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Fiesta de San Juan de Dios en Ebibeyin (Guinea Ecuatorial)
El 8 de marzo de este año 2015, el Padre Simón, titular de la parroquia San Juan de Dios
de Ebibeyin, nombra a San Benito Menni, Co-patrón, con San Juan de Dios, y Patrón
de los jóvenes de la Parroquia.
Crónica de las hermanas de Ebibeyin
Para los que lo conocéis, en Ebibeyin hay una parroquia dedicada a San Juan de Dios.
Situada en un lugar muy apropiado, al lado del Hospital General y una zona donde
predominan los niños y jóvenes, gente muy sencilla y acogedora.
La Iglesia está llena de simbolismos hospitalarios: Nuestra Madre en lugar central y por
partida doble.
Un domingo, a primeros de febrero fuimos allí a celebrar la Eucaristía. El párroco nos
presentó cómo Hermanas Hospitalarias y “nietas” de San Juan de Dios. Todos nos
aplaudieron, insistiéndonos para que volviéramos; ya que las Religiosas al estar en el
recinto del obispado, vamos a la Catedral.
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En casa pensamos que, en este año del centenario de la muerte de Padre, estaría bien
poder poner su imagen en dicha parroquia. Cuando se lo comentamos al Párroco le
pareció ¡estupendo!. Cómo estaba próxima la visita de sor Mª Rosario y sor Mª Angustias,
les encargamos nos trajeran algún poster del Padre.
También a ellas les invitamos a visitar la parroquia y participar en la celebración de la
Eucaristía, el domingo que pasaron en Ebibeyin. Pudieron comprobar, la acogida que les
dieron, así como la alegría de la celebración, la cantidad de jóvenes y niños que
participaban.
Pensamos que era buen día la fiesta de San Juan de Dios, ya que si Dios quiere, el día de
San Benito Menni de este año, queremos celebrarlo en el poblado cerca de Niefang
donde tiene una capilla dedicada, y juntarnos allí las hermanas y trabajadores de Bata y
Ebibeyin.
Llegó el día señalado, la Eucaristía se fijó a las 11.00h. A las 10 salimos de casa con
nuestros colaboradores, Alfonso y Teófilo.
Aquí las celebraciones en las grandes fiestas son muy largas, cantaron los dos coros el
español y el Fang, y las lecturas en las dos lenguas. También la homilía estuvo muy
oportuna, relacionando el Evangelio del día: “Los mercadores del Templo”, con San Juan
de Dios, auténtico mercader. Leemos en sus cartas:
¿Quién no da lo que tiene a este divino mercader pues hace con nosotros tan
buena mercancía, y nos ruega, los brazos abiertos que nos convirtamos (…)
y hagamos caridad?
En fiestas así, no pueden faltar las ofrendas, donde se lleva de todo, según las
posibilidades de cada uno… Quedamos que nosotras llevaríamos nuestras ofrendas las
últimas, para no quitarles protagonismo a los grupos de la parroquia, y a las mujeres que
celebraban su fiesta.
La celebración fue presidida por el Sr. Vicario del Obispo y varios sacerdotes, también
asistieron hermanas de las otras Congregaciones, (Jesús Mª y Mª Inmaculada),
Autoridades de la zona, entre ellas, la hermana de la Primera Dama, (Viceministra de
Asuntos Exteriores).
Llegado el momento, dos hermanas llevaron el cuadro del Padre y la otra, un Copón que
teníamos en casa y que se estaba deteriorando de no usarlo.
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Entramos entre cantos y aplausos, todos se pusieron de pie. Al llegar al altar, a indicación
del Párroco, todo el mundo guardó silencio para que explicásemos quien era el del
cuadro. Y seguido, una fuerte ovación, tuvimos que “bailar al Santo”, entre cantos y
aplausos.
El
Padre
Simón,
titular
de
la
parroquia, tomo la palabra y lo
nombró: Co-patrón, con San Juan de
Dios, y Patrón de los jóvenes. Como
podéis imaginar, para nosotras fue
muy emotivo…y lo dejamos colocado
en el lugar previsto. Finalizada la
Eucaristía,
algunas
jóvenes,
ya
comenzaron a hacerse fotos con su
nuevo Patrón.
Ya veis, aquí como no hay burocracia,
en un día, lo nombraron Co-patrón y Patrón de los jóvenes. Francisca, de todas formas,
le dijo al Sr. Vicario que nos haga un documento donde conste el Nombramiento.
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Nosotras hemos decidido participar todos los domingos que podamos, aunque esté un
poco lejos. Ya es una obligación con nuestro Padre…
Como broche de la fiesta, nos tocaba, la Adoración comunitaria. Teníamos tanto que
agradecer al Señor, alabarlo, adorarlo, por todo lo vivido y también pedirle nos siga
bendiciendo con nuevas vocaciones, para seguir manifestando a los hermanos Su Amor
Compasivo y Misericordioso.
Con cariño, las hermanas de Ebibeyin: Francisca, Julia y Mª Luz
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