Para mujeres que se atreven a contar su historia

Para mujeres que se atreven a contar su historia
Año 16, No. 51
Otoño 2014
DIRECTORIO
ÍNDICE
Sede demac
Chihuahua
Amparo Espinosa Rugarcía
Directora
Graciela Enríquez Enríquez
Coordinadora editorial
Amaranta Medina Méndez
Araceli Morales Flores
María Suárez de Fenollosa
Ángeles Suárez del Solar
Colaboradoras
2004 - 2014
04
Guadalupe Payán Araiza
Coordinadora de la sede demac Chihuahua
Blanca Delgado Ocampo
Secretaria
Zurdo Diseño
Diseño Editorial: Rodolfo Taboada
Ilustraciones: Mariana Zúñiga
Impreso en Nea Diseño
Dr. Durán No. 4 Desp. 118, Doctores
Cuauhtémoc 06720 México, D.F.
demac Para mujeres que se
atreven a contar su historia,
es el órgano de expresión y difusión de
Documentación y Estudios de Mujeres, A.C.
Publicación trimestral. Año 16, Núm. 51
Fecha de impresión: septiembre de 2014
Con un tiraje de 2,000 ejemplares.
Certificados de licitud de título y contenido:
números 12493 y 10064 otorgados por la
Secretaría de Gobernación.
Certificado de reserva:
número 04-2012-121817111500-102
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José de Teresa No. 253, Tlacopac, San Ángel
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Derechos reservados. Se prohíbe la
reproducción total o parcial por cualquier
sistema o método, incluyendo electrónico
o magnético, sin previa autorización
del editor.
Diez años, ocho municipios y cientos
de mujeres escribiendo su historia
14
Las mujeres de los miércoles
15
Mi experiencia como tallerista
16
Que tu voz no se pierda
17
Hermandad mágica
18
Las letras como tabla de salvación
19
¡Prepárate!
Laura Elena Gaytán Saldívar
Tallerista demac en Ciudad Cuauhtémoc, Chih.
María de la Luz Torres Chacón
Tallerista demac en la ciudad de Chihuahua.
Dora María Fernández Rosales
Tallerista demac en la ciudad de Chihuahua.
María del Socorro Ordóñez Villagrán
Tallerista demac en la ciudad de Chihuahua.
María Guadalupe de los Ángeles Monárrez Villalobos
Tallerista demac en Hidalgo del Parral, Chih.
Manuela Moreno Ontiveros
Tallerista demac en la ciudad de Chihuahua y Aldama.
E ditori a l
L
a sede demac en Chihuahua cumple diez años. Gracias a
la conducción de la profesora Guadalupe Payán, hoy es
ampliamente conocida y respetada en ese estado.
Tanto en su capital como en otras ciudades, hay mujeres que
se han atrevido a hacer suya la escritura, transformando así sus
vidas, las vidas de quienes las rodean y de quienes las leen.
Hoy, el poder de esta escritura se puede sentir en Chihuahua.
Admira el poder de convocatoria del equipo demac en las distintas comunidades de aquel estado; la creatividad y entrega
de sus talleristas y la colaboración voluntaria de las atrevidas
mujeres que han contado su historia por escrito. Su ánimo
contagia a otras instituciones que, al comprender el alcance
de nuestro propósito, comparten el impulso de demac. ¡Felicidades a las valientes y decididas chihuahuenses!
Va en esta edición un testimonio del andar de la escritura
en las mujeres, como poderosa herramienta de transformación y empoderamiento.
Ángeles Suárez del Solar
Coordinadora de las sedes demac
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Diez años, ocho municipios y cientos
de mujeres escribiendo su historia
Guadalupe Payán Araiza
Coordinadora de la sede demac Chihuahua
E
n diez años se pueden recorrer
muchos caminos, visitar
muchas ciudades y sacudir muchas
conciencias.
Los Talleres autobiográficos para
mujeres que se atreven a contar
su historia®, ideados, promovidos
e impartidos por Documentación
y Estudios de Mujeres, A.C. (demac),
asociación civil dirigida por su
fundadora, la doctora Amparo
Espinosa Rugarcía, se desarrollaban
con éxito en 2003 en la capital de la
república, en Puebla y en Querétaro.
¿Sería posible que acá, en el norte
bárbaro, en la tierra de la apachería
y los hombres rudos, tuviera cabida
una acción sostenida que apostaba
a la valentía y la sensibilidad de
las mujeres?
Fue una mujer chihuahuense, Guadalupe Payán
Araiza, Lupita, quien asumió la coordinación de
la sede demac en Chihuahua a partir de enero de
2004, invitada por Amparo Espinosa Rugarcía para
hacer realidad este proyecto.
Ella, una mujer atrevida y decidida, aceptó el
reto, y después de una etapa de planeación que
incluyó viajes y acciones concretas de difusión
en distintas ciudades del estado, el programa
estuvo listo.
A mediados de 2004 se inició el primer Taller autobiográfico para mujeres que se atreven a contar
su historia®. Fue en la ciudad de Chihuahua, en un
salón de la biblioteca municipal Miguel de Cervantes Saavedra, ubicada en el parque Sebastián
Lerdo de Tejada.
