Documento de Trabajo “Evolución y determinantes de la inversión privada en Argentina” Demian Panigo, Emilio Depetris-Chauvin, Ricardo Pasquini y Lucas Pussetto Abril de 2007 1 Evolución y determinantes macroeconómicos de la inversión privada en Argentina1 Demian Panigo CEF, PSE-ENS, Univ. de la Plata and CEILPIETTE Ricardo Pasquini CEF Emilio DepetrisChauvin CEF Lucas Pusetto CEF Resumen Este trabajo analiza los determinantes empíricos de la inversión privada en Argentina, permitiendo dilucidar algunos interrogantes claves como la interdependencia de la inversión privada con la inversión pública, el rol de las expectativas y la incertidumbre o los efectos de la distribución funcional del ingreso y la estructura sectorial de la producción sobre la evolución del stock de capital del sector privado. Códigos JEL: E2, N1 y O4. Palabras clave: Inversión privada, Argentina, Determinantes econométricos, Análisis macroeconómico, Evolución histórica. 1 Queremos agradecer a Alberto R. Musalem por sus comentarios. Como es usual, todos los errores y omisiones son de nuestra exclusiva responsabilidad. 2 Contenidos 1. 2. Introducción ................................................................................................ 4 Reseña bibliográfica: los determinantes de la inversión en Argentina .......... 6 2.1 Los determinantes tradicionales............................................................. 6 2.2 Los determinantes políticos e institucionales ......................................... 7 3. Contextualización ........................................................................................ 9 3.1 Caracterización del comportamiento de la inversión en los distintos períodos históricos ........................................................................................... 9 3.2 Una evaluación más detallada de la inversión y sus distintos comp. en los últimos 35 años ......................................................................................... 15 4. Determinantes de la inversión privada entre 1976 y 2005 .......................... 22 4.1 El modelo y los procedimientos metodológicos ..................................... 24 4.2 Discusión de los principales resultados ................................................. 33 4.2.1 Las relaciones de largo plazo .......................................................... 34 4.2.2 Las relaciones de corto plazo condicionadas por los ajustes hacia el "equilibrio" ................................................................................................. 38 5. Síntesis y conclusiones ................................................................................ 40 Referencias......................................................................................................... 44 6. Anexo ......................................................................................................... 49 6.1 Descripción de las variables utilizadas .................................................. 49 6.2 Tablas complementarias para la sección 4 ............................................ 53 3 1. Introducción Probablemente no exista otra variable o sujeto de análisis en la Teoría Económica que despierte tanto interés y controversia como la inversión. Establecer cuáles son los determinantes del proceso de acumulación resulta esencial para el desarrollo de cualquier economía. En tanto componente de la demanda, la inversión es el eje central de las herramientas de corte keynesiano para combatir la recesión y el desempleo. 2 Pero es este mismo rol de la inversión el que genera un prolongado debate en América Latina en relación a los problemas estructurales de balanza de pagos que se derivan del proceso de acumulación. Por el lado de la oferta, la inversión es sinónimo de variación en la capacidad instalada, de incremento en el stock de capital (siempre y cuando la inversión bruta supere a la depreciación del capital pre-existente), de acumulación y crecimiento.3 Como factor de producción, el capital (y por ende la inversión) no solamente expande la frontera de posibilidades de consumo (y producción, aunque no siempre de manera homogénea) sino que juega un rol central en los modelos neoclásicos como determinante del nivel de precios.4 Por estos motivos, los principales objetivos del presente documento consisten en examinar los determinantes macroeconómicos de la inversión privada (en tanto que los "determinantes micro" serán examinados en futuras investigaciones). En este sentido, la presente contribución trata de responder a las siguientes preguntas: 1) ¿Cómo ha evolucionado la inversión agregada en Argentina a lo largo del siglo XX y lo que va del nuevo milenio?, 2) ¿Cuál es su sendero de largo plazo?, 3) ¿Cuán volátil es su comportamiento?, 4) ¿De qué manera responde a los distintos ciclos políticos y eventos de crisis?, 5) ¿Cuál es la dinámica diferencial de los distintos componentes de la inversión? y, nuestro principal objetivo, 6) ¿Cuáles han sido los principales determinantes de la inversión privada en los últimos 30 años (período para el cuál las estimaciones econométricas se encuentran menos expuestas a la "crítica de Lucas", tal como se verá en las 2 Ver Keynes (1936) y, especialmente, Keynes (1937), en donde el autor remarca que: "The theory can be summed up by saying given the psychology of the public, the level of output and employment as a whole depends on the amount of investment. I put it this way, not because this is the only factor on which aggregate output depends, but because it is usual in a complex system to regard as the causa causans that factor which is most prone to sudden and wide fluctuations". 3 En efecto, diferentes estudios han demostrado la relevancia del aumento en el stock de capital, definido de un modo amplio, como variable explicativa de las tasas de crecimiento del producto en diferentes países de América Latina y de otras regiones. Entre estos estudios destacan los de Elías (1990, 1992), Gutiérrez (2005), Loayza et al (2004), Fajnzylber y Lederman (1999), y Solimano y Soto (2004), para América Latina. Igualmente, existen diversos estudios para otros grupos de países, como Easterly y Pack (2001) para África, y Klenow y Rodríguez-Clark (1997) para un análisis global, entre otros 4 Ver Groth y Vestin (2004), entre otros. 4 siguientes secciones)? Con estos objetivos en mente, las distintas secciones del documento responden a la siguiente organización. A continuación se presenta una reseña bibliográfica acerca de los determinantes empíricos de la inversión en Argentina (con especial referencia a la inversión privada). Posteriormente, procedemos a contextualizar nuestro análisis, examinando la evolución de la inversión agregada en el largo plazo y describiendo más detalladamente la dinámica de la inversión y sus distintos componentes para el período con mayor disponibilidad de datos (19702005). En la sección 4, desarrollamos nuestro objetivo principal, analizando cuáles han sido los principales determinantes de la inversión privada en Argentina en los últimos 30 años (período para el cual el régimen de acumulación subyacente no pareciera haberse modificado de manera sustancial5). El documento culmina con las conclusiones, las referencias bibliográficas y dos anexos adicionales en donde presentamos un análisis más detallado de la evolución de la inversión en el largo plazo y un conjunto de tablas estadísticas y econométricas que complementan la información relevante para la sección 4. 5 Como se verá más adelante, existe cierto consenso acerca de que las crisis que se suceden en los últimos 30 años (luego de la crisis de 1975-1976) afectan principalmente al modo de regulación de la economía (al entramado institucional regulador del proceso de acumulación), mientras que sus efectos sobre el régimen de acumulación en sí mismos resultan mucho más acotados (ver Panigo y Torija-Zane, 2004). 5 2. Reseña bibliográfica: los determinantes de la inversión en Argentina En esta sección se examina la evidencia empírica relacionada con los determinantes de la inversión en Argentina. La cantidad de estudios que analizan los determinantes de la inversión en Argentina resulta llamativamente limitada, especialmente para el caso de los determinantes de la inversión privada. Entre las contribuciones más importantes, algunos trabajos examinan los determinantes de la inversión independientemente de su origen interno o externo6, mientas que otros se focalizan sobre las variables relevantes para explicar el comportamiento de la inversión extranjera directa (IED).7 Tanto en uno como en otro caso, se destaca la importancia de los determinantes tradicionales del proceso de acumulación (ingresos esperados, costos asociados, riesgo, etc.), así como también la creciente relevancia de un conjunto de factores políticos e institucionales que permiten mejorar sustancialmente el proceso de estimación de los determinantes empíricos de la inversión. A continuación, presentamos un resumen de la literatura examinada, haciendo hincapié en sus resultados más importantes y en las principales características de las metodologías involucradas. 2.1 Los determinantes tradicionales Entre los distintos documentos examinados, el trabajo de Cavallo y Domenech (1986) constituye un punto de partida relevante para nuestra revisión empírica. En esta contribución, los autores estudian los determinantes de la distribución intersectorial (entre el sector agrícola y el resto de la economía) de la inversión en Argentina, entre 1913 y 1984.8 La principal hipótesis del estudio es que la participación de la inversión agrícola sobre la inversión total, estaría determinada por la participación del stock de capital en ese sector, la rentabilidad relativa intersectorial, los costos salariales relativos y las políticas públicas de crédito subsidiado. La evidencia empírica demuestra, a fortiori, un rol significativo para los precios y la rentabilidad relativa, en tanto que las expectativas futuras de rentabilidad y las restricciones crediticias no parecieran tener efectos estadísticamente significativos sobre la estructura sectorial de la inversión. Bebczuk (1994), por su parte, analiza los determinantes de la inversión privada en Argentina para el período 1962 -- 1993. Utilizando una especificación dinámica, derivada del supuesto de costos de ajustes no lineales en el stock de capital, el autor concluye que la inversión privada depende solo parcialmente de su propio pasado. Al mismo tiempo, los resultados econométricos revelan una relación positiva entre la tasa de acumulación de capital del sector privado, por 6 Ver Grandes (1999), López (1998) o Bebczuk (1994). Ver Treviño y Mixon (2004), Kulfas (1998) o Taylor (1997). 8 Ha de remarcarse que el trabajo de Montuschi (1986) no ha sido incorporado a la presente selección debido a que, si bien describe la evolución de la inversión en Argentina, no examina cuáles han sido los determinantes de la misma. 7 6 un lado, y el crecimiento del PBI, del crédito bancario y del déficit en cuenta corriente (ahorro externo) por el otro. De la misma manera, Bebczuk encuentra que la tasa de inversión privada depende negativamente de la deuda externa, la tasa de inflación, la inversión pública, el salario real y el tipo de cambio real. Para el período 1991-1998, Grandes (1999) examina los determinantes de la inversión agregada en maquinaria y equipo, cuya participación en la inversión total se incrementa sustancialmente, pasando del 40% en 1991 a más de un 50% en 1998. Utilizando datos trimestrales y diversas especificaciones econométricas, el autor concluye que, junto a la evolución reciente de la propia inversión, las principales variables explicativas del proceso de acumulación de capital en maquinaria y equipo serían la tasa de crecimiento del PBI, el riesgo país y la variabilidad de los precios relativos (tipo de cambio real). Acosta y Loza (2005) amplían las contribuciones de Bebczuk (1994) y Grandes (1999), presentando un análisis econométrico de los determinantes de la inversión privada (en % del PBI) para el corto, mediano y largo plazo. Los autores utilizan datos anuales para el período 1970--2000, incluyendo como regresores a la inversión pública, a la deuda externa, al grado de apertura comercial, al crédito al sector privado (todas estas variables expresadas en porcentaje del PIB), al tipo de cambio real9 y a la tasa de inflación (medida por la variación porcentual del IPC).10 En el corto plazo (modelo en primeras diferencias) la inversión privada está principalmente determinada por shocks en el tipo de cambio real (efecto positivo), la demanda agregada (efecto positivo), la inversión pública (efecto negativo) y la liberalización comercial (efecto negativo). En el largo plazo (relación de cointegración), la inversión privada estaría adicionalmente determinada (de manera positiva) por el desarrollo de los mercados financieros y de crédito, y por la sostenibilidad de la política fiscal. Para el mediano plazo (modelo de corrección de errores) los resultados básicamente reproducen las conclusiones halladas a partir del modelo de corto plazo. 2.2 Los determinantes políticos e institucionales Como se mencionó al inicio de esta sección, diversos autores enfatizan en el rol de las variables no económicas como determinantes de la inversión. Kydland y Zaragaza (2003), por ejemplo, argumentan que la inversión argentina en la década de los '90 habría sido inferior a la esperada debido a la existencia de políticas públicas distorsivas y, en concreto, al efecto negativo de la estructura tributaria sobre la acumulación de capital. De manera similar, López (1998) señala que las características específicas de las instituciones argentinas habrían tenido un impacto negativo sobre la respuesta de la inversión a las reformas económicas estructurales. Más aún, el comportamiento arbitrario del gobierno generaría incertidumbre para los 9 Acosta y Loza interpretan el tipo de cambio real y el grado de apertura comercial como indicadores de la rentabilidad de la inversión privada. 