IUJSTIÍACION P ^ AMERICANA ' i^ PRECIOS DE SUSCRICION. AÑO XVII—NÚM. XVI. i; PRKCIOS DE SUSCRICION. ¡i ANO. SEMKyTliE. 35 pesetas. id. 40 8 .400 reis. Madrid Provincias.. . . Portugal 18 pesetas. id. 20 4.300 reis. TRIMESTRE. 10 pesetas. i(l 11 2.300 reis. DIRECTOR-PRCriETARIO, D. ABELARDO DE CARLOS- Cuba y Puerto-Pico.. , . Filipinas ADMINISTRACIÓN, CAKRETAS, 12, PRINXIPAL, Madrid, 24 de Abril de 187S. : 12 pesos fuertes. 15 id. 7 pesos fuertes, 8 id. En las demás Areéricas fijan el precio los Sres. Agentes. SUMARIO. TE*TO.—Revista general, por X>. Peregrín García Cadena.—Viaje alrededor de la Exposición universal de Viena , por un caballero español.—Nuestros grabado?, por don Eusebio Martínez de Velasco.—El eminentísimo Sr. D. Miguel García Ouesta. cardonal arzobispo de Santiago, por D. Enmon Nocedal.—Achaques y flaquezas económicas del reinado de Felipe IV (continuación). porD. Modesto Fernandez y González.—La palmera, por D. F. J. G.—El sueño de un justo, cuento (continuación), por 1). Carlos Rubio.—Los primeros buques de hierro, por D. Vicente de Arana.—Temores iusüücaüos, poesía, por D. L. Sipos.—El sueño del mártir, poesía, por D. José Amonio Gaicano.—La novela de un joven rico (continuación), por D. Carlos Frontauni — Nuevo aparato para ensayar los vino-, que indica wn gran exactitud su riqueza alcohólica — Anuncios. GKABADos.-Retrato del Emmo. Sr D. Miguel García Cuesta, cardenal arzobispo do kuitagoans; fotografía del Sr. Lanrent, por lÍ~ , -—Insurrección carlista. Catana»: Heroica defensa de Puigccrdá por "« vecinos de la ciudad; apunte remitido í ' " • G a l r ^ , por los Sres. Pollicer y > POT l o s S r c s B a l n c : i Ca ^ rs at0 y a e l c n r a Sll ta , » ci-nz, caar St! ; f o t raf p í " g i ^ e l Sr. Laurent, / r S -e r~u 3No sa TC!a r r a : Llegada de un í "-»8tas á Onda-rúa, f í . r e r r a " ? Hico.-Murcia: Palí subíendo á macluar las palmeras, u f- , P e i O a y "ioo—Bellas artes : v?,,* S '•»*"•"•<«. ™ Madrid; cuadro por los Sres P m Tf ' - " y ««- flbrie"', : aTb, ao lnl oe rse S d 0 Poetización aez T-f minerales do los 6 ^ Vaa' ¿¿t ° r S °llcCoT yS Cou.pañia, por los * a s t a d e caballos «lelas cíhiii rcales . P»r los Sres. Com° g a d e u u b u ' l " e negrero, P ST teet l ^marroquíes : El 'finger, por los se•—Nuevo aparato •a alcoliúln a ile los ir «mi, a , ? R EVISTAJÍENERAL. r T - M , , c i í s t i 0 1 1 electoral en odi;üS y s. _ fit- m a S comunistas pracli- L a ffnrm ,. u o t i cins olíctoranve? alidad ,lel ? ° alidd l l Gobierno cat Wn«w ^ t r o f e del vapor lCulliou dKl r^snro '«•'!"• 1Io P 4eon T S dCl di P"^do señor K ? d . de viene á turbar de Enimo. Sr. D. Miguel García Cuesta, cardenal arzpV'iaPO *.; Santiago : f U del actual. Siguiente LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. 250 Volviendo á la cuestión Barodet, que es en estos vez en cuando el reposo que lia encontrado la Franmomentos la que absorbe en primer término la atención cia en el Gobierno reparador ile Mr. Thiers, La cuestión electoral , que en estos momentos absorbe el ín- de .Mr. Thiers. todo parece indicar, según las últimas teres do la política en la vecina república , ofrece un impresiones qnc nos ha comunicado el telégrafo, que si incidente que despierta profundos recelos en aquel Mr. de Kemusat mide sus armas con el celebérrimo país, dondo todavía, no so lian enfriado las pavesas de cx-niaestro de escuela destituido y ex-alcalde de Lyon, que sembraron la metrópoli de la cultura moderna los el primero será derrotado por el candidato de la demoincendiarios del 18 de Marzo. El recelo se funda esta cracia parisién. Para prevenir tan desagradable continvoz en la circunstancia de que los periódicos radicales gencia, el Gobierno de la república busca la cooperahayan publicado la candidatura del ex-aleahle de Lyon, ción de los hombres inlluveutes de París, prometiendo Mr. Barodet, por designación do un Comité de estudio, una declaración del ministro mencionado cu el sentido que, pertenece, al parecer, al COIIJMO eleetoral ir¡>irf'li- do la política del mensaje, á condición de que Mr. Barodet retire su candidatura de la capital y la presento cemo del departamento del Senn. Este documento es muy semejante, por su índole, á en Lyon. Asi, pues, la inlluencia populachera del insigne los que circularon en París antes y después del corto, pero sangriento imperio de la Coiiuitunc. Xo está hr- Mr. líarodet está poniendo en grave conllicto el ascenmado, no se sabe quien constituye los centros do acción diente de Mr. Thiers. Está visto que han llegado los de donde ['arte esta iniciativa electoral, ni do qué elec- tiempos de acción para las pequeñas entidades intores procede el mandato , pero se ve que las órdenes aprensivas y bulliciosas. Mientras se resuelve esta cuestión de intluencia enexpedidas por este Coeaité de estudio y este misterioso tre el primer ciudadano de la república francesa y el Cowjreao ehetoral, se acatan por los iniciados y revelan patriotero lyonés, la Francia va extinguiendo religiouna vasta organización. samente su deuda con la Prusia. El dia 5 del actual el El Gobierno de la república francesa se lia puesto en guardia contra estos amagos que recuerdan exacta- Gobierno de Bcrlin ha recibido "250 millones de franmente los signos (pie precedieron al advenimiento de la cos á cuenta del cuarto millar de la indemnización de Coinmune, y lia anunciado su propósito de sostener con guerra. El diario oficial de Versallcs ha dado esta notodas sus fuerzas la candidatura de Mr. de Remusat en ticia, añadiendo que con la cantidad mencionada ascienden á 750 millones los que la Francia ha satisfecho contra del ex-alcalde de Lyon. Xo es maravilla que estos gérmenes latentes de anar- ya á cuenta del millar indicado. Este quedará extinguiquía intemacionalista, unidos á las impresiones no me- do con otros 2¿ü millones, y el Gobierno de Mr. Thiers nos desagradables que el Gobierno ii anees recibe dia- habrá dado con ello una muestra muy elocuente de la riamente de este lado de los Pirineos , intluyan cada eficacia y del patriotismo con (pie se ha consagrado á dia más en el ánimo de Mr. Thiers, y le obliguen á vi- sacar airoso á »u país de los compromisos contraídos á gilar con un ojo los síntomas anárquicos de su país, consecuencia de la lucha más desastrosa. el tiroteo de la mayoría de la comisión : llovier y u n t a s , se pidieron explicaciones sobre diversos s públicos y sobre actos del Gobierno; y y con, Ministro de la Gobernación no se hallase en estado d satisfacer ¡i todos, el Sr. Figucrola presentó de ni bra una proposición para que so celebrase el domin "JO del actual una reunión extraordinaria con asisten' de todo el G o b i e r n o , a l i n d e que las preguntas que habían quedado sin contestación pudieran ser satisf chas por los Ministros á quienes iban dirigidas E s t a proposición, escrita después y apoyada p or el Sr. S a r d o a l , fue aprobada, á pesar de los ruegos del Sr. Pi y M a r g a l l , que deseaba aplazar la reunión hasta el jueves, y la batalla quedó en suspenso. La actitud apasionada de la mayoría de la comisión p e r m a n e n t e , y los propósito* manifestados por el señor Piivero de empeñar un debate sobre el estado general del país y el sistema seguido por el Gobierno en las actuales circunstancias, eran causa más que suficiente para que la reunión del domingo se esperase con gran curiosidad. P o r lo que hace ¡i la cuestión de orden público, no puede decirse que haya empeorado en estos últimos dias. El p a í s , sin e m b a r g o , abriga vivísimos deseos de oir de labios del Gobierno los medios de represión que se propone poner en juego para dominar completamente una situación que le crea tan graves dificultades, y ésta era otra causa del Ínteres con que se esperábala próxima reunión provocada por la comisión permanente. Como muestra aun más significativa de la actitud batalladora adoptada por la mayoría do la comisión p t r m a n t o , atribuíase á uno de sus individuos, el señor mientras con el otro sigue recelosamente las maniobras Mompeon, el firme propósito de levantar su voz para socialistas de Extremadura y los sucesos poco tranqui! pedir la reunión de la Asamblea. La especie ha sido lizadores de Málaga y del Principado. Las grandes catástrofes menudean. Los periódicos muy mal acogida por los amigos de la situación, y La extranjeros insertan ya algunos detalles sobre el nau- lijmtltli.nl, órgano de una parte del Gabinete, la ha retragio del vapor At/áuttcn. Los pasajeros y tripulantes cogido para anunciar á los radicales de la comisión que, Se ve, pues, que el fantasma de la Internacional ca- de este limpio eran 1.UÜ8, según los despachos de F i - -i á pesar de la actitud de los Diputados republicanos balga sobre los picos de los Pirineos, amagando por ladellia, y de ellos solo se salvaron o00 , gracias á una y conserva loros |u,. forman parte de ella, insistiesen en ( uno v otro lad<> á los dos pueblos hoy más albgidos cuerda que [indo ocluirse entre la roca donde se estrello la idea de realizar o.-te pensamiento acariciado y sosde la raza latina, y no hay necesidad de encarecer el buque, y la orilla del m a r , distante 200 pasos del tenido por sus correligionarios, sobre ellos pesaría!» cuánto importa á estos dos países, tan castigados por la [merlo de 1 lalifax. ! responsabilidad de. las desgracias que de tal resolución insensata propaganda cor. que hoy so despiertan los L a causa del siuicslro tue el error fatal en que : e j pudieran originarse. ciegos instintos de las masas, combatir por todos los incurrió al tomar por el ¡aro de Sambru un fuego lejaLa .moción , á nuestro juicio inoportuna y peligrosa, medios una plaga social (pie tanto contribuye á des- no que divisó el buque, y (pie se hallaba situado d e s del Diputado r a d i c a l , no se llevó á efecto, cornos» prestigiar á los ojos de las clases conservadoras el ejer- graciadamente en un punto erizado de rocas y escollos. creia, en la reunión del 17. No sabemos si ol silencio del cicio de las instituciones libres. Todas las armas son L a destrucción del vapor fue instantánea. Llevaba ¡i Sr. Mompeon obedecería al propósito d-- desistir del» pocas liara combatir á ese fantasma, en quien la ignobordo muchos alemanes, alsaciauos irlandeses é imrle- idea, <', al tle esperar la presencia de todo el j l w l s t e ^ rancia del iluso proletarismo cree ver un nuevo Meses, en su mayor parto colonos de Nueva Escocia. para, explanarla. El asunto preocupaba mucho los ánisías ; tóelas las armas son buenas , inclusa la de la sáLos últimos m o m e n t o s , bien fugaces por cierto, de mos en los círculos p o l í t i c o s , y contribuía á acrece tira. los pasajeros, lueron terribles. Tan luego como se ob- tar el carácter de gravedad (pie se atribuía á la reunió" A este propósito se nos viene á las mientes una no- servo el peligro, (pie sin duda las tinieblas de la noche del dia 20. ticia (pie hemos leido estos dias en un periódico de uo permitieron observar á tiempo , se dio orden p a r a París. que se cerrasen las puertas de los camarotes; pero los (}H aloman, dice el colega francos á que nos referi- ; viajeros las derribaron á golpes y se lanzaron sobro La institución del durado ha comenzado á funciona mos, ha escrito una obra que traslada al lector al año ' cubierta. Los entrepuentes se llenaron de a g u a , y t o - en España. La primera audiencia se verifico el ^ l'JO'J y en la que se relien; la caida del último rey que das las personas que se hallaban en olios perecieron en el antiguo salón destinado en otro tiempo al J u para muestra de esta combatida institución quedaba en instantáneamente a h o g a d a s , no escuchándose sus la- para la prensa. La nueva institución se inaug el mundo. El autor escribo una epopeya para relatar este mentos sino por espacio de dos minutos. Cuando el el juicio público en la causa criminal contra sucoso notable, que en su dictamen ha de ocurrir antes de buque se abrió por completo, los cadáveres de más de Alvares:, por homicidio en la persona de Alv" 1 la fecha mencionada. Pues bien, este libro ha inspirado á 700 víctimas fueron arrastrados por las a g u a s , siendo perpetrado al anochecer del 1." de Xovi un autor la idea de escribir una parodia titulada /•>'/ úl- los primeros los de las mujeres y los niños. 1872. En la primera audiencia tuvo lugar timo to'Ho, cuya acción se coloca en el año 1880 , en cuya L a catástrofe del Atlántico es una de las más t e r r i - de ios jurados entre los treinta y seis que t época supone el autor que los pueblos se habrán conbles que registra la crónica de los numerosos y lamen- ron al a c t o , quedando elegidos los doce primea i vencido de que es imposible vivir sin trabajar, de que .]„„. tables accidentes ocurridos en el mundo en estos últi- salieron de la urna. el repartimiento de la propiedad no duraria más allá de las veinticuatro primeras horas, y do que el comunismo y la Internacional son dos absurdos de que sacan parli<lo unos cuantos tahúres para fundar \m muda* cimttli sobre la ignorancia de millares de obreros y explotar lo que tiene de seductora para la humanidad en general la idea de vivir holgadamente, sin hacer nada. El libro es oportuno; por desgracia los libros están de más para enfrenar el comunismo práctico, instintivo y perentorio de ciertos grupos avanzados como los que en España ensayan .sobre el terreno, ó mejor dicho, soLre los terrenos, la virtud del sistema, y contra ésos no procede más correctivo que una enérgica represión. Anterior mos tiempos. E n el interior , la atención de los círculos políticos se ha lijado estos últimos días cu la actitud de la comisión permanente d é l a Asamblea, á quien s c a t r i l m i a ol liniie propósito de exigir al Gobierno amplias y e x plícitas declaraciones acerca de si so halla resuello ¡i terminar el estado de desconcierto cu ( oio se encuentra el país. La reunión celebrada ol dia 17 , y (pie por la causa expresada se esperaba con cierta ansiedad, ofrec i ó , en efecto, un carácter de marcada oposición á la política del Gobierno. El Sr. P í y M a r g a l l , único M i nistro que representaba al Gobierno, tuvo que sostener Inicio .Recibido el juramento á los Jurados por el 1» te de la Sala do lo criminal de esta Audiencia, s I). Emilio B r a v o , so procedió al examen de los te presentados por ol fiscal Sr. .Moreno de la Riv»,? pues á los ,1o descargo presentados por la defensagiiidanicnte, el sentir fiscal formuló su acusación^ diendo so declarase culpable al procesado del ^ homicidio , sin circunstancias atenuantes m a-, En la segunda audiencia, la defensa pidió q"e. clarase la inculpabilidad del acusado, o se ai su favor la concurrencia de dos circunstancia5 tos, á sabor: la embriaguez y el arrebato y cion. El procesado, hombre de unos cuarenta an Siguiente ^ ^ ^ ^^ . ^ . LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. N.° XVI 251 lis ile Madrid en el v e r a n o , que llegáis á Pavona en tra cara os saluda constantemente con vuestro propio primavera, que pasáis por París en cl o t o ñ o , y que os rostro que tanto os g u s t a , ó relleja las golosas [accioespera el invierno en Alemania. nes de vuestra compañera de viaje, que suele gustaros ¿Queréis el itinerario de la comida.' — P e d i d pesca- también. Una estufa de aire caliente despido suave c a lor , que se templa ¡i placer por medio de un tornillo, dos en San Seliaslian. capones en B a y o n a , ostras en Burdeos, pasteles en P a r í s , /<n\:-i/ra.<.