AlcAnzAr mundo - Adventist World

Publicación internacional de los adventistas del séptimo día
Vol. 11 No. 1 0
Alcanzar al mundo
La audaz iniciativa de la iglesia para los próximos cinco años
Vol. 11 No. 10
N O TA
D E
11
TA P A
Alcanzar al
mundo:
es algo personal
Andrew McChesney
Una osada iniciativa busca
compartir el evangelio mucho más
de lo que se ha hecho hasta ahora.
M U N D I A L
Wilona Karimabadi
Hasta que Cristo venga, la esperanza y la pérdida
suelen venir de la mano.
20Sentados entre el bagaje
V I D A
A D V E N T I S TA
Shandra Kilby
Lo más importante es cumplir con fidelidad
nuestra tarea.
8Disipemos las tinieblas
PA N O R A M A
18Cuando vence la esperanza
D E V O C I O N A L
Ted N. C. Wilson
Hasta una pequeña luz puede poner fin a
las tinieblas.
22
La mensajera de Dios:
D escu b rir el
de P rofec í a
D on
desde Australia para el mundo
16Para ser cristianos maduros
Demos honor a Cristo tratándonos bien a
nosotros mismos.
24Pioneros en todas partes
C R E E N C I A S
F U N D A M E N TA L E S
Elizabeth Camps
John Skrzypaszek
El desarrollo de conceptos teológicos que coinciden
con la estadía de Elena White en Australia.
H E R E N C I A
A D V E N T I S TA
DeWitt S. Williams
El lugar de Thomas y Henrietta Branch en el
África y en la historia.
D E PA R TA M E N T O S
3 I N F O R M E
M U N D I A L
3
Noticias breves
6
Informe de noticias
10 S alud M undial
Alivio del dolor
osteoartrítico
27 E S T U D I O BÍB L I C O
Elías: Un poderoso
hombre de fe
R espuestas
26
I N T E R C A M B I O
28
pre g untas
a
b í b licas
D E
I D E A S
El sexo es cosa seria
spanish.adventistworld.org
www.adventistworld.org: Disponible en línea en diez idiomas
Publicado por la Asociación General de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.
2
Adventist World | Octubre 2015
F O T O G R A F Í A S D E TA PA :
G L O B O : K as i a B i el / i sto c k / t h i n ksto c k
R etratos : D a v i d B . S h er w i n
E
INFORME MUNDIAL
Joanne Ratsara
Adventistas y la OMS,
en una colaboración
mundial sin precedentes
Ambas organizaciones esperan ayudar
a reducir las muertes materno-infantiles
R atsara
B la n c h ard
J oa n n e
J aso n
n una tranquila calle al oeste de
Chicago (Illinois, EE. UU.), aprendí una
importante lección sobre la testificación.
Era un joven pastor asignado a la práctica
de evangelismo, en conexión con una campaña pública para compartir el evangelio en un
vecindario con escasa presencia adventista.
Cada día, visitaba los hogares de los que
asistían a las reuniones para repasar las
verdades bíblicas que habían sido presentadas la noche anterior.
El día después de que el evangelista Mark
Finley presentó la enseñanza bíblica de lo que
sucede a las personas cuando mueren, fui con
temor hasta la casa de una de las personas que
asistía a las reuniones. Era una viuda de al menos setenta años, que vivía sola en una casita
de ladrillos, sin una red de apoyo o de amigos.
Al repasar los textos bíblicos que el pastor
Finley había presentado, me preparé para la
inevitable respuesta. Ella pertenecía a otra
religión que enseña que los que mueren
van inmediatamente a la presencia de Jesús,
y yo estaba preparado para que rechazara,
con amabilidad pero con firmeza, lo que yo
trataba de enseñarle.
Imagine mi asombro cuando, ya cerca
del final del estudio bíblico, exclamó: «¡Qué
noticia maravillosa!»
–¿Lo es? –pregunté con cautela–. ¿Por qué?
–Bueno –me dijo– mi esposo falleció hace
diez años, y desde entonces nuestros hijos
se la pasan peleando por la división de los
bienes. Ahora ya casi ni se hablan. Pensaba
que mi esposo estaba en el cielo, observando
todo este comportamiento. ¡Pero ahora sé
que ni tiene idea de ello!
Me invadió entonces una ola de alivio
y gratitud. A pesar de mis temores, había
aprendido la lección más poderosa sobre la
testificación: el Espíritu Santo ya ha visitado
a aquellos con quienes nos invita a compartir
nuestra fe. Jesús ya había golpeado a esa
puerta antes de mi llegada.
Al leer la nota de tapa de este mes, que se
titula «Alcanzar al mundo», permita que el
Señor le recuerde que compartir nuestra fe no
es otra cosa que ir a los lugares que el Espíritu
ya ha visitado para abrir los corazones,
preparar las mentes y llamar a una
nueva vida en Cristo.
Izquierda: Un bebé nacido en el Hospital Malamulo, en Malaui. Derecha:
Annette Mwansa Nkowane (izquierda), posa con Paul Ratsara y Patricia Jones.
L
a Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Iglesia Adventista
han dado inicio a una sociedad global sin precedentes que busca
reducir los índices de muertes materno-infantiles.
Cincuenta líderes y educadoras internacionales de enfermería se dieron
cita en Bloemfontein (Sudáfrica) para comenzar a implementar el proyecto de cinco años que busca preparar a parteras en cuatro países africanos.
Este proyecto de un millón de dólares está financiado por la Fundación
para el Desarrollo Internacional de la OPEC, a través de la OMS, y fue
diseñado por funcionarios de la OMS, la Asociación General de la Iglesia
Adventista, y la Escuela de Enfermería de la Universidad de Loma Linda.
«Nos sentimos agradecidos de haber iniciado este trabajo conjunto.
Produciremos algo que beneficiará al mundo –dijo Annette Mwansa
Nkowane, enfermera principal de la OMS y principal propulsora de la
iniciativa–. Creo y estoy convencida del éxito de la propuesta. Creo que
con Dios, todo es posible».
Es la primera vez que la OMS, la agencia de salud pública de las
Naciones Unidas, se ha asociado con una organización religiosa a escala
global, dijo Nkowane, enfermera y partera educada en Zambia cuyo título
completo es «funcionaria técnica mundial de enfermeras y parteras».
La OMS espera que el proyecto ayude a lograr la disminución de la
mortalidad materno-infantil, uno de los Objetivos de Desarrollo para el
Milenio, de las Naciones Unidas.
Las semillas del trabajo conjunto fueron establecidas en 2009 en
Ginebra, durante la primera conferencia global de salud organizada
por el Departamento de Ministerios de Salud de la Asociación General,
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
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el órgano administrativo de la Iglesia
Adventista mundial.
Allan Handysides, exdirector del
departamento, y su sucesor Peter
Landless establecieron una estrecha
asociación con la OMS durante la conferencia, y la OMS comenzó a pedir a la
iglesia que colaborara con el proyecto
de parteras. Los líderes adventistas
votaron aceptar la propuesta de la OMS
durante el Concilio de Primavera 2010
en la sede mundial de la iglesia. Pero el
proyecto no se inició hasta ahora, dado
que la OMS enfrentó desafíos al tratar
de garantizar la financiación.
Patricia Jones, directora asociada de
enfermería del departamento de Ministerios de Salud de la Iglesia Adventista
mundial, expresó gratitud a la OMS
por su persistencia. «Gracias por no
rendirse y por confiar en nosotros, una
entidad religiosa, a la hora de asumir el
proyecto», expresó.
La OMS, con sede central en
Ginebra (Suiza), que ha señalado que
la falta de parteras calificadas es un
factor que influye sobre el número de
muertes de madres y bebés, buscó en la
red adventista mundial de educadores
y hospitales una manera de responder
al déficit.
El nuevo proyecto se enfoca en cuatro instituciones del África: el Colegio
Terciario Malamulo de Ciencias de la
Salud, en el Hospital Malamulo (Malaui);
el Colegio Terciario de Enfermería
Maluti, en el Hospital Maluti (Lesoto); el
Colegio Terciario Adventista de Kanye,
en el Hospital de Kanye (Botsuana), y en
el hospital de la Universidad Adventista
de Cosendai (Camerún).
Paul Ratsara, presidente de la Iglesia
Adventista en la División de África
Meridional y Océano Índico, donde se
encuentran tres de esas instituciones,
dijo que el proyecto era una encomienda sagrada de parte de Dios.
«Se podrán salvar las vidas de las
madres y de los bebés», expresó. n
4
Adventist World | Octubre 2015
E U D
INFORME MUNDIAL
Siete Conquistadores son bautizados durante un camporí en el Lago de
Neuchâtel, en Suiza.
Conquistadores
son bautizados
en camporí en Suiza
Se reúnen 2300 personas para
evento de la región Intereuropea
Andrew McChesney, e informes de la EUD
V
arios Conquistadores fueron
bautizados en el Lago de
Neuchâtel en Suiza, durante un
camporí de una semana de duración,
donde se dieron cita 2300 niños y
jóvenes, y sus líderes adultos.
El Camporí de Jóvenes Adventistas,
organizado cada cuatro años por la
División Intereuropea de la Iglesia
Adventista, ofreció a los Conquistadores
de entre 12 y 16 años la oportunidad de
estudiar la gracia de Dios a partir de la
historia bíblica de Jonás, aprender nuestras destrezas y conocer a otros jóvenes
provenientes de veinte países diferentes.
Mientras el sol se ponía el viernes
por la tarde, decenas de campistas se
reunieron en la ribera oriental del Lago
de Neuchâtel para celebrar el bautismo.
Cada uno de los candidatos ingresó a
las aguas uniformado y acompañado
por un líder que portó un globo blanco
de helio. Los globos fueron soltados
hacia el cielo vespertino mientras los
Conquistadores eran levantados de las
aguas del bautismo.
«El punto destacado del día fue
la ceremonia bautismal –dijeron los
organizadores en una declaración en
AYcamporee.org, el sitio web del camporí–. Siete Conquistadores se comprometieron con Cristo. ¡Feliz sábado!»
El camporí se llevó a cabo bajo el
lema «La senda de la ballena: sorprendido por la gracia» en la granja privada
La Corbière, en Estavayer-le-Lac, un
pueblo turístico de seis mil habitantes.
El programa diario ofreció noventa
talleres y un sinnúmero de otras actividades, con temas que fueron desde las
técnicas de exploración hasta cuestiones
ambientales.
Los principales eventos en vivo, llevados a cabo en una tienda gigante que
les prestó un circo, fueron traducidos
del francés al alemán o viceversa. En
diversas secciones de la tienda se ofreció
la traducción a los idiomas de las diversas delegaciones; pero los participantes,
entre ellos, se comunicaron por lo
general en inglés.
La mayoría de los Conquistadores
provino de trece países de la División
Intereuropea: Alemania, Austria,
5
datos del
camporí
1. COMIDAS: Los campistas consumieron tres toneladas de pan, ocho
toneladas de legumbres y verduras, 7,3
toneladas de frutas, y 1,1 toneladas de
papas. Ochenta cocineros prepararon
los alimentos.
2. RESIDUOS: Grupos de voluntarios
juntaron 16 metros cúbicos de residuos
por día, que fueron incinerados.
3. SERVICIOS: Las 80 duchas y
89 baños del campamento consumieron
49 mil litros de agua por día. Para
cocinar se usaron otros 21 mil litros
diarios. Se usó un total de 1900 rollos
de papel higiénico o sanitario.
4. PRESUPUESTO: El camporí
costó 450 mil francos suizos (unos 476
mil dólares).
5. ALOJAMIENTO Y REUNIONES: Los 2300 asistentes durmieron
en 650 tiendas y se reunieron en una
tienda de circo con capacidad para tres
mil personas. El lugar del campamento
ocupó 80 mil metros cuadrados, lo que
equivale a once campos de fútbol.
Escuela adventista
transforma una comunidad
en Panamá
Voluntarios encuentran una creciente comunidad
adventista donde Maranatha construyó una escuela
Julie Z. Lee, Maranatha Volunteers International
E
sto ilustra el poder que tiene
una escuela adventista. Hace
dieciocho años, voluntarios
adventistas construyeron una escuela
en Changuinola, un húmedo pueblo
costeño de unos treinta mil habitantes
en el extremo nororiental de Panamá.
Hace unas semanas, un grupo de
ciento cincuenta jóvenes voluntarios
llegaron a la vivaz Escuela Adventista de
Changuinola para construir dos nuevos
salones de clase, y trabajar en dos iglesias que han surgido como resultado de
la escuela.
Melania Peña de Barría, una de las
ancianas de la iglesia local, quedó sin
palabras después de que los voluntarios
construyeron un templo para su congregación; esto fue durante el viaje misionero de dos semanas organizado por
Maranatha Volunteers International, una
entidad afiliada a la Iglesia Adventista.
«Me siento muy emocionada y
agradecida. No sé si reír o llorar», dijo
Peña de Barría, una de las fundadoras
de la iglesia de Finca 6. Su congregación
había estado reuniéndose sin un templo
durante ocho años, por lo general en
hogares, un centro comunitario y, en
los últimos tiempos, en una tienda de
comestibles vacía. El último sábado del
viaje misionero, la exultante congregación se reunió en su nuevo edificio con
la presencia de los jóvenes voluntarios.
M ara n at h a
Bélgica, Bulgaria, Eslovaquia, España,
Francia, Italia, Luxemburgo, Portugal,
República Checa, Rumania y Suiza.
Esos países cuentan con 1346 Clubes
de Conquistadores y más de diecinueve
mil miembros de entre seis y dieciséis
años. Llegaron también delegaciones
visitantes de Brasil, Gran Bretaña y
Tailandia.
El camporí anterior fue llevado
a cabo en Roma (Italia) en 2011, y el
próximo está planificado para 2019 en
la República Checa. n
Ella Bates (izquierda), de Aitkin (Minnesota,
EE. UU.), y David Shafer, de Cox’s Creek
(Kentucky, EE. UU.), construyen salones de
clase en la escuela adventista en Changuinola (Panamá). [Maranatha]
Los adolescentes participaron como
voluntarios de «Ultimate Workout» (El
entrenamiento más completo), el viaje
misionero anual de Maranatha para
jóvenes, que este año celebra su vigésimo quinto aniversario.
El proyecto de la escuela de Changuinola se inició hace dieciocho años,
cuando voluntarios de Maranatha construyeron la parte principal del campus a
pedido de la Iglesia Adventista de Panamá. El número de estudiantes ya superó
los cuatrocientos cincuenta y este verano,
los voluntarios de «Ultimate Workout»
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
5
M el i ssa
Transformación extrema:
Un sendero hacia la salud
Cuatro emocionantes historias de vida de una
megaclínica gratuita en los Estados Unidos
Tom Ish
A
M ara n at h a
añadieron dos salones de clase.
La escuela ha sido responsable del
marcado crecimiento del adventismo
en la comunidad que la rodea, lo que se
refleja en dos nuevas congregaciones,
Finca 6 y Las Tablas.
