Con Jesús hay vida y Reino de Dios SEMANA SANTA 2015 PARROQUIA DE LLARANES CON JESÚS HAY VIDA Y REINO DE DIOS “¿Con que tu eres Rey?. Sí. Para esto he nacido y para esto vine al mundo, para dar testimonio de la verdad” (Lc. 23, 3) La mayor originalidad de Jesús en su predicación, es ésta: Jesús es el único profeta judío que afirmó, con absoluto convencimiento, que el Reinado de Dios, anunciado y la salvación que éste implica, no es una mera promesa, sino una realidad. Y todavía más, que él mismo – Jesús – es el encargado de hacerlo presente y actuante. Recordemos lo que sucedió en la sinagoga de Nazaret: “Jesús volvió a Galilea por la fuerza del Espíritu,…“El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido para anunciar a los pobres la Buena Nueva, me ha enviado a proclamar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos, para dar la libertad a los oprimidos y proclamar un año de gracia del Señor”. … “Esta Escritura, que acabais de oír, se ha cumplido hoy”. (Lucas 4, 14-22) Dice José Antonio Pagola: “Todo el mensaje y la actividad de Jesús está al servicio del Reino de Dios y obtiene su sentido desde ahí. Jesús no habló simplemente de Dios, sino del Reino de Dios. No fue un teólogo dedicado a exponer teóricamente una doctrina de Dios, sino un profeta entregado a anunciar la causa de Dios entre los hombres. Jesús no ha pedido que se comprenda mejor la esencia de Dios. Ha buscado con todas sus fuerzas que Dios sea acogido entre los hombres y se imponga su reinado.” Esto quiere decir que lo que a Jesús le interesa por encima de todo, es que los seres humanos de todos los tiempos y de todos los lugares, abramos nuestro corazón y nuestra vida a Dios y a su bondad, y asumamos en nuestro comportamiento de cada día, lo que Él espera de nosotros: que lo amemos con todo el corazón, y que nos amemos mutuamente, unos a otros. Nuestra fe cristiana católica, no es, ni puede ser, de ninguna manera, una simple aceptación teórica de una determinada concepción de Dios, sino sobre todo, la búsqueda activa y constante del Reino de Dios, del reinado de Dios en el mundo – aquí y ahora, y por toda la eternidad -, y junto con él, el reinado de la verdad, de la justicia, de la fraternidad, de la libertad y de la paz que de Él proceden. Así lo dijo Jesús a sus discípulos: “Buscad primero el Reino de Dios y su justicia, y todas las demás cosas se os darán por añadidura” (Mateo 6, 33). Es una condición básica para construir una sociedad nueva; una sociedad en la que Dios reine desde el corazón de los seres humanos que la conforman; una sociedad en la que Dios sea a la vez, la meta y el camino, el principio y el fin, y el centro en el que todo confluye. La verdadera felicidad no nos la dan los bienes materiales que poseamos, sino la presencia de Dios en nuestro corazón y en nuestra vida, porque somos sus hijos, y esta es nuestra realidad más íntima y verdadera. El amor a Dios y el amor por los demás es la clave de la esencia humana. Cuando amamos de verdad somos más humanos, y al hacernos más humanos nos hacemos también mejores hijos e hijas de Dios. Seamos, como nos dice el Papa Francisco, una Iglesia en salida, una Iglesia misionera, una Iglesia en continua renovación y conversión, una Iglesia de puertas abiertas, que acompañe con misericordia y paciencia todas las etapas del crecimiento de las personas. Página 3 Con Jesús hay vida y Reino de Dios Presentación general de la Semana Santa Domingo de Ramos Jesús es el Salvador –El Mesías- PRINCIPALES IDEAS DE LA SEMANA SANTA “Con Jesús hay vida y Reino de Dios” Acompañamos la Pasión del Señor recordando a los que sufren en nuestra sociedad y queriendo comprometernos a ayudarles compasivamente. DOMINGO DE RAMOS: Jesús es el Salvador –El Mesías- Jueves Santo La novedad del evangelio que encarna Jesús es una vida en compasión solidaria ante el sufrimiento de la gente, especialmente con las personas y colectivos más excluidos. JUEVES SANTO: Jesús es el amor, la entrega. Jesús es el amor, la entrega Viernes Santo Jesús es el ejemplo, el compromiso definitivo. Vigilia Pascual Jesús es la vida, la resurrección Pascua de Resurrección Jesús es el Cristo triunfante que nos lleva a Dios. En busca de nuevos samaritanos para tiempos de hoy”. Desde una profunda relación con Jesús, respondemos con un amor entregado a los necesitados. Es testamento de Jesús es el servicio. VIERNES SANTO: Jesús es el ejemplo, el compromiso definitivo. Amar compasivamente al modo de Jesús. Morir y vivir amando hasta el extremo. Hay cruces que no son cristianas sino legitimadoras del dolor y la injusticia. VIGILIA PASCUAL: Jesús es la vida, la resurrección. La resurrección nos cambia la mirada para detectar el verde de la esperanza. Es un día de fiesta de gozo, Cristo a Resucitado, la Tumba está vacía, la humanidad está salvada, ahora es momento de abrazar esa salvación testificando una verdadera vida cristiana. DOMINGO DE PASCUA: Jesús es el Cristo triunfante que nos lleva a Dios. La Resurrección nos “primerea” en el amor y nos invita a hacer de la vida una fiesta permanente y no una pesadilla. Primerear: “Tomar la iniciativa, sabiendo que habrá éxito” Con Jesús hay vida y Reino de Dios Página 4 Domingo de Ramos Domingo de Ramos Jesús es el Salvador - el Mesías Monición de entrada Seis días antes de la solemnidad de la Pascua, cuando Jesús subía a la ciudad de Jerusalén, los niños, con palmas y ramos, salieron a su encuentro y con júbilo proclamaron: ¡Hosanna en el cielo! ¡Bendito tú que vienes y nos traes la salvación de Dios! Como los niños de Jerusalén, aclamemos también nosotros hoy al Señor, nuestro Rey y Mesías, al comenzar este camino de Semana Santa. Puestos de pie recibimos al sacerdote. extendía sus mantos sobre el camino a medida que iba avanzando. Al acercarse a la bajada del monte de los Olivos, la multitud de los discípulos comenzó a alabar a Dios a gritos, con gran alegría, por todos los milagros que habían visto. Decían: «¡Bendito el que viene como Rey, en el nombre del Señor! ¡Paz en el cielo y gloria en lo más alto de los cielos!» Algunos fariseos que se encontraban entre la gente dijeron a Jesús: «Maestro, reprende a tus discípulos.». Pero él contestó: «Yo os aseguro que si ellos se callan, gritarán las piedras.» Oración para la bendición de ramos En el nombre del Padre... Jesús es el Salvador –El Mesías-. La novedad del evangelio que encarna Jesús es una vida en compasión solidaria ante el sufrimiento de la gente, especialmente con las personas y colectivos más excluidos. Que Jesucristo, el Señor, cuya entrada en Jerusalén aclamado por todos como el Enviado de Dios, celebramos hoy, esté con todos vosotros. Dios Padre nuestro, igual que los sencillos de corazón reconocen a Jesús como el Señor, te pedimos que todos nosotros vivamos de tal modo que merezcamos estar junto a Ti. Que estos ramos +, signo de nuestra alegría y gratitud, nos recuerden la tarea de ser en el mundo testigos de la paz, de la vida y de la alegría. Aspersión y canto) Lectura del evangelio de San Marcos “Dicho esto, Jesús pasó adelante y emprendió la subida hacia Jerusalén. Cuando se acercaban a Betfagé y Betania, al pie del monte llamado de los Olivos, Jesús envió a dos de sus discípulos y les dijo: «Vayan al pueblo de enfrente y al entrar en él encontrarán atado un burro que no ha sido montado por nadie hasta ahora. Desátenlo y tráiganmelo. .Si alguien les pregunta por qué lo desatan, contéstenle que el Señor lo necesita.» Fueron los dos discípulos y hallaron todo tal como Jesús les había dicho. Mientras soltaban el burro llegaron los dueños y les preguntaron: «¿Por qué desatan ese burro?» . Contestaron: «El Señor lo necesita.» Trajeron entonces el burro y le echaron sus capas encima para que Jesús se montara. La gente Colocamos junto a la cruz que preside nuestras celebraciones ramos de olivo y laurel Canto: Los niños hebreos Los niños hebreos, llevando ramos de olivo, Salieron al encuentro del Señor aclamando: “¡Hosanna en el cielo, hosanna en el cielo, Hosanna en el cielo!” Portones, ¡abrid los dinteles, Que se alcen las puertas eternas, Va a entrar el Rey de la gloria, Héroe valeroso y Dios de Israel. Con Jesús hay vida y Reino de Dios Domingo de Ramos Página 5 Monición Lectura del profeta Isaías Hermanas y hermanos, desde hace cinco semanas nos venimos preparando de modo especial para las grandes celebraciones que ahora comienzan. Mi Señor me ha dado una lengua de iniciado, para saber decir al abatido una palabra de aliento. Cada mañana me espabilaba el oído, para que escuche como los iniciados. El Señor me abrió el oído; y yo no resistí ni me eché atrás: ofrecí la espalda a los que me apaleaban, las mejillas a los que mesaban mi barba; no me tapé el rostro ante ultrajes ni salivazos. El Señor me ayuda, por eso no sentía los ultrajes; por eso endurecí el rostro como pedernal, sabiendo que no quedaría defraudado. Palabra de Dios Hoy, cercana ya la noche santa de la Pascua, nos disponemos a inaugurar, en comunión con toda la Iglesia, la celebración anual de los misterios de la pasión y resurrección del Señor, que comenzaron con su solemne entrada en Jerusalén. Acompañar con ramos al «Príncipe de la paz» habrá de ser siempre, y más en estos momentos, un compromiso. Acto penitencial Sacerdote: En unos momentos de silencio pidamos ahora al Señor que nos perdone. -Tú, que te entregaste por nosotros, Señor, ten piedad. -Tú, que caminas hacia la cruz, Cristo, ten piedad. -Tú, que nos ayudas en nuestro caminar por la vida, Señor, ten piedad. Dios todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone ... Canto del Gloria Oración Señor Jesús, al comenzar esta semana santa queremos pedirte por todos los desafíos que encontramos a diario en nuestra vida de cristianos. Queremos poner en tus manos nuestras esperanzas de un mundo nuevo, de una fraternidad verdadera. Te lo pedimos a Ti, que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén LITURGIA DE LA PALABRA Salmo responsorial Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? Al verme, se burlan de mí, / hacen visajes, menean la cabeza: / "Acudió al Señor, que lo ponga a salvo; / que lo libre, si tanto le quiere." R. Me acorrala una jauría de mastines, / me cerca una banda de malhechores; / me taladran las manos y los pies, puedo contar mis huesos. R. Se reparten mi ropa, / echan a suertes mi túnica. / Pero tú, Señor, no te quedes lejos; / fuerza mía, ven corriendo a ayudarme. R. Contaré tu fama a mis hermanos, / en medio de la asamblea te alabaré. / Fieles del Señor, alabadlo; / linaje de Jacob, glorificadlo; / temedlo, linaje de Israel. R. Con Jesús hay vida y Reino de Dios Domingo de Ramos Página 6 Lectura de la carta del Apóstol San Pablo C. Ellos gritaron de nuevo: a los filipenses S. "¡Crucifícalo!" Cristo, a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de Dios; al contrario, se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo, pasando por uno de tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebajó hasta someterse incluso a la muerte, y una muerte de cruz. Por eso Dios lo levantó sobre todo y le concedió el "Nombre-sobre-todo-nombre"; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo, y toda lengua proclame: Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre. Palabra de Dios C. Pilato les dijo: S. "Pues, ¿qué mal ha hecho?" C. Ellos gritaron más fuerte: S. "¡Crucifícalo!" C. Y Pilato, queriendo dar gusto a la gente, les soltó a Barrabás; y a Jesús, después de azotarlo, lo entregó para que lo crucificaran. Los soldados se lo llevaron al interior del palacio -al pretorio- y reunieron a toda la compañía. Lo vistieron de púrpura, le pusieron una corona de espinas, que habían trenzado, y comenzaron a hacerle el saludo: S. "¡Salve, rey de los judíos! Pasión de nuestro Señor Jesucristo según C. Le golpearon la cabeza con una caña, le escupieron; y, doblando las rodillas, se postraban ante él. San Marcos Terminada la burla, le quitaron la púrpura y le puC. Apenas se hizo de día, los sumos sacerdotes, con los ancianos, los escribas y el Sanedrín en pleno, se reunieron, y, atando a Jesús, lo llevaron y lo entregaron a Pilato. Pilato le pregunto: S. "¿Eres tú el rey de los judíos?" C. Él respondió: +. "Tú lo dices." C. Y los sumos sacerdotes lo acusaban de muchas cosas. Pilato pregunto de nuevo: S. "¿No contestas nada? Mira cuántos cargos presentan contra ti." C. Jesús no contesto más; de modo que Pilato estaba muy extrañado. Por la fiesta solía soltarse un preso, el que le pidieran. Estaba en la cárcel un tal Barrabás, con los revoltosos que habían cometido un homicidio en la revuelta. La gente subió y empezó a pedir el indulto de costumbre. Pilato les contestó: S. "¿Queréis que os suelte al rey de los judíos?" C. Pues sabía que los sumos sacerdotes se lo habían entregado por envidia. Pero los sumos sacerdotes soliviantaron a la gente para que pidieran la libertad de Barrabás. Pilato tomó de nuevo la palabra y les preguntó: S. "¿Qué hago con el que llamáis rey de los judíos?" sieron su ropa. Y lo sacaron para crucificarlo. A uno que pasaba, de vuelta del campo, a Simón de Cirene, el padre de Alejandro y de Rufo, lo forzaron a llevar la cruz. Y llevaron a Jesús al Gólgota (que quiere decir lugar de "la Calavera"), y le ofrecieron vino con mirra; pero él no lo aceptó. Lo crucificaron y se repartieron sus ropas, echándolas a suerte, para ver lo que se llevaba cada uno. Era media mañana cuando lo crucificaron. En el letrero de la acusación estaba escrito: "El rey de los judíos". Crucificaron con él a dos bandidos, uno a su derecha y otro a su izquierda. Los que pasaban lo injuriaban, meneando la cabeza y diciendo: S. "¡Anda!, tú que destruías el templo y lo construías en tres días sálvate a ti mismo bajando de la cruz." C. Los sumos sacerdotes con los escribas se burlaban también de él, diciendo: S. "A otros ha salvado, y a sí mismo no se puede salvar. Que el Mesías, el rey de Israel, baje ahora de la cruz, para que lo veamos y creamos." C. También los que estaban crucificados con él lo insultaban. Al llegar el mediodía, toda la región quedó en tinie- Con Jesús hay vida y Reino de Dios Página 7 Domingo de Ramos blas hasta la media tarde. Y, a la media tarde, Jesús clamó con voz potente: +. "Eloí, Eloí, lamá sabktaní." C. Que significa: +. "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?" (Pausa: Canto…) Dios mío Díos mío, Díos mío, porque me has abandonado... C. Algunos de los presentes, al oírlo, decían: S. "Mira, está llamando a Elías." C. Y uno echó a correr y, empapando una esponja en vinagre, la sujetó a una caña, y le daba de beber, diciendo: S. "Dejad, a ver si viene Elías a bajarlo." C. Y Jesús, dando un fuerte grito, expiró. El velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo. El centurión, que estaba enfrente, al ver cómo había expirado, dijo: Sacerdote: Unidos con Cristo, muerto en la cruz para dar vida a todo hombre, oremos a Dios nuestro Padre. Respondamos diciendo: Escúchanos, Padre. Lector: Para que crezcan en el corazón de todos los hombres sentimientos de generosidad, de perdón y de amor. Oremos. • Para que la fuerza de la pasión de Cristo renueve a la Iglesia y la convierta en servidora decidida de los pobres y de todos aquéllos a quienes el mundo deja de lado. Oremos. • Para que contribuyamos a que la luz del evangelio ilumine y fecunde a todos los pueblos de la tierra. Oremos. • Para que la paz, y no el mero cese de la violencia, se instale entre los hombres. Oremos. • Para que la celebración de la muerte y resurrección de Jesús haga de nosotros fieles seguidores suyos. Oremos. Sacerdote: Dios, Padre nuestro, escucha la oración de tu pueblo y haz que acoja la salvación, que, por su pasión, nos ha conseguido tu Hijo, que vive y reina por los siglos de los siglos. S. "Realmente este hombre era Hijo de Dios." Palabra del Señor Canto de ofertorio: Suba hacia Ti Dios mi esperanza. Él será mi Salvador. He puesto en Ti mi confianza, Sé mi baluarte, Señor. Homilía. Oración de los fieles Suba hacia Ti de mi canto el rumor, Como un incienso que asciende en tu honor. Cuando se alarga la espera, Cuando es de noche en la Cruz, Para salir a tu encuentro Pon en mi lámpara luz. Pon, oh Señor, en mi lámpara luz. Signo celebrativo: Se puede presentar como ofrendas los carteles de nuestro recorrido cuaresmal con la siguiente oración: “Te presentamos, Señor, el sufrimiento de tantas personas que en el mundo sufren, a las que quisimos acompañar durante todo el tiempo de Cuaresma” Con Jesús hay vida y Reino de Dios Oración sobre las ofrendas El pan nos hace presentes a tantos necesitados de trabajo, de ánimo y de alegría. Haz que derramemos alguna gota de amor solidario en un momento de la historia especialmente hambriento de luz que aclare el futuro de tanta incertidumbre. Que tu copa rebose del vino de la fraternidad y nos impregne de tu espíritu de vida y de unión. P.C.N.S. Domingo de Ramos Página 8 das a nuestra oración: extiende tu misericordia sobre la tierra para que los pobres, los hambrientos, los solos, los afligidos, los enfermos, puedan gozar de los frutos de tu bondad. Acoge a los que nos han precedido y duermen en el sueño de la paz. PLEGARIA EUCARÍSTICA En verdad es justo y necesario alabarte y bendecirte, Padre bueno santo. Porque Cristo nuestro Señor, siendo inocente, sufrió la injusticia para perdonarnos, y la muerte para darnos la vida. Nos amó hasta el extremo y a nos enseña a todos a vivir en fraternidad, luchando por la justicia, defendiendo la vida, confiando en que un día estaremos para siempre junto a Ti. Por eso queremos proclamar sin cesar que eres: Por Cristo.... Padre Nuestro Oración de la paz Fue perseguido, acorralado, traicionado. Señor Jesucristo, que eres llamado Príncipe de la Paz, que eres Tú mismo nuestra paz y reconciliación, que tan a menudo dijiste: "La Paz contigo, la paz les doy." Haz que todos hombres y mujeres den testimonio de la verdad, de la justicia y del amor fraternal. Destierra de nuestros corazones cualquier cosa que podría poner en peligro la paz. Ilumina a nuestros gobernantes para que ellos pueden garantizar y puedan defender el gran regalo de la paz. Que todas las personas de la tierra se sientan hermanos y hermanas. Que el anhelo por la paz se haga presente y perdure por encima de cualquier situación. Humildemente te pedimos envíes tu Espíritu sobre estos dones y sobre tu comunidad, para que el pan y el vino sean el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo y nosotros permanezcamos reunidos en el amor Canto de la paz: Yo quisiera... Santo, Santo, Santo… Bendecimos tu nombre, Padre, contemplando cómo tu Hijo, al hacerse hombre, cargó sobre sí la flaqueza, el dolor, la muerte en fin, las consecuencias de nuestro pecado. . CONSAGRACIÓN Dios, que nos has enviado a Jesús, Palabra viva, haznos capaces de cultivar en la escucha y en la oración nuestra interioridad para que sepamos discernir los signos de los tiempos y seamos comunicadores del Evangelio en nuestro mundo. Acoge, Señor, las invocaciones que han sido confia- Yo, yo quisiera ser Esas manos que se estrechan sin hablar, Yo quisiera ser la sonrisa y la libertad Que luchan por nacer. Yo quisiera, yo quisiera, ser paloma... Con Jesús hay vida y Reino de Dios Domingo de Ramos Cantos de comunión: Para que no hubiera Para que no hubiera Más cruces en el mundo: Cristo sube a la cruz (2) Cristo sube a la cruz (2). A la cruz sube Cristo Humillado y deshecho. ¿Quién recoge su grito, Quién escucha su llanto? Para que no hubiera Más llanto en el mundo Cristo llora en la cruz (2) Cristo llora en la cruz (2). De las cruces colgando Agonizan los pobres. ¿Quién les hace justicia, Quién defiende su causa? Para que no hubiera Más muertes inocentes: Página 9 DESPEDIDA ¿Cómo puedo acompañar yo a Jesús durante esta Semana Santa y acompañar los rostros sufrientes que hay a mi alrededor? ¿Cómo se va a notar que quiero vivir la fe en Jesús que nos libera y nos salva? El Jueves Santo es el Día del Amor Fraterno. El amor entendido como servicio, como entrega. Acudamos a la celebración y vivamos el mensaje del amor: ¿Qué has hecho con tu hermano? AMA Y VIVE LA JUSTICIA Canto BENDICIÓN Cristo muere en la cruz (2) Cristo muere en la cruz (2). Oración después de la Comunión La Eucaristía siempre nos da fuerzas para seguir caminando en la vida. Que la felicidad total que nos prometiste a todo el universo se realice, Señor, por la entrega de Jesús y nuestra participación en su modo de vivir. Te lo pedimos a Ti, que vives y reinas por los siglos de los siglos. COMPROMISO DE RAMOS “Ser Iglesia