EXCELSIOR Domingo 28 de febrero DE 2016 AJEDREZ ARTURO XICOTÉNCATL Estudio de A. Jachaturov, Shajmati, URSS, 1945. Las blancas juegan y ganan. Un alfil negro muy limitado… Precioso ejemplo de dominación un tanto complicado, pero muy lógico. A fin de triunfar, las blancas deben capturar al alfil negro y dar mate en una de las esquinas oscuras del tablero. [email protected] Hoy se cumple un siglo de la muerte de un autor cuya aclamada obra novelística lo coloca en el canon literario universal POR RAFAEL MIRANDA BELLO Especi a l [email protected] La solución La jugada inmediata natural es retirar el alfil fuera del alcance del rey y la respuesta de manera semejante, pero ¿a cuál casilla? Le sugerimos que coloque las piezas en el tablero. 1.Ag3! Observe con cuidado que las blancas pueden trazar imagen de mate mediante Ac7 seguido de Cd6++. El alfil negro está muy limitado en sus funciones y no puede sostenerse en la gran diagonal a1–h8, por la citada amenaza. Haga la prueba. Por otra parte, la casilla g5 está vulnerada porque tras 1.... Ag5 2. Cd6+ rey mueve y se gana con el descubierto 3. Cf7+ seguido de 4. Cxg5. Las negras intentan su mejor defensa: 1...Ad8 [1...Ae7 2.Ac7 Ab4 3.Cf6 el alfil mueve, por ejemplo Aa3 o 3...Af8 4.Cd5 con amenaza de mate Cb6++. 4...Ac5 única. 5.Rxc5 y las blancas dan jaque mate.] 2.Ae5 Ag5 [2...Aa5 3.Cd6+ Rd8 4.Cb7+ Re7 5.Cxa5 Y las blancas ganan en función a la teoría del final.] 3.Cd6+ Rd8 4.Cf7+ Re7 5.Cxg5 [Y las blancas dan mate conforme al final de R, C y A contra R. HENRY JAMES (1843-1916) @Expresiones_Exc CLÁSICOS DE DOS SIGLOS Estos son algunos títulos de la monumental obra de Henry James. [James es] el primer novelista verdaderamente moderno en lengua inglesa.” DAVID LODGE 33 El americano (1877) CRÍTICO INGLÉS H enry James es “el primer novelista verdaderamente moderno en lengua inglesa”, afirma el crítico y narrador inglés David Lodge en El arte de la ficción, un libro que usurpa el título de un reputado ensayo del escritor estadunidense que adoptó la nacionalidad británica un año antes de su muerte, ocurrida en Londres el 28 de febrero de 1916. Para Lodge, quien también firmó la biografía novelesca ¡El autor, el autor!, que se inmiscuye en el transcurso de los años que James residió en la capital británica, el autor de Retrato de una dama (1881) —obra de linaje balzaciano que Harold Bloom enjuicia como “la mejor novela escrita en Estados Unidos”—, era “poco menos que un virtuoso en la manipulación del punto de vista” que elegía para contar sus historias, y agrega: “no creía que la verdad última sobre la experiencia humana pudiera ser nunca establecida, pero desarrolló una técnica narrativa que colmaba cada fisura con el metal extraído de la veta de la información”. SUTIL E INVENTIVO “Hijo mayor del teólogo del mismo nombre, que había dejado el rígido calvinismo por la doctrina visionaria de Swedenborg”, informa Borges al inicio del volumen que le concede en su Biblioteca personal —compuesto por las ficciones La lección del maestro (1892), La vida privada (1892), y La figura de la alfombra (1896), “una suerte de símbolo de toda su vasta obra”—, James nació Nueva York el 15 de abril de 1843, y “desde el principio”, sigue Borges, “no ignoró que era un espectador, no un actor, de la vida. A lo largo de su obra comprobamos que fue un espectador sutil e inventivo”. Hermano menor del filósofo y pionero de la sicología moderna William James, se educó en Ginebra, Londres y París. Ingresó a Harvard en 1862 con el fin de estudiar leyes, pero en menos de un año renunció para aplicarse a la literatura. En 1864 publicó su primer cuento, A tragedy of error, y su debut novelístico Guarda y tutela apareció en 33 Retrato de una dama (1881) 100 VUELTAS DE TUERCA Ilustración: Emmanuel Urueta GENIO EPISTOLAR 33 Henry James fue uno de los mayores escritores epistolares de la historia. 33 Hay más de 10 mil cartas personales suyas. 