Un equipo de «Ultimate Workout»
se dedicó a Finca 6, mientras que el otro
grupo trabajó en la iglesia de Las Tablas.
Meses antes, voluntarios de Maranatha
construyeron el templo de Las Tablas,
y el equipo de «Ultimate Workout»
terminó el proyecto encargándose de
pintar el edificio.
Los jóvenes ayudaron a la comunidad
de otras maneras, lo que incluyó atender
a más de trescientos perros, gatos,
gallinas, vacas y cerdos en una clínica
veterinaria gratuita coordinada por Becky Childers, una veterinaria de California
(EE. UU.). Este servicio acaso parezca
un ministerio inusual, pero Childers
dijo que brindó a los jóvenes una nueva
manera de pensar en el servicio.
«Creo que realmente les mostró que
es posible amar y cuidar de las personas
al ocuparnos de las cosas que les resultan importantes», expresó. n
Is h
INFORME MUNDIAL
Becky Childers, que es veterinaria en
California, atiende a un perro en una
clínica veterinaria gratuita que funcionó durante dos semanas.
6
Adventist World | Octubre 2015
nthony Fry, un hombre de 48
años que no tiene dónde vivir,
apreció los análisis de sangre y
el chequeo de salud que recibió en una
megaclínica patrocinada por la Iglesia
Adventista en el estado de Wáshington
(EE. UU.), donde se ofreció atención
gratuita por ocho millones de dólares.
El beneficio más evidente, sin embargo, fue el corte de cabello y un nuevo
traje. La inmensa transformación se
produjo paso a paso ante la mirada fascinada de los espectadores, como parte
del evento «El mejor camino a la salud»
en la ciudad de Spokane, en el que 1600
voluntarios brindaron atención médica
gratuita, cortes de cabello y prendas de
vestir a 3111 personas, durante dos días.
Al comienzo, Fry, una persona simpática y de barba desaliñada, no quería
cortarse demasiado el cabello. Pero
entonces decidió que si quería conseguir
trabajo, tenía que hacer algo drástico
con los extensos bucles entrecanos que
se asomaban bajo un gastado sombrero
de cuero. El corte que recibió equivalió a
tres cortes completos, dijo Page Colson,
una experimentada peluquera de
Tennessee a cargo de la peluquería de la
clínica. Fry quedó muy satisfecho con
el resultado. «Es un hermoso servicio el
que ofrecieron», dijo aún sentado en la
silla de peluquería.
Fry había sido bombero voluntario
y coordinador de campismo en un
pueblo a unos 275 kilómetros al oeste
de Spokane; pero diez semanas antes
del evento había perdido su casa, luego
de una serie de circunstancias desafortunadas. Se enteró de la clínica gracias
a uno de los miles de folletos que
promocionaron en evento y que fueron
distribuidos por voluntarios y por la
misma ciudad de Spokane.
Después de cortarse el cabello,
Dorothy Nelson, voluntaria de consejería
sobre estilo de vida de Loma Linda
(California), y su hija Janet Penner, de
Auburn (Washington), llevaron a Fry
por varias estaciones del programa,
lo que incluyó un tráiler con prendas de
vestir donde consiguió un nuevo traje
y donde su director, Sam Knnabliam,
oró con él.
La impresionante transformación
exterior fue precursora de otra transformación en curso: Fry decidió estudiar
la Biblia, y quiere ser bautizado. Nelson
dijo que sintieron cuán cierto es que
«el hombre mira lo que está delante de
sus ojos, pero Jehová mira el corazón»
(1 Sam. 16:7). Fry quiere seguir a Jesús.
Izquierda: Anthony Fry, en una fotografía
antes y después de su transformación
en la megaclínica gratuita en Spokane
(Washington, EE. UU.).
Derecha: La peluquera Jody Meyer
desenreda el cabello de Nicole.
Abajo: El voluntario Paul Pitts (derecha),
habla con el estudiante universitario
Kerwin Foster en la megaclínica.
estado acostada, aún estaría con la boca
abierta», expresó.
Nicole también se sometió a análisis
de sangre, masajes y atención dermatológica. Cuando se le preguntó si alguien
había orado con ella, dijo que al menos
ocho personas lo habían hecho.
El paciente que vino de
más lejos
M el i ssa
Is h
Ocho horas para peinarla
M el i ssa
Is h
Sueños de casamiento
«¡Jamás me casaría contigo!»
Esas lacerantes palabras no solo
pusieron fin a los planes de casamiento
de Christopher Amonson sino que
también lo alejaron de su hogar en
Spokane para vivir durante dos años en
el desierto de Nevada.
El joven, sin embargo, no podía
sacarse de la cabeza a su exnovia Crystal
Parmer, por lo que regresó para estar
con ella. Cuando Parmer se dio cuenta
de que el novio que había tenido por
casi cinco años la necesitaba, ella misma
le pidió casamiento.
Sin embargo, la pareja enfrentaba un
desafío: ambos estaban sin trabajo y no
podían costearse una boda.
La pareja llegó a la megaclínica por
algunas consultas de salud. Amonson, de
33 años, recibió un nuevo par de lentes,
mientras que Parmer, de 31, disfrutó de
un masaje. Un voluntario se enteró de que
planeaban casarse, y los dirigió hasta el
tráiler de Kannabliam lleno de prendas
de vestir, donde Parmer recibió un vestido de novia, y Amonson un esmoquin.
«Me puse a llorar –dijo Parmer al
describir el momento cuando recibió el
vestido de novia–. Es una bendición, un
regalo de Dios».
Nicole, una mujer de 31 años que da
clases de costura y corte y confección
en Spokane, llegó hasta la megaclínica
con un pedido inusual: necesitaba que
alguien le desenredara el cabello.
Nicole, que pidió que no publicaran su apellido, tuvo una cirugía
hace un año que la dejó postrada, sin
posibilidad de ocuparse de su largo
cabello rojizo enrulado. La ayuda del
estado no cubría el cuidado del cabello, por lo que después de ocho meses,
terminó con una maraña apelmazada.
Nicole se enteró de la megaclínica por
una carta que recibió de parte de un
asistente de salud.
Jody Meyer, una peluquera voluntaria de Spokane, pasó unas ocho horas
trabajando para desenmarañar y peinar
una a una las mechas del cabello de
Nicole. Dijo que la mujer fue valiente
y soportó el dolor de todos los tirones.
«Es como si la puerta del automóvil te
atrapa el cabello y entonces te arrastran
por la calle», dijo Nicole con una mueca
de dolor desde la silla de peluquería.
Aunque las sensibles terminaciones
nerviosas de la cabeza se inflamaron
durante el delicado proceso, Nicole
halló alivio en un tratamiento de fisioterapia. Desde la cirugía, se le ha hecho
difícil digerir la comida, y ya no tenía
cobertura para fisioterapia. Nicole dijo
que el tratamiento hizo que el dolor
desapareciera por primera vez desde la
cirugía. «Fue asombroso. Si no hubiera
Cuando la multitud comenzó a
menguar en la tarde del primer día de
la megaclínica, el capellán voluntario
Paul Pitts y su esposa Karyl, de Arizona,
se dirigieron a la estación de autobuses
en el centro de la ciudad, para distribuir
los volantes de propaganda del programa. El matrimonio se encontró con un
estudiante universitario, Kerwin Foster,
quien se mostró interesado en el evento,
pero lamentablemente tenía que tomar
un autobús a las 17.00.
Cuando Foster pidió que lo acercaran a la clínica, el matrimonio lo llevó
rápidamente en su automóvil. «Pensé
que tenía que aprovechar la oportunidad
de recibir una bendición –dijo Foster–.
Es una gran muestra de bondad».
Foster, que no posee seguro, necesitaba atención odontológica. Pero
como ese departamento estaba colmado
de pacientes, Pitts lo llevó por otras
estaciones: una evaluación de salud,
extracción de sangre, examen físico,
masajes, consejería sobre estilo de vida,
y servicios de capellanía. Entonces se
hicieron arreglos para enviar a Florida
los resultados de sus análisis.
«Esto no es cosa de un día –le dijo
Pitts a Foster mientras este iba de una
estación a otra–. Seguiremos en contacto».
Después de que el matrimonio llevó
a Foster a comer algo en camino a la
estación de autobuses, el joven les agradeció profusamente. «Las palabras no
pueden expresar mi aprecio –dijo Foster, que creció en la Iglesia Metodista–.
Ahora siento que tengo que hacer algo
para ayudar a otras personas». n
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
7
P A N O R A M A
N
M U N D I A L
o es casualidad que en el
comienzo y cerca del fin del
ministerio terrenal de Cristo,
las bodas fueron el punto focal de las
lecciones que enseñó a sus seguidores.
La primera, en Caná, fue una lección
de fe, confianza y obediencia. Fe en que
Dios puede suplir nuestras necesidades,
confianza en que hará lo que es mejor,
y obediencia para seguir las instrucciones divinas, aun cuando esas instrucciones acaso parecen no tener sentido
(como pedir a los siervos que llenen
las vasijas de agua [Juan 2:1-11],
cuando lo que necesitaban era vino sin
fermentar [véase El Deseado de todas
las gentes, p. 122).
La segunda lección fue dada un
atardecer, cuando Jesús y sus discípulos
se sentaron en el Monte de los Olivos,
desde donde tenían una clara visión de
las colinas y los valles que rodeaban a
Jerusalén. El sol recién se había puesto,
y el cielo estaba pintado con los colores
del crepúsculo.
Al mirar la hermosa escena, el
grupo notó un hogar bien iluminado.
Escucharon risas y notaron que había
diez jóvenes que, vestidas de blanco y
con lámparas iluminadas, aguardaban
afuera, evidencia clara que era una fiesta
de bodas, y que estaban aguardando la
llegada del novio.
Jesús usa esa escena familiar y festiva para enseñar importantes lecciones
a sus discípulos de todas las edades.
Conocemos la historia registrada en
Mateo 25:1-13. La «parábola de las diez
vírgenes», como suele llamarse, cuenta
la historia de cinco jóvenes prudentes
y cinco insensatas que aguardaban la
llegada del novio. Aunque todas tenían
lámparas encendidas, solo las prudentes tenían suficiente aceite para toda
la noche.
Las prudentes
Aunque esta parábola está llena de
significado, consideremos por unos
momentos la importante obra de las
prudentes. En primer lugar, sus lámparas estaban encendidas, y tenían suficiente aceite para que sus luces siguieran
ardiendo, aun en la noche más oscura.
En la Biblia, el aceite suele ser usado
para representar el Espíritu Santo
(Zac. 4:1-6). Antes de que nuestra luz
brille, necesitamos estar llenos de ese
aceite especial. En el libro Palabras de
vida del Gran Maestro, Elena White explica cómo el Espíritu Santo nos prepara
para brillar: «Así los seguidores de
Cristo han de verter luz sobre las tinieblas del mundo. Por medio del Espíritu
Santo, la Palabra de Dios es una luz
cuando llega a ser un poder transformador en la vida del que la recibe. Implantando en el corazón los principios de su
Palabra, el Espíritu Santo desarrolla en
los hombres los atributos de Dios. La luz
de su gloria –su carácter– ha de brillar
en sus seguidores. Así ellos han de glorificar a Dios, han de iluminar el camino a
la casa del Esposo, a la ciudad de Dios, a
la cena de bodas del Cordero».1
En el presente, el mundo está envuelto en la oscuridad respecto de Dios
y su carácter. Dios nos llama a cada uno
para que hagamos brillar nuestra luz
por él, no solo para que nos alumbre,
sino para que –al igual que las mujeres
prudentes de la parábola– permita que
otros encuentren el camino hacia el
Esposo –hacia Jesús–, y hacia el hogar
del Esposo –el cielo.
Para que brille nuestra luz
No obstante, ¿cómo hacemos para
que brille nuestra luz? Se nos dice que
«la obra práctica tendrá mucho más
efecto que el mero sermonear. Hemos
de dar alimento al hambriento, vestir
al desnudo y proteger al que no tiene
Disipemos las
tinieblas
Deje que brille su luz
Ted N. C. Wilson
fotografía :
emre
n a c i g i l
No permitan que nadie les
diga que no son necesarios .
hogar. Únicamente el amor de Cristo
puede satisfacer las necesidades del alma
[…]. Hay muchas personas que han
perdido la esperanza. Devolvedles la luz
del sol. Muchos han perdido su valor.
Habladles alegres palabras de aliento.
Orad por ellos. Hay personas que necesitan el pan de vida. Leedles de la Palabra de Dios. Muchos están afectados de
una enfermedad del alma que ningún
bálsamo humano puede alcanzar y que
ningún médico puede curar. Orad por
esas almas. Llevadlas a Jesús».2
Respondamos al llamado
Tomemos seria y personalmente
el llamado divino. No podemos hacer
nada por nosotros mismos; solo cuando
dependemos completamente del Señor
para que nos dirija y guíe podemos
seguir su llamado. Cristo y su justicia
tienen que llenar nuestras vidas.
El mundo abunda en conductas
existenciales: la gente piensa que todo es
relativo, pero no es así. Hay absolutos, y
se encuentran en la Palabra de Dios. Jesús
nos dice en Apocalipsis 3:11: «Vengo
pronto; retén lo que tienes, para que
ninguno tome tu corona». Como adventistas, somos llamados a ser fieles a Dios.
Trabajemos unidos
Miembros laicos, los desafío a que
participen de la misión diaria de la iglesia mucho más de lo que lo han hecho.
¡Contamos con ustedes! ¡Dios cuenta
con ustedes! El evangelismo es la savia
de la iglesia. Todos tenemos que participar, mediante la testificación personal,
el evangelismo en grupos pequeños, o
el evangelismo público en sus diversas
formas. Los invito a participar, aun
cuando piensen que esto no funciona en
la región donde viven; adapten sus métodos, pero háganlo. Bajo la conducción
divina, cada esfuerzo que hagan para
alcanzar los corazones, dará su fruto.
Los líderes y los miembros de
iglesia tienen que trabajar unidos en la
misión. En Testimonios para la iglesia,
tomo 9, leemos: «La obra de Dios en
este mundo no podrá terminarse hasta
que los hombres y las mujeres que
componen la feligresía de nuestra
iglesia se interesen en la obra y unan
sus esfuerzos con los de los ministros y
dirigentes de la iglesia».3
Revolucionen su forma de
pensar
Miembros de iglesia, permitan
que el Espíritu Santo revolucione su
forma de pensar. Asuman la misión de
la iglesia de manera diaria, trabajando
estrechamente con los líderes y los
pastores. Que la participación sea total;
que nadie quede afuera. Todos somos
misioneros, por lo que tiene que haber
una participación plena. Hagan algo
por Cristo y por otros. No permitan
que otro les diga que no son necesarios.
El Espíritu Santo los capacitará como
mensajeros del cielo para iluminar
sus vecindarios. El reavivamiento y la
reforma serán personales y reales.
