LA ZARZUELA: UN EJEMPLO DE CÓMO APLICARLA EN EL AULA

 LA ZARZUELA: UN EJEMPLO DE CÓMO APLICARLA
EN EL AULA
1.- UN BREVE RECORRIDO POR SU HISTORIA
1.1.- Definición del género “Zarzuela”
La Zarzuela es una forma de música teatral o género musical escénico
surgido en España con partes instrumentales, partes vocales (solos,
dúos, coros…) y partes habladas. Su nombre procede de La Zarzuela,
nombre del lugar cercano a Madrid donde se hallaba el teatro que
albergó las primeras representaciones del género. Se diferencia de la
ópera por alternarse en él la prosa hablada y el canto.
1.2.- Historia
El género al que denominamos zarzuela surgió en el siglo XVII como
consecuencia de los espectáculos teatrales con música que s e
organizaban en el pequeño pabellón de caza de La Zarzuela, cerca de
Madrid, en la época de Felipe IV (1621-1665). Este género tuvo su auge
durante el último tercio del siglo XVII y fue decayendo en el curso del
XVIII debido a la invasión de música italiana que sufrió España en la
época de los primeros Borbones. Ante esta situación, la zarzuela trató
de adaptarse (los libretos de la época se presentaban como “zarzuela a
la italiana”), pero el público manifestó su preferencia por el modelo
más que por la imitación, por lo que hacia el año 1780 puede
considerarse a la antigua zarzuela como un género virtualmente muerto.
En su lugar apareció la tonadilla, que se cantaba en los teatros los días
en que había función “de verso”, es decir, hablada, ya que en esta
época no se concebía un espectáculo teatral sin que estuviera
acompañado de música. También se solían añadir a la tonadilla un
sainete y algunas piezas de baile.
Parece que los primeros autores que aportaron su genio al nuevo
género de la zarzuela fueron Calderón de la Barca y Lope de Vega.
l1 Calderón es el primer dramaturgo que adopta el término de zarzuela
para una obra suya titulada “El golfo de las sirenas” (1675).
Lope de Vega escribió una obra
con orquesta. Sin embargo, sólo
obra “Los celos hacen estrellas”
estrenó en 1672. Con esta obra
este género en el siglo XVII.
que tituló “La selva con amor”, drama
se conserva la música suficiente en la
de Juan Hidalgo y Juan Vélez, que se
se puede tener una idea de cómo era
El siglo XVIII da entrada a la dinastía de los Borbones; con ellos se
pusieron de moda los estilos italianos en diversas manifestaciones
artísticas, incluida la música. Las zarzuelas del siglo XVIII se
convirtieron en obras estilísticamente parecidas a las óperas italianas:
por ejemplo, las obras de Antonio de Literes. Pero al llegar el reinado
de Carlos III, también Borbón, los problemas políticos provocaron una
serie de revueltas contra los ministros italianos (por ejemplo,
Esquilache), hecho que repercutió en las representaciones teatrales y
de nuevo imperó la tradición popular española representada, en esta
ocasión, por los sainetes de don Ramón de la Cruz. La primera obra de
este autor representada en este género fue “Las segadoras de Vallecas”
con música de Rodríguez Hita.
El auge de la zarzuela llegó en el siglo XIX a partir de 1839, con los
músicos Francisco Asenjo Barbieri y Emilio Arrieta. Barbieri,
considerado como el padre fundador del movimiento musical del siglo
XIX, escribió zarzuelas que nos recuerdan las obras de Rossini y
Donizetti. Muchas veces el éxito de la obra se debía a una o más
canciones que el público aprende y da a conocer oralmente, como
ocurría con los cuplés. El engranaje de la obra siguió siendo el mismo:
números hablados, cantados y coros que se aderezan con escenas
cómicas que, generalmente, son interpretadas por un dúo.
En esta época se divide en género chico (zarzuelas de un solo acto) y
género grande (zarzuelas de dos, tres o más actos). Se adoptan temas
costumbristas, populares, cómicos y bailes españoles. Algunos autores
de esta época son Emilio Arrieta, Federico Chueca, Fernández
Caballero, Tomás Bretón y Ruperto Chapí.