en el mundo” Preguntémonos: ¿qué nos une?, ¿qué valores compartimos?, ¿qué hacer para que se oiga nuestra voz?, ¿cómo ser más fuertes para evitar la injusticia? y ¿cómo involucrar a la ciudadanía, cómo involucrarnos con ella?. Amén Avisos: El Jueves tendremos “La Cena del Señor” a las 5 y la “Hora Santa” a las 10 Con Jesús hay vida y Reino de Dios Jueves Santo Página 10 Jueves Santo Jesús es el amor y la entrega Canto de entrada: Tal como soy Acto penitencial Tal como soy Señor, sin nada que ofrecer más que mi canción no tengo más que darte pues todo es tuyo, Señor. En este día santo, donde celebramos el amor entregado de Jesús, nos ponemos con sencillez y confianza ante el Padre: Tal como soy Señor, sin nada que entregar más que el corazón me rindo todo a Ti, Tómame Señor tal como soy. Acéptame como ofrenda de amor, como un sacrificio agradable en tu honor grato perfume, yo quiero ser, Señor. Señor, tú nos invitas a servir a los hermanos. Nos cuesta ponernos a los pies de los demás. ¡Señor, ten piedad! Señor, el camino de la vida es el amor. Nos empeñamos en buscar otros sentidos que nos disipan y despistan ¡Cristo, ten piedad! Señor, escuchamos con atención tu palabra clara y luminosa. Escuchamos pero pronto la olvidamos. ¡Señor ten piedad! Monición de entrada Queridos hermanos: Jesús es el amor y la entrega. Nos adentramos plenamente en ese amor que llevó a Cristo a dar su vida por nosotros. Un amor sin límites, universal, pero también personalizado. Cada uno de nosotros puede repetir: «Me amó», me lavó los pies, me sentó a su mesa junto a él. En la cena del jueves Cristo se rompió lleno de amor y de servicio. En sus palabras nos llega al corazón En sus gestos nos muestra el estilo de vida. El Jueves Santo ha pasado a ser el día del amor. Un amor con muchas dimensiones, entre las que se destaca el amor fraterno. Saludo del Sacerdote En el nombre del Padre... Hermanos: Que el amor de Dios se derrame en nuestros corazones; que la paz y la alegría del Señor, llene nuestras vidas; y que la fuerza del Espíritu Santo, esté siempre con nosotros. Que Dios, Padre bueno, que en su amor infinito nos ha dado a su Hijo para que tengamos vida, nos perdone y nos lleve a la vida eterna. Canto del gloria Todo mi ser canta hoy por las cosas que hay en mí, gracias te doy mi Señor, Tú me haces tan feliz. Tú me has regalado tu amistad, confío en Ti, me llenas de tu paz. Tú me haces sentir tu gran bondad, yo cantaré, por siempre, tu fidelidad. Gloria a Ti, Señor, por tu bondad, gloria, gloria, siempre cantaré tu fidelidad. (bis) Con Jesús hay vida y Reino de Dios Oración Nos has reunido, Padre, para celebrar la última cena de Jesús en la que él nos regaló la Eucaristía en el pan partido y su sangre derramada. Que esta celebración nos contagie su amor y su fuerza vivir siempre como servidores de todos creando a nuestro alrededor un mundo de amor, de justicia, de paz y de fraternidad. Te lo pedimos por medio de Jesús, que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén. LITURGIA DE LA PALABRA Lectura del libro del Éxodo En aquellos días, dijo el Señor a Moisés y a Aarón en tierra de Egipto: "Este mes será para vosotros el principal de los meses; será para vosotros el primer mes del año. Decid a toda la asamblea de Israel: "El diez de este mes cada uno procurará un animal para su familia, uno por casa. Si la familia es demasiado pequeña para comérselo, que se junte con el vecino de casa, hasta completar el número de personas; y cada uno comerá su parte hasta terminarlo. Será un animal sin defecto, macho, de un año, cordero o cabrito. Lo guardaréis hasta el día catorce del mes, y toda la asamblea de Israel lo matará al atardecer. Tomaréis la sangre y rociaréis las dos jambas y el dintel de la casa donde lo hayáis comido. Esa noche comeréis la carne, asada a fuego, comeréis panes sin fermentar y verduras amargas. Y lo comeréis así: la cintura ceñida, las sandalias en los pies, un bastón en la mano; y os lo comeréis a toda prisa, porque es la Pascua, el paso del Señor. Esta noche pasaré por todo el país de Egipto, dando muerte a todos sus primogénitos, de hombres y de animales; y haré justicia de todos los dioses de Egipto. Yo soy el Señor. La sangre será vuestra señal en las casas donde estéis: cuando vea la sangre, pasaré de largo; no os tocará la plaga exterminadora, cuando yo pase hiriendo a Egipto. Jueves Santo Página 11 Este día será para vosotros memorable, en él celebraréis la fiesta del Señor, ley perpetua para todas las generaciones."" Palabra de Dios Salmo responsorial: El cáliz de la bendición es comunión con la sangre de Cristo. ¿Como pagaré al Señor / todo el bien que me ha hecho? / Alzaré la copa de la salvación, / invocando su nombre. R. Mucho le cuesta al Señor / la muerte de sus fieles. / Señor, yo soy tu siervo, / hijo de tu esclava; / rompiste mis cadenas. R. Te ofreceré un sacrificio de alabanza, / invocando tu nombre, Señor. / Cumpliré al Señor mis votos / en presencia de todo el pueblo. R. Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Corintios Hermanos: Yo he recibido una tradición, que procede del Señor y que a mi vez os he transmitido: Que el Señor Jesús, en la noche en que iban a entregarlo, tomó pan y, pronunciando la acción de gracias, lo partió y dijo: "Esto es mi cuerpo, que se entrega por vosotros. Haced esto en memoria mía." Lo mismo hizo con él cáliz, después de cenar, diciendo: "Este cáliz es la nueva alianza sellada con mi sangre; haced esto cada vez que lo bebáis, en memoria mía." Por eso, cada vez que coméis de este pan y bebéis del cáliz, proclamáis la muerte del Señor, hasta que vuelva. Palabra de Dios Canto: Un Mandamiento nuevo Un mandamiento nuevo nos dio el Señor, que nos amáramos todos como Él nos amo (bis) Jueves Santo Con Jesús hay vida y Reino de Dios Lectura del Santo Evangelio según San Juan Antes de la fiesta de la Pascua, sabiendo Jesús que había llegado la hora de pasar de este mundo al Padre, habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo. Estaban cenando, ya el diablo le había metido en la cabeza a Judas Iscariote, el de Simón, que lo entregara, y Jesús, sabiendo que el Padre había puesto todo en sus manos, que venía de Dios y a Dios volvía, se levanta de la cena, se quita el manto y, tomando una toalla, se la ciñe; luego echa agua en la jofaina y se pone a lavarles los pies a los discípulos, secándoselos con la toalla que se había ceñido. Llegó a Simón Pedro, y éste le dijo: "Señor, ¿lavarme los pies tú a mí?" Jesús le replicó: "Lo que yo hago tú no lo entiendes ahora, pero lo comprenderás más tarde." Pedro le dijo: "No me lavarás los pies jamás." Jesús le contestó: "Si no te lavo, no tienes nada que ver conmigo." Simón Pedro le dijo: "Señor, no sólo los pies, sino también las manos y la cabeza." Jesús le dijo: "Uno que se ha bañado no necesita lavarse más que los pies, porque todo él está limpio. También vosotros estáis limpios, aunque no todos." Porque sabía quién lo iba a entregar, por eso dijo: "No todos estáis limpios." Cuando acabó de lavarles los pies, tomó el manto, se lo puso otra vez y les dijo: "¿Comprendéis lo que he hecho con vosotros? Vosotros me llamáis "el Maestro" y "el Señor", y decís bien, porque lo soy. Pues si yo, el Maestro y el Señor, os he lavado los pies, también vosotros debéis lavaros los pies unos a otros; os he dado ejemplo para que lo que yo he hecho con vosotros, vosotros también lo hagáis." Palabra del Señor Página 12 Con Jesús hay vida y Reino de Dios LAVATORIO DE LOS PIES Lector: A ejemplo de Cristo, con el signo del lavatorio de los pies, queremos expresar nuestro servicio hacia los hermanos y sobre todo a los excluidos. Este año queremos hacerlo del modo siguiente: Estáis viendo una mesa a la que queremos invitar a sentarse a otros tantos colectivos a los que previamente lavaremos los pies. Pues ahora iremos pidiendo que se acerquen los que representan a cada uno de los grupos marginados. Lector: Pobres Lavemos los pies y sentemos en nuestra mesa a los pobres de nuestra sociedad. Nos hemos encerrado en nuestra seguridad y nos hemos desentendido con frecuencia de ellos. Les pedimos perdón por nuestra falta de solidaridad. Lector: Inmigrantes Lavemos los pies y sentemos en nuestra mesa a los inmigrantes, que llegan a nuestro país buscando un mundo mejor y a veces se encuentran con nuestro rechazo porque son “diferentes”. Les pedimos perdón por no haberlos aceptado y querido como hermanos. Lector: Presos y delincuentes Lavemos los pies y sentemos en nuestra mesa a los presos, a los delincuentes que tanto miedo y tensión nos causan, pero a quienes somos incapaces de ofrecer soluciones de inserción o perdón. Les pedimos perdón por todos los males que podamos haberles inferido. Lector: Enfermos Lavemos los pies y sentemos en nuestra mesa a los enfermos, a aquéllos en cuyo horizonte falta la esperanza de la salud. Les pedimos perdón por nuestros frecuentes olvidos. Jueves Santo Página 13 Lector: Atrapados por el alcohol y la droga Lavemos los pies y sentemos en nuestra mesa a los atrapados por el alcohol y la droga, nuestros hermanos, y, acercándonos a su corazón, busquemos conocer y comprender las presiones, fracasos y luchas que los han llevado a esta situación. Les pedimos perdón por las veces que los hemos juzgado y condenado. Lector: Mayores solos y abandonados Sentemos en nuestra mesa y lavemos los pies a los mayores solos y abandonados. Nos lo han dado todo y a veces los olvidamos. Les pedimos perdón por nuestra ingratitud. Lector: Maltratados Sentemos en nuestra mesa y lavemos los pies a las personas maltratadas, que a veces nos resultan invisibles. Les pedimos perdón por nuestra falta de atención. Oración Bendice nuestro amor, Dios de la vida. Bendice el amor, fruto de la entrega y la donación. Aquí estamos, junto a Ti, ofreciéndote la vida y dando gracias por tu amor. Tu presencia a nuestro lado nos enseñó a descubrir lo mejor del otro, nos abrió las puertas de la entrega y la comunión. Tú fecundaste la unión de las personas y sembraste la concordia, el abrazo y la caricia. Tú eres el Dios de la vida y por eso te entristeces cuando no se respeta la vida. Hoy nos das ejemplo entregándonos tu vida. Con Jesús hay vida y Reino de Dios Jueves Santo Página 14 Oración de los fieles Oración sobre las ofrendas Sacerdote: En este día en el que celebramos el amor de Jesucristo miramos al mundo con misericordia y pedimos por todos los hombres. Respondamos diciendo: “Haznos testigos de tu amor” Que sepamos siempre celebrar la Eucaristía conscientes de todo lo que significa y participando en ella de un modo pleno y activo, pues en ella Jesús resucitado se hace presente y nos da nueva vida al servicio de un mundo nuevo. Te lo pedimos a ti, que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén. Lector: Que la Iglesia sea de verdad una iglesia de iguales y servidores; que nadie sea “señor” para los demás sino que en ella estemos al servicio unos de otros, cumpliendo cada uno su función en una comunidad de hermanos. Oremos. • En el mundo hay muchos hambrientos de pan y de palabra; que el pan que de ti recibimos, Señor, nos dé fuerzas para ofrecer a otros el pan del compartir y de la solidaridad. Oremos. • Que quienes realizan el servicio de la caridad y del voluntariado en la Iglesia lo desempeñen sin servilismos ni paternalismos sino desde el respeto a la dignidad de las personas. Oremos. • Que nuestra iglesia, empezando por cada uno de nosotros, sea de verdad una “iglesia de los pobres”; más aún, una iglesia pobre, abierta y solidaria, capaz de hacer posible el “amor fraterno” que anunciamos. Oremos. • Para que podamos celebrar la eucaristía con coherencia y verdad, aprendiendo en ella a servir. Oremos. Sacerdote: Escucha, Padre, estas oraciones que te presentamos con fe por Jesucristo nuestro Señor. OFERTORIO Canto para el Ofertorio: Ofrenda de Amor Por los niños que empiezan la vida, Por lo hombres sin techo ni hogar, Por los pueblos que sufren la guerra, te ofrecemos el vino y el pan. Pan y vino sobre el altar Son ofrendas de amor, Pan y vino serán después Tu Cuerpo y Sangre, Señor. Por los hombres que viven unidos, Por los hombres que buscan la paz, Por los pueblos que no te conocen, te ofrecemos el vino y el pan. PLEGARIA EUCARÍSTICA Realmente es digno y justo, es nuestro deber bendecirte, Padre, por medio de Jesucristo. Tú, Señor, creaste a las personas a tu imagen y semejanza, para que dominaran el universo. Hiciste una alianza con tu pueblo, rota frecuentemente por nuestra culpa. Y nos prometiste una alianza nueva, la de tu siervo doliente y abandonado, que vino a servir y no a ser servido. Queremos caminar con Jesús en el sufrimiento de nuestro pueblo. Por lo cual con toda la fuerza de nuestra voluntad cantamos tu gloria...... CANTO DEL SANTO Bendecimos tu nombre, Padre, contemplando cómo tu Hijo, al hacerse hombre, cargó sobre sí la flaqueza, el dolor, la muerte en fin, las consecuencias de nuestro pecado. Fue perseguido, acorralado, traicionado. Lo entregó uno de los suyos, Judas, dándole el beso de la falsa amistad. Fue interrogado, en medio de calumnias, flagelado y torturado entre burlas. Al fin lo crucificaron ante la indiferencia de su pueblo y las injurias de los soldados. Cuando lo contemplamos en la cruz, descubrimos la fuerza de tu amor. Porque no abandonaste al crucificado; al contrario, lo has exaltado en la resurrección para que el mundo crea que lo has enviado y nuestras lenguas proclamen: Jesucristo es el Señor. Queremos caminar con Jesús en el sufrimiento de Con Jesús hay vida y Reino de Dios nuestro pueblo. Humildemente te pedimos envíes tu Espíritu sobre estos dones y sobre tu comunidad, para que el pan y el vino sean el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo y nosotros permanezcamos reunidos en el amor. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor, el cual, la víspera de su pasión, tomó pan… CONSAGRACIÓN Por lo cual, hacemos memoria de su muerte, reconociendo que es Hijo de Dios, de su resurrección, ascensión y glorificación. Y mientras esperamos su retorno glorioso te ofrecemos el sacrificio de su obediencia, soledad y abandono, sufridos por nuestro pecado. Recibe el sacrificio de la Iglesia que camina tras su Señor con la cruz a cuestas. Dale fe y fortaleza para soportar las persecuciones, las incomprensiones, las divisiones internas. Que el sufrimiento de los cristianos y de las personas de buena voluntad haga vencer el bien sobre el mal. Que los hombres y mujeres lleguen a aclamar al Cristo que viene humildemente. Que desaparezca la división entre poderosos y débiles. Que llegue en fin tu Reino reconciliador. Jueves Santo Página 15 llegue pronto a nuestro corazón, el amor que tu hijo nos dejó, el amor, habite ya en nosotros. Y en el pan de la unidad, Cristo danos Tú la paz, y olvídate de nuestro mal, si olvidamos el de los demás, no permitas que caigamos en tentación, oh Señor, y ten piedad del mundo. Oración de la paz: María, madre de la paz María, todo lo pudo porque vivió la Paz de Dios. La verdadera paz que consiste en entregarse libremente por amor en manos de Dios. Paz que nos revela el rostro vivo de Dios liberador, rico en misericordia y lleno de amor por los pobres, sus preferidos. Acércate, Madre de la Paz, queremos estar atentos a la Palabra de Dios y decir contigo: "He aquí a la servidora del Señor que se cumpla en mí su voluntad". Haznos promotores de verdad y de justicia. Danos fuerzas para ser hombre y mujeres de paz. Ayúdanos con tu presencia a construir con nuestras vidas el Reino nuevo de Vida generosa para todos. Queremos caminar con Jesús en el sufrimiento de nuestro pueblo. Recuerda a todas las personas que a través de la historia han sido tus testigos en el mundo entregando lo mejor de sí mismos a favor de los demás. Tenlos unidos a ti en tu Reino definitivo. Por Cristo, con Él y en Él, a Ti, Dios Padre Omnipotente, en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloria, por los siglos de los siglos. Amén. Canto del Padre Nuestro Padrenuestro Tú que estás, en los que aman la verdad, haz que el reino que por Ti se dio, Canto de la paz: Paz en la tierra Paz en la tierra, paz en las alturas, Que el gozo eterno reine en nuestro corazón. (Bis) Da la paz, hermano, da la paz, constrúyela en tu corazón; Y con tu gesto afirmarás que quieres la paz. Que tu paz, hermano, sea don. Es el mejor signo de amor que tú nos puedes ofrecer: Abrazo de paz. Con Jesús hay vida y Reino de Dios Canto de Comunión Jueves Santo Página 16 Para meditar: Día del amor fraterno Como el Padre me amó Como el Padre me amó, yo os he amado. Permaneced en mi amor (2) 1. Si guardáis mis palabras y como hermanos os amáis compartiréis con alegría el don de la fraternidad. Si os ponéis en camino, sirviendo siempre la verdad, fruto daréis en abundancia. Mi amor se manifestará. 2. No veréis amor tan grande como aquél que os mostré. Yo doy la vida por vosotros. Amaos como yo os amé. Si hacéis lo que os mando y os queréis de corazón compartiréis mi pleno gozo de amar como Él me amó Solidaridad con Guatemala En Guatemala el 65% de la población son indígenas. El 54% de la población global vive en pobreza y el 14% en pobreza extrema. En casi la mitad de los municipios rurales (44 por ciento), la mayoría de su población (más del 75 por ciento) vive en pobreza, según los resultados del Mapa de Pobreza Rural. Con el fin de explotar las reservar auríferas se está desarrollando la industria eléctrica, que no repercute en la electrificación de las zonas rurales sino en destruir su hábitat. Ante las protestas sociales se está asesinando a los líderes como en los mejores tiempos. El proyecto para este año 2014-15 es: “Defensa, cuidado y captación de agua en las comunidades de Guatemala. Segunda etapa”, respondiendo a la solicitud de SEFCA, agua para otras 25 familias, además de otras actividades económicas amigables con el medio ambiente. Estos procesos buscan contribuir a que tres comunidades de San Pedro Carchá, Alta Verapaz, mejoren y promuevan sus derechos a vivir en un ambiente sano y mejoren su calidad de vida en beneficio de sus familias, comunidades y municipio. Pensamos que, aún siendo conscientes de las grandes necesidades que hay en nuestro entorno, y a las que ni la parroquia a través de Cáritas ni el barrio y la generosidad de sus habitantes ha dejado de atender en la medida de las posibilidades, no debemos olvidar la miseria de otros hermanos nuestros aunque estén lejos Pongamos en marcha nuestra capacidad solidaria, caritativa, tanto con los de lejos como con los de cerca, haciendo bueno el lema de Cáritas: “Qué has hecho con tu hermano?.” AMA Y PRACTICA LA JUSTICIA (Prepara y participa en la XIII Semana Solidaria: “Futuro, apuesta por la persona” Con Jesús hay vida y Reino de Dios TRASLADO DEL SANTÍSIMO AL MONUMENTO (Oración antes del traslado del Santísimo) Queremos vivir en el amor como Tú nos enseñaste, dando tu vida por todos, entregando tu tiempo, tus esfuerzos y tus anhelos para transmitir el mensaje de Dios: darnos la posibilidad de una vida diferente, de un mundo distinto, de una humanidad nueva. Nos mostraste con tu ejemplo lo que es vivir animado por el Espíritu, dando frutos de obras buenas, con el corazón abierto a todos, enseñando a amar, a vivir en la caridad. Jesús, maestro bueno, DANOS TU ESPIRITU para enseñarnos a vivir en la caridad. Canto ante el Santísimo Pange lingua, gloriosi, Corporis Misterium, Sanguinisque pretiosi, quem in mundi praetium, fructus ventris generosi, Rex effudit gentium. Nobis datus, nobis natus, ex intacta Virgine, et in mundo conversatus, sparso verbi semine, sui moras incolatus, miro clausit ordine. (Oración ante el monumento) Alma de Cristo santifícame cuerpo de Cristo, sálvame sangre de Cristo, embriágame, agua del costado de Cristo, lávame pasión de Cristo, confórtame oh mi buen Jesús, óyeme dentro de tus llagas, escándeme no permitas que me aparte de ti del enemigo malo defiéndeme en la hora de mi muerte, llámame y mándame ir a ti. para que con tus Ángeles y santos te alabe por los siglos de los siglos amen. Jueves Santo Página 17 Canto ante el Santísimo Tantum ergo Sacramentum, Venerémur cérnui: Et antíquum documentum Novo cedat rítui; Præstet fides suppleméntum Sénsuum deféctui. Genitori Genitóque, Laus et iubilátio; Salus, honor, virtus quoque, Sit et benedíctio; Procedénti ab utróque Compar sit laudátio. Amen. Oración Tú, Cristo, fuente de toda caridad, te hiciste pobre con los pobres, hermano de todos y consuelo de los afligidos. Tú, Cristo, fuente de toda caridad, diste de comer a la