«Es el privilegio de toda alma ser un
canal vivo por medio del cual Dios pueda comunicar al mundo los tesoros de
su gracia […]. No hay nada que Cristo
desee tanto como agentes que representen al mundo su Espíritu y carácter
[…]. Todo el cielo está esperando que
haya canales por medio de los cuales
pueda derramarse el aceite santo para
que sea un gozo y una bendición para
los corazones humanos».4
En Mateo 9:37-38, Jesús nos desafía
con la verdad de que «la mies es mucha,
pero los obreros pocos. Rogad, pues, al
Señor de la mies, que envíe obreros a
su mies». Y en Santiago 1:25, se nos
amonesta a ser «hacedores de la obra».
En vísperas de la eternidad
Hago un llamado para que todos
reconozcan que estamos en vísperas
de la eternidad. En verdad, ¡Jesús viene
pronto! Dios quiere trabajar en nosotros y por nuestro medio. ¡Si alguna
vez hubo un tiempo para permitir
que nuestra luz brille por Cristo, ese
momento es ahora! (1 Pedro 2:9).
Se nos dice que «La mayor necesidad actual no es tanto de predicadores sabios
y elocuentes como de hombres y mujeres que hayan aprendido de Jesús de
Nazaret a ser mansos y humildes, y que
confiados en su poder, irán […] para
dar la invitación: “Venid, que ya está
todo preparado” (Luc. 14:17)».5
¡Jesús viene pronto! Levantemos en
alto nuestra luz y compartámosla de
manera práctica, señalando a los que
nos rodean a aquel que nos ha dado la
salvación, y que ha prometido llevarnos
pronto al hogar. La iglesia y la obra al
depender completamente en Cristo
implican la participación total de los
miembros. Esta es nuestra obra, la que
nos confió el mismo cielo. Que Dios
nos guíe a cada uno en nuestra tarea de
«Alcanzar al mundo» para Cristo.
¡Levántate! ¡Resplandece! ¡Cristo
viene! n
1 Palabras
de vida del Gran Maestro, p. 341.
énfasis es mío.
para la iglesia, t. 9, p. 95.
4 Palabras de vida del Gran Maestro, p. 345.
5 Testimonios para la iglesia, t. 9, p. 29.
2 Ibíd., pp. 343, 344, el
3 Testimonios
Ted N.C. Wilson es
presidente de la Iglesia
Adventista del Séptimo Día.
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
9
S alud
mundial
Peter N. Landless y Allan R. Handysides
Alivio del
dolor osteoartrítico
Al igual que mi padre, sufro de
osteoartritis. Me pregunto si lo heredé,
y qué puedo hacer. Mi problema más
grande es el dolor de rodilla, que es
casi constante. Tengo 67 años, y
también tengo un poco de sobrepeso.
U
sted no menciona si es
hombre o mujer. Ese dato es
importante, porque las mujeres
sufren más de la osteoartritis de rodilla
que los hombres. Alrededor del 25 por
ciento de los mayores de 55 años sufren
de artritis en las rodillas, y su incidencia
aumenta con la edad. La osteoartritis
de manos puede heredarse, al igual
que otras formas de esa afección. Las
lesiones previas, la presión sobre la
rodilla por cuestiones laborales y, por
supuesto, la obesidad pueden contribuir
a la osteoartritis.
La artritis es la inflamación de una
articulación y, como consecuencia del
dolor, puede producirse debilidad muscular. El cartílago que cubre los huesos
de las articulaciones se daña, y las
superficies irregulares entonces se vuelven más propensas a sufrir lesiones; un
típico círculo vicioso. La desalineación
de una articulación lleva a un desgaste
desparejo. En la rodilla, el dolor suele
producirse entre la rótula y el fémur.
La artritis de rodilla suele ser más
dolorosa al subir las escaleras, levantarse
10
Adventist World | Octubre 2015
de una silla o caminar largas distancias.
En ocasiones, una persona se queja
de que «se le afloja la rodilla». Esto
acaso significa que hay un ligamento o
cartílago dañado, pero es más común
que sea una señal de la debilidad de los
músculos que sostienen la articulación.
A veces se confunde con artritis el
dolor que resulta de la inflamación de
los tendones.
Los rayos X suelen revelar si hay artritis, pero en ocasiones, el dolor artrítico se produce aun cuando no se detecten
cambios en las imágenes. Los análisis de
sangre no resultan útiles en este caso.
Lo primordial es aliviar el dolor.
Hay estudios que han mostrado que
los antinflamatorios no esteroideos son
superiores para aliviar el dolor que el
acetaminofén (paracetamol). Los efectos secundarios del acetaminofén, sin
embargo, son menores que en el caso
de los antinflamatorios no esteroideos,
por lo que suele ser la primera opción
de tratamiento.
Las inyecciones de ácido hiarulónico en la articulación no han mostrado
beneficios significativos; las de corticosteroides alivian el dolor, pero tienden a
deteriorar los huesos de la articulación,
por lo que su acción es limitada. Se
suele usar glucosamina y sulfato de
condroitina para aliviar el dolor. Aunque los estudios han hallado escasa
toxicidad, no se ha demostrado una
mejora más allá del efecto placebo (la
sensación de «sentirse bien» que se produce por la percepción de los supuestos
beneficios de un tratamiento).
En nuestra opinión, el ejercicio para
fortalecer los músculos que rodean la
rodilla disminuye el dolor en muchas
circunstancias y favorece la estabilidad
de la articulación. Los ejercicios deberían tratar de mejorar las funciones
diarias, como por ejemplo inclinarse,
subir escaleras, doblar las rodillas al
levantar pesos y mejorar el equilibrio.
La combinación de perder peso y
fortalecer los músculos ha mostrado ser
superior al mero ejercicio.
Si la articulación está desalineada
(deformada), a veces ayuda usar rodillera.
No se sabe aún si la menor incidencia
de inflamación entre los sudasiáticos es
genética o está relacionada con la dieta.
Algunos afirman que la cúrcuma posee
propiedades antinflamatorias, y algunos
datos parecen apoyar esa afirmación. Se
necesita un estudio más abarcador antes
de recomendar la cúrcuma como terapia
comprobada contra la artritis.
Le sugerimos que pierda algo de
peso, fortalezca sus músculos, y repase
su programa de ejercicios con un fisioterapeuta. Los cambios simples en el estilo
de vida suelen ser los tratamientos más
efectivos.
No hemos cubierto aquí las soluciones quirúrgicas, que usted puede analizar
con un especialista en articulaciones.
Oramos para que el Señor lo fortalezca
y para que, al buscar ayuda e incorporar
los consejos recibidos, experimente plenitud en Cristo y alivio de las molestias. n
Peter N. Landless es cardiólogo nuclear
certificado y director del Departamento de
Ministerios de Salud de la Asociación General.
Allan R. Handysides es ginecólogo
certificado y exdirector del Departamento
de Ministerios de Salud de la Asociación
General.
fotografía : T h i n ksto c k P h otos / i sto c k
N O TA D E TA PA
Andrew McChesney
alcanzar al mundo
es algo personal
El nuevo plan estratégico de la iglesia busca que
cada miembro comparta a Jesús
E
l pequeño grupo de oración que
un matrimonio adventista inició
en Kenia occidental en 2011 ha
crecido hasta tener cuatrocientas personas
y presenciado el bautismo de dieciséis
pastores de otras denominaciones
durante la reciente iniciativa denominada
«Cien días de oración».
La pareja, el empresario Philip Rono
y su esposa Calvin Chepchumba Rono,
están convencidos de que los bautismos
del 18 de junio fueron resultado directo
del derramamiento del Espíritu Santo
durante los «Cien días de oración», un
G L O B O : K as i a B i el / i sto c k / t h i n ksto c k
R etratos : D a v i d B . S h er w i n
programa de oración diaria llevado a cabo
del 25 de marzo al 3 de julio pasados.
«Los “Cien días de oración” se
convirtieron en un gran milagro que
tomó a todos por sorpresa –dijo Philip
Rono–. Siempre hemos invitado a no
adventistas, pero esta vez era un número grande, y nos sorprendió de qué
manera el Señor obró en ellos».
El entusiasmo de los Rono por
compartir a Cristo es justamente lo que
los líderes esperan que se repita en cada
uno de los 18,5 millones de miembros
de iglesia en los próximos cinco años.
El principal énfasis del nuevo plan
estratégico «Alcanzar al mundo», que
será implementado entre 2015 y 2020,
es hallar la manera de que cada
adventista participe del evangelismo.
El plan, basado en los resultados
de una encuesta durante dos años a
más de cuarenta y un mil miembros y
exmiembros de iglesia, busca brindar
una visión y dirección para cumplir la
misión de preparar a un pueblo para
el regreso de Cristo a la vez que insta a
los directores de los departamentos y
líderes de las Divisiones para que creen
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
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N O TA D E TA PA
programas que estimulen la relación
de los feligreses con Dios, y les brinden
maneras de evangelizar.
Entre los actuales programas está
«777», en el cual los miembros oran
a las siete de la mañana y de la tarde,
siete días a la semana; «Diez días de
oración» en enero; «Cien días de
oración»; y «Creed a sus profetas», una
lectura bíblica diaria por Internet que
dos veces por semana incluye pasajes de
los escritos de Elena White, una de las
fundadoras de la iglesia. Estos programas son coordinados por la Asociación
Ministerial de la Asociación General.
Otras iniciativas de la iglesia
incluyen «Misión a las ciudades», el
«Ministerio abarcador de salud», y
«Reavivamiento y reforma».
Ted N. C. Wilson, el presidente
de la Iglesia Adventista, dijo que los
programas serán usados para que cada
miembro participe del evangelismo.
«Es fundamental para la proclamación
plena de los mensajes de los tres ángeles
y el derramamiento de la lluvia tardía
del Espíritu Santo –dijo Wilson–. Todos
necesitan compartir a Cristo y este
precioso mensaje adventista dentro del
contexto en el que se sientan cómodos,
según los guíe el Espíritu Santo».
Wilson dijo que los líderes y
miembros de iglesia deberían trabajar
unidos para la misión, y destacó que
Elena White escribió: «La obra de Dios
en este mundo no podrá terminarse
hasta que los hombres y las mujeres
que componen la feligresía de nuestra
iglesia se interesen en la obra y unan
sus esfuerzos con los de los ministros
y dirigentes de la iglesia» (Testimonios
para la iglesia, t. 9, p. 95).
El impulso de involucrar a todos los
miembros –la «participación total de los
miembros», como lo denomina Wilson–,
será un punto especial de énfasis para
toda la iglesia durante los próximos
cinco años. Wilson está colocando al
departamento de Escuela Sabática y
Ministerios Personales de la Asociación
General, a cargo del recientemente ele-
12
Adventist World | Octubre 2015
Los grupos de oración en Eldoret (Kenia), han crecido de tal manera que
ahora hay cientos de ellos, a los que asisten personas que hacen énfasis en
la oración y el reavivamiento.
gido Duane McKey, directamente bajo
su tutela para ser su consejero, y todos
los departamentos participarán de este
esfuerzo integrado de evangelización.
Cómo se produjo el bautismo
de deciséis pastores
El grupo de oración de Philip y
Chepchumba Rono en Eldoret (Kenia),
ofrece una vislumbre de la participación
total que imaginan los líderes a miles de
kilómetros de distancia, en la sede central de la iglesia en Maryland (EE. UU.).
Este matrimonio comenzó un
pequeño grupo de oración de cinco
personas en 2011, bajo el programa
«Reavivamiento y reforma». Los integrantes del grupo comenzaron a orar
de dos a cuatro horas todos los lunes
y, cuando la iglesia dio a conocer sus
programas de oración, se alentaron para
seguir también esas iniciativas diarias.
La asistencia se incrementó cuando
el matrimonio dio un énfasis aún mayor a la oración y organizó un segundo
grupo en febrero de 2014. Ese grupo
pasó de cincuenta a ciento cincuenta
y luego a doscientas personas que
asistieron a los «Diez días de oración»
a comienzos de enero de 2015. Cuando
comenzaron los «Cien días de oración»
a fines de marzo, llegaron a tener tres-
Durante cuatro años, Chepchumba Rono
y su esposo Philip usaron iniciativas que
formaron parte del programa «Reavivamiento y reforma» que presentó la
Iglesia Adventista, por el cual ofrecieron
reuniones bíblicas para la comunidad.
cientas personas y en mayo a más de
cuatrocienta.
El nuevo grupo había acordado
reunirse dos días al mes para lo que
llamaron «Reuniones de reavivamiento
y reforma». «Vimos entonces que no
era suficiente, por lo que comenzamos a
reunirnos tres días al mes, por lo general jueves, viernes y sábado –dijo Philip
Rono–. Los sábados, la gente oraba por
las tardes, iba a su casa por unas horas,
El plan insta a los directores de los
departamentos y líderes de las Divisiones
para que creen programas que estimulen
la relación de los feligreses con Dios,
y les brinden maneras de evangelizar .
región aledaña ha solicitado seminarios
privados para aprender del adventismo.
Rono dijo que el reavivamiento en
Kenia occidental fue resultado de la
oración. «Necesitamos tomar muy en
serio la oración, en especial durante este
tiempo. Reunirse cada semana hace una
gran diferencia. Hemos presenciado
muchos milagros».
Rono y su esposa ahora están estableciendo un «centro de influencia»,
un centro de vida sana con salas de
tratamiento, una biblioteca, una capilla
para orar todos los días a las 13.00, y
un restaurante en el centro de Eldoret,
para incorporar otro programa de la
iglesia mundial: «Misión a las ciudades». El último verano, el matrimonio
recorrió varios centros de vida sana en
los Estados Unidos en busca de ideas
y consejos.
Qué están haciendo las
Divisiones
Las vigilias de oración organizadas por Philip Rono y otros, llevaron a
que dieciséis pastores de otras religiones solicitaran el bautismo en
la Iglesia Adventista.
y entonces regresaba a las 19.00 para
una vigilia de oración».
Los asistentes siguieron los programas de diez y cien días de oración
en sus hogares. En mayo, durante la
iniciativa de cien días, dos miembros
del grupo invitaron a doce pastores de
otras denominaciones para asistir a las
vigilias. «Quedaron tan impresionados
por la recepción y las lecciones presentadas, que quisieron aprender más de
los adventistas», dijo Rono.
Inmediatamente se organizó un
seminario de tres días, y se invitó a cincuenta pastores. Al fin del seminario, un
grupo de pastores preguntó si se podía
fotografías :
A n dre w
M c C h es n e y
organizar otro seminario similar en la
ciudad de ellos, para que asistieran sus
miembros. Después de ese encuentro,
dieciséis pastores solicitaron el bautismo.
En agosto, los miembros de dos de
las iglesias cuyos pastores se hicieron
adventistas decidieron cambiar el nombre de sus templos a «adventista». Un
miembro del grupo de oración donó
12.400 dólares como parte de pago de
las propiedades, y la Asociación prometió cubrir la diferencia.
