El Socialista - Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes

EL SOCIALISTA
O RGANO
DE
LA
FEDERACION
Redacción y Admón.
NUMERO 51
16, Rue Montaigne.
N O R T E AFRICANA
Y
PORTAVOZ
ARGEL — SABADO 9 DE FEBRERO DE 1946
;
EDITORIAL
LA
U. G .
T
PRECIO: 5 FRANCO
Los -reyes árabes
La celada monárquica
De dia en día, se dibuja con trazos mas fir­
mes la comunidad de la fingida oposición mo­
nárquica y de la dictadura franquista. No es ya
en los antecedentes históricos motivadores y ma­
nifiestos de nuestra guerra civil, tampoco en el
relevante predominio de los políticos monárqui­
cos y fuerzas armadas de la misma disciplina
ideológica en el movimiento militar-falangista, ni
siquiera çn la reiterada oferta que, de su fornida
espada, Don Juan hiciera al « Qaudillo », para
ayudarle en la tarea de asesinar españoles, donde
buscaremos los entresijos de esa comunidad. Es
inútil aparentar antagonismos ni aún diferencias,
cuando forman juntos uha muralla que intenta de­
fender la misma situación y los «mismos intereses.
Ahora que Franco se ve abocado a la desapa­
rición, el mozalbete que ya quiso ayudarle, en­
cuadrado en las filas requetés, viene en socorro
y para continuar el estado de cosas, cuya crea­
ción, el otro presidiera. Si queremos comprobar
tan lógica y consecuente actitud del pretendiente,
basta señalar los nombres de los personajes que
hoy reciben en Lisboa al aspirante a un trono,
que los españoles no quieren, y de cuyas trabas
se deshicieron en gesto de soberana voluntad.
Desde el propio hermano del «Caudillo», emba­
jador en Lisboa, y el Duque de Alba, hasta el
último de las aristócratas y palaciegos que ya fo r­
man su «corte», todos son los más fieles servido­
res de la «cruzada salvadora». Franco los consi­
dera como a sus más leales y no estorbará el me­
nor de sus movimientos, p'jes son pasos conveni­
dos y estudiados previ." .«ente por sus consejeros
políticos y por la d i.'.m a cia vaticanista.
Es sintomática la libertad de que gozan, en sus
manifestaciones callejeras y en su propaganda
abierta en favor de la restauración, esos grupitos de «falangistas arrepentidos». Contrastan
esas facilidades con el recrudecimiento de la per­
secución a los verdaderos demócratas, a quienes
se sigue asesinando impune y cobardemente, y
contra los que se levantan monstruosos procesos,
como el que se prepara para castigar las activi­
dades clandestinas de un nutrido grupo de socia­
listas para los que el fiscal reclama ocho penas
de muerte y quince cadenas perpetuas.
Con la restauración monárquica, se pretende
esquivar la clamorosa protesta y la hostilidad que
de todos los rincones del mundo se elevan contra
la dictadura que se apoyó en el hoy vencido fas­
cismo europeo. Se quieren garantizar los privile­
gios que esa dictadura sostiene, dando la impre­
sión a la opinión extranjera y a los mismos espa­
ñoles de que se cambia de política y de que el
pueblo recupera sus derechos de expresión y au­
todeterminación.
El Gobierno republicano en el exilio gana posi­
ciones valiosísimas que arruinan la ya precaria si­
tuación del franquismo en el dominio internacio­
nal. Ese Gobierno legitimo recoge las esperan­
zas y las energías de la nación anhelante de liber­
tad y presta a sacudir el yugo militar-falangista
que la oprime. Cada dia que pasa se afirma más
la necesidad de la restauración republicana, sola
capaz de encauzar democráticamente los proble­
mas políticos y sociales que acucian a las clases
laboriosas españolas- Y cada dia s« acrecientan
las posibilidades de esta causa republicana. He
ahí, pues, el peligro, y a paralizar su progreso, e
incluso evitarlo, se encaminan los esfuerzos de la
reacción española. La reacción que no tuyo in­
conveniente en pedir ayuda a las fuerzas milita­
res extranjeras, para garantizar su predominio en
perjuicio de la nación, hoy adopta un recurso de
aparente oposición a tan alevosa conducta y si­
mula repudiar el sistema político de ella deriva­
do. Es un artificio más que a nadie engana, por
demasiado conocidos los actores y ser muy cla­
ros los designios.
La insistencia que los socialistas hemos puesto
en mantener la legitimidad republicana, tiene aho­
ra una razón más de su oportunidad política. Si
esa legitimidad republicana, si esa * representa­
ción de la voluntad española no tuviera cuerpo,
es decir, si las instituciones y Gobierno republi­
canos no estuvieran en pie y a la cabeza de la
lucha libertadora; difícil o imposible seria evitar
la celada monárquica que hoy se tiende al pueblo
español. Esto no quiere decir que peligro no haya,
pero tenemos un instrumento y unas armas para
combatirlo, a la par que unas perspectivas fecun­
das en nuestra lucha por el triunfo de la libertad
y bienestar de nuestro pueblo, al enfrentar la Re­
pública democrática a toda suerte de dictaduras
y tiranías
por RODOLFO
El rey Ibn Soud de Arabia visitó
recienteme.nte al soberano de Egipto,
concertando, según se di¡o, las bases
de una política común de la Liga
árabe.
La simpatía que hoy gozan
los pueblos colonizados o mediatiza­
dos por potencias mayores, hace con­
siderar a menudo le Liga árabe co­
mo una sociedad anticolonialiste, y
por consiguiente, digna de las sim­
patías y apoyo de los amigos de la
íibertad. Hay en ello un error de
apreciación
que conviene aclarar.
Aun viviendo gran parte de los paí­
ses árabes bajo la tutela de poten­
cias mayores, la expresión política
de esos Estados ¿rabas no se iden­
tifica precisamente con los anhelos
democráticos. Su ambiente cultural,
determinado por la religión mahome­
tana y el uso común de una lengua
literaria muy antigua, se encuentra en
la raíz del nacionalismo panárabe, cu­
ya expresión popular es la animosi­
dad contra «lo europeo», y cuya ver­
dadera función histórica es transfor­
mar las capas dirigentes tradiciona­
les de la sociedad ¿rabe, de feuda­
les en capitalistas.
El rey Ibn Soud hizo en su desér­
tico país el papel del príncipe m¿s
fuerte que al final de la Edad Me­
dia impuso su poder sobre sus ri­
vales, estableciendo asi el absolutis­
mo real. Bajo el empuje de Abdul
Asis Ibn Soud, Arabia dejó de ser
una multitud de reinos nómadas o
sedentarios. No existe hoy m¿s que
un póder, el del rey absoluto de to ­
da Arabia, que se transforma, poco
a poco, en verdadero Estado. La Edad
Media se conservó en Arabia mien­
tras no hubo contacto con el mun­
do exterior, con el mundo Capitalis­
ta. La existencia da importantes po­
zos de petróleo puso este país, con­
servado durante tantos siglos en su
antiguo estado ’ sotial y político, en
cbntacto con et} mundo capitalista.
Los ¿rabes de Arabia no sabían, ni
saben, utilizar las riquezas de su subsuelo. Pero Abdul Asis Ibn Soud,
guerrero, diplomático y negociante, a
la vez, supo fomentar su poder so­
bre la explotación de los pozos por
unas compañías americanas.
Los derechos de concesión y los
medios de combate moderno, com­
prados con los ingresos, forman par­
te de su poder real y garantizan a
las compañías explotadoras un míni­
mo de orden público, necesario al
trabajo de los pozos y a la seguri­
dad de los conductos del liquido pre­
cioso. Por otra perte, sin embargo,
Nota oficiosa
El terror azul .
contra los socialistas
del P le n o d el P .S .O .E .
Id e n tifica d o s to ta lm e n te
con la c la n d e s tin id a d
_ « El Pleno examinó la situa­
ción política nacional e inter­
nacional con relación al proble­
ma español. Después _ de com­
probar con qran satisfacción
que las posiciones adoptadas en
España por nuestros compañe­
ros coinciden en absoluto con
Jas que viene sosteniendo el
Partido en Francia, se acordó,
por unanimidad, sequír apoyan­
do al Gobierno a fin de que
pueda realizar el proqrama que
se ha trazado para recuperar
el territorio^ nacional y la Re­
pública, ratificando las anterio­
res resoluciones del_ Pleno y de
la Comisión Eiecutiva de con­
tinuar luchando, de acuerdo con
los compañeros de España, pa­
ra acortar los sufrimientos del
pueblo español y anticipar el
restablecimiento de la leqalidad
republicana.
