CON T E NIDO 22 18 22 C ASO DE É XITO Chicza: El chicle que rescató una selva Tamsin de Cuéllar CENTRAL Heces fecales (de cerdos, vacas y humanos) Una fuente desaprovechada de energía Valentina Pérez Botero Foto de portada: Ana Hop. 29 33 04 08 CONSUMO INTELIGENTE Maru Monroy 34 OPINIÓN ¿Cómo elegir las metas ambientales globales para los próximos 15 años? 38 Bjørn Lomborg QUIÉN ES QUIÉN 10 Para crear un bosque, sólo se necesita un hombre: Jadav Payeng 40 Natalia Álvarez 12 ARTÍCULO Pico de Orizaba: Entre deforestación, incendios, tala y siembra ilegal 42 Tamsin de Cuéllar 17 OPINIÓN Alabado sea: El Papa Francisco y el cambio climático Fedro Guillén Este producto fue impreso en papel Domtar Lynx White FSC de 118 g, 100% sustentable. Cuenta con el certificado del Forest Stewardship Council, lo que garantiza el uso responsable de los recursos naturales con que se fabrica. 48 ARTÍCULO Cuba y la guerra contra los búfalos Rubén Cortés GLOSARIO Especie La Redacción ARTÍCULO El último río vivo del DF agoniza Anibal Santiago MIS PRIMEROS DESASTRES El mar y la sopa Julieta García González PA R A L I P Ó M E N O S La ecología oscura o la nueva visión de los vencidos (i) Daniel Sánchez Poitevin P O R TA F O L I O S Hallazgos invisibles Mónica Herrerías O B I T UA R I O Muere la flor de muertos Natalia Álvarez Crónica ambiental, año 2, No. 13, julio 2015, es una publicación mensual editada por dn3 Comunicación sc. Chapultepec 540, interior 609, colonia Roma, delegación Cuauhtémoc, cp 06700, México, df. Teléfono 5514 1577. Editor responsable: Jorge Lestrade Sadurní. Número del certificado de Reserva de Derechos al Uso Exclusivo 04-2014-060613205000-102. Número issn 2007-994x ante el Instituto Nacional del Derecho de Autor. Certificado de Licitud de Título en trámite, Certificado de Licitud de Contenido en trámite. Impresa en Servicios Profesionales de Impresión sa de cv. Mimosas 31, colonia Santa María Insurgentes, delegación Cuauhtémoc, cp 06430, México, df. Teléfono 5117 0100. Crónica ambiental tiene un tiraje mensual de 5 000 ejemplares; esta edición terminó de imprimirse en julio de 2015. Distribución controlada. El contenido de los artículos es responsabilidad exclusiva de los autores y no refleja el punto de vista de Crónica ambiental. Todos los derechos reservados. Queda prohibida la reproducción total o parcial del material publicado sin consentimiento por escrito de Crónica ambiental. COL A BOR A DOR E S N ATA L I A Á LVA R E Z Estudió biología en la unam y optó por el rumbo de las cosas macroscópicas; confluye la cotidianidad leyendo sobre medio ambiente y gastronomía en una feliz y pertinente coincidencia. RUBÉN CORTÉS Director general del periódico La Razón. Ha sido subdirector de La Crónica de Hoy, jefe de portada en Reforma y director editorial en Televisión Azteca. Autor de Crónicas de Guerra, Afganistán e Irak en el frente de batalla (2003), Nueve meses en la eternidad (2007) y ¡Cuba, Cuba! (2009). TA M S I N D E C U É L L A R Licenciada en Comunicación y Letras Iberoamericanas. Ha sido reportera en Televisión Azteca y colaboradora de La Razón, Publímetro, Pánico y La Peste. ISR AEL GALINA Estudió Letras Hispánicas en la unam y el diplomado de Traducción en el ifal. Ha trabajado en las revistas Viceversa, Día Siete y Wow. J U L I E TA G A R C Í A G O N Z Á L E Z Narradora, editora y articulista. Autora de la novela Vapor (2004) y de los libros de cuentos Las malas costumbres (2005) y Pasajeros con destino (2013). EMANUEL GONZÁLEZ Fotógrafo freelance. Estudió Artes Visuales en el Centro Morelense de las Artes. Ha colaborado con el museo La Tallera Siqueiros y con la Secretaría de Cultura en Cuernavaca. GABRIEL HERNÁNDEZ Fotógrafo dedicado al retrato y paisajes urbanos. Egresado del Colegio Ansel Adams de fotografía. Colaborador de Getty Images Latin America. MÓNICA HERRERÍAS Curadora, investigadora y editora independiente de proyectos fotográficos. Dirige Ediciones Ve y ha publicado Manuel Álvarez Bravo (Francia, 2012) y Mexican Portraits (Estados Unidos, 2012). ANA HOP Fotógrafa freelance. Estudió Comunicación en la Ibero y fotografía en Central Saint Martins, en Londres. Ha colaborado en National Geographic Latinoamérica, Esquire, Gatopardo y ELLE. M A R U M O N R OY Reportera y editora con 20 años de experiencia. Ha colaborado en medios como Reforma, Travesías, Gatopardo, GQ, Forbes, Bleu & Blanc y Chilango. DA N I E L S Á N C H E Z P O I T E V I N Estudió filosofía. Cofundador y editor de la revista La Peste. I elinfiernoson.blogspot.com A N Í B A L S A N T I AG O En sus inicios fue reportero de Reforma y otros diarios; después se dedicó al periodismo de investigación y narrativo. Ha sido profesor universitario y conductor de televisión. Premio Nacional de Periodismo 2007. E D UA R D O R A M Ó N T R E J O Diseñador gráfico e ilustrador tapatío de la revista El Fanzine y colaborador en Life & Style. behance.net/eduardoramon I S R A E L G . VA R G A S Diseñador editorial e ilustrador. Ha colaborado en revistas como Wired USA, Wired Italia, Expansión, Quo y Accent. Editor gráfico de las revistas Picnic, Yaconic, La Peste e Indie Rocks! behance.net/israelgevargas DIREC TORIO DIRECCIÓN GENER AL Bárbara Hernández Edgar Chahín DIRECCIÓN EDITORIAL Jorge Lestrade [email protected] C O O R D I N AC I Ó N G E N E R A L Nora Torres [email protected] ASISTENTE EDITORIAL Mariana Ruiz-González [email protected] C O R R E C C I Ó N D E E S T I LO Israel Galina [email protected] DIRECCIÓN DE ARTE Carolina Mendieta [email protected] DISEÑO Lorenzo Vera [email protected] EDICIÓN DE FOTO Diego Treviño [email protected] EDICIÓN WEB Pablo Ampudia [email protected] D E S A R R O L LO W E B Víctor Lozano [email protected] A D M I N I S T R AC I Ó N César Puerta Higuita cronicaambiental.com.mx Revista Cronica Ambiental @cronicaambient CONSUMO INTELIGENTE POR MARU MONROY I @marumonroyv Empaca tu habitacion La firma canadiense Our paper life creó una línea completa de muebles portátiles hechos totalmente con cartón, resistentes al agua, reciclables y que se ensamblan en apenas 30 minutos. El paquete —llamado Room in a Box— incluye base para cama, escritorio, silla, cajoneras y estantes que no necesitan pegamento o herramientas para armarse. Ideales para viajeros y estancias pequeñas. EL COSTO APROXIMADO @ourpaperlife es de 150 dólares (envío gratis). Lava tu ropa (y Empresarios tapatíos desarrollaron Newen, un detergente que encapsula la suciedad después del ciclo de lavado, evitando que la mugre se adhiera nuevamente a la ropa, por lo que el proceso de enjuague se vuelve innecesario. Así, además de ahorrar agua y electricidad, por su pH neutro, el detergente es apto para quienes tienen piel sensible. El empaque rinde 25 cargas y cuesta 60 pesos. EN UNA LAVADORA, el FOTOS: Cortesía de las marcas. no la enjuagues) proceso de enjuague consume 70 litros de agua. newen.mx 4 De laboratorio EN LA ECOCÁPSULA pueden vivir hasta dos personas. a refugio El despacho eslovaco Nice Architects ha diseñado la Ecocápsula, una pequeña vivienda autosuficiente que puede llevarse prácticamente a cualquier rincón del mundo. Tiene utilidades diversas: desde estación científica o habitación de hotel, hasta casa de emergencia o refugio en labores humanitarias. Está equipada con paneles solares y turbinas eólicas para generar su propia electricidad; cuenta también con un sistema de captación de agua de lluvia. ecocapsule.sk Filtro Ladrillos eterno de pet UNA GOTA DE AGUA tarda siete minutos en purificarse. Rosana Gaggino, investigadora del Centro Experimental de la Vivienda Económica en Argentina, encabezó el diseño de un nuevo material empleado en la industria de la construcción que reutiliza uno de los principales desechos de la actualidad: las botellas de plástico. El proyecto recolecta esta materia prima y después la transforma en ladrillos resistentes al fuego y más ligeros (en comparación con los tradicionales). Según sus creadores, aíslan mejor la temperatura y las viviendas construidas con éstos requieren menos cimentación. Un equipo de emprendedores argentinos desarrolló un filtro de agua construido con material cerámico microporoso que, aseguran dura toda la vida y no tiene piezas reemplazables. A diferencia de otros aparatos que funcionan de manera similar, en éste el aire y la luz están en contacto directo con el líquido (para que no desarrolle colonias de bacterias). Su rendimiento mínimo es de cinco litros diarios y elimina metales pesados y químicos tóxicos. Cada tabique emplea 20 botellas de plástico. filtro-eco.blogspot.com.ar 5 La transformación del aguacate Ganadora del Eco Challenge México 2014, Biofase es una empresa dedicada a producir bioplástico a partir de la semilla del aguacate. Este desecho orgánico agroindustrial es transformado en resinas que sustituyen al plástico común y que pueden termoformarse (igual que el polietileno o el propileno) para fabricar empaques, botellas, cubiertos o bolsas. Revolución natural biofase.com.mx Rob Stewart —biólogo, conservacionista, fotógrafo y director de cine canadiense— visitó 15 países a lo largo de cuatro años para recabar las imágenes que luego se convertirían en Revolution, un multipremiado documental que llama la atención e invita a la acción en favor del planeta y sus habitantes. En el filme, Stewart sostiene que si todos estuviéramos conscientes de que el daño al ambiente afecta nuestra supervivencia, actuaríamos de inmediato y de manera contundente para protegerlo. El cineasta, además, documenta el esfuerzo de varios jóvenes en su lucha por conservar los recursos naturales a nivel internacional. therevolutionmovie.com 6 Luz inflable SolarPuff es la primera lámpara inflable de bajo costo que funciona con energía solar. Está fabricada con pet, pesa menos de 100 gramos, es resistente al agua, se compacta y puede transportarse fácilmente. Una recarga de cinco horas proporciona luz durante ocho horas seguidas; su vida útil es de dos años. Existen dos modelos: SolarPuff, que cuesta 30 dólares, y SolarHelix, de 20 dólares (en preventa). LA LÁMPARA se vende con fines humanitarios para llevar luz a comunidades de Haití y Nepal. solight-design.com La reinvención de la rueda GeoOrbital Wheel es una llanta con motor y batería que convierte una bicicleta convencional en una eléctrica. Se ajusta a los modelos tradicionales sin problema y su instalación requiere apenas unos minutos; alcanza una velocidad máxima de 32 kilómetros por hora, cuesta 450 dólares y el pedido tarda seis meses en llegar. geoo.com FUNCIONA igual que la mítica bicicleta de la película Tron. 7 OPINIÓN ¿Cómo elegir las metas ambientales globales para los próximos 15 años? E n este momento, 193 gobiernos de todo el mundo, a través de la Organización de Naciones Unidas (onu), se preparan para seleccionar un conjunto de objetivos de desarrollo ambiental que operarán durante los próximos tres lustros. Las nuevas metas