Ahí, bajo la responsabilidad de Alma Montemayor Jáuregui, quien sería la primera coordinadora
de Talleres demac en el estado, una docena de
mujeres expectantes acudió puntualmente a su
cita semanal para compartir recuerdos, remover
emociones y capturar en el papel sus experiencias
más significativas.
Ese mismo año, apenas dos meses después
de iniciado el taller, la coordinadora de demac en
Chihuahua hizo las gestiones necesarias para
presentar la obra de teatro Bajo condena, que
resumía los dramáticos testimonios capturados en
el libro del mismo nombre, editado por demac, y que
había subido ya a escena en los Centros de Rehabilitación de Chihuahua y Ciudad Juárez, a los que
asistieron alrededor de trescientas internas. La
presentación fue todo un éxito y conmovió al público que llenó en su totalidad el teatro de cámara
Fernando Saavedra. Fue un signo de apertura
y aceptación: la palabra de las mujeres trasponía
límites.
El éxito del primer taller animó a Lupita a extender la experiencia. El estado de Chihuahua tiene
67 municipios y decidió promover el trabajo en las
cabeceras principales. Fue así como, en agosto de
2005, arrancó un taller en Hidalgo del Parral, Chih.
El grupo, integrado por las aguerridas mujeres de
esa revolucionaria tierra, estuvo coordinado por
María Luisa Jara Rodríguez.
En el mes de julio del mismo año se habían
inaugurado las oficinas demac, en la calle 32 núm.
1611, colonia Santa Rita, en la ciudad de Chihuahua. El nuevo espacio facilitó una estrecha
comunicación con la oficina de la ciudad de México, propició la adquisición de mobiliario adecuado
para hacer más cómodas las sesiones del taller
y sentó las bases para expandirse a otros municipios. Tener un espacio para la sede demac Chihuahua afianzó y proyectó a la asociación civil en
la sociedad.
Cada uno de los años siguientes trajo
novedades. En 2006, bajo la coordinación de Laura Elena Gaytán Saldívar,
se abrió el Taller demac de Autobiografía en Ciudad Cuauhtémoc, Chih., integrado por valientes mujeres que desde un inicio se atrevieron a abordar
temas delicados, profundos e íntimos.
Era importante llevar a dicho municipio esta posibilidad de expresión, porque es la antesala para incursionar en
la sierra.
Ante la gran necesidad de estos espacios para
que las mujeres de Ciudad Juárez, Chih., se manifestaran, en 2007, demac México decidió abrir en
esa ciudad fronteriza una sede independiente a
la de la capital del estado para que las juarenses
se atrevieran a romper el silencio al apropiarse
de la escritura.
En 2007, un grupo de entusiastas mujeres de
Jiménez, Chih. deseosas de escribir su historia,
integraron allí el primer Taller demac de Autobiografía, coordinado por María Luisa Jara Rodríguez, y
en 2008, las llamadas “Vencedoras del desierto”
iniciaron el Taller demac de Autobiografía en Delicias, Chih., coordinado por María de Lourdes
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Valdés Gómez. Durante este tiempo se visitaron
los municipios de Casas Grandes y Nuevo Casas
Grandes, donde se realizaron reuniones organizadas por demac.
Cada vez más se avivaba el interés de las mujeres y el de la sede demac Chihuahua por extender este trabajo a otros municipios.
En 2008 surgió la posibilidad de comenzar en
el municipio de Bocoyna, específicamente en San
Juanito y en Creel, lugares recónditos de la sierra
Tarahumara. Trabajar entre las montañas con las
mujeres de la sierra no fue fácil, pero sí muy satisfactorio; se organizó un grupo en Creel y así se
inició el Taller demac de Autobiografía, coordinado
por María del Socorro Ordóñez Villagrán.
Año con año se ha conseguido que varios
grupos de mujeres trabajen simultáneamente en
siete municipios con un propósito común: atreverse a contar su historia.
La necesidad de las mujeres que, al concluir el
Taller demac de Autobiografía, deseaban continuar
escribiendo, motivó el surgimiento de un nuevo
taller llamado Grupo demac, que desde 2006 funciona en la ciudad de Chihuahua, Ciudad Cuauhtémoc, Chih. y en Hidalgo del Parral, Chih.
Debido a la crisis social y existencial,
y a la fuerte necesidad de expresarse
de las adolescentes, se crearon los
talleres juveniles para mujeres que
se atreven a contar su historia, al que
asistieron chicas entre 13 y 17 años,
que contaron con estos espacios de
expresión a partir de 2006 y fueron
coordinados por María Cristina Estrada Hernández y Griselda Vega Baca.
¿Y las historias de mujeres en reclusión? Ante
este cuestionamiento y el antecedente de los
concursos nacionales que demac lanza en los Centros de Readaptación Social (Ceresos) cada dos
años, para invitar a las reclusas a participar con
su autobiografía, se realizaron las gestiones para
ingresar al Cereso en Chihuahua. Con el apoyo de
las autoridades correspondientes del gobierno del
estado, se arrancó en 2008 el primer taller autobiográfico para mujeres en reclusión, en la Unidad de
Bajo Riesgo —la antigua Penitenciaria del estado—,
coordinado por María de la Luz Torres Chacón.
Posteriormente, Manuela Moreno Ontiveros continuó trabajando en el Cereso de Aquiles Serdán
en Chihuahua.
