Economía y Sociedad AÑO XIII/ No. 20/Julio - Diciembre de 2007 Conocimiento, empresas e instituciones Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo Facultad de Economía “Vasco de Quiroga” 1 Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo Dra. Silvia Figueroa Zamudio Rectora Dr. Salvador Jara Guerrero Secretario General Dr. Benjamín Revuelta Vaquero Secretario Académico L.E. José Refugio Rodríguez Velázquez Secretario Administrativo Mtro. José Napoleón Guzmán Ávila Coordinador de Investigación Científica Dr. Medardo Serna González Coordinador General de Estudios de Posgrado CP. Horacio Guillermo Díaz Mora Tesorero General Lic. María del Rosario Ortiz Marín Secretaria de Difusión Cultural y Extensión Universitaria Facultad de Economía Mtro. S. Mario Pérez Morales Director M.C. Israel Hernández Torres Subdirector M.C. Rodrigo Gómez Monge Secretario Académico Lic. Octavio Pérez Luna Secretario Administrativo Economía y Sociedad es una revista semestral… 2 Director de la Revista Salvador Padilla Hernández Jefe de edición René Colín Martínez Comité Editorial Externo Fausto Hernández Trillo, CIDE Alicia Girón González, IIE-UNAM Fernando Noriega Ureña, FE-UNAM Miguel Hernández Madrid, CER-COLMICH Javier Jasso Villazul, FCA-UNAM María de la Luz Martín Carbajal, El Colegio Mexiquense Comité Editorial Interno Andrés Solari Vicente Arcelia Gonzáles Butrón Dante Ariel Ayala Ortiz Eduardo Nava Hernández Jorge Martínez Aparicio Juan José Jardón Urrieta Pablo Chauca Malásquez English Abstracts Kimberly Anne Brooks Lewis Revista indexada en: RedALyC: www.redalyc.org Publicaciones en red: http://www.economia.umich.mx ISSN 1870-414X Diseño de forros Tonalli, Morelia Diseño de interiores e impresión Morevallado Editores 3 CONTENIDO Presentación Abstracts Equipos de trabajo: forma organizativa de la economía basada en el conocimiento. Francisco García Fernández Ana Emilia Cordero Borjas Nuevas tecnologías de la información y de la comunicación: factores explicativos de la conducta exportadora en Argentina M. Verónica Alderete El desarrollo de sistemas de innovación tecnológica. Nuevas exclusiones para las mujeres Rosalba Robles Ortega Formación de redes de conocimiento en México: cambios impulsados por la competencia en la industria automotriz mundial Lourdes Álvarez Medina Alianzas, fusiones y adquisiciones en la industria siderúrgica Salvador Corrales C. Empresa y territorio, convergencia estratégica en un contexto periférico. Jorge Martínez Aparicio Desarrollo e instituciones precarias: la Argentina de los ‘90 Silvia London María Emma Santos Rutinas y complejidad de las organizaciones públicas clásicas Juan José Jardón Poder de voto y valor de Shapley: una revisión teórica - práctica aplicada al Congreso de la Unión de México Rodrigo Gómez Monge Israel Hernández Torres De la redención al calvario: devenir campesino ante los contrasentidos de las políticas del sector agrícola en México Dante Ariel Ayala Ortiz Beatriz De la Tejera Hdz. Transformaciones socioeconómicas en la unidad doméstica campesina de San Miguel, Oaxaca Renato Salas Alfaro S. Mario Pérez Morales 4 Presentación Con este número especial de aniversario la revista Economía y Sociedad en su vigésima edición se ha querido entregar a los lectores cerca de una docena de artículos con especial hincapié en la economía y la sociedad del conocimiento, las empresas industriales y las instituciones. En este número colaboran autores de fuera del país, de otras instituciones de educación superior e investigación mexicanas y de la propia Facultad de Economía de UMSNH. Economía y Sociedad contribuye así a cumplir con uno de los propósitos fundamentales de la universidad pública: la difusión de la cultura y, en este caso, de la cultura y la literatura económica producto de la reflexión teórica y la indagación económica y social las cuales reflejan el quehacer que docentes e investigadores del país y el extranjero realizan con la intención de ampliar y difundir el conocimiento de nuestra realidad en México y América Latina y, en la medida de lo posible, influir en su transformación para beneficio de la sociedad en que vivimos. Ese y no otro, podría o debería ser el objetivo de la ciencia y, en nuestro caso, el de la economía política. El conocimiento entendido como las capacidades sensoriales y cognitivas permite a los seres humanos, teóricamente, aprender, interpretar y entender los fenómenos de la naturaleza de tal manera que podamos aprovecharla en nuestro beneficio, para satisfacer nuestras necesidades físicas, culturales y espirituales de manera racional, sustentable, sin depredar el entorno. Sin embargo esto no es así. Asimismo esperaríamos que dado el enorme potencial productivo del conocimiento o, mejor dicho, del derivado de la economía y la sociedad del conocimiento pudiéramos adquirir los instrumentos, herramientas, capacidades científicas y tecnológicas que nos permitan alcanzar el bienestar y elevar la calidad de vida de la población mayoritariamente pobre en países como el nuestro; no obstante esto tampoco es así. La explicación de este fenómeno tiene mucho que ver con la forma en que se organiza la vida económica, social, política e institucional en nuestros países. Más específicamente las relaciones de causalidad, es decir los por qué y cómo de esta situación podríamos buscarlos en las características excluyentes de la sociedad del conocimiento y el progreso tecnológico desigual en la actividad productiva de las firmas, en la forma en que se organiza la distribución del ingreso y las rentas monopólicas derivadas de la estructura industrial predominante y en el deficiente desempeño de nuestras instituciones económicas y políticas. 5 Esperamos que la lectura de todos y cada uno de los artículos que nuestros colaboradores han escrito en esta oportunidad especial contribuya, al menos en parte, a despejar algunas dudas y a entender un poco mejor nuestra realidad. Salvador Padilla H. Director de la revista 6 Abstracts Working groups: Organizational form of an economy based on knowledge Francisco García Fernández Ana Emilia Cordero Borjas This work has the objective of demonstrating that the Working Groups are organizational forms which Lundvall called “new age”. These forms respond to changes implemented by organizations as a manner of promoting a culture of collective work which promotes the generation, transfer and utilization of knowledge in the function of obtaining the desired goals of investments in information and communication technology. The organizations which do not implement the economic-organizational changes to adapt the functioning of the institution to the new working conditions usually do not meet the desired productivity levels, and consequently, the benefits of the investment. Keywords: groups economy based in knowledge, organizational forms, working New technologies in information and communication: Explicative factors in exportation conduct in Argentina M. Verónica Alderete The object of this work consists of the exploration of various explicative factors in exportation conduct in small and medium-sized businesses (PyMEs), with special emphasis in the new technologies of information and communication (TIC). Beginning with a brief review of studies regarding the theme, it is observed that the majority focus on developed countries and few refer to businesses in developing countries. This study is an over-all analyses of the PyMEs in Argentina. This offers a model which shows that export possibilities are associated with some of the factors described in theory, agreeing with variables tied to the use of new TICs. Keywords: new technologies in Information and Communication, exportation conduct, competition, small and medium-sized businesses, LOGIT The development of systems of technological innovation: New exclusions of women Rosalba Robles Ortega In this article we present an analysis of the following factors: the installation of the Border Industrialization Program in Juarez, the implementation of women in the working market for production, and the exclusion of women in the systems 7 of technological innovation. These three factors, which are related and interact in the (con)figuration of the geographical, socio-cultural, political and economic areas, continue as they have throughout history, with discrimination towards women, even in societies that present economic growth – as in the case of Juarez, but continue to (re)produce injustice and inequality with dichotomies such as production/reproduction, public/private, culture/nature, which are evident in the creation of segmentation and assignation of roles, marking the difference between men and women within the societies. Keywords: technological innovation, working market, exclusion, domestic and extra-domestic arenas The defeat of the Calgary: Rural worker transformation due to contradictions in the politics of the agricultural sector in Mexico Dante Ariel Ayala Ortiz Beatriz De la Tejera Hdz. The evolution of rural workers in Mexico during the last 90 years can be described as having two stages. One of these was of post-revolution development, characterized by the great agrarian reform and the strong State market growth (1936-1982) in which rights and capabilities of rural workers were recuperated. The other is the reaction to globalization (1983 to date), which has brought rural workers to the neoliberal scaffold. In the year 2007, with the market growth due to the international price for corn as a consequence of the rise in demand for biocombustibles, up to its end, which will coincide with the honest opening for the agricultural sector in the market of the North American Free Trade Agreement (NAFTA), there are mistakes and opportunities which could bring about changes, some in a fatal outcome of agricide which is widely feared, and others which would be longingly pardoned. This work is a critical essay on the principal political directions in the agricultural sector with an emphasis on some of the contradictions and paradoxes that have marked the transformation of the rural sector in Mexico with over almost a century of State intervention. We invite reflection over the future of this important social and productive sector of Mexico, illustrating the most urgent problems corn faces today. Keywords: agricultural politics, State protectionism, commercial liberation, NAFTA, corn, biocombustibles, transgenetics Precarious development and institutions: Argentina in the 90s Silvia London María Emma Santos In this article we synthetically present the principal theoretical development of the New Institutional Economy, with the proposal of analyzing what occurred in 8 Argentina during the decade of the 80s due to institutional imbalance and the resultant demand for institutional change. The satisfaction of this demand was channeled in part by the spontaneous appearance of informal institutions and in part by the State, which covered the deficiencies with institutions that, although legal, continued to be as precarious as the informal ones. This new type of institutions arose, in the beginning, as a consequence of subdevelopment, and although it would seem that they could not contribute to the reversion, they were apparently a first step in being the source of profound institutional change. Almost a decade later these small changes have not modified the formal institutional structure, and the majority of them have disappeared, primarily becoming established within older institutions. Keywords: institutional analysis, institutional change, precarious institutions, development The power of the vote and Shapley values: A theoretical-practical revision applied at the Congress of the Union of Mexico Rodrigo Gómez Monge Israel Hernandez Torres This article seeks to analyze the power relations which have been established between the different parliamentary factions which make up the Congress of the Union of Mexico (Chamber of Deputies and Chamber of Senators). We use two basic concepts: the power of the vote and Shapley values. The structure of the argument in the research will be the first part of the elemental theoretical concepts of games. We follow this with an analysis of classical measurements of the power of the vote between the factions. In the third part we discuss the proposal of the theory of games in looking at this problem referent to the Shapley values. We continue with a comparison of both of these measurements, and finally, we present the principal conclusions we have derived from this analysis. Keywords. Chamber of Deputies, Chamber of Senators, cooperative games, non-cooperative games, nucleus, power of the vote, theory of games, Shapley values Alliances, fusions and acquisitions in the siderurgic industry Salvador Corrales C. 9 The siderurgic industry has changed radically in order to operate successfully in globalized markets. Its business strategies have changed drastically to redistribute the market and avoid generalized bankruptcy. Its enterprises nowadays have the need to forge alliances and develop joint investments with competitors to access market segments. This essay analyzes these entrepreneurial organizational methods and emphasizes that strategic alliances develop into fusions or acquisitions of enterprises with financial problems in order to continue operating. The selling of large, integrated, Mexican enterprises is a result of the globalization process where the steel industry participates intensively. In the Monterrey region, this means a loss of foreign capital, which generates an uncertain protection against potential crisis in this industry. Keywords: strategies siderurgic industry, fusions, alliances, acquisitions, business Routines and complexities of classic public organizations Juan José Jardón The text analyses the fundamental basis of organizations from a perspective of microeconomic evolutionary theory and in terms of the relation which exists between complex systems and routines, and it is proposed that complexity may be separated out through a network of routines. In addition, an analysis is made of the coverage that specific routines may play in systems and in turn the depth of organizational levels from production through administration. Various aspects of public sector organizations are explored, contrasting these with the private sector in education, health and natural resources. It is concluded that these public organizations can well be understood through an analysis of routines and that in essence, routines are shared, which means that crucial differences do not exist between organizations of this type. Keywords: Routines, complex systems, public organizations, businesses, education, health Business and territory, strategic convergence in the peripheral context. Jorge Martínez Aparicio In the following presentation, the role of the great enterprises is analyzed in their possibilities of merging with regional development, particularly in the peripheral zone. There are two existing contrasts in regional development and its alleged affinity toward the context to regenerate the capitalist regime. Even transnational enterprises should have the element of reflection in their contribution to regional development, such as in the post-World War II era and today on capital restructuring through internationalization. However, for some historical circumstance or another there is a possibility of considering, above all in a peripheral environment, the generation of outlying conditions which can acquire a particular and distinctive meaning either on a regional or international 10 level because of their special historical situation and their particular social formation. This issue is shown through the case study of the strategic location in Mexico between the main worldwide metallurgic consortiums, Mittal Steel and Arcelor, to put together a world net on specialized siderurgical plants, integrated in the manufacturing of metal products. Because of their location on the Mexican west central coast, even though they represent a substantial amount of industrial activity in the state of Michoacan and in the steel production in Mexico, their contribution toward regional development is very poor. Keywords: international outlier, strategic merging, great enterprises, territory Formation of knowledge networks in Mexico: Changes stimulated by competition in the world-wide automobile industry Lourdes Alvarez Medina The importance of the interaction between science and technology and the marketplace in successful innovation is recognized, however, this has been difficult to achieve in Mexico. At this time, an accelerated process of productive restructuring in the automobile industry due to the North American Free Trade Agreement (NAFTA) is related to the fact that the automobile factories from Asia are amplifying their sales in the United States market, which is displacing American factories. In order to confront this problem and strengthen competition in the industry, initiatives for collaboration in the formation of knowledge and innovation networks have been fostered by automobile and automotive parts producers’ associations in Mexico, the United States and Canada, and include associations dedicated to the development of science and technology. In this work we present the changes that have come about over the last five years in the formation of knowledge networks involving the automobile industry in Mexico, and we reflect over the competition in the global markets which promote them. Keywords: networks, knowledge, industry, automobile Socio-economic transformation in the rural domestic units of San Miguel, Oaxaca Renato Salas Alfaro S. Mario Pérez Morales In this article we present an analysis of the productive practices in the homes of an indigenous Zapoteca community in the state of Oaxaca. The evolution which has occurred in the importance of economic activities is emphasized, 11 this being the pivot in sustaining the home and which is now in obvious regression. Also demonstrated is the incorporation of new activities undertaken not only for mere sustenance which have begun to form a new economic base within which these units operate. Keywords: rural domestic units, community, agricultural activities, customs, migration 12 Equipos de Trabajo: forma organizativa de la Economía Basada en el Conocimiento. Grado Académico Nombres y Apellidos Institución Dependencia Dirección Teléfono Fax Correo electrónico Grado Académico Nombres y Apellidos Institución Dependencia Dirección Teléfono Fax Correo electrónico Doctor en Economía Francisco García Fernández Universidad Autónoma de Tamaulipas Unidad Académica Multidisciplinaria de Comercio y Administración Victoria 20 de noviembre 168 B Zona Centro, Ciudad Victoria, Tamaulipas, México. 834 318 17 56 Ext. 140 [email protected] Aspirante a Doctor en Ciencias Sociales, Mención Estudios del Trabajo Ana Emilia Cordero Borjas Universidad de Carabobo Facultad de Ciencias Económicas y Sociales Av. Salvador Allende, edificio Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, Naguanagua, Estado Carabobo. Venezuela 00 58 245 5716593 / 00 58 416 4490699 00 58 241 8670315 [email protected] RESUMEN El trabajo persigue como objetivo demostrar que los Equipos de Trabajo son formas organizativas propias de la denominada por Lundvall “nueva era”, que responden a cambios que implementan las organizaciones como vía para promover una cultura de trabajo colectivo donde se interactúe de manera que permita generar, transferir y utilizar el conocimiento en función de obtener los rendimientos esperados de las inversiones realizadas en las tecnologías de información y comunicaciones. Las organizaciones que no implementan los cambios económico-organizativos para adecuar el funcionamiento de la institución a las nuevas condiciones de trabajo, en la mayoría de los casos no 13 obtienen la productividad esperada y por consiguiente, los rendimientos de esa inversión. Palabras Claves: Economía Basada en el Conocimiento, Formas organizativas, Equipos de trabajo. 1. Introducción: La Economía Basada en el Conocimiento y la productividad. El inicio del siglo y de Milenio ha sido coincidente con un cambio económico de una envergadura extraordinaria. Casualmente, los últimos tres cambios de siglos han estado asociados a profundas transformaciones económicoorganizativas que de una forma u otra han tenido efectos globales. El actual cambio, bajo condiciones de interdependencia sin precedentes en la vida económica del mundo, nos coloca ante un cambio sincrónico, compartido, pero con diferentes apreciaciones y sobre todo, consecuencias. Este cambio venía gestándose desde fines de la década de los 70, pero con más énfasis en los 80 y 90, cuando el ritmo de transformaciones se aceleró guiado sobre todo por el desarrollo de las nuevas tecnologías, en particular por las tecnologías de información y comunicaciones. El impacto de estas tecnologías sobre las economías más desarrolladas y en particular sobre la norteamericana, ha sido llamado por algunos economistas como la Nueva Economía, en cambio autores europeos asocian el cambio económico al tránsito hacia la denominada Economía Basada en el Conocimiento (EBC). Hay autores que opinan que no son términos idénticos (Nueva Economía, 14 Sociedad de la Información y Sociedad del Conocimiento) y que sugieren etapas sucesivas de desarrollo (Arcos Sánchez, 2001). Lundvall (2003) considera que la Economía Basada en Conocimiento es ante todo una economía de aprendizaje y asegura: “En esta ‘nueva era’ lo que resulta clave es la capacidad para aprender de las personas, de las organizaciones, de las redes y de las regiones. Aprender a enfrentarse y a usar el potencial completo de las nuevas tecnologías…”. El término EBC recoge una diferencia básica de la organización y conducta de la vida moderna. Precisamente, el éxito de las empresas y del conjunto de la economía de un país, dependen cada vez más de su efectividad para generar y utilizar conocimientos (Lundvall 1992). A pesar de que el conocimiento científico y tecnológico tiene una importancia clave, el conocimiento acerca de cómo organizar y gestionar las actividades económicas, especialmente aquellas que comprenden la aplicación de nuevas perspectivas científicas y tecnológicas, también es un determinante crucial del rendimiento económico. Este progreso organizacional y de gestión está cobrando importancia a medida que aumenta el contenido científico y tecnológico de la actividad económica. Actualmente, resulta un lugar común hablar del análisis y la creación de "capacidades de aprendizaje" de una empresa como una actividad económica fundamental, o de la heterogeneidad de las capacidades "cognitivas" de las organizaciones. Por consiguiente, el conocimiento es básico en la economía por su contribución a los incrementos de productividad, a la formación y el crecimiento de nuevas industrias, y su aporte a los cambios organizacionales necesarios para aplicar eficazmente nuevos conocimientos. 15 Ahora bien, el incremento de la productividad en el tejido productivo no sería posible si un mecanismo intermediador, es decir, a través del cual se produce esa difusión del conocimiento hacia todas las ramas y sectores de la actividad económica. Ese mecanismo intermediador han sido las tecnologías de información y comunicaciones (TIC). Precisamente para Lundvall (2001), Steinmueller (2001) y otros evolucionistas, la incorporación masiva de las TIC a la economía y sociedad supone un cambio radical; el tránsito a una nueva etapa de desarrollo. Lundvall (2003) asegura que hay que recurrir al concepto de Paradigma Técnico Económico desarrollado por Freeman y Pérez (1988) en los 80 para poder comprender la magnitud del cambio al que asistimos en la época actual. El esclarecedor concepto de Freeman y Pérez estaba acompañado del término “factor clave”, En cada paradigma hay un "factor o núcleo clave" que sirve de vehículo para la difusión de la revolución tecnológica de una rama a otra y a escala global. Este factor clave ejerce una influencia decisiva sobre la estructura de costos relativos, capaz de servir como mecanismo de difusión en todo el sistema económico, permitiendo, así que se incorpore el nuevo paradigma, en el sentido común de tecnólogos, ingenieros y gerentes (Pérez, 1986). Foray y Lundvall (1996) insisten en el papel del cambio económico basado en el conocimiento: “EL sistema de las TIC provee a la economía basada en el conocimiento de una nueva y diferente base tecnológica que cambia radicalmente las condiciones de producción y distribución del conocimiento, así como su ensamble en el sistema de producción”. Sin embargo, un grupo de economistas, encabezados por Greenspan (2000) abordan el tema desde el ángulo del efecto que las TIC producen sobre la productividad en las 16 economías desarrolladas y en particular, en la norteamericana. Este tema ha sido especialmente controvertido, sobre todo por la famosa Paradoja de Solow, al desconocer el efecto que sobre la productividad de los factores ejercen las tecnologías de información. A. Greenspan, ha sido uno de los principales defensores del papel de las tecnologías de información en los incrementos de productividad de la economía norteamericana. En una intervención pública y debatiendo el tema acerca de los mecanismos a través de los cuales las nuevas tecnologías podrían estar contribuyendo a la mejora de la productividad planteó los posibles canales de transmisión siguientes (2000): 1-Menores costos de búsqueda de información. La mayor disponibilidad de información en tiempo real permite a las empresas reducir inventarios y horas de trabajo relativamente improductivas mediante la conexión directa entre distribuidores y productores de bienes y servicios, y de productores entre sí, así como una utilización más eficiente de los canales de distribución ya existentes. 2- Menores costos de diseño de productos. El impresionante avance en la capacidad de proceso de información de los ordenadores actuales está permitiendo reducir drásticamente el tiempo y el costo de la ingeniería de nuevos productos, tales como automóviles, aviones e, incluso grandes edificios. 3- Mayores economías de escala. Las nuevas tecnologías están estimulando una nueva ola de fusiones empresariales, puesto que facilitan la gestión de las grandes organizaciones, dando lugar a reducciones de costes y ganancias de eficiencia. 17 En los años 90 los trabajos del profesor del Massachussets Institute of Technology (MIT) Erik Brynjolfsson, ofrecieron información que refutaban dicha paradoja y también una explicación de porqué hasta el momento no había sido posible encontrar evidencias positivas de la relación entre TIC y productividad (Brynjolfsson, 2003). Otros como Gordon (1999), no consideraron esas evidencias suficientemente convincentes; los incrementos en la productividad en la última década del siglo pasado en la economía norteamericana no fueron generalizados a toda la economía, sino que se concentraron en los sectores productores de bienes informáticos. Ahora bien, tanto los evolucionistas, como economistas neoclásicos coinciden en que los efectos de la TIC sobre la productividad se producen solo en el largo plazo. David (1991) ha sostenido que el período de adaptación institucional y organizacional siempre sería largo para una tecnología radicalmente nueva. Sin embargo, estudios diversos han puesto de manifiesto que los efectos positivos de las TIC exigen una reforma de la estructura organizativa de la empresa. Esto es, entienden que se hace necesaria una transformación interna (y externa) que permita extraer todos los beneficios de dicha inversión. Al respecto Ontiveros et al. (2004) afirman que "las TIC no son la panacea y que la diferenciación que pueden deparar las TIC es tanto más factible cuanto más estrechamente acompañadas se encuentren de otras ventajas competitivas no estrictamente tecnológicas y, en todo caso, con la adaptación organizativa correspondiente". Por su parte, Bresnahan et al. (1999) subrayan que dicha reforma comporta transformaciones en otros ámbitos como la dotación de recursos, la organización o la innovación, de 18 manera que sea posible aprovechar las complementariedades que se producen entre todos ellos. En el mismo sentido ha trabajado Lundvall (2003). En un proyecto de investigación sobre la economía danesa partió del supuesto que las empresas que introdujeron TIC sin combinarlas con inversiones en la capacitación de los empleados, sin hacer cambios en la dirección y sin modificar la organización de trabajo, tuvieron un efecto negativo sobre el crecimiento de la productividad que duró varios años (Gjerding et al 1992). Estos resultados fueron después confirmados (con mucho más detalle y precisión) por el Ministerio dinamarqués de Negocio e Industria (Ministerio de Negocio e Industria, 1996). El trabajo persigue como objetivo demostrar que los Equipos de Trabajo son formas organizativas propias de la denominada por Lundvall “nueva era”, que responden a cambios que implementan las organizaciones como vía para promover una cultura de trabajo colectivo donde se interactúe de manera que permita generar, transferir y utilizar el conocimiento en función de obtener los rendimientos esperados de las inversiones realizadas en las tecnologías de información y comunicaciones. Las organizaciones que no implementan cambios económico-organizativos para adecuar el funcionamiento de la institución a las nuevas condiciones de trabajo, en la mayoría de los casos no obtienen la productividad esperada y por consiguiente, los rendimientos de esa inversión. En la primera parte se hace una descripción de las formas organizativas desde la perspectiva de la teoría de las organizaciones, para a continuación analizar la importancia de los Equipos de Trabajo como forma organizativa para la generación, transferencia y utilización de conocimientos. 19 2. Formas Organizativas 2.1 Formas Organizativas y su evolución. El siglo XX estuvo caracterizado por grandes transformaciones que originaron la reconfiguración de la economía mundial, ello produjo cambios trascendentes y fundamentales en la estructura social de la humanidad. Tal como afirma Drucker (1998) las organizaciones de la nueva era, han constatado el poder de la tecnología, no sólo como capacidad competitiva sino como agente promotor de cambios profundos en las Formas Organizativas (FO). Según Miles et al. (1997:7) las FO representan “una manera lógica de dar forma a la estrategia, a la estructura y a los procesos de dirección de una organización en un todo efectivo”. La Estrategia define en una organización el qué se hará y la estructura el cómo. Por ello Chandler (1962) propone que la estructura sigue a la estrategia ya que en su estudio sobre Sears Roebuck, Standard Oil, Du Pont y General Motors, constató entre otras cosas que: a) cada estrategia que se planteaba en dichas empresas ocasionaba problemas administrativos producto de una estructura no adecuada para llevarla a cabo, y b) la modificación de la estructura organizacional permitía manejar mejor la implementación de la estrategia. La estabilidad predominante en las etapas económicas de finales del siglo XIX y principios del siglo XX, se caracterizaba por largos periodos de estabilidad y breves periodos de innovación, los cuales Gates (2000:534) define como 20 “inestabilidad constante interrumpida”. Bajo este escenario la incertidumbre es una parte importante del funcionamiento del sistema, reconociendo que el futuro es impredecible (Dosi, 1998) donde el equilibrio se ve condicionado por un entorno complejizado. Así, las Formas Organizativas se corresponden a las exigencias de su tiempo, evolucionando a través de tres épocas, a saber: estandarización, personalización e innovación (Miles et al., 1997) a) La estandarización transcurre desde finales del siglo XIX hasta nuestros días, en esta época la división del trabajo fomenta la especialización, esto enfatiza la Economía del Tiempo, se ejercen e imponen controles y se hacen grandes esfuerzos por establecer una eficiente organización del trabajo. Taylor, Fayol y Weber contribuyen al llamado enfoque clásico de la administración, en el cual “la visión mecanicista, las organizaciones más eficientes y eficaces tenían una estructura jerárquica” (Kikta, 1999: 457). La descomposición en partes sencillas de las tareas, los procesos rutinarios, repetitivos y simples permite describir con precisión cada una de las actividades a desarrollar en la organización, basados en la división del trabajo. Esta etapa en la evolución de las FO, se enmarca en la teoría clásica tradicional, en la cual “surge la idea de que la organización y su aplicación moderna deberían ser sistemas que actúen tan eficientemente como sea posible, por lo que se desarrolla un concepto de racionalidad burocrática mecanizada donde cada persona, unidad, departamento, debe desarrollar un rol específico en la organización” (Katz y Kahn, 1990:83) 21 Weber afirmó que la organización burocrática permitiría administrar de manera óptima en tiempos de cambios acelerados. Nada más alejado de la realidad, pues como predijo Bennis (1965: 31-35) “la burocracia funciona perfectamente en una estructura piramidal de autoridad, con el poder concentrado en unos pocos. La burocracia es un aparato social muy adecuado para las tareas rutinarias”. Por su parte, Toffler (1970) señaló que la velocidad del cambio tecnológico caracterizaría el futuro de las organizaciones, cambios que han aparecido de manera brusca y que la burocracia no podría soportar al no dar respuesta oportuna a los llamados cambios tecnológicos. No hay que desconocer que la visión burocrática o mecanicista ha resultado eficiente para realizar tareas específicas y reforzar el control organizacional, pero esta inflexibilidad dificulta la adaptación a las circunstancias que presenta el entorno, limitando la interconexión entre organización – entorno – organización. b) La personalización, como época se ve condicionada por un mercado competitivo, el cual se inicia con claridad en la década de los sesenta. La calidad asociada a la competitividad como factor fundamental en la definición de Nuevas Formas Organizativas (NFO), rompe con el concepto de puesto individual, con tareas simples y fragmentadas; nace la necesidad de redefinir la estructura de las organizaciones, considerando para ello que “no existe una forma óptima de organizar; es decir, toda organización que desee ser eficaz deberá procurar la congruencia entre su estructura y procesos internos y las contingencias o circunstancias específicas que la caracterizan” (Morgan, 1996:29-64). 22 En esta etapa las Formas Organizativas se vuelven más informales producto de las nuevas tecnologías ya que son éstas las que permitirán a la organización adecuarse al entorno y sobrevivir. La tecnología de la información (TI), llevará a las organizaciones a la adaptación de sus estrategias y por ende de su estructura para renovarse organizacionalmente. La Organización Industrial, enmarcada en la Economía Industrial, tiene su mayor auge en la década de los ochenta y confirma a través de los trabajos teóricos y empíricos realizados en esa época (Caves y Porter, 1977; Porter, 1980, 1981; Lamb 1984; Schmalensee, 1985; Buzzell y Gale, 1987) que las FO estaban orientadas a vincular la efectividad de la TI como ventaja competitiva por sí misma, más no se identificaba o pretendía reconocer el valor que genera la gestión de ésta. Hasta ahora la adaptación es factor fundamental para la supervivencia en un mercado competitivo. No se reconoce a la organización como un todo que interactúa con el entorno y que modifica y se ve modificada por éste. Ello parte de identificar el conjunto de recursos endógenos que sustentarán la existencia de la organización, identificación que se da en la época de la innovación. c) La innovación (finales de los 80), en esta época se hace énfasis en el proceso continuo de innovación y generación de conocimiento, siendo su gestión fundamental para la consolidación de éste como activo y factor diferenciador de las organizaciones (Miles et al., 1997). En esta fase se persigue el desarrollo integral de las personas a través de una comunidad que favorezca la innovación y la creatividad sin desconocer conceptos como 23 autoridad, control o liderazgo. En el siglo XXI, dominado por la Economía Basada en el Conocimiento, las organizaciones requieren de relaciones de trabajo fluidas, flexibles y complejas que incrementen la habilidad de las mismas para obtener, procesar y utilizar información bajo condiciones de interdependencia (Gallardo et al., 1999) Las FO más relevantes de esta fase de innovación son: a) la Forma Adhocrática (Mintzberg 1984), b) la Forma Hipertexto (Nonaka y Takeuchi, 1995), c) la Forma Hipertrébol (Rodríguez Antón, et al, 2001), d) la Forma en Red (Miles y Snow, 1986), y e) los Equipos de Trabajo. a) Forma Adhocrática: se caracteriza por la diferenciación horizontal y gran descentralización. Toffler (1993) señala que la adhocracia es un modo de vida de la empresa, que va más allá de la existencia de pequeños grupos internos, y que le permiten amoldarse con rapidez y flexibilidad a un entorno cambiante y complejo. Para responder con velocidad a los cambios se estimula la coordinación interfuncional. b) Forma Hipertexto: es una organización en red basada en el conocimiento y aprendizaje organizacional, que puede crear unas formas de relaciones e interacciones a través de redes telemáticas tanto internas como externas. Es una FO compuesta por una superposición de capas o estratos cuya meta es brindar una base estructural para la creación del conocimiento organizacional. Tal como en un software de aplicación, “el hipertexto permite al usuario acceder a varias capas” (Nonaka y Takeuchi, 1995). Estas capas son: los equipos de proyectos, la base del conocimiento y el sistema de negocios. La clave de esta Forma Organizativa está e la habilidad de los individuos de 24 acceder a las diferentes capas e interactuar de manera tal que formen un ciclo dinámico de generación de conocimiento. c) Forma Hipertrébol: esta FO combina la forma Hipertexto de Nonaka y Takeuchi (1995) y la forma Trébol de Handy (1995), se refuerza el trabajo en equipo a objeto de promover el proceso innovador a través del establecimiento de proyectos. Cada hoja se corresponde a una función: 1) núcleo del trébol está compuesto por profesionales altamente calificados vinculados a los objetivos, 2) otra hoja se asocia a aquellas funciones que se puedan tercerizar por no tener valor estratégico, y 3) la última hoja agrupa a trabajadores a tiempo parciales y temporales. d) Forma en Red, se caracteriza por el total achatamiento de su estructura, ya que la autoridad se basa en el conocimiento y no en los niveles jerárquicos. Tienen gran importancia las relaciones internas como las externas, por ello se distinguen tres tipos de redes: 1) Red Interna, 2) Red Estable y 3) Red Dinámica (Miles y Snow, 1995). Esto requiere de flujos de información constante que permita la comunicación inter e intra organizacional. e) Equipos de Trabajo, las FO descritas hasta ahora pueden constituir un Equipo de Trabajo (ET) en sí, pero para que pueda considerarse que la organización toma esta forma organizativa debe cumplir determinados requisitos y principios. Una cultura basada en el compromiso colectivo, la continuidad de la interacción social, la creación de una conciencia recíproca, la estabilidad de las relaciones en el tiempo y la estructura de los roles (Olmsted, 1989). El ET como forma organizativa, serán analizado posteriormente, vinculando sus aportes a la Economía Basada en el Conocimiento. 25 Por último, Pettigrew (2003), plantea cinco formas de organización que si bien no son objeto de análisis en el presente trabajo, es relevante mencionarlas a fin de reconocer la evolución constante de las FO en la actualidad. Para el surgimiento de estas NFO el investigador toma en cuenta tres dimensiones del cambio dentro de la organización, a saber: a) Cambios en las estructuras, b) Cambio en los procesos, y c) Cambio en los límites. Las cinco nuevas formas organizacionales planteadas por Pettigrew a partir de la consideración de las dimensiones anteriores son: a) La forma “N”, o forma Network, b) La corporación horizontal, c) La organización en los límites, d) La forma celular, y e) La forma federal. 2.2 Equipos de Trabajo: una nueva forma organizativa a la luz de la Economía Basada en el Conocimiento. Un Equipo de Trabajo, según Katzembach y Smith (1995:52) “es un número pequeño de personas con habilidades complementarias que están comprometidas con un propósito común, con metas de desempeño y con una propuesta por la que se consideran mutuamente responsables”. Ello nos lleva a considerar los ET como una forma organizativa que estimula la Gestión del Conocimiento, por lo cual el estudio de los ET permite determinar cómo organizar y gestionar las actividades que comprenden la aplicación de nuevas perspectivas científicas y tecnológicas para generar, transferir y utilizar conocimiento. 26 Por otra parte, la organización del trabajo en equipos multidisciplinares y autogestionados facilita la creación y transmisión de nuevo conocimiento (Forcadell y Guadamillas, 2002). A través de tres casos referenciados por Romero-García (1998) –véase tabla 1-, se pueden ilustrar los beneficios de la redefinición de las formas organizativas a partir del entrenamiento en Equipos Autogestionados o Autodirigidos; el primero: Equipos Autodirigidos (EAD) y Tiempo de Respuesta, luego del adiestramiento como EAD, el tiempo de respuesta disminuyó significativamente desde 20,4 horas a 1,85 hora, después de 4 meses. Esto evidencia una mejora significativa en el conocimiento colectivo producto de una mayor integración y del aprendizaje por la experiencia del trabajo en equipo. Tabla 1: Equipos Autodirigidos y Tiempo de Respuesta (TR). (Field Operations, Intesa, 1998) Tiempo de Respuesta (en Horas) 20,4 7,45 3,09 2,36 1,85 Fuente: Romero-García (1998). Meses antes Después de mes 1 Después de mes 2 Después de mes 3 Después de mes 4 En el segundo caso -véase tabla 2-, se incrementó el número de actos seguros en un 8%, pasando de 87% a 95% de actos seguros luego del entrenamiento en EAD. Esta experiencia en el proceso SBV de la planta de Amuay de Petróleos de Venezuela, permite evidenciar los beneficios de la integración del conocimiento colectivo a partir del trabajo en equipo. 27 Tabla 2: Equipos Autodirigidos en el Proceso SBV (PDVSA, Amuay 1998) Porcentaje de actos seguros después de entrenamiento en EAD Porcentajes Meses 87 92 94 95 Fuente: Romero-García (1998). Diciembre Enero Febrero Marzo En último caso de estudio referenciado por Romero, sintetiza los resultados del entrenamiento de EAD en el proceso SBV en Proctel and Gamble lo que ha permitido: cambios en seguridad y salud psicológica, cambios en crecimiento personal, mejor capacidad para comunicarse, autoestima, entre otros. Tabla 3: Equipos Autodirigidos en el Proceso SBV (P&G, Barquisimeto 1999) Cambios en el porcentaje de Actos seguros por Departamento Departamento Empaque Líquidos BDC Proceso Fuente: Romero-García (1998). Antes Después 64 75 75 49 93 92 77 66 Tal como dicen Fahey y Prusak (1998: 265), “si el conocimiento no fuera diferente de los datos o de la información, no habría nada nuevo o interesante en la gestión del conocimiento”. Por lo cual la efectividad de los ET como FO adecuada a la EBC, ante las diversas limitaciones propias del trabajo 28 colectivo, se logra a través de la coordinación de las acciones previstas, la solución de situaciones adversas que causen un efecto entrópico en los planes establecidos y la promoción de una cultura orientada al logro y la autogestión de los equipos. Uno de los propósitos de la GC, enmarcada en la EBC, es conectar a las personas entre sí para que éstas se vinculen con la información y convertir ésta en conocimiento y por tanto motivar la creatividad y la innovación (Gunnlaugsdottir, 2003). Los ET desarrollan actividades que les lleva a interactuar en contextos multidisciplinarios, generar e intercambiar información entre los integrantes, promover la creatividad y la mejora continua como una de sus metas primordiales. Estas acciones propician la innovación organizacional y la búsqueda del conocimiento donde quiera que esté localizado. La creación de nuevos conocimientos, que pasan a formar parte de la base de la organización y se ponen a disposición de los integrantes de la misma, sustenta el desarrollo de innovaciones (Nonaka y Takeuchi, 1995). Los ET como forma organizativa derivada de la EBC, reconoce que el conocimiento que orienta la conducta en la vida cotidiana, se define "...como una realidad interpretada por los hombres y que para ellos tiene el significado subjetivo de un mundo coherente" (Berger y Luckman 1991:31) y es que no se podría configurar la nueva EBC sin este tipo de conocimiento que constituye el cúmulo de significados que le dan identidad al grupo social. El impacto de la nueva economía ha traspasado las fronteras de las Teorías Económicas, llegando a influir visiblemente en las Teorías Organizacionales, 29 pues la relación Estrategia – Estructura confirmada por Chandler, nos permite afirmar que los ET como NFO han sido el resultado de un proceso de adaptación de las organizaciones para adecuar su estructura a estrategias que le garanticen el logro de sus objetivos, los cuales se ven retroalimentados por la realidad económica actual. Esta realidad económica como parte de la vida cotidiana “es una construcción intersubjetiva, un mundo compartido, lo que presupone procesos de interacción y comunicación mediante los cuales se comparte con los otros. Es una realidad que se expresa como mundo dado, naturalizado, por referirse a un mundo que es común a muchos hombres" (Berger y Luckman 1991:39). Para ello, se deben considerar un conjunto de elementos que ayudan a que los individuos interactúen unos con otros libremente, pues consolidando valores como la confianza, la empatía y el coraje, se logrará que los miembros de la organización, asuman responsabilidades, experimenten y aprendan a esforzarse continuamente, aprovechando las experiencias y modelos mentales en pro de la gestión del conocimiento (Spender, 1996; Fahey y Prusak, 1998).La asunción de responsabilidades y el aprendizaje continuo lleva al ET como FO a generar una sinergia positiva por medio de un esfuerzo coordinado. Sus esfuerzos individuales y colectivos dan como resultado un nivel de desempeño mayor que la suma total de los insumos individuales transformando grupos en equipos eficaces y productivos. Para ello, resulta vital que en la organización se reconozca explícitamente la importancia de la experimentación y exista tolerancia ante el fallo (Fahey y Prusak, 1998). Así Nonaka y Takeuchi, (1995: 59) sostienen que “debemos prestar atención a la 30 naturaleza activa y subjetiva del conocimiento, representada por términos tales como compromiso y creencias que están profundamente enraizadas en los sistemas de valores individuales (y organizativos)”. De esta manera, el conocimiento estará arraigado en los sistemas de valores individuales, y éstos, a su vez, están condicionados por el contexto de la organización (Nonaka y Takeuchi, 1995; Nonaka y Konno, 1998). Cabe destacar la importancia de reconocer que en la EBC el conocimiento es, además de individual, organizativo; es decir, un componente indispensable del conocimiento depende de las formas de dirección consolidadas en la organización, de las formas colectivas de trabajo, de los programas y procedimientos, el modo en que se transmite la información, y, en definitiva, de las rutinas organizativas (Nelson y Winter, 1982). Como han señalado Fahey y Prusak (1998), el objetivo no es conocer el futuro sino usar las proyecciones para el futuro a fin de proveer información a la gerencia acerca de sus acciones y estrategia. Siendo la definición de la FO uno de las decisiones fundamentales de la Administración ya que a partir de ello se podrá alinear la estructura o forma organizativa (el cómo) a la estrategia (el qué). Las organizaciones enfrentan grandes dificultades debido a lo complejo de las relaciones inter e intra organizacionales que debe promover a fin de gestionar el conocimiento y poder así vincular sus estrategias y formas organizativas a la EBC que condiciona la interacción y permanencia de éstas en un entorno dinámico. En este caso, Cohen y Levinthal (1990) proponen que la capacidad de absorción de una empresa depende de tres factores claves: la relación entre el exterior y el interior de la 31 empresa, la relación entre las subunidades dentro de la empresa, y la relación entre los individuos dentro de cada subunidad. Otra dificultad se presenta al tratar de codificar y transmitir conocimiento dentro del ámbito de la propia organización, ya que el mismo tiene una dimensión tácita (Cole, 1998), por esto proponemos que la organización debe crear equipos multidisciplinares con capacidad de autorganización pues en ellos se crea un contexto común para compartir experiencias y conocimientos que estimula el incremento de los stocks de conocimiento de las tres dimensiones de aprendizaje organizacional: a) individual, b) grupal y c) organizacional (Prieto, 2003). 3. Conclusiones. La EBC supone el tránsito a una nueva etapa de desarrollo, donde el conocimiento se transforma no solo en el principal insumo de las actividades económicas, sino también en su producto más valorado. Precisamente, para que realmente el tránsito a esta “nueva era” impacte a la economía – en indicadores de crecimiento y bienestar- de los países desarrollados y en desarrollo derivado de incrementos de la productividad, son necesarios cambios económico-organizativos profundos en las organizaciones que permitan aprovechar el potencial completo que las nuevas tecnologías lleva asociado. Los Equipos de Trabajo son una de las formas organizativas más relevantes de las organizaciones en la actualidad, los cuales reflejan a diferencia de otras 32 formas, una cultura basada en el compromiso colectivo, la continuidad de la interacción social, la creación de una conciencia recíproca, la estabilidad de las relaciones en el tiempo y la estructura de los roles (Olmsted, 1989). En condiciones de la EBC, el conocimiento además de individual, es preferentemente colectivo y organizativo; es decir, un componente indispensable del conocimiento depende de las formas de dirección consolidadas en la organización, de las formas colectivas de trabajo, de los programas y procedimientos, del modo en que se transmite la información, y, en definitiva, de las rutinas organizativas (Nelson y Winter, 1982). Por consiguiente, la implantación de los Equipos de Trabajo, responde a una necesidad objetiva del mismo proceso de trabajo, y las organizaciones están abocadas, si aspiran a obtener los rendimientos esperados de sus inversiones en TIC, a poner en correspondencia, las formas del conocimiento con el modo en cómo se organiza. Esto implica una reforma estructural de todo el modelo organizativo de la empresa, donde los Equipos de Trabajo son una forma organizativa, adecuada a las formas de conocimiento propias de la Economía Basada en el Conocimiento. Bibliografía. 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España: Plaza & Janés Editores SA. 36 Nuevas Tecnologías de la Información y de la Comunicación: Factores explicativos de la conducta exportadora en Argentina Lic. M. Verónica Alderete Universidad Nacional del Sur – CONICET [email protected] Resumen El objetivo del trabajo consiste en explorar algunos factores explicativos de la conducta exportadora en las pequeñas y medianas empresas (PyMEs), con especial énfasis en las nuevas tecnologías de información y comunicación (TIC). A partir de una breve revisión de estudios sobre el tema, se observa que la mayoría se focaliza en los países desarrollados, y pocos se refieren a empresas de países en desarrollo. Este estudio analiza un conjunto de PyMEs de Argentina. Se estima un modelo que muestra que la probabilidad exportadora está asociada con algunos de los factores descritos por la teoría, encontrándose variables ligadas con el uso de las nuevas TIC. Palabras claves: Nuevas Tecnologías de Información y Comunicación, Conducta exportadora, Competitividad, Pequeñas y Medianas Empresas, LOGIT. Introducción La estrategia de internacionalización que una empresa puede implementar conlleva cierta complejidad, sobretodo si hablamos de PyMEs, dado que las firmas deben evaluar su nivel de preparación para la actividad exportadora, decidir a qué mercado se debe exportar, optando por una estrategia de concentración (uno o pocos países) o de diversificación, buscar información sobre cómo lograr el mejor posicionamiento, realizar viajes para analizar el mercado, promocionar los productos en ferias, adaptar su producto a otros mercados y localizar proveedores y distribuidores, entre otras cuestiones. Sin embargo, en el marco del proceso de globalización y creciente apertura de los mercados, se convierte en una estrategia cada vez más necesaria. 37 Los mercados internacionales pueden ser muy atractivos para las PyMEs en la medida que representan oportunidades significativas para crecer. El presente trabajo tiene como objeto analizar la influencia de la dimensión tecnológica- en cuanto a nuevas Tecnologías de Información y Comunicación (TIC)- en el desempeño competitivo de las empresas. La exportación es un indicador indirecto de la competitividad de la empresa y, dado que se cree que las TIC son un determinante de dicha competitividad, se plantea el interrogante de si las decisiones de exportación están influidas en alguna medida por las TIC. Peng (2001) establece que la base de la internacionalización es la posesión de recursos de distintos tipos que permitan a la empresa extenderse fuera de las fronteras nacionales (Fernández, Z. y Nieto, M.J., 2002). En particular, las nuevas TIC ofrecerían a las PyMEs la posibilidad de enfrentar las limitaciones de acceso a los mercados internacionales (Loane, 2006). La evidencia empírica ha mostrado que las TIC pueden mejorar la performance de una empresa, así como su posición competitiva. Las redes de comunicación y el cibermercado favorecen más a las pequeñas empresas que a las grandes, dado que mientras las empresas grandes poseen los recursos suficientes como para acceder a nuevos mercados, incrementar su visibilidad y sus contactos a través de la participación en ferias internacionales, a las PyMEs les resulta inaccesible presentar su producto en mercados lejanos debido a sus recursos limitados. Viajar al exterior y participar en exposiciones de los principales mercados del mundo constituye un gasto oneroso para las mismas. Las nuevas TIC permitirían a las PyMEs cuyos destinos de la producción consisten en los mercados locales y regionales (debido a la falta de información y capacidad de marketing) tener acceso a nuevos clientes y expandir geográficamente sus mercados. La tecnología de la información tiene el inmenso poder de reducir los costos de coordinación, comunicación y procesamiento de información sobre los mercados, clientes, etc. Esto crea nuevas oportunidades para las PyMEs en cuanto a la posibilidad de comercializar sus productos en el mercado exterior. Eriksson et al. (1997) afirman que la importancia de un recurso clave, como es la información, tanto sobre los mercados exteriores como sobre el propio proceso internacionalizador debe ser 38 considerada (Fernández, Z. y Nieto, M. J., 2002). En primer lugar, debemos distinguir entre información y conocimiento, si bien suelen aparecer como conceptos similares. Es usual considerar la información como una etapa preliminar de la producción de conocimiento, en donde el conocimiento es el resultado de lo que la empresa haya aprendido a partir de la información. Según Yoguel, G. et al (2004) no toda información se convierte necesariamente en conocimiento. Básicamente para que la primera se convierta en el segundo se requieren: recursos, competencias, instituciones, y un concepto latente que denominan tacitness1. Sin toda esta conjunción de fases la mera información no se traducirá en conocimiento, del cual la innovación es la versión empresarial. Las TIC no generan per se competitividad en la empresa, sino que para poder incentivarla su incorporación y extensión debe ser acompañada por cambios profundos, no sólo a nivel técnico sino también organizacional, en la relaciones con proveedores, clientes, etc, que permita la generación y circulación de conocimiento, y una estructura organizativa que facilite la comunicación y el aprendizaje. Sin embargo, a pesar de que Internet se convertirá en una herramienta ampliamente utilizada para los negocios, muchos consideran poco probable que pueda transformar las oportunidades de acceso a los mercados internacionales de las PyMEs. La mayoría de las mismas tienen como principal destino de su producción los mercados locales, y no poseen la capacidad gerencial o capacidad de atender el mercado externo eficientemente. A lo largo de este trabajo, se plantea en primer lugar el estado actual de la problemática en relación a las TIC. Posteriormente, se abordará el marco teórico referido a la competitividad y el comportamiento exportador de las PyMEs así como su relación con el uso de las nuevas TIC; incluyendo una pequeña revisión de los resultados que ha arrojado la literatura empírica 1 Significa conocimiento tácito. La definición de conocimiento tácito no es universalmente aceptada. Según Polany (1992) mientras que el conocimiento explicito es aquel que se puede expresar mediante palabras y números, o cualquier otro dato codificado, el conocimiento tácito se define como la percepción subjetiva o las emociones no se puede instrumentalizar y se transmite en determinados contextos y acciones; es muy personal y difícil de verbalizar o comunicar (Yoguel et al, 2004). El conocimiento tácito involucra: i) los saberes no codificados en manuales sobre la tecnología de proceso aplicados al proceso de trabajo, ii) los saberes generales y comportamentales, iii) la capacidad de resolución de problemas no codificados, iv) la capacidad para vincular situaciones y para interactuar con otros recursos humanos. 