se establecerán para sustituir los muy exitosos Objetivos de Desarrollo del Milenio (odm), —emprendidos en 2000 y que expiran en 2015—, por lo que no es de sorprenderse que muchas de éstas se enfocarán en temas como pobreza, salud, hambre y educación, pero los asuntos ambientales están definitivamente en primer plano. Un rango amplio de las propuestas ambientales está en la mesa justo ahora: desde “idear e instaurar políticas para promover el turismo sustentable”, pasando por la “industrialización inclusiva y sustentable”, hasta “esforzarse por separar el crecimiento económico de la degradación ambiental”. Los 169 objetivos que ahora contempla la onu son ambiciosos, igual que los 18 odm que cambiaron el mundo. La verdad es que la larga lista de metas bien 8 intencionadas debe cortarse; tener 169 prioridades es como no tener ninguna en absoluto. Mi think tank, el Consenso de Copenhague, pidió a 60 equipos de los principales economistas (incluidos varios Premios Nobel) evaluar los costos y beneficios económicos, sociales y ambientales de algunos objetivos propuestos, con la intención de guiar a los encargados de formular políticas que resulten más beneficiosas. A pesar de que los propósitos influirán en el gasto de 2.5 millones de millones de dólares, es importante reconocer que los recursos son limitados y no podemos hacer todo. Debemos animar a los responsables de las políticas a elegir aquellos objetivos que generen los mayores beneficios. Por supuesto, la economía no lo es todo, pero es un parámetro importante que nos ayuda a tomar decisiones informadas. En resumen, el análisis sugiere que reducir la contaminación del aire y la pérdida de arrecifes coralinos son objetivos fenomenales y primordiales. En tanto, para enfrentar el cambio climático, los especialistas recomiendan disminuir los subsidios a combustibles fósiles e incrementar el apoyo a la investigación y el desarrollo. Por partes A menudo, la contaminación del aire interior se pasa por alto; sin embargo, es el problema ambiental más mortífero del mundo, ya que mata a 4.3 millones de personas cada año, principalmente porque 2.8 miles de millones de personas todavía usan leña, estiércol y carbón para cocinar y mantenerse calientes, y respiran aire contaminado dentro de sus hogares todos los días. Para mucha gente, la contaminación del aire interior causada por cocinar y calentarse con fogatas es equivalente a fumar dos cajetillas de cigarrillos al día. Una manera eficaz de enfrentar este problema es proporcionar a 30% de este sector de la población estufas mejoradas —que disipan el humo hacia el exterior a través de chimeneas y respiraderos—. Esta medida salvará casi 400 000 vidas cada año. El costo rondaría los 11 000 millones de dólares al año, pero la inversión dará lugar a beneficios económicos, sociales y ambientales que ascienden a 161 000 millones de dólares al año. En otras palabras, cada dólar gastado dará 10 de beneficios: una meta fenomenal. Se han sugerido varios objetivos para conservar la biodiversidad, y los expertos destacan frenar la pérdida de los arrecifes de coral como una meta eficaz. Estos ecosistemas actúan como criaderos de peces y recursos pesqueros, y mantienen un gran número de especies. Al mismo tiempo, atraen visitantes, generando ingresos por turismo (además, la mayoría de nosotros estaríamos dispuestos a pagar cierta cantidad para asegurar que los arrecifes no se deterioren). Reducir la pérdida global de corales en 50% costaría unos 3 000 millones de dólares anuales, pero los beneficios ascenderían a 72 000 millones de dólares, o cerca de 24 dólares por cada dólar invertido. Por supuesto, el cambio climático también es una prioridad en la agenda. Algunos objetivos climáticos sugeridos son asombrosos (otros no tanto). Es importante que los responsables de las políticas elijan cuidadosamente las metas correctas para lograr la mayor cantidad posible de beneficios por cada dólar gastado. Las investigaciones en la materia muestran que invertir en el desarrollo de tecnología energética es una meta efectiva, ya que crearía soluciones de energía limpia que sean lo suficientemente eficaces para enfrentarse a los combustibles fósiles que hay en el mercado. Esto podría ser financiado con un impuesto al carbono que se incrementara lentamente (dando a los negocios un incentivo para reducir las emisiones, pero sin decirles cómo hacerlo). En total, esta solución ahorraría 11 dólares de daños climáticos por cada dólar gastado. Comparen esto con otra meta climática destacada: duplicar la cuota de energías renovables en el mix energético mundial. A pesar de que hará mucho bien —proporcionará energía y combatirá el cambio climático en una suma de 415 000 millones de dólares anuales—, también tiene un gran costo de 514 000 millones de dólares al año. Por desgracia, esta solución devolverá menos de un dólar por cada dólar OPINIÓN gastado porque las tecnologías aún son inmaduras e intermitentes. Otra gran meta sería eliminar los subsidios a los combustibles fósiles. El mundo gasta la enorme cantidad de 548 000 millones de dólares en dichos subsidios, casi exclusivamente en los países en desarrollo. Esto drena los presupuestos ya insuficientes de recursos que podrían ser utilizados para proporcionar servicios de salud y educación, y fomenta mayores emisiones de dióxido de carbono. Además, los subsidios a la gasolina ayudan sobre todo a los ricos, porque son los que pueden pagar un automóvil. Los economistas estiman que eliminar los subsidios a los combustibles fósiles tiene beneficios 15 veces mayores al costo (y todavía se necesitará ayudar a los más vulnerables para que tengan acceso a la energía). Cuando se seleccionen los objetivos ambientales que operarán en el mundo debemos fomentar que los encargados de formular políticas no sólo elijan aquellos que mejor suenen, tengan los animales más lindos o los grupos de presión más fuertes, sino que escojan más bien las metas que traigan los mayores beneficios para el entorno. Enfocarnos en soluciones inteligentes sería lo mejor que podríamos hacer en los próximos 15 años. Traducción: Israel Galina. POR BJØRN LOMBORG @BjornLomborg Director del Copenhagen Consensus Center. Nombrado por la revista Time una de las 100 personas más influyentes del mundo. Autor de The Skeptical Environmentalist (2001), Cool it (2010) y How to spend $75 billion to make the world a better place (2014). 9 ¿Cómo elegir las metas ambientales globales para los próximos 15 años? QUIÉN ES QUIÉN JADAV PAYENG E n Majuli, una de las islas fluviales más grandes del mundo, localizada en el río Brahmaputra al noreste de la India, vive Jadav. En 1979, cuando tenía apenas 17 años, encontró en un banco de arena los restos de decenas de serpientes que llegaron ahí huyendo de la crecida del río; luego, atrapadas en este sitio, no encontraron vegetación donde refugiarse de los rayos del Sol y murieron insoladas. Entonces, Payeng acudió consternado con las autoridades de su país para sugerir que reforestaran la zona, pero ante la negativa, comenzó lo que se convertiría en su proyecto de vida. Así, en medio de lo que era una vasta extensión de tierra infértil, hoy existe un bosque que abarca una superficie de 550 hectáreas (el bosque de Chapultepec tiene 678), donde 115 elefantes encuentran refugio durante tres meses al año en su ruta migratoria; en el lugar, también habitan venados, tigres, buitres y otras especies, que dan cuenta de una interesante recuperación ecológica. Conforme el bosque ha crecido, ha sido cada vez más difícil protegerlo; la principal amenaza: el humano. “No hay monstruos en la naturaleza, excepto el hombre. Ni siquiera los tigres están a salvo del hombre”, dice cuando le preguntan sobre sus mayores retos. No sólo ha sido pionero en la remediación ambiental de esta isla… Cada que puede, en pleno uso de la reciente exposición mediática que ha logrado, propone al gobierno de su país opciones para salvar Majuli, y es que desde 1917 ha perdido más de la mitad de su superficie debido a la erosión, al grado de que podría desaparecer en 15 o 20 años. Si una sola persona pudo plantar un bosque, qué no harán las 150 000 que habitan Majuli si se unen para rescatarla. Jadav Payeng asegura que seguirá procurando su bosque hasta el último aliento. Para crear un bosque, sólo se necesita un hombre POR NATALIA ÁLVAREZ | @Pimiientta Muchas veces, por no decir siempre, las soluciones vienen de uno mismo. Algo así debió tener en mente Jadav Payeng hace 36 años, cuando por cuenta propia empezó a plantar un bosque. FOTOS: Carlo Bevilacqua. “Un hombre con coraje es una mayoría”, Thomas Jefferson. En cronicaambiental.com.mx encontrarás un cortometraje sobre este personaje, narrado por su amigo Jitu Kalita, fotógrafo de naturaleza, quien en gran medida ayudó a difundir la labor de Payeng. 10 11 ARTÍCULO PICO DE ORIZABA ENTRE DEFORESTACIÓN, INCENDIOS, TALA Y SIEMBRA ILEGAL FOTOS: Emanuel González (Enviado). POR TAMSIN DE CUÉLLAR I ENVIADA Aunque hace casi 80 años el Pico de Orizaba fue decretado área natural protegida para conservar sus abundantes recursos forestales, los incendios, la tala y el cultivo de papa (consecuencias del crecimiento demográfico) han desencadenado una fuerte deforestación en el volcán más alto de México. ción se ha visto perturbada, y el volcán más alto del país (su cima alcanza los 5 636 metros sobre el nivel del mar) ha dejado de ser entendido como deidad y se ha convertido sólo en un recurso natural explotado de forma desmedida por el hombre. El Citlaltépetl, ubicado entre Veracruz (La Perla y Calcahualco) y Puebla (Tlachichuca, Chalchicomula de Sesma y Atzitzintla), es el principal proveedor de servicios ambientales de la región: abastece agua a seis municipios poblanos y 25 veracruzanos (con un aporte anual de 1 943 400 m 3), además captura y retiene el carbono atmosférico. “La riqueza de nuestro parque radica en estos beneficios. Por ejemplo, la captación de carbono es equivalente a un tercio de las emisiones de la ciudad de Jalapa”, explica Héctor Rojas, subdirector del Parque Nacional Pico de Orizaba, dependiente de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp). L a cosmogonía prehispánica establecía que una estrecha relación entre el hombre y la naturaleza; es decir, los recursos naturales eran más que objetos explotables. Por ejemplo, el volcán era una fuente de abastecimiento de agua y semillas que, como ente vivo, podía personificarse e incluso aparecer en revelaciones oníricas cuando los indígenas hacían ofrendas. La montaña, por su parte, era un espacio sagrado donde el ritual era esencial para la subsistencia del hombre. En el caso del Pico de Orizaba, todavía en los 90, los locatarios lo invocaban como Don Francisco Orizabeño, y le ofrecían y aguardiente para pedir agua de lluvia; incluso, su nombre nahúatl, Citlaltépetl (Cerro de la estrella), fue designado así por creencias