10 La tasa de interés real no es considerada por los mismos problemas señalados por Bebczuk (1994), relacionados a la elevada inestabilidad de esta variable en el período examinado. 7 inversionistas, al igual que los elevados niveles de corrupción y de concentración del poder político. Los efectos de las variables no económicas son particularmente enfatizados en los estudios que examinan los determinantes la IED.11 Treviño y Mixon (2004) utilizan diferencias en el entorno macroeconómico e institucional para explicar el comportamiento de la IED de empresas multinacionales en un grupo de siete países de América Latina, incluyendo a Argentina, para el período 1988--1999. Los autores encuentran que las variables institucionales predominan por sobre las variables macroeconómicas para explicar los flujos de inversión extranjera directa. Pese a ello, resulta importante mencionar que los resultados obtenidos son particularmente controvertidos, en tanto y en cuanto de los mismos se desprende que mientras el crecimiento económico afectaría negativamente a la IED, el riesgo político tendría el efecto contrario. Siguiendo esta línea de investigación, Stevens (2000) estudia los determinantes de la inversión en maquinaria y equipo de firmas de Estados Unidos en Argentina, Brasil y México, incluyendo variables económicas y políticas en un modelo de maximización del valor esperado de una firma. Entre las variables "políticas" se incluye a la existencia de restricciones a la repatriación de ganancias y a la duración de los gobiernos en el poder. El autor encuentra que la incorporación de estas variables mejora sustancialmente la calidad global del modelo, con un coeficiente negativo y significativo para las restricciones a la repatriación de ganancias y un resultado opuesto (aunque no significativo) para la duración de los gobiernos en el poder. Finalmente, Taylor (1997) argumenta que la inversión extranjera directa en Argentina estaría principalmente determinada por variables de política económica (tales como el uso de controles sobre el flujo de capitales), en tanto que Villarroya (2003) concluye que, con una mayor estabilidad institucional, Argentina podría haber alcanzado mayores tasas de acumulación de capital. Habiendo concluido la revisión bibliográfica de la literatura empírica que examina los determinantes macroeconómicos, políticos e institucionales de la inversión en Argentina, damos lugar en la siguiente sección a la contextualización histórica de nuestro trabajo, la cual nos permitirá comprender de manera más apropiada los principales resultados de nuestra investigación que se describen en la sección 4. 11 Para los efectos de la IED sobre países en desarrollo, ver Moran et al (2005). Para una revisión de la evolución de la IED en Argentina ver Kulfas (1998). 8 3. Contextualización 3.1 Caracterización del comportamiento de la inversión en los distintos períodos históricos Existe cierto consenso entre los economistas de que la inversión en Argentina en el último siglo ha sido decepcionante si se la contrasta en términos internacionales. La débil e instable performance del proceso de acumulación también se refleja en una elevada volatilidad de la inversión y en su escasa participación promedio en el producto. Para contribuir a una mejor comprensión de los factores que afectan estructural y cíclicamente al proceso de acumulación de capital, presentamos a continuación una breve descripción de las principales características de la economía Argentina durante los últimos 100 años. Una descripción más detallada de los distintos períodos históricos involucrados puede encontrarse en Gerchunoff y Llach (1998), Miotti (1991), Neffa (1998) o Panigo y Torija Zane (2004). Gráfico 1: Evolución de la tasa de inversión en Argentina. 1900-2005 0.40 Máx. global: 0.38 0.35 0.30 Radicalismo con Yrigoyen y de Alvear 0.25 0.20 0.15 Militares, Cámpora, Perón y Martínez de Nacionalismo popular y desarrollismo con Perón Perón, Frondizi e Illia (más gob. de factos) Gran Depresión 1era guerra mund. Último golpe de Estado Menem: Convertibili- Alianza dad, privatizaciones crisis y y apertura (comer. y nuevo gob. financiera) peronista 2da guerra mundial Alfonsín 34 años de crecimiento de la tasa de inversión Período Agroexportador: Roca, Quintana, Alcorta y Sáenz Peña Crisis de Balanza de Pagos Recurrentes. "Stop and Go" 0.10 Mín. global: 0.068 0.05 1900 1910 1920 1930 1940 1950 1960 1970 1980 1990 2000 Ratio Inversión – PBI (a precios const. de 1993) Fuente: Dirección Nacional de Programación Macroeconómica del Ministerio de Economía de la Nación y de Ferreres (2005) 9 10 Tabla 1: Resumen de la caracterización estructural de la economía argentina: 1900-2005 Período 19001929 19301952 Principales Características de la Economía Tensiones endógenas y shocks exógenos Evolución de la Inversión El motor de la economía es el sector agro exportador. Fuerte incorporación de factores de producción (tierra, mano de obra). Significativa entrada de capitales (especialmente británicos y norteamericanos en los 20s). La economía se irá industrializando progresivamente. Por otra parte, se observa una creciente intervención del Estado en el proceso de regulación de la economía. Alta vulnerabilidad externa. Alto endeudamiento. Caída de los precios y de los volúmenes de exportación en la Primera Guerra y en la Gran Depresión. La inversión estará principalmente estimulada por la entrada de capitales externos y por las rentas del sector primario, siguiendo de cerca a la evolución del comercio exterior y de los términos de intercambio. Inversión pública financiada con recursos de impuestos a la exportación y acumulación de alto endeudamiento. Se alcanzan las mayores tasas de inversión del siglo (superando el 35% del producto). El proceso de sustitución activa de importaciones se acelera y la industria alcanza una importancia similar a la del sector primario en el producto. El crecimiento de la industria se da en las ramas de productos básicos. Este proceso requiere la creciente importación de bienes de consumo durables, y de máquinas y equipos. El sector agrícola pierde productividad. Mayor protección por medio de aranceles y regulación monopólica. Mayor participación del ingreso de asalariados y crecimiento del consumo. La economía se cierra a la entrada de capitales. Crecimiento desproporcionado del consumo interno respecto a la productividad. Caída de los términos del intercambio (19491952). Fuertes sequías. Inversiones concentradas en el desarrollo de la industria con la incorporación de máquinas y equipos. El proceso de estatización lleva una fracción importante de la inversión a manos del Estado. Las tasas de inversión de la economía no se recuperarán en todo el período (promediando un 14% del producto). 11 Tabla 1: Resumen de la caracterización estructural de la economía argentina: 1900-2005 (cont.) Período Principales Características de la Economía Tensiones endógenas y shocks exógenos 19531975 Producción intensiva en capital, crecientemente industrial y destinada al mercado interno. A fines del período se observa menor participación del Estado, una relación salarial menos regulada y una progresiva apertura de la economía. Altas importaciones (estimuladas por el requerimiento de industrialización) y bajas exportaciones. La economía sufre un período de crisis recurrentes de balanza de pagos, conocidas como Stop and Go. El Estado estimula la integración vertical de la industria mediante la inversión en bienes durables. La tasa de inversión crece a paso firme en el período, aunque con interrupciones dadas por las crisis de balanza de pagos. 19761982 Se inicia un proceso de liberalización comercial. Pérdida de participación en el producto del sector industrial, a consecuencia de la creciente competencia externa. Desregulación financiera y descentralización bancaria. Desregulación del mercado de trabajo y caída en los salarios. Creciente inestabilidad política y episodios de alta inflación. Alto endeudamiento externo de la economía, alto riesgo tomado por el sistema financiero y crisis bancaria (1981-82). Conflicto entre la apertura externa, los episodios de alta inflación y el crawling peg. Luego de un breve período de expansión (7678), la tasa de inversión se reduce de manera significativa, para finalmente colapsar hacia fines de 1981 (Ver gráficos 1 y 2). Las inversiones de capital externo se focalizan menos en la industria y mayormente en el sector de intermediación financiera y de extracción de recursos. 19831989 Las principales características de la estructura económica se mantienen. Si bien se observa una tendencia hacia la La elevada inflación imposibilita cualquier proyección de mediano plazo. El aumento de la tasa de Tendencia decreciente con un mínimo local de 14,7% en el tercer trimestre de 1989. La caída en la tasa de inversión agregada se explica 12 Evolución de la Inversión desregulación de precios y salarios, estos últimos fueron regulados y reindexados a consecuencia de los altos niveles inflacionarios. La producción doméstica continúa destinándose al mercado interno y es dependiente de los insumos extranjeros. Se mantienen los aranceles preferenciales a ciertas industrias. interés internacional hace insostenible las cargas de la deuda externa. principalmente por la notable caída de la inversión en construcción. Tabla 1: Resumen de la caracterización estructural de la economía argentina: 1900-2005 (cont.) Período Principales Características de la Economía Tensiones endógenas y shocks exógenos Evolución de la Inversión 19902001 Se consolida la reducción del Estado mediante el proceso de privatizaciones y la apertura al capital externo. El régimen es impulsado por el endeudamiento externo, en el cual la intermediación financiera, los servicios privatizados y la producción primaria comandan el crecimiento. Se abandona la sustitución de importaciones, con un nuevo perfil de inserción internacional guiado por la dinámica del MERCOSUR. El régimen de tipo de cambio fijo permite reducir el espiral inflacionario en los bienes transables. La dinámica de las exportaciones (aunque se duplican en 7 años) resulta insuficiente para sostener el modelo de crecimiento impulsado por el endeudamiento externo (fenómeno que se agrava por el déficit fiscal y sucesivos shocks exógenos negativos a partir de 1994). Desde mediados de década se añade la progresiva pérdida de competitividad internacional y el estancamiento de la economía. El capital externo que toma parte en el proceso de privatizaciones da el primer impulso a las inversiones. Luego la tasa de inversión de la economía crecerá de forma sostenida hasta el 94 y mantendrá el nivel hasta el 98. 2002- Se observa un cambio en el régimen económico, que Focos Comienza a observarse una lenta 13 de tensión: distribución del 2005 busca impulsar la industria mediante mayores medidas proteccionistas y la subvaluación de moneda. Cesación de pagos de la deuda externa y redistribución regresiva de la riqueza (que se revierte, marginalmente, desde 2004). Creciente importancia del salario indirecto a través de subsidios como el plan "Jefas y Jefes de Hogar". Nuevos impuestos a las exportaciones. ingreso y rebrote inflacionario. El aspecto distributivo (aunque levemente mejor que en el 2002-2003) se encuentra en un nivel de cierta conflictividad. 14 recuperación en la tasa de inversión, principalmente en el rubro construcción, aunque la misma se mantiene aún muy por debajo de los valores previos a 1976. 3.2 Una evaluación más detallada de la inversión y sus distintos componentes en los últimos 35 años La evolución de la tasa de inversión bruta interna fija (IBIF, de ahora en más) en Argentina no presenta una tendencia claramente definida para el período 1970-2005. Como puede observarse en el gráfico 2, su comportamiento es inestable dependiendo de hechos macroeconómicos concretos. En este sentido, los valores de la tasa de inversión presentan puntos mínimos locales durante los momentos previos al "Rodrigazo", la crisis de la deuda de 1982, la recesión ocurrida durante la implementación del Plan Austral, las hiperinflaciones de 1989 y 1990, la crisis del tequila en 1995 y, finalmente, la caída del régimen de convertibilidad en 2002. Para este último acontecimiento macroeconómico, el valor mínimo local de la tasa de inversión es también un valor mínimo absoluto para el total del período 1970-2005. Por otra parte, también puede observarse que el pico máximo histórico está ligado al inicio del proceso de liberalización financiera y desregulación de los mercados en 1976. Del mismo gráfico también puede deducirse la intensidad de cada uno de estos acontecimientos. A partir del análisis de la evolución del stock de capital estimado por el Ministerio de Economía se identifican dos momentos en los cuales existió destrucción efectiva del mencionado stock -las hiperinflaciones y la crisis de la convertibilidad-. Esto quiere decir que la IBIF realizada no alcanzó siquiera para cubrir la depreciación del capital. En la siguiente tabla se resumen las consecuencias más destacables, en materia de inversión y stock de capital, de los hechos o acontecimientos macroeconómicos mencionados anteriormente. Cada tasa de variación presentada en dicha tabla corresponde a una comparación anual respecto al promedio de los 4 trimestres inmediatamente anteriores al comienzo del acontecimiento12. Estos resultados robustecen la identificación de los hechos macroeconómicos con efectos más dañinos sobre la acumulación de capital. En efecto, durante la crisis de la convertibilidad la tasa de inversión disminuyó casi 30% mientras que durante el período hiperinflacionario lo hizo en un 20%. Por su parte, la IBIF (a precios constantes de 1993) disminuyó en 38% y 26%, respectivamente. Tabla 2: Dinámica de la Inversión en las crisis y recesiones Acontecimiento / Trimestre de Inicio Recesión Pre-Rodrigazo / II 1973 Crisis de deuda / IV 1981 Recesión Plan Austral / I Tasas de variación IBIF 1 * IBIF 2 ** -10% -6% Stock de Capital** 4% -16% -8% -20% -13% 1% 0% 12 Para definir el comienzo exacto del acontecimiento macroeconómico se tomó como referencia el trimestre de mayor caída interanual en la tasa de inversión. Luego, el período de referencia considerado para el cálculo de los valores promedio que se utilizaron para calcular las tasas de variación corresponde a 4 trimestres consecutivos incluyendo el trimestre de mayor caída. 