Semana 18: Isaías 53 Versículo para memorizar

Semana 18: Isaías 53
Versículo para memorizar
Más él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros
pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre de él, y por su llaga fuimos
nosotros curados
Isaías 53:5
Vista panorámica del capítulo
Isaías 53 es una descripción de los sufrimientos de Jesucristo. Este es
citado en el Nuevo Testamento (verso 1 – Juan 12:38 and Romanos 10:16,
verso 4 – Mateo 8:17, verso 5 – 1Pedro 2:24, verso 7 – Hechos 8:32, verso 9
– 1Pedro 2:22, verso 12 – Marcos 15:28). Este pasaje de hecho inicia en
Isaías 52:14-15. El tema es que él no sufrió por sus propios pecados, sino
por los nuestros. El fue el único inocente que ha existido, y el que sufrió
como nadie lo ha hecho. El tomó nuestro lugar. El fue nuestro castigo. El
cumplió la justicia de Dios en cuanto al pecado, para que nosotros
fuéramos libres. El murió para que nosotros viviéramos. El fue contado
como pecado, para que nosotros pudiéramos ser contados como la
justicia de Dios (2 Corintios 5:21). “… Cristo padeció una sola vez por los
pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios… (1Pedro 3:18).” Lo
único que nos pide en devolución es el no pecar mas (Juan 5:14, Juan
8:11).
Isaías 53 (VRV 1960):
1 ¿Quién ha creído a nuestro anuncio? ¿Y sobre quién se ha manifestado
el brazo de Jehová?
2 Subirá cual renuevo delante de él, y como raíz de tierra seca; no hay
parecer en él, ni hermosura; le veremos, mas sin atractivo para que le
deseemos.
3 Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores,
experimentado en quebranto; y como que escondimos de él el rostro,
fue menospreciado, y no lo estimamos.
4 Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y
nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido.
5 Más él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados;
el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros
curados.
6 todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por
su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.
7 Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado
al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y
no abrió su boca.
8 Por cárcel y por juicio fue quitado; y su generación, ¿Quién la contará?
Porque fue cortado de la tierra de los vivientes, y por la rebelión de mi
pueblo fue herido.
9 Y se dispuso con los impíos su sepultura, mas con los ricos fue en su
muerte; aunque nunca hizo maldad, ni hubo engaño en su boca.
10 Con todo eso, Jehová quiso quebrantarlo, sujetándole a
padecimiento. Cuando haya puesto su vida en expiación por el pecado,
verá linaje, vivirá por largos días, y la voluntad de Jehová será en su
mano prosperada.
11 Verá el fruto de la aflicción de su alma, y quedará satisfecho; por su
conocimiento justificará mi siervo justo a muchos, y llevará las iniquidades
de ellos.
12 Por tanto, yo le daré parte con los grandes, y con los fuertes repartirá
despojos; por cuanto derramó su vida hasta la muerte, y fue contado
con los pecadores, habiendo él llevado el pecado de muchos, y orado
por los trasgresores. Domingo
Lunes
Martes
Miércoles
Jueves
Viernes
Sábado
Paginas Extra de Estudio
Isaías Capítulo 53
Día 1 – Sin atractivo
Versículos 1-2
No era que Jesús no tuviera atractivo físico. No era que el fuera un
hombre feo. Es que su sufrimiento le dejó desfigurado, él no tenía más
una apariencia de hombre. “Como se asombraron de ti muchos, de tal
manera fue desfigurado de los hombres su parecer, y su hermosura más
que la de los hijos de los hombres (Isaías 52:14).” Pero el fue la
manifestación del poder de Dios – El brazo del Señor fue revelado. El más
grande milagro de Dios no fue nada de lo que hizo en Egipto, ninguna
sanidad física, ninguna resurrección. Fue el manifestarse en carne, y morir
por nuestros pecados (Hechos 20:28). La salvación y nuestra relación con
Dios son más importantes que cualquier otra cosa. Lo que Jesús paso por
nosotros nos demuestra lo comprometido que Dios está con nosotros y lo
serio que es el pecado. Una de las tres grandes mentiras que Satanás
dice a los hombres es que el pecado no es tan serio (Génesis 3:4). El
precio que el pago por nosotros fue tan alto que no podemos creer en
algo menos.
