A PALOS SUPLEMENTO JOVEN DE TIEMPO ARGENTINO Domingo 19 de octubre de 2014 Buenos Aires, Argentina Año 4 Nº288 Además: Entrevista a Caponnetto | Sarlo-Fantino | Fútbol para extraterrestres | La reedición de El curso del corazón, de M. John Harrison | Hospital Durand: alta complejidad | Estereotipos | La salidera año 5 | nº 288 | 19 de octubre de 2014 2 FUTBOL PARA EXTRATERRESTRES El pecho desnudo Por Zambayonny Ilustración: Daniel Caporaletti Existe una razón elemental por la cual los árbitros amonestan a los futbolistas que festejan los goles quitándose la camiseta o apenas levantándosela. Poca gente la conoce porque a las autoridades futbolísticas en general les de un poco de pudor explicarla sinceramente y sólo se limitan a prohibir y castigar sin demasiadas aclaraciones. Más de una vez han tratado de camuflar el auténtico motivo de la proscripción aduciendo que el tribunal de disciplina se los exige firmemente porque sacarse la camiseta se considera una muestra de conducta antideportiva ligada a la falta de educación, al renuncie de la estética, a la confrontación con el buen comportamiento y hasta a procederes reñidos con el recato y la moral. Nada de eso es cierto. Lo que sucede en verdad es que les da muchísima vergüenza dejar absolutamente en claro que la sincera razón por la cual no se permite a estos deportistas que se levanten o se saquen la camiseta en las celebraciones de los goles, es porque las empresas que pagaron mucho dinero para figurar en el frente de sus casacas tienen que aparecer en las imágenes de los festejos. Así de simple. Solamente se trata de un problema económico, como todo y casi siempre. Aclaración pertinente: no hay que dejar de tener presente que de todas formas los castigadores de espíritu siempre ven faltas por donde caminen. Sin embargo, parece ser que a nadie le conviene que al día siguiente las tapas de todos los diarios muestren al goleador con la boca abierta llena de alegría celebrando feliz sin la publicidad en su pecho y en cambio besándose el escudo tatuado de los colores que defiende o mostrando una leyenda donde le mandan saludos a sus hijos o nombrado a su barrio olvidado o dándole ánimo a alguien con problemas o pidiendo justicia por algún asunto en el que crean. ¡Nada de leyendas políticas! ¡No ensuciemos nuestro deporte! Gritan horrorizados los dueños de la pelota y los pelotudos con dueño haciéndose los distraídos con lo que es política y lo que no. Estos paladines de la corrección me dirán que gracias a esa publicidad el club les puede pagar el sueldo a sus jugadores, y posiblemente lo único que tengan sea razón. Pero yo siempre voy a estar mas cerca de los que rompen las reglas protocolares que de los que las cumplen con más miedo que convicción. ¿A qué iglesia van a rezar estos devotos de la patronal? ¿A la cucha del jefe? No voy a detenerme en esta oportunidad a describir la temible criatura en la que se con- Sarlo-Fantino WHISKYPEDIA Contenido [ocultar] 1. Definición 2. Namedroping 3. Frost Nixon 4. Rol de los intelectuales 5. Nuevo paradigma Se conoce como Sarlo-Fantino a la famosa entrevista que le realizara el conductor de televisión Alejandro Fantino a la intelectual argentina Beatriz Sarlo, en la emisión de Animales Sueltos en la jornada del martes 14 de octubre en el canal América. La entrevista fue incluida dentro de los anales del reportaje periodístico, toda vez que surgió un acontecimiento inesperado para el estado del periodismo de la época: el entrevistador leyó alguno de los libros de la entrevistada, enriqueciendo el reportaje con preguntas al respecto. Namedropping Una de las consecuencias casi ineludibles del maquiavélico proceso de leer antes de una entrevista fue la práctica de lo que se denomina como “name-dropping”, que consiste en la sutil mención a determinados autores de relevancia mundial en el marco de la conversación. La mención de autores que van desde Landriscina hasta Walter Benjamin significó también un vierte cualquier juego bajo la amenaza sombría del dinero influenciándolo todo, pero sospecho que estos tipos son los mismos que