39 reciente acerca de los factores explicativos de la conducta exportadora en las empresas. A continuación, se lleva a cabo un análisis descriptivo de la muestra disponible de empresas manufactureras de Argentina correspondiente al año 2002. Por último, se realiza un ejercicio econométrico para estudiar los factores que influyen sobre la probabilidad de que una empresa exporte o no. Estado actual de la problemática en relación a las TIC Argentina, como cualquier otro país que desea ser competitivo y convertirse en un jugador exitoso en el mercado global, necesita que sus empresas dispongan de tecnologías para poder competir. En lo que respecta al grado de inserción a nivel nacional de las nuevas TIC, nuestro país se encuentra en una situación “medianamente baja” según establece el índice InformationComunication Tecnologies Opportunity Index (ICT-OI)2 creado por el International Telecommunication Union (ITU). De acuerdo a este índice ninguno de los países considerados de América Latina posee niveles altos, solamente Chile se encuentra liderando el grupo. Argentina se encuentra por encima de Brasil, entre otros, dado que presenta mejores niveles tanto en redes (líneas telefónicas fijas por cada 100 hab., suscriptores a celulares por cada 100 hab., Internet banda ancha (kbps por hab.) como en habilidades (tasa de alfabetismo en adultos, tasa de matricula a escuela secundaria), que son dos de los componentes que forman el índice. Parte de la necesidad de acelerar la inversión en TIC consiste en promover el acceso a banda ancha3. La banda ancha tiene implicaciones especiales en el desarrollo sostenible. Por medio de 2 Este indicador es creado a partir de una lista seleccionada de indicadores y se constituye en una importante herramienta para medir la brecha digital midiendo la diferencia relativa en los niveles de oportunidad en TIC entre las economías y a lo largo del tiempo. Se crea a partir de 10 indicadores que permiten medir redes en TIC, educación, habilidades, uptake, e intensidad de uso. Los países son clasificados en 4 grupos: alto, medianamente alto, mediano y bajo. 3 Banda Ancha se refiere a la transmisión de datos en el cual se envían simultáneamente varias piezas de información, con el objeto de incrementar la velocidad de transmisión efectiva. Hoy en día el término banda ancha normalmente describe a las conexiones Internet recientes que funcionan entre 5 y 2 000 veces más rápido que las anteriores tecnologías de marcación por Internet. Sin embargo, el término banda ancha no se refiere a una velocidad determinada ni a un servicio específico. El concepto de banda ancha combina la capacidad de conexión (anchura de banda) y la velocidad. En la Recomendación I.113 del Sector de Normalización de la ITU se define la banda ancha como una "capacidad de transmisión más rápida que la velocidad 40 ésta las empresas de todos los tamaños pueden incrementar su productividad y ser más competitivas mediante de la implementación de soluciones de negocio basadas en Internet, tales como el comercio electrónico y las plataformas de manejo de la cadena de proveedores y logística, entre otras. Muchas ciudades están creando infraestructuras de banda ancha más accesibles para atraer más empresas y negocios a sus localidades. A nivel empresarial, claramente, el acceso a las TIC está ligado, entre otras cosas, a las posibilidades de financiamiento de las empresas. Los indicadores financieros para las PyMEs suelen ser los que determinan la competitividad de estas empresas (y de todas en general) en manos de los estudios más tradicionales y que podemos denominar como históricos. Sin embargo, los factores financieros ya no resultan decisivos por sí solos, sino que deben considerarse otros factores como la descentralización de la producción, la disminución de los costos de transacción gracias a las TIC, así como un mayor acceso al conocimiento y, por ende, al desarrollo de las capacidades comerciales y de negocios en general, ha contribuido a considerar al sector como parte real y necesaria de la dinámica competitiva. Algunos factores de la competitividad en las PyMEs son altamente influenciados por las TIC. Las firmas pueden hacerse más competitivas utilizando las nuevas herramientas en el comercio como lo es Internet. Según la Declaración de Principios adoptada en la primera fase de la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información (CMSI) realizada en Ginebra del 10 al 12 de diciembre del 2003, las TIC son un factor importante para el crecimiento porque aumentan la eficiencia y la productividad, sobre todo entre las PyMEs. Pese a estas cuestiones, parte del problema de apropiación de las TIC por parte de las PyMEs es el desconocimiento, ya no solo de la tecnología como tal sino de la utilidad de la misma. Los beneficios de estas tecnologías siguen siendo un tema que continúa sembrando dudas y temores por parte de los propietarios de primaria de la red digital de servicios integrados (RDSI) a 1,5 ó 2,0 megabits por segundo (Mbits)". Las velocidades de la banda ancha son apreciablemente más rápidas que las de tecnologías anteriores, por lo cual resulta más rápido y cómodo acceder a la información o efectuar transacciones en línea utilizando Internet. En función del tipo de tecnología utilizada, la banda ancha puede aportar beneficios económicos. Por ejemplo, gracias a la tecnología DSL, los usuarios pueden utilizar una sola línea telefónica normalizada para servicios de voz y datos. Esto les permite navegar por Internet y efectuar una llamada simultáneamente utilizando la misma línea telefónica. 41 las PYMEs, quienes no siempre logran ver más que un factor de practicidad en, por ejemplo, la facturación como actividad puntual. Sin embargo, muchas empresas reconocen que efectivamente la inserción del comercio a negocios electrónicos es un instrumento que mejora la competitividad y que debería jugar favorablemente para las PyMEs, pero siempre dentro de consideraciones como mesura, planificación y rubro de actividad. Marco Teórico Con el advenimiento de la corriente de pensamiento denominada “Nueva Economía”4, varios investigadores se preocuparon por analizar la relación entre inversión en TIC y performance en las empresas. Las empresas pueden ahora emplear estas tecnologías con fines competitivos, aunque hasta ahora los efectos reales de las mimas no están claramente definidos. La hipótesis que subyace al resultado de los importantes efectos positivos de la inversión en TIC sobre el aumento de la productividad en el largo plazo (Brynjolfsson and Hitt, 2003; 2000; Brynjolfsson et al. 1994), es que las computadoras, y demás tecnologías afines, formarían parte de un amplio sistema tecnológico y de cambio organizacional que en definitiva es el que posibilitaría que se incremente la productividad a nivel de la firma. Es decir, no es la inversión en computadoras lo que aumenta la productividad, sino la inversión en capacitación y nuevas formas de gestión que son colaterales al proceso de adquisición de nuevas tecnologías a nivel empresarial. En particular, Brynjolffson and Hitt (2003) exploran los efectos de la computación sobre la productividad y el crecimiento del producto en 527 empresas grandes de EEUU entre 19871994. Observan que la contribución de la computación es positiva y debe ser acompañada por grandes inversiones en inputs complementarios, tal como el capital organizacional. Sin embargo, esta visión positiva del impacto competitivo de las TIC no ha convencido a varios otros autores del área de investigación. Strassman (1999) no ha encontrado evidencia de una relación entre inversión en TIC y un incremento tanto en la productividad como en los 4 Corriente de pensamiento surgida en los últimos años de la década de los 90. Sus seguidores sostienen que el gran crecimiento de los países industrializados a partir de la segunda mitad de la década de los 90 proviene del crecimiento en el área de investigación y desarrollo. Considera el impacto sobre las leyes tradicionales de la economía en materia de equilibrio estable y productividad marginal decreciente del trabajo que está ejerciendo la era de la información. 42 resultados de la compañía. Establece que los resultados obtenidos por Brynjolfsson se basan en la evolución de las acciones de empresas que ya están utilizando las TIC intensivamente. Los valores de estas empresas se han apreciado ampliamente en la década pasada, mientras que ha habido una caída de estos valores al final del período. Por otra parte, las estimaciones que se encuentran son para empresas grandes, las cuales pueden subestimar aquellos aspectos que afectan el resultado de las TIC, y que son sólo revelados en los estudios que se focalizan en la organización. Finalmente, establece que la investigación requiere ser extendida a diferentes áreas económicas y tipos de organización distintas a las empresas americanas. Al mismo tiempo que el primer trabajo de Brynjolfsson, otra corriente teórica se desarrolló tratando de explicar el impacto de las TIC sobre las organizaciones. Se lo conoce como la hipótesis de necesidad estratégica, introducida por Clemons and Kimbrough (1986) y posteriormente desarrollada por Clemons and Row (1991). Estos investigadores indican que parte del progreso alcanzado por las empresas se debe a la introducción de las TIC y es rápidamente neutralizado por sus competidores. El mecanismo de introducción de la tecnología, la consiguiente creación de ventajas temporarias y luego la neutralización inmediata se explican por el hecho de que este tipo de tecnología se derrama rápidamente entre los competidores, los cuales esperan obtener el mismo beneficio positivo que aquellos. Desde este punto de vista, las TIC son una condición necesaria no suficiente: sin tecnología no es posible comenzar a competir, pero no es suficiente alcanzar resultados superiores que no sean sostenidos en el tiempo. Más recientemente, durante la segunda mitad de los años 90, la discusión sobre la correlación entre tecnologías de la información y los resultados de la empresa han visto un nuevo avance con respecto al desarrollo estratégico. Específicamente, se trata de los adeptos al paradigma o a la visión de Resource Based View de la empresa que considera una organización como el reflejo de sus recursos internos, visión que se construye sobre la base de la perspectiva schumpeteriana de creación de valor, y considera a la empresa como una canasta de recursos y capacidades. Según Bharadwaj (2000) esta perspectiva provee indirectamente las bases por las cuales podemos explicar el efecto de las TIC sobre los resultados de las empresas, y más 43 específicamente sobre las ventajas competitivas (Bruque S. and Vargas, A. ,2002). De acuerdo a Amit and Zott (2001) la emergencia de los mercados virtuales claramente abre nuevas fuentes de creación de valor dado que las capacidades relacionales y las nuevas complementariedades pueden ser explotadas (por ejemplo entre capacidades online y offline). Cuando una estrategia a favor del uso de TIC es combinada con ciertos recursos y capacidades que son difíciles de imitar, las empresas podrán ganar ventajas competitivas sustantivas a través de barreras a la entrada, costos de comenzar con la actividad -switching costs- y barreras móviles. Esto puede incluir habilidades gerenciales, técnicas y de infraestructura en TIC (Salmeron, J.L. and Bueno, S., 2006). Asimismo, Ernst (1996) y Lall (1995) mencionan que las firmas a la hora de introducir una nueva tecnología, en este caso Internet, deben hacer esfuerzos de selección y adaptación que requieren como condición necesaria umbrales mínimos de conocimientos codificados y en especial tácitos. Mientras el elemento codificado del proceso de conocimiento es básicamente transable, el elemento tácito es firm especific, no se puede comprar en el mercado y constituye un punto clave en las diferencias tecnológicas y en las ventajas competitivas específicas de las firmas (Yoguel, G. y Boscherini, 1996). Sin embargo, la noción misma de competitividad es de muy difícil definición, en tanto está influenciada o determinada por una gran cantidad de variables que dificultan su estudio de manera holística; así lo demuestra la multiplicidad de definiciones que intentan dar cuenta de ella, resumirla y sintetizarla. En ese sentido, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe destaca que en la mayoría de los casos, no se da una definición muy exacta de competitividad y no se hace énfasis en el trabajo de medición ni en la importancia de los indicadores utilizados (CEPAL, 1995). Por su parte, la competitividad internacional es un concepto muy utilizado en la discusión corriente para referirse al desempeño de una firma, una industria o un país en la economía internacional (Chudnovsky y Porta, 1990). La competitividad de gran número de firmas ya no es obtenida a través de la reducción de costos, al menos en los salarios, sino principalmente mediante la generación de rentas emprendedoras a través de la innovación en los procesos de producción, accediendo a mercados nuevos por caminos diferentes, o produciendo, mejorando o rediseñando los productos y servicios con una 44 contribución significativa para los beneficios percibidos del producto final para el consumidor (Prahalad, C.K. and Gary Hamel, 1990). En este trabajo se analiza la competitividad a nivel microeconómico, mediante el comportamiento exportador. Este indicador ha sido utilizado en varios estudios empíricos y es internacionalmente aceptado, ya que las exportaciones de un país reflejan la eficiencia productiva de las empresas de forma ex post, es decir, se trata de evaluar la competitividad por medio de sus efectos reales en el mercado. La mayoría de los estudios se centran en el análisis de los determinantes a nivel micro (características de las empresas) para los países desarrollados. Varian, Litan, Elder and Shutter (2002) estudiaron los beneficios económicos de Internet en los Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania (Monge G, R., Alfaro A., C y Alfaro C, J., 2006). En este trabajo identificaron y midieron los ahorros en costos e incrementos en ingresos de las empresas asociadas con la inversión que ellas han llevado a cabo, en lo que los autores denominan, soluciones de negocios basadas en Internet (Internet business solutions o IBS). Es decir, cualquier iniciativa que combine Internet con redes (networking), software y computadoras (hardware) para incrementar o mejorar los procesos del negocio o crear nuevas oportunidades de negocios. En otros estudios, la Canadian e-Business Initiative (2002 y 2004) estudió el impacto de las IBS sobre el desempeño de las pequeñas y medianas empresas del Canadá (PyMEs que emplean entre 50 y 500 empleados). Los resultados de estos nuevos esfuerzos, señalan que aproximadamente más de la mitad de estas empresas están empleando IBS, y que en el corto plazo se espera que un 20% más adopten este tipo de soluciones. En síntesis, se afirma que la adopción de las TIC (IBS) constituye una importante innovación, la cual mejoraría la productividad y competitividad de las PyMEs canadienses. Tal como indican Estrada, S. y Heijs, J. (2005) en su trabajo, sólo algunos pocos estudios se refieren a empresas de países en desarrollo: Estrada S. y Heijs, J. (2005) para México; Willmore (1992) para Brasil; Zhao and Li (1997) para China, entre otros. Por otra parte, algunos de los estudios para países desarrollados se refieren al caso de las PyMEs, tales como Lefebvre (2001) para Canadá; Roper and Love (2002) para Alemania; Sterlacchini (1999) para Italia. En estos 45 trabajos se ha considerado a la exportación como una variable dependiente, ya sea con base en la probabilidad o la propensión exportadoras.5 De acuerdo con la literatura, y dado que la actividad exportadora es una actividad costosa y riesgosa, debe existir una asociación entre el tamaño de la empresa (ya sea medida como nivel de facturación o por personal ocupado) y la exportación. La probabilidad exportadora parece asociada con el tamaño, es decir, las empresas a medida que dispongan de mayores recursos, tendrán mayores posibilidades de ser exportadoras. Sin embargo, no se ha encontrado consenso respecto a la dirección de tal asociación en el caso de la propensión exportadora. Algunos autores han considerado la variable propiedad del capital, distinguiendo entre empresas nacionales individuales, compañías pertenecientes a grupos nacionales y extranjeras. Los estudios empíricos de Basile (2001), Sterlacchini (1999) y Roper and Love (2002) indican que las filiales multinacionales tienen, independientemente de su tamaño, un sesgo claramente exportador. Se ha incluido también en relación a la propiedad social de la empresa, la variable grupo o holding. Los trabajos de Basile (2001) y Roper and Love (2002) muestran que las empresas que pertenecen a algún grupo económico tienen una actividad exportadora más dinámica. Otros trabajos han incluido la estrategia empresarial como variable explicativa. Se considera que las PyMEs tienen una propensión a especializarse, dado el nuevo marco de desarrollo basado en la especialización flexible (Piore and Sabel, 1984)6 y, en varios casos, al rol de las mismas en su relación como proveedoras de empresas grandes. Por ejemplo, en el distrito industrial, la especialización productiva estimula el desarrollo y la difusión de las innovaciones 5 La probabilidad exportadora se asocia con una dimensión de conducta y la propensión exportadora con una dimensión relacionada con el desempeño, aunque algunos autores consideran ambas formas como un todo expresivo de la conducta. La probabilidad exportadora indica si la empresa ha percibido ingresos por ventas en el mercado internacional. Por su parte, la propensión señala la proporción o el cociente entre los ingresos provenientes de ventas en el mercado internacional y las ventas totales. Optar por un enfoque u otro trae como consecuencia la posibilidad de usar diferentes herramientas de análisis. 6 El concepto de especialización flexible es un ejemplo de las nuevas visiones teóricas que explican las estructuras y el éxito económico de las PyMEs. La noción de especialización flexible ha sido utilizada para denotar el cambio de una forma estandarizada de producción hacia procesos de producción más flexibles y nuevas formas de organización, basadas en redes locales. La mayor flexibilidad emergente de las PyMEs les permitió integrarse de manera más protagónica en la cadena de valor de distintas industrias. Citado en Boschma, R.A.; Lambooy, J.G.; (2002) 46 a través de la disminución de los costos de transacción respecto de los de coordinación, ya que el proceso de innovación está acompañado por la adopción de sistemas informativos modernos entre las empresas. La evidencia respecto a la incidencia de la estrategia empresarial que presentan Lefebvre and Lefebvre (2002) no es nada concluyente. Es posible predecir que una cartera diversificada de productos se asocie con la decisión de exportar, dado que abre posibilidades para reducir riesgos y ampliar los flujos de conocimiento. Sin embargo, una relación cerrada puede aumentar el desempeño exportador, por un efecto monopsónico y de explotación de ventajas comparativas basadas en precios. Cavusgil y Zou (1994) mencionan el debate entre especialización y diversificación (Estrada S. y Heijs, J. ,2005). Por último, el capital humano ha sido incorporado como variable ligada a la capacidad de innovación de una empresa. Roper and Love (2002) y Wagner (1995) la han analizado considerando los empleados con educación de grado universitario. Han sido ambiguos los resultados obtenidos en relación con sus efectos sobre la conducta exportadora. Asimismo, Lefebvre and Lefebvre (2002) para poder captar los resultados de la innovación sobre el comportamiento exportador, incorporaron los productos asociados con la propiedad industrial, tales como marcas o patentes. La importancia de la adopción de tecnologías basadas en la computación e Internet (adopción de TIC) radica en su potencial impacto sobre la productividad y la competitividad de las empresas. Lefebvre and Lefebvre (1996) documentan una extensa gama de investigaciones, básicamente en economías desarrolladas, que apoyan la anterior aseveración. Estos autores encuentran que el impacto de la adopción de TIC tiende a ser observable a nivel de la firma, pero no necesariamente a nivel del sector productivo o a nivel de la economía como un todo. Para explicar esta paradoja, los autores plantean cinco posibles explicaciones: La existencia de dificultades asociadas con la medición de la productividad a nivel agregado, según las estadísticas oficiales, lo cual imposibilita obtener buenos resultados de los análisis macroeconómicos. 47 La distinción entre sectores, principalmente entre la industria y los servicios, no es apropiada para el análisis agregado sobre el impacto de las TIC, debido a la subcontratación de actividades que realizan las empresas manufactureras a empresas del sector servicios. La adopción e implementación de las TIC requiere de un proceso relativamente largo de aprendizaje y ajuste por parte de cada empresa, lo cual genera un rezago entre la adopción y el momento en que los beneficios aparecen para un sector o la economía como un todo. Es posible que la inversión en TIC no sustituya viejas tecnologías, lo cual podría producir un sobreconsumo de tecnología por parte de los administradores, disipándose así sus potenciales beneficios a nivel de una empresa o grupo de empresas. Finalmente, la adopción de TIC puede producir una redistribución de beneficios entre empresas de un mismo sector, con lo cual no se observarían beneficios a nivel agregado. En otras palabras, se podría estar ante el hecho de que la adopción de TIC "cambie la distribución del pastel sin hacerlo más grande". Por otro lado, Heeks (2002) señala la importancia de la adopción de las TIC para el mejoramiento de la productividad de las empresas, al resaltar el papel que la información juega en los procesos y en los resultados de cualquier gestión empresarial. Este autor señala la importancia de las TIC en el procesamiento de datos (i.e. convertir datos en información valiosa para el usuario), así como en la comunicación, como mecanismo para transferir datos desde una fuente hasta un receptor. Fuente de datos y Marco descriptivo El análisis empírico se ha llevado a cabo con una muestra de PyMEs proporcionada por la Encuesta Estructural 2002 de la Fundación Observatorio PyME para el período 2001-2002 en el marco del Premio Fundación Observatorio PyME 2005 a la Investigación Aplicada en Economía Industrial. 48 Resulta relevante reconocer que el período de análisis ha sido para nuestro país uno de los más difíciles en términos económicos, como consecuencia del advenimiento de la crisis; sobretodo, si tenemos en cuenta la situación particular de las PyMEs en términos de exportación. Lamentablemente, es el último período que abarca la base de datos disponible. El diseño muestral para la Encuesta Estructural 2002 ha sido elaborado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) de Argentina, sobre el directorio resultante del cruce de datos del Directorio de Unidades Económicas(DINUE) del año 2000 y los datos del Censo Nacional Económico 1994. Los datos provenientes de estas empresas encuestadas son expandibles al universo de 15500 PyMEs industriales registrado en dicho directorio. Esta encuesta reúne datos provenientes de 617 empresas pertenecientes a distintas ramas de la industria o sectores de actividad y localizadas en distintas regiones del país. La mayor concentración de las mismas se localiza en las regiones del Gran Buenos Aires (48.6%) y Centro (27.7%). Mientras que el 12% se ubica en la región de Cuyo, el 5.7% en la Región Noreste, el 5.2% en el Noroeste y sólo el 0.8% pertenecen a la región Sur. Las empresas pueden ser agrupadas de acuerdo a su tamaño. Si adoptamos la clasificación de las empresas más utilizada que es por mano de obra empleada (Microempresa: 1-9 trabajadores; Pequeña: 10-49 trabajadores; mediana: 50-199 trabajadores y Grande: más de 200 empleados), los resultados son los siguientes: Cuadro Nº 1. Clasificación de las empresas según cantidad de empleados Frecuencia Porcentaje Porcentaje válido* Microempresa 110 17.8 18.0 Pequeña 430 69.7 70.3 Mediana 71 11.5 11.6 Grande 1 0.2 0.2 Subtotal 612 99.2 100.0 Sin Dato 5 0.8 Total 617 100.0 Fuente: Elaboración propia * Sin considerar las empresas con datos faltantes. Porcentaje acumulado 18.0 88.2 99.8 100.0 49 De acuerdo a esta clasificación, aproximadamente el 70% de las empresas son pequeñas y el 18% microempresas. Resta considerar el 11,6 % de empresas medianas y una sola empresa grande. Por otro lado, si adoptamos la clasificación de la Secretaría de Pequeña y Mediana Empresa (disp. 147/2006) para el sector industrial (Microempresa: menos de $1.250.000 anuales; Pequeña: entre $1.250.000 y $7.500.000; Mediana: entre $ 7.500.000 y $ 60.000.000 y Grande: más de $60 mill.), se observa: Cuadro Nº 2. Clasificación de las empresas según facturación o monto de ventas Frecuencia Microempresa 331 Pequeña 180 Mediana 21 Subtotal 532 Sin Dato 85 Total 617 Fuente: Elaboración propia Porcentaje 53.6 29.2 3.4 86.2 13.8 100.0 Porcentaje válido 62.2 33.8 3.9 100.0 Porcentaje acumulado 62.2 96.1 100.0 Según este criterio, la mayoría de las empresas poseen tamaño micro, dado que el 62.2% clasifican como microempresas, el 33.8% como pequeñas y casi el 4% medianas. Se puede observar que los criterios no producen el mismo tipo de clasificación entre las empresas. Según este último, no existirían empresas grandes en la muestra. En el trabajo se va a adoptar este último criterio de clasificación. Caracterización de las empresas según su conducta exportadora. En esta sección se pretende vislumbrar, a partir de un análisis exploratorio basado en tablas de contingencias, cómo afectan las variables ligadas con el uso de las TIC la conducta exportadora de la empresa. En principio, determinaremos la cantidad de firmas que exportaron durante el período de análisis. 50 Cuadro Nº 3 Frecuencia Sin dato 15 Sí Exportó 206 No Exportó 396 Total 617 Fuente: Elaboración propia Porcentaje 2.4 33.4 64.2 100.0 Porcentaje acumulado 2.4 35.8 100.0 Se encuentra que el 33.4% de las empresas exportó, mientras que la mayoría de las empresas (64.2%) no ha exportado durante el período bajo análisis. a) disponibilidad de sitio Web Independientemente de si las empresas exportaron o no durante el período analizado, es posible determinar el porcentaje de empresas que disponían de un sitio web. La información provista por la base de datos establece que el 38.4% de las empresas disponían de una página web durante el período de análisis, lo cual es un porcentaje interesante, mientras que el 47.2% no poseía un sitio web. No es menor que en el 14.4% no se disponga de información en este aspecto. Si bien no es posible deducir nada a partir de la base de datos, se puede conjeturar en que las empresas desconocían lo que es un sitio web. A continuación, relacionamos la variable exportación con la disponibilidad de un sitio web. Cuadro Nº 4 Posee página web? Sí Recuento % de fila ¿Exportó? Sí 118 No 119 Sin dato 0 Total 237 Fuente: Elaboración propia 57.30% 30.10% 0.00% 38.40% No Recuento % de fila Sin dato Recuento % de fila Total Recuento % de fila 79 210 2 291 9 67 13 89 206 396 15 617 38.30% 53.00% 13.30% 47.20% 4.40% 16.90% 86.70% 14.40% 51 100.00% 100.00% 100.00% 100.00% Es posible observar que la mayoría de las empresas que exportaron poseían una página web (57.3%). Mientras que la mayoría de las empresas que no exportaron no poseían esta herramienta (53%). b) Utilización de alguna técnica de mejora de la calidad y/o productividad Los datos disponibles de la muestra indican que el 66 % de las empresas utilizaba alguna técnica de mejora en la calidad y/o productividad. Si relacionamos esta variable con la exportación, tal como se observa en el Cuadro Nº5, resulta que cerca del 76% de las empresas que exportaron utilizaban alguna técnica. Cuadro Nº5 ¿Exportó? Sí ¿Utiliza alguna técnica de mejora de calidad y/o productividad? Sí No Sin dato Total Fuente: Elaboración propia Recuento No % de Columna Recuento Sin Dato % de Columna Recuento Total % de Columna Recuento % de Columna 156 48 2 75.70% 23.30% 1.00% 244 148 4 61.60% 37.40% 1.00% 8 5 2 53.30% 33.30% 13.30% 408 201 8 66.10% 32.60% 1.30% 206 100.00% 396 100.00% 15 100.00% 617 100.00% Modelo a Estimar Mediante la técnica multivariante de regresión logística, se determinará la influencia simultánea del conjunto de variables elegidas. Mientras que en la sección anterior se analizó la relación entre cada una de las variables explicativas con respecto a la conducta exportadora, la regresión logística permitirá establecer la importancia de cada variable teniendo en cuenta en forma simultánea la influencia de las otras variables. 52 Tal como se indicó anteriormente, se trata de estimar cuáles son los factores que influyen en la probabilidad de exportar de una empresa a través de un modelo LOGIT. Variable dependiente (exporto): Conducta Exportadora. Variable dicotómica, que toma valor 1 si la empresa exportó durante los últimos dos años, y 0 en caso contrario. El modelo LOGIT se deriva de un modelo de variable latente o no observable. Sea y* la variable latente conducta exportadora, determinada por ciertas variables independientes observables por la siguiente ecuación estructural: y*= β0 + x β + e , y = 1[ y*>0] La relación entre la variable y binaria observada (si exportó en los últimos dos años) y la variable latente y* (conducta exportadora) se realiza a través de la siguiente ecuación: y = 1 si y* > 0 y = 0 si y*<=0 En este trabajo se supone que el término de error e asume una distribución de forma logística con Var e = π2/ 3, resultando un modelo logit binario con la siguiente ecuación: Pr( y 1 / x) exp( x) 1 exp( x). Variables de Interés Disponibilidad de sitio web: Corresponde a una variable dummy que toma valor 1 si la empresa cuenta con un sitio web y 0 en caso contrario. H1: Se espera que la disponibilidad de sitio web tendrá un efecto significativo y positivo sobre la probabilidad de exportar. Utilización de Técnicas de mejoras en la calidad y/o productividad: Por técnicas de mejoras de calidad y/o productividad se entienden, según la encuesta disponible, las siguientes: control estadístico de procesos, sistemas justo a tiempo, administración de calidad total, gestión participativa y equipos de control numérico. Esta variable dummy toma valor 1 si la empresa utilizó al menos una de las técnicas mencionadas y 0 en caso de no utilizar ninguna. 53 H2: Se espera que la utilización de técnicas de mejora en la calidad y/o productividad tendrá un efecto significativo y positivo sobre la probabilidad de exportar. Variables independientes de control 7 Tamaño de la empresa: tal como lo indica la literatura, el tamaño influye en la disponibilidad de recursos financieros y la capacidad de absorber riesgos, lo cual está estrechamente ligado a la tendencia hacia la internacionalización. EL tamaño será medido como monto de ventas de la empresa. Se supone que cuanto mayor sea el tamaño de la empresa, mayor será la probabilidad de que la empresa exporte. Edad: Se considera que ciertos factores a nivel individual también están asociados a la conducta exportadora de la empresa. La estrategia hacia la internacionalización puede estar reflejada en características individuales de su dueño o gerente. Las empresas con una orientación estratégica de ese tipo son aquellas cuyos socios o dueños se caracterizan por ser tomadores de riesgo, innovativos y proactivos. Se realiza el supuesto de que estas actitudes son más visibles en individuos con edad joven. Antigüedad: Se agrega como variable de control dado que se considera relacionada con el tamaño. En este sentido, se supone que las empresas más jóvenes tienen una menor probabilidad de exportar como consecuencia de falta de experiencia, asimetrías de información, etc. Capital extranjero: Se trata de una variable que indica el porcentaje de capital social de la empresa en manos de extranjeros. Se supone que las de mayor capital extranjero tendrán mejor acceso a mercados exteriores e, incluso, algunas están ubicadas en países en desarrollo con el objetivo de competir en el mercado internacional y ahorrar así costos laborales. Grupo económico: Corresponde a una variable dummy, que toma valor 1 si la empresa pertenece a algún grupo económico, y 0 en caso contrario. Se supone que las empresas que forman parte de un grupo económico tienen una actividad exportadora más dinámica. 7 Entre las variables independientes, se reconoce la necesidad de incorporar una variable relativa al financiamiento de las empresas durante el período de análisis. Si bien se dispone de una variable que indica si la empresa tuvo o no acceso al crédito, de las 617 observaciones, 351 eran datos perdidos. Esto afectó los resultados de la estimación ensayada, razón por la cual se decidió no incorporarla. 54 Estrategia productiva comercial de la empresa: La información que se dispone resalta la presencia de tres tipos de estrategias: especialización, diversificación y otras estrategias. Se supone que en la medida que se disponga de una mayor diversidad de la cartera de productos, se multipliquen los mercados y clientes, esto enriquecerá los flujos de información y cooperación, además de que se acumulará experiencia y capacidad relacional. Por otro lado, se presume que al enfocar sólo un tipo de producto-mercado se uniforman características y se reduce la interacción con otro tipo de usuarios. Se supondrá entonces que la diversificación se asocia con la conducta exportadora. La encuesta ha determinado tres estrategias posibles, de las cuales las empresas debían identificar aquella a la cual estuviera orientada en los últimos años. Dado que son tres las estrategias posibles, se incluirán dos variables dummy en el modelo. Educación de los empleados: el capital humano en una empresa no es una variable directamente observable, por lo cual dada la información disponible en la base de datos, se la ha aproximado por medio del personal calificado, entendiendo por calificado, aquel con educación técnica o universitaria. Se supondrá que un mayor número de empleados con calificación será favorable a la conducta exportadora. Patentes: Corresponde a una variable dummy que toma valor 1 si la empresa cuenta con el uso de licencias y/o patentes. Se supone que tendrá un influjo positivo sobre el comportamiento exportador. Región: Se incorpora para captar las diferencias por regiones en cuanto a diferencias en infraestructura, comunicaciones, transporte, cercanía a puerto, incentivos tributarios, etc. que son variables importantes para las actividades de exportación. Por otro lado, el empleo de Internet requiere de una infraestructura adecuada, tal como la posibilidad de conexión a la red mediante cable-módem, conexión de banda ancha, etc. En algunas regiones del país se instalaron redes de fibra óptica que llegan incluso a viviendas individuales. Desde esta perspectiva, es de esperarse que ciertas regiones sean más propicias para disponer de una página web que otras. Teniendo en cuenta que son 6 las regiones posibles, se incorporaron 5 dummies en el modelo a estimar. 55 Cuadro Nº 6 Nombre Descripción montoventas Tamaño de la empresa según monto de ventas (sin IVA, en moneda nacional) Porcentaje del capital social de la empresa en manos del sector extranjero Si la empresa forma parte de algún grupo económico capitalext grupo otraest Si la empresa tuvo como estrategia productiva comercial la especialización Si la empresa tuvo como estrategia productiva comercial la diversificación Si la empresa tuvo como estrategia productiva comercial otra. EducUniv Porcentaje del personal con educación universitaria TecProf Porcentaje del personal con educación como Técnicos Profesionales patentes PWEB Si la empresa cuenta con licencias o patentes Si la empresa posee sitio web tecmej ed21a25 Si la empresa utiliza alguna técnica de mejora de calidad y/o productividad Número de socios con edad entre 21 y 25 años ed26a39 Número de socios con edad entre 26 y 39 años ed40a59 Número de socios con edad entre 40 y 59 años desde60 Número de socios con 60 o más años de edad antigüedad Años de operación de la empresa con la actual razón social centro Si la empresa pertenece a la región CENTRO del país cuyo Si la empresa pertenece a la región CUYO del país gba Si la empresa pertenece a la región GBA del país nea Si la empresa pertenece a la región NEA del país noa Si la empresa pertenece a la región NOA del país sur Si la empresa pertenece a la región SUR del país especial diversif Hipótesis General: La probabilidad de que la empresa exporte será mayor cuanto mayor sea el tamaño de la empresa (ya sea medida por el número de empleados ocupados como por el valor de ventas), mayor sea el porcentaje de capital extranjero, los socios sean jóvenes, si la empresa pertenece 56 a un grupo económico, si utiliza alguna técnica de mejora de calidad y/o productividad y si disponen de una página web. Por otra parte, si la empresa pertenece a las regiones GBA y CUYO, por ser las regiones de mayor densidad de empresas y donde predominan actividades exportadoras. Resultados obtenidos Los resultados obtenidos a partir de la estimación concuerdan con las hipótesis planteadas para las variables de interés. En particular, la disponibilidad de un sitio web (PWEB) presenta un efecto significativo y positivo sobre la probabilidad de exportar indicando que si la empresa dispone de un sitio web, es más probable que exporte8. En efecto, presenta una significatividad más alta que el resto de las variables. Asimismo, la utilización de técnicas de mejoras en la calidad y/o productividad (Tecmej) posee un efecto positivo y significativo, esto muestra que si la empresa utiliza alguna técnica de mejora en la calidad y/o productividad, mayor es la probabilidad de que exporte. El tamaño de la empresa es significativo a un nivel del 1%. Tal como predice la teoría y de acuerdo a la hipótesis planteada, un incremento en el tamaño de la firma, aumenta la probabilidad de que la empresa exporte. Este mismo resultado se encuentra con el porcentaje de capital extranjero y el porcentaje de empleados con educación técnica. Cuanto mayor sea el valor de estas variables, mayor es la probabilidad de que la empresa exporte. Por otro lado, el efecto hallado con la variable `cuyo´ nos indica que si la empresa pertenece a la región Cuyo, menor será la probabilidad de que la empresa exporte. De acuerdo a los datos proporcionados por la base, la región GBA (región tomada como base) concentra la mayor cantidad de empresas que exportaron en ese período. Por esta razón, es de esperarse que en las 8 Este resultado se mantiene aún cuando corremos el modelo incluyendo otras variables, tales como mano de obra ocupada, en lugar de monto de ventas; la distancia al cliente principal, si el competidor es nacional o extranjero, etc. Asimismo, se han estimado modelos alternativos utilizando otras variables relacionadas con el uso de las TIC, tales como : dispone de Internet (a los fines de la exportación se consideró más interesante la disponibilidad de sitio web), tipo de conexión (Dial up, banda ancha, etc. no resultó significativa), comercializa productos por Internet o e-commerce ( no resultó significativa y el modelo perdía significatividad dado que existen 285 datos perdidos en esta variable, y sólo 86 empresas respondieron afirmativamente). 57 otras regiones, la probabilidad de exportar sea inferior. Por otra parte, no debe olvidarse el período de análisis del estudio, durante el cual la situación de la industria vitivinícola, entre otras, no era la observada actualmente en términos de exportaciones. No concuerda con la teoría el efecto encontrado con la edad de los socios. Es de esperarse que a edades más tempranas (de 26 a 39 años de edad), los socios tengan una mayor conducta exportadora. Esto resultado puede estar relacionado con la presencia de datos faltantes. Cuadro Nº79 Variable Coeficiente P-Value Nivel de significatividad Montoventas 1.13e-07 0.005 ** Capitalext .0290092 0.039 ** Grupo -.1275827 0.779 Ns Diversif -.1888881 0.427 Ns Otraest -.8499611 0.255 Ns EducUniv -.0134358 0.333 Ns TecProf .0180626 0.031 ** Patentes .0583704 0.832 Ns PWEB .7610461 0.002 ** Tecmej .6513556 0.019 ** Centro -.4461129 0.111 Ns Cuyo -.9559536 0.025 ** Nea -.8022182 0.192 Ns Noa -1.447539 0.071 Ns Sur -.0763027 0.950 Ns ed21a25 .4408616 0.207 Ns ed26a39 -.1739027 0.039 ** ed40a59 .0587779 0.211 Ns desde60 .2329888 0.097 Ns antigüedad .0992021 0.092 Ns c -1.887293 0.000 ** Fuente: Elaboración propia, según estimación resultante de aplicar el programa STATA 8.1 Al estimar las probabilidades de que una empresa exporte para cada una de las observaciones de la muestra10, se obtuvo que las mismas varían desde 0.041 a 0.996 con una probabilidad promedio de 0.376. 9 Se destacan en negritas los efectos significativos. Se puede demostrar que las probabilidades pronosticadas tanto con Logit como con Probit son esencialmente idénticas. A pesar de que ambos modelos realizan supuestos diferentes 10 58 A continuación, el análisis se focaliza en algunas de las variables independientes. Con el objetivo de analizar el impacto de cada una de las mismas sobre la probabilidad de exportar se computaron los valores estimados de esta probabilidad para dos valores posibles de cada una de ellas. Es decir, cómo cambia la predicción de la probabilidad según sea el valor de cada variable en particular, sin establecer valores específicos para el resto de las variables, sino consideradas en sus medias. Cuadro Nº 8 Pronóstico de la Prob exportar Con sitio web 0.4545 Sin sitio web Diferencia Prob. 0.2802 0.1743 Montoventas Max 0.9571 Montoventas Min 0.3058 0.6513 en 0.7444 % Tec Prof Mín 0.3259 0.4185 % Tec Prof Max Con Tec mejoras 0.3991 Sin Tec mejoras 0.2572 0.1419 calidad/product. calidad/product Fuente: Elaboración propia, según estimación resultante de aplicar el programa STATA 8.1 En principio, se puede observar en el Cuadro Nº8 que la mayor probabilidad de exportar se pronostica cuando las empresas disponen de un monto de ventas máximo, es decir cuando la empresa es de mayor tamaño. La diferencia entre las probabilidades pronosticadas según que la empresa disponga de un monto de ventas máximo a uno mínimo, es muy grande (0.6513)11. Asimismo, no es menor el efecto que produce disponer o no de un sitio web. Este factor genera una diferencia en términos de probabilidad de exportar estimada de 0.1743. Por otro lado, el uso de técnicas para mejorar la calidad y/o productividad en la empresa, crea una diferencia en términos de probabilidad pronosticada de 0.1419. Por último, también es importante el efecto que tiene disponer de un porcentaje alto de personal técnico profesional. La diferencia sobre la probabilidad pronosticada entre poseer un porcentaje máximo de personal con educación respecto a la varianza del error, estas diferencias son absorbidas a través de las magnitudes relativas de los coeficientes estimados. La correlación entre los dos valores pronosticados es de 0.9994. 11 Cabe recordar que la empresa con monto de ventas máximo corresponde a un tamaño mediano, no existen empresas grandes en la base de datos según facturación. 59 técnica, a uno mínimo, es de 0.4185. A continuación, se analiza el efecto combinado de disponer de una página web y del monto de ventas sobre la probabilidad de exportar. Cuadro Nº 9 Monto ventas Máximo Mínimo Pronostico de la Prob exportar Con sitio web Sin sitio web Diferencia en Prob. 0.9721 0.3994 0.9421 0.2370 0.03 0.1624 Fuente: Elaboración propia, según estimación resultante de aplicar el programa STATA 8.1 Cabe destacar que la probabilidad pronosticada de que una empresa exporte, es superior cuando el monto de ventas es máximo y a su vez dispone de un sitio web. Cuando la empresa es grande, la disponibilidad de sitio web no genera un efecto diferencial importante en la probabilidad de que exporte (la diferencia en probabilidades es apenas 0.03). Sin embargo, cuando la empresa es de tamaño micro, o con un nivel de facturación mínimo, la probabilidad de que exporte se eleva en 0.1624 cuando la empresa dispone de un sitio web. Discusión y conclusiones La globalización de la economía ha aumentado la importancia de las estrategias de internacionalización de las empresas, aún entre las PyMEs. Por tal motivo, es necesario estudiar más en detalle esta estrategia, y analizar cómo incrementarla. La reducida conducta exportadora de las PyMEs ha sido mencionada por muchos autores, pero existen pocos estudios empíricos para Argentina, entre otras cosas, por la dificultad de acceder a bases de datos apropiadas. No se trató de diseñar una receta, sino de identificar los factores más significativos que influyen en la probabilidad de exportar con relación al entorno nacional, observando en particular la relacionada con el uso de las TIC. Aún cuando las nuevas tecnologías no pueden resolver por sí solas los desafíos del desarrollo sostenible, pueden facilitarlo. Sin embargo, las inversiones en infraestructura de TIC deben ser acompañadas con liderazgo gubernamental y con las reformas 60 sociales y económicas apropiadas. Pero sin la infraestructura de comunicaciones básica en su lugar, cualquier país está en una clara desventaja competitiva. En principio, cabe recalcar que la exportación es un indicador indirecto de la competitividad de la empresa y dado que se cree que las TIC son uno de los determinantes de dicha competitividad, lo que se infiere es que las decisiones de exportación deben estar influidas en alguna medida en las TIC. En el trabajo se ha considerado el comportamiento exportador como la probabilidad de exportar o no exportar. A nivel de las PyMEs, no se pretende transmitir que las TIC sean la panacea a la competitividad. Por ejemplo, no es posible afirmar que la disponibilidad de sitios web resolverá la sustentabilidad de las mismas o asegurará a la empresa el buen aprovechamiento de las posibilidades que Internet ofrece. Es discutible si la disponibilidad de un sitio web es un indicador apropiado para captar el grado de inserción de las TIC. Lamentablemente, es la mejor información que se dispone. La regresión logística planteada revela que los factores que afectan simultáneamente la probabilidad exportadora son el tamaño- el personal ocupado y las ventas total- el porcentaje de capital social en manos extranjeras, el porcentaje de empleados con educación técnica profesional y la disponibilidad de una página web. Por último, se reconoce la necesidad de realizar el estudio para períodos más recientes, de forma tal de poder captar la conducta exportadora de las empresas post-devaluación, y por otro parte, plasmar los cambios recientes en cuanto a inserción de nuevas TIC a nivel empresarial. Bibliografía - Amit, R. And Zott, C. (2001). “Value creation in e-business.” Strategic Management Journal, Vol. 22. - Bakos Y. and Brynjolfsson E. (1997).”Organizational partnerships and the virtual corporation”. Cap. 4 en Information Technology and Industrial competitiveness: How information technology shapes competition. Kluwer Academic Publishers. - Brynjolfsson E. and Hitt L. 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(López, 2000; 101) Resumen En este artículo, se presenta el análisis en torno a los siguientes ejes: la instalación del Programa de Industrialización Fronteriza en Ciudad Juárez, la inserción de las mujeres en el mercado del trabajo productivo y, la exclusión de las mismas a los sistemas de innovación tecnológica. Estos tres ejes, los cuales se relacionan e interactúan en la (con)figuración de los espacios geográficos, socioculturales, políticos y económicos, siguen haciendo patente la histórica y continua discriminación de que somos objeto las mujeres, aún en sociedades que presentan crecimiento económico -como es el caso de Juárez-, pero que siguen (re)produciendo injusticias y desigualdades cuando acentúan dicotomías como la de producción/reproducción, público/privado, cultura/naturaleza, las cuales siguen vigentes creando segmentación y asignación de roles, que marcan la diferencia entre hombres y mujeres dentro de las sociedades. Palabras clave: Innovación tecnológica, mercado de trabajo, exclusión, ámbito doméstico y extradoméstico. 65 Introducción Es un hecho, que las mujeres en este siglo XXI somos parte importante del desarrollo económico del país. Pero, es hasta hace poco más de treinta y cinco * Este trabajo es parte de una investigación más amplia sobre los procesos educativos en la industria maquiladora, la cual aún se encuentra en proceso. ** Maestra-investigadora de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, en el programa de Educación, dirección electrónica: [email protected]. años que se puede decir que estamos de lleno en el mercado de la producción – sin dejar de lado el de la reproducción-. Algo que representa, sobre todo en el caso de las mujeres trabajadoras pobres y de clase media, dobles y triples jornadas laborales (García, 2000)12. Así, la innovación tecnológica13 desarrollada, se incorpora a la vida cotidiana de las personas por medio del uso de la computadora, el internet, teléfonos celulares –entre otros-, y en los procesos productivos con el uso de toda la tecnología de punta. Sin embargo, esta innovación también da cuenta de la discriminación de que son víctimas las mujeres trabajadoras, por tener la responsabilidad de un trabajo remunerado, además de la asignación social de la familia y el hogar. Razón por la cual, estas mujeres son excluidas de dichos procesos de innovación en el trabajo, propiciando para ellas una capacitación menos especializada y por lo tanto salarios bajos y puestos de menor jerarquía. De esta manera es que surgen las siguientes interrogantes: ¿qué han representado los sistemas de innovación tecnológica para las mujeres trabajadoras, dentro y fuera de la industria maquiladora, en Ciudad Juárez?, y ¿este desarrollo de nuevos sistemas de innovación tecnológica, han incidido en una mejor calidad de vida para las mujeres trabajadoras de esta industria? El abordaje sociológico-feminista que se presenta es realizado desde una metodología cualitativa, la cual me permite dar respuesta a las preguntas hechas. Es importante comenzar con el planteamiento a partir del cual realizo el siguiente análisis. Inicio diciendo que la cultura es en la sociología, lo que el mercado es para la economía; una categoría intrínseca a la disciplina. Por lo que, dicha categoría de cultura me permite despegar con la reflexión sobre el comportamiento que guardan entre sí, lo socialmente establecido para y entre los géneros, con lo económico y la innovación tecnológica. Posteriormente, estas mismas categorías me dan la posibilidad de tomar pulso y diagnosticar el efecto de dicho comportamiento en algunas de sus expresiones. 12 También López Barajas, hace evidente estas jornadas al proporcionar el dato sobre las horas que hombres y mujeres dedican al trabajo doméstico como extradoméstico. Así, el número de horas-semana que los hombres registran 40 horas en el trabajo remunerado fuera de casa, mientras que las mujeres le dedican 32.7 horas a éste mismo. En el concepto del trabajo doméstico las horas-semanas dedicadas por los hombres son 11.9, y de 28.4 horas por las mujeres (2000, 101). Como es posible de observar, al sumar el total de horas trabajo, los hombres laboran un total de 51.9 horas, y las mujeres 61.1 horas, lo que hace evidente que las jornadas de trabajo por parte de las mujeres es más pesada. 13 Aquí hago referencia a innovación tecnológica, como la educación y el desarrollo tecnológico que por su misma naturaleza se encuentra y se ejecuta principalmente dentro de la industria con tecnología de punta en los procesos productivos 66 Así, la definición de “cultura”14 en su más amplia acepción filosófica, representa el conjunto de actos y producciones creativas del hombre -y la mujer- que transforman el entrono, y como éste también modifica a ambos. Por lo tanto, es posible decir que cualquier innovación tecnológica para el trabajo, se encuentra permeada por la cultura de quienes la diseñan o crean. A la vez, esta conceptualización de cultura me proporciona una primera mirada para analizar algunos de los elementos que rodean estas innovaciones tecnológicas, pero sobre todo, me permite observar y explicar a partir de las entrevistas hechas a trabajadoras de maquila, de qué forma las mujeres -en el caso específico de este trabajo-, perciben, adecuan e incorporan dichas innovaciones tecnológicas a su vida personal, emocional, laboral, en fin, a su cotidianidad15, que no es igual a rutina. Contexto/ Maquiladoras, Mujeres y Acceso a la Tecnología En Ciudad Juárez, “las empresas multinacionales llegan y se instalan en 1966” (Castañeda, 1981, 138). A partir de entonces, la mano de obra contratada por estas empresas en la localidad, se ha distinguido por ser principalmente femenina. Aún y cuando en un principio el porcentaje de la mano de obra femenina llegó a ser hasta de un 90% del total del personal empleado, en la actualidad es posible observar que esta mano de obra sigue siendo un porcentaje mayor (51%), -aunque mucho menor que en el inicio-, del total contratado (Wright,1999). Tanto las mujeres en la localidad (considerada mano de obra barata, a la vez que con características específicas para esta industria), como la situación geográfica de la misma, han representado para las firmas multinacionales algunas de las ventajas competitivas16 más importantes para su desarrollo, debido a que como lo declara Porter: “...en definitiva, las naciones triunfan en sectores determinados debido a que el entorno nacional es el más progresivo, dinámico y estimulante, para la producción” (Porter, 1999; 173). En el caso de Ciudad Juárez –ciudad fronteriza mexicana-, su situación geográfica representa ciertas ventajas para este mercado laboral debido a la 14 A decir de Sherry B. Otner, “la cultura ... afirma de sí misma no sólo que es diferente de la naturaleza, sino que es superior, y ese sentido de diferenciación y de superioridad se basa precisamente en la capacidad de transformar –socializar y culturizar- la naturaleza” (1979, 115). De ahí, la importancia de la identificación de los hombres con la cultura, o bien a la cultura con “el hombre” –aplicándose el término sobre todo a los varones-. 15 Es en la cotidianidad en la que se adquiere una cultura que posteriormente definirá en gran medida la vida de los/as sujetos sociales, por lo que Agnes Héller, define ésta cotidiana como “el conjunto de las actividades que caracterizan las reproducciones particulares creadoras de la posibilidad global y permanente de la reproducción social. No hay sociedad que pueda existir sin reproducción particular. Y no hay hombre o mujer particular que pueda existir sin su propia autoreproducción” (1982, 9). 16 Porter, afirma en el texto de La Ventaja Competitiva de las Naciones, que “Las diferencias de una nación en valores, cultura, estructuras económicas, instituciones e historia contribuyen todas ellas al éxito competitivo” (1999, 163). Esto se encuentra íntimamente relacionado con la selección y elección que hacen las firmas multinacionales para su instalación en lugares geográficos específicos, pero a la vez considerando las características mencionadas por Porter, no sólo para un desarrollo positivo de la firma como tal, sino pensando en formulas óptimas de producción que a su vez generan mejores ganancias. 67 proximidad y comunicación que existe con los Estados Unidos de Norteamérica. Pero además, existieron y existen las políticas económicas -como son las reglamentaciones de instalación y la exención de pagos arancelarios-, entre otros, las cuales incrementan estas ventajas que aquí menciono. Este entorno local, resulta ser favorable para las firmas multinacionales, entre otras cosas por lo que ya se mencionó, pero a la vez, dicho entorno se ha visto favorecido al abrirse nuevos mercados de trabajo que dieron y dan empleo a un alto porcentaje de mano de obra nacional desempleada como lo mencionan De la O-González: “La tasa de actividad total femenina en el conjunto de las ciudades fronterizas es 27 por ciento, según los datos del Censo de 1990, lo que indica un nivel de actividad más alto que en el conjunto de la república. ...Sin embargo, son notorios los niveles de actividad más altos alcanzados por las mujeres jóvenes de 20 a 24 años (41 por ciento) y de 25 a 29 años (36 por ciento), respecto de los niveles que alcanzan las mujeres de la misma edad en el conjunto de la República, con tasas de 29 y 28 por ciento respectivamente (1994, 83) Lo que se observa desde un nivel macro-social, es que fueron estos mercados los que marcaron la entrada masiva de las mujeres a la producción, configurando así lo que en adelante se conformaría en los llamados closters empresariales de producción en serie. La evolución de la industria maquiladora en cúmulos, se debe al conjunto de características reunidas por las firmas multinacionales como son: a) una nueva forma de ver las economías nacionales, regionales y locales y, b) nuevas funciones e interacciones de las empresas, los poderes públicos e instituciones (Porter 1999; 204). Lo anterior implica que dichos cúmulos poseen su más amplia ventaja competitiva, no dentro de la firma, sino fuera de las mismas. Por lo que el bienestar y/o salud de un cúmulo, depende del interés que las empresas ponen en su entorno y los/as sujetos sociales de éste para su desarrollo. La industria maquiladora en Ciudad Juárez, a lo largo de estos más de treinta y cinco años, ha seguido un proceso de desarrollo de innovación tecnológica en sus procesos productivos, y con éste ha incrementado sus ventajas competitivas -como son los casos de Delphi y Phillips-, entre otros (Wright, 1997). Esto ha hecho posible la integración de los factores, que Porter identifica como principales, para un modelo de closters apropiados, en los que se cuenta con factores como: a) innovación; b) mejora continua; c) enfoque estratégico mundial; d) vender a todo el mundo; e) control de la comercialización; f) situar I + D (innovación más desarrollo) en otras naciones; g) ahorro de salarios; h) aprovechamiento de tecnología externa y, i) acceso al mercado17 (Porter, 1999). Así, los closters son definidos por Porter diciendo que: “Un cúmulo es un grupo geográficamente denso de empresas e instituciones conexas, pertenecientes a un campo concreto, unidas por rasgos comunes y 17 Síntesis tomada de una exposición del Dr. César Silva sobre “La ventaja competitiva de las Naciones” de M. Porter, en la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, Octubre, 2000. 68 complementarias entre sí” (1999; 205). Esto se puede sintetizar y observar en la instalación de la industria maquiladora promovida por el Programa de Industrialización Fronteriza18. Sin embargo, es el Tratado de Libre Comercio (TLC), establecido entre Estados Unidos, Canadá y México, a partir del cual se ponen de manifiesto las diferencias estructurales entre dichos países, al llevar a cabo un intercambio comercial en el que se ponen de manifiesto las desventajas y segregación de la fuerza de trabajo femenina (De la O-González, 1994, 78) Pero, ante la necesidad del nuevo mercado laboral por llevar a cabo una innovación continua y adecuada para un desarrollo tecnológico de avanzada, y que les permita responder a las exigencias de un mercado globalizado y plural a la vez que hegemónico, las mujeres se han convertido en parte importante de la mano de obra laboral mundial, por lo que el conocimiento ha pasado a significar una de las principales estrategias en dicho desarrollo de innovación, puesto que el conocimiento, permite sistematizar el sentido común, la experiencia y teoría, a favor de la productividad de un campo, una empresa, una localidad, una región y una nación. Así es como se conjunta el conocimiento explícito, el cual es posible de expresar por medio de un lenguaje formal, que se construye a partir de especificaciones concretas adquiridas por una capacitación o por cierta carrera disciplinaria. En tanto que el conocimiento tácito, se conforma a partir de la experiencia personal y el sentido común desarrollado e incorporado de forma particular por cada sujeto (Novaka y Takeuchi, 1999). Así, cualquier tipo de conocimiento –explícito o tácito-, representa el capital sociocultural de cada una de las personas, pero a la vez de una sociedad. Estos dos tipos de conocimientos, son considerados la base indispensable en todo desarrollo de innovación tecnológica en tanto que reúnen cuatro factores determinantes de la innovación: a) la diversidad del conocimiento; b) la comunicación; c) el capital social y, d) las características de las fuentes complementarias (Hamalainen y Schiensstock, 2000; 30). Es así que, el conocimiento se convierte en estrategia y meta de las empresas multinacionales, aunque la importancia de éste, no es la acumulación del mismo en sectores prioritarios de la empresa, sino en el cómo dicho conocimiento se puede distribuir19 en todos los sectores de la empresa, así como para las personas en sí mismas (Lara, 1998, 32). Sin embargo, bajo todo este marco macroeconómico en el que se desarrolla la industria maquiladora, también se origina y existe un cambio sustantivo a nivel micro-social a partir de la puesta en marcha del Programa de Industrialización Fronteriza, y la llegada e instalación de las multinacionales en las que confluyen hombres y mujeres en una interacción diferente a la usualmente establecida y, que en adelante cambian los patrones socioculturales, como lo menciona López: “La salida de las mujeres al mundo público del 18 Es el Ejecutivo Federal quien fomentó y alentó el Programa de Industrialización Fronteriza con la instalación de las maquiladoras a lo largo y ancho de la franja fronteriza, específicamente en esta ciudad, proporcionándoles las facilidades para su ubicación y localización adecuada a sus necesidades (Gutiérrez, 1994). 