15 1985 Hiperinflación / II 1989 Crisis del Tequila / II 1995 Crisis de la Convertibilidad / IV 2001 -20% -12% -29% -26% -16% -38% -0.5% 1% -1% Notas: * en % del PBI; ** a precios de 1993. Fuente: Elaboración propia en base a Ministerio de Economía Gráfico 2: Evolución de la tasa de Inversión y el Stock de Capital en Argentina: 1970-2005 40% 900000 Golpe de Estado: inicio liberalización financiera y desregulación de los mercados 850000 caída stock de capital 800000 caída stock de capital 30% 25% 750000 700000 cambio estructural en la tasa de inversión Recesión pre"rodrigazo" 650000 20% Stock de Capital Millones de $ de 1993 Tasa de Inversión (en % del PBI) 35% 600000 Crisis Deuda 550000 Crisis Tequila Recesión Plan Austral 15% 500000 Hiperinflación 10% I 1970 Crisis Convertibilidad 450000 III 1973 I 1977 III 1980 I 1984 III 1987 Tasa de Inversión I 1991 III 1994 I 1998 III 2001 I 2005 Stock de Capital Fuente: Dirección Nacional de Programación Macroeconómica del Ministerio de Economía de la Nación. La tasa de inversión promedio para el período examinado (1970-2005) fue 21.8% con dos períodos fuertemente diferenciados: 1970-1978 y 1979 en adelante, con una caída estructural (en promedio) del 50% para el último período. En lo que respecta a la evolución por décadas, la tasa de inversión promedio fue 30% para los años ’70, 20.3% para los ‘80, 18% para los ’90, recuperándose paulatinamente desde 2002 (superando el 20% recién en el 2005). La evolución de la inversión previamente mencionada explica por qué el stock de capital experimentó un crecimiento extraordinario durante la década del 70, permaneciendo sin cambios sustanciales durante la década del 80 para luego experimentar un fuerte crecimiento durante los años 90. Producto de la crisis de 16 2002, el stock de capital se contrae para finalmente recuperarse a partir de 2004. Como consecuencia, el valor del stock de capital, medido a precios constantes, es en 2004, 74% mayor al de 1970. No obstante, al diferenciarse el capital referido a la construcción del capital correspondiente a equipo durable --también llamado capital productivo-, se deduce que las evoluciones de estos stocks a lo largo del período analizado difirieron sustancialmente. El gráfico 3 es elocuente. La evolución del stock de capital de la construcción presenta en forma clara una tendencia creciente durante la totalidad del período analizado aumentando poco más de 80%. Si bien existe una leve desaceleración en la acumulación del stock de capital de la construcción durante los momentos correspondientes a las crisis macroeconómicas el efecto observado en el stock agregado del capital no se presenta, al menos en la misma magnitud. Esto quiere decir que las inversiones referidas a la industria de la construcción que fueron realizadas en esos momentos concretos alcanzaron al menos para cubrir la depreciación de su stock. Este resultado no debería sorprender debido a que la depreciación anual de este tipo de stock es relativamente menor al del equipo durable. Por su parte, el stock de capital correspondiente al equipo durable experimentó un fuerte crecimiento durante la década del 70 para luego contraerse notoriamente en la década del 80 alcanzando un valor mínimo de 71 mil millones de pesos de 1993 en 1991, siendo esta cifra 33% menor a la existente en 1980 -valor máximo-. No obstante, entre 1991 y 2001, el stock de capital del equipo durable aumentó un 50%, rozando los valores de 1980 para luego caer abruptamente en el trienio 2001-2003. Por lo tanto, las caídas en el stock de capital agregado comentadas en párrafos anteriores son explicadas casi exclusivamente por las fuertes variaciones negativas del stock de capital productivo. Gráfico 3: Stock de Capital. Construcción y Equipo Durable. Argentina 19702004 800000 120000 750000 110000 100000 650000 600000 90000 550000 80000 En millones de $ de 1993 En millones de $ de 1993 700000 500000 70000 450000 400000 I 1970 60000 IV 1973 III 1977 II 1981 I 1985 IV 1988 Construcción (eje izquierdo) III 1992 II 1996 I 2000 IV 2003 Equipo durable (eje derecho) Fuente: Dirección Nacional de Programación Macroeconómica del Ministerio de Economía de la 17 Nación. Al realizarse una comparación internacional (gráfico 4) se puede notar que la tasa de inversión argentina se ubica siempre en valores inferiores a los correspondientes a otras economías sudamericanas. En efecto, para el período 1990-2004 la tasa de inversión promedio para Brasil es 19%, para Chile 23% mientras que para Argentina tan sólo 17%. Adicionalmente, se observa que estos guarismos son muy inferiores a los de China, país que posee una tasa de inversión promedio cercana al 40% para el mismo período.13 Gráfico 4: Tasas de Inversión. Comparación Internacional 1990-2004 50 Tasa de inversión como porcentaje del PBI 45 40 35 30 25 20 15 10 1990 1991 1992 1993 1994 1995 Brasil 1996 1997 Chile 1998 Argentina 1999 2000 2001 2002 2003 2004 China Fuente: DATASTREAM. Ratios obtenidos a partir de series expresadas a precios corrientes. Como puede observarse en el gráfico 5, la IBIF en equipo durable representó en promedio sólo el 36% de la IBIF total durante el período 1970-2005. Por lo tanto, la mayor parte de la IBIF argentina pertenece a inversión no productiva, es decir IBIF en construcción.14 Durante la década del 90 existió un aumento de la participación de la inversión en equipo durable. No obstante, a partir de la crisis de 2002, existió una reversión en esa tendencia determinando una participación cercana al 30% para luego recuperarse rápidamente, alcanzando en 2005 su valor promedio del período analizado. 13 Vale aclarar que todas las tasas de inversión presentadas en el gráfico 4 están calculadas como el cociente entre la inversión bruta interna y el producto bruto interno, ambos medidos a precios corrientes. 14 Es dable de mencionar, sin embargo, que según datos de la Secretaría de Política Económica del Ministerio de Economía de la Nación Argentina, el 47% de la inversión en Construcción es en activos no residenciales, potencialmente afectados al proceso productivo. 18 Gráfico 5: Participación de la inversión en equipo durable en la inversión bruta total. Evolución 1970-2005 45% Inversión en equipo durable como % de la IBIF 43% 41% 39% 37% 35% Tendencia polinómica 33% 31% 29% 27% 25% I 1970 III 1973 I 1977 III 1980 I 1984 III 1987 I 1991 III 1994 I 1998 III 2001 I 2005 Fuente: Dirección Nacional de Programación Macroeconómica del Ministerio de Economía de la Nación. Durante el período de análisis existió un cambio significativo en la composición de la IBIF en equipo durable en lo que refiere a la participación de equipos importados. Como puede deducirse del gráfico 6, durante las décadas del 70 y del 80 los equipos importados tenían una escasa participación en la IBIF en equipo durable. Si bien existió un aumento transitorio del componente importado entre 1977 y 1981, durante estas dos décadas casi el 90% (en promedio) de la IBIF en equipo durable correspondía a maquinaria de origen nacional. Ya en la década del 90 comenzó un importante proceso de sustitución (exponencial) de equipo nacional por equipo de origen importado. Proceso incentivado por la implementación del régimen de convertibilidad (con un tipo de cambio real sobrevaluado), la eliminación de los aranceles al ingreso de bienes de capital y la puesta en marcha del Mercado Común del Sur (MERCOSUR). Entre 1991 y 2001 el equipo durable de origen importado fue en promedio el 46% del total de la inversión en este rubro. La crisis de la convertibilidad trajo aparejada una fuerte caída en el componente importado pero a partir de 2004 el mismo recuperó su participación sobre el total, para finalmente alcanzar los valores promedios existentes en los momentos anteriores a la devaluación (y cambio de régimen) de 2002. A su vez, la IBIF en equipo durable puede dividirse en equipo de producción y material de transporte. En este caso, durante el período de análisis, las composiciones no sufrieron un cambio sustancial o un quiebre de tendencia fácilmente identificable. Históricamente en promedio el 70% de la IBIF productiva corresponde a equipos de producción, mientras que el restante 30% pertenece a material de transporte. 19 Por su parte, al realizar la división entre IBIF pública y privada también se pueden deducir hechos destacables. La inversión pública, que a fines de la década del 70 y durante toda la década del 80 representaba más del 30% de la IBIF total, comienza a perder participación fuertemente a partir del período de hiperinflación y la posterior privatización de las empresas estatales ocurrida a comienzos de la década del 90. Al año 2005 la inversión pública representa sólo el 12% de la IBIF total. Por lo tanto, puede concluirse que existió un cambio profundo en la composición de la IBIF con una mayor participación de la inversión privada, cercana al 90% (ver gráfico 7). Gráfico 6: Componente importado de la IBIF en Equipo Durable en Argentina: 1970-2005 Componente importado de la inv. en equipo durable. En % de dicha inversión 60% 50% 40% 30% Tendencia polinómica 20% 10% 0% I 1970 III 1973 I 1977 III 1980 I 1984 III 1987 I 1991 III 1994 I 1998 III 2001 I 2005 Fuente: Dirección Nacional de Programación Macroeconómica del Ministerio de Economía de la Nación. 20 Gráfico 7: Caída tendencial de la participación de la inversión pública en la inversión total. Argentina, 1970-2005 40% Inversión Pública como % Inversión Total 35% 30% 25% 20% 15% 10% 5% 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 Fuente: Dirección Nacional de Programación Macroeconómica del Ministerio de Economía de la Nación. Habiendo presentado la evolución histórica de la inversión, con un detalle pormenorizado en lo que respecta a la dinámica de sus distintos componentes para el período más reciente, podemos entonces embarcarnos en la tarea de identificar cuáles han sido los principales determinantes de la inversión privada en Argentina a partir del quiebre estructural en el proceso de acumulación que se verifica en 1976. 21 4. Determinantes de la inversión privada entre 1976 y 2005 Del análisis de los distintos estudios empíricos aplicados al caso argentino se desprende claramente que no existe modelo alguno que sea universalmente aceptado como "la mejor representación del proceso de acumulación de capital". La gran mayoría de los trabajos aplicados, enfocados al análisis de los determinantes de la inversión (ya sea privada o total) en Argentina, utiliza un conjunto de variables explicativas particularmente reducido.15 De manera análoga, la discusión teórica que se deriva de tales estudios, se enfrenta infructuosamente a los restrictivos límites que impone la utilización de un modelo excesivamente parsimonioso (que deja de lado una gran cantidad de información relevante). En la presente sección, presentamos los modelos econométricos y las correspondientes estimaciones utilizando una base de datos lo suficientemente extensa (1976-2005, con datos de frecuencia trimestral) y comprehensiva (en cantidad de variables explicativas relevantes -28-) como para desarrollar las estimaciones pertinentes sin tener que preocuparnos por los grados de libertad y la eficiencia de los resultados obtenidos. En el anexo del documento, se describe de manera detallada cómo se han obtenido las distintas series temporales que utilizaremos en el análisis econométrico, y cuáles han sido las fuentes de información respectivas. Para cada variable, la definición acotada, la media, la mediana y el desvío estándar de sus distribuciones se presentan en la siguiente tabla:16 15 Especialmente las contribuciones más recientes de Acosta y Loza (2005), Grandes (1999), López (1998) o Bebczuk (1994). Ver sección 2. 16 Antes de presentar las principales características metodológicas que guiarán nuestra evaluación empírica, es necesario remarcar que todas las series utilizadas han sido desestacionalizadas utilizando el método X-12 ARIMA. Las estadísticas descriptivas de la tabla 3 han sido estimadas excluyendo los "outliers" (observaciones aberrantes) de cada serie (los cuales fueron identificados utilizando el método de Hadi). 