33 Mantuvo correspondencia con Robert Louis Stevenson y Joseph Conrad, por ejemplo. 1871. Vivió por temporadas en París, Roma, Florencia y Venecia, y a partir de 1877 se estableció en Londres. Tuvo una ajetreada y cautelosa vida social, y publicó en abundancia: Roderick Hudson (1875), que profundiza en los contrastes entre las costumbres estadunidenses y las tradiciones europeas, un tema que James insiste en escudriñar en las novelas El americano (1877) y Los europeos (1888); Daisy Miller (1879), el único de sus libros al que faltó poco para convertirse en un bestseller, y Los papeles de Aspern (1888), una excursión a los linderos de la vida privada de los escritores y sus afanes. Alentado por “la codicia de algún posible oro”, incursionó en el teatro con la obra Guy Domville (1895), pero el día del estreno recibió tajantes abucheos que marcaron el inicio de su fracaso como dramaturgo, aunque a la postre llegó a escribir una docena de obras teatrales. El escritor irlandés Colm Tóibín, quien noveló la vida de James en The Master. Retrato del novelista adulto, agrupó una selección de sus relatos en la antología Nueva York — cuya culminación llega con la novela breve Washington Square (1881)—, y al presentarla refiere que el trabajo literario de James “apostaba por la idea de “que se podía resistir y hacerse responsable, que se podía aspirar a una fama que iba más allá del dinero”. UN EXPLORADOR DE LA CONCIENCIA Perspicaz y minucioso “pintor de la vida”, como él mismo definió a sus faros literarios: Shakespeare, Cervantes, Balzac; y terco explorador de los paisajes de la conciencia, James elaboró marañas narrativas cargadas de significados que no resultan simples y cuyas insinuaciones a pinceladas desconciertan tanto como engatusan, en novelas de extraordinaria industria entre las que sobresalen Lo que Maisie sabía (1897), Las alas de la paloma (1902), Los embajadores (1903) y La copa dorada (1904). También escribió los libros de viajes La escena americana (1907) y Horas italianas (1909), y no dudó en apuntar el estilete de su prosa hacia los meandros del quehacer literario, produciendo una sólida obra ensayística reunida en libros como Partial Portraits (1888), o el volumen póstumo El arte de la novela (1934), que acompañan y desbastan su prolífica obra narrativa. Al respecto, en La ciencia de la crítica (1899) comentó: “Uno ve al crítico como el auténtico ayudante del artista, el guía que porta la antorcha, el intérprete, el hermano. Cuanto más se observe el tono y más se respete la dirección, más disfrutaremos de la utilidad de una literatura crítica”. En el prólogo de la novela La princesa Casamassima 33 Washington Square (1881) (1886) —una obra que junto a Las bostonianas (1885) y La musa trágica (1890) forman una especie de “tríptico novelesco” en torno a cuestiones sociales, como anotó el escritor español Carlos Pujol 33 Los en el texto El encuadernapapeles dor y la princesa, pero con el de Aspern que James no se propuso “ha(1888) blar de los obreros como tales, ni quería salirse de los únicos conflictos CLAVE que le interesaban: Esta novela corta, los secretos impulperturbadora y fansos que hay que tasmal, es quizá la descubrir en los obra más conocida repliegues más esde Henry James. condidos de la vida interior”—, el autor de historias más que insólitas, escalofriantes, como Otra 33 Otra vuelta vuelta de tuerca (1898) y La de tuerca fontana sagrada (1901), argu(1898) menta a manera de resumen y atinada reflexión de su oficio: “si te pones a escribir sin llevar en ti mismo la raíz del asunto, si no tienes el sentido de la vida y la imaginación penetrante, no eres más que un pelele ante todo lo que se revela y afirma; pero si cuentas con esas otras armas, no estás realmente desamparado, 33 La siempre te queda algún retercera curso, aunque tengas delante persona un misterio como un abismo”. (1900) [email