El grupo de nueve talleristas que impartía los
Talleres demac en los siete municipios dio pie a dos
Encuentros de coordinadoras de Talleres demac,
para intercambiar experiencias didácticas y
estrategias al trabajar con la escritura autobiográfica femenina.
Para llevar estos espacios de expresión a más
grupos y más municipios, la sede demac Chihuahua
estableció alianzas y relaciones públicas con diversas instituciones de cultura, educativas, gubernamentales, municipales y asociaciones civiles como
el Instituto Chihuahuense de la Mujer, el Centro de
Derechos Humanos de las Mujeres, A.C., los institutos y las instancias municipales para mujeres
en las diversas localidades, el Centro de Atención
a las Mujeres y Familias en situación de Violencia
(Musivi), el Consejo Estatal para la Prevención y
Atención a la Violencia (Cepavi), la Escuela Normal del Estado Luis Urías Balderráin, la Escuela
Normal Superior José E. Medrano, escuelas secundarias, Servicios Educativos del Estado de Chihuahua y la Universidad Autónoma de Chihuahua,
entre otras.
El grupo de Talleristas de demac se incrementó,
integrándose al equipo María Cecilia Ávila Tabares
en Jiménez, Chih., María Guadalupe Monarrez
Villalobos en Hidalgo del Parral, Chih. y Dora María
Fernández Rosales en la ciudad de Chihuahua.
En 2009, la sede demac Chihuahua cumplió su
quinto aniversario y para festejarlo se organizaron diversas actividades, en las que contamos
con la presencia de la directora y fundadora de
demac, Amparo Espinosa Rugarcía. Para recibirla,
se organizó una reunión-cena con el personal de
la sede demac Chihuahua y las talleristas de los
municipios en que se estaba trabajando, para
compartir experiencias e inquietudes; al final se
tomó la fotografía del recuerdo.
Al día siguiente se llevó a cabo una rueda de
prensa-desayuno, en la que los medios de comunicación preguntaron todo lo relacionado con el
trabajo desarrollado en el estado de Chihuahua
durante este tiempo y la respuesta de las mujeres a este proyecto.
Posteriormente se llevó a cabo el Encuentro
de demac con instituciones gubernamentales,
municipales, educativas, de cultura, institutos
e instancias de mujeres que han colaborado
con la asociación y a las que la doctora les hizo
entrega de un reconocimiento por su apoyo al
facilitar el trabajo con las mujeres. Asimismo, la
profesora Guadalupe Payán Araiza, coordinadora
de la sede, recibió una placa de agradecimiento
por su ardua labor durante estos cinco años y la
de su equipo de trabajo.
Un grupo de mujeres de diversos municipios
del estado, a nombre de la sede demac Chihuahua,
entregó a la Dra. Amparo Espinosa Rugarcía una
placa de reconocimiento por el apoyo brindado a
las mujeres chihuahuenses durante este tiempo.
Para terminar el festejo del quinto aniversario,
en el Teatro de Cámara Fernando Saavedra, a las
siete de la tarde, se presentó el libro ¡Ah, Chihuahua! ¡Se atrevieron!, obra de reciente edición
con textos de mujeres chihuahuenses, acto al que
asistieron más de 300 personas.
En el 2009 se impartió el Taller de Biografía,
para rescatar la historia de otras mujeres, coordinado por Alma Montemayor Jáuregui.
Estos cinco años fueron de arduo
trabajo, de nuevos retos y de
grandes logros.
El 2009 fue un año de cambios. demac México
visitó sus distintas sedes para entrevistar al personal y a las talleristas, y revisar el funcionamiento
y las actividades en cada una de ellas, y proponer
luego un nuevo programa de trabajo que las
unificara.
A partir de 2010, surgieron más proyectos, hubo
cambios en los ya existentes y se establecieron
nuevas disposiciones; este año fue un parteaguas
en las actividades que demac estaba desarrollando.
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• En los Talleres autobiográficos para mujeres
que se atreven a contar su historia®, que ya
existían, se determinó que durarían 24 sesiones semanales.
• Los Talleres Para perderle el miedo
a la escritura® fue un nuevo proyecto
que rompió con patrones adoptados
en el tiempo. Vinieron a dinamitar
obstáculos, no sólo para abrir camino en ideas y formas, sino también
para construir puentes entre demac
y los grupos más vulnerables, y permitieron llegar a más mujeres, trabajar cuatro horas con ellas y lograr
que perdieran el miedo a la escritura.
• Surgen los Círculos de Encuentro entre Mujeres demac, grupos autogestivos integrados por
aquellas que ya concluyeron el Taller demac de
Autobiografía y desean seguir escribiendo, coordinando ellas mismas las sesiones semanales
a las que asisten.
• Los eventos demac, donde se presentan los
libros de la editorial, continuaron, asimismo los
cafés literarios, en los que se leen los escritos
elaborados por las participantes en los talleres.
Los años 2009, 2010 y 2011 fueron de una gran
inseguridad social en el estado de Chihuahua,
motivo por el cual nos retiramos del municipio de
Bocoyna, de Ciudad Juárez y de los Ceresos. También suspendimos los talleres juveniles.
