VIVES, PERO ¿QUE SIENTES? 1

VIVES, PERO ¿QUE SIENTES?
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ANMORECA
Vives,
pero ¿qué sientes?
VIVES, PERO ¿QUE SIENTES?
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DEL MISMO AUTOR:
Perfiles del Psytaísmo
Personalidad y Poder
Gran Libro del Yoga
El Psytaismo
Un poder para más poder
Hipnotice conmigo
La yoga
Fundamentos teóricos de una disciplina
Antecedentes de un sistema
Recursos de la superación
Desarrollo de una filosofía
En la mente esta tu destino
Apuntes psicomagnéticos
El mundo del alma
La hipnosis fantástica
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ANMORECA
ANMORECA
VIVES,
Pero ¿qué Sientes?
EDITORIAL “SER” S.A.
Lima - Peru
VIVES, PERO ¿QUE SIENTES?
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ANMORECA – 1978
Texto y Portada
ES PROPIEDAD DEL AUTOR
Derechos literarios y artísticos
reservados para todos los países.
Hecho el depósito que marca la ley.
Segunda Edición: Julio 1979.
Impreso en el Perú
Printed in Perú
La presente edición: EDITORIA “SER” S.A.
Derechos reservados. Propiedad del autor.
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ANMORECA
Presentación
Las presiones de la vida diaria han puesto
al hombre moderno lejos de la posibilidad de
utilizar una buena parte de su capacidad
personal y, de ese modo, han limitado el
ámbito de su percepción del mundo y de su
oportunidad para gozar de los dones de la
existencia.
Lejos de la práctica constante de la vida
espiritual y mística, y ajeno a las formas
diversas del esoterismo que hoy se divulgan,
considero que las páginas que siguen, escritas
por un hombre de sólida personalidad y al
mismo tiempo de gran espiritualidad, son una
ventana abierta a un tipo de pensamiento que
cada vez es más extranjero para quienes se
incorporan a la corriente de la vida diaria sin
detenerse a pensar en sí mismos.
El Profesor Anmoreca ha logrado,
además, la compatibilidad entre su propia
concepción de la vida espiritual y el arte de
expresarse poéticamente. De ese modo, este
libro es una preciosa puerta de ingreso a un
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reino que aparentemente estaría cerrado para
quienes debemos movernos en el mundo de las
realidades cotidianas y de las presiones de la
vida económica, social, profesional o política.
Estas páginas, sin embargo, muestran
cuan coherente resulta el preocupase por las
cuestiones del espíritu cuando tales presiones
son mayores, que es el caso de la presente
generación, y que se hará más agudo en la
medida en que ellas actúen en forma más
poderosa sobre la generación siguiente.
No en vano la juventud se rebeló contra el
formalismo paralizante de la civilización,
exactamente como todos los rebeldes, desde el
San Francisco de la realidad cristiana hasta
los personajes de Hesse, que reclamaron con
razón el derecho de dar las espaldas a una
realidad que parecía empeñada en destruir
iodo trazo de espiritualidad en el ser espiritual.
El pobre Santo de Asís, los místicos de la
India y los jóvenes de hoy encontraron siempre
en la poesía el camino de ruptura con una
realidad agresiva y sofocante.
De manera sólida y compacta, este libro
trae el mismo mensaje, mostrando que las
tinieblas existen solamente donde no quiere
avanzarse hacia la luz, particularmente si el
camino es grato de seguir, como en la lectura
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de estas páginas, descontado el provecho que
cada cual sacará, según su temperamento y su
necesidad, de una lectura que sale de la noticia
sensacional del día y de la propaganda
política, económica o social del momento.
Quiero destacar, por ello, que el Profesor
Anmoreca logra particularmente tomar de la
mano al lector y llevarlo por el camino de la
poesía a la vida del espíritu, pero dejándolo
luego en un atajo en el cual el ser humano se
detiene o emprende luego su propia ruta
personal.
Dr. Carlos Zuzunaga Flórez
Lima, marzo de 1979
VIVES, PERO ¿QUE SIENTES?
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A manera de prólogo
En esta pequeña obra reúno las sentencias
discursivas del Psytaísmo, presentadas siguiendo una
correlación de temas, conforme a su esencia y
finalidad. Es así como los enunciados mantienen el
conveniente orden que tipifica la armonía de tas
máximas, cual cuerpo de una doctrina que cuestiona
diversos aspectos del hombre y su vivir.
En consecuencia, la obra versa sobre los signos
de la causativa de la ansiedad, de la angustia, de la
tristeza, de las frustraciones y pesares. De igual modo,
se plantean factores de la alegría, de la esperanza, de
los anhelos, de logros y triunfos, del amor y la,
felicidad, conforme á la concepción psytaísta.
Por eso, en este libro, muchos de los enunciados
del Psytaísmo tienen un tremendo sentido, porque aun
limitándome a exponerlos en síntesis, —vertidos en
máximas y sin otros comentarios que el espíritu mismo
de la idea—, conllevan sugerencias y normas prácticas
para motivar y activar la personalidad y ensanchar el
diario vivir. Precisamente, las sentencias tienden a.
estimular en el lector la confianza y avivar su sentido
de existencia con vigorosa fuerza, con el objeto de
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acrecentar la entereza y el valor, y agilizar la
inteligencia despertando la intuición y abriendo la
afectividad.
Sin embargo, debo aclarar que todo el contenido
del libro gira en torno a las dos premisas capitales del
Psytaísmo. Una de ellas es el impostergable presente
del hombre, el aquí y ahora, dado que esto supone el
eje de la problemática del ser en sí. Y lo es para el
individuo, si dando éste una mirada al pasado que ya
no vuelve y una ojeada ensoñadora al futuro incierto y
desconocido, constata que todo el peso de la vida está
en el presente.
