Discurso de don Ismael Ossa Director Viña La Rosa Gala 2012 de Teatro del Lago Somos parte de una sociedad que está viviendo una etapa especial, estamos dando un salto importante en el desarrollo económico y ello es bueno, sin embargo, es menester analizar el efecto sobre los diferentes grupos que conforman el cuerpo social, sólo quiero en honor a la brevedad, destacar un aspecto relevante y que tiene vinculaciones con el que hacer de nuestras actividades empresariales, nosotros trabajamos con padres y abuelos de muchachos que por primera vez tienen a sus hijos o nietos en la Universidad o en institutos de alta capacitación y ello es un proceso que ciertamente posibilita una vida más plena, pero observemos su vida familiar, cómo interactúan esas generaciones, por una parte mucho esfuerzo y esperanzas sin embargo, muchas dudas y dificultades para sobrellevar el proyecto. Desde un punto de vista meramente económico, solucionable con planes educacionales, financiamiento bancario y becas. Sin embargo no todo es dinero con ello me refiero a la auto estima de nuestros trabajadores, a la sensación de apparteit o de pérdida de oportunidades que sufren por su propia falta de educación y por consiguiente un dejo de amargura por la realidad de sus vidas y entonces lo hemos visto manifestar su incomodidad. Esos padres y/o abuelos son nuestros colaboradores en la empresa, son aquellos que hacen posible mantenerlas activa y creciendo, a esos hombres y mujeres debemos apoyar en este trance que viven, desde luego, capacitándolos para mejorar su productividad y alcanzar mejores niveles de remuneración pero debemos también encenderles su espiritualidad y apoyarles su autoestima. Escuchaba días pasados a un notable profesor responder a la pregunta de un periodista sobre cómo enfrentar las manifestaciones sociales y respondió sencillamente. Escuchándolos para que se sientan acogidos y abran su corazón, parece ingenua su respuesta, pero es muy sabia. Nosotros vivimos a ritmo acelerado, muchas veces y lo vemos en todo, las respuestas están antes de que terminen de exponer sus temas, y entonces solo se engendra el conflicto. Estamos en este lugar reunidos, un teatro magnífico muy bien diseñado, lejos para muchos, pero aquí venimos a escuchar, si amigos, en el recogimiento más absoluto nos sentamos a escuchar… y esta realidad que constituye el Teatro del Lago es un símbolo que debemos no solo cuidar sino expandir a otros lugares de nuestra patria llevando su mensaje y creando puntos de acogida para escucharnos. Debo confesarme, me acerqué a Uli y su señora para llevar a las tierras de mis afanes, una semilla del Teatro del Lago, logrando formar un Conjunto Coral de 25 personas, trabajadores/a agrícolas, por más de un año con clases una vez por semana que ha traído mucho gozo a sus integrantes, familiares y miembros de la empresa. ¡Alumbremos talentos que los hay! Muchas Gracias