22 Tabla 3: Estadísticas descriptivas básicas de las variables utilizadas Variable Inv_priv Breve descripción (para más detalle ver el anexo) Inversión privada en millones de $ de 1993 Estadísticas Media Mediana Desvío 44972.3 46224.6 8980.5 Dpbi_real Tasa de variación trimestral del PBI real 0.006 0.008 0.025 UCI Utilización de la capacidad instalada 0.707 0.712 0.044 Inv_pub Inversión pública en millones de $ de 1993 4460.9 4152.4 1781.7 Aper_pbi Exportaciones más importaciones / PBI 0.160 0.155 0.060 K/L Capital / Trabajadores ocupados, en $ de 1993 65924.3 65985.0 2706.1 TCR Índice del tipo de cambio real (2000=1) 1.217 0.985 0.469 Wq Participación de la masa salarial en el PBI 0.368 0.365 0.035 Inf Tasa de inflación anualizada (IPC) 0.556 0.133 0.729 Volat Desvío estándar móvil de (ventanas de 4 años) 0.025 0.024 0.007 Deuda_pub_pbi Deuda total del sector público / PBI 0.311 0.321 0.160 Precio de los bienes de capital (relativo a salarios) Alícuota impuesto a las ganancias. Empresas dom. 1.239 1.188 0.424 0.320 0.330 0.034 Alic_ext Alícuota impuesto Empresas ext. 0.381 0.350 0.063 Rr_a Tasa de interés promedio activa real 0.134 0.113 0.227 Wr Índice del salario real en la industria (1993=100) 80.073 75.301 9.663 TCR_pcap_wr Alic_dom Beneficios Ahorro a las Dpbi _ real ganancias. Monto total de beneficios en millones de 147118.9 143746.4 29298.9 $ de 1993 Ahorro nacional en millones de $ de 1993 48800.4 47049.9 7985.3 Crédito_priv Créd. bancario al sect. privado en mill. de $ de 1993 40054.5 7.678 7.266 2.503 Ri Tasa de interés de los bonos de la Tesorería de los E.E.U.U. con madurez constante de 10 años Agricape Part. de agric., gan. y pesca en el PBI 0.057 0.057 0.003 Comercio Part. del sector comercio en el PBI 0.173 0.172 0.008 Concstruc Part. de la construcción en el PBI 0.067 0.061 0.015 23 40371.0 16834.5 Energ Part. del sector energético en el PBI 0.021 0.021 0.005 Financie Part. del sector financiero en el PBI 0.046 0.043 0.011 Manufact Part. de las manufacturas en el PBI 0.195 0.195 0.017 Part. del sector de extracción minera en 0.016 0.016 0.003 el PBI Nota: Para obtener los detalles de fuentes y metodologías de cálculo ver la tercera subsección del anexo. Minas 4.1 El modelo y los procedimientos metodológicos En lo que respecta a las características metodológicas, nuestro análisis empírico comienza con un enfoque similar al de Bebczuk (1994). En efecto, el primer paso de nuestra investigación respecto a los determinantes de la inversión privada en Argentina consiste en identificar cuál es el conjunto de variables explicativas relevantes en el marco de un modelo dinámico (auto-regresivo pero multivariado) estimado inicialmente por mínimos cuadrados ordinarios. El aspecto distintivo de nuestro enfoque radica en apartarnos sustancialmente del procedimiento habitual en estos casos que consiste en utilizar el método "General to Specific (conocido como Gets o LSE approach)" popularizado por Hendry (1995).17 En su lugar, utilizamos un procedimiento alternativo, basado en el espíritu de Pesaran y Timmermann (2000)18, en el cual la especificación más apropiada del modelo econométrico se obtiene incorporando de manera secuencial los distintos bloques de regresores que previamente se han agrupado conforme a las características teóricas de su relación con la inversión privada. Tal como veremos a continuación estos bloques de variables explicativas se relacionan teóricamente con: 2) Ingresos brutos esperados, 3) Incertidumbre, 4) Costos asociados a la acumulación de capital (y al proceso productivo), 5) Disponibilidad de recursos y 6) Estructura sectorial de la producción. 17 Pese a su aceptación generalizada, el método Gets ha sufrido diversas críticas entre las cuales se destaca pertinentemente la demanda de cautela de Davidson:...the Hendry methodology generates neat and elegant constructions in the hands of the master.... the chance is that it will spawn monsters when applied by lesser mortals, Davidson (1991), p. 407. En efecto, gran parte de las críticas se concentra en la enorme dependencia de los resultados del punto de partida, especialmente de las variables elegidas y la cantidad inicial de rezagos. Adicionalmente, la versión más parsimoniosa del modelo que se obtiene luego de la "reducción" enfrenta severos problemas de interpretación, en tanto y en cuanto pueden existir diversos rezagos significativos para la misma variable explicativa, para los cuales se reportan coeficientes de regresión con signos opuestos. Aún cuando todas estas críticas pueden subsanarse de una u otra manera. Nuestro principal inconveniente con el método "Gets" se relaciona con la completa ausencia de teoría económica en el proceso de reducción del modelo original (ver Hoover y Perez, 1999). 18 De tipo "Particular a General". 24 El punto de partida es un modelo univariado auto-regresivo que da cuenta de la "potencial" existencia de costos de ajuste no lineales en el proceso de inversión: log(Inv _ priv) t a b log(Inv _ priv) t 1 t (1) donde log(Inv _ priv) t es el logaritmo natural de la inversión privada (expresada en millones de pesos de 1993, tal y como se describe en el anexo), log(Inv _ priv) t 1 es el primer rezago de la misma variable, a y b son los parámetros a estimar por mínimos cuadrados ordinarios (MCO) y t es el error de la ecuación. Luego, aplicamos un test F de significatividad sobre b para saber si el componente auto regresivo de la inversión privada resulta significativo. En tal caso, procedemos a incorporar el siguiente bloque de regresores, los principales determinantes del flujo de fondos esperado del proceso de inversión: log(Inv _ priv)t a b log(Inv _ priv)t 1 c1 X 1,t zt (2) donde X 1, t Dpbi _ real t log(UCI ) t log( Inv _ pub ) t Aper _ pbit log( K / L ) t log(TCR ) t Wq t (3) c1 el vector que contiene a los coeficientes de regresión asociados a las variables incluidas en X 1, t , en tanto que estas últimas se describen detalladamente en el anexo. Al igual que en el caso anterior, examinamos la significatividad (en este caso conjunta, porque el bloque incluye a 7 variables que impactan sobre el mismo determinante de la inversión: el flujo de ingresos esperado) de los coeficientes de regresión para evaluar si las variables que hemos incorporado al modelo resultan globalmente relevantes. Posteriormente, procedemos de manera similar con los restantes bloques de variables "teóricamente agrupadas": X 2 , t (incertidumbre), X 3, t (costos), X 4 , t (disp. de recursos) y X 5, t (estructura sectorial de la producción). X 2, t Inft log(Volat ) t Deuda _ pub _ pbit 25 (4) X 3, t log(TCR _ pcap _ wr ) t Alic _ domt Alic _ ext t Rr _ a t log(Wr ) t (5) X 4, t log( Beneficios) t log(Credito _ priv ) t log( Ahorro ) t Rit (6) X 5, t Agricapet Comercio t Construc t Energ t Financiet Manufactt Minas t (7) Si todos los bloques resultan significativos, el modelo final será: 5 log(Inv _ priv) t a b log(Inv _ priv) t 1 ci X i ,t t (8) i 1 Los resultados del proceso de especificación de la forma funcional más apropiada para el modelo econométrico propuesto se presentan en la tabla 4. En la columna 1 se comienza por un simple modelo auto regresivo, para luego ir agregando los distintos bloques de variables explicativas (cuya relevancia se examina con los respectivos tests de especificación) en las columnas 2 a 6. 26 Tabla 4: Proceso de especificación de las relaciones de largo plazo Variable exp. log( Inv _ priv t 1 ) Dpbi_real t log(UCI ) t (1) (2) 0.952*** 0.894*** [0.035] [0.039] 2.015*** [0.305] 0.247** [0.119] 0.016 log( Inv _ pub) t Aper_pbi t log( K / L) t log(TCR) t Wq t Inft log(Volat) t Deuda_pub_pbi t log(TCR _ pcap _ wr ) t Alic_domt Alic_ext t [0.022] -0.036 [0.151] -0.167 [0.131] -0.019 [0.018] -0.292 [0.180] (3) 0.881*** [0.045] 1.550*** [0.327] 0.187* [0.111] 0.028 (4) 0.816*** [0.065] 1.496*** [0.284] 0.293** [0.135] -0.001 (5) 0.504*** [0.104] 0.396 [0.335] 0.339** [0.145] -0.045 (6) 0.094 [0.069] 0.419* [0.223] 0.002 [0.126] 0.114*** [0.026] [0.030] [0.029] [0.022] 1.101** 1.564** -0.423 2.558*** [0.470] [0.600] [0.610] [0.640] -0.305 -0.21 -0.098 0.154 [0.183] [0.222] [0.319] [0.244] 0.140** 0.298*** 0.494*** 0.371*** [0.054] [0.106] [0.124] [0.085] 0.293 0.317 1.522** 2.808*** [0.261] [0.362] [0.605] [0.480] -0.001 0.013 0.002 0.004 [0.012] [0.012] [0.011] [0.007] 0.005 0.035 0.090* 0.017 [0.030] [0.051] [0.048] [0.037] -0.388** -0.382** -0.268** 0.521*** [0.150] [0.154] [0.142] [0.110] -0.164* 0.399*** 0.270*** [0.091] [0.118] [0.088] -0.139 -0.229 0.529*** [0.250] [0.299] [0.174] -0.209 -0.609* -0.474** [0.315] [0.322] [0.216] -0.017 -0.02 0.006 RR_a t [0.028] 27 [0.027] [0.018] (6b) 0.057 [0.085] 0.425** [0.200] 0.022 [0.099] -0.106*** [0.018] 2.425*** [0.537] 0.096 [0.240] 0.217*** [0.060] 2.678*** [0.417] 0 [0.000] -0.026 [0.033] -0.032 [0.037] -0.185*** [0.064] -0.222 [0.173] -0.242 [0.302] 0.0003*** [0.000] Tabla 4: Proceso de especificación de las relaciones de largo plazo (cont.) Variable exp. (1) (2) (3) log(Wr ) t (4) 0.015 [0.165] (5) -0.152 [0.207] 0.844*** [0.258] 0.057 [0.045] 0.319*** [0.108] 0.005 [0.006] 4.325* [2.507] 84 0.96 0.08 -6.254 [4.883] 86 0.97 0 log( Beneficios) t log( Credito _ priv ) t log( Ahorro) t Ri t Agricape t Comercio t Construc t Energ t Financie t Manufact t Minas t Constante 0.507 3.048** 4.315** [0.380] [1.491] [2.014] 120 119 86 0.89 0.96 0.96 0 0 0.09 Shapiro-Wilk para Observaciones R cuadrado Prob > F [Bloque] Prob > z [Test normalidad] Prob > chi2 [Test Cook-Weisberg para heterocedast.] Prob > chi2 [Test LM de Breusch-Godfrey para autocorr.] (6) -0.078 [0.141] 1.149*** [0.266] 0.048* [0.028] -0.096 [0.095] 0.005 [0.003] -1.715 [1.346] -2.622* [1.461] 16.108*** [1.877] 0.424 [7.202] -2.657 [1.695] 4.547*** [1.520] 13.121*** [4.753] -6.353 [4.054] 86 0.99 0 0.73 (6b) -0.14 [0.104] 1.161*** [0.213] 0.047 [0.032] -0.122 [0.086] 0.004 [0.003] -1.388 [1.342] -1.557 [1.758] 16.717*** [1.412] -3.939 [6.167] -3.883** [1.692] 4.061*** [1.259] 8.627 [5.833] -5.232 [3.277] 120 0.99 0.41 0.86 0.64 0.12 0.51 Nota: Errores estándar entre corchetes. * significativo al 10%; ** al 5% y *** al 1%. En todos los casos la variable dependiente es log ( Inv _ priv ) t 28 Como podemos apreciar en la tabla 4, todos los bloques examinados resultan globalmente significativos al 10% (ver fila "Prob > F [Bloque]"). Más aún, los distintos tests aplicados sobre los residuos de la forma final (test de ShapiroWilk para normalidad19, test de Cook-Weisberg20 para heterocedasticidad y test de Breusch-Godfrey para auto correlación21) dan cuenta de cierta robustez en las estimaciones. La columna (6b) de la tabla 4, implementa un primer test de sensibilidad, utilizando el mismo modelo final de la columna (6), pero incluyendo en la estimación los valores aberrantes de las distintas variables que habían sido excluidos para obtener los resultados de las columnas (1) a (6). Como puede apreciarse los coeficientes de regresión no varían sustancialmente al incluir las observaciones identificadas como "outliers". Antes de comentar los resultados, es necesario examinar si los mismos no están "contaminados" por la existencia de correlación espuria derivada de la existencia de una (o varias) tendencias estocásticas comunes.22 Este tipo de problema, es un resultado habitual cuando se trabaja con series no estacionarias. Para examinar la significatividad empírica de una potencial "correlación espuria" entre las variables de nuestro modelo, el primer paso consiste en examinar el orden de integración de las distintas variables incluidas en el modelo. Si las mismas son mayoritariamente no estacionarias, será necesario implementar un procedimiento alternativo de estimación a los efectos de corregir el sesgo potencial derivado de las tendencias estocásticas comunes. En la tabla 6 (del anexo), se presentan los resultados del test AugmentedDickey-Fuller para distintas especificaciones del componente determinístico de las series. Al igual que Acosta y Loza (2005), y en concordancia con estudios más detallados como los de Carrera, Féliz y Panigo (2003), encontramos que la gran mayoría de las series macroeconómicas en Argentina (a excepción de DPBI _ real, Inf , UCI , Wr y Agricape ) poseen una raíz unitaria (son no estacionarias). Si bien estos resultados pueden variar al pasar de un test a otro, el estudio de Carrera, Féliz y Panigo (op. cit.) nos muestra que la no estacionariedad de las series macroeconómicas argentinas no es muy sensible al test específico utilizado.23 Debido a la notable persistencia de los shocks que enfrentan las series, hemos decidido desarrollar un nuevo análisis de sensibilidad de los resultados reestimando la especificación final en un contexto alternativo, utilizando un 19 La mayoría de los autores acuerdan que este test es el más apropiado para examinar "no-normalidad" en los errores de regresión obtenidos para muestras de tamaño medio como la nuestra. Ver Conover (1999), Shapiro y Wilk, (1965) o Royston (1982, 1995). 20 Es dable de mencionar, sin embargo, que el poder del test de Cook y Weisberg (1983) para heterocedasticidad se reduce notablemente cuando la auto correlación de los errores es muy elevada. 21 Mientras que el test de Durbin-Watson sólo estudia la existencia de correlación de primer orden, el test LM de Breusch y Godfrey (1978), permite evaluar conjuntamente la existencia de correlación serial de primer orden y de órdenes superiores. 22 Algo que remarcan, entre otros, Engle y Granger (1987) o Maddala y Kim (1998). 23 En este sentido, el test de Dickey y Fuller (1979) aumentado que hemos utilizado brinda resultados similares a los que se obtienen con el test de Phillips y Perron (1988, los cuales se encuentran disponibles para quienes así lo soliciten a los autores). 