19 Esto lo dice Arturo Lara a propósito del trabajo que los japoneses han desarrollado para la innovación y el aprendizaje tecnológico en las empresas. 69 trabajo ha propiciado la modificación o redefinición de las posiciones y actividades entre los miembros del grupo doméstico” ( 2000, 101). Por esta razón, retomo la idea inicial sobre como tecnología y cultura se determinan mutuamente, interactuando en un proceso del que son coparticipes en tanto que una (tecnología) y otra (cultura), se ven complementadas, al interactuar de vínculo a través, tanto del conocimiento explícito como del conocimiento tácito. Es aquí que, se hacen evidentes los roles tradicionalmente asignados a hombres y mujeres (el hombre proveedor y la mujer reproductora), y los cuales se ven trascendidos a nivel local, regional y nacional, en tanto que en la actualidad las mujeres no sólo atienden lo doméstico, sino que a la vez desarrollan un trabajo productivo –extradoméstico-, que les proporciona un ingreso económico que no en pocas ocasiones llega a ser el sustento de la familia, aún y cuando éste sea considerado como complementario (López, 2000). De esta forma, las mujeres no sólo se adecuan a un nuevo ritmo de vida por su ingreso al sector productivo, en el cual su “valor capital”20 es considerado menor al de los hombres. Esto, porque el total de habilidades ofertadas por las mujeres no es el mismo acumulado en comparación al que históricamente poseen los hombres, motivo bajo el cual se justifica la asignación de trabajos menos importantes –feminizados- y salarios mas bajos para las mujeres en el mercado de trabajo, así lo argumenta Pequeño: “En la actualidad, con la introducción de nuevas tecnologías y la división sexual del trabajo, los hombres realizan el trabajo calificado y un número menor de mujeres se localiza en tareas rutinarias, ya que su movilidad es difícil” (2005, 36)21. Aún así, las mujeres ajustan -bajo este nuevo ritmo de vida-, su cotidianidad, la cual incorpora y corporeiza22 otros y nuevos significados a partir de una productividad altamente extenuante (Scott, 1992). Por lo que, los cuerpos femeninos se constituyen en nuevos mapas con otros mensajes o lecturas para los hombres, pues ahora son, además de hijas, hermanas, esposas y/o madres, trabajadoras de tiempo completo, altamente productivas. Tanto la asignación como la condición genérica de las mujeres, promueve que se desempeñen con dobles y triples jornadas23, puesto que se sigue cumpliendo con la obligatoriedad social de los trabajos domésticos – cuidado y atención de la familia y el hogar- que prioritaria y estructuralmente 20 Existe la conceptualización de la perspectiva funcionalista que justifica el que las mujeres perciban salarios más bajos que los hombres en relación a mayor tiempo en el trabajo, igual a mayor salario. 21 Esta consideración es la que prevalece para que las mujeres sean mayormente contratadas dentro de los procesos textiles y de confección, mientras los hombres participan en los automotrices y mecánicos. 22 El concepto es utilizado como lo que tiene cuerpo, o toma forma en éste después de ser introyectado para posteriormente ser expresado a través de éste. 23 Si bien, en la actualidad el trabajo extradoméstico que realizan las mujeres resulta ser para muchas familias una contribución económica importante, éste aunado al trabajo doméstico que se sigue desempeñando, promueve que las mujeres sufran de una presión continua (López, 2000). 70 han sido asignados a las mujeres, agregado a éste el trabajo fuera del hogar (Cazés, 1998, 68). Sin embargo, tal pareciera que en la medida en que la mano de obra masculina ha ido recuperando espacio en la industria maquiladora, el acceso al conocimiento, a la vez que a la nueva tecnología, llevados a la educación y/o capacitación, dicha innovación tecnológica se vuelve prerrogativa masculina, conservando así, el derecho o estatus adquirido sobre el conocimiento por y para los hombres, y excluyendo de éste nuevamente a las mujeres como es usual en sociedades patriarcales como la nuestra. Por tanto las mujeres, una vez más, se ven discriminadas y segregadas de este desarrollo de sistemas de innovación, el cual les posibilitaría otras o mejores oportunidades laborales, además de un desarrollo personal, y salarios más altos que pudieran ir subsanando las inequidades con respecto al campo laboral que se dan entre los géneros y los altos índices de pobreza que enfrentan las mujeres24. Sin embargo, lejos de esto, estas mujeres trabajadoras de la industria maquiladora, siguen realizando un verdadero esfuerzo por reacomodar los roles genéricos, entre lo asignado y lo vivido (privado/público), como lo declara Susy: A mi me gusta trabajar, porque ya ve, ahora el dinero no alcanza, pero el día no me alcanza con todas las cosas que tengo que hacer. Yo llego cansada a la casa, pero lo que más me apura, es recoger a los niños de con mi mamá y hay que ayudarles hacer tarea y bañarlos, y luego darles de cenar. A poco, ¿usted cree que me voy a quedar a terminar la escuela -el nivel secundaria-, o a poder viajar, cuando nos dicen que hay que ir a Carolina para ver como se maneja la nueva maquinaria? (Entrevista, noviembre 2006). Lo que se presenta aquí, son dos espacios diferenciados y contrapuestos, en los que las mujeres han aprendido a transitar entre uno y otro debido a la necesidad de preservar uno –el privado-reproductivo-, e incursionar en el otro – el público-productivo-. Esto, ha provocado que también se les considere y vea fuera del lugar asignado, por usurpar el espacio público que no les corresponde, aún y cuando son asignadas a los puestos menos importantes y de mayor subordinación en la estructura laboral y con salarios más bajos dentro de la industria maquiladora, según Lulú: Es muy difícil que nosotros ganemos más que los muchachos, porque a ellos les dan los trabajos más pesados, por ejemplo nosotros soldamos, pero ellos arman toda la tele y la empacan. Y luego, pos también dicen que nosotros no podemos ser supervisoras porque hablamos mucho, por eso lo más que nos dejan ser es jefa de línea, porque así nomás repartimos material y estamos al pendiente de suplir a las que van al baño (Entrevista, noviembre 2006). 24 Según García, “Uno de los factores principales que dan cuenta del número exagerado de mujeres en condiciones de pobreza es la proporción, cada vez mayor, de trabajadoras en empleos que ofrecen ingresos muy reducidos” (2000, 109). A la vez que con pocas o nulas prestaciones sociales, lo que directamente se relaciona con un acceso limitado a la educación. 71 Si bien, lo anterior hace mención a una empresa en especial, la situación es igual que en muchas otras de esta industria, tal y como lo menciona Pequeño: “hay una creciente incorporación de las mujeres a ocupaciones con una tecnologización mayor, lo que no significa la desaparición de la segregación ocupacional en actividades consideradas como femeninas” (2005, 36). Así, los hombres resurgen también en este campo laboral, como los autorizados social y culturalmente dentro de los procesos de conocimiento y adiestramiento, por lo que se vuelve privilegio de la mano de obra masculina, en tanto que son quienes dominan los espacios públicos (Gross, 1995). Mientras tanto, las mujeres son segregadas en estos procesos de capacitación y conocimiento que les pudiera permitir participar de forma más integrada en los procesos productivos y de competencia de esta industria, pero sobre todo de los procesos culturales que les posibilitaría nuevas estrategias personales25. Participar del acceso de las mujeres al conocimiento, implica no sólo un desarrollo importante para las empresas dentro de la producción, sino que a partir de éste se puede generar un progreso personal que les permita a las mujeres, sistematizar la experiencia adquirida y el sentido común en un proceso más amplio de integración a la cotidianidad –a la sociedad-, lo que puede propiciar una mejor calidad de vida, además de convertirse en mano de obra laboral calificada. Pero hasta ahora, dentro de esta industria, las mujeres tienen como única fuente de conocimiento un adiestramiento inicial sobre el proceso de producción al ingresar y una información elemental del producto y material que en adelante manejarán (Wright, 2000; Pequeño, 2005). Esto, les proporciona un tipo de acceso limitado a la tecnología y por lo tanto al conocimiento. En tanto que, los hombres posteriormente al adiestramiento inicial, reciben la posibilidad de una capacitación26, la cual propicia mejores y mayores oportunidades para ellos en el manejo de sistemas de innovación y un despliegue de creatividad, lo que coyunturalmente les proporciona ocupar puestos de importancia a la vez que aumentan sus posibilidades económicas. Lo anterior, es uno de los factores decisivos para que las mujeres sigan conformando la clase más empobrecida a nivel mundial27. Por lo tanto, su condición y calidad de vida como mujer–trabajadora, sigue siendo precaria, en tanto que su participación en el desarrollo de la tecnología se sigue viendo limitada por una cultura de subordinación femenina que la hace vulnerable. 25 López Barajas, argumenta que según investigación realizada, el nivel de educación hace la diferencia en el mercado de laboral pero también en el ámbito privado, debido a que las mujeres con un nivel bajo de educación, centran su aspiración en el hogar, en tanto que a mayor educación sucede lo contrario (2000, 103). 26 La capacitación puede ser desde el manejo de la nueva maquinaria de tecnología de punta, hasta cursos de otro idioma o bien viajar al extranjero para conocer primero las nuevas adquisiciones tecnológicas. 27 González, señala que las mujeres representan el 70% de los 1,300 millones de pobres existentes a nivel mundial (2002, 33), mientras que Salles y Tuirán, definen al grupo de las mujeres como los miembros con menos ventajas dentro de las sociedades (2000, 64). 72 Conclusión/Respuestas Encontradas y Nueva Pregunta De esta forma, podemos decir que existe una exclusión de las mujeres en la educación e innovaciones tecnológicas, si pensamos esto en función de la relación que se establece a partir de un desarrollo tecnológico creado para un mejor desempeño productivo/laboral, éste sigue discriminando y/o segregando a quienes ya sufren de otras exclusiones como son el ser mujeres, pobres y con pocas posibilidades de acceso a la educación formal, pero también a los sistemas de innovación tecnológica. Es el caso de muchas de las mujeres que viven en la zona Poniente de Ciudad Juárez, en donde se encuentra concentrada gran parte de la mano de obra contratada dentro de este sector industrial y, que tal pareciera que las mujeres y al igual que dicha zona (por su precariedad y exclusión del resto de la ciudad), no conforman parte del entorno, el cual ha proporcionado al sector empresarial las ventajas competitivas mas importantes (como lo es la mano de obra necesaria y prioritariamente femenina), que les han permitido incursionar y triunfar en el mundo de la globalización (Arroyo, 2000). Con lo anterior, se puede observar que las mujeres –hoy por hoy-, no forman parte del desarrollo de sistemas de innovación tecnológica puesto que, éste sigue siendo un campo básicamente masculino o masculinizado. Pero también es manifiesto, que estas mujeres siguen teniendo una vida de precariedad y exclusión, en tanto que su vida laboral sigue siendo -en la mayoría de los casos-, casi la misma hasta antes de incursionar en el mercado de trabajo -con salarios mínimos, puestos de mayor subordinación y con las mismas tareas domésticas-, de cuando la IME se instaló, dejando de lado la posibilidad educación y capacitación. Esto, sin contar con que aún en la actualidad el espacio que habitan en la ciudad -como es la zona Poniente-, también representa una de las zonas con mayor rezago de infraestructura urbana en la ciudad. De esta forma, se abren nuevas interrogantes a resolver sobre: ¿cómo se puede acceder a puestos de importancia por parte de las mujeres sin la preparación/capacitación adecuada a las necesidades del mercado?, ¿de qué forma las mujeres se pueden capacitar sin la corresponsabilidad por parte del Estado y los hombres en el hogar?, y ¿por qué aún y con la misma capacitación/conocimiento las mujeres profesionistas, seguimos ganando menos y/o despeñando trabajos de menor importancia? Sin duda hay respuestas que se tienen que trabajar, para atenuar las desigualdades, aunque podemos comenzar por no ignorar las exclusiones y discriminaciones de que somos víctimas las mujeres en el campo laboral, para iniciar cambiando las políticas empresariales que hasta hoy nos siguen marginado del conocimiento y por consecuencia de los beneficios que éste implica, para la obtención de un desarrollo integral en el que el valor de la humanidad no pueda ser abordada únicamente desde la lógica de mercado. 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Entrevistas: Delphi-Susy Phillips-Lulú 76 Formación de redes de conocimiento en México: Cambios impulsados por la competencia en la industria automotriz mundial Lourdes Álvarez Medina Facultad de Contaduría y Administración-UNAM [email protected] Resumen La importancia que tiene la interacción de la investigación científica y tecnológica con el mercado para lograr la innovación es reconocida, sin embargo ha sido difícil de lograr en México. Actualmente se está dando un acelerado proceso de reestructuración productiva de la industria automotriz en la región del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que se relaciona con el hecho de que los fabricantes de automóviles asiáticos incrementaron sus ventas en el mercado de Estados Unidos, desplazando a los fabricantes americanos. Para enfrentar este problema y fortalecer la competitividad de la industria se presentaron iniciativas de colaboración para formar redes de conocimiento e innovación impulsadas por las asociaciones de productores de automóviles y autopartes en México, Estados Unidos y Canadá, así como asociaciones dedicadas al desarrollo de la ciencia y la tecnología. En este trabajo presentamos los cambios que se han dado en el último lustro en la formación de redes de conocimiento involucrando a la industria automotriz en México y reflexionamos sobre la competencia en los mercados globales para impulsarlas. Palabras clave: redes, conocimiento, industria, automotriz 77 Introducción El concepto de redes de conocimiento está ligado a los estudios de innovación que describen la presencia de densas redes de relaciones sociales, profesionales y con la comunidad, en regiones donde hay aglomeración de empresas y otras organizaciones (Saxenian, 1990). Las redes de conocimiento se definen como el conjunto de instituciones académicas, industriales, políticas y agentes de enlace que colaboran conjuntamente, mejorando el trabajo científico, debido a que posibilitan el libre flujo de información e impulsan las condiciones locales para la innovación. Estas redes tienden a agruparse con otras redes para formar sistemas regionales o nacionales de innovación. (Callon, 1992; Hansenn 1992, citado en Gunasekara 2006; Etzkowitz y Uzzi, 1996 citado en Casas y Luna, 2000). Las redes de conocimiento en México desde las universidades, se han impulsado principalmente centros de investigación y políticas públicas, mientras que el mercado y los agentes de enlace han tenido poca participación. El objetivo de este trabajo es describir los cambios impulsados por la competencia en la industria automotriz mundial que inciden en forma positiva sobre la formación de redes de conocimiento en México. Específicamente nos referimos a los cambios en la región del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el papel de los agentes de enlace, las 78 universidades y los centros de investigación. Se considera que la situación adversa que enfrentan los fabricantes de vehículos (General Motors, Ford y Chrysler) en el mercado de Estados Unidos los ha llevado a desarrollar estrategias de cooperación para sobrevivir y están impactando la relación universidad, empresa, gobierno hacia una más integrada y de colaboración para la innovación. Este trabajo está estructurado en tres partes: en la primera se presentan antecedentes que nos ayudan a explicar los procesos de formación de redes en México; en la segunda se describen los cambios en la situación de la industria automotriz en la región del TLCAN; en la tercera se describen los cambios observados en empresas, gobierno, universidades y agentes de enlace que permiten la formación de redes de conocimiento y finalmente se presentan algunas reflexiones. 1. Antecedentes sobre la formación de redes de conocimiento en México En la última década ha habido un gran interés en estudiar los sistemas regionales de innovación porque se consideran motores del desarrollo económico (Freeman, 1991; Lundvall,1992). Las universidades y centros de investigación son los principales actores del sistema que generan los insumos de la llamada “sociedad del conocimiento” por lo que los procesos mediante los cuales se produce y transfiere el conocimiento se constituye en tema 79 central de reflexión de distintos enfoques aplicados al estudio de la ciencia, la tecnología y la innovación (Casas, 2000). En México, a finales de la década de los ochenta del siglo pasado, el discurso político y posteriormente la política económica y tecnológica buscaron apoyar la vinculación universidad-empresa-gobierno y la formación de redes de conocimiento y de innovación (ANUIES, 1995, 1998; DOF, La Ley de Ciencia y Tecnología 2002; CONACYT, 2005). Posteriormente, en la década de los noventa, con el cambio de modelo económico, el Estado realizó diversas acciones orientadas a mejorar las condiciones de producción de las empresas y sus relaciones con instituciones del gobierno, de investigación, institutos y universidades tecnológicas, instituciones puente y asociaciones empresariales. A continuación se describen esos cambios (Casalet, 2000). a) Las instituciones del gobierno, como la Secretaría de Economía, pasaron de regular y controlar empresas a promover y coordinar actores para el desarrollo. b) Las universidades y centros de investigación fueron exhortadas a favorecen la vinculación y sus formas evolucionaron de acuerdo a las necesidades del momento (Solleiro, 1991; Casalet, 2000; Sebastián, 2002). Inicialmente se contó con la oferta de servicios por las universidades que incluían la formación de recursos humanos, estancias de los 80 estudiantes en empresas y servicios tecnológicos rutinarios y repetitivos como las pruebas de laboratorio. Después se adoptó la modalidad de oferta y demanda. Esta incluyó la negociación de la universidad con la empresa para la formación de recursos humanos con un perfil determinado, asesoría, transferencia de tecnología, licencias de explotación de patentes y formación de paquetes tecnológicos. Posteriormente se dieron acuerdos de cooperación entre la universidad y la empresa, ubicándose como socios en proyectos con actividades conjuntas (acuerdos, alianzas y consorcios multi-institucionales). Finalmente, la cooperación en redes propuso proyectos de desarrollo científico y tecnológico sobre la base de equipos heterogéneos organizados en red. Se buscó la creación de centros mixtos de investigación y desarrollo e incubadoras de empresas. c) Se propició el vínculo entre Institutos y Universidades Tecnológicas por lo que mejoró la comunicación y la confianza con el sector productivo (Casalet, 2000). d) Aparecieron y evolucionaron las instituciones puente asociaciones civiles, fideicomisos, sociedades civiles como son: con financiamiento público o privado (Casalet, 2002). Un ejemplo de ésta es la Fundación México Estados Unidos para la Ciencia (FUMEC). Estas instituciones buscan generar un entorno de confianza y crear redes de colaboración que favorezcan el 81 desarrollo del mercado, la modernización tecnológica, fomento de redes asociativas, capacitación para el sector productivo, entre otros. e) Las asociaciones empresariales (AEs) pasaron de ser un espacio donde los empresarios interactuaban, discutían perspectiva gremial (Ruiz, 2002) a y proponían funcionar proyectos desde una como instancias de representación real entre empresarios y gobierno. Características estructurales como: dominio espacial y productivo, capacidad para movilizar recursos económicos, humanos y políticos, tamaño, capital, tecnología, talento humano han sido relacionados con su desempeño. participación en la construcción de redes Las AEs han tenido poca con la academia y el gobierno limitando la cooperación, acceso de las empresas a la información y al conocimiento convencional (Casas y Luna 1994; Tirado y Luna, 2001; Ruiz, 2002). En numerosos estudios sobre vinculación, cooperación y redes de conocimiento se encontraron los siguientes problemas: i) dudas sobre valor de la vinculación, falta de confianza y complejidad de los contratos ii) centros de investigación que difunden conocimiento y aplicaciones pero las relaciones no se institucionalizan suficiente para consolidar vínculos iii) falta de cooperación interinstitucional que reproduce el aislamiento, la desinformación y programas con poca repercusión iv) capacidades de producción y conocimiento limitadas y acotadas a un conjunto pequeño de instituciones en donde los sectores no apoyan el desarrollo tecnológico v) científica y tecnológica que se encuentra separada de las investigación estructuras 82 productivas vi) inexistencia de empresas vii) productos de investigación transferibles a las debilidad de la investigación científica y tecnológica que ocasiona asimetría entre las intenciones de vinculación y las ofertas reales de ciencia y la tecnología (Corona, 1994; Casalet, 1997; Casas, 2001; Campos, 2002; Arellano y Ortega, 2002). También se han descrito problemas que corresponden a cada actor. (Solleiro, 1991; ANUIES, 1998; Sebastián, 2001, Ruiz, 2001): En la empresa hace falta la existencia de una cultura que impulse la innovación y valore la interacción institucional, capacidades tecnológicas y organizativas que le permitan la asimilación, claridad respecto a sus necesidades e instancias mediadoras como asociaciones empresariales a las que pertenece. En la Universidad los problemas se relacionan con la especificidad de la cultura universitaria, la falta de infraestructura, como son los centros de vinculación o centros de transferencia de tecnología, los escasos recursos financieros, la deficiente organización y un pobre acervo de conocimientos. En el gobierno los problemas se relacionan con el entorno institucional inadecuado, la política económica, tecnológica y de educación desalineadas y los instrumentos de fomento incoherentes. En el entorno se observan problemas por la apertura comercial, la internacionalización de las empresas, los requisitos de homologación y 83 certificación para comerciar, la fortaleza del entorno tecnológico y financiero y los agentes de enlace. Casas y Luna (2000) encontraron que en México se están incrementando los casos de colaboración de empresas con Instituciones de Educación Superior a nivel regional, dada la cercanía geográfica entre instituciones de investigación y problemas específicos relacionados con los recursos naturales de la localidad y las actividades industriales, Sin embargo, Almanza y Hernández (2004) señalan que los vínculos y las interacciones entre la industria y los centros no dan muestras muy claras de que contribuyan efectivamente, o en forma evidente, a elevar la competitividad e innovación de las empresas y el país. 2. El comportamiento de la industria automotriz en México La industria automotriz fue una de las primeras que se globalizó y regionalizó distribuyendo partes de sus procesos productivos en diferentes partes del mundo y buscando disminuir sus costos de producción. Actualmente es una industria madura con alta rivalidad, bajo crecimiento de la demanda a nivel mundial y alto crecimiento en países emergentes como China e India, exceso de capacidad instalada en vehículos y componentes, precios a la baja y una reestructuración productiva a nivel mundial impulsada por la competencia (Magliano, 2006). En México los cambios en la industria han sido impulsados principalmente por dos factores: la competencia de los fabricantes de automóviles en el 84 mercado de Estados Unidos y el crecimiento acelerado de la industria automotriz China que ha permitido la entrada de nuevos jugadores a la industria. En la región del TLCAN la industria automotriz se está reestructurando debido a la saturación del mercado de los Estados Unidos de América (EUA), la sobrecapacidad productiva y a que las empresas fabricantes de automóviles asiáticas han sido más competitivas en el mercado de EUA y desplazaron a General Motors (GM), Ford y Chrysler. Las asiáticas han mejorado su participación en dicho mercado pasando de 25 a 40% entre 1999 y 2006, mientras que las estadounidenses han disminuido su participación pasando del 70 al 55% en el mismo periodo. Gráfica 1 Ventas de vehículos en Estados Unidos Porcentaje de mercado Fuente: Magliano George, “Mexico-USA: revolution or evolution”, ponencia presentada en el IV Congreso Internacional de la Industria Automotriz en México, julio de 2006, México. 85 Las empresas americanas tuvieron diversos problemas que las llevaron a tener pérdidas en los últimos años y cerrar varias plantas en los Estados Unidos. La pérdida de mercado y los elevados costos las están obligando a mover líneas de producción y establecer nuevas plataformas en países con mejores condiciones mientras que en México han mejorado las condiciones incrementado la producción y pasando de vehículos de bajo precio a productos con mayor valor agregado. La industria automotriz en México ha ido mejorando su desempeño y en 2006 participó con 6.4% del PIB industrial, 10.2% del total de las exportaciones, 17.4% del empleo en 2006. A partir del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) se ha integrado progresivamente al mercado de los Estados Unidos exportando 91% de la producción de automóviles y 58.25% de la de autopartes (Farias, 2007). En nuestro país, la industria automotriz ha presentado diferentes etapas: a) la llegada de las empresas fabricantes de automóviles construyendo vehículos con autopartes importadas desde 1925 hasta 1962 b) a partir de 1962, el gobierno mexicano emitió distintos decretos automotrices con el objetivo de regular este sector: se reglamentó sobre el número de empresas establecidas en el país y el número de líneas de producción de las armadoras con el propósito de incrementar las escalas de producción nacional, se reglamentó sobre los requerimientos de contenido nacional y de exportación con intención de 86 estimular la producción de vehículos y mejorar la balanza comercial de la industria y c) la entrada en vigor del TLCAN a partir de 1994 que propició el crecimiento acelerado de la producción con una estrategia dirigida a la exportación de vehículos especialmente al mercado de los Estados Unidos. Gráfica 2 Producción Total de Automóviles en México 1994-2006 En unidades producción de automóviles México 1994-2006 2500000 unidades 2000000 1500000 Series1 1000000 500000 00 6 o 2 00 4 añ añ o 2 00 2 añ o 2 00 0 o 2 99 8 añ añ o 1 99 6 1 o añ añ o 1 99 4 0 Fuente: Asociación Mexicana de la Industria Automotriz, página web. En la gráfica 2 se observa que la producción automotriz en México creció 37.3% en diez años, sin embargo cayó en 1995 con la crisis económica que el país experimentó a finales del gobierno de Carlos Salinas y en el 2000 por la desaceleración de la economía de los Estados Unidos. En 2006 se alcanzó una producción de 1.9 millones de vehículos de los que se exportaron 1.5 millones. Los vehículos armados en México son de mayor valor agregado que los importados, especialmente de los que vienen de Brasil. El valor promedio de los 87 vehículos importados de Brasil es de 6,800 dólares mientras que el valor promedio que los vehículos que México exporta es de 18,900 dólares (Magliano, 2006). Gráfica 3 Producción de autopartes en México 1994-1996 Millones de dólares 30000 25000 20000 3-D Column 1 15000 3-D Column 2 10000 3-D Column 3 5000 0 1994 1996 1998 2000 2002 2004 2006 Fuente: Farias Alejandro, “Un vistazo a la industria de autopartes en México, Reunión de evaluación de sector automotor”, mayo, 2007, México, DF. En la gráfica 3 se observa el crecimiento de la producción de autopartes que pasó de 13, 893 millones de pesos en 1994 a 26, 121 millones de pesos en 2006. Esta industria ha tenido un crecimiento constante que se relaciona con el TLCAN que permitió la planeación de la producción en diferentes países para aprovechar las ventajas comparativas de cada lugar y con la nueva ley de 88 inversión extranjera que eliminó los controles a la inversión y la repatriación de utilidades. Año 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 Total Cuadro 1 Inversión extranjera directa en la industria automotriz 1999-2006 Millones de dólares Inversión industria Inversión industria terminal autopartes 1380.4 802.8 460.4 1151.6 115.3 1286.2 339.4 900.5 153.0 961.1 1181.8 1198.0 88.5 1592.6 5.7 1450.0 3,800.00 9,350.00 Fuente: Farias Alejandro, “Un vistazo a la industria de autopartes en México”, Reunión de evaluación de sector automotor”, mayo, 2007, México, DF. En el cuadro 1 se observa que la inversión extrajera directa en la industria sumó 13,150 millones de dólares entre 1999 y 2006; 3,800 correspondieron a la industria terminal y 9,350 a la industria de autopartes (Farias, 2007); además existen anuncios importantes de inversión por GM, Ford, Chrysler, VW, y Nissan. 3. Cambios observados en la interacción de las empresas automotrices con el gobierno y universidades En el siglo pasado, en México las capacidades productivas locales eran escasas por lo que se privilegió la importación de autopartes y componentes, 89 cuando el contenido de partes fabricadas en México fue obligatorio, en la fabricación de automóviles, se incentivó la inversión extranjera pero hubo poco desarrollo de capacidades locales. Con el TLCAN y los cambios en la ley de inversión extranjera las ensambladoras desarrollaron una estrategia de producción regional que benefició el crecimiento de la producción para la exportación, se incrementó la inversión extranjera directa y algunas capacidades tecnológicas y se formaron recursos humanos especializados, sin embargo, la relación con las universidades no se percibía como necesaria. En este periodo se encontró la formación de capital social importante. Las relaciones del gobierno con los representantes de la industria automotriz se fueron construyendo desde finales del siglo pasado y subsisten hasta la fecha. Esto explica la capacidad de cooperación entre la partes para definir y dar continuidad a la política automotriz del país desde hace varios años. En 1994 el TLCAN indujo una reorganización productiva en la región que se fortaleció y mantuvo hasta que en el 2000 empezaron a irrumpir una serie de cambios impulsados por la pérdida de competitividad de Ford, GM y Chrysler. Estos cambios obligaron a implementar nuevas estrategias para competir contra las empresas asiáticas, especialmente en costos. La situación de la industria automotriz en la región del TLCAN había sido prevista desde principios de siglo por lo que desde entonces se observó una nueva propuesta de los representantes de las asociaciones de automóviles y especialmente de autopartes para cooperar con universidades y centros de investigación. 90 La relación entre empresas, pertenecientes al sector automotriz, con universidades y centros de investigación ha ido creciendo. En 2003 se identificaron 20 actores que participaban especialmente ofreciendo desarrollo tecnológico y servicios a la industria, once participaban con servicios educativos y solamente unos cuantos hacían investigación (Flores, 2003). El acercamientos de los representantes de la industria automotriz a diferentes instituciones de educación superior públicas y privadas se vio reflejada en estudios sobre prospectiva automotriz (Abdel, 2003), investigaciones sobre metas de producción propuestas por la Secretaria de Economía (Barrón, 2003) foros de la industria automotriz en México que empezaron a incluir mesas dedicadas a la cooperación universidad - empresa con la participación de representantes del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, el Consultivo de Ciencia y Tecnología, instituciones de educación superior nacionales, instituciones internacionales como la investigación aplicada Foro red automotriz de de Canadá conocida como AUTO 21 entre otros (CIIAM, 2005, 2006, 2007). Actualmente existen instituciones de educación superior que han creado Centros de Desarrollo dedicados a la industria Automotriz como es el CeDIAM--ÍTESM. El centro busca fortalecer las cadenas de valor en la industria automotriz, para incrementar la competitividad, incubar empresas y fortalecer el sector. Éste fue creado y diseñado de acuerdo con requerimientos de las empresas fabricantes de automóviles y proveedores de primer nivel. Su 91 comité técnico está conformado por directivos de las armadoras, proveedores nivel 1, representantes del gobierno, cámaras industriales, directivos del ITESM y centros de investigación. Por último señalaremos la iniciativa de colaboración para formar redes de conocimiento impulsadas por las asociaciones de productores de autopartes, asociaciones puente o de enlace como la Fundación México Estados Unidos para la Ciencia (FUMEC). FUMEC como agente de enlace buscó sectores con potencial de crecimiento y creó proyectos para ayudar a la integración de capacidades entre los dos países. Debido a la relevancia que ha tomado la electrónica automotriz en la producción de vehículos en los últimos años ésta seleccionadas por la fundación. fue una de las áreas El proyecto de electrónica inició con la realización de un taller en la Universidad de Texas, sobre Tecnologías de Sistemas Micro-Electromecánicos (MEMS) y en 2003 se creó un Centro de Articulación Productiva (CAP) para apoyarlo. Posteriormente se creó una red de centros de diseños en la que participan nueve instituciones privadas y una pública: La Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ), la Universidad Veracruzana (UV), el ITESM campus Monterrey, el Instituto Tecnológico Superior de Irapuato (ITESI), la Universidad de Guadalajara (U de G), el CINVESTAV de Jalisco, la UNAM campus Querétaro, el Instituto Nacional de Astrofísica, óptica y electrónica (INAOE) y el Instituto de Investigaciones Eléctricas (IIE). Se propusieron cubrir actividades de: diseño, elaboración de 92 prototipos, fabricación, encapsulado y comercialización. De las diez instituciones tres tienen laboratorios pero únicamente la UACJ está dirigida a trabajar con la industria automotriz, específicamente con Delphi (Boletín Fumec). Respecto al tipo de vinculación se encontró lo siguiente: nueve realizan investigación en ciencia y tecnología y participan en redes de conocimiento y cooperación con fines productivos; tres participan solamente en redes de conocimiento; cuatro ofrecen programas especiales de formación de recurso humanos y dos se han dedicado a crear información especializada como los mapas tecnológicos. También se encontró que todos ellos han recibido apoyos del fondo PYME, de la Secretaría de Economía. Este tipo redes han sido planeadas para pasar de redes de conocimiento a redes de innovación. Sin embargo, los flujos de conocimientos entre los centros parece no ser sistemático; se interactúa y comparte información en los cursos y foros sobre la base de necesidades específicas como la cooperación para manufacturar un producto diseñado por varios participantes. Otros actores con los que colaboran son: Laboratorios Nacionales Sandía, la Universidad de Texas, la Universidad de Nuevo México, Team Technologies, Aplicaciones de control SA de CV, el Centro de Diseño MEMS de SONY en San Antonio, Texas, Intellisuite y Coventor. 93 4. Reflexiones En este trabajo hemos reflexionado sobre la importancia de la competencia para impulsar la formación de redes de conocimiento presentando el caso de la industria automotriz en México. Señalamos cambios importantes en la industria mundial como son el crecimiento de la producción automotriz en China, que ha permitido la entrada de nuevos jugadores a una industria madura, y la pérdida de competitividad de Ford, GM y Chrysler ante los fabricantes asiáticos en el mercado de los Estados Unidos. Estos cambios se relacionan con nuevas necesidades de capacidades tecnológicas, recursos humanos e infraestructura en México. La relación de la industria automotriz con las universidades no es nueva pero sí se observa acciones importantes a favor de la vinculación. Los proyectos presentados son relevantes y especialmente el CEdIAM-ITESM en donde se pueden ver resultados más rápidos ya que las formas de participación e interacción con la industria son diversos. Por ejemplo, asesoría, capacitación, formación de programas para personal de la industria. Por otro lado, el proyecto para desarrollar electrónica automotriz, busca la creación específica de capacidades y será necesario un periodo más largo para ver resultados. 94 Los cambios en la industria automotriz, el papel de agentes de enlace y el papel de universidades y centros de investigación ha ido cambiando conforme los requerimientos de la industria automotriz ha cambiado. Consideramos que esta tendencia puede ser positiva para el crecimiento y desarrollo de la industria automotriz en México así como la creación de capacidades locales. Sin embargo, es importante que se busque aprovechar esta ventana de oportunidad. Podemos concluir que la formación de redes de conocimiento es incipiente y ha sido impulsada por agentes de enlace como FUMEC y asociaciones empresariales (Industria Nacional de Autopartes). El gobierno participa activamente financiando proyectos de prospectiva, Centros de Articulación Productiva y otorgando recursos del programa PYME. Se han involucró a universidades y centros de investigación nacionales quienes tienen acceso a recursos del CONACYT así como a universidades y centros de investigación en Estados Unidos y Canadá. El gobierno ha declarado la importancia y el apoyo que se dará en este sexenio a la industria automotriz por lo que se espera una mayor interacción entre los actores estudiados 95 BIBLIOGRAFÍA Acuña, Patricia. (1993).”Vinculación Universidad - Sector Productivo”. ANUIES. México. Revista No.87. Disponible en: http://web.anuies.mx/anuies/revsup/res087/ex7.htm Abdel Muski A., “Sector de autopartes en México: diagnóstico prospectiva y estrategia”, presentación al Congreso de la Industria Automotriz en México, 13 de julio de 2004. ANUIES (1995).”Programa Nacional de Extensión de la Cultura y los Servicios”. México. http://www.anuies.mx ANUIES, (1998). Manual Práctico acerca de la Vinculación UniversidadEmpresa. 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Sus empresas ahora se ven en la necesidad de firmar alianzas o desarrollar coinversiones con sus rivales para acceder a segmentos de mercado. En este ensayo se analizan estas formas de organización empresarial y se hace hincapié que las alianzas estratégicas conducen a las fusiones o adquisiciones de empresas con problemas financieros para continuar operando. La venta de las grandes empresas integradas mexicanas es un resultado del proceso de globalización donde la industria acerera participa intensamente. Para la región de Monterrey, representa un abandono a la suerte del capital extranjero, todo lo cual genera una expectativa incierta frente a una potencial crisis de esta industria. Palabras clave: industria siderúrgica, fusiones, alianzas, adquisiciones, estrategias empresariales. Introducción 28 El autor es investigador de El Colegio de la Frontera Norte en Monterrey. Si desea enviarle correspondencia puede hacerlo a través de su cuenta electrónica: [email protected] 100 La industria siderúrgica alcanzó su máximo desarrollo en los años setenta del siglo XX. La época coincide con la quiebra de un modelo de industrialización basado en la gran empresa. El tamaño de las plantas siderúrgicas así como su nivel de integración vertical las convirtió en un foco rojo que fue necesario atender con urgencia. Una industria que se caracterizó por su rigidez en los procesos de producción, logró flexibilizarse con la reducción de su tamaño, el cierre de empresas incosteables, departamentos obsoletos y el desarrollo de nuevas estrategias para hacerle frente a la competencia. Con el proceso de globalización, la industria acerera realizó también cambios en la cadena productiva para continuar operando con éxito y evitar las quiebras generalizadas. Considerando dichos procesos, este ensayo hace hincapié en la necesidad de estudiar las redes que le han permitido sobrevivir: alianzas estratégicas, coinversiones y adquisiciones. Al saturarse el mercado, los conflictos comerciales generaron nuevas políticas proteccionistas y estrategias para librar las barreras al comercio. Las alianzas estratégicas, coinversiones, fusiones y adquisiciones se convirtieron en las estrategias fundamentales para continuar operando con éxito y hacerse competitivas. En la primera parte de este ensayo se hace un resumen de la reestructuración desde mediados de la década de los setenta, la segunda evalúa las estrategias para operar en red y librar la competencia, la tercera comprende las experiencias mexicanas de organización empresarial. Por lo anterior, el objetivo de este ensayo consiste en analizar los procesos que condujeron a la industria siderúrgica mexicana a su venta al capital extranjero. 101 l. Tendencias generales en la industria siderúrgica En 1973, año de la crisis petrolera más citada en la historia económica reciente, la producción total mundial de acero logró el récord de 767 millones de toneladas; sin embargo, el incremento en los precios del petróleo impactó a toda la industria y redujo los pedidos de acero tanto para nuevas plantas, como para ampliaciones o remodelaciones; en términos más apropiados, se desarrolló un efecto inflacionario a través de toda la economía (Hall 1997). Como resultado, en 1975 la industria acerera entró en crisis al caer su producción a 712 millones de toneladas de acero crudo, lo cual incrementó su capacidad ociosa. La inflación complicó los planes de expansión de la industria acerera de muchos países importadores de petróleo (Hogan 1994); a su vez, esto propició el incremento de la oferta exportable como resultado de la contracción del consumo interno. La industria automotriz cambió radicalmente los diseños de los automóviles, para hacerlos más pequeños. Mientras que en 1973 los componentes de acero de los automóviles comprendían el 81.8%, a principios de la década de los ochenta se redujeron a 70% (Corrales 2006, Minello 1990). En suma, la creciente importancia del plástico, el aluminio, el cemento y otros productos tal como la fibra de vidrio, obligaron a esta industria a reestructurarse. Con la recesión de los setenta, según cálculos de William T. Hogan (1994) la producción japonesa cayó en un 14 por ciento, la de la Comunidad Económica Europea experimentó una caída del 19 por ciento y en Estados 102 Unidos en un 20 por ciento. Este hecho hizo necesario cambiar los sistemas de organización, para hacerla más flexible; en consecuencia, se desarrollan nuevas tecnologías para monitorear los procesos de fusión e incrementar la calidad de laminación; es así como se consolidan las Miniacerías29. Los efectos económicos y sociales de la reestructuración fueron muy altos; en 1975 Estados Unidos poseía 21 compañías de acero integradas y operaba 48 plantas siderúrgicas; veinte años más tarde, 17 de esas compañías tuvieron que cerrar y 10, operar de manera parcial (Hogan 1994). En Europa occidental el proceso de reestructuración siguió los mismos causes que en América y Japón: reducir y/o cerrar las grandes plantas para adecuar la capacidad instalada a los requerimientos del mercado: de 998 mil trabajadores que empleaba la Unión Europea en 1974, a finales de la década de los noventa se reducen a 280 mil. En Estados Unidos durante 1974 trabajaban 521 mil trabajadores; para 1999 bajaron las estadísticas a 153 mil trabajadores (http://worldsteel.org/trends indicators/2000) En Estados Unidos las compañías siderúrgicas que mayores daños experimentaron por los procesos de reestructuración durante la década de los ochenta fueron: U.S. Steel que cerró 5 empresas, le siguió Republic al mantener operando de manera parcial 4 de sus plantas y cerró una planta en Buffalo; geográficamente quien mayores daños experimentó fue el estado de Pennsylvania, con el cierre de 8 plantas y la transformación de otras 3 más de 29 Las miniacerías son empresas que utilizan chatarra como materia prima y hornos eléctricos para la fusión del metal. Estas empresas no requieren de suministro de mineral de hierro, producen a escalas más pequeñas todo tipo de productos de acero, a costos promedio más bajo que las empresas integradas y son un subproducto de la reestructuración en esta industria. 103 diversas compañías. El segundo Estado con mayores daños por la industria siderúrgica fue Ohio, donde cerraron 3 plantas y transformaron otras dos. En suma, la racionalización significó la reducción de 48 millones de toneladas; el equivalente al 30% de la capacidad instalada en Estados Unidos (Hogan 1994). Al contrario de lo que ocurría con la industria integrada, las miniacerías acumularon capacidad y desarrollos tecnológicos para competir en el mercado del acero nacional y mundial30. Durante todo ese tiempo de reestructuras y cierres de empresas, los precios de los productos siderúrgicos sólo crecieron nominalmente (Hall 1997). En cambio, la producción acerera adquirió una enorme importancia en países en vías de desarrollo. La Unión Soviética desde mediados de los años setenta desplazó a Estados Unidos en la producción de acero. Con la caída del bloque soviético en 1989 aparece en escena la República Popular de China como el principal productor de acero en el mundo, con una capacidad superior a los 340 millones de toneladas de acero líquido al año (IISI 2006, CANACERO 2004). La creciente participación de países en desarrollo (China, Corea del sur, Brasil, México, entre otros) en la competencia por los mercados del acero, ha hecho crecer la capacidad instalada presionando los precios, como ocurrió con la crisis asiática de 1997-1998. A principios del 2000 la pujante economía China revirtió los efectos recesivos de dicha crisis e hizo crecer a la industria acerera por su gran demanda de productos de acero. Seis años después, sorprende a propios y extraños el hecho de que en el 2006 China se convirtió en 30 Heinrich y Schubert (1999) calculan que durante la década de los noventa las miniacerías produjeron 210 millones de toneladas de acero líquido. 104 el principal proveedor de productos de acero de Estados Unidos (NASTC 2007). En virtud de las dificultades propias del mercado siderúrgico que acumula inventarios y presiona los precios en el mercado mundial, muchas empresas han desarrollado el comercio intra-firma para enfrentar las barreras proteccionistas; Burnham (2000) afirma que la industria acerera mundial cambia radicalmente su estructura, tecnología, habilidad gerencial y fuentes de capital. Asegura que más del 30% de las importaciones de acero de Estados Unidos se realiza a través de los propios productores. II. Alianzas estratégicas, co-inversiones y adquisiciones Dos de las más conocidas formas de cooperación ínter-empresarial entre las grandes empresas, son las alianzas estratégicas y coinversiones. La integración de operaciones entre dos o más empresas hace posible acceder a nuevos paquetes tecnológicos, segmentos de mercado, financiamiento, etc. Estas relaciones empresariales se logran a través de dos formas básicas: 1) la compra de una empresa que se encuentra con problemas financieros (adquisición) y 2) la conformación de una tercera empresa con aportaciones equitativas entre las empresas creadoras (fusión y/o coinversión) (Mangum et al. 1996). El concepto de alianza estratégica incluye una diversidad de formas de cooperación empresarial. En la década de los noventa se registró su acelerado crecimiento: de 1000 existentes en 1989 (860 internacionales) se incrementaron a 7000 en 1999 (4400 internacionales) (Nam-Hoon y Kentaro 2000). El predominio de los contactos internacionales muestra el tamaño de las empresas 105 que participan en ellas; las más comunes se dan entre empresas automotrices: General Motors con Isuzu, Suzuki, Fuji, Toyota del Japón y Fiat de Italia; Ford con Mazda de Japón, etc. Por la composición del capital, el 48% fueron coinversiones y por su localización geográfica, el 78% se hicieron a nivel internacional (Nam-Hoon y Kentaro 2000) Por ramas industriales, las más importantes se dan en telecomunicaciones, la industria farmacéutica, automóviles, electrónica, equipo electrónico, computadoras, servicios financieros y de negocios. Desde la perspectiva regional, unas registran mayor frecuencia que otras; de acuerdo al estudio antes citado, en Norteamérica se desarrollaron 65% de todas las alianzas estratégicas en el mundo; le siguen en importancia Europa y Asia. América Latina, el este de Europa y África ocuparon muy bajo porcentaje en este conjunto total de redes de empresas. En el estudio de Nam Hoon y Kentaro, no figura la industria siderúrgica; sin embargo, las primeras alianzas estratégicas en Estados Unidos se realizaron en 1984 entre la NKK con la National Intergruop, hasta antes de 1983 conocida como National Steel. En esta coinversión, el 70% provenía de la empresa extranjera y generaron 12 mil empleos; en 1988 Nisshin Steel y Wheeling-Pittsburgh Steel acordaron otra alianza estratégica para producir acero galvanizado y aluminio, donde la empresa extranjera aportó sólo el 10% de la inversión. Con ello generaron arriba de 5500 empleos (cuadro único). En general, a principios de los noventa había ya 8 empresas japonesas y una coreana instaladas en Estados Unidos (Mangum, et al. 1996). Cuadro único 106 Coinversiones entre empresas americanas y extranjeras en territorio de Estados Unidos Extranjera Americana Inicio Empleo Inversión* Kyoei/Sumitomo NKK Kawasaki Sumitomo POSCO Nisshin Nisshin Yamato Kogyo Kobe Kawasaki Nippon Nippon Nippon Kawasaki Sumitomo Kove Nisshin Nacional Inter-group CVRD (Brasil) LTV Corp. USX Corp Wheeling-Pittsburgh Wheeling-Pittsburgh Nucor USX Corp Armco Inland Inland Inland Armco LTV Corp. USXCorp. Wheelin-Pittsburgh 1975 1984 1984 1986 1986 1988 1988 1988 1989 1989 1989 1990 1991 1991 1991 1992 1993 315 12,000 725 83 990 5500 100 320 3,000 9,500 11,500 280 250 100 100 100 100 300 2.2 bill. 275 100 437 15 96 210 300 1.6 bill. 186 520 550 150 180 200 120 *Millones de dólares Fuente: Garth L. Mangum et al. (1996). Transnational Marriages in the Steel Industry. Experience and Lessons for Global Business. Quorum Books, USA. Resultan interesantes los porcentajes de participación de la inversión extranjera en las empresas acereras de Estados Unidos. Las dos con menor porcentaje de inversión (Nisshin con Wheeling-Pittsburgh en 1988 y Nipón con Inland en 1989) generaron el mayor volumen de empleo, mientras que las dos adquisiciones, un número menor. Pueden observarse montos equitativos de coinversión en un núm. significativo de empresas. El cuadro ilustra a su vez una industria norteamericana posarse a los pies de sus más acérrimos adversarios: los acereros japoneses. A pesar de ser empresas altamente integradas, con grandes economías a escala y el orgullo nacional de esa época, las siderúrgicas japonesas se 107 % Extranjero 100 70 50 40 50 10 67 50 50 45 14 40 50 50 50 50 100 encadenaron a la industria norteamericana; ello les permitió acceder a un mercado sumamente competido. Operar bajo las nuevas condiciones en alianza con empresas que antaño competían por un mismo mercado, les permitió incrementar su comercio intrafirma. Para consolidarse en el mercado americano e incrementar la capacidad competitiva de la industria acerera japonesa, las primeras inversiones las hicieron proveedores de acero de fabricantes de autos japonés (Stein 1998; Mangum et al. 1996) de reciente instalación también en Estados Unidos; ello les garantizó calidad, entrega a tiempo y socios conocidos, constituyendo una red extraterritorial que habría de consolidar al capital japonés en ese país. La firma de alianzas estratégicas, la realización de co-inversiones y adquisiciones, cobraron mucha importancia por todo el mundo desde la crisis energética y siderúrgica de 1975. Kawasaki Steel estableció alianzas desde la década de los setenta con acereras brasileñas; Unisor-Sacilor de Francia estableció alianza con Thyssen de Alemania; a partir de 1991 empresas Chinas y Taiwanesas adquirieron el 40 % de una empresa integrada en Malasia. Mientras japoneses, alemanes y españoles negocian la posibilidad de invertir en la industria acerera China; una gran empresa privada de ese país, Shoungang Corporation negoció por esa misma época co-inversiones con empresas de Filipinas, Pakistán, Indonesia e India. En 1994 Inland Steel de Estados Unidos formalizó alianza con Altos Hornos de México, S. A. para crear Ryerson de México, etc. (Mangum et al. 1996, fusión núm. 10). Con la liberalización de la economía soviética a finales de los ochenta, empresas acereras rusas que habían sido líderes productoras de acero desde 108 1975, iniciaron compras de empresas en Estados Unidos en el 2006. Severstal, una de las más importantes empresas acereras rusas estuvo negociando la compra de U.S. Steel localizada en Pittsburgh (http://www.pittsburghlive.com/x/pittsburghtrib/s_480715.php), el corazón de la industria acerera norteamericana. Resulta de particular interés resaltar la fusión (merger) en febrero del 2001 de tres empresas acereras europeas: Arbed de Luxemburgo, Aceralia de España y Usinor de Francia, creando con ello una de las empresas aceraras más grandes en el mundo, con una producción cercana a los 50 Millones de toneladas de acero líquido. La fusión de estas tres empresas desplazó del primer lugar a POSCO (Pohang Iron & Steel Corporation), empresa acerera coreana que a finales de los noventa encabezaba el ranking de este sector industrial y a Nippon Steel de Japón en la actualidad segunda en el ranking. Igualmente, a mediados de la presente década, el grupo siderúrgico que encabeza el hindú Lakshmi Mittal cuya sede se encuentra en Rótterdam, Holanda, ha adquirido empresas acereras por todo el mundo. En el 2006 se fusionó con Arcerol para así convertirse en la principal empresa acerera en el mundo con una producción de 116 millones de acero líquido al año. Con esta escala productiva desafía toda lógica económica. Mientras que las pequeñas empresas son más fáciles de administrar, cambiar de giro y evitar costos financieros, a Lashmi Mittal no le preocupa una potencial caída del Producto Interno Bruto de China, que colocaría en una situación de crisis a esta industria. Sin embargo, el éxito Chino ha acercado a productores de acero japoneses con el grupo de Shanghai, Baosteel Group Corp. que produce lámina 109 para la industria automotriz. De igual forma, se han asociado con la principal empresa acerera coreana POSCO. Prácticamente en toda la región acereros japoneses están desarrollando alianzas con chinos, coreanos y taiwaneses para incrementar sus mercados. En efecto, dado el exceso de capacidad de los japoneses, se hace necesario encontrar nuevos mercados en Asia, región que produce 48% del acero crudo en el mundo (http://www.asahi.com/english/2002, IISI 2004). III. Experiencias mexicanas de alianzas, fusiones y adquisiciones Las empresas acereras integradas mexicanas han establecido también alianzas estratégicas con empresas extranjeras, ello les ha permitido salvar muchas barreras al comercio y desarrollar segmentos de mercado. El grupo Villacero que compró SICARTSA I a principios de los noventa, suscribió alianza con una empresa inglesa en 1994 para la fabricación de lámina galvanizada, lo mismo hizo Hylsamex quien en 1997 estableció una alianza estratégica con la empresa Belga Bekaert para producir alambre (López 2001). Como parte de sus estrategias de expansión, la compañía regiomontana del grupo ALFA unió esfuerzos con el grupo Ítalo-argentino Techint, Sivensa de Venezuela y Usiminas del Brasil para adquirir la compañía Siderúrgica Sidor de Venezuela. En las negociaciones para la subasta de esta empresa también participaron el Grupo Villacero y el Grupo IMSA, que perdieron la licitación (Expansión 1998:núm. 743) 110 Durante la década de los noventa, para responder al reto de la apertura comercial y la globalización, todas las empresas acereras integradas mexicanas invirtieron cuantiosas sumas para modernizarse.31 La gran empresa acerera regiomontana Hylsamex del corporativo ALFA, acumuló una deuda de 1345 millones de dólares (Expansión 2001:núm. 821) como resultado de sus procesos de modernización; esta deuda propició su venta en el 2005 al grupo ítaloargentino Techint. Fue la única empresa acerera mexicana que creó su propia tecnología (HYL) para producir acero y actualmente se utiliza en 8 países, con 35 plantas fundidoras; por tanto, era considerada un orgullo regional (Expansión 1995:núm. 667). Entre las adquisiciones de mayor importancia de las empresas acereras regiomontanas podemos distinguir las siguientes: El grupo IMSA compró en 1999 la planta de galvanizado propiedad de AHMSA en Monclova, construida en 1997; esta adquisición permitió al grupo industrial regiomontano, el más diversificado de todos los grupos industriales (cuyos dueños fueron la familias Canales Clariond y Clariond Reyes), fortalecer una de sus líneas de producción para la exportación al mercado de Estados Unidos: la lámina galvanizada. Sin embargo, en Mayo de 2007, a un precio cercano a los 3 mil 227 millones de dólares, IMSA fue vendida a Ternium del grupo Techint. Con ello, los empresarios mexicanos se deshacen de una industria que forjó el desarrollo industrial de Monterrey y México. 