1. Espiritual

02/01/2011
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19:16
EL SIGLO DE DURANGO |
Cuerpo F
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| NOSOTROS
LUNES 3 DE ENERO DE 2011
FIN DE SEMANA
PADRES E HIJOS
POR: IGNACIO ESPINOZA GODOY
Cómo afrontar la “cuesta de enero”
Roberto Torres y Dany.
Pepe Nápoles y Gaby Espinoza.
Thelma Aguilar, Marcela Ruiz, Eduardo Ruiz e Iván Aguilar.
Alejandra Sierra, Daniela Ortiz, Carolina Sosa, Blanca de los Santos y Janny Ricartti.
CRUCIGRAMA NO. 9798
Horizontales
3. Que prescinde de la instrucción religiosa (fem.).
8. Preparase las eras para
sembrar.
10. Título de dignidad entre los
malabares.
12. Parte muscular del corazón.
13. Árbol moringáceo de países tropicales, de fruto oleaginoso usado en industria.
14. (Eugenio d’, 1882-1954)
Importante ensayista español y crítico de arte.
15. Muy distraídos.
17. Composición que se canta
o toca entre dos.
19. Pastor siciliano amado por
Galatea.
21. Boca del volcán.
23. Ciudad nombrada en el
Antiguo Testamento, cerca
del mar Muerto, destruida
por una lluvia de azufre y
fuego.
25. Símbolo del Europio.
26. Bacalao.
27. Símbolo del praseodimio.
28. Volcán de Filipinas, en
Mindanao.
30. Fracción de tropa regular
marroquí.
31. (Se ...) En América, padece puna o soroche.
34. Elemento químico del
grupo de los lantánidos,
metal de las tierras raras.
37. Pagará el vasallo al señor
cierta contribución.
39. Domestica, doma.
41. Deficiencia de la sangre,
ya sea en su masa o en
sus componentes.
43. (Jean Paul, 1743-1793)
Médico y revolucionario
francés.
45. Traidor, falso.
46. Antigua lengua provenzal.
47. Arbusto quenopodiáceo
erecto, sapina.
48. Iniciales que indican anonimato.
Verticales
1. Teología fundada en principios de la razón.
2. Naranjo amargo.
3. Mamífero félido de Asia y
Africa.
4. Volcán en actividad de
Costa Rica, en la Cordillera
Central.
Una de las temporadas más
difíciles del año, en términos
económicos, es, sin duda, la
que se denomina tradicionalmente “cuesta de enero”,
porque muchas familias
echan la casa por la ventana
en diciembre, gastando sin
ton ni son en regalos y una
cena abundante que no siempre se consume en su totalidad ante la amplitud de los
platillos que se prepararon o
compraron para la ocasión.
Y es que los mexicanos,
tradicionalmente, somos así,
es decir, no somos previsores
y no planeamos qué hacer
con un dinero extra como es
el caso del aguinaldo que nos
ganamos por un año de esfuerzo. Lamentablemente, el
trabajo que nos costó conquistar ese derecho se ve desperdiciado y pulverizado en
unos cuantos días al malgastar esos recursos, pensando
erróneamente que “para eso
es el dinero”, para gastarlo
en unos cuantos lujos, que al
cabo “el dinero va y viene”.
Sin embargo, una vez que
pasa la temporada de derroche y excesos, llega también
la cruda moral al revisar
nuestros bolsillos y percatarnos de que están vacíos por
la inconsciencia de no pensar en la famosa “cuesta de
enero”. Es precisamente en
el inicio de año cuando vemos que el primer mes tiene
31 días y, o ya no tenemos dinero para afrontar lo que
resta de enero, o es tan poco
que nos vemos obligados a
recurrir a buscar un préstamo o a apretarnos el cinturón para prescindir de algunos gastos que no son precisamente prioritarios para el
funcionamiento del hogar.
Lamentablemente, tampoco somos previsores y “olvidamos” que, a partir de
enero de cada año, tenemos
la obligación de ponernos al
corriente en el pago de algunos impuestos, tales como el
predial y, si tenemos automóvil, también es inevitable tenerle que hacerle frente al
pago del refrendo vehicular,
de tal forma que son gastos
de los que no podemos librarnos pues, de lo contrario, si lo hacemos extemporáneamente, nos resulta contraproducente pues se nos
acumulan recargos que difícilmente nos condonan.