29 ECM, o modelo de corrección de errores. El ECM (popularizado por trabajos como los de Granger y Engle, 1987; Johansen, 1988; o Hendry, 1995) es una manera elegante de corregir los problemas derivados de la existencia de variables cointegradas, combinando un modelo de corto plazo con otro que nos brinda los ajustes en torno a las relaciones de largo plazo. Inicialmente reexpresamos el modelo en primeras diferencias, de manera que todas las variables se vuelven estacionarias (eliminando así los problemas de correlación espuria). Los resultados de esta primera transformación se presentan en las columnas (1) y (3) de la tabla 5 (sin y con outliers, respectivamente). Pero este modelo en primeras diferencias elimina toda la información referente a la relación de largo plazo existente entre las distintas variables. La forma apropiada para incorporar parte de esta información, sin reestablecer el problema de correlación espuria, consiste en incorporar al error de la relación de largo plazo (obtenido a partir del modelo en niveles de la tabla 4) como regresor adicional en el modelo en primeras diferencias. De esta manera, el nuevo modelo a estimar sería: 5 log(Inv _ priv) t a b log(Inv _ priv) t 1 ci X i ,t t 1 t (8) i 1 donde la principal diferencia con la ecuación (8) esta dada por la reexpresión del modelo en primeras diferencias y por la inclusión de t 1 (el error rezagado de la ecuación 8) como regresor. De esta manera, el coeficiente debe leerse como la velocidad de ajuste de la inversión privada hacia el nivel que determina su relación de largo plazo con las variables explicativas. Para que el modelo sea estable, se espera que 1 0. Para aplicar este procedimiento no solamente es necesario que la gran mayoría de las series tenga una raíz unitaria (algo que ya hemos examinado), sino que las mismas estén cointegradas. Para este último punto bastaría con que el error de la ecuación (8) sea estacionario, algo que se verifica sin mayores inconvenientes con el resultado del test Breusch-Godfrey en la tabla 4. De esta manera, estamos en condiciones de estimar la ecuación (9) y examinar la sensibilidad de los resultados a esta nueva especificación econométrica. En las columnas (2) y (4) de la tabla 5, se presentan los resultados de esta última especificación (sin y con outliers, respectivamente) 30 Tabla 5: Modelos en diferencias, con y sin corrección de largo plazo Variable exp. Δ log( Inv _ priv ) t 1 Δ Dpbi_real t Δ log(UCI ) t Δ log( Inv _ pub) t Δ Aper_pbi t Δ log( K / L) Δ log(TCR) t t Δ Wq t Δ Inft Δ log(Volat) t Δ Deuda_pub_pbi t Δ log(TCR _ pcap _ wr ) t Δ Alic_domt Δ Alic_ext t Δ RR_a t Δ log(Wr ) t Δ log( Beneficios) t (1) -0.01 [0.109] 0.093 [0.240] -0.101 [0.103] -0.056*** [0.021] 1.591** [0.704] -0.441 [0.448] 0.473*** [0.166] 3.582*** [0.686] -0.004** [0.002] -0.022 [0.058] -0.077 [0.074] -0.448*** [0.165] -0.440*** [0.118] -0.464** [0.231] -0.017 [0.016] -0.267 [0.206] 1.990*** [0.394] (2) -0.009 [0.102] 0.353 [0.221] -0.107 [0.089] -0.115*** [0.022] 2.408*** [0.608] -0.043 [0.363] 0.433*** [0.145] 3.302*** [0.604] 0.000 [0.001] -0.005 [0.046] -0.371*** [0.093] -0.306** [0.139] -0.263 [0.236] 0.076 [0.407] -0.005 [0.011] -0.01 [0.179] 1.601*** [0.312] 31 (3) -0.146* [0.076] 0.022 [0.220] -0.051 [0.096] -0.073*** [0.020] 2.056*** [0.651] 0.035 [0.376] 0.026 [0.174] 2.897*** [0.609] 0.000 [0.000] -0.054 [0.048] -0.065 [0.063] 0.023 [0.176] -0.404*** [0.124] -0.347* [0.205] -.0002*** [0.000] 0.24 [0.193] 1.605*** [0.331] (4) -0.102 [0.075] 0.239 [0.214] -0.076 [0.083] -0.126*** [0.020] 2.433*** [0.611] 0.484 [0.340] 0.059 [0.154] 2.788*** [0.630] 0.000 [0.000] -0.049 [0.040] -0.151** [0.070] 0.021 [0.158] -0.206 [0.143] 0.212 [0.265] -.0001* [0.000] 0.22 [0.172] 1.410*** [0.336] (5) 0.108 [0.114] 0.636 [0.468] -0.111 [0.100] -0.086*** [0.018] 1.763 [1.263] 0.472 [0.322] -0.131 [0.145] 2.241*** [0.839] 0.000 [0.000] -0.075* [0.044] -0.064 [0.060] 0.196 [0.152] -0.479*** [0.142] -0.313 [0.193] -.0003*** [0.000] 0.392** [0.169] 1.067** [0.529] Tabla 5: Modelos en diferencias, con y sin corrección de largo plazo (cont.) Variable exp. Δ log( Credito _ priv ) t Δ log( Ahorro) Δ Ri t Δ Agricape t Δ Comercio t Δ Construc t Δ Energ t Δ Financie t Δ Manufact t Δ Minas t EC t1 t (1) 0.011 [0.048] -0.225 [0.168] 0.004 [0.011] -3.626** [1.752] -4.759** [2.228] 13.359*** [3.231] -4.122 [8.807] -1.116 [2.334] 2.202 [1.914] 10.849 [8.234] (2) 0.053 [0.037] -0.179 [0.148] 0.008 [0.008] -2.368 [1.788] -5.209*** [1.577] 16.676*** [2.487] -9.371 [8.344] -1.598 [2.011] 4.380** [1.660] 19.313*** [6.526] -3.115*** [0.679] -0.001 [0.005] 86 0.919 0.08 0.78 0.53 -0.003 [0.005] Observaciones 86 R cuadrado 0.881 Prob > z [Norm.] 0.00 Prob > chi2 [Het.] 0.64 Prob > chi2 [Autocorr.] 0.00 Prob > chi2 [Test J de Hansen para validez de inst.] Prob > chi2 [Test LR de Anderson identificación del mod.] Constante (3) 0.037 [0.042] -0.226 [0.142] 0.001 [0.007] -0.11 [1.609] -2.058 [1.860] 18.209*** [2.385] 0.435 [8.100] -0.875 [2.107] 4.356*** [1.459] 6.559 [8.053] 0.000 [0.004] 119 0.878 0.02 0.45 0.00 (4) 0.054 [0.040] -0.226* [0.129] 0.002 [0.006] -0.465 [1.572] -2.793* [1.678] 20.084*** [1.926] -4.758 [7.493] -1.947 [1.992] 5.229*** [1.242] 7.625 [6.958] -2.454*** [0.603] 0.001 [0.004] 119 0.9 0.09 0.76 0.13 (5) 0.015 [0.038] -0.317** [0.131] 0.005 [0.005] 0.076 [1.492] -1.855 [2.260] 20.729*** [2.485] 4.069 [7.068] -0.55 [1.782] 5.117*** [1.444] 7.203 [6.555] -0.022*** [0.008] 0.002 [0.005] 119 0.8632 0.334 para 0.019 Nota: Errores estándar entre corchetes. * Significativo al 10%; ** al 5% y *** al 1%. En todos los casos la variable dependiente es log ( Inv _ priv ) t 32 Como detalle final para evaluar la verdadera consistencia de nuestras estimaciones, testeamos el supuesto de exogeneidad (a la Granger, 196924) de un conjunto de regresores que, al menos teóricamente, podrían verse afectados por el comportamiento de la inversión privada: DPBI _ real, UCI , Aper _ pbi, K / L, Inf , Beneficios, Credito_ priv y Ahorro . En la tabla 7 (del anexo) se examinan las distintas hipótesis nulas relevantes. Como principales resultados de dicha tabla, se observa que algunas de las variables examinadas no son estrictamente exógenas en el sentido de Granger (básicamente Dpbi _ real y Aper _ pbi ), lo cual amerita que las mismas sean instrumentalizadas para evitar un sesgo en las estimaciones. En la columna (5) de la tabla 5 se presentan los resultados derivados de estimar la ecuación (9) por el método de momentos generalizado (Ver Hansen, 1982), utilizando variables instrumentales para Dpbi _ real y Aper _ pbi (lo que se conoce como estimador IV-GMM) . Los instrumentos utilizados para dichas variables fueron los propios rezagos (desde el segundo al quinto), variables dummies de política identificando al tipo de gobierno ("peronista" o "radical", la de referencia es "militar") y, finalmente, el nivel de reservas internacionales expresado en millones de USD. Como puede apreciarse en las últimas filas de la tabla 5, los test de validez25 e identificación26 del modelo que utiliza variables instrumentales nos permiten examinar los resultados con relativa confianza.27 4.2 Discusión de los principales resultados Una vez discutidos los diversos inconvenientes metodológicos que presenta la estimación de nuestra ecuación de inversión, nos avocamos a la discusión de los resultados acerca de los principales determinantes del proceso de acumulación de capital por parte del sector privado. Para ello procederemos en dos etapas. En primer lugar discutiremos cuáles son las relaciones del largo plazo relevantes para la inversión privada argentina entre 1970-2005 (esencialmente, columnas (6) y (6b) de la tabla 4), para 24 Para examinar exogeneidad débil, se utiliza comúnmente el test de Hausman (1978). Sin embargo, el mismo sufre de diversos problemas y circularidades que lo vuelven particularmente sensible a problemas de especificación. Ver Elosegui et al (2006) o Grandes et al (2006). 25 Ver Sargan (1958) y Hansen (1982). 26 Ver Anderson y Rubin (1949), Staiger y Stock (1997), Dufour (1997) o Stock,Wright y Yogo(2002) para una interesante discusión en torno a los problemas de identificación en el contexto de variables instrumentales. 27 Adicionalmente, la robustez de nuestros resultados también puede apreciarse en la tabla 8, al final del anexo. Allí se presentan los coeficientes que se obtienen de reestimar la especificación ECM con el segundo (en lugar del primer) rezago del error de la ecuación (8) como término de corrección de errores. Esta modificación tiene en mente el hecho de controlar por la potencial colinearidad entre el primer rezago del error de la ecuación (8) y el componente auto regresivo de la inversión privada que se incluye como regresor en la ecuación (9). De hecho, puede apreciarse que en la tabla 5, los coeficientes que determinan la velocidad de ajuste hacia el equilibrio de largo plazo ( en términos de la ecuación 9) en las columnas (2) y (4) son menores que -1, lo cual genera una fuente de volatilidad sistémica que no permite una convergencia de largo plazo hacia la relación establecida a partir del modelo en niveles. Este problema desaparece con la especificación ECM de segundo orden que se presenta en la tabla 8 (al final del anexo) sin que se modifiquen sustancialmente los resultados de la tabla 5. 33 examinar a continuación los resultados que se derivan del modelo de corrección de errores (columnas (2), (4) y (5) de la tabla 5) que nos permiten analizar las relaciones de corto plazo, habiendo controlado por el efecto "gravitatorio" que ejercen las relaciones de largo plazo. 4.2.1 Las relaciones de largo plazo Utilizando los datos que se presentan en las distintas columnas de la tabla 4, comenzamos nuestro análisis por el componente auto regresivo. El resultado es particularmente sorprendente. A diferencia de lo que se encuentra en la gran mayoría de los estudios empíricos (ver Bebczuk, 1994), la serie de inversión privada no pareciera tener "memoria" significativa, cuando el modelo multivariado se encuentra correctamente especificado. Examinando la evolución del coeficiente de log( Inv _ priv t 1 ) entre las distintas columnas (1) a (6b) podemos concluir que la inclusión de las variables proxy de "estructura productiva" (proporción de producto sectorial) son las principales (sino exclusivas) responsables de este cambio radical en la estructura dinámica de la inversión privada. En particular, pareciera que la omisión de variables explicativas sectoriales en los estudios empíricos existentes (a excepción del trabajo de Cavallo y Domenech, 1986) han forzado explicaciones potencialmente ficticias y normalmente fundamentadas en la existencia de costos de ajustes cuadráticos en el proceso de inversión. En otras palabras, la persistencia de los shocks que golpean a inversión privada en Argentina, podría ser un resultado espurio, derivado de la presencia de variables omitidas. Por otra parte, pareciera existir una fuerte relación (positiva) de largo plazo entre la evolución de la demanda agregada (aproximada por Dpbi _ real ) y nuestra variable dependiente. Estos resultados iniciales no hacen sino confirmar la evidencia de Acosta y Loza (2005), Bebczuk (1994) y Grandes (1999), revalidando las proposiciones empíricamente contrastables que se derivan del modelo acelerador de la inversión desarrollado originalmente por Clark (1917). La no significatividad del coeficiente de log(UCI ) se explicaría por la fuerte colinearidad existente entre esta variable y las que identifican a la estructura sectorial de la producción. De cualquier manera, es necesario remarcar que, controlando por Dpbi _ real y log( K / L) , resulta difícil encontrar qué podría modificar significativamente la utilización de la capacidad instalada (influenciando así al proceso de inversión). En este sentido, la no significatividad de log(UCI ) podría verse como un resultado de la multicolinearidad entre esta variable, Dpbi _ real y log( K / L) . Los resultados obtenidos para los coeficientes de log( Inv _ pub) parecieran sostener la hipótesis teórica de que la inversión pública es "sustitutiva" de la inversión privada. Este resultado podría explicarse por la escaza participación de la inversión en infraestructura en la inversión total del sector público (lamentablemente no contamos con dicha apertura para todo el período examinado), habida cuenta de la consabida complementariedad de la misma con la inversión del sector privado. Sin embargo, también es posible que el sector público haya intentado desarrollar una política intencionalmente contra cíclica 34 para el gasto en bienes de capital, incrementando los mismos cuando caía la inversión privada y viceversa. Aunque plausible, esta última explicación se enfrenta a la convención generalizada de que, por el contrario, la política fiscal en los últimos 20 años (por lo menos) ha sido sistemáticamente pro cíclica. El nivel de apertura comercial ( Aper _ pbi ) es una de las variables más significativas del modelo, y presenta una relación de largo plazo fuertemente positiva con la inversión privada. Al haber controlado por tipo de cambio real, estructura productiva, masa salarial, beneficios y precio relativo de los bienes de capital, el efecto del comercio sobre la inversión debería interpretarse en términos de niveles de competencia. La acumulación de capital privado aumenta con la apertura, no porque ésta genere mayores o menores beneficios sino porque aumenta el grado de competencia, lo cual induce a un incremento de la inversión como estrategia de supervivencia.28 La variable log( K / L) no resulta relevante para la evolución de largo plazo de la inversión privada entre 1970 y 2005. Puesto en otros términos, o bien la productividad marginal del capital no depende monotónicamente del stock relativo Capital/Trabajo, o bien existen problemas de medición del stock de capital, o en la agregación de distintas calidades de trabajo. Alternativamente, es posible que nuestra incapacidad de corregir el ratio K / L por la variación en las horas de trabajo promedio por ocupado esté alterando de alguna manera los resultados obtenidos para la variable examinada. Por el contrario, el tipo de cambio real ( log(TCR ) ) resulta siempre significativo: al haber controlado por el precio de los bienes de capital (generalmente importados) un tipo de cambio real depreciado mejora la competitividad de la economía y con ella las expectativas de beneficios futuros para las firmas. Con la variable Wq damos lugar a otro tipo de controversia. La pregunta relevante, puesta en términos de Taylor (2004), resulta evidente: ¿Puede el efecto positivo sobre la demanda de la masa salarial sobre compensar su impacto negativo sobre los costos29 (y así relacionarse positivamente con la inversión privada)? A la luz de nuestros resultados para la relación de largo plazo, la respuesta pareciera ser que sí. Efectivamente, un incremento en la participación de la masa salarial en el PBI se encuentra positivamente correlacionado con una dinámica creciente de la inversión privada.30 28 Es relevante mencionar que no se ha incluido como regresor a los términos del intercambio. Debido a que esta variable está correlacionada con el grado de apertura comercial, podemos asumir que parte de los efectos que estamos captando bajo el grado de apertura comercial se deben a variaciones en los términos de intercambio. Así también, al haber controlado por el tipo de cambio real y el precio de los bienes de capital, ya hemos incorporado el efecto de los términos de intercambio sobre la inversión a travéz de estas últimas dos variables. (i.e.: Es poco probable no captar un efecto de los términos de intercambio sobre la inversión que no pueda ser captado a travéz de los mencionados controles) 29 Impacto negativo si no existe un efecto “salarios de eficiencia” significativo. Caso contrario, el aumento salarial podría finalmente reducir los costos medios laborales al incrementar más que proporcionalmente la productividad. 