humanidad hambrienta, amaste a los niños, te compadeciste de la viuda y socorriste al que te necesitaba. Tú, Cristo, fuente de toda caridad, enséñanos tu amor, tu compartir, tu solidaridad, para que, viéndote, te sigamos amando, compartiendo, siendo solidarios. Tú, Cristo, fuente de toda caridad, despierta en nosotros un corazón tan grande que sintamos los problemas de los hermanos como nuestros, y que nuestras manos sean tus manos que se tienden al necesitado. Canto: Cantemos al amor de los amores Cantemos al amor de los amores, cantemos al Señor. Dios está aquí, venid adoradores, adoremos, a Cristo redentor. Gloria a Cristo Jesús, cielos y tierra, bendecid al Señor, honor y gloria a ti, Rey de la gloria, amor por siempre a ti, Dios del amor (2) Celebraremos la Hora Santa a las 10 de la noche Con Jesús hay vida y Reino de Dios HORA SANTA Canto inicial No adoréis a nadie, a nadie, más que a Él. No adoréis a nadie, a nadie, más que a Él. No adoréis a nadie, a nadie más. No adoréis a nadie, a nadie más. No adoréis a nadie, a nadie más que a Él Monición de entrada Queremos estar con Jesús en estos momentos de soledad y oración. Volveremos a recordar sus palabras y sus gestos, que no se nos olviden, que sean luz y vida para nosotros. Nos importa estar cerca del Señor, escucharle y comulgar con él. Queremos adentramos en el misterio de su amor y de su dolor. No lo agotaremos, porque es misterio y porque se prolonga hasta el fin. Aquí no hace frío, hace calor, porque está Cristo. Aquí no es de noche, es de día, porque está Cristo. Aquí no hay desesperación, hay esperanza, porque está Cristo. Aquí no hay violencia, hay paz, porque está Cristo. Aquí no hay división, hay comunión, porque está Cristo. Oración Sentimos, Señor, tu presencia amistosa y resucitada. Gracias por quedarte con nosotros. Nos miras con amor inmerecido, un amor que nos limpia y nos recrea y enciendes nuestro corazón con tu palabra. Gracias, Señor, por tu amor y tu palabra. ¡Quédate siempre con nosotros! Canto: Quédate junto a nosotros. Quédate junto a nosotros que la tarde está cayendo, pues sin ti a nuestro lado nada hay justo, nada hay bueno. Caminamos solos por nuestro camino, cuando vemos a la vera un peregrino, nuestros ojos, ciegos de tanto penar, se nos llenan de vida, se nos llenan de paz. 1. EL MANDAMIENTO DEL AMOR «Como yo os he amado» (Jn 15, 12). Antes de que Jesús nos diera el mandamiento del amor estaba la realidad de su amor. «Él nos amó Jueves Santo Página 18 primero» (Jn 4, 19), Y de qué manera. Llegó hasta el extremo, hasta dar su vida por nosotros. La primera verdad, la primera buena noticia que Jesús nos da, es que somos amados, que Dios nos ama. Entonces, si Dios nos ama, ya no hay nada que temer. «Ya nada ni nadie nos puede separar del amor de Dios manifestado en Cristo» (Rm 8, 3539). Vamos a dejamos amar, vamos a sentir la fuerza y la ternura de su amor, y vamos a tratar de corresponder confiando en él, abandonándonos a él y amándole con todo nuestro corazón. Respondemos todos: gracias, Señor Gracias, Señor, porque has querido lavarme los pies y el corazón; gracias, Señor porque me has perdonado. porque me has curado. porque me has sentado a tu mesa. porque te has hecho para mí alimento y bebida. porque me has hecho partícipe de tu misma vida. porque me has regalado las joyas de tu Espíritu. Amaos unos a otros Dios nos ama para que nos amemos. El amor no es un tesoro que se guarda, sino una energía que se desarrolla y difunde, un espíritu que se cultiva y se contagia. El que es amado vivirá en el amor, porque «el amor saca amor». Nuestra vida entera está marcada por el amor de Jesucristo. Dios nos ama no tanto para que lo amemos, sino para que nos amemos, a la manera de Cristo: Un amor hecho servicio, la diaconía, disposición para lavar los pies de los hermanos, el amor hecho vida a través de nuestras manos. Un amor ungido en la misericordia, el perdón, la empatía, la compasión, la ternura, la ayuda entrañable, el amor de las entrañas. Un amor de amistad y cercanía, de integración y comunión, superando distancias y diferencias, prejuicios y rivalidades, un amor fiel, que permanece, una sola alma, el amor del corazón. Un amor marcado por la generosidad, que no retiene, que abre siempre la mano, que comparte cuanto tiene, que se despoja y se hace pobre, el amor de los panes y los dineros. Con Jesús hay vida y Reino de Dios Un amor de entrega, que da de sí mismo, de su tiempo y sus talentos, que se da a sí mismo, hasta el fin. (Silencio oracional) Respondemos todos: Tú, Cristo, eres fuente de todo amor. Te hiciste pobre con los pobres, hermano de todos y consuelo de los afligidos. Diste de comer a la humanidad hambrienta, amaste a los niños, te compadeciste de la viuda y socorriste al que te necesitaba. Enséñanos tu amor, tu manera de compartir, tu solidaridad, para que viéndote te sigamos amando, compartiendo, siendo solidarios. Entra en nuestra vida con todo tu amor, haz de nosotros instrumentos humildes para ayudar a nuestros hermanos. Estás en e1 parado, en el drogadicto, en el alcohólico, en el niño abandonado, en el explotado y oprimido, en el enfermo de sida y en todo marginado. Despierta en nosotros un corazón tan grande que sintamos los problemas de los hermanos como nuestros, y que nuestras manos sean tus manos que se tienden al pobre necesitado. Canto: Si me falta el amor Si me falta el amor, no me sirve de nada. Si me falta el amor, nada soy. (Bis) Aunque todos mis bienes dejase a los pobres y mi cuerpo en el fuego quisiera inmolar, todo aquello sería una inútil hazaña si me falta el amor. Aunque yo desvelase los grandes misterios y mi fe las montañas pudiera mover, no tendría valor, ni me sirve de nada, si me falta el amor. 2. LA NOCHE DE GETSEMANÍ Jesús asume y redime el sufrimiento humano Se hizo de noche en el alma de Jesús. Después de los momentos luminosos de la cena, todas sus lámparas se apagaron. Como si un diablo o muchos diablos hubieran ido preparando el terreno para librar con el Mesías un combate definitivo. Porque el maligno, sabemos, no se dio por vencido en el desierto. «Toma consigo a Pedro, Santiago y Juan y comenzó a sentir pavor y angustia» (Me 14, 33). Lo que sien- Jueves Santo Página 19 te Jesús en estos momentos es también misterio. Todas las tinieblas humanas entran en su alma. Es la hora del príncipe tenebroso. Lo que siente Jesús:) • Tristeza mortal. «Mi alma está triste hasta el punto de morir» (Me 14, 34). Todas las depresiones del mundo dentro de Jesús. Claro que se puede morir de tristeza o quitarse la vida por la tristeza. Esta tristeza es peor que cualquier enfermedad. Jesús tenía razones para semejante tristeza: los acontecimientos que se acercaban, la reacción de los discípulos, especialmente de Judas, el silencio del Padre ... Otras veces no hay razones, pero es lo mismo. Jesús asume toda la tristeza humana, nuestras penas y nuestras lágrimas. (Silencio oracional) • Angustia, miedo total. Difícil definir esa angustia de Jesús, la ansiedad, el no tener ningún punto de apoyo, sentir el alma «en carne viva» ... Y el terror, porque sabe lo que le espera; el maligno se 10 pintaría al vivo. Temblaba de angustia y de miedo Jesús, caído en tierra, «cayó en tierra» (Me 14, 35). Asume así nuestros miedos -¡tantos!- y nuestras angustias horrorosas. (Silencio oracional) • Repugnancia ante la realidad que está viviendo. «¡Aparta de mí este cáliz!» (Me 14,36). En esa copa están todos los dolores y las amarguras. ¡Qué asco tener que beber todo eso! (Silencio oracional) Desencanto y absurdo. No encontraba sentido a tanto sufrimiento y desgarro. ¿Por qué y para qué? ¿No podrían hacerse las cosas de otra manera? ¿Qué adelantas, Padre, con mi muerte y mi fracaso? Es el sinsentido, el absurdo de la existencia humana. Tantos trabajos y preocupaciones, ¿para qué? ¿Dónde quedan las ilusiones y esperanzas que vivía y predicaba? Desengaños, desencantos, el vacío de la vida. . (Silencio oracional) • Soledad. Ahí están tres discípulos muy cerca, pero están muy lejos, no comprenden nada. La gente, la mayoría del pueblo, le va a dar la espalda. Pero lo que mata a Jesús es el abandono del Padre. ¿Es que no oye? ¿Es que no me quiere? ¿Es que no existe? Con Jesús hay vida y Reino de Dios (Silencio oracional) Canto: Cristo nos da la libertad, Cristo nos da la salvación, Cristo nos da la esperanza, Cristo nos da el amor. Cuando luche por la paz y la verdad, la encontraré; cuando cargue con la cruz de los demás, me salvaré. Dame, Señor, tu palabra; oye, Señor, mi oración. Cuando sepa perdonar de corazón, tendré perdón; cuando siga los caminos del amor, veré al Señor. Dame, Señor, tu palabra; oye, Señor, mi oración. Los discípulos duermen Mientras Jesús agoniza, los discípulos, aun los más íntimos, duermen. Pueden más en ellos el cansancio y el sueño que la situación y el ruego del amigo. Ni Pedro, ni Juan ni Santiago estuvieron a la altura de las circunstancias. ¡Qué bueno hubiera sido que acompañaran a Jesús, aunque no dijeran nada, pero que quisieran compartir y consolar! También por ellos mismos necesitaban fuertemente más vigilancia y oración. Pero son unos inconscientes. Nos pasa a nosotros muchas veces. No sabemos o no somos capaces de estar cerca del hermano o del amigo que nos necesita. Nos pide una palabra, un gesto, una presencia comprensiva y solidaria, pero nosotros dormimos, vamos a lo nuestro. Dormimos: Cuando no escuchamos la Palabra de Dios o el grito del hermano. Cuando no vemos el «dios» que está o pasa a nuestro lado. Cuando nos resbala el problema del otro. Cuando ignoramos el sufrimiento del mundo y nos encerramos en el nuestro. Cuando no hacemos frente a nuestras responsabilidades. Cuando vivimos alienados con nuestras «ocupaciones», diversiones y adicciones. Cuando no somos conscientes del momento que vivimos. Cuando no nos abrimos a Dios ni lo buscamos. (Silencio oracional) El ángel del consuelo Cristo luchó agónicamente sintiendo a fondo la tentación. Durante las horas de lucha repetía machaconamente: Jueves Santo Página 20 ¡Abba! ¡Abba! «Pase de mí este cáliz», o endúlzalo un tiempo, que yo vea la necesidad de beberlo y el fruto que va a producir. «Pero no lo que yo quiero, sino lo que quieres Tú» (Me 14, 36). «Entonces se le apareció un ángel venido del cielo que lo confortaba» (Le 22, 43). Jesús se hizo tan débil que necesitó el consuelo de un ángel. Le haría ver que no estaba solo; que el Padre lo amaba. No nos extrañemos. Todos necesitamos el ángel del consuelo. Pero todos podemos ser también ángeles del consuelo, el que comprende e ilumina, el que comparte y alivia. ¡Se necesitan muchos ángeles así! (Silencio oracional) Canto: Tú eres el Dios que nos salvas. Oración universal Hagamos presente en nuestra oración la agonía del mundo, para que, unida a la de Cristo, sea redimida. Respondemos: “Acoge, Señor, nuestra oración” 1. Por los agonizantes, que no se sientan solos. 2. Por los enfermos crónicos, que no pierdan la paciencia. 3. Por los que están desesperanzados o deprimidos, que encuentren razones para la esperanza. 4. Por los que se sienten solos, que encuentren la cercanía que necesitan. 5. Por los que están encarcelados, que se les mire y trate con respeto. 5. Por los que sufren torturas, que sean liberados. 6. Por los desempleados, que encuentren trabajo. 7. Por los drogadictos, que puedan recuperarse. 8. Por los inmigrantes, que sean acogidos. 9. Por los que sufren el hambre y todo tipo de exclusión, que puedan sentarse a la mesa de la creación. 10. Por todos los que otros años nos acompañaban, en especial por nuestra amiga Ángeles, que nos solemnizaba las fiestas, la liturgia y la cariad, para que nos mire con amor desde el cielo. Padrenuestro Canto: Cantemos al amor de los amores. Mañana: Vía crucis a las 12. Pasión y muerte del Señor, a las 5 Con Jesús hay vida y Reino de Dios Viernes Santo Página 21 Viernes Santo Con Jesús, compartimos el dolor LA CRISIS Y LAS PERSONAS “Estamos saliendo de la crisis” – “La crisis se ha asentado entre nosotros”. Son los dos criterios que se nos exponen, según la procedencia. Las medidas para atajar los problemas ocasionados por la crisis, están predefinidas en el ideario neoliberal: recortes salariales, reformas laborales, reducción de prestaciones, reformas sanitarias… Asistimos a lo que algunos llaman “Modelo Fracasado” («En lugar de la persona, se ha puesto la economía en el centro de nuestra sociedad»). Sólo saldremos de la crisis si somos capaces de entender que la economía o es para las personas o es injusta y excluyente, tal y como ha señalado el Papa Francisco. Si somos capaces de comprender que no seremos una sociedad verdaderamente democrática si la política no es capaz de gobernar a los mercados (y no al contrario) y, sobre todo, si no nos ocupamos de todas las personas, especialmente de las que más sufren. Algunos indicadores macroeconómicos parecen señalar un cierto repunte de recuperación, pero aún son tenues y frágiles y, sobre todo, todavía no afectan a aquellas personas que más sufren el empobrecimiento o la exclusión social. Además, esta crisis prolongada ha venido de la mano de una política centrada en la austeridad y los recortes sociales, que ha generado una intensa y creciente desigualdad que amenaza seriamente la cohesión social. Este año se celebrarán Elecciones Municipales, con la aparición de una fuerza emergente que está poniendo nerviosos a los partidos clásicos. Se prevé una campaña electoral muy intensa y con resultados imprevisibles, muy vinculados a lo que sucederá en Grecia, cuya campaña está abriendo diversos debates sobre la continuidad del Euro, la unión Europea, la crítica al B.M y al F.M.I., proponiendo otro tipo de financiación para los países en crisis para financiar la deuda. La precariedad laboral está afectando a un número importante de personas y familias, son los “trabajadores pobres”, cuyos ingresos no son suficientes para cubrir las necesidades básicas y que están muy lejos de los que se denomina “trabajo decente”. Hay una amenaza de deslocalización de las empresas, expresada en el conflicto de ALCOA, pero que se puede extender a otras industrias locales. El poder político está secuestrado por el económico, con las graves consecuencias que de ello se derivan: no son las personas el centro de la vida, sino la economía, en torno a la cual giran todas las decisiones. Escapemos de la «globalización de la indiferencia», (Papa Francisco) que nos lleva a pensar sólo en nosotros mismos y nos vuelve insensibles al sufrimiento del prójimo. Ha llegado el momento para conmovernos y movernos, para encontrarnos con el hermano caído. Somos guardianes del bienestar de nuestros hermanos y hermanas, somos guardianes de sus derechos, de los que reconocen nuestra dignidad inalienable. Por ello, desde Cáritas queremos convocar a todos a vivir la FRATERNIDAD comprometida. «La medida de la grandeza de una sociedad está determinada por la forma en que trata a quien está más necesitado, a quien no tiene más que su pobreza» dice el Papa Francisco. Por eso es necesario comprometerse en la transformación radical de esta sociedad, para construir una alternativa más humana, fraterna y solidaria en la que: Todo se ponga al servicio de los seres humanos, especialmente los más empobrecidos. Se garantice a todo el mundo la vivienda, la salud, la enseñanza y el trabajo dignos. Se asegure la calidad de los servicios públicos evitando convertirlos en negocio privado. Toda la ciudadanía pueda disponer de una renta mínima para vivir dignamente. Página 22 Con Jesús hay vida y Reino de Dios Viernes Santo INTRODUCCIÓN AL VIERNES SANTO EJERCICIO DEL VIACUCIS La liturgia y las lecturas bíblicas de este día nos ponen delante de la imagen de Jesús crucificado. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo... Nos surgen estas o parecidas preguntas. ¿Por qué el sufrimiento? ¿Por qué el dolor? ¿Por qué si decimos que Dios es bueno, es posible que en nuestro mundo haya tantos ajusticiados, tantos muertos prematuros, tantos...? En el ejercicio del viacrucis queremos de seguir a Jesús, caminar tras sus huellas, acompañarlo en su camino. El Vía Crucis nos introduce en el misterio de la salvación. Los cristianos no tenemos más respuesta que la cruz de Jesús. Mirando a Jesús, clavado en la Cruz, comprendemos que él ha asumido todos nuestros dolores, todas nuestras penas. El camino de la cruz es nuestro propio camino para seguir con fidelidad la voluntad de Dios. Es una invitación a la oración personal y comunitaria en todo momento del año. Los pobres, los marginados, los humillados, han encontrado siempre en la Cruz su identidad perdida, la identidad y la dignidad que el mundo no les reconocía. Una vez más se cumple la Bienaventuranza con que abrió Jesús su predicación: "Bienaventurados los pobres, porque de ellos es el Reino de Dios". El Vía Crucis de Jesús se hace historia en el camino de un pueblo que busca su liberación. El día de hoy es tiempo para situarse en pobreza, en desnudamiento interior, en silencio, ante la cruz, conscientes de nuestras limitaciones y miserias, conscientes de que no nos podemos salvar a nosotros mismos. Como discípulos de Jesús se nos invita hoy a seguirle. Ser cristianos no es un juego de niños, no es fácil serlo en nuestro mundo, no lo ha sido nunca. El que nunca haya encontrado la cruz puede irse preguntando si su vida es realmente la de un seguidor de Jesús. Por la mañana: Viacrucis Por la tarde: Pasión y muerte del Señor: 1. Lectura de la Pasión 2. Homenaje a la Cruz. 3. Oración Universal 4. Comunión Desde los pobres de nuestra tierra, construyendo unidos la justicia y la paz, volvemos los ojos al tradicional camino de la cruz para retomar fuerzas y reencontrarnos con Jesús crucificado. Desde la cruz de Jesús, presente en tantos lugares de este mundo sediento de justicia, afirmamos nuestra fe en la resurrección y la vida. Anunciamos con alegría y esperanza la presencia liberadora de Jesús entre nosotros. Encarnamos en el mundo el reino de Dios, los ansiados cielos y tierra nuevos, donde reine la justicia, la paz y el amor verdadero. Primera Estación: Jesús es condenado a muerte - Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste al mundo. "El Consejo en pleno se levantó y llevaron a Jesús ante Pilato. Allí empezaron con sus acusaciones: «Hemos comprobado que este hombre es un agitador. Se opone a que se paguen los impuestos al César y pretende ser el rey enviado por Dios.»" La Presencia de Jesús se hace ya insoportable para los poderosos de su época. Sus constantes llamados a la conversión, su amor a los pobres, su denuncia de una religión que había perdido el rumbo, su identificación con el pueblo sencillo lo hacen un personaje peligroso. Ante Pilato argumentan que la seguridad del impe- Con Jesús hay vida y Reino de Dios rio está amenazada. Pilato cede ante las presiones. "Pilato les dijo: «¿Qué voy a hacer con el que llamais rey de los judíos?» La gente gritó:«¡Crucifícalo! Pilato les preguntó: «Pero ¿qué mal ha hecho?» Y gritaron con más fuerza: «¡Crucifícalo!» Pilato quiso dar satisfacción al pueblo: dejó, pues, en libertad a Barrabás y sentenció a muerte a Jesús. Lo hizo azotar, y después lo entregó para que fuera crucificado."