1. Ciencia

9 al 15 de febrero de 2015
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ANÁLISIS
Sus señorías
El PSOE pierde su brújula y los barones la buscan en el Sur
■ Federico Castaño
El Partido Socialista está
atrapado por el tiempo electoral,
como lo prueba el hecho de que
Susana Díaz haya decidido no
mover pieza hasta las elecciones
autonómicas y municipales de
mayo. Si los tiempos fueran más
flexibles y no apretara el actual
ciclo electoral, es altamente
probable que con un CIS como el
que conocimos la semana pasada
los barones con mayor peso en el
partido abrieran el proceso para
elegir a un nuevo secretario
general. Todos reconocen que
Pedro Sánchez está haciendo
grandes esfuerzos para
consolidarse en el cargo y
remontar en las encuestas y casi
todos confiesan al mismo tiempo
que no le ven con la capacidad
necesaria para encarar este
desafío con éxito, sobre todo en
un momento en que el Podemos
de Pablo Iglesias y el PP le han
metido en un bocadillo que puede
resultar todavía más indigesto
después de las próximas
legislativas.
Si se confirmara que el PSOE
ha perdido la hegemonía de la
izquierda y es un hecho el
sorpasso de Podemos, el margen
parlamentario de los socialistas
en la próxima legislatura sería
muy estrecho. Siempre partiendo
de la premisa de que Mariano
Rajoy sigue teniendo todas las
papeletas para continuar en La
Moncloa, Pedro Sánchez o quien
le sustituya tendría dos
posibilidades: aproximarse a la
formación de Pablo Iglesias y dar
por bueno el discurso del PP
sobre el Frente Popular o primar
su perfil de partido de Gobierno,
como recomiendan, entre otros,
Felipe González y Alfredo Pérez
Rubalcaba, y abrirse a pactos
puntuales con Rajoy.
Es una encrucijada endiablada,
tanto que algunos barones dan
como seguro que Susana Díaz,
por aclamación, como ella quiere,
acabará imponiéndose como
lideresa del PSOE antes de
S. Díaz.
FERNANDO MORENO
“Parece evidente la
intención de Rajoy de
mirar a su electorado y
cicatrizar las heridas que
la crisis y la forma de
gestionarla han ido
provocando en las
organizaciones
provinciales y regionales
del PP”
agosto convirtiéndose en la tabla
de salvación que anhelan muchos
en su partido. La brújula parece
que está en el Sur.
Todos los puntos débiles que
han venido arruinando en los
últimos tres años el discurso
político del PP han entrado en
M. Rajoy.
F.M.
P. Sánchez.
F.M.
periodo de observación. La
corrupción, la crisis económica y
el desafío soberanista en
Cataluña son tres aspectos
cruciales a los que el Gobierno
está dedicando buena parte de su
tiempo. De ellos depende, en
gran medida, que los populares
recuperen el voto que se han ido
dejando en la abstención. Parece
evidente la intención de Rajoy de
mirar a su electorado y cicatrizar
las heridas que la crisis y la forma
de gestionarla han ido
provocando en las organizaciones
provinciales y regionales del PP.
Hay otras cartas que también le
sonríen a Mariano Rajoy. Los
manuales políticos demuestran
que los partidos que se presentan
divididos a unas elecciones,
compiten en desventaja. Y el
F. González.
F.M.
P. Iglesias.
F.M.
“El PSOE comparece
a este ciclo electoral
sin una política de
alianzas definida,
sin un liderazgo asentado
y sin un programa
electoral alternativo al del
Gobierno que sirva de
referencia en todo el
Estado”
PSOE, admiten sus
parlamentarios, no va a tener
nada fácil evitar los
enfrentamientos, teniendo en
cuenta que, después de las
elecciones de mayo, algunos
barones operarán al grito de
sálvese quien pueda a la hora de
A. Pérez Rubalcaba.
F.M.
cuadrar sus acuerdos con otras
fuerzas políticas. Es otro de los
puntos negros del PSOE:
comparece a este ciclo electoral
sin una política de alianzas
definida, sin un liderazgo
asentado y sin un programa
electoral alternativo al del
Gobierno que sirva de referencia
en todo el Estado.
En un reciente almuerzo
ofrecido en Madrid por Pedro
Sánchez, uno de sus asesores de
comunicación adelantó a los
periodistas que el líder socialista
iba a presentar hasta 15
propuestas económicas.
Disimulando su asombro, uno de
los presentes preguntó con sorna:
¿Nos las vais a pasar por correo?
Al día siguiente, ni una sola de
ellas apareció en los titulares.