religiosas, ya que se creía que al iniciar su camino hacia la eternidad Quetzálcoatl subió a la boca del volcán y dejó que su cuerpo ardiera mientras su espíritu transformado en quetzal volaba y se volvía estrella. Actualmente, este vínculo persiste, pero tal vez sólo como un recuerdo vago. Debido a la urbanización en la zona del Parque Nacional Pico de Orizaba la tradi- La superficie total de este parque es de 19 750 hectáreas, es decir 27 veces el Estadio Azteca, divididas en dos regiones: en Puebla domina el bosque templado de clima seco (ladera occidental del volcán), y en Veracruz el ecosistema es más húmedo con bosque templado y mesófilo de montaña (ladera este). Cada zona tiene dinámicas sociales y económicas particulares; sin embargo, el crecimiento demográfico en ambas originó una mayor demanda de recursos naturales y, por lo tanto, una nueva dotación de ejidos dedicados a la agricultura (que implica provocar incendios), la ganadería y, en ciertos casos, a la tala clandestina. El resultado de esta tendencia generó una excesiva fragmentación de la masa forestal del parque, así como la pérdida masiva de suelos y de la capacidad para retener agua de lluvia. La diferencia entre las precipitaciones pluviales en ambas zonas del parque es una de las causas principales de que la deforestación permanezca actualmente de manera más fuerte en el lado de Veracruz. Aquí llueve todo el año (hasta 1 700 mm anuales), mientras que en Puebla sólo en verano (hasta 900 mm anuales). “Debido a que el lado veracruzano no tiene problemas de desabasto (porque sigue lloviendo y siempre hay humedad), existe una percepción de abundacia de recursos. A mayor abundancia, menor interés (en la protección de los recursos naturales)”, sostiene Rojas. 13 proyectos del fapo para generar nuevos ingresos: Huertos de traspatio. Taller de artesanías con hoja de pino y piel de borrego. Invernadero de hongos y setas. Actividades ecoturísticas como senderismo. Biblioteca y estación ambiental para niños. La Perla, zona cero El área más dañada dentro Parque Nacional se ubica en el municipio veracruzano La Perla; sus 42 comunidades integran 23 648 habitantes, y de acuerdo con el censo de 2011 de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), desde 1970 el aumento demográfico ha sido de 225%. “La repercusión de este crecimiento es el cambio de uso de suelo; los ejidatarios tienen que tumbar los árboles para que entre más luz natural que favorece el crecimiento de los cultivo de papa, por lo que el terreno es más fácil de erosionar debido a que la tierra queda expuesta”, explica Martín Moreno, del Fondo Ambiental Pico de Orizaba (fapo). El cultivo de papa es el medio más importante para obtener ingresos en esta comunidad, pero la actividad ya ha afectado 80% del área originalmente cubierta por bosques de coníferas en las zonas aldeñas al volcán (según la Conanp). “La gente necesita recursos y por eso cultiva, pero como la actividad no es rentable, tiene que buscar otras maneras (de obtener ingresos). La más El aumento demográfico en La Perla (Veracruz) ha sido de 225%. práctica es tomar el patio de casa —que es el Parque Nacional— para sustraer madera”, agrega Moreno. “La historia más fea sucede en La Perla, es la sección más dañada, me refiero a que ya no hay árboles (…) siguen siendo pueblos marginados y la pobreza los lleva a delinquir”, lamenta Héctor Rojas. Este problema implica la creación de grupos organizados que ya extraen madera de Orizaba, Córdoba, Maltrata, Mendoza y Ciudad Serdán, y que inducen a los locatarios a esta actividad; ellos acceden a practicarla porque las ganancias son más sustanciales que las del cultivo”, sostiene. En los últimos ocho años ha sido común aserrar las especies de oyamel (Abies religiosa) y pino negro (Pinus hartwegii) para la venta de madera o la producción de carbón. Estos grupos responsables han establecido redes de comercialización con sistemas de comunicación que les permiten evadir operativos federales. “Cuando llegan los militares o Profepa (Procuraduría Federal de Protección del Ambiente) les dan aviso y éstos no encuentran talamontes. Las organizaciones se sienten apoyadas porque los locatarios les brindan protección”. Al respecto, Moreno cuenta que los coyotes (intermediarios) son quienes obtienen las mayores ganancias; además, entregan a los lugaremos motosierras, “así cuentan con una herramienta que no hubieran podido comprar”, dice. La superficie erosionada global, según la Conanp, es aproximadamente de 7 000 hectáreas, que representan 5% de la superficie total del parque; la dependencia asegura que el problema está contenido y que la deforestación sólo permanece en los límites del área protegida. Sin embargo, Crónica ambiental realizó un recorrido 14 19 750 hectáreas VERACRUZ PUEBLA Los incendios como grandes enemigos El mayor peligro al que se enfrenta el Parque Nacional son los incendios forestales que son muy frecuentes, ya sea por causas naturales (como los que ocurren en épocas de sequía) o provocados por el hombre para estimular el rebrote de pasto para el ganado, la agricultura y la tala ilegal. Tanto la Conanp como la Conafor han apoyado a las brigadas contra incendios de Puebla y Veracruz; estos grupos de vigilancia están formados por habitantes de las zonas cercanas. Actualmente, las brigadas han habilitado cerca de 350 kilómetros de brechas cortafuegos que evitan que el siniestro se propague. No obstante, “somos 14 personas capacitadas y con equipo muy básico; si encontramos fuego le echamos tierra y rematamos con lo que podemos trasladar, porque el terreno es muy complicado”, menciona el líder de brigada en Veracruz. Estos grupos de vigilancia funcionan, también, como medios de control contra la tala ilegal, ya que han logrado focalizar los puntos de extracción de madera. Los talamontes han tenido que buscar otras alternativas de acceso que son más complicadas y, por lo tanto, la actividad ha disminuido. PICO DE ORIZABA LA PERLA por esta zona y constantó que los propios locatarios han invadido poco a poco la región. “La responsabilidad de la región era de la Conanp, pero ahora aparecieron dueños y más que seguir los trabajos de restauración están cambiando el uso de suelo”, dice Martín Moreno. Al problema anterior se suma que debido a que los límites no están resguardados con ningún tipo de seguridad, las invasiones de terrenos se han vuelto comunes y, por consiguiente, también el cultivo de papa y el pastoreo. “Los ejidos no están delimitados totalmente, por lo que muchas veces surgen conflictos por si es parque o ejido”, explica Leticia Cuevas Flores, jefa de Departamento de Conservación y Restauración del Pico de Orizaba, dependiente de la Comisión Nacional Forestal (Conafor). Los estragos de este crecimiento poblacional se ven reflejados en los yacimientos de agua y en la erosión del suelo; “la tala ha existido por años y es que la gente no tiene conciencia del daño que ocasiona... El suelo ya no tiene nutrientes”, explica Raúl García, habitante del lugar y líder de la brigada contra incendios en la zona veracruzana. Respecto de la erosión, al no haber árboles, las lluvias fuertes se llevan las semillas que podrían propiciar una regeneración forestal natural; “de este lado del parque (Veracruz) las pendientes son muy pronunciadas y eso quiere decir que hay mayor velocidad en los arrastres de suelo que impactan de manera grave la productividad del bosque”, menciona Cuevas Flores. Consecuencias de la deforestación Reducción de espacios para flora y fauna. Pérdida de diversidad biológica. Reducción de áreas de captación de agua. Disminución de los niveles de ríos y arroyos. Daño directo en los humedales y en el Sistema Arrecifal Veracruzano (por lo tanto, en la actividad pesquera del río Jamapa). 15 Restauración y educación ambiental El Programa de Cuencas Prioritarias en Pico de Orizaba, subsidiado por la Conafor, ha logrado restaurar 3 200 hectáreas de bosque con un índice de supervivencia de 60%; “el programa lo hemos aplicado con enfoque de cuenca; es decir, trabajar en la parte más alta de la montaña. Tenemos 4 000 hectáreas compactas”, declara Cuevas Flores, quien es encargada de este proyecto que brinda a los locatarios 25 000 pesos por hectárea si realizan acciones de conservación y vigilancia. “Llevamos cuatro años colaborando con las autoridades, ha sido positivo porque hay recursos económicos para las familias y, por esto, la tala ha disminuido”, asegura Raúl García. Para la reforestación siembran pino negro que es una especie que puede adaptarse a una altura de 4 000 msnm, pero su lento crecimiento provoca que las autoridades centren la siembra en áreas seguras, “varias instituciones hemos construido viveros para tener semillas. Si plantamos 100 000 árboles lo haremos en áreas donde colabore la gente”, comenta el subdirector regional de la Conanp. Por ejemplo en la zona poblana, la Conanp construyó tinas ciegas para abastecer agua a esa región: “hicimos excavaciones en el suelo para retener líquido y no tardamos más de un año en tener resultados”, Imagen de un sembradío ilegal de papa dentro del Parque Nacional (en la zona veracruzana). explica Rojas. De esta forma, los habitantes poblanos aprendieron que el bosque es esencial para contar con este recurso y evitar así la tala y el cultivo demedido; aquí los proyectos de reforestación han tenido buenos resultados, al grado de ser el área de bosque más sana del parque. Los programas de reforestación, de cuencas hidrológicas y de vigilancia se presentan como oportunidades laborales para el locatario, “la reforestación es buena no sólo por el hecho de estar plantando árboles sino que demuestra a la sociedad los beneficios que acarrea; la gente obtiene ingresos de los árboles al cuidarlos y comprende que el bosque puede darles más recursos a través de actividades diferentes a la tala”, finaliza Martín Moreno. Fuentes: Conabio I Conafor I Conanp I Glockner, Julio. Los volcanes sagrados. México, 2011. I Inafed I Sedesol. ARTÍCULO 16 Pico de Orizaba. Entre deforestación, incendios, tala y siembra ilegal “Me aburren los ateos, siempre están hablando de Dios”. E l epígrafe del escritor alemán Heinrich Böll (1917-1985) que introduce estas líneas me aplica como anillo al dedo; soy ateo y hoy me ocuparé de temas cercanos a la fe. Por principio —y quizá por prejuicios (de alguna manera fundados, lo cual es una paradoja cuántica)— cada que un ultraconservador republicano se manifiesta, invariablemente estoy en contra, y procedo a citar a Jeb Bush, ese cachorro del imperio que anticipando la encíclica papal Laudato si´ (Alabado sea) y sin conocerla en lo más mínimo, expresó: “Es una arrogancia sostener que con relación a los cambios climáticos exista una ciencia exacta… la religión debería ocuparse de hacer mejores a las personas y menos de cuestiones que tienen que ver con aspectos políticos”. Bien, el precandidato presidencial