Se han programado una serie de
reuniones para alcanzar a los exfeligreses de los pastores bautizados. Asimismo, otro grupo de pastores de una
Blasious Ruguri, presidente de la
División de África Centro-Oriental de la
Iglesia Adventista, que incluye a Kenia,
dijo que la oración es fundamental para
el cumplimiento de los objetivos de
«Alcanzar el mundo».
Contó que en su División «continuará la vida de oración de todos los
miembros en todas las iglesias para
mantener el fuego ardiendo en cada
corazón».
Ruguri también dijo que su División ha descubierto que el evangelismo
a cargo de niños es sumamente efectivo para alcanzar a la gente, y que las
personas responden mejor cuando las
mujeres participan de las iniciativas
misioneras.
Los líderes de la iglesia mundial
están animando a cada región y a
cada miembro para que encuentren los
métodos que mejor les funcionen.
La División Sudamericana ha hallado que «Revividos por la Palabra» y su
sucesor, «Creed a sus profetas», han sido
muy bien aceptados por los miembros.
«Estamos motivando a los miembros
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
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N O TA D E TA PA
Los grupos que brindan cuidados especiales en Indonesia hacen
uso de recursos contextualizados durante las reuniones semanales de
«Evangelismo y estilo de vida integrados»
A be
A be
para que dediquen la primera hora
de cada día a estar en la presencia del
Señor, participar de #RBHW, #BHP,
estudiar la lección de Escuela Sabática
y orar”, dijo Erton Köhler, presidente
de la División. #RBHW y #BHP son las
etiquetas de Twitter para los planes de
estudio diario de la Biblia, y sus usuarios se encuentran entre los más activos
del mundo.
«La única manera de ser renovados
es pasando tiempo personal con Dios
en el mejor momento de la mañana,
cuando la mente está abierta para leer,
comprender y estar cerca de Dios»,
dijo Köhler.
Paul Ratsara, presidente de la
División de África Meridional y Océano
Índico, dijo que el mayor desafío en su
región es la disponibilidad de recursos.
«Mi sueño es tener suficientes Biblias
y libros del Espíritu de Profecía para
todos los miembros –dijo–. Necesitamos asegurarnos de que cada miembro
intensifique sus planes de lectura».
Ratsara dijo que aprecia mucho
«Revividos por la Palabra» y «Creed
14
Adventist World | Octubre 2015
Carpe n a / S S D
a sus profetas», y que su intención es
promover enérgicamente el plan de
lectura. «Con el aumento de disponibilidad de teléfonos inteligentes e Internet, más miembros tendrán acceso
a la gran bendición de estas lecturas
diarias», expresó.
El acceso a la Biblia y el Espíritu de
Profecía es también un desafío en la
División del Pacífico Sur, cuyo presidente procura dar un fuerte énfasis al
discipulado. «La Biblia es muy accesible en inglés y francés, y en todos los
idiomas de las islas del Pacífico –dijo
su presidente Glenn Townend–. Pero
aun entre los adventistas, no todos
saben leer».
Townend dijo que tres entidades
«Está escrito» –en Oceanía, la Unión
de Papúa Nueva Guinea, y la Misión
de las Islas Salomón–, han pasado la
Biblia y algunos libros de Elena White
al formato de audio para que puedan
ser escuchados en reproductores que
funcionan con energía solar. «Los
líderes enseñarán y serán ejemplos de
maneras bíblicas creativas de oración, y
Carpe n a / S S D
el Canal Hope ofrecerá programas sobre
hábitos espirituales que conectan a las
personas con Dios –dijo Townend–. Por
cierto, fomentaremos el plan de lectura
de la Biblia. El discipulado no se hace
realidad sin una estrecha conexión con
Cristo mediante hábitos espirituales».
En la División de Asia Pacífico Sur,
su presidente Leonardo Asoy enfrenta
desafíos tremendos, dado que hay grupos sin alcanzar y millones de personas
de tres de las principales religiones: el
budismo, el hinduismo y el islamismo.
Asoy dijo que el territorio seguirá
usando iniciativas como «Misión a las
ciudades» y «Un año en misión» para
alcanzar a esas comunidades, pero
que dará un mayor énfasis al cuidado
y retención de los miembros. «Los
miembros nuevos, en especial los que
provienen de religiones no cristianas,
necesitan mentores, un sentido de pertenencia, capacitación en evangelismo
personal y discipulado, para ser así
cristianos gozosos y activos que
comparten a Cristo por medio de su
ejemplo», dijo.
Asoy se mostró entusiasmado por un
nuevo programa denominado «Evangelismo y estilo de vida integrados»,
promovido por su predecesor, Alberto
Gulfan, y dijo que contribuye con los
objetivos de «Alcanzar al mundo».
«Usa el método de evangelismo de
Cristo, y fomenta el reavivamiento y la
reforma personales», dijo. Los miembros que participan del programa dedican dos meses a la oración, el estudio
de la Biblia y la preparación. Después
de ese período, invitan a su familia,
amigos y vecinos para que los acompañen en grupos en sus hogares u otros
lugares informales. Se busca así cultivar
relaciones. Durante esos encuentros
semanales, analizan temas de interés
general en las áreas de salud, familia,
felicidad y participación comunitaria,
y ofrecen perspectivas basadas en la fe.
También escogen proyectos grupales
comunitarios.
Aunque la unidad familiar es el
punto básico de inicio, y una familia
invita a otra a unírsele, los grupos de
atención también reúnen personas con
trasfondos comunes, como por ejemplo
profesionales jóvenes, madres o padres
solos y ancianos.
«No se enfatiza el evangelismo
como evento. En su lugar, el programa
ofrece el evangelismo como un proceso, mediante contactos personales a
largo plazo y la atención de los individuos –dijo Asoy–. Va a llevar tiempo,
pero estamos listos para ver qué hará
el Señor». n
Para saber más:
Lea el plan estratégico «Alcanzar el
mundo» en www.adventistarchives.
org/reach-the-world.pdf.
El estudio 2011-2013 detrás del nuevo
plan estratégico puede ser consultado
en documents.adventistarchives.org/
Statistics/Other/ACRep2013.pdf.
Lea la sinopsis de la nueva estrategia
en www.adventistreview.org/churchnews/story2921-%E2%80%8B
what-you-need-to-know-about-theadventist-churchs-new-strategy.
Andrew McChesney
es editor de noticias de
Adventist World.
OBJETIVoS de
«Alcanzar al mundo»
Veintiún objetivos divididos en tres categorías.
Relación directa con Dios
1. Que los adventistas participen del estudio diario de la Biblia.
2. Que todos los miembros estudien las doctrinas, algo fundamental para la madurez
espiritual.
3. Que todos los miembros conozcan mejor los consejos y el ministerio profético de
Elena White.
4. Incrementar la participación de los miembros en prácticas espirituales bíblicas
auténticas.
5. Fomentar, entre los pastores, docentes, miembros y estudiantes de las instituciones de la denominación, un mayor aprecio por un estudio de las Escrituras según el
método histórico-gramatical y el enfoque historicista de interpretación, lo que incluye
comprender las profecías.
6. Animar a los miembros para que adopten patrones regulares de culto personal.
Relación interna con Dios
7. Mejorar la unidad y la comunidad entre los miembros de iglesia.
8. Fomentar el discipulado en los creyentes e involucrarlos en el servicio.
9. Incrementar la participación de los jóvenes en la vida de la iglesia.
10. Afirmar el papel administrativo de los pastores en el liderazgo organizacional.
11. Mejorar las prácticas de liderazgo para aumentar la credibilidad y la confianza
en la organización de la iglesia, sus operaciones e iniciativas misioneras.
Relación externa con Dios
12. Incrementar la obra misionera y la presencia adventista en la Ventana 10/40.
13. Incrementar la obra misionera y la presencia adventista en las grandes zonas
urbanas del mundo.
14. Hacer que el establecimiento de nuevos grupos de creyentes sea una prioridad
en todas partes del mundo.
15. Reorientar sustancialmente nuestra comprensión y métodos misioneros.
16. Involucrar a todos los miembros de iglesia, pastores y líderes en el trabajo combinado.
17. Incrementar la participación de los jóvenes en la misión de la iglesia.
18. Animar a las iglesias locales para que tomen la iniciativa de comunicar los
mensajes de los tres ángeles y lleven adelante la misión de la Iglesia Adventista.
19. Elevar el perfil de la misión a las religiones y sistemas de creencias no cristianos.
20. Fortalecer los recursos globales de la iglesia mundial para la misión.
21. Optimizar los planes y las metodologías de comunicación, para así fortalecer la
obra y el testimonio de la iglesia.
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
15
C reencias
fundamentales
Elizabeth Camps
NÚMERO 22
Para ser cristianos
Un carácter semejante al de Cristo
H
ace un tiempo, una amiga y yo estábamos
recordando nuestro primer año en la universidad,
cuando todo nos parecía tan nuevo y apasionante.
Allí estábamos, en un inmenso campus, viendo cada día a
cientos de personas nuevas. Las posibilidades nos parecían
interminables, y estábamos sumamente entusiasmadas.
Hablamos de todo lo que experimentamos por primera vez
cuando fuimos al colegio: desde vivir en una habitación de la
residencia con otra persona hasta preparar nuestras comidas
y poner la ropa a lavar para no quedarnos sin ropa limpia.
Algo más nos resultó significativo: por primera vez
éramos responsables de nosotras mismas en todos los sentidos. Estábamos realmente solas; mamá y papá ya no nos
acompañaban cada día, asegurándose de que comiéramos lo
correcto y a horas adecuadas, o recordándonos que era hora
de ir a dormir. En la universidad, por primera vez, decidíamos
cuándo levantarnos, comer y acostarnos. Aunque acaso entonces no lo notábamos, ser plenamente responsable de uno
mismo es una gran tarea. Así como nos sucedió al llegar a la
universidad, Dios también nos ha confiado la responsabilidad
plena de cuidar de nuestro cuerpo.
pios del cielo». En otras palabras, queremos ser seguidores de
Cristo en cada aspecto de la vida. Esto incluye no solo nuestra
interacción con los demás sino también nuestra manera de
vestir. Reconocemos que la ropa puede transformar la apariencia, pero jamás transformar el carácter.
Ese carácter semejante al de Cristo no solo representa la
belleza interior; también incluye nuestros cuerpos. Parece
ser que Dios quiere no solo que tratemos a otros como
lo haría Cristo, sino que también nos tratemos a nosotros
mismos como lo haría Cristo. En 1 Corintios 6:19, 20,
leemos que nuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo.
Eso significa que Cristo vive en nosotros y es mostrado al
mundo por nuestro medio. Somos llamados a honrar a Dios
con nuestro cuerpo.
¿Qué mejor forma de honrar a Dios que cuidando del
templo que él nos ha dado? Esto implica cuidar de nuestras
necesidades básicas de salud, como por ejemplo asegurarnos
de dormir lo suficiente, comer bien y beber suficiente líquido.
Pablo enfatiza que debemos cuidar las necesidades físicas en
1 Corintios 10:31, donde dice: «Si, pues, coméis o bebéis o
hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios». Comer
y beber está relacionado a caminar con Cristo.
Cómo ser cristianos adultos
La frase «conducta cristiana» evoca varias ideas y
conceptos. Acaso pensemos en nuestra manera de tratar e
interactuar con los demás. O nos lleva a reflexionar en cuánto
reflejamos a Dios y a la iglesia cuando interactuamos con los
que jamás han oído hablar de los mensajes de los tres ángeles.
Es por eso que solemos prestar atención a nuestra manera
de actuar, y procuramos recordar la importancia de ser una
influencia positiva. Pero si miráramos más de cerca, podríamos descubrir que la conducta cristiana no se refiere solo a
nuestra relación con otros sino también a la manera en que
nos tratamos a nosotros mismos.
Resulta útil repasar brevemente las palabras específicas
que utiliza la Creencia 22: «Hemos sido llamados a ser un
pueblo que piensa, siente y actúa en armonía con los princi-
16
Adventist World | Octubre 2015
Es difícil ser adulto
Cuando ingresé a la universidad era muy joven; mis hábitos de sueño y alimentación eran las últimas de mis preocupaciones. En medio del trajín de clases totalmente nuevas,
el trabajo y las numerosas responsabilidades, a menudo me
olvidaba de acostarme a una hora razonable. A veces me
iba a dormir a la madrugada. Algo parecido sucedía con mi
alimentación. Estaba tan ocupada que me olvidaba de comer,
y descuidé la tarea de planificar mi alimentación. Me limitaba
a comprar o preparar algo que me ayudara a continuar rápidamente con mis actividades.
Aun después de la universidad, cuidarnos no suele ser
nuestra prioridad, y nos resulta muy difícil. Estamos cada vez
más ocupados con proyectos laborales, nuestra familia y las
maduros
comienza cuidando de nosotros mismos
actividades de la iglesia. Parece ser que no importa en qué
etapa de la vida nos encontremos, tenemos que luchar para
cuidar de nuestro cuerpo.
Y sin embargo, en medio de todas las responsabilidades
de la vida, me siento atraída por las palabras de Juan 14:15:
«Si me amáis –nos dice Jesús–, guardad mis mandamientos».
Mi motivación para vivir una vida semejante a la de Cristo
que abarque el carácter, el cuerpo y la mente, tiene que verse
impulsada por el amor. Si amamos a Dios, tendremos
deseos de honrarlo; y Dios nos ha pedido que lo honremos
cuidando nuestro cuerpo. Al concentrarnos en Dios y amarlo,
sentiremos el deseo y la voluntad de cuidarnos.
Es bueno saber que Dios cuida de cada aspecto de nuestra
vida: el espiritual, el emocional y el físico. Piensa inclusive en
los más pequeños detalles, y nos los recuerda una y otra vez
en la Biblia, que es su carta de amor hacia nosotros. Por ello,
cuando nos llama a vivir una vida semejante a la de Cristo,
necesitamos recordar que esto no solo afectará a los que nos
rodean, sino que también nos transformará personalmente. n
* Los textos bíblicos han sido extraídos de la versión Reina-Valera 1995® © Sociedades Bíblicas
Unidas, 1995. Usada con autorización.
Elizabeth Camps es escritora y especialista
en relaciones públicas de la Administración
Adventista de Minimización de Riesgos,
en Silver Spring (Maryland, EE. UU.), y disfruta
mucho de su profesión.