Entonces, ¿qué debemos
y podemos hacer para que la
“cuesta de enero” no nos pegue tan fuerte y salgamos airosos, o al menos no resultemos tan afectados en este periodo? La respuesta, usted y
yo lo sabemos, no es tan complicada, sólo que no siempre
es fácil guardar dinero para
todos los gastos ineludibles
de principios de año, porque
la sensación de comprar y
consumir de todo lo que nos
privamos durante todo un
año es tan placentera, que no
resistimos la tentación y sucumbimos ante las grandes
“ofertas” y promociones con
que somos bombadeados
constantemente en esta época en la que los únicos beneficiados son los proveedores
de productos y servicios.
Planeación, moderación
y ahorro son las palabras
clave para este tipo de situaciones; no obstante, también,
son términos que no siempre
llevamos a la práctica porque siempre será más cómodo gastar en todo aquello que
nos llame la atención, sin importar si luego no tendrá alguna utilidad para el hogar
o, incluso, en el aspecto personal. Así, somos presa fácil
de muchos anunciantes y
tiendas comerciales que nos
ofrecen mercancía “a precios rebajadísimos”, porque
es de “fin de temporada”.
Si bien es cierto que algunas promociones son reales, podemos echar un vistazo al bolsillo y hacer cuentas
de si el desembolso que pretendemos hacer no altera la
economía familiar y no descompletamos algunos gastos
prioritarios que no podemos
aplazar. Sólo en estas circunstancias sería prudente
darnos un pequeño lujo y
comprar, por ejemplo, esa
prenda de ropa que nos gustó y que nos permitirá ir renovando gradualmente el
guardarropa.
También, si nos fijamos
el objetivo de destinar parte
del aguinaldo a hacer algunas mejoras o reparaciones
al hogar, tenemos que contemplar que estas tareas implican un buen desembolso
que debe ser bien planeado,
de tal forma que las cuentas
no vayan a rebasar el presupuesto que habíamos asignado a ese importante renglón,
que a fin de cuentas se convierte en una inversión que
siempre redundará en el bienestar de todos los integrantes de la casa.
De igual forma, no hay
que olvidar las cuentas pendientes que hemos adquirido
con las tarjetas de crédito,
pues si postergamos el pago
sufriremos las consecuencias con los molestos recargos, producto de la negligencia al gastar imprudentemente, pensando, quizá, “a’i
después me pongo a mano”,
cuando los bancos y las tiendas departamentales no se
tientan el corazón para cobrar a como dé lugar en los
plazos estipulados en los
contratos que firmamos con
plena conciencia de lo que
hacíamos.
Por ello, y por muchas razones más, amable lector, es
conveniente planear bien en
lo que gastamos para afrontar con dignidad la “cuesta
de enero” y tener un “colchoncito” que nos permita
solventar todas las contingencias y compromisos económicos que se nos presenten en este periodo del año,
temido por muchos.
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Voy de un lugar a otro
dando pasos.
Templete o pabellón de
estilo oriental y generalmente abierto por todos
lados, que se construye en
azoteas, jardines, etc.
Verá con atención y cuidado una cosa.
Tiempo destinado a descansar después de almorzar.
Muy enojado.
Fruto de mesocarpio carnoso y endocarpio leñoso y
una sola semilla.
Abreviatura usual de «doctora».
Se atreva.
Falto de piedad.
Persona que tiene por
oficio trabajar en maderas
finas.
Variedad de jara ramosa,
de tallos algo rojizos.
Escoger.
Ciudad del estado de
Florida, en EE.UU.
Especie de arquita (pl.).
Tejido grosero de lana.
E larga griega.
SOLUCION DEL NO 9797
El Sudoku se presenta normalmente
como una tabla de 9×9, compuesta
por subtablas de 3×3.
Las reglas son sencillas: hay que rellenar
las casillas del tablero de 9x9 con números
del 1 al 9, de forma que no se repita ningún
número en la mismalínea, columna, o
subcuadro de 3x3.
Además, cada número de la solución debe
aparecer sólo una vez en cada una de las
tres “direcciones”. Los números del 1 al 9
no necesariamente tienen que
estar en orden.
35. Embrear.
36. Conjunto o manojo de flores.
38. Remo parecido al canalete,
usado en algunas pequeñas embarcaciones de la
India.
40. Partícula que compone
innumerables apellidos
galeses.
42. Río de Europa central, que
nace en la Suiza oriental.
44. Perezoso americano.
SOLUCIÓN
AL ANTERIOR