1. No category

Reflexión
Semanal.
5 mi n u t o s d e r e f l e x i ó n , p a r a
e mp e z a r e n l a p r e s e n c i a d e
Dios.
18 al 22 de julio 2016.
L u n e s — S A C A R BIEN DEL MAL
El catedrático de psicología de la Universidad Complutense de Madrid,
que ha vivido muchos años de su vida enseñando en varias universidades extranjeras, el Dr. José Luis Pinillos , bilbaíno de nacimiento, científico riguroso, cristiano convencido y practicante, ha manifestado sobre su experiencia sobre su enfermedad y muerte inminente: “Fue en
1961. Yo tenía cuarenta y pico años y cuatro hijos. El diagnóstico era
muy duro: padecía de cáncer maligno y se me daba un plazo de unos
seis meses de vida. Afortunadamente debió haber algún error porque
aún sigo vivo. Pero, yo tuve la certeza subjetiva de que estaba muy enfermo y que me quedaba muy poco tiempo en este mundo.
Durante el Congreso Internacional de Oncología, celebrado hace un par de años conté mis vivencias, porque
siempre he pensado que es muy importante la actitud del enfermo frente a su situación, sobre todo en casos
graves. Existe una misteriosa relación entre lo psíquico y lo corporal y creo que es posible sacar bien del mal,
como es la enfermedad. Yo lo pasé fatal. Tenía cuatro hijos todavía pequeños. Mi situación profesional era
difícil. El plazo que me daban era unos seis meses de vida. La impresión que produce la noticia es muy profunda. Al principio experimenté una fase de rebelión radical, de negación ante la evidencia del diagnóstico.
Después intenté reaccionar, manteniendo a rajatabla todos mis compromisos y mis proyectos de futuro. Esta
actitud es fundamental. Si uno abandona; si uno no lucha con coraje, el proceso es peor. Mi experiencia me ha
enseñado muchas cosas: cuando uno se encuentra cerca de la muerte, el mundo cambia, y cambian las perspectivas; dejas de dar importancia a cosas que no la tienen. Y para mí, que soy una persona creyente, todo aquello
me ha servido para acercarme más a Dios y profundizar en mis creencias».
M a r t e s — PA R A D Í A S DE TRIBULACION
- Si te sientes acorralado;
- Si la noche ha sido muy larga para ti;
- Si has velado a un ser querido;
- Si vives momentos de adversidad, de fracaso;
- Si el dolor, el sufrimiento, no te han dejado dormir;
- Si pasas por horas oscuras;
- Si has esperado con verdaderas ansias el nuevo amanecer;
- Si experimentas la vaciedad y el hastío en tu interior;
- Si tienes problemas que resolver;
- Si estás enfermo o experimentas el desamor;
- Si un ser querido ha fallecido;
- Si buscas luz, vida, paz, amor...
Acércate a Jesús, rézale, vacía tu interior y exponle tus cuitas y tus
quejas. Cuéntale lo que te pasa, “retírate en tu aposento” (Mt. 6,6)
Y no olvides su invitación: “Venid a mí todos los que estáis cargados, cansados, trabajados -por el sufrimiento-, oprimidos y yo os aliviaré” (Mt. 11 ,28).
Tomás de Kempis aconsejaba: “Si te miras a ti, no podrás por ti cosa alguna de éstas; mas si confías en Dios,
Él te envía fortaleza del cielo” .
5
mi n u to s
d e
r e f le x ió n,
p ar a
e mp ez ar
e n
l a
p r es e nc ia
d e
Dio s.
M i é r c o l e s - H A G A P O S I B L E LA PAZ
- Haga posible la paz, evitando enfados y desavenencias.
- Haga posible la paz, haciendo las paces.
- Haga posible la paz, desarmando la mente y el corazón de toda ira y venganza.
- Haga posible la paz, siendo persona pacífica.
- Haga posible la paz, procurando el diálogo.
- Haga posible la paz, esforzándose para que la justicia reine en usted y en todo el mundo.
- Haga posible la paz, otorgando el perdón y sabiendo pedir perdón cuando deba hacerlo.
- Haga posible la paz, trabajando por la paz. Una sola persona que cumple el mandamiento del amor, hace mucho más que 40 personas que únicamente hablan de paz.
- Haga posible la paz, adquiriendo y practicando las virtudes, porque, como decía santa
Teresa de Jesús «las virtudes ayudan mucho a la paz».
J u e v e s — V I D A E T E RNA
Se llama Cliff Richard. Es cantante de rock. Llevó más de 30 años en los primeros puestos
del ranking de la Gran Bretaña. Ha manifestado: “A los 14 años abandoné la religión. A
esa edad se toman decisiones que cambian por completo el rumbo de la vida. Y ahora reconozco que cuando tenía 14 años tomé esa importante decisión. Creía en Dios, pero no era
algo importante. A la muerte de mi padre hablé con un amigo y me aconsejó leer la Biblia
para confortarme. En cuanto empecé a leerla, no sabía nada de nada sobre Jesús. Estudié
durante tres años y pregunté dudas a sacerdotes y amigos. Y acabé convirtiéndome. De eso
hace 26 años. Soy cristiano practicante y mi vida gira en tomo a ese hecho. Incluso en el
escenario, siempre que tengo oportunidad, lo cual es la mayor parte de los conciertos, hablo de mi fe, de mis creencias. Creo que soy un afortunado. La religión es lo mejor y lo más importante. Porque, a pesar de que me apasiona la música, el rock no me ofrece eternidad. Jesús sí me la ofrece.”
Jesús promete vida eterna: “Todo el que haya dejado... heredará vida eterna” (Mt. 19,29). “Los justos... irán a
una vida eterna” (Mt. 25,46). “El que escucha mi palabra y cree en el que me ha enviado, tiene vida eterna” (Jn. 5,24). “El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna” (Jn. 6,54). “El que cree en mí, aunque muera, vivirá. Y todo el que vive y cree en mí, no morirá para siempre” (Jn. 11,25).
Vi e r n e s — EL OBJETO MAS BELLO: NUESTRA PROPIA VIDA
No conozco hecho más esperanzador que la capacidad del hombre para hacer de su vida algo más elevado por
medio de un esfuerzo consciente. Es muy positivo poder pintar un cuadro determinado, modelar una estatua y
hacer bellos unos cuantos objetos; pero mucho más digno de gloria es modelar y pintar el medio a través del
cual vemos. Influir en la calidad de cada uno de nuestros días es la más elevada de las artes.
Todos los seres humanos tenemos el deber de hacer que la vida toda, aun en sus
más mínimos detalles, sea algo digno de contemplar, tanto en las horas más nobles
como en las más críticas.
La vida se vuelve sencilla a base de actos sencillos. Recuerdo que, en cierta ocasión, fui a ver a un amigo y le conté que estaba preocupado porque varios conocidos habían acudido a mí para pedirme dinero prestado. Yo me sentía confuso, dividido entre mis principios acerca de prestar dinero y el deseo de ayudar a otros. La
respuesta que me dio mi amigo fue sencilla: "Nunca prestes nada a nadie si no has
sentido deseos de ayudarle desde el primer momento". Aquello decidió el asunto.
Verdaderamente, "dar" debe estar libre de todas las obligaciones que hacen de la
donación un "préstamo". Los regalos se convierten en deudas si no se dan de corazón. Deberíamos regalar las cosas libremente y presentarlas del mismo modo porque, entonces, la caridad estaría libre de finanzas, el amor no se vería sometido a
reclamaciones personales; dar y recibir y todo lo que pudiéramos necesitar, nos sería dado con sólo pedirlo.