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Claridad, El Periódico de la Nación Puertorriqueña
Historia de los Rayos Gamma… “y lo demás que haya en la sala”
Por: Irvin García
A la memoria de Horacio “Tato” Olivo
Indiscutiblemente la propuesta artística de Los Rayos Gamma ha hecho historia a lo largo y a lo ancho del
archipiélago borincano en los últimos 40 años. Desde su fundación en 1971, cuando Eddie López, su creador, se
hizo acompañar por Jacobo Morales, Horacio Olivo y Silverio Pérez, hasta el presente, Los Rayos Gamma han
filtrado la realidad política y social del país y la han convertido en fina sátira humorística. Esa trayectoria es la
que recoge Iván Martínez Colón en su libro Historia de Los Rayos Gamma… “y lo demás que haya en la sala”,
publicado bajo Publicaciones Gaviotas en Río Piedras, Puerto Rico.
Con una narrativa sencilla, sin grandes alardes académicos pero con un honesto rigor histórico y respeto a los
derechos creativos, Iván Martínez nos presenta en distintos cuadros y contextos, el cómo y porqué la propuesta
de los Gamma hizo historia. El escrito está dividido conceptualmente en dos partes.
En la primera parte el narrador, Iván Martínez, quien es a la vez participante vitalicio de esta “cruzada
humorística a favor de la conciencia…” (IMC) se coloca como observador omnipresente. Es el testigo de los
momentos y contextos históricos en que se desarrolla lo que llegaría a ser la “Gammamanía” y el “estilo
Gamma”, y comparte ese proceso sin apasionamientos, sin pasar juicios, casi de forma periodística. Entre
GÉNESIS y EL DESENCUENTRO, capítulos que abren y cierran la primera parte del libro, se revela la
fórmula secreta de Eddie López para crear lo que se inició como Los Rayos Gamma que luego cuando López se
enteró de que tenía cáncer cambió a El efecto de los Rayos Gamma sobre Eddie López, y que finalmente se mantiene en la memoria colectiva
puertorriqueña como Los Gamma. Según se avanza en la narración el lector ve crecer ante sus ojos una propuesta artística que se originó con
cuatro exponentes, frente a un público que abarrotaba aquel café-teatro (abarrotado= menos de 100 almas), hasta convertirse en un fenómeno de
masas que impactó (y todavía amenazan con…) toda la nación borincana. Para el músico en Iván Martínez no pasa desapercibido el desarrollo del
elemento musical en la propuesta artística de Los Gamma. Con un manejo magistral del lenguaje el autor va dibujando una secuencia in
crescendo de sonidos y escenarios que comienzan con una guitarra, rasgada con más entusiasmo que destreza, y culminan con el majestuoso
sonido de la Orquesta Sinfónica de Puerto Rico. En esa secuencia se destaca el genio creativo del talentoso arreglista y director musical José
“Cuqui” Rodríguez. Por último, pero no menos importante, resulta en gran acierto haber incluido algunas de las parodias, libretos del espectáculo
y pasos de comedia que acentuaban la pertinencia de la propuesta de Los Gamma en su proceso de hacer historia. Mención aparte merece el texto
del monólogo El Borracho de Jacobo Morales. El mismo es un escrito exquisito que se ha mantenido vigente desde los años del último cuarto del
siglo pasado hasta el presente.
La segunda parte del libro comienza con el capítulo llamado Cómplices donde algunos de los actores, actrices, músicos y personal de
producción que colaboraron en distintos momentos en la propuesta Gamma dan testimonio del efecto de los rayos gamma en su vida artística.
Especial atención merece el escrito titulado Living la vida Gamma. En este apartado el autor se desnuda de su ropaje de historiador y observador
para compartir su experiencia personal con los Gamma. Resisto aquí la tentación de revelarle el contenido de este testimonio. Lo que sí puedo
mencionar es que en este capítulo Iván Martínez deja ver, sin proponérselo, el nivel intelectual y la profundidad de su trabajo en este libro. La
capacidad de narrar unos hechos desapasionadamente, (puro ordenamiento intelectual) y luego compartir los afectos y sentimientos de su
experiencia, (puro ordenamiento del corazón) son distancias y acercamientos entre la cabeza y el corazón que pocos escritores pueden lograr.
Son varias las razones que hacen de la Historia de los Rayos Gamma … “y lo demás que haya en la sala” un documento pertinente para estos
tiempos. Una de ellas es el constante contexto histórico en que se enmarca la propuesta Gamma. Aquí sobra el “prohibido olvidar” porque todo
está recordado. Especialmente la trayectoria de los partidos políticos y sus militantes desde la victoria del Partido Nuevo Progresista en 1968
hasta el presente, enfocados con el humor, el cinismo y la sátira que nos caracteriza como pueblo, y que ha sido la mayor fuente de energía que
ha alimentado a Los Rayos Gamma.
La partida de Horacio “Tato” Olivo es otra de las razones que le da pertinencia a esta historia. Horacio Olivo no tuvo la oportunidad de ver
impreso este libro, y me aventuro a decir que aparte del autor, era la persona que con más entusiasmo lo esperaba. Tato Olivo fue la figura
constante en los Gamma. Nunca se desprendió del proyecto para atender otros intereses profesionales, que aunque los tenía nunca los percibió
conflictivos. Era el único Gamma abiertamente independentista y militante del Partido Independentista Puertorriqueño, posición que mantuvo
hasta sus últimos días y que sirvió de motivo para muchos chistes y parodias del grupo. Le destaco porque pienso que todo proyecto artístico para
ser duradero necesita de la consistencia de quienes creen en su esencia. Horacio “Tato” Olivo, a mi entender, fue ese tronco.
Bienvenida sea la Historia de los Rayos Gamma … “y lo demás que haya en la sala”. ¿… “y lo demás que haya en la sala”, qué significa? Lo
siento, tiene que adquirir el libro para saberlo y además enterarse de otros detalles que hacen de este escrito único en su clase.
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