protected] 2: EXPRESIONES Domingo 28 de febrero DE 2016 : EXCELSIOR El búho RENÉ AVILÉS FABILA TRES PARA LLEVAR [email protected] Oscar Wilde, el conversador luminoso, el cuentista oral Su vida transcurrió en salones sofisticados. Abruptamente se detuvo en la prisión. Sus últimos días en Europa continental fueron paliados sólo por algunos amigos franceses, como Jean Cocteau. L a literatura de Oscar Wilde fue tan grandiosa como trágica su vida. La bisexualidad no encajaba en la época victoriana. Cuando leí sus hermosos cuentos, sus piezas teatrales ingeniosas de diálogos inteligentes y encantadores, sus conferencias brillantes, no pude sino enamorarme de su literatura. Yo era muy joven y en la escuela solíamos leerlo casi clandestinamente, incluso memorizábamos sus frases plenas de aguda y fina ironía. Una de ellas sigue maravillándome, porque la veo citada en docenas de lugares bajo cualquier pretexto: “La naturaleza copia al arte”. Al no saber qué me gustaba más de su obra, cuentos, como El gigante egoísta, El ruiseñor y la rosa, poesía delicada o su novela El retrato de Dorian Gray, opté por entregarle mi sincera devoción a la persona y a la totalidad de su trabajo literario. Mi madre me regaló la edición de obras completas de editorial Aguilar. Su vida transcurrió en salones sofisticados. Abruptamente se detuvo en la prisión. Sus últimos días en Europa continental fueron paliados sólo por algunos amigos franceses, como Jean Cocteau, quien lo visitaba en el modesto hotel del Quartier Latin donde se hospedaba y falleció lejos del mundano ruido que le encantaba y distante de una familia que padeció las consecuencias de su pasión por el joven y apuesto Lord Douglas. La cárcel fue atroz para su espíritu refinado y frívolo, pero le fue útil para escribir sus obras más grandiosas: La balada de la cárcel de Reading y De profundis. En París retomó la literatura francesa y dijo: “Y qué razón tengo yo para vivir”. La bibliografía sobre Wilde sigue apareciendo y yo la sigo comprando. En París encontré Oscar Wilde, escrito por Vyvyan Holland, uno de sus hijos, quien optó por vivir bajo ese seudónimo. Un libro biográfico con abundantes ilustraciones. Cierra con la foto del célebre monumento de Epstein, que cubre los restos de Wilde en Père-Lachaise. Su otro hijo, Cyril, seleccionó la carrera de las armas y murió en 1915 en el frente francés, luchando contra los alemanes. En el número 10 de Tite Street, Londres, hay una modesta placa que lo recuerda: “Oscar Wilde, 1854-1900, wit and dramatist lived here”. Sus libros siguen recorriendo el orbe y el cine los busca. Para muchos el mejor Oscar Wilde era el oral. Por relatos de quienes lo conocieron sabemos que su conversación era brillante, aguda e imaginativa. Cuentan que solía deslumbrar a sus escuchas. Entre nosotros, habrá que recordar a Salvador Novo y a Juan José Arreola. Wilde gustaba de exponer historias, fábulas y cuentos, con frecuencia variaciones de temas conocidos y de relatos que modificaba o invertía. André Gide, en un libro memorable, Oscar Wilde, cuya traducción se debe al poeta mexicano Marco Antonio Campos, relata algunas de sus conversaciones, las que, con rigor, eran monólogos con los que el escritor irlandés iluminaba a sus amigos y admiradores. Con algo de esfuerzo se podrían recuperar algunos de estos “textos” y de tal forma aumentar su bibliografía. Quedaría, sin embargo, la duda de algo fundamental: ¿qué tanto los herederos de aquellas conversaciones prodigiosas nos darían la esencia del Wilde oral? “Wilde, dice el novelista francés luego de conocerlo en París, no conversaba: contaba. Durante casi toda la cena, no paró de contar. Contaba dulce, lentamente; Para muchos el mejor Oscar Wilde era el oral. Por relatos de quienes lo conocieron sabemos que su conversación era brillante, aguda e imaginativa. 