ENRIQUE AYALA MORA 13 DE NOVIEMBRE DE 1.950 VOLVER

ENRIQUE AYALA MORA
13 DE NOVIEMBRE DE 1.950
VOLVER… LA CASA DE LA IBARREÑIDAD
Hoy es la “Casa de la Ibarreñidad”, diariamente hay un tráfago de funcionarios
municipales, estudiantes, artistas, gente que se toma un café en el patio solariego, sus
habitaciones, salas y salones son los típicos del mundo burocrático, pocos visitantes
preguntan sobre las fotografías, diplomas e insignias que cuelgan de las paredes. En las
noches los guardias aseguran que oyen algunas vibraciones de las energías que han
quedado en más de un siglo de historia de la casa.
Cien años “no es nada”, aquí viven los recuerdos de cinco generaciones. Don Heliodoro la
construyó cuando la ciudad aún convalecía de la hecatombe telúrica de 1.868, fue su
ilusión, la supervisó desde los cimientos un día del año 1.910, la casa aún en fábrica,
parado en el balcón del segundo piso se le fotografió mirando el cercano parque. Aquí
duermen y a veces despiertan los recuerdos de otros días, de generaciones que fueron
completas de hermanos, padres y madres, de juventudes que ardían en expectativas, de
niños que correteaban por los frescos corredores, de mujeres y hombres que se
encerraron en sus habitaciones con su poesía, con sus oraciones, con sus sueños, a veces
con sus nostalgias y depresiones, con sus propios universos. Aquí yacen y viven los
recuerdos de otros días.
Volver… a la casa para la familia Ayala es un dolor y una alegría, tantos recuerdos, tantas
piedras, muros y techumbres entrañables, tantos viejos fantasmas que parecen
reclamarles cuando van. Pero ahora el consuelo es que esta casa es patrimonio de todos
los Ibarreños. Cien años han pasado en un tris, desde cuando los Ayala y los Pasquel
llegaban de sus vacaciones en la hacienda de “Chorlavicito”, desde cuando habitaban aquí
los Ayala Leoro: Segundo Heliodoro, José Miguel, Sergio Enrique, Rodrigo, María Teresa,
María Delfina, Zoila Rosa.
Fresca esta en las memorias familiares y en las fotografías, como que recién sucediese la
despedida de Segundo Heliodoro Ayala de su hermano Sergio Enrique y de su padre, para
viajar en el año de 1.916 a los Estados Unidos. Exultantes, hermosos los novios Sergio
Enrique Ayala y María Teresa Pasquel, año de 1.926. El desfile por la llegada del ferrocarril
a Ibarra pasa frente a la casa, en el año 1.929. Está Enrique Ayala Pasquel fotografiado en
su primera comunión en el año 1.933. Está la foto de don Heliodoro Ayala en el corredor
de la casa, en el año 1.933, son sus últimos días. Enrique Ayala Pasquel candidato a
diputado junto al profeta, Dr. José María Velasco Ibarra, año 1.960. En 1.965, el desfile
colegial del Colegio Sánchez y Cifuentes pasa por la calle Bolívar, frente a la casa de los
Ayala. Enrique Ayala Mora es el escolta izquierdo de la bandera. Hay una foto familiar en
el corredor de la casa, es del año 1.967. Paquita Ayala Mora, saluda con el presidente
Velasco Ibarra, en el año 1.969, fotografía tomada durante su estancia en la casa. Citamos
finalmente esta foto entrañable de la fiesta de despedida de la casa, año 2.005. Aparecen
Fanny Mora de Ayala con sus hijos Ayala Mora y otras generaciones de la familia
INFANCIA
Enrique Ayala Mora viene al mundo y vive su infancia en esta vieja casona, nace el 13 de
noviembre de 1.950, es hijo de Enrique Ayala Pasquel y de Fanny Mora Bonilla, sus padres
pertenecen a antiguas familias de la ciudad de Ibarra, y en las dos vertientes se encuentra
personajes de la más alta consideración social, política, cultural y religiosa. Enrique Ayala
Pasquel el padre tuvo gran afinidad por el quehacer político y siendo velasquista fue
Gobernador de Imbabura en los años 1.953 a 1.955 y 1.970 a 1.972, fue diputado por
Imbabura de 1.960 a 1.962, senador de la República en el año 1.968. Hombre coloquial,
sencillo, gran deportista, buen orador. La madre así mismo persona exultante, alegre,
vinculada al quehacer cultural concretamente musical, en su juventud participó en las
veladas musicales de las radios locales, fue maestra distinguida y reconocida.