Después de la Revolución de 1868, el país entró en una profunda crisis
(sobre todo económica) que se reflejó también en el teatro. Fue
entonces cuando el Teatro Variedades de Madrid tuvo la idea de reducir
el precio del espectáculo y, al mismo tiempo, la duración de la
representación. Fue lo que se llamó teatro por horas. La innovación
tuvo un gran éxito y los compositores de zarzuelas se acomodaron al
nuevo formato creando obras mucho más cortas. La zarzuela grande fue
l2 batallando en el Teatro de la Zarzuela de Madrid, pero con poco éxito y
poco público.
Entre 1901 y 1920 empezaron a aparecer las principales obras del gran
repertorio de la zarzuela del siglo XX, distinta de la nacida en el siglo
anterior. La contribución más destacada a este gran repertorio la
debemos principalmente a Amadeo Vives, autor establecido en Madrid
que logró el aplauso unánime de un público que iba al teatro pensando
en las buenas zarzuelas de antaño, pero que salía satisfecho con las
novedades que Vives le ofrecía. La primera obra de Vives perteneciente
a
este
gran
repertorio
es
sin
duda,
“Bohemios”.
Influido
considerablemente por el éxito que en el campo de la ópera italiana
había alcanzado “La Boheme” de Puccini, Vives utilizó ingredientes
parecidos, y aunque su argumento no cuenta la misma historia, nos
sitúa en un ambiente muy parecido al de esta ópera.
La zarzuela se va manteniendo con estas producciones que, a veces, se
ajustan a la estructura musical de una ópera italiana, gracias a autores
de la talla de Francisco Alonso, Pablo Sorozábal, Federico Moreno
Torroba y Jacinto Guerrero.
La guerra civil española abre un paréntesis y en la posguerra, la
decadencia es casi total. No existen apenas nuevos autores para este
género y no se renuevan las obras. Por otro lado, la zarzuela existente
es difícil y costosa de representar y sólo aparece esporádicamente,
durante unos pocos días o semanas.
En estos primeros años del siglo se empieza a dar el apelativo de
género ínfimo a las representaciones conocidas como revistas, obras
musicales con una conexión de ideas parecida al de la zarzuela pero
más ligeras y atrevidas. Una de estas obras fue “La Corte del Faraón”.
La música se hizo tan popular que algunos de sus números acabaron
siendo verdaderos cuplés difundidos por el público.
A partir de 1950 la zarzuela pudo sobrevivir gracias a la discografía. Se
produjeron una serie de grabaciones de gran éxito, la mayoría de ellas
dirigidas por el músico español Ataúlfo Argenta. Tras la muerte de éste,
se incorporaron directores como Indalecio Cisneros, García Asensio y
otros. Incluso hubo grabaciones que fueron dirigidas por el propio autor
de la obra, como fue el caso de Pablo Sorozábal y Federico Moreno
Torroba. En esta etapa participaron en las grabaciones nuevas y
grandes voces de la lírica como Montserrat Caballé, Alfredo Kraus,
Plácido Domingo, Juan Pons, etc.
2.- LA ZARZUELA EN EL AULA
2.1.- Justificación
l3 La música es un hecho cultural porque se inserta en la vida del hombre
y en los distintos tipos de sociedad que el hombre ha construido, de ahí
que la música tenga alguna forma de corresponderse con las formas de
vida de los hombres y con sus códigos de conducta y conocimiento, que
es lo que llamamos “Cultura”.
Una adecuada comprensión e interpretación de una obra musical
requiere el conocimiento del estilo de la obra, el cual queda
determinado por la época en que se produjo y por el ambiente de la
misma.
Por todo ello es de primordial importancia llevar a la escuela cualquier
manifestación artístico-musical de nuestro patrimonio artístico español,
para que el alumn@ lo conozca y lo respete.
Con el acercamiento de la zarzuela a nuestro alumnado, vamos a
brindarles la oportunidad de conocer no solamente un género musical
genuinamente español, sino también de conocer una época y una
situación social muy diferente a la actual, con unos modismos en el
lenguaje, vestuario, formas de pensamiento, etc.
2.2.- “Agua, azucarillos y aguardiente”
La zarzuela que vamos a utilizar para el acercamiento de este género a
la escuela es “Agua, azucarillos y aguardiente” del músico Federico
Chueca, que cuenta con un solo acto con dos cuadros, y que está
ambientada en el Madrid de finales del siglo XIX. En esta obra hay sól o
cinco números musicales (aunque el último sea múltiple): el Preludio,
las Seguidillas que introducen el segundo cuadro (coro de niños y
niñeras), el Pasacalle (coro de barquillero), el Vals y el número final,
compuesto por una sucesión de temas que cierran la obra.