< en Slrasburgo, ante el termómetro que os denuncia la atmósfera q u e respiráis. Cojines de alza y baja, convierten en recliy en Alemania pan y manteca. ¿Queréis el itinerario de la bebida.' — 1 Liceos servir natorio vuestro a s i e n t o , en butaca después, en cania sagardúa en San S e b a s t i a n , licor en ITendaya. vino en más t a r d e , y hasta en silla de c o m e d o r , cuando os Burdeos , soda en París . cerveza en Strasburgo . y en acercáis á hi mesa corrida del testero. Por un ochavo al minuto , en fin, h a c é i s , españoles, los tontos ó los Alemania tokav. ; Queréis el itinerario de los rios ? - - M i r a d al Kbro principes por cuarenta y ocho horas ; y ¿ quién (decid19 de Abril. en vuestra p a t r i a , al Adur en los Bajos P i r i n e o s , al nos) lo pasa mejor en este mundo que los príncipes y Pr.iiEiiuix GARCÍA CADKXA. Garona en el país de los g i r o n d i n o s , al Sena en P a r i s , los tontos.' -xal Iihin en S t r a s b u r g o , al Danubio en el término de * * vuestro viaje. La cuestión de idioma es muy interesante en los itiVIAJE ALREDEDOR ,' Queréis el itinerario del liseo .' — Dejaos registrar nerarios. Nosotros no podemos aconsejar al viajero, que en H e n d a y a . casi registrar en P a r í s , registrar, y bien, DE IX EXPOSICIÓN' UNIVERSAL T'V, VI EN* A, para venir á Viena aprenda vascuence, patois. franen Alsácia. registrar muchísimo en la frontera austrocés, alsaciano , alemán y vienes. Probablemente no lo por un Caballero Español. húngara. liana, aunque esto le fuera muy .útil; y como aun ('Queréis el itinerario del curioso ' — V i s i t a d las r e s La Exposición Universal de Viena de 1S7:! va á tauraciones de la Iglesia vieja de Bavona, haced que cuando lo intente no ha de poder realizarlo para el mes abrirse al público dentro de breves dias. l'n caballero iis lleven en París al nuevo parque de C'ltinimoiU. no próximo, preferimos aconsejarle otro sistema , que deje que no tenía nada que hacer en España, ni tenia tam- lalteis á las doce á ver dar la hora al reloj de S t r a s b u r - intacta nuestra re-potabilidad de mentor. Consiste éste poco ganas de que hicieran nada con el , se ha puesto g o , subios por las piernas de la JJucurin en Munich , y en llevar mucho dinero en el bolsillo y derramarlo por toda- partes, con lo cual no dejan de entenderlo en encamino para Viena, con el deliberado propósito de en \ iena en Viena ya os lo iremos diciendo en a d e ninguna. Si al pobre y respetable Sotos Ochando se le referir á los lectores de LA ILUSTRACIÓN' ESTAÑÓLA SUS lante. hubiera ocurrido e-ta idea, no se habría roto los casimpresiones de viaje sobre cl gran concurso industrial ( Q u e r é i s , por último, el itinerario de Cupido.' — cos en busca de la lengua universal. y artístico de la capital de Austria. Mirad a las caras en Guipúzcoa , ¡i los cuerpos en BaHay va dos lenguas universales reconocidas en el Ninguna idea científica, literaria ni filosófica tiene yona , a los pies en P a r i s , en Alsácia á ninguna p a r t e ; mundo : la música y el oro. Con la primera se habla á preconcebida para realizar su intento: por el contrario, y por lo que hace en Alemania , en Alemania lo m e - tod.is las almas, con la segunda se habla ú todos los piensa proceder por lo- métodos más empíricos de la jor es que cantéis misa. cuerpos; v aun juzgamos más eficaz la última, porque t Ja la barba, decentemente vestido ;i lo artesano, y en de que cn yo semblante se 1 c i a la tristeza y la emoción parecía hallarse poseido. ocupaba el banco que le e - l a ba destinado. Habiéndosele concedido la palabra . no q u i só usar de este derecho, en vista de lo cual . el presidente procedió á resumir .'1 debate. El reo fue condenado á trece- años de reclusión con las accesorias correspondientes, y ¡i la indemnización pedida por el señor liscal en favor de la viuda de A l varo Alba. i I ! '• : : i I ' i í- naturaleza : piensa seguir el método de las mariposas, á [IOCO de pronunciarla , cantan y bailan los que la de los perros y de los muchachos.—Picar de llor en flor, oyen. No hay. pues, que temer los idiomas : se compra andar y desandar los caminos , saltar y atrepellar por lo P r m i s t o . pues , ya de estos antecedentes . el viajero (pie no le interese, sea lo que sea y valga lo que valga, puede hacer el cálculo de que habiendo de visitar las una gramática en el Banco de España que tenga hojas en español, francés y alemán, y con pocas lecciones en hé aquí todo su plan de conducta. poblaciones donde se fabrica lodo lo mejor que u-a su 1 Cuenta, para desarrollarlo á gusto de los lectores, equipaje, debo ser al salir tan c o r t o , como abundante el camino. sab uno hablando como un loro. Es probado. primero con sus piernas propias, después con la bene- quiera llevarlo á l.i entrada. Así se evitara gastos y Porque intentar imponerse en estas lenguas.del Norvolencia de ellos, y en último estado con el empleo de- molestias sin n u m e r o , con la añadidura de que nada o cidido y constante de las tres potencias de su alma, que. poco de lo que saque le ha de servir después. Sin em- te ; adquirir vocabularios para darse á entender lo prepor cortas que sean, siempre constituyen el nvjor me- b a r g o , si es l u m a d o r , le aconsejamos que lleve tabaco ciso; creers" en disposición de decir como en Italia o dio de ver y de referir lo que se ha visto : — Memoria, de España, para todo el viaje, aunque le cueste un ojo Francia lo indispensable para ser contestado, es un entendimiento v voluntad. de la c a r a : pues ¡i pesar do nuestras murmuraciones j absurdo ! — La lengua alemana está hecha para separar dos continentes dentro de un mismo continente'. sobre la m a t e r i a , el único país ,|ue fuma t a b a c o , es el También procurará hacerse cargo. Gemíanos y latinos necesitaban un mar por medio, y nuestro. á falta de ese mar tienen una lengua. Ellos mismos IOtra advertencia muy importante tenemos que diritardan en comprenderse las silabas, más de lo que nosEL ITINKÜAÜIO. gir a nuestros c o m p a t r i o t a s . — Hay un refrán muy cootros tardamos en comprendernos los discursos. En cl nocido que dice, que en Alemania no viajan en primePor todas partes se va, á Viena: pero por ninguna pulpito hablan muy despacio, eu la comedia represenaconsejamos ¡i los españoles que hagan el viaje, más ra clase unís que los príncipes v los tontos. Alúdese con tan con estridente V forzada pronunciación , cu la ópeque por el camino. Llamamos camino al que designaría esto, á la perfecta comodidad de ios cochos do secunda ra cantan con el trabajo y la tortura del que hace garun tendero de la Puerta del So] de Madrid, á'quion en ese país , al excesivo lujo de los de primera , v ¡i la garismos para las angina-. Todos los alemanes que han pudiera decírsele:— « ¿Me da, V. un billete para Yie- gran dilereucia de precio:-que entre ¡imlios existe. ¡Li- viajado confiesan (pie nacieron ininteligibles : por eso na?» —Ese hombre daría un billete por Irun. por Ba- bre Dios, con toilo, á un español , de hacer caso de s e - conservan la escritura llamada gótica ; porque renunyona, por París, por Slrasburgo, y por Munich, á la mejante p a t a r a t a ! cian al concierto románico del mundo moderno : el que ^ a un filósofo de Cádiz , el tio Macaco , dejó estable- quiere ser escuchado fuera, escribe en francés o en capital de Austria. Los otros caminos, que los hay, lo mismo conducirían ¡i Viena (pie á liorna; seguirlos se- cido que lo mejor es lo im'i.< Inicuo; y desde endulces latín. ría viajar, no caminar; y sobre todo, no hay ninguno sido ¡i los alemanes , que tan atrasados se hallan en cier('neniase eu Viena que un señor dedicado á la filotas filosofías, podia ocurrírselos preferir las segundas más directo, más cómodo ni más barato. logía tan sabio como devoto, al levantarse por las fin menos de cinco dias se recorren las seiscientas clases á las primeras. Pero puesto que las pretieren, el mañanas, hinca una rodilla en tierra, eleva al cielo las leguas mal contadas (pie separan al arruinado Manza- extranjero debe sacar pártelo del e r r o r , por bis si- manos, y dice:—« ¡ Gracias, Dios mió, por haber pernares del caudaloso Danubio. Es preciso, sin embargo. guientes r a z o n e s : p r i m e r a , como los alemanes no v i a - mitido que naciera alemán ; pues esto me evita el tener aber nacido correo de gabinete ó maleta inglesa,, que jan en los coches de lujo, va uno solo; s e g u n d a , como (pie aprender mi preciosa lengua ! » esto propio, para decidirse á recorrer de un tirón esa va uno solo, puede comer, inmar y d o r m i r ; tercera, UN CAP.ALI.EIÍO ESVAÑOL. longaniza de terreno que, estirado un poco por el J l e - como d u e r m e , (unía y coin •, cl viaje es delicioso y nalodia hasta Cádiz y otro poco por el Norte á Peters- da cansado. A d e m a s , echada por nosotros la cuenta del ur a u m e n t o , resulta escasamente de una peseta por hora; go, constituyela extensión máxima de Europa. y para, los que pagamos en Madrid dos por el mismo la t F m d e n t o e s s a l i r l l e Madrid e l l e l tren expreso de NUESTROS GRABADOS. arde, y correr y correr, como se pueda, hasta meter- tiempo en coche matalón , y cinco en Viena por igual eeu Bayona al dia siguiente. Dormir ya en francés, servicio , ¿qué diablos de peseta es esa, autora de refraues lie-haber comido en Hendaya (banquete y sue- nes equívocos que mortilican el cuerpo sm dar salud al fl *P Ei. EJUIO. Sit. J). MIGUEL GARCÍA CUESTA , cardeinapreciables en ciertos momentos de la historia) , y alma como le conviene? nal arzobispo de Santiago (V. pág. 241)). «ntmiiaT al otro dia, en el expreso déla una de la tarNo hay si::o hacerse príncipes ó tontos desde la m i s «e,. Por Burdeos á París. En París debe detenerse el ma estación del E s t e eu P a r í s . Allí se dirigirá cl vianoch °HtOj'° a ( 1 " e l d Í a y c l s i S l l i cnte: á las ocho de la jero á unos carruajes lustrosos por fuera, brillantes de BEIiOA V rUIGCERDÁ. allí\ • • S t e ' t o m a r billete para Strasburgo; pasar color y ile luz por dentro , eu cuyas portezuelas dice t r O l l O V U S q U 0 bÍ01L l a s m e r e hacer ' c e bi ciudad; «: V i e n n e » . — En ellos, sin m o v e r s e , se hace toda la Todos los españoles recuerdan la toma de Berga por como a n u e v a j o m a d a hasta Munich, donde dormirá jornada, no obstante los infinitos cambios de empresas, las huestes de Saballs. dia 28 de Marzo último , y la ravill / P , a t n a r c a ; y aprovechará el siguiente dia, ma- idiomas , caminos y nacionalidades. Tontos ó prínci- heroica defensa de Puigcerdá por loo habitantes de la rá s m i 1 Atenas moderna: A n a : en seguida , doce lio- pes , comenzáis por adquirir la inviolabilidad del d o - jdaza, ayudados de una sección del ejercito y carabineras tron a Vi(!lla )a a l a micilio; príncipes ó t o n t o s , disfrutáis desde el primero ros , durante los dias <J y 10 del actual; y no necesitaalmuerzo. ' i' l >' "<>" ' Hé cómodo, lo práctico y lo útil. hasta el último momento las prerogaíivas que e n a l t e - mos entrar en detalles minuciosos acerca de estos dos M cen la personalidad h u m a n a ; por creeros tontos ó prín- hechos de armas , detalles que ha divulgado la prensa cipes, vuestra portezuela es la primera, que se abre, política. N S Dos dibujos presentamos en la pág. 2.)2 que repre"' v i a ¡ ( ' n i " ¡ corroo de gabinele, vuestra llamada es la primera que se a t i e n d e , vuestro V 1 lll;ll l(a ' r t n0 t '" ' ¡ " ^ ' ' - • l , ' I ' " ' "<> b a deseo es el primero que se cumple. Se os habla siem- sentan ambos hechos: el primero, el ataque \ igoroso s l l s"' "' ' " viajes. Consideramos que hom- pre con el sombrero (pillado , como á los príncipes y á de los carlistas á la plaza (le Berga, y el segundo la br eó rn an los tontos ; seos da t rat aunen í o de íl ust, risinia ó de' e x - defensa obstinada , que obtuvo la corona de la victoria, iman i J e r ' C í l ' ) a " ( ' n i " señora, mejor dicho, ¡i quien P a c i ó n d y " " 0 * i' (>l l ) i u ' " Kusto para visitar la E x celencia , como á los tontos y á los príncipes; en suma, de la plaza de Puigcerdá, ante el desesperado ataque de le il) llos(1im t o d o P, , " bacerse cargo en el camino pasáis unas horas como principes ó como t o n t o s , que de las mismas huestes de Saballs. cuanto puede serles agradable. Al caballero, os lo a s e g u r a m o s , son las mejores horas de la vida. Contado el ataque de Berga por el Sr. D. Rafael NiS,, es e Pecialmentfi ovlc lc nn6oo P o r un ochavo al minuto , os arrellanáis eu anchos qui, jefe de los voluntarios francos que defendían la na llllaattllllrraall V V señora I r , 'sin VV él ta ™ V"- i'in^u* diñen,., em P enda sin él tan laboriosa marcha, van almohadones de terciopelo, que se sacan ó se meten á plaza, testigo y actor, por lo tanto, eu aquel horrible consejos. ¿Q Q u ^ee^ nnn uuu ,eesstt rr oo s consejos. v o l u n t a d , para, hacer mas muelle ó más ligera la p o s - drama, dice ademas así, explicando las causas de aquej re is el i t i i is el itinerario dde la ropa ? — Calculad que sa- tura supina. Un gran espejo colocado frente de vues- lla catástrofe: Anterior Inicio Siguiente LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. 252 XVI INSURRECCIÓN CARLISTA. CATALUÑA.—Heroica defensa de Puigccrdá por los vecinos de la ciudad. CATALUÑA.— At.-quc de Berga por el jefe carlista Saballs. Anterior Inicio Siguiente LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. XVI «Dos faltas nos perdieron allí: la extensión de k línea que habíamos de defender con algunas malas defensas, y la inexperiencia ó insuficiencia del comandante , qne no eonsorvó_ la serenidad ni tuvo método ni iniciativa. A es to se agregó también que los soldados de San Fernando eran bisónos , y que los paisanos armados habian recibido los fusiles el (lia antes, lo cual les imposibilitaba de saberlos manejar bien. Sin embargo, preciso es decir que los carlistas se presentaron ante Berga como yo no los había visto en ninguna de las repetidas ocasiones en que me habia batido con ellos , resueltos, animosos y arrojados, de un modo que'á todos nos asombró. » Ocupada la plaza por las fuerzas de Saballs, que se apoderaron de mucho material de guerra, armas y municiones, huyeron aquéllas en seguida llevándose los prisioneros , en número do 500 hombres, al saber la aproximación de la columna Cabrinetty. Por fortuna, los bárbaros fusilamientos de los voluntarios de Targarona, hecho horrible de que se acusó al jefe carlista en los primeros dias siguientes al de la rendición de la plaza, parece que no han resultado ciertos, pues el misino Sr. Xiqui, autor de la relación que precede, era uno de los que se suponía que habian sido fusilados. En virtud de este hecho , dícese por los carlistas que 1). Carlos de Borbon ha conferido el título de conde de Berga al jefe Saballs, añadiendo que ha decretado la creación de una medalla conmemorativa de tal suceso. La defensa de Puigeerdá la refieren así, en poeas palabras, los periódicos de Barcelona : « Los defensores de la villa ocuparon los puestos que tenían ya designados de antemano , preparándose á morir en la brecha antes que consentir que los IXSUKTCFCCTON CAIUJSTA. carlistas deshonrasen la tierra clásica del heroísmo. Hay á medio tiro escaso de la villa una gran casa, de obra de fábrica, propia del ex-dipntado Sr. F a bra y Floreta, aislada, con excelentes condiciones para la defensa , y que ocupada por los defensores de Puigeerdá podia impedir á los carlistas acercarse á aquella parto de murallas. Pero siendo tan escaso el número do defensores de la. villa, y á iin de no dejar sin defensa todo el recinto , no pudo ser ocupada. Aposesionarse de este edificio parece que dirigieron sus esfuerzos los carlistas , y lo consiguieron. Desde allí se hacia un vivísimo fuego, que era sostenido cada vez con más vigor por los de la muralla. Sonó la señal de asalto, y alzando una gritería infernal se precipitaron los carlistas á la muralla, siendo recibidos por una lluvia do plomo que les causó estragos. Otra vez lo intentaron y otra fueron rechazados. La sección de petroleros, protegida por un numeroso grupo, empezó á rociar una casa para producir el incendio y abrir brecha; los momentos eran preciosos , recrudecía el fuego. Cabrinetty no podia estar lejos, los voluntarios continuaban resistiendo como al empezar el ataque. dispuestos á morir entre las tapias ó envueltos entre llamas : reciben los sitiadores aviso de que se aproxima una columna, las cornetas dan la señal de retirada, y abandonando el ataque después de veinte y tantas horas de fuego y repetidos asaltos, huyen inmediatamente, temiendo que no les fuese cerrada la salida, porque en este caso el descalabro hubiera sido completo. » Los habitantes de Puigeerdá se coronaron de gloria en la defensa heroica de la plaza , aunque los carlistas refieren que el amano de ataque á Puigeerdá sólo tuvo por objeto llamar hacia aquel punto las columnas del ejercito, El cura Santa Cruz, cabecilla carlista. NAVAUHA.