La conducta cristiana
Hemos sido llamados a ser un pueblo
piadoso que piensa, siente y actúa en
armonía con los principios del cielo. Con el
fin de que el Espíritu Santo reproduzca en
nosotros el carácter de nuestro Señor, nos
ocupamos únicamente en actividades que
produzcan pureza cristiana, salud y gozo
en nuestras vidas. Esto significa que
nuestras diversiones y entretenimientos
deben hallarse a la altura de las más
elevadas normas de la belleza y el gusto
cristianos. Sin dejar de reconocer las
diferencias culturales, nuestra vestimenta
debe ser sencilla, modesta y presentable,
como corresponde en el caso de individuos cuya verdadera belleza no consiste
en el adorno exterior, sino en el ornato
incorruptible de un espíritu manso y apacible. Significa además que, por cuanto
nuestros cuerpos son templos del Espíritu
Santo, debemos cuidar de ellos en forma
inteligente. Junto con el descanso y el
ejercicio adecuados, debemos adoptar
el régimen alimentario más sano posible,
y abstenernos de los alimentos impuros
señalados en las Escrituras. Ya que las
bebidas alcohólicas, el tabaco y el uso
irresponsable de drogas y narcóticos son
dañinos para nuestro organismo, debemos
abstenernos también de ellos. En vez de
usarlos, debemos ocuparnos en todo lo
que contribuya a colocar nuestros pensamientos y cuerpos bajo la disciplina de
Cristo, quien desea para nosotros gozo,
bondad y salud perfecta (Gén. 7:2; Éxo.
20:15; Lev. 11:1-47; Sal. 106:3; Rom. 12:1, 2;
1 Cor. 6:19, 20; 10:31; 2 Cor. 6:14-7:1; 10:5;
Efe. 5:1-21; Fil. 2:4; 4:8; 1 Tim. 2:9, 10; Tito 2:11,
12; 1 Ped. 3:1-4; 1 Juan 2:6; 3 Juan 2).
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17
D evocional
Cuando
vence
la
esperanza
Wilona Karimabadi
C
uando estaba en la escuela
primaria, era muy apegada a mis
abuelos, quienes vivían lejos.
Un par de veces al año, sin embargo,
venían de visita y se quedaban durante
varias semanas. Para mí siempre era
como recibir un premio, porque podía
ignorar algunas de las reglas diarias:
después de la escuela, podía comer algo
especial, me contaban historias más
tarde de lo acostumbrado, y muchas
otras cosas que suelen hacer los abuelos
para mimar a sus nietos. Para mí,
la visita de ellos hacía que la rutina
diaria –la escuela, las tareas en casa y la
estricta hora de ir a la cama– se tornara
más liviana, como si estuviera siempre
de vacaciones.
Esos días tan especiales, sin embargo, pasaban rápido. Y antes de que
me diera cuenta, teníamos que ir a
despedirlos al aeropuerto. Entonces
regresaba a la rutina normal, que me
resultaba devastadora porque, como
suele suceder, los abuelos superan a
los propios padres. Ellos prometían
llamar por teléfono al llegar, diciendo
que no pasaría mucho antes de que
regresaran, pero no recuerdo que
eso me hiciera sentir mucho mejor.
Quizá era demasiado sensible,
pero después de que el avión
desaparecía en la distancia me
sentía realmente deprimida. No
estoy exagerando: lloraba todos
los días, caminaba sin propósito
por la casa, y me costaba sonreír.
Gracias a Dios, ese malestar me
duraba solo una semana. Pero me
comportaba como si estuviera de
duelo, tanto así que, frustrados
con mis lágrimas y semblante taciturno, mis padres me recordaban
continuamente que los abuelos
18
Adventist World
En ese momento, sus apesadumbrados corazones sintieron el alivio
que aun hoy también alivia nuestras cargas: la esperanza .
estaban allí, del otro lado de la línea del
teléfono. Pero no era lo mismo.
Por supuesto, podía escuchar sus voces cuando lo deseaba, pero para mí, eso
no se comparaba con su presencia física;
quería verlos y estar con ellos. Hasta
hoy, aún recuerdo cuán perdida me
sentía cuando se iban, con un tremendo
vacío, y ya nada me parecía divertido.
Estaba completamente triste.
Esos pobres discípulos
He estado siguiendo un plan anual
no consecutivo de lectura de la Biblia,
lo que, al momento de escribir estas
palabras, me ha llevado hasta la semana
cuarenta de las cincuenta y dos. Ha
sido una experiencia destacada, porque
recordé pasajes que conocía y quería, y
estudié muchos otros nuevos, algunos
de los cuales me maravillaron y otros
que me dejaron atónita. Al leer en
los Evangelios las experiencias de los
discípulos, me identifiqué realmente
con ellos, porque durante la crucifixión
y posterior ascensión de Jesús, el sentimiento de pérdida que habrán experimentado tiene que haber sido terrible.
Después de años de caminar y hablar con el Salvador por el que dejaron
todo para seguirlo, este desapareció de
su vista. Puedo imaginar que, en esas
horas que siguieron a la crucificción,
habrán sentido un vacío terrible.
Por supuesto, sabían lo que les había
enseñado. Imagino que creían que las
promesas de Cristo jamás los abandonarían, aun cuando ya no los acompañara con su presencia física. Pero el
regreso de Jesús al cielo tiene que haber
sido una experiencia agridulce.
Sabemos que después de su resurrección, Jesús no los dejó inmediatamente.
«Después de padecer la muerte, se les
presentó dándoles muchas pruebas confotografía :
mo n ke y
bus i n ess
vincentes de que estaba vivo. Durante
cuarenta días se les apareció y les habló
acerca del reino de Dios» (Hech. 1:3).*
Los discípulos preguntaron al Señor
cuáles eran sus planes para restaurar el
reino de Israel. Quizá en sus corazones
y mentes humanos anhelaban que
Cristo finalmente viniera como ellos
habían pensado que lo haría, para hacer
realidad allí mismo y en ese instante la
redención de su pueblo. Estoy segura
de que esperaban contra todos los
pronósticos que, de alguna manera, el
amado Salvador no tuviera que dejarlos
físicamente otra vez. Pero Cristo les recordó que solo el Padre conocía la hora
exacta. Entretanto, sin embargo, quería
hacer realidad su promesa de estar
con ellos para siempre y, lo que es más
importante, darles poder. «Pero cuando
venga el Espíritu Santo sobre ustedes,
recibirán poder y serán mis testigos
tanto en Jerusalén como en toda Judea
y Samaria, y hasta los confines de la
tierra» (vers. 8).
Una promesa cumplida
Como me lo recordaban mis abuelos por teléfono cuando llegaban a su
casa, yo también creía que no pasaría
mucho hasta que nos viéramos otra vez.
Y después de que pasaba la semana de
tristeza, se me hacía más fácil aguardar
la próxima visita. Y ciertamente me
ayudaba estar ocupada con lo que tenía
a mano: la escuela, los amigos y la vida
normal de una niña.
Los discípulos tenían importantes tareas que cumplir: tenían que ir y contar
la historia. Cristo los había desafiado
a predicar y enseñar en su nombre,
estableciendo su reino en la tierra y
preparando a su pueblo para su regreso;
una obra que seguimos haciendo.
Imagino que habrá resultado
i mages / i sto c k / t h i n ksto c k
abrumador siquiera pensar en lo que
les aguardaba, mientras veían que subía
y subía hasta que una nube lo ocultó
de su vista (vers. 9). Pero Cristo no los
dejaría sin alentarlos en una forma
realmente inspiradora.
«Ellos se quedaron mirando fijamente al cielo mientras él se alejaba. De
repente, se les acercaron dos hombres
vestidos de blanco, que les dijeron: “Galileos, ¿qué hacen aquí mirando al cielo?
Este mismo Jesús, que ha sido llevado
de entre ustedes al cielo, vendrá otra vez
de la misma manera que lo han visto
irse”» (vers. 10, 11).
Creo que en ese momento, sus
apesadumbrados corazones sintieron el
alivio que hoy también alivia nuestras
cargas: la esperanza.
La tristeza de mi niñez era finalmente vencida por la promesa de ver a mis
queridos abuelos otra vez, y pronto. Y
cuando años después pasaron al descanso, la tristeza que sentí ya de adulta y el
anhelo de verlos que aún siento de tanto
en tanto se ven superados por la misma
esperanza. ¡Pronto los veré otra vez!
Esa esperanza ayudó a que los discípulos siguieran adelante. Y es la misma
esperanza que hoy nos impulsa a seguir,
hasta que alcancemos ese momento
en que el adiós sea realmente cosa del
pasado. ¡Qué glorioso se nos presenta el
futuro! n
*Los textos bíblicos han sido extraídos de La Santa Biblia, Nueva
Versión Internacional® NVI®
Copyright © 1999 de Biblica, Inc.® Usada con autorización.
Todos los derechos reservados.
Wilona Karimabadi
es editora asistente de
Adventist World.
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
19
V ida
adventista
Shandra Kilby1
Sentados
entre el
bagaje
Cómo sentirnos realizados
espiritualmente con las tareas
más simples
E
l viento sopla con fuerza, por
lo que me levanto a cerrar la
ventana de la oficina. Como de
costumbre, me detengo un momento
para contemplar el emotivo panorama.
Cada vez que miro hacia afuera me
inunda una emoción difícil de contener,
que amenaza con salirse por la garganta.
De alguna manera, la escena me cautiva.
Torres macilentas marcadas por las balas,
impacientes hileras de automóviles,
incontables tendederos con ropas al
viento en innumerables balcones en
medio del aire sucio de Beirut. Hay allí
millones de personas no alcanzadas.
Mientras cierro la ventana, escucho el
lúgubre llamado a la oración proveniente
de una mezquita. Pienso por un
momento en el impresionante número
de personas que jamás han escuchado
el mensaje del evangelio –allí afuera
muy cerca de mi ventana– y mi corazón
apenas lo soporta. Con sentido del deber,
sin embargo, regreso a mi tarea.
Después de todo, no es mi trabajo
alcanzar a esas personas.
20
Adventist World | Octubre 2015
Trabajo como secretaria de una
oficina adventista en Oriente Medio. Al
igual que otros incontables obreros de
la iglesia mundial, completo informes,
lleno formularios de datos estadístico,
y recopilo información de diversos
campos de nuestro territorio. En los
días sin tanto trabajo, riego las plantas
de la oficina y limpio las ventanas. Es
un trabajo que recibe muchos nombres:
asistente personal, secretaria o asistente
administrativa. Más allá del nombre,
estoy segura de que no soy la única de la
denominación que a veces siente que el
montón de informes establece una cruel
línea divisoria entre yo –que trabajo
en la oficina– y «ellos» –la misión de la
iglesia–: esas personas sin rostro y sin
nombre que aguardan ser alcanzadas
por el ministerio de corazón a corazón.
Queremos estar allí, llevando las almas
hacia una relación con Cristo, pero por
alguna razón, a algunos Dios nos ha
llamado para cumplir tareas de acción
más limitada.
¿Son misioneros los que trabajan
fotograf Í a :
en oficinas? ¿Participan realmente del
ministerio los que se dedican a tareas de
apoyo? Hace poco, comencé a estudiar
la Palabra de Dios para ver qué consejos
da en ese sentido.
Los que cuidan el bagaje
En 1 Samuel 30 se cuenta la impactante historia de David y sus seiscientos
hombres, que regresaron a la ciudad de
Siclag y la hallaron saqueada e incendiada. Sus mujeres, hijos y animales habían
sido capturados y, como era de esperar,
David y sus hombres sintieron una
momentánea desesperación. Recomponiéndose en seguida, decidieron seguir
a los amalecitas en retirada. Agobiados
por la carga de armas, alimentos y otros
pertrechos militares, emprendieron la
marcha.
La Biblia no especifica si caminaban
a paso vivo, trotaban o corrían, pero
dice que para cuando David y sus
seiscientos llegaron al torrente de Besor,
la tercera parte de los hombres estaba
tan exhausta que no podía continuar.
S te v e
H i x / S omos
Images / F use / t h i n ksto c k
Puede ser que
En lugar de descansar, David decidió
dejar a los doscientos soldados agotados
junto al torrente. Para aligerar la carga
de los otros cuatrocientos, hizo que
dejaran el bagaje con los doscientos
exhaustos. La Biblia expresa que esos
doscientos permanecieron «cuidando el
bagaje» (1 Sam. 30:24).2
Muchos empleados de oficina nos
sentimos como esos doscientos que
quedaron sentados entre el bagaje
mientras otros avanzan para pelear las
batallas del Señor. Puede ser que nuestra función parezca poco importante,
no valorada e insignificante. Pero al
igual que los extenuados soldados, cada
uno tiene cosas que le impiden cruzar el
torrente. Cuestiones de salud, obligaciones familiares, la edad, la experiencia,
la educación u otras circunstancias
pueden impedir que algunos cristianos
trabajen en la ganancia directa de
almas. Y puede ser que se pregunten
si realmente están contribuyendo a la
misión de la iglesia.
Si usted se ha cuestionado esto,
le informo que no es el primero. En
efecto, algunos de los mismos hombres
de David dijeron que los doscientos
no merecían una recompensa. El versículo 22 explica que después de que el
ejército de David rescató sus familias y
posesiones de manos de los amalecitas,
algunos soldados sintieron que los
doscientos del bagaje no debían recibir
parte del botín. «Estos no vinieron con
nosotros, así que no vamos a darles
nada del botín que recobramos. Que
tome cada uno a su esposa y a sus
hijos, y que se vaya».
Parecía que el personal de apoyo era
de segunda categoría; como si estuviera
conformado por haraganes indignos
de una recompensa. Los que pelearon
en el frente dijeron a los del bagaje que
tomaran sus esposas y se fueran.
Pero David pensaba distinto.
David reconoció que esos doscientos
hombres, que no participaron en el
combate del campo de batalla, eran sin
embargo un valioso recurso para su
nos preguntemos si
realmente estamos
contribuyendo
a la misión de
la iglesia .
ejército. Después de todo, si no hubieran permanecido con el bagaje, aligerando así la carga de los perseguidores,
quizá los demás no habrían podido
alcanzar al enemigo. La respuesta de
David a los disgustados luchadores
es inspiradora: «No hagan eso, mis
hermanos –les respondió David–. Fue
el Señor quien nos lo dio todo, y quien
nos protegió y puso en nuestras manos
a esa banda de maleantes que nos había
atacado […]. Del botín participan
tanto los que se quedan cuidando el
bagaje como los que van a la batalla»
(vers. 23, 24).
El libro Palabras de vida del Gran
Maestro comparte un pensamiento interesante desde la perspectiva de Dios,
dirigido a los que permanecen con el
bagaje (o en palabras modernas, en la
oficina): «No es la cantidad de trabajo
que se realiza o los resultados visibles,
sino el espíritu con el cual la obra se
efectúa, lo que le da valor ante Dios».3
No todos pueden pelear en la batalla,
pero todos pueden cumplir con fidelidad el deber asignado. Pueden cuidar
con dedicación del bagaje y orar por los
que están en la batalla. Al terminar el
día, ya sea hayamos estado blandiendo
la espada o cuidando el bagaje, Dios
nos dará la misma recompensa. Aunque
los que trabajamos en una oficina no
bautizamos a nuevos miembros ni estamos al frente de campañas de evangelización, Dios ve nuestros esfuerzos
humildes y devotos como algo digno de
la misma recompensa.