El Pleno, por último, escu­
DE
chó con profunda emoción los
informes, que de la situación en
nuestro país proporcionó la Deleqación española ; conoció que
durante el próximo mes de fe­
brero se celebrará la vista cau­
sa instruida contra varios com­
pañeros nuestros, acusados de
haber reconstituido en la _ clan­
destinidad el Partido Socialista
Obrero Español, causa en la que
se piden O C H O PENAS DE
MUERTE ; rindió un fervoroso
homenaje a quienes allí luchan
contra la cruel tiranía franauista,
que tantas vidas ha costado ya,
y acordó realizar cuanto esté al
alcance del Partido para arran­
car de las qarras del verduqo las
vidas de esos ocho compañe­
ros. Ni un crimen mas ! Ni una
qota de sanqre mas ! »
129 de enero de 1946)
Siquiendo su _labor de exter­
minio y represión de todo jo
que siqnifica movimiento hacia
la libertad, los .tribunales fran­
quistas se disponen a decretar
nuevos crímenes. Se anuncia, en
Madrid, para dentro de unos
dias, la vista de la causa contra
un numeroso qrupo de compa­
ñeros acusados de la reorgani­
zación clandestina de nuestro
Partido Socialista. El fiscal pide
la pena de muerte para ocho
de ellos : Gómez Eqido, Sócra­
tes Gómez, Antonio San Miguel,
José Díaz Méndez, Enrique Me­
lero, Vicente Valls, Francisco de
Toro y ■Mario Fernández, a
quienes se considera como d¡riqentes nacionales. _En la misma
causa se piden quince cadenas
perpetuas contra otros tantos
compañeros Inculpados como
dirigentes provinciales, y otras
cuatro penas de quince anos a
supuestos enlaces.
Franco no está todavía ahito
de sanqre y continua su maca­
bra tarea. Debemos salvar esas
vidas de nuestros meiores com­
pañeros, arrancarlas de las ma­
nos del verdugo. Todos los tra ­
bajadores, todos los hombres
honrados, deben levantar su pro­
testa y acrecentar su esfuerzo
para evitar ese nuevo crimen.
Que la protesta universal pa­
ralice los designios sangrientos
del franquismo, y que la acción
vindicadora de los trabajadores
españoles, tenqa en cuenta a ios
criminales-
Para solucionar la crisis
de Trabajo
Madrid. - En los medios falangistas
se asegura que el problema del pa­
ro está en vies de solución. En efec­
to, según una disposición guberna­
mental, todos los hombres que se en­
cuentran en situación de paro for­
zoso, deberán ser encuadrados en ba­
tallones de trabajadores que se de­
dicarán a trabajos de utilidad públi­
ca. Estos batallones serán alojados
en campos especiales, sometidos a
vna disciplina «paternal».
Las estadísticas aseguran que, de
este modo, el número d » parados pa­
sara de medio millón a 100.000.
la sensibilidad
política que no per­
mite, como en los tiempos anterio­
res del imperialismo, intervenciones
militares en tieras lejanas, facilita
al rey Ibn Soud una situación políti­
ca mucho más independiente que fué
la de otros sultanes y reyes de paí­
ses atrasados en el siglo último.
Muy distinta es !a situación en
Egipto, cuyo ingrseo en la órbita de
la economía capitalista
se efectuó
haca casi cien anos y con la inme^
diata asimilación de las capas diri­
gentes del país al nuevo sistemo de
enriquecimiento. Además, los riegos
del Nilo hicieron del Egipto un país
productor de algodón de primera
importancia. Su unificación político
es antigúa y sus contactos con el
múndo occidental provocaron pronto
el establecimiento
de un sistema
constitucional parlamentario que le
dá apariencia de un Estado demo­
crático. Sólo es en apariencia, por­
que la constitución de Egipto facili­
ta. la representación
parlamentaria
solamente a las capas superiores de
su estructura social. El Parlamento,
el aparato administrativo del Estado y el poder político pertenecen a los
terratenientes. Al lado de irnos lati­
fundistas, propietarios de la casi to­
talidad
de las tierras
cultivables,
existe la capa de los intelectuales en
busca de empleo, una burguesía co­
mercial reducida, los funcionarios del
Estado y la masa del proletariado,
agrícola e industrial.
{
¡Este es el bajo fondo histórico y socidl donde la política de le Lige - r
árabe actuá. Su objeto es ganar la
meyor independencia frente a fódá *
ingerencia extranjera que pueda li­
mitar las ganancias de la dase ço- minadora de estos países ; y fortale­
cer también su poder estataí median­
te lo expansión territorial. Así, pues,
el Egipto reivindica ahora Ur’ evacua­
ción de su territorio de la* tropas
británicas, la anexión de unos te rri­
torios de la Cirenáica italiana y del
Sudán y hasta una base marítima en
el
mar
Rojo.
Los
dos
reyes
se
opusieron,
en
su
decía- ración común después de . la en:
trovista, a la inmigración judía’ en
Palestina, declarada «país árabe», y
cuyo carácter nacional no se debe­
ría alterar por la inmigración judía.
Esta posición es una posición de ayu­
da al emir de Transjordania, que, por
su parte, reivindica la fusión dé su
reino con Palestina. Las desgraciadas
acciones terroristas de los nacionalis­
tas, cuyas reivindicaciones de un Es­
tado judio en tierra árabe son la ba­
se del recrudecimiento de la excita­
ción nacionalista por ambas partes
de la población palestina, han posi­
bilitado una posición política más
bien favorable a la Liga Arabe, órñ
gano del nuevo capitalismo en el Me­
dio Oriente.
El Partido Laborista condena el
réqimen de Franco
Londres. — El Comité Ejecu­
tivo del Partido Laborista ha
acordado una resolución, en la
que dá su aprobación a los tér­
minos empleados por el Sr. Bevin para condenar el régimen
establecido en España.
Esta resolución expresa la
esperanza de que el Gobierno
británico haga cuanto esté a su
alcance de acuerdo con los otros
Gobiernos aliados en el sentido
de favorecer el restablecimien­
to en España del régimen demo­
crático derribado por las tuer­
zas conjuntas de Hitler y Musso­
lini.
El Comjté Ejecutivo del Par­
tido Laborista ha afirmado su
convencimiento de que la su­
pervivencia de un Gobierno
fascista en Europa o en cual­
quier otro sitio del mundo
constituye en si una amenaza
permanente a la libertad y a
la paz. — FEBUS
D « T o u lo u si
I I Comité Nacional del Partido
Durante los días 27, 28 y 29 del gestión, extensa e interesante, que
pasado Enero, se We reunido el pleno presenta -la Comisión ejecutiva a
nacional del Pactido Socialista Obre­ examen y discusión d e l Pleno, inter­
ro Español, en presencia de una de­ vención oral que, pór recoger y colegación dei Partido
va* üMMator ja
política de uUitima hora, viene a ser un complenido expresamente de España.
mento de dicha Memoria.
Excusan su ausencia el camarade
En el curso del examen de la MaEnrique de Francisco, presidente de
mqria, W m a
y
o r
parte
lo Comisión Ejeoitiva, re^aoidg ^ n
Méjico por motivos de organisation, de Jos d^bgádos, aprobándose !a
y el compañero Fernando de los gestión de la "Ejecutiva, por unanimi­
Río», ministro de Estado, imposibili­ dad.
En el tercer punto del orden del
tado de abandona» Londres en virtud
de la misión que le lv?
pncprnen- día : El £cc^)lpma político español,
después de un amplio y detenido
dada por el Gobierno republicano
español cerca de las delegados a la análisis de la situación, en el que
han in te ^b n id o bastantes delegados,
Asamblea de las Naciones Unidas.
Bajo la presidencia de Tritón G ó­ así como la delegación de España y
mez (ministro de Emigración), en su varios miembros de la 'Ejecutiva, el
calidad de vicepresidente del Parti­ Pleno nacional del Partido ha acor­
dado, por unanïrfríBacf, reiterar todo
do, assistée :
su apoyo al Gobierno Gíral en la mi­
Por la Omisión ejecutiva: Rodolfo
sión confiada a éste por las Cortes
Llopis, Arsenio Gimeno, Manuel Pa­
de la República.
lacios, Juan Tundidor, Pascual Tomés,
Entre las numerosas resoluciones
Paulino Gómez, José Gregori y Pa­
votadas en el transcurso de la reu­
blo Careaga.
nión plenaria, figuran :
Por la I región : José Barreiro.