sostienen que la incentivación y el soborno son cosas diferentes aduciendo como simios mononeurales que una es para ganar y la otra es para perder. Esta libremercadista y sensible rama de la humanidad un día aceptará dinero de cualquiera solamente para hacer bien el trabajo por el que cobran y abrirán la posibilidad de que les rompan la cabeza o que los miren con desprecio en caso de no lograr el objetivo pautado, porque una vez que te convertís en mercenario los valores y el orgullo se confunden adentro de los bolsillos entre las monedas de menor valor. Cuando un tercero interviene en un juego de 2 sucede lo mismo que en las parejas. Por eso hay tantos cornudos defendiendo esta postura. Para no sentirse solos. cambio de paradigma en el arte de la entrevista. Frost Nixon La entrevista fue catalogada por algunos periodistas locales como la versión argentina del reconocido mundialmente reportaje del periodista David Frost al ex presidente Richard Nixon, que logró por primera vez sacarle una confesión respecto al Watergate. Aunque sin las mismas intenciones de extraerle una confesión, sino más bien de tener una charla amena, el periodista Alejandro Fantino utilizó la técnica de leer un par de libros antes de la entrevista, técnica que no se utilizaba aproximadamente desde los años 50 en el país, debido a que dicha práctica había pasado de moda a la hora de entrevistar. Rol de los intelectuales La entrevista, aunque amena y en un buen clima, no estuvo alejada de polémicas, como aquella en la que se debatió el rol de los intelectuales dentro de un país. A la pregunta respecto a si Luis Landriscina Volviendo al tema de las amarillas (o de las rojas en casos terminales) con las que son castigados aquellos jugadores que se levantan la indumentaria en los festejos de los goles a pesar de la pena, hay una pregunta que se realiza gran parte de la humanidad: ¿Qué fuerza sobrenatural los obliga a celebrar de esta manera aún sabiendo que recibirán una tarjeta por parte del réferi, una sanción económica por parte de su propio club, un repudio vergonzante por parte de sus seguidores y un sermón de calesita por parte de los periodistas que el único césped que pisaron fue el del jardín de sus psicólogos? Pues bien, la respuesta es que no lo pueden evitar. Simplemente no lo pueden evitar. Es por eso que acá encontramos una de las pruebas más irrefutables y maravillosas de lo que significa la esencia del fútbol: convertir un gol es demasiado extraordinario y comparable a pocas cosas. A estos afortunados jugadores tocados con la varita de la gracia no les importa lo que pase después. No les importa el látigo corrector de los torcidos, no les importa el chiflido desafinado de los desdentados, no les importa el reproche sin las eses mentales de los críticos presos de su sillón, no les importa la acusación cobarde de los que le suben demasiado el contraste a la tv, no les importa que su mujer ya esté dormida cuando vuelvan a casa, ni les importa que el gerente de la empresa que aparece en su camiseta se envenene con champagne tilingo en el palco oficial. Lo único que quieren es correr como locos, lo más desnudos y lejos posible, abrazándose con los suyos, felices y libres como un pájaro nuevo que desconoce las temibles leyes de la gravedad. La mayoría de los hinchas no comprenden esta actitud y por eso los insultan. Aunque tal vez lo hagan simplemente porque no pueden perdonarse a sí mismos no haber sentido jamás algo semejante.X o José Larralde representaban la figura del intelectual tal y como se lo imaginaba la entrevistada, la misma, no sin cierta elegancia, negó la posibilidad de que todo el que contara cuentos, sean cantados o relatados, se convierta inmediatamente en un intelectual, como parecía sugerir la pregunta. Nuevo paradigma La entrevista Sarlo-Fantino instauró un nuevo paradigma dentro del periodismo argentino, al recuperar una vieja tradición, de preparar las entrevistas conociendo a la persona que está del otro lado de los escritorios de televisión, y promover incluso la lectura de libros. En ese sentido también fue comparada