El significado de las cosas
comunes
Cuando miro por la ventana de mi
oficina, siento un dolor muy profundo
al ver una gran ciudad repleta de individuos que no conocen a Dios. Cuando
veo a una niña de unos seis años que
mendiga en la esquina; cuando cruzo
a la hermosa musulmana con un moretón bajo uno de sus ojos; cuando
observo a los refugiados sirios, donde
hay jóvenes que ya están llenos de
canas… no puedo menos que orar para
que haya más obreros en el frente. En
lo que a mí respecta, me gustaría saber
que mi vida influye en sus tareas o en
las de alguna persona. Me da energías
saber que lo que hago en la oficina, no
importa cuán insignificante parezca,
juega una pequeña parte para apoyar
a los otros «cuatrocientos» que son
llamados al frente de batalla.
Por eso, leemos que «la obra de
muchos puede parecer restringida por
las circunstancias; pero dondequiera
que esté, si se cumple con fe y diligencia, se hará sentir hasta las partes más
lejanas de la tierra. La obra que Cristo
hizo cuando estaba en la tierra parecía
limitarse a un campo estrecho, pero
multitudes de todos los países oyeron
su mensaje. Con frecuencia Dios
emplea los medios más sencillos para
obtener los mayores resultados».4
Ya sea aguardemos junto al torrente
de Besor o estemos en el fragor de la
batalla, cobremos ánimo, porque Dios
considera que nuestra labor es valiosa y,
si somos fieles, la influencia de nuestra
obra llegará hasta lo último de la tierra. n
1 La
autora utiliza un pseudónimo
2 Las citas bíblicas pertenecen a la Santa Biblia, Nueva Versión
Internacional ® NVI® Copyright © 1999 de Bíblica.® Usada con
permiso. Todos los derechos reservados.
3 Elena White, Palabras de vida del Gran Maestro, p. 328.
4 Elena White, El Deseado de todas las gentes, p. 762.
Shandra Kilby es un seudónimo.
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
21
LEGADO
de LUZ
PARTE 5: 1891–1900
Los años en Australia
ELENA
GOULD
WHITE
L
a llegada de Elena White a Australia
en diciembre de 1891, y los nueve
años que pasó allí (1891-1900),
coinciden con un período significativo
de su contribución a las publicaciones
de la iglesia.
La realidad del tema del gran conflicto, y su impacto en la vida espiritual
de la iglesia, quedaron claramente
establecidos en su pensamiento. Se
refirió al efecto de las luchas no solo «en
los corazones humanos en los Estados
Unidos» sino también «en las mentes
humanas de esa nación lejana».1 Asimismo, antes de su llegada a Australia,
Elena White luchó contra el desafío de
enfrentar lo desconocido, a saber, una
falta de dirección divina respecto de su
próximo viaje. «Esta mañana me siento
ansiosa y atribulada respecto de mi
deber. ¿Puede ser la voluntad de Dios
que vaya a Australia? […]. No tengo
luz especial sobre mi intención de dejar
los Estados Unidos para ir a ese lejano
país. A pesar de ello, si supiera que es la
voluntad de Dios, iría».2
Elena White estaba cerca de la edad
de jubilarse, tenía problemas de salud y
su principal objetivo era completar su
libro sobre la vida de Cristo. «Anhelo
el descanso, la quietud, y terminar
“La vida de Cristo”».3 Sin embargo,
su continua búsqueda para entender
el accionar divino en la vida humana
reforzó su confianza en la presencia y
conducción divinas. Escribió: «Estoy
presentando el caso ante el Señor, y creo
que él me guiará».4
Con esa confianza tan profunda en
Dios, llegó a Sídney a bordo del S. S.
Alameda el 8 de diciembre de 1891. Este
período lejos de su hogar abrió nuevas
oportunidades de reflexionar acerca de
qué era importante para Dios.
La contribución de Elena White a
la iglesia durante sus años en Australia
puede dividirse en tres segmentos significativos. En primer lugar, alimentó la
22
Adventist World | Octubre 2015
La mensajera de Dios :
desde Australia
para el mundo
Una mirada a la vida y el legado de Elena White
John Skrzypaszek
vida espiritual de la iglesia relativamente
nueva. En segundo lugar, ofreció una
motivación visionaria para el progreso
institucional, junto con la urgencia por
la misión. En tercer lugar, dentro de su
período más productivo como escritora
(1888-1911), los nueve años en Australia
resultaron significativos. Desde allí
brindó un destacado énfasis a la vida
espiritual de la iglesia mundial. En el
contexto del gran conflicto, sus publicaciones exploraron la profundidad
edificante del amor divino, que eleva
el valor, la dignidad y la singularidad
humanos.5 El énfasis de su admiración
estuvo en la persona de Cristo.
La atención espiritual
La atención espiritual que Elena
White brindó a la joven iglesia comenzó
tan pronto llegó a Sídney. En su primer
sábado allí, habló de Juan 17. En una
carta a O. Olsen, explicó: «Nunca antes
habían escuchado palabras que les
dieran tanta esperanza en relación con
la justificación por la fe y la justicia de
Cristo».6 La misma carta indica que
había una falta general de comprensión
de este tema tan esencial. En referencia
a A. G. Daniells, escribió: «Solo tiene
un destello de luz sobre el tema de la
justificación por la fe y la justicia gratuita de Cristo».7
El miércoles siguiente, Elena White
llegó a Melbourne, donde las relaciones
entre los obreros de la Compañía
Publicadora Echo dejaban mucho que
desear. Sobre la base de una visión que
había recibido en 1875, habló de la falta
de unidad y armonía entre los obreros.8
Les advirtió de los peligros de las actitudes prevalecientes. Como respuesta, sus
corazones fueron quebrantados: «Los
hermanos se confesaron mutuamente
sus faltas y se abrazaron, sollozando y
pidiéndose perdón».9
El espacio no nos permite explorar
todas las instancias de atención espiritual que brindó Elena White durante
este período. Esa atención derivó de la
profundidad de su búsqueda personal
para comprender el amor divino.
En una nota de su diario del 17 de
diciembre de 1891, escribió: «Tuve
gran libertad de presentar el plan de
salvación y el maravilloso amor de Dios
por el ser humano caído». El tema del
amor de Dios y la autenticidad de la
atención espiritual que brindó crearon
una sólida intimidad entre Elena White
y la Iglesia Adventista de Australia. Ese
vínculo relacional ha sido comparado al
impacto que tiene una madre sobre un
niño pequeño.10
La motivación misionera
Elena White dio forma a la visión de
progreso institucional y urgencia de la
misión de la iglesia, algo que estuvo vinculado a una visión fechada el 1º de abril
de 1874. El mensajero le dijo: «Estáis
concibiendo ideas demasiado limitadas
de la obra para este tiempo […]. Debéis
tener una visión más amplia».11
El desafío era abrumador, porque
tenía aplicación mundial. «El mensaje
PARTE 6: 1900–1915
La visión de Elena White para la
iglesia mundial
Durante sus años en Australia, Elena
White destacó el centro mismo del tema
del gran conflicto. La visión histórica
general que había escrito sobre el gran
conflicto entre el bien y el mal resaltaba
la interacción real entre dos fuerzas
opuestas: la de Dios y la de Satanás.
Las publicaciones escritas entre 1888 y
1911 dirigieron la atención del lector
al centro mismo de la cuestión, a saber,
la importancia de la travesía espiritual
personal con Dios en medio de una vida
que enfrenta la fuerza de las tinieblas.
En su clásica obra El Deseado de
todas las gentes (1898), que completó
en Australia, Elena White nos dejó la
siguiente gema: «Cada uno necesita
tener experiencia personal en cuanto a
EN EL HEMISFERIO SUR: Mientras estuvo en Australia, Elena White vivió la mayor
parte del tiempo en «Sunnyside», su hogar en Cooranbong, no lejos de Sídney.
obtener el conocimiento de la voluntad
de Dios. Debemos oírle individualmente hablarnos al corazón. Cuando todas
las demás voces quedan acalladas, y
en la quietud esperamos delante de él,
el silencio del alma hace más distinta la
voz de Dios».14
En 1897, comenzó a enfocarse en
otro tema: el valor de la educación
cristiana. Al referirse al contenido del
libro La educación (1903), por entonces
de próxima aparición, Guillermo White
escribió que «se ha presentado más
sobre el plan de redención usando obras
publicadas de mi madre tales como
Patriarcas y profetas, El conflicto de los
siglos, El Deseado de todas las gentes, El
discurso maestro de Jesucristo, y Palabras
de vida del Gran Maestro».15
Es evidente que Elena White sintetizó el centro mismo de la educación cristiana y su función de restaurar el valor,
el potencial y la singularidad humanos
en medio de la lucha entre fuerzas
opuestas. Las fuerzas del mal desprecian
la vida humana, pero la presencia de
Dios inspira y restaura su potencial de
servir y mejorar la sociedad.
Allí en Australia, Elena White llamó
la atención de la iglesia mundial a la
importancia de crear un punto de
referencia no en especulaciones sobre el
tiempo, sino en una confianza personal
e implícita en Cristo. Para ella, una fe
semejante es producto de la confianza
en las promesas de Dios en la Biblia. Sus
escritos motivan a la iglesia mundial
para que llegue a ser las manos de
Cristo. En efecto, desde Australia
también logró estimular la obra en los
Estados Unidos mediante cartas en las
que reprobaba el así llamado poder monárquico, que había surgido en ese país.
P atr i mo n i o
avanzará con poder a todas partes del
mundo, a Oregón, a Europa, a Australia,
a las islas del mar, a todas las naciones,
lenguas y pueblos».12
Pocos meses después de establecerse
en Australia, pudo decir: «Ahora considero este asunto como una parte del gran
plan del Señor para el bien de su pueblo
aquí en este país, para el de los Estados
Unidos, y para mi propio bien».13
Gracias a esa perspectiva, Elena
White fue fundamental a la hora de
establecer una escuela bíblica para
preparar misioneros (24 de agosto de
1892), seguida de la creación de una
institución educativa conocida hoy
como el Colegio de Educación Superior
Avondale (1897). Elena inspiró el interés en la salud y la vida sana, animando
a los feligreses para que expandieran
el ámbito de la misión divina. Su ímpetu misionero dio origen al Hospital
Adventista de Sídney y a la Compañía
de Alimentos Saludables Sanitarium.
Para ella, todas las instituciones tenían
un papel importante en el gran plan
de Dios. Tenían que participar de la
tarea armoniosa de expandir su misión
al mundo, y debían ser vistas como el
medio para un fin.
W h i te
Los años en Elmshaven
Una gran pérdida
La partida de Elena White en agosto
de 1900 dejó una gran pérdida en la iglesia
de Australia. Durante los nueve años de su
ministerio allí la gente disfrutó la bondad
de sus atenciones. Thomas Russell, un
hombre de negocios de Cooranbong,
resumió bien ese sentimiento de pérdida:
«Extrañaremos mucho la presencia de la
señora White en nuestro pueblo. La viuda
y el huérfano hallaron una ayudadora en
ella. Dio amparo, vistió y alimentó a los
necesitados, y donde había pesadumbre,
su presencia brindó una luz renovada».16 n
1 Elena White Manuscrito 29, 1891, en Sermons and Talks (Silver
Spring, Md.: E. White Estate, 1990), t. 1, pp. 155, 156.
2 Elena White, Manuscrito 44, 1891, en Manuscript Releases
(Silver Spring, Md.: E. White Estate, 1990), t. 18, p. 155.
3 Elena White, Manuscrito 29, 1891, en Sermons and Talks, t. 1, p. 156.
4 Elena White, Carta 57, 1891, en Arthur L. White, Ellen G. White:
The Australian Years (Washington, D.C.: Review and Herald Pub.
Assn., 1983), t. 4, p. 18.
5 Libros escritos entre 1888 y 1911: El conflicto de los siglos
(1888); Patriarcas y profetas (1890); El camino a Cristo (1892);
El discurso maestro de Jesucristo (1896); El Deseado de todas las
gentes (1898); Palabras de vida del Gran Maestro (1900); La educación (1903); El ministerio de curación (1905); Los hechos de los
apóstoles (1911); y varios tomos de Testimonios para la iglesia.
6 Elena White, Carta 21, 1891. (Véase A. L. White, Ellen G. White:
the Australian Years, t. 4, p. 22).
7 Ibíd.
8 Documento del Patrimonio White, Archivo 105j: Guillermo C.
White, «Una visión abarcadora».
9 Elena White, Manuscrito 45, 1891, en A. L. White, Ellen G.
White: The Australian Years, t. 4, p. 26.
10 Arthur Patrick, «Ellen White: Mother of the Church in the
South Pacific», Adventist Heritage, Primavera 1993, p. 30.
11 Elena White, Notas biográficas de Elena G. de White, p. 231.
12 Ibíd.
13 Elena White, Carta 18a, 1892, en Mensajes selectos, t. 2, p. 268.
14 Elena White, El Deseado de todas las gentes, p. 331.
15 Arthur L. White, Ellen G. White: The Early Elmshaven Years
(Washington, D.C.: Review and Herald Pub. Assn., 1981), p. 181.
16 Thomas Russell, Cooranbong, 3 de mayo de 1900. Esta nota
fue escrita en un álbum dado a Elena White en ocasión de su
partida a los Estados Unidos en agosto de 1900.
John Skrzypaszek es
director del Centro de
Investigaciones White en
el Colegio de Educación
Superior Avondale, en Australia.
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
23
Thomas y Henrietta Branch
La Asociación de Colorado recomendó una familia «de color». Si la
Asociación General les pagaba el viaje,
la Asociación de Colorado los patrocinaría abonándoles el salario mientras
estuvieran en África. Thomas Branch
nació en Misuri (EE. UU.), el 24 de
diciembre de 1856. Henrietta Paterson
nació el 12 de marzo de 1858, siendo
la menor de una numerosa familia. Se
casaron el 7 de diciembre de 1876. Su
primera hija, Mabel, nació en 1878. Se
unieron a la Iglesia Adventista en 1892.
Para ese tiempo, Mabel tenía dos hermanos: Thomas (junio de 1887) y Paul
(marzo de 1891). Más tarde nacería
Robert (enero de 1896).
Pioneros en Colorado
Cuando la Asociación de Colorado
los eligió, los Branch ya sabían lo que
significaba ser pioneros. Henrietta había
recibido cierta preparación como enfermera, y recibiría mayor capacitación
para ser médica misionera. Thomas era
24
Adventist World | Octubre 2015
A so c i a c i ó n
la
de
J
oseph Booth, un inglés de mentalidad
independiente, tuvo una idea
misionera que comprartió con W. A.
Spicer, por entonces secretario de la Junta
de Misiones Adventistas en el Extranjero.
Al escucharlo, Spicer se convenció de que
sería una gran bendición para la obra en
África. La región central, insistió Booth,
se beneficiaría mucho con obreros «de
color». Como escribió Spicer, ellos
pueden «brindar un servicio especial,
donde los blancos no pueden entrar».1
Además, Booth tenía a su disposición
una propiedad de ochocientas hectáreas,
con edificios. Seguramente podía servir
como complejo misionero
y mucho más. Los bautistas
del séptimo día, dueños de
la propiedad tasada en veinticinco mil dólares, habían
acordado transferirla a los
adventistas por solo cuatro
mil. Pero alguien tenía que
ponerse al frente de la misión,
administrar el complejo y
desarrollar su potencial.