1) Intensificación de la' ayuda al
Por la 2: Emilio Alvarez y José
Partido clandestino en Ëspana y a la
Fernández Menaza.
Resistencia republicana y . antifascista
Por la 3 : Virgilio Pierna.
Por la 4
Fermín Zarza y Ricardo en general.
Guartero.
2) Proponer <$ue 1* Junta Española
Benité Vizcaíno.
Por la 5
de Liberación, en Francia, de acuerdo
Por la 6
Jesús Cam pillio y Eloy con lo estipulada en su acta efe
López.
constitución, se ofrezca como orga­
Por la 7 : Leoncio Pérez y Anto- nismo asesor e l-G o b ie rn o GiraI.
nio Guirao.
3) Mantener le posición - adoptada
Por la 8
Jesus Zamora y Cipriano últimamente poc. eJ Partido respecto
Menéndez.
a una eventual - participación minista-.
Por la ÿ : Julián Crespo.
rial del Partido Comunista, es decir,
Por la‘ ,A
10
no votar ninguna exclusión.
Emilio Bernaldo de
Qui ros.
4) Convocar el II Congreso nacio­
Por la I I
Cayetano Jato.
nal del Partido ) para el Ȓ*7-- de A bril
Por la 12
Manuel Díaz Antuna.
próximo en . Toulouse;* ;
?
^
Salvador Marbén.
Por la 13
5) Encargar e-i .fe ófEjefcutiva que
Por Africa del Norte : Ildefonso
continúe sus trabajos* desdaba! punto
Torregrosa.
de vista orgánico*. cerca <Je los- soda-,
Eloy NoPor Bélgica-Jnglaterra
listas vascos y catalane* para el estar
gales.
blecimiento de las norrias «-que han
Una vez abierta la reunión, por Ja de regular las relaciones-■e$tre »|a djr
presidencia, el compañero Uopis, co­ racción central efej Pa**id$>; y las ,d i­
_____ ___
___ autónomas.
_
mo secretario general, hace una glo­ recciones
d e_
’ las fog¡Qft9&
bYfeÛdta7>o’ 'l« ’^doràqiôg,de Jusa de conjunto sobre la Memoria de
o&bz
- '.c
néim'
•v.m
España entre dos guerras
N A C IO N A L
Primero. - Apertura y constitución
del Congreso.
Segundo. - Elección de la Mesa y
nombramiento de pronencras.
Tercero. - Examen de la gestión del
Pleno -Nacional.
Cuarto. - Modificación de Estatutos
orgánicos.
Quinto. - Situación política.
Sexto. - Elección de Comisión Eje­
cutiva, y residencia de la misma.
Séptimo. - Preguntas y proposicio­
nes.
Octavo. - Glausui# del Congreso.
Para conocer las doctrinas so­
cialistas, Jeed los « Comenta­
rios al programa socialista » de
Pablo Iglesias
publicados por EDICIONES SO­
CIALISTAS
GQfi una introducción* y la decla/ación de principios del P.S.O.E.
— —
c e n tro
.¿W q
C '.lf
OZU-3
«a
Proclamación de la República
( V il)
ORDEN DEL DIA
DEL CONGRESO
—
REUNIONES DE LA COM ISIO N
EJECUTIVA
•
Durante los dias 5, 12, 13, 19 y
26 del pasado mes de enero, se ha
reunido la Comisión Ejecutiva de la
Federación norteafricana.
Aparte de la evacuación de con­
sultas y de asuntos de trámite, la
Ejecutiva ha adoptado, entre otros,
los siguientes acuerdos.
Aplazar hasta el dia 23 de febrero
el Congreso ordinario norteafricano
convocado para el 19 de enero, a
virfud de insistentes requerimientos
de nuestra Ejecutiva de Francia.
satisfacción la gestión realizada por
la Federación Departamental de Tú­
nez y por las secciones que la inte­
gran, cerca del compañero Daniel
Mayer y aprobado el informe pre­
sentado de dicha gestión a nuestra
Ejecutiva de Francia, la cual ha sido
también informada de la gestión rea­
lizada por la Ejecutiva norteafficana
cerca del camarada Lussy.
Se han recibido las circulares nú­
meros 31, 32 y 34 de nuestra Ejecu­
tiva de la metrópoli así como infor­
mación relativa a diversas consultas
que se le tenían formuladas, de todo
la cual se Jta informado a nuestras
secciones.
Se han aprobado los textos de las
circulares números 19, 20 y 21.
lidad de oum fcciones.
La Ejecutiyjl
) diversas
e interesanthij
cerca de
los OrganismoJ
Or an
ptro dipuÍLe conI desde lo
|A!ejandro
'¡guió por
Avenida
para ba­
rio a los
la calle
Boulevard
Partido
Imenterio,
fedumbre
en Oran
irosas io ­
de orgalilares. En
tries polí1 al Alcaljiéllas, andirigieron
despedi­
das y _reen vida
|or el pa­
resias es
tado, Don
ducción de|l
alto de la
Dumas, dont
el Puente del
de Tunis, rut
jar hasta el|
muertos y
Contribuir al Empréstito de la Li­
de Alsacia y|
beración con el beneficio obtenido
Segué, pasan
en la venta de folletos, y aportar un
(y seguir he
donativo, destinado al mismo fin, de
escoltado
5.000 francos, de la Caja de «El So­
Se decide la impresión del informe
tal, que no
cialista». Trasladar a las secciones el de nuestros delegados al Pleno dei
otra semejan
informe-consulta de nuestro repre­
Comité nacional, para su remisión a
roñas y ramt
sentante en el Comité nacional, com­ las secciones o entrega a los delega­
nizaciones y
pañero Torregrosa.
dos, con anterioridad a la celebra­ la cabecera,
La Ejecutiva ha aprobado el ba­ ción del Congreso de la Federación ticas y sindL
lance administrativo presentado por norteafricana.
de de Orán.|
»
el Tesorero y acuerda su impresión
te la ultima
Se han recibido copias de las re­
la palabra
para su envío a las secciones.
soluciones adoptadas por diferentes
da, exaltandn
Se ha aprobado asimismo la Me­ secciones en torno a la consulta del
levantes cuati
moria de gestión y el Balance pre­ compañero Torregrosa.
sentados por el administrador de «El
También se ha recibido la comu­ hicieron de
dre de todc
nicación de la designación de dele­
Socialista».
gados al Congreso, de la casi tota- el AbueloLa Comisión Ejecutiva ha visto con
Con ,él mi [ico diputado a Corte pó en Arqelia. Al pe
embarqa a su viut ps, el Partido Socialis
7.T. unimos el nues [ ferviente
deseo de qi |s puedan
ser un dia ini la tierra
levantina que facer.
Suma a n té rie u r............... 631,959 frs
)NSAL
«EL S O C IA L IS T A » ........................................
5.000 »
A r g e l
Fédération N o rte a fric a n a .............................
5.000 »
Se previenel los dele­
Agrupación de O u jd a ..................................
6.360 »
qados de qru| ita AgruAgrupación de Argel ......................................
1.564 »
pación, que i itirar los
periódicos yl liquidaTotal recaudado hasta el dia
ciones de los| iodos los
sábados de
la tarde
31 de Enero de 1946 ........................... 649.883 frs
y los dominq II de la
(La totalidad de la recaudación ha sido ya remitida a nuestra
manana.
Comisión Ejecutiva de Francia).
El Corres p listrativo.
Ayuda a España
—
*• JA -.9 5
q «o... re $mi ®b *
03
ventudes Socialistas por la brillante
labor desplegÍWa al servicio del Par­
tid o y de la República.
Entre los acuerdos de carácter or­
gánico. figuran :
I ) Aprobación de las cuenta^ de
Tesorería.
2) Unificación del carnet del Par­
tido.
3) Reeditar la Organización gene­
ral del Partido.
4) Mejorar la publicación de « El
Socialista », transladéndole de Tou­
louse a Marsella.
La nota más sobresaliente de la
reunión, ha sido la coincidencia abso­
luta de aspiraciones y de táctica en­
tre el Partido clandestino de España
y las fuerzas exiladas representadas
en el Pleno. Tal compenetración fue
recogida y encomiada por Trifón G ó­
mez, desde la presidencia, en sus
palabras de clausura de la .reunión,
y en el saludo final de la Delega­
ción de España.