estadounidense comete los errores que siempre se le han atribuido a la Iglesia: opinar sin saber de qué habla, de manera dogmática, y asumir que las instituciones eclesiásticas deben ser neutras y asépticas, lo cual es a todas luces un despropósito, pero seamos clementes… se apellida Bush. El papa Francisco acaba de publicar un muy extenso documento que se ocupa de cuestiones ambientales. De una manera correcta y clara, describe las continuas afectaciones ambientales como: “una pequeña señal de la crisis ética, cultural y espiritual de la modernidad”, frase a la que no le cambiaría una coma. En su encíclica, dice inequívocamente que el cambio climático es un fenómeno probado por la ciencia y que lo es también el hecho de que tiene un origen antropogénico basado en el uso excesivo de combustibles fósiles, por lo que insta a transitar hacia energías renovables. Cuestiona, también, la deuda de los países industrializados hacia las naciones con menos recursos debido a sus hábitos de consumo y a su obsesión por anteponer el crecimiento económico por sobre la preservación del entorno. En un insospechado activismo, habló de la necesidad de crear redes sociales que presionen a los líderes políticos, particularmente a aquellos que eluden el tema por temor —es mi lectura— a pérdidas electorales de corto plazo. A veces un mensaje puede ser poco novedoso, el del Papa no lo es; lo que señala lo han venido haciendo especialistas desde hace décadas. Sin embargo, el emisor hace toda la diferencia: que el líder espiritual de miles de millones de personas (más de 1 100) se manifieste de forma tan clara y contundente, puede hacer una diferencia enorme en el activismo y la atención sobre el tema. Bienvenido, en consecuencia, el mensaje; bienvenida la apertura de la Iglesia sobre temas más propios de este mundo, y bienvenido el cambio de timón de una institución que condenó hace años a Galileo y a Darwin. POR FEDRO GUILLÉN @fedroguillen Articulista y autor de los libros Crónica alfabética del nuevo milenio y La sala oscura. Es doctor en Ciencias. 17 OPINIÓN alabado sea el papa francisco y el cambio climático FOTOS: Cortesía de Fulvio Eccardi. I conecto.mx CHICZA EL CHICLE QUE RESCATÓ UNA SELVA POR TAMSIN DE CUÉLLAR 18 CASO DE ÉXITO Cerca de 46 cooperativas de Quintana Roo y Campeche unen sus esfuerzos, a través del Consorcio Chiclero, para explotar de forma sustentable el árbol de chicozapote, a fin de producir el único chicle 100% biodegradable y orgánico en el mundo; por si fuera poco, han diseñado un exitoso plan de conservación forestal que aplican en la zona mexicana del Gran Petén (segunda selva tropical más grande del continente después del Amazonas). Luego, la chiclerada (grupo de chicleros) junta la resina en un gran cazo para su cocimiento (el chicle se obtiene de la deshidratación de esta sustancia), por lo que se mantendrá a fuego lento hasta que cuaje; es decir, cuando la espuma se vuelva amarillenta, para después estirarla y moldearla en marquetas (bloques que pesan 10 kilos). Por cada kilo, un chiclero recibe hasta seis dólares. H ace décadas, al inicio de la época de lluvias, los chicleros se abrían camino en la selva con un machete, seguían el croar de las ranas para encontrar aguadas (zonas de agua potable) y acampaban para explotar el árbol de chicozapote (Manilkara zapota), y así obtener un látex natural que después se transformaría en chicle. Ahora, aunque es más sencillo acceder a la zona, la extracción continúa siendo la misma, pero en jornadas diarias de seis horas durante casi cinco meses seguidos (así mantienen viva una tradición maya que además es sustentable). El hombre afila el machete con el que empieza a hacer los primeros cortes en zigzag sobre la parte baja del árbol; luego se ata por la espalda con una cuerda al tronco, y con la ayuda de espolones comienza ascender al menos 20 metros. La savia escurre por los zurcos hasta un depósito previamente colocado en la base del árbol. “Un palo de estos puede dar cinco kilos si es de buena clase”, explica el chiclero Francisco Tadeo, quien lleva trabajando en la región 45 años. De vuelta a la tradición La popularización internacional del chicle durante la Segunda Guerra Mundial provocó la máxima explotación de este látex natural y, en consecuencia, la creación de un sustituto; es decir, un polímero derivado del petróleo que satisficiera la alta demanda. Fue entonces cuando, a partir de 1970, estas áreas selváticas fueron abandonadas y el cambio de uso de suelo se volvió inminente. Tras la sustitución sintética de la goma natural, muchos chicleros dejaron esta actividad para centrarse en otras opciones de ingreso, como la explotación de madera y la agricultura, lo que desencadenó altos niveles de deforestación en el Gran Petén (distribuido entre México, Guatemala y Belice). 19 Preocupados por esta situación, en 2009 se reunieron 2 000 chicleros de Quintana Roo y Campeche para, por un lado, producir Chicza, único chicle orgánico certificado y biodegradable del mundo que se comercializa en 25 países de la Unión Europea, Medio Oriente, Estados Unidos y, por supuesto, México. Por el otro, emprender un satisfactorio plan de rescate de la selva aledaña a los territorios donde se extrae el látex natural. Así, este grupo recuperó la antigua tradición maya de extracción del chicle, al regresar a la selva para la explotación sustentable del chicozapote. “El árbol no se muere, lo dejamos para poder trabajarlo en ocho o 10 años”, cuenta Crisanto Mesx Che (esta especie vive hasta 300 años, de los que 120 son productivos). Actualmente, extraen resina de 30% del total de árboles en una zona de 1.3 millones de hectáreas. “La producción está sujeta, por un lado, a la demanda del mercado y, por el otro, al clima; el monte puede darnos 1000 toneladas anuales de látex sin dañar el árbol”, explica Manuel Aldrete, Director Ejecutivo de Consorcio Chiclero. Los integrantes de la empresa social transforman estas toneladas de goma en pequeños paquetes de 15 y 30 gramos de chicle endulzado con miel de agave y saborizado con menta, canela y fru- 2 000 chicleros han contribuido con la conservación de la selva mexicana, cuna de la cultura maya. 20 tas tropicales. El Consorcio Chiclero es propietario de la marca, la planta procesadora, la comercializadora y exportadora. Amigable con el entorno En 2009 Chicza, que se comercializa en 25 países, quedó dentro de los 20 productos más novedosos de la Feria de Productos Orgánicos y Naturales de Londres. Chicza se caracteriza por ser una alternativa para contrarrestar la contaminación ambiental originada por las gomas tiradas al aire libre, ya que por ser hidrosoluble es un producto que puede desintegrarse en tan sólo unas semanas y no se adhiere a ninguna superficie. “La composición química de los chicles sintéticos y de los naturales es muy similar, la única diferencia es que los segundos pueden degradarse ya sea con luz solar o con bacterias del entorno”, asegura Víctor Calderón, bioquímico del ipn. Incluso este chicle orgánico puede funcionar como abono si es depositado en macetas o áreas verdes. Mercado verde De forma paralela, los habitantes de 10 municipios de Quintana Roo y Campeche tienen un programa en conjunto con la Comisión Nacional Forestal para desarrollar plántulas (plantas en primeros estadíos de crecimiento) de especies nativas como el ramón, la pimienta gorda y el chicozapote para reforestar. Gracias a la actividad de esta empresa social se han recuperado 4 000 hectáreas de suelos degradados que están cercanos al área de explotación sustentable del chicozapote, y que ahora son recursos forestales renovables; además, se logra la conservación de la selva donde se realiza la actividad chiclera. “Haberse organizado también permite a los chicleros contar con seguridad laboral, fondos sociales y becas de licenciatura para sus hijos”, agrega Aldrete. Para más información, visita chicza.com Contaminación pegajosa 5 1.5 Una goma de mascar tarda 5 años en desintegrarse. Arrojar un chicle al aire libre “es muy grave porque no es biodegradable, puede tardar años en descomponerse”, alerta Víctor Calderón. Además de los problemas estéticos que ocasiona este tipo de contaminación, el especialista resalta que las gomas de mascar se convierten en “reservorios de microbios… que se Un mexicano consume, en promedio, 1.5 kilos al año. esparcen en tres horas y podrían afectar a personas con cierta 150 000 70 10 000 Cerca de 150 000 toneladas quedan pegadas en el suelo a nivel mundial. susceptibilidad; es decir, quienes están más al ras del piso”. En el Centro Histórico del DF hay 70 Para el entrevistado, la educación es la clave para evitar estos inconvenientes ambientales y de salud. “La gente debe saber cómo desecharlo [un chicle] y dónde”. El Una goma pegada en el piso contiene 10 000 bacterias y hongos. bioquímico recomienda envolver la goma en un papel pegados por cada metro cuadrado. y tirarlo a la basura. Fuentes: chicza.com | conabio | conecto.mx | Instituto Nacional de Estadística y Geografía (inegi). Pérez Aguilar, Raúl. El chicle en Quintana Roo: sus caminos y voces. Cuicuilco N°60, Universidad de Quintana Roo, 2014. CASO DE ÉXITO 21 Chicza. El chicle que rescató una selva CENTRAL U Heces fecales (de cerdos, vacas y humanos) NA FUENTE INSOSPECHADA de energía ILUSTRACIONES: Eduardo Ramón Trejo. POR VALENTINA PÉREZ BOTERO* I @vpbotero Las excretas, transformadas en biogás y luego en electricidad, son una nueva alternativa a las fuentes limpias de energía, gracias a que científicos de todas partes del planeta han encontrado en el inodoro lo que podría ser el próximo “oro oscuro”. La apuesta es encender a buena parte del mundo por medio de las deposiciones diarias de personas y animales. 22 L a cámara cierra el encuadre: uno de los hom-bres más ricos del mundo se lleva a la boca un vaso con líquido transparente. “Es agua”, dice en tono festivo mientras se escuchan risas. La breve conclusión de Bill Gates parece decir por ausencia —y celebración del público—: “No es mierda”. Minutos antes, una banda transportadora introdujo toneladas de excremento humano a una máquina que a lo lejos parece un modelo a escala de una ciudad industrial y que de cerca es un complejo sistema que recibe aguas negras para transformarlas en el agua potable que Gates probó y para producir energía a partir de las heces fecales recibidas. Así es, el material que corre cuando bajamos la palanca del wc poco a poco ha dejado de ser visto sólo como un “producto” desagradable (asqueroso) que debe enviarse lo más pronto posible al drenaje; hoy, ingenieros e investigadores de todo el mundo lo están convirtiendo en una materia prima utilísima con la que es posible producir electricidad y, en consecuencia, crear a una nueva opción de energía limpia (además de la solar o la eólica). Lo mejor de este recurso es que es gratis y abundante. Gates está consciente del valor y potencial de esta “riqueza naciente”; tan es así que en su blog personal Gatesnotes aseguró que en una segunda etapa el Omniprocessor (nombre oficial de la maquinaria) será capaz de recibir el desecho de 100 000 personas y producir diariamente tanto 86 000 litros de agua potable como 250 kilowatts de electricidad. Para ejemplificar este potencial, diremos que con la deposición diaria de los habitantes de la delegación Milpa Alta del Distrito Federal, se podría mantener encendido un foco incandescente de 100 watts durante cuatro meses continuos. El objetivo es, entonces, aumentar esta capacidad productiva en el corto plazo. Antes de continuar, es necesario precisar que para convertirse en energía, el excremento antes debe atravesar por un largo proceso de transformación. En el caso de la máquina financiada por la Bill and Melinda Gates Foundation la electricidad es obtenida a partir del vapor generado cuando las heces son quemadas. 