1. Como “un gran estudio acerca de la parte medular de la intelectualidad mexicana y su contexto político y social” se define este libro que reúne 15 ensayos que el escritor Héctor Perea (1953) escribió durante diez años para diferentes publicaciones. Los temas de su interés han sido la literatura, el periodismo, el arte y la labor editorial y la creación a través de las nuevas tecnologías. Textos que, en algún momento, reconoce el autor, se han permitido el roce con la ficción. Las obras de escritores como Martín Luis Guzmán, Carlos Fuentes y José Emilio Pacheco, entre otros, nutren la primera parte de este volumen. Pero también, el autor se ocupa de las acciones alternativas de Ulises Carrión, Guillermo Gómez-Peña y Ana Clavel, “que van más allá de la literatura”, el azaroso exilio político de personajes como Joaquín Clausell y los efectos culturales de la Guerra Civil española en la relación México-España. En la segunda parte plasma, a partir de cuatro bocetos, la imagen de un Alfonso Reyes “inmerso en acciones sencillas pero nobles”. ——Virginia Bautista TÍTULO: La música delgada AUTOR: Héctor Perea EDITORIAL: UNAM, México, 2016; 209 pp. 2. El tercer volumen de la Sintaxis histórica de la lengua española escudriña en el uso correcto de preposiciones, adverbios y conjunciones, además es el mejor ejemplo de un estudio diacrónico de la lengua, es decir, una sesuda —y más que exhaustiva— investigación, análisis y entendimiento de la evolución del idioma a través del tiempo. Se podría pensar que este esfuerzo de investigación está dirigido exclusivamente a especialistas; sin embargo, no sólo se trata de un trabajo para filólogos, sino también para todo aquel que desee entender más y mejor nuestro idioma y sus pasadizos intrínsecos. Mediante ejemplos claros, entendibles estadísticas y una muy amplia bibliografía, este glosario lingüístico es, sin duda, la muestra más amplia de las relaciones internacionales en nuestras letras. Asimismo, aquí se encontrarán otros elementos idiomáticos: rasgos de tipo sintáctico, semántico y pragmático, minucias de la lengua y un corpus variado y muy bien escogido. ——Mario Alberto Medrano su voz era maravillosa”. Hubiera sido magnífico tener una grabadora y conservar su voz educada y sus portentosas historias. Por lo pronto, a reserva de que alguna otra ocasión regrese al tema con mayor intensidad, me permito transcribir una de esas historias (El discípulo), conservada por la memoria de Gide en la versión castellana de Campos. “Terminada la cena, salimos. Al ver que mis dos amigos caminaban juntos, Wilde me llevó aparte: “—Usted escucha con los ojos —dijo de pronto—; por eso le voy a contar una historia. “Cuando Narciso murió, las flores de los campos estaban desoladas y pidieron al río unas gotas de agua para llorar. —¡Oh!, respondió el río, aun si todas mis gotas de agua fueran lágrimas, no tendría suficientes para llorar a Narciso. Cómo lo amaba. —¡Oh!, retomaron las flores de los campos, ¿cómo no podrías haberlo amado? Era hermoso. —¿Hermoso?, preguntó el río. —¿Y quién mejor que tú lo sabes?, dijeron las flores. Cada vez que se inclinaba en la orilla, miraba en tus aguas su belleza... Wilde se detuvo un instante. “—Si yo lo amaba —respondió el río— era porque cuando se inclinaba sobre mis aguas veía el reflejo de mis aguas en sus ojos”. —— www.reneavilesfabila.com.mx TÍTULO: Sintaxis histórica de la lengua española (Volumen 3) COORDINADORA: Concepción Company EDITORIAL: UNAM/FCE, México, 2015; 4,279 pp. 3. Desde la llegada de los europeos al Nuevo Mundo, un cisma se abrió entre ambos lados del planeta. Los recién llegados nunca han dejado de preguntarse cómo era posible la existencia de civilizaciones que, ante sus ojos, no habían evolucionado al mismo tiempo que ellos. Para finales del siglo XV, cuando Cristóbal Colón puso por primera vez los pies en tierra americana, el mundo occidental estaba aparentemente mucho más adelantado que cualquiera de las culturas que