El tiempo avanza y la sede demac Chihuahua
en 2012 se encuentra ante nuevos retos, como el
concurso binacional La Crisis Global y yo, Barcelona/Chihuahua, lanzado por la Dirección general
de demac, en el que se invitaba a las mujeres de la
ciudad de Chihuahua y a las de Barcelona a participar con escritos autobiográficos sobre la crisis
global. Las mujeres se despojaron de sus miedos,
se pusieron a escribir y desfilaron para entregar
sus escritos. Participaron 88 de Chihuahua y 27 de
Barcelona, y el concurso fue un éxito; ellas se atrevieron a compartir sus crisis económicas, sociales,
culturales, emocionales y de salud, entre otras,
cómo las fueron enfrentando y lo que aprendieron.
El resultado fue el libro La crisis global en Barcelona y Chihuahua. Escritos autobiográficos de mujeres, en el que aparecen los dos escritos del primer
lugar y diez ganadoras de mención honorifica.
Otro reto fue la apertura de demac en el municipio de Aldama, Chih., lugar donde las mujeres han
recibido estos espacios con gran disposición
y participación.
Interesante fue la invitación de la Dirección
general para compilar los escritos elaborados en
los Talleres autobiográficos y en los Círculos de
encuentro realizados en 2012. Fue una ardua tarea
que valió la pena, y se lograron reunir 69 textos
de Ciudad Cuauhtémoc Chih. y la ciudad de Chihuahua, que formaron parte de la edición del libro
¿Dónde quedo yo? Mujeres que se arraigan con la
escritura.
Si bien el año 2012 fue fructífero, en el mes de
diciembre sufrimos la gran pérdida de nuestra
querida compañera Alma Montemayor Jáuregui,
primera tallerista en la sede demac Chihuahua,
quien laboró con nosotros desde 2004, fecha
en que se inauguró la sede, hasta julio de 2012,
cuando debió retirarse a causa de su enfermedad.
¡Descanse en paz!
En abril de 2013, ante la necesidad urgente de
contar con más espacio para facilitar el desarrollo
de nuestras actividades, se ampliaron las oficinas
de la sede demac Chihuahua.
Hemos trabajado con mujeres de grupos
vulnerables en centros de adicción, en centros
comunitarios, en los Ceresos, en albergues, en
casas-hogar de niñas, con mujeres en situación
de violencia, con mujeres de preferencias sexuales diferentes, esposas de policías caídos en
cumplimiento de su deber, familiares de enfermos de sida, familiares de enfermos alcohólicos,
familiares de mujeres desaparecidas, familiares
de personas discapacitadas, vendedoras ambulantes, sexoservidoras, mujeres en las escuelas de
equidad, mujeres de bajos recursos económicos,
madres y jefas de familia, mujeres divorciadas,
usuarias de diversas asociaciones civiles, mujeres del medio rural, mujeres de la tercera edad y
menonitas, entre otros grupos. Mujeres a quienes
agradecemos la oportunidad de sembrar en ellas
la posibilidad de cambiar su vida al apropiarse de
la escritura.
Fachada oficinas Sede demac Chihuahua.
Café Literario Café Mandala.
Café Literario demac cedehm.
Al volver la vista atrás y sumar las distintas actividades que se han realizado
a lo largo de estos diez años, en ocho
municipios, la cifra crece.
En estos diez años, para que la mujer se apropie de la escritura se han impartido:
• 65 Talleres autobiográficos para mujeres que
se atreven a contar su historia®, a los que han
asistido 499 mujeres que se han apropiado de
la escritura.
• 131 Talleres Para perderle el miedo a la escritura® a los que han asistido 1 254 mujeres de
los grupos más vulnerables.
• Actualmente están funcionando cuatro Círculos
de Encuentro entre mujeres demac, a los que
asisten semanalmente 40 mujeres.
Para la proyección de la escritura autobiográfica:
• Se han organizado 59 eventos culturales demac
en los diversos municipios, donde se han presentado las nuevas obras de la editorial demac
y a los que han asistido 6 410 personas.
• Se realizaron 15 Cafés literarios Grupos demac,
donde las mujeres leen escritos autobiográficos; han asistido 1 110 personas.
• Se ha concurrido anualmente a las ferias
estatales del libro, para promover a la editorial demac y se ha participado en otros eventos
como talleres y lecturas en atril.
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• En el libro de 42 mujeres latinoamericanas en
el que hablan sobre el Cuerpo, sexualidad y
pecado desde la religión y la espiritualidad se
publicó el escrito de Xitzali, mujer chihuahuense, titulado “Mente, cuerpo y espíritu, un
encuentro con Dios”, resultado del concurso
2000-2001.
• El libro Bajo condena, resultado del Concurso
Premios demac Penitenciario 2002, en el que
ganó Alexa, una chihuahuense, con el escrito
“Mi diario”.
Stand demac en la 14ª feria del Libro de Chihuahua 2013
Se han distribuido los libros de la editorial demac
para su venta en la librería Don Quijote y en la
tienda de regalos Patty Ann de Ciudad Cuauhtémoc, Chih. y en Hidalgo del Parral, Chih. en la
librería Urquidi y en el Palacio de Alvarado. En la
ciudad de Chihuahua se tienen a la venta en la
sede demac. En Ciudad Juárez, Chih., se instalaron
en cinco librerías, en centros de investigación y
educación superior. También en esta ciudad se
crearon las librerías itinerantes de demac para su
venta en eventos, parques, ferias, festivales de
arte, etcétera.