El Partido en Afin
v*
por José BOUEJOS
El 14 de abril de 1931, como resultado de la victoria electoral
de los partidos democráticos y socialista, se proclamaba la Repú­
blica española. Parecía que la historia quería compensar un si­
glo de agitaciones, motines, pronunciamientos y asonadas mili­
tares, huelgas generales y atentados individuales con uh epílogo
incruento y ‘pacifico- En medio del alborozo general y dé la des­
bordante alegría del pueblo, acatada el parecer por todas las
clases sociales, izábase la bandera tricolor republicana en los
viejos muros del Palacio Real, residencia secular de Tas dos mo­
narquías más rançias de Europa que habían moldeado en siglos
de dominio la estructura política y social de las grandes nacio­
nes del Continente.
El primer Gobierno republicano lo formaban representantes
de partidos pglíticos muy diferentes en su composición social y
aspiraciones, y unidos provisionalmente alrededor dé .un esbozo
de programa gubernamental. Esta heterogénea composición po­
lítica y social del Gobierno expresaba con fidelidad la diver­
sidad de fuerzas históricas que habían concurrido 6t derrocar el
régimen monárquico. En efecto, contra éste se rebejáron ' no so­
lamente fuerzas proletarias o auténticamente democráticas, sino
hasta sectores considerables de la gran burguesía conservadora.
La Monarquia además del peligro que constituía pét' sus velei­
dades dictatoriales y absolutistas, germen constante de trastornqj políticos y sociales, era un obstáculo notable para et pro­
greso y desarrollo de la economía española. Y a causa de esto,
viejos políticos procedentes del campo monárquico y entronca­
dos con sectores financieros e industriales, manifestaron su antimonorquismo, adhiriéndose en forma velada o franca 6 la
República
Pero aquello que parecía ser una generosa compensación de
la Historia al pueblo español, no era, de ningúrvmnodo, el re­
mate definitivo, sino el prólogo de una nueva época. Los gran­
des problèmes de orden social, político y económico que debía
resolver la República, no permitían la subsistencia de una coa­
lición tan heterogénea de fuerzas sociales y de Partidos políticos.
España caminaba con retraso excesivo, y aquellos problemas que
habían esperado su solución durante un siglo, la exigían ahora
en forma imperativa y apremiante.
Más de un siglo permaneció España al margen de la trans­
formación político-social que había modificado la fisonomía his­
tórica de las grandes naciones europeas. Las modernas reformas
realizadas a fines del siglo pasado en virtud de las leyes desamortizadoras ni habían alterado la estructura de la propiedad
.
rústíta, ni despojado a ésta de su carácter semi|<fucjal. ¿Cuando
Francia hacía ya siglo y medio que había extirpado las raíces
feudales de su sistema agrario, en nuestro país perduraban casi
intactas las formas de propiedad y explotación comunes al feu­
dalismo. La gran .reforma agraria de la postguerra que se des­
bordó por Europa vino a .estrellarse contra los Pirineos, perma­
neciendo España, una vez más, como compartimento estanco,
en el cual no se reflejaban las transformaciones sociales del
mundo.
No podemos comprender muchos de los acontecimientos su­
cedidos en nuestro país a partir de 1931 si no fijamos la atención
en ciertos problemas y rasgos generales de la economía nacional,
que, en definitiva, son los que determinarían el contenido his­
tórico de la revolución.
En 1931 la economía rural española, pivote del sistema eco­
nómico, correspondía, históricamente considerada, ai período
intermedio entre el régimen feudal y burgués
De los 22 millones y medio de hectáreas de superficie culti­
vable catastradas, más de la mitad, o sea cerca de 12 millones
y medio se componía de fincas mayores de 250 héctareas. En
el Sur de España el área de los latifundios superiores a 500 hec­
táreas oscilla entre el 45 y el 60 por ciento de la superficie
total. Esta propiedad se distribuye de la siguiente manera.
En la Mancha 277-504 propietarios son dueños de 4.820.194
hectáreas, de las cuales 1.870.213 pertenecen a 1.848 propieta­
rios.
En Extremadura 1775 propietarios concentran la propiedad
de 1.238.852 hectáreas de las 3.455-712 hectáreas de la región,
En la parte alta de Andalucía 2.789 propietarios de los 285.462
propietarios de la región poseen la mitad de las tierras, o sea
2.455.439 hectáreas del total de 5.335.754.
En la parte baja, 854 propietarios son dueños de 823.937 hec­
táreas, mientras que 167-765 poseen 1.901.156 hectáreas.
El latifundio es el rasgo característico, pero no único del ré­
gimen de propiedad rústica en España. Como contraste, en Ga­
licia predomina el minifundio, la minúscula parcela individual,
sobre la que recae el gravamen feudal de los toros. En otras
regiones, Levante, Provincias Vascongadas, etc.., el régimen de
propiedad y explotación es fundamentalmente bufgués, aunque
subsisten como en Cataluña ciertas formas y arbitrios de tipo
Semifeudal.
El proceso de industrialización da comienzo en España a
principios de sigio. Esta etapa se inicia y evoluciona durante
bastantes anos a base de capital extranjero — ingjés, y francés
fundamentalmente — que busca con preferencia — como campo
de sus inversiones la minería, ferrocorriles, y en grado menor,
la metalurgia. En Vizcaya las Compañías mineras de más im­
portancia, que extraían el 80 por ciento del mineral, eran ingle­
sas como la Orcorena Iron, Luchana, Mining, y francesas como
la Franco Belga; en Andalucía las minas de cobre de Riotinto,
las de hierro de Almería y algunas más pertenecían a Compa­
ñías inglesas y francesas. El sistema de, cois |ss terrovarias se creó con capital francés, nacionail capital
español en la segundo decenio de este siglo)
(antes se
La industria metalúrgica, cuyas factorias
asientan en Vizcaya, es hoy fundamentalmei Ral. Asi­
mismo lo es la industria textil catalana.
La guerra pasada provocó en el campo de la espanacioñola fenómenos de importancia fundamental.!
nalización de algunas de las ramas de nuest |a disminuyendo notablemente el papel y la importai! Ipital extranjero; y dio origen a un apogeo rapidísin litalismo
banca rio. Fué entonces euando corrfenzaron a| se, aunque" en forma incipiente, algunos de los ras< itacados
del capitalismo financiero : gran concentració ¡tales en
de las
un número muy reducido de Bancos, interf
bancadas e industriales, monopolios, etc.
Como es lógico a esta estructura econom( corresjosición,
ponder clases y categorías muy diferentes
desarrollo y aspiraciones. El predominio del
lista no
induspodía abolido la clase burguesa, dado que
trial del país la restaba importancia. Su de inómica
había de manifestarse necesariamente en sus| ¡políticos
poco importantes en el orden nacional. La ca :¡al, nu­
méricamente preponderante, estaba constituí) ls deceñas de millares de campesinos medios y pobr irticipación en la vida política fué siempre esporádij lerencia
ni continuidad- A la democracia burguesa, al >eral, le
faltaba en España tanto el fundamento de lesía industrial acomodada, nacida de la destrucción! len teuíos, co­
dal como el de una poderosa clase media
merciantes, pequeños industriales e intelectual! in Francia.
Con un predominio social y económico del Bes latifundistas y banqueros, pasivas e impotentes la I y clase
histómedia, correspondía al proletariado actuar
rica decisiva de dos revoluciones de contenida uy diterente: la revolución democrática y la révolue fta. • Repor la
petíase el caso de la revolución rusa, pero
situación geográfica de España, la reducción |itorio y
su dependencia en muchos aspectos de ln< -rancia,
Rusia debió su victoria, en parte, a la inmensidí arritorio
y a la riqueza de sus fuentes de materia prir lo a los
(r.tes al
profundos antagonismos de Europa en los
final de la primera guerra. España, en su proc tionarib
no podia abandonar un ritmo que le impon!) tencias,
obsesionadas, que no preocupadas, por impedir alio del
socialismo en el continente. Esta trágica contri htre las
necesidades nacionales en el orden histórico fad ex­
todaterior gravitaron sobre la revolución española,
vía más manifiesta que e l nacer la República, a guerra
civil -cinco anos después.