Alfredo Pérez Rubalcaba se
quejaba de que no conseguía
atravesar la barrera mediática y la
sobreexposición de su sucesor en
Ferraz ha evidenciado que éste
sigue siendo uno de los
principales problemas a los que
se enfrenta el Partido Socialista.
Son tantas las ocurrencias del
actual líder que ya casi todo lo
que dice o anuncia nace
devaluado. Igual le pasó a José
Luis Rodríguez Zapatero.
Por no hablar de la
descoordinación interna que hay
entre partido y grupo
parlamentario. Pocas horas
después de anunciarse el “pacto
de Estado” para combatir el
terrorismo yihadista, desde el
PSOE se advirtió que era su
intención recurrir parte del mismo
al Constitucional. Transcurrido un
día, Sánchez defendía en
Barcelona nuevos acuerdos con
el PP mientras que su portavoz
en el Congreso, Antonio
Hernando, comunicaba
justamente lo contrario.
Conclusión: el primer partido de
la oposición, que puede dejar de
serlo, ha perdido la brújula y
sigue desnortado. No todo son
por ello alegrías en el PP. Hay,
incluso, ministros que andan muy
preocupados por ello.
Consejo de Ministros
66 nuevos fiscales contra el yihadismo y la corrupción
■ El Consejo de Ministros ha
aprobado la ampliación de la
plantilla fiscal en 66 plazas, de
las que 50 suponen la
incorporación de nuevos
abogados fiscales y el resto se
destinan a concursos internos
para reorganizar efectivos en
todas las fiscalías territoriales.
La vicepresidenta del Gobierno,
Soraya Sáenz de Santamaría, ha
recordado que el pasado lunes 2
el presidente del Gobierno,
Mariano Rajoy, y el secretario
general del PSOE, Pedro
Sánchez, firmaron un acuerdo
para afianzar la unidad en
defensa de las libertades y en la
lucha contra el terrorismo. Este
pacto incluía, ha apuntado, "la
necesaria garantía de los
recursos humanos y materiales
necesarios para que la
determinante labor de lucha
contra el terrorismo que
desarrollan nuestros jueces,
fiscales y cuerpos de seguridad
del Estado, así como las
Fuerzas Armadas en las
misiones en el exterior, puedan
desarrollarse
satisfactoriamente".
El ministro de Justicia, Rafael
Catalá, ha añadido que la
medida se sitúa en el contexto
del Real Decreto, aprobado el 31
de octubre de 2014, por el que
se crearon un total de 282
plazas de jueces y magistrados
para contribuir a la lucha contra
la corrupción. Además, ha
señalado que la decisión implica
"un reforzamiento de las
capacidades de la Fiscalía
General del Estado, es
coherente con el compromiso de
regeneración democrática y
con la lucha contra el
delito".
Catalá ha
manifestado que, con la
ampliación acordada hoy, la
plantilla de fiscales contará con
un total de 2.473 efectivos, que
junto con los 5.600 jueces y los
más de 45.000 funcionarios de
la Administración de Justicia
"nos dota de una capacitación
profesional adecuada,
cualificada y suficiente para
llevar a cabo
todos los
compromisos de la mejora de la
Justicia". De las 66 nuevas
plazas de fiscales, cuatro son
para la Fiscalía General del
Estado: dos para trabajar en
asuntos relacionados con la
criminalidad informática y otras
dos en temas de cooperación
penal internacional. Además, se
crean otras cuatro plazas para la
Fiscalía Especial contra la
Corrupción y la Criminalidad
organizada. Además, el Ejecutivo
ha analizado la
situación y los
daños
ocasionados por
el temporal de
los últimos
días en la
cornisa
cantábrica, en la zona pirenaica,
en la ribera del Ebro y en otras
zonas del centro de la Península.
La vicepresidenta del Gobierno
ha informado de que se trata de
una primera valoración para que,
una vez remita el temporal,
poder atender a las necesidades
derivadas de la evaluación de
los daños.
El Gobierno ha autorizado
también la concesión de
subvenciones al transporte
terrestre público regular de
viajeros de Madrid y de
Barcelona, recogidas en la Ley
de Presupuestos Generales del
Estado para 2015. La
vicepresidenta ha detallado que,
en el caso de Madrid, el importe
es de casi 127,5 millones de
euros, y en el de Barcelona de
casi 99 millones.
Por último, el Gobierno ha
completado el desarrollo
normativo de la Ley de medidas
para mejorar el funcionamiento
de la cadena alimentaria, que
entró en vigor hace un año (Ver
P.7)