ESTRATEGIAS METACOGNITIVAS EN LA PREPARACIÓN MUSICAL PROFESIONAL: UN DESAFÍO Dra. Silvia Malbrán Facultad de Bellas Artes UNLP Facultad de Filosofía y Letras. Departamento de Artes UBA La formación musical especializada compromete habilidades metacognitivas. La reflexión sobre la práctica entraña un desafío para quien la realiza. ¿Qué es la Metacognición? Es una forma del pensar sobre el pensar, tipifica la configuración de un “estilo de pensamiento” crítico e independiente. Desde la década de los ochenta diversos estudios y proyectos se han dirigido a desarrollar la capacidad de los estudiantes para “aprender a aprender” enfatizando particularmente el papel de la actividad metacognitiva. “El músico requiere considerables habilidades metacognitivas relacionadas con la actividad y con la práctica que debe realizar, para lo cual necesita administrar el tiempo, mantener la concentración y la motivación” (Hallam, 1997:13-14). Existe consenso en que la música es una construcción de la mente, un juego de representaciones involucradas tanto en la recepción como en la producción. En el caso de los lenguajes, las representaciones están gobernadas por reglas abstractas (simbólicas) que suponen un mapeo entre símbolos y objetos o sucesos del mundo (Malbrán, 2002). Según Abeles (1995) las destrezas metacognitivas son indicadoras del grado de madurez del aprendiz; generalmente los individuos que las poseen son estudiantes no atados a los medios de instrucción formal tales como un maestro o un libro. Esto es propio además de un particular estilo de educador y de enseñanza: una de las metas de la formación musical debiera ser el desarrollo de músicos independientes, capaces de aprender por sí mismos y de seguir aprendiendo continuamente. En un estudio realizado con instrumentistas expertos y principiantes se constataron “amplias habilidades metacognitivas de los músicos profesionales: poseían una aguda percepción de sus propias fortalezas y debilidades y podían adoptar variedad de estrategias de acuerdo a sus necesidades. Estas cualidades no se restringían a cuestiones técnicas, de interpretación y de ejecución, sino que también se extendían a aspectos relativos al aprendizaje en sí mismo tales como concentración, planeamiento, monitoreo y evaluación” (Hallam, 1997:16). En el mismo estudio cuando se analizaron las relaciones entre organización y concentración se observó que cuanto más organizados eran los estudiantes mayores niveles de concentración obtenían. Esto ilustra el rol que cumplen la planificación y organización en la tarea; ambos componentes resultan básicos para enfrentar uno de los más importantes desafíos de la ejecución en vivo: la concentración sostenida. Si la meta es que el estudiante desarrolle estrategias de “conocimiento sobre el conocimiento” las preguntas del profesor debieran indagar los cómo y por qué de decisiones tomadas por los estudiantes 9 ¿por qué resolviste de este modo la conducción vocal? 9 cuál razón? te indujo a integrar de tal manera ambas líneas de pensamiento musical?, 9 ¿cómo se te ocurrió utilizar el corno con estos recursos ?, ó 9 ¿cómo hiciste? para memorizar el movimiento de la sonata?... Estas cuestiones ilustran al maestro sobre el “recorrido mental” del estudiante y ayudan al alumno a convertir conocimiento procedimental en declarativo y a tomar conciencia de sus propias estrategias de pensamiento. En la medida en que ellas se hacen concientes aumenta su poder transferencial. La investigación ha mostrado que reconocer los procesos empleados para arribar a una solución resultan tan importantes como la solución misma. Favorecer el pensamiento independiente demanda la flexibilidad por parte de los maestros. Por ejemplo, acciones tales como…. 9 conjugar la expresión individual con la adecuación estilística; 9 promover la búsqueda de estrategias superando el sentimiento de “marca del maestro” o “rasgos propios de la escuela”; 9 establecer un balance entre el repertorio elegido por cuestiones formativas y la elección personal de obras que el estudiante prefiere; 9 respetar la elección del estudiante de los recursos y repertorios para las clases de ensayo; 9 considerar las preferencias estéticas del alumno como aspectos a ser discutidos… Según Mayor y colaboradores (1995) se necesita una intervención externa (educativa, recuperadora) para poner en marcha la adquisición de estrategias de autoaprendizaje y autocontrol metacognitivo. Los estilos atribucionales se ponen en juego en los procesos de autoaprendizaje. Los estudiantes que han desarrollado habilidades metacognitivas cuando analizan sus actuaciones atribuyen sus progresos/ dificultades a factores internos como por ejemplo, monto de esfuerzo, cambio o fortalecimiento de determinados procedimientos. Aluden al uso de auto instrucciones -propias del pensamiento estratégico-, muestran perseverancia en la tarea y automotivación. Los estudiantes que