23 EL GRAN RECOLECTOR POR QUÉ DEBEMOS VOLTEAR A VER LAS HECES La tecnología más difundida a nivel internacional para producir energía con materia fecal se basa en el uso de biodigestores. Se trata de dispositivos sencillos que consisten en una especie de pulmón de plástico, metal o concreto recubierto que al interior fabrica fertilizante y gas metano (que luego se convertirá en energía). El proceso se reduce a capturar las emisiones de gas que generan las bacterias anaeróbicas mientras descomponen la materia orgánica (es decir, la caca). Al biodigestor entra un batido de heces con agua, y en un lapso de 45 a 50 días (el tiempo de reposo depende de la temperatura) se obtiene fertilizante y lo que se conoce como biogás. Este tipo de gas puede ser utilizado directamente como energía calorífica (remplaza al gas LP para cocinar), ingresado en un generador para producir energía eléctrica o incluso vertido en el tanque de un automóvil de motor híbrido para echarlo a andar. Joseph Sebastian Pathiyamattom, investigador del Instituto de Energías Renovables (ier) de la unam, sostiene que el bajo costo de la materia prima —excremento— y la simplicidad tecnológica de la máquina que lo procesa en energía (biodigestor), hacen del biogás un producto competitivo en el panorama de elaboración de energía. “En el caso del biogás, el balance energético es positivo porque se gasta menos y se genera más. Tan es así que compite con la producción de otros combustibles convencionales como el bioetanol (obtenido de caña de azúcar o del maíz) y el biodiesel (proveniente de aceites vegetales o grasas animales)”. El impulso a la creación de energía a partir de materia fecal humana nace, por una parte, en el contexto de la diversificación de fuentes —más verdes y menos dependientes de los combustibles fósiles—. Por la otra, ante la necesidad de resolver los grandes problemas de drenaje en países en desarrollo. Esta visión, precisamente, es la que promueve los financiamientos otorgados por la fundación Gates en su objetivo de mejorar la sanidad en países emergentes. La Organización de las Naciones Unidas (onu) establece que hoy en día más de 1000 millones de habitantes en el mundo no tienen electricidad, lo que equivale a que una de cada cinco personas vive en la oscuridad. A este panorama se suma que 2.5 millones de personas no cuentan con un sistema de drenaje apropiado, ocasionando que al menos 700 000 niños mueran al año por enfermedades relacionadas con esta causa. Por lo anterior, es decir, la carencia, la propuesta de obtener energía a partir de un problema —las aguas negras— parece ser el remedio. “Es una solución que se paga por sí misma”, dice Timothy Wade, cofundador de Pivot*, en teleconferencia desde Seattle, al explicar que la empresa que dirige se inició pensando en cómo solucionar el problema de drenaje en países en desarrollo y la respuesta fue: encontrarle valor a la mierda. “La idea fue crear un producto valioso, no sólo por los problemas que resuelve, si no porque tiene un precio en el mercado”, concluye. Dicha firma, por ejemplo, al igual que el Ominiprocessor y los biodigestores, prestan el servicio de tratamiento de aguas y de conversión de excremento en un bien preciado: energía. “Ya empieza a ver una minería en los desperdicios humanos”, advierte Wade sobre la explotación y búsqueda de 24 recursos en las heces, “y creo que se intensificará a medida de que la población continúe creciendo y los bienes disminuyéndose. Reúso y recuperación son la única salida”, concluye sobre el futuro de la industria. ¿LA MATERIA FECAL DE 7 000 MILLONES DE PERSONAS PODRÍA ENCENDER AL MUNDO? En 2010 el profesor William Cash de la Universidad de Stanford, Inglaterra, se preguntó lo mismo: ¿el mundo podría depender de la producción de energía generada a partir de su propia materia fecal? 886 000 millones de kilos al año de excremento humano no son suficientes, concluyó este ingeniero, pero aceptó que “aunque nunca seríamos capaces de mover al mundo con nuestro propio desperdicio biológico, hay una gran cantidad de energía disponible que estamos dejando ir”. A pesar de que las cantidades se quedan cortas, las heces humanas siguen siendo la mejor materia prima. Si se comparan con la deposición de otros animales como elefantes, leones y vacas, las excretas de personas y de cerdos se encuentran entre las que producen más sólidos volátiles —elementos indispensables para generar más metano dentro del biodigestor. Por ejemplo, si las heces de un caballo producen de 200 a 300 sólidos volátiles, la de un humano puede llegar hasta 500, de acuerdo con una investigación de la unam hecha para medir la eficiencia de cada tipo de heces. En México existen ejemplos que lo confirman. Africam Safari, zoológico campestre a las afueras de Puebla, es el único lugar en el mundo donde se combina el tratamiento de agua y generación de energía calorífica a partir de heces de elefante. “Obtenemos energía de un desecho”, dice Israel Garza, encargado del programa, y explica que desde abril de 2012 el lugar ha utilizado la excreta de sus tres elefantes asiáticos para cocinar desde palomitas hasta carne asada. El biogás obtenido por el excremento de tres Elephas maximus es suficiente para mantener prendida una hornilla por ocho horas. Además, el biodigestor empleado genera un fertilizante líquido que abona los jardines del parque. El modelo ha sido tan exitoso que en 2014 fue galardonado por el gobierno mexicano con el Premio Nacional del Trabajo en el rubro de innovación, que en una segunda etapa se empezarán a procesar todas las aguas residuales producidas en los baños públicos del parque. Pero, ¿quién comería una cena cocinada con excremento? “No huele”, se ríe Israel y dice que el factor asco —al que esta tecnología se ha tenido que enfrentar a nivel mundial—, se rompe cuando la gente ve el mecanismo en funcionamiento y entiende que el gas no tiene nada que ver con el excremento del que partió (lo mismo que el agua que bebió Bill Gates). Si tomamos en cuenta que 65 millones de personas en América Latina, de acuerdo con la onu, aún cocinan con leña por falta de acceso a gas y/o energía y, en consecuencia, desarrollan graves enfermedades respiratorias, los biodigestores alimentados con sus propias heces y las de sus animales, parecen una salida viable y accesible. 25 ACCESO A LA TECNOLOGÍA Biobolsa, es una empresa mexicana especializada en fabricar biodigestores para pequeñas unidades de producción, granjas que tienen de una a 40 vacas o su equivalente en otro tipo de animales, incluido el humano. La eficiencia de este sistema, tomando los números de la firma, establece que si se introducen 1 823 litros de materia fecal bovina en clima cálido, se producirá lo equivalente a 874 kilos de gas LP al mes o 145 kilowatts de energía al día (60 focos de 100 watts prendidos durante 24 horas seguidas). En términos de inversión, un biodigestor mediano (20 m3) tiene un costo de hasta 35 000 pesos. El precio incluye el dispositivo, capacitación de los operadores y un kit introductorio. “Tenemos calculado que un propietario pequeño puede pagarlo en un plazo de tres años”, dice Camilo Pagés, director de operaciones de la compañía, y afirma que la máquina tiene 20 años de vida útil. Esto le permite a un granjero mexicano tener 17 años de beneficios: “En la mayoría de nuestros casos, los usuarios desplazan el uso de combustibles. A nivel doméstico, eliminan en 100% el uso de gas LP de su vida cotidiana”, afirma el empresario. Pese a la viabilidad de este sistema en México, los últimos datos del Sistema de Información Energética de la Secretaría de Energía (Sener) ubican a la producción de biogás como la menor entre las energías renovables utilizadas en el país. Sólo produce 0.3%. La energía solar, que le sigue en un ranking de menos a más, aporta 1.18% de la creación de energía en este rubro. Si el nivel de producción nacional de biogás se compara con la producción total de energía primaria en nuestro país, el porcentaje sería más insignificante: 0.02%. “En México no ha habido una dirección bien definida”, dice Sebastian Pathiyamattom y asegura que el estudio de la generación de energía a partir de excremento no lleva más de 10 años en el país. Como estrategia de expansión, en este mes de julio, el ier acompañará como sustento académico a la empresa General Electric ante la Secretaría de Economía en la presentación sobre la viabilidad del biogás como fuente alterna de energía, pero en términos generales, insiste el investigador, “el balance es positivo”. “La basura de unos es el tesoro de otros”, escribe Bill Gates para cerrar el texto que publicó inspirado en la visita que hizo a la máquina que transforma excremento en agua, energía y un poco de ceniza. El optimismo lo ancla en que “el modelo convierte el desperdicio en productos que tienen un valor en el mercado”. Es decir, el potencial económico del excremento permite solucionar el problema de drenaje en países en desarrollo y generar ganancias. Gates está convencido, como muchos otros académicos e inversionistas, de que el excremento se ha convertido en un tesoro que puede ayudar a mover el mundo. ¿QUÉ TAN VERDE ES EL ORO OSCURO? El cofundador y directivo de la firma antes mencionada asegura que en su experiencia la generación de biogás (captura el metano —un gas más contaminante que el bióxido de carbono—, desplaza el consumo de combustibles de origen fósil, relega el uso de fertilizantes químicos, evita la contaminación de los mantos freáticos por aguas negras y disminuye el uso de leña para cocinar (lo que a largo plazo reduce la deforestación). “Al final de la ecuación tenemos beneficios ambientales por varios frentes”, asegura Pagés. 