—Llegada do un convoy di: heridos carlistas á Oudarrua. Anterior Inicio Siguiente LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. 254 para favorecer la introducción en España, por la frontera francesa, de una gran remesa de anuas de luego. De todas maneras, Puigcerdá , que nunca en la guerra civil pudo ser tomada por las tropas carlistas, lia demostrado ahora que está dispuesta á merecer toilavia el dictado, que algunos la concedieron entonces, (le iui\ itciblt'. Finalmente, el grabado segundo que publicamos en la página '_'.'>•> representa una de esas escenas tan trecuentes ahora, por desgracia, en nue>tras provincias del Xorte y de Cataluña, donde arde violenta la destructora llama de la guerra civil: es de noche . y la blanca luna ilumina la tviste escena de la llegada de algunos heridos carlistas a Ondarrua , en las provincias vascas. r:i. I T I I A S A N I A i i ; r z . ,'Hasta cuándo durarán estas escenas de desolación en nuestra desventurada patria? N.° XV| LA i;oi>Kr,A ni", r x iircjri-'. XF.(U;TU;O. Todavía, á pesar de los progresos de la civi]i zac j on moderna, hay seres inhumanos que se dedican al horri ble trálico de carne humana, cazando desdichados l l e . LA I ' A I . M K K A ( V é a s e p á g . '2~<6). gros en las costas del África y conduciéndolos luego hacinados en la bodega de un limpie, á las playas del llrasil, Cuba ó Puerto-Rico, para someterlos á la condición más dura e indigna que puede tener la especie I.A CAPILLA 1)1". I . O S T O K F . U O S , I ' U A I H I O ¡>F. O . .11)si'; humana. la esclavitud. VII.LICHAS. El dibujo (pie ligura en la pág. ¿til señala el aspecto Co-tumbro piadosa era. entre los lidiadores españo- que ofrecia uno de los departamentos inferiores de un les, vi-ilar de\ otamente, antes de comenzar la corrida buque negrero brasileño que lúe capturado no hace de toros, una modesta capilla que, bajo la advocación muchas semanas, en aguas de Zanzíbar, por un buque de Nuestra Señora de los Dolores, existía en casi todas de guerra de la marina británica, al mando del capitán las plaza- de la penin-ula; pero esta costumbre ha Mr. G. I.. Sulivan : más de PÍO infelices negros, cogicaído últimamente en desuso, hasta el punto de que en dos en la costa occidental del África, encerraba en sus muy pocas partes exista todavía. bodegas el buque negrero, y todos ellos ofrecían el lasSin embargo, en Madrid, en un modesto editi- timoso aspecto «pie se observa en los que aparecen recio contiguo al circo taurino. está la pequeña capilla tratados en nuestro dibuio. denominada de los toreros, que fue restaurada y adornada no luí muchos años por el famoso matador de toros Francisco Arjona Guillen {Cñrl/iii-c.*), y en la T I T O S A F U I C A X O S . F.I. AOl'AHOR A 51 \)V\, ANT K EX TÁNGER. cual aun se puede observar que, momentos antes de En Tánger, ima de las poblaciones más importantes reunirse lo- lidiadores para verificar el ¡ms, a. algunos del imperio de Marruecos, hav muchos tipos populares de. ellos se postran ante la imagen de la Virgen Madignos de ser retratados en el álbum del artista viajero ría, implorando la protección del eie'.o en la lucha ; que visita las tortuosas y sucias calles y plazas de aquecercana. lla ciudad. No deja de formar un contraste singular con las ideas Va en uno de los números anteriores de LA ILUSTRAde irreligiosidad y escepticismo que hoy se extienden i CHIS ESPAÑOLA hemos ofrecido á nuestros apreeiables con rapidez lamentable, esta piadosa costumbre de los alionados dos perfectos retratos de moras y hebreas toreros madrileños, que no son por cierto los hombres principales, en traje de fiesta; y en la pág. 2G1 del premenos despreocupados en a-untos religiosos, pero que sente damos un fiel traslado de los aguadores ambucomprenden el dulce consuelo que recibe el alma cris- lantes que vagan por las calles de Tánger, igualmente tiana cuando implora el auxilio divino en los trances que por las de otras ciudades del imperio marroquí, ya más apurados de la vida. ofreciendo agua con rudas voces, y por una módica rePor lo demás, el bello grabado de la pág. 257 es co- tribución . á los transeúntes . ya conduciéndola á las capia de un hermoso cuadro pintado por el joven artista sas de los extensos arrabales, donde el precioso líquiD. .lose Villegas, y representa La i:tt/iill<i d</ /(•>>-' tvriros j do escasea. en Madrid. Debemos advertir que nuestro dibujo es debido al Dicho cuadro, expuesto en liorna v París, mereció diestro lápiz del malogrado Beequer, sin rival para reno pocos elogios de la prensa y de las personas inteli- tratar fielmente esos tipos populares que fotografían gentes,y en aquella última capital lo adquirió, pura su exactamente las costumbres de un pueblo. magnifica galería artística, el Conocido amateur norteE. MARTÍNEZ DE VEI.ASCO. americano Mr. Stward. lié alií. en la pág. 2">o . el retrato de este célebre personaje, á quien se atribuyen, con verdad ó sin ella, una multitud de hechos sangrientos , ocurrido-en las provincias del Norte durante la actual insurrección carlista, y el cual viene á representar, para la generalidad de las gentes, una especie de ogro sediento de sangre de liberales. Si se comete un robo de trenes, ó se habla del fusilamiento de una anciana . ó se cuenta que dos guardas municipales han aparecido asesinados en un paseo público, o se refiere un audaz golpe de mano, realizado inesperadamente por las facciones en cualquier punto de las provincias vasco-navarras, ú se dice que han entrado en España algunas fuerte- remesas de armas y municiones, etc. etc.. — al cura Santa Cruz, á ese célebre cura Santa Cruz se supone autor de tales fechorías, aunque algunas no sean ciertas afortunadamente, y otras no hayan sido cometidas por el audaz cabecilla carlista. El pueblo español, más que ningún pueblo amigo de lo maravilloso, de lo fantástico, de lo que salga fuera de los límites de lo ordinario , se complace en crear en todas las épocas de trastornos y revueltas políticas, esos pequeños tipos legendarios, que tanto abundan en la historia de nuestras modernas discordias civiles, llámense el cura Mermo é> IÍICLTO, Cabrera ó /urbano, lialanzátcgui o el cura Santa Cruz. Este último, D. Manuel Santa Cruz, cura párroco de EL EMMÜ. SR. D. MIGUEL GARCÍA CUESTA, Jlernialde, modesta villa navarra situada no lejos de la IAi'il'.ICA 1>K Al'.OXOS M 1 N E 1; A LKS 1)1-: I.OS SKNOUKS S A E Z . frontera francesa, é hijo de un antiguo veterano de la l ' T O I l , SO1.F.U V C O M l ' A Ñ Í A . (.'AKDF.XAl, AI'.ZOHISI'O DE SANTIAGO. primera guerra civil, apenas cuenta treinta y ocho El primer grabado de la pág. 2(¡0. es la vista de uno años, y en su exterior humilde y reservado no indicaba Son los tiempos que alcanzamos de duda, desconfianciertamente hace tres años que habiadeser, andando el de bis talleres de aquel establecimiento, que apenas za y cansancio; y en tiempos como éstos por maravilla cuenta tres años de fundación, y lia llegado desde la .-e encuentran entendimientos superiores, grandes catiempo, un soberbio cabecilla carlista. Alzóse en la insurrección del año último, logrando condición más sencilla hasta poseer hov un motor de racteres ni heroicas acciones, lüsadaoir á los que, talescapar á Francia cuando los migúele! es fueron á pren- :.»(> caballos de fuerza, para poner en acción los infini- tos de otros argumentos, dicen que ciertas ideas son ya derle, y apareen') en las montañas de Navarra y Gui- tos aparatos que realizan la fabricación de los abonos imposibles. ¿ Qué será imposible en estos pueblos mopúzcoa , al frente de unos cuantos hombres decididos, minerales, aplicados va con gran éxito en los principa- dernos que, cruzados de brazos, ven conculcar sus deal estallar nuevamente, en Diciembre último, la insur- les cultivos (pie se practican en nuestras provincias rechos sagrados, pisotear sus tradiciones venerandas, agrícolas. rección carlista. rodar los tronos por el suelo, hundirse con estrepitólos Damos gustosos cabula á este dibujo, llenando una imperios, y se dejan oprimir y vejar del primer charlaDecíase que formaba parte, como capellán castrense, tie la partida que acaudillaba Soroeta; mas esto no pa- de nuestras más importantes mi-iones, cual es la de tán que los adula, de cualquier aventurero que lo intensaba de ser un buen deseo de algunos carlistas madri- dar á conocer los establecimientos que en nuestro país ta ' ¿Qué será imposible en estos pueblos donde jamas leños á (pílenos repugnaba que un sacerdote de la re- representan la producción y el trabajo, entre los cuales baila resistencia ninguno que tiene fuerza material, ligión católica abandonase las hopalandas clericales por se encuentra el que dirigen los Sres. Saez, Utor y So- donde asi tuvo dóciles mayorías el tirio como el troja la boina y el trabuco, porque muerto aquel cabecilla en ler, fundadores de esta industria en España. no y quien quiera que mandase? Los grandes carao un combate, el cura Santa Cruz continúa al frente de una res, las grandes resistencias, las epopeyas gloriosas, 1» partida, campando por sí solo ó cu combinación con reconquista, las Cruzadas, el descubrimiento de Ameotros jefes carlistas, en las provincias del Xorte. rica, la guerra déla Independencia, no se conciben sil ' U I ' . L I C A S U B A S T A 1)1'. C A K U U A J F . S Y l ' A I i . i I . I . O S l ' H Ü T U X H no con aquella fe viva y ardiente que muda de asi en El fusilamiento del desdichado alcalde de Anoeta, C I E X T E S A I . I ' A T U I M O N I O I J U K F ' F É !>)•; I.A C O 1 1 O N A . las montañas. ejecutado por orden de Santa Cruz, fue uno délos primeros hechos que dieron á éste la triste celebridad que Por eso, ahora como siempre, en las entrañas P11, Proclamada la república española, y habiendo dehoy tiene, á cuya celebridad no contribuyó poco por clarado el Gobierno (pie todos los bienes pertenecien- simas de aquella Madre inmortal y divina, maestra <^ cierto la extraña determinación de la Diputación pro- tes al patrimonio (pie fue de la corona , pasen á ser la fe, luz del mundo, que tiene los pies en latieriay vincial de Guipúzcoa, tasando en público pregón la ca- propiedad de la nación, todos ellos, con pocas pero jus- cabeza sobre los coros de los ángeles, hay almas g r a j nn slID beza del citado cura en -10.000 reales. tas excepciones en lavor de algunos monumentos ar- i\',v, entendimientos admirables, caracteres fi ' e_ A tal punto llegó el horror que causaron otros he- tísticos á históricos de merecido renombre, aparecen que descuellan sobre la decadencia universal y el ge chos sanguinarios atribuidos al mismo cabecilla, que desde luego comprendidos bajo las leyes generales de ral abatimiento, como brillan las estrellas en las tu» " los periódicos carlistas anunciaron un dia que el cura desamortización. blas de la noche. Por eso sobre todos y sobre t o d ° a , Santa Cruz liabin sido destituido por |). (.Virios, con En su virtud, y por determinación del director ge- cuella la colosal figura de Pió I N , admiración de >^ orden de ser sometido ¡i un consejo de guerra ; pero el neral del patrimonio que fue de la corona, en la sema- hombres, alegría y regocijo de los cielos. Por e s ' fe m mismo cura Santa Cruz, en carta dirigida á uno de di- na última se verificó en las antiguas reales caballerizas nuestra pobre p España, donde todavía hay "^*j¿¿ ^ j chos j icnód icos, A7 I't'iisttininiin l'l.<¡xinul, no solamen- una subasta pública de los carruajes y caballos que exis- ha havv todaví n n u r b l s gentes tes capaces de dai a todavía iinnumerables 1 t i GrP te negó la exactitud de aquella noticia, sino que pre- tían en la misma, exceptuándose igualmente algunos por la verdad y resucitar hazañas épicas m. resucitar hazañas épicas m. r - j e tendió sincerarse de los cargos que se le dirigian y aun de los primeros, que , como la carroza de la rema Dona por la verdad y h t d í l l s e social amenazó con su poderosa saña á los (pie intentaban di- • luana, ln Lai-tt , vinculaban recuerdos históricos apn1- más gloriosos; hay todavía alguna clase social cap ^ sacnlicarse por no manchar su conciencia y famarle así decía. ciables , y que serán conservados en los museos de la Id hecho es, después de todo, que el cura Santa Cruz nación. Pasaba hace poco por' axioma inconcuso cnti tenía razón, porque ni fue destituido por I). Carlos, ni _ liste acto de la subasta está representado en nuestro tas gentes que el clero español era ignorante )' sometido á un consejo de guerra, ni siquiera amonesta- dibujo de, la pág. ¿(¡0. guado ; y hubiera dado risa, si no moviese a c ol_ do para que diese en adelante oidos á la voz de la cle^ Fuó muy concurrido en los varios ilias que duró la sion, la petulancia con (pie se '.mofaban de el Jo mencia, porque hoy mismo, al trazar estas lineas, lee- subasta , v algunos objetos adquirieron un precio bas- bres que se imaginan sabios porque no creen en ^g mos en los periódicos de noticias, que el citado cura tante elevado, según los detalles que ha ofrecido la es decir, porque lo ignoran todo. Verdaderanien > ^ Santa Cruz ha sorprendido en las cercanías de Tolosa prensa local de noticias. natural y lógico era que nuestro clero fuese lo K _ ,_ á dos desdichados guardas municipales, fusilándolos sin j decía de él. El nivel intelectual y moral de l oa ^ piedad. ' ritus formados en nuestras universidades. c n n U Anterior Inicio Siguiente LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. luchas políticas, en los cates y ios casinos, os muy ses dejó tan buena memoria, que su nombre y su voz i, 'o- nuestros hombres saben poco y valen menos; ora fueron oídos siempre con veneración V respeto, .liien .''so ser muv graneles para sobreponerse á la cór- quisiera poder copiar ó entresacar los párrafos más norante niveladora de los tiempos. Suprimidos los con- ' tables del discurso que pronunció en el Sonado poco entos, manantiales inagotables de ciencia y do virtud antes de la. revolución de Setiembre; de la elocuente míefluyeny se difunden por toda la sociedad; despo- defensa que hizo de la unidad católica en las últimas 1 li'lflesia de sus bienes; nialísimamonte ilutados Cortes Constituyentes, donde, juntamente con el ilustre {os pocos" seminarios que babia ; retribuidos los sacer- obispo de Jaén , hizo enmudecer y puso admiración y dotes tan pobremente, que aun para comer no teniau, respeto á los enemigos de la Iglesia. Bien quisiera copiar sus pastorales y sus cartas al Gobierno, cuando so 6e necesitaba un verdadero milagro para que el cloro, sin medios ni recursos, so sobrepusiera á la ignorancia mandó que el clero jurase la Constitución, cuando se v envilecimiento universales. "\ yo no sé cómo so hizo promulgó la lev de matrimonio civil, cuando un minis"el milagro , pero el milagro se hizo. Nuestros prelados tro do Gracia y Justicia tuvo la osadía do dar órdenes v nuestros teólogos fueron ¡i Roma, y entre los prela- á los obispos como si fuesen delegados suyos y no sudos y los sabios do todo el orbe católico, sostuvieron periores, y alabar la entereza, el valor y la energía incólume la fama gloriosa que sus predecesores alcan- con que hizo frente á la persecución que la Iglesia está zaron en el concilio tridentino; y nuestro episcopado sufriendo, sin cejar un paso jamas y haciendo cejar rayó tan alto, por lo menos, como el do los pueblos que muchas voces á sus enemigos, hoy tan poderosos. No pasan por más cultos. Sobrevinieron en España sucesos tengo tiempo, ni un artículo da lugar para tanto. Una de esas cartas fue causa de que el virtuoso prelamentables; todas las clases sociales, con pocas excepciones, doblaron la cerviz ante el nuevo poder: y lado fuese procesado, el cual hizo á 1). Candido Nocesólo una, el clero, quiso antes morir do hambre que dal la honra señaladísima de nombrarle su abogado defensor. quemar incienso ante el ídolo nuevo. Lo mismo hicieron y siguen haciendo los virtuosos En este clero, en este episcopado, que son de las pocas "lorias que van quedando en España, descollaba ; prelados de la iglesia española que se vieron y se ven entre los más altos el Emilio. Sr. D. Miguel García personalmente perseguidos. Sóame lícito, pues se ofreCuesta, cardenal arzobispo de Santiago, que acaba de ce la ocasión, rendirles público testimonio de gratitud respetuosa. Que si los hijos heredan los bienes de formorir. Nació el 6 de Octubre de 1803 en Maeotera, villa si- tuna, y la posición, y el nombre, y aun la gloria de los tuada á siete leguas de Salamanca. Fueron sus padres padres, con más razón debo sor la gratitud heredihonradísimos labradores y educaron su corazón cristia- taria. na y santamente , maí su pobreza no les consentía culDe las altísimas virtudes y caridad ardentísima del tivar la privilegiada inteligencia de su hijo. Un cura ilustre prelado que acaba de morir dan buena muestra párroco de Maeotera, pariente suyo, prendado de la el dolor con que. Salamanca primero, daca más tarde, virtud y el ingenio del pobre niño, le dio medios de le vieron ir á cumplir sus altos destinos en otra parte; hacer los primeros estudios . y más tardo logró que el y las lágrimas con que boy le llora la ciudad del Apósobispo de Salamanca diese á su protegido una beca de tol, y pide al Gobierno que le dije tributar á su cadágracia en el colegio de Carolinos, que era el Seminario ver todos los honores que se deben á un príncipe tle la conciliar. Con tanto aprovechamiento estudió filosofía, sangro. que así que acabó su estudio sus propios maestros le Entre tanto su alma privilegiada habrá recibido en dieron el encargo de explicarla. Cursi') enseguida teolo- el cielo el premio que ganó en la tierra, y rogará á Dios gía, y con el grado de bachiller recibió también el en- por el triunfo de la fe que tan grande le hizo, en la cargo honroso de enseñar la primera y más alta de las patria que tanto amó y que honró tanto. ciencias. No bastaban á su privilegiada inteligencia el RAMÓN NOCEDAL. estudio y la enseñanza de materias tan difíciles . y en las aulas de aquella universidad insigne aprendió al propio tiempo las lenguas sabias, y puso término y coACHAQUES Y FLAQUEZAS ECONÓMICAS rona á sus estudios con la borla de doctor por aquella universidad. Nombráronle luego superior del SeminaI I E I , R E I N A D O I)K F E L I P E I V . no, y poco después vico-iv.