Enrique Ayala Mora es el mayor de una familia extensa de ocho hermanos que fueron
educados en los valores familiares, tradicionales y católicos. Familia muy atada a la Iglesia
Católica y a la cultura local, por contar entre sus miembros con distinguidos religiosos,
políticos, poetas, artesanos y escritores. Influencias notables debió recibir Enrique Ayala
Mora de su familia ampliada: Mora, Pasquel, Suárez Veintimilla, Bonilla, Leoro, etc.
Recuerdo especial para el historiador es la familia Suárez Veintimilla, y su pléyade de
personajes: Carlos, Rafael, Carmela, Jorge y especialmente Mariano, quien fuera
encargado del poder, casado con su tía abuela Blanca Pasquel, todos fueron para Enrique
amigos entrañables.
Enrique Ayala Mora se educó en este ambiente de la casa descrita, fascinado desde niño
con los tomos de la vieja biblioteca donde vivía ensoñaciones de los personajes
principalmente históricos a los que desde muy joven citaba con autoridad. La historia
misma vivía en la casa, los viejos tíos y tías lo alimentaron con las historias de la ciudad
perdida de 1.868, le amamantaron con las historias de las familias, de las antiguas casonas
señoriales de la villa, de los personajes, de los señores obispos, de los señores artesanos.
Hasta hoy en la memoria privilegiada de Enrique, en sus relatos aparece la gente de
antaño con sus anécdotas, formas de vida, picardías y aciertos. Gran narrador, en sus
relatos la gente parece revivir como en una película.
EDUCACIÓN
Enrique Ayala Mora fue alumno del Instituto Rosales, Hermanos Cristianos de Ibarra
donde se matriculó en el año de 1956. Los Hermanos Cristianos eran en todo el país,
principalmente en Ibarra, reconocidos por su excelencia y rigurosidad. Enrique caminaba
hacia la escuela las tres cuadras que iban desde su casa, calles entonces casi desiertas. La
educación secundaria la hizo en el Colegio Salesiano Sánchez y Cifuentes, tiene recuerdos
especiales de sus profesores sacerdotes Jorge Ugalde y Adolfo Álvarez que fueron quienes
incentivaron y promovieron su afición por la historia.
La educación superior la realizó en la ciudad de Quito en la Pontificia Universidad Católica
del Ecuador, en donde se inscribió en la facultad de Filosofía y Pedagogía, aquí tuvo
compañeros y maestros insignes como el genial Fernando (Conejo Velazco), el también
historiador, analista e investigador social Jaime Durán Barba, así como su amigo
inseparable Luis Mora. El hombre que marca su época universitaria es el Padre Hernán
Malo Gonzáles, sacerdote Jesuita, académico de primera línea, hombre de avanzada, muy
adelantado a su tiempo, cuestionador e inconforme. La vida en Quito es un cambio
importante en su vida, en una época de rebeldía mundial de la juventud, de avanzada de
la doctrina socialista, de “mayo del 68”, de Vietnam, del movimiento Hippie, de la lucha
por los derechos civiles en todo el mundo, de la Teología de la Liberación. En el Ecuador
Monseñor Leonidas Proaño, habiendo dejado su natal Imbabura, iniciaba una revolución
hacia la “concientización”, la política, la educación de los indígenas y campesinos desde su
Diócesis de Riobamba.
LA UNIVERSIDAD CATÓLICA EN EL INICIO DE LA LUCHA
Enrique Ayala Mora se vincula a la Universidad Católica desde su formación religiosa,
familiar, tradicional y desde la educación formal recibida en los colegios confesionales.
Podemos decir que la visión política inicial del joven estudiante Enrique Ayala Mora viene
de la Doctrina Social de la Iglesia y desde esa perspectiva y desde la óptica de los nuevos
ambientes culturales y políticos lo que ve en la Universidad no le gusta, junto con otros
compañeros profesores y directivos sueñan y quieren una nueva Universidad, más abierta,
más democrática, más a tono con los tiempos que corren. Dos etapas pueden distinguirse
muy claramente en su trayectoria en la Universidad, una, en que la Universidad bajo el
espíritu innovador del Padre Hernán Malo parece enrumbarse por nuevas sendas y estar
conforme al despertar de revolución y de innovación académica; y, otra época de
contraataque desde la visión tradicional conservadora de la Iglesia, tendencia que al final
acaba de imponerse bajo la egida del ultra conservador sacerdote Luis Tobar García.
