LOS HONGOS DEL ESPACIO NATURAL Y ARQUEOLÓGICO DE SIETE CAMINOS Jaime Blanco Un hongo es un organismo uni o pluricelular, sin clorofila, que se reproduce mediante esporas, que serían el equivalente a las semillas de las plantas. Fungo es una palabra que abarca numerosos organismos vivos (unas 150.000 especies conocidas, aunque distintos autores estiman que pueden existir alrededor de 1,5 millones de especies). Boa parte de ellos son organismos microscópicos, entre los los cuales se encuentran a muchos agentes patógenos que causan dolencias en animales y en el hombre (tiñas, pe de atleta) y también en plantas (oidios, mildeu, ferruxes,…), mientras que otros hongos son útiles al hombre (son los lévedos y fermentos que se usan para producir cerveza, pan o vino, sirven para madurar mentones, para obtener antibióticos (penicilina) u otros medicamentos, o son apreciados comestibles.....). En este espacio natural intentamos estudiar especialmente aquellos hongos que, en determinadas condiciones ecológicas y climatológicas son quien de producir unas estructuras equivalentes a los frutos de las plantas, de tamaño visible y con formas variadas, denominadas popularmente setas, saetas en castellano y, científicamente, carpóforos o basidiomas y tienen una función reproductora como en las plantas, ya que producen semillas llamadas esporas. A estos hongos que producen setas visibles a simple vista si le denomina genéricamente macromicetos (macro = grande, visible; miceto = hongo). Los hongos, como los animales, son organismos llamados heterótrofos porque lo case toda su alimentación tienen que recibirla como materia orgánica producida por otros organismos (plantas,…), ya que no tienen clorofila como las plantas, por el que no pueden aprovechar los nutrientes del solo para producir (como las plantas (organismos autótrofos)) su propia materia orgánica a través de la fotosíntesis. Los hongos absorben a través de las paredes de sus células la materia orgánica más sencilla, después de degradar la mas compleja gracias a la acción de fermentos o enzimas propios, mientras que los animales poseen un complejo aparato digestivo con el que aprovechan los alimentos. Para conseguir la materia orgánica que precisan, los hongos se nutren de tres maneras diferentes, dando lugar a estas tres maneras de vida que detallamos de seguido: Saprófitos: este grupo de hongos se alimentan de la descomposición de la materia orgánica muerta. Ejemplos de hongos saprófitos son especies como el champiñón de París (Agaricus bisporus), cultivado desde hace cerca de 300 años y Pleurotus ostreatus (saeta de ostra) (lignícola), que si cultiva desde hace tiempo son las dos especies que si encuentran con mayor facilidad en las tiendas. Parásitos: son hongos que viven la costa de otros seres vivos (llamados huéspedes), mayoritariamente vegetales, aunque también pueden parasitar animales u otros hongos. El ejemplo mas clásico son las especies del género Armillaria, siendo la mas abundosa en nuestra tierra Armillaria mellea, parásita de diversos árboles y arbustos. Micorrícicos o simbiontes: son hongos que forman una relación o asociación de mutuo beneficio (simbiosis) con las raíces de distintos árboles o arbustos. Esta simbiosis se llama micorriza, y el micelio del hongo rodea las raíces mas finas (pastadeiras) de la planta formando una relación muy estrecha, a modo de un guante. Por medio de esta relación, los hongos obtienen a través de esas raíces finas o pastadeiras la sepa elaborada de la planta y a cambio hacen que la planta aumente la capacidad de absorción de agua y sales minerales del solo, la planta es más resistente a plagas y dolencias y la suya capacidad de crezca será mayor, por el que la producción forestal (madera, corcho, frutos) aumentará en la medida en que las raíces de los árboles tengan mas micorrizas. Muchos hongos micorrícicos se asocian con muchos árboles, mientras que hay algunos que sólo si asocian con una especie o un grupo de especies próximas, como acontece por ejemplo con el níscalo (Lactarius deliciosus), que se asocia en Galiza preferentemente con las raíces de los pinos (Pinus spp.), o las especies del género Leccinum, boletais asociados a los abedules (Betula pubescens) o especies próximas como los avellanos (Corylus avellana L.). De los datos sobre hongos que tenemos hasta el momento en este espacio natural hace falta destacar la presencia de un nuevo taxon para la ciencia descrito recientemente (2013): Flammulina velutipes var. cytisicola Blanco-Dios, y dos especies poco comunes en Galicia: Phaeocollybia christinae (Fr.) R.Heim o Psathyrella cotonea (Quél.) Konrad et Maubl. En el área de influencia de este espacio natural sabemos de la presencia de dos especies (Hericium erinaceum (Bull.: Fr.) Pers. y Phylloporus pelletieri (Lév.) Quél.) incluidas en un listado de 33 macromicetos elaborado por la ECCF (European Council fuera Conservation of Fungi) que si considera están en peligro de extinción en Europa y que están incluidos en el anexo I de las propuestas de la Convención de Berna (2003). ambién en montes cercanos a este espacio natural como es el predio del Centro de Investigación Forestal de Lourizán o el monte Gagán conocemos la presencia de especies nuevas para la ciencia recién descritas consideradas hasta el momento muy raras o poco comunes a nivel mundial como son Arrhenia pontevedrana Blanco-Dios (2015), Cantharellus gallaecicus (Blanco-Dios) Olariaga (2004), Cantharellus lourizanianus Blanco-Dios (2011), Craterellus pontevedrensis BlancoDios (2014), Cystodermella freirei (Justo & M.L. Castro) Vizzini (2003) o Tricholoma gallaecicum (Blanco-Dios) Blanco-Dios (2004).