Día 2 – El soportó lo que era nuestro
Versículos 3-5
Nosotros escondemos nuestros rostros de él mientras que el soporto
nuestros Dolores, sufrimiento, transgresiones, iniquidades y castigo. No
podríamos haber soportado el ver el precio tan terrible del pecado. Era
nuestra culpabilidad expuesta de forma cruda. Era no solo la usual
mueca de dolor ante el dolor de alguien más; era el saber que eso era
para nosotros. ¿Por qué la gente siente curiosidad al ver accidentes?
¿Por qué ven películas de terror? ¿Por qué algunas personas encuentran
a Hitler interesante? El problema con ver a la cruz no es que fuera muy
sangrienta. Es el enfrentar nuestra pecaminosidad y nuestra necesidad
de él. Hay una lucha por eliminar el hablar y el cantar a cerca de la
sangre de Jesús en las que hoy se hacen llamar iglesias. La única iglesia
que Jesús reconoce es aquella que ha sido lavada con su sangre
(Mateo 26:28, Hebreos 9:22, Apocalipsis 1:5, Apocalipsis 7:14). El que se
avergüenza del sufrimiento de Jesús no será reconocido en el cielo
(Marcos 8:38, 2 Timoteo 1:8). Por sus llagas fuimos sanados. Estas palabras
son a menudo citadas a lo largo de 1Pedro 2:24 sobre la sanidad física, lo
cual es verdad. Sin embargo la sanidad más importante es la espiritual.
Estas van de la mano (Salmos 103:3, Mateo 9:2-7, Santiago 5:14-15,
1Pedro 2:24-25).
Día 3 – La oveja perdida y el cordero al matadero
Versículos 6-7
Los comportamientos de las ovejas y de las personas tienen
algunas similitudes. Es por eso que Dios algunas veces utilizó esa analogía
(Salmo 23, Juan 10). Las ovejas tienen la tendencia de vagar cuando no
son vigiladas por el pastor o mantenidas en su recinto. Ellas no ponen
atención a los peligros que les asechan. Hay predadores, lesiones, y mala
o no comida y agua. “Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de
la gloria de Dios (Romanos 3:23).” Es nuestra tendencia natural el salirnos
del camino que Dios tiene para nosotros, sea en pecado o en
distracción. Olvidamos cuan peligroso es el estar fuera de la voluntad de
Dios. Jesús es el buen pastor que de su vida por sus ovejas,
defendiéndoles de los depredadores, guiándoles a buenos pastizales y a
agua. El enfrentó al enemigo que no podíamos vencer por nosotros
mismos, y se ofreció voluntariamente (Juan 10:17-18). El no abrió su boca
para defenderse (Mateo 26:62-63, Mateo 27:12-14, 1Pedro 2:23). Era
Isaías 53:7 lo que el eunuco etíope estaba leyendo cuando Felipe lo
encontró (Hechos 8:32).
Día 4 – ¿Un juicio justo?
Versículos 8-9
Fue tomado de la prisión, y del juicio. El juicio de Jesús fue una total
burla de justicia. No solo ellos le condenaron a muerte injustamente, ellos
violaron muchas de sus leyes y procedimientos judiciales por hacerlo. Ellos
no podrían haber encontrado algo para culparlo.