31 De 1990 a 1998, según palabras textuales de la CANACERO, “(…) dadas las exigencias de globalización de mercados y de la privatización del sector siderúrgico mexicano (noviembre de 1991), hasta 1998 se registraron inversiones por 4 mil 430 millones de dólares, para fortalecer y modernizar su estructura productiva, orientándose hacia la consolidación de su capacidad competitiva” (CANACERO 2002) 111 En 1997 IMSA acero adquiere Industria Galvanizadora, S. A. de Guatemala, en el año 2000 adquiere la Building Products con sede en Sacramento California, USA y el en 2002, MSC Pinole Point, etc. De las dos empresas acereras regiomontanas hoy operando, IMSA-acero pudo librar “el efecto dragón” por posesionarse de un segmento de mucha demanda en los mercados internacionales, por que no produce acero líquido debido a los altos costos de los combustibles; a que es un cliente cautivo de las empresas acereras regionales y al éxito de sus alianzas estratégicas con empresas transnacionales. En efecto, en plena crisis asiática (1997-1998) adquiere el 26% de las acciones de la empresa acerera Argentina COMESI, en 1998 realizó una joint venture con la Companhia Siderúrgica Nacional de Brasil y en 1999, con Varco Pruden Int. de Estados Unidos. En el mismo tenor, en mayo de 1999, IMSA acero suscribe alianza estratégica con ISPAT Int. Propiedad de Mittal Steel, para producir y distribuir productos de acero laminados destinados a la industria automotriz, la industria doméstica y de motores en toda América Latina, con excepción de Brasil. IMEXA, antes SICARTSA II, empresa productora de laminados planos, cubriría el 75% de las necesidades de IMSA acero en los futuros 5 años y el convenio podría ser renovado. Entre sus operaciones se contemplaba la construcción de una fábrica de galvanizado especial para la industria automotriz, la fabricación de bobinas largas, entre otros compromisos de negocios (http://www.newswire.ca/2000). Mientras que IMEXA produce laminados planos a través de tecnología de 112 reducción directa, IMSA acero es la más importante empresa mexicana productora de lámina galvanizada. El grupo Villacero invirtió sumas millonarias de dólares en sus empresas acereras para estar en condiciones de competir al globalizarse la economía mexicana durante la década de los noventa. En su conjunto, las inversiones acumuladas desde la adquisición de SICARTSA I sumaron 600 millones de dólares, a pesar del “efecto dragón” de finales de esa década. Fue la primera empresa acerara mexicana en producir acero líquido en otro país, porque en 1997 compró Border Steel Inc. localizada en El Paso, Texas, para producir varilla corrugada (Expansión 1998: núm. 748). No obstante, como resultado de los procesos de fusión y adquisiciones, Mittal Steel recientemente compró la planta uno de SICARTSA con un desembolso de 1439 millones de dólares (http://www.jornada.unam.mx/2006/12/21/index.php?). Esta empresa había sido propiedad del grupo Villacero y adquirida en 1991 al gobierno federal a un monto de 170 millones de dólares. La venta a empresarios extranjeros de SICARTSA deja sola a AHMSA en el escenario nacional bajo propiedad de mexicanos. Si las condiciones del mercado lo permiten, tal vez sobreviva algún tiempo como propiedad de mexicanos; su enorme deuda sin embargo, podría conducirla a la misma suerte que el resto de las empresas acereras integradas mexicanas. En resumen, las alianzas estratégicas, las co-inversiones y adquisiciones generaron un reacomodo de fuerzas, nuevas redes empresariales y la reconstrucción de la cadena productiva con base en la racionalidad del justo a 113 tiempo y el control total de calidad, la flexibilidad laboral y escalas más pequeñas de producción. Estas redes empresariales se han convertido en las estrategias fundamentales para desarrollar la industria y las economías regionales (Palacios 2004, Pozas 1999). Las experiencias de la industria siderúrgica significan cambios radicales en las formas de operar en una industria que, por definición, se creía rígida y orgullo del viejo régimen fordista en la industria, que no le toco experimentar a Fundidora Monterrey S. A., cerrada en mayo de 1986. Fundidora Monterrey fue la empresa pionera del ramo en México y cuna de la industrialización de su ciudad y la región noreste. La llamaban la maestranza, porque fue escuela de miles de trabajadores que ingresaron a trabajar sin adiestramiento alguno; sólo con sus energías y el deseo de una vida mejor a la ofrecida por el campo mexicano. Las siguientes líneas se proponen rendirle un tributo después de veinte y dos años de apagar sus hornos. Juan Zapata Novoa (1989) apunta en el libro: La Muerte de Fundidora, que a finales de siglo XIX existían en Monterrey las condiciones para el desarrollo de una empresa fundidora. Este libro resume los avatares de su destino y es el único libro sobre esta empresa que fue escrito para no olvidar sus enseñanzas y penas, aciertos y desatinos, conflictos y acuerdos empresariales que le permitieron mantenerse operando un poco más de ochenta años; que supo librar los estragos de la revolución mexicana, la segunda guerra mundial pero que, con la crisis del sector en 1975 junto con problemas administrativos, la condujeron a su destino final. 114 Fue en la década de los setenta cuando los problemas financieros de Fundidora Monterrey se agravaron; para salvarla de la quiebra, fue adquirida por el Estado mexicano en 1977. Para administrar a tres grandes compañías integradas, el gobierno crea el Holding SIDERMEX en 1978, un hecho insólito para la época, cuando en el mundo industrializado se hacía todo lo contrario (Zapata Novoa 1989). La concentración de estas empresas en manos del Estado demuestra que la economía mexicana no se había articulado a la globalización, se aferraba al proteccionismo, a su mercado interno, sin el éxito esperado, lo cual condujo al cierre de Fundidora y a desincorporar tanto a AHMSA como a SICARTSA. Fundidora Monterrey forjó la cultura industrial de Monterrey y por definición, de Nuevo León. No obstante su alto nivel de integración vertical, muchas empresas pequeñas y medianas fueron sus proveedoras de partes y componentes, lo que propiciaba efectos de inducción sobre toda la cadena productiva regional. Su localización en la ciudad de Monterrey, con una planta industrial más diversificada a través de la industria metalmecánica y de transformación, redujeron el impacto recesivo sobre el desarrollo económico regional, el despido de aproximadamente 12,500 trabajadores y la contracción en el consumo de una diversidad de insumos y partes: desde guantes industriales, zapatos, pinzas, motores eléctricos, cal siderúrgica, dolomita, pinturas, etc. A Fundidora Monterrey no le toco firmar alianzas estratégicas como una medida para sobrevivir a la competencia. Esto tal vez se debió a que fue adquirida por el Estado en una época en que estas prácticas no alcanzaban su 115 máximo desarrollo o bien, porque su rentabilidad era poco prometedora por su maquinaria obsoleta, lo beligerante de su sindicato minero y las deudas de corto plazo con la banca internacional, que le impedían continuar operando. La poca experiencia asociativa de Fundidora provino de la época de SIDERMEX. Antes de ser adquirida por el Estado Mexicano, tres empresas acereras japonesas: Nippon Steel, Mitsui y Mitsubichi invirtieron en Fundidora un importante porcentaje de capital (Zapata Novoa 1989). El autor antes citado asegura que los Prieto tuvieron muy buenas relaciones con los banqueros nacionales; pero empresas acereras que tuviesen algún interés bajo previos acuerdos de comercialización conjunto, asesoría tecnológica, etc. nunca fueron importantes; tal vez esto explique también su muerte, el aislamiento con el resto del mundo e incluso, estuvo “aislada en el centro de Monterrey” ( Novoa 1989:70). Conclusiones Después de saturarse los mercados del acero como resultado del incremento en los precios de los combustibles a mediados de la década de los setenta, la industria siderúrgica vio cuestionado su tamaño, su organización empresarial, comercial y desarrollo tecnológico. Estos procesos modificaron las estrategias empresariales para evitar mayores cierres, pérdidas financieras y obtener algún margen de ganancia que les permitiera continuar operando. Con los procesos inducidos por la crisis energética y los materiales sustitutos como el plástico, el aluminio y el cemento, Estados Unidos fue 116 desplazado por el bloque soviético al convertirse en el más importante productor de acero en el mundo. A escala global la crisis del sector siderúrgico transformó la cultura industrial predominante en la época, que privilegiaba lo grande, lo masivo y sus economías a escala. Desde entonces adquieren mucha importancia las miniacerías. Las pérdidas financieras y los costos sociales propiciados por el desempleo y el cierre de muchas empresas siderúrgicas por todo el mundo fueron enormes. Este fenómeno no fue privativo de alguna región o ciudad en particular, fue generalizado. No obstante, en cada región tuvo distintos grados de intensidad dependiendo del nivel de desarrollo y diversificación de sus economías. Tal vez la más importante de las ganancias de esta crisis fue el desarrollo de prácticas comerciales más sofisticadas basadas en la cooperación ínter-empresarial para acceder a los mercados, a los avances tecnológicos de punta, a la ayuda financiera para el pago de las deudas, en suma, a la búsqueda dentro del propio sector industrial la fuerza que les permitiera continuar operando. Las alianzas estratégicas, las fusiones, compras parciales de empresas, ayuda financiera, asesoría tecnológica, etc. se convirtieron en los instrumentos básicos para la continuidad de las empresas. Las alianzas estratégicas se generalizaron por todo el mundo y en toda actividad industrial, comercial y de servicios. Estos procesos representan el núcleo central de la globalización de las economías y están fortaleciendo el comercio intra-firma e intra-industria. Las empresas acereras de las más 117 remotas regiones del mundo se han tenido que sujetar a estas prácticas empresariales y mercantiles si quieren seguir operando. Las experiencias de alianzas, fusiones y adquisiciones de las empresas acereras mexicanas muestran a todas luces un ambiente de creciente globalización al hacer suyas estas prácticas para mantenerse operando. El hecho muestra a su vez un alto grado de vulnerabilidad por la alta dependencia del capital extranjero para sus procesos de producción. En la práctica, las experiencias de las empresas siderúrgicas mexicanas en torno a operar en alianza con empresas extranjeras significaron preparar el terreno para su venta al capital extranjero. Para Monterrey, que forjó su desarrollo industrial con esta industria, representa el abandono de una industria básica que posee un importante mercado nacional. Tal vez la capacidad previsora de sus empresarios les de la razón. Una potencial crisis proveniente de China o bien, el crecimiento de las exportaciones chinas a Estados Unidos que ya es una realidad, coloca a la industria siderúrgica regiomontana en un futuro incierto; tal vez esto explique la reciente organización en la industria acerera regional y nacional. Bibliografía Burnham, James (2000). U. S. Steel Industry Protection, www.csab.edu/ 2000. Actual de La Industria Siderúrgica Mundial y en México, 17 de marzo de 2004. Documento obtenido de Internet en Marzo de 2005. CANACERO 2002. Perfil de la industria siderúrgica mexicana. Corrales C. Salvador (2006). Redes Productivas en la Industria Acerera. El Caso de Altos Hornos de México, S. A. 1982-2002. El Colegio de la Frontera Norte, Tijuana, Baja California. CANACERO (2004:4), Situación 118 Expansión (1995). “HYLSA, Exportar va Después, núm. 667, 25 de octubre, México Expansión (1998). 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El elemento de reflexión es el papel de la gran empresa, inclusive trasnacional, y su contribución al desarrollo regional/local, tanto en los años de la segunda posguerra mundial y durante la etapa reciente de reestructuración del capital a través de su internacionalización. No obstante, en una y otra circunstancia histórica cabe la posibilidad de considerar, sobre todo en un ambiente periférico, la generación de condiciones de enclave, que pueden adquirir un significado particular y distintivo ya sea como enclave regional o enclave internacional, por su especial situación histórica y particular formación social. Esta cuestión se ilustra mediante el estudio de caso de la estrategia de localización en México entre los principales consorcios metalúrgicos asociados a nivel mundial, Mittal Steel y Arcelor, para armar una red mundial de plantas siderúrgicas especializadas e integradas en la producción de productos metálicos; y que por su instalación en la costa del centro occidente mexicano, aun cuando representan un significativo aporte a la actividad industrial en el estado de Michoacán y en la producción de acero en México, en poco contribuyen al desarrollo regional y local. Palabras clave: Enclave Internacional. Convergencia estratégica. Gran empresa y Territorio. Abstract. In the following presentation, the role of the great enterprises is analyzed towards their possibilities of merging in the regional development, particularly in peripheral zone. There are two existing contrasts in the regional development and its alleged affinity toward the context to regenerate the capitalist regime. The great enterprises should have the element of reflection even transnational, and their contribution to the regional development, such as in the World War II postwar and now-a-days on capital restructuring through internationalization. However, under a historical circumstance or another there is a possibility of considering above all in a peripheral environment, the generation of outlier 121 conditions, which can acquire a particular and distinctive meaning either on a regional or international outlier because of their special historical situation and their particular social formation. This issue is shown through the case study of the strategic location in Mexico between the main metallurgic consortiums related World Wide, Mittal Steel y Arcelor, to put together a World net on specialized siderurgical plants, integrated on the manufacturing of metal products; and because of their location on the Mexican west central coast, even though they represent a substantial amount of industrial activity in the state of Michoacan and in the steel production in Mexico, their contribution toward the regional development is very poor. Key Words: International Outlier. Strategic Merging. Great Enterprises and Territory. Presentación. En el estudio sobre la convergencia estratégica de la gran empresa y el territorio en un contexto periférico, se contrastan diferentes momentos para valorar el papel de la gran empresa ante la expectativa del desarrollo, en los años de la segunda posguerra mundial y en la etapa actual de reestructuración del capital y su internacionalización. En los últimos años, expertos y organizaciones públicas ocupadas en la planeación del desarrollo se plantean, en contextos de ajuste productivo, alta competitividad y bajo crecimiento económico, la posibilidad de que el desarrollo endógeno y autosostenido pueda alcanzarse mediante la concentración espacial de inversiones públicas y privadas (Vázquez B.: 1997). Se considera, entonces, que la política de polos de desarrollo podría ser aplicable en circunstancias actuales, en la medida en que las grandes empresas se adecuan a formas de organización flexible y que estimularían la integración de unidades de empresas externas en los sistemas productivos locales. En ese sentido, en el marco del desarrollo endógeno, se piensa en la viabilidad de la convergencia entre las estrategias de la gran empresa y el territorio. Desde esta perspectiva, en ambos períodos analíticos, generados en condiciones históricas y sociales diferentes --una entre los años de la segunda posguerra y otra con la crisis mundial y prolongada del sistema capitalista desde los años setenta del siglo pasado--, se parte del supuesto de que las estrategias de la gran empresa pueden converger con las expectativas de desarrollo de un lugar en particular. Así se propuso en América Latina entre los años sesenta y setenta bajo la figura de los polos de desarrollo; y desde la década de los noventa del siglo XX tal convergencia se reedita mediante el contexto en que se propone el desarrollo local. Sin embargo, en áreas periféricas se imponen diversas limitaciones territoriales, de situación regional, cuando las características de las empresas que se 122 establecen el lugar hacen dudar acerca de los efectos positivos que la gran empresa genera a favor del desarrollo local. El problema a discutir considera, en la expectativa de la convergencia entre las estrategias de la gran empresa y el desarrollo local, la divergencia y falta de articulación entre las decisiones de inversión de las empresas instaladas en un lugar y el desarrollo de la localidad, en un contexto periférico. La tesis que se plantea en el presente documento argumenta que la acción de la gran empresa en un entorno de periferia, no necesariamente genera condiciones propicias de desarrollo regional/local o no converge con las estrategias territoriales; provoca, entonces, condiciones de desarticulación regional y reproduce la forma de un enclave, que en el contexto actual asume la forma de enclave internacional. I. La gran empresa y el desarrollo regional. Entre los años setenta y ochenta se registró un amplio debate acerca de las alternativas de desarrollo estructural y regional entre los países subdesarrollados, fue una etapa que permitió la revisión y análisis de la trayectoria histórica de esas economías. Una de sus dimensiones básicas fue la que refería a las alternativas de planeación y ordenamiento del territorio en torno a los procesos de concentración espacial estimulados por las grandes inversiones públicas y privadas. Destacó, en ese sentido, la pretensión de instrumentar polos de crecimiento en países con escasa industrialización e integración interna, en áreas periféricas. Sin embargo, ante las insuficiencias en la difusión del desarrollo planificado, resurgió la noción de enclave como la forma para caracterizar las consecuencias restrictivas en la integración de las zonas en que se aplicó la estrategia de polarización. El referente de enclave planteado por Cardoso y Faletto en 1969, se replanteó; e inclusive se convirtió en un sustituto para calificar los efectos nocivos de las experiencias de polarización en América Latina (Boiser, 1975; Coraggio, 1975; Hiernaux, 1984; Zapata, 1985). En esos términos, en ámbitos periféricos, hablar de los polos de desarrollo -como modelo de planeación--, implicó considerar la situación del enclave a través de las expresiones empíricas de desarticulación interna (Hiernaux, 1984; Zapata, 1985), por el contexto ideológico en que se elaboró el modelo de los polos (Coraggio, 1975) y ante las condicionantes imprevistas en la planificación que podrían desvirtuar su instrumentación concreta (Boiser, 1975). La gran empresa y los polos de desarrollo. Si bien la estrategia del desarrollo polarizado adquirió forma en América Latina durante los años setenta como un instrumento de planeación para resolver los 123 desequilibrios y desigualdades interregionales; en su inicio se trató de un modelo elaborado en los países europeos para los años de la segunda posguerra mundial y que buscaba conciliar el crecimiento económico con el desarrollo social. El concepto polos de crecimiento fue originalmente un instrumento para la descripción y explicación del desarrollo en el espacio económico abstracto, propuesto por Perroux en la primera parte de los años cincuenta del siglo XX. Después el alcance del concepto se amplió y reorientó para incidir en asuntos normativos con la intervención en políticas económicas y de planeación a través del Estado (Hermansen, 1977: 12). Un lugar fundamental en la propagación del crecimiento lo jugarían las grandes empresas con capacidad innovadora, que habrían de ejercer una amplia influencia y dominio sobre otras entidades económicas. La empresa motriz, con capacidad innovadora y liderazgo provocaría estímulos sobre otras empresas. La gran empresa ocuparía un lugar dinámico por su tamaño, acelerado crecimiento, capacidad de innovar y por generar impulsos externos, que provocarían diversos vínculos interindustriales. La interdependencia entre las industrias en función de sus enlaces implicaba la posibilidad de generar efectos de difusión productiva hacia atrás y hacia adelante. La gran empresa implicaba una fuerza de expansión o estancamiento en razón de la aptitud innovadora como empresa líder. En el marco del modelo de polos de desarrollo la gran empresa jugaría un papel sustancial en la integración de los sistemas sociales en que se instala, con relación a la difusión de innovaciones (técnicas, culturales y sociales) para la conformación de un espacio funcional y geográfico. La difusión geográfica de las innovaciones sucedería mediante el dinamismo de grupos sociales conectados por relaciones mutuas y recíprocas de interdependencia. Implicaba la creación de un ambiente social favorable para la innovación y la transmisión rápida de formas nuevas de hacer las cosas desde los polos hacia sus áreas circundantes y entre los polos. El enclave regional. Ante las propuestas elaboradas para estimular el desarrollo regional desde los años setenta para América Latina y en torno al modelo de polos de desarrollo, de modo asociado surgió la noción de enclave para referir –en términos generales-- a aquellas zonas periféricas que difícilmente encontraban condiciones para incorporarse a la economía nacional y que con dificultades lograban un crecimiento y formas socioeconómicas de integración interna. El referente de enclave se derivó, al menos, de cuatro corrientes de análisis en Latinoamérica, región que ha evidenciado diversas limitaciones estructurales para alcanzar el desarrollo modelado a partir del comportamiento de los países industrializados. 124 Por un lado, a finales de los sesenta Cardoso y Faletto formularon la idea de enclave para caracterizar, en el marco del dependentismo, la ausencia de un desarrollo efectivo en la periferia y la generación de relaciones sociales de dominación articuladas hacia afuera (con respecto al centro económico) de la zona en cuestión. Se trata de un estudio que buscaba caracterizar la posición de América Latina en el ámbito mundial entre finales del siglo XIX e inicios del XX. De otro lado, entre los años setenta y ochenta, distintas posiciones analíticas retomaron el concepto de Cardoso y Faletto, para caracterizar la situación negativa del desarrollo en un lugar donde se aplicó la pretensión del desarrollo polarizado. Desde los mismos promotores de la planeación, en los años setenta, se consideró la posibilidad del enclave en la medida en que no se alcanzaran las condiciones y requisitos para la implantación de un polo (por ejemplo en Boiser, 1975). También la idea del enclave apareció entre las críticas derivadas del razonamiento lógico conceptual a las propuestas del modelo de polos de crecimiento (es el caso de Coraggio, 1975). Ambas nociones (polo vs. enclave) aparecieron unidas en una paradoja y en función de las secuelas positivas o negativas de la acción sectorial de la industria y del conglomerado urbano para la integración regional, a través de la acción de la gran empresa pública o privada. Otras referencias al enclave se elaboraron en los ochenta con base en las evidencias empíricas dadas por los resultados negativos en la instrumentación de polos de desarrollo en Latinoamérica y replanteando la noción de Cardoso y Faletto. Es el caso de Zapata y Hiernaux. Se reformuló la idea del enclave tradicional, hacia una expresión “regional” o “moderna” y a manera de una actualización en el contexto de un mayor control de la economía nacional sobre su territorio, en circunstancias de la crisis generalizada a principios de los ochenta y ante las transformaciones que ya se apuntaban en algunas áreas subnacionales. En los años ochenta apareció la necesidad de precisar el alcance de la noción de enclave a la luz de las experiencias de polarización aplicadas desde los años setenta en América Latina. Se reelaboró un referente de enclave diferente a la propuesta de economía de enclave que hacía alusión a un tipo de país que se estructuraba en la relación centro-periferia (Cardoso y Faletto). Se intentó recoger la idea del enclave como una formación socioeconómica. A partir de la relación que se caracterizó entre los países centrales y periféricos (Cardoso y Faletto), Francisco Zapata (1985) replanteó la noción de enclave en consideración a diversas situaciones latinoamericanas donde se instrumentó el 125 desarrollo polarizado entre los años setenta y ochenta. Con base en una actitud sociológica asumió que el enclave se transforma poco a poco en un polo de desarrollo, debido a que en un plazo dado la nación se hace cargo de la riqueza generada y gradualmente comienza a procesarse internamente, ante los procesos de nacionalización ocurridos en México desde 1938 y luego en otros países de América Latina. No obstante, afirma que “en términos sociológicos el enclave mantiene sus principales características invariables (…) se termina por desarticular totalmente la vida económica, social y política de la entidad en la cual se localiza el polo” (Zapata, 1985: 30-32; 60). Por su parte, para Daniel Hiernaux (1984: 525-526) el concepto de enclave cobra vigencia y utilidad en el análisis regional, en cuanto a las relaciones que se establecen entre una región y los focos de mayor desarrollo del país donde se insertan. En ese ámbito, los enclaves neocoloniales reproducen el esquema de dependencia centro-periferia pero expresados por la dominación de intereses extralocales en el contexto nacional y con el respaldo de los grupos de poder local. De ese modo, los enclaves regionales adquieren contenido específico y que los distingue de la forma tradicional. Desde esta perspectiva, los enclaves regionales se distinguen por la pretensión de una producción diversificada, de acuerdo con las expectativas de los polos de crecimiento. Condición diferente de los enclaves tradicionales, monoproductores de materias primas (recursos naturales) y agrícolas para satisfacer las necesidades de las economías centrales. En los enclaves regionales el desarrollo se piensa en función de la región, de acuerdo con la lógica de los polos de crecimiento y a pesar de que se orientan a revitalizar un mercado de mayor magnitud que el local. Condición diferente a las formas clásicas del enclave, donde las empresas se localizarían en función de la extracción de recursos naturales y la producción se destina al mercado mundial. La región era excluida de los beneficios económicos. Finalmente, al igual que en la versión tradicional, los enclaves regionales se constituyen como una prolongación de la economía central, ya sea de arraigo nacional o extranjero. En cualquiera de los casos, los recursos explotados benefician a la economía central y no se traducen en provecho de la región. Así, las inversiones y su programación se ordenan con acuerdo a los criterios y necesidades de los capitales de la economía central. La formación social y territorial del enclave se modifica en función de una economía central y en el contexto de la relación localidad/región/nación; y donde las formas de apropiación y gestión siguen estrechamente ligadas por vínculos determinados desde las instancias del poder central y en detrimento de las expectativas regionales de desarrollo. Son modalidades de integración territorial que pueden adquirir contenido a través del poder del Estado, de los grupos empresariales, los partidos o las federaciones gremiales, etc. 126 Por tanto, el contenido que se le ha asignado al concepto de enclave no se restringe a su acepción clásica. En su versión regional se argumenta en cuanto a fenómenos análogos pero expresados en función de un contexto histórico y social diferente y específico, ante la pretensión de un desarrollo polarizado. Lo distintivo --puede resumirse-- está en el hecho de que la relación centroperiferia en que se fijó el enclave tradicional adquirió un nuevo contenido en el ámbito nacional y a través de la desigualdad regional. Para ello se recuperó el significado del enclave en las propuestas de Zapata (1985) y Hiernaux (1984), que en particular construyeron en torno a las experiencias de implantación de polos de desarrollo en América Latina. II. La gran empresa y el desarrollo local En el contexto de los años noventa, cuando el problema del desarrollo se arma con base en la expectativa de lo local y endógeno, en el entorno de reestructuración, crisis prolongada y de internacionalización del capital, el papel de la gran empresa y su convergencia con los requerimientos territoriales de un lugar en particular, se convierten, otra vez, en un referente analítico. En los últimos años, se ha asumido que la política de polos de desarrollo puede aplicarse en el contexto del desarrollo local, en cuanto que las grandes empresas pueden adecuarse a las formas de organización flexible y estimular la integración de unidades externas a los sistemas productivos de un lugar en particular. Se supone la convergencia entre las estrategias de la gran empresa y el territorio y su confluencia con efectos positivos para provocar el desarrollo. La gran empresa transnacional es considerada como un agente capaz de converger con las estrategias territoriales (Vázquez Barquero, 1997). No obstante, en áreas periféricas, la experiencia señala que dominan los efectos negativos esperados territorialmente en el área en que se instala la gran empresa. Más que una convergencia aparece la divergencia y la desarticulación entre la inversión de las grandes empresas instaladas en un lugar y el desarrollo de la localidad. En esa medida, la acción de la gran empresa en un entorno de periferia no siempre genera desarrollo regional/local; no converge con las estrategias territoriales. Puede provocar formas de enclave, que en el contexto actual se expresa bajo la forma de enclave internacional. La gran empresa, agente del desarrollo local. Además de la Comisión de la Unión Europea, en particular la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) le ha asignado a la gran empresa transnacional un papel principal en el desarrollo. Para América Latina, la Cepal ha reconocido a la inversión extranjera multinacional como un agente que refuerza y estimula el desarrollo; no obstante, sugiere políticas de regulación y vigilancia para que el desarrollo sea ordenado por empresas de la zona en la búsqueda de una mayor integración de la región. 127 En el contexto desde los años noventa, siguiendo a Vázquez Barquero (1997) se admite que la acción de la gran empresa, como unidad motriz del desarrollo, tendría la capacidad de generar un proceso de difusión de innovaciones en el lugar en el que se instala, como un polo de desarrollo. Con la capacidad de generar vínculos con un conjunto de empresas pequeñas, se generaría un efecto dinámico y multiplicador para dinamizar al sistema productivo local. La gran empresa, como fuerza motriz, tendría la facultad de impulsar un sistema productivo local, compartiendo formas de organización, cultura productiva, tecnologías y objetivos comunes, en esa medida operarían mecanismos difusores de innovación. El cambio en las estrategias de las grandes empresas tendría que ser acompañado y orientado, a través de los procesos de reestructuración del capital, la forma del Estado y mediante las iniciativas locales y regionales, con capacidad para promover el crecimiento y la transformación territorial de manera descentralizada, e inclusive autónoma. Estimular acciones desde el ámbito local y el Estado que provoquen la competitividad de las empresas en el impulso del desarrollo local. Ello implica mejorar la infraestructura, la disposición de recursos, la promoción de empresas, de ambiente de innovación, de redes organizativas, que fortalezcan la presencia de las instituciones y la acción de la sociedad en el espacio productivo de un lugar. En consecuencia, la gran empresa innovadora se vería atraída por aquellas localizaciones con recursos, infraestructura y formas de organización, con calidad y capacidad innovadora para generar economías externas de escala y con un marco institucional propicio a la empresa, la competitividad y cooperación. En esta lógica, la acción de la gran empresa puede considerarse como un agente activo en las estrategias del desarrollo local. Es un elemento catalizador del crecimiento y desarrollo. Ello es posible, aclara y precisa Vázquez Barquero (1997), en tanto que la gran empresa puede establecer sus plantas en áreas cuya dinámica productiva garantiza un desarrollo endógeno, incluso en el contexto de la internacionalización del capital. En consecuencia, la convergencia de las estrategias de la gran empresa con el territorio, de acuerdo con Vázquez Barquero, depende de la procedencia y arraigo de las empresas y de la forma de organización territorial del lugar en que se establecen. Es obligado, en este proceso, la formulación de un plan de desarrollo local al que las empresas podrían asimilarse por su estrategia de inversión. Implica, incluso entre los países periféricos, generar una estrategia de desarrollo endógeno que sea compatible con las expectativas de inversión de las grandes empresas innovadoras. O sea, redefinir las políticas del desarrollo en términos de la acción de las empresas y su articulación a las organizaciones locales. La posibilidad del enclave. 128 En ese contexto, el mismo Vázquez Barquero (1997) supone la posibilidad de formación de un enclave, cuando la inversión de la gran empresa no confluye con las expectativas de vida del lugar en que se localiza. En términos de un ámbito local implicaría que los efectos de la gran empresa ante el desarrollo pueden ser insuficientes o genera disfunciones que restringen la capacidad de desarrollo en la zona en que se espera un efecto de difusión regional. Es una imagen que corresponde más a la situación de las áreas periféricas de la economía actual; y que a la vez contrasta la expectativa del desarrollo, incluso como iniciativa. La alternativa de la convergencia de las estrategias de inversión de las grandes empresas transnacionales con las expectativas del desarrollo local pueden, entonces, en contextos periféricos derivar en condiciones de escasa difusión y articulación con la economía del entorno en que se instalan. La presencia de la gran empresa no se traduce en resultados endógenos. El corolario del desarrollo polarizado en ámbitos locales se desvirtúa bajo la figura de un enclave. La acción de la gran empresa transnacional en espacios periféricos, en actual proceso de internacionalización del capital y ante la finalidad del desarrollo local, puede traducirse, en efecto, en una formación social de enclave; pero además, hoy, en este contexto, adquiere un diferente significado por su distinto contenido histórico y espacial, bajo la figura de un enclave internacional (Martínez Aparicio: 2006). III. El enclave internacional. La formación social de enclave que se identificó originalmente en los procesos de creación de los estados nacionales en las zonas periféricas, particularmente en América Latina, desde finales del siglo XIX y durante los años de la segunda posguerra, bajo la figura de economías de enclave (Cardoso y Faletto, 1969); y que en los años ochenta se replanteó en tanto enclaves regionales (Coraggio, 1975; Hiernaux, 1984; Zapata, 1985) para caracterizar los efectos negativos del desarrollo polarizado; en el contexto actual, en el marco de la expansión del capital en el nivel mundial y de las iniciativas del desarrollo en ámbitos locales , ha de redefinirse como la constitución de un enclave internacional. La relación centro/periferia es el referente guía en cualquiera de los momentos temporales y espaciales que compromete redefinir el contenido específico de la formación social del enclave. Las distintas caracterizaciones de la noción de enclave han implicado diferentes situaciones históricas y espaciales del desarrollo del régimen capitalista en el nivel mundial, a través de sus diversas expresiones como un sistema estructurado entre el centro y la periferia. Con base en ese referente (centro/periferia), cabe, dado el contexto de internacionalización del capital y la aspiración del desarrollo local, replantear la idea del enclave como posibilidad bajo la figura de enclave internacional. 129 Las circunstancias que distinguen, temporal y espacialmente, al enclave internacional con relación a sus formas precedentes (economía de enclave y enclave regional), implican referir a las estrategias de expansión de las empresas en el marco de la internacionalización del capital, en términos de los condicionamientos de la nueva división internacional del trabajo y de la producción flexible y automatizada (Fröbel, Heinrichs Y Kreye. 1977). La internacionalización del capital. Entre los márgenes de la crisis global del capital, las grandes empresas de los países industrializados buscaron nuevos emplazamientos a través de la transferencia de capitales (productivos, comerciales y financieros), orientados a las áreas de menor desarrollo económico y donde podrían realizar ganancias extraordinarias validadas por el mercado internacional. Se gestó el fenómeno de la internacionalización del capital, con consecuencias de una mayor amplitud con respecto a los precedentes históricos de expansión o globalización generados por el propio régimen capitalista (el imperialismo como antecedente). A este proceso de internacionalización del capital se le caracterizó como la nueva división internacional del trabajo (Fröbel, Heinrichs y Kreye, 1977: 832-833). En esos términos, por internacionalización del capital aquí se refiere al conjunto de transformaciones en las condiciones de la acumulación (producción, distribución y consumo) a partir de los años setenta, activadas e impulsadas hegemónicamente por las corporaciones transnacionales. Los cambios recientes en la organización industrial se expresan por la expansión y penetración mundial del capital a través de las grandes empresas transnacionales, que se constituyen como el principal agente de la acumulación. Tanto en el ámbito nacional como local, la internacionalización del capital opera a través de sus diferentes formas (productiva, mercantil y dineraria) y mediante los mecanismos de concentración y centralización que son peculiares del régimen capitalista. Implica una variedad de cambios socioeconómicos -que trascienden en políticos y culturales-- dados por la expansión planetaria de las empresas transnacionales en el marco de diversas innovaciones en la automatización y flexibilización de los procesos de reproducción del capital. De modo simplificado podría afirmarse que la internacionalización del capital se entiende como una fase, subsiguiente a la del imperialismo, ante la dinámica específica y permanente de propagación mundial del capital. En esta fase, la expansión del capital se traslada también entre los países en desarrollo para la generación de bienes intermedios y de capital fijo y a fin de dirigirlos al mercado mundial; aunque de manera fragmentada por su localización en distintos lugares y parcializada en el ámbito del proceso de producción. En ese mismo sentido, el enclave internacional, para caracterizar a algunas áreas periféricas, es un nivel superior de la forma de las economías de enclave y 130 del enclave regional, y que hoy se expresa en función de un contexto temporal y espacial distinto y que es determinado por la lógica de lo que se caracteriza como internacionalización del capital. Hacia un enclave internacional. Los cambios registrados ante la reestructuración del capital en el nivel mundial ante las condiciones de apropiación y gestión del territorio, modificaron la situación temporal y espacial del enclave regional hacia un enclave internacional. Al menos y por ejemplo: la transferencia de la propiedad pública a manos privadas; los procesos de apertura comercial; el lugar que juegan los corporativos transnacionales en el flujo mundial de los capitales; el debilitamiento de la acción obrera como actor social y de su reducida presencia en el ámbito local, que modificarían las condiciones de integración socioeconómica. La formación social y territorial del enclave se modificó desde los años noventa en función de la acción neoliberal del Estado y de la presencia de empresas corporativas transnacionales y de gestión privada y centralizada, ajena a la vida local. Sin la capacidad de provocar una mayor integración regional/local, con efectos de desarticulación socioeconómica interna y de desigualdad y exclusión entre la población. Actualmente, la problemática del enclave ha de incorporar también a la acción de la internacionalización del capital. Se trata de asimilar los cambios que impone la realidad en términos de una nueva escala y temporalidad para el estudio de los fenómenos territoriales. En ese sentido, algunas de las características de la economía de enclave y del enclave regional podrían reproducirse en el marco de la internacionalización del capital. Más aún, cuando el enclave regional se reconstituye en ese nuevo contexto como enclave internacional. La formación social de enclave internacional puede caracterizarse a partir de las evidencias en la reorganización de las grandes empresas transnacionales establecidas en áreas periféricas. Ante los estímulos de la reestructuración mundial del capital las grandes empresas se fraccionaron en unidades pequeñas, autónomas e independientes, en sus formas de organización productiva y administrativa, buscando la descentralización, una mayor horizontalidad y movilidad de las plantas para adecuarse y ampliarse a las nuevas condiciones que impone el mercado. Por su acción territorial se modificaron los vínculos productivos y comerciales en función de diferentes estrategias de inversión y localización industrial implantadas por una nueva división internacional del trabajo. Ante los impulsos provocados por la internacionalización del capital, los cambios se manifestaron en diversas formas de integración de los grandes consorcios privados que operan desde la localidad, en la reasignación del 131 mercado, de las actividades productivas y en la posesión sobre las reservas de recursos naturales. La consecuencia es que en las zonas periféricas las formas de reorganización e integración industrial de las empresas centrales se arman hacia el nivel extralocal, a partir de los vínculos productivos, tecnológicos y comerciales, reestructurados frente a la fase de la internacionalización. Con base en la articulación a corporativos privados con perfil transnacional, ajenos a la localidad por su origen, con distinta trayectoria y posición competitiva, y que como agentes de la internacionalización desarrollan estrategias diferenciadas para expandirse en el mercado. Bajo esta lógica, en las zonas periféricas, la acción de las grandes empresas transnacionales en poco contribuye al desarrollo local. En el contexto de la internacionalización del capital, las grandes empresas operan principalmente en función de sus efectos extralocales; inclusive, con mínima vinculación con proveedores y clientes capaces de endogeneizar sus actividades. En efecto, en el lugar en que se instalan se generan condiciones de desarticulación socioeconómicas entre el centro productor y su entorno. Se estructuran mecanismos de extracción de recursos locales en beneficio de otras regiones. IV. El estudio de caso. A través de las expresiones particulares del enclave en el estudio de caso, habría que destacar algunas de las secuelas manifiestas en el nivel local y que implican las desigualdades en ámbitos periféricos donde la forma del enclave internacional se ha radicado. La formación social de enclave internacional en el área de estudio puede caracterizarse desde los años noventa, a partir de que las condiciones de reorganización de las principales empresas establecidas (Sicartsa, Mittal Steel –antes Imexsa--, APILAC), por sus vínculos productivos y comerciales fuera de la localidad y en función de las diferentes estrategias de integración al mercado mundial. Desde los años setenta en la costa michoacana, adyacente a la desembocadura del río Balsas, en el municipio Lázaro Cárdenas, México, ocurrieron profundos cambios socioeconómicos y poblacionales. Con la edificación de una vasta infraestructura urbana e industrial basada en la producción metalmecánica, en la petroquímica y en la actividad portuaria, a partir del primer tercio de los setenta –en una zona de fuerte aislamiento nacional-- se pretendió establecer un área de atracción económica y social que provocaría el crecimiento poblacional y su desarrollo a través de la inversión pública. Con la implantación de grandes empresas paraestatales se buscó satisfacer la demanda del mercado nacional y generar productos de exportación, se propuso la constitución de un polo de desarrollo. 132 Ante la recurrencia de la crisis y como consecuencias de los cambios en la política regional para Ciudad Lázaro Cárdenas y su entorno, la política neoliberal desde el segundo lustro de los ochenta aplicó la reconversión industrial del sector paraestatal y la asimilación de la economía nacional al mercado mundial. La reestructuración industrial se instrumentó en el marco de lo que se denominó como redimensionamiento del sector paraestatal y la reconversión industrial. Por una parte, implicó un extenso proceso de liquidación, fusión, transferencia y venta de paraestatales, acompañado por despidos masivos y selectivos de personal; por otro lado, cambios en las relaciones laborales y una amplia reestructuración técnica de las plantas maduras y tradicionales (Altos Hornos de México, S.A. y SICARTSA). Desde la segunda mitad de los ochenta se desechó la voluntad política e institucional para impulsar una política regional con alcance territorial. Al finalizar la década ochenta y durante los noventa, la prioridad estratégica hacia las plantas industriales paraestatales y la actividad portuaria fue la fragmentación, privatización y su incorporación al mercado mundial. En la década noventa SICARTSA (la paraestatal) se fraccionó en cuatro empresas y se privatizaron a favor del Grupo Villacero, con arraigo nacional (en Monterrey) y bajo la misma denominación (Sicartsa) y buscó ampliarse hacia el mercado mundial; así mismo por el conglomerado mundial Ispat Internacional (Ispat Mexicana, hoy denominada Mittal Steel asociada con Arcelor), con amplia presencia en los cinco continentes del globo. Como tercer componente se constituyó la Administración Portuaria Integral (APILAC) que tiende a ocupar una mayor preponderancia para incorporar al lugar con el comercio internacional.32 El actual gobierno estatal ha intentado rescatar la propuesta de colocar a la Administración Portuaria Integral de Lázaro Cárdenas (APILAC) como el principal agente gestor y articulador de los espacios del complejo, con el atractivo para la inversión extranjera y promover al puerto para su integración al comercio mundial en la zona del Pacífico. Se constituye como un área exclusiva para la producción y transferencia de mercancías, y con el fin de generar condiciones de localización industrial y de desconcentración económica. En su conjunto son empresas que, como entidades autónomas y más aún como filiales de un conglomerado, además de incidir en el mercado nacional, en ese sentido son empresas de control sobre el mercado en el país, también se preocupan por ocupar posiciones en el nivel mundial, independientemente del 32 Otras grandes empresas implantadas en los ochenta y privatizadas en los noventa, como Fertinal (Fertimex en la etapa paraestatal), NKS y PMT, han sucumbido ante la prolongada crisis y la resistencia laboral; actualmente están en receso y se encuentran en proceso de reventa entre consorcios privados. En el primer tercio de la primera década del presente siglo, se estímulo de manera importante la construcción de infraestructura para la atracción de las principales navieras que operan en el nivel mundial (Hutchison Port Holdings, Evergreen Marine, Container Lines, entre otras). Asimismo, a mediados de esta primera década el consorcio Villacero vendió a Mittal Steel las plantas constituidas bajo la denominación de Sicartsa. 133 arraigo nacional en la gestión centralizada del corporativo al que pertenecen. Inclusive, antes que asimilarse a las circunstancias de la economía local para impulsar su crecimiento se han articulado a estímulos extralocales. Todo ello les asigna un perfil transnacional. En ese sentido la peculiaridad que distingue al desarrollo del capital en la zona –y en esa medida de la situación de enclave--, es que por un lado son escasos los alcances de la concentración industrial; y, por otra parte, los efectos de la descentralización (estimulados por las privatizaciones) en poco refieren a las posibilidades de articulación con el resto de la economía local; y, más aún, se generan consecuencias de centralización de los capitales instalados pero armados a través de una lógica externa –más cercanos a la interferencia de la internacionalización del capital. Como complejo portuario, Sicartsa y Mittal Steel disponen de la infraestructura que las liga al tráfico de insumos y productos industriales en el ámbito nacional y exterior, en tal magnitud que determinan el volumen de carga portuaria. En ese sentido, se trata de un puerto principalmente industrial y que opera para los requerimientos de las grandes empresas instaladas en la zona. Visto así, su alcance se restringe a la actividad de las grandes empresas transnacionales. El puerto, como expresión del complejo industrial, propicia una plataforma mercantil para la vinculación de áreas productivas segmentadas y flexibles comercialmente, desde el ámbito nacional hacia los mercados de Norteamérica, Centroamérica y Asia. Como un sitio de enlace de las redes productivas y comerciales, construidas entre el ámbito exterior y con las zonas de mayor crecimiento industrial en la región centro de México. En esa medida, el puerto michoacano, más que un centro de atracción económica para la región, se consolida “desde la región” como un área para el eslabonamiento de diversos fragmentos de la producción nacional y mundial mediante el tráfico de mercancías. V. Conclusiones. Con base en las referencias del estudio de caso y ante el replanteamiento de la noción de encalve como enclave internacional, en términos generales, puede señalarse que en la zona de estudio, como área periférica, no se advierte una integración industrial mediante importantes enlaces productivos locales, tampoco se cuenta con la capacidad para provocar un desarrollo interno. Las transformaciones que se registran en Ciudad Lázaro Cárdenas, Michoacán, México, y su entorno, no dejan de ser análogas con la idea de la economía de encalve y del enclave regional; y se manifiestan en un contexto histórico y territorial diferente y específico, dado por la internacionalización del capital, por lo que adquiere un nuevo significado. 134 En ese sentido, podría afirmarse que en Ciudad Lázaro Cárdenas, Michoacán, México, opera un redimensionamiento de las condiciones de enclave; ahora asentadas en el predominio de la inversión privada y con la acción de la internacionalización del capital. Los cambios registrados en la década de los noventa ante las transformaciones en la apropiación y gestión del territorio, modificaron las características del enclave. En un sentido positivista, entre las alternativas, que podrían orientar a superar la situación del enclave en la zona, han de buscarse en la idea del desarrollo endógeno y en función de las diferentes condiciones de vida de los pobladores que ocupan la región. Principalmente implicaría una política regional, que es ausente, para incorporar las necesidades y condiciones de reproducción de la amplia extensión agropecuaria: en la planicie y, más aún, en el área serrana que ocupa una gran superficie con escasa capacidad de retención poblacional. Evitar el predominio de las políticas de crecimiento sectorial de tipo urbano, ya sean en la actividad industrial, el comercio y los servicios, como únicas o principales fuentes de vida, a través de la inversión y empleo. Dejar de asumir a la inversión externa (nacional e internacional) como elemento principal de las políticas de desarrollo. La inversión sectorial o de atracción externa, supone que el desarrollo está en función de extender el régimen del trabajo asalariado como condición de vida de los individuos; aunque se relega y margina la posibilidad de vida familiar y comunitaria de una amplia margen de la población rural. Por supuesto que la acción de las instituciones (organizaciones fincadas desde el Estado y los agrupamientos sociales), como intermediarias entre la participación social y las formas del poder, ha de involucrarse en el encuentro de nuevas formas de gestión pública del desarrollo regional y local. La descentralización en la toma de decisiones y en la disposición de los recursos por parte de los gobiernos locales, es también un factor central para promover el desarrollo regional/local. Estos, entre otros aspectos del desarrollo, aparecen ausentes en las acciones del gobierno estatal y municipal en Lázaro Cárdenas, Michoacán. La erección de un puerto articulado a la región del Pacífico, inclusive mediante la inversión extranjera, como se propone el gobierno estatal a través de un “plan de negocios” que lo promueva en el ámbito internacional, resultará insuficiente para estimular el desarrollo regional y local. Más aún, si no se involucra la situación de vida e intereses de la amplia superficie rural, aunque despoblada. Todavía en la actualidad, los alcances de la difusión industrial y comercial de la infraestructura edificada en la zona se amplían de modo positivo hacia otras regiones del mercado nacional y se vuelven ajenas a la localidad en que se originan; y más aún, las secuelas negativas (por ejemplo, el crecimiento 135 fragmentado, disminuido y concentrado de la población; el reducido incremento del empleo industrial ante el crecimiento de la actividad terciaria; el conflicto entre el dominio urbano frente a la vida rural) se extienden en el ámbito local. En términos generales, a través de evidencias recogidas en la zona de estudio, no se advierte una integración industrial mediante importantes enlaces productivos locales, tampoco se cuenta con la capacidad para provocar un desarrollo interno; a pesar del contenido voluntarista de los planes y proyectos de desarrollo que se han propuesto para la zona. Por el contrario, se recrea la situación de un enclave internacional con fuertes dependencias y determinaciones extralocales. Los distintos fragmentos de la economía local y las formas desarticuladas de organización poblacional son determinados en función de circunstancias exógenas. Los factores catalizadores se ubican fuera de la zona, entre los centros de decisión nacional o mundial, cuyos principales agentes –en el contexto de la internacionalización-- son las transnacionales y el Estado. Bibliografía. BOISER, S. 1975. “Industrialización, urbanización y polarización. Hacia un enfoque unificado”. Desarrollo urbano y regional en América Latina, problemas y políticas. Selección de L. Unikel y A. Necochea. El Trimestre Económico, núm 15. Eds. Fondo de Cultura Económica. México. pp. 237-277. CARDOSO, F. y FALETTO, E. 1969. Dependencia y Desarrollo en América Latina. Eds. Siglo XXI. México, 1978. CORAGGIO, J. 1975. “Hacia una revisión de la teoría de los polos de desarrollo”. 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México. 137 Desarrollo e Instituciones Precarias: la Argentina de los ‘90 Silvia London – [email protected] María Emma Santos [email protected] Universidad Nacional del Sur CONICET Clasificación J.E.L.: O1 Resumen En este trabajo se presentan sintéticamente los principales desarrollos teóricos de la Nueva Economía Institucional, con el propósito de analizar lo ocurrido en Argentina durante la década de los 90 como una situación de desequilibrio institucional, seguida de una demanda por un cambio institucional. La satisfacción de esta demanda se canalizó en parte por el surgimiento de instituciones informales de manera espontánea y en parte por el propio Estado que suplió las falencias con instituciones que, aunque son legales, no dejan de ser tan precarias como las informales. Este nuevo tipo de instituciones surgen, en principio, como consecuencia del subdesarrollo y que 138 no parecen poder contribuir a revertirlo, si bien en una primera instancia aparentaron ser la fuente de un cambio institucional profundo. Casi una década más tarde estos pequeños cambios no modificaron la estructura institucional formal, desapareciendo la mayoría de ellos y volviéndose a instaurar las antiguas instituciones en la mayoría de los casos. Palabras Clave: Análisis Institucional – Cambio Institucional Instituciones precarias – Desarrollo 139 Introducción Algunos años después del profundo cambio institucional que significó la implementación del Plan de Convertibilidad, la Argentina evidenció un fuerte empobrecimiento por ingresos como consecuencia del mal funcionamiento del mercado laboral., que motivó una demanda de cambio institucional que favoreciera la generación de empleo. Ante la incapacidad del Estado de satisfacer la demanda en términos formales fueron surgiendo organizaciones e instituciones precarias, algunas de modo espontáneo desde la sociedad y otras impulsadas desde el propio Estado, todas tendientes a suplir la falta de ingresos genuinos de las personas. Algo precario es definido como “de poca estabilidad o duración, que se tiene sin título, por tolerancia o inadvertencia del dueño”. Es sinónimo de inestable, incierto, inseguro, transitorio. Esta caracterización conceptual es aplicable a las instituciones de las que haremos mención: clubes del trueque, ventas ambulantes, casas usurpadas, programas de microcrédito, cuasimonedas, planes sociales, etc. Muchas de estas instituciones u organizaciones son informales, en el sentido de que no están inscritas dentro de los cánones convencionales del Derecho y están desprovistas de los mecanismos de coerción inherentes al Estado. Por otro lado, algunas son además ilegales, como las casas usurpadas. Otras no pueden ser calificadas de informales porque son impulsadas y legitimadas por el Estado, pero inspiran poca confianza, y en este sentido son precarias. 140 El objetivo del presente trabajo es analizar esta nueva generación de instituciones en Argentina desde las herramientas que ofrece la Nueva Economía Institucional (NEI), sugiriendo posibles causas y consecuencias de las mismas para el desarrollo económico de nuestro país. Para ello, en la segunda sección se presentan sintéticamente los conceptos básicos de la NEI necesarios para el desarrollo de la tercera sección, en la que se analiza la precarización institucional ocurrida en la Argentina. En la cuarta se establecen vínculos entre precarización institucional y desarrollo económico en Argentina y finalmente, en la quinta sección, se presentan las conclusiones del trabajo. Conceptos básicos de la NEI En esta sección se presentan los conceptos fundamentales de la NEI tomando principalmente el enfoque de North (1990) y complementándolas con las ideas de otros autores. Concepto de instituciones y organizaciones Las instituciones son las reglas de juego en una sociedad, las limitaciones ideadas por el hombre que dan forma a la interacción humana. Por lo tanto, estructuran incentivos en el intercambio humano, sea político, social o económico, y definen y limitan el conjunto de elecciones que están al alcance de los individuos. Surgen para reducir la incertidumbre de los agentes, quienes cuentan con plena información, y proporcionan una estructura a la vida diaria y proveen una guía para la interacción. 141 Existen instituciones formales (normas, leyes, contratos y mercados) e informales (acuerdos y códigos de conducta delineados por las costumbres, la tradición o la religión) que pueden ser creadas, como lo son las constituciones de las Estados, o evolucionadas, como evoluciona el derecho consuetudinario. A su vez pueden distinguirse dos grandes ámbitos de las instituciones que interactúan y se complementan entre sí: las instituciones políticas y las instituciones económicas. Las primeras definen la estructura jerárquica del gobierno, su estructura de decisión y las características del control de agenda. Permiten que el Estado funcione como una unidad básica de toma de decisiones políticas y económicas, y definen y limitan a las reglas económicas. Las segundas definen derechos de propiedad. Según Hernando De Soto (1987) los derechos de propiedad son más que derechos reales, es decir, derechos sobre las cosas (en contraposición a los derechos personales referidos a relaciones con otras personas a través de los contratos), ya que los individuos no sólo pueden ser poseedores de cosas sino también de sus contratos. De manera que desde esta conceptualización, son derechos de propiedad todos aquellos, tanto personales como reales, que reconocen a sus titulares la enajenabilidad y la exclusividad sobre los mismos. Existe una estrecha relación entre las normas políticas y las económicas. Las reglas económicas y los contratos individuales están especificados y se hacen cumplir por medio de la toma de decisiones políticas, pero a su vez la estructura de los intereses económicos también tendrá su influencia en la estructura política. 