Durante esta primera etapa entre 1.973 al año 1.975 el padre Hernán Malo Gonzáles le
nombró Coordinador Académico del Departamento de Ciencias Sociales y Política de la
Universidad Católica, esta fue una experiencia muy enriquecedora sobre la administración
y el manejo académico que le sería fundamental para posteriores emprendimientos. Hizo
militancia en el movimiento universitario de aquellos años, sea como profesor o como
alumno, así por ejemplo concurrió al Congreso de Universidades y Escuelas Politécnicas
del Ecuador, asistió al Congreso Latinoamericano de estudiantes de Universidades
Católicas celebrada en Guayaquil. Su preocupación por la suerte de su Universidad se
patentiza en el tema de su tesis: “Propuesta de Reforma de la Universidad Católica”.
La lucha política dentro de la Universidad Católica de Quito se hizo en aquellos tiempos
muy activa, podríamos decir que virulenta, pues incursionó dentro de ella el Opus Dei, el
padre, luego Monseñor Juan Larrea Holguín, quien luego sería el primer Obispo del Opus
Dei en el Ecuador intentó el rectorado para captar el manejo de la Universidad. Los
jesuitas unos apoyaban al padre Hernán Malo para que permanezca en el rectorado y
otros abierta y radicalmente lo combatían. Muchos afirmaban que se trataba de una
pugna de izquierdistas y derechistas, pero más exacto es decir que Hernán Malo y sus
seguidores simplemente se acogían a las reformas conciliares de Vaticano Segundo y los
otros se apegaban a una visión tradicional que en el fondo no reconocía al Concilio. “La
derecha” jesuítica acaudillada por Julio Tobar García triunfa y consigue la salida del Padre
Hernán Malo del rectorado, esto significa un barrido general de profesores, estudiantes y
religiosos rojos. Libro interesante de esta época es el ensayo escrito por nuestro
biografiado titulado “Reforma, Contra Reforma y Modernización”, ensayo de militancia
donde se abordan los problemas de La Universidad Ecuatoriana y de la Universidad
Católica en particular.
Enrique Ayala Mora, hombre en formación constante viajó a Inglaterra por el año 1.979,
estuvo en las Universidades de Cambridge, pasó luego a la Universidad de Essex. Hizo
desde Inglaterra grandes aportes a la historia y a la investigación social. Pocos saben que
además estudió leyes por consejo paterno, pero al completar el tercer año se negó a dar
el grado de Licenciado.
LA POLÍTICA COMO SERVICIO
La política la lleva en las venas desde la memoria de Don Heliodoro Ayala y de su padre
activo político velasquista, luce en este quehacer el sello distintivo de su familia: el
servicio a los demás. Hombre de gran honestidad política, su búsqueda de la militancia
adecuada surge desde su juventud cuando por su formación católica, desde la Doctrina
Social de la Iglesia, se entusiasma con el Concilio Vaticano Segundo y desde esta visión
participa en la vida política de esta Universidad Católica del Ecuador, le interesa la
propuesta de Monseñor Proaño apegada a la Teología de la Liberación y a la
“Concientización, Educación y Política” posteriormente escribiría sobre este obispo y
levantaría su memoria histórica al frente de un equipo disciplinario.
Dese el año 1.970 empieza a vincularse al socialismo, tendencia en el que milita toda su
vida en ese año es presentado al casi mítico intelectual socialista Manuel Agustín Aguirre.
En 1.972 ingresó a las Juventudes Socialistas Revolucionarias. Participó en la formación del
Frente Amplio de Izquierdas FADI y al regresar al país desde Inglaterra organizó el Partido
Socialista Único.
En 1.986 fue candidatizado por el socialismo para la primera diputación por la provincia de
Imbabura, no solo las vinculaciones políticas sirvieron, sino los viejos lazos familiares y
sociales, y una campaña, quizás la primera en Imbabura que se la realizaba con una visión
de planificación estratégica, salió electo y el Bloque Progresista formado por la Izquierda
Democrática, la Democracia Popular, el Socialismo, el FADI y el Movimiento Popular
Democrático, le eligió como Vicepresidente del Congreso. En el año 1.987 se encargó por
corto tiempo de la presidencia del Congreso. Como diputado se destacó por la valentía de
sus discursos, por su gestión de la defensa de la soberanía del país frente al imperialismo.