con aquellas entrevistas realizadas a grandes escritores por Joaquín Soler Serrano, donde el entrevistador, además de tener capacidad para hacer una pregunta, podía identificar la obra del entrevistado y manifestarse respecto a ella. El formato de entrevista Fantino-Sarlo, sin embargo, no fue tan utilizado posteriormente a que se produzca la misma. X 19 de octubre de 2014 | año 5 | nº 288 3 ESTEREOTIPOS ruido de fondo | El curso del corazón, de M. John Harrison (Páprika) Amor y orden HOY: El militante cannábico Por Carlos Godoy » »Cada vez que saca la billetera se siente olor a incienso. » »Puede ser muy flaco o tirando a gordo. » »Tiene la casa llena de sahumerios y estatuas de divinidades hindúes. » »Dice que los que se fuman un porro no saben nada de la cultura cannábica. » »Sueña con que Dolores Fonzi sea la Evita de su causa. » »Compra la revista THC desde el primer número. » »Está suscripto al newsletter de Librería Muscaria y recibe noticias del lanzamiento de libros como “Calendario lunar para el huerto y el jardín ecológicos” o “Historia, farmacología, iconografía, usos terapéuticos, efectos, reflexiones, identificación, referentes culturales y aspectos legales de los hongos psilocibes”. » »Quiso participar de la Huerta Orgazmica pero se colgó. » »Se hizo vegetariano. » »En consecuencia se dejó la colita de Rodrigo Palacio. » »99% de probabilidades de ser hijo único. » »Se considera usuario medicinal porque le aflojó el dolor de un pinzamiento cervical. » »Se junta con amigos a festejar el 20 de abril en referencia al 4:20. » »Tiene predilección por lo natural. » »Come frutas secas. » »Usa mucho la palabra nutrientes. » »Se estudió en profundidad la historia de la marihuana. » »Suele justificar su legalización aduciendo que cosas como el aceite de unción de Moisés o el pijama de invierno de Benjamin Franklin estaban fabricados con cáñamo. » »Cree que la marihuana tiene propiedades mágicas: cita como ejemplo a Snoop Dogg que dejó su vida de gángster para convertirse en Snoop Lion. » »Legend, de Bob Marley, y el Dark Side of the Moon, sus discos de cabecera. » »Todavía cree que el Dark Side of the Moon se puede escuchar en paralelo con el Mago de Oz. » »Todavía espera que Pink Floyd venga a tocar al Valle de la luna. » »Puede creer en teorías conspirativas. » »Muy fanático de la película Zeitgeist. » »Y de cualquier película en la que actúe Ice Cube. » »Le gusta mucho el UFC. » »Una vez fue con unos amigos a ver a Sri Sri Ravi Shankar creyendo que era el de los Beatles. » »De adolescente se fumaba un paraguayo y flasheaba escuchando a oscuras un disco de ambient y new age editado por Roche que le afanó a su madre visitadora médica. » »Tuvo un perro negro al que le puso Bob. Estereotipo que viene «La mina que se pone en bolas en el Encuentro Nacional de Mujeres» Si se te ocurre cómo describirlo, mandá tus ideas a [email protected] o vía Twitter a @niapalos así lo publicamos. web www.niapalos.org mail [email protected] twitter facebook @niapalos niapalos Resulta curioso que la novela más prestigiosa de un escritor de culto como M. John Harrison, descatalogada hace años, hoy vuelva a ser reeditada como el segundo título de una nueva editorial independiente llamada Páprika. Resulta curioso porque las editoriales independientes suelen satisfacer exclusivamente caprichos y necesidades de pertenencia de grupo -más allá de la inversión económica que este tipo de publicación implica- y porque en general el lector especializado suele depender de las editoriales multinacionales para recuperar traducciones de libros descatalogados. El curso del corazón, ese es el título de esta novela de Harrison, fue publicada en 1992 y traducida al español en 1996 por Minotauro. La misma traducción de Andrés Ehrenhause es la que hoy ofrece Páprika en esta reedición con diseños de tapa betsellerianos. En la novela se puede ver la delicada prosa de Harrison que también se puede apreciar en sus cuentos, ensayos y demás experimentos narrativos pero, esta vez, concentrada dentro de los límites de una novela genérica y por mo- mentos