-tov : leía en este establecimiento dos cátedras do teología, y <-n la universidad (CONTINUACIÓN.) enseñaba lengua hebrea, y aun le quedaba tiempo para consagrar ocho horas diarias al estudio. Predicaba ade— Es una ilusión do V. mas con frecuencia; ora su lógica irrebatible si disen— Será una realidad mientras no se me pruebe lo tía; cuando exponia y enseñaba brotaban, como raudal contrario. Purísimo, de sus laidos los tesoros de la verdad; y ar— ¿Pero no vé V., santo varón, que las ideas y los rebataba su elocuencia cuando contemplaba oxtasiado pensamientos discutidos por las muchedumbres pierden y narraba con amor y entusiasmo las glorias de la Vir- su eficacia al llegar al terreno de la práctica y se debilita gen María. el principio de autoridad? Espíritu incansable, voluntad firmísima, ni para su — Precisamente facilita su aplicación. pmntad ni para su entendimiento hubo jamas cansan— Nonos entenderemos en este punto. cio m fatiga. — No es fácil. — ¡, Tiene V. algo que decir contra el reinado de F e de o V > ^ ^ n o m b n u ' ° rector del Seminario. El 22 Dan 1° ' 1ÍH7 fue presentado por el Gobierno es- lipe IV, glorioso para el arte dramático, para los poetas y para los ingenios ? 184.S fPaia lai S Ü l a v a c a n t e d e J a o a ; el 11 de Abril de — Nada se me ocurre por el pronto ; sólo lamento, o*6 lúe preconizado en Roma, y el 1 6 de Julio siguiente consagrado en Valladolid." En 1852 fuépromo- como buen español, que mientras perdíamos ciudades y breV V a r z o b ¡spal de Santiago. El 27 de Setiem- reinos, se pusieran en escena comedias de Calderón y c o n f i r i ó e l 1>a a de Moroto. Y me lamento más del género y de la clase J el 30 1 P la púrpura cardenalicia, ctnbre fia r rl i > l ;l que entonces era reina de Espa- á que pertenecían los espectadores. d<3 SU CÓvte tistas > g''-™<les, guerreros, sabios, ar— Y ¿ qué importa un detalle, quizá sin intención exl m p U S 6U SU l l e a l al virt ° Capilla oí birrete de púrpura I puesto, para el brillo que dio á la España aquel reinado al i ° P , r e l a d o . al orador elocuente, al sabio profun- do verdaderamente literario? — No niego la gloria adquirida en algunos ramos de' i» i r e J 0 d e u n o s Pobres labradores de Maeotera. nad hÍJ dü U a P b r C lavamlora <le Gl a del saber humano, pero en materias financieras no »Tal an ° ^ '° " ° ' " bl tal de 1 7-ipal° Igl'-'sia, llegó á ser autor inmor- existia orden, ni concierto, ni unidad. Pasen las intride Pron a introducción al Símbolo de la //•, admiración gas amorosas, porque á veces son superiores á la vo' I O S V le \x' t rr a* i v w). o . , , , , . 1 . . . i__ Í ' i i •• i iros 1 i' ^ r ñ< S ; no de otra suerte el hijo do unos luntad de los hombros; pase la rebelión de Cataluña, a, al amparo de la que al lili y al cal») eran hijos de España; pero la in.-,.. ' leo'> -i ser regente itíftaió sn 1 b w l L ^ ^e una una monarquía monarquía que que exe.\- dependencia de Portugal, que enflaquecía y debilitaba a er 7 empu~° ] ;l d ° S mundos; y ahora mismo, el que la nación, ora motivo do dolor para nuestros compatriotas. Do (dio no tuvo exclusivamente la culpa Feliv erdaf]P,.a i » ' e s l a )' príncipe, de la'sangro. ¡ Santa v pe IV. Fuese del Conde-duque de Olivares, favorito mayor, ó de I). Luis Méndez de Ifaro que le sucedió en : f cabezas m ^ i f " ' <1Utí " i( "'" S ÍfíUill'il' " ° *''-'"'"ul" el poder y valimiento, la verdad es que la España men^escS S t c L 1l c1l l o8s '''04noñosSl; 'abriendo'á la vniud guaba en reinos lo que perdía en soldados, viéndose alarl 0 eanunos jiiira ganar las alturas y desamparada fuera y cníhiquecida dentro de casa. Al morir Felipe 1 V , estábamos en pública almoneda; los ••jas obra • • r n ° que acal f elonoi m a s notables del esclarecido va- honores y las mercedes, los títulos y los vasallos, todo Uaar se vendía, porque la maldad de los hombres había engatíctúo coi ' m O n i " ' n ° C a b e " e " 1:l e x t ( ' l l s ¡ u u lll! ñado á un desventurado príncipe de regia estirpe. a defin^jf. 6 , l l z o e n Roma cuando fue con motivo de — Eso es pintar como querer, amigo mió. Cierto que d0 m arí, y S ática de la Inmaculada Concepción el líey era algún tanto libre en materias amorosas, f l u e l cceennttrroo i a r rtes\" ! l l a ; 1 perenne de las ciencias vy aunque parecía más de lo que era. En su corazón no se tes e nrteTJ o s ' más ilusstres sabios de todos los paí- albergaban las malas pasiones ni en su inteligencia Anterior Inicio 255 predominaban otros deberes que los del bien y de la virtud. Tenia un sedo delecto, y es que bis apariencias le condenaban. Siendo como era bueno en si, la maledicencia lo atribuyó paternidades y noviajos que producirían la risa, si a risa pudiera tomarse esto asunto. — Pues la historia nos cuenta que Felipe IV estaba apasionado de la actriz Doña María Calderón v de alguna otra que no so presentaba en escena — La historia recoge todos los cuentos y todas las anécdotas de las generaciones, así como se llama hoy en los papeles públicos dilapidadores y malvados á gente pobre ó inocente. — Yo creía que la Calderona , así la llamaba el vulgo, prodigio de belleza, dominaba al líey, cosa que no tiene nada de extraño, porque de antiguo bis mujeres dominan por regla general á los hombres, y son causa do que el Código penal esté siempre en ejercicio. — No existia tal dominio. Felipe 1A era afable, cariñoso, galante, sobre todo con las damas , amigo do sus amigos, muv instruido, aficionado á los artistas y á los literatos, y de aquí la fama que el vulgo le atribuyó de vivir en perpetuos amoríos. Pero esto sería siempre insignificante comparado con el arte dramático que llegó á inconmensurable iJtuva en aquel reinado. Don Podro Calderón de la Barca, ingenio peregrino, poeta sin rival que, después de tomar parto en las campañas de Flándes é Italia, abrazó el estado eclesiástico, escribiendo mil quinientas producciones para inmortalizar su nombre, el de su Rey y el de la patria. La vida es tuieño recuerda siempre á un gran poeta ; El Atraille de Zalamea es saludado en la escena con muestras de admiración. Veloz de Guevara, aunque su primer apellido era Dueñas, manejaba la sátira con agudeza y escribía á conciencia como boy no se acostumbra, grande amigo de Felipe IV. Pérez de Montalvan, discípulo de Lope de Vega, poeta dramático, novelista, escritor diligente. Tirso de Molina, ó sea Gabriel Tellez, cuyo nombre pronuncian con envidia los literatos, y SIÍS producciones andan en manos do lajuventud y de la ancianidad. Agustín Moroto, corrector primoroso, cuyas obras producen en el público moderno grande entusiasmo. El rico hombre de Alcalá, La ¡•••••laca de su (¡alan, El desden con el desden. Agustín de Rojas, crítico de primer orden y poeta muy estimable. Juan líuiz de Alarcon, cargado de espaldas, pero derecho de entendimiento; objeto do burlas, poro superior ¡i los burlados, por sus obras y sus comedias. Gaspar de Mendoza, crítico v erudito. Fernando de Zarate, autor cómico y poeta lírico de gran valía. Antonio de Solis, que no sólo os literario consumado, sino historiador peritísimo, divas comedias se leen con avidez y so estudian con respeto. Pues bien ; estos y otros trabajadores asiduos del pensamiento, levantaron la escena patria y le imprimieron un carácter verdaderamente nacional. A pesar de la libertad de palabra y acción, que los partidos constitucionales y las monarquías representativas conceden á los vasallos , esfuerzo bruto de generaciones vocingleras; á pesar de esa libertad, repito, las letras han decaído, el arte dramático anda por los suelos y la moralidad literaria se busca con linterna y no se encuentra por la redondez de la Península. Existen, sí, ó han existido, tres, cuatro, diez poetas líricos, cómicos ó dramáticos que no prostituyen ni su nombre ni su conciencia ante el mal gusto del público novelero, pero en cambio, vive y goza y triunfa una serie de mercaderes de la literatura que se arrodillan ante el becerro de oro, que crean dudosas costumbres públicas y se afanan por aclimatar en territorio español espectáculos, en que lo menos es el ingenio humano y lo más las ricas vestiduras y la cortedad de trajes en coristas y bailarinas. Si así continuamos y de tal manera nos conducimos, llegará tiempo en que el pudor no sea una virtud ni la honestidad una gracia del alma. Desgraciado país en que se pierda la fe, pero más desventurado cuando se dedica en cuerpo y alma á admirar en escenas públicas los postizos de las cantantes ó las figuras de las cancanistas. Ustedes no han inventado nada nuevo ni nada bueno. Los liberales se contentan con mucho ruido, es decir, mucho bombo y muchos platillos. — Amigo mió, veo que nos trata V. á los liberales como si fuéramos unos perdidos, siendo así que esa clase de espectáculos de dudosa moralidad proceden de tiempos absolutistas. Aquellas comedias do magia en el buen Retiro, aquella exposición de gente femenina, aquellos escotes que lucían las actrices y las cortesanas, aquellas casas de conversación, de las que decia Gaspar Caldera de lleredia en 1641 que «tienen más peligros que comodidades»; aquella afición desmedida á todos los juegos , donde se pierde el propio honor y la fortuna, admirablemente descritos por Julio Monreal (1), dados el tiempo y la época, no eran producto de la devoción ni de la penitencia, sino de los vicios, de los deseos y de las pasiones constantes de la humanidad, (1) Costumbres del siglo xvn. Siguiente LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. 256 MURCIA.— l'alinereros subiendo A niachcur lan Anterior Inicio Siguiente LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. .° XVI 257 BELLAS ARTES.—La capilla de los tormts, en Madrid ; cuadro do ü . José Villegas. Anterior Inicio Siguiente 258 LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. ¿y las sátiras que circulaban en el reinado de Felipe IV contra el (¡obiorno, contra las l'aiiiilias, contra los literatos, y lo que era peor, ront ra el líev .' ,' Y aquel ¡>¡\dn' nin'stro glosado, atribuido á un ingeniosísimo escritor, al que contestó 1). Lorenzo Uamirez de P r a d o ? ( 1 ) . ,'V las composiciones de Quevodo , (pie aun hoy. pecadores como somos, llevan la sonrisa, á los labios v la m a licia al corazón.' Digamos , a n i l l o mió . como dijo \\n poeta del tiempo tío Felipe IV: aclimatación de la palmera en España. Xo hay persona (jiie' haya, recorrido nuestras pro\ nielas meridionales que no recuerde con placer esos árboles esbeltos y airosos que ostentan su bellísimo penacho de hojas verdes á cien pies del s u e l o , y que mecidos por las mansas brisas del Mediterráneo producen un susurro dulcísimo A' suave, Tra temos di' d isee. ir ir . Viendo al mundo vacilar, Si será mejor llorar O será mejor roir. La palmera es esencialmente africana: ya decia el ibis', re guerrero y melancólico poeta Abderrauiau : 1 ¿Como el recuerdo que en el alma deja La vo/ de bi niuier que hemos querido.Ü v,Tú también, insig Eivs aquí forastera.'.! — Sigan Y d s . en esas ilusiones, (pin al cabo d é l o s Esos conquistadores de la E d a d Media que á todas años Labremos perdido Lasta el nombre español. El lujo, las costumbres y el egoísmo tienen (pie t r a e r , al partes donde llagaba su triunfadora cimitarra llevaban MI civilización y .-us costumbres , encontraron cu el M e ñn y á la postre, sus naturales consecuencias. —Respecto á lujo, no creo (pie fuese menor en tiem- diodía de E s p a ñ a un clima v un terreno en que pudiepo de Felipe I V . El catnbray , el cbainelote y el raso ron aclimatar su árbol favorito, la palmera . que en la andaba a b u n d a n t e , y no pocos dineros hizo un merca- vida errante del árabe le marca cu medio del desierto der afamado de aquella época, Maese O u t i v e r o s . lon- el apetecido oasis don,le ha de descansar y donde enjista sin igual de la calle Mayor. Las costumbres son contrara la fuente consoladora que devuelva la, frescura a sus abrasados lab-ios. apropiadas á la época en (pie vivimos. E n efecto, la palmera necesita un terreno arenisco —- Tan a p r o p i a d a s , como que dan trabajo diario á y flojo, pero no desprovisto de h u m e d a d . La forma que curiales y juzgados. — l'ues entóneos no eran unos santos tampoco. H a s - generalmente se sigue en Murcia para plantar las palta al inofensivo i ) . .Pedro Calderón de la ¡larca le h i - meras es la siguiente : se forma una especie de plantel rieron do unas cuchilladas en el ensayo de ^u comedia Colocando en la tierra ios huesos del dátil tres a tres y El mai/úr encantó amor. Le digo á V. que la gente del a distancia de una vara entre cada plantación : pronto siglo x v n era muy b u e n a , tan buena como la de los si- el hueso germina y se forma un bosque, en miniatura de p a l m i t o s , los cuales se trasplantan al sitio que se deglos anteriores y siguientes. — Me causa maravilla la inocencia de osti«s jóvenes sea, arrancándolos con una gran pella de t i e r r a , pues del dia. Viven en medio de inmensas bacanales, se creen la palmera . como todas las [dantas vivaces, necesita superiores en bondad á todas las generaciones, consi- t r a s p l a n t a r s e en la tierra. deran á su propia razón como el último progreso de la A los cuatro años se conoce el sexo de la palmera ciencia, y sin pensar en Aquel, que ha de juzgarnos á (pues como todo el mundo s a b e , la palmera es moiiotodos, dictan leyes y establecen máximas con tal aplo- genita'), pro luciendo la hembra unos dátiles embrionamo y con tan vertiginosa actividad, que llego á dudar rios , que sin embargo sirven para conocer la calidad del si nos liemos vuelto locos. Con un poquito de historia. fruto que el árbol ha de producir. El macho sólo p r o y unas nociones de escepticismo, se tienen por