30 Lo cual no resulta extraño para una economía esencialmente "cerrada" como lo ha sido la economía argentina en el período examinado. 35 Cuando se depuran los efectos reales que puede tener sobre variables tales como el tipo de cambio, la tasa de interés activa o los salarios reales (controlando en la ecuación por ( log(TCR ), RR_ a y log(Wr ) ), la inflación deja de tener efectos significativos sobre la inversión. En otras palabras, los resultados de la tabla 5 parecieran indicar que, en tanto fuente de incertidumbre (el otro efecto de la inflación), la variación del índice de precios al consumidor no tiene relación alguna de largo plazo con la inversión privada. Algo similar sucede con nuestra variable proxy de volatilidad macroeconómica ( log(Volat ) ). De hecho, la única fuente de incertidumbre relevante para la evolución de largo plazo de la inversión privada pareciera ser el ratio entre deuda externa pública y producto bruto interno ( Deuda _ pub _ pbi ). Con el signo teóricamente esperado, los resultados que se obtienen para esta última variable son poco alentadores para la teoría keynesiana (especialmente cuando se los combina con los resultados obtenidos para la inversión pública). En efecto, un incremento en el gasto de bienes de capital del sector público que no pueda ser completamente financiado con recursos propios pareciera generar un doble efecto negativo sobre inversión privada. Al efecto "sustitución" previamente mencionado (en la explicación del coeficiente de log Inv_pub ) habría que sumarle el impacto de la deuda pública sobre la incertidumbre (y con ella sobre los "animal spirits" de los empresarios) y la capacidad de financiamiento del sector privado -el conocido "efecto desplazamiento". En lo que se refiere a las variables de costos, encontramos que la más relevante es la que identifica al precio relativo del capital en relación al trabajo: log(TCR _ pcap _ wr ). Para todas y cada una de las especificaciones del modelo estimado, el coeficiente asociado a esta variable resulta negativo y significativo. Habiendo controlado por movimientos en el tipo de cambio real y en los salarios reales, el impacto del precio relativo del capital sobre la inversión privada solamente puede explicarse a partir de variaciones en el precio en dólares de los bienes de capital. Posteriormente observamos que las alícuotas del impuesto a las ganancias aplicadas a empresas domésticas y extranjeras afectan negativamente a la inversión privada, pero solamente en contextos estables. Cuando incorporamos los eventos aberrantes (outliers, épocas de fuerte inestabilidad macroeconómica) a la estimación (ver columna (6b) de la tabla 5), los efectos de las alícuotas impositivas se vuelven no significativos. Resulta sorprendente que con la variable RR_ a sucede exactamente lo contrario. En general, la tasa de interés activa real no tiene ningún efecto relevante (de largo plazo) sobre la inversión privada en Argentina. Sin embargo, cuando reestimamos el modelo final incluyendo los outliers, el costo financiero real de la inversión se vuelve muy significativo (al 1%) y con el signo esperado. La última de las variables que pertenecen al grupo de "costos" es el salario real, cuyo coeficiente resulta no significativo en todas y cada una de las especificaciones examinadas. Al igual que en el caso de la utilización de la capacidad instalada, la no significatividad de este coeficiente pareciera ser el 36 resultado de un problema de multicolinearidad. En efecto, al controlar por log(Beneficios) , Wq y log(TCR _ pcap _ wr ) en la misma ecuación, la única variación de los salarios reales factibles es aquella que no cambia ni el monto ni la tasa de beneficios (y que deja inalterado el precio relativo capital/trabajo). Bajo tales circunstancias, los efectos potenciales del salario real (condicionado) se encuentran muy limitados. No sorprende entonces que gran parte del efecto del salario real sobre la inversión ya haya sido captado por Wq t y log(TCR _ pcap _ wr ). Respecto al grupo "disponibilidad de recursos", hallamos diversos resultados interesantes. En primer lugar, los beneficios son fuertemente significativos para explicar la evolución de largo plazo de la inversión privada, al punto de presentar las mayores elasticidades (incluso superiores a 1). La relevancia de las restantes variables es mucho más acotada (por ejemplo la de log( Credito _ priv ) ) o directamente nula (para el caso de log( Ahorro) t y Rit ). Para el caso del ahorro, resulta importante mencionar que la identidad macroeconómica fundamental iguala forzosamente el ahorro global (doméstico más externo) a la inversión agregada, pero no exige ninguna relación a priori entre ahorro doméstico (nuestra variable log( Ahorro) t ) e inversión privada (la variable dependiente del modelo). La no significatividad del ahorro doméstico en el largo plazo implicaría que la dinámica de la inversión se relacionaría principalmente con la evolución del ahorro externo (déficit en cuenta corriente). Por otra parte, la fuerte elasticidad de la inversión privada a los beneficios agregados (en conjunto con la escaza importancia del crédito bancario y la tasa de interés internacional) da una idea de la importancia de los recursos propios como fuente de financiamiento del proceso de acumulación de capital en el sector privado. Este hallazgo es compartido por estudios de Elosegui y otros (2005) del CEF y Elosegui y otros (2006) del BCRA, quienes argumentan que el diferencial de costos (entre fuentes internas y externas) y los problemas de información asimétrica en mercados imperfectos han incrementado el racionamiento de crédito disponible para el sector no financiero de la economía. Cuando la inversión privada depende sistemáticamente de la disponibilidad de fondos propios, una gran cantidad de oportunidades de inversión no son desarrolladas, generando problemas de eficiencia y asignación. Finalizamos nuestro análisis de largo plazo señalando nuevamente (ya lo habíamos hecho al comentar el componente auto regresivo) que los cambios en la estructura sectorial de la producción en Argentina (participaciones sectoriales relativas en el PBI) parecieran constituirse como "el" determinante clave del proceso de inversión. A modo de síntesis podemos señalar que, como relación de largo plazo, la dinámica de la inversión privada se ve particularmente favorecida cuando crece la construcción, el sector industrial ( Manufact ) y el de explotación minera. Por el contrario, la performance más pobre de la inversión privada se verifica cuando el crecimiento se encuentra liderado por el comercio mayorista y minorista, el sector Financiero o la agricultura. Una vez discutidos los aspectos principales de la relación de largo plazo entre 37 inversión privada y sus distintos determinantes, procedemos a la evaluación de los resultados del modelo de corrección de errores. 4.2.2 Las relaciones de corto plazo condicionadas por los ajustes hacia el "equilibrio" Una vez examinadas las relaciones de largo plazo (relaciones en niveles), procedemos con el análisis de los resultados econométricos obtenidos a partir del modelo de corrección de errores (tabla 5), que reflejan las relaciones de corto plazo (relaciones en primeras diferencias) entre la inversión y sus variables explicativas teniendo en cuenta los ajustes concomitantes hacia el equilibrio de largo plazo. Dentro del grupo de las variables que determinan el flujo de ingresos esperado, se observa que, a diferencia de los resultados que se observan para las relaciones de largo plazo, los coeficientes correspondientes al Dpbi_real no son estadísticamente significativos. En otras palabras, las fluctuaciones de la demanda agregada no son relevantes para explicar el comportamiento cíclico de la inversión (sólo su evolución tendencial). A excepción de la inversión pública ( Inv _ pub ), el coeficiente de apertura comercial ( Aper _ pbi ) y la participación de la masa salarial en el PBI ( Wq ), el resto de las variables que componen el grupo de los determinantes del flujo de ingresos esperado no son significativas a los niveles usuales de confianza.31 Para las tres variables relevantes, los resultados son similares a los obtenidos para las relaciones de largo plazo. Al igual que para las relaciones de largo plazo, los coeficientes de la variable K / L tampoco son significativos. Como se vio con anterioridad, esto parecería indicar que para el período examinado no se verifica la relación estándar entre stocks relativos de los factores de producción, productividades marginales y acumulación de capital privado.32 En lo referente a la incertidumbre, en el análisis de largo plazo sólo se obtuvieron coeficientes significativos estadísticamente para la deuda externa pública como porcentaje del PBI. En el corto plazo, dicho resultado se mantiene (aunque el coeficiente correspondiente al estimador IV-GMM no resulta significativo). La inflación, por su parte, no resulta significativa ni en el corto ni el en largo plazo. La única diferencia con el análisis derivado de la tabla 4, radica en el rol de la volatilidad. En el largo plazo, la variable era no significativa. En el corto plazo, cuando se controla por endogeneidad (estimador IV-GMM, columna (5) de la tabla 5), la volatilidad tiene el efecto negativo esperado. Mayor volatilidad, mayor incertidumbre, menor inversión privada. 31 En el caso del TCR , su significatividad se limita a la estimación que no incluye outliers. Cuando se incorporan estas observaciones o se corrigen por endogeneidad de Aper _ pbi y Dpbi _ real , el TCR deja de ser significativo para explicar las fluctuaciones de corto plazo de la inversión privada. 32 Con las salvedades ya mencionadas referidas a los problemas de medición de K, L y la intensidad de su utilización. 38 Con respecto a las variables del grupo asociado a los costos del proceso de inversión, los resultados de corto plazo pueden resumirse en tres apreciaciones generales. En primer lugar, la única variable que resulta sistemáticamente significativa (y con un efecto negativo sobre la inversión privada) independientemente del estimador utilizado es la alícuota del impuesto a las ganancias aplicada a las empresas constituidas con capital nacional. Cuando se estima el modelo inicial, sin outliers ni control por endogeneidad, el precio relativo del capital ( TCR _ pcap _ wr ) tiene un efecto negativo y significativo sobre la inversión privada al igual que lo que se verificaba para las relaciones de largo plazo. La restante variable del grupo "costos" que resulta significativa en (al menos) 2 especificaciones, es la tasa de interés activa real ( RR_ a ), cuyo impacto (negativo) de corto plazo sobre la inversión privada solamente resulta relevante cuando se incluyen las observaciones identificadas como outliers (algo muy similar a lo que ocurre con las relaciones de largo plazo). Por otra parte, no se observan diferencias sustanciales entre los resultados de corto y largo plazo para el grupo de variables de recursos financieros. Los beneficios tienen un efecto positivo y significativo sobre la inversión privada (independientemente de la especificación econométrica). Por el contrario, el crédito al sector privado ( Credito _ priv ) y la tasa de interés internacional ( Ri ) no tienen un efecto significativo sobre nuestra variable dependiente. Sin embargo, existe una relación negativa y significativa entre ahorro doméstico e inversión privada. En una economía abierta con movilidad perfecta de capitales, cuando la tasa de interés internacional sube, la inversión privada se reduce pero el ahorro doméstico aumenta, verificándose lo contrario cuando la tasa cae. Esto podría explicar la relación negativa entre ahorro doméstico e inversión. El problema con este enfoque es que requiere de movimientos en la tasa de interés internacional para explicar la relación negativa entre ahorro e inversión. Por otra parte, es importante mencionar que, al igual que con el caso de las restantes variables examinadas, podrían existir variables omitidas -como una variación permanente en los términos del intercambio, que lleven al ahorro doméstico y a la inversión a moverse en sentidos opuestos.33 Finalmente, la relación de corto plazo entre las variables sectoriales y la inversión privada es muy similar a la de largo plazo. La principal diferencia consiste en que la participación del sector financiero en el PBI deja de ser una variable significativa para explicar la evolución de la inversión en el corto plazo. 