(Mc. 15, 12-15) Se desinteresa del problema y entrega a Jesús para morir. Ante la injusticia se lava las manos. Jesús observa todo con serenidad y confianza en Dios, su Padre. Desde el silencio de su corazón reza: Señor, aquí estoy que se haga tu voluntad. La figura de Jesús, pobre e indefenso ante el tribunal que lo condena, se hace presente en estos días en las vida de tantos hermanos, víctimas de la injusticia y la falta de fraternidad, sin vivienda ni salarios dignos, muchas veces despojados de sus derechos. Son los condenados a muerte de nuestro mundo de hoy. Los mismos que Jesús amó hasta la muerte de cruz. Para aplicar a la vida: ¿Estoy dispuesto a dar la vida por amor a los demás? ¿Qué puedo hacer para evitar que mis hermanos sean condenados a vivir sin dignidad? Ante la injusticia, ¿nuestra actitud es la de Pilato o nos jugamos por la verdad? PADRENUESTRO... CANTO: Cristo libertador Cristo nos da la libertad. Cristo nos da la salvación. Cristo nos da la esperanza. Cristo nos da el amor. SEGUNDA ESTACION: Jesús carga con la cruz - Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste al mundo Viernes Santo Página 23 "Así fue como se llevaron a Jesús. Cargando con su propia cruz, salió de la ciudad hacia el lugar llamado Calvario (o de la Calavera), que en hebreo se dice Gólgota." El camino a la vida pasa por la cruz. Una de las condiciones del seguimiento de Jesús es la aceptación de la cruz que representa ser su discípulo. Cargar con la cruz no con resignación y fatalismo, sino con la alegría del que se da hasta el extremo. Nadie tiene más amor que el que da la vida por sus amigos. Jesús nos enseña una nueva manera de vivir. Ser libres es hacerse servidor de todos por amor. La cruz representa también un instrumento de condenación y muerte. Era un castigo terrible reservado solo para pocos. El condenado era azotado y debía cargar los maderos recorriendo la ciudad. La agonía era lenta y la muerte humillante. Para aplicar a la vida: Actualmente nuestro pueblo soporta distintas cruces como consecuencia de la crisis, el paro y muchos recortes sociales. ¿Las reconozco? ¿Cuáles son? ¿Cuál es nuestro mensaje y compromiso ante ellas?. PADRENUESTRO… CANTO: Somos un pueblo que camina Somos un pueblo que camina y, juntos caminando, podremos alcanzar, otra ciudad que no se acaba, sin penas ni tristezas, ciudad de eternidad. TERCERA ESTACION: Jesús cae por primera vez - Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste al mundo. "Luego Jesús llamó a sus discípulos y a toda la gente y les dijo: «El que quiera seguirme, que renuncie a sí mismo, tome su cruz y me siga. Pues el que quiera asegurar su vida la perderá, y el que sacrifique su vida (por mí y) por el Evangelio, la salvará." Con Jesús hay vida y Reino de Dios Para llegar a él, Dios nos propone un camino: dar la vida por los demás. Ofrecer nuestras fuerzas y comprometer nuestra lucha en la lucha por la vida de todos. Jesús lo asume así y se mantiene fiel a pesar del cansancio, la humillación y la frustración. Fidelidad que es fruto de la oración y la entrega. Fidelidad que nos muestra la identificación de Jesús con el Padre hasta las últimas consecuencias. Fidelidad que Jesús nos pide para seguirlo y hacer la voluntad de Dios: construir su reino, anunciar la liberación, hacer realidad la esperanza, la justicia y la paz. La tarea no es sencilla y los obstáculos abundan. Pero Jesús nos enseñó que la fuerza del amor puede más que la debilidad de una caída. Se puede continuar adelante. Vale la pena vivir ofreciéndolo todo para que otros vivan más y mejor. Para aplicar a la vida: ¿Somos fieles en las dificultades que hallamos en el camino o abandonamos nuestra misión al menor tropiezo? ¿Vivimos para nosotros mismos, procurando salvar nuestra vida, o demostramos con gestos y actitudes que vivimos para los demás? Viernes Santo Página 24 CUARTA ESTACION: Jesús encuentra a María - Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste al mundo. "También estaban allí, observándolo todo, algunas mujeres que desde Galilea habían seguido a Jesús para servirlo." Camino del calvario, los ojos de Jesús encuentran a los de su madre. Ella, también abandonada, sola, silenciosa entre la gente que murmura. Traspasado su corazón por el dolor. No se cruzan palabra, solo las miradas. Mirada de madre, mirada de hijo. El dolor de madre es aliento para el hijo. Escucha su palabra, la vive con decisión, aun cuando le exija lo más difícil. María siempre presente en la vida de Jesús, desde un segundo plano, casi perdida, pero fiel y animando, siempre animando. María se hace presente entre su pueblo sufriente acompañándolo y compartiendo sus angustias como hace tiempo con Jesús. Su presencia contemplativa no es pasiva, por el contrario, ella inspira y alienta a seguir a Cristo, a cambiar las cosas, a vencer la muerte instalada entre nosotros. María nos impulsa a contemplar la acción liberadora de Dios y a sumar nuestros esfuerzos a su causa. Para aplicar a la vida: PADRENUESTRO… Canto: Sí me levantaré, volveré junto a mi Padre. A ti, Señor, elevo mi alma. Tu eres mi Dios y mi salvador. … María nos muestra cómo el camino del seguimiento puede ser doloroso y exigirnos sacrificios, ¿cómo reaccionamos cuando por seguir a Jesús tenemos conflictos, vivimos incomprensión o críticas? Las mujeres acompañaron a Jesús hasta el final, desafiando el peligro, las miradas, el rechazo. ¿Valoramos en nuestras comunidades la aportación de las mujeres? PADRENUESTRO... CANTO: Enséñanos a decir amén Madre de todos los hombres, Enséñanos a decir amén Cuando la noche se acerca y se oscurece la fe. Madre… Cuando el dolor nos oprime la ilusión ya no llega. Madre… Con Jesús hay vida y Reino de Dios QUINTA ESTACION: Simón de Cirene ayuda a Jesús a llevar la cruz - Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste al mundo. "Cuando lo llevaban, encontraron a un tal Simón de Cirene que volvía del campo, y le cargaron con la cruz para que la llevara detrás de Jesús." Al regresar de su trabajo, Simón de Cirene es obligado a ayudar a Jesús. No es su voluntad pero poco importa. Lo importante es que alivia a Jesús, se compromete con él. Lo libera del peso de la cruz y comparte con él su dolor. La civilización del amor exige personas comprometidas con el sufrimiento y el dolor de los demás. Solidarias con los que sufren y los marginados. Un mundo nuevo exige cristianos que caminen junto al pueblo compartiendo su destino. Trabajando por la promoción del hombre, haciendo más livianas las cruces de nuestros hermanos. Seguir a Jesús es vivir la solidaridad como expresión concreta y actual del mandamientos del amor. Viernes Santo Página 25 PADRENUESTRO... CANTO: Cerca está el Señor Cerca está el Señor, cerca está el Señor. Cerca de mi pueblo, cerca del que lucha por amor. Cerca está el Señor, cerca está el Señor. Es el peregrino que comparte mi dolor También está el Señor le conoceréis en el que lucha por la igualdad. También está el Señor le conoceréis en el canta la libertad. También está el Señor no olvidéis su voz sufre el gran dolor del oprimido. SEXTA ESTACION: La verónica limpia el rostro de Jesús - Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste al mundo. "Así como muchos quedaron espantados al verlo, pues estaba tan desfigurado, que ya no parecía un ser humano. El mirar a Simón ayudando a Jesús nos recuerda aquellas palabras del Maestro: " Venid, benditos de mi Padre, porque tuve hambre , y me disteis de comer, tuve sed y me disteis de beber, era forastero, y me alojasteis, desnudo, y me vestisteis, enfermo, y me visitasteis, preso, y me viniesteis a ver..." Despreciado por los hombres y marginado, hombre de dolores y familiarizado con el sufrimiento, semejante a aquellos a los que se les vuelve la cara, no contaba para nada y no hemos hecho caso de él. El desafío es descubrir a Jesús que pasa a nuestro lado. Necesitado de ayuda. Vivo en las angustias del trabajador, del despedido, de la madre sola, del anciano, y en tantos más, marginados por nuestra utilidad sociedad "cristina", sorda ante el reclamo de su Dios: Misericordia quiero y no sacrificios. Una Mujer se abre paso entre la multitud y seca el rostro de Jesús. No le importa el "que dirán " de la gente ni sus reacciones o sus insultos. Compadecida por el dolo se acerca y lo alivia. Como Simón estamos llamados a colaborar con el que sufre... a diferencia de él la decisión es nuestra, libre, personal. En ella se juega el aceptar el Reino. Para aplicar a la vida: El cirineo nos señala cómo el camino de Jesús conduce a un camino de la solidaridad, ¿vivimos solidarios o nuestra fe son meras palabras? ¿Con quiénes sería solidario hoy Jesús? ¿Cómo actuamos nosotros? ¿Qué podemos mejorar para vivir como Dios pide? Sin embargo, eran nuestras dolencias las que él llevaba, eran nuestros dolores los que le pesaban." Hoy Cristo sufriente se revela en el rostro de los abandonados, de los que viven oprimidos bajo la miseria y el sufrimiento. Desde allí espera de nosotros nuestra conversión. Vivir, como la Verónica, la compasión evangélica en gestos concretos de amor al otro. Aun a costa de ser mal mirados, incomprendidos y hasta perseguidos. Para aplicar a la vida: Compasión es conmoverse, sentir con el otro su sufrimiento y experimentarlo como propio: ¿somos indiferentes al dolor de los demás? Jesús está allí, en el hambriento, en el desnudo, en el abandonado, en el enfermo. ¿Qué hago por ello? Con Jesús hay vida y Reino de Dios Viernes Santo La madre Teresa nos ha mostrado la posibilidad de vivir la compasión y el amor en nuestros días. ¿Qué puedes hacer, en tu ambiente, para vivir como ella? reconocer nuestros errores? PADRENUESTRO... PADRENUESTRO... CANTO: Un solo Señor ¡Un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo, un solo Dios y Padre! Llamados a guardar la unidad del Espíritu por el vínculo de la paz, cantamos y proclamamos: ¡Un solo Señor… Página 26 ¿Buscamos ayuda en Dios para superar las dificultades de la vida? CANTO: Alma mía... Alma mía, recobra tu calma, que el Señor fue bueno contigo. Alma mía, recobra tu calma, que el Señor escucha tu voz. SÉPTIMA ESTACION: Jesús cae por segunda vez OCTAVA ESTACION: Jesús consuela a las mujeres que lloran por Él. - Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste al mundo. - Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste ... "... eran nuestras faltas por las que era destruido nuestros pecados, por los que era aplastado. El soportó el castigo que nos trae la paz y por sus llagas hemos sido sanados". "Lo seguía muchísima gente, especialmente mujeres que se golpeaban el pecho y se lamentaban por él. Jesús, volviéndose hacia ellas, les dijo: «Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí. llorad más bien por vosotras y por sus hijos." El camino se hace largo y pesado, las fuerzas escasean y Jesús cae por tierra nuevamente. El amor es inmenso y todo lo soporta. De pie, tambaleante, sigue el camino que nos traerá la paz. Más bien lamentaos por vuestros hijos y por vosotras, que sois quienes necesitan conversión. Jesús invita a cambiar de vida. A renovarse desde el interior y expresarlo en obras y actitudes. Nada se consigue sin esfuerzos y el camino del cristiano no está libre de sacrificios. Jesús nos muestra que el amor al Padre es mayor que cualquier sufrimiento. En sus manos se ofrece: Padre bueno, dame fuerzas para hacer tu voluntad. Escuchar su palabra y ponerla en práctica. Ser solidarios, justos, fraternos. Empeñar la vida en la construcción del Reino. Jesús en las dificultades no abandona el camino, recurre al Padre y se abandona en él. ¿Cómo actuamos nosotros? El camino hacia el Padre encierra una apertura creciente a la voluntad de Dios y una liberación progresiva de todo lo que me impide ponerla en práctica. A veces sentimos la tentación de bajar los brazos y no continuar adelante. Jesús nos enseña que Dios no nos abandona, siempre nos acompaña, aun en los momentos más penosos de la vida. Para aplicar a la vida: ¿Cómo enfrentamos nuestras caídas? ¿Sabemos Seguir a Jesús exige la conversión. Ser hombres nuevos para construir un mundo nuevo. Vivir los valores del evangelio e impregnar de ellos nuestra cultura y sociedad. No basta decir: Señor, Señor; para seguir a Jesús hay que comprometerse con el Reino y hacerlo presente en obras concretas. Para aplicar a la vida: ¿qué actitudes de mi persona debo cambiar para serlo? y el amor en nuestro tiempo? Con Jesús hay vida y Reino de Dios PADRENUESTRO... CANTO: Perdona a tu pueblo... Perdona a tu pueblo, Señor, Perdona a tu pueblo, perdónale, Señor. No estés eternamente enojado, perdónale, Señor NOVENA ESTACION: Jesús cae por tercera vez - Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste... "Felices los que son perseguidos por causa del bien, porque de ellos es el Reino de los Cielos." El peso de los maderos se acrecienta a cada paso. Jesús cae. La tierra cubre su rostro y empasta sus heridas. No resiste más. Sus fuerzas, al límite de lo humano. Pero su fidelidad es mayor que el dolor. Una vez más se sobrepone. Hay que seguir, Señor. Si es posible alíviame de este trance, pero que se haga tu voluntad, Padre. Jesús se reincorpora y prosigue. Los últimos pasos son terribles, pero se mantiene fiel a sus palabras: el buen pastor da la vida por sus ovejas. Mantiene viva la esperanza. Nosotros también si queremos vivir para los demás vamos a encontrar incomprensión y soledad. Descubrimos tortura y muerte en tantas personas en el mundo!. Vivir para los demás, hacer el bien, practicar la justicia, exige dejar todo, darlo todo de uno, hasta la vida si es necesario. Para aplicar a la vida: ¿Me brindo a los demás con todo mi ser? PADRENUESTRO... CANTO: Danos un corazón... Danos un corazón grande para amar. Danos un corazón fuerte para luchar.. Hombres nuevos, luchando en esperanza, caminantes, sedientos de verdad. Viernes Santo Página 27 Hombres nuevos, sin frenos ni cadenas, hombres nuevos que exigen libertad. Danos… DÉCIMA ESTACION: Despojan a Jesús de sus vestiduras -- Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste... "Después de clavar a Jesús en la cruz, los soldados tomaron sus vestidos y los dividieron en cuatro partes, una para cada uno de ellos. En cuanto a la túnica, tejida de una sola pieza de arriba abajo sin costura alguna, se dijeron:«No la rompamos, echémosla más bien a suertes, a ver a quién le toca.» Así se cumplió la Escritura que dice: Se repartieron mi ropa y echaron a suertes mi túnica. Esto es lo que hicieron los soldados." Llegamos al calvario. Jesús, agotado y exhausto, es desnudado delante de la multitud. Ni el mínimo derecho a la intimidad es respetado. Jesús, desnudo, herido, desolado al pie de la cruz, se hace solidario de tantos hombres y mujeres despojados de sus derechos a lo largo de la historia. La ambición de tener y tener domina a los soldados. El hombre no importa, lo que vale son las cosas. Dramático paralelo con nuestro tiempo donde millones de hombres sufren por la ambición descontrolada de unos pocos y la escandalosa injusticia institucionalizada del sistema económico internacional. Para aplicar a la vida: Jesús llega a la cruz desnudo, sin pertenencias, sin nada. ¿Qué valor le damos a las cosas materiales? ¿las transformamos en absolutos, dejamos que nos dominen? sufren: ¿soy consciente de que lo que a mi me sobra, a ellos les falta? PADRENUESTRO... CANTO: Con vosotros está Con vosotros está y no le conocéis. Con vosotros está, su nombre es el Señor. Con Jesús hay vida y Reino de Dios Su nombre es el Señor y pasa hambre Y clama por la boca del hambriento, Y muchos que lo ven pasan de largo, Seguros y al calor de su dinero. Con vosotros… UNDÉCIMA ESTACION: Clavan a Jesús en la cruz - Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste... "Al llegar al lugar llamado de la Calavera, lo crucificaron allí, y con él a los malhechores, uno a su derecha y el otro a su izquierda." Clavado en la cruz espera pacientemente el momento de dar la vida. En su dolor tiene tiempo para los que lo rodean. Su compasión no tiene límites. Abandonado y humillado pide perdón por quienes lo están matando. Es el punto máximo del amor: el perdón. Sólo Jesús es capaz de semejante demostración de amor. Desinteresado, despreocupado y descentrado de sí mismo. Su pensamiento gira en torno a quienes lo rodean. Padre, perdónalos. Para aplicar a la vida: cia del amor. ¿Cómo actuamos nosotros con las personas que no nos caen bien, que no piensan como nosotros, y aun con aquéllas que nos hacen mal? Jesús muere por nuestros pecados, personales y sociales. ¿Qué situaciones de pecado de nuestra sociedad empujan los clavos de Jesús? Viernes Santo Página 28 DUODÉCIMA ESTACION: Jesús entrega su vida por nosotros - Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste... "Desde el mediodía hasta las tres de la tarde todo el país se cubrió de tinieblas. A eso de las tres, Jesús gritó con fuerza: Elí, Elí, lamá sabactaní, que quiere decir: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?» Pero nuevamente Jesús dio un fuerte grito y entregó su espíritu." En el escándalo de la cruz comprendemos en profundidad a Jesús. Su existencia toda fue servicio, total disponibilidad, anticipo de su entrega máxima: su propia vida . Muere por nuestros pecados para que exista una esperanza. Desde la cruz, a la vista de la muerte de Jesús, todo cambia. Los olvidados del mundo no son los olvidados de Dios. Los vencidos resultaran los vencedores y los postergados los primeros. Ante la cruz los esquemas no sirven. La novedad es que para tener vida hay morir por todos, para recibir hay que entregarse sin reservas, para ser libre hay que hacerse esclavo de los demás por amor. Jesús sigue muriendo en nuestros días en los rostros de los niños que sufren, los ancianos olvidados, los desempleados, los obreros mal pagos, los indígenas, los marginados, los jóvenes sin futuro. Mi compromiso con Cristo debe llevarme a entregar, como él, mi vida por amor a todos, empezando por los más pobres, para construir su Reino de justicia, amor y paz. Para aplicar a la vida: PADRENUESTRO... yo dar lo mejor de mi vida? ¿Dónde y cómo me estará pidiendo Dios continuar la misión de Jesús? CANTO: Victoria, tu reinarás. Victoria, tu reinarás. Oh cruz, tu nos salvarás. PADRENUESTRO... El Verbo en ti clavado, muriendo nos rescató. De ti, madero santo, nos viene la Redención. CANTO: Santa María del Camino Mientras recorres la vida tú nunca solo estás, contigo por el camino Santa María va. ¡Ven con nosotros a caminar, Santa María Ven! (2 veces) Aunque te digan algunos que nada puede cambiar, lucha por un mundo nuevo, lucha por la verdad. Con Jesús hay vida y Reino de Dios DÉCIMOTERCERA ESTACION: El cuerpo de Jesús es bajado de la cruz - Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste... "Cerca de la cruz de Jesús estaba su madre, con María, la hermana de su madre, esposa de Cleofás, y María de Magdala ." Junto a la cruz, en silencio, traspasada por el dolor, María. La Virgen de la fidelidad a la Palabra de Dios. María, presente en la cruz y presente junto a cada uno de nosotros. Contagiándonos su fidelidad y su fortaleza para seguir a Jesús. Al pie de la cruz, la Virgen fiel nos enseña que ella acompaña a todos los que buscan a su hijo. Ella también es nuestra madre para siempre. María observa cómo descienden el cuerpo de su hijo amado. Aparentemente, el justo ha fracasado y la muerte ha vencido una vez más. Alrededor de nosotros, a la vista del sufrimiento y el dolor, de los niños en riesgo de pobreza, de los drogadictos, o los desahuciados y tantos más. A la vista de todos ellos también podría pensarse que la muerte es la vencedora. Pero el Padre dirá la última palabra y de la muerte brotará la vida en abundancia. Nuestro caminar junto a los pobres debe mantener siempre viva la esperanza. Habrá vida y vida para todos. Hacerla realidad en nuestros días es la tarea fundamental de los cristianos. Para aplicar a la vida: Jesús resucita cada día en cada obra de bien, en cada gesto solidario, en cada compromiso concreto por un cambio hacia la justicia, ¿cómo puedes hacer realidad la resurrección de nuestro Señor hoy? PADRENUESTRO... CANTO: Quédate junto a nosotros Quédate junto a nosotros Que la tarde está cayendo, pues sin ti a nuestro lado nada hay justo, nada hay bueno. Caminamos solos por nuestro camino, cuando vemos a la vera un peregrino, nuestros ojos, ciegos de tanto penar, se nos llenan de vida, se nos llenan de paz. … Viernes Santo Página 29 DÉCIMOCUARTA ESTACION: Jesús es enterrado - Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. - Porque por tu santa cruz redimiste... "Estaban tan asustadas que no se atrevían a levantar los ojos del suelo. Pero ellos les dijeron: «¿Por qué buscan entre los muertos al que vive?.No está aquí. Resucitó. Acordaos de lo que les dijo cuando todavía estaba en Galilea." Jesús es enterrado. Ha muerto. Pero el plan de salvación triunfa: Cristo resucita. "Si hemos muerto con él, viviremos con él”. De la muerte nace la vida, del sufrimiento y la frustración surge la esperanza. Nos ha liberado del pecado y de la muerte. Donde el mundo ve frustración y sin sentido, Dios hace estallar la vida. De la noche surge la luz que nos ilumina y acompaña. El Padre no nos abandona. Su promesa liberadora se hace realidad en Jesús. Para aplicar a la vida: ¿Cómo puedes, en tu familia, en tu barrio, en tu comunidad, hacer un aporte concreto para que la vida nueva de la Resurrección se haga signo concreto, real, cotidiano? PADRENUESTRO... CANTO. Caminaré en presencia del Señor Caminaré en presencia del Señor (2 veces) Amo al Señor porque escucha mi voz suplicante, porque inclina su oído hacia mí el día que lo invoco. Me envolvían redes de muerte, caí en tristeza y en angustia; invoqué el nombre del Señor: Señor, salva mi vida. DECIMOQUINTA ESTACIÓN: La vida vence. Este es el mensaje para todos los pueblos. Dios