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VIGILIA ADOREMOS
DEL ARZOBISPO CON LOS JÓVENES
DÍA 4 DE DICIEMBRE
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO. VENGO A ADORARTE
Tú con Tu Luz a las tinieblas bajaste
gracias a Ti pude ver
Por tu belleza aprendí a adorarte
y junto a Ti quiero estar.
Vengo a adorarte,
vengo a postrarme,
vengo a decir que eres mi Dios.
Sólo Tú eres digno, eres adorable,
tan maravilloso para mí.
Rey y Señor,
cielo y tierra te exaltan
sólo por tu gran amor.
humilde a tu creación viniste
pobre te hiciste por mi.
Nunca sabré cuánto costó
ver mi pecado en la cruz
SALMO 125
El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres.
Cuando el Señor cambió la suerte de Sión,
nos parecía soñar:
la boca se nos llenaba de risas,
la lengua de cantares.
Hasta los gentiles decían:
«El Señor ha estado grande con ellos.»
El Señor ha estado grande con nosotros,
y estamos alegres.
Que el Señor cambie nuestra suerte
como los torrentes del Negueb.
Los que sembraban con lágrimas
cosechan entre cantares.
Al ir, iban llorando,
llevando la semilla;
al volver, vuelven cantando,
trayendo sus gavillas.
Gloria al Padre…
Ecos del salmo. Despacio y dejando unos segundos de silencio.
Aleluya cantará,
quien perdió la esperanza
y la tierra sonreirá, ALELUYA
Del Evangelio según San Lucas 3,1-6
En el año quince del reinado del emperador Tiberio, siendo Poncio
Pilato gobernador de Judea, y Herrodes virrey de Galilea, y su hermano
Felipe virrey de Iturea y Traconítide, y Lisanio virrey de Abilene, bajo el
sumo sacerdocio de Anás y Caifás, vino la palabra de Dios sobre Juan,
hijo de Zacarías, en el desierto.
Y recorrió toda la comarca del Jordán, predicando un bautismo de
conversión para perdón de los pecados, como está escrito en el libro de
los oráculos del profeta Isaías:
“Una voz grita en el desierto:
Preparad el camino del Señor,
allanad sus senderos;
elévense los valles,
desciendan los montes y colinas;
que lo torcido se enderece;
lo escabroso se iguale.
Y todos verán la salvación de Dios”.
GLORIA. MARTIN VALVERDE.
¡Gloria, gloria!
¡Gloria, gloria
a Jesús, el Señor,
al Cordero de Dios,
al Nombre sobre todo nombre!
¡A Jesús el Señor,
al Cordero de Dios,
al Nombre sobre todo... nombre! (3 BIS)
PETICIONES
- Tú que transformas los corazones de todos los que se acercan a ti
con confianza, despierta en los gobernantes el deseo de terminar
con la violencia y las guerras para poder así transformar el mundo
y vivir en paz. Ven y danos un corazón pacifico.
MARANATHÁ. VEN SEÑOR JESÚS
- Tú que nos dijiste que lo que hacemos al hermano te lo hacemos
a ti, convierte el corazón de los violentos, despertando en ellos la
conciencia de que todos somos hijos del mismo Dios. Ven Señor y
arráncanos del dominio de la muerte.
MARANATHÁ. VEN SEÑOR JESÚS
- Tú que viniste para que tuviésemos vida abundante, haznos fieles
testigos de tu amor y misericordia para que en este Año Jubilar
que comienza, muchas personas puedan acercarse a ti. Ven,
Señor, y restaura tu Reino de misericordia
MARANATHÁ. VEN SEÑOR JESÚS
- Tú que viniste para alumbrar al mundo, haz que, todos los jóvenes
nos esforcemos por caminar a tu encuentro, "Luz del Mundo", y que
seamos para otros jóvenes que se encuentran perdidos y sin
esperanza, estrella que ilumine. Ven, Señor y danos tu luz.
MARANATHÁ. VEN SEÑOR JESÚS
- Tú, Señor, que llenas por completo el corazón de todo el que te lo
ofrece sin miedo, concédenos que respondamos generosamente
si escuchamos tu llamada a ser sacerdotes, misioneros, religiosos
o matrimonios cristianos. Ven y llena nuestros corazones.
MARANATHÁ. VEN SEÑOR JESÚS
- Tú que quisiste nacer en un hogar humilde, concede a nuestras
familias ser reflejo de la familia de Nazaret; consuela a las familias
que se encuentran divididas o en dificultades y haznos prepararnos
con esperanza para tu venida. Ven y cura nuestras heridas.
MARANATHÁ. VEN SEÑOR JESÚS
- Tu Señor que eres Maestro, concede a nuestros padres,
maestros, profesores, catequistas y a todas las personas que
colaboran en nuestra educación, que sepan guiarnos en la fe,
enseñándonos a hacer un mundo más humano, más justo y más
acorde con tu querer. Ven, Señor y guíanos.
MARANATHÁ. VEN SEÑOR JESÚS
PADRENUESTRO
BENDICIÓN CON EL SANTÍSIMO
Al entrar a tu santo lugar
Me asombra que me pueda acercar
Para ver tu gloria y tu belleza
Y adorarte en intimidad.
En confianza yo me puedo acercar,
De tú mesa quiero participar
Todo lo que puedo
hacer es postrarme
Y con mis labios proclamar
Mi pan, mi luz, mi oración,
Eres tú Jesús
Mi Dios, mi amor y mi canción
Eres tú Jesús, sólo Tú.
Me cui-das, me abra-zas
Me ca-ntas, me a-mas X2
Mi pan, mi luz, mi oración,
Eres tú Jesús
Mi Dios, mi amor y mi canción,
Eres tú Jesús, sólo Tú.
CANTO FINAL
Fuente de paz y de fidelidad, Virgen María.
Dios se fijó en ti por tu humildad, Virgen María.
Elegida del Señor, siempre dócil a su voz, en el amor.
Hágase, Señor, en mí tu voluntad.
Hágase en mí, según tu Palabra.
Con María unimos nuestras voces al cantar:
Hágase, Señor, tu voluntad en mí.
Hágase, Señor, tu voluntad. (2)
Llena de amor, de luz y sencillez, Virgen María.
Guía mis piés, maestra de la fe, Virgen María.
Cambia nuestro corazón por tu fiel intercesión ante el Señor.
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Deleju Madrid
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