PRIMERA ENCUESTA LOCAL A ESTUDIANTES DE ENSEÑANZA MEDIA DE LA CIUDAD DE MARCOS JUÁREZ, SOBRE CONSUMOS DE SUSTANCIAS PSICOACTIVAS Y FACTORES DE RIESGO Y PROTECCIÓN ASOCIADOS | 2016. PRIMERA ENCUESTA LOCAL A ESTUDIANTES DE ENSEÑANZA MEDIA DE LA CIUDAD DE MARCOS JUÁREZ, SOBRE CONSUMOS DE SUSTANCIAS PSICOACTIVAS Y FACTORES DE RIESGO Y PROTECCIÓN ASOCIADOS | 2016. INTENDENCIA | ING. PEDRO DELLAROSSA. SECRETARIO DE SALUD PÚBLICA | DR. LEONARDO C. AYUSO. ELABORACIÓN Y REDACCIÓN | LIC. MARÍA PÍA DEZZOTTI. T.S ESTEFANÍA S. YORDAN. MARCOS JUÁREZ, 2016. PRIMERA ENCUESTA LOCAL A ESTUDIANTES DE ENSEÑANZA MEDIA DE LA CIUDAD DE MARCOS JUÁREZ, SOBRE CONSUMOS DE SUSTANCIAS PSICOACTIVAS Y FACTORES DE RIESGO Y PROTECCIÓN ASOCIADOS | 2016. INTRODUCCIÓN El Programa de Prevención y Asistencia de las Adicciones – dependiente de la Secretaria de Salud Pública – de la Municipalidad de Marcos Juárez, a través del área de Prevención, Capacitación e Investigación ha realizado la “Primera Encuesta Local a Estudiantes de Enseñanza Media, sobre consumo de sustancias psicoactivas y factores de riesgo y protección asociados”. Dicha investigación busca obtener datos comparables con los resultados alcanzados por el Observatorio Argentino de Drogas del SEDRONAR, a través de la Quinta Encuesta Nacional a Estudiantes de Enseñanza Media, sobre consumo de sustancias psicoactivas y factores de riesgo y protección asociados. Este estudio forma parte del Sistema Subregional de Información e Investigación Sobre Drogas en Argentina, Colombia, Bolivia, Chile, Ecuador, Perú y Uruguay. Los países participantes, en reuniones técnicas y de coordinación realizadas, consensuaron los aspectos metodológicos del estudio, definiendo un cuestionario base estandarizado, criterios de selección de muestra y modalidades de abordaje en campo. De esta manera se pudo garantizar la comparabilidad de los datos producidos a nivel regional. Realizar la Primera Encuesta en Estudiantes de Nivel medio permitió obtener datos locales acerca de la situación actual del consumo de sustancias psicoactivas en jóvenes escolarizados que tengan entre 13 y 17 años de edad; tarea fundamental para enriquecer las intervenciones preventivas, y lograr a largo plazo, una evaluación del impacto que tienen los programas y proyectos vigentes. El estudio informa sobre la magnitud de los consumos de alcohol, tabaco, solventes y/o inhalantes, marihuana, cocaína, éxtasis, heroína y otras drogas ilegales; a partir de un cuestionario auto gestionado. También indagó sobre factores de riesgo y protección ligados al uso de drogas, sobre los perfiles asociados al abuso de bebidas alcohólicas y sobre la percepción de los estudiantes acerca de la peligrosidad de estas sustancias. La encuesta se realizó sobre una muestra representativa de alumnos que corresponden a la población escolar del nivel medio que este cursando 2°, 4° y 6° año en la localidad de Marcos Juárez – Córdoba. En total respondieron la encuesta 258 estudiantes. ANTECEDENTES Durante los años 2011 y 2012, y con la intención de contar con datos a nivel local acerca del consumo de sustancias en jóvenes escolarizados del nivel medio, el Programa de Prevención y Asistencia de las Adicciones - ex Secretaría de Adicciones – diseñó un cuestionario que permitió obtener información sobre la magnitud del consumo de alcohol, tabaco, marihuana, cocaína y otras sustancias en la localidad. Además, pretendió conocer aquellos aspectos relacionados con los factores de riesgo y de protección que influyen directa o indirectamente en los hábitos de consumo, así como también sobre los lugares y personas que eligen los jóvenes para dialogar o informarse sobre dichas temáticas, las motivaciones para el consumo de alcohol y otras drogas, las percepciones acerca de la accesibilidad a las mismas, y de los riesgos de dichos consumos. El instrumento utilizado en esta oportunidad, buscó recabar información acerca de conductas personales, percepciones y/o creencias que tienen los jóvenes sobre esta problemática, conformándose de la siguiente manera: En una primera parte, se relevó datos personales que permitieron categorizar o subdividir la población con la que estábamos trabajando, de acuerdo al sexo, edad, escuela y curso al que pertenecían los encuestados. Un segundo grupo de preguntas, refirió al tipo y manejo de información que los jóvenes tienen acerca de sustancias, sus riesgos y efectos; así como también a aquellas personas a las que normalmente recurren para buscar esta información. Otro grupo de preguntas apuntó a conocer la percepción que poseen estos jóvenes, sobre el alta o escasa accesibilidad a las sustancias, especialmente en los espacios de desarrollo cotidiano, así como también, los riesgos que conlleva el consumo. En un nuevo grupo de interrogantes, se obtuvieron datos en relación a los niveles de consumo de sustancias (legales e ilegales) dentro de la población de jóvenes estudiantes sobre la cual se realizó el estudio. Si bien se pudo recabar información al respecto, se consideró de fundamental importancia utilizar un instrumento que proporcione datos comparables con aquellos obtenidos a nivel provincial y nacional, por el Observatorio Argentino de Drogas, en relación al consumo de sustancias psicoactivas en jóvenes escolarizados entre los 13 y 17 años de edad. OBJETIVOS La Primera Encuesta local sobre consumo de sustancias psicoactivas en estudiantes del nivel medio, tiene como propósito estimar una magnitud de consumo de sustancias en la localidad de Marcos Juárez, de la población escolar del nivel medio que se encuentra cursando 2°, 4° y 6° año, con resultados que puedan ser comparables tanto con los estudios nacionales realizados por el Observatorio Argentino de Drogas del SEDRONAR, como así también futuras investigaciones que se desarrollen a nivel local. Objetivo general Obtener información confiable y actualizada sobre la magnitud, características y factores asociados al consumo de sustancias psicoactivas en estudiantes del nivel medio de la ciudad de Marcos Juárez. Objetivos específicos Determinar la prevalencia de vida, año y mes de consumo de drogas legales e ilegales. Estimar la incidencia del consumo de drogas legales e ilegales. Determinar la edad de inicio al consumo de drogas legales e ilegales. Conocer el nivel de exposición, acceso y riesgo de consumo de drogas legales e ilegales. Conocer los factores de riesgo asociados al consumo de drogas legales e ilegales. DISEÑO Y TRABAJO DE CAMPO El diseño y trabajo de campo estuvo a cargo del Área de Prevención, Capacitación e Investigación del Programa de Prevención y Asistencia de las Adicciones de la Municipalidad de Marcos Juárez. El levantamiento de las encuestas y digitación de la base de datos, fue desarrollado por las profesionales de dicha área. El diseño de la muestra fue elaborado por las mismas profesionales, asesoradas por la estadista Susana Jercovick, garantizando que los resultados obtenidos sean comparables con los estudios nacionales. El trabajo de campo se realizó durante los meses de septiembre, octubre y noviembre de 2014, en este periodo se realizaron 258 encuestas en las siete escuelas de nivel medio tanto públicas; como públicas de gestión privada de la localidad. Las escuelas fueron notificadas del presente estudio, a través de una nota que describió los objetivos de la investigación y validez del instrumento utilizado. Dentro de las instituciones educativas, se realizó la encuesta con grupos conformados por no más de 15 alumnos seleccionados al azar, pertenecientes a los diferentes cursos; en donde se enunciaron los objetivos del estudio, la metodología de las respuestas y la forma de entregar los cuestionarios realizados, para poder así garantizar que se mantuviera la confidencialidad y anonimato de los alumnos participantes. Su aplicación fue auto administrada voluntariamente y de forma anónima. La etapa posterior al relevamiento incluyó la carga, tabulación y validación de datos. Este proceso fue desarrollado durante el año 2015, permitiendo en 2016, proceder al análisis correspondiente sobre los resultados obtenidos. MARCO TEÓRICO El consumo de drogas, que hoy se presenta como problemático desde muchos puntos de vista a nivel global y local, no siempre lo fue. Las drogas no tienen un significado propio, sino que se le atribuye en relación a la cultura en los que sus consumos se instauran. La O.M.S. -Organización Mundial de la Salud- entiende como droga a “toda sustancia que introducida en el organismo, por cualquier vía de administración, produce alguna alteración, de algún modo, del natural funcionamiento del sistema nervioso central del individuo, y es además, susceptible de crear dependencia psicológica, física o ambas.” No todas las drogas tienen la misma connotación, las drogas “legales” (alcohol, tabaco y psicofármacos) por estar permitidas por la ley, tienen una mayor tolerancia social, está naturalizado su uso y por lo tanto, hay una baja percepción del riesgo que pueden generar. Es posible así, que no asociemos sus consumos con un eventual problema de salud sobreviniente. Sin embargo, hoy estas sustancias generan más problemas sanitarios que las drogas “ilegales” (marihuana, cocaína, éxtasis, etc.). De acuerdo al Indicador de Mortalidad Relacionada al Consumo de drogas (IMRCD), utilizado en el estudio de “Mortalidad relacionada al consumo de drogas en Argentina” realizada por SEDRONAR, el cual estima el número anual de defunciones que pueden relacionarse directa o indirectamente con el consumo de sustancias psicoactivas. Se destaca el impacto del consumo del tabaco en las muertes por enfermedades cardiovasculares (95%), infecciosas (92%) y cánceres (85%). Mientras que el consumo de alcohol se asocia más frecuentemente con las muertes por enfermedades neuropsiquiátricas (95%), enfermedades hepáticas (71%) y lesiones, ambas en proporciones significativamente mayores que otras sustancias psicoactivas. Las lesiones refieren a homicidios, de los cuales el 2% corresponden a sustancias de uso indebido1, 19% 1 Sustancias de uso indebido incluyen: drogas antiepilépticas, sedantes, hipnóticas, antipakinsonianas y psicotrópicas, no clasificadas en otra parte, otras drogas que actúan sobre el sistema nervioso autónoma, otras drogas, medicamentos y sustancias biológicas, y a disolventes orgánicos e hidrocarburos halogenados y sus vapores. estupefacientes2 y 79% alcohol; y accidentes de tránsito, 0.5% por sustancias de uso indebido, 7.9% estupefacientes y 91.6% corresponden a alcohol. La diferenciación entre lo permitido y lo prohibido está relacionada al momento social, a factores económicos y culturales. Lamentablemente, esto no nos da datos acerca de lo peligrosa que puede ser una droga utilizada indebidamente. El estatus de legalidad no las exime de la nocividad que conlleva su abuso. La tolerancia social, es una variable de gran importancia para explicar el consumo o no que se realiza de sustancias psicoactivas, definida por el investigador Hugo Miguez (1998) como “patrones de comportamiento que implican indulgencia hacia hábitos de abuso de sustancias, en el entendido que constituyen una forma general de ser y no justifican, por lo tanto, una actitud de censura severa o significativa”. Las representaciones que se puedan tener sobre las diversas drogas, dependen de las creencias y construcciones sociales que se realizan en torno a las sustancias, una actitud favorable de los compañeros frente al consumo, relacionarse con otros jóvenes que consumen drogas, dificultades para relacionarse, el rechazo por parte de los iguales, la disponibilidad percibida de drogas, el abordaje inadecuado del tema por parte de los medios de comunicación, entre otros; constituyen factores de riesgo que vuelven vulnerables a adolescentes y jóvenes frente al consumo de sustancias. Sin embargo, hay factores protectores que pueden funcionar independientemente de los anteriores, como la asociación con iguales que están implicados en actividades comunitarias y recreativas, contar con grupos de amigos que respeten y acepten la diversidad de opiniones, confianza en sí mismo y resistencia a las presiones de grupo, entre otros. Es importante distinguir aquí tres niveles de relación posible que una persona puede establecer con las drogas, teniendo en cuenta que no todo consumo representa una adicción. 