clásica. Seguramente este sea el texto de Harrison más convencional o de lectura más ágil dentro de lo que es la hermenéutica de su estilística. Harrison es uno de esos escritores posmodernos (en el sentido borgeano del término) que plantea en su narrativa una forma de leer más que de escribir. Una especie de free style que mezcla ciencia ficción con fantasy, relatos de ascenciones religiosas, novelas de aventuras caballerescas medievales, filosofía, terror y ensayos literarios. En el caso de El curso del corazón lo único que mantiene al lector en una realidad cercana temporal y espacial son las referencias a calles y localidades del Reino Unido; así como a modelos de autos, a bebidas y comidas. La novela plantea esa dinámica entre chaman o brujo y discípulo a la manera de la saga de Carlos Castaneda que inicia con Las enseñanzas de Don Juan pero con un chaman (Yaxley) mucho más oscuro y peligroso. También en un modo borgeano, el argumento surge de la búsqueda gnóstica de ese punto en el que la filosofía y la religión se unen para develar el todo. El lugar en el que se encuentran las verdades univer- sales. El aleph bajo una escalera para Borges, el coeur del pleroma en los campos de Cambridge para Harrison. La diferencia con Borges es que Harrison no se fija en la paradoja de belleza filosófica o religiosa sino que utiliza ese enclave para construir un escenario terrorífico. Y ahí es cuando aparece la gran pregunta de la novela: ¿Qué pasa si en esa búsqueda de la redención espiritual sale todo mal? ¿Qué es lo que queda? El curso del corazón de M. John Harrison es una novela que trata sobre el sufrimiento de las relaciones de pareja y las amistades. Es una novela que lleva al extremo la idea de soledad y somete a los personajes a sus propios miedos y a la búsqueda inútil de la salvación. Harrison con una trama inusual y fantasmagórica nos lleva a preguntarmos cuánto realmente estamos preparados para todo esto. <<El curso del corazón, M. John Harrison, Páprika, 2014, 288p trad de Andrés Ehrenhause>> × “Entrevista a Caponnetto”, de Juan Terranova (CEC) Alguien tiene que decir la Verdad Por Tomás Richards “Entrevista a Caponnetto”, de Juan Terranova, es un relato y es una crónica y es, como su nombre lo indica, una entrevista al director de la revista Cabildo, el último intelectual de la derecha argentina. Partiendo de una afirmación de Alan Pauls -“hace muchos años, décadas diría, la derecha no produce cabezas inteligentes”-, el narrador inicia un periplo en busca del pensamiento actual de esa franja ideológica y del personaje en quien esta encarne. Como para refutar a Pauls aparece entonces un exponente de la derecha reaccionaria, heredera del nacionalismo católico preconciliar: el lúcido y polémico Antonio Caponnetto. Un hombre cuyas maneras amables y cuya sensibilidad por la poesía contrastan con la prosa encendida y las ideas violentas enarboladas por el bastión nacionalista que es Cabildo. La aparición de Caponnetto no hace más que complejizar la cuestión inicial de “la derecha” contemporánea, dando pie a preguntas de mayor alcance: ¿qué significa ser de derecha ya en pleno siglo XXI?, ¿existe una derecha o hay varias -la clásica, la oligárquica, la liberal?, ¿el tradicionalismo monárquico y los modernos partidos empresariales como el PRO pertenecen ambos al campo de la derecha? Y en todo caso, ¿tienen sentido todavía las categorías decimonónicas de izquierda y derecha en un país siempre regido por la antinomia peronismo-antiperonismo? La cuestión se vuelve más y más persistente. A medida que el tiempo transcurre y el narrador, que es y no es Terranova -el que dice “yo” en “Borges y yo” no es Borges-, va cambiando de geografía y de ambiente, el abanico de preguntas se amplía hasta englobar a la izquierda y su epígono más característico: el progresismo. Sin caer en la obviedad de convertirse en un panegírico de Caponnetto y su vasta obra, el texto se vuelve entonces sobre el progresismo blanco bienpensante y destapa la paradoja. Una vez erigido en statu quo intelectual y mediático el progresismo se ameseta y muere. Esa