no nos abandona en el dolor, en la injusticia y el sufrimiento. Nos quiere libres y libres para amar, empeñados en la construcción de la civilización del amor. Sumando nuestros esfuerzos para empezar hoy y aquí la fraternidad, la paz y la justicia anheladas. Nos propone a todos el camino de Jesús. Camino de cruz, camino de esperanza y liberación. Con Jesús hay vida y Reino de Dios Camino de donación, dar la vida para que otros vivan. Su resurrección es signo y prenda de la resurrección a la que todos estamos llamados y de la transformación final del universo. Para aplicar a la vida: El camino de Jesús es el camino del cristiano, ¿en tu vida qué aspectos necesitan pasar por la noche oscura de la cruz para ver la mañana luminosa de la Resurrección? que la muerte no tiene la última palabra, la vida es más fuerte porque es el proyecto de Dios. ¿Cómo, con qué gestos, con qué opciones, con qué prácticas, Dios nos llama a anunciar su proyecto de Vida, en medio de tanta muerte, violencia, injusticia y desesperanza? Confiemos nuestras propuestas, nuestras opciones y nuestras esperanzas en las manos de Jesús, él las presentará al Padre para que envíe el Espíritu que hace nuevas todas las cosas. Oremos confiados dando gracias al Dios de la Vida. PADRENUESTRO… CANTO: Tu nos dijiste.. Tú nos dijiste que la muerte no es el final del camino, que aunque morimos no somos carne de un ciego destino. Tú nos hiciste, tuyos somos. Nuestro destino es vivir, siendo felices contigo, sin padecer ni morir. Cuando, Señor, resucitaste, todos vencimos contigo. Nos regalaste la vida, como en Betania al amigo. Si caminamos a tu lado, no va a faltarnos tu amor, porque, muriendo, vivimos vida más clara y mejor (Este Viacrucis fue escrito por Jesús Murúa) Celebraremos el culto de la tarde a las 5 Viernes Santo Página 30 Con Jesús hay vida y Reino de Dios Viernes Santo Página 31 Viernes Santo Con Jesús, compartimos el dolor Momento de silencio Monición de entrada Hoy, Viernes Santo, celebramos la Pasión y la Muerte de Nuestro Señor Jesucristo. La cruz es por medio de la Pasión redentora de Cristo un signo de victoria sobre el mal, el dolor y la muerte. de su poder redentor. Estamos a la sombra de la Cruz, abrumados por ella, pero empeñados en no permitir que se prolongue; ante este árbol recibimos la misión de oponernos a la muerte sin dignidad, a la muerte, legal según las leyes de los hombres, pero inhumana. El compromiso con el Reino de Jesús y su persona nos sitúa en el corazón del sufrimiento del mundo. Triunfa el Dios de la vida, resucitando a su Hijo Jesús de entre los muertos. La clave para contemplar la Cruz está en el amor de Dios Padre, que se ha hecho visible en la entrega total de Jesús el Señor hasta dar su vida para la salvación de todos. Nuestra celebración de esta tarde posee tres partes: la liturgia de la Palabra, la adoración de la Cruz y la Sagrada Comunión. Dios nos habla dándonos luz sobre la Pasión y Muerte de su Hijo. Venerar la Cruz, es expresión de nuestra fe en Jesús, muerto y resucitado. Comulgar el Cuerpo de Cristo nos hace participar de la entrega gloriosa de Jesucristo. Iniciamos esta celebración poniéndonos de rodillas, en silencio contemplativo, y lleno de confianza y gratitud al Señor. Con Jesús, compartimos el dolor. Oración del Sacerdote Hoy Jesús encarna a todos los crucificados y ejecutados; se encarna en quienes se hacen solidarios con los que sufren y dan testimonio de la fe y de la verdad con su vida. Ante nosotros se levanta la Cruz para que la contemplemos, la honremos, la besemos y participemos PRIMERA PARTE: PASIÓN Y MUERTE DEL SEÑOR Con Jesús hay vida y Reino de Dios Lectura del profeta Isaías (52,13-53,12) Mirad, mi siervo tendrá éxito, subirá y crecerá mucho. Como muchos se espantaron de él, porque desfigurado no parecía hombre, ni tenía aspecto humano, así asombrará a muchos pueblos, ante él los reyes cerrarán la boca, al ver algo inenarrable y contemplar algo inaudito. ¿Quien creyó nuestro anuncio?, ¿a quién se reveló el brazo del Señor? Creció en su presencia como brote, como raíz en tierra árida, sin figura, sin belleza. Lo vimos sin aspecto atrayente, despreciado y evitado de los hombres, como un hombre de dolores, acostumbrado a sufrimientos, ante el cual se ocultan los rostros, despreciado y desestimado. Él soportó nuestros sufrimientos y aguantó nuestros dolores; nosotros lo estimamos leproso, herido de Dios y humillado; pero él fue traspasado por nuestras rebeliones, triturado por nuestros crímenes. Nuestro castigo saludable cayó sobre él, sus cicatrices nos curaron. Todos errábamos como ovejas, cada uno siguiendo su camino; y el Señor cargó sobre él todos nuestros crímenes. Maltratado, voluntariamente se humillaba y no abría la boca; como cordero llevado al matadero, como oveja ante el esquilador, enmudecía y no abría la boca. Sin defensa, sin justicia, se lo llevaron, ¿quién meditó en su destino? Lo arrancaron de la tierra de los vivos, por los pecados de mi pueblo lo hirieron. Le dieron sepultura con los malvados, y una tumba con los malhechores, aunque no había cometido crímenes ni hubo engaño en su boca. El Señor quiso triturarlo con el sufrimiento, y entregar su vida como expiación; verá su descendencia, prolongará sus años, lo que el Señor quiere prosperará por su mano. Por los trabajos de su alma verá la luz, el justo se saciará de conocimiento. Mi siervo justificará a muchos, porque cargó con los crímenes de ellos. Le daré una multitud como parte, y tendrá como despojo una muchedumbre. Porque expuso su vida a la muerte y fue contado entre los pecadores, él tomo el pecado de muchos e intercedió por los pecadores. Palabra de Dios Viernes Santo Página 32 Salmo responsorial (30) R. Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu. A ti, Señor, me acojo: no quede yo nunca defraudado; tú, que eres justo, ponme a salvo. A tus manos encomiendo mi espíritu: tú, el Dios leal, me librarás. R. Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu. Soy la burla de todos mis enemigos, la irrisión de mis vecinos, el espanto de mis conocidos; me ven por la calle, y escapan de mí. Me han olvidado como a un muerto, R. Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu. Pero yo confío en ti, Señor, te digo: "Tú eres mi Dios." En tu mano están mis azares; líbrame de los enemigos que me persiguen. R. Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu. Haz brillar tu rostro sobre tu siervo, sálvame por tu misericordia. Sed fuertes y valientes de corazón, los que esperáis en el Señor. R. Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu. Lectura de la carta de San Pablo a los Hebreos (4,14-16;5,7-9) Hermanos: Mantengamos la confesión de la fe, ya que tenemos un sumo sacerdote grande, que ha atravesado el cielo, Jesús, Hijo de Dios. No tenemos un sumo sacerdote incapaz de compadecerse de nuestras debilidades, sino que ha sido probado con todo exactamente como nosotros, menos en el pecado. Por eso, acerquémonos con seguridad al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y encontrar gracia que nos auxilie oportunamente. Cristo, en los días de su vida mortal, a gritos y con lágrimas, presentó oraciones y súplicas al que podía salvarlo de la muerte, cuando en su angustia fue escuchado. Él, a pesar de ser Hijo, aprendió, sufriendo, a obedecer. Y, llevado a la consumación, se ha convertido para todos los que le obedecen en autor de salvación eterna. Palabra de Dios Con Jesús hay vida y Reino de Dios Pasión de Nuestro Señor Jesucristo según San Juan (18,1-19,42) C. En aquel tiempo, salió Jesús con sus discípulos al otro lado del torrente Cedrón, donde había un huerto, y entraron allí él y sus discípulos. Judas, el traidor, conocía también el sitio, porque Jesús se reunía a menudo allí con sus discípulos. Judas entonces, tomando la patrulla y unos guardias de los sumos sacerdotes y de los fariseos, entró allí con faroles, antorchas y armas. Jesús sabiendo todo lo que venia sobre él, se adelanto y les dijo: +. "¿A quién buscáis?" C. Le contestaron: S. "A Jesús, el Nazareno." C. Les dijo Jesús: +. "Yo soy." C. Estaba también con ellos Judas, el traidor. Al decirles: "Yo soy", retrocedieron y cayeron a tierra. Les preguntó otra vez: +. "¿A quién buscáis?" C. Ellos dijeron: S. "A Jesús, el Nazareno." C. Jesús contestó: +. "Os he dicho que soy yo. Si me buscáis a mí, dejad marchar a éstos." C. Y así se cumplió lo que había dicho: "No he perdido a ninguno de los que me diste." Entonces Simón Pedro, que llevaba una espada, la sacó e hirió al criado del sumo sacerdote, cortándole la oreja derecha. Este criado se llamaba Malco. Dijo entonces Jesús a Pedro: +. "Mete la espada en la vaina. El cáliz que me ha dado mi Padre, ¿no lo voy a beber?" C. La patrulla, el tribuno y los guardias de los judíos prendieron a Jesús, lo ataron y lo llevaron primero a Anás, porque era suegro de Caifás, sumo sacerdote aquel año; era Caifás el que había dado a los judíos este consejo: "Conviene que muera un solo hombre por el pueblo." Simón Pedro y otro discípulo seguían a Jesús. Este discípulo era conocido del sumo sacerdote y entró con Jesús en el palacio del sumo sacerdote, mientras Pedro se quedó fuera a la puerta. Salió el otro discípulo, el conocido del sumo sacerdote, habló a la portera e hizo entrar Viernes Santo Página 33 a Pedro. La criada que hacía de portera dijo entonces a Pedro: S. "¿No eres tú también de los discípulos de ese hombre?" C. Él dijo: S. "No lo soy." C. Los criados y los guardias habían encendido un brasero, porque hacía frío, y se calentaban. También Pedro estaba con ellos de pie, calentándose. El sumo sacerdote interrogó a Jesús acerca de sus discípulos y de la doctrina. Jesús le contesto: +. "Yo he hablado abiertamente al mundo; yo he enseñado continuamente en la sinagoga y en el templo, donde se reúnen todos los judíos, y no he dicho nada a escondidas. ¿Por qué me interrogas a mí? Interroga a los que me han oído, de qué les he hablado. Ellos saben lo que he dicho yo." C. Apenas dijo esto, uno de los guardias que estaba allí le dio una bofetada a Jesús, diciendo: S. "¿Así contestas al sumo sacerdote?" C. Jesús respondió: +. "Si he faltado al hablar, muestra en qué he faltado; pero si he hablado como se debe, ¿por qué me pegas?" C. Entonces Anás lo envió atado a Caifás, sumo sacerdote. Simón Pedro estaba en pie, calentándose, y le dijeron: S. "¿No eres tú también de sus discípulos?" C. Él lo negó, diciendo: S. "No lo soy." C. Uno de los criados del sumo sacerdote, pariente de aquel a quien Pedro le cortó la oreja, le dijo: S. "¿No te he visto yo con él en el huerto?" C. Pedro volvió a negar, y enseguida canto un gallo. Llevaron a Jesús de casa de Caifás al pretorio. Era el amanecer, y ellos no entraron en el pretorio para no incurrir en impureza y poder así comer la Pascua. Salió Pilato afuera, adonde estaban ellos, y dijo: S. "¿Qué acusación presentáis contra este hombre?" C. Le contestaron: S. "Si éste no fuera un malhechor, no te lo entregaríamos." Con Jesús hay vida y Reino de Dios C. Pilato les dijo: S. "Lleváoslo vosotros y juzgadlo según vuestra ley." C. Los judíos le dijeron: S. "No estamos autorizados para dar muerte a nadie." C. Y así se cumplió lo que había dicho Jesús, indicando de qué muerte iba a morir. Entró otra vez Pilato en el pretorio, llamó a Jesús y le dijo: S. "¿Eres tú el rey de los judíos?" C. Jesús le contestó: +. "¿Dices eso por tu cuenta o te lo han dicho otros de mí?" C. Pilato replicó: S. "¿Acaso soy yo judío? Tu gente y los sumos sacerdotes te han entregado a mi; ¿que has hecho?" C. Jesús le contestó: +. "Mi reino no es de este mundo. Si mi reino fuera de este mundo, mi guardia habría luchado para que no cayera en manos de los judíos. Pero mi reino no es de aquí." C. Pilato le dijo: S. "Con que, ¿tú eres rey?" C. Jesús le contestó: +. "Tú lo dices: soy rey. Yo para esto he nacido y para esto he venido al mundo: para ser testigo de la verdad. Todo el que es de la verdad escucha mi voz." C. Pilato le dijo: S. "Y, ¿qué es la verdad?" C. Dicho esto, salió otra vez adonde estaban los judíos y les dijo: S. "Yo no encuentro en él ninguna culpa. Es costumbre entre vosotros que por Pascua ponga a uno en libertad. ¿Queréis que os suelte al rey de los judíos?" C. Volvieron a gritar: S. "A ése no, a Barrabás." C. El tal Barrabás era un bandido. Entonces Pilato tomó a Jesús y lo mandó azotar. Y los saldados trenzaron una corona de espinas, se la pusieron en la cabeza y le echaron por encima un manto color púrpura; y, acercándose a él, le decían: Viernes Santo Página 34 S. "¡Salve, rey de los judíos!" C. Y le daban bofetadas. Pilato salió otra vez afuera y les dijo: S. "Mirad, os lo saco afuera, para que sepáis que no encuentro en él ninguna culpa." C. Y salió Jesús afuera, llevando la corona de espinas y el manto color púrpura. Pilato les dijo: S. "Aquí lo tenéis." C. Cuando lo vieron los sumos sacerdotes y los guardias, gritaron: S. "¡Crucifícalo, crucifícalo!" C. Pilato les dijo: S. "Lleváoslo vosotros y crucificadlo, porque yo no encuentro culpa en él." C. Los judíos le contestaron: S. "Nosotros tenemos una ley, y según esa ley tiene que morir, porque se ha declarado Hijo de Dios." C. Cuando Pilato oyó estas palabras, se asustó aún más y, entrando otra vez en el pretorio, dijo a Jesús: S. "¿De donde eres tú?" C. Pero Jesús no le dio respuesta. Y Pilato le dijo: S. "¿A mí no me hablas? ¿No sabes que tengo autoridad para soltarte y autoridad para crucificarte?" C. Jesús le contestó: +. "No tendrías ninguna autoridad sobre mí, si no te la hubieran dado de lo alto. Por eso el que me ha entregado a ti tiene un pecado mayor." C. Desde este momento Pilato trataba de soltarlo, pero los judíos gritaban: S. "Si sueltas a ése, no eres amigo del César. Todo el que se declara rey está contra el César." C. Pilato entonces, al oír estas palabras, sacó afuera a Jesús y lo sentó en el tribunal, en el sitio que llaman "el Enlosado" (en hebreo Gábbata). Era el día de la Preparación de la Pascua, hacia el mediodía. Y dijo Pilato a los judíos: S. "Aquí tenéis a vuestro rey." C. Ellos gritaron: S. "¡Fuera, fuera; crucifícalo!" C. Pilato les dijo: S. "¿A vuestro rey voy a crucificar?" Con Jesús hay vida y Reino de Dios C. Contestaron los sumos sacerdotes: S. "No tenemos más rey que al César." C. Entonces se lo entregó para que lo crucificaran. Tomaron a Jesús, y él, cargando con la cruz, salió al sitio llamado "de la Calavera" (que en hebreo se dice Gólgota), donde lo crucificaron; y con él a otros dos, uno a cada lado, y en medio, Jesús. Y Pilato escribió un letrero y lo puso encima de la cruz; en él estaba escrito: "Jesús, el Nazareno, el rey de los judíos." Leyeron el letrero muchos judíos, porque estaba cerca el lugar donde crucificaron a Jesús, y estaba escrito en hebreo, latín y griego. Entonces los sumos sacerdotes de los judíos dijeron a Pilato: S. "No escribas: "El rey de los judíos", sino: "Éste ha dicho: Soy el rey de los judíos."" C. Pilato les contestó: S. "Lo escrito, escrito está." C. Los soldados, cuando crucificaron a Jesús, cogieron su ropa, haciendo cuatro partes, una para cada soldado, y apartaron la túnica. Era una túnica sin costura, tejida toda de una pieza de arriba a abajo. Y se dijeron: S. "No la rasguemos, sino echemos a suerte, a ver a quién le toca." C. Así se cumplió la Escritura: "Se repartieron mis ropas y echaron a suerte mi túnica". Esto hicieron los soldados. Junto a la cruz de Jesús estaban su madre, la hermana de su madre, María, la de Cleofás, y María, la Magdalena. Jesús, al ver a su madre y cerca al discípulo que tanto quería, dijo a su madre: +. "Mujer, ahí tienes a tu hijo." C. Luego, dijo al discípulo: +. "Ahí tienes a tu madre." C. Y desde aquella hora, el discípulo la recibió en su casa. Después de esto, sabiendo Jesús que todo había llegado a su término, para que se cumpliera la Escritura dijo: +. "Tengo sed." C. Había allí un jarro lleno de vinagre. Y, sujetando una esponja empapada en vinagre a una caña de hisopo, se la acercaron a la boca. Jesús, cuando tomó el vinagre, dijo: Viernes Santo Página 35 +. "Está cumplido." C. E, inclinando la cabeza, entregó el espíritu. (Una pequeña pausa) Los judíos entonces, como era el día de la Preparación, para que no se quedaran los cuerpos en la cruz el sábado, porque aquel sábado era un día solemne, pidieron a Pilato que les quebraran las piernas y que los quitaran. Fueron los soldados, le quebraron las piernas al primero y luego al otro que habían crucificado con él; pero al llegar a Jesús, viendo que ya había muerto, no le quebraron las piernas, sino que uno de los soldados, con la lanza, le traspasó el costado, y al punto salió sangre y agua. El que lo vio da testimonio, y su testimonio es verdadero, y él sabe que dice verdad, para que también vosotros creáis. Esto ocurrió para que se cumpliera la Escritura: "No le quebrarán un hueso"; y en otro lugar la Escritura dice: "Mirarán al que atravesaron." Después de esto, José de Arimatea, que era discípulo clandestino de Jesús por miedo a los judíos, pidió a Pilato que le dejara llevarse el cuerpo de Jesús. Y Pilato lo autorizó. Él fue entonces y se llevó el cuerpo. Llegó también Nicodemo, el que había ido a verlo de noche, y trajo unas cien libras de una mixtura de mirra y áloe. Tomaron el cuerpo de Jesús y lo vendaron todo, con los aromas, según se acostumbra a enterrar entre los judíos. Había un huerto en el sitio donde lo crucificaron, y en el huerto un sepulcro nuevo donde nadie había sido enterrado todavía. Y como para los judíos era el día de la Preparación, y el sepulcro estaba cerca, pusieron allí a Jesús. Palabra del Señor REFLEXIÓN REFLEXIÓN El crucificado nos revela la profundidad del mal en el mundo; desbarata cualquier ingenuidad sobre el mal. “Éste es el hombre; aquí lo tenéis. Éste es el Hijo”. Necesitamos silencio para situarnos con las víctimas, con el Dios de Jesús, y para cerciorarnos de que no estamos aliados con los que matan o se aprovechan de la muerte y el sufrimiento de los otros Con Jesús hay vida y Reino de Dios SEGUNDA PARTE: Viernes Santo Página 36 Señor, escúchanos; Señor, óyenos. (Silencio) ORACIÓN UNIVERSAL Monición Sintiéndonos miembros de un pueblo sacerdotal y partícipes de un nuevo sacerdocio inaugurado por Jesucristo, elevemos hasta el Padre nuestra súplica, que quiere hacerse planetaria como universal es la salvación que nos trae el crucificado. 1. Por la Iglesia Oremos, hermanos, por la Iglesia, para que el Señor le dé su espíritu. Por el Papa Benedicto, por los pastores y agentes de pastoral, por todos los miembros del pueblo de Dios para que el Señor nos conceda vivir y perseverar en la vocación a la que hemos sido llamados. Cantado: Señor, escúchanos; Señor, óyenos. (Silencio) Sac.: No olvides, Señor, echar tu mirada compasiva sobre esta Iglesia tuya para que, juntos, trabajemos por tu reino de forma humanizadora y generosa. 2. Por la unidad de los cristianos y creyentes Oremos por todos los que creemos en Cristo, para que haciendo del evangelio nuestra norma de vida, caminemos con decisión hacia la unidad para que todos formemos un solo rebaño bajo un solo pastor conforme al deseo del Señor. Oremos también por los creyentes de otras religiones y cultu ras, para que todos seamos signo de paz y de fraternidad en nuestro mundo. Señor, escúchanos; Señor, óyenos. (Silencio) Sac.: Que descubramos, Padre, por el diálogo, que cada tradición tiene un tesoro. Y que diálogo te hagamos a ti presente entre nosotros como semilla de luz y ver dad que orienta nuestras búsquedas. 3. Por los no creyentes. Oremos por los hombres y mujeres que no creen en Dios, para que siendo fieles a su conciencia, la honradez y coherencia de sus vidas les haga descubrir que Dios no está lejos de ellos y que Dios Creador y Padre se comunica siempre con sus criaturas y con sus hijos. Sac.: Tú, Padre, no eres el Dios de unos pocos sino el Padre de todos. Aunque algunos de ellos no crean en ti, tú sí crees en ellos. Que su postura no creyente nos ayude a nosotros a purificar nuestra fe y nos fuerce a un verdadero testimonio de ti con nuestra vida. 4. Por los gobernantes Oremos para que en todos los países sean elegidos como gobernantes, hombres y mujeres íntegros, que deseen servir a la sociedad, y así podamos conocer progresos importantes en la práctica de los Derechos Humanos, de la justicia y de la paz en el interior de cada país y en el mundo entero. Señor, escúchanos; Señor, óyenos. (Silencio) Sac.: Que sean las personas, Señor, y el bien común, el centro de toda acción política. Que desaparezcan los ciegos partidismos, la corrupción y la mentira. Que la vida política sea realmente un servicio y una fuente de autoridad. 