unos duce la hijuelo, (> sea una especie de iloivcitas que al sabios , cuando viven perpetuamente en la ignorancia. abrirse arrojan el peden fecundad 1 ']-do la hembra. Ya llegará un dia en que, contritos y arrepentidos ante ! (íenei'almente se pasan algunos años sin (pie vuelva grandes catástrofes, vuelvan los ojos á la España de á echar f r u t o , y cuando ya el árbol es adulto , es p r e ciso todos los años verificar la operación que se conoce sus padres y á la fe de sus abuelos, l'ero será tarde A h o r a es la época de los grandes pecadores, mañana con (d nombre de morl/mr, y que consiste en sacudir será la de los grandes penitentes. Ahora es la ('poca cierta cantidad del polvillo impalpable que produce el de las aflicciones y de los mlortunios , mañana vendrán macho sobre el cogollo de la hembra en la estación los arrepentimientos. oportun:'. Esta operación se verifica subiendo iluir el i i — Siempre lo mismo. Yds. los tradicionalistas viven tronco de la palmera en la forma que representa el g r a en lo pasado, se olvidan de lo presente y no tienen íija bado (pie encabeza estas líneas , v es, [un1 coiisiguiont o, la mirada en el porvenir. Mientras tanto, la humanidad arriesgada y difícil, habiendo hombres que se dedican avanza, las instituciones se trasforman, las sociedades exclusivamente á ella. se modifican, las ideas cambian, los hombres si; suceEl niachoado artificia! sólo se usa en los jardines y d e n , y el progreso humano camina á través de los si- casas p a r t i c u l a r e s , pues en campo abierto y en esos glos y de los tiempos. Estaremos dementes ó viciados, bosques de palmeras (pie se encuentran en Elche, don¡ quien lo sabe ! pero con sobra é> falta de juicio, cuer- de ¡os machos están mezclados con las hembras, el amdos ó locos, nadie puede detener el curso de los sucesos biente se encarga de t r a s p o r t a r el polvillo fecundante. y la corriente de las ideas. Existe una fuerza superior á Por regla general en \\\i plantel nuevo de palmeras nuestra voluntad que; nos lleva a<Iel<inte: y aunque (pusié- resultan un cincuenta por ciento machos. De estos la ramos detenerla, seríamos arrollados v vencidos. Con mayor parte se arrancan , dejando sólo p r ó x i m a m e n t e que, amigo niio, preparémonos á vivir la vida (lelas un macho pul'cada nueve ó diez hembras. instituciones constitucionales ó republicanas. Hay innumerables clases de dátiles, que pueden, sin — Sigan Yds. en buen hora. Vo. perdida la esperan- e m b a r g o , dividirse en dos gtvndcs secciones : los que za, sólo conservo la fe en Dios y me preparo á morir maduran en el árbol y los que se maduran artificialcomo español y como cristiano, repitiendo con el poeta : mente. Los primeros son naturalmente los preferidos; pero, sin e m b a r g o , hay una clase que se llama «dátil Mi regocijo es llorar, tierno», y que se come cuando adquiero un amarillo anaMi reír gemir contino, ranjado : esta especie es rarísima en Andalucía y sido Mi placer es lamentar, se encuentra en Murcia y Alicante. Y ini descanso pensar, Los i[iic se maduran artificialmente se cogen cuando ¿Tanto mal ci'mio me vino? están en sazón, v por, medio de! vinagre se les hace ad— i Ay! amigo mió, los sinsabores del mundo y la quirir un color casi negro , ó sea una madurez ficticia. maldad de los hombres no son patrimonio de esta ge- Estos son los menos apreciados. neración ni de este siglo. Eray Luis de León , aquel liE s imposible citar en tan estrechos límites todas las terato y teólogo eminente, honra de la España y obje- (dases de d á t i l e s , que v a n a n en forma, dimensiones y to predilecto para todas las envidias, víctima inocente color, desde el verde esmeralda al encarnado fuerte, de aviesas pasiones , decia á sus contemporáneos: desde un tamaño como una avellana gruesa hasta el de una ciruela, de las mayores. Dichoso el humilde estado ()t r o d é los esquilmos de la palmera es la leña que I leí s a b i o (pie se retira produce la poda . la cual se verifica todos los a ñ o s , cor1 'e a q u e s l e m u n d o m a l v a d o , ^ con pobre mesa v casa lando un orden de ramas, l'jsla leña es muy apreciada, Ku el c a m p o delelloso, por los panaderos para lo que llaman caldear los hornos. < '(MI só]<> I):ns se c o m p a s a llav palmeras que producen hasta veinte y cinco ar** á solas .su vida p;isa robas de dátiles , (pie siendo ile buena calidad se venden Ni e n v i d i a d o ni e n v i d i o s o . á diez o doce reales la ari'oha, en el á r h o l , \- como el gasto de cultivo es poquísimo ó casi nulo, resulta que MoDKSTO EiiliNAXnF.Z Y GoNZALEZ. la palmera es uno de los árholos que unís producen. Los machos también tienen su esquilmo, pues seles ata el cogollo fuertemente, y de ese modo se obtienen LA PALMERA. esas ['almas rectas v blancas que se observan en n u e s Entre las muchas cosas que tenemos que agradecer tras iglesias el Domingo de liamos. La palmera es de lento crecimiento, necesitándose á los árabes, figura sin disputa en primer término la cincuenta ó sesenta años para su completo desarrollo, (1) Biblioteca Nacional; M.-2Ü0. — Manuscritos. y aun eso en las mejores condiciones. Pero en cambio es imposible fijar el límite de la vida de la palmeracerca de Murcia hay palmeras que se sabe existían e« completo desarrollo en el tiempo de los árabes. Decia un pahnorero de oficio que no habia conocido ninguna palmera morirse de viopi : á cierta edad les suele atacar un gusano, que royendo el cogollo las destruye p e ro pasada una especie de crisis, la palmera vive por yn espacio de tiempo que es imposible determinar. En Murcia, en una casa particular, hay unas palmoras que el abuelo del actual poseedor, que murió de edad, muy avanzada, aseguraba que su abuelo decia (pie las había conocido siempre en el mismo estado, v h o y . después del trascurso de cinco generaciones, las tales palmeras no han empezado aún á mostrar el primer signo de vejez . que consiste en adelgazarse el tronco hacia el medio y engruesar en la base. La verdad, es que la palmera es el árbol más hermoso que se produce en España, y uno de los más bellos del m u n d o : razón tenía el poeta que dijo: •;' ¡ Ah : no me habléis jamás de esos países Donde no crece la gentil palmera !» F. J. G. EL SUENO DE UN JUSTO por Carlos Rubio. Cominu-.U'iun. Con: imi'.K'iun.) Don J u s t o , imbécil . convertido en máquina por la b o r r a c h e r a , era muy culpable, v muy censurable, etc.; pero él [¡clisaba que en aquel momento había de ser aquello ó no ser y (pie los que condenaban aquello . condenaban aún más el suicidio, horror de Dante, que visitó el infierno, Y abominación de L). Jaeobo, que, segú según muchos JS biogTafos, oiogTaios, se suicidó. suicnio. Por esto se figuraba figuraba que haciendo lo que hacia hacia, nno era más digno de censura que el manzanillo dando muerte con con su su sombra. sombra. muerte Doña Doña Sinforosa Sulfurosa hacia hacia M'odiuios prodigios de de valor, valor, yv los los hanlos los cia i m p u n e m e n t e , ['urque, como era tan fea, todo os que ([lie la m i r a b a n , quedaban petrificados como los veían la cabeza de Medusa. Mirándola, y mirando á D. J u s t o , un grumete solo decia :—Mal lavandero es Dios. Lavó la lnu dad en el diluvio, dejó manchas de esta especio, entures otro g r u m e t e 'teólogo le replicaba: —X'o aveiu nicle la juicios t e m e r a r i o s , porque los caminos por doncl Providencia conduce las almas . sólo de (día son ccono< culos; los juicios de Dios son impenetrables, muchos rezas en los altares que han hecho más picardías que estos dos demonios encarnados. En medio de los horrores del abordaje, una joven desmelenada y vestida de blanco se arrojó á los pies do D. J u s t o ' g r i t a n d o : « p i e d a d , p i e d a d » ; pero é l l a separó con el pié y siguió corriendo hacia un lado y otro como un loco. Xo era él quien se agitaba, sino el grok. r Por fin, cuando el combate hubo acabado, P ai ó P° donde estaba la joven que habia sido víctima ucl y la lascivia de la tripulación. E r a ya cadáver. V era Beatriz. Don Don JJ u u ss tt o o enfurecido enfurecido quiso quiso matar matar áa todos todos los w qne \ i :.. j. .. i i .i. ._ i :: /e i ., .-. /.l,,..<i ettiP^*" habian atentado contra su hija. Ciego de cólera, e; menel zó á repartir golpes ¡i diestro y siniestro; pero sus el migos no se acababan jamás. Cuantos más m _ a ^ más remudan, v en medio del combate doña biM° le cogió por la espalda y le sujetó como á un niño. seguida los marineros le a t a r o n , le metieron ^en lancha y le abandonaron á merced de las olas. rO fue que n o l e zambullesen en el a g u a , y más 1° que encontrase al poco tiempo una isla. • La situación de I). J u s t o n o . era ciertamente en d i a b l e . Náufrago de la vida, y náufrago de la m a r ' g 0 ' contrábase en la plava desconocida como un nue i pvtenualiinson , sin un pedazo de pan , casi desnudo, e.\ do de hambre y de fatiga, y por más que vagao- 1 ^ l a d o á o t r o , no veía huidlas humanas. I or m1 j ^ una altura descubrió grandes v numerosos g rll l. negros que corrian como locos en todas direcd ^ lanzando espantosos gemidos; pero entonces le ^ metió un nuevo terror. Aquellos negros parecía > _ vajes. y si le descubrían sería fácil ¡pie cuando a g dia ¡dgun europeo les preguntase por é l . ' t í ^ , o ndiesen : — N o era malo , comimos de él y solo !<tramos un poco duro. ._m yjeDÉl deseaba encontrar h o m b r e s , pero no p r e c i a te para que le comieran; y si le dcscubriaii. tCL) t a l l o . ' y ¿cómo evitar que le descubrieran- I Anterior Inicio XVi Cuando más absorto estaba en estas dudas, Siguiente LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. XVI . z qU e á su espalda d e c í a : — M u y buenos dins, Ulan- dor extranjero hubiese tomado por blanco la paloma g e ynlvió y vio á un anciano negro que apoyado que venía, según dicen, á comer á la oreja de Mahoma, 'una una lincha de piedra le contemplaba p (ó al menos tal y que ellos creían que- era el Kspiritu Santo. fió) como ell carnicero ie á lla ve*. Kn un momento |). Justo filé cogido, desnudado, s e l e figuró) Seguramente no lia habido niño que haya soñado al atado . y los grandes caciques se reunieron á conferendemonio tan feo como le pareció aquel negro. ciar qué género de muerte habían de darle. Y sin embargo se arrodilló á sus pies j u n t a n d o las Kl anciano que habia sido esclavo presidia , y en homanos y exclamando : —Perdón , perdón. nor de la verdad era el que proponía las medidas mas El anciano se sonrio enseñando dos lilas de dientes dulces. Se contentaba con las que San Pedro Arbues blancos y aguzados , que le hubiera podido envidiar una aplicaba á los impíos. fiera T luego dijo: — No tengas miedo, l i e odiado á Don Justo encontraba absurdo que por matar un pálos blancos porque me razaron como á u n a bestia y me jaro se le castigase como por matar á Píos. La idea de vendieron por esclavo. Decian que en el ingenio eva más que jiudiera matarse á Dios de una pedrada le parecía feliz que en un patria. X ' o les hubiera agradecido que un aborto del delirio, no comprendía que cupiera en caDO se hubieran tomado tanto trabajo por mi felicidad. beza humana: pero el anciano negro le pregunto. ,'No Decian que no podían romperse mis cadenas ni las de se castigan en tu país los delitos contra la religión .' mis hermanos , porque había que, respetar derechos adY él se acordó de haberlos castigado. quiridos. Eso me probaba que, según vuestra m o r a l , el Por fortuna para él, antes de que se encontrase un crimen engendra derechos respetables. P e r o a pesar de castigo bastante grande para su crimen, otra tribu de todo, como he vuelto á mi p a t r i a , y gracias á lo que • negros se presentí' en las alturas. Eran unos vecinos aprendí en mis viajes, soy aquí rey, no quiero pagaros que venían á caza de hermanos suvos para hacerlos inal por mal. Puedes tranquilizarte, blanco . no te haré prisioneros y venderlos á Europa. Hubo una gran ludaño. cha. Los negros . cuyo Dios había sido muerto, huye—Pero tus compañeros... m u r m u r ó D . J u s t o . ron; los otros, que teman otro Dios mejor, una pie—Ali, eso es diferente. Jijo el n e g r o . E s muy posi- dra que no podía morirse, recogieron á D. Justo y le ble que si te encuentran te paguen los beneficios d e q u e aplaudieron y ensalzaron al saber que había dado nos colma tu raza, y por eso te aconsejo que te escon- muerte al Dios de sus enemigos, y más de una negra das. Es más, te aconsejo que te escondas m u c h o , p o r - dijo mirándole : la verdad es que para blanco no es del que andan registrando nuestra isla en busca de su todo feo. Casi parece una persona. Dios, que se ha escapado. Busca una g r u t a profunda, métete en ella y no salgas. I,os negros no son tan tontos como dicen los parti—lie moriré de hambre. —Posible será. Kn tu p a í s , á quien tiene hambre darios de la esclavitud moderna. Viviendo en su país se le da una moneda de plata ó cobre ; yo soy rey . t o - de una vida puramente animal , su inteligencia se ha debilitado . pero han brillado en la antigüedad: de tiemma un regalo regio. Y echando á sus pies una g r u e s a pepita de oro , se po en tiempo aparece algún Juan Latino que prueba ([lie la raza es susceptible de la más alta civilización, y alejó cantando : casi siempre entre el negro esclavo y su amo hay meYo tengo dos caballitos, nos diferencia intelectual que entre el mismo amo y Uno blanco y otro negro, El blanco no vale nada, Sócrates ó Napoleón, á cuya raza nadie pone en duda Ll negrito es el que es bueno. que pertenezca. Según Ueseherelle . los negros dicen que Dios, al Don Justo hubiera preferido un panecillo á la pepita, pero sin duda en la isla, no había t a h o n a s ; cogió el p r e - principio del mundo, croó tres hombres y tres mujeres sente , y oyendo acercarse los gritos de los n e g r o s , h u - de su color y otros tres blancos con sus respectivas yó como ciervo perseguido; corrió en todas direcciones, compañeras , les dejó la facultad de elegir el bien y el y al cabo encontró una g r u t a donde se metió... Los n e - mal, y puso en el suelo á un bulo una enorme calabaza gros pasaron por delante varias veces siempre dando y á otro un papel cerrado. Los negros tuvieron el prigemidos, pero no registraron la g r u t a y no le vieron. vilegio de elegir los primeros v eligieron la calabaza, Cuando dejó de oirlos se atrevió á asomar la cabeza. suponiendo que estaria llena de preciosidades , pero no Tenia un hambre horroro-a y miraba a un lado y otro encontraron en ella sino : Igunos metales ; los blancos, buscando un árbol frutal , pero nada habia, Sólo al cabo abriendo e! papel , aprendieron tildas las ciencias. Dios le un rato vio en medio de la llanura un pájaro del t a - entonces abandonó a los negros en los bosques, v los blancos se embarcaron para otros países. maño de una perdiz , que parecía muy fatigado. Los libertadores de 1). J u s t o , recordando estaleRelanzó a l a cabeza la pepita de oro" y tuvo tal yenda , trataron de sacar partido de su adquisición. acierto, que le maté» del golpe. A E s , dijeron, de los que han leído el papel, tengá< fin comeré, exclamó... P e r o en el momento en lúe se apoderaba de su caza, las colinas inmediatas p a - mosle con nosotros y nos enseñará los secretos que recieron coronadas de grupos de negros que descendie- constituyen la fuerza de su raza; y pensaron que los ron como torrentes g r i t a n d o : ¡Impío , impío ! ¡ H a a s e - mejores lazos con que podian atarle (ésta i'vX' su torped a d o a nuestro Dios! con tanta furia como nuestros za) eran los lazos de la familia. Al efecto buscaron una verdadera Venus de su especie; es decir, la antítesis muelos cuando se lanzaban contra los judíos. nt de las nuestras , una Venus tal, que por no verla podia res-1 ° 6 1 a S r a v e - ' ' o s pueblos primitivos son por eaW g e n e r a l f e t ichistas. La razón h u m a n a , cuando cualquier cristiano dejarse empalar. En cuanto á su virpisza a desarrollarse, presumo una cosa m u y n a t u - tud nada habia que decir, sido s.e la echaba haber sido la querida de tres monos. Don Justo se negó á contraer cultas C " e S t a t v a l ) a J ° a 1 3 a y l e persuadir á las naciones el enlace , pero ellos le persuadieron dulcemente no cidosS ' ] a . S a ^ e r : 1 u e a s i como nosotros somos desconocí uien a a habrá seres superiores ;i nosotros , ¡i dándole de comer y administrándole algunas docenas laraz 1° C 0 I 1 0 C W ( h n ° s por falta de sentidos. Cuando de palos hasta que consintió. Al fin se dio ú partido, y res l a ° " '] \"' p a s o n " ' l s ' e o ! ° c a sobre todos estos s e - el matrimonio fue consumado. Como era natural , D. Justo en cuanto pudo, sin cui•tniltin]' ' I jei '° l l ü ' o s s u p r i m e , al c o n t r a r i o , los Ca> a c o n e 1101nl> darse del abandono en que dejaba á su nueva esposa genio"' ' re de dioses, ya con el de que estaba en cinta , huyó en el barco de un negrero supone' y u V 0I l 6l SdG°1 eásn ge cs !t eá su> e t cC''( ) ^'t u <m t o"t0lllls t i P° c l l s que arribó á aquella costa. He veo al fin libre, dijo al nos t ' °" " -' con nosotros verse sobre cubierta; pero la esposa negra que le habia tomado amor habia observado su fuga y seguido sus 6 C s as ¡lasos, y cuando el navio soltó las velas, se le presentó •""Kuim ' *' formas otros t a n t o s disfraces, cios ' p l e s extraña. Juvenal se burlaba de los e g i p - diciéndole: Amor mío, aquí estarnos todos. ban ciertas Don Justo tuvo que contenerse mucho por no arroqne p o r V hortalizas. No consta más n °s nos 1 ' 1 U e d o r a s e n , y lo que dice de los cristia- jarla al mar. W o s e x t r a i a C e . C r t ; c r c l " o l i a b l a l ) a de los antiguos p u c harlos f ' ' e ' ° S c o n ' a exactitud con (pie suelen h a I). Justo tenía desgracia cuando se embarcaba. Esta ^ a d i ¡X>u 1 C < ¡ M > S ' ' < i s m o d e r n o s ; pero :í decir ver- vez una borrasca destrozó la nave. De toda la tripu8e >ni se disfrac 1 ' ' " ' de los (|iie creian que un genio lación solo se salvaron en una balsa diez é» doce persoaQ iinal ó ,1 f ') l a n t a , los (jne creen <iiie: si- disfrazado nas, entre ellas él v la negra. 