33 Finalmente, existe una interpretación alternativa que se basa en la paradoja de la frugalidad de Keynes (1973), según la cual un aumento en el ahorro de los consumidores reduce la demanda agregada de la economía, desincentivando así el gasto de inversión de las empresas. 39 5. Síntesis y conclusiones El importante interés y la controversia existente sobre el análisis, tanto teórico como empírico, de la inversión no son casuales. Las soluciones propuestas para resolver problemas de tipo macroeconómico como las recesiones y el desempleo, cualquiera fuese el pensamiento económico subyacente, tienen como componente esencial a la inversión. Además, es ampliamente reconocido el efecto positivo de la inversión sobre el crecimiento económico y su influencia significativa sobre las expectativas de inflación (a partir de su impacto sobre la evolución de la capacidad instalada) y la dinámica distributiva. Del análisis histórico de la inversión en Argentina se pudo constatar el por qué del consenso acerca del decepcionante desempeño de su evolución34, de su marcada volatilidad35 y de cómo su composición y su dinámica de corto plazo se ha transformado radicalmente según políticas e instituciones de cada período. La economía principalmente agro-exportadora de principios de siglo XX, atrayendo exitosamente el capital y los recursos externos, alcanzó las tasas de inversión más altas de la historia de Argentina. Posteriormente, las décadas de orientación auto-centrada y los esfuerzos realizados por el desarrollismo en materia de estímulos industriales no han sido igualmente exitosos en materia de acumulación. Las crisis de balanza de pagos resultantes de la incapacidad de sostener el nivel de importaciones que la industrialización necesitaba, ha jugado un papel crucial en esta dinámica. Largas décadas de inestabilidad inflacionaria y las crisis resultantes del excesivo endeudamiento también han coincidido con el colapso final de los incentivos a invertir. Con la estabilización monetaria, las privatizaciones y la desregulación de los mercados en los años '90 se verifica una importante recuperación de la inversión, con una participación sólo marginal de la inversión pública. El estancamiento que comienza en 1998 y la crisis del 20012002 conducen a un mínimo local en la tasa de acumulación de capital (para recuperarse gradualmente en los últimos años). Del análisis más exhaustivo que desarrollamos para los últimos 35 años (gracias a la mayor disponibilidad de información), se pueden obtener algunas reflexiones interesantes. A partir de 1979, se verifica una caída estructural de la tasa de inversión (de 10 puntos porcentuales en términos del PBI). Por su parte, las crisis más recientes (hiperinflaciones hacia fines de los '80 y crisis de la convertibilidad) solamente han tenido efectos temporarios sobre el proceso de acumulación y, por ende, sobre el stock de capital de la economía. En lo que respecta a la composición de la inversión, se destaca inicialmente la mayor participación de la inversión en construcción en detrimento de la inversión en equipo durable. En efecto, históricamente, más del 60% de la IBIF total 34 Reflejado en una tasa promedio, en términos del PBI, de menos del 17% para los últimos 50 años, una tasa que, por ejemplo, representa poco más del 30% de la tasa promedio de inversión en Singapur. Según los datos de la Penn World Table, esta pobre performance se traduce en el puesto 64 (sobre 188) a nivel mundial (para el mismo período), siendo el peor ranking entre los 5 grandes de América Latina (México, Brasil, Argentina, Chile y Venezuela). 35 Desde 1950 en adelante el coeficiente de variación (desvío estándar sobre media) de la tasa de inversión es 0,19, muy superior a los valores observados para el mismo período en la gran mayoría de los países, tales como Francia (0,09), Alemania (0,13), México (0,14), Estados Unidos (0,07) e incluso China (0,18), quien presenta un período de extrema turbulencia entre 1950 y 1962. 40 corresponde a inversión en construcción. Por otro lado, la distribución de la inversión entre sector público y sector privado se mantiene moderadamente estable hasta inicios de los '90, momento en el cual se observa una notable caída en la participación de la inversión pública (que pasa del 30% -en promedio para el período que va desde 1970 a 1990- a menos del 10% -como promedio desde 1990 a 2005- de la inversión total). En lo que se refiere a la composición del stock de capital, se verifica que la acumulación en equipos durables responde mucho más elásticamente a los ciclos económicos que el stock en "bienes inmuebles" (construcción) y que la participación del componente importado (en el stock de equipo durable) pasa de menos de 15% en los años '70 a más del 50% en la década de los '90. La caracterización histórica desarrollada nos permite contextualizar el aporte más importante de nuestro trabajo, esto es examinar los determinantes de la inversión privada en Argentina a partir del último quiebre estructural en el proceso de acumulación. A modo de resumen, sin que por ello se minimice la importancia de los diversos factores analizados en el trabajo, podemos resaltar que: 1) En oposición a los resultados de la mayor parte de la literatura empírica existente para el caso argentino, encontramos que la inversión privada no depende significativamente de su pasado. Este resultado (que desde un punto de vista teórico refuta la hipótesis tradicional de costos de ajustes crecientes en el stock de capital), se deriva de una mejor especificación del verdadero proceso generador de los datos (habida cuenta del mayor alcance y longitud de nuestra base de datos, en relación a los estudios empíricos pre-existentes). 2) En lo que respecta a los determinantes de los ingresos esperados derivados del proceso de inversión, encontramos que la evolución de la demanda agregada (en su conjunto) solamente tiene efectos (positivos y significativos) sobre la inversión privada en el largo plazo. Algo similar sucede con el tipo de cambio real cuyas depreciaciones constituyen una fuente de crecimiento significativa para la inversión privada. En el corto plazo, ninguna de las dos variables pareciera determinar la evolución cíclica de nuestra variable dependiente. Por su parte, el coeficiente de apertura de la economía (exportaciones más importaciones sobre producto) y la participación de los asalariados en el PBI tienen efectos tanto en el largo como en el corto plazo. Ambas variables son de las más significativas en todas las especificaciones y tienen un impacto positivo y sumamente relevante sobre la inversión privada. Finalmente, el caso de la variable inversión pública merece un mayor grado de detalle en la discusión. Tanto los resultados de corto como los de largo plazo parecieran rechazar la hipótesis de complementariedad, validando la idea alternativa de que, para el período examinado, la inversión pública sería sustitutiva de la inversión privada aunque las elasticidades obtenidas son relativamente bajas. 3) Para el bloque de variables relacionadas a la incertidumbre macroeconómica, los resultados son bastante contundentes aunque, en cierta medida, inesperados. La única variable sistemáticamente significativa 41 (independientemente del plazo y del método de estimación) para explicar el comportamiento de la inversión privada es el ratio entre la deuda del sector público y el producto bruto interno. Por el contrario, la volatilidad del crecimiento y la tasa de inflación parecieran ser completamente irrelevantes para el proceso de acumulación del sector privado. 4) Por su parte, las variables del bloque "costos de la inversión y del proceso productivo" también presentan resultados interesantes. Podemos establecer que para el corto plazo, las variables de costos más relevantes son la tasa de interés real y la alícuota del impuesto a las ganancias que se aplica sobre empresas de capital nacional (constituido originariamente en el país). En ambos casos el efecto sobre la inversión privada es negativo, estadísticamente relevante y particularmente significativo desde un punto de vista económico (especialmente para la variable tributaria). Para el largo plazo, la variable más importante es el precio relativo del capital (en relación al costo salarial) y, en menor medida, la alícuota previamente mencionada. 5) Cuando examinamos la sensibilidad de la inversión privada a la disponibilidad de financiamiento (interno o externo, doméstico o internacional) llegamos a las siguientes conclusiones. La mayor parte del financiamiento de la inversión privada pareciera provenir de recursos propios, internos a la firma, en tanto y en cuanto la acumulación de capital del sector privado responde muy elásticamente a los beneficios corrientes pero no tiene relación alguna con la evolución de nuestro indicador de profundidad financiera (créditos al sector privado sobre PBI). De manera análoga, el hecho de que la variable dependiente no tenga una correlación positiva con el ahorro doméstico (obteniendo, incluso, algunos coeficientes de regresión negativos para las relaciones de corto plazo) indica (por simple identidad contable macroeconómica) que la dinámica de la inversión privada en Argentina se explicaría principalmente por la disponibilidad de financiamiento externo (a través de la cuenta de capital ya que, para el período examinado, la inversión agregada supera en promedio al ahorro doméstico). Junto a la no significatividad de la variable tasa de interés internacional, los resultados nos hablan al mismo tiempo de racionamiento de crédito interno, de dependencia externa y de elecciones óptimas en contextos de alta incertidumbre (que reducen la relevancia empírica de la paridad no cubierta de tasas de interés). 6) Nuestras conclusiones del análisis empírico finalizan con el impacto de la estructura sectorial de la inversión sobre la dinámica del proceso de acumulación de capital privado a nivel agregado. En este sentido, los hallazgos son bastante intuitivos: a) las estimaciones mejoran notablemente su poder explicativo cuando se incluyen las variables de estructura sectorial, y b) la inversión privada se acelera significativamente cuando el crecimiento macroeconómico es liderado por la industria y el sector de la construcción. En definitiva, los resultados previamente examinados, deben interpretarse como una serie de "indicios fuertes" en relación a una temática crucial y compleja en Argentina, a partir de los cuales es posible comenzar a discutir las estrategias más apropiadas de crecimiento y acumulación, y las políticas económicas 42 disponibles a tales efectos.36 36 En este mismo sentido, 1) los problemas de medición existentes (especialmente en el consumo, el ahorro, entre otras variables), 2) la potencial relevancia de variables omitidas tales como los términos del intercambio y 3) la necesidad de desarrollar diversos análisis de sensibilidad para los resultados obtenidos (i.e. usando diversos tasas de interés o proxies de volatilidad) nos llevan a plantear la necesidad de continuar con el análisis de los determinantes de la inversión privada en Argentina en futuras investigaciones. 43 Referencias 1. Acosta, P. y Loza, A. 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Ambas series fueron tomadas de su fuente original: la Dirección Nacional de Programación Macroeconómica del Ministerio de Economía (MECON, de ahora en más). Por su parte, la variable Inv_pub corresponde a la serie de inversión pública y fue calculada como sigue. En primer lugar se utilizaron los datos suministrados por la Secretaría de Programación Económica del MECON sobre gasto de capital del sector público (trimestral en moneda constante para el período 19932005), medido como porcentaje del PBI. Estos datos (anualizados) fueron empalmados con una serie anual de gasto de capital del sector público proveniente de la Secretaría de Hacienda del MECON para el período 19761993, también expresados como porcentajes del PBI en moneda constante. Para ello se llevo "hacia atrás" a la primera serie aplicándole las tasas de variación de esta última. Para el tramo 1976-1993, la nueva serie empalmada fue trimestralizada utilizando un método de interpolación lineal. Para el período 1993-2005 se utilizaron los datos trimestrales ya existentes. Finalmente, se multiplicó esta serie por la serie de PBI real para obtener la serie Inv_pub valuada en millones de pesos de 1993. La serie de inversión bruta privada (variable Inv_priv) se obtuvo como diferencia entre la serie IBIF y la serie Inv_pub. La variable Volat mide la volatilidad de la economía y fue calculada como el desvío estándar de DPBI_real, calculado sobre ventanas móviles de 16 trimestres. Por su parte, la variable UCI representa a la serie de tiempo trimestral del porcentaje de utilización de la capacidad instalada de la industria, obtenida de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas FIEL-. La variable K/L representa el cociente entre el stock de capital y la cantidad de ocupados de la economía. El stock de capital se deriva de una estimación realizada por la Dirección Nacional de Programación Macroeconómica del MECON, está medido en millones de pesos del año 1993 y tuvo en consideración un método de depreciación geométrico. Por su parte, la cantidad de ocupados, medida en millones de personas, se calculó realizando la multiplicación entre la 49 tasa de empleo y la población total.37 Esta última variable es el resultado