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Claridad, El Periódico de la Nación Puertorriqueña
Eddie Miró: El hombre de la sonrisa perpetua
Por: Edgardo Huertas
Hoy quiero dedicar el baúl de los recuerdos a un artista muy especial, Eddie Miró, a quien conozco hace ya
varias décadas. Este humacaeño criado en Santurce desde los siete años, comenzó su carrera profesional en la
radio allá para el 1951, cuando ni se pensaba en la televisión en Puerto Rico que llegaría tres años mas tarde.
Fue la actriz Alicia Moreda quien se lo recomendó a Tommy Muñiz quien era el productor de moda. La chispa
de Eddie agradó al productor quien comenzó a participar en la emisora WRIO en el programa Ahora o nunca y
cantaba además en una orquesta de estudiantes.
Con Tommy comenzó a realizar sus primeros pasos en programas como Gloria y Miguel, Los vecinos de la
calle tranquilidad, y El profesor Colgate que estelarizaba José Miguel Agrelot y en donde Eddie podía cantar,
actuar e imitar. Eddie estudió la carrera de agrimensor y justo cuando su futuro profesional comenzaba, fue
reclutado por el ejército en donde permaneció varios años como especialista en el cuerpo médico.
Cuando en 1960 regresa del ejército, Tommy realmente no tenía trabajo para él. En cambio ya la televisión se
había convertido en una realidad y Paquito Cordero comenzaba a producir programas fuera de la famosa “piña”
de Tommy. Eddie comenzó a escribir libretos de comedia para Paco y actuaba en programas de comedia. Así
nació El Show Ford en donde Miró vuelve a ver a una joven vecina llamada Ita Medina, quien era a su vez una
de las famosas India Girls junto a Sarita Ayala y Nora Osorio. El encuentro con Ita le vino bien. Se enamoró y
en 1965 se casaba con quien se convertiría en el amor de su vida y madre de sus tres hijas Dana, Michele, y
Christie.
Comenzó a recibir reconocimiento como libretista. Eddie siempre ha tenido una facilidad impresionante para
el humor. De esta forma se envolvió en los libretos de La Taberna India, Los Enredos de Cuquita, El show
Coca Cola, y Lo mejor de la semana, entre otros.
Cuando Paquito es contratado por la división latina de la Columbia Pictures para producir una serie de
largometrajes, Eddie Miró fue el libretista de algunos protagonizados por Adalberto Rodriguez “Machuchal”.
En 1973, Eddie se convirtió en el animador favorito de la televisión con el programa Noche de Gala que se transmitió por Telemundo Puerto
Rico y en Estados Unidos costa a costa. Este programa fue plataforma de lanzamiento en la animación para figuras femeninas como Marisol
Malaret, Marilyn Pupo, Deborah Carthy Deu y Gilda Haddock. Las más importantes estrellas de la música participaron semanalmente de esta
hora de variedad y buen gusto en la televisión boricua.
Por otra parte, de los cuarenta años que estuvo en el aire El Show de las Doce, por más de dos décadas Eddie fue su animador ocupando el
lugar que previamente habían ostentado Miguel Ángel Alvarez, Mario Pabón, Micky Miranda y Yoyo Boing.
Cuando Awilda Carbia comenzó a trabajar en El Show de las doce, Miró tuvo la responsabilidad de crear semanalmente las rutinas y libretos
para los personajes de “la primera dama de la comedia”. Así se hicieron famosos dentro y fuera de Puerto Rico personajes queridos como “Flor
Rosa”, “Zoila Norsa”, “Enriqueta la secretaria”, “Rabito” y tantos otros.
Con Awilda y Eddie viajé cada pueblo de la isla haciendo fiestas patronales. Participé en el Teatro Tapia, El Teatro Riviera, El Teatro Yagüez,
El Palacio de Recreación y Deportes, Teatro La Perla y el Teatro Puerto Rico en Nueva York. ¿Dónde no llevamos la alegría de Eddie, mis
canciones y la genialidad de Awilda para transformarse y conquistar todo tipo de público. Eddie fue además el animador de Salsa sábado en la
noche y Super Sábados.
Cuentos, anécdotas, bromas (algunas dulces y otras pesadas) hemos escrito y vivido con un cariño particular. Eddie ha sido, es y será de la
parte maravillosa de esta industria porque en él se conjugan un excelente compañero, un buen amigo, y un estupendo profesional.
Awilda le llamaba “rotito y medio” porque en su rostro cuando sonríe es lo que se percibe en sus cachetes. De cualquier modo, su sonrisa es el
reflejo de un hombre que nació para brillar, iluminar la vida y hacer reír al mundo. Gracias amigo por seguir siendo “el hombre de la sonrisa
perpetua”.
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