26 En Ruanda los presos operan las cámaras donde se produce biogás FOTO: James Mollison. a partir de sus heces. Para muestra, basta un mojón materia prima vaca lugar granja HECES baños públicos humano prisión autobús de transporte público perro parque público país aplicación guanajuato, méxico (rancho la estrella) Más de 25 toneladas de estiércol (producidas por 700 cabezas de ganado) se transforman en 1 400 m3 de biogás, y luego en energía, que cubre 32% de la demanda de la granja. Representa ahorros de hasta 100 000 pesos mensuales en producción, mantenimiento y operación. kenia Proporciona servicios de sanidad a comunidades marginadas (reduce el problema de falta de drenaje) y produce energía. Las excretas de 8 000 prisioneros son suficientes para abastecer 75% de la demanda de electricidad en 14 cárceles de este país. ruanda Impulsan un camión para 40 pasajeros (más de 1000 al mes) que, con un solo tanque, recorre hasta 300 kilómetros. inglaterra La popó de los perros que pasean en el parque sirve para generar energía eléctrica que se emplea para prender una lámpara y calentar agua. inglaterra 27 La empresa Wessex Water creó un autobús impulsado por heces humanas que transporta 12 000 pasajeros al año. ¿Y LAS FLATULENCIAS? 300 LITROS Las flatulencias de las vacas son un grave problema ambiental (aunque usted no lo crea). Esto porque están compuestas por metano, un gas de efecto invernadero altamente contaminante; si partimos de que una sola cabeza de ganado emite en un día hasta 300 litros de metano, imaginemos la capacidad energética de esta materia prima. Conscientes de ese potencial, investigadores del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (inta), en Argentina, desarrollaron una suerte de mochila-contenedor que se conecta directamente en las cavidades estomacales del animal donde se produce el metano. 100 LITROS Así, los científicos obtienen el gas necesario —que luego se transforma en energía— para poner en funcionamiento un refrigerador de 100 litros, a una temperatura de hasta 6 ºC, durante un día completo. * La empresa Pivot de capital estadounidense pero con su planta matriz en Uganda, fabrica el primer combustible sólido hecho de materia fecal humana. Su producto compite en el mercado de la energía con el carbón y la madera. Fuentes: Gates Foundation I inegi I Organización Mundial de la Salud I Organización de las Naciones Unidas I Sanergy I Secretaría de Energía I The Guardian I The Park Spark Project. CENTRAL 28 Valentina Pérez Botero es periodista en la Unidad de Investigación del periódico El Universal y columnista en Cuadernos Doble Raya. Colombiana de nacimiento y chilanga hace siete años. Heces fecales. Una fuente insospechada de energía ARTÍCULO CUBA Y LA GUERRA CONTRA LOS BÚFALOS POR RUBÉN CORTÉS | @Ruben_Cortes 29 El occidente cubano es golpeado por una plaga: miles de búfalos salvajes destrozan sembradíos y vehículos de transporte. Llegaron a la isla hace dos décadas como un regalo de Vietnam a Cuba por el apoyo de la isla en la guerra contra Estados Unidos. L e habían tomado el gusto a quererse entre los árboles, a pesar de que tuvieron que hacerlo por necesidad, después de que el gobierno obligara a los amantes a registrar sus fotografías, nombres y apellidos, estado civil, dirección y centro de trabajo en las casas de cita particulares y en las posadas públicas. Encontraron lugar en la floresta y hasta nombre le pusieron: Hotel Yerbita. Hacían el amor en cualquier oportunidad que pudieran robarle a sus labores como médicos, y a sus matrimonios, pues ambos eran casados, pero preferían las primeras horas de la noche, cuando avisaban a sus casas de una guardia imprevista, una operación urgente. Escapaban en el coche de ella, un Fiat que le vendiera el gobierno como premio por haber prestado colaboración internacionalista en Belice. Se iban a los bosques cercanos a la ciudad: en el abra de las tierras bajas del sur, donde el gobierno había soltado una manada de búfalos que le regalaron los vietnamitas a Fidel Castro en agradecimiento a tantos años de solidaridad y alianza política. Una noche el hechizo se rompió por culpa de los búfalos: uno, grande y negro, estaba plantado en medio de la carretera y ella debió detener el coche en una maniobra de último segundo para no estrellarse contra la masa de 800 kilogramos, el peso que alcanzan los machos adultos de la especie introducida en Cuba: Bubalus bubalis o búfalo asiático. El animal avanzó hacia el vehículo y ella intentó conectar la marcha atrás, pero no pudo: sólo escuchó un mugido prehistórico mientras veía dos cuernos curvos que arrancaban de cuajo el capó. Antes de que se iniciara otro ataque, ella logró controlar el carro y huyeron. Luego supieron que su historia era común y que, además, tuvieron suerte. Una semana atrás una pareja de búfalos había arremetido —y producido múltiples e irreparables abolladuras— a una guagua de transporte escolar que, felizmente, iba sin estudiantes. El chofer escapó de milagro. Los primeros búfalos habían llegado el 27 de julio de 1987. Eran 24 hembras y dos machos de la especie de río. En 1991 vinieron 460 de pantano, 60 de ellos machos, pero fueron escapando de las granjas y reproduciéndose en estado salvaje hasta sumar unos 8 000 ejemplares, que se convirtieron en el espanto de campesinos, choferes y alumnos de las escuelas: en su incontenible avance en busca de alimentos, arrasaban con cercados y cosechas, machacaban vehículos y dañaban casas, mataban perros y caballos, embestían a los monteros. Un médico veterinario había provocado el pánico al advertir en la televisión a los matarifes clandestinos que abundaban en los campos cubanos, que los búfalos llevaban en la sangre de manera natural brucelosis y tuberculosis vacuna, enfermedades que se transmitían a los humanos aún cocinando o congelando la carne y cuyos microbios sólo se podían destruir con 30 nombre científico: BUBALUS BUBALIS nombre común: Búfalo de agua Peso: entre 800 y 1 200 kilos. un producto industrial, imposible de reproducir en las cocinas domésticas. Sin embargo, Fidel Castro estaba contento con el regalo de los vietnamitas y en un discurso había asegurado: “Pueden desarrollarse perfectamente en los lugares bajos y ser productores de carne y de leche de muy alta calidad, al extremo de que algunas marcas famosas de quesos en el mundo se producen con leche de búfala”. Castro también había tenido gestos de bondad con Vietnam. El 19 de junio de 2007, el periódico oficial Juventud Rebelde contó la historia de un agente secreto cubano que atravesó el mundo varias veces para llevarle al patriarca Ho Chi Min unos botes de helado cubano marca Coppelia que le mandaba el líder comunista. Había varias vías aéreas para llegar desde La Habana a Hanoi y todas duraban casi dos días, con muchas escalas, en una especie de 31 Recorren hasta 20 kilómetros diarios. ruta no de la seda, sino del helado y de las ranas toro, pues Fidel Castro, a quien le preocupaba la alimentación de los soldados vietnamitas que luchaban contra las tropas estadounidenses, también les envió ranas toro vivas, convencido de que esos batracios tenían un gran valor proteico y eran capaces de adaptarse fácilmente en Vietnam, donde abundaban las lagunas y los arroyos. “No sé si las ranas toro las llevó el mismo compañero del helado, pero luego nos enteramos de que quien lo hizo pasó las de Caín. En Moscú tuvo que meterlas en la bañadera del hotel, para luego pescarlas una a una y seguir viaje”, reveló en la misma edición del diario la periodista Rosa Miriam Elizalde, quien trabajaba en la Oficina de Información del Consejo de Estado. Fue después de aquello que el jefe de la Revolución cubana recibió los búfalos, con la idea de que constituyeran el futuro de la ganadería de la isla, debido a su bajo índice de mortalidad y a que las hembras parían un becerro cada año a lo largo de dos décadas. Además, no había que procurarles pienso, pues se alimentaban de lo que encontraban y se podrían usar algún día como transporte de carga, al ser capaces de mover seis veces su peso. No sólo comían lo que hallaban: también destruían. Un maestro había visto llegar un día a la escuela a una campesina cargada de hijos pequeños gritando que un búfalo despedazaba su bohío de pencas de palma. Un grupo de profesores corrió hasta las cercanías de la choza y vieron al animal. Algunos afirmaban que los búfalos eran almas de Dios, como el montero Pedro Luis Acosta, jefe de la Lechería Número Ocho, en la provincia de Pinar del Río. “En estado salvaje son ariscos, pero se amansan más rápido que un toro cebú, a la semana te paseas entre ellos. Claro, antes hay que capturarlos uno a uno por montes y pantanos”. Pedro Luis sólo les veía un problema: “No hay cerca sin electrificar que los pare, andan en manadas que salen de noche y acaban con todos los sembrados que encuentran a su paso y, aun con sus tarros jorobados no fallan al pinchar, pero ninguno busca a las personas para atacarlas, pero si los acorralan son peligrosos, más si son hembras paridas”. El derribo de alambradas y empalizadas por parte de los búfalos había ocasionado numerosos 32 Estudio del escritor Ernest Hemingway, ubicado en la Finca Vigía, en Cuba, donde escribió su novela El viejo y el mar, publicada en 1952, que lo llevó a ganar el Premio Pulitzer un año después. I Foto: xxxxx pleitos legales entre los campesinos, pues la falta de lindes territoriales propició que muchos ocuparan tierras que no eran suyas. El gobierno tuvo que tomarse en serio el tema y organizó brigadas de buscadores de búfalos, similares a las de cazadores de bisontes en el oeste americano de hace 300 años, salvo en que las cuadrillas de Pinar del Río no matan a los animales, sino que los lazan para llevarlos a cautiverio. Las cacerías son al oscurecer, o en noches de luna llena, para aprovechar el agotamiento de los búfalos tras todo un día de destrozos. Sin embargo, en la incierta primavera de 2015, con sus días ora gélidos, ora agobiantes de calor, a veces con lluvias de capricho, llegaron los primeros resultados del control de estos animales salvajes. El diario El Guerrillero informó que “sólo en los tres últimos años, una brigada ha capturado alrededor de 4 000 búfalos. Gracias a este esfuerzo temerario, entre 2009 y 2012 fueron capturados en total más de 7 000 ejemplares. Sin duda un importante alivio para una zona eminentemente agrícola, que ha sufrido enormes estragos a causa de ellos”. Las búsquedas y capturas son con caballos, monturas, dos carretas tiradas por tractores y dos grupos de monteros. Cada cazador recibe del gobierno el equivalente a 20 dólares de salario mensual sin importar el número de búfalos que capture: si caza uno, gana 20 dólares, si caza 40… son 20 dólares, en una labor de verdad temeraria porque los animales atacan a matar cuando se ven cercados y destripan caballos con una facilidad pasmosa. Pero los guajiros pinareños son hombres estoicos, descendientes de los primeros canarios que emigraron a la isla hace 400 años y se instalaron en la inhóspita región occidental para fabricar carbón y hacer tasajo que vendían a los piratas que bordeaban la isla camino