2 Uso: en este caso, el consumo puede ser ocasional o experimental. En general, no se Estupefacientes incluye: narcóticos y psicodislépticos. evidencian consecuencias nocivas para el individuo ni para su entorno. Se trata de un uso no problemático de sustancias, es decir que por la frecuencia, cantidad o situación biológica, psicológica y social que presenta la persona, este consumo no genera problemas. Sin embargo, un único episodio de consumo excesivo, puede resultar nocivo. Abuso: éste se da cuando el uso de sustancias se hace habitual, y la persona comienza a experimentar problemas relacionados con el consumo de drogas en sí mismo y en su entorno. Se incrementa la frecuencia y las cantidades consumidas de sustancia, se dificulta el cumplimiento de las obligaciones, y se generan conflictos interpersonales y sociales. Dependencia: la relación que se establece sobre el consumo de drogas pasa a ser más importante que otras actividades de la vida cotidiana. Así, conseguir la sustancia, consumirla, experimentar sus efectos y reponerse de ellos, se convierte en una pauta de comportamiento permanente. Diversos estudios sobre consumo de drogas señalan que es la adolescencia y la juventud, el momento de la vida donde la experimentación con alcohol y otras drogas tienen mayor presencia. El desarrollo de las culturas juveniles es posible a partir de dos sucesos que afectaron específicamente la vida cotidiana de los sectores jóvenes: la expansión del tiempo libre y la masificación del consumo. Diversos autores observan que en las sociedades contemporáneas el pasaje hacia la adultez se prolonga cada vez más, cambio que remite al mayor margen de tiempo libre del que disponen los jóvenes, gracias a la extensión de la educación media. A su vez, el pasaje de una sociedad tradicional a una moderna implicó el debilitamiento de los sistemas tradicionales de inserción social tales como el trabajo, el desarrollo de una familia propia, la participación política y ciudadana, entre otros, que se encuentran debilitados y de sincronizados entre sí, por lo que el pasaje de la juventud a la adultez ya no es algo dado (CEPAL, 2004). Un aspecto fundamental de la cimentación de la cultura juvenil serán los estilos de vida juveniles, conformados éstos por un conjunto de consumos y usos de diversos bienes materiales y culturales dentro de la vida cotidiana. Por lo tanto, para pensar la construcción de un estilo de vida juvenil debemos profundizar en el análisis del tipo de consumos que lo componen, y los consumos culturales son un aspecto específico de éstos. A través del consumo, los jóvenes realizan un proceso de integración a la vida social a partir de cumplir con las expectativas de ésta, siguiendo a Bauman (2000) la actual es una sociedad de consumidores y mucho más en lo referido al segmento juvenil que en los últimos años se ha convertido en uno de los principales objetivos del mercado; pero a su vez a través del consumo los jóvenes operan un proceso de diferenciación donde los adolescentes definen, a partir de la elección de un estilo, una pertenencia de clase particular. Siguiendo a Bourdieu “los estilos de vida serán el conjunto de prácticas que los individuos adopten para construir su identidad y lograr su lugar en la sociedad” (Bourdieu, 1998) El hecho de que se consuman drogas, se experimente o no con ellas, va a depender de diversos factores relacionados con: creencias, mitos y/o estereotipos que circulan de forma cotidiana, entorno sociocultural, lo que piensan al respecto su grupo de iguales, etc. También, “ciertos sesgos perceptivos le llevan a creer que el consumo de drogas es más frecuente de lo que es realmente. A su vez, se une a ello una incisiva publicidad de las drogas legales dirigidas específicamente a estos jóvenes, casi como un marketing de las drogas ilegales vía el boca a boca” (Becoña Iglesias, 2002). Un fenómeno actual explicativo del consumo de sustancias en adolescentes y jóvenes, tanto a niveles de uso, abuso o dependencia, es el “consumo recreativo” de drogas. Se ha producido una importante transformación de la diversión y de los hábitos de consumo. El alcohol y la noche constituyen dos elementos organizadores de la diversión juvenil, y un tiempo de ocio central e indelegable. Lo cierto es que se ha producido un cambio en los patrones de consumo de sustancias en los jóvenes, asociados a estas nuevas formas de divertirse. De acuerdo al estudio realizado por la Lic. Patricia Zotto Libonatti “Características del consumo de alcohol en atracón (bringe drinking) en los jóvenes de Córdoba, Argentina durante la realización de la previa” permitió conocer características que presentan la denominada “previa” en la ciudad de Córdoba. Dichas características, creemos son similares a las dadas en nuestra región. Se considera a la noche como uno de los momentos, en que los jóvenes disfrutan y desarrollan su tiempo libre, y un espacio en donde la diversión se convierte en el principal objetivo. Muchos de estos jóvenes, disfrutan de la noche a través de la denominada “previa”, la cual es definida por ellos mismos como una “juntada con los amigos/as esperando, preparándose, pasando un rato divertido para luego ir al boliche”. Al preguntarles a los jóvenes por qué realizan la previa, las respuestas más frecuentes es la de pasar un rato divertido con los amigos/as. Los motivos para hacer la previa parecen estar asociados a la diversión, estar con amigos/as y en gran medida también, esperar el horario de apertura de los boliches, no quedarse solo/a, y beber alcohol. Por otra parte, ante la pregunta ¿qué efectos se esperan conseguir con el consumo de alcohol? La mayoría de los jóvenes refieren a poder estar más sociables, desinhibirse, sentirse bien, arriesgarse y divertirse. Durante las previas, algunos jóvenes con la intención de pasarla bien y “poder socializar mejor” beben grandes cantidades de alcohol, alcanzando en muchos casos el estado de borrachera. Esta nueva manera de consumir alcohol en la actualidad, caracterizado por el consumo en poco tiempo y grandes cantidades, es llamada “bringe drinking o consumo de atracón”. ¿Cuál sería el problema de la previa? Que los jóvenes se reúnan para pasar un rato divertido con sus amigos/as no representa un problema, por el contrario, puede propiciar charlas y consolidar relaciones sociales. Podríamos concluir así, que el problema radica en el consumo abusivo de alcohol, realizado por algunos jóvenes en estos espacios. De allí la asociación, entre vida recreativa y consumo de drogas, lo cual implica definir nuevas formas de utilizar saludablemente el tiempo libre, contemplando la posibilidad de reconocer nuevas opciones de esparcimiento y diversión. Un buen punto de partida tiene que ver con la implicancia de los ámbitos escolares, que constituyen un espacio por el que transitan la mayoría de los jóvenes; y actuar allí, posibilita que las acciones preventivas lleguen a la mayoría de la población joven presente en estas instituciones; involucrando además, otros actores de la comunidad: directivos, docentes, padres y madres y otras organizaciones vinculadas a las escuelas. Por otra parte, si consideramos, la prevalencia de abuso y dependencia al alcohol, según el nivel educativo alcanzado, en una población entre los 16 y 64 años, veremos que, la mayor prevalencia del abuso de alcohol en los últimos 30 días, se da en la población con primario incompleto con un 12,9% y secundario incompleto con 10,3%, representando los mayores porcentajes en relación a estudios primarios y secundarios completos. Respecto al síndrome de dependencia al alcohol en personas que bebieron en el último año, la tendencia anterior se repite, presentando un 9,6% en población con primario incompleto y 6,7% con secundario incompleto, superando a estos dos con el 9,9% quienes se encuentran sin instrucción (Hugo Miguez, 1999). Estos datos reflejan la relevancia que se le otorga a la escuela como factor protector, y por tanto, la importancia de considerarla como un escenario eficaz para la prevención del consumo de sustancias. METODOLOGÍA Definición y operacionalización de variables Adolescencia: la O.M.S. la define como “una etapa evolutiva específica de crecimiento y desarrollo del ser humano, de la que es necesario destacar los aspectos conflictivos más comunes, y las variaciones en forma de periodos de crisis biopsicosociales que son preparatorias para el progreso hacia la juventud y la etapa adulta”. Sustancias psicoactivas: todas aquellas sustancias que una vez introducidas por diversas vías en el organismo, actúan directa o indirectamente sobre el sistema nervioso central, produciendo cambios en la actividad mental, como modificaciones en la percepción, el comportamiento, el estado de ánimo, entre otros. Consumo de sustancias: se considera al “consumo” desde el aspecto cualitativo como un acto humano complejo, en el que intervienen dimensiones singulares (personales), particulares (grupales) y generales (estructuras sociales). Cuantitativamente se define como el uso de cualquier sustancia psicoactiva. Se consideran las siguientes: Alcohol, Tabaco, Solventes e Inhalantes, Marihuana, Pasta base – Paco, Cocaína, Heroína, Opio, Morfina, Alucinógenos, Hachís, Crack, Éxtasis, Ketamina, Popper, otras drogas. Práctica de consumo: Bourdieu considera que habitus y práctica son conceptos estrechamente relacionados; las prácticas sociales de un agente dependen de las posibilidades específicas que poseen, posibilidades que están en relación con el volumen y la estructura de su capital y con los habitus incorporados. Entendiendo al habitus como a aquellas disposiciones a actuar, percibir, valorar, sentir y pensar de una cierta manera, más que de otra; disposiciones que han sido interiorizadas por el individuo en el curso de su historia. Producto de la historia es lo social incorporado (estructura - estructurado), es decir “una interiorización de la interioridad”; en tanto estructura – estructurante, el habitus se constituye en un esquema generador y organizador, tanto de las prácticas sociales como de las percepciones y apreciaciones de las propias prácticas y de las prácticas de los demás agentes. En el presente estudio, se indagará respecto a los espacios, escenarios, ocasiones, contextos y circunstancias del consumo, prevalencia y frecuencia de uso de sustancias. Prevalencia de consumo de vida por sustancia. Haber fumado cigarrillos o consumido (cada sustancia) alguna vez en la vida. SI/NO Prevalencia de año por sustancia. Haber fumado cigarrillos o consumido (cada sustancia) en los últimos 12 meses. SI/NO Prevalencia de mes por sustancia. Haber fumado cigarrillo o consumido (cada sustancia) en los últimos 30 días.SI/NO Edad de inicio en el consumo (por cada sustancia). Edad al momento de fumar cigarrillos o consumir (cada sustancia) por primera vez. Frecuencia de uso (por sustancias más utilizadas). Cantidad de días que fumó cigarrillos o consumió (cada sustancia) en los últimos 30 días o menos. Cantidad de días que se emborrachó o tomó más de la cuenta en los últimos 30 días o menos. Cantidad aproximada de cigarrillos fumados por día en los últimos 30 días o menos. Frecuencia de consumo de bebidas alcohólicas en los últimos 30 días, por tipo de bebidas: cerveza, vino, bebidas fuertes o tragos combinados (wisky, vodka, ron u otros): Diariamente / Fines de semana / Algunos días de semana / No consumió. Cantidad de bebida alcohólica consumida en cada ocasión, en los últimos 30 días, por tipo de bebida: cerveza, vino, bebidas fuertes o tragos combinados (wiski, vodka, ron u otros). Cantidad de veces que ha consumido 5 tragos o más, de bebida alcohólica en una misma salida, en las últimas 2 semanas: Ninguna vez / Sólo una vez / Entre dos y tres veces / Entre cuatro y cinco veces / Más de cinco veces. Cantidad de días que usó tranquilizantes y/o estimulantes en los últimos 30 días o menos. Frecuencia de uso de marihuana, cocaína, pasta base, éxtasis o cualquier otra sustancia ilegal. Una sola vez/algunas veces durante los últimos 12 meses/ algunas veces mensualmente/ algunas veces semanalmente/ diariamente. Lugar de consumo. Lugar de consumo de alcohol la última vez: en la casa/ en el boliche/ en la calle (plaza, kiosco, esquina)/ en la casa de alguno de los amigos/ en una fiesta/ en la escuela/ en la cancha o recitales/ en el club o lugar donde hace deportes/ otro lugar, ¿cuál? Lugar de consumo de marihuana, cocaína, pasta base, éxtasis u otras (si consumió en el último año): en la casa/ en el boliche/ en la calle (plaza, kiosco, esquina)/ en la casa de alguno de los amigos/ en una fiesta/ en la escuela/ en la cancha o recitales/ en el club o lugar donde hace deportes/ otro lugar, ¿cuál? Consumos problemáticos en los últimos 12 meses. Haber viajado en auto conducido por una persona (o por uno mismo) que haya consumido alcohol. SI/NO Amigos o familiares te hayan sugerido o mencionado que disminuyas el consumo de alcohol. SI/NO Haber consumido alcohol para: relajarte, sentirte mejor contigo mismo o para integrarte a un grupo. SI/NO Haberte metido en problemas al consumir alcohol. SI/NO Haber olvidado al consumir alcohol. SI/NO Haber consumido alcohol estando solo o sola. SI/NO Haber sentido malestar físico o ansiedad, tras dejar de tomar alcohol durante unos días, que te llevaron a tomar nuevamente. SI/NO Haber fumado marihuana antes del mediodía. Nunca/ Rara vez/ De vez en cuando/ Bastante a menudo/ Muy a menudo Haber fumado marihuana estando solo/a. Nunca/ Rara vez/ De vez en cuando/ Bastante a menudo/ Muy a menudo Haber tenido problemas de memoria al fumar marihuana. Nunca/ Rara vez/ De vez en cuando/ Bastante a menudo/ Muy a menudo Te hayan dicho amigos o alguien de tu familia que deberías reducir el consumo de marihuana. Nunca/ Rara vez/ De vez en cuando/ Bastante a menudo/ Muy a menudo Haber intentado reducir el consumo de marihuana sin conseguirlo. Nunca/ Rara vez/ De vez en cuando/ Bastante a menudo/ Muy a menudo Haber tenido problemas debido a tu consumo de marihuana. Nunca/ Rara vez/ De vez en cuando/ Bastante a menudo/ Muy a menudo Creencias acerca del consumo y factores intervinientes: Bourdieu habla de creencia refiriendo al habitus como aquello que permite recordar la historicidad de la gente, plantear que lo individual, lo subjetivo y lo personal es social, es producto de la misma historia colectiva, que está presente en las personas, sus creencias y sus prácticas. El habitus constituye un sistema de disposiciones durables. El encontrarse enfrentado a situaciones nuevas, en el contexto de condiciones objetivas diferentes a aquellas que constituyeron instancias de formación de los habitus, presentan instancias que posibilitan la reformulación de sus disposiciones. Aunque, la mayor parte de los agentes sociales se encuentran expuestos a encontrar circunstancias semejantes a aquellas en las cuales se formaron sus disposiciones y por ello, a vivir experiencias que tienden a reforzar esas disposiciones. En la presente investigación, se pretende trabajar sobre los sentidos y significados atribuidos al consumo en general, al propio y al del “otro” (pares, adultos, etc.). Expectativas y motivaciones acerca del consumo. Causas percibidas acerca del consumo de alcohol / tabaco / sustancias ilícitas en otras personas: No está informada sobre los daños que produce/ Tiene problemas personales/ Le gusta, le divierte, le da placer/ Esta informada pero no le importa nada/ Porque la mayoría de su grupo o amigos consume/ Otra, ¿Cuál?