izquierda onanista e inofensiva que se lee a sí misma hasta el hartazgo en suplementos culturales, concursos editoriales y universidades se presenta como estéril para abordar la realidad de manera más o menos novedosa, pierde “su potencial perturbador” y se disuelve en la intrascendencia a la vez que un intelectual del orden, la ortodoxia y la auctoritas deviene impensadamente en un “asordinado y potente heterodoxo”, un maldito y un rebelde. Al revés que la de Pauls, que sale límpida y precisa de la grabación de la entrevista, la voz de Caponnetto sale sucia y con ruido de fondo. Aun así consigue instalar con mayor eficacia una lectura a contrapelo del zeitgeist político y cultural de los últimos dos o tres lustros en la Argentina, siempre esperando “el gran debate” a la vera del campo intelectual local. Esa ausencia marcada, esa differance, pareciera ser el lugar al que la intelectualidad de derecha se ve relegada por los dueños del sentido común y de la corrección política. “Entrevista a Caponnetto” podría leerse en tándem junto a otro libro también editado por el Centro de Estudios Contemporáneos, “Entrevista a Adrián Krmpotic”, de Carlos Mackevicius, tomándolo como un intento de abordar la política actual desde una zona menos segura y más híbrida del pensamiento y de la escritura. <<“Entrevista a Caponnetto” se descarga desde www.elcec.com>>× año 5 | nº 288 | 19 de octubre de 2014 4 Mientras lo miran las nuevas olas Nota El 23 de octubre Charly García cumple 63 años. Seis décadas de una parábola artística tan genial como furiosa: autor de una obra fundamental y cultor de una figura pública que pareció acompañar el derrotero particular de la Argentina de fin de siglo (de las utopías al fin de las utopías, y del deshielo democrático a la pendiente intoxicada de un país integrado al mercado mundial de símbolos y consumos culturales), Charly hizo de todo, se consagró como mesías del rock nacional y, como tal, alcanzó la pasión, la muerte y la resurrección. Convertido en leyenda viva, le preguntamos a varios músicos jóvenes por su legado. ¿Qué ven las nuevas generaciones cuando miran a Charly García? Por Imanol Subiela “Charly es la primera estrella que quiso ser cometa” (Luis Alberto Spinetta) El 23 de octubre Charly García va a cumplir 63 años. Pero hoy, Carlos Alberto García Moreno ya no es Charly García. Para las nuevas olas, él es solo su obra, la música. Ya no importa su personaje histriónico, escandaloso, mediático, porque su talento musical y la gran cantidad de composiciones que ha esparcido durante estos años lo rebalsan, lo exceden. Su vida íntima ya no resulta atractiva: se admira su obra, con lo bueno y lo malo, con las miserias y los brillos. Ya pasaron los años 90 cuando se ocuparon de señalarlo, de observar qué hacía y dejaba de hacer con su cuerpo. Hoy Charly García está al borde de ser un mito en vida, una estatua de bronce que camina por la calle. ¿Qué ven las nuevas generaciones cuando miran a Charly García? Sergio Marchi, autor de No digas nada, una vida de Charly García, afirma: “Cuando yo nazco en el rock argentino, en 1977, él ya era un mito”. Sin embargo, ese que vio Marchi no es que el que vieron los adolescentes del 90 y de los primeros años del 2000. Según el periodista, ellos vieron a Say No More “que es la versión alucinada de García sobre sí mismo”. Ok, alucinada, pero igual posicionada en un pedestal. ¿Existe un momento específico en el cual Say No More conquistó los corazones de los jóvenes? Para Joaquín Vitola, cantante del grupo Indios, el día que García se tiró a la pileta desde un noveno piso fue un hito, fue la confirmación de que ese tipo era una leyenda. El viernes 3 de marzo de 2000, Say No More estaba muy aburrido en su Mendoza fatal, entonces dijo: “¿Qué me falta ahora? ¡Sólo aprender a volar!” y se tiró (¡Mirá pendejo se tiró por vos!). “Cuando saltó desde el 9º piso y sa- lió con vida, nadando, en esa pileta de dos metros, todos dijimos ‘Si no se murió ahí, ya no se muere más’. ¿Cómo puede seguir vivo ese cuerpo? Es algo para analizar. El tipo, por esas cosas es más