Memoria Nihon University - Universidad de Córdoba

MEMORIA BECA UCO GLOBAL NIHON UNIVERSITY (JAPÓN)
PREPÁRATE QUE VIENE JAPÓN
El título de este relato fue una de las primeras frases que me dije cuando la Universidad de
Córdoba me eligió para el programa de movilidad internacional en la Universidad de Japón.
Tómalo al pie de la letra y ponte a estudiar japonés lo antes posible porque el tópico del
idioma se convierte en la mayor barrera a derribar, pues, en contra de lo que pensaba, no es
tanta gente la que habla inglés en el país del sol naciente y las dificultades pueden ser
grandes desde el principio.
La Facultad de Economía está ubicada en el distrito de Suidobashi-Jimbocho a unos veinte
minutos en metro (Mita Line) desde Itabashihoncho, donde se encuentra la residencia de
estudiantes. The College of Economics es un complejo de edificios bien comunicados entre
ellos, cuenta con una moderna sala de ordenadores con impresoras y scanner “self service”,
biblioteca, salas de trabajo en grupo, espacios reservados para actividades deportivas, buen
acceso a la oficina de relaciones internacionales y la posibilidad de comer por 3 euros a
elegir entre una variada oferta en la cafetería de la facultad.
Todas las asignaturas que se ofertan para estudiantes de intercambio son en inglés, siendo el
ambiente muy agradable. La cordialidad y extrema educación es un rasgo muy marcado de
la cultura japonesa.
A tan sólo dos paradas de Jimbocho, tomando Shinjuku Line, está el distrito de Ichigaya
donde se encuentra la Facultad de Lenguas y Humanidades de Nihon University, edificio
reservado para las clases de japonés. El curso de japonés comienza la tercera semana de
mayo y dura hasta el 30 de Julio. Son dos meses y medio de enorme exigencia y estudio
intenso de la lengua japonesa puesto que son quince horas semanales con una programación
apretada de test (Vocabulario, dictados, Kanji y gramática) y tareas casi diarias.
La residencia, ubicada en el distrito de Itabashihoncho, es adecuada para lo que el
universitario precisa, incluyendo desayuno y cena, que para mí es todo un lujo
(Exceptuando el Domingo). El personal es muy cordial y agradable, en especial, la
encargada de la cocina está siempre pendiente de las necesidades de todos y se interesa si la
comida que se sirve es de agrado.
La cocina japonesa es muy variada y aunque Tokio es una capital cara, sobre todo en el
sector servicios, es posible comer por 23 euros un bowl de arroz con carne y salsa de soja
que está delicioso. Hay vida más allá del sushi en la gastronomía japonesa, entre lo más
destacado está el ramen, udon, tempura, soba, gyudon y un largo etcétera.
El coste de la vida en Tokio es alto en general, concretamente la oferta de ocio y transporte
por la ciudad, aunque hay opciones para todos los públicos, se puede comer desde 3 euros
hasta lo que se quiera imaginar y la opción más barata tiene una gran relación calidadprecio.
Personalmente, venir a Japón suponía el reto más ilusionante que me he propuesto. En un
principio era para un semestre pero extendí el acuerdo para quedarme un año entero. Vivir
en Tokio, que es una de las capitales más modernas y desarrolladas del mundo, participando
en la Universidad y teniendo la oportunidad de conocer gente tan diferente es una
oportunidad única y un privilegio que intento aprovechar al máximo.
Esto no quiere decir que todo sea fácil, no son pocas las ocasiones en las que alguien puede
llegar a sentirse solo, ya que el choque cultural es grande, la manera de hablar, de
interactuar los unos con los otros o la sensación de lejanía cultural puede provocar
incomodidad. Pero nadie dijo que fuera sencillo, es un reto a superar con determinación y
constancia, poco a poco, día tras día; cuando pasa un tiempo se ven los frutos del sacrificio
de estudiar un idioma tan distinto, con un nuevo alfabeto, que en mi caso aprendí desde
cero, y de memorizar mucho sin tener ninguna conexión con la lengua materna. Con todo
ello, Japón es todo un apasionante mundo por descubrir.
Debo decir que tras unos meses de experiencia comienzo a apreciar evolución e integración
personal en la cultura japonesa, seguramente a baja intensidad pero los proyectos requieren
tiempo y esfuerzo, no se puede abandonar a los primeros síntomas de debilidad o hastío.
No quisiera despedirme sin agradecer sinceramente a la Dirección del Máster de Comercio
Exterior e Internacionalización de Empresas y a todo el personal de la Oficina de
Relaciones Internacionales de la Universidad de Córdoba por todo el apoyo y la confianza.
Carlos Javier Diéguez Duvá
Movilidad Internacional Nihon University
Máster en Comercio Exterior e Internacionalización de Empresas
Universidad de Córdoba