/ No sabe. Haber sentido curiosidad alguna vez por probar alguna sustancia ilícita: SI/ NO/ Ya he probado. Disposición a probar alguna droga ilícita, si tuviese oportunidad: SI/ NO/ Ya he probado. Percepción de la aceptación/rechazo de familiares y amigos respecto del consumo. Percepción de aptitud del grupo de amigos respecto del consumo de marihuana: Te dirían algo para que no consumas/ Algunos dirían que no lo hiciera otros no dirían nada/ No te dirían nada/ Alentarían para que lo hiciera/ No sabes bien lo que harían o te dirían. Percepción de aptitud del grupo de amigos respecto del consumo de otra sustancia (cocaína, paco, éxtasis, ácidos o cosas parecidas): Te dirían algo para que no consumas/ Algunos dirían que no lo hiciera otros no dirían nada/ No te dirían nada/ Alentarían para que lo hiciera/ No sabes bien lo que harían o te dirían. Percepción de la reacción de los padres si supieran del consumo de alguna sustancia, como marihuana, cocaína, éxtasis y otras: Lo castigarían/ Harían como que no lo saben/ Hablarían con vos para que no lo hicieras más/ Buscarían ayuda de un profesional (medico, psicólogo, etc.) Percepción del riesgo del consumo. Percepción del riesgo que corre una persona que: Fuma cigarrillos algunas veces / frecuentemente: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sabe qué riesgo corre. Toma bebidas alcohólicas algunas veces / frecuentemente: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sabe qué riesgo corre. Se emborracha con bebidas alcohólicas: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sabe qué riesgo corre. Prueba tranquilizantes (tales como rivotril, alplax, lexotanil, valium) sin pm una o dos veces: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sabe qué riesgo corre. Toma tranquilizantes (tales como rivotril, alplax, lexotanil, valium) sin pm algunas veces: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sabe qué riesgo corre. Toma tranquilizantes (tales como rivotril, alplax, lexotanil, valium) sin pm frecuentemente: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sabe qué riesgo corre. Prueba estimulantes (tales como prozac, ritalina, soloft) sin pm una o dos veces: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sabe qué riesgo corre. Toma estimulantes (tales como prozac, ritalina, soloft) sin pm algunas veces: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sabe qué riesgo corre. Toma estimulantes (tales como prozac, ritalina, soloft) sin pm frecuentemente: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sabe qué riesgo corre. Prueba solventes o inhalantes una o dos veces: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sé qué riesgo corre. Aspira solventes o inhalantes algunas veces / frecuentemente: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sé qué riesgo corre. Prueba marihuana una o dos veces: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sé qué riesgo corre. Fuma marihuana algunas veces / frecuentemente: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sé qué riesgo corre. Prueba cocaína una o dos veces: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sé qué riesgo corre. Consume cocaína algunas veces / frecuentemente: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sé qué riesgo corre. Prueba pasta base o paco una o dos veces: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sé qué riesgo corre. Consume pasta base o paco algunas veces / frecuentemente: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sé qué riesgo corre. Prueba éxtasis una o dos veces: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sé qué riesgo corre. Consume éxtasis algunas veces / frecuentemente: Ningún riesgo/ Riesgo leve/ Riesgo moderado/ Gran riesgo/ No sé qué riesgo corre. Otras variables a evaluar. Características demográficas del alumno (edad, sexo y disponibilidad de dinero). Edad: 14 años o menos/ 15 – 16 años/ 17 años o más. Sexo: Masculino/ Femenino. Disponibilidad mensual de dinero para gastos propios: Nada/ Menos de $40/ Entre $41 y $90/ Entre $91 y $120/ Más de $120. Niveles de información y cursos de prevención. Grado de información acerca de las consecuencias del consumo de drogas (tabaco, alcohol, marihuana, pasta base, cocaína, etc.): Nada informado/ Poco informado/ Bien informado/ No sabe. Cursos sobre prevención del consumo de drogas, recibidos en el colegio: No recibió/ Recibió una vez/ Recibió varias veces/ No sabe. Vínculo con el grupo de amigos y patrones de consumo. Cantidad de amigos que toman alcohol regularmente, todos los fines de semana o más: Ninguno/ Menos de la mitad/ La mitad de sus amigos/ Todos o casi todos/ No sabe. Cantidad de amigos que fuman marihuana regularmente: Ninguno/ Menos de la mitad/ La mitad de sus amigos/ Todos o casi todos/ No sabe. Conocimiento acerca del consumo actual de alguna droga ilícita por parte de sus hermanos o alguna otra persona que viva en su casa: SI/ NO/ No sabe. Haber consumido alcohol cuando se consumió bebidas energizantes (Red Bull, Speed, etc.): SI/NO Oferta y accesibilidad de drogas legales e ilegales. Ultimo ofrecimiento recibido, sea para comprar o probar de Marihuana, Cocaína, Pasta base o Paco, Inhalantes, Éxtasis, Anfetaminas o Metanfetaminas: Durante los últimos 30 días/ Mas de 1 mes, menos de 1 año/ Hace más de 1 año/ Nunca me han ofrecido. Lugar del ultimo ofrecimiento de marihuana: Nunca le ofrecieron/ En su casa/ En su colegio/ En los alrededores del colegio/ En una fiesta o recital/ En los alrededores de su casa/ Por internet, mail o chat/ Otro lugar. Lugar del ultimo ofrecimiento de alguna droga (a excepción de la marihuana): Nunca le ofrecieron/ En su casa/ En su colegio/ En los alrededores del colegio/ En una fiesta o recital/ En los alrededores de su casa/ Por internet, mail o chat/ Otro lugar. Grado de dificultad/ facilidad para conseguir Marihuana, Cocaína, Pasta base o Paco, Inhalantes, Éxtasis, Anfetaminas o Metanfetaminas: Le sería fácil/ Le sería difícil/ No podría conseguir/ No sabe si le sería fácil o difícil. DISEÑO DE LA MUESTRA La población accesible, corresponde a alumnos que asisten a las escuelas del nivel medio de la ciudad de Marcos Juárez, Córdoba. Es importante destacar que la ciudad cuenta, con siete instituciones educativas secundarias, siendo cinco de ellas de carácter público: IPET N°51 “Nicolás Avellaneda”, IPEM N°93 “República del Perú”, IPEM N°277 “Esteban Echeverría”, IPEA N°209 “Domingo F. Sarmiento”, Esc. N. S. Gral. Manuel Belgrano; mientras que el resto son públicas de gestión privada: Fasta “Sagrado Corazón” e Instituto María Inmaculada. Considerando, que cada una de estas instituciones presenta una realidad muy particular, se conforma una muestra aleatoria simple, respetando una cierta cantidad de elementos por cada escuela de manera tal que los mismos sean proporcionales a la cantidad de alumnos que cada establecimiento tiene. Es decir, sobre un total de 2564 alumnos, se toma como muestra el 10% de la población objetivo, que corresponde a 258 elementos. RESULTADOS GENERALES: TASAS DE CONSUMO A NIVEL LOCAL A continuación se presentan los datos locales sobre el consumo de sustancias psicoactivas legales e ilegales de los estudiantes del nivel medio de 2°, 4° y 6° año de cursado. Los datos sobre consumo se presentan por sexo y tramos de edad; y al análisis del consumo anual, se incluyen algunos datos referidos a factores de riesgo y protección asociados al consumo. PREVALENCIA DE VIDA La prevalencia de vida3 corresponde al “consumo realizado por los estudiantes en algún momento de la vida, es decir, es el porcentaje de estudiantes que respondieron positivamente a la pregunta: ¿Has consumido/fumado/probado… alguna vez en tu vida? sobre el total de estudiantes”. GRÁFICO 1: Prevalencia de vida de consumo de sustancias psicoactivas. Año 2014. 3 Informe Final de Resultados la Quinta Encuesta Nacional a Estudiantes de Enseñanza Media 2011. CUADRO 1: Prevalencia de vida por tipo de sustancias psicoactivas según sexo e intervalos de confianza del 95%. Año 2014. % % SUSTANCIA MASCULINO MASC FEMENINO FEM TOTAL TABACO 56 22,0 55 21,6 113 ALCOHOL 113 44,1 96 37,5 209 INHALANTES 2 0,8 0 0,0 2 MARIHUANA 22 8,9 15 6,0 37 PASTA BASE 0 0,0 2 0,8 2 POPPER 2 0,8 1 0,4 3 COCAINA 5 2,0 4 1,6 9 HEROÍNA 0 0,0 1 0,4 1 EXTASIS 0,0 2 0,8 2 ALUCINOGENOS 2 0,8 1 0,4 3 RELEVON 0 0,0 0 0,0 0 CRACK 0 0,0 2 0,8 2 OPIO 0 0,0 0 0,0 0 MORFINA 0 0,0 3 1,2 3 HASHIS 0 0,0 0 0,0 0 KETAMINA 0 0,0 2 0,8 2 ANFETAMINAS 1 0,4 1 0,4 2 OTROS 0 0,0 1 0,4 1 LIMITE LIMITE % TOTAL INFERIOR SUPERIOR 44,3 255 37,7 50,1 81,6 256 77,2 86,8 0,8 250 0,5 4,3 14,9 248 7,0 14,8 0,8 248 1,9 7,0 1,2 247 0,3 3,8 3,6 248 1,0 5,4 0,4 248 0,0 1,2 0,8 248 0,0 1,9 1,2 248 0,0 3,2 0,0 247 0,0 1,2 0,8 247 0,0 1,2 0,0 247 0,0 1,2 1,2 247 0,0 1,2 0,0 247 0,0 1,9 0,8 247 0,0 1,2 0,8 247 0,0 2,6 0,4 247 0,0 0,0 El cuadro 1 indica que las sustancias legales (alcohol y tabaco) son las más consumidas. El 44,3% de estudiantes fumaron alguna vez en su vida, y el 81,6% tomaron alguna bebida alcohólica. En cuanto al consumo de sustancias ilegales, 37 de los estudiantes encuestados ha consumido marihuana alguna vez en su vida, seguido por 9 casos de consumo de cocaína, 3 consumos de Popper, 3 de alucinógenos y 3 de morfina. El resto de las sustancias presentan entre 1 y 2 casos de consumo. Dentro del conjunto de los psicofármacos usados sin prescripción médica, los tranquilizantes ocupan el primer lugar con 5 casos, seguido de los estimulantes con 2 casos. Los varones muestran una prevalencia superior en el consumo de sustancias, a excepción del tabaco, en donde el consumo es similar entre hombres y mujeres. En el cuadro 2, se puede observar cómo a medida que aumenta la edad, se incrementa el porcentaje de estudiantes que han probado o consumido sustancias licitas e ilícitas. Debido a que el número de casos de consumos de las drogas licitas (tranquilizantes y estimulantes sin prescripción médica) e ilícitas (inhalantes, heroína, morfina, alucinógenos, hachis, crack, éxtasis, quetamina, Popper, entre otras) son relativamente bajos, no fueron tenidos en cuenta a partir del análisis que se desarrollará a continuación, por no considerarse que sean representativos de la muestra seleccionada. CUADRO 2: Prevalencia de vida por tipo de sustancias psicoactivas según tramo de edad. SUSTANCIA TABACO ALCOHOL MARIHUANA PASTA BASE COCAINA MENOS DE 15 5,5 13,7 1,2 0,0 0,0 15-16 16,1 26,7 5,1 0,4 1,6 MAS DE 16 20,8 38,8 7,5 0,4 1,6 GRAFICO 2: Prevalencia de vida por tipo de sustancias psicoactivas según tramo de edad. Año 2014. PREVALENCIA DE AÑO La prevalencia de año corresponde a cualquier consumo realizado en el último año anterior a la encuesta, y puede ser entendido como un “consumo reciente”. Es el mejor indicador sobre el consumo de drogas, y es por ello que cuando se presenta el análisis sobre factores de riesgo y protección, se realiza sobre la prevalencia del último año. GRÁFICO 3: Prevalencia de año de consumo de sustancias psicoactivas. Año 2014. Según muestra el gráfico 3, las prevalencias de consumos más altas corresponden al alcohol (71,7%), seguido por el tabaco (28,3%), marihuana en un 11,2%, un 1,2% corresponde a cocaína y un 1,2% a pasta base. CUADRO 3: Prevalencia de año por tipo de sustancias psicoactivas según sexo. Año 2014. SUSTANCIAS MASCULINO FEMENINO TABACO 13,2 15,1 ALCOHOL 38,4 33,3 MARIHUANA 6,2 5,0 COCAINA 0,0 1,2 PASTA BASE 0,8 0,4 TOTAL 28,3 71,7 11,2 1,2 1,2 INTERVALO DE CONFIANZA 27,1 29,5 70,5 72,9 10,0 12,4 0,0 2,4 0,0 2,4 El cuadro 3 permite analizar los consumos por sexo, observando que los varones presentan mayor prevalencia de año en el consumo de alcohol y marihuana, mientras que en el tabaco y la cocaína tienen mayor prevalencia el sexo femenino. CUADRO 4: Prevalencia de año por tipo de sustancia psicoactiva según tramos de edad. SUSTANCIAS TABACO ALCOHOL MARIHUANA COCAINA MENOS DE 15 1,9 9,7 0,4 0,0 15-16 10,9 23,6 4,7 0,4 MAS DE 16 14,7 36,4 5,8 0,4 Tal como se presenta en el consumo de vida y de año, las prevalencias de consumo actual de tabaco, alcohol y marihuana aumentan con la edad de los estudiantes, mientras que la cocaína se presenta entre los 15 y 16 años, y se mantiene en mayores de 16. A continuación, se presenta el gráfico 4: GRAFICO 4: Prevalencia de año por tipo de sustancia psicoactiva según tramos de edad. Año 2014. PREVALENCIA DE MES La prevalencia de mes corresponde a los estudiantes que manifestaron haber consumido alguna de las sustancias en los últimos 30 días, también se los suele considerar a este tipo de consumo como “consumo actual”. GRAFICO 5: Prevalencia de mes de consumo de sustancias psicoactivas. Año 2014 El 60,5% de los estudiantes tomaron alcohol en el último mes, y un 21,7% han fumado tabaco. La droga ilícita más consumida fue la marihuana con el 7%, mientras que la cocaína alcanzó el 0,8%. CUADRO 5: Prevalencia de mes por tipo de sustancia psicoactivas según sexo. Año 2014. SUSTANCIA MASCULINO FEMENINO TABACO 11,2 10,5 ALCOHOL 32,2 28,3 MARIHUANA 3,5 3,5 COCAINA 0,0 0,8 Como observamos en el cuadro 5, los consumos actuales de tabaco y marihuana son similares en hombres y mujeres. En el caso del alcohol son los varones los que mayor consumo tienen en este último mes, mientras que la cocaína corresponde a las mujeres. CONSUMO ACTUAL DE BEBIDAS ALCOHÓLICAS. El alcohol, se presenta como la sustancia psicoactiva de mayor consumo, la que presenta la edad de inicio más baja y la que se encuentra frecuentemente asociada al consumo de otras drogas ilícitas como la marihuana y la cocaína. Es una sustancia legal, acompañada de fuertes campañas publicitarias e incorporada históricamente en el patrón alimentario de la región; para lo cual es importante identificar con precisión cuál es el perfil de consumo que los adolescentes presentan. Si bien la prohibición de venta de alcohol a menores existe en el marco normativo, es evidente que los jóvenes acceden a las bebidas alcohólicas sin restricciones comerciales/culturales. A partir de indicadores como: frecuencia de consumo, cantidad de bebidas consumida, episodios de borrachera y/o intoxicación y aparición de trastornos físicos y/o psíquicos al suspender la ingesta, es posible identificar la magnitud de población adolescente en riesgo en relación al consumo de bebidas alcohólicas. En este estudio, se incorpora el uso de la escala CRAFFT que permite estudiar el abuso de alcohol a partir de preguntas que refieren a dificultades personales o a la interacción social que puede haberle causado el consumo de alcohol. Según los datos del presente estudio, 156 estudiantes del nivel medio han consumido alguna bebida alcohólica en el último mes, es decir un poco más del 60% de los estudiantes encuestados, lo cual corresponde a un 32,2% de los varones y 28,3% de las mujeres. Frecuencia de consumo de bebidas alcohólicas Los estudiantes consumen preferentemente durante los fines de semana, tanto quienes toman cerveza, vino o bebidas fuertes. CUADRO 6: Frecuencia de bebidas alcohólicas consumidas en el último mes según sexo. Año 2014. CERVEZA VINO TRAGOS FUERTES MASCULINO FEMENINO MASCULINO FEMENINO MASCULINO FEMENINO DIARIAMENTE 2,30% 0% 0% 0,70% 0% 0% FINES DE SEM. 14,30% 24,10% 30,30% 35,20% 34,30% 40% ALGUNOS DÍAS 11,30% 11,30% 2,10% 2,10% 0,70% 1,40% TOTAL 35,40% 27,90% 32,40% 38% 35% 41,40% GRÁFICO 6: Cantidad de cerveza consumida en el último mes según sexo. Año 2014. GRÁFICO 7: Cantidad de vino consumido en