que una leyenda”, opina Vitola. Pero los días de Say No More vieron su fin y alcanzaron su redención, nuevamente, en la Mendoza fatal. En junio de 2008 una nueva etapa de García aparecería para quienes recién arribaban al rock nacional, para quienes nacieron con el Pacto de Olivos y empezaron a hacer pogo con la 125. Ese año fue internado en un hospital de Mendoza y luego trasladado a Buenos Aires, donde inició un tratamiento de rehabilitación. Después de un año y dos meses de haber sido internado… reapareció. La cantante Rosario Ortega, que ha compartido canciones y escenarios en el último tiempo con García, considera que los recién llegados al rock ven “un clásico, una marca registrada, un pilar de la música nacional” Esa leyenda con marca registrada, ya despojada de toda “alucinación”, comenzó una prolija reinterpretación de su propia obra. Los discos que aparecieron con versiones de su repertorio luego de 2008 (El concierto subacuático en 2009 y 60x60 en 2012) mostraron la nueva etapa que le tocaría apreciar a la generación del Bicentenario. Una etapa en la que ya no importaría si García rompía todo, si estaba flaco o gordo, si se tiraba o no por vos. Volvamos con Ortega: “Lo que importa de Charly está en la obra, en cuando toca ‘Desarma y Sangra’ y se te eriza la piel. Lo demás que haga sirve para volver todo más excéntrico, pero Charly es su obra”. Lo que pesa es su música: más de 40 discos. “Ves todo lo que hizo y, en algún punto, lo tenés que tener como norte porque es un chabón que lo motorizó la música y sonar, todo el tiempo se ocupó de sonar”, reflexiona el cantante de Indios. “Ves que el loco está bien, acá entre nosotros, tocando todo su repertorio. ¿Qué más querés? ¿Qué más le querés exigir?”, se pregunta Facundo Iñigo, vocalista y guitarrista de Pilotos. Marchi recuerda cuando García dijo: “Todavía no me morí y ya me quieren hacer una estatua de bronce”. El sentimiento de García se materializó: el 5 de febrero de 2013 una estatua de bronce con su figura y la de Nito Mestre quedó instalada en Mar del Plata. Iñigo dice que “en este país te tenes que morir para que te reconozcan algo”, pero pareciera que García se salvó de la “Lo extensa y diversa que resulta la obra de García permite que las generaciones se mezclen y se unan” 19 de octubre de 2014 | año 5 | nº 288 5 norma. María Ezquiaga, cantante de Rosal, gran conocedora y admiradora de la obra de García (tanto le gusta que con grabador portátil grabó su propia versión de “Adela en el carrusel” apenas salió Parte de la religión), dice que “los homenajes son re importantes, porque en ellos los músicos reconocen que vienen de músicas anteriores y porque ese pasado nos une”. Lo extensa y diversa que resulta la obra de García permite que las generaciones se mezclen y se unan. Quizás él como sujeto no logre eso, pero su música permite que en un mismo escenario se encuentren artistas y bandas como Fito Páez y Pilotos: dos generaciones diferentes unidas, quizás, por el ángel vigía que descubre al ladrón o, quizás, por querer estar cerca de la revolución. Pubis angelical Por Martin Rodr[iguez Este es el aguante, considéralo Hoy, los jóvenes aliados se han convertido en la resistencia say no more, encargada de luchar contra los que prefieren las figuras importadas, de militar la música popular argentina y de resistir a las largas colas para comprar costosas entradas a festivales extranjeros (materializados en elegantes hipódromos). Luchan, como la chica que se robó al mundo, contra los que no se imaginan nada, contra los que se siguen llamando chabones, contra los que creen que todo tiempo pasado fue mejor y contra los que buscan detener el poder del idealismo. Los aliados tienen que enfrentarse a la polémica dicotomía de “el Charly de antes” y “el Charly de ahora”. La binariedad nunca fue muy útil: si no funcionó la Teoría de los Dos Demonios, menos la de los dos García. “Charly sigue igual porque lo escuchás hablar ahora y dice unas cosas tan lúcidas y con un humor crítico tremendo, manteniendo una coherencia con las ideas que pensó siempre”, afirma Tomás Vilche, director de Mandarinas Records, guitarrista y cantante de Los Bluyines y La Patrulla Espacial. Al momento de hablar “del antes” y “del ahora”, María Ezquiaga dice que “hay que tener presente la frase “las comparaciones son odiosas”, y además reflexiona: “A veces se lo pone en un lugar donde se prioriza la idea de que es un genio, como si por ser eso no hubiese tenido un problema con las drogas. Eso me parece nocivo para él y para todos ¿Cuánto tiempo se puede aguantar tanta autodestrucción?”