“Atrápame si puedes”

“Atrápame si puedes”
La vida de Frank Abagnale y el triángulo del fraude
Los lectores recordarán una película llevada al cine y producida por Spielberg titulada
“Atrápame si puedes”, basada en una historia real, la vida de Frank Abagnale.
Frank trabajó como médico, abogado y copiloto de una de las grandes líneas aéreas, todo
ello antes de cumplir los dieciocho años. También fue un genial falsificador y sus
habilidades le otorgaron una plaza en la historia. A la edad de 17 años, Frank Abagnale Jr.
se convirtió en el ladrón de bancos de más éxito en la historia de Estados Unidos.
En 5 años, usó 8 identidades distintas y logró pasar cheques falsos en 26 países por un valor
total de cerca de 4 millones de dólares. Fue capturado en 1969 y luego de 5 años en una
prisión federal, salió de ella a cambio de una condición: colaborar con el Gobierno en la
lucha contra el fraude. Posteriormente escribió varios libros y se hizo millonario tras
fundar una consultora especializada en la detección de fraudes legales (www.abagnale.com)
Este caso de película sirve para ilustrar la perspectiva psicológica del fraude explicada a
través del “Triángulo de Fraude” compuesto de tres elementos que son: Presión o motivo,
Oportunidad y Racionalización. Es así que generalmente el fraude ocurre cuando alguien
con una necesidad financiera (motivo) tiene acceso indebido a fondos (oportunidad) y está
en condiciones de justificarse a sí mismo y ante terceros (racionalización). En otras
palabras, las personas cometen fraude cuando ellas necesitan, o piensan que necesitan, los
fondos, creen que no serán descubiertas; y han justificado su acto internamente.
La vida de Frank es un ejemplo de cómo se configuran en la mente de un delincuente los
tres elementos del triángulo del fraude, los cuales serán analizados a continuación,
utilizando las mismas palabras del protagonista.
Motivo
El pequeño Frank tuvo una adolescencia donde no pudo superar el hecho de tener que
escoger entre su padre y su madre cuando éstos se divorciaron, por lo cual abandona el
hogar con 100 dólares en el bolsillo. Las necesidades económicas de este chico de 16 años,
le hacen utilizar su ingenio para sobrevivir y perpetrar su primer fraude al abrir una cuenta
bancaria falsificando su edad. Su estatura de 1,83 metros y sus canas prematuras le
permitieron pasar como adulto. Técnicamente este tipo de fraude se denomina “robo de
identidad”.
Seguidamente y para “recolectar” fondos recogió varias boletas de depósito en blanco en el
espacio destinado al número de cuenta escribió la cifra que acababan de asignarle a él,
luego las colocó de nuevo en el estante del banco con la esperanza de que algunos clientes
distraídos que iban a hacer depósitos los usaran, como efectivamente ocurrió.
Otra motivación, además de la económica, fue la actitud que su padre le había enseñado, de
que la vida es pura apariencia y habría que fingir ante los demás para sacar provecho de
ellos y ser capaz de sobreponerse a los golpes para conseguir el sueño americano. Así,
Frank comprueba que sólo es necesario un uniforme y el sutil arte de la seducción para
hacerse pasar por profesiones que por la simple apariencia brindaban cierto status y
prestigio social como piloto de aerolínea, médico y abogado.
Oportunidad
En los años 60 la confianza era una premisa en las transacciones comerciales según la cual
tampoco se dudaba de la solvencia económica y moral de una persona con profesiones de
prestigio como las que Frank utilizó hábilmente. Asimismo los robos de guante blanco eran
poco conocidos en el ambiente por lo cual nadie dudaba de la veracidad de un cheque, una
tarjeta de negocios o cualquier otro documento.
"Nunca
me consideré inteligente", comentó hace poco a la agencia Reuters. "Sólo me
sentaba a pensar: si pudiera viajar por el mundo como parte de la tripulación de una
aerolínea. Lo pensaba y luego lo hacía. Era un oportunista". Y fue esa actitud la que
permitió a aprovechar las fallas del sistema para cometer sus fraudes.
Y es que conforme se "especializó", Abagnale llegó a imprimir sus propios cheques y a
producir carnés de identidad falsos. Evidentemente la época se prestó para sus andanzas,
pues durante los 60 no existían los códigos de barras ni las identificaciones computarizadas.
El tipo de fraude que cometía Abagnale hace 40 años, seduciendo a sus víctimas para
hacerse con cheques fraudulentos, hoy parece confinado a material de cine. Según el mismo
comenta que "Hace 40 años si quería falsificar un cheque, hubiera necesitado una
enorme máquina. Hoy lo puedo hacer usando (el programa) 'fotoshop' en 10 minutos"
advierte Frank Abagnale quien es hoy una autoridad mundial en técnicas de fraude por robo
de identidad y falsificación de documentos.
Racionalización
Para entender como piensa un delincuente (en este caso arrepentido) solamente basta con
seguir las respuestas que él mismo brinda sobre dos preguntas efectuadas en una entrevista:
Pregunta: ¿Nunca pensó en las consecuencias de sus travesuras?
Frank: “No, era demasiado prematuro pensarlo. Estaba loco, me dejé llevar por la
velocidad, me deslumbró la efectividad de mis fraudes y nunca temí a la justicia. Era
como un juego. No sé cómo llegué tan lejos.”
Pregunta: ¿Se sintió culpable?
Frank: “Al principio no. Quizás superado los 20 comencé a reprocharme lo que hacía.
No era un ladrón que iba al banco pistola en mano, que mataba para salir con las manos
llenas de dinero. Más adulto me fui dando cuenta de que por mi culpa el cajero podía
perder su empleo, y me sentí incómodo. Era difícil hacer algo cada vez que comenzaba a
aplicar mi racionalidad.” Sin embargo el chico había cometido gran parte de sus delitos
entre los 16 y 21 años, cuando la racionalización de sus crímenes todavía era fuerte y le
permitió seguir el juego sin sentir culpa.
Finalmente el mismo concluye diciendo que "Jamás lo volvería a hacer. Pero si quisiera
podría estafar millones de dólares en solo segundos" lo cual nos brinda la perspectiva de
que el fraude es un proceso mental que involucra primeramente la voluntad y se
complementa con la habilidad, inteligencia y oportunidad de perpetrarlo.
Partes de este artículo fueron extraídas parcialmente de:
 http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/business/newsid_4766000/4766881.stm
 www.experticia.net/blog/index.php?/archives/148-Frank-Abagnale-El-estafador-del-siglo.html
 www.elmundo.com.ve/ediciones/2003/03/18/p1-9s1.htm
 es.wikipedia.org/wiki/Frank_Abagnale