a sus grandes asaltos en el Golfo de México. Hombres recios, cerreros, que se cortaban las uñas a cuchillo y se rasuraban con machete. Sus descendientes tienen, hoy, una tarea ciclópea: les faltan cazar unos 5 000 búfalos sueltos entre pantanos, pinares y serranías. Pero ellos pueden. Son hombres de verdad. POR LA REDACCIÓN Fuente: Conabio 33 ARTÍCULO RÍO MAGDALENA El último río vivo del DF agoniza POR ANIBAL SANTIAGO | @apsantiago Pese a que hace sólo tres años se destinaron cientos de millones de pesos para su rescate, hoy esas obras están destruidas y abandonadas. Los hogares, de modo clandestino, y el gobierno de la ciudad de México, vierten en él sus aguas negras. El procurador ambiental admite que ya nada se hace para rescatarlo. L a rata se asoma, no detecta intrusos y abandona su madriguera en la ladera del río Magdalena. Con saltos eléctricos sobre tres rocas sortea el cauce poderoso. Botellas de plástico, llantas y bolsas son el más reciente legado que los vecinos del Barrio Las Calles arrojaron al último río vivo del Distrito Federal; en esa cima de basura el roedor muerde una tortilla. Un rótulo informa arriba del animal: “Comedor Comunitario Plazuela del Pedregal”, en cuya entrada, apenas a dos metros de las ratas, decenas de niños del poniente capitalino se divierten en unos juegos públicos. De la mano de sus dos pequeños, Laura López (de 29 años) baja la escalinata junto a la corriente marrón, densa como leche con chocolate, y tuerce el gesto: “las ratas dan vueltas en los juegos. Y este olor, ¡ay!”, se tapa la boca y se carcajea. La risa es su defensa ante el hedor vomitivo que emana de un caño que escupe agua que ya sobre el río se vuelve espuma blanca. Rocío Ávila oye a su vecina y se detiene. Su casa, frente a la corriente, es el refugio de los dos nietos que cuida cada tarde: “Les digo: por las ratas, ustedes de aquí no salen”. Desde su nacimiento hace 59 años habita la colonia La Concepción, que hasta tiempos del regente Ramón Aguirre (gobernó la ciudad de 1982 a 1988) era el delta de los ríos Magdalena y Batán: “En el velorio de mi hermana estaban todos rezando el rosario y entró una rata. La gente gritaba”. — ¿Cómo era aquí cuando usted era niña? — Pasaba el agua limpiecita. “Agua limpiecita” también prometieron la Secretaría del Medio Ambiente del Distrito Federal (Sedema) y el Programa Universitario de Estudios sobre la Ciudad (puec) en 2007, cuando la unam y la uam lanzaron un “plan 34 35 FOTO: Gabriel Hernández. maestro de salvación” que dirigió el investigador Manuel Perló (quien no respondió la solicitud de entrevista). Cinco años más tarde, la rehabilitación se hizo realidad y estuvo integrada por 250 proyectos, entre parques lineales, centros comunitarios, restauración de puentes coloniales, entubamiento del drenaje —entonces a cielo abierto— y plantas de tratamiento (esa parte del proyecto no se completó). Las autoridades involucradas prometieron que fluiría agua pura desde el Parque Ecológico Los Dinamos. En la Plaza La Conchita aún está la placa que el entonces jefe de gobierno Marcelo Ebrard develó en octubre de 2012: “Esta plaza es un espacio público recuperado por el programa de rescate integral de los ríos Magdalena y Eslava”, indica. Pero a la plaza, con sillas y mesas de cemento, la maniata el vapor hediondo del agua que se desprende del lecho y que asciende a donde avanzan los peatones. “Ponemos alimento envenenado, pero las ratas suben a donde los niños juegan —se queja vociferando Emmanuel Aguilar, padre de familia de 30 años que descansa en un puente sobre el agua—. Esto se volvió imposible por la gente… Todavía conectan sus drenajes al río”. No miente: en varias calles de las colonias San Nicolás, La Concepción y otras, los drenajes clandestinos derraman las aguas residuales de las casas al río Magdalena. Bajo el Sol y sin disimulo dos ratas comen sobre una roca frente a la calle Canal, en la que Flora Rivera, de 66 años, acepta abrir la puerta. — ¿Por qué no se conecta al drenaje legal en vez de tirar todo al río? — Yo rento, que la dueña opine. — ¿No le gustaría un río limpio? — Claro, si fuera mi propiedad, pero desde 1999 rento. El parque lineal construido hace tres años parece víctima de un bombardeo: a las luminarias empotradas en el piso les robaron los focos, los juegos infantiles están rotos y grafiteados, los senderos desaparecen bajo la basura, las placas explicativas sobre el valor ecológico e histórico de la zona están rotas o pintarrajeadas, y en el río hay islotes de desperdicios pútridos. De los 400 millones de pesos que, según se anunció, serían destinados desde 2012 al rescate del río Magdalena —cuyo curso tiene 28 kilómetros— ya sólo queda abandono. De trajes sepias, botas de hule y gorras, nueve personas chapotean en las aguas negras a unos pasos del Hospital de Gineco Obstetricia 4 del imss: jalan cuerdas, hunden machetes, clavan hoces y levantan trinches para llenar costales con las toneladas de basura que, tres veces al año, la Cuadrilla de Barrancas de La Magdalena Contreras extrae del río para disimular la tragedia. — ¿Qué han encontrado? —Perros, gatos, caballos destripados y hasta puro en su origen El río Magdalena inicia su recorrido en el bosque templado del Cerro de San Miguel, en Cuajimalpa, pasa por Los Dinamos y atraviesa la mancha urbana de la delegación Magdalena Contreras, donde en su cruce con Periférico —dentro de la Presa Analzo— está entubado. Reaparece a cielo abierto en los Viveros de Coyoacán y concluye al unirse bajo tierra al río Churubusco. Recibió su nombre porque frailes dominicos fundaron en sus orillas el pueblo de María Magdalena Atlitic a petición de Hernán Cortés. Durante la conquista, de 1525 a 1569, el río fue parte de los dominios del cacique indígena Juan de Guzmán Ixtolinque, Señor de la Villa de Coyoacán. Sirvió de inspiración a Juventino Rosas para componer el vals Sobre las olas. 36 CA— ¿El gdf aún descarga su drenaje en el río? MAC— Sí, y estamos pidiendo mayor coordinación al Sistema de Aguas (sacm), la Secretaría del Medio Ambiente y las delegaciones. difuntos —se ríe la trabajadora Cristina Estrada—. Vimos en Los Dinamos dos cadáveres en el agua, y otro se apareció en Avenida Querétaro. — ¿Quiere ver algo feo?, pregunta Elena Reza, jefa de la brigada. — Dígame. — La Barranca de Atacaxco. Le hacemos caso. En lo más elevado de la delegación Magdalena Contreras, un enorme tubo de concreto descarga sobre el río, desde unos 20 metros de altura, un incesante chorro de aguas negras. Las riberas son larguísimos depósitos de basura acumulada desde hace unos 30 años, cuando la Barranca de Atacaxco dejó de ser una gloriosa cascada de agua transparente para volverse un espejo negro de aguas infectadas con misteriosas costras de espuma. De las copas de los árboles cuelgan bolsas de basura hechas jirones. Los niños de la Primaria Gambia eluden la inmundicia por el puente donde Germán García, de 60 años, vende ropa usada. “Hace medio siglo, los niños tomábamos de esta agua que viene del manantial de San Bernabé. Había milpas y magueyales, pero como el camión de basura pasa sólo una vez por semana, la gente empezó a echar aquí sus desechos. Vea qué se hizo de esto”, dice mirando el cerro forrado de casas de tabique. “Aquí se tira basura, llegan aguas negras, animales —precisa su esposa Micaela—, pero lo peor es que nuestros niños juegan en medio de la porquería”. Adelante, pintada en el muro protector de la barranca, la cara de un marrano acompaña una frase: “No tiren basura, pinches puercos. Los vamos a agarrar”. CA— Hay casas que vierten su drenaje clandestino al río. ¿Por qué invirtieron tantos millones en limpiarlo si los desagües caseros seguirían cayendo? MAC— Pues sí, no tiene sentido. CA— ¿Hay un cálculo de las descargas clandestinas? MAC— No. Y hay que ver dónde están. CA— ¿Quién lo va a ver? MAC— Problema complicado. Hay incluso buenos fraccionamientos (residenciales) que descargan en las barrancas. Le he preguntado (al titular del sacm, Ramón Aguirre) cuánto falta para concluir la obra y me dice: “Son 50 millones de pesos, no tengo los recursos”. CA— Es decir, las cosas seguirán igual. MAC— Es nuestro último río vivo. Vale la pena invertir. CA— Niños juegan al lado de ratas. MAC— La fauna nociva no es nuestra competencia. CA— Vecinos de la colonia Atacaxco, donde el río está más contaminado, dicen que el camión de limpia pasa sólo una vez por semana. Es comprensible que prefieran aventar basura a un río de por sí contaminado que acumular basura en casa. MAC— No se ha logrado la coordinación. Tienes razón. “Es una porquería”, procurador CA — En 2012 el Gobierno del Distrito Federal (gdf) inició las labores de rescate del río Magdalena, y hoy es una calamidad: senderos y áreas infantiles destruidas, ratas. ¿Qué pasó?, pregunto al titular de la Procuraduría Ambiental y de Ordenamiento Terrirorial (paot), Miguel Ángel Cancino. MAC — No se completó la planta que potabilizaría agua cerca del Hospital Ángeles, ni la planta de tratamiento que descargaría agua limpia al cauce. La obra (el plan maestro de salvación) se hizo sin control adecuado. Y falta compensar los árboles que se derribaron. ARTÍCULO CA— Hay miles de toneladas de basura en el río. ¿Cómo sacarlas? MAC— Creo que no me estás hablando del río Magdalena. CA— La parte de Atacaxco es impresionante: son montañas de basura. MAC— Déjame localizar ese sitio, dice el funcionario y abre Google Maps. Esto es una porquería —admite señalando un tramo del río—. Es tan complejo... Pero te prometo que nos daremos una vuelta por Atacaxco para conocerlo. 