el último mes según sexo. Año 2014. GRÁFICO 8: Cantidad de tragos fuertes consumidos en el último mes según sexo. Año 2014. La bebida más consumida son los tragos fuertes con el 76,4%, seguido por el vino en un 70,4% y por último la cerveza con el 63,3%. Los varones consumen generalmente más cerveza, mientras que las mujeres eligen en su mayoría vino o tragos fuertes. Teniendo en cuenta las edades de los jóvenes, todas las sustancias marcaron un consumo significativamente inferior en los grupos menores de 15 años, y presentan el mayor consumo en los grupos de más de 16 años; excepto los tragos fuertes, donde el grupo entre 15 y 16 presenta un porcentaje de consumo levemente superior. En general, el consumo de bebidas alcohólicas se incrementa con la edad de los estudiantes, en especial a partir de los 15 y 16 años, y preferentemente durante los fines de semana. CUADRO 7: Frecuencia de consumo de bebidas alcohólicas en el último mes según tramo de edad. Año 2014. CERVEZA VINO TRAGOS FUERTES MENOS DE 15 15 - 16 MAS DE 16 MENOS DE 15 15 - 16 MAS DE 16 MENOS DE 15 15 - 16 MAS DE 16 DIARIAMENTE 0,9 0 0 0 0,7 0 0 0 0 FINES DE SEM. 5,1 17,1 22,2 5 25,2 34,5 5,4 36,9 33,1 ALGUNOS DÍAS 2,6 8,5 12,8 0,7 0,7 2,9 0,8 0 1,5 TOTAL 2,6 20,5 16,2 3,6 14,4 12,2 3,1 9,2 13,1 GRÁFICO 9: Frecuencia de consumo de cerveza en el último mes según tramo de edad. Año 2014. GRÁFICO 10: Frecuencia de consumo de vino en el último mes según tramo de edad. Año 2014. GRÁFICO 11: Frecuencia de consumo de tragos fuertes en el último mes según tramo de edad. Año 2014. Consumo de cerveza En lo que respecta a la cantidad de cerveza consumida en una misma ocasión, el 22,3% de varones y el 20,4% de mujeres tomaron un litro o más de cerveza durante los últimos 30 días, lo que representa un mayor consumo por parte de los varones; mientras que consumen en forma moderada (una latita por cada ocasión) el 14,6% de los varones y el 16,5% de las mujeres. Los menores de 15 años son los que menor cantidad de cerveza han consumido en una misma ocasión durante el último mes. El mayor porcentaje (5,8%) hizo un consumo moderado. A medida que aumentan las edades, aumenta también la cantidad de cerveza bebida en una misma ocasión. CUADRO 8: Cantidad de cerveza consumida en una sola ocasión según sexo. Año 2014. CERVEZA MASCULINO FEMENINO 1 LATITA 14,6 16,5 3/4 LITRO 8,7 16,5 1 LITRO 22,3 20,4 GRÁFICO 12: Cantidad de cerveza consumida en una sola ocasión según sexo. Año 2014. CUADRO 9: Cantidad de cerveza consumida en una sola ocasión según tramo de edad. 1 LATITA 3/4 LITRO LITRO TOTAL CERVEZA MENOS DE 15 15 - 16 MAS DE 16 5,8 9,7 16,5 1 8,7 14,6 2,9 19,4 16,5 9,7 37,9 47,6 GRÁFICO 13: Cantidad de cerveza consumida en una sola ocasión según tramo de edad. Consumo de vino En lo que respecta a la cantidad de vino consumido en una misma ocasión, el 21% de los jóvenes realizó un consumo moderado, el cual se define por la ingesta en una misma ocasión de sólo una copa de vino. En esta categoría, el 10,5% corresponde a varones, y el restante a mujeres. Considerando el mayor porcentaje ingerido: el 15,2% de los varones toma un litro o más frente al 11,4% de las mujeres. Por lo cual, son los hombres los que presentan un mayor consumo abusivo de vino. A medida que aumentan las edades de los estudiantes, el consumo de vino aumenta, así como su abuso. El 1% de los menores de 15 años consumieron un litro o más en una misma ocasión durante el último mes, el 10,5% entre 15 y 16 años, y el 12,4% más de 16 años. CUADRO 10: Cantidad de vino consumido en una sola ocasión según sexo. Año 2014. VINO MASCULINO FEMENINO 1 COPA 10,5 10,5 1/2 LITRO 12,4 16,2 3/4 LITRO 10,5 12,4 1 LITRO 15,2 11,4 GRAFICO 14: Cantidad de vino consumido en una sola ocasión según sexo. Año 2014. CUADRO 11: Cantidad de vino consumido en una sola ocasión según tramo de edad. 1 COPA 1/2 LITRO 3/4 LITRO 1 LITRO VINO MENOS DE 15 15 – 16 MAS DE 16 1 8,6 9,5 2,9 14,3 12,4 2,9 3,8 15,2 1 10,5 12,4 GRÁFICO 15: Cantidad de vino consumido en una sola ocasión según tramo de edad. Bebidas fuertes y tragos combinados Al contener esta categoría una variedad de bebidas, desde wisky, vodka, fernet, gancia, y cualquier trago que combine distintas bebidas resulta más difícil establecer una medida igual para todas ellas en lo que respecta la medición de las cantidades consumidas. De todas maneras, con el objetivo de armonizar las respuestas, se presentaron las categorías de medidas o tragos. Con el propósito de hacer observable la cantidad de bebidas alcohólicas consumidas en una misma ocasión, los siguientes gráficos consideran “un trago” y “más de un trago”. CUADRO 12: Cantidad de bebidas fuertes consumidas en una sola ocasión según sexo. 1 MEDIDA (TRAGO) MÁS DE 1 MEDIDA MASCULINO FEMENINO 14,8 14,8 33,1 37,4 GRÁFICO 16: Cantidad de bebida fuerte consumida en una sola ocasión según sexo. Considerando al consumo moderado el de una medida o trago en una misma ocasión, se encuentra en esta categoría el 29, 6% de los estudiantes, en una igual proporción hombres y mujeres con un 14,8% cada uno. El resto de estos jóvenes, es decir el 70,5% presenta un consumo abusivo. En este caso, se observa nuevamente que a medida que aumentan las edades hay un aumento en el consumo de bebidas o tragos fuertes. Quienes presentan mayormente este tipo de consumo son los mayores de 16 años con el 34,7%. CUADRO 13: Cantidad de bebidas fuertes consumidas en una sola ocasión según tramo de edad. Año 2014. 1 MEDIDA (TRAGO) MÁS DE 1 MEDIDA MENOS DE 15 2,6 4,4 15 – 16 MÁS DE 16 10,4 14,8 17,7 34,7 GRAFICO 17: Cantidad de bebidas fuertes consumidas en una sola ocasión según tramo de edad. Año 2014. Consumo riesgoso y/o abusivo Uno de los indicadores que permite identificar el consumo abusivo, se refiere a situaciones puntuales de intoxicación y borrachera que pueden haberse dado con cualquier cantidad y tipo de bebida alcohólica. Sobre el total de estudiantes que consumieron alcohol durante el último mes, el 42,9% reconoce haberse emborrachado o haber tomado más de la cuenta. Sin especificar el tipo de bebida alcohólica consumida, se les preguntó a los estudiantes que tomaron alcohol en el último mes, sobre cuantas veces lo hicieron en magnitudes de 5 tragos o más en una misma ocasión o salida durante los últimos 15 días. Esta magnitud ya es considerada una medida de abuso o bringe drinking. Aquí se pudo observar que el 62,8% de quienes consumieron alcohol durante el último mes, consumió al menos una sola vez estas cantidades de alcohol en los últimos 15 días. De los cuales, el 34,8% corresponde a los varones y el 37% a las mujeres. CUADRO 14: Frecuencia de consumo de 5 tragos o más de bebidas alcohólicas en una misma ocasión en los últimos 15 días según sexo. MASCULINO FEMENINO SOLO UNA VEZ 12,6 14,8 ENTRE DOS Y TRES 6,7 14,8 ENTRE 4 Y 5 VECES 5,9 4,4 MAS DE 5 VECES 9,6 3,0 TOTAL 37,8 30,6 14,3 17,3 GRAFICO 18: Frecuencia de consumo de 5 tragos o más de bebidas alcohólicas en una misma ocasión en los últimos 15 días según sexo. Los episodios de borrachera y/o intoxicación se incrementan a medida que aumenta la edad de los estudiantes, sobre todo a partir de los 16 años. Entre los que tienen 14 años o menos, la situación de abuso durante los últimos 15 días alcanza un 5,5%, los que tienen entre 15 y 16 años el 38,5%, y los mayores de 16 el 56%. CUADRO 15: Frecuencia de consumo de 5 tragos o más de bebidas alcohólicas en una misma ocasión según tramo de edad. Año 2014. SOLO UNA VEZ ENTRE DOS Y TRES ENTRE 4 Y 5 VECES MAS DE 5 VECES MENOS DE 15 1,1 3,3 0,0 1,1 15-16 13,2 12,1 8,8 4,4 MAS DE 16 25,3 15,4 5,5 9,9 TOTAL 39,6 30,8 14,3 15,4 GRAFICO 19: Frecuencia de consumo de 5 tragos o más de bebidas alcohólicas en una misma ocasión según tramo de edad. En cuanto a los lugares donde se da este tipo de consumo, se observa que un 41,5% lo ha hecho en casa de amigos, seguido por un 30% en el boliche, un 17% en su propia casa y un 8,5% en fiestas. En relación a estos lugares, los comportamientos de hombres y mujeres son similares. CUADRO 16: Lugar de consumo de bebidas alcohólicas según sexo. Año 2014. LUGAR EN SU CASA EN EL BOLICHE EN LA CALLE EN LA CASA DE AMIGOS EN UN BAR EN FIESTAS EN LA ESCUELA EN LA CANCHA O RECITALES EN EL CLUB MASCULINO FEMENINO 7,7 9,2 16,9 13,1 0,8 2,3 20,8 20,8 0 0 3,8 3,8 0 0 0 0 0 0 GRAFICO 20: Lugar de consumo de bebidas alcohólicas según sexo. Año 2014. En cuanto a las edades de los jóvenes, se observa que cuanto más grande son los estudiantes, el lugar más frecuente de consumo es la casa de un amigo, y cuanto más joven, el lugar es el boliche. En segundo lugar, ocurre al revés. Reconocemos la ausencia de consumos en espacios como la escuela o el club, vistos como espacios de protección para los estudiantes. CUADRO 17: Lugar de consumo de bebidas alcohólicas según tramo de edad. Año 2014. LUGAR EN SU CASA EN EL BOLICHE EN LA CALLE EN LA CASA DE AMIGOS EN UN BAR EN FIESTAS EN LA ESCUELA EN LA CANCHA O RECITALES EN EL CLUB MENOS DE 15 2,3 3,8 0 0,8 0 1,5 0 0 0 15 - 16 MÁS DE 16 7,7 6,2 13,8 10 0,8 2,3 16,9 21,5 0 0 4,6 2,3 0 0 0 0 0 0 GRAFICO 21: Lugar de consumo de bebidas alcohólicas según tramo de edad. Cuando se analiza por grupo de edad, se observa que los más jóvenes realizaron este tipo de consumo mayoritariamente en el boliche, mientras que para los más grandes, el lugar más frecuente de consumo es la casa de algún amigo. En segundo lugar, los menores de 15 años consumen en su casa, y los mayores en el boliche. Cabe mencionar que el 6,4% de los estudiantes que consumieron alguna bebida alcohólica en el último mes, manifestaron que al dejar de beber unos días sintieron malestar físico o ansiedad, que los llevó a consumir nuevamente. Esta situación, es uno de los indicadores de la dependencia, el síndrome de abstinencia según los Criterios de Clasificación Internacional de Enfermedades Décima Versión – CIE 10. El síndrome de dependencia es definido como “el conjunto de manifestaciones fisiológicas, comportamentales y cognoscitivas, en el cual el consumo de una droga o de un tipo de ellas, adquiere la máxima prioridad para el individuo, mayor incluso que cualquier otro tipo de comportamiento de los que en el pasado tuvieron el valor más alto. La manifestación característica del síndrome de dependencia es el deseo (a menudo fuerte y a veces insuperable) de ingerir sustancias psicotrópicas (aun cuando hayan sido prescriptas por un médico) alcohol o tabaco”. Otro indicador que permite analizar el consumo problemático de alcohol es la escala CRAFFT. A partir de 6 indicadores relativos a dificultades personales o en la interacción social que pueden haberle causado el consumo de alcohol, se considera que si el estudiante con consumo reciente de alcohol ha respondido afirmativamente al menos 2 de estas preguntas, manifiesta un uso problemático de la sustancia. Las preguntas que integran la escala refieren a si el estudiante alguna vez ha viajado en auto conducido por sí mismo o por una persona que había consumido alcohol; si alguna vez amigos o familiares le han sugerido que disminuya el consumo de alcohol; si lo ha consumido alguna vez para relajarse, sentirse mejor consigo mismo o integrarse mejor a un grupo; si se ha metido en problemas por su uso; si se ha olvidado lo que hizo por haber bebido; y si ha consumido alcohol estando solo. El 60% de estudiantes que han consumido alcohol durante el último año, lo han hecho en forma problemática, mostrándose que las mujeres son más propensas a pasar por estas situaciones que los varones. Respecto a la edad, a medida que aumenta la misma, mayor es el porcentaje de estudiantes que presentan estos tipos de consumos. CUADRO 18: Porcentaje de estudiantes que consumieron alcohol en el último año y presentan consumo problemático según sexo. Año 2014. 0 O 1 INDICADOR > 2 INDICADORES MASCULINO FEMENINO 38,38 41,86 61,62 93,03 TOTAL 40,86 59,68 GRAFICO 22: Porcentaje de estudiantes que consumieron alcohol en el último año y presentan consumo problemático según sexo. Año 2014. CUADRO 19: Porcentaje de estudiantes que consumieron alcohol en el último año y presentan consumo problemático según tramo de edad. Año 2014. 0 o 1 INDICADOR > 2 INDICADORES MENOS DE 15 68 32 15 – 16 37,7 50,82 MÁS DE 16 34,04 65,96 GRAFICO 23: Porcentaje de estudiantes que consumieron alcohol en el último año y presentan consumo problemático según tramo de edad. Año 2014 A continuación, se analiza cada uno de los indicadores, y se observa que un 49,5% de los estudiantes, ha olvidado algunas veces lo que hizo luego de tomar alcohol. El consumo que inquieta a amigos y/o familiares se observa en un 48,2% de estudiantes en esta situación, sin diferencias significativas por sexo. Se revela también que un 38% ha viajado en un auto conducido por una persona que había consumido alcohol (sea el mismo o no) con una leve mayoría entre los varones que mujeres. Un 32,1% ha consumido alcohol estando solos/as sin haber distinciones entre hombres y mujeres. Un 29,3% de los encuestados ha consumido alcohol para relajarse, en mayor proporción las mujeres que los varones. Finalmente, un 17,9% se ha metido en problemas como consecuencia del consumo de alcohol, más las mujeres que los hombres. Todos estos indicadores tienden a aumentar con la edad de los estudiantes, aunque evidencian un aumento mucho mayor entre los 15 y 16 años. CUADRO 20: Porcentaje de estudiantes que han consumido alcohol durante el último año y han respondido afirmativamente a cada indicador de consumo problemático según sexo. Año 2014. INDICADOR DE CONSUMO PROBLEMÁTICO ALGUNA VEZ HAS VIAJADO EN AUTO CONDUCIDO POR PERSONAS QUE HAYA CONSUMIDO ALCOHOL ALGUNA VEZ AMGOS O FAMILIARES TE HAN SUGERIDO QUE DISMINUYAS EL CONSUMO DE ALCOHOL ALGUNA VEZ HAS CONSUMIDO ALCOHOL PARA RELAJARTE MASCULINO FEMENINO 20,8 17,2 23,3 24,9 11 18,3 6,8 11,1 14,2 17,9 24,2 25,3 ALGUNA VEZ TE HAS METIDO EN PROBLEMAS AL CONSUMIR ALCOHOL ALGUNA VEZ SE TE HA OLVIDADO LO QUE HICISTE AL CONSUMIR ALCOHOL ALGUNA VEZ HAS CONSUMIDO ALCOHOL ESTANDO SOLO GRAFICO 24: Porcentaje de estudiantes que han consumido alcohol durante el último año y han respondido afirmativamente a cada indicador de consumo problemático según sexo. CUADRO 21: Porcentaje de estudiantes que han consumido alcohol durante el último año y han respondido afirmativamente a cada indicador de consumo problemático según tramo de edad. Año 2014. INDICADOR DE CONSUMO PROBLEMÁTICO ALGUNA VEZ HAS VIAJADO EN AUTO CONDUCIDO POR PERSONAS QUE HAYA CONSUMIDO ALCOHOL ALGUNA VEZ AMGOS O FAMILIARES TE HAN SUGERIDO QUE DISMINUYAS EL CONSUMO DE ALCOHOL ALGUNA VEZ HAS CONSUMIDO ALCOHOL PARA RELAJARTE MENOS DE 15 15 - 16 MÁS DE 16 2,6 17,7 16,1 5,3 17,5 22,2 2,1 13,1 13,1 0,5 8,4 7,9 2,1 12,1 17,9 4,2 19,5 23,2 ALGUNA VEZ TE HAS METIDO EN PROBLEMAS AL CONSUMIR ALCOHOL ALGUNA VEZ SE TE HA OLVIDADO LO QUE HICISTE AL CONSUMIR ALCOHOL ALGUNA VEZ HAS CONSUMIDO ALCOHOL ESTANDO SOLO GRAFICO 25: Porcentaje de estudiantes que han consumido alcohol durante el último año y han respondido afirmativamente a cada indicador de consumo problemático según tramo de edad. CONSUMO ACTUAL DE TABACO El 21,7%, que representa a 56 estudiantes tomados como muestra, fumaron tabaco en el mes anterior a la muestra, lo cual se considera “consumo actual”. Dichas prevalencias de consumos tanto en hombres como mujeres son similares, alcanzando un 11,2% y un 10,5% respectivamente. Para analizar la intensidad de este consumo se utilizan dos indicadores: la cantidad de días que fumaron durante el último mes y la cantidad de cigarrillos que fumaron por día en igual periodo de tiempo. CUADRO 22: Cantidad de días que fumaron en el último mes según sexo. Año 2014. 