MODIFICA RESOLUCIÓN EXENTA N° 3639 DE

“75 años de vino en el CSIC”
Dr. Alfonso V. Carrascosa Santiago, Museo Nacional
de Ciencias Naturales
El vino ha sido objeto de estudio por el CSIC desde sus inicios, hace ahora 75 años.
Dentro del mismo ha tenido lugar la institucionalización de la investigación científica en
enología. Todo empezó con Juan Marcilla Arrazola (1886-1950), que fue previamente
director del único centro de investigación científica sobre vino de la historia de España,
el que fuera Centro de Investigaciones Vinícolas (CIV), creado en 1933. Marcilla fue
Vicepresidente tercero del CSIC y Vicepresidente de la OIV así como presidente
fundador de la Sociedad Española de Microbiología. Las directrices autárquicas del
momento le llevaron a ampliar el ámbito de sus estudios, pero la enología sobrevivió
hasta la creación del Instituto de Fermentaciones Industriales en 1967. En él se
consolidó la que podríamos denominar Escuela de Madrid de Microbiología Enológica
y se adecuaron las nuevas técnicas cromatográficas y electroforéticas al análisis del
vino, gracias a la actividad de un conjunto de científicas pioneras interesadas por su
calidad, algo que hizo surgir la quimiometría enológica. Hoy son varios los centros de
investigación del CSIC en los que el vino sigue estudiándose, con un enfoque en
conjunto multidisciplinar único en España.
Alfonso V. Carrascosa Santiago (Madrid, 1961) es doctor en Ciencias Biológicas por la
Universidad Complutense de Madrid y científico del CSIC, con destino en el Museo Nacional de
Ciencias Naturales (MNCN), en el que forma parte del grupo "Historia y documentación de las
Ciencias Naturales en España". Ha colaborado con importantes instituciones relacionadas con
la seguridad alimentaria tales como ENAC o AENOR, así como de gestión de la investigación
industrial como CDTI, habiendo sido profesor de la Universidad Autónoma de Madrid. Coautor
de varias patentes transferidas a empresas, de más de 100 artículos científicos en revistas SCI,
y de varios libros, recibió, junto a sus compañeros, el Premio Candia 1991, la Medalla de Oro al
Mérito de la Investigación Enológica 2007, el Premio de la Real Academia Gallega de Ciencias
2009 y el Premio Internacional en Enología OIV 2011. En la actualidad coordina el Grupo de
“Historia de la Microbiología Española” de la Sociedad Española de Microbiología (SEM), es
director de la revista Arbor y miembro de la Comisión Mujeres y Ciencia del CSIC.
El origen de nuestras variedades de vid
José Miguel Martínez Zapater, Instituto de Ciencias de
la Vid y el Vino (Logroño)
Convivimos diariamente con los nombres de variedades de vid que son la base de
nuestros mejores vinos: Tempranillo, Garnacha, Cariñena, Verdejo, Albariño, Viura,
etc. ¿De dónde vienen estas variedades? ¿Cuándo y cómo han llegado hasta nuestros
viñedos? El estudio de su genoma puede ayudarnos a reconstruir más de diez mil años
de interacción de la especie humana con la vid.
José Miguel Martínez Zapater es Doctor en Ciencias Biológicas por la Universidad Autónoma de
Madrid y Profesor de Investigación de la Agencia Estatal CSIC. Ha desarrollado su actividad
investigadora en el MSU-DOE Plant Research Laboratory (East Lansing, Michigan, USA) y
posteriormente en España en el INIA (Madrid) y en el CSIC (Centro Nacional de Biotecnología,
Madrid). En la actualidad es Director del Instituto de Ciencias de la Vid y del Vino (CSIC,
Universidad de La Rioja, Gobierno de La Rioja, Logroño). En los últimos años su trabajo se
centra en el estudio del desarrollo reproductivo de la vid y su impacto en la calidad de la uva.
También está implicado en el desarrollo y aplicación de herramientas genómicas para la
mejora genética de esta especie tanto en uva de mesa como de vinificación.