37 Río Magdalena. El último río vivo del DF agoniza MIS PRIMEROS DESASTRES A POR JULIETA GARCÍA GONZÁLEZ | @julietaga 38 los veintidós años, con unos días de casada, empaqué mis escasas pertenencias, subí a mi auto y agarré camino al Norte, rumbo a la Península de Baja California. Llegué a la ciudad de La Paz bajo las siguientes condiciones: 42 ºC a la sombra, techo de asbesto, piso de cemento. El amor es una fuerza muy poderosa y, tras el primer golpe de calor, asimilé al puerto y su tranquilidad como parte de mi vida. El Sol quema la región más distal de Baja California Sur durante siete meses del año con intensidad épica. Cuando caía sin misericordia sobre el pavimento y los edificios chatos, cuando se reflejaba —con poder duplicado— en las piedras claras que parecían pulidas y que se deslavaban del monte en la temporada de huracanes, lo prudente era huir. En vez del favor del dinero, tuvimos el de la juventud. En los ratos libres explorábamos los recovecos de esa tierra casi virgen. La arena de las playas es blanca, finísima y delicada. Podíamos caminar mar adentro por cientos de metros sin que nos llegara más allá de la cadera. De esta manera conocí y amé las aguas y los seres que estudiaba mi esposo en la universidad. Juntos, aprendimos a negociar con las condiciones del entorno. Buceábamos con equipo en pésimas condiciones, prestado, o bajábamos a más de 20 metros de profundidad con el aire de nuestros pulmones. Estas salidas se volvieron una adicción, buscábamos cualquier pretexto para organizar una, solos o acompañados. Buceamos con tiburones ballena y mantarrayas gigantes; vimos tortugas marinas viajar en mar abierto con su mirada meditativa; conocimos los jardines de anguilas y jugamos con lobos marinos. Los delfines nos acompañaron y abrazamos una vez un cachorro de elefante marino. Fue en una de esas expediciones que llegamos a Punta Perico, un lugar rocoso rodeado de una lengua de arena y pequeñas calas. Éramos cinco o seis, equipados con esnórkel, aletas, toallas y sombrillas. En cuanto bajamos a la arena, supimos que algo no estaba bien. Lo que vimos nos paralizó: las aguas no eran claras, sino carmesí. Las pequeñas olas que se formaban para reventar contra las rocas mecían a cientos de tiburoncitos, muertos, ahogados. Tomamos unos y no supimos qué hacer con ellos. Los lanzamos de nuevo al agua y observamos la mancha roja extenderse largamente. Un pescador pasaba por ahí con sus redes y su piel tostada. Le preguntamos por la insólita mortandad de esos seres. — Es que los necesitan para hacerlos sopa, nos dijo con el acento del norte. — ¿Sopa?, preguntamos. — Sí, de aleta. En la dinastía Ming, la sopa de aleta de tiburón era considerada una delicia sin igual, exclusiva para ricos y celebraciones especiales. Los siglos xix y xx vieron crecer su popularidad y accesibilidad en China, Japón y otros países. Para prepararla hay que atrapar a los tiburones vivos, cortarles las aletas, ingrediente fundamental, y dejarlos ir. Caen al agua incapaces de moverse. Inhabilitados para nadar, mueren de asfixia. Son seres ovovivíparos: las hembras preñadas liberan a los fetos como un último recurso para la supervivencia y el oleaje los arrastra hasta la playa. En las tranquilas aguas peninsulares, pescadores locales o extranjeros buscaban su propia forma de supervivencia satisfaciendo un mercado voraz. Esos seres muertos, imprescindibles para mantener el delicado ecosistema marino, nunca aparecieron en los diarios o en la televisión: era una masacre cotidiana, una forma de generar recursos en aguas pródigas y silentes. Las tragedias ambientales que llaman la atención aparecen con escándalo en los noticieros: un derrame obvio, petróleo sobre pelícanos. Pero son el abuso cotidiano de los recursos y la ruptura sistemática del entorno lo más grave. Los biólogos en formación me enseñaron el significado de esos tiburones muertos. No sólo eran vidas sacrificadas por un plato de sopa, sino la desaparición de lo que los científicos conocen como especies clave. Vivos, equilibran los mares y honran las aguas. Nunca olvidaré el tono del oleaje, los pequeños seres inacabados flotando en él o el rostro impasible del pescador: el de quien enfrenta la verdad porque no queda de otra. MIS PRIMEROS DESASTRES 39 El mar y la sopa PARALIPÓMENOS La ecología oscura o la nueva visión de los vencidos (I) POR DANIEL SÁNCHEZ POITEVIN @Dapoitevin F ue la Conferencia de las Partes (cop 15) —celebrada en Copenhague en 2009— la que probablemente acabó con el movimiento verde como se conocía hasta el momento. El mundo entero estaba a la expectativa, reinaba la confianza de un acuerdo planetario total; acudieron celebridades, líderes tanto de la sociedad civil como de la esfera política. Fuera cierto o no, aquella pequeña ciudad era la meca de la nueva conciencia político-ambiental, pero nada pasó. Todos volvieron a sus casas con las manos vacías. Lo que se inició en 1992, en la Cumbre de la Tierra en Río de Janeiro, ha sido un recorrido que no sólo ha empeorado los problemas que se plantearon en aquella prometedora cumbre, pasando por un inútil Protocolo de Kioto, sino que también ha degradado el pensa- miento y el activismo verde. Después de Copenhague no hay más cumbres anuales que alguien atienda; los acuerdos no son más que borradores retóricos que han estado empantanados por lustros. El movimiento verde ya no existe. Para Paul Kingsnorth, ex editor de la revista The Ecologist, este movimiento no sólo fracasó —participó en él durante años—, sino que ahora los verdes, o como él les llama, los neoecologistas, están en contra de todo el movimiento conservacionista de hace 50 años y califican de ingenuos tanto el pensamiento como el enfoque de los verdes antiguos. Para él, los neoecologistas tienen razón, y acaso ése es el drama de todo esto: Llevan razón al decir que los planteamientos convencionales a escala humana de aquellos pensadores de los 70 van a funcionar jamás si el mundo continúa formulándose a sí mismo de acuerdo con las exigencias del industrialismo capitalista tardío. Llevan razón al decir que un mundo de 9 000 millones de personas, todas tratando de alcanzar el estatus de consumidor de clase media, no puede sustentarse en las estrategias locales. 1 La frialdad de los neoecologistas expone la ingenuidad de los viejos verdes. Argumentan además que la idea de preservar la naturaleza impoluta no es más que “un sueño anticuado que frustra nuevos planes 40 para salvar el medio ambiente”.2 Bastan las declaraciones del renombrado director científico de The Nature Conservancy —probablemente la organización más importante de conservación que existe en el mundo—, Peter Kareiva, al decir que “no es un defensor de la biodiversidad” y que la prioridad es “el mejor manejo de la naturaleza en beneficio humano”. Sin idealismo: “no sean estúpidos, [lo más importante] es la gente”.3 Las soluciones se centran en la sustentabilidad, cuya mano no debe soltarse de la ciencia y la tecnología; se trata del desarrollo y el progreso basados en el avance de la geoingeniería, los cultivos transgénicos, la tecnología renovable a gran escala, la biotecnología. En efecto: se trata de “el mejor manejo de la naturaleza en beneficio humano”. En este sentido, señala Kingsnorth, “el capitalismo ha absorbido a los verdes”, 4 pues son la economía y la industria —responsables del problema— quienes deben plantear la solución: no se trata de no contaminar, sino de contaminar igual, pero pagar impuestos por hacerlo; que se llenen los campos con aerogeneradores eólicos, con tal de no disminuir el consumo de energía. Para este periodista, si bien los neoecologistas tienen razón en la crítica al viejo discurso verde, no la tienen en el remedio. Finalmente, los dos discursos coinciden en que hay que hacer algo ante el deterioro ambiental, y sus soluciones son caminos diferentes y opuestos. La nueva lucha verde es una especie de traición, según los ideales pasados. Desde el punto de vista crítico, tienen razón; sin embargo, para Kingsnorth PARALIPÓMENOS el progreso tiene una trampa: éste no es un avance, es la solución de un problema, pero que intrínsecamente genera nuevos problemas: Los cultivos genéticamente modificados son un intento de solucionar los problemas causados por la anterior trampa del progreso: y también son la siguiente. […] Dentro de 40 años los sucesores de los neoecologistas utilizarán el mismo razonamiento sobre la necesidad de una nueva oleada tecnológica capaz de sacarnos de la trampa en la que tan hábilmente nos han hecho caer los cultivos genéticamente modificados.5 Según Paul Kingsnorth, no hay una salida optimista. Después de más de 20 años de servir al movimiento verde e intentar cambiar el mundo, acepta que el cambio climático es irreversible y el daño que la humanidad causa a la biosfera, sea reversible o no, no dejará de suceder por el hecho de que nadie renunciará a su estilo de vida y de consumo para mejorar las cosas. “Si no sientes desesperación en momentos como éste, es que no estás vivo del todo […] Éste es mi planteamiento actual. Supongo que es el desarrollo de una filosofía personal para un periodo oscuro: una ecología oscura. Nada de esto va salvar al mundo: no se trata de salvar al mundo […]”. 6 De modo que la posición de Kingsnorth, de ahora en adelante, es de negociación, negociar el modo en que uno va caer. ¿Qué queda después de asumir el fracaso de la civilización, de aceptar que no queda salvación posible? En la segunda parte de este artículo, hablaremos del surgimiento de esta ecología oscura y del oscuro proyecto que de ésta emana. 1 Kingsnorth, Paul, Ecología Oscura. Buscando certezas en un mundo post-verde. 2013. 2 Kingsnorth, Paul, op.cit., p. 10. 3 Citado de mundotnc.org/como-trabajamos/peter-kareiva.xml 4 Citado de George Monbiot en monbiot.com/2010/05/10/mon- eys-hunger 5 Kingsnorth, Paul, op.cit., p. 14. 6 Ibid., p. 18. 41 La ecología oscura o la nueva visión de los vencidos (I) 42 PORTAFOLIOS HALLAZGOS INVISIBLES POR MÓNICA HERRERÍAS P ortraits es una serie que Janelle Lynch (Nueva York, 1969) empezó a fotografiar sin una cámara. Inspirada por las reflexiones del agricultor y escritor estadounidense Wendell Berry, Janelle se dio tiempo para explorar el paisaje de múltiples formas antes de decidirse a retratarlo. Necesitó escucharlo, sentirlo, olerlo, tocarlo y observarlo para después congelarlo en el tiempo. El objetivo era vivir una primera experiencia de conexión con el entorno; fundirse en él para verlo diferente. Los pimpollos y árboles de higos a las orillas del río Llobregat y del arroyo Rubí —a las afueras de Barcelona— atrajeron la atención de la fotógrafa. Los objetos, la vegetación y los desechos que al paso del tiempo, del viento y de los incesantes movimientos del agua se fueron adhiriendo a los árboles, fueron para Lynch las señales y rastros de los ausentes. Por ello, era natural asignarles a aquellos árboles —a sus retratos— características humanas de edad o género por lo que quedaba enredado en sus ramas. Luego de 20 años de trabajo continuo, la artista ha desarrollado una visión personal de su relación con la natuPara conocer otras series de la fotógrafa, visita: janellelynch.net 43 raleza. No necesita retratar seres humanos para hablar de ellos y de su polémica interacción con el entorno. La intensidad de sus imágenes se explica por el sencillo hecho de que capturar la naturaleza es la última etapa de un largo proceso creativo de observación ligado a una labor personal introspectiva. Amante del gran formato y con un agudo sentido de análisis, Lynch logra en su trabajo lo que para Berry todo fotógrafo debe anhelar: encontrar lo inesperado y lo que no puede anticipar. Así, cada imagen de Portraits, mientras más se observa, más significados despliega. Distintas capas de sensaciones, temas y lecturas que tienen que ver con los ciclos de la vida y la ausencia, el deterioro y la pérdida, están ahí, a punto de aparecer. Sólo hay que observar para que se manifieste lo invisible. 44 45 46 47 OBITUARIO ILUSTRACIÓN: Eduardo Ramón Trejo. POR NATALIA ÁLVAREZ | @Pimiientta Fuentes: Conabio | NOM-059-SEMARNAT-2010 I unam. Crónica ambiental | julio 2015 13
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