142 Así como se ha distinguido entre instituciones políticas y económicas, es necesario diferenciar el concepto de instituciones respecto del de organizaciones u organismos (North :1990). Al igual que las instituciones, las organizaciones proporcionan una estructura a la interacción humana. Se trata de individuos enlazados por alguna identidad común hacia ciertos objetivos, como por ejemplo cuerpos políticos (partidos políticos, el Congreso, una agencia reguladora), cuerpos económicos (empresas, sindicatos, cooperativas), cuerpos sociales (iglesias, clubes) y órganos educativos (escuelas, universidades). Las organizaciones que surjan y la forma en que éstas evolucionen está determinado por el marco institucional. Los organismos se crean con un propósito deliberado como consecuencia de la oportunidad ofrecida por las instituciones, y en el curso por lograr sus objetivos van evolucionando, alterando así las instituciones y constituyéndose en la fuente principal de cambio institucional. Es la interacción entre organizaciones e instituciones lo que determina la dirección del cambio institucional. Así, las instituciones son órdenes abstractos independientes de los individuos que las componen que cumplen la función de facilitar a los individuos y a las organizaciones la consecución de sus fines particulares, pero que en sí mismas no tienen fines específicos. Las organizaciones, en cambio, son órdenes concretos determinados por los individuos y los recursos que los integran, creados para la consecución de fines particulares. Instituciones y organizaciones conforman el sistema total de constricciones e incentivos de una determinada sociedad. En consecuencia de ellas depende el nivel de desarrollo económico. 143 Lin y Nungent (1995) distinguen entre arreglos institucionales y estructura institucional. El primero es un conjunto de reglas de comportamiento que gobiernan en un dominio específico. En cambio, la estructura institucional es la totalidad de los arreglos institucionales en un sistema, incluyendo las organizaciones, leyes, costumbres e ideología. Instituciones y Costos de Transacción Se dice que las instituciones y las organizaciones inciden en el nivel de desarrollo económico porque afectan los costos de transacción y los costos de transformación, determinando en gran medida la estructura productiva de un país. El concepto de costos de transacción fue introducido por Coase (1937) están relacionados con la dificultad de verificar todas las acciones de las partes involucradas en una transacción, lo cual está dado en gran medida por la existencia de asimetrías de información y por la imposibilidad de escribir contratos completos33. No sólo hay costos de transacción entre agentes económicos sino también entre agentes económicos y políticos, y actores políticos. Dixit (1996) analiza como principales fuentes de costos de transacción políticos el no impacto de la información, el oportunismo y la especificidad de los activos. Señala además que los costos de transacción en la política suelen ser mayores que en el ámbito económico debido a que los contratos son menos completos, 33 Contratos completos son aquellos que especifican con absoluto detalle todas las acciones que las partes contratantes deben realizar desde la firma del contrato en adelante, para cualquier evento futuro posible. 144 los mecanismos de enforcement más débiles (o directamente inexistentes) y las estructuras de gobierno más complejas que las relaciones entre agentes económicos. Asimismo, North señala que los costos de transacción son más altos en política que en economía precisamente por un efecto de selección por el cual los problemas más complejos de la sociedad, que no pueden resolverse vía negociaciones entre individuos, son “transferidos” a la arena política. Las instituciones tienen un efecto crucial sobre los costos de transacción: dependiendo de su diseño pueden contribuir a reducir los costos de transacción, permitiendo que se efectúen transacciones que, de no existir estas instituciones, no se hubieran llevado a cabo. Por otra parte, los costos de transformación son los costos de transformar factores de producción como tierra, trabajo y capital y conseguir la producción de bienes y servicios. Esa transformación no sólo es función de la tecnología empleada sino también de las instituciones. Cuando un sistema institucional define y garantiza pobremente los derechos de propiedad, la inseguridad resultante se traduce tanto en mayores costos de transacción como en la utilización de tecnologías que incorporen poco capital fijo y no impliquen acuerdos de largo plazo. Instituciones y desarrollo económico Así llegamos a la vinculación entre instituciones y desarrollo económico. North explica que las instituciones necesarias para realizar el intercambio económico varían en cuanto a su complejidad desde aquellas que resuelven problemas de intercambio simple hasta las que se extienden a través 145 del espacio y del tiempo a muchos individuos. El grado de complejidad del intercambio económico es una función del nivel de contratos necesario para realizar el intercambio en economías de varios grados de especialización. La no-especialización es una forma de seguro en que los costos y las incertidumbres de las transacciones son muy elevados. A mayor especialización, número y variabilidad de los atributos valiosos, mayor será el peso que deberá ponerse en instituciones confiables que permitan a los individuos participar en contrataciones complejas con un mínimo de incertidumbre en cuanto a que los términos del contrato se puedan realizar. El intercambio en las economías modernas compuestas de muchos atributos variables que abarcan largos períodos requiere confiabilidad institucional. Cuando el sistema de medición y garantía de los términos de un intercambio es deficiente, la parte que asume el riesgo aplicará una mayor tasa de descuento que reducirá el valor del bien comprado. Así, el grado de incertidumbre respecto a la seguridad de los derechos constituye una distinción crítica entre los mercados relativamente eficientes de los países avanzados y los mercados limitados del pasado o de los actuales países en desarrollo. Por otra parte, la estructura institucional determinará la cantidad, tipo y forma de los conocimientos y habilidades disponibles en una sociedad. Las clases de conocimiento, destreza y aprendizaje que requerirán los miembros de una organización para maximizar sus funciones de utilidad, dependerán en buena parte del contexto institucional. En esta dirección Olson (2000) considera que si bien los mercados son una fuente indiscutible de prosperidad, no todos los tipos de mercados 146 necesarios para lograr la prosperidad pueden alcanzarse espontáneamente. Reconoce allí, la importancia de las instituciones. Olson distingue dos grandes tipos de mercados. Unos llamados de autoejecución o autoaplicación, que emergen regularmente tengan o no algo en común quienes participan en ellos. Algunos de estos mercados son literalmente irreprimibles y surgen cuando los beneficios del intercambio son muy significativos y cuando hay pocas posibilidades de conducta oportunista. Por contraste, los mercados socialmente creados emergen sólo cuando una sociedad posee ciertas disposiciones institucionales, características de los países más ricos del mundo. Para Olson la causa de la pobreza de muchos países está en que no pueden materializar beneficios que sólo pueden lograrse en mercados creados por el gobierno, y tampoco pueden gozar de los beneficios de la producción individual derecho-intensiva. Sin el entorno institucional adecuado un país se verá limitado a los intercambios autoejecutados. En esta misma línea de pensamiento está Hernando De Soto (1987), para quien el Derecho es el factor fundamental condicionante del desarrollo. Según él, para lograr la prosperidad de una nación, es necesario que el Estado provea “buenas leyes”, las cuales contienen dos características. Primero, proporcionan los incentivos que permitan aprovechar las oportunidades económicas y sociales que el país ofrece. Mientras más seguras sean las transacciones y más seguro sea el derecho de gozar de los frutos de la inversión, mayor será el valor real de una actividad económica. 147 En segundo lugar, una buena ley favorece la especialización y la interdependencia de hombres y recursos. Es un axioma comprobado (desde los tiempos de Adam Smith) que la especialización permite alcanzar un nivel más alto de bienestar. Pero para que los miembros y los recursos de una sociedad puedan especializarse, quienes poseen los recursos necesitan asegurarse de que podrán intercambiarlos. Esto sólo se producirá si es que cada uno está seguro de que lo que recibirá a cambio de su recurso o producto le reportará un beneficio mayor al que él mismo habría podido conseguir. El aislamiento y la desconfianza no permiten la especialización porque, por definición, una persona especializada necesita de otros para satisfacer sus requerimientos. El Derecho permite la especialización porque hace exigibles los derechos de propiedad (mecanismos de enforcement), da confiabilidad a los contratos que permiten organizarlos y transferirlos y, por fin, atribuye responsabilidades por los actos de las personas que no han sido establecidas por contratos. A su vez, dentro del Derecho, De Soto distingue tres instrumentos que hacen más eficientes las actividades económicas y sociales: los derechos de propiedad, los contratos y el derecho extracontractual. La importancia económica de los derechos de propiedad radica en que éstos proporcionan incentivos para agregar valor a los recursos invirtiendo, innovando o combinándolos productivamente para la prosperidad y el progreso de toda la comunidad. Cuando los derechos de propiedad están bien definidos y hay garantías de que serán preservados, las personas invierten. De Soto 148 interpreta la usurpación de terrenos fiscales para viviendas, de calles para comercio ambulante y de rutas para transporte informal, como los medios espontáneos empleados por los informales para crear derechos extralegales de propiedad en vista de la falta de buena ley. Por su parte, la confianza que brinda la posibilidad de celebrar contratos permite que las personas estén dispuestas a tomar más riesgos. Por lo tanto, los contratos son un requisito esencial para la inversión a largo plazo. Al igual que Dixit (1996), De Soto reconoce también la importancia del enforcement del contrato, es decir, un mecanismo de coacción para asegurar su continuidad (coacción que, según Dixit, es más sencilla de producirse en economía que en política). La relevancia histórica de los contratos fue señalada por North y Thomas (1980)34 quienes marcan que el surgimiento industrial en Europa fue posible gracias a que los Estados mejoraron sustancialmente el cumplimiento de los contratos y redujeron de manera notable sus costos privados de ejecución. Finalmente, la responsabilidad extracontractual es el tercer pilar de toda buena ley ya que es la que protege bienes jurídicos sin importar que éstos no estén incorporados en los contratos. Este derecho garantiza que los daños producidos por determinadas actividades sean asumidos por los responsables y no por terceros. Lo que se logra con el derecho de propiedad, los contratos y la responsabilidad extracontractual es reducir la incertidumbre de las personas que desean invertir su trabajo o capital para desarrollar los recursos existentes. 34 Citado en De Soto (1987). 149 En todo lo dicho hasta aquí pareciera que la causalidad de la relación es desde instituciones hacia desarrollo económico. Sin embargo Lin y Nungent (1995) consideran que la relación entre instituciones y desarrollo económico es claramente en dos sentidos. Por un lado, las instituciones pueden influenciar tanto el nivel como el sendero del desarrollo económico; por otro lado, el desarrollo económico puede, y frecuentemente lo hace, disparar el cambio institucional. El caso de Argentina ejemplifica muy bien esta doble relación. Cambio institucional Concepto y fuentes del cambio El cambio institucional consiste en cambios en el conjunto de reglas, normas y cumplimiento obligatorio que constituyen el marco institucional. Por lo general ese cambio es de tipo incremental y no discontinuo (London:2007). Esto se debe a que, si bien las normas formales pueden cambiar de la noche a la mañana como resultado de decisiones políticas o judiciales, las limitaciones informales encajadas en costumbres, tradiciones y códigos de conducta son mucho más resistentes a las políticas deliberadas. La interacción entre instituciones y organismos determina la dirección del cambio institucional. Las instituciones, junto con las limitaciones ordinarias de la teoría económica, proveen las oportunidades que hay en una sociedad. Las organizaciones son creadas para aprovechar esas oportunidades y al evolucionar alteran las instituciones. Los actores de cambio institucional son los empresarios individuales o los dirigentes de las organizaciones o movimientos 150 sociales, políticos, económicos o militares. Todos ellos son vistos como maximizadores de utilidad, sea propia o de sus organizaciones. Según North (1990) la fuente más importante de cambio institucional son los cambios en los precios relativos que alteran los incentivos de los individuos en la interacción humana. Algunos de estos cambios pueden ser exógenos, pero la mayoría son endógenos, reflejando los esfuerzos de maximización de los empresarios (políticos, económicos y militares) que alteran precios relativos y que por consiguiente inducen al cambio institucional. A su vez, para que se produzca un cambio institucional es necesario que se trate de un cambio de precios relativos de tipo permanente. Otra posible fuente de cambio institucional es la variación de las preferencias. El proceso de cambio institucional se origina por un cambio en los precios relativos que induce a una o ambas partes a un cambio en los términos de un acuerdo o contrato (sea político o económico) ya que perciben que con el cambio podrían capturar mayores beneficios. Pero dado que los contratos están insertos en una jerarquía de normas, la renegociación no será posible sin una reestructuración de un conjunto de reglas de orden superior (o violando alguna norma de conducta). En ese caso, la parte que intenta mejorar su posición negociadora tendrá que invertir recursos en reestructurar las normas en un nivel más adecuado (London:2007). Los empresarios y sus organizaciones responderán a las relaciones cambiantes de precios estimando los costos y beneficios de dedicar recursos a alterar las normas o hacerlas cumplir. Así, la demanda de cambio institucional es consecuencia de la percepción de que los nuevos arreglos institucionales 151 permitirían capturar ganancias que no son posibles en el marco institucional vigente. Pero la oferta de cambio institucional depende de la capacidad y de la voluntad del orden político vigente para proveer nuevos arreglos institucionales. Ese orden político vigente puede ser caracterizado como un mercado político cuya eficiencia depende de la cantidad y calidad de los intercambios que permite. En términos de Olson, la eficiencia del mercado político y la posibilidad de crear prosperidad dependerá del grado de inclusividad de los intereses de los gobernantes y del alcance del horizonte temporal. Lin y Nungent (1995) consideran que el enfoque de costos de transacción ha probado ser muy útil para analizar la demanda comparativa de arreglos institucionales alternativos. En cambio, el enfoque de acción colectiva, con su énfasis en los problemas de free-rider (los cuales son consecuencia de los costos de transacción) ha sido especialmente útil para analizar la oferta de acuerdos institucionales alternativos. De esta forma, consideran que cuando existe un desequilibrio institucional surgirán oportunidades ventajosas para nuevos arreglos institucionales. Sin embargo, debido a los costos de información y transacción, no hay garantía de que un desequilibrio institucional conlleve un cambio inmediato hacia una nueva estructura de equilibrio. Cuándo, bajo qué condiciones y hasta qué punto ocurra tal cambio institucional es lo que aborda la teoría de la acción colectiva. Numerosos factores inciden en el movimiento hacia un nuevo equilibrio. Entre otros, se encuentran los costos de información y transacción de 152 identificar, diseñar e implementar el nuevo arreglo institucional. Además, el cambio institucional está condicionado por la estructura existente y es path dependence (sendero dependiente, North:1990). Consecuentemente, algunos arreglos pueden no ser viables por ser incompatibles con otros existentes en la estructura. En la medida en que el innovador pueda apropiarse de los beneficios que surgen de ellas, es más probable que sean llevadas a cabo. Olson (1965, 1982) y sus seguidores han identificado las características que debe tener un grupo para que logre éxito en la acción colectiva: pequeño tamaño del grupo, homogeneidad de origen de sus miembros, cercanía social y proximidad física de sus miembros, sensibilidad del grupo a la amenaza de pérdida debido a la inacción, desigualdad en la distribución de la riqueza o el poder entre sus miembros, y horizonte de interacción largo. Por su parte Hardin (1982) señaló que en ciertos casos los obstáculos para la acción colectiva pueden ser superados por la presencia de “empresarios políticos”: personas que por sus propias razones de carrera encuentran en su interés privado trabajar para proveer beneficios colectivos a grupos relevantes. Precarización institucional en Argentina En esta sección aplicaremos los instrumentos de análisis presentados anteriormente para reflexionar sobre la precarización institucional ocurrida en la Argentina en la década de los ´90, luego de la implementación del Plan de Convertibilidad, el cual de distinguió de los anteriores planes en que no fue un 153 mero plan de estabilización sino uno de reforma estructural, con objetivos de largo plazo. Se intentaba no sólo la eliminación de la inflación sino también crear las condiciones para alcanzar la senda del crecimiento económico. El plan tuvo tres pilares: la Ley de Convertibilidad, que imponía un sistema de tipo de cambio fijo más una serie de medidas orientadas a combatir la inflación, la Reforma del Mercado, dada por una amplia apertura comercial y financiera junto con la flexibilización laboral y liberación de otros mercados de fijaciones de precios por parte del Estado, como el de productos agrícolas y ganaderos, y la Reforma del Estado que consistió fundamentalmente en la privatización de la mayoría de las empresas públicas, la descentralización del gasto (salud y educación, sobre todo) y en el paso a un sistema de jubilaciones de capitalización privado. Con este plan se logró detener la acción de muchos grupos de presión que se habían enquistado en el aparato estatal y que contribuían significativamente a la puja distributiva que muchos autores consideran una de las principales causas de inflación durante los 80. La Ley de Convertibilidad junto con la competencia que significaba la apertura a la importación, eliminó las expectativas inflacionarias y devaluatorias. En los primeros años del plan, los indicadores macroeconómicos dieron buenos signos: significativa reducción de la inflación, altas tasas de crecimiento ininterrumpido, reducción del desempleo hasta el 92 ¿año?¿porcentaje? unidades?, cierre de las cuentas fiscales, incremento en las exportaciones y dinamización de la inversión extranjera directa. Sin embargo, la repercusión de la crisis mexicana de 1994, si bien pudo superarse en un período relativamente breve puso al descubierto las 154 deficiencias intrínsecas del modelo de la convertibilidad, en particular el hecho de estar el crecimiento basado en el consumo interno como factor dinámico, financiado principalmente por ahorro externo. El comportamiento de la economía superado el efecto Tequila ya no fue tan favorable. Si bien se retomó el crecimiento, éste disminuyó en el 98 por la repercusión que tuvo la crisis financiera originada en los países asiáticos sobre nuestro socio comercial, Brasil, y se hizo negativo a partir del 99. A partir de entonces, y no obstante el cambio de gobierno, la economía Argentina volvió a sumergirse en una recesión que se fue agravando cada vez más. El saldo social de la década fue altamente desfavorable. Continuó acentuándose la desigualdad en la distribución del ingreso. En su aspecto funcional la participación de los asalariados en el producto total de la economía continuó la caída que había iniciado durante el gobierno anterior: del 37% en 1980 pasó al 26% en 199835. En la distribución personal, los estratos altos incrementaron su participación en deterioro de los estratos bajos. Este incremento en la desigualdad estuvo básicamente determinado por los cambios en el mercado laboral. Pasado el impacto inicial favorable que tuvo el logro de estabilidad sobre el empleo, la desocupación alcanzó los dos dígitos a partir del 93, y continuó incrementándose llegando a un pico en 1995. Aunque luego disminuyó continuó en niveles muy elevados, cercanos al 20% promedio. A su vez, la reducción del desempleo posterior al 95 se conjugó con un incremento del subempleo, es decir, personas que deseaban trabajar más horas de las que lo 35 Diario Clarín, 21 de Junio de 1998. Citado en Teubal (1999). 155 hacían o estaban ocupadas en un puesto de un nivel de calificación menor al que les correspondía. Los salarios reales, luego de la brutal caída durante del 89, bajaron un nuevo escalón a comienzos de 1990 para mantenerse en los años siguientes mientras se produjo una amplia dispersión salarial. La crisis en el mercado laboral produjo un empobrecimiento por ingresos que significó un cambio en los precios relativos endógenamente generado: los bienes de consumo se encarecieron profundamente con relación al salario. Este panorama fue asociado a un desequilibrio institucional, una situación en la que “una o ambas partes perciben que podrían capturar mayores beneficios cambiando los términos del acuerdo o contrato”. Desde los sectores empobrecidos comenzaron a aparecer, a mediados de la década de los 90, fuertes protestas y reclamos sociales, los cuales podrían interpretarse como una demanda de cambio en las instituciones formales fundamentalmente dirigidas a la generación de empleo o al menos a la generación de redes de contención social que suplieran la falta de empleo. Pero el gobierno dio respuestas formales muy débiles tanto en términos de empleo como de redes de contención. De acuerdo con Lin y Nungent (1995) podría argumentarse que los costos de información y transacción de identificar, diseñar e implementar el nuevo arreglo institucional impidieron el movimiento hacia instituciones eficientes en el mercado laboral. A la vez la inmovilidad se vio agravada por las diferentes percepciones de los grados y causas del desequilibrio; la clase dirigente no percibía el problema laboral con la misma gravedad que lo hacían quienes padecían la desocupación. Así, se fueron gestando los incentivos propicios para que prevalecieran organizaciones 156 informales la falta de oferta de cambio institucional formal, hecho que puede entenderse desde la teoría de la acción colectiva de Olson, por medio de los conceptos de grupos de interés y de intereses inclusivos vs. intereses restringidos. Por parte del Estado, de haber existido un interés inclusivo hubiera provisto el cambio institucional requerido por gran parte de la sociedad en términos de generación de empleo, ya que el mismo hubiese incrementado la productividad y el ingreso permitiendo recaudar más y obtener mayores ingresos del mercado. La falta de interés inclusivo puede atribuirse a la presencia de grupos de interés que dominaban las acciones del gobierno. Por su parte, Spiller y Tommasi (2000) señalan que cuando la capacidad de los actores políticos de realizar transacciones (acuerdos) intertemporales es limitada cuando hay altos costos de transacción, rasgo presente en el caso de Argentina, se observarán: 1) políticas públicas demasiado volátiles ante cambios políticos y/o demasiado rígidas como para ajustar ante cambios en las realidades subyacentes, 2) acciones individuales no cooperativas y 3) falta de inversión en instituciones más eficientes. En efecto, con el propósito de detener la inflación y proporcionar un horizonte de largo plazo para el accionar económico, se asumió un compromiso (la Ley de Convertibilidad) tal que no dejó margen para ajustarse ante un cambio en la realidad subyacente. Esto corrobora lo explicado por Dixit (1996) respecto del trade-off entre los beneficios de un compromiso (como modo de lidiar con los costos de transacción) y los costos en términos de pérdida de flexibilidad. Lo que el Estado no pudo ofrecer de manera formal fue generado, de modo informal, por agentes económicos que crearon organizaciones que 157 lograran la acción colectiva en favor de sus intereses, produciéndose una precarización institucional: un avance de instituciones informales (algunas legales y otras no) por sobre las formales. Son instituciones precarias en el sentido que son instituciones transitorias que suplen de modo imperfecto los espacios vacíos dejados por el mal funcionamiento de las instituciones formales. Muchas de ellas fueron gestadas de modo espontáneo por los propios individuos y otras fueron impulsadas desde el propio Estado, como forma de dar respuesta débil e ineficiente a los requerimientos de cambio institucional. A continuación analizaremos algunos casos. Instituciones precarias generadas por la sociedad La producción y el intercambio informal Un ejemplo paradigmático de organización informal fue la formación de los Clubes del Trueque. El primer club se creó en el 95 en la localidad de Bernal. En dos años, los clubes estaban diseminados en muchas provincias del país, y a los cinco años estaban presentes en 14 provincias. Se conformaron dos redes principales: la Red Global del Trueque y la Red del Oeste36. En Julio de 2002, entre 2,5 y 3 millones de personas participaban activamente en el sistema y, si se suma el entorno familiar este numero se estima entre 10 y 12 millones37. Los organizadores indican que las redes no son organizaciones no gubernamentales ni una fundación, por eso no tienen personería jurídica ni una estructura formal. Se definen a sí mismos como “una gran empresa virtual en la 36 37 Nos referiremos en términos generales a la Red del Trueque. Fuente: Diario Clarín, 10/07/02, disponible en www.prosumidoresprensa.com.ar 158 que cada grupo tiene independencia para organizarse como quiera. Únicamente hay un consejo asesor que brinda las pautas centrales”38. En los clubes del trueque se intercambian bienes y servicios de todo tipo, y están compuestos por “prosumidores”: productores y consumidores a la vez. Surgen como una alternativa concreta de sustento para muchas personas que se habían quedado sin percepción de medios de pago. Fueron organizaciones en el sentidos señalado por North (1990), y respondieron, al menos en sus orígenes, a las características establecidas por Olson para el logro de la acción colectiva. En este caso el bien común a lograr es el espacio de intercambio. Los grupos no eran demasiado grandes al principio, tenían cierta identidad común (personas de clase media recientemente empobrecidas por ingresos) lo cual les proporcionaba homogeneidad. A la vez, lo que perdían por la inacción tenía un alto costo para ellos (no poseer medios de cambio para poder abastecerse de elementos esenciales), y el horizonte de interacción era de largo plazo por lo que la conducta oportunista estaba, en cierto modo, desalentada. Por último, podemos asociar a los organizadores de los clubes con los “empresarios políticos” de Hardin (1982) cuyo interés privado los lleva a trabajar para proveer intereses colectivos. Ahora bien, la necesidad de existencia de estos clubes es un signo claro de subdesarrollo: el trueque fue la primer forma de intercambio. Este hecho muestra la precariedad de esta institución, que puede interpretarse como un mercado “autoejecutable” (Olson:2000). La informalidad de estos los clubes hace que no puedan gozar de todas las ventajas que provee funcionar al amparo 38 www.tercersector.org.ar/revista/12/trueque.htm 159 del Derecho. Se crean así sistemas de normas consuetudinarias para ordenar las actividades, sustitutos ingeniosos, pero que no funcionan tan bien como podría hacerlo un Derecho estatal eficiente. Como explica Hernando De Soto, hay costos por operar en la informalidad: se deben buscar mecanismos para tratar de minimizar el oportunismo, no es posible constituir empresas de gran escala, y se recurre a mecanismos de presión alternativos que sustituyen a la coerción legal. En la actualidad la Red del Trueque está prácticamente extinguida. En el año 2004 sólo participaban 80,000 socios y de los 6,200 nodos que hubo en funcionamiento en los mejores momentos (fines de 2001 y mediados de 2002) sólo quedaban 100039 en dicho periodo. Precisamente, esta decadencia del sistema se produjo como consecuencia de un quiebre en la confianza al registrase numerosos casos de violación a las normas de la Red del Trueque, como impresión de créditos falsos y venta de créditos40. La vivienda informal El empobrecimiento por ingresos también llevó a muchas personas a la incapacidad para proveerse una vivienda, intensificándose el fenómeno de usurpación de inmuebles para vivir en ellos. Si bien no hay estadísticas oficiales sobre este tema, estudios realizados por la Universidad de Buenos Aires41 consideran como inicio de este proceso los años 1982/1983. 39 Sainz, Alfredo, “La híper le ganó la pulseada al trueque”, Diario La Nación 17/08/03. Fuente: Diario Clarín 10/07/02. Disponible en www.prosumidoresprensa.com.ar 41 Fuente: Urien Aldao, Paula, “Casas Tomadas”, Revista La Nación, 22/02/98. 40 160 Según la distinción de North entre instituciones y organizaciones, puede decirse que la vivienda en inmuebles usurpados es una institución informal (supone normas, acuerdos, contratos y derechos extralegales), y además, en este caso, es ilegal. A la vez, para lograr y mantener la usurpación se generan organizaciones informales. El estudio citado, indica que en 1998, alrededor de 150,000 personas de la Capital Federal conformaban parte de la población en riesgo que no tiene vivienda propia ni puede pagar un alquiler. Con el deterioro económico posterior al 98, no es descabellado suponer que esta cantidad aumentó, y que proporcionalmente debe ser mucho mayor en las localidades de las provincias pobres del noreste y noroeste. Este mismo estudio señalaba que en ese año, 55,000 familias ocupaban de manera ilegal 10,000 inmuebles, entre casas particulares, edificios de departamentos, viejas fábricas, hospitales abandonados, y otros edificios municipales. Para el caso del Perú Hernando De Soto (1987) hace un análisis aplicable al caso de Argentina. El autor señala que en los asentamientos informales se genera una normatividad extralegal como manera de sustituir el Derecho formal y poder normar y ordenar la vida y las transacciones, ya que estos asentamientos se caracterizan porque en ellos conviven varias familias, lo que De Soto llama la “masa crítica mínima” para disuadir al propietario de tomar medidas de desalojo. En los asentamientos hay un “contrato de invasión implícito” por medio del cual se reparte el espacio y se forman organizaciones de defensa y resguardo de los intereses de los ocupantes. En Argentina, es el Movimiento de Ocupantes e Inquilinos (MOI) que ayuda y protege a las 161 cooperativas formadas en las casas tomadas. Éstas negocian con las autoridades para conseguir el derecho definitivo, y se ocupan de lograr el acceso a servicios públicos. Se crea lo que De Soto llama el “derecho expectaticio de propiedad”. Este derecho no otorga a sus titulares todos los beneficios que consagra el sistema jurídico formal. Tiene un carácter temporal, en espera de que alguna vez el gobierno confiera a los informales la propiedad definitiva, y se va perfeccionando de manera progresiva. En un principio se sustenta únicamente en la presencia de los invasores sobre el terreno, y luego se va afirmando con las distintas acciones que toman las cooperativas y el propio gobierno para acreditar la posesión. Por lo tanto, “existen una serie de costos que los informales deben asumir como resultado de haber accedido a la propiedad informalmente. Estos costos suponen contratar la invasión y ejecutarla físicamente, asumir el riesgo de la represión gubernamental o privada, así como el de reubicación, soportar un largo período de ocupación insegura y vivir sin disfrutar de los servicios básicos ni de obras de infraestructura; deben movilizar buena parte de sus recursos al estar presentes físicamente en los terrenos para asegurar sus derechos, y finalmente, adquirir una propiedad sobre la que únicamente pueden ejercer atributos disminuidos(…) contrariamente a lo que podría creerse, los invasores pagan un precio muy alto por el terreno que ocupan, solo que, como no tienen dinero, lo pagan con su propio capital humano.” (De Soto, 1987, p. 26) 3.1.3 El mercado de trabajo informal 162 El trabajo informal es tal vez la consecuencia más directa de la falla en el mercado laboral formal. Dentro de este tipo de trabajo podemos distinguir entre los asalariados informales y los cuentapropistas informales con distinto grado de productividad (pequeños emprendimientos, ofreciendo sus productos en los Clubes del Trueque o en intercambios informales personales, o de menor productividad ofertando bienes y servicios en las calles). Rapoport42 señala que, luego del pico de desempleo de 1995, el porcentaje de asalariados “en negro”43 sin aportes jubilatorios ni cobertura social, se elevó al 36% de la población económicamente activa. Tal porcentaje se incrementó, entre 1991 y 1997, para el 20% más pobre en 8,2 puntos, y para el 20% más rico, en 4,7 puntos. A su vez, el cuentapropismo44 no profesional, creció, para el 20% más pobre en 8,5 puntos, mientras que para el 20% más rico decreció en 6,2 puntos. Además, si bien no existen estadísticas oficiales al respecto, es fácil advertir el notable crecimiento en la cantidad de personas que desarrollan actividades de muy baja productividad en las calles de las ciudades: comerciantes ambulantes, cartoneros, limpiavidrios, entre otros. De forma análoga a lo que ocurre con la vivienda informal, el comercio informal genera su normatividad extralegal. Los comerciantes se reparten el espacio: los limpiavidrios se instalan en determinadas esquinas, así como los 42 Rapoport, M. y colaboradores (2000) Se denomina trabajo “en negro” a aquel trabajo asalariado que se encuentra fuera de toda legislación laboral y que por lo tanto carece de aportes jubilatorios, obra social, y demás beneficios del mercado formal. 44 Cuentapropistas: individuos que trabajan en forma independiente. Por ejemplo, como cuentapropistas profesionales encontramos a los médicos, abogados, ingenieros, etc. que no trabajan en relación de dependencia. Por otro lado, existe una amplia variedad de cuentapropistas no profesionales, que abarca desde individuos con pequeños negocios hasta limpiabotas, limpiavidrios, etc. 43 163 vendedores de pequeños artículos que se colocan en zonas de comercios formales, también los cartoneros tienen sus circuitos definidos. Al igual que con la vivienda, el uso exclusivo del lugar hay que ganarlo permaneciendo en él. De Soto dice que dentro de la normatividad extralegal está el “derecho especial de dominio”, pero que éste es mucho más endeble que el “derecho expectaticio de propiedad” ya que el Estado nunca cederá la posesión de parte de la vía pública. El crédito informal En los países en desarrollo, el sistema de crédito formal excluye por completo a las personas de ingresos bajos que son precisamente las que más necesitan de un crédito. En Argentina, esta debilidad del mercado crediticio se hizo más patente con el agravamiento en los problemas de empleo, que incrementó la cantidad de personas que necesitaban un crédito para emprender alguna actividad productiva que les permitiera subsistir, o para consumir. Así, se generaron incentivos para el surgimiento de sistemas de crédito informal o que lindan con la informalidad creando una nueva institucionalidad en este tipo de mercado. Hay dos problemas fundamentales que caracterizan al mercado crediticio: el no poder pagar (default involuntario) y el no querer pagar (default voluntario), ambos consecuencia de fallas de información (Ray:1998). Por ejemplo, si el uso de un préstamo no puede ser monitoreado, puede ser utilizado en un proyecto demasiado riesgoso, conduciendo a la no-devolución involuntaria. Asimismo, puede ocurrir que el prestamista pueda pagar el crédito pero no tenga interés en hacerlo, en particular cuando los costos de oportunidad 164 son extremadamente altos. Esta problemática se acentúa cuando no existen mecanismos de enforcement. Ray señala que las fallas en las posibilidades de monitoreo y en los mecanismos de enforcement son mayores en los países en desarrollo. Allí las cortes existentes son débiles o ausentes y muchos prestatarios deben confiar en mecanismos punitivos similares a los disponibles en el caso de la deuda internacional: la amenaza de no conseguir préstamos futuros. Bajo estas circunstancias, los prestamistas formales (bancos o gobierno) tienen desventajas en relación con los prestamistas informales. En primer lugar, no tienen información con respecto a las características, historia o actividades actuales de sus clientes y, en segundo lugar, no pueden aceptar garantías en formas no monetarias, como trabajo o producto. Estas ideas son aplicables al sistema de microcrédito implementado por la Fundación Grameen, ideado e iniciado en Bangladesh por Muhammad Yunus, que hoy tiene réplicas en muchos países del mundo, entre ellos Argentina. Aquí, la primera réplica se emprendió en Enero de 2000, en Misiones. Actualmente hay 23 réplicas distribuidas en las provincias de Buenos Aires (en 9 de Julio, Azul, Bahía Blanca, La Plata, Almirante Brown, Florencio Varela, Lomas de Zamora, Pilar, San Isidro y Tigre, en algunas localidades hay más de una réplica), Córdoba (en Córdoba y Resistencia), Santa Fe (en Santa Fe y Rosario), Entre Ríos ( en Concordia y Paraná), Mendoza (en Mendoza), 165 Misiones (en Posadas), Neuquen (en Junín de los Andes), Río Negro (en Viedma), Misiones (en Posadas) y Chaco (en Resistencia).45 El sistema presta a personas muy pobres y a grupos de prestatarios en vez de a individuos. Se constituyen grupos de cinco personas (por lo general mujeres) que no sean familiares, con proyectos independientes y económicamente sustentables que deben ser aprobados por los otros integrantes. El método se aplica a través de organizaciones no gubernamentales que son las que consiguen los fondos para iniciar el crédito y supervisan la evolución de los proyectos, no pide garantías, se basa en la confianza, cosa que es posible sólo por la cercanía y la forma de funcionamiento de los grupos, y cuenta además con un mecanismo para evitar el oportunismo: los microcréditos se otorgan a dos prestatarias que si cumplen con el pago durante seis semanas habilitan a otras dos para recibirlo, quienes de la misma forma habilitan a la última del grupo. Si uno de los miembros del grupo no paga, ningún otro miembro puede volver a pedir prestado. De acuerdo a lo expuesto por Ray, el diseño de este sistema de crédito informal resuelve muy bien los problemas de información señalados anteriormente. En primer lugar, el hecho de que el riesgo de incumplimiento por parte de uno de los miembros del grupo es compartido entre el prestamista y los demás prestatarios ( ya que ningún miembro del grupo puede recibir más crédito si uno incumple), incentiva a los prestatarios a identificar a “prestatarios poco riesgosos”. Becker (1981)46 llama a esto “apareamiento asociativo 45 46 Fuente: www.grameenarg.org.ar Citado en Ray (1998). 166 positivo” (positive assortative matching). Los prestatarios tienen incentivos por sí mismos para usar información al formar los grupos, y esto induce una autoselección en la que las personas no riesgosas desplazan del mercado a las riesgosas, resultado que ningún esquema bancario de préstamos individuales podría emular. Por el contrario, en un esquema de crédito individual, el riesgo de default lo asume únicamente el banco, y entonces las personas riesgosas desplazan a las no-riesgosas del mercado. En segundo lugar, el hecho de que los prestatarios entablen una relación cercana y desarrollen sus pequeños emprendimientos en una misma zona, aumenta las posibilidades de monitoreo entre pares, reduciendo el riesgo de oportunismo. Sin embargo, Ray señala que existen algunas desventajas potenciales en el sistema. Primero, cuando un miembro del grupo incurre en una dificultad financiera genuina y no le queda otra alternativa que incumplir, la estrategia dominante del resto del grupo es incumplir también, porque de todas formas, el default de ese miembro ha destruido el crédito grupal. Sin embargo, el sistema Grameen intenta evitar efecto otorgando créditos secuencialmente, minimizando el “efecto contagio” de un default individual. A la vez, minimiza la posibilidad de que miembros del grupo, aún siendo solventes, declare cada uno el default en la expectativa de que los otros lo hagan también. El monitoreo entre pares también puede tener un efecto negativo: es posible que se generen excesivas presiones para elegir proyectos extremadamente seguros que no son socialmente óptimos en términos de beneficio promedio. En este sentido, puede ocurrir que el grupo tienda a ser sobre-conservador. 167 Existen otros programas de microcrédito similares al descrito, algunos implementados desde el propio gobierno y también por medio de ONGs. Inclusive, como se explicará en la siguiente sección, el Plan Jefas y Jefes de Hogar está tratando de encauzarse en este sentido. Hay también otro tipo de instituciones crediticias que comenzaron siendo ilegales y evolucionaron hacia alguna forma de legalidad, pero pueden ser considerados informales en el sentido de que no están regidos por las leyes propias del sistema bancario ni están amparados por el Banco Central. Es el caso de las casas de crédito rápido que surgieron también durante los años 90. La mayoría de estas instituciones funcionaba en sus inicios como “cuevas”, actividad ilegal encubierta por alguna otra actividad legal, generalmente agencias de turismo, en las cuales se cambiaban cheques o moneda extranjera clandestinamente. Estas instituciones fueron buscando la manera de establecerse de forma legal y comenzaron a operar “a puertas abiertas” proveyendo enormes facilidades para el crédito, como por ejemplo, la noexigencia de garantías, o exigencia de garantías muy pequeñas. Sin embargo, pese a no ser ilegales, estas instituciones no son parte del sistema financiero formal del país. El caso de los programas de microcrédito como el Grameen, implementado por medio de organizaciones no gubernamentales, puede entenderse de forma análoga a lo analizado con los Clubes del Trueque. Las ONGs actuaron como “empresarios” para favorecer la acción colectiva hacia el logro de un bien común. El bien común no es el crédito (el cual es rival y excluible), sino el que las personas pobres estén trabajando en emprendimientos 168 productivos en vez de mendigando o viviendo de subsidios estatales. Toda la sociedad, y en especial los propios pobres, se ven beneficiados con esta situación. Estas instituciones lograron sortear con bastante éxito los problemas de información (la tasa de devolución es del 96%, mucho más alta que en el sistema formal, del 70 o 75%47) y suplir la falla del mercado crediticio formal. Sin embargo, estas instituciones no dejan de ser precarias y son signo de subdesarrollo, además de llegar a un grupo muy reducido de participantes. Los países desarrollados no necesitan de estas instituciones, o al menos no en la medida en que las requerimos nosotros, porque el sistema crediticio formal funciona mucho mejor, y esto se debe a dos motivos: información más completa y enforcements legales ante el incumplimiento. En términos de De Soto, cuentan con “buenas leyes”. Con estas dos características, los sistemas crediticios de los países desarrollados pueden hacer préstamos a personas de bajos ingresos (aunque no a indigentes) con exigencias de garantías y plazos de devolución factibles. Instituciones precarias impulsadas desde el Estado Urgido por la crisis económica, y la consecuente demanda de cambio institucional, el Estado tuvo que dar alguna respuesta, aunque fuera coyuntural. Y la respuesta que dio fue en términos de instituciones, si bien legales, precarias. 47 Esquivada Gabriela, “Capitalismo para los pobres”, Revista Nueva, 25/03/01. 169 Plan Jefes y Jefas de Hogar Actualmente, el Plan Jefes y Jefas de Hogar es el plan social de mayor envergadura en el país. Tuvo su antecedente en el “Plan Trabajar” (1996) cuyo objetivo era reducir la pobreza y al mismo tiempo generar oportunidades de empleo para los pobres y mejorar la infraestructura social en las comunidades pobres. En 1997, fue sucedido por el Plan Trabajar II, una versión expandida y reformada del proyecto original, y en 1998, se implementó el Plan Trabajar III, todos básicamente con las mismas características. El programa estuvo diseñado desde el principio para ofrecer un salario muy bajo de modo de atraer sólo a participantes pobres y desempleados (autoselección). Los participantes eran contratados para trabajar en algún proyecto de infraestructura que debía ser propuesto por los gobiernos locales (municipios) u organizaciones no-gubernamentales que debían cubrir los costos no-salariales del plan. Entre Mayo de 1997 y Junio de 1998, hubo 65,321 beneficiarios48. Durante el gobierno de E. Duhalde este plan devino en el Plan Jefes y Jefas de Hogar, de características muy similares aunque el requisito para ser beneficiario es ser desempleado y jefa o jefe de hogar donde habiten hijos menores de 18 años o personas discapacitadas de cualquier edad. La ayuda mensual tiene como contraparte que los beneficiarios deben realizar una actividad laboral o entrenamiento durante cuatro horas diarias. En Junio de 2003 el número de beneficiarios era de 1,978.149 , el monto total desembolsado 48 Baker (2000). 170 entre Enero y Junio de 2003 fue de $1,760.176.03049. El Plan recibió ayuda internacional del Banco Mundial por un monto de US$ 600 millones50. El Plan trató de establecer vínculos con empresas e instituciones que tomaran a los beneficiarios, completaran el sueldo hasta alcanzar el de convenio y así promover la inserción laboral. Pero los resultados en este sentido fueron muy magros: sólo 473 empresas están en el registro de “componente solidario” del programa y sólo han sido incorporados 1,089 beneficiarios a las empresas51. En estos días se está lanzando una nueva modalidad en este Plan que se llama “Plan Nacional de Desarrollo Local y Economía Solidaria, manos a la obra”, especialmente destinado a beneficiarios del Plan Jefes de Hogar. El mismo consiste en un concurso de proyectos productivos asociativos para entregar créditos grupales de hasta $15,000. En su diseño prevé la formación de Consejos Consultivos Locales que “asumen el rol de acompañantes de los proyectos socio-productivos, otorgando su aval, evaluando la calidad y variedad de los proyectos, y propiciando la complementariedad y articulación de los recursos y capacidades locales”.52 La efectividad de esta nueva variante se encuentra actualmente en análisis. El Plan Jefes de Hogar fue uno de los cambios institucionales incrementales en respuesta a las demandas sociales. Si bien tiene algunas ventajas en su diseño ha sido instrumento de clientelismo y es muy usado en el “intercambio de votos” entre gobernadores y Poder Ejecutivo Nacional, o 49 Fuente: www.trabajo.gov.ar/planes/sociales/jefes/infoyestad.htm Rosales, Jorge, “Aporte de US$600 millones para el plan jefes de hogar”, Diario La Nación 29/01/03. 51 Stang, Silvia, “Luces...”, op. cit. 52 “Plan Jefes de Hogar Desocupados”, Componente Materiales – Tipología 6. Folleto de Difusión. 50 171 congresistas entre sí. A su vez, se han denunciado muchos casos de planes otorgados a beneficiarios que no cumplen los requisitos (fraude asistencial)53. De allí que se corra el riesgo perpetuarse en el tiempo. Tanto el Sector Público como los beneficiarios tienen incentivos para que se transforme en un elemento permanente de la política social. Es interesante resaltar que en algunos casos la administración del plan es delegada en organizaciones no gubernamentales. Si bien esto puede reducir las posibilidades de perpetuación del plan (aunque igual puede surgir un clientelismo político entre estas organizaciones y el gobierno), se puede interpretar como una consecuencia de falla en la burocracia formal. Una vez más, una institución formal (en este caso la burocracia) es reemplazada por una informal. Cuasimonedas A raíz de la crisis financiera que vivió la Argentina hacia fines del 2001, y dadas las restricciones de emisión que imponía la Ley de Convertibilidad, la cantidad de medios de pago de la economía se redujo considerablemente. Así, tanto el gobierno nacional como los gobiernos provinciales recurrieron a la emisión de bonos de rendimiento muy pequeño con vencimiento variable para ser utilizados como medio de pago, lo que dio en llamarse cuasimonedas. Patacones (Pcia de Buenos Aires), Lecops (Nacionales), Federales (Entre Ríos), Quebrachos (Chaco), Bocade (Tucumán y La Rioja), Boncafor (Formosa), 53 El error tipo I es cuando, individuos elegibles por el programa social, no son beneficiarios del mismo. 172 Bono Público (Catamarca), Petrom (Mendoza), Lecor (Córdoba) permitieron continuar efectuando las transacciones que el Peso no podía realizar. Se emitieron $3,300 millones de Lecops y $2,500 millones de Patacones. En Diciembre de 2002, las cuasimonedas representaban el 20,5% de la base monetaria, mientras que en Noviembre de 2003, el porcentaje había disminuido al 3%54. Actualmente no quedan prácticamente cuasimonedas en circulación. La emisión de estas cuasimonedas suscitó muchas críticas en términos legales, era como volver a fines del siglo XIX cuando cada provincia tenía su propia moneda. La emisión de las mismas supuso un riesgo para la economía en términos de inflación, pero fue la única alternativa que se presentó para lubricar el flujo de transacciones. Es interesante observar cómo el propio Estado viola su institucionalidad en la que, según el artículo 75, inciso 6, es atribución del Congreso “Establecer y reglamentar un banco federal con facultad de emitir moneda”, y según el inciso 11, “Hacer sellar moneda, fijar su valor y el de las extranjeras...”. Por otra parte, la carta orgánica del Banco Central le confiere monopolio de emisión monetaria. Esta institucionalidad formal indica que la Nación es la única que puede emitir moneda (las provincias delegaron esta facultad al gobierno federal), y, más precisamente, al Banco Central. Lógicamente, las cuasimonedas no son dinero, sino bonos, pero en la práctica fueron emitidas para ser utilizadas como medio de cambio, y el Estado las utilizó básicamente para el pago de salarios. 54 www.bcra.gov.ar, “Informe Diario”. 173 Así, una institución formal y fundamental de la economía como es la moneda nacional, tuvo que ser complementada (temporalmente) con una institución muy precaria como fueron los bonos provinciales. Otras instituciones precarias Tanto en el caso de las instituciones precarias surgidas espontáneamente como en el de las impulsadas desde el gobierno, podrían indagarse muchas otras surgidas en los últimos años, y también podría profundizarse el análisis de las aquí mencionadas. Por ejemplo, los comedores barriales son otro ejemplo de instituciones precarias generadas por la sociedad. Análogamente, el que el Estado haya tenido que ampliar la extensión y reforzar las comidas de los comedores escolares da cuenta de otra institución precaria impulsada desde el Estado. Lamentablemente en la última década la escuela ha visto desplazada su función de institución educadora por la de institución de contención y alimentación. Esto es particularmente grave, no sólo porque denota el empobrecimiento de la población (adultos que ni siquiera pueden afrontar la alimentación de sus hijos) sino porque la escuela, que debería compensar las desigualdades de educación con las que empiezan los chicos provenientes de los sectores de menores ingresos, tiene que destinar tiempo a compensar otras carencias, restando tiempo a actividades de aprendizaje a los alumnos que más lo necesitan. Precarización institucional y desarrollo económico Como se analizó en la segunda sección, hay varios autores que plantean una estrecha vinculación entre instituciones y desarrollo económico. Y al 174 parecer la relación de causalidad es en ambos sentidos lo que crea la posibilidad de círculos virtuosos (buenas instituciones-desarrollo económico-cambio institucional hacia mejores instituciones-más desarrollo) o viciosos (malas instituciones-subdesarrollo económico-cambio institucional hacia instituciones más precarias que refuerza la condición de subdesarrollo). Evidentemente, Argentina parece responder al patrón de un círculo vicioso. Los problemas económicos en el mercado de trabajo que detonaron en 1995 llevaron al empobrecimiento por ingresos de gran parte de la población, lo cual, en vista de una ausencia de cambio institucional efectivo que generara puestos de trabajo, llevó al surgimiento de instituciones precarias, consecuencia de una situación de subdesarrollo. Pero, por su parte, esta precariedad institucional conduce a una serie de resultados no favorecedores del desarrollo. De Soto los identifica como: baja productividad, disminución en la inversión, ineficiencia del sistema tributario, pocas posibilidades de generar progreso técnico y dificultades de formulación de la política macroeconómica. La baja productividad se debe a que el costo del trabajo en el mercado laboral formal es muy alto por exigencias institucionales, mientras que en el mercado informal es mucho menor, y, en cambio, el capital es caro para los informales (porque no pueden obtener créditos y, si lo obtienen, es a una tasa muy alta) y más barato para los formales. Esto lleva a una especialización arbitraria de alta relación capital-trabajo en el mercado formal y baja relación en el informal que no necesariamente lleva a los niveles de productividad óptima de cada actividad. A su vez, si las empresas mantienen un tamaño 175 pequeño es menos probable que se propicie el progreso técnico. El progreso técnico también se ve desfavorecido si no hay un sistema de patentes confiable. La inversión se reduce en el mercado formal porque el derecho de propiedad es poco confiable (por ejemplo, el antecedente de la retención compulsiva de los depósitos bancarios a plazo ocurrida a fines del 2001- no es favorable a la inversión) y, a su vez, a medida que aumenta la proporción de actividades económicas informales, se utilizan tecnologías más intensivas en trabajo y se reduce el incentivo a la inversión. El sistema tributario se hace ineficiente porque cuanto mayor sea la proporción de actividades informales menor va a ser la recaudación, y al reducirse la base imponible habrá que aumentar la tasa de imposición a las empresas formales, lo cual desincentiva su expansión y alienta más informalidad. Finalmente, a medida que disminuye la economía formal con respecto a la informal, se hace más difícil hacer planificaciones certeras de políticas macroeconómicas. Por medio de estos canales y otros no explorados aquí la precariedad institucional refuerza el subdesarrollo. Un renglón especial para el concepto de desarrollo involucrado en este trabajo55. Muchos autores, por ejemplo Ray (1998), conciben al desarrollo económico como crecimiento económico más otras características que suelen mejorar con el crecimiento, como esperanza de vida, mortalidad infantil, acceso a agua potable, alfabetismo, etc. Sin embargo, este enfoque es sólo útil en principio para el análisis iniciado en este trabajo. El estudio del desempeño 55 Para una discusión más profunda sobre el concepto de desarrollo, ver London 1996. 176 económico y la influencia de las instituciones merecen un punto de vista más amplio, y hacia el cual se orienta nuestro enfoque. Para ello, el concepto de desarrollo que más se adecua a nuestros objetivos es el presentado por A. Sen (1999). Sen plantea al desarrollo como un proceso de expansión de libertades. El crecimiento económico puede ser muy importante como medio para expandir las libertades de los miembros de una sociedad, pero éstas también dependen de otros determinantes como los arreglos económicos y sociales (por ejemplo, facilidades para la educación, salud) así como derechos políticos y civiles. Con esto, Sen se está refiriendo a las instituciones. Ver al desarrollo en términos de expansión de las libertades sustantivas dirige la atención a los fines que hacen al desarrollo importante, y no solamente a algunos medios que, eventualmente, juegan un rol prominente en el proceso. Desde este enfoque, y con la intención de romper el círculo vicioso mencionado anteriormente, podríamos preguntarnos cuáles son las instituciones que aumentan las libertades de las personas. Sin duda, los Planes Jefes de Hogar, las cuasimonedas, el trabajo informal, el intercambio informal, la vivienda informal y el crédito informal tienden a atar más que a liberar. Los Planes sociales crean dependencia de quien los provea, las cuasimonedas no confieren todos los derechos ni admiten todas las transacciones que el peso. Lógicamente estas instituciones han solucionado problemas coyunturales, pero lejos de liberar, restringen. 177 Por lo tanto una buena medida para comenzar a pensar en un cambio institucional formal que sea beneficioso para todos es pensarlo en términos de la expansión de libertades. Conclusiones En este trabajo se presentaron sintéticamente los principales desarrollos teóricos de la Nueva Economía Institucional, en cuanto a la definición de instituciones, el proceso de cambio institucional y la relación institucionesdesarrollo económico. Luego se interpretó lo ocurrido en Argentina en la última década como una situación de desequilibrio institucional, seguida de una demanda por un cambio institucional que fuera mutuamente ventajoso. Esta demanda fue satisfecha, en parte por el surgimiento de instituciones informales de manera espontánea, por lo general en grupos chicos que cumplieran los requisitos necesarios para que se produzca la acción colectiva, o guiados por un “empresario”, capaz de lidiar con ello, y en parte por el propio Estado, que suplió las falencias con instituciones que, aunque son legales, no dejan de ser tan precarias como las informales. Estas nuevas instituciones pueden interpretarse como cambios institucionales incrementales; consecuencia del subdesarrollo y que no parecen poder contribuir a revertirlo. Actualmente si bien la mayoría de las instituciones precarias generadas en los 90 han desaparecido, ninguna de ella evolucionó hacia una institución formal con resultados positivos para el Desarrollo. Más aún, el crédito informal y los planes sociales subsisten, y se encuentran enquistados en el funcionamiento económico. 178 En caso de que hubiera una voluntad política para efectuar reformas en las instituciones políticas y económicas que intenten propiciar el desarrollo, un criterio de análisis interesante es el que se deriva del enfoque de Sen (1999): buscar instituciones que aumenten las libertades de las personas. En definitiva, este criterio propiciará el diseño de instituciones cuyas características responderán a las consideradas como necesarias por los autores citados: serán las “buenas leyes” de De Soto (1987), que permiten aprovechar las oportunidades económicas y sociales del país y favorecen la especialización, garantizarán los derechos de propiedad e impondrán el cumplimiento de los contratos que Olson (2000) señala como indispensables para la prosperidad y proporcionarán un sistema eficiente de medición y garantía de los términos de un intercambio que remarca North (1993). Bibliografía Baker, J. L. (2000), Evaluating the Impact of Development Projects on Poverty, A Handbook for Practitioners, World Bank. Beccaria, L. y A. Orsatti (1990), “La cuestión salarial en la Argentina. Un balance de los 70 y 80”, en Anales del 2o Congreso Internacional de Política Social, Laboral y Previsional, Buenos Aires. 