La exploración del Universo en el Siglo XXI
Xavier Barcons, Instituto de Física de
Cantabria (CSIC-UC)
La Astronomía ha experimentado llamativos avances en la última década, culminando en
importantes descubrimientos. Se han descubierto miles de planetas orbitando alrededor de
otras estrellas, se ha puesto en evidencia la importancia que tienen los agujeros negros en el
devenir del Universo y se sabe que el Universo está repleto de un enigmático ingrediente
llamado Energía Oscura. Esto ha sido posible, entre otras cosas, gracias a una impresionante
batería de observatorios astronómicos en tierra y el espacio que han abierto nuevas ventanas al
Universo. La combinación de grandes retos científicos, que ocasionalmente se resuelven y más
frecuentemente abren otros retos mayores, con la necesidad de desarrollar tecnologías
avanzadas y desarrollar esquemas de cooperación internacional para explorar el Universo,
hacen que la Astronomía sea una de las ciencias más fascinantes en la actualidad.
Xavier Barcons nació en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona) el 16 de Julio de 1959. Se licenció en
Ciencias Físicas por la Universidad de Barcelona (1981) y se doctoró en Ciencias en la Universidad de
Cantabria (1985). Fue Profesor Ayudante (1981-1987), y Profesor Titular (1987-1993) en la Universidad
de Cantabria. Becario post-doctoral (1986-87) y visitante sabático (1997) en la Universidad de
Cambridge. En 1993 ingresa en el CSIC como Investigador Científico y en 2002 es promocionado a
Profesor de Investigación del CSIC. Fue miembro fundador y primer director (1995-1999) del Instituto de
Física de Cantabria, centro mixto del CSIC y la Universidad de Cantabria al que está adscrito en la
actualidad.
Ha sido asesor científico de la Agencia Europea del Espacio (ESA), como miembro del Grupo de Trabajo
de Astronomía (AWG) de 2001 a 2002 y del Comité Asesor en Ciencias del Espacio (SSAC) de 2003 a
2005. Ha participado en programas espaciales de la ESA como el observatorio XMM-Newton, como coinvestigador del Survey Science Centre y en el Comité de Usuarios que preside desde 2010. Lleva
también realizando desde hace casi 15 años labores de coordinación científica en la misión
XEUS/IXO/Athena.
De 2004 a 2006 fue gestor del Programa Nacional de Astronomía y Astrofísica del Ministerio de
Educación y Ciencia y desde entonces es colaborador externo de dicho Ministerio (en sus sucesivas
encarnaciones) en temas de Astronomía. Coordinó entre 2004 y 2006 las negociaciones técnicas para la
entrada de España en la Organización Europea para la Investigación Astronómica en el Hemisferio
Austral (ESO), y fue delegado en el Consejo de dicho Organismo desde 2007 a 2011. Fue miembro del
Grupo de Estrategia Científica (2007-2008) y en 2011 fue elegido Vicepresidente del Consejo de ESO.
Desde 2012 es Presidente del Consejo de ESO. Es también miembro del directorio del proyecto ALMA
desde 2008, presidiendo además su comité de personal. Creó en 2007 y coordinó hasta 2010 la Red de
Infraestructuras de Astronomía (RIA) por encargo del Ministerio de Ciencia e Innovación. También ha
formado o forma parte del Comités Científicos Asesores de varias instituciones científicas exranjeras. Ha
sido y es evaluador y miembro de comisiones de selección para agencias nacionales, extranjeras en
multitud de paises y de organizaciones internacionales.
Investiga en Astronomía, en particular en galaxias activas, agujeros negros supermasivos y
cartografiados del cielo con rayos X. Impulsó el primer grupo español de Astronomía de rayos X en
Santander, que continua siendo una referencia nacional e internacional. También ha impulsado, junto a
varios laboratorios del CSIC, el desarrollo de sensores criogénicos para detectar rayos X en telescopios
espaciales. Ha publicado más de 120 artículos en revistas internacionales especializadas que han
recibido cerca de 4000 citas (índice de Hirsch 35). Ha sido invitado en decenas de ocasiones a impartir
conferencias en Congresos internacionales especializados, realiza frecuentes actividades de divulgación
(charlas, artículos) y ha dirigido 7 tesis doctorales.