1,..' P " o Ue hombre? Estuvieron quince dias en el mar sin ver una isla, sin "ente estas i,leas, cada p u e b l o , cada fa- ver una vela. Las provisiones se acabaron, el agua se agoté). Los ' e « u i d a s e V V f ' 1 > r . o c l l n i l l u l e n e l ' s l 1 «<'"''> t u t e l a r . | u e ?ae«to q n e a ^ t e m l i e s e como el amo (Íel perro, y ha s u - náufragos, más que personas, parecían espectros. La Üotr aform S . S e U l ° t"telar se le revelaba bajo u n a inteligencia habia muerto en todos aquellos seres, y con El |, Ue u, • U e a i li» el fetichismo. ella la conciencia. Ya no eran hombres, eran fieras hamOr brientas. Wolo U n •• íl ' i u e u a b l a ai'nbado D . J u s t o tenía )Ia h Uno do ellos dijo un dia á otro no sé qué cosa al °ido á r P a j a v o (iue > cansado de estar preso, h a 'P'astado de e C o r r o r l o s campos. Don J u s t ó l e habia oído. Debió ser horrible, porque el que la ovó se es:ldos , eoinr, l^ n a ._? < í d l ' a d a ' y i o s negros estaban enture- , tremeció é hizo un signo de repugnancia. ran estado los árabes si un caza- ' Pero al dia siguiente, el que se habia estremecido rÑc^6tii Anterior y ime(lon I>resen " Inicio 259 la dijo á otro, y al otro dia todos la sabían. Todos, e x cepto la. negra , porque de lo que se t r a t a b a era de sacrificarla al hambre común. Cuando se lo dijeron dio horribles chillidos, t r a t ó de defenderse, se asió a i). J u s t o para que la defendiera, pero él estaba enfermo febril, no podia moverse, apenas podía hablar. La negra fue despedazada viva con las uñas, con los dientes de aquellos lobos con forma humana que IIIIIgian de gozo royendo sus huesos y bebiendo su sangre ansiosamente. Uno de los marineros arrojó una tajada á 1). J u s t o , que seguia echado pidiendo agua, y él la comió. ¿No hubo madres que se comieron á sus hijos en el sitio de Jerusalen .' La barca fue al fin recogida por un navio que iba á E u r o p a , precisamente al mismo país de D. J u s t o . E-te, al saberlo, lo primero que hizo fue ocultar su nombre. Esperaba ser perdonado, pero temía á la ley que él en otro tiempo habia interpretado tan soberanamente. En su país las autoridades le dieron algún socorro; mego le abandonaron, y sólo, anciano, pobre, sin tuerzas, sin nombre ni familia, vivía de pedir limosna. l'na noche de invierno un caballero viejo le encontré) medio muerto de hambre y de trio en la puerta de su casa. Se compadeció de él y le hizo entrar. Cuando D. J u - t o hubo tomado una taza de caldo y un poco de vino, reconoció á su protector. Era un fiscal, antiguo compañero s u y o , muy rico y más severo que él: el vulgo le llamaba el verdugo para ponderar su crueldad. El fiscal también lo reconoció, y levantándose y cogiéndole por u n a o r e j a , le dijo: ; Hola , h o l a ! ¿estás aquí , buena pieza? Don J u - t o cayó de rodillas e x c l a m a n d o : — P o r Dios, por lo que más améis, no me descubráis. P e r o el fiscal le tenia sujeto como un perro de presa y repetía : — El que la hace que la p a g u e . — E s preciso vengar á la sociedad, es preciso que el ejemplo de la pena aterrorice á l o - culpables. Entonces un caos de ideas horribles se revolvió tempestuosamente por la imaginación de 1). J u s t o . Cubrió su vista un velo s a n g r i e n t o , vio la cárcel, el cadalso, el v e r d u g o ; recordé, que el fiscal al entrar h a bia guardado en una cómoda u n a cartera con billete- de banco; recordó que habia mandado á su único criado á llevar una carta ; vio un cuchillo sobre la m e s a , pidió gracia por ultima v e z . y como el fiscal le repitiese: — N o , n o , y empezase á dar voces, le hundió el cuchillo en el corazón. En seguida abrió la cómoda, cogió la cartera y quiso huir incendiando la casa para ocultar su fuga, pero la calle estaba llena de gente , la justicia acudió y fue preso y conducido á un calabozo. Don J u s t o fue conducido :í u n a h ú m e d a , oscura y sucia m a z m o r r a , que era más terrible que!eí pozo en que se abandonó á Daniel con los l e o n e s , porque los criminales allí encerrados eran m á s temibles que todas las fieras inventadas por la Providencia. El uno habia matado á su padre y su m a d r e , el otro se habia comido á sus hijos como Saturno. E n t r e todos descollaba un anciano venerable como un padre del yermo , alto, flaco, de rostro aguileno, de cabellera n e v a d a , con negros ojos de fuego , de voz d u l ce y de benévola sonrisa. Nunca habia matado por odio ni p o r i n t e r é s , sino por entretenimiento. M a t a b a como otros fuman, y no creía, él, que era erudito como pocos, y como pocos l ó gico , que fuera más culpable el m a t a r que el fumar. J u s t o le tomó cariño por su inteligencia, á cuya luz le gustaba descansar, como un viejo al rayo del sol, y trató de convertirle, pero á las primeras palabras vio que no podia luchar con él. U n a tarde le contemplaba dormido con el tranquilo sueño de la inocencia. El anciano se despertó y fijó en él sus ojos claros y serenos. — N o sé cómo podéis dormir a s í , le dijo J u s t o ; ¿no tenéis remordimientos? —¿ D e q u e , respondió el anciano, de ser como Dios me ha hecho? Que los tenga el (pie me ha organizado. ¿Habéis visto á un tigre, á una serpiente que tenga, r e mordimientos jamas? — Pero los que "habéis asesinado — H a b í a n asesinado á otros muchos sin tener r e mordimientos de conciencia. J u r a d , yo también he d e seado en otro tiempo seguir el sendero de la virtud á quien he amado como D . Quijote á Dulcinea, y por quien he hecho más locuras que el héroe de Cervantes; pero al fin he exclamado corno Bruto al suicidarse: — Virtud, eres un nombre hueco.—El h o m b r e , que es un átomo en la creación, se ha figurado que el mundo se Siguiente LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. 200 XVI .M.\ i JI; I L).—Talleres de pulverización en la fábrica (le abemos minerales de los Sves. Pacz, Utor, Soler y Compaília (calle de 1'elU s, n.° 3). III II l i l i I! lllillllllM II lili MADRID,—Subasta de carruajes y caballos de las caballerizas reales, Anterior Inicio Siguiente LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. XVI ]„ hecho para ¿1, y Havirtud á lo que O conviene, y vicio a¡i lo que le perjudica; pero eon el wismo fundamento podría hacer, gnal razonamiento una pulga. Es más, cada siglo, cada clima, cada nación formado también, ha --obedeciendo á su noral instinto, un código me y religioso que cree santo é infalible, y que suele estar en desacuerdo, cuando no en contradicción, con los códigos de los demás siglos, climas y pueblos. La educación nos hace aceptar esas preocupaciones, y como siempre queda en la cántara olor del primer vino que ha tenido, el recuerdo de ellas es lo que nos causa los remordimientos. — ¿Pero no creéis en nada? — Creo en Dios, porque creo en mí; creo en el todo, pues no siendo yo el todo , debo ser parte. — No os entiendo. Y ¿qué falta os hace? Luego se volvió del otro lado, murmuró algunas palabras en voz baja, suspiró, enjugó una lágrima que se deslizaba de sus ojos limpia y silenciosa, y sin hacer caso de Justo que le contemplaba con dolor y con respeto á la fez, olvidado quizá do que habia quien le escuchara, dijo, hablando consigo mismo: — Qué suplicio tan horrible es ser. Vivir es desear, des S_ar es padecer. El suPlício de Tántalo es el símbolo de la vida. No es posible vivir sin matar. Los indios, que para n <> matar sólo se alimentan de vegetales, son victimas de su desconocimiento del microscopio. El vegetal está lleno de seres animados , lo est a el a g u a , lo está el lre ? ! todo átomo es un "isecto. Con todo movimiento producimos iniUar es de asesinatos. El sa nto más inofensivo co?»te durante su vida ' an to asesinatos como l m á s de sals asesinatos del 108 ^ s horrorizan, del santo n o ; por q u é ? p ma Bodega de un buque negrero, capturado recientemente en las aguas de Zancibar. >enW m°s Sacrificio, tino J taniaño de la vic'tima. no n ? a d a s c ñ 0 1 ' a que 10 Puede n C Ísin a r desmayirnna de n r holia > H o s , traspasa una . g a c °n una aguja v por 261 animales eran simples máquinas y que se burlaban de los que les su ponían sensibles, diciendo : « El dolor en la vida del hombro se explica por el pecado original; los que creéis que los asnos padecen, suponéis que habrán comido paja prohibida.» Pero esta especie de razonamiento sólo prueba una enfermedad de la inteligencia. El animal siente por lo menos tanto como el hombre, quizá más, porque el sentimiento y la razun son dos ramas del mismo tronco, y cuanta más savia lleva la una, ni é n o s queda para la otra. Vivir es padecer y hacer padecer, ¿y cómo dejar de vivir si la mente no es más que un fantasma , si lo que llamamos nacer y morir no es más que el paso de un crisol á otro crisol? ¡Si al menos estos cambios sirvieran para purificarnos! Pero lo que no ha nacido no puede morir; el ser será como ha sido, el movimiento durará eternamente, y navegando por un mar sin orilla, jamas llegaremos al limbo Xo en las puertas del infierno, sino en las de la vida debe escribirse el Lasciate ogni speranza del Dante En aquel momento entró el carcelero, y dijo, asiendo á .Insto por el brazo: — Vamos , galopín , que el señor verdugo espora. •Justo sintió que la sangre se le helaba en las venas. ¡Morir! ¡morir! I Nunca le habia parecido tan hermosa la vida ! Pero entonces, el anciano pareció despertarse, se volvió, saltó del lecho como una flecha del arco, clavó un puñal en el corazón del carcelero, le desnudó con rapidez febril, arrojó su traje á Justo, y le dijo : —Disfrázate con esto y huye, pues tienes miedo á la muerte •— Pero ese hombre asesinado, murmuró Justo, que estaba atónito. — ¿No has visto que hahia matado una mosca al entrar? Si es justo que quien mata muera, bien muerto está. Huye. Justo quiso huir y despertó. Al despertar J.usto, en el comedor de su casa, vio aún á Benigno, que sentado enfrento de él,.la barba apoyada en la mano y el codo en la mesa, le miraba sonriendo y le preguntaba: •— ¿ Habéis dormido bien? (Se continuará.) TIPOS M.UÍlíCK-jUllüá.—El aguador ambulante, en Tánger. Anterior Inicio Siguiente LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. 262 LOS PRIMEROS BUQUES DE HIERRO. Xo sin razón ha dicho un distinguido metalurgista que los usos del hierro son tan numerosos que casi se ¡Hiede decir que la marcha progresiva de las artes y de la sociedad está ligada á los progresos de la siderotecnia. El hierro posee la facultad de adelgazarse y ser reducido á planchas, de ser reducido ahilo ó alambre, de ser aguzado, de endurecerse y reblandecerse á nuestro arbitrio. Asi es que se presta, no solamente á todas nuestras necesidades, sino también á todos nuestros caprichos. Es un poderoso ó irreemplazable auxiliar de las artes y de las ciencias: sirve al mismo tiempo á la agricultura y á la guerra. El mismo mineral nos proporciona la espada y la reja del arado, el buril, el cincel, la aguja, los muelles o resortes, el áncora, la cadena , la máquina de vapor, el fusil, la bala y la metralla. Entraba ya e:i gran cantidad en la construcción y armamento de los buques de madera, y la invención de los buques de hierre vino, hace ya bastantes años, á darle un nuevo e importantísimo empleo. Hoy que la construcción de buques de hierro ha tomado tanto incremento, tal vez no parecerá del todo inoportuno dirigir una mirada retrospectiva, y rcíerir los pasos lentos, pero seguros , que dio á su nacimiento esta industria hoy tan pujante. Las primeras embarcaciones de hierro de que tenemos noticia, son las que navegaban en algunos canales de Inglaterra á linos del siglo XVIH. El 28 de Julio de 1787 escribían de Birminghani lo siguiente: ic Hace algunos días, un barco construido de hierro inglés por .1. Wilkinson, ingeniero de la herrería de Ilradlov, subió por el canal á esta villa, conduciendo 22 toneladas y 15 quintales de hierro. Sus dimensiones son próximamente las mismas que las de las otras embarcaciones que navegan en el canal, [mes mido 70 pies de largo y G pies y 8 '/s pulgadas de ancho. ' E l grueso de las planchas con que está construido es de unos 5/1B de [migada, cuyas [(lanchas están unidas ó clavadas con remaches, como las calderas de cobro o li-as de las bombas o máquinas de incendios ; pero la roda y el codaste son de madera, y la regala está torrada ó revestida de lo mismo; los baos son de olmo. Pesa unas 8 toneladas, puede cniducii , teniendo agua suficiente, más de .'