los colonizadores se toparon. Y esa idea, a pesar de los avances que hoy existen de uno y otro lado del mundo, ha persistido en gran medida. Peter Watson, uno de los historiadores más reputados de Inglaterra, trata de hallar las razones por las que ambos costados del mundo evolucionaron a diferente ritmo. El autor no vuelve al error de considerarse superior; por el contrario, se encarga de hacer un minucioso análisis de las circunstancias migratorias, geográficas, alimenticias, mitológicas y tecnológicas que influyeron para que los humanos de ambos territorios acabaran diferenciándose a tal grado de crear una gran divergencia global. —Luis Carlos Sánchez TÍTULO: La gran divergencia AUTOR: Peter Watson EDITORIAL: Crítica, México, 2015; 718 pp. EL RADAR EXPRESIONES [email protected] @Expresiones_Exc RECOMENDACIONES EFEMÉRIDES El libro Nace el museógrafo mexicano Sátira desencantada y profética, esta novela resulta al final un dramático balance personal de su autor. AGENDA Un día como hoy, pero de 1909, nació el museógrafo, promotor cultural, pintor, diplomático y cineasta mexicano Fernando Gamboa, fundador de la revista Tiempo y del Instituto Nacional de Bellas Artes. Murió el 7 de mayo de 1990. Mariinsky debuta en Cuba Hoy cumple HERNÁN LARA ZAVALA ESCRITOR MEXICANO / 70 AÑOS Maestro universitario, editor, tallerista literario, promotor de la cultura, traductor y narrador. PENÍNSULA, PENÍNSULA Premio Iberoamericano de Novela Elena Poniatowska 2009 y Premio Real Academia Española 2010, entre otros. TÍTULO: Las moscas del capital AUTOR: Paolo Volponi EDITORIAL: Sexti Piso, México, 2016; 367 pp. Víctor Manuel Torres Coordinador Edgar Hernández Editor Paola Rodríguez Coeditora Visual LA HABANA.— La Orquesta del Teatro Mariinsky de San Petersburgo actuará por primera vez en Cuba, donde ofrecerá una presentación única el próximo 6 de marzo en el Teatro Nacional de La Habana, anunciaron ayer los promotores del espectáculo. La orquesta, bajo la batuta de Valery Gergiev, incluyó a Mario Palomera Diseño Cuba en su gira latinoamericana que también la llevará a México y Chile. Medios locales de la isla resaltaron que Gergiev ha contribuido a expandir el repertorio de ópera y ballet, con obras de compositores como Mozart, Verdi, Puccini, Mussorgsky y Tchaikovsky, junto a clásicos europeos del siglo XX. (EFE) EXCELSIOR : Domingo 28 de febrero DE 2016 EXPRESIONES :3 R AFAEL CATANA (VER ACRUZ, 1955) Foto: EFE El encuentro madrileño abrió sus puertas en 1982. FERIA DE ARTE Arco alentó acervos Teje dolor y gozo Los poemas que el músico presenta hoy en la FIL de Minería juegan todo el tiempo con una paradoja clave: hay solemnidad, pero también desparpajo ¿DÓNDE Y CUÁNDO? Los pájaros de la cervecería, de Rafael Catana, y Trece por cuatro. Poemas para recuperar la salud en un dos por tres, de Eduardo Guzmán Chávez, se presentan hoy a las 16:00 en el Auditorio Cinco de la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería. EFE [email protected] MADRID.— Cuando en 1982 Arco abrió sus puertas por primera vez, en España casi no existía el coleccionismo y eran escasas las instituciones que adquirían arte contemporáneo. Ahora, 35 años después, el coleccionismo está al alcance de muchos. “Existe toda una generación de coleccionistas que nacieron con Arco, de gente que han venido con sus colegios y sus familias a la feria y que han generado un coleccionismo nacional importante que compra o no compra en función del ciclo económico, pero hay una serie de gente informada que viaja, que visita las galerías y que son un sustrato esencial de Arco”, dijo Carlos Urroz, titular de la feria. En la primera edición de la Feria de Arte Contemporáneo en que trabajó, en 1995, Urroz recordó que se organizaba una comida para coleccionistas y clientes de las galerías “y eran 25 personas” frente a las mil que acudieron en la primera jornada de la de 2016. Los pájaros de la