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COMO PARTE DE LAS CAPACITACIONES QUE DEBE DAR LA POLICÍA DE
TRÁNSITO
PRÁCTICA EN POLÍGONO NO PERSIGUE NINGÚN OBJETIVO MÁS ALLÁ DE
LA AUTODEFENSA
OFICIALES DE TRÁNSITO REFRESCARÁN SUS
CONOCIMIENTOS DE TIRO CON ARMAS DE FUEGO
Desde el pasado 5 de febrero se
giraron instrucciones para que todos
los oficiales de la Policía de Tránsito
pasen, al menos una vez, por un
polígono de tiro para que repasen el
uso de sus armas de reglamento en la
práctica y en un espacio seguro y
controlado.
Para finales del presente año
absolutamente todo el cuerpo policial
deberá haber participado de alguna
práctica de tiro organizada por la
Policía de Tránsito.
El arma de reglamento puede ser utilizada cuando
una situación de amenaza contra el oficial lo amerite.
Esta directriz, detalló el Comisario Mario Calderón, Director de la Policía de Tránsito,
obedece a la necesidad lógica de capacitar y repasar conocimientos de los funcionarios, más
cuando se trata de un cuerpo policial y de una herramienta de trabajo tan delicada como lo es
un arma de fuego.
Los inspectores tienen el conocimiento necesario adquirido como requisito para portar un
arma, ese conocimiento debe ser refrescado y mantenido mediante la práctica de sus
destrezas, tanto respecto a sus habilidades para desenfundar un arma, quitarle o ponerle el
seguro, cargarla o descargarla, como su capacidad e idoneidad para percutir esa arma, de tal
forma que el objetivo buscado como lo es defenderse o reducir con fuerza controlada a un
agresor, se logre con el menor riesgo posible de autoagredirse o herir a terceros inocentes.
Calderón aclaró que este refrescamiento de conocimiento no está ligado particularmente al
tema de piques, pues no desea que exista una percepción equivocada que la Policía de
Tránsito se está preparando para un enfrentamiento armado con estas personas.
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“Hay algo que la ciudadanía debe interiorizar: Los oficiales de Tránsito son policías. Los
conductores y los peatones deben entender que los oficiales son una autoridad de la
República y hay que respetarlos, lastimosamente muchos infractores de la Ley lo olvidan y
recurren a la agresión física, al amedrentamiento y a los insultos cuando se les aplica una
multa y el oficial debe estar preparado para repeler una agresión de hecho, con su arma de
reglamento si fuera el caso, y en proporción al ataque que está sufriendo”, reseñó el Director
de la Policía de Tránsito.
Hay comportamientos ciudadanos, continuó Calderón, que requieren que los oficiales estén
atentos a la necesidad de desenfundar el arma de fuego e incluso accionarla, como cuando
un conductor en estado etílico o en fuga para evadir una multa recurren a la violencia, a lanzar
su vehículo contra el oficial o incluso sacan armas de fuego, puñales u objetos contundentes
para agredir o amenazar a la autoridad.
El Director de Tránsito también recordó que los inspectores e inspectoras tienen claras sus
obligaciones y sus potestades y ninguna situación de eventual amenaza debe ser un inhibidor
de sus deberes, de tal forma que en una situación de riesgo deben actuar con prudencia,
solicitando colaboración de compañeros y hasta de otros cuerpos policiales que siempre están
atentos a asistirlos. No es admisible el incumplimiento de deberes por temor, finalizó.
26-02-2015
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