no han reparado en ellas atribuyen sus progresos /dificultades a factores externos tales como suerte o disposición del maestro. Hallam (1997) observó que la práctica diaria era característica de los estudiantes con motivación interna, mientras que para los músicos con motivación externa la práctica resultaba azarosa e irregular. Ericsson et al. (2006) caracterizan al trabajo efectivo, reflexivo y productivo como “práctica deliberada y bien estructurada”; esto es ejercicio autocontrolado de la práctica con una meta y un plan, atributos todos ellos de las habilidades metacognitivas y del comportamiento experto. Los estilos atribucionales inciden en el grado de implicación del estudiante en su propio progreso y son decisivos para la elaboración del propio perfil como creador, intérprete o educador. ¿En qué grado las acciones del maestro pueden influir sobre el estilo atribucional del estudiante? Mencionaremos algunas de ellas 9 reforzar los aciertos y ayudar a explicitar las causas de los mismos aciertos: por ejemplo, lo has podido resolver porque esta vez como primer paso memorizaste la melodía ,luego prestaste atención a las relaciones tonales de las funciones armónicas, finalmente revisaste los resultados examinándolos “desde afuera, como si fuera realizado por otra persona”; 9 prestar atención a los factores internos minimizando los externos: sí, ya sé que consideras que por una cuestión de suerte esta melodía te resultó más clara; veamos ahora por cuáles razones la consideras más clara; 9 proveer variedad de obras que resulten fáciles de asimilar y retener auditivamente (Hallam,1997). 9 establecer comparaciones positivas entre actuaciones anteriores y la última actuación; más allá de que equivocaste algunas notas lo has podido tocar completo sin repetir los fragmentos con errores. Esto es un gran progreso; veamos ahora las dificultades de los fragmentos con errores. ¿Cuál fue tu primer error? Analicemos las causas..... ¿Y el siguiente?.... Otro comportamiento metacognitivo alude al concepto de autoeficacia. Según Bandura (1986) “es el enjuiciamiento que hacen las personas de su capacidad para organizar y ejecutar cursos de acción requeridos para lograr los tipos deseados de ejecución” Se ha visto que si “ la atribución interna para éxitos y errores es acompañada por un sentido de autoeficacia, el estudiante no solamente se siente responsable por su progreso, sino que también muestra confianza en sus destrezas y en sus habilidades necesarias para el mejoramiento futuro” (Chaffin y Lemieux, 2004:32) ¿En qué grado las acciones del maestro pueden incidir en la autoeficacia del estudiante? Dependiendo de la especialidad se señalan acciones del maestro tales como 9 asignar tareas acordes con el estado de preparación del alumno; si resultan demasiado fáciles no suponen un reto, esto es un desafío digno de atención; si son demasiado difíciles llevan al desánimo y abandono… 9 provocar la curiosidad por indagar una nueva técnica, sonoridad, habilidad mecánica o interpretativa… 9 subrayar la importancia de la nueva tarea para el progreso individual… 9 analizar críticamente la filmación de la práctica de la enseñanza realizada, actuando el estudiante como observador de su propia actuación… 9 considerar con el estudiante la grabación del ensayo coral por él dirigido, potenciando los aciertos, adoptando medidas para corregir los errores... Configurar una representación del discurso musical conforme va desarrollándose en el tiempo, necesita tomar en consideración el rol de la memoria que va almacenando información mientras se sigue escuchando o leyendo (Malbrán, 1997). La memoria es una habilidad básica para los músicos y su cultivo debiera promoverse desde los pasos iniciales. Un aquilatado desarrollo de la memoria se necesita para i) interpretar obras de largo aliento del repertorio instrumental (sonatas, suites);ii) dirigir obras corales o sinfónicas; iii) improvisar a solo o en conjunto; iv) orquestar una obra… La información entrante es recibida por la memoria sensorial que selecciona la información relevante; los datos retenidos ingresan a la memoria a corto plazo, centro operativo por excelencia; esta memoria (llamada también de trabajo) entra en relación con la información a largo plazo que tiene registradas nuestras experiencias anteriores significativas (Malbrán, 2006).Se ha visto que la memoria de trabajo juega un importante rol en la música por actuar en tareas tales como la lectura a primera vista y la improvisación. La nueva información puede ser retenida y relacionada con eventos del pasado y del presente, así como predecir o adelantar mentalmente los eventos futuros (Ginsborg, 2004). Los músicos concientes de sus estrategias memorísticas recuerdan paquetes de información significativa, poseen representación interna de sus componentes y pueden aludir a incidencias del discurso ya que advierten sus relaciones estructurales, todos