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Las organizaciones se analizan bajo la relación que hay entre sistemas complejos y rutinas ya que se plantea que la complejidad puede ser desarticulada a través de una red de rutinas. Además, se parte de la cobertura disipativa que pueden tener determinadas rutinas en los sistemas y con esto la profundidad en niveles organizaciones desde la producción hasta la gestión administrativa. Se exploran aspectos de organizaciones públicas contrastando con las privadas en la educación, salud y recursos naturales y se concluye que dichas organizaciones públicas pueden bien entenderse analizando las rutinas y que en esencia se comparten rutinas que hacen que no existan diferencias cruciales entre organizaciones en su tu tipo. Palabras clave: Rutinas, sistemas complejos, organizaciones públicas, empresas, educación, salud. Clasificación JEL: B5, L31, L32, L33, L89, P0 Profesor titular de tiempo completo de la Facultad de Economía de la UMSNH, Michoacán. Edifio T, Cd Universitaria, Morelia, Michoacán. Apartado postal 2-55, CP 58000, México Tels 443-3167152 y 3261617 [email protected] 1. Introducción El análisis de rutinas y capacidades en las organizaciones ha sido el resultado de las contribuciones y trabajos que han analizado a la empresa. Eminentemente rutinas y capacidades involucran un análisis evolucionista pero que en el trayecto de las controversias donde un mar de economistas 56 Profesor investigador de la Facultad de Economía, UMSNH. 183 naufragaron han sentado huella con el afán de consolidar la teoría de la empresa. Este desarrollo se ha beneficiado de diferentes enfoques donde algunos de ellos han mejor respondido a preguntas sobre economía industrial y otros sobre economía del equilibrio. Los antecedentes de las organizaciones desde la perspectiva evolucionista no se pueden relacionar directamente con las categorías del enfoque de coordinación, hoy, en boga. Sin embargo, la discusión que introdujo Torstein Veblen (Veblen, (1899, Hodgson, 2004)), abarca varios temas de interés porque al analizar críticamente al marginalismo dejó la duda y el reto, ya que con su contribución esta corriente de pensar -institucional- mejoraría o se abandonaría. Pero también, la alternativa Vebleniana de ver a las instituciones dentro de un enfoque evolucionista fue de hecho el cimiento para analizar a la organización bajo la dinámica biológica. Alfred Marshall (Marshall, (1920)), enteradísimo de las discusiones, provocaron que sus contribuciones no fueran aisladas sino que precisamente apuntaron en ambas direcciones. Por un lado, el análisis de equilibrio parcial y con esto la economía industrial se fortaleció enormemente porque se vino a dar respuesta a la cuestión de industrias y mercados segmentados, en parte separada de la corriente de equilibrio general y sus resultados ambiciosos de asignación de recursos y eficiencia. Por otro lado, se deja una teoría no tan desarrollada que interroga sobre la empresa en su interior y no tanto como una función de oferta la cual a la postre serviría tanto para el análisis parcial como al general. Con poco impacto para su época, Frank Knight (Knigth, (1921)) analiza la empresa introduciendo la diferencia entre riesgo e incertidumbre y su evolución y la forma como repercute en las organizaciones hasta consolidarse en sociedades anónimas.57 Las disputas por la hegemonía de las explicaciones entre equilibrio general y parcial vienen posteriormente, pero ya no tanto mirando al interior de 57 Queda planteado un problema que para el autor es irresoluble, la indeterminación del sistema debido a que ninguna organización puede contrallevar el moral hazard. También se puede ver a Alchiam (1950). 184 la empresa sino en torno a mercados e industrias. Tanto Chamberlain (1936), con su trabajo famoso sobre competencia monopolística como el de Joan Robinson (1934), y su discusión con competencia imperfecta y el alud de trabajos alrededor de estos, se situaban ya no para analizar la empresa como organización sino su ubicación en una discusión de envergadura pues se trataba de construir paradigmas de la economía. Sin embargo, la discusión se ubicaba no en la empresa pero sí en la teoría del equilibrio general. ¿Cómo se da el retorno al estudio de la empresa antes del trabajo de Ronald Coase (Coase, (1937)) si la forma como se -percibía- la empresa no escapaba de esa tradición fuerte, muy bien establecida de la función de oferta? La empresa vista como costos de transacción, utilizando el sistema de precios refleja en mucho la fuerte influencia ya en los años treinta del Siglo XX de analizar los fenómenos económicos. Son el sistema de precios, los mercados, las industrias el escenario para analizar a la empresa. Por esto razón, la genialidad del trabajo de Coase es ubicar a la empresa dentro del sistema de precios, sin la necesidad de interrogarse a la organización intrínsecamente y de esta forma fortaleciendo esa tradición ya consolidaba. En varias contribuciones de Williamson y Demsetz se han analizado el origen y la forma como se trasmuta los costos de transacción y que tienen como fondo la idiosincrasia de los individuos. No cabe duda que este planteamiento trae al escenario del análisis económico el estudio de la empresa en su interior y con esto, a las organizaciones pero todavía con la lupa con que se va desarrollando prácticamente en todo el siglo XX. Romper con la tradición neoclásica de racionalidad, equilibrio, maximización, sólo podría darse estudiando el carácter evolucionista por donde Veblen lo inició enfrentando a la corriente marginalista. Las instituciones no podían ubicarse bajo la racionalidad, la ahistoria sino en el tiempo y en tanto el aprovechamiento evolucionista proporcionaba bases más sólidas. Esto lo hicieron más tarde Nelson y Winter (1982) en su seminal obra. La teoría evolucionista de la empresa se había fortalecido. Hoy, hay una gran literatura que analiza esta evolución donde se puede 185 referir a varios autores que han destacado en los diferentes temas que ha abierto y sigue abriendo la teoría económica evolucionista. La relación de organizaciones y sistemas complejos, sin embargo, es un tema relativamente nuevo. La complejidad y los sistemas van de la mano; pero como analizar a las organizaciones con sistemas. Por un lado, los sistemas han evolucionado al incorporar complejidad y ser parte hoy de adaptaciones complejas. Por otro lado, las organizaciones y la teoría evolucionista y las que se van generando por autores que retoman el tema rechazando la función de producción en todo el siglo XX, son la base para integrar organizaciones con sistemas complejos. Pero sobretodo logrando la mutación de paradigmas que han generado axiomas mejorados y nuevos. Este trabajo comparte la idea de que aprovechamientos teóricos diferentes pueden ayudar a entender las organizaciones públicas clásicas. Primeramente se acepta que el desarrollo de las teorías económicas que han analizado a la empresa privada ha servido en parte para entender varios aspectos de las organizaciones. En segundo, que las organizaciones presentan grados de complejidad y que no se renuncia a las propuestas recientes de sistemas complejos para entender la dinámica de cambio de las organizaciones y su papel en las industrias y en la estructura de la producción. Tercero que es el aprovechamiento evolucionista a través de las rutinas el que puede ayudar a precisar mejor el comportamiento de las organizaciones públicas. Así, por un lado, se parte de rutinas y capacidades y por otra, se analiza si la organización como coordinación cabe en las organizaciones públicas clásicas. Es decir, se trata de analizar que tanto las organizaciones privadas difieren de las públicas bajo una perspectiva evolucionista. La hipótesis que esta detrás de esto es que no hay diferencias substanciales ya que son las rutinas las que marcan las diferencias. Este trabajo se organiza como sigue. En la siguiente sección se hace un repaso de las organizaciones como sistemas complejos con la idea de destacar cual ha sido el factor de la complejidad y como se ha estudiado esta a través de jerarquías y complejidad. En la sección 3, el trabajo discute varias rutinas que 186 se dan en algunas organizaciones públicas. Trata de ver la diferencia tenue con respecto a empresas públicas y privadas. En la sección 4 se analiza el monopolio en algunas empresas. Finamente, se hacen algunas conclusiones. 2. Las organizaciones públicas como sistemas complejos Las organizaciones pueden modelarse como sistemas complejos adaptativos (SCA) porque se está implicando su complejidad en el tiempo. No todas las organizaciones son complejas si se considera el número de agentes y la interacción entre ellos no abarca a todos. Los SCA han sido desarrollados por Kauffman (1993), Allen (1994, 2001), Fernández (1994), Foster (2007) entre otros.58 Una idea central está basada en que no existe un solo y exclusivo objetivo y que una decisión puede llevar a situaciones más complejas y en muchos de los casos a no previsibles. Cuando las decisiones de los agentes afectan el ambiente en uno diferente y nuevo, entonces la situación podría reconocerse como caótica. La cuestión de la incertidumbre estriba en que se puede hablar de ella pero sin conocerla. Este es el aspecto del entorno de la firma que se conoce, pero cuando se desconoce prácticamente se esta en una situación más compleja. Una de las argumentaciones hechas por Morin (2003) es que el problema ha sido pensar que no hay caos y entonces cuando ocurre esto, la situación se vuelve compleja. Pero si desde el principio no hubiera tal predisposición, entonces nos moveríamos en un mundo complejo y actuaríamos complejamente. En el fondo, en esto radica lo que se modela con los sistemas complejos y como una situación diferente a la anterior debido a la interacción de los agentes que a la luz de lo lineal puede ser caótica, pero a la luz de lo complejo se vuelve normal. 58 El concepto de complejidad ha estado en los análisis desde hace mucho tiempo y Edgar Morin (Morin (2003)) ha discutido mas la apreciación de pensar complejamente, es decir con la interacción de muchos agentes, sin la predisposición de normas. 187 Cuando las organizaciones están gobernadas jerárquicamente, la jerarquía implica una complejidad en las relaciones y por tanto la disposición del jefe o gerente puede ser importante en la medida en que puede moverse en situaciones caóticas. Cuando la jerarquía no contempla situaciones impredecibles, cuando se está acostumbrado a los cambios repetitivos puede funcionar su predicción y entonces se dan explicaciones y argumentaciones conductistas y de racionalidad limitada. Al analizar las interacciones de los agentes, la conexión de sus decisiones, el como afecta a otros agentes, se puede entonces ver el potencial de las posibles interacciones. En principio, si los agentes no guardan relación entre ellos, es posible que no exista un intercambio conectivo y entonces será mas fácil ver que tanto afecta a otros. Con el enfoque de grafos se puede considerar el número de agentes que existen y la conexión entre ellos. A nivel de organización y muy posiblemente de empresa pública no se puede obviar la jerarquía. Implícitamente se explicaría que la producción no se lleva a cabo sin una estructura de gobernación y esto sin duda debe conducir a cuestionamientos sobre la idiosincrasia de la jerarquía. La base de las interacciones puede ser un agente individual pero también podría ser una célula de individuos o un equipo, donde las actividades rutinarias están consolidadas. De hecho varios autores como Williamson, Alchiam y Demsetz han incursionado en el estudio de los grupos y equipos pero no en la tradición evolucionista.59 El límite de hasta donde llega la rutina, hasta donde permea un equipo, (pudiendo integrarse por un agente) o varios, se consensa por los mismos. Desde luego habría casos donde un equipo comparta determinadas rutinas con un equipo y otras rutinas con otro. En el fondo va ser una condición importante para denotar la profundidad de las interacciones. Pero en una organización jerárquica se tendría que empezar por grupos de agentes que comparten rutinas y trabajan sobre ellas 59 Algunos autores como Williamson (1989,1991) han incursionado en el estudio de los grupos y las jerarquías. Otro autor es Alchiam y Demsetz (1972) al estudiar diferentes formas de organizaciones y el problema del remoloneo que da origen a otros aprovechamientos. 188 y sin ellas los agentes no tendrían presencia y no habría conexión con otras actividades. Entonces, las conexiones en una forma y las rutinas en otra son inseparables, son parte de lo mismo. Lo que se plantea aquí es que -son las rutinas las que especifican las conexiones entre los agentes-. Entre mayor especificada sea la conexión mayor el efecto de la jerarquía en la organización. En una organización pública (OP) cabría una -unidad hipotética- donde se darían los acuerdos entre los agentes para llevar a cabo rutinas de trabajo. Las rutinas en este caso serian institucionalizadas. A este nivel más básico se destaca la -unidad rutinaria- (UR) como aquella donde no habría más divisiones internas y en cambio si habrían todas las posibilidades de expansión. En una estructura jerárquica donde existe un jefe y muchas divisiones, la UR estaría en el seno de los departamentos. Dependiendo de la organización, la UR puede ubicarse en una gerencia, en una subgerencia, en una jefatura pero lo que interesa en demasía es conocer un límite de hasta donde permea, hasta donde se extiende la rutina, hasta donde opera. O visto de otra forma, a qué nivel, las rutinas aparecen con –contundencia-, y además, como una forma de acercamiento a la cuestión del impacto de la emergencia. El cómo se imponen rutinas de trabajo y cómo los equipos tratan de imponer rutinas, ha sido un tema de investigación (quizá con otras connotaciones) empezado por Cyert y March (1963) y Simon (1976). Es reconocido que hay rutinas en la estructura jerárquica que no están al alcance del jefe y por tanto las decisiones superiores no necesariamente tendrían el mismo efecto en comparación a si todas las rutinas estuvieran controladas y/o administradas. Parte de los análisis se han abocado a estudiar hasta donde la actividad rutinaria encubierta es benéfica a la organización y en esto parte de la crítica se ha dirigido a rechazar a que las firmas son quasi-mercados ya que se argumenta hay rutinas que no se incluyen en los mercados pero que operan con gran normalidad formal e informalmente.60 60 Dentro de lo formal y lo informal desde luego habría un catálogo de rutinas algunas incluso para romper rutinas. 189 Si para el jefe la rutina (imaginaria) mas importante es la ganancia, pero al interior de los equipos hay rutinas que tiene que ver con factores idiosincrásicos, conductistas; puede ser que las decisiones futuras tendrán resultados caóticos en la medida de su alejamiento a lo previsto, diferente a lo que marcaría la rutina de la ganancia. En cambio, en el caso de las rutinas normalizadas y rutinas -rebeldes, o subterráneas-; es decir fuera del registro y control y sin que el jefe u otro órgano las observe, adapte o tenga injerencia, el resultado podría ser mixto, y no necesariamente caótico. Caótico se refiere a un comportamiento de normal a anormal. Pero situándonos en un comportamiento que incluya a todos los comportamientos no se tendría que separar lo anormal o caótico. Esto es lo que trata de modelar los SCA. Foster (2007) hace referencia a un agrupamiento de los SCA como sistemas dependiendo de una autonomía ligada a procesos endógenos donde se disipa energía. Dependiendo de la complejidad de las interacciones de los agentes, aquí se estaría discutiendo los sistemas complejos de 3 y 4to orden donde hay adquisición de conocimiento y donde el conocimiento se vuelve interactivo respectivamente. 3. El diseño de los modelos de las organizaciones públicas como sistemas complejos y las rutinas En un sistema complejo (SC) se pueden ubicar niveles de interacción entre los agentes que pueden compartir su especificidad: la rutina. A un nivel más básico, las conexiones de la UR pueden ser las mismas que a niveles más altos. A nivel de jefatura, las rutinas pueden ser las mismas que a nivel de gerencia o dirección. Esto hace que la conectividad tenga gran influencia sobre el sistema tanto para cambiarlo como para preservarlo. Cuando la rutina se consolida, se institucionaliza su influencia, permea todo el sistema y esto permite analizar más el efecto de la emergencia. Desde luego que habrá conexiones especificas sólo en determinados niveles y entonces esto denote cierta diferenciación entre las OP. 190 Rutinas bien establecidas Consejo de administración y órganos colegiados. Se puede decir que una característica de la OP es la de acudir a las instancias de consejos u órganos para la toma de decisiones. Es una rutina bien consolidada. A diferencia de la empresa privada (Epri) la empresa pública (Ep) su dirección (o agencia) puede tener más autonomía en periodos medios. La jerarquía en la OP adquiere formas diferentes y sin influencia sobre lo que ocurriría en las empresas públicas y privadas. Las diferencias entre las empresas puede en verdad obedecer a circunstancias particulares y en algunos casos la gobernación en algunas Ep a determinado nivel puede implicar mayor jerarquía que la Epri. Los incentivos por su parte pueden ser diferentes en ambas. En la OP el prestigio de la institución y la adecuación de intereses particulares con los de la organización hacen que la remuneración sea un incentivo relativo. Los incentivos van por el lado de conocer que se forma parte de un equipo que contribuye a algo público y de beneficio social, que es de la pertenencia de un conocimiento científico, que proporciona prestigio a la institución donde se trabaja y esto con lleva a otros prestigios que en muchos casos pueden ir en contra de acuerdos y capitales políticos. En efecto, de acuerdo con varios estudios en EUA muchas de las personas eligen trabajar en un organismo público por cuestión de valores y no por motivaciones utilitaristas e ingresos (Bozeman, (1998)). Desde la apreciación evolucionista la cuestión radicaría en analizar los hábitos y las rutinas y sobretodo la herencia y los procesos de selección. En especial el aspecto del vehículo para copiar los fenotipos puede adquirir gran relevancia para explicar los intereses particulares. En la Epri, la mayoría de las veces, el status de director implica grados de control que se refleja en formas diferentes desde la imagen hasta el mando. También está asociado a salarios altos que en la visión moderna de la agencia se ve como recompensa. En muy pocos casos, directores de rango alto, el prestigio se asocia a salarios medios. Casi no se puede disociar el 191 prestigio con el status. En la teoría moderna de la empresa y la información asimétrica, el principal y el agente dan cuenta de esto. Sin embargo, no se puede dar respuesta con este enfoque a situaciones cuando ni el prestigio ni el status explican una institución saludable y con ética como es el caso de algunas empresas públicas u organismos públicos y ONGs. A partir de la dirección y del papel del gerente, las similitudes entre organizaciones públicas y privadas pueden ser más evidentes. Sin embargo, la gran diferencia estriba en las rutinas que transitan dentro y fuera de la institución a nivel de célula o equipo de trabajo. En este sentido, entre más lazos externos tenga una organización privada o pública, más dinámica será su estructura rutinaria. La teoría de la agencia ha tenido un desarrollo para el diseño de los incentivos en la Epriv pero este aprovechamiento no necesariamente puede ser un insumo o una analogía para un aprovechamiento de rutinas. Parte importante de estas diferencias obedecen a la concepciones distintas de empresa como coordinación de conocimiento y con esto la coordinación de rutinas incluyendo en sí mismo la rutina de coordinación; frente a ver a la empresa como una entidad que resuelve problemas (Fransman (1998)). En este sentido, una parte de lo que sería un programa de investigación para entender la coordinación de rutinas y el conocimiento implícito puede retomar algunos aspectos de la agencia y el principal y a partir de ahí involucrar al aprovechamiento de rutinas. Los resultados son diferentes ya que el mismo proceso de identificar las rutinas hace que se profundice en el entendimiento del conocimiento de las organizaciones, lo cual implica ir más al fondo de las OP, sobretodo si las rutinas implican un conocimiento tácito. De la misma manera se podría ver otros aprovechamientos e incorporar las reglas. Tal es el caso de algunas aplicaciones de la teoría de juegos como tema novedoso para decisiones como rutinas pero guardando mesura sobre la no operabilidad de los objetivos y las “optimizaciones” que poco tienen que ver. Las decisiones en colectivo son lo de antaño, lo cual le da una gran ventaja al aprovechamiento de rutinas ya que involucra acuerdos que cuando 192 son muy extendidos, inter-organizacional como intra-organizacional son potencia institucional. En organizaciones como sindicatos son una práctica común, y lo mismo que la asamblea de socios o los consejos donde se votan por los representantes. Sin embargo en los primeros su vigencia y fuerza se ha disminuido entre otras razones porque se han dado otras rutinas paralelas que han beneficiado a las partes. Estructura de la jerarquía Un aspecto central es que el conocimiento y coordinación de las empresas está depositado en las rutinas. Los cambios en el conocimiento implican cambio de rutinas y los cambios en estas implican ajustes que vuelven complejo las nuevas rutinas. La complejidad es la dinámica de las rutinas. La jerarquía en las organizaciones se da a través de las rutinas que permean la organización. Sin embargo, puede ser que la jerarquía sea visible y oculta. Cuando es oculta, el control formal de la organización no corresponde a la realidad ya que habrá rutinas desconocidas que no pueden monitorearse. Esto puede ocurrir en la mayoría de los casos, pero la diferencia se da en la importancia de las rutinas que no son cubiertas por la jerarquía reconocida y que tienen un peso en la idiosincrasia de la organización. La jerarquía también puede verse con respecto al entorno de la organización. Para una organización, el exterior puede ser el entorno económico, el social, político, tecnológico, cultural etc. La jerarquía está en relación con el exterior. Sólo que la organización sea para si misma, la estructura jerárquica puede aislarse del exterior y es así como se ha interpretado la ubicación de la -estrategia- en los enfoques de administración y negocios. Pero también es común encontrar en el análisis económico elaboraciones teóricas donde la gobernación de las empresas está referida por su relación con la industria a que pertenece, el grupo tecnológico, como por otras empresas donde se usa el sistema de precios, inclusive dentro del mismo grupo a través 193 de precios de transferencia. En los procesos de producción de bienes intermedio y final, no solo hay interrelaciones entre los grupos industriales y las firmas sino que el grado de negociación varía sobretodo si el consumidor ya no incorpora más valor agregado. Cuando se trata de procesos de productos intermedios las rutinas que se dan en las empresas adquieren especial relevancia. Es decir, cuando las rutinas trascienden el exterior de las empresas ya sea en la industria, en el grupo tecnológico, o con otras empresas. El valor agregado que se pueda aumentar puede tener relevancia si con todo esto desencadena incrementos de escala crecientes. En este caso, las rutinas que trascienden el exterior, la jerarquía de la organización juega un papel importante que denotar. En otras palabras, cuando ocurren cambios importantes en la producción, cuando está de por medio una nueva forma de producir, un nuevo producto, un proceso, este puede fracasar o tener éxito y en este trance las rutinas que intervienen, y que se generan juegan un papel trascendente. Sin embargo, las rutinas pueden inclusive inducir productos o procesos malos, regulares o buenos pero no los óptimos en el sentido de la economía convencional. Es decir, no todo los que esta a disposición del consumo es lo óptimo para desfortuna de la –racionalidad-; mas bien, no se sabe que tanto de lo mejor hay. Los ejemplos pueden abundar y Arthur (1994) ha ilustrado esto en forma pionera y brillante.61 En este sentido los programas de investigación que retomen las rutinas que se relacionan con el entorno de la empresa, con la industria a que pertenece, el grupo tecnológico de que se trate, las empresas de la misma industria y de otras industrias y servicios implican estudios sobre niveles de mando en la estructura de la jerarquía, la fuerza de la relación y conexión entre los agentes, la esquematización de la rutinas de estas conexiones, las relaciones entre células de rutinas. Lazaric y Raybaut (2005) retoman la cuestión de las conexiones por su adyacenticidad en el modelo y plantea el problema de rutinas formalizadas. 61 Véase también Davis (1985, 1993) y Cowan y Hulten (2000) donde se analizan casos asociados al vehículo eléctrico. 194 Algunos aspectos de organizaciones públicas Ejemplos de organizaciones públicas son servicios de salud y hospitales, universidades públicas, empresas públicas de producción, servicios de seguridad, cuerpos policíacos etc. En organizaciones de servicios educativos, las rutinas adquieren relevancia si con ellas se representa la permeabilidad en el sistema. La rutina de tomar decisiones colegiadamente en los consejos internos con procedimientos establecidos es una característica. Por lo regular esta rutina permea todo el sistema educativo de una universidad y es la base para la planeación al mismo tiempo de crear las condiciones para la generación de potenciales rutinas e instituciones. Desde luego puede haber otras rutinas características de las unidades de trabajo más pequeñas. En las academias, la rutina por excelencia puede ser el trabajo libre e independiente. Prácticamente no existirían academias si no existieran estas rutinas y buena parte de su funcionamiento de las academias tiene que ver con la permanencia, penetración y permeabilidad de este tipo de rutina las cuales en muchos casos no son visibles o no están en los estatutos. Estas rutinas son la conexión de los agentes y pueden integrar a varios de ellos en las academias. Los esfuerzos que se han dado por materializar a los grupos no siempre han tenido éxito porque omiten la conexión entre los agentes o sea omiten la rutinas. Así, un departamento de economía o de política económica en términos administrativos puede tener sentido pero no va a contener a todas las rutinas que el jefe encargado desearía. En ese sentido es característico que la dirección dé por sentado la institucionalidad de las academias. Esto no necesariamente ocurre en una universidad privada donde las academias se dan en forma más tenue, y sí en cambio se dan las áreas de conocimiento y disciplinas. Existe el objetivo de ganancia u otro equivalente relacionado con algún interés de grupo, clase o status etc. y la organización jerárquica donde el jefe puede tener mas relevancia cuando las conexiones son predecibles pero no tanto cuando no tiene una forma de administrar las rutinas rebeldes y subterráneas o cuando el jefe ya no conduce. Para algunos, el jefe debe poseer liderazgo y ser 195 brillante (Witt, 1998). En las universidades públicas, este objetivo se combina con otras instituciones de gobierno y por tanto la rutina de ganancia no tiene sentido. Lo que se da en ambas organizaciones de enseñanza, públicas y privadas es “el mantenimiento de su trayectoria educativa”; la DPT 62 educativa. En cualquiera de los casos la personalidad del jefe es importante y el campo donde se desenvuelve cada uno, el ámbito de acción y las habilidades son diferentes. La diferencia entre academias y áreas de conocimiento son ejemplos para distinguir las rutinas y conexiones que implican conocimiento tácito entre los agentes. Atrás de esto está una cuestión ontológica del conocimiento a diferencia del área que puede implicar rutinas conocidas y establecidas y manualizadas. Un ISO en la educación necesariamente tendrá que ver con las áreas de conocimiento y en menor medida podrá absorber el conocimiento ontológico que puede estar en las academias donde los agentes imponen conocimiento tácito. Esto está prácticamente en la naturaleza del investigador y con ellos en las rutinas del agente investigador. La dinámica de las rutinas no se desasocia de la articulación del conocimiento y en este sentido un ISO debe no ser estático. Lazaric y Denos (2003), han incursionado y discutido este aspecto de las rutinas y su dinámica cambiante y la articulación del conocimiento. En los servicios hospitalarios públicos y privados no es tan clara la trayectoria de salud (y la DPT de salud) como en las universidades públicas; aunque sí es mucho mas clara la rutina de lucro en los privados sobretodo si se compara con las organizaciones privadas de educación incluso considerando países. Cuando la educación es para el futuro, las rutinas en las OP son fundamentales, mientras que las mismas rutinas en lo privado no lo 62 En otros trabajos me he referido a la dinámica para mantener la trayectoria (DPT) como la base para entender a la organización desde un enfoque evolucionista donde se pueden interpretar objetivos cambiantes como mantenerse en el negocio, obtener lo mínimo indispensable para sobrevivir, crecer, investigar, etc. pero en torno a las rutinas para mantenerse en la trayectoria dictada por axiomas estables en un tiempo determinado. 196 son. Así, las rutinas que hagan coincidir necesidades de enseñanza con la estructura organizativa interna en el corto plazo darán a la organización privada cierta ventaja sobre las que no lo hacen. Sin embargo, la salud es para hoy ya que para el futuro no tendría caso para la mayoría de la población dado el riesgo que se asumiría. Esto es intrínseco a la medicina alópata e intensiva en capital. Es diferente a otro tipo de medicina (tecnología) como la preventiva la cual la variedad puede ser mayor ya que puede potenciar prácticamente la medicina tradicional de la historia animal y regional pues además le favorece el conocimiento institucionalizado quasilibre y sin costo. En esta última, la costumbre por la preferencia por el tiempo no es tan importante porque esta medicina esta con mayor intensidad relacionada con el futuro. Podría discutirse las similitudes entre OPriv en educación y salud por un lado y las similitudes por actividad por el otro. En el primer caso, a pesar de ser ambas servicios, las diferencias entre rutinas no son menores. En la segunda, responden a lo ya anteriormente planteado: el grado de elaboración de las rutinas que buscan la ganancia y el lucro. El riesgo de fallo en un servicio de salud impone restricciones y acota la rutina de ganancia aunque la combina con otras. Esta es una gran diferencia con respecto a otras organizaciones. Asimismo, hay en lo público a nivel celular (o equipo) una serie de rutinas que se comparten con los servicio de salud privado. Sobretodo cuando ciertas actividades de -control- rutinizadas son cruciales para que los pacientes sigan un tratamiento con éxito. Así, las rutinas de control son una gran diferencia para cualquier servicio de salud. Este tipo de rutinas permean todo los servicios de salud en una forma contundente. En ellas descansa el éxito o fracaso de forma mas tajante que en otros servicios. Tómese como ejemplo los casos de las rutinas de control en un hospital desde que se llega hasta que sale el paciente, la preparación de una operación, la misma operación quirúrgica, los tratamientos y 197 la post-operación.63 Los servicios de salud no están aislados de influencia rutinaria de otras rutinas con mayor contundencia. La I&D en la medicina marca de hecho el tratamiento de las enfermedades desde la aplicación de desarrollos de medicinas hasta la utilización de equipo para su tratamiento. Entonces, las rutinas en los centros hospitalarios están dominados por otras rutinas que provienen de la emergencia de nuevas rutinas nacidas en la industria de aparatos y equipo de la metal mecánica, electrónica, informática, la nanotecnología, la no muy lejana medicina genoma que desatará cambios radicales y la tradicionalmente generada en la industria y laboratorios de medicinas. En las empresas de extracción de recursos naturales y producción de materias primas, las rutinas que implican indirectamente la soberanía tuvieron gran hegemonía y a la postre se han creado otras rutinas que refuerzan trayectorias tecnológicas que permiten la permeabilidad del sistema de producción. En la medida en que las trayectorias permean el sistema, la Ep cobra vigencia. Esto podría ocurrir también con la empresa privada pero debido a que no todas son contundentes en el sentido de que no tienen gran conexión con otros sectores industriales y la economía en su conjunto, las rutinas para fortalecer su trayectoria tecnológica no tienen gran permeabilidad y en consecuencia menor impacto y la substitución puede ser menos tortuosa. Lo anterior puede ir aparejada por el escaso control de ciertas rutinas o bien, ya sea por la información limitada o por la visión desdibujada del empresario y dependiendo de la fase del ciclo de producción, el riesgo es variable. Cuando el horizonte se esclarece, una parte del ciclo a fin a la actividad industrial o de servicio de la empresa puede entonces tornarse en un objetivo rutinario. 4. Monopolio, empresas y jerarquía 63 Lo mismo podría decirse de las rutinas de control en la producción de energía eléctrica en plantas núcleo-eléctricas donde han tenido un desarrollo fundamental para mitigar el riesgo asociado a la conversión. 198 La simplificación de una industria ha tendido a delimitar el riesgo asociado en la medida de que el empresario puede tener mas claridad de la totalidad del negocio en primer instancia y las conexiones de la empresa con otras empresas en diferentes industrias y grupos tecnológicos. Los casos de monopolio natural han sido por lo regular complejos entre otras razones porque implican no sólo tamaños más grandes sino también diferentes grupos tecnológicos e incluso involucrando ramas industriales distintas. Cuando el monopolio natural es simplificado por razones tecnológicas u organizacionales, el riesgo disminuye y se vuelve accesible a la capacidad de riesgo del empresario. Esto en el fondo ha ocurrido en los ultimas décadas; por una parte, se han creado rutinas que han facilitado la reducción de la complejidad de determinadas industrias, y por la otra, el empresario tiene ahora accesos a medios que lo vuelven mas fácilmente avisado, conoce mas sus rutinas y las de su equipo, y en algunos casos ha incrementado su visión a través de nuevas tecnologías con garantía de vigencia que han servido para disminuir los efectos de la racionalidad limitada y excesivo oportunismo de los agentes. Sin embargo, lo que para una empresa privada el manejarse en toda una industria implicaba demasiada complejidad (dada el desconocimiento de rutinas) para una empresa pública podría interpretarse como un manejo más natural, dado que la complejidad estaba sujeta a mayores prácticas conocidas y de control del mismo sector. Claro está, eran diferentes rutinas ya que ni la empresa pública se manejaba con la rutina de lucro o de sobrevivencia ni la empresa privada se movía en toda la industria. En los modelos donde sólo se establecía la rutina de lucro impedía visualizar el desarrollo de otras rutinas. No obstante no habría una definición sobre otros aspectos como tecnológicos financieros que seguramente implicarían desarrollos distintos. En las empresas públicas de electricidad, donde en muchos países la consolidación de las rutinas de la industria se asociaba a que prácticamente empresas de electricidad tenían un control de la complejidad del sector, lo cual era imposible de trasladarlo a empresa privadas sin antes crear otras rutinas que 199 sirvieran de mecanismo para facilitar su manejo y administración. En el fondo, lo que está en discusión es la hegemonía de rutinas al interior de las empresas, las cuales no obedecen a mandos de gerencia sino que son más autónomas pues suponen un componente tácito. Cuando las rutinas de la Ep son fuertes, el costo de sustituirlas por otras rutinas puede ser alto ya que no sólo implica un periodo de gestación largo sino también costos asociados a la infraestructura física y organizativa para preservar las anteriores rutinas ya que su exterminio resulta prácticamente imposible y en cambio sí se reproducen rutinas para la cohabitación. La trayectoria tecnológica de la Ep son un conjunto de rutinas. Podría señalarse que la Ep trata de preservar su trayectoria, DPT y al hacerlo incrementa su accesibilidad a otras industrias. La gran trayectoria que se ha observado en la industria de electricidad en cualquier país ha sido el dominio de un grupo interactivo de tecnologías a nivel de generación que ha promovido la RED eléctrica y con esto el proceso de -transmisión-. La consolidación de estos dos han sido el obstáculo para un recambio tecnológico y se ha consolidado debido a que al interior de la empresas, las rutinas dominantes han sido la potencia y la velocidad especifica como variables dominantes de la industria (Jardón, (2001)). Las tecnologías de generación como la de ciclo termal y ciclo combinado han implicado escalas de tamaño que han aumentado el desarrollo de la transmisión (con características de alta especificidad de capital). La conversión de la empresa de electricidad está en función de reinventar su trayectoria tecnológica a manera de un centro eje de control para dominar la industria y el consumo. En esto, la transmisión juega un papel doble, tanto porque sigue presente en el control de electricidad de alta potencia pero a la vez su transformación para dar acceso a electricidad de baja potencia con energía renovable se lo impide. La emergencia de una organización económica nueva pública o privada que haga posible la combinación de alta y baja potencia espacialmente es el futuro de un centro de control para un bienestar mayor. La DPT enfrenta una colección de presiones que pueden representarse por factores y variables latentes para consolidarse en las industrias y mercados de productos 200 intermedios y finales. 5. Conclusiones En el transcurso del presente trabajo no se introdujo una definición de organización ni empresa. Esto se dejó al campo del dominio de las rutinas y las capacidades. En el fondo se pudo iniciar a partir de Ep o una Epriv y de ahí llegar a un concepto más general de organización. Pero también pudo ser lo contrario. Lo que se quiere mostrar es que las organizaciones son rutinas y esto es lo que está en la base del análisis no importando la connotación público o privado. De la misma manera se habla de organizaciones sin llegar a empresas. Esto cabe también en la concepción de rutinas. Otro aspecto a notar es que la especificación de las conexiones forman las rutinas. Referencias bibliográficas Alchiam, A.,(1959) “Uncertanily, Evolution and Economic Theory”, Journal of Political Economy, núm. 58, pp. 211-21. (Reimpreso en O. Williamson (ed.), Industrial Organization, Cheltenham, Edgar Edward, 1990). Alchiam, A. y H. Demsetz, (1973), “Production, Information Costs, and Economic Organization” The American Economic Review, núm. 62, pp.777-795. Allen, P.A, (1994), “Evolutionary Complex Systems: Models of Technology Change”, en L. Leydesdorff y P. Van den Besselaar (ed.), Evolutionary Economics and Chaos Theory, Londres, Pinter Publishers. Allen, P.M.,(2001), “Knowledge, Ignorance and the Evolution of Complex 201 System”, en J. Foster y J.S. Metcalfe (ed.), Frontier of Evolutionary Economics: Competition, Sel-Organization and Innovation Policy, Cheltenham, Edward Elgar. Arthur, W.B.,(1994), Increasing Returns and Path Dependence in the Economy, Ann Arbor, Michigan. 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Witt U., (1998),“Imagination and leadership: the neglected dimensions of the evolutionary theory of the firm”, Journal of Economic Behaviour and Organization, Num 35, pags:161:177 204 Poder de voto y valor de Shapley: Una revisión teórica - práctica aplicada al Congreso de la Unión de México Rodrigo Gómez Monge64 Israel Hernandez Torres65 “Nada resulta más sorprendente para el que examina los asuntos humanos con mirada filosófica que la facilidad con que la mayoría es gobernada por la minoría” David Hume Resumen El presente artículo busca analizar las relaciones de poder que se establecen entre las diferentes fracciones parlamentarias que integran el Congreso de la Unión de México (Cámara de Diputados y Cámara de Senadores). Se utilizan dos conceptos básicos: el poder de voto y el valor de Shapley. La estructura argumentativa de la investigación será una Profesor e Investigador Asociado “A” de la Facultad de Economía “Vasco de Quiroga”, estudió la Maestría en Administración y la especialidad en Finanzas en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) y actualmente cursa el Doctorado en Economía Aplicada en la Universidad de Santiago de Compostela, su correo electrónico es: [email protected]. 64 Profesor e Investigador Asociado “C” de la Facultad de Economía “Vasco de Quiroga”, estudió la Maestría en Política Pública en el Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE) y actualmente cursa el Doctorado en Economía Aplicada en la Universidad de Santiago de Compostela, su correo electrónico es: [email protected]. 65 205 primera parte con los conceptos elementales de teoría de juegos, continuaremos con el análisis de la medida clásica de la relación entre las fracciones: el poder de voto, en el tercer apartado se verá la propuesta de la teoría de juegos a este problema: el valor de Shapley, proseguiremos con una comparación entre ambas medidas y, finalmente, presentaremos las principales conclusiones que se derivan de este análisis. Palabras principales Cámara de Diputados, Cámara de Senadores, juegos cooperativos, juegos no cooperativos, núcleo, poder de voto, teoría de juegos, valor de Shapley. I. Palabras preliminares sobre teoría de juegos. Por principio de cuentas, trataremos de definir lo que es la teoría de juegos. La podríamos especificar como “el estudio del comportamiento estratégico cuando dos o más individuos interactúan y cada decisión individual resulta de lo que él espera que los otros hagan. Es decir, ¿qué debemos esperar que suceda a partir de las interacciones entre individuos?” (Monsalve, 2003: 138). De igual forma, las dos principales estructuras que se utilizan para tratar de explicar las diferentes interacciones entre los individuos son las siguientes: 206 1. “La primera es la teoría de juegos no cooperativos, en la que, básicamente, tenemos un conjunto de jugadores, cada uno con estrategias a su disposición y unas asignaciones de pagos que reciben por llevar a cabo tales estrategias. “La característica “no cooperativa” está en la manera de cómo eligen y en lo que saben de los otros jugadores cuando seleccionan. En general, se supone que los individuos toman sus decisiones independientemente unos de otros aunque conociendo a sus oponentes y las posibles estrategias que estos tienen a su disposición. Es decir, son individuos egoístas pero que tratan de predecir lo que los otros agentes harán para obrar entonces en conveniencia propia. “En esta estructura de análisis los agentes no alcanzan algún nivel de cooperación. 2. “La segunda estructura fundamental es la teoría de juegos cooperativos o coalicionales. Aquí tenemos a los mismos agentes egoístas, pero ahora se asume que, si pueden obtener algún beneficio de la cooperación, no dudarán en formar coaliciones que son creíbles.66 Por supuesto, bajo una estructura como la de juegos no cooperativos, un acuerdo de cooperación puede no ser la “solución”, de manera que los agentes deben tener una estructura de información diferente si queremos un comportamiento acorde. 66 207 “En una estructura cooperativa tenemos el mismo conjunto de jugadores egoístas, solo que ahora tienen información sobre cierta valoración a priori de las coaliciones. Es decir, se reconoce cuáles coaliciones son las más “valiosas” y cuáles las “menos valiosas”.” (Monsalve, 2003: 138-141). Ahora, ya que contamos con las definiciones sobre los conceptos principales de teoría de juegos y las estructuras más utilizadas para representarlo, existen dos conceptos fundamentales relacionados con los juegos cooperativos y que resultan esenciales para comenzar con el análisis de la presente investigación. Los conceptos a que nos referimos son el núcleo y el valor de Shapley. “El núcleo es un subconjunto del conjunto de imputaciones67 del juego, siendo una imputación una división de v( N ) entre los jugadores tal que ningún jugador i recibe menos de la cantidad v(i ) , la cantidad que puede garantizar por sí mismo.” (Méndez, 2006: 3). De igual forma, el valor de Shapley es “una asignación que sea un compromiso sincero para los jugadores.” (Méndez, 2006: 6). El valor de Shapley presenta cuatro propiedades fundamentales: v( N ) 67 Las imputaciones del juego v son asignaciones de a los jugadores que satisfacen una condición de racionalidad individual. El núcleo es el conjunto de imputaciones que cumple, además, una condición de racionalidad coalicional. 208 1. “Eficiencia (EFF). iN i (v) v( N ) cumple EFF si, para todo v G( N ) , , es decir que debe asignar v( N ) a los jugadores. 2. “La propiedad del jugador nulo (NPP). satisface NPP si, para cada v G( N ) y cada jugador nulo i N , i (v) 0 . Significa que los jugadores que no generan beneficio alguno, no deberían recibir algo. 3. “Anonimato (AN). satisface AN si, para cada v G( N ) y cada i j N , jugadores intercambiables en i (v) j (v) v , se verifica que . Esta propiedad requiere que trate igual a los jugadores con las mismas posibilidades. 4. “Aditividad (ADD). satisface ADD si, para cada v w G( N ) , se verifica que (v w) (v) (w) . Esta característica es una condición técnica. No está, como las otras tres, estrictamente relacionada con alguna idea de equidad.” (Méndez, 2006: 7). Finalmente, el teorema que expresa al valor de Shapley es el siguiente: n “Existe un valor único G( N ) R que satisface EFF, NPP, AN y ADD. Este valor, que se llama valor Shapley, viene dado por: i (v ) SN ‚ s(n s 1) (v( S {i}) v( S )) n {i} 209 para todo v G( N ) y todo i N , denotando s la cardinalidad de S .”(Méndez, 2006: 7). II. Análisis del poder de voto. Después de otorgar el marco teórico y referencial de los principales conceptos de teoría de juegos, comenzaremos con la primera parte de la investigación. La definición del poder de voto en el Congreso de la Unión de México viene dado por la parte proporcional con que cuenta cada uno de los partidos a partir del número de diputados adscritos a cada fracción parlamentaria. De esta manera tenemos: PPV = (Xdfp/Xdt)*100 En donde: PPV = Porcentaje de Poder de Voto. Xdfp = Diputados integrantes de cada fracción parlamentaria (Partido Acción Nacional (PAN), Partido de la Revolución Democrática (PRD), Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Partidos Minoritarios (PM)). Xdt = Diputados totales = Xdfp. 210 1. La Cámara de Diputados en los periodos comprendidos entre 1988/200968. El sustento legal del cual parte la elección de los miembros de la Cámara de Diputados se basa en lo siguiente: “Artículo 52.- La Cámara de Diputados estará integrada por 300 Diputados electos según el principio de votación mayoritaria relativa, mediante el sistema de distritos electorales uninominales, y 200 Diputados que serán electos según el principio de representación proporcional, mediante el Sistema de Listas Regionales, votadas en circunscripciones plurinominales”. (Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, 2006: 44). A partir de lo anterior la mayoría simple en la Cámara de Diputados se lograría con 251 diputados en coalición. De la misma manera, la mayoría calificada se lograría con 376 diputados en coalición. Para el caso de la presente investigación, solo se considerará lo referente a la mayoría simple. El periodo 1988/2009 se seleccionó dado que es en el lapso que la composición de la Cámara de Diputados se estabilizó. Es decir, a partir de 1988 la composición de la Cámara es de 500 diputados, 300 por el principio de mayoría relativa y 200 por el principio de representación proporcional. 68 211 Tabla 1 Composición de la Cámara de Diputados 1988/ 1991 101 24 260 115 500 Partido/Coalición Partido Acción Nacional (PAN) Partido de la Revolución Democrática (PRD) Partido Revolucionario Institucional (PRI) Partidos Minoritarios Total 1991/ 1994 89 41 320 50 500 Escaños 1994/ 1997/ 2000/ 1997 2000 2003 119 122 207 71 125 52 300 239 211 10 14 30 500 500 500 2003/ 2006 151 97 224 28 500 2006/ 2009 206 126 105 63 500 Fuente: Sitio de internet: http://www.congresogto.gob.mx/instituto/apuntesL/16sistemasE.pdf, fecha de consulta: 19 de febrero de 2007. Tabla 2 Poder de voto en la Cámara de Diputados Concentrado Periodo 1988/2009 Partido/C oalición Partido Acción Nacional (PAN) Partido de la Revolución Democrática (PRD) Partido Revolucionario Institucional (PRI) Partidos Minoritarios Total 1988/1991 20.20% 4.80% 52.00% 23.00% 100.00% 1991/1994 17.80% 8.20% 64.00% 10.00% 100.00% 1994/1997 23.80% 14.20% 60.00% 2.00% 100.00% 1997/2000 24.40% 25.00% 47.80% 2.80% 100.00% 2000/2003 41.40% 10.40% 42.20% 6.00% 100.00% 2003/2006 30.20% 19.40% 44.80% 5.60% 100.00% 2006/2009 41.20% 25.20% 21.00% 12.60% 100.00% Año Fuente: Elaboración propia. De lo anterior podemos identificar los siguientes comportamientos, a partir del poder de voto de los partidos políticos en el periodo 1988 – 2009: o El Partido Acción Nacional (PAN) ha incrementado su poder de voto en el lapso referido, presentando un estancamiento en el periodo legislativo 2003/2006. 212 o El Partido de la Revolución Democrática (PRD), al igual que el PAN, ha incrementado sus niveles de preferencia electoral, sin embargo tuvo un estancamiento en el periodo 2000/2003. o El Partido Revolucionario Institucional (PRI) presenta una disminución de las preferencias electorales desde el periodo 1994/1997, con un leve repunte en las elecciones de 2003/2006. o Los Partidos Minoritarios han tenido una participación marginal en las contiendes electorales, alcanzo su techo en las celebradas en el año de 1988, con el 23.00% y su piso en las del año 1994 con el 2.00%. En las últimas elecciones celebradas presentaron un incremento al 12.60% del poder de voto. Gráfico 1 Poder de voto 70.00% 64.00% 60.00% Porcentaje 50.00% 60.00% Partido Acción Nacional (PAN) 52.00% 47.80% 42.20% 41.40% 40.00% 41.20% 30.20% 30.00% 20.00% 44.80% 23.00% 20.20% 10.00% 4.80% 0.00% 23.80% 17.80% 25.00% 24.40% 19.40% 14.20% 10.00% 8.20% 2.00% 2.80% 10.40% 6.00% 25.20% 21.00% Partido de la Revolución Democrática (PRD) Partido Revolucionario Institucional (PRI) Partidos Minoritarios 12.60% 5.60% 1988/1991 1991/1994 1994/1997 1997/2000 2000/2003 2003/2006 2006/2009 Periodo electivo Fuente: Elaboración propia. 2 2 0 0 1 1 213 2. La Cámara de Senadores en los periodos comprendidos entre 2000/201269. La elección de los miembros de la Cámara de Senadores se basa en el siguiente sustento legal: “Artículo 56.- La Cámara de Senadores se integrará por ciento veintiocho Senadores, de los cuales, en cada Estado y en el Distrito Federal, dos serán elegidos según el principio de votación mayoritaria relativa y uno será asignado a la primera minoría. Para estos efectos, los partidos políticos deberán registrar una lista con dos fórmulas de candidatos. La senaduría de primera minoría le será asignada a la fórmula de candidatos que encabece la lista del partido político que, por sí mismo, haya ocupado el segundo lugar en número de votos en la entidad de que se trate. “Los treinta y dos Senadores restantes serán elegidos según el principio de representación proporcional, mediante el sistema de listas votadas en una sola circunscripción plurinominal nacional. La ley establecerá las reglas y fórmulas para estos efectos.”. (Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, 2006: 47). A partir de lo anterior la mayoría simple en la Cámara de Senadores se lograría con 65 senadores en coalición. El criterio de selección para el periodo 2000/2012 fue el mismo utilizado en el caso de la Cámara de Diputados. 69 214 De la misma manera, la mayoría calificada se lograría con 97 senadores en coalición. Al igual que en el caso de la Cámara de Diputados, solo se tomará como referencia la mayoría simple. Tabla 3 Composición de la Cámara de Senadores Escaños 2000/2006 2006/2012 46 52 16 29 60 33 6 14 128 128 Partido/Coalición Partido Acción Nacional (PAN) Partido de la Revolución Democrática (PRD) Partido Revolucionario Institucional (PRI) Partidos Minoritarios Total Fuente: Palma, Esperanza y Rita Balderas (2006). "Desarrollo Electoral y estrategia del PRD en el 2006" en El Cotidiano, vol. 41, num. 141, Universidad Autónoma Metropolitana - Azcapotzalco. México, D.F., pp. 38-43. Tabla 4 Poder de voto en la Cámara de Senadores Concentrado Periodo 2000/2012 Partido/C oalición Partido Acción Nacional (PAN) Partido de la Revolución Democrática (PRD) Partido Revolucionario Institucional (PRI) 2000/2006 35.94% 12.50% 2006/2012 40.63% 22.66% Año Partidos Minoritarios Total 46.88% 4.69% 100.00% 25.78% 10.94% 100.00% Fuente: Elaboración propia. Tomando en consideración la tabla 4, podemos identificar el desarrollo del poder de voto en los periodos legislativos de la Cámara de Senadores que estamos analizando (2000/2006 y 2006/2012): o El Partido Acción Nacional (PAN) ha incrementado su poder de voto en el lapso referido en 4.69%. 215 o El Partido de la Revolución Democrática (PRD), al igual que el PAN, ha incrementado sus niveles de preferencia electoral en el 10.16%. o El Partido Revolucionario Institucional (PRI) presenta una importante pérdida en las preferencias electorales del 21.10%. o Los Partidos Minoritarios han tenido un incremento del 6.25%, aunque su participación continua siendo marginal, desde el punto de vista del poder de voto. Gráfico 2 Poder de voto 50.00% 46.88% 45.00% 40.63% 40.00% Porcentaje Partido Acción Nacional (PAN) 35.94% 35.00% Partido de la Revolución Democrática (PRD) 30.00% 25.78% 22.66% 25.00% Partido Revolucionario Institucional (PRI) 20.00% Partidos Minoritarios 15.00% 12.50% 10.00% 10.94% 4.69% 5.00% 0.00% 2000/2006 2006/2012 Periodo electivo Fuente: Elaboración propia. III. Análisis del valor de Shapley. 2 0 2 0 1 1 Por lo que respecta al valor de Shapley70, tenemos: 70 Utilizando el teorema mencionado al inicio de la presente investigación. 216 i (v ) SN ‚ s(n s 1) (v( S {i}) v( S )) n {i} En donde: i(v) = Valor de Shapley para el jugador i. s = Número de jugadores en la coalición V(S}, excluyendo al jugador i. n = Número de jugadores participantes totales. V(S{i}) = Utilidad proporcionada por s jugadores, incorporando al jugador i. V(S) = Utilidad proporcionada por s jugadores, excluyendo al jugador i. A partir de lo anterior podemos entender, para el caso específico del Congreso de la Unión, al valor de Shapley como el porcentaje de coaliciones ganadores en que pudieran participar cada uno de los grupos parlamentarios. En este apartado resulta importante destacar uno de los supuestos fundamentales en que se basa el presente artículo y es la votación en conjunto de todos los participantes de cada una de las fracciones políticas que integran tanto la Cámara de Diputados, como la Cámara de Senadores. 1. La Cámara de Diputados en los periodos comprendidos entre 1988/2012. 217 Tabla 5 Valor de Shapley en la Cámara de Diputados Concentrado Periodo 1988/2009 Partido/C oalición Partido Acción Nacional (PAN) Partido de la Revolución Democrática (PRD) Partido Revolucionario Institucional (PRI) Partidos Minoritarios Total 1988/1991 8.33% 8.33% 75.00% 8.33% 100.00% 1991/1994 12.50% 4.17% 79.17% 4.17% 100.00% 1994/1997 12.50% 4.17% 79.17% 4.17% 100.00% 1997/2000 12.50% 29.17% 45.83% 12.50% 100.00% 2000/2003 41.67% 16.67% 41.67% 0.00% 100.00% 2003/2006 29.17% 12.50% 45.83% 12.50% 2006/2009 50.00% 16.67% 16.67% 16.67% 100.00% 100.00% Año Fuente: Elaboración propia. En la tabla 5 vemos claramente cuál es el valor de Shapley para cada uno de los partidos que integran la Cámara de Diputados y, al igual que en el caso del poder de voto, encontramos comportamientos interesantes: o El Partido Acción Nacional (PAN) ha presentado un comportamiento prácticamente de estancamiento en los periodos 1988/1991, 1991/1994, 1994/1997 y 1997/2000, presentando un incremento superlativo en el año 2000/2003, una caída en el 2003/2006 y su techo en el valor para la legislatura actual, 2006/20009. o El Partido de la Revolución Democrática (PRD), presenta un estancamiento en los periodos 1988/1991, 1991/1994, 1994/1997, logrando su máximo histórico en el periodo 1997/2000, para 218 después descender y mantenerse en las tres últimas legislaturas en alrededor del 15%. o El Partido Revolucionario Institucional (PRI) en las tres primeras legislaturas de análisis (1988/1991, 1991/1994, 1994/1997) fue la fuerza con el mayor número de coaliciones ganadoras (prácticamente tres de cuatro), sin embargo a partir del periodo 1997/2000 su participación ha venido bajando hasta llegar a ser, en la actualidad, una fuerza minoritaria en este aspecto. o Los Partidos Minoritarios han tenido una participación marginal en el número de coaliciones ganadoras, presentando el máximo de ellas en la actual legislatura, con un porcentaje igual al del PRD y PRI. 219 Gráfico 3 Valor de Shapley 90.00% 80.00% 75.00% 70.00% 79.17% 79.17% Partido Acción Nacional (PAN) Porcentaje 60.00% 50.00% 45.83% 40.00% 30.00% 41.67% 29.17% 20.00% 10.00% 8.33% 0.00% 12.50% 12.50% 4.17% 4.17% 12.50% 45.83% 50.00% Partido Revolucionario Institucional (PRI) 29.17% 16.67% 12.50% Partido de la Revolución Democrática (PRD) Partidos Minoritarios 16.67% 0.00% 1988/1991 1991/1994 1994/1997 1997/2000 2000/2003 2003/2006 2006/2009 Periodo electivo Fuente: Elaboración propia. 2. 2 0 1 La Cámara de Senadores en los periodos 1 comprendidos entre 2000/2012. Tabla 6 Valor de Shapley en la Cámara de Senadores Concentrado Periodo 2000/2012 Partido/C oalición Partido Acción Nacional (PAN) Partido de la Revolución Democrática (PRD) Partido Revolucionario Institucional (PRI) Partidos Minoritarios Total 2000/2006 33.33% 8.33% 50.00% 8.33% 100.00% 2006/2012 45.83% 12.50% 29.17% 12.50% 100.00% Año Fuente: Elaboración propia. Por lo que respecta a la Cámara de Senadores, el comportamiento que se presenta es el siguiente: 220 o El Partido Acción Nacional (PAN) incrementó su valor en la comparativa de los periodos analizados, de un 33.33% a un 45.83%. o El Partido de la Revolución Democrática (PRD), al igual que el PAN, ha incrementado su participación en el número de coaliciones ganadoras de 8.33% a 12.50%. o El Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha visto disminuido su valor en la última legislatura dramáticamente. Paso de un 50% de posibilidades de obtener una coalición ganadora a un 29.17%. o Los Partidos Minoritarios presentan un comportamiento idéntico al observado por el PRD, parando de un 8.33% al 12.50%. Gráfico 4 Valor de Shapley 60.00% 50.00% 50.00% 45.83% Partido Acción Nacional (PAN) Porcentaje 40.00% 33.33% 30.00% 29.17% 20.00% 10.00% Partido de la Revolución Democrática (PRD) Partido Revolucionario Institucional (PRI) Partidos Minoritarios 12.50% 8.33% 0.00% 2000/2006 2006/2012 Periodo electivo 221 IV. Análisis conjunto del poder de voto y del valor de Shapley. Ahora, ya conocemos el comportamiento individual del poder de voto y del valor de Shapley de las principales fuerzas electorales en México. Es decir, por un lado cuántos diputados y senadores tiene cada una de las fracciones parlamentarias con respecto al total de miembros de las Cámaras del Congreso de la Unión y, por otro, cuántas coaliciones ganadoras pueden formar los integrantes de dichos partidos políticos, bajo el supuesto de que en las votaciones que participen lo hagan en forma unida, como grupo político. El diseño de estrategias políticas al interior de las Cámaras de Diputados y Senadores, así como la aprobación de ciertas reformas son las principales causas de la importancia para diferenciar entre el poder de voto y el valor de Shapley. 