. “Charly está igual porque sigue siendo una persona que no para de crear, por ejemplo, ahora está en su casa con miles de iPads haciendo música todo el tiempo”, cuenta Ro- sario Ortega. ¿Es posible que la gente cambie? Para Iñigo no: “La gente no cambia, cambian los hábitos”. Ok, ¿Es posible que García cambie? Mientras no destruya sus ganas de crear y la obra ya creada no es posible que cambie. Ni si quiera Say No More pudo destruirla al “copiarse a sí mismo” (como ciertos periodistas “gorditos” creyeron), porque solo alteró y hasta, en cierto punto, liberó la obra de García: en Say no more Charly hizo, deshizo, mezcló, armó y desarmó como quiso, pero nunca destruyó nada. Los aliados deben resistir a la “muerte” que algunos quieren sentenciarle a García, como hizo cierto sector del rock chabón en los 90. Pero el aliado ya está preparado para la acérrima defensa: ha aguantado de todo, hasta los “manoseos” mediáticos que hicieron con Say No More durante el menemismo. “En los 90 se lo tomó a Charly para decir ‘miren eso le va a pasar a los rockeros’, lo usaron para estigmatizar a un tipo de gente. ¡Como a Maradona cuando lo sacaron de la cancha de la mano para hacerle el antidoping!”, afirma Vilche. Charly García, al igual que Maradona, es alguien que despierta pasiones: amor y odio. El aliado se enojó con García cuando la autodestrucción de su cuerpo ya era casi total. Porque lo amaba no lo podía ver así y por verlo así lo odió. Le dijo: “Charly: te amo, te odio, dame más.” Pero para que García diera más tuvieron que perdonarlo. Por suerte el corazón es blando, el corazón perdona. Las nuevas generaciones tuvieron que perdonar su caos, sus guitarras rotas y sus movimientos aletargados que permitieron el “dame “En los 90 se lo tomó a Charly para decir ‘miren eso le va a pasar a los rockeros’, lo usaron para estigmatizar a un tipo de gente. ¡Como a Maradona cuando lo sacaron de la cancha de la mano para hacerle el antidoping!” más”. Con respecto al perdón Vitola dice: “Se presenta un dilema en el que a Charly lo perdonamos todo o le decimos ‘che, pará, te ponemos límites y nos limitamos nosotros a escuchar una parte de tu música’. Ni ahí, te banco en todas, escucho toda tu obra y venite con todas tus mierdas y toda tu belleza”. Es larga la carretera cuando uno mira atrás y aunque esa carretera esté llena de “mi capricho es ley” y de excesos, también está llena de música maravillosa que ha logrado que las nuevas generaciones la escuchen dejando de lado la superficialidad de su vida privada/pública. Los aliados de hoy lo escuchan para luego querer abrazarse y fundirse en su música cuando están mal, cuando están solos, cuando ya están casados de llorar. ¿Cuántas veces tendré que morir para ser siempre yo? Bailen las viudas, vuelen los velos al infinito, caigan las balas sanas aquí que las otras se harán grito porque García cada vez que muera seguirá siendo siempre él. No importa en qué envase venga después de cada muerte, si es gordito o raquítico, porque García supo crear, como ningún otro artista, una obra única, que ya hoy lo hace trascender por siempre. Su producción es tan extensa y prolífica que pueda ser actual en todo momento y que, incluso, sirve para ser el espejo de este país porque a través de ella contó la Argentina como nadie. Hoy las nuevas olas lo miran y toman sus canciones para comprender cómo se construyó parte del rock del país junto con sus procesos políticos y sociales en los cuales el trabalenguas traba lenguas y el asesino te asesina. Para las nuevas generaciones, say no more es parte de su religión. X Una