Romanticismo peligroso
(Au «Carrefour» des Bobards)
Repetidas veces, « El Socialista » se sabe qué !l>fos”jionnbres, aún con
salló al paso de los bulos que en la la ayuda de una población simpati­
actualidad se propagan afanosamen­ zante, no pueden constituir,, ni cons­
te, despertando, en el público extran­ tituyen, un conjunto de fuerzas gue­
jero y hasta en las filas de los exi­ rrilleras que merezca el nombre de
liados, la Impresión de que España ejército. Los puertos de Andalucía
vive en estos momentos una situa­ están vigilados y guardados, como
ción de guerrilla permanente. No hay siempre, por mar y por tierra. Q ui­
cosa más peligrosa en política que el siéramos conocer también a quien es­
romanticismo. Y nada tan criminal
tuviese dispuesto a enviar tan ingen­
en el periodismo, como presentar los tes cantidades de armas y otrps su­
acontecimientos según la fantasía de ministros sin adelantarle el dinero.
quien los pone sobre las cuartillas,
Nuestra triste experiencia durante la
sin averiguar la veracidad de sus in­ guerra civil, nos recuerda, que, ni
formaciones.
los mejores amigos de nuestra cau­
El sacrificio de los que marcharon sa, nos enviaron la menor cantidad
à los frentes en 1936 y el de los vo­ de material sin pago previo.
luntarlos Internacionales que con ellos
Un dia llegará la descomposición
iban, el de los fusillados desde 1939, del tinglado fascista. Pero esa des­
y el de los que todavía sufren los ri­ composició moral y política de las
gores policíacos del régimen fran­
filas franquistas tiene causas muy dis­
quista, merece una estimación más tintas de las románticas acciones gue­
justa de los problemas españoles ; rrilleras inventadas p g f el escribano
problemas que se deben enjuicier con del semanario parisino, con la buena
el alma serena, y no con la superfi­ intención, quizas, de prestar un ser­
cial exaltación que derrocha inútil­ vicio a . la causa de la libertad en Es­
mente las simpatías que la causa re­ paña. En todo caso, se equivocó, ya
publicana tiene hoy en el mundo.
que el romanticismo no es el arma
Al exaltar continuamente los espí­
ritus con rumores fantásticos sobre
ej ércltos guerrilleros en las sierras
ibéricas,
se debilita Ja disposición
emocional en favor de nuestra cau­
sa. Y se debilita porque como esos
ejércitos fantasmas no pueden ofre­
cer éxitos reales, nuestros simpati­
zantes en el extranjero y los mismos
refugiados, desorientados, un día se
desesperan al comprobar la realidad
y consideran que ya no hay esperan­
E! día 29 del pasado mes de enero,
zas ni posibilidades de «acabar con dejó de exisfir, ' a íos 78 anos de
aquello».
/
I edad, el sOcíaJftta, m édico^-y d ip u ­
ideológica de la clase obrera, nú­
cleo principal y más coherente de la
población española capaz de resur­
g ir y actuar tan pronto se descom­
ponga el franquismo.
El arma de la clase obrera es el
realismo político. Su táctica debe le­
vantarse sobre lo que es, no sobre
lo que uno se imagina. La insurrec­
ción de octubre del 34, para citar
un hecho histórico, no fué un gesto
romántico, fué la reacción efectiva
ante un peligro mortal. Lo mismo»
ocurrió en julio de 1936 con la acción
espóntánea de las masas.
En determinadas circunstancias —
por ejemplo, en la retaguardia de
los
ejércitos
nazis
durante
la
última gran guerra — la acción gue­
rrillera puede ser de máxima impor­
tancia, a condición de que esta ac­
ción coincida con 1a de un ejército
regular que opera a cierta distan­
cia. Pero situar el problema español,
después de nuestros reveses en la
guerra civil, en el plan de una hipo­
tética acción guerrillera, es una sim­
ple tontería, o... mala fé.
Un Diputado socialista
ha muerto
Un ejemplo de esta ligereza ro­
mántica aparece estos días en una
revista parisina de cierto renombre.
El semanario «Carrefour» publica un
«reportaje» bajo el titulo, « Vérités
sur l'Espagne », donde se lee que en"
Andalucía existe un ejército de gue­
rrilleros, mandado por jefes superio­
res del ejército regular, y abastecido
por pequeños puertos de 1a costa
andaluza, o mediante paracaídas. No
faltan tampoco las afirmaciones gra- .
tuitas sobre la descomposición del
ejército franquista, debido al «senti­
miento caballeresco» de los oficiales
españoles —• de los que combatieron
a la República — atraído por las hazanas audaces del «maquis» andaluz.
Todo el mundo sabe que en las
sierras españolas hay antifascistas
huidos del terror franquista que se
defienden y luchan como pueden y
con enorme heroísmo. Pero también
tad o a Cortes, Don Salvador G arcía.
Como Tantos otros, cae en‘ el~ exilio:
en esté exilio qué; pese a los deseos
de Francia, hace tantas vfëtimas co­
mo los'^campos de concéViVrktTón ale'manes. Y la " muerte d e l’ Nsílfiado es
la lenta tortura física y mora!, como
una visión dantesca dè la ÿîda, que
haçé pasar cdnió relámpagos los dias
dé" esperanza’ y p t o l o / ^ sirí.'térm itlo
los ítoíriutos agoreros de ia -’ tlesespera o ió » .
-m
i
« y x M H x 'w
»
Así ha muerto Don Salvador. Vi­
viendo todos los dias una esperanza
nueva y muriendo cada minuto jo id o
inexorablemente por esos imponde­
rables que son la vida del exiliado.
Porque ?quien no jia visto_ a Dpn
Salvador junto a la mesa de tertulia
con esa^*ftirada tan suya
inteli­
gencia, vivacidad, bondad, caricia
de padre — reposar la mano sobre
la tabla dispuesto a entregarnos las
M iedo y represión
Madrid, Enero 1946. - Después del
acuerdo de la Asamblea Constitu­
yente francesa, en e¡ sentido de la
ruptura de relaciones con la Espi­
na fascista, en los medios políticos,
en los oficiales, mejor dicho, pues ya
existen otros medios
políticos dis­
tintos de los oficiales y que cada vez
se manifestan con mas vigor, respi­
rábase un ambiente de despeofeo y
de rabia impotente. La Falange y
los elementos militares más abierta­
mente hitlerianos no lograban disi­
mular su odio a la Francia democratica y ^ibre.
Los comentarios de corrillo trans­
piraban una ira contenida solo por
necesidades
de tipo
diplomático,
pues los equilibrios que al fascismo
español impone su delicada posición
internacional obligànle a prescindir
de las bravatas propias de su psico­
logía y que en otras épocas lanzaba
continuamente Franco y sus más cons*
picuos colaboradores.
Pero esa ira y esa rabia se ha
transformado en pánico después de
conocerse la dimisión del General de
Gaulle. Se tiene por seguro aquí que
el nuevo Gabinete francés decidiré
la ruptura total de relaciones con la
España de Franco, y ello obligaré,
piensan los falangistas, a las demés
potencias democráticas a adoptar
una actitud de desvio con respecto
al fascismo español más perjudicial
aún para éste que el enraVecimiento
d d ambiente que actualmente le ro­
dea.
Impulsados por ese convencimien­
to de la inminencia de un rompi­
miento definitivo
con Francia, los
dueños de la situacin se estén apre­
surando a reforzar la ya numerosa
guarnición fronteriza. Se ha recrude­
cido la censura en la corresponden­
cia y se necesitan más requisitos que
de costumbre para víajér con direc­
ción a las regiones españolas limí­
trofes con los Pirineos. Por su parte,
los monarquizantes hacen todo lo po­
sible por que Franco Salga del país
cuantó antes y se pfbclame una si­
tuación de hecho qd8fr 4hitigue un
tanto las dificultades diplomáticas en
que podría sumir al ’facismb una im­
minente decisión del nuevo Gabinete
francés, y hasta, si es posible, evitar
tal
decisión
del nuevo
Gabinete
-francés con la instauración de una
Monarquía que hícrese promesas de
liberalismo y de demodfacîa.
Los partidarios de Don Juan, en­
tretanto, siguen* tratandp de apro­
ximarse a las organizaciones de la
Resistencia, y lanzan continuos ma­
nifiestos en contra de la situación.
Por su parte, los periódicos clandes­
tinos de los partidos y organizacio­
nes obreras y republicanas, sostienen
que la única situación legal posible
en el país y la verdadera encarna­
ción de la democracia no puede ser
otra que la República;
La represión se ha-¡recrudecido en
los últimos días-, En Madrid se han
practicado numerosas detenciones de
elementos que se hallaban en «liber­
tad vigilada», y los tribunales mili­
tares han dictado sentencias graves
la semana anterior, entre ellas, va­
rias penas ;de muerte.
Henry
DUPONT.
primicias de la última noticia de ra­
dio o prensa que terminaría con el
exilio?
?Quien no le conoció arreme­
tiendo contra el presunto desespe­
rado obligándole a levantar su mo­
ral un tanto derrumbada? Esa fué
la vida externa de Don Salvador. La
íntima, la suya, la que nadie vio,
puede que otra fuera; pero la inge­
nuidad, condición dominante de su
carácter, hace creer que no tuviera
doblez externa. Y en la intimidad co­
mo ert la calle, Don Salvador seguiré
siendo el mismo. Hasta en las horas
postumas, fué el doble de la tertulia,
pensando en el regerso...