Chihuahua cuenta con cinco bibliotecas circulantes en los municipios, para que las mujeres de
los talleres autobiográficos se lleven los libros de
la editorial, con la finalidad de que lean las diversas historias y se despierte su interés para que
escriban la suya.
Las mujeres chihuahuenses participan cada vez
más en los concursos Premios demac nacionales e
internacionales, y no sólo van abriendo brecha en
la escritura autobiográfica, sino que también van
dejando huella en diversas publicaciones:
• El libro ¡Ah, Chihuahua! ¡Se atrevieron…! Texto
en el que participaron 43 mujeres chihuahuenses y que se hizo en conmemoración del quinto
aniversario de la sede demac Chihuahua.
• El libro La abuela de los baños, obra ganadora
del Concurso Premios demac 2009-2010, de la autora chihuahuense Josefina Gutiérrez Martínez.
• El libro La crisis global en Barcelona y Chihuahua. Escritos autobiográficos de mujeres.
Resultado del concurso binacional Barcelona/
Chihuahua realizado en 2012; en esta obra
participan con sus historias seis mujeres chihuahuenses y seis de Barcelona.
• El libro ¿Dónde quedo yo? Mujeres que se
arraigan con la escritura, obra que contiene 69
textos elaborados por mujeres que participaron
en los Talleres autobiográficos y en los Círculos
de encuentro del año 2012.
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Se han publicado los siguientes boletines
informativos Red demac:
• Número 19, Invierno 2005, incluyó textos
de mujeres participantes en el primer
taller autobiográfico realizado
en Chihuahua.
• Número 37, Verano 2010. Chihuahua
2010. Crónica de una aventura literaria.
• Número 38, Invierno 2010. Textos autobiográficos de las mujeres en reclusión
leídos en el café literario.
• Número 47, Otoño 2013, versó sobre
el concurso La crisis global y yo
Barcelona/Chihuahua.
La escritura autobiográfica es el resucitador de las historias femeninas, que
recobran vida al ser plasmadas en
papel por las talladoras de palabras.
Cada escrito es para dejar un testimonio vivo y contundente de lo que hace
y aporta la mujer a la sociedad.
Cuando la mujer entra a un Taller demac de Autobiografía es porque ya ha vencido sus miedos internos y se atreve a escribir y romper con el silencio. Deja de ser prisionera de su propia represión y
recupera el derecho de expresar lo que piensa y lo
que siente, para ser más libre, ser ella misma.
La mujer que escribe su historia recupera su
autoestima, su alegría, su seguridad, su esencia.
Empieza a liberarse de los viejos patrones, de las
ataduras y programaciones aprendidas o impuestas. Encuentra sentido a su vida, se transforma
física, mental y espiritualmente. Se fortalece, se
concientiza y se hace responsable de su vida.
Toma decisiones, deja fluir su creatividad, emprende y asume nuevos retos, deja salir todas sus
potencialidades y habilidades para realizar proyectos en beneficio de ella y de los demás.
Descubre su luz, su fuerza y su fortaleza, para
lograr lo que se proponga.
“Gracias a la pasión, la entrega, el nivel de
compromiso y el gran empeño del equipo de talleristas y del personal, la sede demac Chihuahua, en
el transcurrir del tiempo, no sólo ha proyectado
ante la sociedad su misión, sino que la ha hecho
realidad al lograr que en estos diez años 499 mujeres chihuahuenses se hayan apropiado de
la escritura”.
Guadalupe Payán Araiza
Nació en Delicias, Chih., hace 54 años. Es
maestra jubilada, madre de una hija y un
hijo, de quienes está plenamente orgullosa, pues ve en ellos su mejor obra.
Mujer revolucionaria de corazón y de nacimiento, atrevida y muy apasionada. Está
plenamente convencida de que cada ser
humano es responsable de su felicidad. En
su caminar por la vida, ha aprendido que
no hay verdades absolutas, que cada quien
tiene su verdad y todas son respetables.
Considera que la escritura autobiográfica
femenina es una herramienta muy poderosa para que la mujer se encuentre, se
conozca a sí misma y tome conciencia de
su vida.
Es coordinadora y fundadora de la sede
demac Chihuahua desde enero de 2004 hasta la fecha. Con su valioso equipo de trabajo ha llevado la escritura autobiográfica a
siete municipios de su estado. Ha creado y
coordinado dos proyectos editoriales de escritura autobiográfica: Huellas del tiempo.
Historias vivenciales del magisterio
y el libro ¡Ah, Chihuahua! ¡Se atrevieron…!
Textos autobiográficos de mujeres
chihuahuenses.
Coordinó la compilación de los escritos
del libro ¿Dónde quedo yo? Mujeres que se
arraigan en la escritura.
Publicó su libro Pensamientos a corazón
abierto en 2002. Además, se han publicado
algunos de sus escritos autobiográficos en
libros colectivos y en el Boletín estacional
Red demac. Para mujeres que se atreven a
contar su historia.
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Las mujeres de los miércoles
Laura Elena Gaytán Saldívar
Tallerista demac en Ciudad Cuauhtémoc, Chih. Septiembre, 2006.
L
as mujeres de los miércoles tatuaron en mi
entraña sus alegrías y desventuras.
Impía horadé en las oquedades de sus almas, develando el miedo oculto tras la máscara
de su sonrisa fácil.