ellos componentes de la Metamemoria. Ausubel (2002 ) distingue claramente entre memoria rutinaria y memoria significativa. Las estrategias de memorización pueden ser pasivas (memorizar sin tocar), prácticas que han dado en llamarse ensayo mental, también denominada memoria implícita. La idea básica es que los sentidos (visual, auditivo y kinéstesico) pueden ser usados para crear o recrear una experiencia en la mente que recupera el hecho físico al que representa (Connolly y Wiliiamon, 2004). Según Ginsborg, (2004) la memorización de obras extensas depende de la memoria “conceptual” y pone en juego la habilidad de conformar representaciones de la música en la mente en sus niveles global y local. En el nivel global la obra es representada como un todo, desde el comienzo al final; a nivel local la representación se conforma con las sucesiones de notas que integran las unidades menores o agrupamientos formales. ¿Cuáles acciones del maestro pueden incidir en el mejoramiento de las habilidades mnémicas del estudiante? analizar la obra con el alumno para advertir las segmentaciones y agrupamientos formales para usar dicha información a la hora de repetir un fragmento. Esto significa que por ejemplo en lugar de solicitar la repetición a partir del compás 17 se requiera partir del agrupamiento en que está incluido dicho compás. 9 seleccionar el repertorio de manera de progresar de microformas a obras de largo aliento; 9 actuar como modelo ejecutando de memoria diferentes obras del repertorio. 9 indagar los vacíos de memoria en términos de falta de control atencional, de lagunas de información, insuficiente automatización de 9 ciertos mecanismos técnicos, en lugar de adjudicarlo simplemente a falta de estudio. 9 prestar atención al uso simultáneo de diferentes modalidades de la memoria (por ejemplo, tactil, visual y melódica). 9 requerir la retención de fragmentos de extensión progresiva como estrategia previa a la trascripción al papel, descartando el dictado por compás o por células/motivos... 9 recuperar de la memoria a largo plazo obras ejecutadas en cursos anteriores. Otro componente metacognitivo se refiere a la predicción de la propia actuación que depende del control del nivel de performance por parte del estudiante. ¿En que grado las acciones del maestro pueden ayudar a configurar en el estudiante la predicción de su propia actuación? 9 evaluar juntos cada interpretación, para distinguir los procesos/ mecanismos/recursos correctos de los que no lo son… 9 ayudar al estudiante con baja autoestima a valorar sus logros y al excesivamente autoconfiado a realizar juicios realistas… 9 requerir opinión del estudiante, antes de la actuación, acerca del punto de dominio en que se encuentra respecto de la obra a ejecutar, para comparar luego con lo que realmente sucedió en la performance… 9 cotejar la interpretación realizada, con la ejecución de la clase anterior y analizar los progresos, retrocesos, dificultades surgidas o superadas... 9 orientar durante la clase la práctica efectiva: “obtener una visión global de la obra, identificar dificultades, seleccionar estrategias apropiadas, trabajar sobre secciones e integrarlas en un todo, monitorear el progreso, fijar metas y evaluar” (Hallam, 1997:31) Los músicos hacen uso de la metalógica, estrategia entendida como el uso conciente de esquemas y reglas, comportamiento presente en diversos desempeños musicales. ¿En qué grado las acciones del maestro pueden ayudar a la conformación de procedimientos metalógicos? 9 guiar la composición de motetes y fugas mediante la muestra y análisis de procedimientos prototípicos. La tarea consiste en aplicar reglas estilísticas atendiendo a una suma de variables sin descuidar la continuidad discursiva y las reglas de buena formación. Esto no se limita a procedimientos de ensayo-error; es necesario recurrir a ejemplos y contraejemplos, en este caso de la sintaxis barrocotonal… 9 analizar la producción creativa (composición musical) brindando razones acerca de los puntos fuertes o débiles, de la presencia o falta de elaboración de determinados recursos; es decir, solicitando y brindando razones acerca de la eficacia de los procedimientos utilizados. 9 compartir con el estudiante el análisis crítico del guión de la clase que él ha preparado, analizando la graduación del contenido, los recursos seleccionados, los arreglos musicales compuestos… 9 revisar con el estudiante la codificación de la melodía escuchada en términos de su coherencia melódico-tonal, la grafía de las alturas de acuerdo al contexto, la distribución de los valores rítmicos de acuerdo a la estructura métrica... 