1. La Cámara de Diputados en los periodos comprendidos entre 1988/2012. La tabla 7 nos muestra los valores de poder de voto y valor de Shapley para cada uno de los partidos políticos en los periodos de análisis para la Cámara de Diputados. 222 Tabla 7 Poder de voto y valor de Shapley en la Cámara de Diputados Concentrado Periodo 1988/2009 Partido/C oalición Partido Acción Nacional (PAN) Poder de voto Año Partido de la Revolución Democrática (PRD) Partido Revolucionario Institucional (PRI) Partidos Minoritarios Valor de Shapley Poder de voto Valor de Shapley Poder de voto Valor de Shapley Poder de voto Valor de Shapley 8.33% 1988/1991 20.20% 8.33% 4.80% 8.33% 52.00% 75.00% 23.00% 1991/1994 17.80% 12.50% 8.20% 4.17% 64.00% 79.17% 10.00% 4.17% 1994/1997 23.80% 12.50% 14.20% 4.17% 60.00% 79.17% 2.00% 4.17% 1997/2000 24.40% 12.50% 25.00% 29.17% 47.80% 45.83% 2.80% 12.50% 2000/2003 41.40% 41.67% 10.40% 16.67% 42.20% 41.67% 6.00% 0.00% 2003/2006 30.20% 29.17% 19.40% 12.50% 44.80% 45.83% 5.60% 12.50% 2006/2009 41.20% 50.00% 25.20% 16.67% 21.00% 16.67% 12.60% 16.67% Fuente: Elaboración propia. A partir de lo anterior, vemos que el Partido Acción Nacional (PAN), comparando el poder de voto y el valor de Shapley, presenta las siguientes características: o De manera general, de las 7 legislaturas que estamos analizando, en 4 de ellas es mayor el poder de voto que el valor de Shapley (1988/1991, 1991/1994, 1994/1997 y 1997/2000), presentando en 2 de ellas valores similares (2000/2003 y 2003/2006) y, en la última, un valor de Shapley mayor al poder de voto. o En el periodo 1988/1991 contaba con el 20.20% de los diputados totales, un porcentaje aceptable. Sin embargo el número de coaliciones ganadores en que podía participar era prácticamente nulo, 8.33%. 223 o En la legislaturas 1991/1994, 1994/1997 y 1997/2000 su valor de Shapley permaneció inalterado, 12.50%, mientras tanto el número de diputados con el que contaba incrementó de 17.80% a 23.80% y a 24.40%, respectivamente. o En el lapso 2000/2003 el poder de voto y el valor de Shapley fueron, prácticamente, iguales 41.40% y 41.67%, es decir, el número de diputados correspondía exactamente al número de coaliciones ganadoras en que podía participar. o En 2003/2006 sucedió algo similar a la legislatura anterior, su poder de voto y valor de Shapley fue similar, aunque presentó una disminución: 30.20% y 29.17%, respectivamente. o Finalmente, en la 2006/2009 tiene un mayor porcentaje de coaliciones ganadores con respecto al número de diputados que tiene 50.00% contra 41.20%. De lo anterior, podemos concluir que el PAN ha pasado de etapas en que presentaba mayor número de diputados (poder de voto) que el poder que efectivamente ejercer al interior de la Cámara (valor de Shapley), hacia legislaturas en que le es más importante tener el control sobre las coaliciones ganadoras que sobre el número de diputados que puede colocar en la Cámara, esto se puede apreciar claramente en el gráfico 5. 224 Gráfico 5 Poder de voto y valor de Shapley Partido Acción Nacional (PAN) 60.00% 50.00% Porcentaje 50.00% 41.67% 41.40% 40.00% 30.00% 20.00% 20.20% 10.00% 8.33% 17.80% 12.50% 23.80% 24.40% 12.50% 12.50% 41.20% 30.20% 29.17% Poder de voto Valor de Shapley 0.00% 1988/1991 1991/1994 1994/1997 1997/2000 2000/2003 2003/2006 2006/2009 Periodo electivo Fuente: Elaboración propia. Por lo que respecto al Partido de la Revolución Democrática (PRD), su comparativo es el siguiente: o De las 7 legislaturas que estamos analizando, en 4 de ellas es mayor el poder de voto que el valor de Shapley (al igual que el PAN), siendo estas la de 1991/1994, 1994/1997, 2003/2006 y 2006/2009. Y en 3 de ellas los valores son similares: 1988/1991, 1997/2000 y 2000/2003. o En el periodo de 1988/1991 su valor de Shapley era similar al poder de voto que había conseguido. o En la legislaturas 1991/1994 y 1994/1997 su valor de Shapley permaneció constante, 4.17%, mientras tanto el número de diputados con el que contaba incrementó de 8.20% a 14.20%, 225 respectivamente. Este punto es interesante, ya que a pesar de que incrementó su poder de voto de manera importante (4.80% a 14.20%), sus posibilidades de lograr coaliciones ganadores fueron iguales. o En el lapso 1997/2000 logró su techo en el valor de Shapley (29.17%) solo con el 25% del poder de voto. o En la 2000/2003, tuvo solo el 10.40% del número total de diputados, sin embargo tenía el 16.67% de las coaliciones ganadoras. o Para los periodos legislativos de 2003/2006 y 2006/2009 su poder de voto ha sido mayor que la posibilidad de lograr coaliciones ganadoras, siendo el peor escenario el que tiene actualmente, ya que cuenta con el 25.20% de los diputados y solo un 16.67% de posibilidades de ganar una votación71. A partir de aquello, podemos concluir que la evolución del PRD ha sido inestable. Existieron elecciones en que presentaron mayor poder de voto que las posibilidades de alianzas ganadoras, después se dieron dos periodos en que tuvieron mayor valor de Shapley (y, por ende, mayor poder político y de decisión) que el número de diputados con que contaba para, finalmente, estar en una etapa en la que el avance en el Un porcentaje similar al que tenía en el lapso de 2000/2003, en el que contaba con tan solo el 10.20% de los diputados totales. 71 226 número de diputados no se traduce en poder político al interior de la Cámara de Diputados. Lo anterior se puede analizar en el gráfico 6. Gráfico 6 Poder de voto y valor de Shapley Partido de la Revolución Democrática (PRD) Porcentaje 35.00% 30.00% 29.17% 25.00% 25.00% 25.20% 20.00% 15.00% 16.67% 14.20% 10.00% 5.00% 8.33% 8.20% 4.80% 4.17% 10.40% 19.40% 16.67% Poder de voto Valor de Shapley 12.50% 4.17% 0.00% 1988/1991 1991/1994 1994/1997 1997/2000 2000/2003 2003/2006 2006/2009 Periodo electivo Fuente: Elaboración propia. En lo referente al Partido Revolucionario Institucional (PRI) su comportamiento se puede resumir en los puntos que se listan a continuación: o De las 7 legislaturas estudiadas, en 1 de ellas es mayor el poder de voto que el valor de Shapley (2006/2009), en 3 de ellas fue mayor (llegando a valores del 75%, promedio) el valor de Shapley que el poder de voto (1988/1991, 1991/1994, 1994/1997). Y en 3 de ellas los valores son similares: 1997/2000, 2000/2003 y 2003/2006. 227 o En los periodos 1988/1991, 1991/1994 y 1994/1997 el valor de Shapley era mucho mayor, relativamente hablando, con respecto al poder de voto que había conseguido. Teniendo en el primer de los indicadores valores mayores o iguales al 75% (es decir, en 3 de cuatro coaliciones ganadoras, necesariamente debería estar el PRI), mientras en el segundo de ellos siempre contó con la mayoría simple en la Cámara de Diputados. o Para las legislaturas 1997/2000, 2000/2003 y 2003/2006 su valor de Shapley fue similar a su poder de voto, rondando ambos el 45%. o Finalmente en el lapso 2006/2009 su poder de voto ha sido mayor que la posibilidad de lograr coaliciones ganadoras (21.00% contra 16.67%). Siendo este el peor escenario que ha enfrentado el PRI en el periodo de análisis. Tomando como referencia lo anteriormente expuesto, podemos concluir que el PRI ha ido restringiendo sus posibilidades en ambos indicadores. De la misma forma, la tendencia es contraria a la que presenta el PAN: a lo largo del periodo analizado ha ido perdiendo el diferencial a favor entre el número de coaliciones ganadoras en que puede participar y el número de diputados con que cuenta al interior de la Cámara de 228 Diputados72 hasta el punto actual de tener ese diferencial en contra, como se puede percibir en el gráfico 7. Gráfico 7 Poder de voto y valor de Shapley Partido Revolucionario Institucional (PRI) 90.00% 80.00% 75.00% Porcentaje 70.00% 79.17% 64.00% 60.00% 52.00% 50.00% 79.17% 60.00% 47.80% 45.83% 40.00% 42.20% 41.67% Poder de voto 45.83% 44.80% Valor de Shapley 30.00% 21.00% 16.67% 20.00% 10.00% 0.00% 1988/1991 1991/1994 1994/1997 1997/2000 2000/2003 2003/2006 2006/2009 Periodo electivo Fuente: Elaboración propia. Finalmente, en los Partidos Minoritarios (PM) se ha dado la siguiente comparativa: o De las 7 legislaturas estudiadas, en 3 de ellas es mayor el poder de voto que el valor de Shapley (1988/1991, 1991/1994 y 2000/2003), en 2 de ellas fue mayor el valor de Shapley que el poder de voto (1997/2000 y 2003/2006). Y en 2 de ellas los valores son similares: 1994/1997 y 2006/2009. o En los periodos 1988/1991 y 1991/1994 el poder de voto fue mucho mayor que el poder de voto. Lo anterior significa que, a Esto sin considerar la disminución, tan importante, que ha presentado en el número de diputados. 72 229 pesar de contar con un número importante de diputados, la posibilidad de lograr una coalición ganadora era mínima. o En la legislatura siguiente (1994/1997), a pesar de tener su piso en el poder de voto de todo el periodo analizado, su valor de Shapley fue similar al que presentó en la legislatura 1991/1994. o Para la 1997/2000 se presenta una situación interesante: el número de diputados con que contaba era mínimo (2.80% o 14 diputados), sin embargo podían participar en el 12.50% de las coaliciones ganadoras (en 1 de cada 6 coaliciones ganadoras estaban los PM). o Para el caso 2000/2003 se da una situación contraria al periodo anterior, a pesar de incrementar importantemente el número de diputados (de 2.80% a 6.00%), no era decisivo para formar alguna coalición ganadora (su valor de Shapley fue de 0.00%). o Para la legislatura 2003/2006 se da un comportamiento similar al presentado en la 1997/2000: con un poder de voto de 5.60%, contaba con el 12.50% de las coaliciones ganadoras. o Finalmente, en el lapso 2006/2009 los PM tienen su techo en el valor de Shapley (16.67%) con el 12.60% de los diputados totales. Resumiendo lo anterior, podemos concluir el comportamiento de los PM ha sido similar a la presentada por el PRD: inestable. Comenzó el periodo de análisis con dos legislaturas en la que contaba con mayor 230 poder de voto que valor de Shapley, en las dos siguientes legislaturas cambio el patrón: contó con un mayor valor de Shapley que poder de voto. Sin embargo, perdió ese avance en el siguiente lapso (no tuvo poder político, de decisión, al interior de la Cámara de Diputados) y, en las dos últimas legislaturas, el valor de Shapley ha sido mayor que el poder de voto conseguido en las urnas. Esto se puede apreciar en el gráfico 8. Gráfico 8 Poder de voto y valor de Shapley Partidos Minoritarios 25.00% 23.00% Porcentaje 20.00% 16.67% 15.00% 12.50% 10.00% 12.60% 10.00% 8.33% 5.00% 4.17% 4.17% 2.00% 6.00% 1991/1994 1994/1997 Poder de voto Valor de Shapley 5.60% 2.80% 0.00% 0.00% 1988/1991 12.50% 1997/2000 2000/2003 2003/2006 2006/2009 Periodo electivo Fuente: Elaboración propia. 2. La Cámara de Senadores en los periodos comprendidos entre 2000/2012. 231 Al igual que en el apartado anterior, la tabla 8 nos muestra el concentrado del poder de voto y valor de Shapley para cada una de las fracciones parlamentarias que componen la Cámara de Senadores. Tabla 8 Poder de voto y valor de Shapley en la Cámara de Senadores Concentrado Periodo 2000/2012 Partido/C oalición Año Partido Acción Nacional (PAN) Poder de Valor de voto Shapley Partido de la Revolución Poder de Valor de voto Shapley Partido Partidos Minoritarios Revolucionario Poder de Valor de Poder de Valor de voto Shapley voto Shapley 2000/2006 35.94% 33.33% 12.50% 8.33% 46.88% 50.00% 4.69% 8.33% 2006/2012 40.63% 45.83% 22.66% 12.50% 25.78% 29.17% 10.94% 12.50% Fuente: Elaboración propia. El Partido Acción Nacional (PAN) presenta comportamientos similares en las 2 legislaturas que estamos analizando; en la primera de ellas es un poco menor el valor de Shapley que el poder de voto conseguido y, en la segunda, se invierte el comportamiento: un poco mayor el valor de Shapley que el poder de voto. Lo anterior se pone de manifiesto en el gráfico 9. 232 Gráfico 9 Poder de voto y valor de Shapley Partido Acción Nacional (PAN) 50.00% 45.83% 45.00% 40.63% 40.00% 35.94% 33.33% Porcentaje 35.00% 30.00% Poder de voto 25.00% Valor de Shapley 20.00% 15.00% 10.00% 5.00% 0.00% 2000/2006 2006/2012 Periodo electivo Fuente: Elaboración propia. El Partido de la Revolución Democrática (PRD) ha incrementado ambos valores en el periodo de análisis, de hecho ha sido más importante el incremento en el poder de voto que en el valor de Shapley. Otra característica esencial es que siempre ha sido mayor el poder de voto que el valor de Shapley con que cuenta. Este comportamiento es similar al que se presenta en la Cámara de Diputados, por lo que el PRD no logra consolidar el incremento en el número de senadores (de 16 a 29) en un poder político y de decisión en esta Cámara. Esto se puede percibir en el gráfico 10. 233 Gráfico 10 Poder de voto y valor de Shapley Partido de la Revolución Democrática (PRD) 25.00% 22.66% Porcentaje 20.00% 15.00% 12.50% 10.00% 12.50% Poder de voto Valor de Shapley 8.33% 5.00% 0.00% 2000/2006 2006/2012 Periodo electivo Fuente: Elaboración propia. Por lo que respecta al Partido Revolucionario Institucional (PRI), este disminuyó considerablemente ambos indicadores (al igual que en el caso de la Cámara de Diputados), teniendo como característica principal que tanto el poder de voto como el valor de Shapley son similares en el periodo de análisis, siendo un poco mayor el valor de Shapley durante el lapso estudiado. Lo anterior se puede ver en el gráfico siguiente: 234 Gráfico 11 Poder de voto y valor de Shapley Partido Revolucionario Institucional (PRI) 60.00% Porcentaje 50.00% 50.00% 46.88% 40.00% 30.00% 29.17% 25.78% Poder de voto Valor de Shapley 20.00% 10.00% 0.00% 2000/2006 2006/2012 Periodo electivo Fuente: Elaboración propia. Finalmente, los Partidos Minoritarios (PM) han incrementado, al igual que el PRD, ambos indicadores, sin embargo han conseguido tener mayor valor de Shapley (poder político) que poder de voto (número de senadores) en el periodo de análisis. Es importante señalar que el poder que tiene de participar en coaliciones ganadores al interior de esta Cámara es similar al que tiene el PRD, la diferencia existente es que los PM cuentan con el 10.94% de los senadores contra el 22.66% con que cuenta el PRD. El comportamiento en cuestión se puede observar en el gráfico 12. 235 Gráfico 12 Poder de voto y valor de Shapley Partidos Minoritarios 14.00% 12.50% 12.00% 10.94% Porcentaje 10.00% 8.00% 8.33% Poder de voto Valor de Shapley 6.00% 4.00% 4.69% 2.00% 0.00% 2000/2006 2006/2012 Periodo electivo Fuente: Elaboración propia. V. Conclusiones. Las conclusiones las podemos realizar en dos aspectos: evolutivo y estratégico. Por lo que respecta al aspecto evolutivo podemos observar, de manera general, en ambas Cámaras: o El Partido Acción Nacional (PAN) ha presentado un incremento en ambos indicadores. Por lo que respecta a la relación entre el poder de voto y el valor de Shapley, podemos concluir que ha evolucionado de legislaturas en que era mayor el poder de voto que el valor de Shapley a periodos en que es menor esa relación. o La evolución del Partido de la Revolución Democrática (PRD) ha sido inestable: en una primera parte presentó un incremento, 236 después disminuyo para, en las últimas legislaturas, tener un repunte importante. De igual forma no existe una relación determinante entre el poder de voto y el valor de Shapley; existen ocasiones en que el primero es mayor al segundo y, otras, en que es menor. o El Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha tenido una disminución dramática en ambos indicadores aunque, actualmente, en la Cámara de Senadores es mayor su valor de Shapley al poder de voto que tiene; en la Cámara de Diputados ya no es de esa manera: aquí es mayor el poder de voto al valor de Shapley. o Finalmente, los Partidos Minoritarios (PM) presentan un comportamiento marginal e inestable. La diferencia radica en que los PM han cambiado su estructura: actualmente tienen mayor valor de Shapley que poder de voto en ambas Cámaras, a diferencia del pasado en que era mayor su poder de voto que el valor de Shapley. En el aspecto estratégico: o Se puede inferir que el PAN ha cambiado la estrategia: ha buscado conseguir un número de diputados y senadores tal que le permita lograr coaliciones ganadoras en ambas Cámaras y, por ende, lograr la mayoría relativa en las votaciones. 237 o Por lo que respecta al PRD, la estrategia ha sido fallida. Han tenido un comportamiento inestable, aunque tendencialmente ha ido incrementando su comportamiento; el problema radica en el hecho de que no ha logrado convertir ese avance en las preferencias electorales en un poder político al interior de las Cámaras. o El caso del PRI es drástico, en el periodo de análisis ha perdido mucho del poder con que contaba en ambas Cámaras. La estrategia, al principio del periodo, estaba clara: mayor poder de voto que se traduzca en valor de Shapley. Sin embargo en la actualidad no tiene su estrategia definida, la gran pérdida en el número de escaños puede haber producido una pérdida en el objetivo del partido: tener el mayor poder político con el menor número de representantes posibles. o Para los PM, al parecer, también es clara la estrategia: en este momento cuentan con mayor valor de Shapley que poder de voto. Al parecer, si actúan de manera conjunta, pueden lograr buenos dividendos en la Cámara de Diputados y Senadores: con el 16.67% y 12.50% de las coaliciones ganadoras, respectivamente. 238 Bibliografía Arévalo, Julián, Ernesto Cárdenas y Sergio Monsalve (2005), “Juegos Coalicionales” en Un Curso de Teoría de Juegos Clásica, sitio de Internet: http://biblioteca.itesm.mx/nav/, fecha de consulta: 05 de marzo de 2007, Bogotá, Colombia. Diaz-Cayeros, Alberto (2004), “Dependencia fiscal y estrategias de coalición en el Federalismo Mexicano” en Política y Gobierno, Volumen XI, Número 2, México, D.F. Monsalve, Sergio (2003), “John Nash y la Teoría de Juegos” en Lecturas Matemáticas, Número 24, Bogotá, Colombia. Méndez Naya, Luciano (2007), “Notas de Teoría de Juegos”, Madrid, España. Monsalve, Sergio (2003), “Teoría de Juegos: ¿Hacia dónde vamos? (60 años después de Von Neumann y Morgenstern” en Revista de Economía Institucional, Número 4, Bogotá, Colombia. Núñez del Prado, José Antonio, Ma. Pilar García Pineda, Antonio Heras Martínez (2004), “Teoría de Juegos Cooperativos vs. Teoría de la Evidencia”” en XII Jornadas de ASEPUMA, Madrid, España. Shapley, Lloyd Stowell (1953), “A value for n-person games” en Contributions to the Theory of Games volume II, H.W. Kuhn and A.W. Tucker (eds.). 239 ---------- (2001), “La ampliación de la Unión Europea al este de Europa” en El Acercamiento del Este y del Oeste se realiza en la perspectiva de la Ampliación de la UE, sitio de Internet: http://biblioteca.itesm.mx/nav/, fecha de consulta: 13 de marzo de 2007, Madrid, España. Sitio de Internet: http://www.ife.org.mx, diversas fechas de consulta. 240 De la redención al calvario: devenir campesino ante los contrasentidos de las políticas del sector agrícola en México Dante Ariel Ayala Ortiz73 Beatriz De la Tejera Hdz.74 Resumen La evolución del campesinado en México durante los últimos 90 años describe dos etapas: una de redención reivindicación posrevolucionaria, caracterizada por la amplia reforma agraria y la fuerte gestión estatal del mercado (1936-1982) que reivindicó recuperó derechos y capacidades a los campesinos; y otra etapa de transición hacia la globalización (1983 a la fecha), que llevó al campesinado ante el calvario cadalso neoliberal. El año 2007, desde su arranque marcado por el incremento en el precio internacional del maíz a consecuencia del aumento en la demanda por biocombustibles, hasta su término que coincide coincidiráà con la apertura cabal total del sector agrícola en el marco del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), supone desafíos y oportunidades que pueden convertirse, unos en el desenlace fatal de un agrocidio largamente anunciado, otras, en su anhelado indulto. Este trabajo hace un ensayoa breve recapitulación de crítico sobre algunos de los principales derroteros de las políticas del sector agrícola, destacando algunos de los contrasentidos y paradojas que han marcado el devenir del sector campesino en México a lo largo de casi un siglo de intervención estatal. Invitar a la reflexión sobre el futuro de este importante sector social y productivo de México, ilustrando con los problemas máàs acuciantes que presenta el maíìz actualmente, es propósito primario del presente trabajo. Palabras clave: Política agrícola, proteccionismo estatal, liberación comercial, TLCAN, maíz, biocombustibles, transgénicos. Con formato: Interlineado: sencillo Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Cursiva, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Introducción Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) La historia del campo mexicano está marcada de injusticias, claroscuros y contrasentidos. Los agravios datan desde la misma conquista, tras el sometimiento de las comunidades indígenas, el despojo de sus tierras ocupadas, Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Interlineado: sencillo 73 Biólogo y economista (UMSNH), con estudios de Maestría en Integración Regional y Desarrollo Sustentable (Universidad de Roskilde, Dinamarca), es Candidato a Doctor en Problemas Económicos Agroindustriales (CIESTAAM, Universidad Autónoma Chapingo). Actualmente es profesor-investigador de tiempo completo en la Facultad de Economía de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo. 74 Ingeniera agrónoma especialista en Desarrollo Rural (Universidad Autónoma Agraria “Antonio Narro”), con maestria Maestría en Sociología Rural (Universidad Autónoma Chapingo) y doctorado en Economía (Colegio de Posgraduados). Actualmente es profesorainvestigadora titular de tiempo completo y Coordinadora de la Maestría en Desarrollo Rural Regional de la UACh-sede Morelia. Miembro del SNI. 241 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Color de fuente: Automático la implantación de la hacienda como unidad de explotación agrícola hasta la desamortización de bienes comunales y la trata de naturales en condición de esclavitud, como mano de obra desechable para la producción de las fincas porfirianas. Casi cuatro siglos de abusos, injusticias y expoliación hasta que la Revolución reivindicó a los genuinos productores del campo la esperanza de una nueva libertad, justicia social y progreso económico. La reivindicaciónredención fue basta vasta y prometedora. Inició en 1915 con la promulgación de una Ley Agraria que ponía fin al latifundio, restituía posesiones a los pueblos dotándolos tanto de tierras como de aguas suficientes y, posteriormente, ordenaba la creación de nuevos centros de población rural Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, 12 pto, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) confiriéndoles los recursos necesarios para la producción primaria. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, 16 pto, Español (alfab. internacional) Ya en la época posrevolucionaria, se abrió una etapa de bonanza que fue más Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) allá del mero reparto agrario para el campesino: el Estado creó infraestructura productiva, intervino los precios, operó la estacionalidad de la oferta, subsidió la producción, abatió importantes costos transaccionales y estimuló la demanda de bienes agrícolas mediante el soporte al consumo urbano; medidas que en conjunto fortalecieron al sector campesino.. Pero la reivindicación redención del campesino fue también peregrina. Es más, no acababan aún de asentarse la Revolución y su reforma en el sur del país Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, 12 pto, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) cuando, en los años ochenta, al campesino se le acusó de ser fuente de ineficiencias, corruptelas y despilfarros. Se le llamó dependiente y hasta parásito del Estado. Su propiaLa debacle le fue atribuida como su responsabilidad, por carecer de competitividad ante los vecinos próximos tiempos de integración económica mundial (Rubio 2003:15). De la reivindicaciónredención posrevolucionaria el campesino pasó al calvario cadalso del neoliberalismo. 242 La sentencia fue clara: el campesino ha dejado de ser funcional al sistema; se ha convertido en “carga inútil”; es oneroso para el Estado sostenerlo; es símbolo de lo rudimentario y obstáculo para la modernización del agro, condenándosele Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman al destierro del campo mexicano.75 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Armando Bartra (2003:31) ilustra nítidamente este episodio: “Hace veinte años los teólogos del neoliberalismo tuvieron la revelación de que los campesinos estaban de más. Y armados con la espada del libre comercio y la cruz de las Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar ventajas comparativas, emprendieron una cruzada contra las comunidades rurales. A golpes de mercado se impusieron vaciar el campo de los rústicos sobrantes. En una nación de milpas, traspatios fecundos, huertos y acahuales, los tecnócratas se propusieron barrer con la dizque ineficiente agricultura Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) campesina, desatando el éxodo rural.” Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar Se emprendió entonces una estrategia encaminada al desmantelamiento y Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) desestructuración de la base productiva campesina. El cadalsocalvario ha comprendido al menos cuatro (fases) componentes (porque han actuado simultáneamente), cada una uno con su respectivo instrumento desarticulador de la modalidad campesina: primeroa, el abandono estatal y la desincorporación de los organismos de apoyo; segundoa, la contrarreforma agraria que permitió nuevas formas de acceso del capital al campo, pero también de concentración de tierras y centralización de recursos; terceroa, la fase el mecanismo agrocomercial que expuso a los productores ante la avidez de la competencia desleal y los distorsionados precios internacionales. Y una cuarta faseo componente, aún pertrechadoa pero que está tomando a la biotecnología como el ariete que busca podría dar el golpe fatal al campesino. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) 75 . Como lo señalaban abiertamente funcionarios gubernamentales: "Es la política de este régimen remover del México rural la mitad de su población en los siguientes cinco años" (Luis Téllez, Subsecretario de Agricultura, 1991); mientras que el profesor Hank González sostenía: "mi obligación como Secretario de Agricultura es sacar del campo a 10 millones de campesinos” (Sin maíz no hay país http://www.ini.gob.mx/sinmaiz/economia.html ; consulta 04/12/2003). 243 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Así, el presente ensayo trata sobre el devenir del sector campesino ante los contrasentidos de la política agrícola, a lo largo de casi un siglo de intervención estatal en el campo mexicano (1915-2006). Se busca poner en relieve diversas sólo algunas contradicciones de la política sectorial que en diferentes momentos han propiciado el debilitamiento del campesinado como agente productivo y articulador del desarrollo rural. En última instancia, este trabajo pretende ser breve referente para comprender los desafíos actuales para el campesinado ante los inminentes embates de la apertura comercial, la tecnología transgénica y la generación de biocombustibles, entre otros severos procesos anti-campesinos recientes. Luego de la presente introducción, el documento se compone de tres secciones; la primera y segunda son relativas a las fases de reivindicación redención Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, 12 pto, Español (alfab. internacional) posrevolucionaria (1916-1982) y al cadalsocalvario neoliberal (1983-2006), respectivamente, destacando algunlos objetivos, instrumentos e incongruencias de la política agrícola y sus repercusiones sobre el sector campesino. La tercera Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) sección reflexiona sobre los rumbos del sector campesino en el nuevo contexto internacional de euforia y preocupación por los biocombustibles. La reivindicación redención posrevolucionaria: el fortalecimiento del sector campesino (1936-1982) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Negrita, Español (alfab. internacional) Uno de los logros más tangibles e inmediatos de la Revolución Mexicana fue la Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) reforma agraria, que oficialmente empezó en Veracruz con el primer reparto de tierras del día 6 de enero de 1915 y su posterior incorporación en la Constitución de 1917, que recogió sus principios fundamentales en el artículo 27. La reforma agraria fue el proceso mediante el cual se buscó la eliminación de las formas y estructuras precapitalistas del campo (caracterizadas por relaciones cuasi-feudales entre los factores tierra-capital y -trabajo), y su transformación en unidades de producción mercantil (Méndez 1998:96), lo que implicaba no 244 sólo la conversión de la tenencia de la tierra, sino también introducir capital al campo mediante inversiones en infraestructura, maquinaria, equipo, tecnología, capacitación, insumos, etc. En México se optó por la vía campesina para lograr esta reforma agraria. Pero desde ahí surgió el primer contrasentido de la política agrícola posrevolucionaria, que a la postre conduciría, paradójicamente, a la propia condena de la modalidad campesina. La contradicción consistió en que con un mismo instrumento de política (i.e. el reparto agrario) se pretendió alcanzar dos objetivos que, de origen, pueden llegar a serconsiderarse opuestos (de origen),: uno social y otro económico. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) El objetivo social radicaba en reivindicar la deuda histórica del despojo original, mediante la restitución de tierras y aguas a pueblos y comunidades indígenas (bajo el lema, “tierra y libertad”), al tiempo que se dotaba de parcelas a los verdaderos trabajadores del campo (con la consigna de “la tierra es de quien la trabaja”). Pero simultáneamente se perseguía el objetivo económico de Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) romper con los grandes latifundios de tipo feudal de las haciendas porfirianas y su transformación en explotaciones con vocación hacia el mercado, estableciendo al ejido, como la estructura social y productiva que articularía el campo mexicano, peroaunque sin dotar en la magnitud necesaria de los soportes paralelos (v.gr. créditos y asistencia técnica) para conseguirlo.. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Como es sabido, en el arte del diseño de las políticas públicas, existe un principio básico que establece que para cada objetivo de política se debe aplicar (al menos) un instrumento, resultando poco factible y eficaz el uso de un mismo instrumento para atender dos objetivos. De aquí se sostiene que En efecto, la reforma agraria en México, en efecto, había inició iniciado la redención redención del sector campesino pero, contradictoriamente, sembró sembraba 245 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) también la semilla de su futuro cadalsocalvario, al generar efectos polarizadores de la agricultura mexicana: por un lado, un amplio sector minifundista en el que aún prevalecían condiciones precapitalistas (pero que socialmente había sido reivindicado), y por otro lado, un reducido sector de productores agrícolas neocapitalistas, poseedores de las mejores tierras de cultivo, y que pronto se convirtió en el blanco de atención de las políticas públicas, al ubicársele como el agente de la transformación productiva agrícola. Los tiempos posrevolucionarios fueron de gran optimismo. La paz regresaba al campo y al país, y el campesino estaba contagiado de la euforial optimismo “institucionalizadora". Con el reparto agrario la frontera cultivable se expandió en pocos años, en tanto que la política agrícola se fortaleció con nuevos y variados instrumentos de intervención operados desde la gestión directa del Estado. El producto agrario se expandió y se alcanzóaron a generar excedentes suficientes para hacer que el exceso de oferta mantuviera bajo el precio de la canasta básica para la ciudad, contribuyendo a retener reducidos los precios de los bienes-salario que, a su vez, incentivarían el proceso de industrialización sustitutiva de importaciones en el país. Entonces se hizo más compleja la operación de la política sectorial. , pues aAdemás de manejar las vertientes propiamente agraria y agrícola, fue necesario implementar la política alimentaria, cuyo reto central es dar una solución al dilema de los precios con el menor costo económico, social y político, tomando la decisión política de elegir qué grupos de la población y qué sectores de la economía van a ser beneficiados o perjudicados por tales decisiones (Appendini 1992:14). Durante este periodo, se aseguraba que no se podía intervenir en la comercialización agrícola sin intervenir en los precios, y no se podía intervenir 246 en los precios sin intervenir en todo el complejo de relaciones entre los agentes económicos participantes. Por tal razón, el instrumento de política comercial supremo fue la intervención en los precios, y en torno a este instrumento giraron todos todas las demás formas de intervención estatal tanto de la esfera de la circulación, cuanto de la producción. El objetivo de la intervención en la comercialización era inducir niveles de precios lo suficientemente altos como para proteger a los productores de los intermediarios, y lo suficientemente bajos como para proteger a los consumidores de los encarecedores (Guerrero 2001:94). El Estado apostaba a que podría simultáneamente gestionar tanto la oferta como la demanda de bienes básicos. Se suponía que el precio de garantía era para dar seguridad al productor e incluía la recuperación de los costos de producción y una utilidad. Si el productor no podía vender a precios mayores, el Estado garantizaba la compra en cantidad ilimitada. Pero también había que atender las necesidades del consumo, por ejemplo, apoyando a la industria de la masa y la tortilla, a la cual se le entregaba el maíz a un precio menor que el del costo, subsidiando la diferencia el gobierno federal. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, 9 pto, Español (alfab. internacional) Precios del maíz en México, 1938-1964 1000 900 800 700 600 500 400 300 200 100 0 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Precio medio rural 1964 1963 1962 1961 1960 1959 1958 1957 1956 1955 1954 1953 1952 1942 1941 1940 1939 1938 Pesos / tonelada Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman P. garantía compra Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Figura 1a. Precios del maíz en México, 1938-1964. Fuente: Guerrero 2001:95. 247 Así, en las figuras 1a y 1b se puede observar que el propósito estatal de proteger y estimular a los productores sólo se cumplió en la mitad del periodo, de modo que los precios oficiales de compra de maíz fueron mayores a los medios Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, 9 pto, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) rurales durante los años 1938, 1941, 1952, 1958 a 1962, 1974, 1977 y 1981. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, 9 pto, Español (alfab. internacional) Precios del maíz en México, 1965-1982 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Pesos / tonelada 10000 9000 8000 7000 6000 5000 4000 3000 2000 1000 0 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Precio medio rural P. garantía compra 1982 1981 1980 1979 1978 1977 1976 1975 1974 1973 1972 1971 1970 1969 1968 1967 1966 1965 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) P. garantía venta Figura 1b. Precios del maíz en México, 1965-1982. Fuente: Guerrero 2001:95. Así, en las figuras 1a y 1b se puede observar que el propósito estatal de proteger y estimular a los productores sólo se cumplió en la mitad del periodo, de modo que los precios oficiales de compra de maíz fueron mayores a los medios Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar rurales durante los años 1938, 1941, 1952, 1958 a 1962, 1974, 1977 y 1981. Además, si se comparan los precios oficiales de compra y venta durante el periodo de 1965 a 1982, se observa que en todos los casos el precio oficial de venta fue menor al precio oficial de compra y al precio rural, lo cual confirma la tesis de que la política comercial durante este largo periodo privilegió las necesidades del consumo, sobre las necesidades de los productores, aunque al canalizar recursos en ambos sentidos, suponía una intervención estatal clara y decidida.. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) 248 Sin embargo, los problemas de la deuda externa durante los años ochenta se Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar convirtieron en el detonante de la crisis que condujo al fin del sistema de gestión estatal de la comercialización agrícola, marcando el cambio hacia la Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) estrategia de desarrollo tendiente al modelo de liberalización económica y apertura comercial. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Antes de pasar al análisis del siguiente periodo, debe enfatizarse sobre la Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) dualidad de la política agrícola, que si bien reivindicaba la importancia del campesinado, contribuía a configurarlo como grupo social marginal y con una base económica deteriorada o escazaescasa. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) La introducción del capital público a un sector del campo mexicano, con el objetivo de modernizar y eficientar la producción, propició el establecimiento de un modelo de desarrollo bimodal, ampliándose la diferenciación entre la agricultura campesina (orientada básicamente hacia el mercado interno) y la Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) agricultura empresarial (con capacidad para exportar y vender a la industria nacional o en los circuitos comerciales para el consumo directo), debido en gran parte al apoyo preferente del Estado para la modernización de la segunda y por el establecimiento de una política compensatoria de costos de producción con un sesgo también hacia ella, que en el siguiente período sería clave para mantener la estabilidad de precios (Flores 2003:67). Este modelo bimodal también se expresó regionalmente en el país, configurando un Norte próspero y Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) modernizado y un Sur tradicional. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) La explicación que Appendini (1991:34) da ofrece a este proceso sees Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) sustentada en el deslinde que se da en la operación de la política agrícola y Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) agraria: mientras que la primera apoyó a los productores privados para promover cambios tecnológicos y mejoras en sus procesos productivos, la última continúo con el reparto de la tierra, permitiendo la reproducción de campesinado al asegurarle el acceso a la tierra, pero no le permitió favoreció el acceso a otros medios de producción. 249 Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Por otro lado, la modalidad intervencionista del subsidio posee una característica contradictoria que agravó el mercado: los precios relativamente altos benefician solamente a los productores comerciales y a los campesinos excedentarios; es decir, a los productores que cuentan con alternativas y recursos suficientes para la producción. Con esto se contribuye a ampliar la diferenciación entre los productores. Por consiguiente, los productores campesinos deficitarios, pero numéricamente mayoritarios, empezaron a conocer los límites de la política redentorareivindicadora, haciéndose sucesivamente más dependientes de sus ingresos monetarios extra-parcelarios para la supervivencia familiar y en busca de ellos se hizo costumbre la emigración a las ciudades. Esta es finalmente la contradicción más aguda de la política estatalmente dirigida: la propia intervención estatal contribuyó a deteriorar la estructura productiva que contaba con los campesinos como elemento importante de abasto, aunque fueran ineficientes en términos convencionales, pero sin erigirlos a ellos y su estructura socio-productiva básica, el ejido, como verdaderos articuladores del modelo de desarrollo rural.. El calvario neoliberal: la transición hacia el mercado global (1983-20006) Diversos estudios han demostrado cómo los severos problemas de la deuda externa de los años ochenta, dieron lugar a un profundo viraje en la orientación del modelo económico general (Méndez 2001: 56, Sáenz 1995:19), y agrícola en particular (Calva 2003a:4, Appendini 1992:93-145), sosteniendo algunos de ellos, que la crisis del sector campesino ha sido directamente propiciada como objetivo de la política agrícola neoliberal adoptada desde entonces (Bartra 2003:3, Salinas 2006:14), en el cual los campesinos han pasado de la posición de explotados a excluidos (Rubio 1997 y 2001). 250 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman El propósito fundamental perseguido a partir de 1983 ha sido crear las condiciones para que los agentes privados, puedan funcionar y ser competitivos. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) De esta manera se esperaba eliminar la carga para la economía mexicana representada por los subsidios a la producción y comercialización. Los cambios más significativos han apuntado en dos sentidos: por un lado, se pretende buscó desmantelar el sistema estatalmente gestionado que funcionó durante más de cuatro décadas, en apoyo fundamentalmente del campesinado. Mientras que por otro lado, se pretendióe apoyar el desarrollo de empresas privadas, capaces de competir en el mercado global, para que sean éstas quienes desempeñen las funciones que antes correspondían al Estado. Esto marcó el inicio de la retirada del apoyo estatal deal campo mexicano, y con ello, el surgimiento de otro contrasentido de la política agrícola. Veamos. Experiencias sobre cambio estructural tendiente a la liberalización del sector agrícola ha habido en muchos países (v.gr. los Estados Unidos y Australia hacia finales de los años setenta), en los cuales estas profundas transformaciones se han dado justo cuando su sector agrícola “marchaba bien”; es decir, se trata de reformas estructurales de tipo contracíclicoas, en las cuales el alejamiento del Estado se inicia hasta que los agentes tienen la capacidad de continuar sin el apoyo gubernamental, bajo la expectativa de que esta mayor “libertad” mejore la asignación de los recursos. Paradójicamente, en el caso de México, el retiro del Estado se dio al inicio de la Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, 12 pto, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) crisis de los años ochenta, de modo que en lugar de tomar medidas de corte contracíclico que rompieran con la fase destructora de la crisis, se aplicaron medidas que profundizaron su carácter desestructurante. Es decir, en lugar de promover la defensa del sector mediante su transformación, se optó por dejarlos solos a su suerte. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional), Tachado El camino de reivindicación ante el resto de la sociedad y como eje estructurante del desarrollo rural que el Estado había marcado para redención el 251 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) campesino por décadas, mostraba su fin y ahora, con un Estado alejado, le correspondía tomar un camino entre distintas opciones: se hacían eficientes por esfuerzo propio (i.e. sin el apoyo del Estado), o se buscaban otra actividad qué hacer (i.e. dejaban de ser campesinos), o buscaban los medios propios para Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar mantenerse en esta actividad (i.e. se autosubsidiaban, recluyéndose en los umbrales del autoabasto). Así, se daba paso al cadalso. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Entonces, bajo la el modelo agrícola nueva lógica, el Estado se empeñó en propiciar la desestructuración campesina, con la perspectiva expectativa de que luego buscaría la reconversión hacia la gran empresa agrícola siguiendo el Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) modelo estadounidense. Pero ha fallado en su primer propósito y en consecuencia, también en el segundo. En los Estados Unidos el proceso de eliminación de sus pequeñas y medianas farms familiares les llevó entre cinco a siete años, durante la década de los ochenta (Solari 2002); un proceso doloroso, pero relativamente corto. En Mientras tanto, en México han pasado ya 25 años de lastimosas políticas anticampesinas, y –afortunadamente- aún se dista mucho para culminar esta tan aberrante tarea, pues se estima que aún persisten en este sector cuando menos varios millones de unidades campesinas76. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Así, se puede identificar que hasta ahora, el proceso de descampesinización emprendido por el Estado en el periodo de ajuste estructural ha comprendido tres componentes con igual número de instrumentos de política diferenciados y que, desde hace al menos cinco años, se prepara una cuarta acometidaofensiva. A continuación se comentan brevemente. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar Con formato ... Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato ... Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman 76 De acuerdo a información proporcionada por el senador J. A. Aguilar Bodegas, se estima que de los 5.5 millones de productores agrícolas que hay en el país, sólo 1.5 se clasifican en productores comerciales, es decir, que producen para el mercado, que están integrados a una cadena productiva, siendo receptores de inversión y apoyos públicos; mientras que los restantes 4 millones son clasificados como productores rezagados (incluyendo a productores sin mercado hasta productores sin plataforma de producción), caracterizados por poseer predios pequeños que cultivan bajo la modalidad de temporal y que no cuentan con acceso a programas como Ingreso-Objetivo y Apoyos para la Comercialización. Conferencia dictada en octubre de 2005, CIESTAAM, UA Chapingo. 252 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato ... Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman ... El primer componente, aplicado principalmente entre 1982 y 1990, fue una fuerte política de ajuste que consistió, como se ha dicho, en el retiro del aparato Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Sin Resaltar estatal de apoyo a la producción agrícola, eliminando pagos directos, precios de Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman garantía, e infraestructura institucional de soporte a la producción y Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Sin Resaltar comercialización de productos básicos (Appendini 1992:97). Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman De la política de precios garantía se pasó a los precios de concertación, lo cual prácticamente significó la liberación de los precios internos y su alineación automática con los precios internacionales, ya que también se eliminaron los permisos previos de importación (a excepción del trigo). De hecho, la referencia básica para la fijación de los precios de concertación eran las cotizaciones internacionales y los aranceles vigentes (Guerrero 2001:256). En lo referido únicamente al retiro del soporte institucional, se puede señalar que de 1115 empresas públicas existentes en México para 1983, siete años más tarde sólo quedaban 549, para 1996 apenas eran 230 y al término del año 2006 quedaban alrededor de 200 entidades (Fox 2006:287). Muchas de las desincorporaciones que se hicieron del aparato estatal se dieron sobre industrias paraestatales y organismos gubernamentales relacionados directamente con el sector agrícola. De hecho, en la última década, por lo menos una veintena de empresas públicas vinculadas con el sector rural han sido sometidas a un proceso de desincorporación, liquidación o privatización (Cienfuegos 2003). Muchas de éstas tenían que ver directamente con las funciones de apoyo a la comercialización y el abasto de productos básicos, como Conasupo, Boruconsa y Almacenes Nacionales de Depósito, entre otras. Así, aunque sumamente golpeado, el sector campesino se mantuvo en pie, y no obstante que disminuyó el valor de su producto, siguió participando en los mercados locales y regionales y formando parte de una oferta nacional. Sin embargo, para enfrentar este difícil paso fue necesario realizar cambios en sus prácticas tradicionales que les permitiera ahorrar recursos, aunque en muchos 253 de los casos estos cambios fueron a costa del deterioro tecnológico y ambiental de sus recursos.77 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman El segundo componente del proceso tomó la vertiente agraria, iniciando en 1991 mediante la reforma constitucional al Artículo 27 y la promulgación de una nueva Ley Agraria que, argumentando la necesidad de atraer inversión Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman privada al campo, atentó contra la estructura del ejido, elemento esencial del tejido social y productivo campesino. Esta fase ha culminado recientemente con la terminación de los programas de certificación de derechos ejidales (PROCEDE) y titulación sobre otras formas de tenencia de la tierra; pero, en la práctica se observa que la mayoría de los ejidos se mantienen vigentes en su estructura y que la enajenación de predios a inversionistas empresariales no ha sido masiva.78 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman El tercer componente en esta tarea de descampesinización por parte del Estado mexicano tomó como instrumento la política agrocomercial. Como se sabe, a partir de 1994 se aperturó el sector agrícola de básicos al incluirse dentro del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, concediendo un periodo de Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman desgravación de 15 años para ciertos productos básicos como maíz, frijol y leche en polvo. La medida suponía proteger la producción nacional durante un periodo “extralargo”, que permitiera reposicionar a México como comprador neto de maíz, y a los productores mexicanos como exportadores de productos de mayor valor agregado (De la Tejera 2007). Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Azul claro Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman 77 Para una explicación detallada de este proceso de deterioro consultar a García Barrios y autores (1991), quienes hacen un análisis detallado de las condiciones ecológicas, productivas y sociales de una comunidad de la Mixteca Alta oaxaqueña, bajo un entorno de crisis. 78 Sin embargo, debe señalarse que si bien el capital privado no ha entrado directamente al campo a través del cambio en la propiedad de la tierra, síi ha penetrado mediante otras formas de posesión de este factor, como la renta de tierras y la siembra bajo contrato, mismas que frecuentemente resultan ser formas más expoliantes de los recursos y depauperizadoras del menguado capital campesino, a cargo de empresas como Del Monte, Cargill y otras.. 254 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman José Luis Calva señala que los resultados de este experimento neoliberal han sido muy diferentes a los proyectados. En valor per cápita, el PIB agropecuario y forestal del año 2001 resultó 14.3% inferior al de 1981; mientras que, en contraparte, las importaciones de alimentos se dispararon de 1790 millones de dólares (mdd) en 1982, a 7274.4 mdd en 1994 y a 11,077.4 mdd en 2001. En el caso particular de los productores de maíz, de 1982 a 2001 perdieron el 56.2% del poder adquisitivo del grano (Calva 2003b:25), en tanto las importaciones de maíz desde los Estados Unidos se han quintuplicado de 2,148 millones de toneladas promedio entre 1989 y 1993 a más de 10,700 millones toneladas para 2006). En la práctica, tras trece años de vigencia del TLCAN, sólo se ha beneficiado a unos pocos pero grandes grupos empresariales vinculados con empresas transnacionales como Anderson Clayton, Bachoco, Continental, Cargill, Pilgrims Pride, Purina y otras de origen nacional pero con participación extranjera como Maseca y Minsa (De la Tejera 2007). Ciertamente, el efecto de esta política ha sido de gran impacto en términos económicos, sociales y ambientales; pero el campesinado no ha sido devastado, pues mientras que las predicciones eran, por ejemplo, que la superficie de maíz se reduciría en 3.21 millones de hectáreas, es decir alrededor del 40 % de lo Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático sembrado en 1992 (Levy y Winjbergen 1992), en estos casi cinco tres lustros de Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman operación del TLCAN, el cultivo de maíz tradicional no ha tendido a desaparecer, sino que incluso su superficie se ha incrementado en un 7% (Fox 2006:397). Pero el periodo no ha estado exento de incongruencias y contradicciones, por ejemplo: (i) el haber alcanzado la autosuficiencia en 1993, justo en el año que se declara abiertamente que los productores de maíz serán los sacrificados del TLCAN, por ineficientes (Guerrero 2001:307); (ii) la entrada creciente de productores de riego al cultivo de maíz cuando se supone que van a producir 255 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) hortalizas (Ayala y Schwentesius 2006:77); y (iii) el no cobro de aranceles sobre la cuota negociada en el TLCAN (De la Tejera 2007), pese a haberse asegurado que éese sería el mecanismo de protección del sector mientras se lograba elevar su competitividad en la transición hacia el libre mercado. Por otra parte, llama fuertemente la atención que, a diferencia de otros países que, no obstante ser promotores abiertos del libre comercio (como Estados Unidos, la Unión Europea y Japón), privilegian la seguridad alimentaria sobre la liberalización comercial, en el caso de México el eje central e inamovible ha sido privilegiar la liberación comercial por encima de la seguridad alimentaria (Ayala y Solari 2005:139), a pesar que ello atente la preservación de su base productora de alimentos y el empleo de millones de familias en el medio rural. Un contrasentido más de nuestra política agrícola. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Empero, ahora se cierne una cuarta ofensiva contra el campesinado y ésta adopta como instrumento de desmantelamiento, a la política agrotecnológica que busca impulsar el cambio hacia la tecnología transgénica. La estrategia ha comprendido, primero, la penetración al sector presionando a los órganos legislativos del país para que se autorice la liberación comercial y productiva del maíz genéticamente modificado79; segundo, promover la adopción de Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman semillas híbridas y mejoradas, es decir, la sustitución de las numerosas variedades de maíz criollo o de otras nacionalmente desarrolladas en centros de mejoramiento de esta planta, bajo el supuesto, aún no demostrado, de garantizar mayores rendimientos; tercero, fortalecer el vínculo de dependencia alimentaria de nuestro país hacia las grandes empresas transnacionales de alimentos, Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman haciendo uso de un complejo sistema de disposiciones legales nacionales y acuerdos comerciales internacionales, como los TRIPS, con los que la Organización Mundial del Comercio MC regula los aspectos de la propiedad 79 En marzo de 2005, fue aprobada la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados, también conocida como “Ley Monsanto”, en función de la fuerte injerencia que esta transnacional, productora de semillas transgénicas, tuvo en el diseño, dictaminación y aprobación de la mencionada ley. 256 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: Times New Roman intelectual relacionados con el comercio; y cuarto, promover y estimular de manera muy importante toda la investigación en estas áreas, con fuertes presupuestos gubernamentales, con reorientación de las líneas prioritarias de investigación de los organismos públicos dedicados a la ciencia y tecnología, prestigiando artificialmente todo tipo de iniciativas de este tipo, al tiempo que se frena, desincentiva y bloquean propuestas de investigación críticas u opuestas a esta orientación. Evidentemente, es difícil saber a priori cómo responderá el sector campesino ante esta nueva acometida, pero se asegura que la apertura del mercado del maíz en México impondría otros riesgos de carácter económico, ambiental y Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) tecnológico que nuevamente tendrían que ser sorteados por el campesinado mexicano en su legítima lucha por la supervivencia como sector social. Por ejemplo, Ayala y autores (2006:31)se estiman que en el plano productivo, la autorización para utilizar materiales transgénicos en el cultivo del maíz propiciaría una mayor polarización económica entre los productores Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) comerciales y los tradicionales de nuestro país, al aumentar la brecha tecnológica entre ambos subsectores, dado que la difusión y acceso a esta tecnología estaría disponible sólo para los productores comerciales, tanto por su Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) costo, como por el hecho de que estas tecnologías están fuera de la lógica de producción campesina; mientras que en la esfera del consumo, podría registrarse una pérdida general para los consumidores nacionales de maíz, dada la reducción en la calidad y pureza del maíz consumido (Ayala et al. 2006b:31). Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Pero las pérdidas también podrían traducirse en términos de las externalidades que respectivamente generarían los productores de transgénicos (externalidades ambientalmente negativas, dado el paquete tecnológico asociado a esta producción, fuertemente degradante del ambiente (Nadal y Wise 2005:57), en comparación con los productores del sector tradicional, que generan Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Sin Cursiva Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato Con formato externalidades positivas (Ayala et al. 2006:Ib.:32), dada en virtud de las Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman 257 ... Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman ... múltiples funciones que la agricultura campesina desempeña en la provisión de servicios ambientales (v.gr. preservación de la diversidad genética del maíz), sociales (v.gr. sostén del empleo en el medio rural) y culturales (v.gr. folclor, gastronomía, identidad, etc.) El problema consiste en participar en un mercado altamente indiferenciado (De la Tejera 2007); es decir, , no sólo en competir no sólo con jugadores de diferente condición, sino en hacerlo en un terreno que solamente favorece a una de las partes, potencialmente otorgando potencialmente ventajas competitivas a los productores de semillas transgénicas. Seguir participando en un esquema en donde las ventajas comparativas y competitivas, en términos convencionales, están a favor de los productores comerciales y de las importaciones, contribuiría a la erosión de los ambientes de producción campesina, al ser desplazados del mercado interno. Continuar con este proceso empecinado de apertura a la tecnología transgénica en el mercado del maíz, podría conducir a que, en el mediano plazo, México corriera el riesgo de depender de la compra de su propio material genético (hoy un bien público nacional) a empresas transnacionales que buscan transformarlo y patentar como suyo. Contradicciones Paradojas de la política agrícola. También Del mismo modo, hay que decir que, pese a ir en contra de la política de descampesinización que implicaba el nuevo modelo agrícola, también ha habido diversas iniciativas surgidas principalmente de universidades y centros de investigación que tendientes a desarrollar tecnología nacional que permita elevar el rendimiento de la producción maicera y mejorar la competitividad del sector. Como ejemplo puede mencionarse el Programa Nacional de Maíz de Alta Tecnología (PRONAMAT), desarrollado por INIFAP y otras instituciones, cuyos resultados obtenidos en 1991, concluían que México tendría el potencial de 258 Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) alcanzar a producir 28 millones de toneladas de maíz para el año 2010, haciendo uso de tecnología propia y sin que se implicase cambios en el uso de la tierra (Fritscher 1995:51). De nuevo la paradojael contrasentido: la falta de recursos impidió continuar el avance del proyecto, pues las políticas públicas no van iban en ese sentidoa dirección, como lo apunta Antonio Turrent.80 Por fortuna aún todavía hay numerosas investigaciones que, aunque no cuentan con todo el respaldo gubernamental, se han sostenido, refrendando sus resultados en el sentido de que es realmente posible un incremento significativo Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional), Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato ... Con formato ... Con formato ... ¿Quo vadis campesino?Biocombustibles: ¿ Crucifixión o indulto campesino? Con formato ... Con formato ... Con formato ... Luego de casi 25 años cinco lustros de marcha campesina en por el calvario Con formato ... Con formato ... Con formato modelo agrícola, los productores tradicionales de México continúan ... Con formato ... produciendo al pie del surco,. Con enormes pérdidas sociales y económicas Con formato ... Con formato ... Con formato obliga a seguir sembrando su “milpa”, aun cuando su costo de producción ... Con formato ... rebasa con mucho el precio vigente en el mercado (Dyer y Yunez 2003). Se Con formato ... Con formato ... Con formato ... productivo, sin transgénicos (Espinosa 2007 y Turrent 2007). neoliberal, se observa que aunque muy vapuleados y castigados por efecto del para sus practicantes, en virtud de que existe un arraigo cultural mayor que los sigue haciendo y, se asegura, se seguirá haciendo porque la idiosincrasia y cultura de la gran mayoría de los productores de maízcampesinos en México Con formato: Interlineado: sencillo (Luna 2003:121), por la “polifonía” de su producción, que lo mismo siembran Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato y mejorar la “calidad de vida” en las familias campesinas (Appendini et al. ... Con formato ... 2003). Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... maíz, frijol y calabaza, que cultivan diversidad biológica y cultural, y cosechan variedad de usos y costumbres que los mexicanos somos (Bartra 2003:26) y por lo que representa el maíz como un elemento central en la búsqueda por sostener 80 Entrevista hecha por Guerrero (2001:328) al Dr. Antonio Turrent, reconocido especialista en producción agrícola y exdirector del INIFAP, en mayo de 2001. 259 De hecho, hoy se presenta una nueva circunstancia que aparentaría dar un respiro al sector campesino con la posibilidad de recobrar el espacio perdido en el mercado interior y en ingreso real del sector, a partir del incremento de precios en el mercado de maíz y sus derivados, a consecuencia de la creciente demanda de este grano como insumo para la generación de biocombustibles. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Aún no están disponibles las cifras oficiales sobre la superficie que se cultivará con maíz en el este ciclo primavera-verano 2007 en México pero, si la teoría económica no se equivoca, habrá una respuesta positiva de los productores ante el incremento del precio que podría llevar a incrementar la cosecha nacional tal vez en dos o tres millones de toneladas. Pero hay que tener cuidado que la recuperación prevista en la cadena precio-superficie sembrada-volumen de producción no se convierta en el alivio fugaz que acostumbra anteceder el Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Cursiva ocaso del desahuciado. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Es decir, la coyuntura puede ser favorable, pero sólo si se toman firmemente las riendas del proceso y se deja de actuar en reacción a los vaivenes del mercado, conduciendo al sector campesino, maicero por excelencia, hacia su transformación como agente corresponsable de la soberanía alimentaria nacional y generador de múltiples servicios y funciones que van más allá del ámbito rural. El sector campesino y la producción de maíz, principal bien de consumo básico para los mexicanos, no debe quedar más expuesto a lo que desde los Estados Unidos se decida hacer con el mercado internacional de este cereal. En el momento que el proyecto de biogeneración de combustible con base en maíz fracase en los Estados Unidos, el mercado internacional podría verse inundado de millones de toneladas de maíz a un precio muy tan bajo que impactaría severamente en los términos de intercambio del resto de los países productores de maíz, sean o no exportadores. Tampoco a los vaivenes ocasionados por 260 modificaciones en el consumo internacional, como fue el caso de China este Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático año 2007. Como ya ha sucedido en otros momentos, en los que factores climáticos o de deficiente gestión estatal de la oferta, impactan el mercado, nuevamente el precio internacional de maíz se ha visto puede verse afectado por los crecidos saldos exportables de los Estados Unidos. Para México, la potencial caída del precio internacional del maíz en el mediano plazo, podría representar la consumación de la muerte anunciada al campesinado hace 25 años al campesinado. Al igual, un incremento significativo en los precios, en tanto no se resuelven problemas estructurales de distribución en el mercado doméstico, puede significar para los consumidores y productores deficitarios, serios Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Sin Resaltar Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman problemas. Andado el cadalso no resta más que el toque de degüello. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático Por ello, hay que ser sumamente cautos y no generar falsas expectativas sobre una burbuja (etílica en el sentido literal del término) que tarde o temprano reventará. Hay que tener presente lo ya señalado por el Director de Mercados y Comercio Agrícola de la OCDE, “la producción de etanol a partir de maíz, sólo Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato manera rentable económicamente, pero falta aún considerar los costos ... Con formato ... ambientales. El desarrollo tecnológico internacional puede significar cambios Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... es viable en los Estados Unidos; en ningún otro país, salvo que se apliquen subsidios” (en Castro 2007). Ciertamente, Een Brasil se produce etanol a partir de la caña de azúcar de severos en la oferta-demanda de maíz que no son del todo previsibles. Así, para México, el desafío es doble: por un lado, disminuir la excesiva dependencia de la importación de maíz estadounidense para la satisfacer el consumo nacional aparente; como se ha señalado, la coyuntura es favorable pero la solución debe ser estructural: se impone el reestructurar la producción nacional de maíz, con base en la capacidad productiva tcuanto de maiceros 261 temporaleros como de riego, ordenando simultáneamente la producción de Con formato ... Con formato ... maíces criollos de alta calidad y la de híbridos nacionales de alto rendimiento, explotando las potencialidades combinadas de generar maíces de alta calidad tanto para la industria como para el consumo humano, que es debe ser la prioridad. De esta forma se pueden ir desarrollando mercados que vayan diferenciando precios en función de las diferentes calidades del producto, o más claramente, en función de los diferentes productos agrupados hasta hoy en la denominación genérica de maíz (De la Tejera et al. 2006). Por otro lado, es imperativo no dejar más a los productores maiceros nacionales expuestos a la veleidad del mercado mundial dirigido desde el vecino país del norte, que conforme restringe la oferta internacional, encareciendo el precio, por desviar su producción hacia la generación de biocombustibles (como ahora lo comete), en otros momentos se deshace de sus inventarios a pesar de que ello se traduzca en la eliminación de muchos pequeños productores de países deficitarios, o teniéndolo incluso, como objetivo de política comercial, de forma que en el mediano plazo tales países se conviertan en mercados dependientes y cautivos de sus agroexportaciones (Ayala y Solari 2005:140). Se reitera, : hay que tener claro que la producción de maíz con destino hacia la generación biocombustibles no es la opción para México; y no lo es por al menos cinco razones fundamentales: la primera, de tipo económico, consiste considerandoen que el costo medio de producción de una tonelada de maíz en México es muy superior con respecto al costo medio de producción en losa (checar Internet http://apps.fao.org ), mientras que en Estados UnidosEUU Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman asciende a___ . Por ejemplo, De la Tejera y autores (2006 y 2007) reportan Con formato que en el año 2004 se estimó por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), para este país, un costo en pesos de $8,853/ha con un rendimiento medio de 8.5 ton/ha promedio (i.e. un costo aproximado de 1,000 pesos por tonelada), mientras que en México el costo por tonelada se estimaba en ese mismo año en un rango que va desde los $1,890 pesos hasta más de 262 ... $5,000 pesos por tonelada, variando los datos por región y sistema productivo. Con formato ... Con formato ... Con formato ... eEs decir, el modelo que opera para el país vecino pero no es económicamente viable para México. La segunda es de carácter técnico, pues México es deficitario en la producción de maíz, siendo un gran importador de este cereal desde hace casi cuatro décadas, lo cual significa que impulsar la creación de un nuevo sector industrial demandante de maíz, sólo hará incrementar la dependencia de las importaciones aún para el consumo humano y tal vez elevará aún más el precio internacional y nacional de este commoditygrano. La tercera razón se ubica en términos ambientales, ya que no se han analizado con detalle los requerimientos de recursos naturales que implica la producción de cada unidad de etanol, y tampoco su eficiencia energética, para definir si realmente es factible su producción en México, pese a que acaba de aprobarse la Ley de Promoción y Desarrollo de los Bioenergéticos. . Por ejemplo, Giampetro et al. (1997), estimaron que en un sistema óptimo (con el mejor de los comportamientos tecnológicos), se requiere 0.033 ha de tierra y 170 ton de agua para la producción de cada Ggigajoule (Gj) de etanol, en áreas templadas. Ampliando los factores, indican que la producción de biocombustibles puede ser factible sólo si no hay restricciones para la disponibilidad de tierra y fuentes de agua para la producción de los granos especializados necesarios para energía, si no se causa degradación significativa de suelos, contaminación de agua y aire o pérdida de biodiversidad. En principio, la producción intensiva de maíz requerida para este uso en México, significaría sin duda, un uso aún más intensivo de agroquímicos, mayor mecanización, empleo de semillas especializadas que compiten deslealmente con las semillas criollas, mayor demanda de agua escasa, etc., por lo que sus efectos sobre los recursos naturales pueden ser muy negativos. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático 263 El cuarto motivo es de tipo geo-político: seguir dependiendo de la importación del alimento estratégico nacional para el consumo básico de la mayoría de la población, es incrementar nuestra vulnerabilidad política, exacerbada por la frontera compartida con el gigante internacional del producto. Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Finalmente, la quinta razón es de orden moral, pues para un pueblo que ha Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático perdido la capacidad de producir el alimento de su propia gente, postrándose a Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman la dependencia por la importación agroalimentaria e ess, a todas luces, una Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático frivolidad incentivar la producción de maíz para “alimentar autos”, mientras la gente –y paradójicamente, en mayor medida, la del campo-, tiene que Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman conformarse con el acceso a un maíz importado de bajísima calidad, y eso Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... contrasentidos de nuestra política agrícola a lo largo de casi un siglo de Con formato ... intervención estatal. Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Literatura citada Con formato ... Con formato ... Appendini, K. 1992. De la Milpa a los Tortibonos: la Reestructuración de la Política Alimentaria en México. Ed. El Colegio de México. 1ª. Edición. México, 257 pp. Appendini K., R. García y B. De la Tejera.; 2003.; Seguridad alimentaria y calidad de los alimentos: ¿Una estrategia campesina?; Revista Europea de Estudios Latinoamericanos y del Caribe; No. 75; October; Amsterdam, The Netherlands. Págs. 65-83 Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... Con formato ... cuando le llega. México ya ha dado señales de querer entrar al juego de los bioenergéticos. Acceder a elloEse es tal vez, podría ser el más reciente último de los Ayala O., D.A. y A. Solari V. 2005. México y Estados Unidos: análisis de dos crisis agrícolas. Espiral año/vol XII No. 034. Universidad de Guadalajara.: Pp:125-146. Ayala O., D.A., R. Schwentesius R. y R. García Barrios. 2006. Riesgos económicos de la apertura a transgénicos en el mercado de maíz en México: una aproximación teórica. Centro de Investigaciones Económicas, Sociales y Tecnológicas de la Agricultura y la 264 Agroindustria Mundial. Reporte de Investigación No. 77. México. 42 pp. Ayala O., D.A. y R. Schwentesius R. 2006. Determinantes de la autosuficiencia de maíz en México (1981-2002). En: Economía y Sociedad No. 17:7394. Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo. Bartra V., A. 2003. El campo mexicano ante la globalización. Conferencia magistral dictada en la Universidad Autónoma de Chapingo. 22 de febrero de 2003. Mimeo. Calva, J. L. 2003 a. 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Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Inglés (Reino Unido) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Color de fuente: Automático, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman, Español (alfab. internacional) Con formato: Fuente: (Predeterminado) Times New Roman 266 Transformaciones socioeconómicas en la unidad doméstica campesina de San Miguel, Oaxaca Renato Salas Alfaro S. Mario Pérez Morales Resumen El presente artículo analiza las prácticas productivas de los hogares en una comunidad indígena zapoteca, localizada en el estado de Oaxaca. Se enfatiza la evolución ocurrida en la importancia de las actividades económicas, antaño piedra angular en el sostenimiento del hogar y que ahora se encuentran en franco retroceso. Asimismo se muestra la incorporación de nuevas actividades, ya no meramente de subsistencia, que de poco en poco comienzan a formar la nueva base económica sobre la que operan estas unidades domésticas. Palabras clave: unidad doméstica campesina, comunidad, actividades agrícolas, costumbres, migración Introducción Habitualmente las unidades domésticas campesinas se conciben como unidades familiares de producción y consumo que a diferencia de antes, ahora tienen a su disposición fuentes de sustento adicionales a las que ancestralmente han venido practicando. Estos hogares realizan diferentes actividades productivas, -la mayoría- inclusive en el sector urbano y extranjero. Del producto que obtienen, una parte se consume en el hogar, otra se regala a vecinos o parientes y otra más puede destinarse a la venta -bienes y servicios: agrícolas o artesanales-. Igualmente, de su fuerza de trabajo, una parte se vende, otra se autoconsume; en algunas comunidades otra parte se “intercambia” o “regala” a parientes, vecinos y a la propia comunidad. La manera en que ésta organización socioeconómica predominante del medio rural, ha venido sufriendo alteraciones -sea por su integración paulatina al sistema mercantil o por evolucionar debido a otras causales-, puede interpretarse de diversas formas. No obstante la literatura concerniente enfatiza que en nuestro país, al menos desde los años sesenta, las políticas agrarias han empujado su integración al mercado de una manera desigual y perjudicial, contribuyendo a la formación de una crisis del papel de la economía campesina (Martínez, 2003: 18). Una aseveración más radical incluso señaló que los 267 últimos 500 años de historia en México, han sido de desafío entre un proyecto de modernización occidental y otro que se resiste arraigado en las formas de vida mesoamericanas (Bonfil, 1994: 10). Tanto la política agrícola del país como los planes nacionales de desarrollo se han orientado esencialmente a promover la eficiencia económica, eliminando apoyos a pequeños productores o financiando obras de irrigación para uso primordialmente de los productores comerciales. En general la política agrícola del país, más que beneficiar ha terminado por obligar a las unidades domésticas a depender de la venta de su fuerza de trabajo para subsistir. Al respecto, existe evidencia irrefutable. Por un lado, Gutelman (1984: 44) y Stavenhagen (1985: 13) han señalado que por lo menos desde el régimen porfirista y ante la complacencia institucional, las comunidades indígenas de este país fueron despojadas de sus tierras por latifundistas y compañías deslindadoras, quedando miles de familias sin medios de producción, luego el hambre las llevó y ha llevado al postrero empobrecimiento. Por otro, la idea de que los ejidos eran incapaces de mejorar el nivel de vida de los campesinos, a menos de que poseyeran un alto nivel técnico (Gutelman, 1984: 113) y con el subterfugio de reducir las importaciones agrícolas, el estado mexicano privilegió la inversión pública en obras de irrigación y en el fortalecimiento de la industria, relegando al sector temporalero del campo. El rompimiento del equilibrio precio-ingreso de los productos básicos apremió a los hogares a conseguir sus ingresos a través de la búsqueda de empleo en los pequeños centros urbanos del país, que por aquellos años recién iniciaban. Coincidentemente fueron años donde convergió la oferta laboral de los Estados Unidos dirigida a mexicanos con características similares; enmarcada dentro del Programa Bracero (Arizpe, 1981:631). Otros reveses para las unidades domésticas campesinas han provenido de decisiones políticas erróneas incluso en esferas lejanas a la agricultura. De 268 acuerdo con Aspe (1993: 22), en los años setenta el país debía orientar su actividad económica hacia las exportaciones, pero en el gobierno se prefirió seguir supliendo la inversión privada con el gasto publico81. Así, en 1976 se presentó la primera crisis económica nacional, fue eludida por el petróleo descubierto en estos años y por el consecuente crédito internacional. No obstante, la crisis sólo se postergó y finalmente estalla en 1982. En plena crisis el gobierno mexicano al emprender la búsqueda de fondos en el exterior, es impelido a adoptar una política económica de estabilización, que incluye la reforma económica de cambio estructural sostenida en principios de mercado libre82. Con éstas acciones, los pequeños productores rurales -máximamente los del centro y sur del país; temporaleros- fueron gravemente afectados. Si bien, estos efectos adversos se compensan en parte por su propia dualidad -productores y consumidores-, por las bien conocidas prácticas del compadrazgo (Santiago, 2004: 82; De la Fuente, 1998: 24-25; Barabas, 2003) o por la incorporación de fuentes adicionales de ingreso, el efecto final ha sido un creciente volumen de desempleados rurales (Yunez, 2000: 334; Aragonés, 2001: 323; Calva, 1996: 167-171). No obstante y pese a las fuertes embestidas referidas, resulta evidente que esta organización mantiene su vigencia en el país; es el perenne deterioro del nivel de vida en el sector rural83 que incita a que los hogares reorienten sus recursos productivos, flexibilizando los patrones tradicionales de reproducción para tolerar nuevas actividades en su interior. Aunque esta diversificación 81 Ésta es una situación típica para los países deudores, el FMI prácticamente los obligaba a adoptar dichas líneas de política económica de estabilización: recortes de gasto público, crédito restrictivo, venta de activos entre otras. 82 En México ésta política incluyó: devaluación, caídas del salario real, reducción de los controles de precios, eliminación de subsidios y precios de garantías en los cultivos básicos, reforma del artículo 27, desincorporación de los distritos de riego y de Conasupo, y la privatización del crédito agrícola. 83 También debe agregarse la ubicación geo espacial, comúnmente en localidades carentes de infraestructura de desarrollo con limitada oferta de servicios (presas, carreteras, comunicaciones, transporte). Situación que los aísla frecuentemente de las opciones de progreso que podrían tener ante la presencia más o menos funcional de los mercados de trabajo, productos, crédito y seguros. 269 contrarresta las condiciones del medio rural, existe evidencia insuficiente para sostener o rechazar que contribuya a reducir totalmente los efectos negativos. Aun así, los hogares persisten en sobrevivir de tal forma que en México constituyen el componente mayoritario de las unidades agropecuarias y junto con los campesinos sin tierra, forman una proporción importante de la oferta de trabajo nacional (Yunez, Taylor y Becerril, 2000: 101). Finalmente diremos que una situación no tan visible de las unidades domésticas, es la forma en que han tenido que incorporar actividades económicas adicionales y otras que no son propiamente productivas como la migración internacional pero que aportan una buena cantidad de ingresos, ni tampoco el mecanismo por el cual actividades otrora tradicionales han tenido que ser demeritadas en las prácticas del hogar. Este es el sentido del presente trabajo, aportar el análisis de las prácticas productivas de la unidad doméstica concretamente en la comunidad indígena zapoteca, del Estado de Oaxaca. El énfasis está puesto sobre la evolución ocurrida en la importancia asignada a las actividades económicas del hogar, antaño piedra angular en el sostenimiento del hogar y que ahora se encuentran en retroceso y la incorporación de nuevas actividades, ya no meramente de subsistencia pero que sin embargo constituyen su nueva base económica. Un poco de teoría El análisis de la problemática campesina es un asunto añejo, ha sido abordado desde diferentes perspectivas en el transcurso del tiempo, pero ni ahora ni ayer se veían buenas perspectivas para ésta forma de organización social. No obstante puede advertirse, que las explicaciones dadas no incorporan características propias de las comunidades específicas, que sin duda es un trabajo que corresponde al investigador. Por ejemplo, en el Capital de Marx se plantea que el campesino que produce con sus propios medios de producción, o será transformado en un pequeño 270 capitalista que a la postre explotará el trabajo ajeno, o perderá sus medios de producción y se transformará en un trabajador asalariado más. A su vez, la obra de Chayanov sobre la organización de la unidad económica campesina, rechaza que todos los aspectos económicos del hogar se piensen en términos capitalistas cuando partes muy grandes de la vida económica como la esfera agraria funcionan y se organizan bajo formas no capitalistas. En éstas no aplica el concepto de trabajo salarial o precios de mercado, por lo que no deben aplicarse categorías económicas de análisis capitalista al estudio de estructuras económicas que no funcionan como tal. En esta “economía natural” la producción se orienta hacia la satisfacción de las necesidades de la unidad de producción y consumo; la cualidad más que la rentabilidad es lo importante. De estos planteamientos precursores, se han construido diferentes modelos de unidad doméstica. En el ámbito económico éstos han sido utilizados para explicar y cuantificar los aspectos económicos de un hogar, comúnmente típico en una comunidad rural. A modo de muestra, tenemos el modelo neoclásico de unidad doméstica (Barnum and Squire, 1979; Sing, Squire and Strauss, 1986), el cual considera que en las áreas agrícolas las unidades domésticas producen para venta y autoconsumo, que compran algunos insumos y proveen otros como el trabajo-. En este modelo, la unidad doméstica integra tres funciones que normalmente se analizan por separado en la teoría económica: trabajar, producir y consumir, con tres agentes aislados: productor, consumidor y trabajadores. Aquí la unidad doméstica se conjetura como entidad económica que maximiza beneficios mediante un óptimo nivel de producción, el cual es influido por el salario, los precios y la tecnología. En realidad solo maximiza beneficios respecto al trabajo, cuando la productividad marginal de éste iguala su salario; en relación al consumo incluyendo el ocio, éste se determina sujeto al ingreso y al tiempo total familiar (Barnum and Squire, 1979: 8). Otras maneras de mirar la vida campesina concuerdan y en algunos casos corroboran las predicciones teóricas esbozadas, pero en general cada vez se 271 aprecia una mayor divergencia entre las realidades detectadas que conciernen a la unidad doméstica campesina. Bonfil (1994), asevera que la economía practicada en las comunidades indígenas del país, es una de subsistencia y que ni la racionalidad económica, ni la acumulación materialista son motores de la producción. Para él, las relaciones de producción antagónicas y la diferenciación social no existen en estas comunidades (Bonfil, 1994: 37-38). En esta dirección Bartra (1993), considera factible que la economía campesina pueda constituir un modelo de desarrollo integral, socialmente justo y sustentable; empresas en busca de rentabilidad pero justicieras, portadoras de eficiencia técnica y económica, sensibles socialmente y con rostro humano. Sin embargo este argumento es duramente cuestionado por Cook (2005: 38), quien afirma que la visión de autosuficiencia alimentaria en la unidad doméstica no permite apreciar el germen de una cultura mercantil antiquísima mayormente en Mesoamérica. Para él, los intensos intercambios mercantiles acontecidos en esta región -e.g. los tianguis- han sido parte de los usos y las costumbres de las comunidades, reflejando una cultura mercantil más que de autosuficiencia. Para otro estudioso del tema como Warman (2003), el dinero y los bienes industriales son una necesidad para la economía indígena, ya que estructuralmente sólo algunos hogares pueden lograr la autosuficiencia alimentaria. Enfatiza que la diferenciación económica entre hogares y la acumulación de riqueza en las comunidades es una realidad cabalgante; la otrora solidaridad y equidad se diluye cada vez más (Warman, 2003: 212,215,240). Otros investigadores han advertido particularmente rasgos similares en comunidades zapotecas de Oaxaca. Por citar algunos, De la Fuente (1998), Stephen (1998) y Nader (1998), han revelado que en estas comunidades aunque las relaciones entre sus miembros no transcurren idealmente, es ésta la imagen que se empeñan en transmitir hacia el exterior. En suma, las diferentes evidencias y predicciones muestran que efectivamente desde hace bastante tiempo ya se preveía cierta evolución de la unidad 272 doméstica campesina hacia los procesos de acumulación capitalista. Sin embargo, los planteamientos dicotómicos –como en Marx- no consideran el cuadro cultural ancestral en el que transcurren las actividades de producción y consumo en las comunidades indígenas de este país. En contraste, el modelo que aportó Chayanov centró la atención en la satisfacción de necesidades, pero es discutible que lo siga siendo aun. En el modelo neoclásico de la unidad doméstica, la comunidad no tiene inclusión ya que fue diseñado para hogares típicos; la agregación ocurre bajo el supuesto de que todos responden de manera similar (Barnum and Squire, 1979: 9,12; Sing, Squire and Strauss, 1986: 425). Éste ni siquiera menciona la posibilidad de que un hogar decida producir a sabiendas de que tendrá pérdidas, o que destinará recursos que podría consignar en otra de mayor provecho económico. En este sentido, el análisis empírico de la unidad doméstica campesina debe contemplar por lo mínimo los aspectos de producción y consumo, pero también los de búsqueda de ganancias y acumulación de activos. En este sentido, el presente trabajo intenta analizar las prácticas productivas de la unidad doméstica campesina en la comunidad zapoteca de San Miguel, Oaxaca. El énfasis está centrado en la evolución de la importancia asignada a las actividades económicas del hogar que antaño constituían su piedra angular y que ahora se encuentran en retroceso, asimismo en la incorporación de nuevas actividades como la migración internacional o las artesanías, que aunque no son meramente de subsistencia ahora componen su nueva base económica, sin embargo éstas también entrañan conflictos con las formas tradicionales de organización con las funciona una buena cantidad de hogares en la comunidad. Para cometer tal objetivo, la presente investigación fue realizada mediante trabajo de campo llevado a cabo en los meses de mayo-septiembre de 2005. La comunidad de San Miguel 273 La comunidad zapoteca de San Miguel es típica84 en los Valles Centrales, se localiza a 37 kilómetros de la ciudad de Oaxaca Capital, sus orígenes datan de los años 1400. Sin embargo su urbanización es relativamente nueva. Apenas en 1962 se inició la construcción de la carretera que la une con su cabecera municipal –tres kilómetros-, la cual fue pavimentada apenas en 1996. Actualmente la comunidad cuenta con un jardín de niños, dos escuelas primarias y una escuela tele secundaria; tiene además una clínica de salud, una agencia municipal, una oficina de bienes comunales, un templo del siglo XVII, un panteón, un mercado, un módulo de turismo, una terminal de transporte y una caseta telefónica privada. San Miguel cuenta con una población de 2 509 habitantes que viven dentro de la comunidad y otros 845 registrados con residencia fuera de ésta, principalmente en E.U. Aquí, los hogares practican la agricultura de temporal – maíz, fríjol y calabaza-, se rigen por usos y costumbres y realizan una serie de actividades económicas adicionales (artesanía asalariada, traspatio y migración) con las que solventan su mantenimiento diario. Oficialmente se tiene registrado que 38% de la PEA labora en el sector primario, 55% en el sector secundario (en este sector se contabiliza la artesanía) y 7% en el terciario. No obstante, es alrededor del 95% de los trabajadores quienes perciben a lo mucho 2 salarios mínimos mensuales de ingreso. Es una comunidad donde los hogares a pesar de que disponen de bienes de manufactura moderna, aun mantienen vigente el uso de bienes ancestrales. Por ejemplo, alrededor del 90% de los hogares cocinan usando leña como combustible, muelen el maíz y los chiles en metate, hacen sus propias tortillas y utilizan cazuelas de barro. Asimismo éstos se organizan de acuerdo con sus lazos de parentesco; familias e individuos se integran en redes que se amplían según los compromisos de compadrazgo o matrimonio contraídos, esto sirve 84 Se afirma que la raíz zapoteca tiene al menos dos mil años en los Valles Centrales de Oaxaca (Nader, 1998: 39; Cordero, 1982); vid, el Instituto Nacional Indigenista http://www.emexico.gob.mx 274 para enfrentar de mejor manera las recesiones económicas en el hogar. Acogen personas adicionales, que al interior siguen llamando familia (padres, nietos, nueras, yernos, amigos); casi el 20% de los hogares son de estructura extendida. Aun se aprecia que los hogares nuevos, son establecidos a corta distancia de sus familias. Finalmente diremos que las familias enteras trabajan en la transmisión de las buenas costumbres y normas comunales, se busca controlar cualquier comportamiento violento de los ciudadanos hacia sus congéneres o hacia las normas de la comunidad. Es visible que entre los hogares existe un fuerte consenso de que la responsabilidad en el cuidado de los hijos y las acciones de estos hacia la comunidad, es una tarea familiar. En la comunidad se practica un sistema de gobierno por usos y costumbres85; este sistema de cargos políticos y religiosos, es el núcleo de la vida comunitaria. Las responsabilidades en el funcionamiento y organización tanto a nivel administrativo municipal como espiritual, se asignan entre los hombres adultos jefes de familia en asamblea general; no votan los niños ni las mujeres. Los cargos asignados duran un año, inician a los 15 años de edad como policía auxiliar y terminan con la designación de encargado del templo; en el intermedio existen cargos menores como las vocalías: salud, escuela, obras, agua potable, forestal y colindancias entre otros. El cargo inicia en enero y termina entre diciembre o enero del siguiente año; por lo general, los lugareños descansan un año antes de volver a servir a la comunidad. En total una persona otorga a la comunidad entre 10-15 años de su vida en cumplimiento de diversas funciones, absolutamente todos sin recibir pago alguno86. 85 El gobierno por “usos y costumbres”, es un sistema de elección de autoridades reconocido jurídicamente por la legislación electoral del Estado de Oaxaca hasta 1995. En la actualidad 418 de los 570 municipios que conforman la entidad se rigen por este sistema; tratándose mayoritariamente de municipios indígenas. 86 Por ejemplo, el c. Alberto… quien cuenta con 73 años de edad y -según recuerda-, tiene en su haber los siguientes cargos cumplidos: topil de iglesia, vocal de carretera, mayordomo de pascua, mayor de vara, suplente de agente, encargado de templo, tesorero de templo, topil de templo, cobrador del fuego artificial, policía en dos ocasiones, topil de vara, mayordomo, vocal del patriótico, tesorero del patriótico, cabo auxiliar; entre los que recuerda. En todos ellos, la rutina fue la misma, un año de servicio a la comunidad, sin recibir apoyo económico alguno, en todos fue elegido porque cumplió satisfactoriamente el cargo anterior. En los primeros cargos fungió como vigilante de la comunidad, en otros de mayor jerarquía le fueron encomendadas 275 Transformaciones en la comunidad La transformación de San Miguel ocurre paralelamente a las modificaciones del entorno regional cada vez más monetizado, la irregularidad de las lluvias también abona al proceso, el crecimiento propio de la comunidad, la difusión de nuevas ideas por la radio, y la propia necesidad de satisfacer sus necesidades básicas mediante aquellos medios monetarios que el mercado regional exigía, son factores detonantes de los cambios estructurales acaecidos. De las transformaciones más visibles en esta comunidad, se encuentran aquellas relacionadas con la estructura física de los hogares, vestimenta y el uso frecuente de la compra venta. Hasta antes del 1970, las casas se construían con cucharilla del campo (paja), carrizo y quiote del maguey, por lo general tenían piso de tierra y se localizaban principalmente dispersas en el cerro, cada familia vivía y cuidaba “sus tierras”, que en algunos casos rebasaba las 20 hectáreas. El lugar donde ahora se ubica la comunidad, estaba desolado, lleno de hierbas, árboles y barrancas. En ese tiempo las cosechas eran buenas y poco utilizaban el dinero como medio de cambio. A medida que las lluvias comenzaron su irregularidad en los setenta y el uso de efectivo se volvió frecuente en el mercado regional, la necesidad los empujo a buscar un lugar cerca del centro urbano para salir en busca de empleos. Ahora los hogares se construyen de ladrillo con piso y techo de cemento. A diferencia de cuando los materiales para construcción provenían del cerro, en la actualidad los gastos en construcción y restauración, provienen esencialmente de las remesas internacionales. Antaño, el calzón y la camisa de manta blanca, sombrero y tejidos de lana constituían la vestimenta de los hombres, las mujeres por su parte vestían túnica blanca adornada al cuello con hilos de distintos colores, el pelo se amarraba con trencillas de lana negro y se acostumbraba enrollarse en cobijas de lana color gris y las llamadas “Biug”, elaboradas en el tareas de mayor responsabilidad conforme fue madurando y su importancia en la comunidad fue creciendo, fue mayordomo hasta que su condición económica le permitió alimentar su hogar, sus hijos y solventar los gastos de la fiesta. 276 hogar. Para entonces, el amole, la raíz de chomizo y el camote del monte, servían como detergentes para la ropa. Ahora ya solamente las mujeres mantienen esta tradición, del mismo modo que integran el uso de lavadoras, detergente comercial, planchas eléctricas y horno de microondas o dvd. Transformaciones importantes vienen ocurriendo en el ancestral sistema de cargos. Antes que otra cosa, los cargos son indicadores de prestigio. En el caso de algunos de ellos, como los mayordomos la importancia se vuelve regional en virtud de que invitan gente de otras comunidades (compadres, ahijados), los hospedan y alimentan; después la situación es a la inversa. Esta importancia viene empujando en los últimos años, sobre todo a la gente instruida o de posición económica holgada (como los emigrantes) a buscar su inserción en aquellos que no se encuentran hasta debajo de la ordenación tradicional (e.g. topil). Los cargos se siguen cumpliendo, pero ahora la comunidad permite que la persona originalmente asignada, se libere de tal tarea sólo con desembolsar el pago equivalente a otro nativo para que lo sustituya en sus funciones de manera total. Los pagos oscilan entre $100 pesos diarios y de $15 000 a $18 000 pesos anuales. Otra opción es que un familiar lo remplace87; pero negarse no es valido. Los pagos surgen esencialmente porque los migrantes no están presentes en la comunidad y porque son ellos quienes pueden pagar. En algunos otros cargos como las vocalías, los responsables se pueden rolan por días o semanas de cumplimiento, de este modo pueden laborar sus tierras o telares en los días liberados para obtener su propio sustento. Asimismo, hace apenas unos años que las mujeres empiezan a ser incorporadas en el sistema de cargos. De igual forma algunas niñas han sido añadidas para cumplir tareas de promoción de salud, se desempeñan un año y no vuelven a ser llamadas. Resalta que antaño las mujeres adultas no cumplían cargos de ningún 87 Los arreglos más frecuentes ocurren entre migrantes nacionales e internacionales y entre familiares que ya no residen en la comunidad. la forma que asumen consiste en que uno cubre su cargo y al año siguiente cubre el del familiar, a cambio cuando le vuelve a tocar cargo directo, el familiar vendrá a cubrirlo, eso le permite laborar entre 2-3 años en E.U. a ambos. 277 tipo, pero ahora la comunidad determinó asignarles sobre todo a las esposas de migrantes. Todo surge a razón de que las familias no migrantes se quejaron de hacer el esfuerzo por la comunidad mientras los que tienen migrantes lo disfrutan, básicamente las mujeres quienes permanecen en ésta. De este modo al considerar que los maridos tienen mejores ingresos en los Estados Unidos, la asamblea determinó que las esposas hagan un espacio en sus funciones domésticas para aportar a la comunidad. Variantes similares son apreciadas también en comunidades zapotecas vecinas –como la cabecera municipal-. En ésta, a las mujeres viudas o dejadas les asignan el cargo de atender la tienda DICONSA, encender el alumbrado público, recoger la comisión que aportan los parceleros al ejido, promoción de salud. En otra comunidad zapoteca distante geográficamente como San Francisco Cajonos, las niñas son responsables de lavar vasos, y hacer el aseo en la iglesia. Otra institución ancestral que resiente marcadas modificaciones, es la Guelaguetza, también llamada Guetza en San Miguel y Gozona en otras comunidades88. En esta comunidad ya solo funciona para fiestas, funerales y la mayordomía, pero es de uso limitado en las actividades agrícolas, cuna original. La guetza emana de la falta de recursos para pagar peones, y porque a decir de los pueblerinos, es más relajante trabajar platicando y comentando entre compañeros y familiares. Anteriormente la mayoría de hogares en San Miguel trabajaba con guetza, ahora menos del 10% de éstos recurre a ella para solventar alguna fase agrícola. Una razón –esgrimida por los pobladores- es que los hombres jóvenes están emigrando, las lluvias son bastante irregulares y con la llegada de remesas los hogares no necesitan sembrar puesto que el maíz comprado es más barato. A la par, el ingreso salarial de los textiles contribuye en la compra de los alimentos. Desde una perspectiva más general, puede decirse que los intercambios recíprocos se están reduciendo en las 88 Este ancestral sistema de ayuda mutua, consiste en otorgar apoyos de una familia hacia otra, en especie (animales, maíz, fríjol), en trabajo para construir casa, trabajar en la parcela u otro. El apoyo es un tipo de préstamo que será retribuido por la familia receptora cuando aquella que dona, lo requiera; en algunos casos esto puede tardar años. 278 comunidades, a causa del avance de las relaciones monetizadas (Barabas, 2003: 39). La mayordomía es otra institución notable donde se aprecian cambios radicales. Aunque todavía se aprecia como devoción hacia el santo patrono, comienza por dominar la esencia de mecanismo de promoción social (Cordero, 1982: 52). Por citar, el mayordomo de la fiesta 2004 gastó alrededor de $80 000 pesos89; invitó música, comida, bebida y cuetes. El dinero procedió de sus tres hijos migrantes (2 500 dólares), bienes y servicios por guetzas (30 000 pesos) y ahorros propios (personalmente aportó 3 marranos y 20 pollos que tenía engordando desde que le asignaron el cargo, el costo de la banda ($4 000), la misa y las flores de adorno). En suma, realizó un gasto 30 veces mayor al necesario que implica el cargo, el cual consiste en pagar el rosario, velas y flores90. Aunque vale decir que este gasto “conspicuo”, redistribuye el ingreso comunal. Los apoyos recibidos por guetza, se entregaron en la casa del mayordomo, fueron anotados de común acuerdo siguiendo las características de cada bien, esto a razón de que la devolución será de manera similar. No obstante desde ahora el mayordomo sabe que devolverá bienes –nunca dinero- en mayor cuantía; por un lado para corresponder al gesto de apoyo, y por otro para que ahora le deban a él. Ejemplos de bienes que recibió el mayordomo y la forma en que fueron anotados, es como sigue: “Un pollo de 3.750 kg, de engorda, blanco, joven”, “3 paquetes de cigarros faros chicos de 15 cajetillas”,” ½ fanega de maíz blanco larguito”, “9.5 kg de asadura”, “un guajolote de 5 kg”, “2 kg de chile guajillo, 3 pollos de engorda de 3 kg cada uno”… La voluntad del servicio, la fe en el santo, la búsqueda del reconocimiento a sus dones de buena persona por parte del pueblo, siguen vigentes en la búsqueda de 89 El mayordomo fue el C, Fausto Policarpo, entrevistado en su casa el 18 de Junio de 2005. Un repunte en el interés por asumir el cargo de mayordomos, sobre todo por los migrantes, se advierte en la comunidad de Santa Ana del Valle (Cohen, 2001:962). Igualmente situaciones de gasto exagerado en la mayordomía son advertidas en comunidades de la Mixteca poblana (Rivera, 2003: 10). 90 279 la mayordomía, sin embargo este cargo recién comienza a deslucirse. A decir de algunos pobladores, antes los mayordomos de la comunidad eran personas mayores y respetables, en la actualidad jóvenes de 25 y 30 años de edad ya quieren ser mayordomos; ahora lo hacen especialmente para lucirse y pasar por importantes a la vista de todo el pueblo. En las actividades productivas, la búsqueda de ganancias no determina la importancia que éstas tienen en el hogar. Por ejemplo, en las actividades extensivamente practicadas en la comunidad, la valoración que se hace entre agricultura, artesanía y migración es en apariencia irracional, mientras la agricultura proporciona alimentos y en ocasiones ni siquiera eso, la artesanía aporta dinero en efectivo en mayor cantidad que aquella, la migración a su vez contribuye con remesas en alta proporción al hogar, no obstante en éstos aun se asigna una mayor importancia a las actividades agrícolas, inclusive en aquellos que ya no la realizan. El campo es la actividad más importante para el hogar, porque participa toda la familia y de él se quedan con todo el producto91. No obstante, dicha importancia viene menguando conforme pasa el tiempo; en otros años las actividades agrícolas se realizaban en todos los hogares, ahora solo 70% de éstos realiza al menos una actividad relacionada. Este quebranto contrasta con la propia historia de la cultura zapoteca, ya que hasta hace unos años el culto del maíz se consideraba trascendental para su funcionamiento; de entre sus cultivos -maíz, fríjol, calabaza- sin duda éste era el rey del consumo (De la Fuente, 1960: 23-26; Flanery, 1999). El grano es tan importante que se afirma incluso que es de él, que nace la civilización Mesoamericana (Bonfil, 1994: 24,33). 91 En esta comunidad se practica principalmente la agricultura de temporal, siguiendo técnicas de siembra ancestral; caminar detrás de la yunta, soltar la semilla y tapar con el pie, en su caso utilizar azadón, pico y coa. 280 En función de que el maíz, aparte de ser el alimento también fungía como eje ordenador del propio territorio, antes la comunidad se ordenaba en función de las actividades agrícolas; las entradas a los corrales para los toros, los caminos hacia la milpa y los accesos al centro, fueron diseñados para darles fluidez. De igual manera, en el presente el retroceso de estas actividades impacta en el nuevo diseño de las casas y el tipo de activos que se acumulan; ahora se construye con ladrillo y cemento, se acumulan vehículos y telares para las artesanías; las casas son diseñadas con espacios interiores que albergan los autos y telares. A la pregunta de porqué sí la agricultura es una actividad con pérdidas continuas, ó por qué sí los esfuerzos familiares no se transforman en retornos de ingreso o producción se sigue practicando, los nativos responden que la inversión de fuerza de trabajo familiar se realiza en intervalos discontinuos, mientras que el producto se cosecha cuando es posible92 en una sola emisión; de no sembrarlo, se debe comprar. Otra explicación se refiere la calidad del grano que se obtiene de la cosecha propia; es contundente el arraigo de los hogares a consumir granos cultivados por ellos mismos, dado que aprecian una mayor calidad en los suyos que en aquellos expendidos a precios más económicos por la tienda “DICONSA”. Finalmente, el cultivo del maíz en cuanto costumbre, es también una actividad de enseñanza y educación de los hijos; es aquí donde los padres transmiten las primeras enseñanzas a sus hijos. Así, al reducirse las 92 La evaluación neta a precios de mercado de la producción en el 2004 (que no fue diferente a los años anteriores), sin considerar la fuerza de trabajo familiar, indica que algunas familias tuvieron beneficios económicos positivos, pero la mayoría fueron negativos. Una vez incorporado el valor del trabajo familiar, el resultado es contundente; todos registran pérdidas. La producción de maíz fue raquítica, desde una familia que no cosechó nada, una con tres kilos, hasta una que levantó cuatro toneladas. Y si bien los ingresos que tienen los hogares no compensan los desgastes de su propia fuerza de trabajo, en cambio son significantes en relación al gasto potencial que habrían de realizar en ausencia de cosecha. A precios de mercado del 2004, se estima un valor de la cosecha comunal total de $109 551 pesos, comparado contra lo que se hubiera gastado por consumir el grano en la tienda, tenemos un promedio de $1 000 pesos de ahorro por hogares. De acuerdo a los rangos de ahorro, 27 hogares ahorran hasta $200 pesos, 21 se ahorró entre $200-$400 pesos, 31 se ahorró entre $400-$1000 pesos, 28 de ellas se ahorró desde mas de $1000 hasta $12 500 pesos. Es decir, en los hogares se considera que tener la fuerza de trabajo postrada en el hogar no les garantiza emplearla en trabajo asalariado, por tanto la cosecha así trabajada proporcionan un respaldo económico real. 281 actividades agrícolas, se reduce también el contacto padre-hijo, y la enseñanza de las tradiciones como la guetza. Con relación a la artesanía textil de lana, es probable que de acuerdo con los registros y vestigios de la comunidad ésta se haya practicado desde tiempos antiguos; es muy posible que los primeros pobladores de San Miguel – presumiblemente de Teotitlán del Valle- ya trajeran consigo la habilidad para tejer sus cobijas y tapetes. Existe pues una larga y profunda tradición textil que ha venido pasando de padres a hijos, generando en la comunidad una especie de habilidad natural para tejer. Sin embargo desde los ochenta esta habilidad ha sido aprovechada comercialmente por vendedores de Teotitlán del Valle quienes subcontratan a los tejedores locales. Los acaparadores financian las actividades textiles mediante la dotación del hilo de lana natural, en algunos casos especifican el producto, pagan por piezas, en ocasiones hacen préstamos por adelantado, otras recurren al compadrazgo para asegurar peones tejedores. No obstante su efecto económico, la artesanía se relega para momentos de descanso agrícola y migratorio. Para el jefe de hogar, es una actividad ideada para mantener ocupada su familia93. Aunque no es considerada una actividad nuclear, es practicada extensivamente por alrededor del 70% de hogares y aporta más del 80% de los ingresos por salario en la comunidad. Aun así, es una actividad secundaria en parte porque no sienten suyo el producto que elaboran, incluso ni siquiera pueden comprarlo. Por ejemplo, una pieza pagada en la comunidad en $100.00 -cien pesos- es exhibida en el mercado a precio de entre $500-$800 pesos. 93 Por ejemplo, los ingresos por un día de trabajo a destajo fluctúan entre $80-$100 pesos, para un tejedor diestro que trabaje sin descanso y además reciba la ayuda de hijos y esposa, ya que el enrollado del hilo en las agujas implica bastante tiempo. Aunque el salario es para el marido. Por otro lado, los telares de uso en San Miguel son elaborados o comprados por el propio tejedor, instalados en el propio hogar, con esto ellos mismos costean su alimentación, no pagan renta de local ni gastos adicionales de producción. 282 Otras actividades económicas de particular importancia que de primera impresión no lo parecen, también son apreciadas en la comunidad. Por ejemplo, los pobladores –hombres y mujeres por igual- pasan mucho tiempo platicando diariamente con sus vecinos, parientes y ahijados en pleno día y en horas de trabajo; por las mañanas en el mercado y por las tardes frente al panteón. Cuando el tiempo así perdido se enmarca dentro de las costumbres locales, aparece sin duda como parte de la racionalidad económica de la comunidad; esta actividad les posibilita recibir regalos y apoyos a futuro, sean alimentos o algún otro bien. En el caso de las mujeres, ésta es una de las pocas formas de participación política que se les permite; son las interacciones en el traspatio, el molino y la plaza donde ellas pueden comentar cuestiones de la comunidad sin recibir reprimendas. Finalmente una de las actividades de incorporación más reciente en la comunidad, que está creciendo desproporcionadamente y que genera mayor ingreso que todas las demás, es sin duda la migración internacional. Ésta se origina en el programa bracero con la salida de cinco o seis migrantes. Al término de éste, solo unos pocos pobladores aun se arriesgaron en la migración aunque de manera indocumentada, como sucedió en otras regiones (Binford, 2004). En general, es hasta después del año 2000 que la migración se masifica; del 2000 al 2004 han emigrado de la comunidad alrededor del 65% de los emigrantes totales94. Aquí, la migración a diferencia de otras localidades del país, se compone esencialmente de los hijos varones del hogar, cuya edad oscila entre 14–30 años. Este patrón migratorio seguido por la comunidad es similar al que se aprecia en otras regiones del país; en Michoacán (Wiest, 1973; 1984: 63; Acevedo, 2000:148), en Guanajuato (Quiroz, Pérez, Barrios, 2000), en Puebla 94 Una de las razones que ofrece la población del porque no migraron en la época del programa bracero, es la falta del dominio del idioma español. Así, mientras que en otras comunidades se ha documentado que las historias que contaban los migrantes retornados había influenciado nuevas migraciones (Reichert, 1981; López, 1988), en ésta no había motivo que los empujara a migrar. 283 (Binford, 2004; Cordero Díaz, 2004; Lee, 2004), en Veracruz (Garrido, 2004). De igual forma que en otras comunidades (Binford, 2004), la masificación de la migración en ésta concuerda con los años de aplicación de políticas económicas neoliberales en el país y la consabida reducción en los apoyos a los pequeños productores rurales. No obstante, los migrantes de esta comunidad no migran por la acuciante necesidad económica, ya que sus actividades artesanales y de traspatio les permiten paliar en gran medida sus requerimientos de alimentos, esta característica la hace similar a otras comunidades (Lee, 2004), pero principalmente la distingue de otras donde ha sido la búsqueda de recursos para alimentación lo que ha empujado la migración (Dinerman, 1982; Wiest, 1983). En San Miguel, se migra buscando construir la casa, ahorrar para formar un patrimonio entre otros; ahora cuando los jóvenes desean casarse, comprar o construir la casa, su primera opción es marcharse a los Estados Unidos. En síntesis, la práctica de estas actividades económicas locales e internacionales, objetivas y subjetivas, proporciona una serie de ingresos a los hogares. Su contabilidad en esta comunidad se realizó agrupándolos en diferentes fuentes, para el año 2004. Dominan primordialmente los salarios y las remesas internacionales, ambos constituyen alrededor del 80% de los ingresos totales de los hogares. No obstante, esta comunidad presumiblemente igual que otras del país, no distribuye de manera homogénea los ingresos y activos que genera; el computo de los ingresos ratifica la existencia de desigualdad –aunque menor a la medida nacional- en la distribución de ambos indicadores. Conclusión Este artículo ha mostrado que la economía doméstica campesina en la comunidad zapoteca de San Miguel, no se encuentra totalmente inmersa en la búsqueda de autosuficiencia alimentaria como fue conjeturado en algún tiempo 284 (Chayanov, 1985; Bonfil, 1994), aunque este motivo sigue siendo una fuerza importante que tiene vigencia en la producción de alimentos básicos y ancestrales como el maíz, el fríjol y la calabaza entre los hogares. Su vigencia es tal, que éstos consideran como primera en importancia a la actividad agrícola aunque ésta ya se realiza cada vez menos y no les aporta en promedio ni siquiera una cuarta parte de sus requerimientos alimenticios. En cambio la actividad artesanal que provee a los hogares alrededor del 80% de los ingresos salariales o las remesas internacionales que provén alrededor de un tercio de los ingresos totales de la comunidad, aunque se les considera importantes, su importancia va detrás de la actividad agrícola. La valoración primaria de las actividades agrícolas en relación a las diversas fuentes salariales; asignar importancia primordial a una actividad productiva que no genera retornos y que no retribuye prácticamente nada, por sobre otras que en contraste les están cubriendo todas sus necesidades, presenta sin duda una contradicción en primea vista. No obstante como fue enunciado al principio, ésta y presumiblemente las comunidades de otras regiones del país, han tenido que enfrentar y soportar fuertes embestidas contra sus sistemas tradicionales de organización y producción, acciones derivadas las más de las veces por políticas económicas insensibles e ignorantes a la realidad sui generis que transcurre en su interior. De este modo, la comunidad ha tenido que aferrarse a su sistema, mediante la flexibilización para permitir el ingreso de nuevas modalidades y variantes en su sistema tradicional, como el pago por los cargos, el acceso a niveles no ordinario de iniciación, o la asignación de mayordomos que no cumplen cabalmente la rutina de ascenso tradicional, asimismo la incorporación de nuevas actividades productivas como la migración internacional o las artesanías por subcontratación. En todo caso, el análisis de San Miguel refleja la existencia de fuerzas fuera del ámbito económico mercantil que empujan la práctica de las actividades agrícolas tradicionales. El peso de la costumbre (alimentarse con su 285 producción), sigue siendo más importante que el beneficio económico que pudiera obtenerse de la cosecha, aunque vale decir, esta es una percepción compartida apenas por el grupo de mayor edad. En esta comunidad, incluso aquellos hogares que no realizan ninguna actividad agrícola valoran a ésta en primer lugar, esgrimen diversos argumentos pero uno es constante; el peligro de que un pueblo no pueda ni siquiera producir sus alimentos. En esta comunidad, la unidad doméstica presenta ambas facetas del proceso productivo con tan solo días y horas de diferencia. Un día son patrones otro son peones, no es apreciable como predijera Marx que los campesinos terminarían por ser patrones o peones. Por otro lado, es admirable como la conjetura de Chayanov mantiene su vigencia en esta comunidad pero solo enmarcada dentro de las estrategias socioeconómicas flexibles de reproducción de la unidad doméstica. La alimentación ya no se constituye en eje principal, ahora gran parte de recursos y energías del hogar han evolucionado hacia la obtención de salarios y activos, y esto es interesante, no dejan de reconocer la importancia que tiene la actividad agrícola y el peligro que su retroceso implica. El trabajo destaca también que los procesos de diferenciación socioeconómica entre los hogares están en marcha y se ven ampliamente alimentados por los fuertes flujos de ingresos que provienen del extranjero. La desigualdad económica en San Miguel como en otras del estado (San Pedro Mártir; De Teresa, 1994: 77) y del país, existe y es una realidad. Es decir, como han planteado Warman (2003) y Cook (2005), la economía doméstica campesina ya tiene un buen tiempo que ha reorientado su expectativa más hacia la acumulación de activos que hacia la consecución de la alimentación. Los activos posibilitan el acceso a mayor cantidad y calidad de bienes (incluido el tiempo familiar), pero es una situación que no deja de preocupar, ya que el acaparamiento de recursos productivos, si bien puede ser una faceta natural de su propio funcionamiento y reflejar un retorno que la propia economía asigna a la contribución de los factores productivos que poseen los hogares (Friedman y 286 Friedman, 1980), en teoría este aspecto no puede considerarse deseable ya que además de conducir al desarrollo económico desigual, impacta otras variables internas como el analfabetismo, la producción, el deficientemente uso de recursos técnicos y humanos, mayor atraso económico y desigualdad (Debraj, 1988; Alesina and Rodrik, 1994: 485). 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