Con las mujeres de los miércoles pincelé
nuestra común historia, para rescatar del olvido
a hechiceras y profetas quemadas en la pira
medieval.
Cuando se marchan, por instantes una niebla
fría arropa mi alma. Las veo partir más libres,
más fuertes, más bellas y más felices, y el
murmullo de sus voces me susurra al oído que
buenos vientos soplan en sus nuevos rumbos.
Con las mujeres de los miércoles lloré a mis
muertos, honré a mis ancestros y celebré la
vida.
Con sus revelaciones… Resolví el acertijo de
mi propia existencia.
Laura Elena Gaytán Saldívar
Las precisiones fueron puntuales, debía ocupar
no más de media cuartilla para sintetizar la complejidad de sus luces y sus sombras, para exaltar
con elocuente grandilocuencia la notoriedad de
sus logros, y para exponer ante un interlocutor
anónimo las raíces que le anclan a la tierra.
Revelar los valores que preserva como dogmas
y los sueños que persigue mirando las estrellas;
procurando —desde luego— poner a salvo de
miradas indiscretas, los demonios nacidos en
las noches oscuras de su alma, con quienes,
confiesa, ha aprendido a cohabitar en amistosa cofradía.
La forzada introspección le condujo por el
sendero de la única e incuestionable verdad: Ser
quien ha podido ser. Se indigna y se revela ante
las imposiciones y mandatos que pretenden moldearla a modo. Celebra la vida riendo por alguna
bobería con la misma intensidad que llora cuando
el dolor y la tristeza arañaron su alma.
Con valor, y sin tomar atajos, camina de la
mano de la vida, en este tiempo y en este espacio, para seguir siendo Laura, la encantadora de
golondrinas, pero nostálgica siempre en abril,
curandera de almas por vocación y hasta el final
de los tiempos, Mujer Subversiva por Convicción.
Mi experiencia como tallerista
María de la Luz Torres Chacón
Tallerista demac en la ciudad de Chihuahua. Agosto, 2008.
V
iví la experiencia de tomar un Taller demac de
Autobiografía. Indudablemente que ser participante en este taller me permitió entender
muchos momentos de mi vida que, sin darme
cuenta, habían quedado oscuros y sin explicación.
Conocí las bondades del escrito autobiográfico y
me dispuse a compartirlo con otras mujeres.
En 2008 me inicié como tallerista en la Unidad
de Bajo Riesgo; pensamos que las mujeres se iban
a limitar a expresar sus ideas con confianza y libertad. Durante 16 meses, semana a semana acudí al
centro penitenciario a impartir mi sesión de escritura. Al realizar cada ejercicio vi en cada mujer la
cara de la inocencia, especialmente al escribir sus
relatos de infancia. A algunas de ellas, temprano
las había alcanzado la desventura, y sus rostros
cambiaron por la dureza del desamor, el abandono o la violencia. Entre recuerdos, lágrimas, risas,
propósitos y planteamiento de nuevas metas, siete
mujeres lograron escribir la historia de su vida.
María de la Luz Torres Chacón.
Es originaria de la ciudad de Chihuahua. Desde
muy pequeña mostró interés por el magisterio.
Luego de concluir su educación básica, cursó la
carrera de Educación preescolar y, posteriormente, obtuvo el título de licenciada en Lengua y Literatura, lo que le dio la oportunidad de laborar por
más de 30 años en el sistema educativo. Ya jubilada, cursó el Taller demac de Autobiografía, donde
fue invitada a colaborar como tallerista, actividad
que actualmente realiza. Es coautora en los libros
¡Ah, Chihuahua! ¡Se atrevieron…!, ¿Dónde quedo
yo? Mujeres que se arraigan con la escritura y
Herencia de amor, así como de algunas colaboraciones en la revista Fémina Sapiens.
Disfruta de la música, la lectura, la escritura
y la convivencia en familia. Es madre, esposa y
abuela. Se considera un ser humano que sabe
dar amor a los demás y con gran capacidad de
hermanarse con las mujeres. Con frecuencia, su
cara muestra amplia sonrisa; señal de que está
satisfecha con la vida.
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Que tu voz no se pierda
Dora María Fernández Rosales
Tallerista demac en la ciudad de Chihuahua. Octubre, 2008.
D
urante siglos la escritura femenina había
sido marginada y hasta despreciada por las
mismas mujeres, que no se sentían dignas
de contar sus historias, por lo cual los hombres
aprovecharon las circunstancias y se apropiaron
del poder de la escritura.
Hoy cambiamos el rumbo de la historia, ya aprendimos que podemos ser
escribientes, talladoras de palabras
y escritoras de cuanto queramos
expresar, ya perdimos los miedos que
veníamos cargando por siglos, porque
los pudimos enfrentar unidas, fortaleciéndonos solidariamente con otras
mujeres que nos permitieron enriquecernos con sus historias de vida.
Me siento muy honrada y orgullosa de ser tallerista en demac, asociación a la que tengo mucho
que agradecer, pues con la oportunidad que me
brindaron, he logrado crecer como ser humano al
descubrir en mi persona capacidades que me han
llevado a conocerme mejor, elevar mi autoestima
y desarrollar mis habilidades creativas para tener
una existencia más plena.