Doñana: Patrimonio de la humanidad esculpido por la
mano del hombre desde el Neolítico
Juan José Negro Balmaseda, Estación Experimental de
Doñana
El Dr. Juan José Negro Balmaseda es el actual Director de la Estación Biológica de Doñana (EBD), instituto
perteneciente a la Agencia Estatal Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Es Profesor de
Investigación desde 2009 y miembro del Departamento de Ecología Evolutiva de este Instituto. Es Vicepresidente de
la Sociedad Española de Etología, miembro del consejo editorial de varias revistas científicas internacionales,
coordinador de las actividades de investigación en el Espacio Protegido Doñana, y miembro del Comité Starligth
para la defensa de la calidad del cielo nocturno y de la Red Española para el Estudio de la Contaminación Lumínica.
El Dr. Negro recibió su licenciatura en Biología en la Universidad de Sevilla en 1987. Realizó su tesis doctoral,
disfrutando de una beca de formación de personal investigador, en la Estación Biológica de Doñana, y habiendo
realizado cursos de postgrado en el Departamento de Ecología y Biología Vegetal de la misma universidad en 1991.
Después, se trasladó a Montreal, Canadá, donde realizó su investigación postdoctoral con una beca del Gobierno de
España durante tres años en el Departamento de Recursos Naturales de la Universidad McGill. Retornó a Sevilla y a
la Estación Biológica en 1995 como investigador post-doctoral.
Sus investigaciones abordan cuestiones sobre ecología evolutiva y conservación de especies amenazadas. Sus
especies modelo de estudio son generalmente las aves de presa, un grupo de especies con poblaciones
generalmente reducidas (y, por tanto, crónicamente en peligro de extinción) y en conflicto permanente con las
actividades humanas. También ha trabajado con otras especies de aves, ya estén gravemente amenazadas, como
la malvasía cabeciblanca y el ya extinto en España torillo andaluz, o especies de interés social o cinegético, como la
perdiz roja y el ánsar común.
Mantiene desde sus comienzos dos líneas de investigación. Por un lado, utiliza herramientas genéticas para abordar
cuestiones ecológicas que afectan a individuos y a poblaciones. Por otra parte, lleva a cabo investigaciones sobre la
evolución de las señales biológicas de comunicación. De especial relevancia en este ámbito son sus aportaciones a
la evolución de la coloración en aves, ya sea en el plumaje o en otras zonas corporales. También está interesado en
la aplicación de nuevas tecnologías para la monitorización de poblaciones de vida silvestre. Actualmente dirige un
proyecto destinado a demostrar la utilidad de los sistemas aéreos no tripulados (UAVs o drones) en investigaciones
medioambientales, que incluyen el seguimiento de fauna silvestre, la documentación fotográfica de procesos
ecológicos o, incluso, el control de furtivos. Como ocurre frecuentemente en ciencia, donde una idea puede llevar
inesperadamente a otra, su interés por la comunicación no verbal le ha llevado a estudiar capacidades cognitivas en
el ser humano, incluyendo a los extintos neandertales. Del mismo modo, la inquietud conservacionista por las aves
le ha llevado a abordar un problema ambiental de reciente aparición: la contaminación lumínica, que causa estragos
por desorientación en poblaciones de aves marinas que nidifican en zonas costeras.
El Dr. Negro ha publicado 150 artículos en revistas científicas internacionales, dos libros, varios capítulos de libros y
numerosos artículos divulgativos en revistas de la naturaleza. Ha dirigido 6 tesis doctorales que obtuvieron todas
ellas las máximas calificaciones, y participado como profesor universitario en asignaturas troncales (Universidad
Pablo de Olavide), de máster (Universidades Hispalense y de Córdoba), programas de doctorado (Universidad
Hispalense) y cursos de posgrado (Universidad Internacional de Andalucía y Universidad Internacional Menéndez
Pelayo). También ha patentado junto con investigadores químicos del CSIC un procedimiento para extraer y
cuantificar el pigmento melanina a partir de materiales biológicos. Ha sido galardonado con dos distinciones
científicas: el Premio para Jóvenes Investigadores de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla 1997; y, en 2004,
el Premio de la Fundación BBVA a la Investigación Científica en Biología de la Conservación en España. Colabora
con numerosos investigadores en varios países, destacando sus relaciones con Canadá y Argentina. El Dr. Negro
es trilingüe y domina el español como lengua materna, además del inglés y el francés.