de una estimación propia en base a información censal del INDEC y al supuesto de una tasa de crecimiento de la población constante. Para el cálculo de la tasa de empleo trimestral se tuvo en cuenta el cambio de metodología efectuado por el INDEC en 2003. En efecto, la serie para el período 1976-2003 se empalmó utilizando las tasas de variaciones de las series de la nueva metodología. Como originalmente la serie de tasa de empleo era de periodicidad semestral, la serie final se obtuvo trimestralizando los datos semestrales utilizando promedios. La variable Aper_pbi representa el grado de apertura de la economía argentina mediante el cociente entre la suma de las exportaciones e importaciones y PBI_real. Las mencionadas series de comercio exterior debieron empalmarse, utilizándose para el período 1993-2005 series a precios de 1993 del MECON. Luego, se llevó hacia atrás a cada una de las series utilizando a) para el período 1980-1993, las tasas de variación de las mismas series expresadas a precios de 1986 (obtenidas también del MECON) y b) para el período 1976-1980, las tasas de variación de las series expresadas a precios de 1970 (obtenidas de la Comisión Económica para América Latina, CEPAL, de ahora en más). Todas las series originales son de periodicidad trimestral en valores anualizados.38 La variable TCR representa al tipo de cambio real bilateral y se calculó como el producto entre las series del tipo de cambio nominal y el cociente entre los índices de precios al consumidor de Estados Unidos y Argentina. Estas tres series fueron obtenidas de la base "International Financial Statistics" (IFS, de ahora en más) del Fondo Monetario Internacional. La base utilizada es 2000=1. La variable Wq representa a la distribución funcional del ingreso, más específicamente al ratio entre la masa salarial total y el PBI_real.39 Vale aclarar que no existe información oficial sobre esta variable. Para poder construir la serie utilizada se trimestralizaron, mediante una extrapolación lineal, las series anuales de Lindenboim (2005) y Feliz y Pérez (2004). Posteriormente se estimó el promedio simple de ambas series para finalizar el cálculo con la aplicación hacia atrás de la tasa de variación de la serie de Féliz (sobre el promedio previamente calculado, utilizando como punto de partida la estimación obtenida para el primer trimestre de 1993) para el período 1988-1992 (debido a que no existen datos de Lindenboim para esta sub-muestra de Wq). 37 Recordemos que la tasa de empleo se define como el ratio entre el total de ocupados y la población total, en tanto que la tasa de ocupación es el ratio entre el total de ocupados y la población económicamente activa. 38 Resulta evidente que este tipo de empalme no tiene en cuenta el impacto de los cambios en los precios relativos del deflactor implícito del PBI. Entre otros problemas, esto genera inconsistencias contables básicas, no asegurando que la suma de los componentes de la demanda agregada iguale al producto más las importaciones. De cualquier manera, esta metodología de empalme constituye la única herramienta disponible para examinar de manera aproximada la evolución de las cuentas nacionales trimestrales en Argentina. 39 Un indicador más apropiado para la participación de los trabajadores en el ingreso total hubiese consistido en dividir la masa salarial por el producto bruto nacional. Sin embargo, tanto por cuestiones comparativas como por cierto escepticismo respecto de la fiabilidad de información acerca de la remuneración neta de factores del exterior, finalmente optamos por utilizar como denominador el producto bruto interno. 50 Por su parte, la serie Inf refiere a la tasa de inflación trimestral anualizada calculada a partir del índice de precios al consumidor publicado por el INDEC. La variable Deuda_pub se refiere a la deuda pública total como porcentaje del PBI. Para el período 1993-2005 se utilizó la serie trimestral de la Secretaría de Finanzas del MECON. Para el período 1976-1993 se empalmó la serie anterior utilizando las tasas de variación obtenidas de una serie anual trimestralizada estimada por Ferreres (2005) en base a datos del Boletín de Techint, del FMI y del Banco Central de la República Argentina (BCRA, de ahora en más). La serie resultante estaba medida en dólares corrientes. Como la variable Deuda_pub esta medida como porcentaje del PBI, se utilizó para el cálculo el PBI en dólares corrientes obtenido a partir de la multiplicación del tipo de cambio nominal por el PBI trimestral a pesos corrientes (obtenido del IFS). Con el objetivo de contar con una variable que representara los cambios en los precios relativos de los bienes de capital se construyó la variable Tcr_pcap_wr. La misma se obtuvo realizando el cociente entre la multiplicación de las series TCR y el índice de precios de las importaciones de bienes de capital suministrado por el INDEC (1993 base=100) y un índice de salario real industrial. Este último índice (variable Wr) tiene como base 1980 y debió construirse a través de un empalme de series. Para el período 1976-1993 se utilizó el índice de salario real promedio trimestral de CEPAL, luego se realizó el mencionado empalme utilizando las tasas de variación del índice de salarios real industrial calculado por Tendencias Económicas y Financieras en base a información del INDEC. Las variables Alic_dom y Alic_ext representan las alícuotas del impuesto a las ganancias aplicadas a sociedades de origen nacional y de origen extranjero, respectivamente (ambas series suministradas por Errepar). La obtención de la serie de tiempo referida a la tasa de interés activa real (variable Rr_a) no fue una tarea sencilla tanto por la heterogeneidad y abundancia de datos existentes para distintos plazos y tipos de préstamos, como por la dificultad de definir claramente una tasa de referencia. El primer paso para obtener esta serie fue el cálculo de la tasa de interés nominal. Para el período 1980-2005 se utilizó el promedio mensual de plazos y entidades para las tasas activas no reguladas recolectadas de la publicación Tendencias Económicas y Financieras. Para el período 1977-1980 se cálculo el spread entre las tasas pasivas y activas anuales trimestralizadas estimadas por Ferreres (2005) en base a información del BCRA. Se aplicó dicho spread a una tasa nominal pasiva (de frecuencia trimestral) obtenida del BCRA. Con esta nueva serie se calcularon tasas de variación que fueron utilizadas para empalmar la serie del período 1980-2005. Para el período 1976-1977 se aplicó la tasa de variación de la tasa nominal activa trimestralizada de Ferreres (2005) a la serie empalmada hasta 1977. Una vez obtenida la serie de tasa de interés activa nominal, se le restó la tasa de inflación, luego se dividió por 1 más la tasa de inflación y así se obtuvo la variable Rr_a. Por su parte la variable Ri representa a la tasa de interés internacional calculada como el promedio trimestral de los valores mensuales de la 10-Year 51 Treasury Constant Maturity Rate obtenidos del Board of Governors of the Federal Reserve System. La variable Beneficios representa los beneficios de los capitalistas y se cálculo multiplicando la variable PBI_real por uno menos la variable Wq. 40 De esta manera, la variable se encuentra expresada en millones de pesos de 1993. Para obtener la serie de tiempo referida a la tasa ahorro de la economía (variable Ahorro) se multiplicó la variable PBI_real por uno menos la propensión al consumo. Esta última variable se cálculo como la suma del consumo público y privado expresados como porcentaje del PBI. Para su cálculo se implementó exactamente la misma metodología que en el caso de la variable Aper_pbi. Es decir, se debió empalmar 3 series medidas a precios de 1993, de 1986 y de 1970. La variable Credito_priv refiere al crédito al sector privado medido en millones de pesos de 1993, el cual se calculó multiplicando el crédito medido en pesos corrientes -obtenido en IFS- con el cociente entre el PBI real y el PBI a precios corrientes. Por último, las variables Agricape, Minas, Manufact, Construc, Energ, Comercio y Financie están medidas como porcentaje del PBI a costos de factores y representan, respectivamente, a los sectores agropecuarios y pesca, extracción de minas y canteras, industria manufacturera, construcción, electricidad, gas y agua, comercio minorista y mayorista (incluye restaurants y hoteles) y establecimientos financieros y de seguros. La metodología de cálculo utilizada para la obtención de las series de tiempo de estas variables es la misma que se implementó para la serie Aper_pbi. El sector faltante (que se utiliza como base de comparación) es "Otros servicios". 40 Ver nota anterior. 52 6.2 Tablas complementarias para la sección 4 Tabla 6: Resultados de los test ADF para raíces unitarias Variable Agricape Componente determinístico Ninguno Constante Cons. y Tend. Rezagos Prob>t Rezagos Prob>t Rezagos Prob>t 9 0.10 0 0.00* 0 0.00 Aper_pbi 0 0.99 0 0.92 0 0.78 Comercio 0 0.59 0 0.34 0 0.38 Construc 8 0.18 8 0.18 7 0.21 Deuda_pub_pbi 1 0.27 1 0.25 1 0.18 Dpbi_real 0 0.00 0 0.00 0 0.00 Energ 0 1.00 0 0.84 0 0.60 Financie 0 0.75 0 0.52 0 0.93 Inf 0 0.00 0 0.00 0 0.00 log( Ahorro ) 3 5 3 0 0 5 0 0 0.79 0.99 0.81 0.73 0.73 0.64 0.11 0.06 3 5 3 2 2 5 0 0 0.37 0.77 0.06 0.13 0.14 0.17 0.20 0.20 3 6 3 2 2 5 0 0 0.70 0.18 0.21 0.39 0.36 0.21 0.33 0.50 0 0.49 0 0.01* 0 0.05 0 0.37 0 0.50 0 0.81 0 0.29 3 0.00 3 0.00* Manufact 0 0.15 0 0.38 0 0.24 Minas 0 0.84 1 0.44 3 0.09 Ri 4 0.36 4 0.75 4 0.35 RR_a 0 0.00 0 0.00 0 0.00 Wq 9 0.10 1 0.00 1 0.00* log(Beneficios) log( Credito _ priv ) log( Inv _ priv ) log( Inv _ pub) log( K / L) log(TCR) log(TCR _ pcap _ wr ) log(UCI ) log(Volat ) log(Wr ) Nota: Los rezagos utilizados se derivan del criterio de Akaike. Cuando el resultado depende del componente determinístico el * indica la estructura apropiada 53 Tabla 7: Test de causalidad a la Granger Hipótesis nula Rezagos 3 Prom. Desvío 1 2 log( Inv _ priv) t no causa a Dpbi _ realt 0.01 0.00 0.06 0.02 0.03 log( Inv _ priv) t no causa a log(UCI ) t 0.91 0.36 0.17 0.48 0.38 log( Inv _ priv) t no causa a Aper _ pbit 0.00 0.00 0.00 0.00 0.00 log( Inv _ priv) t no causa a log( K / L) t 0.48 0.30 0.40 0.39 0.09 log( Inv _ priv) t no causa a Inf t 0.29 0.01 0.16 0.15 0.13 log( Inv _ priv) t no causa a log( Beneficios) t 0.42 0.59 0.77 0.59 0.17 log(Credito _ priv ) t 0.40 0.93 0.99 0.77 0.32 log( Inv _ priv) t no causa a log( Ahorro) t 0.55 0.26 0.14 0.32 0.21 log( Inv _ priv) t no causa a Nota: En todos los casos los resultados se derivan de VARs multivariados. 54 Tabla 8: Sensibilidad del modelo final de inversión privada al orden del término de corrección de errores Variable exp. Δ log( Inv _ priv ) t 1 Δ Dpbi_real t Δ log(UCI ) t Δ log( Inv _ pub) t Δ Aper_pbi t Δ log( K / L) Δ log(TCR) t t Δ Wq t Δ Inft Δ log(Volat) t Δ Deuda_pub_pbi t Δ log(TCR _ pcap _ wr ) t Δ Alic_domt Δ Alic_ext t Δ RR_a t Δ log(Wr ) t Δ log( Beneficios) t (1) -0.01 [0.109] 0.093 [0.240] -0.101 [0.103] -0.056*** [0.021] 1.591** [0.704] -0.441 [0.448] 0.473*** [0.166] 3.582*** [0.686] -0.004** [0.002] -0.022 [0.058] -0.077 [0.074] -0.448*** [0.165] -0.440*** [0.118] -0.464** [0.231] -0.017 [0.016] -0.267 [0.206] 1.990*** [0.394] (2) 0.011 [0.109] -0.015 [0.274] -0.088 [0.107] -0.050** [0.019] 1.444** [0.680] -0.46 [0.478] 0.569*** [0.183] 3.740*** [0.705] -0.004** [0.002] -0.016 [0.058] -0.144 [0.089] -0.496*** [0.169] -0.451*** [0.128] -0.379 [0.230] -0.021 [0.016] -0.192 [0.242] 1.967*** [0.399] 55 (3) -0.146* [0.076] 0.022 [0.220] -0.051 [0.096] -0.073*** [0.020] 2.056*** [0.651] 0.035 [0.376] 0.026 [0.174] 2.897*** [0.609] 0.000 [0.000] -0.054 [0.048] -0.065 [0.063] 0.023 [0.176] -0.404*** [0.124] -0.347* [0.205] -0.0003*** [0.000] 0.24 [0.193] 1.605*** [0.331] (4) -0.12 [0.078] 0.073 [0.227] -0.048 [0.095] -0.076*** [0.019] 2.099*** [0.639] 0.029 [0.395] 0.072 [0.172] 2.861*** [0.624] 0.000 [0.000] -0.045 [0.047] -0.044 [0.062] -0.006 [0.172] -0.444*** [0.146] -0.295 [0.214] -0.0002*** [0.000] 0.308 [0.197] 1.527*** [0.351] (5) -0.024 [0.107] 0.576 [0.457] -0.191* [0.109] -0.090*** [0.018] 4.129*** [1.388] 0.294 [0.313] -0.02 [0.149] 2.806*** [0.775] 0.000 [0.000] -0.079 [0.048] -0.034 [0.054] 0.112 [0.151] -0.488*** [0.137] -0.391** [0.184] -0.0003*** [0.000] 0.469*** [0.173] 1.324*** [0.499] Tabla 8: Sensibilidad del modelo final de inversión privada al orden del término de corrección de errores (cont.) Variable exp. Δ log( Credito _ priv ) t Δ log( Ahorro) t Δ Ri t Δ Agricape t Δ Comercio t Δ Construc t Δ Energ t Δ Financie t Δ Manufact t Δ Minas t (1) 0.011 [0.048] -0.225 [0.168] 0.004 [0.011] -3.626** [1.752] -4.759** [2.228] 13.359*** [3.231] -4.122 [8.807] -1.116 [2.334] 2.202 [1.914] 10.849 [8.234] ECt 2 Constante Observaciones R cuadrado -0.003 [0.005] 86 0.881 (2) 0.025 [0.046] -0.21 [0.157] 0.002 [0.011] -4.076** [1.685] -4.696** [2.158] 11.865*** [3.438] -5.605 [8.513] -1.906 [2.613] 1.893 [1.884] 11.345 [8.512] -0.653 [0.449] -0.001 [0.005] 85 0.887 (3) 0.037 [0.042] -0.226 [0.142] 0.001 [0.007] -0.11 [1.609] -2.058 [1.860] 18.209*** [2.385] 0.435 [8.100] -0.875 [2.107] 4.356*** [1.459] 6.559 [8.053] 0 [0.004] 119 0.878 (4) 0.049 [0.046] -0.236* [0.139] 0 [0.007] 0.014 [1.590] -1.931 [1.889] 17.345*** [2.510] -2.105 [8.282] -1.028 [2.246] 4.398*** [1.436] 7.192 [8.177] -0.092 [0.511] 0 [0.004] 118 0.883 (5) 0.049 [0.035] -0.499*** [0.131] 0.002 [0.006] 0.213 [1.496] -5.035** [2.446] 20.595*** [2.366] -1.025 [7.116] -1.555 [1.797] 6.764*** [1.325] 8.527 [6.982] -0.016** [0.008] -0.001 [0.005] 118 Nota: Errores estándar entre corchetes. * Significativo al 10%; ** al 5% y *** al 1%. En todos los casos la variable dependiente es log ( Inv _ priv ) t 56
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