cervecería es un poemario coeditado entre Ediciones Sin Fin y La zorra vuelve al gallinero. Foto: Notimex Fotos: Tomadas de Facebook POR LUIS CARLOS SÁNCHEZ [email protected] Haciendo poesía, Catana se torna solemne hasta el punto de admitir a Octavio Paz como disciplina aleccionadora. “Siempre está ahí el maestro Paz que, aunque no lo queramos, perpetuamente saca el cinturón para decirnos: ‘Catana, corrige tus textos’, en el mejor sentido de la palabra”, dice el cantautor, quien ha decidido rescatar del bóiler algunos poemas de toda la vida para conformar un libro. Al teléfono, la maliciosa y socarrona voz del compositor de Lluvia ácida se resiste a volverse ceremoniosa: “Sí, soy solemne como poeta, pero con mi humor trato de romper eso, yo siempre digo que estoy tan feo, tan feo que hasta estoy guapo; es la contradicción de la misma vida”. Sus poemas juegan todo el tiempo con esa paradoja: hay solemnidad, pero también desparpajo; hay dolor, pero también goce; hay soledad, pero también compañía, algo que puede propiciar una ciudad tan grande como la de México. “Yo soy un escritor de canciones. Alguna vez dejé de escribir poemas y me dediqué a escribir canciones, porque soy músico de rock; en ese sentido, este libro se tardó muchos años en gestarse. Tenía un libro hace años, pero hace dos lo metí al bóiler y empecé a cortar, a deshacerme de los poemas que no me gustaban”. De ahí nació Los pájaros de la cervecería, una “autobiografía en busca de una voz”. Pienso que este (libro) es una especie de biografía que tiene que ver con el viaje, con el silencio, con las mujeres.” RAFAEL CATANA CANTAUTOR “Un libro es un diario de vida te guste o no; atrás de él siempre hay otros libros; pienso que éste es una especie de biografía que tiene que ver con el viaje, con el silencio, con las mujeres”, dice el cantautor rupestre. Su primer poemario podría ser cortado en dos. Hay una parte, explica, que contiene una memoria más juvenil, “la memoria del punk, la memoria del rock mexicano” y otra donde desfilan los héroes de toda la vida. “Tal vez son José Revueltas, tal vez son Francisco Toledo. Tiene que ver con esas referencias, con Carlos Coffeen Serpas, de pronto las historias que cuenta Revueltas de las Islas Marías y de pronto Tijuana y luego la Ciudad de México”. Siempre está ahí la capital como escenario para disfrutar el silencio, enamorarse y extrañar, para charlar eternamente y caminar sin rumbo. “La Ciudad de México es milenaria, nosotros a veces no nos damos cuenta de la importancia que tiene vivir aquí y la historia que tenemos; ya es un lugar común, a veces se nos olvida que la Ciudad de México es el ombligo del mundo; es una ciudad con muchas historias, con una historia cinematográfica, con una historia amorosa, con una historia de violencia, pero con una historia de cultura”, piensa. Pero en los versos de Catana, la urbe transmuta a otras latitudes. También puede ser Tijuana, Guadalajara o la isla griega de Naxos. El viaje siempre está presente y a veces huele a cuero, a asfalto sazonado por el irritante calor o humedecido por la madrugada. “El viaje es un tema de mi poesía, pero también hay una reflexión clásica griega en el sentido de que hay una historia de los clásicos; Naxos es el viaje, el eterno retorno, Naxos es la Ciudad de México, pero también es Tijuana”. ¿Es la misma búsqueda la de la canción y la de poesía?, se le pregunta. “Sí, siempre es la misma búsqueda, sólo que en las canciones hay una métrica, porque tienes cuatro o tres minutos y medio para hacer una canción y cuando haces literatura eres más libre. Los pájaros de la cervecería tenía que aparecer, es un poco más un espacio de libertad”. ¿Quiénes dirías que son tus referentes poéticos? “Siempre uno va a los clásicos, pero yo menciono a Roque Dalton y siempre detrás de mí está Ramón López Velarde y también Eduardo Lizalde, pero también están los beat y los poetas