1 A 9 DÍAS 10 A 19 DÍAS 20 A 29 DÍAS 30 DÍAS MASCULINO FEMENINO 18,3 26,7 5 8,3 8,3 8,3 8,3 16,7 TOTAL 45 13,3 16,7 25 GRAFICO 26: Cantidad de días que fumaron en el último mes según sexo. Año 2014. El gráfico anterior muestra que el 45% de los estudiantes fuman menos de 10 días al mes (lo que podría pensarse como consumo de fin de semana) en mayor proporción entre las mujeres. En el otro extremo, el 25% de los estudiantes, lo hace todos los días, alcanzando un 8,3% los hombres y un 16, 7% las mujeres. CUADRO 23: Cantidad de días que fumaron en el último mes según edad. Año 2014. 1 A 9 DÍAS 10 A 19 DÍAS 20 A 29 DÍAS 30 DÍAS MENORES DE 15 18,5 5,6 11,1 9,3 15-16 MAS DE 16 5,6 18,5 0 1,9 3,7 3,7 3,7 18,5 TOTAL 42,6 7,4 18,5 31,5 GRAFICO 27: Cantidad de días que fumaron en el último mes según edad. Año 2014. En cuanto a las edades, los menores de 15 años y los mayores de 16, representan el mayor porcentaje (18,5%) de consumo de tabaco por fin de semana. Éstos últimos, mantienen igual porcentaje en lo que hace a consumos diarios (18,5%) CUADRO 24: Cantidad de cigarrillos consumidos por día en el último mes según sexo. Año 2014. HASTA 5 ENTRE 6 Y 10 ENTRE 11 Y 15 ENTRE 16 Y 20 MASCULINO FEMENINO 46,7 81,8 16,6 12,1 16,6 3 19,9 3 GRÁFICO 28: Cantidad de cigarrillos fumados por día en el último mes según sexo. Año 2014. De estos jóvenes que consumen tabaco, el 65,63% ha fumado hasta 5 cigarrillos diarios durante el último mes, siendo las mujeres las que más lo hacen. CUADRO 25: Cantidad de cigarrillos consumidos por día en el último mes según edad. Año 2014. HASTA 5 ENTRE 6 Y 10 ENTRE 11 Y 15 ENTRE 16 Y 20 MENOS DE 15 71,4 0,0 28,6 0,0 15-16 66,7 16,7 4,2 12,5 MAS DE 16 63,3 13,3 10,0 13,3 GRÁFICO 29: Cantidad de cigarrillos que fumaron por día en el último mes según edad. Año 2014. En cuanto a las edades, son los menores de 15 años los que declaran un consumo de fin de semana con el 71,4%. Esta cantidad de cigarrillos diarios es la que representa mayor consumo en todas las edades, sin embargo, la misma disminuye a medida que aumenta la edad. A partir de los 15 años se presenta el mayor consumo diario de tabaco, el cual aumenta con la edad. EDAD DE INICIO EN EL CONSUMO Las sustancias legales (alcohol y tabaco) son las de inicio más precoz, con un promedio general de 14 años. Las sustancias como la marihuana tienen una edad de inicio promedio de 15 años. Los datos sobre cuando se produjo el primer consumo no muestran diferencias significativas entre varones y mujeres. CUADRO 26: Indicadores estadísticos de la edad de inicio en el consumo de sustancias psicoactivas según sexo. Año 2014. MASCULINO FEMENINO CANTIDAD TABACO 13,7 14,3 108 ALCOHOL 13,4 14,1 203 MARIHUANA 15,2 15,1 36 COCAÍNA 14 15 10 CUADRO 27: Indicadores estadísticos de la edad de inicio en el consumo de sustancias psicoactivas según tramos de edad. Año 2014. TABACO ALCOHOL MARIHUANA COCAÍNA MENOS DE 15 13 12,8 14,2 14 15 – 16 MÁS DE 16 CANTIDAD 14 14,9 108 14 14,2 203 14,8 15,9 36 15,5 14,2 10 En cuanto a las edades de inicio por tramo de edad, se puede observar que en el caso de las drogas como el alcohol, el tabaco y la marihuana, los consumos son cada vez más tempranos. No así, en el caso de la cocaína, donde se mantiene el promedio de edades de inicio (entre 14 y 15 años). INTENSIDAD Y ABUSO DEL USO DE DROGAS ILICITAS La intensidad del consumo se relaciona directamente con el daño que el uso de las drogas ilícitas produce en la salud, ya que el uso más frecuente y en mayor cantidad puede estar asociado a signos y síntomas que pueden corresponderse a adicciones. La intensidad del uso de drogas ilícitas en usuarios recientes refiere al grado de habitualidad que ha adquirido el consumo en los adolescentes que han utilizado cada una de las sustancias durante el último año, es decir, permite observar en qué medida el consumo es de tipo experimental (una sola vez), ocasional (algunas veces), o frecuente (semanal/diario). A continuación, analizamos la intensidad del uso de drogas ilícitas en los estudiantes teniendo en cuenta el número de casos obtenidos en las respuestas, los cuáles, no representan un valor significativo en relación a la muestra total. De ellos, destacando el consumo de marihuana, donde se obtuvieron 29 respuestas que comprenden un consumo realizado durante el último año, de los cuales 16 corresponden a un tipo de consumo ocasional, seguido de 7 respuestas relacionadas a un tipo de consumo experimental, y 6 frecuentes. CUADRO 28: Intensidad del uso de sustancias de estudiantes con consumo reciente según tipo de sustancia ilícita. MARIHUANA COCAINA EXTASIS OTRAS DROGAS EXPERIMENTAL OCACIONAL FRECUENTE 7 16 6 1 1 1 0 2 0 1 1 1 TOTAL 29 3 2 3 GRÁFICO 30: Intensidad del uso de sustancias de estudiantes con consumo reciente según tipo de sustancia ilícita. Año 2014. ABUSO DE MARIHUANA Para estimar el abuso de marihuana, utilizamos la escala CAST. A partir de seis preguntas sobre: cuántas veces el estudiante ha fumado antes del mediodía, lo ha hecho estando solo, ha tenido problemas de memoria al fumar, algún familiar o amigo le ha sugerido que debería reducir el consumo, ha intentado reducirlo y no ha podido o ha tenido algún problema a causa del consumo de marihuana. Se construye una escala que clasifica el consumo en: bajo riesgo, riesgo moderado o de alto riesgo. GRÁFICO 31: Estudiantes que consumieron marihuana durante el último año por escala de riesgo de consumo. Podemos observar en el cuadro anterior, que el 65,5% de los consumidores de marihuana reciente tienen un consumo de bajo riesgo, es decir de no abuso y que no le ha generado problemas en el entorno o su salud; un 24,1% presenta un uso de riesgo moderado, es decir, que en ocasiones sí ha abusado y/o ha causado inconvenientes a sí mismo o a su ámbito; mientras que un 10,3% consume marihuana de una manera que se puede considerar de alto riesgo, y por lo tanto son sujetos de atención por la problemática de su consumo. Consideramos importante referir que los estudiantes con consumo de marihuana de alto riesgo representan un 1% del total de la muestra estudiada. CONSUMO DE BEBIAS ENERGIZANTES Las bebidas energizantes son bebidas sin alcohol de venta libre que producen un efecto estimulante y están compuestas por cafeína, vitaminas y otras sustancias naturales organizadas que eliminan la sensación de agotamiento, que por contener altas dosis de cafeína no pueden beberse de manera ilimitada y pueden producir dependencia. Si bien estas bebidas incluyen en su composición glucosa y otros azúcares que proporcionan energía al cuerpo (excepto las versiones dietéticas), no eliminan la fatiga muscular ni el agotamiento en general, solamente eliminan temporalmente estas sensaciones, por lo tanto es normal la sensación de decaimiento una vez que acaba su efecto en el organismo. El riesgo potencial de consumo de estas bebidas, se ve incrementado por el uso concomitante con otras sustancias como es el caso del alcohol. A continuación observamos que más del 80% de los jóvenes ha consumido alguna vez en la vida bebidas energizantes, y un poco más de un 60% lo ha hecho durante el último año, teniendo los varones la mayor prevalencia. CUADRO 29: Prevalencia de vida, año y mes de bebidas energizantes según sexo. Año 2014 PREVALENCIA DE BEBIDAS ENERGIZANTES MASCULINO FEMENINO TOTAL VIDA 45,7 36 81,7 AÑO 37,2 26,3 63,5 MES 21,5 17 38,5 De acuerdo al siguiente cuadro, el consumo de bebidas energizantes aumenta con la edad de los estudiantes. Un alto porcentaje de los consumos se han realizado durante el último año. CUADRO 30: Prevalencia de vida, año y mes de bebidas energizantes según tramo de edad. Año 2014. PREVALENCIA DE BEBIDAS ENERGIZANTES MENOS DE 15 15 - 16 MAS DE 16 VIDA 17,2 27,6 37,7 AÑO 11,7 20,6 30 MES 3,2 13,4 23,5 Los siguientes gráficos presentan que un gran porcentaje de los usuarios de bebidas energizantes las combinan con alcohol, lo que aumenta su efecto y las hace particularmente riesgosas. Aquí también fueron los varones los que tienen mayor consumo. GRÁFICO 32: Porcentaje de estudiantes que consumió bebidas energizantes durante el último mes y lo hicieron en forma combinada con alcohol según sexo. Año 2014. GRÁFICO 33: Porcentaje de estudiantes que consumió bebidas energizantes durante el último mes y lo hicieron en forma combinada con alcohol según tramo de edad. Año 2014. El uso combinado aumenta con la edad. La mitad de los estudiantes de más de 16 años con consumo actual de bebidas energizantes lo hace en forma combinada con alcohol (50,4%). FACTORES DE RIESGO Y PROTECCIÓN El consumo de sustancias psicoactivas es un fenómeno social condicionado por aspectos económicos, culturales e individuales, por lo que es necesario, a partir de la investigación, indagar sobre aquellas variables que permitan identificar y comprobar las asociaciones que el consumo presenta en relación a diferentes condiciones: individuales, comunitarias, escolares y familiares. La naturaleza del fenómeno que analizamos, el consumo y abuso de sustancias psicoactivas, medido a partir de las declaraciones de los individuos, mediante una encuesta, no debiera subestimar la mirada sobre los determinantes sociales que intervienen en las conductas y percepciones individuales, tales como la percepción del riesgo, la curiosidad por probar drogas, las expectativas a futuro de realizar proyectos personales, entre otros. Entonces, si bien se construyen analíticamente ciertas dimensiones para poder observar aspectos del fenómeno: familiar, personal, comunitario y escolar; partimos del supuesto que están fuertemente relacionadas unas con otras. En la búsqueda de las causas que determinan el consumo, se denomina “factores de riesgo” a aquellas características sociales, culturales y/o individuales, que en conjunto, en un determinado momento, incrementan las condiciones de vulnerabilidad de la persona para el consumo de drogas. Por otra parte, los “factores de protección” se refieren a los estímulos y situaciones originadas en el individuo, el grupo o el medio social, que al estar presentes en un periodo de la vida específico, determinan menor vulnerabilidad en relación al uso de drogas. La población bajo análisis, adolescentes escolarizados, ya de por sí constituye por la etapa del ciclo vital en la cual está, una población de alto riesgo. La experiencia internacional y nacional indica que en esta etapa se da inicio a la experimentación del uso de drogas. De todas maneras, tal como las tasas de consumo indican, la mayoría de los estudiantes no hace uso de sustancias psicoactivas, pero es de esperar que quienes ya lo estén haciendo con intensidad y frecuencia, presenten en un corto y mediano plazo, problemas de salud, familiares y sociales, vinculados a dichos consumos. En el marco de esta problemática, y con el objetivo de presentar datos que fortalezcan su conocimiento, se presentan las diferentes variables de riesgo y protección que fueron indagadas en el cuestionario y su relación con las tasas de consumo del último año. A modo de organizar la información, se proponen las siguientes dimensiones analíticas: Dimensión personal Diferentes son los factores de riesgo de tipo individual que favorecen el consumo de drogas. Estos factores están ligados a condiciones psicológicas y conductuales, tales como trastornos de conducta y problemas de salud mental, depresión, trastornos por déficit de atención con hiperactividad, conductas antisociales, alienación y rebeldía, agresividad, actitudes favorables al consumo de drogas y búsqueda de sensaciones. Por otro lado, los factores de protección, se vinculan a la autoestima, habilidades sociales para su integración, habilidades para adaptarse a circunstancias cambiantes, aspiraciones de futuro y resiliencia. En esta dimensión denominada “personal” (lo cual no implica que se la desligue de los condicionantes sociales en las cuales el estudiante se encuentra inserto) se han incluido un conjunto de variables incorporadas en la encuesta y que refieren a la disponibilidad de dinero, si el estudiante trabaja o no, las expectativas que los estudiantes tienen en un corto y mediano plazo, la percepción sobre el riesgo que presenta el consumo de drogas, y la curiosidad y propensión a experimentar su uso. Disponibilidad de dinero y ocupación CUADRO 31: Prevalencia de año por tipo de sustancia psicoactivas según disponibilidad mensual de dinero. Año 2014. SUSTANCIA CIGARRILLOS ALCOHOL MARIHUANA COCAINA TOTAL NADA MENOS DE 40$ 1,35 0,34 3,04 2,03 0,68 0,00 0,34 0,00 5,41 2,36 41-90 $ 1,69 4,73 1,01 0,00 7,43 91 A 120$ MAS DE $120 1,69 19,93 7,09 45,27 0,34 7,77 0,00 0,68 9,12 73,65 TOTAL 25,00 62,16 9,80 1,01 100,00 GRAFICO 34: Prevalencia de año por tipo de sustancia psicoactivas según disponibilidad mensual de dinero. Año 2014. La mayoría de los alumnos declaran disponer más de $120 por mes para sus gastos. No necesariamente se debe asociar este indicador con el nivel socioeconómico del estudiante, sino con la posibilidad de disponer de dinero, que si bien tiene que ver con alguna condición socioeconómica del hogar, indica una condición favorable del estudiante para satisfacer gustos y necesidades. Aunque la relación no es