Y es también en el presente, donde adquiere
profundo sentido la segunda premisa, relativa a los
sentimientos; pues ella es la más dominante y destacada en la disciplina psytaísta, al evidenciar que el realce
o debilitamiento de la poderosa energía de los
sentimientos, por sobre el pensar conceptual, capaz de
engrandecer al hombre o minimizarlo, no es de ayer ni
de mañana, sino de aquí y ahora.
No obstante, en el rosario de sentencias, en ese
engarce de pensamientos a través de los cuales hago
firme hincapié en que la vida es breve pero dura, fugaz
pero contundente, el Psytaísmo tiende a toda costa a
dilatar y ablandar el existir, por cuanto exige hacer
brillar mucho más la vida con radiantes y frescos
colores, o con los del suave tono cromático del
crepúsculo que se oculta.
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Tal vez la fuerza de los planteamientos
psicológicos o de las argumentaciones filosóficas del
Psytaísmo, que corren en sus aforismos, estén precisamente en esa singular y sencilla actitud de vida que,
con firme insistencia preconizo, y recomienda adoptar,
cual efectivo medio de hallar una mejor manera de vivir
y una mayor integración social.
¿Acaso no es fermento conflictivo la furia
compulsiva que desarrollamos nosotros mismos al
querer rebelarnos a lo que ya fue, y a lo que no
sabemos sucederá, en base a los alocados pensamientos
de una estereotipada forma de raciocinar? Y tal hecho,
¿no turba la armonía emocional? A la postre ¿no es la
carga afectiva y su sentimiento lo que trama el dolor o
la alegría?
Empero, destaco que, bienestar y gozo, son
estados consecuentes a la vibrante, grata y
complaciente energía del sentir. Y ellos son destellos de
la aurora del vivir que se dan en todas las
circunstancias, aquí y ahora, si el hombre descubre y
les arranca a las formas existenciales o a los hechos en
sí el ánglo más brillante de su posición en el tiempo y
en el espacio para alumbrar mejor su propia senda.
Por otra parte, si las máximas, extraídas de los
aforismos del Psytaísmo, resultan, algunas de ellas, con
acento lírico, con un sabor poético, ello no modera la
salvaje simplicidad del mensaje ni del mandamiento y
norma que sus ideas plasman, cuál precepto digno de
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cumplir, conforme al recto y abrupto camino del vivir
donde la razón no lo es todo, ni la voluntad es la que
determina la senda a seguir para alcanzar un
propósito.
Porque, por duro que parezca, el alimento más
nutritivo, —tal vez no siempre el más agradable— lo
contienen los hechos de ahora. Y tales hechos
responden a nuestra vivencia pero no forzosamente a
nuestra raciocinación ni al determinante voluntario.
Por lo mismo, no dudo en calificar el presente
libro, cual compendio de normas del vivir dentro de un
enfoque peculiar que, desde luego, no son meras
proposiciones retóricas.
El contenido del libro supone una enseñanza
práctica con afirmativo fin de ayudar a unos y otros a
superar sus problemas y liberarse del tedio de una
existencia vacía o calmar su tormentoso vivir, teniendo
en cuenta los enunciados que, a buen seguro,
despejarán el intelecto y darán otra promisora visión
del mundo de ahora. Tú en contacto sensible con la
gente y sus hechos.
Y esto no lo digo con aire de majestad o espíritu
crecido, por el hecho de ser yo el padre del sistema y,
por ende, el promotor del Psytaísmo. Aunque yo no
fuera la piedra de esta doctrina, como fundador de la
disciplina de "sentir más y raciocinar menos", las
alentadoras proposiciones que contienen las máximas
no aumentan ni disminuyen. Porque sea aquel, este o yo
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el inspirado gestor de su mensaje, su contenido se
mantiene impreso en las páginas que siguen, invitando
a unos y a oíros extraer su enseñanza.
Por lo mismo, recomiendo que este libro, VIVES,
PERO ¿QUE SIENTES? no debe ser leído una sola vez,
a titulo de información. Si usted, mi reconocido lector,
quieres sacarle el copioso jugo de una utilidad
constante, debe considerar la obra como un breviario,
una especie de libro de oraciones del vivir, al que tiene
que recurrir con asiduidad, sobre todo, cuando se halle
afectado por el ánimo ensombrecido.
Incluso, no dude en abrir sus páginas cuando
es-té acorralado por una situación apremiante, pues
tendrá la ocasión de comprobar que su espíritu se
reconforta y su mente se despeja, dando paso a un
destello intuitivo que le aclarará el panorama del
momento, amén de aplacar su ansiedad y zozobra, más
dulcificar la tonalidad afectiva.
Los que han incursionado en el Psytaísmo,
asistiendo a un curso práctico, y también aquellos que
han leído algún libro al respecto y han interpretado los
ejercicios prescritos, psicológicos y de regulación
fisiología, gozaron de la gran experiencia de una
reestructuración psicológica y una insospechada
revitalización en base a identificarse con el aquí y
ahora y ensanchar la afectividad.
Por tanto, saben, porque lo han encarnado en su
ser, que no se puede sostener el pasado ni traer aquí el
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porvenir. Saben también, por que lo han sentido y
constatado, que el sentimiento y la intuición son los dos
puntales del vivir, uno como fuerza que impulsa, la otra
como condición de la creatividad, del saber y descubrir.
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