Beneficios nara la Isrlesia
Según declaraciones de Fernández Cuesta, del 31 de Diciem­
bre, el presupuesto actual prevee un aumento a favor, del Clero
y dei culto católico, con la ampliación de las sumas destinadas
para construcción de nuevas parroquias. A pesar de tener la
lista completa de los presupuestos para el ano en curso, no He­
mos encontrado nada atribuido a la Iglesia. ?Será tan alta la
atribución que hasta el gobierno franquista teme publicarla?
Pero falta la carne . . .
Hace poco, tuvo la ¡dea el gobierno franquista de tasar la
carne. Los precios no eran muy baratos, por cierto, y, sin em­
bargo, la consecuencia fué la total desaparición de tan apre­
ciada mercancía. No exageramos, lo dice el mismo gobierno
publicando el siguiente comunicado : «El gobierno se ocupó del
grave problema creado por la total falta de carne en la mayor
parte del país desde que entraron en vigor las tasas oficialmente
fijadas, que, estudiadas con suficiente amplitud, venían a señalar
topes a un continuo e injustificado aumento de precios, que im­
pedía ya totalmente a los sectores de población modestos ad­
quirir este necesario alimento. Estimando que este hecho insólito
e inexplicable constituye un caso de confabulación evidente que,
en perjuicio de las necesidades generales, afecta a la tranquili­
dad pùblica y a la disciplina, ha acordado la adopción de seve­
ras medidas para garantizar el abastecimiento y sancionar la
más rápida jy eficaz puesta en práctica de las mismas ». (dado
el dia 12 de Enero).
Los comunicados del gobierno franquista rinen siempre con
la lógica y el sentido de las palabras. Pero nos parece que éste
es el más atrevido de todos en cuanto a la «confabulación» de
la desaparición de la carne, «hecho insólito e inexplicable » para
los jerarcas que entienden poco de economía...
Comienza mal la campana en contra del estraperlo-
£1 presupuesto de 1946
El discurso del Ministro de Hacienda hacía alardes de econamía en el presupuesto del Ejército. Es verdad que los puesupuestos del Ejército y de la Marina han bajado un tanto : el
primero arroja 3.019,3 millones de pesetas en contra de 3.687,7
millones el ano pasado; el segundo, 672,6 en contra de 725,2.
Pero no así del presupuesto del Aire que pasa a 934,8 millones
de pesetas en contra de 566,6 en 1945.
Así que para la totalidad de los presupuestos de las fuerzas
armadas, Tierra, Mar y Aire, tenemos en 1946 una cantidad su­
Y este hombre cuya única vanidad
perior a l& del dno 1945 de unos 300 millones de pesetas. (4.676,6
fué et curar física y moralmente, no
en contra de 4.379,5). Si es esto una baja, entonces es que las
usó el valor que todo hombre posee,
palabras no tienen el mismo sentido para nosotros y los señores
en mayor o menor cantidad, hasta la
ministros del régimen franquista...
hora del tránsito postrero, y tan he­
En honor a la verdad, debemos reconocer que los presupues­
roicamente la afrontó, que sólo él
pudo darse cuenta cabal de aquel
tos de Gobernación y de Falange han ba|ado notablemente. El
arresto ignorado. Es que los carac­
de Gobernación de unos 700 millones y el de Falange de unos
teres congénitamente buenos — en
95 millones, este presupuesto pasg, oficialmente, a ser la mitad
el más- amplio sentido del concep­
del ano anterior. Decimos oficialmente, porque existe una rúbri­
to — comienzan ellos mismos por
desconocer se aptitudes bélicas, sea
ca titulada « Obligaciones a extinguir » que podría encubrir lo
cual fuere el dilema en que la vida
que ne se quiere publicar, alcanzando la cantidad apreciable de
los situe.
cerca de 200 millones de pesetas. Y que muy bien podrían exis­
Así, Don Salvador, por primera vez
tir capítulos no publicados de presupuestos extraordinarios.
en su vida, fué valiente. Y lo fué
El presupuesto de Educación Nac¡onal ha crecido de 260 mi­
frente a la muerte. Luchó a brazo
partido para conservar ese último
llones de pesetas : pero sabemos que se subvencionan amplia­
aliento que quiso exhalar junto al
mente a las escuelas religiosas desde los seminarios hasta las es­
Serpis, pero luchó.con la fuerza y re­
cuelas de los curas de parroquia1. Así que este aumento no si­
sistencia resultante de todas las de­
més cualidades que formaban su tem- • gnifica para nosotros un bien pa^a la población, sino todo io
peramento : delicadeza, moral, bon­
contrario.
dad sobre todas* *Por eso, el heraldo
Interesante es el capítulo de la Deuda pública : dividida en
que anunció^ la triste nueva fué su
tres rúbricas, llega a la cantidad apreciable de 2-277,5 millones
propia vida, cuando alzándose sobre
de pesetas. Sobre un presupuesto total de gastos de 13.215
él, en un último impulso por conser­
millones, esto representa la sejtfa parte de los gastos, es decir
varse y cpnservarle, con la m aj^ta d
de quien se sobrevive en la espeçie,
más del 16%. Es una cifra enorme símbolo de la debilidad fi­
gritó : Don Salvador ha muerto.
nanciera del régimen.
Serafín ESCLAPEZ.
O tro símbolo es que, tomando por buenas las cantidadee in­
dicadas en el periódico, el presupuesto de ingresos es interior
de 2.087 millones de pesetas al de gastos. El déficit del ano será
ciertamente más importante, dada la importancia de los ciea-tos extraordinarios que se van publicando a lo largo de los
meses.
No tienen los jerarcas del régimen razones de congratularse
Argel
del éxito de su hacienda. Y nosotros que habremos de tomar su
La Asamblea de la sección
sucesión, tendremos que afrontar una tarea bastante dura, árida
local de Arqel, convocada pa­
y con sinsabores, encontrando una hacienda en descomposición,
ra el pasado domingo y que no
se celebró por dificultades de
una agricultura deshecha y una industria desarrollada en un sen­
local, tendrá luqar en la maña­
tid o contrario a las necesidades vitales de la economía de Esna del dominqo, dia 10, en lo­
pana. Nos parece que tales problemas deben estudiarse inme­
cal de costumbre.
diatamente en la emigración, y cada uno de nuestros lectores
El Comité.
dedicar unos ratos de reflexión a tan desagradable tema.
Vida de Ta U.G.T.
Se desea saber...
El parado de Manuel Domlrrquez, natural de Madrigal de
la Vera fCáceres), para tm asun­
to de interés. Dirigirse a IsidoroPérez I, rue Fourchault, Bab el
Oued - Alger.
¡¡ Salvemos las vidas amenazadas
de nuestros compañeros de España!!
EL SOCIALISTA
Nota explicativa del Sr. Giral
Revolución y contrarrevolución
Al margen de un debate
por A . de le ROSA
La oposición de las grandes
potencias por sus esteras de in­
fluencia se ha traducido, en la
rimera sesión del Consejo de
equridad de la U.N.O. (Orga­
nización de las Naciones Uni­
das), en un debate vivaz entre
el ministro de Negocios Exte­
riores de Gran Bretaña y el
vicecomisario de Negocios Ex­
teriores de la U.R.S.S. El fondo
de la discusión fué que Gran
Bretaña y los Estados Unidos
habían intervenido en la zona
de influencia soviética en los
Balkanes, para obtener eleccio­
nes bajo un régimen de compe­
tencia entre los partidos políti­
cos de aquellos paises, en vez
de las elecciones plebiscitarias
de los varios « Frentes Patrió­
ticos », formados por sugeren­
cia de las autoridades de ocu­
pación soviéticas; Menos Bulqaria, todos los paises balkáni­
cos ai norte de la frontera grieqa celebraron, pués, (o cele­
brarán) elecciones democráticas,
transformándose los gobiernos
respectivos con participación y
sequn la fuerza de los partidos.