9 evaluar con el estudiante la instrumentación de fragmentos para los cuales ha seleccionado los instrumentos, la parte y rol que asigna a cada uno, el registro en el que los ubica de acuerdo al resultado expresivo buscado... En el vasto campo de la Metacognición un lugar destacado lo ocupan las habilidades metalinguísticas que han sido objeto de numerosos estudios y especulaciones. Uno de los modelos de mayor predicamento ha sido el de Karmiloff- Smith (1985, 1986,1987). Describe los tipos de representaciones cognitivas mediante conocimientos implícitos, explícitos no concientes, explícitos concientes, codificados lingüísticamente y verbalizables. La lectura implica estrategias activas de decodificación que conducen a la comprensión. Según Baker y Brown (1981)1 se trata de 1) comprender las demandas implícitas y explícitas de la tarea 2) identificar los aspectos importantes del mensaje; 3) centrar la atención en los contenidos principales; 4) controlar la marcha para saber si se está comprendiendo 5) preguntarse acerca de si se marcha en el sentido correcto, 6) emprender acciones correctoras. 1 Citado por Mayor et al (1995 ) Un ejemplo de tales desempeños es la lectura cantada de melodías a primera vista. Analicemos cada una de las estrategias. Para 1) comprender las demandas implícitas y explícitas de la tarea, el lector necesita hacer una primera “ojeada” de la partitura para advertir las exigencias que demanda 2) identificar los aspectos importantes del mensaje, atendiendo a la configuración tonal y métrica 3) centrar la atención en los contenidos principales, analizar las sucesiones armónicas y sus relaciones con la melodía; representarse internamente las sucesiones acórdicas; identificar los puntos de mayor dificultad melódica y rítmicométrica; elegir las alturas previas que servirán como puntos referenciales para la resolución de los pasajes de mayor dificultad (en base a la predicción realizada); elegir el patrón métrico a tomar como referencia para medir adecuadamente los grupos rítmicos de mayor dificultad… 4) controlar la marcha para saber si se está comprendiendo, leer en audición interna el total de la melodía; revisar recorriendo por grado conjunto los intervalos melódicos amplios, incómodos o enlazados con los previos de manera no frecuente. 5) preguntarse acerca de si se marcha en el sentido correcto, retornar a las alturas tonales claves para controlar la marcha en los puntos de mayor cromatismo o con vinculaciones melódicas infrecuentes; analizar la continuidad en términos de la estabilidad del tempo; integrar el discurso de manera fluida atendiendo a las indicaciones dinámicas y agógicas o incluirlas si no estuvieran consignadas. 6) emprender acciones correctoras, revisar las estrategias de ayuda elegidas en función de su operatividad al momento de aplicarlas (eventualmente remplazarlas por otras de mayor eficacia); estimar de manera objetiva los resultados afianzando las estrategias elegidas y tendiendo a obtener un homogéneo resultado entre los segmentos de menor y mayor dificultad. Los elementos de juicio presentados intentan dar cuenta del importante papel que juega la planificación de las tareas, su revisión durante la puesta en marcha y en los momentos posteriores a la actuación, “metacomponentes” según Sternberg (1996).Gran parte de los estudiantes pueden acceder al dominio de estrategias del tipo de las señaladas. El meollo de la cuestión es tornarlas habituales y concederles un lugar de preeminencia en las interacciones maestro- alumno de la formación musical profesional. Referencias Abeles,H.,Hoffer,Ch. Y Klotman,R.(1995).Music Education.2da ed. Londres:Prentice Hall Ausubel,D.P. (2002). Adquisición y retención del conocimiento. Una perspectiva cognitiva. Barcelona: Paidós. Bandura,A. (1986).Social Foundations of Thought and Action: A Social Cognitive Theory.N.J: Prentice Hall. Chaffin, R. y Lemieux,A. (2004). General perspectives on achieving Musical Excellence. En A.Williamon (ed.). Musical Excellence. Londres: Oxford. Connolly,Ch. y Wiliiamon,A. (2004). Mental skills training. En A. Williamon (ed.). Musical Excellence.Londres: Oxford. Ericsson,A., Charnss,N., Felfovich, P. y Hoffman,R. (2006).The Cambridge Handbook of Expertise and Expert Performance. New York: Cambridge University Press. Ginsborg,J. (2004). Strategies for memorizing music. En A. Williamon (ed.). Musical Excellence.Londres: Oxford. Malbrán, S. (1997). Música y Metaudición. Algunas reflexiones para su estudio.Orfeotrón 2,40-46. Malbrán, S. (2002,a ). La Sincronía Rítmica como forma particular de la Organización Temporal. Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación. Universidad Nacional de La Plata. (Tesis inédita). Malbrán, S. (2006). Teoria musical y psicologia de la música: nuevas visiones para la pedagogía. Cursos de verano: Universidad de Santander. (En prensa). Mayor,J., Suengas, A. Y González Marqués, J. (1995).Estrategias metacognitivas. Madrid: Síntesis Sternberg,R. (1996).La teoria triárquica de la Inteligencia: comprender el autogobierno mental. En A. Puedo Los componentes cognitivos de la inteligencia. Barcelona: Paidós.
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