Dora María Fernández Rosales
Nació en Jiménez, Chih. Su tierra adoptiva fue
Nuevo Casas Grandes, donde creció al lado de
sus padres y hermanos, en un ambiente amoroso,
salpicado de libros, música y cine. Actualmente
tiene 42 años de matrimonio, es madre de tres
hijos y cuatro nietos. Los primeros años de casada
se dedicó al hogar y a sus pequeños, pero un día
se le presentó la oportunidad de incursionar en la
docencia, en el nivel de secundaria, impartiendo
español y talleres de lectura y redacción, labor que
desempeñó por más de 20 años; desde entonces
ha recorrido diferentes caminos de aprendizajes
y enseñanzas en los cuales siempre han estado
presentes las letras.
Estudió Letras españolas y la Licenciatura en
Educación. Durante 15 años fue promotora de
fomento a la lectura y escritura, directora de teatro
juvenil y del periódico escolar. Hoy es conductora
de un programa en Radio Universidad, colaboradora en libros, revistas de poesía y cuentos.
Actualmente es tallerista en demac, donde disfruta su vocación de maestra al apoyar a otras mujeres a empoderarse de la escritura, desarrollando
sus habilidades comunicativas para que la voz de
las mujeres no se pierda y quede su testimonio
escrito en la historia de la humanidad.
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Hermandad mágica
María del Socorro Ordóñez Villagrán
Tallerista demac en la ciudad de Chihuahua. Febrero, 2009.
P
ertenecer al proyecto demac me ha brindado
la posibilidad de ver la transformación de
cada mujer en los Talleres autobiográficos
para mujeres que se atreven a contar su historia®. Se inician con temor, incertidumbre y desconfianza, pero a la vez con el deseo de descubrir
la magia de la escritura, ésa que les permite ir
rescatando su vida, descubriendo que la condición
de mujer va más allá de ser ama de casa, mamá
o profesionista; la posibilidad de que cada palabra
escrita dé sentido y significado propio. En ocasiones, cuando surgen las palabras escritas duele al
pensarlas, recrearlas y finalmente darles significado.
Como tallerista, se debe ir puliendo ese diamante en bruto, ir descubriendo el brillo de su
belleza en el perdón a sí mismas por los errores
cometidos. Es darle forma al sueño que aún no
se ha logrado, con los aciertos y éxitos obtenidos
a lo largo de los años, o lo que falta por recorrer y
construir, acompañándolas en ese nuevo destino
con estrategias, alternativas y todo aquello que la
dinámica del grupo va sugiriendo, con la intención
de que fluyan las historias en los manuscritos de
cada etapa de su vida. Esto es mágico, tiene el
efecto de una hermandad, que aun con todas las
diferencias de edad, de posición social y cultural,
se funden en una sola: ¡El ser mujer y lograr ser
escuchadas sin prejuicios!
Lo más impresionante es cuando las
mujeres nos comparten o regalan un
fragmento de su obra. Ellas vuelven a
revivir su pasado, pero en esta ocasión
para sanar sus penas; cada una de
ellas nos alienta a las que aún no nos
atrevemos a escribir la nuestra.
Entrega de constancia a Martha Irene Lara Alatorre.
María del Socorro Ordoñez Villagrán
Nació en Ciudad Cuauhtémoc, Chih., es maestra
jubilada. Ha trabajado en pro de la equidad de
género con el propósito de que las mujeres se
respeten a sí mismas y construyan día a día un
mejor mundo para ellas y su familia. En la adolescencia trabajó con jóvenes de ambos sexos durante varios años con el mismo fin: que los jóvenes
tomaran la decisión de construir un mundo mejor
para ellos y su sociedad al plantearse un ideal
real, posible y comunitario.
Ama a los niños, la naturaleza, las flores y los
árboles. Le encantan los atardeceres y amaneceres, observar la lluvia y observar detenidamente a
las personas. Valora la escritura como un medio
de expresión que permite describir las experiencias y las emociones.
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Las letras como tabla de salvación
María Guadalupe de los Ángeles Monárrez Villalobos
Tallerista demac en Hidalgo del Parral, Chih. Agosto, 2009.
Me decidí por tomar como guía el libro de
uando me invitaron a ser talleris- Secretos, leyendas y susurros porque me sentí
cautivada por la ensoñación de la leyenda de la
ta demac, mil y una ideas se agol- princesa Ameyhale y el interés de sus secretos y
paron en mi mente: rechazar
rituales.
A los pocos meses de estar trabajando el prila oferta porque no quería más commer Taller demac de Autobiografía, sufrí el mayor dopromisos de los que ya tenía; porque
lor de una madre, y la continuación de los trabajos
estaba acostumbrada a trabajar “a mi del taller fue un paliativo para mi situación. El
modo” y no quería imposiciones; por- compañerismo, la solidaridad que se había formado en el grupo, con mis hermanas talladoras, se
que tenía que responder a quién sabe convirtió en un dulce bálsamo que inició la sanaqué intereses; quizá también porque
ción de mi herida, con lo que, a partir de ahí, cobré
conciencia de la importancia de la labor de demac.
tenía miedo, pero ¿miedo a qué?