mexicanos salvajes: Mario Santiago, Rubén Medina”. ADELANTO EDITORIAL El amante judío POR MANUEL ECHEVERRÍA MÚ SI CA Especi a l [email protected] 1 Elías Bruck dejó el expediente sobre el escritorio y observó las nubes del Mediterráneo con la sensación de que en el momento más inesperado iba a estallar otra bomba. Acababan de dar las nueve de la mañana y las oficinas habían empezado a llenarse con el rumor opresivo de los días difíciles, un fenómeno habitual en el Instituto de Inteligencia y Operaciones Especiales de Israel, donde la vida transcurría en un estado de emergencia constante. La mayor parte de las ciudades estaban infestadas de francotiradores y lobos disfrazados de corderos, y era imposible anticiparse a las intenciones de los fedayines, que tenían una capacidad asombrosa para esquivar los dispositivos de vigilancia y seguir dinamitando lugares vulnerables. Las explosiones podían oírse en quinientos metros a la redonda y dejaban siempre el mismo saldo: un montón de cadáveres y una columna de humo negro que se difundía por las azoteas y los patios y llenaba las casas con una oleada de pavor. Los otros problemas no eran menos graves: la hostilidad creciente de los países de la región, las redes de espionaje que el servicio había construido sin escatimar gastos ni sacrificios y solían derrumbarse de la noche a la mañana, la furia sagrada de Yasir Arafat, que una semana organizaba ataques demoledores desde los Altos del Con autorización del sello Océano presentamos un avance del más reciente título del narrador mexicano TÍTULO: El amante judío AUTOR: Manuel Echeverría EDITORIAL: Océano, México, 2016. Golán y la Franja de Gaza y la semana siguiente anunciaba a los cuatro vientos que los usurpadores judíos estaban condenados a refugiarse en el desierto o en el fondo del mar. El Bulevar Rothschild estaba cubierto de árboles frondosos y flores anaranjadas y por todas partes se anunciaba el retorno de la primavera: brisas tiernas, pájaros nuevos, aromas lejanos. Las playas de Tel Aviv se habían llenado de turistas y ladrones y el edificio se hallaba sumergido en la atmósfera densa de un baño turco donde los mozos y las secretarias iban de un lado a otro ideando métodos para defenderse del calor y darle respiración artificial a los aparatos de aire acondicionado, un mundo de papeles secretos y archivos herméticos de los que dependía la seguridad de millones de israelitas que habían pasado los últimos años viviendo en el filo del abismo. Ariel Feinberg revisó el expediente y miró el retrato oficial de Ben Gurión: un anciano fornido y distante que había terminado por convertirse en el padre espiritual de los judíos. “¿Qué opinas?” “ No s é — r e s p o n d i ó Bruck—. Por eso vine a hablar contigo. Algunas de las fotografías parecen ser irrebatibles.” Feinberg dejó pasar unos segundos. “Al contrario. Son menos confiables que las fotografías de diciembre.” “¿Por qué?” “Porque fueron tomadas a distancia y están llenas de sombras y zonas borrosas.” Feinberg volvió a examinar las fotografías. “Estas dos se aproximan un poco más, pero están lejos de ser convincentes.” “Un hombre cambia mucho en veinte años.” “Desde luego, pero da la impresión de que este hombre se convirtió en otro hombre.” “La gira por América es gracias a las aportaciones de Veronica Atkins y Susan Carmel Lehrman” ORQUESTA MARIINSKY Valeri Gergiev, director principal. Sergei Redkin, piano. Borodin: Danzas Polovtsianas Tchaikovsky: Concierto para piano y orquesta núm. 1 en si bemol menor, Op. 23 y Obertura 1812, Op. 49 Stravinsky: El pájaro de fuego (versión corta) AUDITORIO NACIONAL Reforma y Campo Marte Col. Bosque de Chapultepec Boletos en: Taquilla del Auditorio Nacional y www.ticketmaster.com.mx www.gob.mx/mexicoescultura www.cultura.gob.mx síguenos en: /SecretariaCulturaMx @cultura_mx 4: EXPRESIONES Domingo 28 de febrero DE 2016 : EXCELSIOR
© Copyright 2024