La reacción a tales interven­
ciones ha sido la intentona so­
viética de interferir a su vez en
la zona de influencia británica,
es decir en Grecia. No cabe
duda que el caso de Grecia se
prestaba para el caso, puesto
que nadie puede sinceramente
afirmar hoy día que se hayan
cumplido en G recia los requi­
sitos democráticos para formar
un qobierno, capaz de qobernar
realmente y de resolver los qraves problemas que atronta el
país desde su liberación. El de­
bate de Londres ha sido ani­
mado : no porque los oradores
principales, Bevin y Vichinski,
se preocuparan tanto de lo de
^Grecia, sino poríque Bevin se
opuso a cierta táctica que mal
coincide con las costumbres de
buena vecindad entre las na­
ciones. Tal táctica de la diplo­
macia soviética interpreta cla­
ramente la concepción base de
la política exterior de Moscú ;
lo que pudiera llamarse, en el
lenquaje de la psicoloqía mo­
derna, un « complejo de per­
secución
supercompensado ».
No neqamos que hay razones
históricas para tal •« comple­
jo ». Las manías antisoviéticas
de la burquesía internacional
estuvieron en el origen mi*smo
del estado soviético, y apenas
cesaron con el ataque de H i­
tle r conüra la U.R.S.S. Es lai
fa lta de pensamiento dialéctico
y de comprensión para las re­
latividades en la vida política,
lo que induce a los estadistas
soviéticos de hoy a sequir pen­
sando en « conjuras » perpetuas
contra la Unión Soviética, mien­
tras que, en la realidad, la bur­
quesía internacional, debilitada
económica y socialmente por la
querrá, ha revisado desde hace
tiempo su posición trente a la
existencia del sistema económi­
co de la U.R.S.S.
Con mucha razón, Bevin re­
cordó al deleqado soviético
que cuando una amenaza real
pesaba sobre la joven revolu­
ción rusa, él se opuso al envio
de armas a los enemiqos de la
Rusia revolucionaria (Bevin tua
secretario del Sindicato de
transportes), y que hoy día no
hay, ni habrá, amenazas contra
la paz, ei decir contra la U. R.
S. S. Habló Bevin como minis­
tro de Neqocios Exteriores de
Gran Bretaña y no como diriqente de partido. Sin embarqo,
los socialistas, no tan sólo los de
su país, estarán de acuerdo con
sus palabras en lo que se retiere a la situación internacional y
a los métodos para consequir
un ambiente de buena vecin­
dad entre las naciones del mun­
doPero los socialistas ne tene­
mos dioses, ni «diriqente's que­
ridos», cuyas palabras sean saqrpdas e indiscutidas. Por te ­
ner el problema de Grecia unos
rasqos comunes con el proble­
ma español, nos parece preciso
un examen critico de lo que se
f
dijo en Londres sobre el aspec­
to político del caso griego. Al
estallar la querrá mundial, en
Grecia qobernó el dictador
Metaxas, que, apoyado por las
jerarquías militares y el rey, ha­
bía instaurado un « orden nue­
vo » de tintes fascistas. Mu­
chos de los caciques y militares
de este réqimen colaboraron
lueqo con los ocupantes nazis y
fascistas. Unos cuantos, hasta
constituyeron, bajo la protec­
ción de la Cruz Gamada, los
famosos batallones de «Seguri­
dad», con objeto de mantener
el orden... hitleriano. Mientras
tanto, el pueblo que heroica­
mente había luchado en la ba­
talla de Albania, tormo sus cua­
dros de resistencia. La organi­
zación política que fomentó la
acción clandestina era el E.A.M.
sus unidades de combate se
amaron E.L.A.S.
El E.A M. es una coalición de
qrupos políticos de izquierda,
cuyo núcleo más activo tué, en
determinados momentos, el Par­
tido Comunista. Su base social
se compuso por la masa cam­
pesina pobre y los obreros in­
dustriales de fas pocas ciuda­
des del país, montañosa e insu­
lar a la vez. El rey y los oficia­
les, que loqraron evacuarse con
las tropas británicas, reorgani­
zaron en el M edio Oriente un
pequeño ejército regular y la
marina. Pero los soldados y los
marinos de estas tuerzas, al
darse cuenta que la dirección
política estaba en manos mo­
nárquicas o metaxistas, se rebe­
laron. Con ayuda de las autori­
dades británicas en el Medio
Oriente, se desarmaron e inter­
naron a estos « rebeldes ». Fué
esta la primera intervención en
favor de la Contrarrevolución
qrieqa. La segunda se llevó a
cabo, como es sabido, cuando
las fuerzas del E.L.A.S. — que
de hecho gobernaban la casi
totalidad del país, fuera de la
capital — intentaron v oponerse
a (a toma del poder político en
la capital por parte de las te r­
tulias monárquicas y metaxis­
tas. A l oriqen de tales interven-.
dones está la persona del ex
presidente del consejo británi­
co, Winston Churchill, cuyas re­
laciones intimas con las casa
reales de toda Europa y cuyas
simpatías por la contrarrevolu­
ción de cualquier matiz son qui­
zás más conocidas en el extran­
jero que en Gran Bretaña. Re­
cordamos, sin embargo, que la
intervención británica js n las lu­
chas de Atemas provocaron ca­
si una crisis gubernativa
en
Gran Bretaña y que ta dgcisión
del Partido Obrero de sepa­
rarse de la coalición nacional,
apenas cesaron las hostilidades,
se debe, parcialmente, à la tem­
pestad causada en la opinión
pública británica por el caso de
Grecia.
Mientras tanto, la situación
ha cambiado profundamente.
Al momento de intervenir el
qeneral Scobbie contra el E. LA. S. tal acción constituía una .
ayuda para la contrarrevolu­
ción. Pero cuando se concluyó
lueqo el acuerdo de Vazirka y
el E. L. A. S. entregó sus armas
tan sólo a los británicos, la pre­
sencia británica en Grecia cons­
tituía el único obstáculo para el
restablicimiento de 'una dicta­
dura de estilo nietaxista, aun­
que la derrota del E. L. A. S.
había tenido por consecuencia
un estado de semidictadura con
qobiernos derechistas que in­
tentaron durante todo el ano
pasado transformarse en régi­
men totalitario. Pero la situa­
ción no se prestó a ello. Pasa
en Grecia algo parecido como
después de la derrota obrera
en octubre de 1934 en España;
complicándose la situación pa­
ra los alementos reaccionarios
por la situación écenómica gra­
vísima del país y por el hecho
que el cambio de rumbo políti­
co en Gran Bretaña dejó a las
tertulias derechistas sin ampa­
ro exterior. Una misión de di-
rectores de policía británica es­
tá, desde hace unos meses, re­
organizando los servicios poli­
cíacos bajo el punto de vista
de establecer un cuerpo que no
tome partido en ninguna con­
tienda política, sino que vigila­
ra la libertad de expresión y de
asociación. Gracias a tal reoraanización, el E. A- M. ha podi­
do reanudar sus actividades
Los qobiernos que se tormaron desde la guerra civil tueron
en mayoría de tintes derechis­
tas. Tan sólo el gabinete Sotulis, formado recientemente por
sugerencia de Londres, está
compuesto de hombres libera­
les y democráticos. El E. A. M.
no participa en este gobierno,
pero está tratando su ingreso
bajo condición de la liberación
de los presos políticos y de alqunas garantías más. No se
puede, por consiguiente, afirm ar
que en estos momentos la pre­
sencia británica en Grecia cons­
tituye un apoyo para la con­
trarrevolución griega. La situa­
ción ya no es la misma que en
el tiempo del gobierno Chur­
chill- Pero hay siempre quien
no quiere comprender que la
Inqlaterra del 1944-45 y la del
1945-46 son valores políticos
muy distintos.
Nosotros, que no tenemos
obligaciones ministeriales de
ninguna clase, consideramos el
problema histórico de la revofución y de la contrarrevolución
en Grecia bajo conceptos algo
distintos de Bevin (y muchos ca­
maradas laboristas participan (
de nuestro criterio). Sin embar­
qo no nos asociamos a la críti­
ca de Vichinski, cuyas aprecia­
ciones unilaterales no prueban
nada más que, para él se trata
de un expediente diplomático.
Nueva York. - 0 Jefe del G obier­
no republicano ha facilitado a los
periódicos de Nueva York una inte­
resante nota en la que se explica la
composición del gobierno español en
exilio, su legalidad y su posición
ente los Gobiernos de los demis pai­
ses democráticos.
Recuerda que la casi totalidad de
las potencias del mundo entero han
condenado
y
repudiado
públicamente el régimen fascista que ac­
tualmente sufre España. Asi ha suce­
dido en la Asamblea de San Francis­
co y en la reunión de Postdam.
Igualmente lo han hecho el Presi­
dente Truman y Mr. Bevin. El Con­
greso obrero mundial y otras orga­
nizaciones representativas de los pue­
blos democráticos se han unido a
esta condenación.