estrictamente lineal, la disponibilidad de dinero aparece como factor de riesgo en el consumo de cualquier sustancia legar o ilegal. Teniendo en cuenta que los montos propuestos en el cuestionario, corresponden al año 2011, es más probable que la mayoría de los jóvenes respondan que el dinero que disponen por mes sea la de los valores más altos. Percepción del riesgo El cuestionario indagó sobre esta percepción por parte de los alumnos haciendo mención a las distintas sustancias y también a las diferentes frecuencias de sus usos. Incluso, se diferenció el uso de alguna vez, al de una o dos veces para poder captar la percepción frente a la experimentación. Se diferencia la percepción de riesgo según el tipo de sustancia y la frecuencia de uso. En general, a medida que se incrementa la frecuencia de uso disminuye la opinión sobre su inocuidad. Las sustancias legales o ilegales en su uso frecuente son consideradas de gran riesgo por la mayor proporción de alumnos. En relación al consumo de sustancias legales como tabaco y alcohol, la mayoría lo considera de riesgo leve o moderado cuando su consumo es ocasional. Tanto tranquilizantes como estimulantes son considerados por los encuestados, en su mayoría, de riesgo moderado y grande, cualquiera sea el tipo de consumo que se realice. Sin embargo, representan el porcentaje más elevado el desconocimiento respecto al riesgo que genera su consumo. Por otro lado, estas mismas sustancias (tabaco y alcohol) son consideradas de gran riesgo cuando su uso es frecuente. En cuanto a la marihuana, un uso experimental es considerado de riesgo leve, el consumo ocasional de riesgo moderado y su uso frecuente de gran riesgo; es decir que aumenta el riesgo a medida que aumenta la frecuencia del consumo. Sin embargo, podemos destacar que aproximadamente el 47% de los jóvenes consideran que el uso experimental de la marihuana es inocuo; siendo ésta la sustancia ilegal con menor percepción del riesgo. Respecto al resto de sustancias de tipo ilegal, a medida que aumenta la frecuencia de su uso, aumenta la percepción del riesgo respecto a ellas, siendo consideradas las más riesgosas, los consumos frecuentes de cocaína y pasta base. Considerando la percepción del riesgo una barrera subjetiva para el consumo de sustancias, la percepción de ninguno o bajo riesgo, o el desconocimiento, hacen que los estudiantes se encuentren vulnerables para el inicio del consumo. La barrera subjetiva está presente en mayor medida frente al uso frecuente de sustancias y mucho menos para el uso experimental u ocasional. Más del 70% de los estudiantes considera que el uso frecuente de inhalantes, cocaína, pasta base y éxtasis, y el emborracharse con bebidas alcohólicas como de gran riesgo. Este porcentaje es levemente menor respecto al consumo frecuente de tabaco, alcohol, psicofármacos y marihuana. CUADRO 32: Distribución porcentual de los estudiantes según percepción del riesgo por sustancia y frecuencia de uso. Año 2014. Percepción del riesgo Cual es el riesgo que corre una persona que…? Ningún riesgo Riesgo leve Riesgo moderado Gran riesgo Fuma cigarrillos alguna vez 6 51,4 27,71 11,24 Fuma cigarrillos frecuentemente 1,2 6,45 22,98 66,53 Toma bebidas alcoholicas alguna vez 19,24 53,13 22,59 1,67 Toma bebidas alcoholicas frecuentemente 0,8 10,48 32,66 53,22 Se emborracha con bebidas alcoholicas 0,4 7,63 17,26 70,68 Prueba tranquilizantes una o dos veces 5,35 18,93 22,22 30,45 Toma tranquilizantes alguna vez 0,81 9,8 29 36,32 Toma tranquilizantes frecuentemente 0,41 5 8 65 Prueba estimulantes una o dos veces 4,9 25,71 22,44 16,32 Toma estimulantes alguna vez 1,23 11,06 28,27 27,5 Toma estimulantes frecuentemente 2,48 2 9,5 55,37 Prueba inhalantes una o dos veces 4,5 18,85 33,19 24,18 Aspira inhalantes alguna vez 1,21 6,5 33,73 42,27 Aspira inhalantes frecuentemente 1,21 2 6,47 72,9 Prueba marihuana una o dos veces 32,65 36,7 18,36 7,75 Fuma marihuana alguna vez 11 29,67 42,27 12,6 Fuma marihuana frecuentemente 3,26 7,34 16,32 69 Prueba cocaina una o dos veces 9 43,8 26 13,22 Consume cocaina alguna vez 1,66 12,86 48,54 29,87 Consume cocaina frecuentemente 0,81 2,85 5,71 85,3 Prueba pasta base o paco una /dos veces 4 24,18 31,14 23,77 Consume pasta base o paco alguna vez 1,23 7 33 41,7 Consume pasta base o paco frecuentemente 1,24 1,24 4,56 77,59 Prueba extasis una o dos veces 7,72 30,89 25,2 17 Consume extasis alguna vez 1,62 9,75 38,61 30,89 Consume extasis frecuentemente 0,4 1,21 7,31 72,35 No sabe 3,61 2,82 3,34 2,82 4 23 24 21,66 30,61 32 30,57 19,26 16,26 17,4 4,49 4,47 4 7,85 7 5,3 16,8 16,94 15,35 19,1 19,1 18,7 Curiosidad y probabilidad de consumo de drogas Otro factor de riesgo se asienta en la curiosidad por probar alguna droga ilegal y en la certeza de hacerlo frente a la posibilidad de tener acceso u ocasión. CUADRO 33: Porcentaje de estudiantes que tiene curiosidad de probar alguna droga ilegal según sexo. Año 2014. SI NO YA HE PROBADO TOTAL MASCULINO FEMENINO 31,0 18,3 62,7 78,6 6,3 3,2 100,0 100,0 TOTAL 24,6 70,6 4,8 100,0 GRÁFICO 35: Porcentaje de estudiantes que tiene curiosidad de probar alguna droga ilegal según sexo. Año 2014. El 24,6% de los estudiantes manifiesta tener curiosidad de probar alguna droga ilegal, en mayor proporción los varones (31%) respecto de las mujeres (18,3%). CUADRO 34: Porcentaje de estudiantes que tiene curiosidad de probar alguna droga ilegal según tramo de edad. Año 2014. SI NO YA HE PROBADO TOTAL MENOS DE 15 13,8 84,6 1,5 100,0 15-16 MAS DE 16 32,1 26,4 64,1 66,4 3,8 7,3 100,0 100,0 GRÁFICO 36: Porcentaje de estudiantes que tiene curiosidad de probar alguna droga ilegal según tramo de edad. Año 2014. Tal como muestra el gráfico, la curiosidad aumenta con la edad de los estudiantes. El porcentaje de estudiantes que de tener la ocasión, probarían una droga ilegal es del 9,5%. Esta probabilidad del consumo, representa menos de la mitad que la curiosidad y ocurre en varones y mujeres en proporciones similares. CUADRO 35: Cantidad de estudiantes que, si se presentara la ocasión, probarían alguna droga ilícita según sexo. Año 2014. SI NO YA HE PROBADO TOTAL MASCULINO FEMENINO 8,8 10,2 82,4 85,8 8,8 3,9 100,0 100,0 TOTAL 9,5 84,1 6,3 100,0 GRÁFICO 37: Cantidad de estudiantes que, si se presentara la ocasión, probarían alguna droga ilícita según sexo. Año 2014. Del mismo modo que la curiosidad, la posibilidad de probar se incrementa con la edad, especialmente luego de los 15 – 16 años. Sin embargo, cabe destacar que aproximadamente el 84% de los estudiantes manifiesta que no probaría una droga ilícita, aunque se presentara la ocasión de hacerlo. CUADRO 36: Porcentaje de estudiantes que tiene curiosidad de probar alguna droga ilegal según tramo de edad. Año 2014. SI NO YA HE PROBADO TOTAL MENOS DE 15 4,6 93,8 1,5 100,0 15-16 MAS DE 16 10,3 11,8 80,8 80,9 9,0 7,3 100,0 100,0 TOTAL 9,5 84,2 6,3 100,0 GRÁFICO 38: Porcentaje de estudiantes que tiene curiosidad de probar alguna droga ilegal según tramo de edad. Año 2014. Dimensión familiar Consumo de drogas en el ámbito familiar y reacciones frente al consumo. El 5,6% de los estudiantes dijeron que alguno de sus hermanos u otra persona que vive en su casa, consume actualmente alguna droga ilícita. El 8,4% contestó no saber, o no respondió, y el 86% contestó que no. GRÁFICO 39: Consumo actual de drogas ilícitas en su casa. Año 2014. En cuanto a la reacción de los padres si supieran que los estudiantes consumen alguna droga ilícita, la mayoría de los jóvenes consideran que sus padres actuarían de forma comprensiva y tratando de ayudarlos: el 48% buscarían ayuda profesional, el 39,9% hablaría con ellos para que no lo hicieran, mientras que el 11,7% piensa que sus progenitores los castigarían. GRÁFICO 40: Percepción sobre la reacción de los padres frente al consumo de drogas ilícitas. Año 2014. Dimensión comunitaria y entorno social Grupo de pares. En la población bajo estudio, adolescentes escolarizados, el grupo de pares juega un rol importante, tanto si éste consume, como así también acerca de cómo se comportarían frente a una situación hipotética de consumo. El grupo de amigos, es una instancia de socialización secundaria que durante la adolescencia adquiere un peso importante en la conformación del individuo. Dos aspectos se analizan en relación al grupo de pares, el primero sobre la tenencia de amigos que fuman marihuana o consumen alcohol regularmente, y el segundo, la presión que el grupo ejercería frente al consumo de marihuana y otras drogas ilícitas. El 52,6% de los estudiantes manifestaron que todos o casi todos sus amigos consumen regularmente alcohol, es decir todos los fines de semana o más, seguido por un 17,26% de los jóvenes que considera que menos de la mitad de sus amigos beben cada tanto, un 16,46% dice que la mitad de sus amigos lo hace, mientras que un 6% no tienen amigos que tomen bebidas alcohólicas. Podemos observar las tasas de consumo actual o del último mes del consumo de alcohol de los estudiantes, según la tenencia de amigos que consumen alcohol regularmente, donde el 54,8% de los jóvenes que consumen alcohol son los que tienen todos o casi todo su grupo de amigos que consumen alcohol de forma regular. Es decir, que a medida que es mayor el entorno que consume, mayor es la proporción de alumnos que toman alcohol actualmente. CUADRO 37: Prevalencia de mes de consumo de bebidas alcohólicas según la tenencia de amigos que consumen alcohol regularmente. Año 2014. TENENCIA DE AMIGOS CONSUMIDORES NINGUNO MENOS DE LA MITAD LA MITAD DE LOS AMIGOS TODOS O CASI TODOS NO SE CONSUME BEBIDAS ALCOHOLICAS 1,6 8,6 12,9 54,8 5,4 NO CONSUME BEBIDAS ALCOHOLICAS 1,1 4,8 4,3 4,8 1,6 GRÁFICO 41: Prevalencia de mes de consumo de bebidas alcohólicas según la tenencia de amigos que consumen alcohol regularmente. Año 2014. Respecto al entorno de amigos que fuma marihuana, se presentan los siguientes valores: el 54,18% dijo no tener amigos que consumen, el 23,5% tiene menos de la mitad de sus amigos que lo hacen, el 3,98% tienen la mitad de sus amigos que fuman marihuana y el 2,39% dijo que todos o casi todos sus amigos lo hacen. La influencia del entorno, muestra algunas diferencias respecto al alcohol en las tasas de consumo del último año de marihuana según si sus amigos consumen o no; representando el mayor porcentaje el 42,85% de los estudiantes que fumaron marihuana en el último año, tienen menos de la mitad de sus amigos que fuman regularmente, seguido por un 21,42% que tiene a todos o casi todos sus amigos que lo hacen, y un 17,85% que dice que es la mitad. GRÁFICO 42: Prevalencia de año de consumo de marihuana según la tenencia de amigos que fuman marihuana. Año 2014. Otro aspecto a analizar en el grupo de pares o de amigos es la presión que el mismo ejercería frente a una situación de consumo. Se indagó sobre la percepción que los estudiantes tienen de las reacciones de su grupo de amigos si supieran que ellos fuman marihuana. Las respuestas indican que: el 55% le diría algo para que no lo hiciera, el 20,7% considera que algunos le dirían que no lo hiciera y otros no le dirían nada; el 17,18% no sabe qué le diría o harían; un 6,64% sentiría una actitud de indiferencia a sus amigos frente al consumo y un 0,39% los alentaría a seguir consumiendo. El consumo reciente de marihuana es más alto en el grupo de estudiantes que tienen amigos que sienten indiferencia frente al consumo, el 9,1% de los estudiantes considera que de sus amigos, algunos le dirían que no lo hiciera mientras que otros no le diría nada, seguido por un 2,3% que no sabe que harían o le dirían. GRÁFICO 43: Prevalencia de año de consumo de marihuana según presión del grupo. La presión para no consumir es mayor cuando el consumo de drogas es diferente a la marihuana, tales como cocaína, pasta base, éxtasis o ácidos. El 68,6% de los estudiantes piensa que este consumo sería desaprobado por los amigos más cercanos. Aproximadamente un 26% de los estudiantes no sabrían que le dirían o harían sus amigos, aunque algunos le dirían que no lo hicieran. El 4,7% presentaría indiferencia o no le diría nada, y solo un 0,4% considera que lo alentarían para que lo hiciera. Oferta directa de drogas Así como la percepción del riesgo de consumo de sustancias es una barrera subjetiva, la oferta se constituye como una barrera objetiva del consumo. Se estima que cuando mayor sea la oferta, mayor será la probabilidad de consumo de cada una de las sustancias. El 31,2% de los estudiantes ha recibido oferta de marihuana ya sea para comprar o probar, y esta oferta ha sido mayor en el último mes anterior a la encuesta. Al 9,8% de los jóvenes le ofrecieron cocaína, al 4,4% le ofrecieron éxtasis, y al 1,2% pasta base. CUADRO 38: Distribución porcentual de estudiantes según oferta de drogas ilícitas. Año 2014. CUANDO TE OFRECIERON ULTIMOS 30 DIAS MARIHUANA 12,8 > DE UN MES Y < DE UN AÑO MAS DE UN AÑO NUNCA ME HAN OFRECIDO COCAINA PASTA BASE 3,3 0,0 EXTASIS 1,6 9,6 2,8 0,4 1,6 8,8 68,8 3,7 90,2 0,8 98,8 1,2 95,5 GRÁFICO 44: Distribución porcentual de estudiantes según oferta de drogas ilícitas. Año 2014. Entre los estudiantes que recibieron oferta directa de drogas para comprar y consumir, el consumo es superior que entre los estudiantes que no recibieron oferta directa. GRAFICO 45: Prevalencia del consumo del último año según oferta de drogas. Año 2014. El lugar de oferta de marihuana y otras drogas en su mayoría se refiere a “otro lugar” no especificado en el cuestionario, seguido de fiestas y recitales. En menor proporción son los alrededores de las casas de los estudiantes. Un 1,7% de éstos, recibió oferta de marihuana dentro de su colegio, y un 0,8% ha tenido oferta de otras drogas. CUADRO 39: Lugar de oferta de marihuana y otras drogas ilegales. Año 2014. NUNCA ME HAN OFRECIDO EN MI CASA EN EL COLEGIO EN LOS ALREDEDORES DEL COLEGIO EN UNA FIESTA O RECITAL EN LOS ALREDEDORESDE MI CASA POR INTERNET,MAIL O CHAT OTRO LUGAR TOTAL MARIHUANA 66,4 0,0 1,7 0,4 12,3 3,0 0,0 16,2 100 OTRAS DROGAS 85,5 0,4 0,8 0,4 6,9 1,6 0,0 4,4 100 Accesibilidad La accesibilidad y oferta de sustancias es la otra dimensión que conjuntamente con los factores que determinan la demanda, explican la problemática del consumo de drogas. En el cuestionario, se les preguntó a los jóvenes cuan fácil les resulta conseguir determinadas sustancias ilegales. Los resultados indican que para el 45,6% de los estudiantes es fácil conseguir marihuana, para el 22,5% de ellos es