Conducir sus talleres ha sido para mí más que
un nuevo tipo de trabajo, más que un compromiso
A nuevos conflictos en mi turbulenta vida; a decon otras personas, ha sido una tabla de salvajarme ver y, quizás, a que gente ajena por comple- ción, un motivo de vida, pues las letras han dejado
to a mí me conociera. Por otro lado, me motivaba
de ser un instrumento técnico de expresión, han
una nueva experiencia, una nueva ruta de escape, llegado a convertirse en el medio más valioso de
la oportunidad de demostrarme que aún era capaz mi crecimiento personal al concederme ver dentro
de hacer algo positivo.
de mí y analizar mis perspectivas, mis complejos,
Leer y escribir han sido mi pasión desde niña.
mis actitudes, y permitiéndome desarrollar mi inteMi formación docente me llevó a especializarme en ligencia emocional al conocer a otras mujeres que,
Lengua y Literatura, de ahí era yo. Conduje talleres como yo, sobreviven, sueñan, sufren y aspiran a
literarios durante mucho tiempo y los disfruté amllevar una vida mejor y que, a través de la escripliamente y recibí también muchas satisfacciones, tura, han conocido, como yo, que la expresión de
así es que este nuevo tipo de talleres no podrían
nuestros sentimientos constituye una liberación de
ser menos, por lo tanto, ¡manos a la obra!
las ataduras que nos impiden vivir a plenitud.
C
María Guadalupe de los Ángeles
Monárrez Villalobos
Radica, a sus 60 años de edad, en Hidalgo del
Parral,Chih. al sur del estado de Chihuahua. Profesora normalista, amante de las letras, con Licenciatura en Lengua y Literatura. Durante muchos
años ha logrado compartir su afición con alumnos
y amigos, en su práctica docente y en talleres de
creación literaria. Actualmente jubilada, se ocupa
en promover talleres de lectura y escritura de forma particular y en coordinación con algunos planteles educativos de la ciudad, principalmente con
demac, en los Talleres autobiográficos para mujeres
que se atreven a contar su historia®, en los que
trabaja desde 2010, labor con la que ha alcanzado el crecimiento social, moral y emocional
que sólo se logra a través de la creación y el
compartir textos sinceros y profundos escritos
por mujeres.
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¡Prepárate!
Manuela Moreno Ontiveros
Tallerista demac en la ciudad de Chihuahua y Aldama, Chih. Junio, 2010.
P
articipé en el primer Taller de autobiografía
que impartió demac en Chihuahua, y desde
la primera sesión me di cuenta de que estaba haciendo algo verdaderamente importante.
Había dentro de mí una vocecilla que me decía
con alborozo y con un poco de temor: “¡Prepárate,
prepárate!” Y me veía como un ave que, al extender las alas, siente debajo de ellas una corriente
de aire favorable y se estremece ante la posibilidad cierta de su primer vuelo. Y así fue. Al escribir
volaba sobre mi vida, iba y venía por ella en cada
sesión. A veces terminaba con las alas doloridas
y regresaba a mi casa abrumada, haciéndome mil
preguntas… Pero a la siguiente semana estaba
puntual en la biblioteca donde se impartía el taller
y logré terminarlo.
Me invitaron a colaborar como tallerista y nada menos que en el Cereso de
Aquiles Serdán. Esto fue un antes y un
después en mi vida.
Quedé tatuada para siempre por las palabras,
las miradas y las letras de cada una de aquellas
mujeres que estaban privadas de su libertad. Algo
había cambiado en mí. Me sentí parte de una
tribu; la tribu de las mujeres de todo el mundo.
Sentí claramente cómo todas éramos una sola: ya
no era ajena a ninguna mujer. En ellas había una
parte de mí y en mí había una parte de todas ellas.
Después del primer taller que impartí, ha
habido muchos más, y en cada uno he visto a las
mujeres recorrer un camino que, invariablemente,
empieza con la desconfianza, con la sensación de
que no serán capaces de escribir ni una frase y de
que lo que tienen que decir no es importante. Poco
a poco van dando pasos más firmes. Al sentirse
respaldadas por la energía del grupo, van penetrando más profundamente dentro de ellas, las historias de las otras alimentan las propias y se hace un
círculo maravilloso en las que todas alimentamos y
somos alimentadas espiritual y emocionalmente.
Manuela Moreno Ontiveros
Nació en el medio rural del estado de Chihuahua,
hija de campesinos y jornaleros sin tierra propia.
Cuando se terminaba el trabajo en un rancho, la
familia cargaba la carreta y se iban al próximo.
Tuvo una niñez de nómada; su tierra era aquella
donde se posaban sus pies descalzos y se conectaba profundamente con ella. Podía sentirla viva,
palpitante, enseñándole a fluir con la nieve, el sol
y el viento. El contacto cercano y profundo con la
naturaleza y con sus criaturas la proveyó de una
espiritualidad sana, que no está reñida ni con sus
defectos, ni con su sensualidad.
Se formó en el área de humanidades porque
es una mujer enamorada de la vida, del ser humano y de las letras. Esencialmente libre, pensante,
amorosa, tolerante y solidaria. Tiene vocación de
mujer, de madre y de partera. Disfruta de acompañar a las mujeres en esos momentos en que la
vida se torna un trabajo de parto para finalmente
darse a luz a sí mismas.
Guarda de su niñez una muy saludable dosis
de locura y pasión… Y la pluma es su instrumento
para expresarlas, vivirlas y reinventarlas.
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DOCUMENTACIÓN Y ESTUDIOS DE
MUJERES A.C.