El fragmento con el que vamos a trabajar en el aula corresponde al
segundo cuadro, introducido por unas seguidillas interpretadas por el
coro de niñ@s y de niñeras/nodrizas que interpretará la canción
infantil “Tanto vestido nuevo”. Cuando entran las niñeras, los niñ@s
intercalan frases habladas que dan viveza al conjunto pero que
“interrumpen” un poco el efecto de la música.
Después disminuye la vivacidad rítmica y se inicia la canción infantil
“¿Quién dirá que las carboneritas?”. Entran nuevamente las niñeras,
exagerando ahora el acento gallego, y finalmente se vuelve al tema
inicial para cerrar el número brillantemente.
Empezaremos a trabajar con el alumnado proponiéndoles el aprendizaje
de una canción tradicional andaluza: “Las calles de Sevilla” (ver página
7), que contiene la misma melodía que la canción infantil “Tanto vestido
l4 nuevo” que aparece en esta zarzuela. Una vez trabajada y aprendida
con el procedimiento habitual para trabajar una canción (en primer
lugar, ritmo con sílabas Kodaly, texto y notas, en segundo lugar la
melodía (por frases, primero con notas y después con la letra de la
canción). También podremos aprenderla con la flauta, ya que por su
tesitura y tonalidad, se adapta perfectamente a las canciones que se
trabajan en la escuela, sobre todo en un tercer ciclo. Como con el
aprendizaje de cualquier otra canción, también podremos hacerle un
acompañamiento instrumental.
Una vez aprendida y trabajada la canción en todos los ámbitos
mencionados anteriormente, les propondremos al alumnado la audición
de un fragmento de la zarzuela “Agua, azucarillos y aguardiente” y que
se corresponde con el de la canción “Tanto vestido nuevo”. Una vez
escuchado, comentaremos con l@s alumn@s si han reconocido dicha
canción, les explicaremos al género al que pertenece y les
presentaremos el texto original:
Tanto vestido nuevo
tanta parola,
y el puchero a la lumbre
con agua sola.
Arrión, tira del cordón,
cordón de la Italia,
¿dónde irás, amor mío,
que yo no vaya?
A continuación le contaremos el argumento de esta zarzuela, como si
del argumento de una película o novela se tratara:
A finales del siglo XIX en Madrid, vivía una chica llamada Asia -su
verdadero nombre Anastasia-, con su madre, doña Simona. Eran muy
pobres y más aún a raíz de la edición de un libro de poesías que Asia
había escrito y del que solo había vendido tres ejemplares. Para salir
de los apuros económicos en los que se encontraban, su madre la
quiere casar con un chico de su pueblo, pero Asia quería quedarse a
vivir en Madrid y además, tenía novio, Serafín, el cual era bastante
“pillo”. Doña Simona no ve con buenos ojos la forma de proceder de
Serafín, ya que no actúa como los novios “normales” y se limita a
llevarlas a tomar agua con azucarillos y algún que otro merengue.
En una verbena, Asia se entera por Pepa, dueña de un “aguaducho”, de
que su novio trama quedarse a solas con ella (algo deshonesto en
aquella época) echándole un somnífero a su madre en el merengue.
Asia no quiere creer que su novio sea tan ruin. Cuando llega éste, doña
Simona finge haber comido algunos merengues y es Serafín el que cae
l5 en su propia trampa comiéndose él mismo los merengues con
somnífero. Al final, Serafín se queda dormido como un tronco sobre un
banco y Asia toma una decisión heroica: volverá a su pueblo donde le
espera una boda rústica pero sincera.
Una vez contado el argumento de la zarzuela, podemos debatir con el
alumnado las costumbres y la forma de pensar en la sociedad de
aquella época, ya que a l@s alumn@s les “chocarán” con las de la
sociedad actual, buscando incluso información en internet sobre la
sociedad del siglo XIX.
También comentaremos el significado de algunas palabras y profesiones
hoy en desuso, como por ejemplo, el significado de “aguaducho”, que es
un puesto donde se vendía agua, la profesión de aguador/a, vendedores
ambulantes de agua, los “barquilleros”, vendedores ambulantes de
barquillos, las “amas de cría o niñeras”, contratadas por las señoras
para cuidar a l@s niñ@s.