5. Por los pobres y los que sufren Oremos para que Dios nuestro Señor, ilumine nuestra inteligencia y reafirme nuestra voluntad para erradicar las causas del hambre, la mayor arma de destrucción masiva que azota a la humanidad. Le pedimos ser solidarios con todas las víctimas de las guerras y de toda forma de violencia. Recordamos ante el Señor a todos los perseguidos injustamente, a los que no tienen trabajo, a los niños explotados, a los excluidos de nuestra sociedad, para que la salvación de Jesucristo se haga presente en todos ellos. Señor, escúchanos; Señor, óyenos. (Silencio) Sac.: Dios, Padre nuestro, Padre de la vida. Danos la misericordia que brota de tu espíritu para que sepamos ayudar a tantos hombres y mujeres, niños y niñas, a salir de sus abismos de dolor en cuyas cruces sigue muriendo hoy Cristo, tu Hijo. Danos entrañas de misericordia y fortaleza para la justicia. Por el mismo Jesucristo nuestro Señor. Con Jesús hay vida y Reino de Dios TERCERA PARTE: ADORACIÓN DE LA CRUZ (El sacerdote al fondo de la Iglesia eleva la cruz.. El monitor introduce esta presentación) Monición La Cruz es instrumento de tortura, de ejecución, de muerte... Pero Dios es más fuerte que todos los poderes de este mundo, y donde nosotros ponemos muerte, Él va a poner resurrección y vida. Adorar la Cruz es adorar el instrumento donde Dios nos revela su Amor, ese Amor al que nosotros no correspondemos, pero que Él mantiene firme; ahora vemos muerte, pero pronto veremos la nueva vida que Dios da a su Hijo y, en él, a toda la humanidad. Adorémosla con agradecimiento. Viernes Santo Página 37 Canto: Victoria, tu reinarás... Monición En tu cruz, Señor, brilla la aurora de nuestra esperanza. ¡La vida, la Justicia, la Paz, la Solidaridad son más fuertes que la muerte! !Aunque vivamos, Señor, tiempos de crisis, violencia y muerte que oscurecen nuestra mirada, amanece un nuevo día, amanece que ya es Reino! (En el Altar. En voz alta proclama) “Mirad el árbol de la cruz, donde estuvo clavada la salvación del mundo". Venid a adorarla.” Canto: Victoria... (En el fondo de la Iglesia. En voz alta proclama) “Mirad el árbol de la cruz, donde estuvo clavada la salvación del mundo". Monición: A continuación nos acercamos a besar la cruz, mientras cantamos: Venid a adorarla.” Canto: Ved la cruz de salvación Canto: Victoria, tu reinarás... OS SALVARÁS (Al fondo de la Iglesia. Se inicia la marcha hasta el centro de la Iglesia) Monición La cruz nos enseña el camino, por eso es punto de partida, para todos los que buscamos vivir en las huellas de Jesús. Asumiendo la Causa de los Pobres, trabajando por la Justicia y la Paz, ofreciendo la vida en la entrega diaria por dar a luz al Reino en nuestra tierra. (En el centro de la Iglesia. En voz alta proclama) “Mirad el árbol de la cruz, donde estuvo clavada la salvación del mundo". Venid a adorarla.” 1.- Ved la cruz de salvación donde Dios nos dio la vida; precio de la Redención de la humanidad caída. Cruz de Cristo vencedor, te adoramos, sálvanos. 2.- Ara donde se inmoló el Cordero Inmaculado. Cristo en ti nos redimió de la muerte y del pecado. 3.- Arbol santo e inmortal son tus frutos redentores. Gracia, luz, perdón y paz Brindas a los pecadores. 4.- Nave firme en el luchar con las olas de la vida Faro en nuestro navegar a la Patria prometida. Con Jesús hay vida y Reino de Dios CUARTA PARTE Viernes Santo Página 38 Monición final LITURGIA EUCARÍSTICA Amigos: hoy no nos despedimos. Monición La comunión de hoy es la expresión de la unión con la causa de Jesús, con su misma suerte. Comulgar significa participar, y en esta situación significa participar con la misma suerte de Jesús y más ampliamente con la suerte de todos los desposeídos de nuestro mundo. Como conclusión de nuestra celebración participaremos ahora del Cuerpo de Cristo, muerto para darnos vida. La Eucaristía que ayer celebrábamos nos alimenta también hoy, mientras esperamos compartir, mañana por la noche, la Eucaristía de la Pascua. Sacerdote: Unidos a Jesús, muerto en la cruz, oremos al Padre para que su Reino, su amor, llegue a todos los hombres. Y pidámosle que a nosotros nos conceda su perdón y nos libre de todo mal. Todos/as: Padrenuestro... Líbranos, Señor… Éste es el Cordero de Dios COMUNION ORACIÓN FINAL Sacerdote: Dios todopoderoso, rico en misericordia, que nos has renovado con la gloriosa muerte y resurrección de Jesucristo, no dejes de tu mano la obra que has comenzado en nosotros, para que nuestra vida, por la comunión en este misterio, se entregue con verdad a tu servicio. P.J.S. Esta tarde hemos vivido la primera parte de esta celebración de la Pascua: la Pasión de Jesucristo y su Cruz. Nos espera la celebración más grande: la Pascua. La muerte de Cristo en la Cruz es un paso a la resurrección. Desde ahora hasta mañana por la noche vivamos en actitud de contemplación, de reflexión y de espera: esperamos la Resurrección. Mañana, por la noche, a partir de las 8 celebraremos el acontecimiento más importante de estos días: LA RESURRECCIÓN DE JESUCRISTO. Canto de Comunión: Estaba al pie de la Cruz Estaba al pie de la cruz, bebiendo todo el dolor que derramaba Jesús, Que fue a la Cruz por amor. (Bis) Al pie de la cruz estaba María, clavada su alma en cruz de dolor. Al pie de la cruz penaba y sufría la madre que al mundo nos dio al Redentor. (Bis) Al pie de la cruz estaba María, la madre que Cristo por madre nos dio. Al pie de la cruz, la cruz compartía y nos engendraba en sangre y dolor. (Bis) Al pie de la Cruz estaba María. La Madre Creyente que nos engendró Al pie de la Cruz su fe estaba viva Y a todos nosotros por Madre se dio. (Bis) Viernes Santo Con Jesús hay vida y Reino de Dios NOS DISTE LA VIDA Tú nos diste la vida para convivir y nosotros lo llevamos todo a la muerte, a la guerra, a la competencia, a la indiferencia. Tú nos diste árboles y bosques y nosotros estamos talándolos. Tú nos diste la primavera a los pájaros y ríos a los peces y nosotros no hacemos más que contaminarlos con los residuos de las industrias. La primavera se hace amoría y los ríos quedan vacíos y el aire se corrompe. Tú nos diste el equilibrio de la creación y nosotros la hemos desequilibrado y nos encaminamos al fracaso. Nuestro tiempo pasa, Señor. Danos tu tiempo para que podamos vivir. Danos el valor de servir a la vida y no a la muerte. Danos tu futuro a nosotros y a nuestros hijos. J. Moltmann Página 39 Con Jesús hay vida y Reino de Dios Vigilia pascual Página 40 Vigilia Pascual. Con Jesús, resucitamos ESQUEMA DE LA CELEBRACIÓN I. Liturgia de la luz 1.- Monición ambiental. 2.- Bendición del fuego 3.- Procesión del cirio. 4.- Canto 5.- Pregón Pascual. II. Liturgia de la Palabra. 6.- Lecturas de la Historia de la salvación 7.- Gloria: Gloria a Dios, gloria al Padre... 8.- Epístola. 9.- Aleluya 10.- Evangelio. 11.- Breve homilía III. Liturgia del bautismo 12.- Monición 13.- Bendición del agua 14.- Renovación de las promesas del bautismo 15.– Bautizos IV. Liturgia de la Eucaristía 16.- Ofertorio. 17.- Santo. 18.- Padrenuestro 19.- Paz. Canto 20.- Comunión. 21.- Oración final. SIGNOS CELEBRATIVOS DE LA VIGILIA PASCUAL La Eucaristía es luz y es vida. Nuestros signo hoy son: El Cirio Pascual, luz que brilla como el sol, porque es el propio Jesús resucitado. La Pila bautismal, que contiene el agua de donde brota la vida. Vida porque calma nuestra sed, equilibra nuestro organismo y se distribuye al mundo como elemento imprescindible de vida, y nos trae a Jesús por medio del bautismo, de quien debemos de ser testigos. Monición explicativa Hermanas y hermanos: Iniciamos la celebración de la Resurrección de Jesucristo, nuestro Señor, que por nosotros y todas las personas dio su vida en la Cruz. En esta noche santa, la Vida vence a la muerte y la Luz a las tinieblas del egoísmo y del pecado. En esta noche santa, los cristianos de todo el mundo nos reunimos en torno a Cristo Resucitado. Él es nuestra luz, Él es la Verdad, Él es nuestra Paz. Si seguimos sus pasos, llegaremos un día a la Pascua eterna, que hoy celebramos, llenos de esperanza. Vamos a participar gozosamente en esta celebración, llena de símbolos y contenidos liberadores, es la noche más luminosa para nosotros cristianos. Comenzamos la celebración yendo al exterior de la Iglesia donde encenderemos el fuego, donde surgirá la luz que encenderá el cirio, y donde encenderemos nuestras velas, donde encenderemos nuestros corazones con la vida de Jesús. Con Jesús hay vida y Reino de Dios Vigilia pascual Página 41 PRIMERA PARTE: LITURGIA DE LA LUZ MONICIÓN DELANTE DEL FUEGO PASCUAL Hermanos: bienvenidos a la Celebración de la Vigilia Pascual. En esta noche que para nosotros se ha convertido en la más brillante y hermosa, en la que el Señor Jesús ha pasado de la muerte a la Vida, la Iglesia invita a todos sus hijos, diseminados por el mundo, a que se reúnan para orar y celebrar este acontecimiento. En medio de las tiniebla, arde este fuego vigilante que vamos a bendecir. Con él encenderemos el Cirio Pascual. De este modo, entre nosotros brillará esa luz que simboliza a Cristo Resucitado. De su Luz y nueva Vida participamos todos nosotros. Con la alegría que debemos sentir en esta noche feliz que nos habla de resurrección y vida, comenzamos la celebración. sea nuestra alegría y nuestro gozo. Dad gracias al Señor porque es bueno, Porque es eterna su misericordia. Aleluya, Aleluya PROCESIÓN DEL CIRIO Y DE LA COMUNIDAD Todos caminaremos detrás de Cirio pascual, recién bendecido y encendido. En el recorrido, pararemos tres veces y cantaremos “LUZ DE CRISTO”, y se nos ofrecerá la luz para que la repartamos con los demás. Vivamos este momento, intenso y profundo, y caminemos a la luz de Cristo, el Señor. (Encendemos las velas y comenzamos la procesión) A la entrada de la Iglesia BENDICIÓN DEL FUEGO POR EL PRESIDENTE DE LA CELEBRACIÓN El fuego ha acompañado la vida de las personas, y lo sigue haciendo en todas las culturas. El fuego acompaña, calienta, ilumina la oscuridad. Nosotros hemos encendido esta llama que ahora queremos bendecir. OREMOS: Oh Dios y Padre nuestro, que por medio de tu Hijo amado has dado a tus fieles el fuego de tu luz: santifica ╬ este fuego, y concédenos que la celebración de estas fiestas pascuales encienda en nosotros deseos sinceros de vivir nuestro seguimiento de Cristo, de quien recibimos una nueva luz y un nuevo ser, para así crear vida en nuestro caminar por la vida. Por Jesucristo Nuestro Señor. R/ AMÉN. (Presenta, bendice y enciende el Cirio Pascual) CRISTO ayer y hoy, principio y fin, Alfa y Omega. Suyo es el tiempo y la eternidad, a Él la gloria por los siglos de los siglos. R/ AMÉN. Canto: Éste es el día en que actuó el Señor Este es el día en que actuó el Señor, Sacerdote: “Luz de Cristo” Todos: “Demos gracias a Dios” Canto: 1. Caminamos hacia el sol, esperando la verdad; la mentira y la opresión, cuando vengas cesarán. Llegará con la luz la esperda libertad (2) (En el centro de la Iglesia el sacerdote vuelve a proclamar:) Sacerdote: “Luz de Cristo” Todos: “Demos gracias a Dios Canto (En un tercer momento, en el altar el sacerdote vuelve a proclamar:) Sacerdote: “Luz de Cristo” Todos: “Demos gracias a Dios Canto 2. Construimos hoy la paz en la lucha y el dolor, nuestro mundo surge ya en la espera del Señor. Llegará con la luz la esperada libertad (2) Sacerdote: “Luz de Cristo” Todos: “Demos gracias a Dios Canto: 3. Te esperamos, tú vendrás a librarnos del temor; la alegría, la amistad son ya signos de tu amor. LLEGARÁ CON LA LUZ LA ESPERADA LIBERTAD. (BIS) Con Jesús hay vida y Reino de Dios PREGÓN DE PASCUA L SACERDOTE: Que se haga la luz hasta los confines de la tierra y la alegría se desborde en el corazón de los hombres, que renazca la esperanza de la paz: que surja con fuerza la vida, y que el amor se derrame impetuoso llenando de armonía nuestras relaciones, os lo anunciamos con fuerza y esperanza en este nuevo año de gracia y paz. ¡CRISTO VIVE PORQUE HA RESUCITADO! PREGONERA: CRISTO HA RESUCITADO; CRISTO VIVE. Y POR ESO, ESTA NOCHE ES UNA NOCHE DE GRACIA, DE AMOR, DE ALEGRÍA Y PAZ. Ésta es la noche en que los pobres de la tierra se sienten bienaventurados, porque Cristo es la fuerza que les impulsa a salir de la pobreza. Ésta es la noche en la que, los que nada poseen, se sienten bienaventurados, porque Cristo les entrega el dominio de la tierra. Ésta es la noche de los que sufren y lloran, porque su bienaventuranza se ilumina desde la plenitud de la Resurrección. Ésta es la noche de los que voluntariamente arriesgan su vida por la paz y la justicia, entre los más necesitados, porque el triunfo de Cristo es su propio triunfo. Ésta es la noche de los que sufren la injusticia en la tortura, el desprestigio de la cárcel, porque su camino termina en la Resurrección. Ésta es la noche de tantos miles de Voluntarios, creyentes y no creyentes, esparcidos por todo el mundo, que ponen manos, pies, cara, y corazón a la misericordia de Dios, entre los más necesitados. Página 42 Vigilia pascual Quiere este pregón ser flecha afilada que hiera el corazón endurecido de tantos hombres, y les haga descubrir la fuerza del amor de Dios que les acosa. Nosotros, que vivimos en un mundo injusto del que somos sus propios autores, que vivimos la idolatría de nuestro propio egoísmo, que camuflamos con prestigio la falsedad de nuestra vida, que despreciamos la sencillez del pobre. ¿POR QUÉ BUSCAMOS ENTRE LOS MUERTOS AL QUE VIVE? Nosotros, que ambicionamos el dominio y el poder, que legislamos en nuestro propio provecho, que defendemos con las armas el orden que nos conviene, que, encerrados en nuestro pequeño mundo, damos la espalda a la construcción de la justicia y la paz, que vivimos esclavizados por un consumo que nos mantiene insatisfechos. ¿POR QUÉ BUSCAMOS ENTRE LOS MUERTOS AL QUE VIVE? Ésta es también nuestra noche; ésta puede ser nuestra Pascua, si abrimos el corazón a la fuerza de Cristo que surge glorioso, y da la vida al desierto de nuestra existencia; si abrimos nuestro corazón para trabajar, cada uno dentro de sus posibilidades, por la paz de nuestro pueblo. CRISTO HA RESUCITADO; CRISTO VIVE. Y JUNTOS CELEBRAMOS UNIDOS SU TRIUNFO, QUE ES EL NUESTRO. Por eso partimos juntos el pan y bebemos juntos el vino nuevo que alegra el corazón, sellemos esta alianza en la que Dios se nos ofrece, es gozo y exigencia luchar por una tierra nueva, y con el corazón abierto a la gratitud y a la esperanza, unamos nuestra voz a la voz del pueblo de Dios que reza, ama, espera y canta al Señor del Universo. Que vive y reina por los siglos de los siglos. R./ AMÉN. Ésta es la noche en la que todos los excluidos de una sociedad opulenta y farisaica, pueden aspirar, como los publicanos y las prostitutas, a las primicias del Reino de Dios. Canto al final del pregón Hermanos: es la noche de Pascua, es el paso del Señor por en medido de su pueblo; ésta es la noche de la liberación y la paz. 1. La muerte, ¿dónde está la muerte?, ¿dónde está mi muerte?, ¿dónde su victoria? ¡Resucitó (3) Aleluya.(3) Aleluya (3) Resucitó! (3) 2. Gracias, sean dadas al Padre, que nos pasó a su reino, donde se vive el amor Con Jesús hay vida y Reino de Dios Vigilia pascual Página 43 SEGUNDA PARTE: LITURGIA DE LA PALABA MONICIÓN GENERAL (sacerdote) Hermanos: con el Pregón solemne de Pascua, hemos entrado de lleno en la noche santa de la resurrección del Señor Jesús. Ojalá lo disfrutemos. Ahora pasamos a la SEGUNDA PARTE de esta celebración. Nos dejaremos guiar por la PALABRA DE DIOS que, a través de la historia, ha ido también iluminando a los hombres en su caminar. Aquí escucharemos las obras maravillosas que Dios ha realizado para llevar a cabo su Historia de Salvación. Este rato de escucha de la Palabra y de oración puede ayudarnos a vivir, en profundidad, cuanto nuestros labios proclaman esta noche, esta gran noche. Monición: En esta primera lectura descubrimos a Dios, Creador del universo. En la raíz del cosmos y del hombre está presente el Dios de la vida. Escuchamos con corazón sencillo y abierto este relato, lleno de encanto. Lectura del libro del Génesis (1,1-2,2) Al principio creó Dios el cielo y la tierra. La tierra era un caos informe; sobre la faz del abismo, la tiniebla. Y el aliento de Dios se cernía sobre la faz de las aguas. Y dijo Dios: "Que exista la luz." Y la luz existió. Y vio Dios que la luz era buena. Y separó Dios la luz de la tiniebla; llamó Dios a la luz "Día"; a la tiniebla, "Noche". Pasó una tarde, pasó una mañana: el día primero. Y dijo Dios: "Que exista una bóveda entre las aguas, que separe aguas de aguas." E hizo Dios una bóveda y separó las aguas de debajo de la bóveda de las aguas de encima de la bóveda. Y así fue. Y llamó Dios a la bóveda "Cielo". Pasó una tarde, pasó una mañana: el día segundo. Y dijo Dios: "Que se junten las aguas de debajo del cielo en un solo sitio, y que aparezcan los continentes." Y así fue. Y llamó Dios a los continentes "Tierra", y a la masa de las aguas la llamó "Mar". Y vio Dios que era bueno. Y dijo Dios: "Verdee la tierra hierba verde que engendre semilla, y árboles frutales que den fruto según su especie y que lleven semilla sobre la tierra." Y así fue. La tierra brotó hierba verde que engendraba semilla según su especie, y árboles que daban fruto y llevaban semilla según su especie. Y vio Dios que era bueno. Pasó una tarde, pasó una mañana: el día tercero. Y dijo Dios: "Que existan lumbreras en la bóveda del cielo, para separar el día de la noche, para señalar las fiestas, los días y los años; y sirvan de lumbreras en la bóveda del cielo, para dar luz sobre la tierra." Y así fue. E hizo Dios dos lumbreras grandes: la lumbrera mayor para regir el día, la lumbrera menor para regir la noche, y las estrellas. Y las puso Dios en la bóveda del cielo, para dar luz sobre la tierra; para regir el día y la noche, para separar la luz de la tiniebla. Y vio Dios que era bueno. Pasó una tarde, pasó una mañana: el día cuarto. Y dijo Dios: "Pululen las aguas un pulular de vivientes, y pájaros vuelen sobre la tierra frente a la bóveda del cielo." Y creó Dios los cetáceos y los vivientes que se deslizan y que el agua hizo pulular según sus especies, y las aves aladas según sus especies. Y vio Dios que era bueno. Y Dios los bendijo, diciendo: "Creced, multiplicaos, llenad las aguas del mar; que las aves se multipliquen en la tierra." Pasó una tarde, pasó una mañana: el día quinto. Y dijo Dios: "Produzca la tierra vivientes según sus especies: animales domésticos, reptiles y fieras según sus especies." Y así fue. E hizo Dios las fieras según sus especies, los animales domésticos según sus especies y los reptiles según sus especies. Y vio Dios que era bueno. Y dijo Dios: "Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza; que domine los peces del mar, las aves del cielo, los animales domésticos, los reptiles de la Con Jesús hay vida y Reino de Dios tierra." Y creó Dios al hombre a su imagen; a imagen de Dios lo creó; hombre y mujer los creó. Y los bendijo Dios y les dijo: "Creced, multiplicaos, llenad la tierra y sometedla; dominad los peces del mar, las aves del cielo, los vivientes que se mueven sobre la tierra." Y dijo Dios: "Mirad, os entrego todas las hierbas que engendran semilla sobre la faz de la tierra; y todos los árboles frutales que engendran semilla os servirán de alimento; y a todas las fieras de la tierra, a todas las aves del cielo, a todos los reptiles de la tierra, a todo ser que respira, la hierba verde les servirá de alimento." Y así fue. Y vio Dios todo lo que había hecho; y era muy bueno. Pasó una tarde, pasó una mañana: el día sexto. Y quedaron concluidos el cielo, la tierra y sus ejércitos. Y concluyó Dios para el día séptimo todo el trabajo que había hecho; y descansó el día séptimo de todo el trabajo que había hecho. Palabra de Dios Salmo responsorial: (103) R.- Envía tu espíritu, Señor, y repuebla la faz de la tierra. Bendice, alma mía, al Señor; ¡Dios mío, qué grande eres! Te vistes de belleza y majestad, la luz te envuelve como un manto. R.- Envía tu espíritu, Señor, y repuebla la faz de la tierra. Asentaste la tierra sobre sus cimientos, y no vacilará jamás; la cubriste con el manto del océano, y las aguas se posaron sobre las montañas. R.- Envía tu espíritu, Señor, y repuebla la faz de la tierra. De los manantiales sacas los ríos, para que fluyan entre los montes; junto a ellos habitan las aves del cielo, y entre las frondas se oye su canto. R.