Í2 toneladas, y cala 8 ó 9 [migadas sin carga. » El uso de esta clase de bateles empezó á hacerse más general hace cerca de sesenta años, [mes consta (pie en una junta: que la lii'itish Assiicuitiou celebró en (ílasgow en 18 10, se leyó una Memoria sobre constrtic • cion de buques de hierro, después de cuya lectura varios de los presentes comunicaron hechos que probaban que hacia, ya mucho tiempo que el hierro se empleaba en la construcción de embarcaciones ocupadas en la navegación de los canales, l'arcce que en el misino año de 18 10 oslaban desarmando en el condado do Stafford algunos barcos de hierro que habían servido durante veintiocho años. Es curiosa la carta que Mr. Jevons, de Liverpool, dirigió el 19 de Marzo de 1812 á Mr. («rantham, de cuyo excelente tratado sobro construcción de buques de hierro hemos tomado la mayor parte de estos datos. Esta carta contribuye á demostrar cuánto tiempo ha pasado ya desdo que se hicieron los primeros ensayos de aplicación del hierro á la construcción de buques. Mr. Jevons refiero en ella que ya en 1815 hizo construir un bote do hierro, á bordo del cual daba frecuentes paseos en el rio Merscy , y que tres ó cuatro años más tarde hizo construir un salvavidas, también de hierro. Ambas embarcaciones dieron construidas por Joshua Jlorton, en .lipton, cerca do liirmingham. I'ero fue en llorsley, condado de Stafford, donde se construyó el primor buque de vapor, de hierro. Estaba destinado á navegar en el Sena, y fue llamado Aaron Manbij, que era el nombre del autor del proyecto. Construyéronlo Manby, hijo, y el capitán Napier, el mismo que después ha alcanzado el rango de almirante, y que con tanto acierto dirigió la expedición contra el rey Teodoro de Abisinia. Terminóse el Anmn MUnbn á fines de 1821, y fue conducido en trozos ¡i Londres, volviendo á armarlo allí cu un dique. Recibió un cargamento de linaza y do hierro, y el capitán Xapier lo condujo de Londres al Havre y de allí á l'arís, siendo el primero y único buque que durante los siguientes tremía años nave;;' > directamente de París a Londres. Oigamos lo que dice el misino Mr. Manby de los vapo- : res que construyó enseguida: «Algún tiempo después construí, también de hierro, i otro buque de vapor semejante al Aaron Manh)/, aunque con pequeñas modificaciones ; [tero como no podia ser admitido en Francia á causa de las leyes de navegación que se habían promulgado, fue preciso introducirlo en trozos, como lo hice, armándolo en Charenton, Anterior donde había establecido previamente una fábrica de hierros, y donde más después construí otros dos vapores de hierro, todos para navegar en el Sena. Continuaron navegando hasta 18:10, cuando por causa de la revolución y alguna desavenencia entro los accionistas, fueron vendidos á una nueva sociedad. Nada tenia yo que ver con esta nueva sociedad, pero los vapores continuaron ocupados on la navegación del Sena hasta la época en que dejé la Francia, y creo que todavía continúan. He 1822 á 18;¡0, el casco del Aaron M<t;tb/¡ jamas necesitó reparación alguna, á pesar de que muchas veces encallé) teniendo el cargamento á bordo.)) A propósito del Adren Maní///, véase lo que se leía on he ConMitniionel de París del 1:5 de Junio de 1822 : u. Le batean á vapeur en l'er, Y Aaron Mdnb>¡, Capt. anglais Xapier, est arrivé hier. lundi. á liuit honres du soir, au Port St. Xicholas. avec un chargement de graine de tréíle . qu' il avait [iris á líoueu , et do quolques [liceos de fon te et de mécaniques, venant d'Angleterre. Le batean fraileáis á vapeur. Le Din: de Jlordeanx, arrivé de líouen samedi au soir, avec un chargement complot qu'il n'avait pu mettre á torre cu entier, était partí au port á quatre honres du soir pour aller á la rencontre du batean anglais qu' il a alteint á la hauteur de St. Cloud, en face des cascados, lis sont partís ensemblo, de la pomte de l'lsle Seguin , et le batean fraileáis, dont la mameuvre est visiblement supéricure. est arrivé au Port St. Xicholas quarante minutos avant Tangíais. Les curieux ont été, pendant toute la journée. visiter les doux bateaux.» El vapor M'anjuix W'dlesleij (el vencedor do "Waterloo era á la sazón lord lugarteniente de Irlanda) fue construido bajo la superintendencia de Mr. Granthain, no el caballero do este nombre citado más arriba, sino sil padre. Empezóse á construirlo hacia 182o, pero por varias cireun.-tancias que creemos inútil relatar aquí, no estuvo terminado hasta 1*25, que fue cuando marché) á su destino, que era Lough I )erg, sobre el rio Shannon, en Irlanda. Treinta y cuatro años más tarde. (> ' sea en 185!'. estaba todavía á lióte, aunque ya era inútil para navegar. En 18:51, Mr. Mac Gregor Laird construyó el Albnrkah, y dos é> tres años más tarde Mr. John Lair construye) el Jdlni /!an'/o!/ili y el d-arrij ()n:en y otros dos vapores para el rio Eufrates, para la expedición mandada por Chesney. El mismo Mr. Laird construye) en 18:57 el Haiiitioir, de 580 toneladas, destinado á llevar pasajeros y mercancías de Londres al Havre y viceversa. Mr. Laird l'ué también el que en LS:!',I construyó el A7//ÍÍ--.</.--, de (¡GO toneladas, y el Plilei/etlmn . de 570, para la compañía de las Indias O ríen tales. Estos buques tomaron una parto brillante en la guerra de China, en 18 12. Pero bien puede decirse que la construcción do buques de hierro lia hecho on estos últimos tiempos grandes progresos. ¿ (¿ué son los limpies mencionados al lado de los que ahora se construyen? Tanto la marina mercante como la militar de todas las naciones cuentan con numerosos buques de hierro de colosales dimensiones, (de-gantes formas y superiores cualidades marineras. Todos los dias están saliendo de los astilleros de Clyde y de los domas de Inglaterra, vapores que miden más de 400 pies ingleses de eslora. ¿Qué figura baria el Aaron Jíaubj/ de 1821 al lado de uno de esos magníficos buques ? ¿ Y qué diremos de esos formidables barcos de coraza, verdaderas fortalezas flotantes, con sus grandes cañones y gruesas armaduras? Ahí está el Achules, su longitud entre perpendiculares es ¿580 pies, y su mayor manga óS pies y i! '\2 [migadas. Su coraza tiene 4 '| 2 pulgadas de grueso. Este buque costó más de 450.000 libras esterlinas, ó sean 45 millones de reales. El Black Prinee os un buque de las mismas dimensiones próximamente : lleva máquina de las llamadas de maleta, el diámetro dejos cilindros es 112 pulgadas, la longitud del golpe 4 pies, el diámetro del tubo principal 32 pulgadas. Lleva el tornillo ó hélice de Griflith, de 24 '|.j pies de diámetro, para hacer 50 revoluciones por minuto. Tiene diez calderas, cada una de 14 pies de largo, 10 [mis y :í [litigadas de ancho y 12 pies y 4 pulgadas de alto, con cuarenta hornos, conteniendo cada, una 1!) toneladas de agua. El condensador tiene 15 |iiés de largo, 12 de ancho y í) de alto, y el (ubo inyector tiene !) pulgadas de diámetro. VA Minntaur mide G.G21 toneladas, su longitud entre perpendiculares os 400 pies. La coraza tiene 5 '/.^ pulgadas de griioso y pesa 1SG0 toneladas. Pero si estos buques son verdaderamente colosales, lo es mucho más el lamoso (ír/'at rlnxteni, llamado primeramente LeeiaUían, el cual tiene nada menos que G8Ü [lies de eslora, 8:5 de manga y GO de puntal. Xo es probable que veamos jamas im buque mayor; tal vez no se construya nunca otro tan grande. Su descripción nos llevaría muy lejos, pero basta haber consignado sus Inicio 3- dimensiones principales , para formarse una íde cuánto ha adelantado la. construcción de buques deV r<>, y para qu- se vea hasta dónde pueden conducid hombre el trabajo y la perseverancia. Yn'Kvrrc ñu ARAXA. TEMORES JUSTIFICADOS. —Señor cura, de un peeailo Contrita vengo á acusarme. — Tu pecho puedes franquearme. — l'ues sabréis ipie me ln encontrado Aye-r con mi novio - -• Y qué? — Pidióme con rendimiento T'n lieso.— ¡ Liviano intento ! ¿V tú? —Yo. s-e lo negué. — ¡Muy bien!—M¡,s luego —¡Aydeiní! Si hay un luego, áui: no le alabo. — Insistió tanto, que al cabo — ¿Se lo concediste?—Sí. —Hiciste nial.— ¡Qué queréis! Tanto me rogó —Comprendo; Mas . hija , te recomiendo Que á sulas juntos no estéis. \\ vil a su compañía Como un peligro de muerto. —Lo haré así: mas ¿si por suerte A uelvo á encontrarle otro dia? — Entonces, sin vacilar. ])url.°. su intención artera. — ¡ Ay, señor cura. Dios quiera Que no le vuelva ¡i encontrar! L. SIPOS. EL SUEÑO DEL MÁRTIR. \ o no s-_> si lo vi en sueño. O ou beat¡íieo delirio ; Mas los muertos despertaban Para presentarse al juicio. I'e las tumbas entreabiertas, Sin concierto y sin guarismo. \ ¡i la par cobrando todos Su sustancia y ser anticuo, Yo los vi brotar y alzarse En impulso repentino. Como el junco di1 los campos, Que se nace p<u- sí mismo; Kl espanto en el semblante, \ clin irar como nf endido. Tras las sombras de la tumba, Pe la eterna luz al brillo. ('ada cual alzaba a] viento, O uemiibi I'I ruego ó e-rilo. Que a explicarse im acertaban Asordados mis nidos. Yn no sé lo que decian Los turbados redivivas: P e uno sobi, á mí cercano, Kl acento oí distinto. ('(mtrastaba de su rostro Lo apaei ble . lo 1 »en iirnii. Con (d pasmo v soiiresaIto Kn aquél ¡es di f nndiilo. Y vi un ángel ;i su lado Con la palma del martirio, Los vestidos como nieve Y las alas como armiño. Y ambos, juntos como hermanos, Iban rumbo del empíreo ; Y palabra hallando el mártir, Dijo al ángel, sorprendido: ((¡ lírcve sueño! Aun estarían Lamentándome los mios ¿Pues ayer no fue mi muerte? ¡Qué allégalo estaba el juicio! Y aunque ya de mí (lisiaban, Kn voz leda, como un niño, Oí al ángel responderle : «Si han pasado veinte siglos )> JOSÉ ANTONIO CAI.CASÍO. LA NOVELA DE UN JOVEN RICO. (CONTINUACIÓN.) CARTA DU SOLEDAU. L a carta decia así : , ^ «Me entregar., n la carta de V. con su donativo p ^ el pobre enfermo, «pie ya. m, necesitaba nada de e»^ mundo el infeliz. A g r a d e z c o , sin e m b a r g o , 01 SO de V., aunque no lo ha hecho V. movido solana ^ del hermoso sentimiento de la caridad J p ' * ^_ prójimo, porque- si así hubiera sido, no habría • ^_ crito la carta que acompañaba á las monedas. 1 e r ^ ted calculó bien q u e , acompañando este donáti T < g im obligaba á leer la carta. L a he leido, señor °'ojtedudado si debería dejarla sin r e s p u e s t a , pero la Siguiente LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. .° XVI 265 ! —A propósito ; en la Junta do señoras hay una Some obliga á c o n t e s t a r á Y. , b i e n q u e s e a p a r a d e - : d e l P r o g r e s o e n t u s i a s m a a h o r a al i l u s t r a d o p ú b l i c o u n a cirle poco m á s (pie n a d a . cuntariinx d e e s e n o m b r e , q u e c a n t a l a Suhá p o r l o ledad. -¿Si?.... j Q u i e r e Y. s a b e r q u i é n es l a q u e p e d i a en la, i g l e s i a , llamojico. — La excelentísima señora marquesa de la Code San S e b a s t i a n p a r a los p o b r e s , q u i é n es la q u e e s — l'or Dios, don Facundo lina. taba junto ¡í la c a b e c e r a del l e c h o del m o r i b u n d o . S a - Per.., h o m b r e d e 1 >ios . ¿ q u i é n es e s a S o l e d a d ? —¿Casada?.... tísfaré la curiosidad d e Y . Y o soy la q u e p e d i a p á r a l o s ; _ L e a Y . e s t a c a r i a , a m i g o m i ó . E s la d e la m a n o , pobres y a c o m p a ñ a b a al e n f e r m o . ' — ¡ A h ! e x c l a m ó d o n F a c u n d o , l i j a n d o la v i s t a e n — Xo señor, viuda tres veces; tiene ochenta y seis años. í Y a ' s a b e Y. q u e e r a y o , y a h o r a q u e r r á Y . s a b e r ' el papel , y o c o n o z c o e s t a b ' t r a —Siempre está A", de broma. quién soy y o . ¿ No_es v e r d a d ? Pura curiosidad — (- Si ? ¿ La c o n o c s Y . ? ¡ O h ! ¡ Qué fortuna!... Si A", me hubiera, visto s i n el velo c o n q u e a c o s t u m b r o — Yo he \ i s l o esta letra otra vez ú otras veces. —Hombre, yo busco á Soledad por todas partes, y i cubrir m i r o s t r o , es s e g u r o q u e n o h a b r i a Y . lijado —¿Dónde? en cuanto oigo ese nombre, me informo de las circunsen mí su a t e n c i ó n , p e r o esa es la c o m l i c i o n h u m a n a , lo ' — P r o b a b l e m e n t e e n a l g ú n p a p e l ; m e p a r e c e q u e , tancias de la persona. También sé de otra Soledad desconocido tiene p a r a n o s o t r o s g r a n d e s a t r a c t i v o s . U s - : l a s l e t r a s se v e n , p o r lo r e g u l a r , e n el p a p e l . —¿ De otra.' ted se lia forjado ya e n s u i m a g i n a c i ó n u n a ó m a s n o - j — T i e n e A", r a z - . n , d o n ' F a c u n d o : m i p r e g u n t a e s —Sí señor, una oradora que ayer habló en una r e unión do libres pensadores y pensadoras. L<i Corresponvelas en que yo seré la p r o t a g o n i s t a ; \ . c r e e ( p i e . c o - I n e c i a . nociéndouie, va a c o n o c e r a l g o e x t r a o r d i n a r i o y m i s t e - ¡ — C á l m e s e Y . , y n o s e a t a n i m p r e s i o n a b l e . V a b u s - : dencia da cuenta de la reunión, y en ese suelto he visrioso, y por eso m u e s t r a tanto_ afán p o r -conocerme. : c a r é m o s a l a . m i s t e r i o s a a u t o r a d e la c a r t a , y d a r e m o s to epie la ciudadana Soledad no se cuántos hizo una ; Curiosidad , solo c u r i o s i d a d ! P e r o v e a A . si y o s o y " c o n ella c u a n d o m e n o s lo p e n s e m o s . S i es h e r m o s a , n o calorosa defensa del sexo débil, atacando al fuerte de la franca: la presencia d e Y . h i z o p r o f u n d a i m p r e s i o n e n d u r a r a el m i s t e r i o , p o r q u e u n a m u j e r h e r m o s a n o s e manera más enérgica, y pidiendo [.ara la mujer iguales m i , porque se parece \ . a u n h o m b r e q u e lia sido d u e ñ o a v i e n e á o c u l t a r el r o s t r o m u c h o t i e m p o . L a s s u c e d e á derechos que para el hombre. Pero supongo que no será de mi corazón , objeto d e m i a m o r , del a m o r m a s p u r o bis m u j e r e s h e r m o s a s lo q u e a l o s p o l í t i c o s (pie s o n esa la Soledad que á Y. le preocupa. —Si no trae Y. más noticias y firme X i n g u u o lúe a m a d o c o m o é l , n i n g u n o t a n 1 g r a n d e s o r a d o r e s ; n o les a g r a d a id r e t r a i m i e n t o , y s i digno (le ser a i n a d o . T e n i a l a m i s m a edad q u e Y . r e - • a l g u n a v e z lo a d o p t a n , á ía p r i m e r a o c a s i ó n lo a b a n — Xo hay que desesperar por eso. Puede que en el presenta, la m i s m a d u l c e y s u a v e m i r a d a , la m i s m a d o n a n . E n t r e t a n t o , n o t e m e i Y . d u d a vo b u s c a r é esa ' bbaile encuentre A', á Soledad. — ¡Ojalá! vez en el | Soledad en todo .Madrid : cu las reuniones ¡\ q u e —Cuidadito con las máscaras. Una mujer con careta che del tra/uc/n . c u a n d o t u v o \ . la b o n d a d d e p a g a r t o . en los t e a t r o s . e n l a s i g l e s i a s , e n los p a s e o s , p r e r mí y por m i n a , a q u i e n s e l e h a b i a o l v i d a d o el g u i l l a r é , i n q u i r i r é , a v e r i g u a r é , y n o d a r é p o r t e r m i n a - es sumamente peligrosa. Siento que le preocupe á u s nero, creí un u n . m e n t ó q u e Y . e r a é l . el h o m b r e á d a m i m i s i ó n h a s t a (pie le lleve á Y . d e l a n t e d e s u d e s - ted tanto esa mujer desconocida. —,' Por qué .'.... líen tanto aui''' ; A y ! n o p o d í a s e r e l , el está m u y \ c o n o c i d a y le d i g a : ...Ahí t i e n e Y . á S o l e d a d , n —Porque acaso descuide A*, sus estudios. jos do aquí. D e s p u é s he v i s t o a Y . e n la i g l e s i a d e La carta de Soledad contenía u n a postdata q u e — ¡Oh! no, al contrario. ni Sebastian, en el t e a t r o y e n c a s a ¡leí p o b r e e i d e r decía : — Más vale así. ito, v no debo o c u l t a r l e q u e s u presencia. u\- h a cati«.Si me escribe A'., basta q u e ponga en el sobre m i mit o.iJo nombre y un sello de! interior p a r a que l a carta heü'ue —Tengo un respeto á mi desconocida Por nad:i sa viva emoción. Y . , c o m o é l , v a a la i g l e s i a , t i e n e s tset edd puede creencias . no s u c u m b e al i n l l u | o ib 1 la e p i d e m i a r e i n a n - [aa mis m i smanos. m a n o s , I i. p u e d e escribirme e s c r i i u r i n ecu; c u a n t a s veces del mundo quisiera que puliera formar de mí un deste de inqiie la 1, ni al c o n t a g i o d e l i n d i f e r e n t i s m o ; u s - (¡mera . p e r o n o r e c i b i r á Y. con les i ación á t o d a s s u s c a r - ventajoso concepto. ted, como él hizo m u c h a s v e c e s , s e c o n s i d e r a h o n r a t a s , porque a mí me cuesta mucho trabajo escribir. » — I sfeii presiente que su famosa desconocida es viedo, vendo con la cal. -za d e s c u b i e r t a al lado d e l s a e e r J o a q u í n c s c r i m ó v a n a s veces á S o l e d a d , p e r o n o ja ,'Será-, en efecto, la marquesa de los ochenta y dotí: que lleva al e n f e r m o el m a y o r b i e n y el m a y o r o b t u v o c o n t e s t a c i ó n . D o . me.-es h a b í a n p a s u d o , y v a seis años ?.... — ¡ Oh, no! E< joven y bella. consuelo de n u e - t r a s a n t a r e l i g i ó n . 1 s t e d , e n l i n , e s , . h a c i a días q u e n o r e c i b í a c a r t a , c u a n d o r e c i b i ó u n a q u e — ¿ Como lo sabe Y. ?" como él , c a r i t a t i v o y g e n e r o s o , b s t e d t a m b i é n t i e n e , ' decia : — Me lo dice el corazón. como él tenía, en alto g r a d o el s e n t i m i e n t o d e lo b e l l o ; , ( ( A m i g o m i ó , a beneficio d e l o s p o b r e s n i ñ o s o x p ó —.V los jóvenes tan impresionables como A", les dice en el teatro Real vi á \ . u n a n o c h e , sin d i s t r a e r s e u n ¡ s i t o s se d a m a ñ a n a u n baile e n el t e a t r o Jieai ; e:i e s t a momento, embebecido oven.lo l a s d u l c í s i m a s i n e o m p a r a - | o b r a h<i¡ltt!i!