Se le puede proponer al alumnado la escenificación y dramatización
del coro de niños y niñeras, ya que es bastante divertido. Para que
ell@s sitúen esta escena, se les puede visionar previamente esta
escena en el dvd, incluso l@s mism@s alumn@s pueden buscar dicha
escena en YouTube. Posteriormente se repartirán los papeles de los
personajes, aprendiéndonos la letra (ver pág. 8 a 10) y hacer “playback” con la grabación. Para su escenificación también podremos
caracterizarnos, buscando vestuario.
3.- CONCLUSIÓN
Con todo lo anteriormente expuesto vamos a desarrollar una serie de
competencias básicas, como la competencia cultural y artística, al
conocer una manifestación artístico-musical del patrimonio andaluz y
español, el tratamiento de la información y competencia digital, al
buscar información en internet, comunicación lingüística, al trabajar con
la letra de las canciones y el vocabulario de las mismas, competencia
social y ciudadana, al argumentar y razonar sobre las diferencias
sociales y culturales y nuestra realidad cotidiana, competencia de
aprender a aprender y autonomía e iniciativa personal, pues partimos de
una aprendizaje significativo, en el que el alumn@ es el protagonista
del aprendizaje, utilizando como metodología la investigación.
l6 l7 Coro de niñeras
Niñas (Jugando al corro.)
Tanto vestido blanco,
tanta parola,
y el puchero a la lumbre
con agua sola.
Arrión, tira del cordón,
cordón de la Italia,
¿dónde irás, amor mío,
que yo no vaya?
Niñeras
Las señoras nos mandan
a Recoletos con los bebés,
[ Niño Yo quiero agua.
Niña Y yo barquillos.
Niñera ¿Y tú que quieres?
Niño Yo azucarillos.]
pa que tomen el fresco
por los jardines,
iarza y olé!
[ Niñera Pero señora porqué le pega.
Ama Porque es muy malo.
Chico Tía gallega.]
Nos encargan que vayamos
siempre detrás,
y que no nos separemos
l8 de ellos jamás;
pero si nos habla un tipo
de esos que nos hacen tilín,
¡vaya si se quedan solas
las criaturitas al fin!
Amas (Arrullando.) ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!
Niñas
¿Quién dirá que las carboneritas
quién dirá que las del carbón
quién dirá que yo soy casada
quién dirá que yo tengo amor?
Ahora la señá viudita
ahora se quiere casar
con el Conde, Conde de Cabra
Conde de Cabra se la ha de llevar.
Amas (Arrullando.) ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!
Nodrizas
Nos llaman amas
y es lo cierto,
quien lo inventó tuvo talento;
pues ya es sabido, y no de ahora,
que quien nos sirve es la señora.
¡Cuándo me iré
a mi lugar,
que el farruco me manera llamar!
¿Cuándo será?
¿Cuándo me iré?
¡Qué ganillas le tengo de ver!
Cuando el rapaz a media noche
se enrabia y llora sin cesar,
nosotras no nos despertamos,
si no nos vienen a llamar.
¡Cuando me iré!
A mi lugar,
que el farruco me manda a llamar.
¿Cuándo será?
¿Cuando me iré?
¡Qué ganillas le tengo de ver!
Amas y Niñeras
Las señoras nos mandan
a Recoletos con los bebés,
l9 [ Niño Yo quieo correr.
Otro Yo quieo saltar
Niñera ¿Y tú que quieres?
Niño Yo quieo mear.]
Nos encargan que vayamos
siempre detrás,
y que no nos separemos
de ellos jamás;
pero si nos habla un tipo
de esos que nos hacen tilín,
¡vaya si se quedan solas
las criaturitas al fin!
Niñas
Tanto vestido blanco,
tanta parola,
y el puchero a la lumbre
con agua sóla.
Niñeras y Nodrizas
(Llevándose los niños.)
Vámonos hacia casa,
porque ya es hora,
y me temo el regaño
de la señora. (Vanse.)
l10 BIBLIOGRAFÍA
Enciclopedia
La Zarzuela. Salvat editores, S.A.1989. ISBN 84-3455023-7 (tomo 1), ISBN 84-345-5025-3 (tomo 3).
Torres, J., Gallego
Musical.
A. y Álvarez, L: Música y Sociedad .Ed. Real
Aguirre de Mena, O. y de Mena González, A.: Educación musical.
Manual para el profesorado. Ediciones Aljibe.
Alsina, P. y Sesé, F.: La música y su evolución. Historia de la Música
con propuestas didácticas y 49 audiciones. (1994). Barcelona. Editorial
Graó.
http://es.wikipedia.org
http://www.youtube.com
zarzueleros.com
zarzuela.net
l11