Actualmente existen once paises
que no mantienen relaciones diplo­
máticas con Franco. Los parlamentos
de Francia, Cuba, Ecuador, Perú v
Uruguay han pedido que se lleve a
efecto la ruptura.
Los paises que han reconocido al
Gobierno republicano son : Méjico,
Guatemala, Panamá y Venexuela.
En el Gobierno estén representa-
dos Izquierda Republicana Union Re­
publicana, P.S.O.E., E.R. de Catalu­
ña, Nacionalistas Vascos, y las dos
grandes organizaciones obreras U.G.T.
y C.N.T. Y si el Partido comunista
no esté representado, éste reconoce
su legitimidad, y votó la moción de
confianza en el Parlamento, la cual
fué votada por aclamación.
€ M i Gobierno -afirm a --, se ha
comprometido ante el Parlamento a
formar, una vez en España ; un cen­
so electoral con el fin de ir a unas
elecciones generales que determinarán
la política futura en nuestra Patria.
Termina la nota, haciendo saber
que el Gobierno republicano no so­
licita la intervención de las poten­
cias extranjeras en el pleito español,
aunque Holanda, Noruega, Bélgica,
Checoeslovaquia, Abisinia y otros pai­
ses que se encontraban en semejante
caso fuesen liberados prestándoseles
incluso ayuda militar. Lo que pide
es la ruptura con el Gobierno del
General Franco y el reconocimiento
de la legalidad del Gobierno Repu­
blicano y de su autoridad legitima,
con ei propósito fundamental de evi­
tar para España nuevos derrama­
mientos de sangre. - FEBUS
V oces de A m érica
Nueva York. — La Radio ameri­
cana comentando una Editorial de
Radio Nacional de España, en la
cual afirma que la estricta neutrali­
dad del pueblo español en la pasa­
da contiendo le dé derecho a parti­
cipar en las actividades internacio­
nales para consolidar la Paz del mun­
do, dice : < El pueblo americano
comparte, en cierto modo, el crite­
rio de lo Radio Nacional. El pueblo
español tiene derecho a no estar
ausente en las tareas de reorganiza­
ción mundial. Pero no el Gobierno
del General Franco. En su célebre
carta al General en cuestión, el llo­
rado Presidente Roosevelt, decia que
ACUSABA
AL
REGIMEN
FRAN­
QUISTA POR SU COMPLICIDAD
C O N EL NAZISMO. La exclusión de
s
h
España de la O.N.U., ha dicho Mr.
Byrnés, ha de interpretarse no como
una repulsa al pueblo español, sino
al Gobierno de Madrid.
Los Estados Unidos, como Inglanterra, no quieren intervenir en los
asuntos interiores de otros paises.
Pero cierran sus puertas a la España
oficial y las abren de par en par al
Pueblo español invitándole para que,
en el cuadro de las estipulaciones
internacionales, busque la fórmula que
le permita reconquistar su soberanía,
poniendo en juego una unidad de
acción y de generosidad. El pueblo
español sabe que para esta obra de
salud nacional y de beneficio inter­
nacional, cuenta con la simpatía to­
tal y absoluta de los Estados Unidos
de América. — FEBUS
oc-
Desde España
Esto piensa quien combate
« Esto se hunde, tal es la afirma­
ción generalizada por todo el ám­
bito nacional. Hay quienes sostienen
que son las dificultades económicas,
mas que la capacidad criminal del
fascismo, las que darán al traste con
el régimen oprobioso que padece'mos. Sin desdeñar los factores eco­
nómicos que actualmente agobian a
la camarilla falangista y que son re­
sultado lógico de la vergonzante ad­
ministración de los bienes nacionales
esquilmados en provecho de unos
cuantos desalmados,
queremos
no
obstante advertir a la opinión demo­
crática, para que no se deje llevar
ingenuamente
por
un
optimismo
desorbitado y se apreste a un mejor
aprovechamiento de sus energías en
pro del hundimiento efectivo del fran­
quismo.
Tenemos todos comprobado, por
desgracia, que para el fascismo no
existen caminos vedados. Su estructu­
ración respondo en todas las latitudes
aj. mismo cometido y a resultados
idénticos. Un ejército y una policia
elefantiésicos, una burocracia predo­
minante y entorpecedora, servidores
todos ello de una o varios cabezas
perturbadas, que amenazan siempre
al pueblo con terribles represiones,
y a los servidores del régimen con la
pérdida de sus prebendas si se nie­
gan a ejercer la función para que
fueron contratados.
Falta solamente demostrar cuénta
capacidad de sufrimiento es capaz
de desarrollar un pueblo y tendremos
en seguida cerrado el circulo vicio­
so. Veinte anos aguantó el pueblo
italiano a su tirano y quién sabe
cuantos más habría contado H itle r a
no ser por \d guerra que le llevó al
actual desastre alemán. Siete anos
consiguió vivir Primo de Rivera en
9I palacio de Buenavista y nueve lleva
Franco entre Burgos y el Pardo. Esta­
mos hoy como el primer día. Odián­
dole todos en nuestro fuero interno,
pero impotentes por nuestra falta de
virilidad y decisión, otrora monopo­
lios españoles. Fabricahdo bulos o
escuchando
emisoras
extranjeras,
leyendo boletines de información y
pasándonos* de mano en mano la *
prensa clandestina antifascista, que
nadie sabe, más que quienes la ha­
cen, cuántos sacrificios y riesgos
cuesta sacarla a la luz.
Y asi, españoles, antifascistas, de­
mócratas, ésto no se hundirá. Se hun­
diré cuando cada hombre y cada mu­
jer se pregunten a si mismos si vale
la pena vivir en un país desahuciado
por el resto del planeta, donde na­
da es posible a no ser la esclavitud.
Se hundirá, cuando 1a conciencia em­
puje a las masas hacia los Sindica­
tos obreros, los partidos políticos y
los organismos rectores de la Alianza
Nacional de Fuerzos Democráticas.
Se vendré a bajo el tinglado falan­
gista y militarista en el preciso mo­
mento que podamos ofrecer al mun­
do un frente unido y dispuesto a
todo ; a lo que sea. Cuando los
veinticinco
millones y
medio de
connacionales
nos
enfrentemos
al
medio millón escaso de sicarios y
lacayos de Franco. Cuando todos y
cada uno de é nosotros nos propon­
gamos «obstruir con arena la maqui­
naria infernal del actual régimen,
conseguiremos que se nos cobre mie­
do y el respeto que merecemos. De
ahí al hundimiento, hay un solo pa­
so.
Las dificultades de carácter eco­
nómico que Franco encuentra a su
paso no harén més que disminuir la
capacidad adquisitiva de la masa
ciudadana. Pero las bayonetas, los
campos de concentración, las cárce­
les y lo f cementerios nos aguardan,
si no somos capaces de reaccionar
antes que la desnutrición nos con­
vierta en peleles.
El Boletín- de Información Reser­
vada de Falange, decía a este res­
pecto : € Nada nos debe amedran­
tar. Seguiremos nuestro camino hasta
el fin. Firmes en nuestro puesto. Si
nos hundimos, Dios se hundiré con
nosotros ». Es decir que Falange y
Franco dicen como Hitler. « Detrás
de mi, el diluvio ».
Todo esto que es suficientemente
aleccionador creemos haré reflexio­
nar a quienes nos lean. Y si de ver­
dad quieren ayudar a nuestro G o­
bierno exilado a que nos recupere la
consideración y el reconocimiento de
las potencias mundiales, que no ol­
viden que éstas han dicho que la
cuestión del régimen español com­
pete por éntero a su pueblo. Y ese
pueblo, somos todos. Pobres y ricos,
jóvenes y viejos, derechistas o izquier­
distas. que estamos obligados a de­
mostrar nuestro deseo y a conver­
tirlo en realidades palpables, barrien­
do para siempre estos anos de humiliación, de crímenes y de explotación
inicuos, para ofrecer a nuestros hijos
la paz, cultura y trabajo con los que
producir pan para España.
De Solidaridad Obrera de Barce­
lona ».
?Cruzada contra
Francia?
Bilbao, 30. - Coincidente con la
intensificación de la propaganda an­
tifrancesa coreada por toda la Pren­
sa y Radios de España, presentando a
Francia como un peligro para la civilazacion y para la seguridad de
España, y con el reforzamiento a lo
largo de la frontera de las unidades
de «cobertura», se ha hecho publico
hoy un aviso a todas las poblaciones
costeras y en particular a los na­
vegantes en el Atlántico, para que
se sujeten a las normas que se pre­
cisan en el aviso, ya que van a ve­
rificarse maniobras y ejercicios de
baterías costeras a largo alcance».
FEBUS.