Cuando ellos
finalmente lo arrestaron lo hicieron de noche porque ellos no tenía una
razón válida, y porque su arresto fue basado en traición deshonesta y
soborno (Mateo 26:15). Entonces ellos violaron muchos de sus parámetros
legales en un desesperado intento por encontrar algo para acusarle. Ellos
realizaron un juicio en secreto por la noche. Ellos lo realizaron en la casa
de el Sumo sacerdote Anás, no en la sala de juicio (Juan. 18:13). Ellos
continuaron presentando falsos testigos cuyo testimonio no coincidía y no
probaban ningún crimen (Mateo 26:59-61, Marcos 15:59). Ellos entonces
llevaron a cabo otra audiencia delante de Caifás en su palacio. Una vez
más, este era el lugar y el tiempo equivocado (Mateo 26:27-28). Ellos
demandaron a Jesús el testificar en su defensa (Mateo 26:62-63). Los
jueces hicieron la acusación que finalmente imputaron en Jesús, no en
los testigos (Mateo 26:65-66). Y después ellos llevaron a cabo otra
audiencia por la mañana donde el sanedrín decidió el ejecutarlo
basados en nada más que el testimonio de Jesús, forzándole a él
ilegalmente (Mateo 27:1). En ningún momento se llamó a ningún testigo
de la defensa. Nadie podía ser llevado a muerte sin haber 2 o 3 testigos
(Deuteronomio 17:6, Deuteronomio. 19:5). Porque ellos no podrían por la
ley romana realizar la ejecución, ellos entonces lo llevaron delante de
Poncio Pilato (Mateo 27:2, Juan. 18:31). Los romanos nunca ejecutarían a
un hombre por violaciones de las leyes religiosas judías, pero si por un
crimen en contra de Roma. Por consiguiente los judíos cambiaron las
acusaciones una vez mas (Lucas 23:2). Pilato les pregunto tres veces cual
era la acusación digna de muerte que ellos tenían en contra de Él, y en
lugar de responder ellos gritaron que fuera crucificado (Lucas 23:22-23),
aun después de que Pilatos declaro dos veces que él no había
encontrado ninguna falta en el (Lucas 23:4 & 14). Mientras tanto, Pilato
envió a Jesús para otra audiencia delante de Herodes siendo que en
apariencia el estaba bajo su jurisdicción (Lucas 23:6-15). Esta era solo
una forma de Pilato tratar de salirse de este asunto. A pesar de que no
fue encontrado culpable de nada, Jesús fue una vez más azotado, y
devuelto a Pilato (Lucas 23:11). Pilato también lo golpeo, torturo y azoto
(Juan.19:1-5). Esto no logro satisfacer a los furiosos, y sanguinarios judíos
(Juan. 19:6-7). Pilato entonces intento el usar una costumbre de soltar un
prisionero, pero ellos escogieron un asesino llamado Barrabas en su lugar
(Mateo 27:15-21). Finalmente, Pilato les dio lo que pedían, y crucificó a
Jesús (Mateo 27:24-26). Aun Pilato conocía que el motivo de los
acusadores no fue ninguna verdadera violación de la ley judía o romana
(Mateo 27:18). Aquellos quienes querían desesperadamente imponer
algo en su contra, y lo vigilaron de cerca y esperaron por 3 años y medio
para hacerlo, nunca pudieron encontrar nada, aun después de agotar el
sistema legal para hacerlo. Después de 2000 años, todavía nadie ha
podido imponer ningún pecado a su cuenta. El es el único hombre
perfecto (2 Corintios 5:21, Hebreos 4:15, Hebreos 9:28, 1 Pedro 2:22, 1Juan.
3:5).
Día 5 – Su alma
Versículos 10-12
A menudo nos enfocamos solo en los aspectos físicos del
sufrimiento de Jesús, pero donde se quedan los aspectos que son
emocionales y espirituales también. En el jardín, el estaba en tan grande
estrés que los pequeños vasos sanguíneos cerca de la superficie de su
piel comenzaron a sangrar (Lucas 22:44). Él le dijo a sus discípulos, “Mi
alma está muy triste, hasta la muerte (Mateo 26:38).” El cayó al suelo, y
oro (Marcos 14:35). Dios hizo su alma una ofrenda o pecado, no solo su
cuerpo. El vio la agonía de su alma. El derramo su alma hasta la muerte.
Eso no es todo. Después de que Jesús murió, ¿a donde fue su alma por
tres días? Fue al infierno. “Porque como estuvo Jonás en el vientre del
gran pez tres días y tres noches, así estará el Hijo del Hombre en el
corazón de la tierra tres días y tres noches (Mateo 12:40).” “(Y eso de que
subió, ¿qué es, sino que también había descendido primero a las partes
más bajas de la tierra? (Efesios 4:9).” “Porque no dejarás mi alma en el
Seol, ni permitirás que tu santo vea corrupción (Salmos 16:10, Hechos 2:27
& 31).” “Y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos
de los siglos, amen. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades
(Apocalipsis 1:18).” El experimentó completamente las consecuencias del
pecado – espíritu, alma, y cuerpo. Pero la tumba no pudo detenerlo.
Porque él se humillo por nosotros, Dios le levanto de la muerte y le exalto
hasta lo sumo (Filipenses 2:5-11).