- Envía tu espíritu, Señor, Vigilia pascual Página 44 y repuebla la faz de la tierra. Desde tu morada riegas los montes, y la tierra se sacia de tu acción fecunda; haces brotar hierba para los ganados, y forraje para los que sirven al hombre. R.- Envía tu espíritu, Señor, y repuebla la faz de la tierra. Cuántas son tus obras, Señor, y todas las hiciste con sabiduría; la tierra está llena de tus criaturas. ¡Bendice, alma mía, al Señor! R.- Envía tu espíritu, Señor, y repuebla la faz de la tierra. Monición Dios obra portentosamente liberando a su pueblo de la esclavitud de Egipto, el paso de la esclavitud a la libertad, acompañándolo en la travesía del Mar Rojo y del desierto. Escuchamos. Lectura del libro del Éxodo (14, 15-15, 1) En aquellos días, dijo el Señor a Moisés: "¿Por qué sigues clamando a mí? Di a los israelitas que se pongan en marcha. Y tú, alza tu cayado, extiende tu mano sobre el mar y divídelo, para que los israelitas entren en medio del mar a pie enjuto. Que yo voy a endurecer el corazón de los egipcios para que los persigan, y me cubriré de gloria a costa del Faraón y de todo su ejército, de sus carros y de los guerreros. Sabrán los egipcios que yo soy el Señor, cuando me haya cubierto de gloria a costa del Faraón, de sus carros y de sus guerreros." Se puso en marcha el ángel del Señor, que iba al frente del ejército de Israel, y pasó a retaguardia. También la columna de nube de delante se desplazó de allí y se colocó detrás, poniéndose entre el campamento de los egipcios y el campamento de los israelitas. La nube era tenebrosa, y transcurrió toda la noche sin que los ejércitos pudieran trabar contacto. Moisés extendió su mano sobre el mar, y el Señor hizo soplar durante toda la noche un fuerte viento del este, que secó el mar, y se dividieron las aguas. Los israelitas entraron en medio del mar a pie enjuto, mientras que las aguas formaban muralla a derecha e izquierda. Los egipcios se lanzaron en Con Jesús hay vida y Reino de Dios su persecución, entrando tras ellos, en medio del mar, todos los caballos del Faraón y los carros con sus guerreros. Mientras velaban al amanecer, miró el Señor al campamento egipcio, desde la columna de fuego y nube, y sembró el pánico en el campamento egipcio. Trabó las ruedas de sus carros y las hizo avanzar pesadamente. Y dijo Egipto: "Huyamos de Israel, porque el Señor lucha en su favor contra Egipto." Dijo el Señor a Moisés: "Extiende tu mano sobre el mar, y vuelvan las aguas sobre los egipcios, sus carros y sus jinetes." Y extendió Moisés su mano sobre el mar; y al amanecer volvía el mar a su curso de siempre. Los egipcios, huyendo, iban a su encuentro, y el Señor derribó a los egipcios en medio del mar. Y volvieron las aguas y cubrieron los carros, los jinetes y todo el ejército del Faraón, que lo había seguido por el mar. Ni uno solo se salvó. Pero los hijos de Israel caminaban por lo seco en medio del mar; las aguas les hacían de muralla a derecha e izquierda. Aquel día salvó el Señor a Israel de las manos de Egipto. Israel vio a los egipcios muertos, en la orilla del mar. Israel vio la mano grande del Señor obrando contra los egipcios, y el pueblo temió al Señor, y creyó en el Señor y en Moisés, su siervo. Entonces Moisés y los hijos de Israel cantaron este canto al Señor: Palabra de Dios Interleccional: (Ex 15, 1-2. 3-4. 5-6. 17-18) R.- Cantaré al Señor, sublime es su victoria. Cantaré al Señor, sublime es su victoria, caballos y carros ha arrojado en el mar. Mi fuerza y mi poder es el Señor, él fue mi salvación. Él es mi Dios: yo lo alabaré; el Dios de mis padres: yo lo ensalzaré. R.- Cantaré al Señor, sublime es su victoria. El Señor es un guerrero, su nombre es "Yahvé". Los carros del Faraón los lanzó al mar, Vigilia pascual Página 45 ahogó en el mar Rojo a sus mejores capitanes. R.- Cantaré al Señor, sublime es su victoria. Las olas los cubrieron, bajaron hasta el fondo como piedras. Tu diestra, Señor, es fuerte y terrible, tu diestra, Señor, tritura al enemigo. R.- Cantaré al Señor, sublime es su victoria. Los introduces y los plantas en el monte de tu heredad, lugar del que hiciste tu trono, Señor; santuario, Señor, que fundaron tus manos. El Señor reina por siempre jamás. R.- Cantaré al Señor, sublime es su victoria Monición En medio de las dificultades, y a pesar de las infidelidades del pueblo, el Señor le sigue acompañando y dándole un corazón nuevo. Es su vida de amor por las personas. Lo acogemos. Lectura del profeta Ezequiel 36, 16-28: Me vino esta palabra del Señor: "Hijo de Adán, cuando la casa de Israel habitaba en su tierra, la profanó con su conducta, con sus acciones; como sangre inmunda fue su proceder ante mí. Entonces derramé mi cólera sobre ellos, por la sangre que habían derramado en el país, por haberlo profanado con sus idolatrías. Los esparcí entre las naciones, anduvieron dispersos por los países; según su proceder, según sus acciones los sentencié. Cuando llegaron a las naciones donde se fueron, profanaron mi santo nombre; decían de ellos: "Éstos son el pueblo del Señor, de su tierra han salido." Sentí lástima de mi santo nombre, profanado por la casa de Israel en las naciones a las que se fue. Por eso, di a la casa de Israel: Esto dice el Señor: "No lo hago por vosotros, casa de Israel, sino por mi santo nombre, profanado por vosotros, en las naciones a las que habéis ido. Mostraré la santidad de mi nombre grande, profanado entre los gentiles, que vosotros habéis profanado en medio de ellos; Con Jesús hay vida y Reino de Dios y conocerán los gentiles que yo soy el Señor oráculo del Señor-, cuando les haga ver mi santidad al castigaros. Os recogeré de entre las naciones, os reuniré de todos los países, y os llevaré a vuestra tierra. Derramaré sobre vosotros un agua pura que os purificará: de todas vuestras inmundicias e idolatrías os he de purificar. Y os daré un corazón nuevo, y os infundiré un espíritu nuevo: arrancaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. Os infundiré mi espíritu, y haré que caminéis según mis preceptos, que guardéis y cumpláis mis mandatos. Y habitaréis en la tierra que di a vuestros padres. Vosotros seréis mi pueblo, y yo seré vuestro Dios." Palabra de Dios Salmo responsorial: (41, 3. 5bcd; 42, 3. 4) R.- Como busca la cierva corrientes de agua, así mi alma te busca a ti, Dios mío. Tiene sed de Dios, del Dios vivo: ¿cuándo entraré a ver el rostro de Dios? R.- Como busca la cierva corrientes de agua, así mi alma te busca a ti, Dios mío. Cómo marchaba a la cabeza del grupo, hacia la casa de Dios, entre cantos de jubilo y alabanza, en el bullicio de la fiesta. R.- Como busca la cierva corrientes de agua, así mi alma te busca a ti, Dios mío. Envía tu luz y tu verdad; que ellas me guíen y me conduzcan hasta tu monte santo, hasta tu morada. R.- Como busca la cierva corrientes de agua, así mi alma te busca a ti, Dios mío. Que yo me acerque al altar de Dios, al Dios de mi alegría; que te dé gracias al son de la cítara, Dios, Dios mío. R.- Como busca la cierva corrientes de agua, así mi alma te busca a ti, Dios mío. Vigilia pascual Página 46 Oración: ¡Oh Dios, poder admirable y luz sin ocaso! Mira con bondad a tu Iglesia, sacramento de la nueva Alianza y signo visible de la presencia salvadora. Que todo el mundo experimente y vea cómo lo abatido se levanta, lo viejo se renueva y vuelve a su integridad primera, por medio de nuestro Señor Jesucristo, de quien procede todo bien y la nueva vida. Te lo pedimos por el mismo Jesucristo nuestro Señor. R./ AMÉN. (Concluida la oración, se encienden las velas de la mesa del Altar y comienzan a sonar las campanas y campanillas. El Presidente entona el GLORIA, que en este día, más que nunca, debe ser alegre y expresión de vida) Sacerdote: Hermanos: cantemos jubilosos la gloria del Señor, en esta noche santa, en que Cristo resucitó, destruyendo la muerte, y nosotros fuimos salvados definitivamente. Entonemos el canto del GLORIA… Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias. Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor Hijo único, Jesucristo, Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre: tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestras súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros: porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre. Amén Oración: Dios y Padre nuestro, que iluminas esta noche santa y toda la vida con la Resurrección de Jesús y nos haces participar de tu Amor: ayuda a esta comunidad cristiana a llenarse de la fuerza del Resucitado y haznos verdaderos testigos de esta Buena Noticia. Con Jesús hay vida y Reino de Dios Página 47 Vigilia pascual para contar las hazañas del Señor. R.- Aleluya, aleluya, aleluya. Monición Nos adentramos en el Nuevo Testamento. Recordamos que Cristo vence al pecado y nos muestra el camino de la victoria. Acogemos esta invitación. (Sentados) La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular. Es el Señor quien lo ha hecho, ha sido un milagro patente. R.- Aleluya, aleluya, aleluya. Lectura de la carta del apóstol San Pablo a los Romanos (6, 3-11) Hermanos: Los que por el bautismo nos incorporamos a Cristo fuimos incorporados a su muerte. Por el bautismo fuimos sepultados con él en la muerte, para que, así como Cristo fue resucitado de entre los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en una vida nueva. Porque, si nuestra existencia está unida a él en una muerte como la suya, lo estará también en una resurrección como la suya. Comprendamos que nuestra vieja condición ha sido crucificada con Cristo, quedando destruida nuestra personalidad de pecadores, y nosotros libres de la esclavitud al pecado; porque el que muere ha quedado absuelto del pecado. Por tanto, si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con él; pues sabemos que Cristo, una vez resucitado de entre los muertos, ya no muere más; la muerte ya no tiene dominio sobre él. Porque su morir fue un morir al pecado de una vez para siempre; y su vivir es un vivir para Dios. Lo mismo vosotros, consideraos muertos al pecado y vivos para Dios en Cristo Jesús. Palabra de Dios Salmo responsorial: (117) R.- Aleluya, aleluya, aleluya. Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia. Diga la casa de Israel: eterna es su misericordia. R.- Aleluya, aleluya, aleluya. La diestra del Señor es poderosa, la diestra del Señor es excelsa. No he de morir, viviré Monición Para terminar el recorrido de la Historia de la Salvación de Dios para con la humanidad, nos encontramos con el relato evangélico, con un mensaje claro y contundente: las promesas se han cumplido; Dios ha sido fiel a su palabra. Aquél a quien buscan las mujeres, a quien todos buscamos, no está aquí: HA RESUCITADO. La vida ha triunfado sobre la muerte; ha nacido la aurora de una nueva vida. Escuchemos, con fe, esta Buena Noticia, que transforma la historia. Lectura del santo Evangelio según San Marcos 16,1-7 Pasado el sábado, María Magdalena, María la de Santiago, y Salomé compraron aromas para ir a embalsamar a Jesús. Y muy temprano, el primer día de la semana, al salir el sol, fueron al sepulcro. Y se decían unas a otras: "¿Quién nos correrá la piedra de la entrada del sepulcro?" Al mirar, vieron que la piedra estaba corrida, y eso que era muy grande. Entraron en el sepulcro y vieron a un joven sentado a la derecha, vestido de blanco. Y se asustaron. Él les dijo: "No os asustéis. ¿Buscáis a Jesús el Nazareno, el crucificado? No está aquí. Ha resucitado. Mirad el sitio donde lo pusieron. Ahora id a decir a sus discípulos y a Pedro: Él va por delante de vosotros a Galilea. Allí lo veréis, como os dijo." Palabra del Señor (Breve homilía) Con Jesús hay vida y Reino de Dios Vigilia pascual Oración de los fieles Sacerdote: Confiados en el Señor, presentamos a Dios, nuestro Padre, nuestras plegarias y las necesidades de la humanidad. 1.- Para que la Iglesia, sea portadora de esperanza y de ánimo a los hermanos que sufren abandono y desamor. Roguemos al Señor. 2.- Por los gobernantes y dirigentes de todas las naciones de la tierra, para que luchen siempre en favor de la justicia y la paz. Roguemos al Señor. 3.- Por todos los que estamos en esta Celebración: haznos testigos de la vida y ayúdanos a favorecer todo lo que mejore la vida de las personas. Roguemos al Señor. 4.- Por los que van a ser bautizados estos días y sus familias, para que con tu fortaleza se identifiquen con el proyecto de tu Hijo amado. Roguemos al Señor. 5.- Por nuestras Comunidades, para que crezcamos todos en sentimientos de solidaridad, cercanía y acogida al otro. Roguemos al Señor. ORACIÓN: Dios y Padre nuestro, gozo y vida de los hombres, escucha nuestras súplicas, derrama sobre nosotros y tu Iglesia la gracia de la Resurrección de tu Hijo y llénanos de tu paz y de tu alegría. Por Jesucristo Resucitado, nuestro Señor. R/ AMÉN. Página 48 TERCERA PARTE: LITURGIA BAUTISMAL Invocación a los santos Monición: Iniciamos la liturgia bautismal con la Invocación a los santos de Dios. Son nuestros referentes en la vida y modelos a imitar, a quienes queremos seguir. Sacerdote: Son muchísimas personas las que en la historia han vivido, desde sus oficios y tareas, el proyecto de Jesús. Recordemos a un puñado de ellos para que nos sirvan de referencia en nuestra vida. Hoy nuestra liturgia bautismal tiene un significado muy especial porque renovaremos nuestras promesas bautismales e introduciremos a tres nuevos miembros de la comunidad en la Iglesia a través de su bautismo. Juán Bautista, profeta de la verdad y mártir de la justicia Asamblea: Que seamos constructores del mundo nuevo Pedro y Pablo, primeros testigos de la Resurrección, martirizados por anunciar con valentía el Evangelio. Asamblea: Que seamos constructores del mundo nuevo Francisco de Asís, bienaventurado por haber elegido ser pobre. Asamblea: Que seamos constructores del mundo nuevo Casaldáliga, Ellacuría, Monseñor Romero, Teresa de Calcuta y tantas personas que han sufrido la persecución por ser coherentes consigo mismo y con el Evangelio. Asamblea: Con Jesús hay vida y Reino de Dios Que seamos constructores del mundo nuevo Y todas las personas que en el campo, en la fábrica, en la escuela, en los despachos, en los andamios y en las minas luchan día a día por realizarse como personas. Asamblea: Que seamos constructores del mundo nuevo. Bendición del Agua Monición El Espíritu de Dios que, un día, en el origen del mundo vivificó las aguas, nos hizo a nosotros nacer en las aguas del Bautismo a la vida y a la fe. Por eso, en esta Noche de Pascua celebramos su memoria y proclamamos nuestra fe, dispuestos a vivir, como nos ha dicho Pablo, «muertos al pecado y vivos para Dios». Nos disponemos a vivir este momento de significado tan especial en nuestro caminar como creyentes. Vigilia pascual Página 52 Y cuando Cristo descendió a ella en el Jordán, renovaste nuestra naturaleza pecadora en el baño del nuevo nacimiento. Que de nuevo nos vivifique ahora y nos haga participar en el gozo de la Pascua. Por Jesucristo nuestro Señor. R./ AMÉN. Renovación de las promesas del bautismo Sacerdote: Hermanos: por el misterio pascual hemos sido sepultados con Cristo en el Bautismo, para que vivamos una vida nueva. Por tanto, terminado el camino de la Cuaresma, renovemos las promesas del nuestro bautismo. Así, pues: ¿Renunciáis a Satanás, esto es: al pecado, como negación de Dios; al mal, como signo del pecado en el mundo; al error, como ofuscación de la verdad; a la violencia, como contraria a la caridad; al egoísmo, como falta de testimonio del Amor?. Todos: Sí, renunciamos. Presidente: Invoquemos, queridos hermanos, a Dios Padre todopoderoso, para que bendiga esta agua, que va a ser derramada sobre nosotros en memoria de nuestro Bautismo; y pidamos al Señor que nos renueve interiormente, para que permanezcamos fieles al Espíritu, que recibimos en el día de nuestra regeneración. Sacerdote: ¿Renunciáis a sus obras, que son: Vuestras envidias y odios; vuestras perezas e indiferencias; vuestras cobardías y complejos; vuestras tristezas y desconfianzas; vuestras injusticias y favoritismos; vuestros materialismos y sensualidades; vuestras faltas de fe, de esperanza y de caridad? (Después de una breve pausa en silencio,- prosigue:) Todos: Sí, renunciamos. Señor Dios nuestro, en esta noche en que celebramos la acción maravillosa de nuestra creación y la maravilla aún más grande de nuestra redención, dígnate bendecir ╬ esta agua. La creaste para hacer fecunda nuestra tierra y para favorecer nuestros cuerpos con el frescor y la limpieza. La hiciste también instrumento de misericordia al librar a tu pueblo de la esclavitud y al apagar con ella su sed en el desierto; por los profetas la revelaste como signo de la nueva alianza que hiciste sellar con los hombres. Sacerdote: ¿Renunciáis a todas sus seducciones, como pueden ser: el creeros los mejores; el veros superiores; el estar muy seguros de vosotros mismos; el creer que ya estáis convertidos del todo; el quedaros en las cosas, medios, instituciones, métodos, reglamentos, y no ir a Dios? Todos: Sí, renunciamos. Con Jesús hay vida y Reino de Dios Profesión de Fe Sacerdote: Todo esto, hermanos, es compromiso para construir un mundo más de acuerdo con el querer de Dios Padre y de Jesucristo el Señor Resucitado. Ahora os pregunto desde el corazón: ¿Creéis en Dios, Padre todopoderoso, creador del cielo y de la tierra? Todos: Sí, creemos. Sacerdote: ¿Creéis en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que nació de Santa María Virgen, murió, fue sepultado, resucitó de entre los muertos y está sentado a la derecha del Padre?. Todos: Sí, creemos. Sacerdote: ¿Creéis en el Espíritu Santo, en la Santa Iglesia Católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de los muertos y en la vida eterna? Todos: Sí, creemos. Y Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos regeneró por el agua y el Espíritu Santo y que nos concedió la remisión de los pecados, nos guarde en su gracia, en el mismo Jesucristo nuestro Señor, para la vida eterna. R/. Amén. Monición. Ahora el sacerdote nos rociará con el agua bendita, recordando muestro bautismo, y con la que se bautizarán los nuevos cristianos. ASPERSIÓN Vigilia pascual Página 53 Con Jesús hay vida y Reino de Dios Vigilia pascual Página 51 CUARTA PARTE: PLEGARIA EUCARÍSTICA Canto de ofertorio: Vaso nuevo Gracias quiero darte por amarme, Gracias quiero darte yo a Ti, Señor. Hoy soy feliz porque te conocí, Gracias por amarme a mí también. Yo quiero ser, Señor, amado Como el barro en manos del Alfarero. //Toma mi vida, hazla de nuevo, Yo quiero ser un vaso nuevo// (Bis) Oración sobre las ofrendas De Ti, Padre, recibimos todo bien que nos ayuda en la vida, y de esa bondad hemos recibido también este pan y este vino traemos al altar. Envía sobre ellos tu Espíritu de vida y haz que sean nuestro alimento en la misión de ser testigos del resucitado, siendo cercanos a todas las personas. Por Jesucristo nuestro Señor. R/ Amén. Te damos gracias porque has hecho que nosotros seamos, a través de Jesucristo, sal de la tierra y luz del mundo. A pesar de que con frecuencia desnaturalizamos la sal de la conversión y escondemos la luz de la misión, henos aquí, Padre, en tu presencia. Nuestra confianza y esperanza están puestas en tu Hijo y Señor nuestro Jesús, porque partió su pan - el pan de su cuerpo– con el hambriento, hospedó bajo el techo del firmamento a los hombres sin techo, llamándolos amigos, revistió de humanidad nueva a los hombres maltrechos. Él es nuestra luz, nuestra aurora. Apareció en medio de la noche publicó la Buena Nueva a la luz del día y en una noche fue traicionado. A la luz tenue de unas antorchas entregó a sus discípulos la sal y la luz de su personalidad. Estando cenando con sus discípulos... CONSAGRACIÓN Plegaria Eucarística Dios que habitas en la luz eterna, creador de la luz-vida y de la luz-amor antes de que apareciesen en el firmamento el sol, la luna y las estrellas. Bendito seas por todas las luces que iluminan nuestras vidas en el conocimiento, la verdad y la vida. Te damos gracias por la luz del sol, por la luz que han inventado las personas, por todos los iluminados que son hijos de la luz, por el don de la fe, que es un rayo de tu luz en nuestros corazones. Por eso, unidos hoy a la creación entera, nacida de la separación entre la noche y el día, entre las tinieblas y la luz, cantamos el himno de tu gloria: SANTO... Es muy saludable, Padre, que todos juntos te glorifiquemos. Nuestras palabras, Señor, no pueden definirte, porque Tú habitas en una luz que no alcanzamos. Al recordar hoy la noche del abatimiento y la aurora de su Resurrección, envíanos tu Espíritu. Que aprendamos a reconocer tu luz en el niño que nace a la vida, en los padres que se inclinan por sus hijos, en los débiles y temerosos, a los que de pronto algo les apasiona por dentro y les hace renacer. Mira, Padre, la sal y la luz que malgastamos en nuestros fallos, desalientos y fracasos; mira cómo intentamos mantenernos unidos, descubrir las nuevas obras de misericordia y de justicia en nuestro mundo para luchar a favor de las personas con la esperanza puesta en tu Reino. No te olvides de la situación en la que se encontraba tu Hijo crucificado y que ahora goza junto a Ti de gloria y plenitud, en compañía del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén. Oración del Padrenuestro Con Jesús hay vida y Reino de Dios Vigilia pascual Página 52 Oración de la paz Canto de paz: Oh, Señor Jesús, maestro bueno, danos tu Espíritu, para aprender a vivir en la paz. Oh Señor, yo no soy digno, de que entres en mi morada. Mas dí una sola palabra Y mi alma quedará sana. (Dos veces) Necesitamos de tu presencia, Señor. Acude a nosotros, ven a nuestro corazón. Queremos cambiar y vivir los valores del Evangelio. Convierte nuestra vida para tener coherencia entre lo que decimos, creemos y practicamos. Danos tu Espíritu, para llenarnos de tu presencia y aprender a vivir en paz con nosotros mismos. Muéstranos el camino que conduce al testimonio eficaz. Enséñanos a vivir la paz que es tarea de todos. Ayúdanos a ser portavoz de un mundo en paz. Que seamos valientes para denunciar lo que se opone a la paz. Queremos construir la paz a nuestro alrededor, comenzando por nuestra familia, nuestros amigos, nuestros conocidos. Ayúdanos a llevar tu paz a nuestro trabajo. Enséñanos a vivir la paz fruto de la justicia. Educa nuestra mirada para descubrir los obstáculos a la paz. Compromete nuestro esfuerzo, lo mejor de nosotros, para construir un mundo diferente con paz y justicia para todos. Canto de Comunión: La fiesta del Señor Aleluya, aleluya, es la fiesta del Señor. Aleluya, aleluya, el Señor resucitó.