G e n eral
adventista
FAMILIA PIONERA: Henrietta y Thomas Branch (sentados); detrás de ellos,
Mabel (al centro), Robert (extremo izquierdo) y Paul (extremo derecho).
A r c h i v os
H erencia
De Witt S. Williams
en
La primera familia adventista
afroamericana que fue de
misionera al África
un buen orador, dedicado estudiante
de la Biblia, y entusiasta obrero laico.
Las semillas que él plantó hace más de
un siglo han dado abundantes frutos en
cuatro iglesias adventistas afroamericanas en Pueblo y Denver (Colorado).
Los Branch eran mayores que la
mayoría de los misioneros que enviaba
la iglesia: Thomas tenía cuarenta y seis
años y Henrietta, cuarenta y cuatro.
Su hija Mabel, aún soltera, acababa de
cumplir veinticuatro. Los tres muchachos tenían quince, once y seis años,
y estaban ansiosos de vivir una nueva
experiencia. No tenemos pruebas de
que Thomas, el hijo mayor, haya acompañado a la familia en su osada misión.
Como ningún adventista de raza
negra había sido enviado por la Iglesia
Adventista al África, los Branch iban
a ser pioneros nuevamente. No tenían
modelos que imitar. Requirió valor,
valentía y mucha fe en la providencia de
Dios aceptar ese llamado macedónico.
Pero estaban felices de ir. La Asociación
de Colorado ordenó a Thomas Branch
el 22 de mayo, y su partida quedó
registrada. «Despidiéndonos inmediatamente de los hermanos y colegas, y de
aquellos por quienes habíamos trabaja-
do, viajamos a Denver, nuestro antiguo
hogar, para prepararnos para el viaje
[…]. Empacamos unos pocos artículos
y despidiéndonos de los amigos, salimos
rumbo a Chicago. El pastor Spicer nos
encontró allí, y nos dio todas las instrucciones necesarias para la travesía».2
En camino a África
Los Branch se embarcaron hacia
Londres (Inglaterra) el 4 de junio de
1902, arribando allí el día 12. En su
primer sábado en Inglaterra, fueron invitados por la iglesia de Duncombe Hall,
donde «recibieron una calurosa bienvenida de parte de todos los hermanos».3
Dos semanas después de llegar a
Londres, se embarcaron otra vez; los
acompañaba el decidido Joseph Booth,
cuya iniciativa e ideas los había iniciado
en la travesía. Ante ellos tenían un viaje
de siete semanas desde Southampton
hasta el África Oriental, y el servicio
a Dios en un nuevo campo de labor.
Habían dejado su propio mundo
atrás, pero afirmaron con seguridad:
«Sabemos que hay un gran campo de
labor adonde el querido Señor nos está
llevando, y estamos felices de ocupar un
lugar en su viña».4
Booth el inconformista
En la desembocadura del río Zambeze,
el cónsul británico los detuvo durante
nueve días, lo que aparentemente permitió que los Branch percibieran quién
era realmente Joseph Booth, y en qué
situación los había metido. Resulta ser
que Booth era un entusiasta defensor de
ideas políticas y sociales proafricanas.
Los funcionarios ya estaban preocupados de que las enseñanzas de algunos
afroamericanos indujeran un espíritu
de independencia y hasta de insubordinación. El etiopianismo, un movimiento
de nacionalismo africano, comenzó en
Sudáfrica alrededor de 1890, cuando
las iglesias independientes africanas
comenzaron a afirmar, sobre la base de
una lectura particular de las promesas
bíblicas, que Etiopía un día extendería
sus manos hacia Dios (véase Sal. 68:31).
Los colonialistas equiparaban al
etiopianismo con los afroamericanos
educados, aunque era el inglés Joseph
Booth –no Thomas Branch el afroamericano– cuyas ideas y acciones estaban
asociadas con ese pensamiento.
Booth había escrito África para
los africanos, en donde bosquejaba un
programa para abolir el colonialismo
británico. Booth creía en la plena igualdad racial, y se sentía llamado por Dios
para hablar contra las desigualdades.
Para él, la misión que quería establecer
sería una manera de desarrollar la independencia financiera y educativa de
los africanos. Spicer y los adventistas no
sabían nada de ello cuando Booth les
habló del terreno y la necesidad de enviar a alguien. Requirió mucho esfuerzo
convencer a las autoridades de que los
Branch no estaban involucrados con el
etiopianismo.
La Misión de Plainfield, como se
llamó la propiedad, produjo muchos
problemas entre Branch y Booth. Los
Branch no estaban interesados en las
propuestas de Booth, sino que solo
querían enseñar y predicar el evangelio.
Booth siempre estaba involucrado en
algún proyecto, y jamás tenía dinero
para pagar las cuentas de la misión o
el salario de los Branch. Después de
solo seis meses, la Junta de Misiones en
el Extranjero llamó a Booth para ser
colportor en Inglaterra.
y el 14 de julio de 1906 organizó la primera iglesia adventista de Malaui.
Branch siguió al frente de la misión
hasta que otro misionero, Joel C. Rogers,
la rebautizó como Malamulo (que significa «mandamientos»), y los Branch se
dirigieron a Sudáfrica en 1907 en busca
de un mejor clima y un lugar para que
sus hijos pudieran estudiar. Para su gran
decepción, no se les permitió que sus
hijos asistieran a escuelas adventistas
que eran para blancos. Esto, sumado a
los desafíos de salud de Henrietta, los
llevó a regresar el año siguiente a los
Estados Unidos. Thomas fue puesto
una vez más a cargo de la obra entre las
personas de color de Denver.
Branch dejó una marca más como
pionero, cuando en 1911 fue llamado a la
Asociación de Pensilvania. Allí organizó
y pastoreó la primera iglesia adventista
afroamericana de Filadelfia. Más tarde la
llamaron Ebenezer, y llegó a ser la madre
de una decena de iglesias adventistas
afroamericanas que hoy hay en la zona.
Henrietta Branch falleció en 1913.
Los Branch fueron pioneros en
Colorado, Malaui y Filadelfia. En lugar
de enfocarse en la política y los prejuicios, proclamaron el evangelio y brindaron la verdadera liberación a muchos. Su
asombroso legado a la Iglesia Adventista
sigue siendo una inspiración y un modelo de la misión internacional de la iglesia
de parte de cada miembro, desde todas
partes hacia todas partes, hasta que todo
el mundo reciba el mensaje. n
1 W. A. Spicer, «The New Missionary Enterprise: Nyassaland»,
Advent Review and Sabbath Herald, 27 de mayo de 1902, p. 17.
2 El Sr. y la Sra. T. H. Branch, «Called to Africa», Advent Review
and Sabbath Herald, 15 de julio de 1902, p. 20.
3 Ibíd.
4 Thomas Branch y familia, «On the Ocean», Echoes From the
Field, 3 de septiembre de 1902, p. 2.
Al frente de Plainfield
De ahí en más los Branch trabajaron
solos en la Misión Plainfield hasta
que la Junta Misionera envió a Joseph
Watson y su esposa e hijo. Pero en menos de un año, el clima hizo estragos en
Watson, que falleció a los treinta y tres
años; fue enterrado en los terrenos de la
misión, y su esposa e hijo regresaron a
su país. Branch siguió solo en la misión,
DeWitt S. Williams fue
director de Ministerios
de Salud de la División
Norteamericana desde
1990 hasta su jubilación en 2010, después
de 46 años de servicio. Williams también fue
misionero en África.
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
25
R espuestas
a
El
¿Por qué las ofensas
sexuales eran castigadas
con la muerte en el
Antiguo Testamento?
pre g untas
sexo
es cosa seria
La pregunta de la pena
capital es particularmente sensible para las
culturas occidentales, y
entiendo esa aprehensión, pero su pregunta se
refiere a casos específicos
legislados en el Antiguo Testamento. Entendamos la legislación
en sí, antes de aclarar sus fundamentos.
1. Casos legales: Solo me ocuparé de tres
casos específicos. El primero es el adulterio (Deut.
22:22), considerado en todo el Antiguo Cercano
Oriente un gran pecado que requería la pena de muerte para
ambas personas. En la Biblia también es considerado un gran
pecado contra Dios, el cónyuge y la sociedad. Mediante la
pena capital, el pueblo debía «extirpar [ba’ar, “exterminar,
quitar”] el mal de Israel» (vers. 22). El adulterio no era simplemente un asunto privado, sino que tenía el potencial de
perjudicar al pueblo de Dios, lo que hacía necesario extirparlo de su medio. ¿Podía ser conmutada la pena de muerte a un
castigo menor, o el infractor ser perdonado por su cónyuge?
Era algo que sucedía en el Antiguo Cercano Oriente, y hay
algunas indicaciones de que en Israel también. Proverbios
deja entrever que el marido podía aceptar compensación
monetaria del adúltero y salvar el matrimonio, o al menos
la vida de ambos (Prov. 6:32-35; Oseas 3:1-3). Los pecadores
también podían acceder al perdón divino (Sal. 51).
El segundo caso es la pérdida de la virginidad detectada
después del matrimonio (Deut. 22:20, 21). El marido se da
cuenta de que su esposa, supuestamente virgen, no lo era; se
siente no solo traicionado sino también engañado. Ella tiene
que ser ejecutada, porque «cometió una vileza» [nebalah, acto
que altera el orden moral y social] en Israel» al ser promiscua
[zanah, prostituirse; faltar a la integridad moral] (vers. 21).
Esto es tratado como un caso de adulterio.
El tercer caso es el de un hombre que tuvo relaciones consentidas con una virgen desposada (vers. 23, 24). Esto también
es considerado un caso de adulterio, y corresponde la pena
capital para ambos. No se indica en estos dos casos si la sentencia podía ser conmutada por el esposo, aunque es posible.
2. Posible justificación: Hay varias cosas que decir
sobre el tema. En primer lugar, esas leyes no eran tan solo
cuestiones civiles, sino que revelaban la naturaleza y la
moralidad de Dios. La pena capital indica la seriedad de la
moralidad sexual ante los ojos de Dios.
26
Adventist World | Octubre 2015
b í b licas
En segundo lugar, la posibilidad de conmutar la pena a
una menor, y el perdón divino, siempre estuvieron a disposición de los pecadores arrepentidos.
En tercer lugar, la violación de las leyes sexuales podía
tener un impacto adverso sobre el mundo social, dado que
ignoraba la seriedad de la ofensa, relajando así la integridad
moral. Tales violaciones eran consideradas heridas mortales
para la familia y para el orden social, porque amenazaban la
intención de Dios para la humanidad.
En cuarto lugar, la promiscuidad sexual dañaba a ambas
personas, transformándolas en instrumentos de placer personal, sin respeto mutuo y sin la responsabilidad que entraña el
matrimonio. Las relaciones sexuales dentro del matrimonio
unifican a un hombre y una mujer en vínculos de amor
divino; fuera de él, muestran falta de respeto por los demás y
daño a la autoimagen de la pareja.
En quinto lugar, la sexualidad no es nuestra propiedad
exclusiva. En cierto sentido, pertenece a la raza humana, y
usarla mal de una u otra forma nos perjudica a todos.
En sexto lugar, la virginidad es un don divino que debe ser
protegido hasta que pueda culminar dentro de los parámetros
de amor que brinda la institución divina del matrimonio. No
siempre se alcanza el objetivo, pero es un don que necesita ser
preservado en sumisión al Señor.
Estas ideas son extrañas para el mundo contemporáneo.
Al ocuparnos de interrogantes relacionados con la moralidad
sexual, necesitamos preguntarnos: ¿Quién determina lo que
es correcto y bueno desde el punto de vista moral? ¿Es el sistema legal de la sociedad secular, o la permisividad que la caracteriza («¡Todos lo hacen!»)? Para los cristianos, la respuesta
es clara: Dios ha revelado su voluntad en las Escrituras. Toda
vez que los sistemas legales traicionan la moralidad cristiana,
tenemos que obedecer a Dios.
Y a la persona que acaso se ha alejado de la intención
divina para la sexualidad humana, solo me permito citarle las
Escrituras: «Ahora vete [perdonada], y no vuelvas a pecar»
(Juan 8:11, NVI). n
Angel Manuel Rodríguez trabajó para la
iglesia como pastor, profesor y teólogo. Ya
jubilado, vive en Texas, Estados Unidos.
E studio
b í b lico
Elías
Un poderoso
hombre de fe
Mark A. Finley
D a n i ele
E
ste mes comenzamos una nueva serie de estudios
bíblicos. Analizaremos los grandes héroes de la fe de
las Escrituras. Al hacerlo, no solo queremos incorporar
datos sobre esos fieles hombres y mujeres de Dios, sino
examinar los desafíos que enfrentaron, analizar sus reacciones
y descubrir el secreto de una fe a toda prueba. Aprenderemos
de sus éxitos y fracasos, sus victorias y derrotas, sus
momentos en la cima y en el valle.
El primero de ellos será Elías. Nos interesa en especial
Elías porque, aunque vivió en tiempos de apostasía, permaneció fiel a Dios y fue trasladado sin ver la muerte. Los que
nos estamos preparando para la traslación al momento de la
segunda venida de Cristo podemos aprender lecciones vitales
de fe de ese poderoso hombre de Dios.
1
Lea 1 Reyes 16:29-33. ¿Cuál era la condición
espiritual de Israel durante los días del rey Acab y
el profeta Elías?
El rey Acab reinó en Israel durante veintidós años. Contrajo
matrimonio con Jezabel, una reina pagana. Juntos llevaron al
pueblo de Dios hacia la adoración de Baal y la apostasía. El
registro bíblico declara que Acab «hizo lo malo ante los
ojos de Jehová, más que todos los que reinaron antes de él»
(vers. 30). ¡Qué terrible legado!
2
¿Qué mensaje envió Dios a Acab por medio del
profeta Elías? Lea 1 Reyes 17:1. ¿Qué cualidades
habrá tenido Elías para presentar un mensaje tan
sorprendente?
3
¿Qué provisión hizo Dios para Elías en esa
época de hambruna nacional? Lea 1 Reyes 17:1-5;
8-14. ¿Qué nos enseña esto sobre Dios?
Un antiguo himno cristiano expresa en el coro: «Su santa
ley, obedezco por fe, y feliz para siempre, con Jesús estaré».
Cuando confiamos en Dios implícitamente, y obedecemos
da
Volterra
por amor sus mandamientos, él se ocupa de satisfacer nuestras necesidades (Fil. 4:19); él cumple sus promesas. Cuando
damos prioridad a su Reino, él nos promete ocuparse de
nuestras necesidades (Mat. 6:28-33).
4
Después de tres años y medio, ¿qué orden dio
Dios a Elías? ¿Cómo respondió el profeta?
Lea 1 Reyes 18:1-3.