fácil conseguir cocaína, para el 8,6 % es fácil conseguir pasta base, y para el 9,3% de los jóvenes es fácil conseguir éxtasis. En este sentido, el mayor consumo de marihuana, se relaciona con la mayor percepción de accesibilidad que manifiestan los jóvenes. CUADRO 40: Distribución porcentual de los estudiantes según percepción de facilidad de acceso a drogas ilegales. Año 2014. ME SERIA FACIL ME SERIA DIFICIL NO PODRIA CONSEGUIRLA NO SE SI SERIA FACIL O DIFICIL MARIHUANA COCAINA PASTA BASE EXTASIS 45,6 22,5 8,6 9,3 5,6 13,9 16,8 15,0 9,6 13,5 18,4 17,9 39,2 50,0 56,1 57,7 GRÁFICO 46: Distribución porcentual de los estudiantes según percepción de facilidad de acceso a drogas ilegales. Año 2014. Respecto a la asociación entre accesibilidad y consumo, la mayor tasa de consumo se corresponde al grupo de alumnos que considera que es fácil acceder a esas sustancias. La diferencia en la prevalencia según si la marihuana es fácil (10,6%) o difícil (0,8%) de conseguir, es de casi un 10% aproximadamente. GRÁFICO 47: Prevalencia del último año y percepción de facilidad de acceso a drogas ilegales. Año 2014. Asociación entre consumo de alcohol y tabaco, y drogas ilícitas El consumo de alcohol y tabaco en adolescentes es un factor de riesgo para el consumo de otras sustancias psicoactivas. La experiencia nacional e internacional indica que entre la población con consumo de sustancias lícitas, la probabilidad de consumo de sustancias ilícitas es mayor. En cuanto a la asociación de consumo de tabaco con el de marihuana (sustancia ilícita de mayor prevalencia) entre los estudiantes que fumaron tabaco durante el último año, el consumo de marihuana fue del 27,4%, mientras que entre los no fumadores, la tasa es del 8,22%. En cuanto a los estudiantes que tomaron alguna bebida alcohólica durante el último año, el consumo de marihuana es del 12,43%, frente al 1,62% del grupo de los que no bebieron. Cursos de prevención e información Uno de los aspectos que suele ligarse a los motivos del consumo de los adolescentes es el de la desinformación que los mismos tienen respecto de los daños que provoca el uso de drogas. El estudio indagó sobre el nivel de información que los estudiantes creen tener acerca de los daños que ocasiona el consumo, sobre si han recibido cursos de prevención en el colegio, y sobre los motivos del consumo de drogas en la gente en general. El 61,3% de los estudiantes considera que está bien informado sobre las consecuencias del consumo de drogas, más los varones (64,1%) que las mujeres (58,6%). A medida que aumenta la edad, se incrementa el porcentaje de estudiantes que se considera bien informados. CUADRO 41: Distribución porcentual de los estudiantes según percepción de la información según sexo. Año 2014. NADA INFORMADO POCO INFORMADO BIEN INFORMADO NO SE MASCULINO FEMENINO TOTAL 4,7 2,3 3,5 22,7 30,5 26,6 64,1 58,6 61,3 8,6 8,6 8,6 GRÁFICO 48: Distribución porcentual de los estudiantes según percepción de la información según sexo. Año 2014. CUADRO 42: Distribución porcentual de los estudiantes según percepción de la información según tramo de edad. Año 2014. MENOS DE 15 15-16 MAS DE 16 NADA INFORMADO 7,5 1,3 3,0 POCO INFORMADO BIEN INFORMADO NO SE 31,3 47,8 13,4 24,1 64,6 10,1 27,0 67,0 3,0 GRÁFICO 49: Distribución porcentual de los estudiantes según percepción de la información según tramo de edad. Año 2014. De acuerdo al siguiente cuadro, la información no opera como barrera frente al consumo: CUADRO 43: Prevalencia del último año por tipo de sustancia psicoactivas según nivel de información. Cantidad de casos. Año 2014. TABACO ALCOHOL INHALANTES MARIHUANA COCAINA PASTA BASE EXTASIS OTRAS DROGAS NADA INFORMADO 5,4 2,7 0,0 3,4 0,0 33,3 0,0 POCO INFORMADO 21,6 23,8 100,0 13,8 0,0 0,0 0,0 BIEN INFORMADO 67,6 65,4 0,0 82,8 100,0 66,7 100,0 0,0 0,0 100,0 NO SE TOTAL 5,4 100 8,1 100 0,0 100 0,0 100 0,0 100 0,0 100 0,0 100 0,0 100 Entre los “bien informados” se observan también los mayores consumos de alcohol (65,4%), tabaco (67,6%) y marihuana (82,2%). El 88% de los estudiantes manifiesta haber recibido una o varias veces cursos de prevención sobre el consumo de drogas. Los estudiantes de mayor edad han recibido en mayor proporción cursos de prevención probablemente por haber pasado más tiempo en el sistema educativo. CUADRO 44: Distribución porcentual de los estudiantes según recepción de cursos de prevención según sexo. Año 2014. MASCULINO FEMENINO 4,7 2,3 NO RECIBI RECIBI UNA VEZ RECIBI VARIAS NO SE 22,7 64,1 8,6 30,5 58,6 8,6 TOTAL 3,5 26,6 61,5 8,6 GRÁFICO 50: Distribución porcentual de los estudiantes según recepción de cursos de prevención según sexo. Año 2014. CUADRO 45: Distribución porcentual de los estudiantes según recepción de cursos de prevención según tramo de edad. Año 2014. MENOS DE 15 7,5 NO RECIBI RECIBI UNA VEZ RECIBI VARIAS NO SE 15-16 31,3 47,8 13,4 1,3 MAS DE 16 3,0 24,1 64,6 10,1 27,0 67,0 3,0 GRÁFICO 51: Distribución porcentual de los estudiantes según recepción de cursos de prevención según tramo de edad. Año 2014. Indagar sobre el imaginario de los estudiantes acerca de las causas del consumo de drogas, se constituye en un aspecto que contribuye a la explicación sobre su propio consumo. Los datos indican que para el 28,22% de los estudiantes, la gente consume drogas por problemas personales, 22,82% los motivos tienen que ver con diversión, el 19,5% considera que se consume por la influencia de amigos, el 13,63% por actitudes o indiferencias hacia el problema que puede ocasionar el consumo, es decir que está informado pero no le importa, y la desinformación sobre los daños es señalado como motivo de consumo para el 8,71% de los estudiantes. Las opiniones difieren según sean varones o mujeres: ellos consideran que la gente consume por motivos de diversión, mientras que ellas manifiestan en su mayoría que la gente lo hace por problemas personales. GRÁFICO 52: Distribución porcentual de los estudiantes según razones de consumo de drogas según sexo. Año 2014. En cuanto a las edades, los dos primeros grupos consideran que la causa del consumo es por tener problemas personales, mientras que los más grandes señalan que las causas están relacionadas a la diversión y el placer. El porcentaje de estudiantes que considera la desinformación como causa de consumo es menor a medida que aumenta la edad de los alumnos. GRÁFICO 53: Distribución porcentual de los estudiantes según razones de consumo de drogas según tramo de edad. Año 2014. A continuación, se muestran las tasas de consumo de los estudiantes agrupados según la opinión que tienen respecto a las causas de consumo. Para el alcohol, el mayor consumo ocurre entre los grupos de estudiantes que piensan que la gente consume porque no está informado sobre los daños que produce, tienen problemas personales y porque la mayoría de los amigos consume, estas opciones en porcentajes similares. Tanto el tabaco como la marihuana, tienen el mayor consumo dentro de los grupos que piensan que lo hacen porque les gusta y les divierte. Aunque la pregunta no haya sido dirigida a las razones del propio consumo, ésta asociación estaría indicando la razón individual al consumo. CUADRO 46: Prevalencia del último año por tipo de sustancia psicoactivas según percepción sobre las causas del consumo de drogas. Año 2014. NO ESTÁ INFORMADA TABACO ALCOHOL TRANQUILIZANTES ESTIMULANTES INHALANTES MARIHUANA COCAINA P.BASE EXTASIS OTRAS TIENE PROBLEMAS PERSONALES 10,3 44,8 0,0 0,0 0,0 0,0 0,0 0,0 0,0 3,4 15,0 43,0 0,0 0,0 0,0 3,7 0,0 0,9 0,0 0,9 LE GUSTA, LE DIVIERTE 21,7 34,1 0,7 0,0 0,7 10,9 1,4 0,0 0,0 0,0 ESTA LA INFORMADO MAYORIA PERO NO LE LO HACE IMPORTA 10,4 10,9 39,6 42,4 2,1 1,1 4,2 0,0 0,0 0,0 8,3 3,3 2,1 0,0 2,1 0,0 0,0 0,0 0,0 0,0 En cuanto a las causas del consumo de alcohol, los estudiantes consideran que la causa más frecuente es la búsqueda de diversión (47,5%), seguido de los que lo hacen porque la mayoría consume (16,10%), y un 16,10% considera que lo hacen porque a pesar de estar informados no les importa. Estos porcentajes se presentan de manera similar en ambos sexos, aunque en el primer caso la mayor proporción se corresponde con los varones, mientras que en la segunda razón (grupo de amigos que consume) son las mujeres las que mayormente lo consideran. CUADRO 47: Distribución porcentual de los estudiantes según razones de consumo de alcohol según sexo. Año 2014. NO ESTA INFORMADA DE LOS DAÑOS TIENE PROBLEMAS PERSONALES LE GUSTA LE DIVIERTE LE AYUDA A SENTIRSE DESINHIBIDO ESTA INFORMADO PERO NO LE IMPORTA POR QUE LA MAYORIA CONSUME NO SE MASCULINO FEMENINO 3,2 5,6 8,1 8,1 53,2 41,9 8,9 6,5 5,6 11,3 14,5 17,7 6,5 8,1 TOTAL 4,4 8,1 47,5 7,7 8,45 16,1 7,3 NO SE 15,4 30,8 0,0 3,8 0,0 3,8 0,0 3,8 3,8 3,8 Para los estudiantes de los tres grupos de edades, la primera causa es la búsqueda de diversión. Esta proporción aumenta a medida que aumenta las edades. Los más chicos señalan en segunda instancia, el tener problemas personales (19,4%), el grupo entre 15 y 16 años porque la mayoría de los amigos consume (22,1%), y por último, los de 17 años y más, indican que los ayuda a sentirse más desinhibidos (15,5%). CUADRO 48: Distribución porcentual de los estudiantes según razones de consumo de alcohol según tramo de edad. Año 2014. NO ESTA INFORMADA DE LOS DAÑOS TIENE PROBLEMAS PERSONALES LE GUSTA LE DIVIERTE LE AYUDA A SENTIRSE DESINHIBIDO ESTA INFORMADO PERO NO LE IMPORTA POR QUE LA MAYORIA CONSUME NO SE MENOS DE 15 5,6 19,4 37,5 2,8 2,8 16,7 15,3 15-16 MAS DE 16 3,9 4,1 5,2 2,1 48,1 58,8 2,6 15,5 14,3 8,2 22,1 9,3 3,9 2,1 Considerando la relación entre la percepción acerca de las causas del consumo y el propio consumo, se puede observar que la mayor prevalencia de mes se da entre quienes piensan que la gente consume alcohol para divertirse, o porque les gusta y le da placer. En este grupo también se encuentran los que tomaron más de la cuenta y se emborracharon en el último mes, y los que consumieron cinco tragos o más en una misma ocasión. También representan prevalencias de mes de alcohol muy elevadas y se ubican en porcentajes altos dentro de los indicadores de abuso, aquellos que piensan que la mayoría de sus amigos consume. CUADRO 49: Prevalencia del último mes de alcohol y porcentaje de abuso según percepción sobre las causas de consumo de alcohol. Año 2014. PREVALENCIA PREVALENTES DE DE MES MES QUE TOMARON MAS DE LA CUENTA Y SE EMBORRACHARON EL PREVALENTES DE MES QUE TOMARON 5 O MAS TRAGOS EN UNA MISMA OCASIÓN NO ESTA INFORMADA SOBRE LOS DAÑOS QUE PRODUCE PORQUE LA ESTA MAYORIA LE GUSTA, LE LE AYUDA A INFORMADA DE SUS DIVIERTE, LE SENTIRSE PERO NO LE AMIGOS DA PLACER DESHINIBIDO IMPORTA CONSUME TIENE PROBLEMAS PERSONALES 2,0 3,2 33,9 5,2 3,6 10,9 2,4 3,2 5,2 26,6 5,6 7,3 10,5 6,5 2,8 6,9 33,1 5,6 6,9 12,5 6,5 NO SE La encuesta indagó sobre las causas de consumo de tabaco según la opinión de los estudiantes. Los jóvenes en general eligen en primer lugar la búsqueda de diversión y placer. Los varones optan en segundo lugar por el desinterés y el hecho de que la mayoría de sus amigos consumen. Las mujeres en cambio, señalan con más frecuencia el desinterés y luego la diversión. CUADRO 50: Distribución porcentual de los estudiantes según razones de consumo de tabaco según sexo. Año 2014. NO ESTA INFORMADA TIENE PROBLEMAS PERSONALES LE GUSTA, LE DIVIERTE ESTA INFORMADA PERO NO LE IMPORTA LA MAYORIA DEL GRUPO CONSUME NO SE MASCULINO FEMENINO 3,5 10,3 10,5 15,5 28,9 23,3 23,7 23,7 9,6 24,1 16,4 10,3 TOTAL 6,9 13 26,1 23,9 20 9,95 Para los estudiantes de acuerdo a los grupos de edades, la primera causa del consumo de tabaco en los jóvenes menores de 16 años es la diversión y la búsqueda de placer, seguido por el desinterés. En los mayores de 16 años, la primera razón es el desinterés, seguido por la diversión. CUADRO 51: Distribución porcentual de los estudiantes según razones de consumo de tabaco según edad. Año 2014. MENOS DE 15 9,7 NO ESTA INFORMADA 15-16 MAS DE 16 7,1 3,4 TIENE PROBLEMAS PERSONALES LE GUSTA, LE DIVIERTE 16,1 24,2 14,3 27,1 11,4 26,1 ESTA INFORMADA PERO NO LE IMPORTA LA MAYORIA DEL GRUPO CONSUME NO SE 17,7 16,1 16,1 22,9 24,3 4,3 29,5 20,5 9,1 Las personas que consideran que la gente consume tabaco porque les gusta, les divierte y les da placer son las que presenta mayor prevalencia de mes, es decir las que fuman actualmente en mayor proporción. GRÁFICO 54: Prevalencia del último mes de consumo de tabaco según razones de consumo de tabaco. Año 2014. COMPARACIÓN CON DATOS PROVINCIALES A continuación, y a modo de comparación de los datos locales desarrollados en la presente Encuesta con los obtenidos de la Provincia de Córdoba en la V Encuesta a Estudiantes de Enseñanza Media sobre consumo de sustancias psicoactivas y factores de riesgo y protección asociados a dichos consumos del Observatorio Argentino de Drogas de SEDRONAR, se puede mencionar: De acuerdo a los consumos realizados en la Provincia de Córdoba correspondientes a aquellas sustancias que han sido consumidas alguna vez en la vida, podemos observar que el consumo local se corresponde al registrado al nivel provincial siendo alcohol, tabaco y marihuana. CUADRO 52: Prevalencia de vida por tipo de sustancias psicoactivas según sexo e intervalos de confianza del 95%. Población escolar nivel medio. Córdoba. Año 2011 PREVALENCIA DE VIDA SUSTANCIAS TABACO ALCOHOL SOLVENTES O INHALANTES MARIHUANA PASTA BASE – PACO COCAÍNA HEROÍNA OPIO MORFINA ALUCINÓGENOS HACHÍS CRACK ÉXTASIS KETAMINA POPPER ANFET./METANFETAMINA OTRAS DROGAS ALGUNAS DROGAS ILÍCITAS VARÓN MUJER TOTAL 49,8 50,5 50,3 82,6 82,5 82,6 6,4 2,7 4,4 20,5 11,1 15,6 2 0,8 1,4 5,7 3,1 4,3 0,9 0,3 0,6 0,8 0,2 0,5 1,5 0,3 0,9 2 0,8 1,4 1,5 0,3 0,9 1 0,3 0,7 2,4 0,7 1,5 0,9 0,1 0,5 1,3 0,4 0,9 1,3 0,8 1,1 4,5 3,2 3,8 23,9 15,4 19,5 INTERVALO DE CONFIANZA 48,5 52,2 81,2 84 3,7 5,3 14,2 17,2 1 1,9 3,7 5,1 0,4 0,9 0,3 0,9 0,5 1,5 1 2 0,5 1,4 0,4 1,1 1,1 2,1 0,3 1 0,5 1,4 0,7 1,7 3 4,9 17,9 21,2 CUADRO 53: Prevalencia de año por tipo de sustancias psicoactivas según sexo e intervalos de confianza del 95%. Población escolar nivel medio. Córdoba. Año 2011 PREVALENCIA DE AÑO SUSTANCIAS TABACO ALCOHOL SOLVENTES O INHALANTES MARIHUANA PASTA BASE – PACO COCAÍNA ÉXTASIS OTRAS DROGAS ALGUNAS DROGAS ILÍCITAS VARÓN MUJER TOTAL 34,2 36,4 35,5 74,7 73,7 74,2 3,6 1,6 2,5 15,6 8,5 11,8 0,8 0,4 0,6 3,1 1,4 2,2 1,2 0,3 0,7 3,9 3 3,4 17,9 11,9 14,7 INTERVALO DE CONFIANZA 33,7 37,4 72,5 75,8 2 3,2 10,5 