El CSIC en la Ciencia y Logística Antártica
Miguel Ángel Ojeda, Unidad de Tecnología Marina (Barcelona)
Desde la instalación por parte del CSIC de la Base Antártica Española "Juan Carlos I"
en febrero de 1988 la investigación española en la Antártida ha crecido de forma
exponencial. Este crecimiento viene además ayudado por la instalación de la segunda
base, BAE Gabriel de Castilla, y la botadura del BIO Hespérides en 1991. Desde
entonces la presencia y actividad de investigadores e instalaciones españolas en el
continente helado no ha hecho más que crecer y mejorar. Conseguir que la ciencia que
se hace en las instalaciones aumente y tenga un componente de cooperación
internacional mayor, así como la mejora de las instalaciones son parte de los retos
futuros.
Licenciado en Ciencias del Mar por la U. de Las Palmas de G.C. trabaja en la Unidad de
Tecnología Marina del CSIC desde 1999. En 2001 realiza su primera campaña antártica y desde
ese momento ha tenido diferentes responsabilidades dentro de la estructura de la UTM y la
campaña antártica española. Desde 2004 es el responsable de la coordinación logística de la
campaña antártica española, incluyendo las bases antárticas Juan Carlos I y Gabriel de Castilla
y los buques Hespérides y Las Palmas, siendo Jefe de la BAE Juan Carlos I en dos campañas. En
la actualidad es también el responsable de la coordinación técnica y operativa de los buques
oceanográficos dependientes del CSIC.
La Ciencia en nuestro día a día
Beatriz Amorena Zabalza, Instituto de Agrobiotecnología,
Pamplona
Minuto a minuto, estamos viviendo y disfrutando en persona los resultados de los
avances científico-tecnológicos aunque, a menudo, no somos conscientes de ello ni de
su evolución hasta el momento actual. Detengámonos a pensar cómo era nuestro mundo
hace unos años y cómo la ciencia ha contribuido a su estado actual en aspectos
concretos de nuestra vida, incluyendo el transporte, las comunicaciones, la
alimentación, la medicina y, en definitiva, la salud en su globalidad.
Beatriz Amorena Zabalza es Doctora y Máster en Genética por la Universidad de WisconsinMadison (EEUU) y en Ciencias Biológicas por la Universidad de Barcelona. Tras su etapa en el
Departamento de Genética de la Universidad de Wisconsin, fue Profesor Titular de Genética en
la Universidad de Zaragoza, y posteriormente, Profesor de Investigación del Consejo Superior
de Investigaciones Científicas (CSIC) en el Instituto de Agrobiotecnología (IdAB, Centro mixto
del CSIC, la Universidad Pública de Navarra y el Gobierno de Navarra). En los últimos años, su
trabajo se ha centrado en el estudio de enfermedades infecciosas bacterianas y víricas
concretas, para comprender su naturaleza, averiguar cómo podemos defendernos frente a
ellas y desarrollar herramientas de utilidad en los ámbitos de diagnóstico, terapia y vacunación
empleando nuevas tecnologías.
Mujer y Ciencia
María Jesús Lázaro, Instituto de carboquímica, Zaragoza
En la primera reunión que tuve como miembro de la Comisión de Mujer y Ciencia del
CSIC en el año 2003 oí una frase que me impacto mucho: “Cada generación de mujeres
… empezaba creyendo que la discriminación por razón de genero se resolvió en la
generación anterior … pero poco a poco se iban dando cuenta de que las condiciones no
son igualitarias …”. Sinceramente esta frase me extrañó y pensé que esto no podía
ocurrir en la Sistema Científico Español. Sin embargo, conforme tienes conocimiento de
las estadísticas, te das cuenta de que el problema no está resuelto ni es fácil de resolver.