5 ¿Qué desafío presentó Elías a los profetas de
Baal en el Monte Carmelo? ¿Por qué creen que les
pidió que primero oraran? Lean 1 Reyes 18:21-24.
La adoración de Baal incluía idolatría, adoración al sol e
inmoralidad sexual. Exaltaba la naturaleza por sobre Dios.
Daba prioridad a las criaturas antes que al Creador. Sobre el
Monte Carmelo, Elías demostró la necedad absoluta de
exaltar las teorías humanas por sobre la revelación divina.
Las formas humanistas de religión no tienen ningún poder de
transformar vidas.
6 Lea 1 Reyes 18:38, 39, 44, 45. ¿Cómo respondió
Dios a la fidelidad de Elías?
La fidelidad a Dios, y la confianza en sus promesas, nos preparan para recibir sus bendiciones en abundancia.
7
Lea Santiago 5:17. ¿Cómo se describe a Elías en
el libro de Santiago, en el Nuevo Testamento?
¿De qué manera esto es un ejemplo para nosotros?
Elías fue «un hombre sujeto a pasiones semejantes a las
nuestras». Tuvo desafíos y deficiencias de carácter, al igual que
cualquier otro ser humano. Sin embargo, mediante la fe en las
promesas de Dios y la confianza en su poder, Elías llegó a ser
un poderoso hombre de fe. Su vida nos enseña lecciones de
confianza, obediencia y compromiso total. El mes que viene
estudiaremos más sobre Elías, que en último término fue
trasladado sin ver la muerte. n
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
27
INTERCAMBIO DE IDEAS
Dios responde las oraciones, a veces
a velocidades asombrosas .
–Ernie Schultz, Edmond, Oklahoma, Estados Unidos
mensajes de los tres ángeles.
Por favor, oremos por el pleno derramamiento del Espíritu Santo. Cuando lo recibamos, podremos mostrar y
recibir verdadero amor. Gracias.
(Isaac) B. K. Aidoo
Accra, Ghana
Cartas
«Me produce mucha humildad»
Gracias por publicar la entrevista de Bill
Knott con el recién relegido presidente
de la Asociación General («Me produce
mucha humildad», Septiembre 2015).
Y gracias, pastor Wilson, por recordarnos la declaración de Elena White en
Testimonios para la iglesia que dice: «La
obra de Dios en este mundo no podrá
terminarse hasta que los hombres y las
mujeres que componen la feligresía de
nuestra iglesia se interesen en la obra y
unan sus esfuerzos con los de los ministros y dirigentes de la iglesia» (t. 9, p. 95).
Alexander Becker
Francia
Aprecio las consideraciones del presidente de la iglesia mundial cuando
habla de la necesidad de humillarnos
ante nuestro Hacedor y de que todos
participemos de la obra de esparcir los
La clave de la historia es que este jamaiquino está tan convencido del mensaje
que aprendió de la Biblia, que estuvo
dispuesto a renunciar a los vínculos de
su vida vieja. Me parece que quiso evitar
toda duda de su deseo de seguir a Cristo
mediante el bautismo, y de su lealtad
incuestionable. Por ello, produjo en sí
mismo un cambio público y visible. ¡Esa
fe y ese valor me resultan alentadores!
Anne Oyerly
B errien Springs, Míchigan,
Estados Unidos
Crecimiento asombroso
El 20 de julio de 2015, envié una carta
a Adventist World, refiriéndome a la
gran diferencia entre la feligresía adventista per cápita en África y en Estados
Unidos, y sugiriendo un informe sobre
ese tema. ¡Quince días después encontré
la historia, «Crecimiento asombroso»,
de Pardon K. Mwansa, en la edición
de agosto!
Es obvio que el artículo fue preparado
mucho antes de que llegara mi carta, pero
esto muestra que Dios responde las oraciones, a veces a velocidades asombrosas.
Ernie Schultz
E dmond, Oklahoma,
Estados Unidos
Un ángel en Sudáfrica
Gracias por el gran trabajo de condensar
mi artículo «Un ángel en Sudáfrica»
(Abril 2015). Me desilusionó un poco que
el espacio no permitió incluir la fotografía
de mi sobrino David Otis y su familia, en
un viaje misionero a Sudáfrica en 2012,
Pedidos y
agradecimientos
He decidido dejar al padre de mis dos
hijos, que no respeta el sábado y es
alcohólico. En medio de este problema,
hace poco me encontré con un exnovio.
Estoy confundida y necesito sus
oraciones.
Glenda, Papúa Nueva Guinea
28
Adventist World | Octubre 2015
Estoy muy desilusionado. He pedido
varias cosas a Dios pero aún no he recibido respuesta. Por favor, oren para que
Dios me responda pronto.
E.S.A., Brasil
Por favor, oren para que mi familia pueda progresar financieramente, olvidar el
pasado y prepararse para el mañana. También necesitamos la protección del cielo.
Kipkosgei, Kenia
Por favor, oren por Rachel, que tiene que
decidir adónde estudiar y está viviendo en
su automóvil.
Judy, Estados Unidos
culminando así el círculo de influencia
angélica que comenzó en el siglo XIX.
Una pequeña corrección: mis registros
genealógicos muestran que mi abuelo,
David Fletcher Tarr, fue el undécimo
de los quince hijos de James y Hannah
(Brent) Tarr, como mencioné en el
artículo, y no el duodécimo de dieciséis,
como se imprimió.
Elaine Tarr Dodd
C ollegedale, Tennessee,
Estados Unidos
Gracias
Soy adventista y vivo en una remota aldea
del Valle del Rift, en Kenia. Me sentí muy
inspirado y emocionado al leer Adventist
World, tanto que me gustaría recibirla por
correo para unirme con otros adventistas
en creencias, misión, vida y esperanza.
Gracias, y que Dios los bendiga.
Lel Richard
Kenia
Adventist World es publicada por la
Iglesia Adventista y distribuida entre los
miembros sin cargo. Pónganse en contacto
con su Asociación o División para recibir
Adventist World en su iglesia. También
estamos en Internet en www.adventistworld.
org, en varios idiomas. –Los editores.
Los que promocionan los suplementos nutricionales suelen ofrecernos soluciones
rápidas. Nos quieren hacer creer que los suplementos son más fáciles y
convenientes que una comida nutritiva.
A continuación se presentan algunos alimentos simples que hacen innecesarios
los costosos suplementos nutricionales. Además, las verduras son más sabrosas
y satisfactorias que las pastillas.
Los isotiocianatos y el sulforafán del brócoli sirven como antioxidantes y
anticancerígenos.
El nitrato de las remolachas ayuda a mejorar el flujo y la circulación sanguíneos.
Los oligosacáridos de las legumbres mejoran la salud digestiva por su alto
contenido de fibra.
fotografías : J ea n S c h e i je n / sa n ja gje n ero
Una oración
en treinta segundos
Amado Pastor Jesús, piensa en nosotros.
Haznos un solo cuerpo en ti.
Pautas para las cartas: Envíelas por favor a letters@
adventistworld.org. Las cartas tienen que ser claras, con una
extensión máxima de cien palabras. Incluya el nombre del
artículo y la fecha de publicación. Coloque también su nombre,
el pueblo o ciudad, el estado o provincia y el país desde donde
nos escribe. Los envíos serán editados por razones de espacio
y claridad. No todas las cartas serán publicadas.
Les pido que oren por mi familia: Mi esposa
y yo perdimos el trabajo, mi hija necesita
dinero para comenzar la escuela secundaria,
y tenemos un bebé de siete meses. Oren por
favor para que Dios nos abra las puertas y
podamos encontrar el trabajo que nos permita mantener a nuestra pequeña familia.
Fredrick, Kenia
Aleja de nosotros los conflictos y la malicia, y que nada entorpezca
nuestra comunión.
Solo un Salvador puede rescatarnos. Únenos con amor sólido y
sagrado, y que seamos compasivos al soportar nuestras faltas.
–Maria Aparecida Araujo, San Pablo, Brasil
Oren por favor para que mi madre no
pierda el trabajo.
Carolina, Colombia
Les pido que por favor oren por mi salud,
y para que encuentre trabajo y la persona
apropiada para formar un matrimonio.
Karen, Reino Unido
Oraciones y alabanzas: Envíe sus pedidos de oración y
agradecimientos por las oraciones contestadas a prayer@
adventistworld.org. Sea breve y conciso; dígalo en cincuenta
palabras o menos. Los envíos serán editados por razones de
espacio y claridad. No todos serán publicados. Incluya por
favor su nombre y su país. También puede enviar sus pedidos
por fax a: 1-301-680-6638; o por correo a Adventist World,
12501 Old Columbia Pike, Silver Spring, MD 20904-6600 U.S.A.
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
29
INTERCAMBIO DE IDEAS
Hace
89años
El 2 de octubre de 1926, se llevó a cabo la primera Escuela Sabática autorizada
en el hogar de Marius Raspal.
El interés en la fe adventista surgió en el país en 1917, cuando André
Rasamoelina, que era inspector de escuelas protestantes, conoció a un joven
llamado Tuyau, quien había asistido a varias reuniones adventistas en la isla
Mauricio al este de África. Rasamoelina se sintió tan interesado que escribió
a Paul Badaut, misionero adventista pionero en Mauricio, a la dirección que
Tuyau le había dado. Badaut envió el nombre y la dirección de Rasamoelina
a la Asociación General.
En diciembre de 1918, J. L. Shaw envió algunos impresos a Rasamoelina.
En 1919, después de un intercambio adicional de cartas, el departamento de
Misioneros Locales envió a Rasamoelina algunos impresos, entre ellos, un
ejemplar del libro El camino a Cristo, de Elena White.
Rasamoelina tradujo el libro al malgache en su tiempo libre. Durante julio de
1922, Raspal, un misionero adventista en Mauricio, pasó diez días con Rasamoelina,
dándole estudios bíblicos. La Asociación General contribuyó con ochocientos
dólares para publicar la traducción que hizo Rasamoelina de El camino a Cristo.
Diga
¡Aaaaah!
Los sentimientos positivos (de sobrecogimiento,
asombro y sorpresa) pueden estar vinculados
con proteínas que hacen trabajar más al
sistema inmunológico, aliviando los síntomas
de la mala salud y la depresión.
Según una investigación de la Universidad de
California en Berkeley (EE. UU.), las actividades
que estimulan el sobrecogimiento, como
caminar en la naturaleza, contemplar obras
de arte y escuchar música, pueden mejorar
la salud y la expectativa de vida.
Fuente: Emotion/The Rotarian
fotografía : F reeImages . c om / D a n n y de B ru y n e
Rx: salud
para la
[Prescripción]
El ejercicio de elevada intensidad
(correr, practicar ciclismo, cortar leña o
quitar nieve) ayuda a quemar calorías,
y posee estos beneficios adicionales:
Fortalece el corazón y mejora la
resistencia.
Disminuye el riesgo de sufrir diabetes y
afecciones cardiovasculares.
Estimula la agilidad mental, al regular
químicos esenciales para captar y
almacenar información.
Source: Women’s Health
359
El número de personas
en el mundo a las que
se les diagnosticó el
virus de la poliomielitis
en 2014 (de una
población de más de siete mil millones).
Con tan solo un dólar se pueden adquirir
diez dosis de la vacuna oral contra la
poliomielitis.
Fuente: The Rotarian
fotografía : F reeImages . c om / J oel R orabaug h
30
Adventist World | Octubre 2015
fotografía :
C D C
G lobal
Healt h
5O
PALABRAS O MENOS
Mi
personaje bíblico
favorito
nA
pesar de sus graves equivocaciones, Dios perdonó
a David y siempre estuvo listo para ayudarlo. Me alegra
saber que puedo contar con Dios. Al igual que David,
tiendo a cometer muchos errores. Pero sé que Dios
tiene otros planes para mí. Quiero que él guíe mi vida.
–Rachel, Francia
n Mi
personaje bíblico favorito es José. Aunque era
inocente, su obediencia al cumplir con las tareas que
le encomendó su padre lo hizo terminar en prisión.
Pero mediante la intervención divina, llegó a ser primer
ministro en tierra extraña. Su historia me inspira.
–Gloria, Kumasi, Ghana
n Mi personaje bíblico favorito es Isaías. Fue un profeta
valiente que no transigió con el pecado. Hoy día no
vemos a muchos como él, en un mundo donde
abundan las tentaciones, las trampas y la seducción
del mundo tecnológico.
–Tayo, Lagos, Nigeria
n Mi
personaje favorito es la reina Ester. Fue una mujer
valiente, que le confió a Dios todas sus circunstancias.
Fue a ver al rey Asuero sin saber si saldría viva de allí.
Quiero confiarle mi vida a Dios en cada circunstancia.
–Esther, Austria
Para la próxima, cuéntenos cuál es su promesa bíblica favorita.
Envíela a [email protected], y como asunto,
escriba: «50 Words».
«He aquí, vengo pronto . . .»
Nuestra misión es elevar a Cristo, uniendo a los
adventistas de todo el mundo en creencias, misión,
vida y esperanza.
Editor
ADVENTIST WORLD es una publicación internacional de
la Iglesia Adventista del Séptimo Día, editada por
la Asociación General y la División de Asia-Pacífico
Norte de la Iglesia Adventista.
Editor ejecutivo
Bill Knott
Editor asociado
Claude Richli
Gerente editor internacional
Pyung Duk Chun
Junta editora
Ted N. C. Wilson, presidente; Benjamin D. Schoun, vice-­
presidente; Bill Knott, secretario; Lisa Beardsley-Hardy;
Daniel R. Jackson; Robert Lemon; Geoffrey Mbwana;
G. T. Ng; Daisy Orion; Juan Prestol; Michael Ryan; Ella S.
Simmons; Mark Thomas; Karnik Doukmetzian, asesor legal.
Comisión coordinadora de ADVENTIST WORLD
Jairyong Lee, chair; Yutaka Inada, German Lust,
Pyung Duk Chun, Suk Hee Han, Gui Mo Sung
Editores de Silver Spring, Maryland, EE.UU.
Lael Caesar, Gerald A. Klingbeil (editores asociados),
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Editor en línea
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Consultor
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Jairyong Lee, Israel Leito, Thomas L. Lemon,
Geoffrey G. Mbwana, Paul S. Ratsara, Blasious M.
Ruguri, Ella Simmons, Artur A. Stele, Glenn Townend,
Elie Weick-Dido
A los colaboradores: Aceptamos el envío de manuscritos
no solicitados. Dirija toda correspondencia a
12501 Old Columbia Pike, Silver Spring, MD 20904-6600, EE.UU.
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bíblicas pertenecen a la versión Reina Valera. Revisión 1995.
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Vol. 11, No. 10
Vol. 11 No. 10 | Adventist World
31
* Isaac Bediako es granjero en Nkoranza (Ghana).
Bediako ha llevado a cientos de personas a Cristo
durante sus más de cuarenta años en la iglesia, y
desde 2006 ha distribuido más de ciento treinta mil
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Un mundo.
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