13,2 0,4 1,1 1,8 2,7 0,5 1,1 2,6 4,5 13,3 16,3 CUADRO 54: Prevalencia de mes por tipo de sustancias psicoactivas según sexo e intervalos de confianza del 95%. Población escolar nivel medio. Córdoba. Año 2011 PREVALENCIA DE MES SUSTANCIAS TABACO ALCOHOL SOLVENTES O INHALANTES MARIHUANA PASTA BASE – PACO COCAÍNA ÉXTASIS OTRAS DROGAS ALGUNAS DROGAS ILÍCITAS VARÓN MUJER TOTAL 24,1 25,9 25,2 63,3 61,6 62,6 1,5 0,8 1,1 9,8 4,4 6,9 0,6 0,2 0,4 1,4 0,8 1,1 0,6 0,2 0,4 2,5 2,2 2,3 11 7,1 9 INTERVALO DE CONFIANZA 23,5 27 60,8 64,4 0,8 1,6 6 8,1 0,2 0,9 0,8 1,4 0,3 0,6 1,6 3,3 7,8 10,3 Esta misma tendencia se presenta en las prevalencias de vida, año y mes, es decir que tanto el alcohol, el tabaco y la marihuana fueron las sustancias más consumidas en el último año y último mes anterior a la encuesta, en la provincia de Córdoba. A nivel local, se presentan como más relevantes los consumos de las mismas sustancias, con breves variaciones según los sexos. A nivel provincial, el consumo de los hombres respecto a las mujeres, es similar aunque hay un mayor porcentaje de varones que consume marihuana en cada una de las prevalencias (vida, año y mes). CUADRO 55: Prevalencia de vida por tipo de sustancias psicoactivas según edad e intervalos de confianza del 95%. Población escolar nivel medio. Córdoba. Año 2011 SUSTANCIAS TABACO ALCOHOL SOLVENTES O INHALANTES MARIHUANA PASTA BASE - PACO COCAÍNA HEROÍNA OPIO MORFINA ALUCINÓGENOS HACHÍS CRACK ÉXTASIS KETAMINA POPPER ANFET./METANFETAMINA OTRAS DROGAS ALGUNAS DROGAS ILÍCITAS PREVALENCIA DE VIDA 14 O MENOS 15-16 36,6 53,1 65,6 88,6 4,8 4,5 7,5 16,7 1,3 1,2 2,4 4,8 0,8 0,5 0,6 0,3 1,4 0,6 1,1 1,3 1,3 0,5 1,1 0,4 1,2 1,4 1 0,1 1,1 0,4 0,6 1,1 2,3 4,9 12,1 20,6 17 O MAS TOTAL 62,8 50,3 94,5 82,6 3,6 4,4 23,1 15,6 1,5 1,4 5,7 4,3 0,4 0,6 0,5 0,5 0,7 0,9 2 1,4 0,8 0,9 0,5 0,7 1,8 1,5 0,4 0,5 1 0,9 1,6 1,1 4,1 3,8 25,7 19,5 CUADRO 56: Prevalencia de año por tipo de sustancias psicoactivas según edad e intervalos de confianza del 95%. Población escolar nivel medio. Córdoba. Año 2011 SUSTANCIAS TABACO ALCOHOL SOLVENTES O INHALANTES MARIHUANA PASTA BASE - PACO COCAÍNA ÉXTASIS OTRAS DROGAS ALGUNAS DROGAS ILÍCITAS PREVALENCIA DE AÑO 14 O MENOS 15-16 24,9 39,4 52,2 82,2 3 2,5 4,7 13 0,6 0,4 0,6 2,4 0,3 0,8 1,9 4,7 7,8 16,1 17 O MAS TOTAL 43,2 35,5 89,3 74,2 2,1 2,5 18,3 11,8 1 0,6 3,8 2,2 1,2 0,7 3,4 3,4 20,7 14,7 CUADRO 57: Prevalencia de mes por tipo de sustancias psicoactivas según edad e intervalos de confianza del 95%. Población escolar nivel medio. Córdoba. Año 2011 SUSTANCIAS TABACO ALCOHOL SOLVENTES O INHALANTES MARIHUANA PASTA BASE - PACO COCAÍNA ÉXTASIS OTRAS DROGAS ALGUNAS DROGAS ILÍCITAS PREVALENCIA DE MES 14 O MENOS 15-16 16,4 27,5 39,3 71,6 1,2 1 2,5 7 0,5 0,1 0,3 1,1 0,2 0,4 1,5 3,4 4 10,1 17 O MAS TOTAL 32,2 25,2 78,1 62,6 1,3 1,1 12 6,9 0,8 0,4 1,9 1,1 0,6 0,4 2,1 2,3 13,4 9 Por otra parte, si consideramos los consumos de acuerdo a las edades de los estudiantes, podemos observar que tanto a nivel local como provincial se presenta un incremento del consumo de todas las sustancias a medida que aumentan las edades. CONCLUSIONES Hoy, es fundamental considerar a la investigación en conductas adictivas como una condición necesaria para el diseño de políticas públicas en adicciones. Teniendo en cuenta las variables consideradas en el presente estudio que refieren a las experimentaciones con sustancias y consumos actuales, destacamos la prevalencia del consumo de alcohol por sobre el resto de las sustancias. Cabe mencionar que el consumo de marihuana ha adquirido, en general, mayor relevancia en la actualidad; debido en su mayoría a la naturalización de su uso relacionado a una manera habitual de socialización, y la circulación de determinados mitos y/o creencias respecto a su inocuidad (“es una droga natural”, “tiene efectos terapéuticos”, “es más saludable que fumar tabaco”, “no provoca adicción”, entre otros)4, a partir de las escasas advertencias sobre los riesgos de su consumo. Sin embargo, más allá de todas las sustancias que se consumen, la droga de consumo prioritario por los jóvenes es el alcohol, especialmente en la nocturnidad. “El concepto de droga de inicio” es usado para definir aquellas sustancias que funcionan como puerta de ingreso a experiencias de consumo de sustancias psicoactivas, tienen al alcohol y al tabaco como sus más claros representantes. Esta caracterización no alcanza para entender el papel que el alcohol tiene en la cultura actual. Así, esta sustancia representa fundamentalmente una droga de “iniciación” ya que su consumo implica para adolescentes y jóvenes, ingresar al mundo de la independencia, del disfrute del aquí y el ahora, y de la satisfacción inmediata. En cuanto a la asociación de consumo de tabaco con el de marihuana (sustancia ilícita de mayor prevalencia) entre los estudiantes que fumaron tabaco durante el último año, el 4 Mitos sobre consumo de marihuana trabajados en intervenciones preventivas con jóvenes de escuelas del nivel medio de la ciudad de Marcos Juárez (2013/2014) consumo de marihuana fue del 27,4%, mientras que entre los no fumadores, la tasa es del 8,22%. En cuanto a los estudiantes que tomaron alguna bebida alcohólica durante el último año, el consumo de marihuana es del 12,43%, frente al 1,62% del grupo de los que no bebieron. Bajo una mirada cultural, el alcohol es una sustancia que acompaña un ritual social complejo con sentidos y significados nuevos. Esto posibilita identificar la complejidad de un problema que no solo está construida por adolescentes, sino también validado por los medios de comunicación, la publicidad, el negocio de la noche en manos de adultos, y por supuesto la cultura juvenil. Esto implica diferentes responsabilidades. Nos desentrampa de una mirada ingenua y tradicional sobre el problema de las drogas, ya no implica poner foco sobre los daños que estas sustancias provocan en el sistema nervioso y las propuestas en las que solo se imparte información sobre las sustancias y sus efectos. Si bien creemos que no es posible analizar el consumo de sustancias psicoactivas por parte de adolescentes, sin considerar estas conductas como parte de una cultura de consumo que las abarca y propicia. Tampoco se deben soslayar aspectos tales como: tolerancia, accesibilidad y permisividad por parte de los roles adultos. El relevamiento y análisis de los datos lleva a considerar la problemática del rol adulto en la cuestión del consumo abusivo de los adolescentes. Esta consideración si bien se focaliza en los padres principalmente, no deja de lado otros roles adultos en donde entran profesores y autoridades escolares, comerciantes, adultos en general e incluso el estado. Analizar la mirada adolescente hacia el adulto desde la problemática específica del consumo abusivo de alcohol, implica entrar en el terreno de la tolerancia social que existe respecto al tema. La permisividad y la accesibilidad, son dos dimensiones que se desprenden de aquella y nos permiten abordarla desde un nivel de mayor concreción. Cuando hablamos de permisividad apuntamos a un nivel micro social y nos estamos refiriendo a la actitud de los padres respecto a la potestad de ejercer la autoridad y reglamentar el consumo de alcohol en sus hijos. La casa propia o de un amigo, resulta el espacio mayoritariamente elegido para realizar consumos excesivos de alcohol; en tanto “casa libre de adultos” lo cual se efectiviza por ausencia u omisión (padres que no salen de sus cuartos a ver qué está pasando, en definitiva que “no molestan”, “no se meten”). Esta condición de “casa libre” supone por lo general niveles más o menos altos de tolerancia o de permisividad por parte de los adultos en el consumo de alcohol. Entre quienes presentan menor permisividad están los padres que lo permiten como “mal menor” o como una forma de poder controlar más a los chicos y en extremo más permisivo aquellos padres que, desde una actitud de complicidad o de comodidad, “dejan el campo libre” ya sea saliendo o quedándose en la casa pero “sin molestar”. La accesibilidad tiene que ver con la facilidad o no que los adolescentes tienen y perciben para consumir alcohol y puede situarse en planos micro y macro sociales: abarca a los padres, al comerciante, al estado y a la sociedad. En las instancias de accesibilidad que los adolescentes perciben, se focalizan en el plano del mercado principalmente abarcando a los grandes supermercados, a quioscos y pequeños comercios y a nuevas modalidades como deliverys de bebidas alcohólicas, y hasta comercios “clandestinos” que se conocen por boca a boca y funcionan en casas de familia. El grupo de pares constituye el ámbito de contención afectiva y representa espacios de autonomía y prácticas de los primeros pasos de independencia. Y es donde comienzan a consolidarse la elección de los primeros consumos culturales, que terminarán definiendo el lugar de los otros y el propio en el espacio social. El 52,6% de los estudiantes manifestaron que todos o casi todos sus amigos consumen regularmente alcohol, es decir todos los fines de semana o más; las tasas de consumo actual o del último mes, según la tenencia de amigos que consumen alcohol regularmente, indican que el 54,8% de los jóvenes que consumen alcohol son los que tienen todos o casi todos su grupo de amigos que consumen alcohol de forma regular. Es decir, que a medida que es mayor el entorno que consume, mayor es la proporción de alumnos que toman alcohol actualmente. La percepción del riesgo sobre una sustancia es importante, dado que sobre aquellas en las que las personas tienen una mayor percepción del riesgo, tienen un menor consumo. Esta percepción varía claramente de una droga a otra, como son igualmente distintos los consumos en función a cada una de ellas. Algunos autores han mostrado cómo el grado de riesgo percibido por los jóvenes sobre las distintas drogas influía en el consumo de las mismas; esto a mayor riesgo percibido sobre una droga, menor consumo y a menor riesgo mayor consumo (Bachman, Johnston, O´Malley y Humphrey. 1988). En el estudio se identificó esta percepción en función de diferentes tipos de consumo, ya sea ocasional, moderado o frecuente; la mayoría consideró al tabaco y al alcohol de riesgo leve o moderado, cuando menor es su consumo; y riesgoso, cuando éste aumenta. Esto puede deberse a que la publicidad de las drogas legales va orientada claramente a que los consumidores incrementen el consumo, de tabaco y/o alcohol o, si no lo consumen, se hagan consumidores. Para el niño adolescente que ve como a su alrededor las personas consumen drogas legales con total libertad, que las ven anunciadas en los diferentes medios de comunicación, la primera idea que extrae de ello es que su consumo no trae riesgos. De ahí, que la percepción del riesgo que tienen los adolescentes como el resto de la población sobre el alcohol, sea baja. Para la prevención del consumo de sustancias, éste es un tema central. La prevención se basa principalmente en las drogas legales; hoy casi todos los programas preventivos tienen un componente orientado al análisis de la publicidad del alcohol y a cómo hacerle frente a sus mensajes y analizar diferentes creencias y/o mitos sobre dicha sustancia. A la hora de pensar la prevención del consumo problemático de drogas, son varios los ámbitos en donde podemos llevar a cabo nuestras acciones. El educativo, junto con el ámbito familiar, quizás sean uno de los más idóneos por contar con potencialidades y/o fortalezas que lo caracterizan, garantizando cierto éxito en las intervenciones que se realicen. La prevención del consumo problemático de drogas en la escuela, se incluye dentro de las acciones promotoras de salud realizadas desde el ámbito educativo. Según Graciela Touzé “la importancia de la educación como medio y estrategia para lograr las metas de salud para todos, es inigualable. Considerando que su objetivo fundamental es el desarrollo del ser humano, la educación se propone una profunda transformación de la sociedad”. Por otra parte, actúa en el nivel de la vida cotidiana, incluyendo a un enorme número de niños y jóvenes, y sus familias así como también otros actores como directivos, docentes, cooperadoras, y miembros de gabinetes pedagógicos, que desde un modelo participativo permitan que sea la misma escuela la que se asuma como protagonista de la prevención, facilitando el diseño de un programa preventivo integrado a la vida escolar. BIBLIOGRAFÍA Arizaga, Cecilia & otros. Observatorio Argentino de Drogas SEDRONAR. El consumo de drogas como consumo cultural. La problemática del consumo de sustancias psicoactivas en adolescentes desde la cultura del consumo. Becoña Iglesias, E. (2002).Bases científicas que sustentan los programas de prevención de drogas. Universidad de Santiago de Compostela. Becoña Iglesias, E. Bases teóricas que sustentan los programas de prevención de drogas. Del Zotto Libonatti, P. (2010). Características del consumo de alcohol en atracón (bringe drinking) en los jóvenes de Córdoba – Argentina durante la realización de La Previa. Tesis doctoral. Universidad de Valencia, España. Mansilla, J. C., Miguez, H., & Fernández, R. (2010). Estudio exploratorio sobre el imaginario de la nocturnidad, la alcoholización y la diversión juvenil. SEPADIC; Universidad Nacional de Córdoba. Miguez, H. (2003) Epidemiologia de la alcoholización en la Argentina. Revista Argentina de psiquiatría Vertex. Suplemento de Epidemiologia en Salud Mental. Miguez, H., & CONICET. (2010). Sobre la subjetividad para el consumo. www.hugomiguez.com.ar. Observatorio Argentino de Drogas SEDRONAR. (2005). Imaginarios sociales y prácticas de consumo de alcohol en adolescentes de escuelas de nivel medio. Observatorio Argentino de Drogas SEDRONAR. (2010). El consumo de drogas como consumo cultural. La problemática del consumo de sustancias psicoactivas en adolescentes desde la cultura del consumo. Observatorio Argentino de Drogas SEDRONAR. (2010). Quinta Encuesta Nacional a Estudiantes de Enseñanza Media 2009. Informe Final de Resultados. Observatorio Argentino de Drogas SEDRONAR. (2010). Quinta Encuesta Nacional a Estudiantes de Enseñanza Media 2009. Informe Final Provincia de Córdoba. SEPADIC Gobierno de Córdoba. (2010). Hacia un plan Municipal sobe Adicciones. Córdoba. Touzé, Graciela. (2010). Prevención del consumo problemático de drogas: Un enfoque educativo. Ministerio de Educación de la Nación.
© Copyright 2024