Esta es una de las famosas gráficas tijera referente al porcentaje de mujeres en cada uno
de los niveles de la carrera científica. El personal de investigación está formado por un
58.66 %, el porcentaje de postdoctorales en el CSIC es el 49.09 %, pero lo más
alarmante es que el porcentaje de contratados Ramones y Cajales que entra al CSIC es
tan sólo el 38.82 y los mismo el número de Científicas Titulares, que se mantiene a lo
largo de los años en un 40%. Así no es de extrañar las diferencias que hay en el último
escalón de la carrera científica del CSIC, que el porcentaje es un 23.88%.
¿Hemos mejorado algo a pesar de todos los esfuerzos que hay hecho el CSIC fundando
la Comisión de Mujer y Ciencia en 2003? La respuesta es sí. En el año 2001 el
porcentaje de personal en la escala superior era un 14%. ¿Que pasa en las
Universidades? Se ha mejorado menos, pues el porcentaje de catedráticas se sitúa en un
20%.
Desafortunadamente, a pesar de las políticas de igualdad, la desigualdad entre la
participación de mujeres y hombres sigue siendo un hecho y una debilidad en todas las
instituciones científicas. El progreso de las mujeres científicas es mucho más lento de lo
que cabría esperar. La Comisión Europea ha elaborado un informe “Cambio Estructural
de Instituciones Científicas” se identifican como problemas comunes, la falta de
transparencia en la toma de decisiones o la falta de transparencia en la toma de
decisiones o la existencia de redes de amiguismo y de perjuicios. (Conclusiones del
artículo “la comisión de Mujeres y Ciencia del CSIC: diez años promoviendo la
igualdad en oportunidades y la excelencia en el organismo”, ARBOR Ciencia,
Pensamiento y Cultura, 2013, vol. 189-759. ISSN-L:0210-1963).
El número de Rectoras es muy escaso en la Universidades, el número de directoras en el
CSIC es tan sólo el 20%. La presencia de mujeres en Comités Científicos en los
Congresos, de conferenciantes plenarios, premiadas en investigación es muy escasa.
Los datos muestran un cierto avance y pequeñas reducciones en la brecha de género en
algunos ámbitos, pero también nos dicen que, a pesar de los progresos realizados en
estos años, la infrarrepresentación de las mujeres continúa siendo un tema que requiere
de acciones y medidas. La segregación horizontal persiste, con pocas mujeres que
estudian en los campos tecnológicos y en algunas ciencias experimentales, y pocos
hombres que eligen carreras en las ciencias de la vida. La presencia de mujeres en los
escalones superiores de la carrera, y en los puestos de decisión, tampoco ha avanzado en
estos últimos años a una velocidad proporcional al número de mujeres capacitadas para
acceder a estos puestos (Informe Científicas en Cifras, 2013, Unidad de Mujer y
Ciencia, Ministerio de Economía y Competitividad)
Mª Jesús Lázaro Elorri es Investigadora Científica del Instituto de Carboquímica (CSIC).
Actualmente es la Directoria de dicho instituto. La Dr. Lázaro es licenciada en Ciencias
Químicas (1990) por la Universidad de Zaragoza, habiéndose doctorado en la misma
Universidad en el año 1994. Posteriormente, realizó una estancia postdoctoral en el
Departamento de Ingeniería Química y Analítica del Imperial College de la Universidad de
Londres durante los años 1996 a 1998, tras la cual se incorporó de nuevo al Instituto de
Carboquímica. A lo largo de su carrera investigadora, ha trabajado en distintos temas
relacionados con tecnologías de producción limpia de energía y reducción de emisiones de
gases de efecto invernadero. Sus líneas actuales de investigación son: - producción de H2 libre
de CO2 , - catalizadores para reducción de óxidos de nitrógeno tanto en fuentes móviles como
fijas, y – electrocatalizadores para pilas de combustible, electrolizadores y conversión
electroquímica de CO2. Tiene 195 publicaciones del SCI con un Indíce H=34, ha llevado a cabo
51 proyectos de investigación, ha dirigido 11 tesis y ha obtenido diversos premios de
investigación. Además ha sido miembro de la Comisión Mujer y Ciencia del CSIC desde su
fundación en el año 2003 hasta 2012. Actualmente es vocal de AMIT-Aragón-MUCIT.