( bis) 1.-Ya no hay miedo,ya no hay muerte, ya no hay penas que llorar, porque Cristo sigue vivo, la esperanza abierta está. 2.-Cuando un hombre a tu lado ya no sabe caminar, no le dejes de la mano, dale tú felicidad. 3.-Cuando alguien te pregunte, dónde está la libertad, que en tus obras él descubra que Jesús es quien la dá. 4.-Si delante de los hombres, encendemos nuestra luz, abriremos mil caminos para la Resurrección. Sacerdote: Oración final ¡Que la paz de Jesús Resucitado esté con todos vosotros! Te damos gracias, Señor, por todo lo que hemos vivido y celebrado esta noche. Haz, que esta explosión de alegría, que arranca de la Resurrección de Jesús, nos empuje a convertir nuestra vida en Pascua de Resurrección. Te lo pedimos por J.N.S. Todos: ¡Y con tu espíritu! Sacerdote: ¡Démonos fraternalmente la paz! Con Jesús hay vida y Reino de Dios Monición de despedida Hermanos: hemos participado en la GRAN celebración de la Comunidad Cristiana. Dios ha cumplido sus promesas y ha resucitado al Señor Jesús. Por eso “ALELUYA” es nuestro canto. Ahora, vayamos a la vida y anunciemos esta Buena Noticia; nuestro mundo sigue necesitando de buenas noticias. Que cada uno de nosotros seamos TESTIGOS de Cristo resucitado. Para que lo podamos vivir así, recibimos ahora la solemne bendición pascual. BENDICIÓN SOLEMNE Que nos bendiga Dios Padre en esta noche solemne de Pascua, y que su misericordia nos guarde de todo pecado y de todo mal. R/. Amén Y el que nos ha redimido por la resurrección de Jesucristo, nos enriquezca con el premio de la vida eterna. R/. Amén Vigilia pascual Página 53 Sí, es SU fiesta y NUESTRA fiesta. Hermanos: podemos felicitarnos de corazón. “Entregar la vida por amor” es considerado por Dios como la obra suprema y máxima. ¡Qué mensaje más estupendo el de esta fiesta! Pero a NOSOTROS también nos atañe profundamente esta fiesta: estamos LLAMADOS A VIVIR la misma suerte de Jesús, si vivimos a su estilo. Dios, pues, no engaña. Ésta es nuestra convicción. HOY es el GRAN DÍA de nuestra FE. Preparémonos a celebrarlo a lo largo de toda la PASCUA. Y... ¡dichosos quienes acogen al DIOS de la VIDA! ¡Muchas gracias a todos los que habéis asistido a las celebraciones y especialmente a los que habéis contribuido a solemnizarlas! ¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN! Canto final: Hoy el Señor resucitó Hoy el Señor resucitó y de la muerte nos libró. Y a todos nosotros, que, al terminar los días de la Pasión del Señor, celebramos con gozo la fiesta de Pascua, nos conceda también alegrarnos con el gozo de la Pascua eterna. R/. Amén Alegría y paz, hermanos, que el Señor resucitó. Y que la bendición de Dios, Padre, Hijo ╬ y Espíritu Santo, descienda sobre nosotros y nos acompañe siempre. R/. Amén Con gozo alzad el rostro a Dios, que de El nos llega salvación. Reflexión para este día “Por la CRUZ a la LUZ. Esta noche es de vela ante el Señor. Mantengamos encendidas las lámparas esperando al Señor” ¡ALELUYA, ALELUYA, ES LA FIESTA DEL SEÑOR! Porque esperó Dios le libró y de la muerte lo sacó. El pueblo en El vida encontró, la esclavitud ya terminó. La luz de Dios en él brilló; de nueva vida nos llenó. Todos cantad, aleluya; todos gritad: aleluya. Con Jesús hay vida y Reino de Dios REFLEXIÓN Y ESPERANZA PASCUAL “Vio y creyó” (Jn20. 1-9) La paz y la alegría dependen de la mirada desde el interior que cultivamos. Vigilia pascual Página 54 SIGNO DE VIDA Y DE RESURRECCIÓN El que acepta renacer desde la fe en el Resucitado puede animarse a leer la propia historia desde una luz distinta. Desde la luz que reconoce lo que está mal pero no se cierra en el rechazo a Dios sino que se deja impulsar por la búsqueda. El Resucitado trabaja en nosotros impulsándonos a nuevas búsquedas. El Resucitado nos abre al futuro impulsándonos a creer, a ver de un modo diferente el presente. Que el tiempo pascual nos ayude a revisar nuestras miradas del pasado; las pasiones del presente y la invitación a levantar la mirada que nos hace el Señor. Sólo si decidimos dejarnos transformar podremos vivir la paz y la alegría de la Pascua. Porque la vida nueva del Señor es el principio de nuestra vida en el Espíritu. Sólo si hoy me decido a dejar crecer la fuerza del Resucitado me estaré preparando para el encuentro definitivo. Sólo si dejo que la fuerza del Resucitado me impulse, encontraré el mejor modo de compartirla. Compartiendo, mi paz se acrecentará y seré, con más facilidad, testigo de la alegría. Desde la mirada creyente del evangelista San Juan, muy felices pascuas. NUESTRO COMPROMISO PASCUAL Hemos celebrado los misterios fundamentales de nuestra fe. Ahora comenzamos el tiempo de ponerlos en práctica “para que todos tengan vida”, “para que los oprimidos vean pronto su resurrección”. Impliquémonos en tareas de caridad, caridad con los de cerca y con los de lejos. Que ningún hermano nuestro esté desatendido por nosotros ni por las instituciones. No lo permitamos. Que la semana solidaria que ya estamos preparando y que pronto celebraremos sea un signo de nuestro espíritu de resucitados. Con Jesús hay vida y Reino de Dios Domingo de Pascua Página 55 Domingo de Pascua de Resurrección Con Jesús, creamos espacios de solidaridad Canto de entrada: Cantemos el gozo Cantemos el gozo de la Resurrección, La noche fue vencida, surgió un nuevo día. La tierra se llena de vida y de luz, Pues Cristo glorioso triunfó de la cruz. ¡Aleluya, Aleluya! Con lienzos atado, sellado el sepulcro, La muerte no pudo vencer a la vida. El día tercero, según prometió, En cuerpo glorioso Jesús resucitó. ¡Aleluya, Aleluya! Monición de entrada: Cantemos el gozo Hermanos: Cristo ha resucitado. “Este es el día que hizo el Señor, sea nuestra alegría y nuestro gozo”. Es la Pascua del Señor Jesús. Su paso de la muerte a la vida. Y por lo tanto también nuestro poder participar de su misma vida resucitada por medio de nuestro Bautismo y de la Eucaristía. Vamos a proceder a bautizar a 5 niños en este día tan señalado, participamos rememorando nuestro propio bautismo. Hoy renovaremos nuestros compromisos bautismales. mos; el creer que ya estáis convertidos del todo; el quedaros en las cosas, medios, instituciones, métodos, reglamentos, y no ir a Dios? Todos: Sí, renunciamos. Profesión de Fe Sacerdote: Todo esto, hermanos, es compromiso para construir un mundo más de acuerdo con el querer de Dios Padre y de Jesucristo el Señor Resucitado. Ahora os pregunto desde el corazón: ¿Creéis en Dios, Padre todopoderoso, creador del cielo y de la tierra? Todos: Sí, creemos. Sacerdote: ¿Creéis en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que nació de Santa María Virgen, murió, fue sepultado, resucitó de entre los muertos y está sentado a la derecha del Padre?. Todos: Sí, creemos. Palabras de acogida y renuncia al mal y al pecado... Así, pues: Sacerdote: ¿Creéis en el Espíritu Santo, en la Santa Iglesia Católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de los muertos y en la vida eterna? Todos: Sí, creemos. ¿Renunciáis a Satanás, esto es: al pecado, como negación de Dios; al mal, como signo del pecado en el mundo; al error, como ofuscación de la verdad; a la violencia, como contraria a la caridad; al egoísmo, como falta de testimonio del Amor?. Todos: Sí, renunciamos. Y Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos regeneró por el agua y el Espíritu Santo y que nos concedió la remisión de los pecados, nos guarde en su gracia, en el mismo Jesucristo nuestro Señor, para la vida eterna. R/. Amén. Sacerdote: En el nombre del Padre… Sacerdote: ¿Renunciáis a sus obras, que son: Vuestras envidias y odios; vuestras perezas e indiferencias; vuestras cobardías y complejos; vuestras tristezas y desconfianzas; vuestras injusticias y favoritismos; vuestros materialismos y sensualidades; vuestras faltas de fe, de esperanza y de caridad? Todos: Sí, renunciamos. Sacerdote: ¿Renunciáis a todas sus seducciones, como pueden ser: el creeros los mejores; el veros superiores; el estar muy seguros de vosotros mis- Aspersión ¿Queréis que vuestros hijos sean bautizados en la fe que acabamos de profesar? y canto del gloria Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias. Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor Hijo único, Jesucristo, Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre: tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestras súplica; tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros: porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu Santo Con Jesús hay vida y Reino de Dios Domingo de Pascua Página 56 Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a Confiamos en ti, Señor, y por eso sabemos que la los Colosenses Oración muerte ya no manda en nuestra vida, y que podemos vivir como resucitados, libres, tomados de tu mano, lejos del pecado que es la peor de las muertes. En tu gran amor hacia tus hijos has querido, Señor, regalarnos la vida, haz, Padre, que la acojamos con la alegría que llena nuestro corazón al descubrir la resurrección de tu Hijo. Amén LITURGIA DE LA PALABRA Hermanos: Ya que habéis resucitado con Cristo, buscad los bienes de allá arriba, donde está Cristo, sentado a la derecha de Dios; aspirad a los bienes de arriba, no a los de la tierra. Porque habéis muerto, y vuestra vida está con Cristo escondida en Dios. Cuando aparezca Cristo, vida nuestra, entonces también vosotros apareceréis, juntamente con él, en la gloria. Palabra de Dios Lectura del Santo evangelio según San Juan Hechos de los apóstoles En aquellos días, Pedro tomó la palabra y dijo: "Conocéis lo que sucedió en el país de los judíos, cuando Juan predicaba el bautismo, aunque la cosa empezó en Galilea. Me refiero a Jesús de Nazaret, ungido por Dios con la fuerza del Espíritu Santo, que pasó haciendo el bien y curando a los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él. Nosotros somos testigos de todo lo que hizo en Judea y en Jerusalén. Lo mataron colgándolo de un madero. Pero Dios lo resucitó al tercer día y nos lo hizo ver, no a todo el pueblo, sino a los testigos que él había designado: a nosotros, que hemos comido y bebido con él después de su resurrección. Nos encargó predicar al pueblo, dando solemne testimonio de que Dios lo ha nombrado juez de vivos y muertos. El testimonio de los profetas es unánime: que los que creen en él reciben, por su nombre, el perdón de los pecados." El primer día de la semana, María Magdalena fue al sepulcro al amanecer, cuando aún estaba oscuro, y vio la losa quitada del sepulcro. Echó a correr y fue donde estaba Simón Pedro y el otro discípulo, a quien tanto quería Jesús, y les dijo: "Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto." Salieron Pedro y el otro discípulo camino del sepulcro. Los dos corrían juntos, pero el otro discípulo corría más que Pedro; se adelantó y llegó primero al sepulcro; y, asomándose, vio las vendas en el suelo; pero no entró. Llegó también Simón Pedro detrás de él y entró en el sepulcro: vio las vendas en el suelo y el sudario con que le habían cubierto la cabeza, no por el suelo con las vendas, sino enrollado en un sitio aparte. Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado primero al sepulcro; vio y creyó. Pues hasta entonces no habían entendido la Escritura: que él había de resucitar de entre los muertos. Palabra de Dios Palabra del Señor Canto interleccional Éste es el día en que actuó el Señor, sea nuestra alegría y nuestro gozo. Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia. ¡Aleluya, Aleluya! La piedra que el cantero desechó es ahora la piedra angular. Es el Señor quien lo ha hecho, ha sido un milagro patente. Te doy gracias porque me escuchaste, porque fuiste mi salvación. Con Jesús hay vida y Reino de Dios Domingo de Pascua Página 57 Oración de los fieles Oración sobre las ofendas Sacerdote: Padre, amanece la vida en este domingo de Resurrección. Unidos a Cristo resucitado, te pedimos: -Por la Iglesia universal, por el papa Francisco, y por cada una de las iglesias locales y comunidades en que nos reunimos. Para que salgamos al mundo con valentía a anunciar el Reino de Dios. Roguemos al Señor El grano de trigo muerto da vida al pan que presentamos. La uva exprimida, pisada y derramada se recoge para dar vida a este vino que ofrecemos. Que entregártelos para que tú los transformes nos recuerde siempre que también entregarte nuestras vidas dará el fruto de unas vidas más plenas. Te las entregamos a Ti, que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén. -Por cuantos reciben el bautismo, para que sus padres cuiden esa semilla y la hagan crecer y fructificar y para que en nosotros encuentren ejemplo y apoyo. Roguemos al Señor -Por quienes más están padeciendo las consecuencias de los recortes y la crisis económica: las personas desahuciadas, los parados de larga duración, los jóvenes en busca de primer empleo, las familias encabezadas por mujeres, los excluidos y excluidas de la sanidad pública, y por quienes viven las consecuencias de las diferencias Norte / Sur en nuestro mundo, especialmente los migrantes, las personas desplazadas por causas de la guerras y los desastres ecológicos. Roguemos al Señor -Por nuestros difuntos. Para que sigan vivos en nosotros, y para que el Señor les premie con el esfuerzo que en sus vidas hicieron por salir de las tinieblas e ir hacia su luz. Roguemos al Señor -Por nosotros y nuestra Comunidad. Para que la alegría de la Pascua nos contagie a unos y otros, y nos haga vivir haciéndole sitio al resucitado para que Él sea siempre el centro de nuestra Asamblea. Roguemos al Señor. Sacerdote: Estos son, Padre, nuestros deseos. Haznos cómplices de aquellas cosas que te pedimos. Canto de ofertorio: Confío en ti, Señor EN TI CONFÍO, SEÑOR, A TI PRESENTO MI AFÁN, NO QUEDARÉ DEFRAUDADO, PORQUE ERES MI SALVADOR (BIS) En Ti pongo mis ojos, Me salvas de la trampa, Olvidas mis pecados, Me das la salvación. LITURGIA DE LA EUCARISTÍA Plegaria Eucarística Te damos gracias, Señor, porque tú eres el Dios de los vivientes, que nos llamas a la vida y quieres que gocemos de una felicidad eterna. Tú has resucitado a Jesucristo de entre los muertos, el primero entre todos, y le has dado una vida nueva. A nosotros nos has prometido lo mismo: una vida sin fin, sin penas ni dolores. Por eso, Padre, estamos contentos y te damos gracias. Nos unimos a todos los que creen en ti, y con los santos y los ángeles te cantamos con gozo: Santo, Santo, Santo es el Señor, ... Señor, tú eres santo. Tú eres siempre bueno con nosotros y misericordioso con todos. Te damos gracias, sobre todo, por tu Hijo Jesús. El nos reúne ahora en torno a esta mesa, porque quiere que hagamos lo mismo que él hizo en la última Cena. Padre de bondad, envía tu Espíritu para santificar este pan y este vino, de manera que sean el Cuerpo + y la Sangre de tu Hijo Jesucristo. Porque Jesús, antes de morir, mientras estaba cenando por última vez con sus discípulos, tomó pan, te dio gracias, lo partió y se lo dio, diciendo: CONSAGRACIÓN Padre, te pedimos que nos recibas a nosotros con tu Hijo querido. Con Jesús hay vida y Reino de Dios Domingo de Pascua Página 58 El aceptó libremente la muerte por nosotros, pero tú lo resucitaste. El vive ahora junto a ti y está también con nosotros. El vendrá lleno de gloria al fin del mundo y en su reino no habrá ya pobreza ni dolor, nadie estará triste, nadie tendrá que llorar. Padre, tú nos has llamado a esta mesa, para que en la alegría del Espíritu Santo, comamos el Cuerpo de tu Hijo. Haz que este Pan nos dé fuerza y nos ayude a servirte cada día mejor en nuestros hermanos. Acuérdate, Señor, del Papa y de nuestros Obispos. Llena los corazones de tus hijos con la alegría de la Pascua, la alegría de la Resurrección de Jesús para que la anuncien a todos los hombres que viven tristes. Acuérdate también de nuestros hermanos que han muerto admítelos a contemplar la luz de tu rostro; y concédenos que todos, un día, junto con Cristo, con María y todos los santos, vivamos contigo en el cielo para siempre. Compromete nuestro esfuerzo, lo mejor de nosotros, para construir un mundo diferente con paz y justicia para todos. Sacerdote: Que la paz del Jesús resucitado esté con todos vosotros. Démonos fraternalmente la paz. Por Cristo, con él y en él, a ti, Dios Padre omnipotente, en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos. Amén. Oración final Oración del Padrenuestro Padre nuestro.. Oración de la paz Enséñanos a mostrar tu paz en todas partes. Danos tu Espíritu, para aprender a ser transparentes a tu presencia, para aprender a llevar tu paz a nuestros ambientes. Enséñanos a vivir la paz fruto de la justicia. Danos una voz fuerte que se alce contra la violencia, que denuncie la injusticia, que se indigne contra la exclusión. Educa nuestra mirada para descubrir los obstáculos a la paz. Fortalece nuestra mano para eliminar las mordazas de la paz. Canto de paz: Qué mañana de luz ¡Qué mañana de luz recién amanecida! Resucitó Jesús y nos llama a la Vida. ¡Despertad! Es hora de nacer, es hora de vivir la vida nueva, la gracia del Señor. No lloréis, en la boca un cantar Y un puesto para el gozo y la esperanza En cada corazón. Caminad al viento de la fe, sembrando de ilusión vuestro sendero, viviendo del amor. No temáis, que Cristo nos salvó, La muerte ya no hiere a sus amigos. ¡Jesús resucitó! Dios y Señor nuestro, te damos gracias porque has resucitado a tu Hijo Jesús, y de esta manera has abierto para nosotros la puerta de una vida sin límite. Abre nuestros ojos y nuestros oídos para que llevemos el gozo y la fuerza de la resurrección de Jesucristo a toda persona y situación. Que todos puedan sentirse transformados, “resucitados” por su presencia salvadora. Canto final: Hoy el Señor Resucitó 1.- Hoy el Señor resucitó y de la muerte nos libró. Alegría y paz hermanos que el Señor, resucitó 2.- Sobre la cruz Cristo venció y el sufrimiento iluminó. 3.-Porque esperó Dios lo libró y de la muerte lo sacó. 4.- El pueblo en Él vida encontró, la esclavitud ya terminó. 5.- La luz de Dios en Él brilló, la nueva vida nos llenó. BENDICIÓN FINAL AGRADECIMIENTOS Con Jesús hay vida y Reino de Dios Domingo de Pascua Bibliografía utilizada Servicios Koinonía Ágora Marianista Homilética Sal Terrae Dabar Cáritas: Cuaresma y pascua Buenas Nuevas Comunidades Cristianas Populares Redes Cristianas “En Camino”. Familia pasionista. Cuaderno de uso privado Parroquia de Santa Bárbara de Llaranes. Avilés, abril 2015 Página 59 Con Jesús, mejoramos el presente y proyectamos el futuro
© Copyright 2025