En 1.987 desempeñó la tercera secretaría del Comité Ejecutivo Nacional del Partido
Socialista.
Su producción intelectual sobre temas histórico-políticos es amplia y profusa, apenas
citamos algunos: Es fundamental para la historiografía su libro "Lucha Política y origen de
los Partidos en el Ecuador" libro que ha tenido tres sucesivas ediciones en 1.982, 85 y 88.
Un ensayo de 30 páginas sobre el Partido Socialista en el Ecuador. Participo durante
muchos años en la edición del periódico "La Tierra" de Víctor Granda. En conjunto con
Rafael Quintero, escribió un artículo largo titulado "Teoría e ideologías sobre el Estado en
el Ecuador". En 1.989 editó "La opción política de un Profeta", biografía política del Obispo
de los pobres, sobre Leonidas Proaño. "Los Partidos Políticos y la Dictadura", Revista
Mensajero. 1.980 y "Los Partidos políticos en la década de los setenta"; "El Arne,
veintinueve años de Vida", Mensajero, 1981. "Historia, compromisos y política",
recopilación de diversos ensayos sobre historiografía ecuatoriana.
LA NUEVA HISTORIA DEL ECUADOR
La historia es su vocación fundamental y podemos decir sin temor a equivocarnos que con
Enrique Ayala Mora, existe un antes y un después en la historiografía ecuatoriana, pocos
historiadores ecuatorianos tienen una producción más abundante, tan metodológica y
científicamente bien construida, por otro lado ha sido el organizador de equipos de
trabajo interdisciplinarios que han recuperado la memoria histórica del país, aportes que
se iniciaron muchas veces con limitados recursos económicos, solo desde la genialidad
gestora del historiador.
Obra magnifica levantada bajo su iniciativa es “La Nueva Historia del Ecuador”, es además
autor de cinco de los trece estudios que componen esta historia. Entre los múltiples
aportes a la historia del país, citamos solo unos pocos:
"Cacao, Capitalismo y Revolución Liberal"; Una Introducción escrita en Essex para el
Volumen cuarto del Pensamiento Básico sobre "Federico González Suárez y la polémica
sobre el Estado Laico"; Introducción escrita para el tomo I del Libro del Sesquicentenario,
1.981, titulada "Política y Sociedad en el Ecuador Republicano"; Ensayo para la revista
Crítica y Utopía de Buenos Aires, 1.981, titulado "Gabriel García Moreno y la gestión del
Estado Nacional en el Ecuador. "Simón Bolívar, pensamiento político", ensayo para
consulta de estudiantes.
En el año 1.984 colaboró en la revista de la Biblioteca Nacional José Martí de La Habana
con un artículo sobre "Tendencias del desarrollo del culto a Bolívar en el Ecuador". En
1.985 lo hizo para la Revista de Historia de América con "Fundación del Partido
Conservador Ecuatoriano" y trabajó como editor de "La Historia del Ecuador, Ensayos de
Interpretación", manual de uso que constituye el Volumen 10 de la Biblioteca de Historia
Ecuatoriana.
En 1.986 había escrito: "Le culte de Bolívar en Equateur", L. Heme, París y una
introducción a la obra "Ambato", titulada "Pedro Fermín Cevallos y la Historia Política".
En 1.989 editó "La opción política de un Profeta", biografía política del Obispo de los
pobres, sobre Leonidas Proaño e "Historia, compromisos y política", recopilación de
diversos ensayos sobre historiografía ecuatoriana.
LOS AYALA ROMÁN
En el año 1.976 contrajo matrimonio con Magdalena Román Pérez, Ibarreña, con quien ha
procreado dos hijos es un hogar profundamente imbuido de los fines de servicio y
militancia que es el sello de los Ayala de Ibarra.
FUENTES BIBLIOGRÁFICAS
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El Comercio. (s.f.). Enrique Ayala Mora. Recuperado el febrero de 2015, de
http://www.elcomercio.com.ec/tag/enrique-ayala-mora
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Hidalgo, M. (2.015). Descripción de los cuadros de la Casa de la Ibarreñidad
(Enrique Ayala Mora). Ibarra.
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Universidad Andina Simón Bolívar . (s.f.). Historiador Enrique Ayala Mora presenta
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http://www.uasb.edu.ec/contenido?historiador-enrique-ayala-mora-presentalibro-sobre-historia-y-conocimiento-del-pasado

Varios. (1.993). Pensamiento de Pedro Moncayo. Quito - Ecuador: Corporación
Editora Nacional.