<- d e c a r i d a d i n t e r v e n g o y o c o n o t r a s s e ñ o - el corazón muchas cosas que son agradables ficciones. Pero no insisto, que los caracteres como el de A', son bles armonías de la n i u - i c a de u n a d e l a s unís h e r n i o s a s \ r a s y s e ñ o r i t a s . y m e h e a c o r d a d o d e Y . p a r a e n v i a r l e y delicadas i n s p i r a c i o n e s del g r a n M e y e r b e e r . \ e r á u s - ¡ d o s b i l l e t e s . X o sé si ¡i A . le g u s t a n los b a i l e s . p e r o se muy susceptibles, y no quiero enojar á persona á quien ted, es para, m i u n a p e n a v u n c o n s u e l o al m i s m o ' q u e le g u s t a e j e r c e r la c a r i d a d . E l i m p o r t e d e los l u - tanto estimo. tiempo. Heles p u e d e e n v i a r l o á l a s e ñ o r a t e s o r e r a de, l a J u n t a , »¿\ qué m á s he de d e c i r á \ ? ¿ T u n e A . todavía Condesa de X X X . » El baile en el Teatro Jveal era brillantísimo; los pecuriosidad ile v e r m e . ' E - t o v s e g u r a d e q u e si m e . riódicos habían dicho poco encareciendo el lujo que se viera, no t e n d r í a d e s e o s d e \ o i v o n n e á v e r , y v o s i ostentaría en aquella liesta. quiero ver á Y. F u mi familia h a y a l g u n a p e r s o n a q u e ¡ r>, IIAII.K DI-: MÁSOAKAS. Joaquín quedó deslumhrado al penetrar en el gran le conoce, y p o r e s a p e r s o n a si'1 vo n o t i c i a s d e V. ¡lias pasados vio á Y . en u n a uhinif< stiirian y t u v e u n m a l : P a r a J o a q u í n im e r a cosa n u e v a \i)i baile d e i n a - c a - sah.n, y no pudo menos de manifestar su asombro á dia; porque en esas aficione.-. :io s e p a r e c e V . á a q u e l ; r a s ; h a b í a e s t a d o en a l g u n o e n S e v i l l a , y a u n en < >>n- I). Facundo, que le acompañaba. — Esto es magnílu'o, le dijo; yo no podía figurarme á quien yo creí q u e en t o d o h a b i a A', d e p a r e c e r s e . L a ' n a , p e r o e s i o s bailes no p o d h i n c o m p a r a r s e c o n los d e un espev'l;ículo semepiute. misma persona d e mi f a m i l i a , u n loco d e a l a r , m e a s e - \ uiiesl ro g r a n t e a t r o d e l a ó p e r a . Pon Facundo no le pudo contestar, porque ya les hagura que A . va, á u n <;lnh d e esos q u e a h o r a a b u n d a n ; C o n t a b a n los p e r i ó d i c o s , a n t e s d e q u e se v e r i f i c a r a , tanto; e s a p e r s o n a lo a p l a u d e , y yo lo d e p l o r o . • g r a n d e s p r o d i g i o s d i lujo q u e s e d e s p l e g a r l a e n la bla rodeado u\i grupo de donosísimas máscaras. —Toma, viejo marrullero, decía ¡i I). Facundo una " P e r o A . d i r á q u e á m i n o m e i m p o r t a t o d o e s o . S í ¡ l i e s t a , d e lo b r i l l a n t e q u e s e r í a l a r e u n i ó n , d e los c a p n n i e importa, imnorhi i i , , i - , u , , . es ,,_• un , . , , des,'iicauto , 1 , . ^ , , , , - . , , , ( - , . para . , . , , - , mí > . . ; saber ^ - , 1 , , , , - Idiosos , . 1 , , , . , , ^y„bellos 1 , , - l í , , . . - trajes t ,-.,;,...•que , ' , , ,o „ ,s. t^ e, , n, ,ti a r. í, ,a. n ; . , „las \ . . < más , , , ' i s elegantes , . ! , . , , . , , ' , r , . - - que vestía un rico traje de jardinera, presentándole ttint porqui' c l«e no se parece V. completamente á aquel á ouien he y bellas damas de la a r i s t o c r a c i a , y a s e g u r a b a n , en íin, violeta. amado tanto. q u e no faltaría allí p e r s o n a a l g u n a i m p o r t a n t e de M a - — ¿ Marrullero me llamas?.... Xo me conoces, por»^o quería decir á Ar. más que dos palabras , y llevo drid. Las señoras de la J u n t a habían colocado todos los que, ¿donde hay ser unís inofensivo que yo? — Y nulo empeile ruido. billetes al [.recio de cinco duros cada, u n o , v el r e s u l ya escritas muchas. Concluyo, pues. tado del beneficio sería un i n g r e s o de a l g u n o s miles de . s -^ a da tiene V. que admiraren mí, que soy una mu— Eso honra á la que fue mi mujer, porque es señal jer como otra cualquiera, aunque el que tanto se paré- ellos p a r a atender ¡i l o s pobres niños de la Inclusa, de que no podía ser reemplazada por ninguna otra. Los i s seguraba que no la habia más buena y más amenazado.-; de u n a h u e l g a de n o d r i z a s , porque á é s t a s que se casan por segunda vez lo hacen porque la p r i yo en el mundo. Pero él estaba enamora- no se les pagaba inicia algunos meses por efecto do l a mera les salió mal, y para no irse del mundo sin saber 1 de mí/ p e n u r i a en que se h a l l á b a l a Diputación, que habia d e - lo que es la felicidad conyugal. El que ha sido muy 11 cuanto á su deseo de conocerme, prometo á us- bido hacer otros g a s t o s patrióticos en honor de la r e - venturoso con su mujer ya no puede serlo con una seted volución. J o a q u í n tenía curiosidad p o r ver el baile , y gunda. ¿ X'o sabes tú nada de eso? cuando esie esté y yo ren ' T nie ' V Mconocerá " " J t x ' ' : l euamio o pplenamente l e n a m e n t e conc o n - ¡ votación. .)oaqum tenia curiosidad p o r \ e r e i oane , v vencida — Hijo, yo no sé. (iU U t o l l J e s e x a c t a 1:l :re V q ° ° ' semejanza e n | halagábale la e s p e r a n z a d o hallar aiií Á Soledad, por"tre —Es extraño, porque si no mienten mis informes, t^-" _*"' ' q u e , a u n q u e no la siiponia aficionada á bulles, conjetuB la primera vez epie te cases tú será ya la tercera, porCaita íisonie " ° P O 1 1 C Cm á l a c n n " s i l l m l ( l e Y -> t a u núnl ( i l i c : i c : l s o t e n d r í a q u e asistir oficialmente, d i g á que la segunda ha sido el año pasado. cotKn» ' ) a i a n i i ' e s t ' ' l u l a I l l e c u a n t a s veces quiera, mosio a s í , p o r ser ella u n a de l a a j l a m a s e n c a r g a d a s de — ¡Jesús! ¡Jesús! ¡Qué hombre tan embustero! n"m"iSg"o ,, si '• í " a .,^t ÉL -isuite • " c- o "" M en cu algún aigun caso caso quiero quiere saber saocr m nu í | ] laa liesta ncsia benéfica. oeneuca. °P"»on. ,!„,..•. á, Vv" n o t Í L É;..; , „á,quie „.,;„- ¡ i Joa,..„„.,;,. „,- ;... , Tl „ _ , , „ M^e los billetes. Ía s exclamó la máscara, y seguida de sus compañeras s deb' vo s° le Úar<i í (1(i,„l o,., pobres ( piin ofreei.) á D . Facundo i M k l e los billetes. se alejó presurosa de D. Facundo, que so quedó na brT S 0 C 0 [ r t ' r ' l c I 1 0 1 '"' 6 ;' ^ ' ; s u eoncurso jiara a l - i — P r e c i s a m e n t e yo iba á o f r e c e M V. o t r o , dijo don riendo. miffo 6 n a ° ' ^ ' t r ' ! t a l ' ^ ^ ^ - ' ( ' n m i > como ¡í u n Facundo; esas señoras ne: h a n enviado s e s e n t a , q u e — Va ve Y. céuno la he conocido, dijo á Joaquín. Erupi e ' C O m ° ' l U U a i l l i ^ ° l I i s l : r e t o y desinteresado, importan midti menos que C.OÜO r s . Afortunadamente, — En efecto, y no le ha hecho gracia que la haya u s Carta c ^ & C .° l l l l : U ' C U 1;l '''«'rcclon de \ ' . , llrmando esta . todavía hay Tertulia progresista ; en esta patriótica s o Estae-'l. 1 m " " ' " ' ° ' 'l'"'.,'^ — SOI.KIIAI). )) | ciedad be colocado cincuenta, y ocho, reservándome dos ted hablado de su segundo matrimonio. — Pues mire V., ella no se puedo quejar del primero W l e v e , 5 • d C ' U t ' 1 ' 1 " ' ! lv V ii ' i '' 1 " ' " ' s t r o estudiante, caria par»¡nosotros. I'Iti cuanto he dicho á mis amigos de la m ás s j , C l e u v c i 'es seguidas, y hubiera leido una vez Tertulia que era cosa de la aristocracia, tiempo les ha ni del segundo de sus maridos. Si el primero era sufriel il outl aill do, (d segundo no lo es menos. facundo 0 ' ' > ¡i la sazón el bueno de don faltado para t o m a r l o s , porque, aunque los progresistas Una. máscara vestida de noche estrellada, con u\i her. \¡ , , _ suelen tronar contra la aristocracia, crea Y. que les ¡Áuil'.t"'"''' 1 " 1 " 1 "'"' V. acaso la conocerá. gusta por extremo codearse con la nobleza. Allá irán moso traje de raso azul oscuro, sembrado de estrellas - ¡ Q, V."'" . ñus cincuenta y indio tcrtitlittntix dispuestos á c o n q u i s - de piala,'se acercó á D. Facundo. —Pero hombro, dime, ¿de qué vives?.... le pregun— Si. ",TL .' " , " " ' : ¡ ' 1 " ' " ' ;l a l « " l l u S o l e d a d ? i (ar ciuci (a y ocho m a r q u e s a s , ó m á s , porque alguno : hl C r v bien se atreverá á cautivar más de una. De Do manera que té.. Te has arruinado dos, ó tres, ó no sé cuántas veces, '" ' '--7""" / ''"' 1 ''í se anuncia una Olltl con ese título, en competencia puesto que \ . tiene billete y me ofrece otro, venderé 1 y sin embargo, cada vez vives mejor, y trabajas menos, la P e> a "rros ll y te diviertes más. también dos qiu! me quedan, t b i é n ¡¡os d d é iremos al baile. baile '¡ J^bUl uuniaa. CÁELOS FRONTAÜKA. —Me los ha enviado ella. a- Se trata de una l n u e r (Se continuará.) I Snlorl ii c- i —¿ Pa de la mano?.... ¿«Hi; ' l e d a d ! ¡ Soledad 1 En un café de la plaza —Si señor. 5¡a ! " • > • • • * ' - I ' " - . . . . . . . . V U . N - 1 O j , , . V ~ - , J L Anterior Inicio Siguiente LA ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA Y AMERICANA. 264 EEVO APARATO P A U ENSAYAR IOS VINOS, A C A T O S QUIMICOS-IKDÜSTUTALES P E M. SAVALLK. VUE INDICA CO^i GltA'í VWC.TlTCrt I,A KiyiT.ZA ALCOHÓLICA. Si es de suma importuncui pava todos los destilailorcs de los países vinícolas saber á punto fijo ln riqueza alcohólica de los vinos que adquieren pava realizar la destilación , es cierto que hasta ahora casi todos los medios propuestos para obtener tal resultado no daban sino apreciaciones más ó menos apvoximadas , nunca exactas, que evan la causa de deplorables pérdidas. Los pequeños alambiques de ensayo dan un producto muy imperfecto en el alcohol, que no se puede apreciar con verdadera precisión, ;i causa de que el instrumento de indicación en los grados más ínfimos no tiene la cupilaridad necesaria pava ello, y también porque en la operación se suelen mezclar con el citado producto algunos ácidos que le desvirtúan por completo. Los Sres. ^avalle é hijo , constructores mecánicos en París, y de cuyos ingeniosos aparatos, de su invención, pava destilav alcoholes por diferentes métodos, nos hemos ocupado varias veces en las páginas XVI Naturalmente, el nuevo aparato, cuya copia presentamos en esta página, es algo más complicado que los antiguos y por lo tanto, algo más difícil su instala' cion , porque también es mayor, y su construcción muy diferente; pero como los servicios que presta son muy importantes las grandes fábricas de destilación se apresurarán á adquirirlo, porque ademas el precio del mismo, 500 francos, no es excesivo para los buenos resultados que ofrece. Advertimos para concluir, que el citado aparato puedo calentarse por medio del gas, del petróleo, de espíritu de vino y aun del vapor, — y liarán bien las personas que deseen obtenerlo, indicando á los constructores citados, Sres. Savalle é hijo (Aveunc du general Uhrich, 64, París), si quieren que el aparato que pidieren se caliente por medio del gas ó por otro medio de los indicados, aunque el primero de éstos es preferible á los otros. Xo terminaremos este breve suelto, sin recomendar á los agricultores y vinícolas españoles la curiosa obra que el mismo !?r. Savalle acaba de publicar en París, titulada: Progresos recientes de la destilación, en la cual se hallarán descripciones curiosas y exactas de los aparatos que posee la misma casa pava la destilación de melazas, remolachas , granos , patatas, vinos , caña de azúcar, jugos fermentados, etc., así como para la rectificación de alcoholes, producción de mitilena anhidra, y otras industrias lucrativas. de L A ILUSTRACIÓN ESPAÑOLA , en virtud de numerosos experimentos y observaciones , han conseguido inventar un nuevo aparato que señala con toda exactitud la riqueza alcohólica que tienen los vinos que han de someterse á la destilación, libre de toda mezcla, con otros ácidos extraños. Sabido es que uno de los defectos prinNuevo aparato para determinar exactamente la riqueza alcohólica de los vinos. cipales de los antiguos aparatos do ensayo Dicha obra, de cerca de 200 páginas en consiste en que éstos debían operar sobre un volumen de vino muy pequeño relativamente; y el ración, se llega á reconocer el alcohol contenido en los cuarto mayor, é ilustrada con 37 grabados, cuesta fran60 aparato de M. Savalle opera sobre cinco litros de vino vinos en una aproximación de 10 litros de alcohol sobre cos lo, , con inclusión de portes del correo, haciendo simultáneamente, dando un producto que equivale de ¡ 1.000 — y lo cierto es que, hasta ahora, ningún otro el pedido á la casa mencionada, Avenue du general Uhrich , 61, París. 50 á 60 grados centesimales. En virtud de dicha ope- aparato ha ofrecido una apreciación tan minuciosa. ANUNCIOS. AJEDREZ. NEGRAS. 1. a D 2 H ú ~> K , jaque. 2." D á 5 F. 'ó." D á 8 c , juque-mato. Jl ii (i C. 11 á 7 c. Soluciones exactas á los problemas 6 y 7. D. R. Moncgal (Barcelona);—L'n socio de. IJI Bomba (Segovia).— La observación de Grite último suscrito!- acerca del problema núm. G no es exacta. CERVILLETA MÁGTCA para volver nueva 6 instantáneaámentela plata, el plaqué, los metales ingleses, los cobres pulimentados, el oro, las alhajas, etc. Modo de usar la servilleta mágica: Lávese y quítesele primeramente al objeto que se quiere pulimentar todo cuerpo grasicnto, después se frota simplemente con la servilleta mágica bien seca (que nunca esté húmeda), y se obtendrá al instante sin gran esfuerzo, un brillo como si estuviese nuevo el objeto. pesetas 1,50 » 8 G id París, Francisco Ampenot, 92, rué Riclielieu. Se expenden también en Madrid, por' cuenta del fabricante, en la calle de Carretas, 12, principal, Administración de LA MODA ELE1 Servilleta Suscritorci-i de Avila, Castre-ITraiales y Santi-téban del Puerto insisten en asegurar que el problema núm. o tiene solución en lasdos jugadas siguientes : BLANCAS. NT'OTtAS. I . ' D á 3 B. 2.* D A 2 G , jaque mate. umno PREMIO ^ c n la Kxpos." Havre 18CS. Solución al problema núm. 7. BLANCAS. /P^W^^ • . GANTE. P á 1 n, pide D. Repetimos que no hay tal solución : dicho* señores suponen que el pcon 2 s , entrando B I I E , pide JJ ; pero ¿y si PIDE CABALLOV—V. ÚNICA ADMITIDA la lixpos." Paris DES (A^ua FEES do Jas liadas). Esta agua es la primera y la mas dicaz para teñir progresivamente el cabello y la barba.—Ningún peligro ofrece el empleo de esta agua milagrosa. POMADA DE LAS HADAS Necesaria para entretener la eficacia de la tintura y volver al cabello toda su suavidad. MADAME SARAH FÉLIX, UMCA PROPIETAIIIA. DEPÓSITO CESEBAL, ñue Richer,Aó, l'AlllS. I'or mayor en Madrid, Agencia franco-española, Sordo, SI. Depósito particular en todas las perfumerías y peluquerías de provincia y del extranjero." NO MAS TINTURAS FB0GHES1VAS PROBLEMA NÚM 8. Con el sencillo aparato de bordar que tiene la exoeleBt quina de coser NKOKAS. A I! C D E F G ./ "^ I s Jantes SMITHSON f K 8 7 7 (i •i •"' 5 i 4 1 :¡ :Í - ", r 'i i i A B C D K Para volver inmediata11*/? mente á los cabellos y a la l>;irba su color natural en turtos matices. F H W Con esta Tintura no hay ?°£ s ||| .-.¡dad de lavar la cabeza m ' scU ni después, su aplicación es • ^^ cilla y pronto el resultad ju(i_ mancíia la piel ni daña la s La raja cúmplela f> /•»-. CnsaL. LEÓRAND. Paris, y eu las princip rias de América SILENCIOSA PERFECCIONADA LOS CÓDIGOS ESPAÑOLES :OM:U1UIAIIOS Y AMITAI'O Segunda edición. Doce tomos en folio ; (¡00 reales en rústica y 720 c " Pta 1» Están de venta en las principales librerías, y sigue aD ^. susericioii en la de su editor, San Martin, Puerta del mero 6, Madrid. BLANCAS. MADRID.—IMPRENTA DE M. RIVADENEYBA. Juegan éstas, y dan mate en tres jugadas. Duque de Osuna, 3. Anterior Inicio , puede una señora en muy poeo tiempo bordar toda clase de ^ gos, vestidos, colgaduras de cama, cortinas de balcones, ..y^ ta cutar los más variados y caprichosos arabescosnupara " suscr i. es :aS Son pocos cuantos elogios podamos hacer á . í? ensal)ls toras de la bondad y excelencia de esta máquina, indisp hoy en todas las casas de familia. d Don Antonio de Paz, en Santander, remitirá remitir ln labores, precios y modelos de la expresada m máqui pormenores necesiten las señoras suscritoras. p i
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