silueta negra con un corazón blanco en las calles de Nueva York con la leyenda Modern Clix vista durante su temporada en el paraíso: García y su novia brasileña en casa de Pedro Aznar, compra de instrumentos, chucherías, discos, y grabación del mejor disco. Una silueta negra con un corazón blanco: Clics modernos por las disquerías de Buenos Aires. “No era Lennon ni Rucci” dice el mejor verso de ese mejor disco, en la canción agridulce, “Transas”, donde refina su voz: “él se cansó de hacer canciones de protesta”. Siluetas negras neoyorquinas en las que García vio la referencia rupestre de la Buenos Aires en deshielo de los primeros 80: las siluetas negras de los desaparecidos en las calles porteñas. No era Lennon ni Rucci. García ES el pop. García es Warhol, es Lennon, es Rucci. Si el epíteto del “rock nacional” a Charly le sonaba a “el rock nació mal”, es porque para él su afiliación al rock, en primer instancia, lo era a un internacionalismo extremo. Sin embargo… ¿qué es lo que hace a toda la obra de García tan argentina en un sentido casi inefable? Digámoslo así: la argentinidad de su lírica, de su narrativa, es una sucesión de rechazos contra todas las instituciones de este Estado-Nación, tal como las ejecutó acaso en su disco más “serio”: en Instituciones, pero también, en ese abrazo del oso de sus metáforas, en sus triquiñuelas cínicas entre la Coca Cola, las canciones de protesta, su obsesiva importación de instrumentos modernos, sus alianzas culturales (con Mercedes Sosa, con Fito Páez, con Menem) toda una forma única de expresión del malestar en la cultura nacional. Como el que sabe meter la mano en la rejilla hasta encontrar el rollo de pelo pardo, tocarlo, tocar las notas, esas notas, el fondo de olla que podría expresar “¡eso que somos!”, y pegar el raje de ahí, con la elegancia de un traje blanco y una galera, porque el argentino que huye sirve para todas las batallas del sentido que nos quedan. La gran pregunta que la obra de García recorre es la pregunta moral del rock: ¿cómo sacarse a la nación de encima? Tuvo una respuesta cheta, puso la palabra “grasa” en el centro del rock, en plena dictadura, cuando le cantó a ese modelo de Fiebre de Sábado por la Noche que era el modelo de una juventud pacificada (de casa al mercado, del mercado a casa). García percibió el vacío existencial que dejaba el fin del idealismo, el barrido de napalm en la selva de la juventud argentina, el fin de “una vida peligrosa”. Su mejor canción de siempre, la canción que -Spinetta dixit- hubieran querido componer Lennon & McCartney, era “Viernes 3 AM”, donde un hijo de la guerra o un hermano menor de la guerra lleva el caño a su sien. ¿Qué describe esa muerte? En un primer plano de sociología casi obvia: el drama de una sociedad en la que sólo se podía ver películas. ¿Y qué significa sólo ver películas? No poder protagonizar nada, ser el espectador excluyente de la aventura de los otros. Ese aspecto narrativo de García, de narrativa colectiva, con su burla intensa a la Argentina de Estado, un tic nervioso que está presente desde el primer disco, desde Vida de Sui Generis, aquel disco purísimo hecho íntegramente con los huesos de una adolescencia oprimida, colocó el lugar de clásico, de clásico en el sentido más trágico, de su obra. Charly García funda un rock nacional que se coloca cara a cara con el Estado. Por eso su canción más lograda en la primavera democrática es “Inconsciente colectivo”, y le valió la identificación con ese espíritu, con ese lugar común, como habitante foráneo del lugar común, lúcido, es decir: el que ve con extrañamiento lo que parece natural. García emite radiografías de lo público. Y no de cualquier espacio público: sino de ese desierto de sal pisado por las generaciones urbanas por las que suenan casi todas las campanas de la guerra moderna (colimba, guerrilla, guerra, militancia). Cuando vino el guarisover, cuando la guerra empezó a terminar, cuando la primavera democrática quemó sus flores (flores quemadas en los jardines de Campo de Mayo), hizo un disco sintomático. Lo coloco en un año: 1987. Lo coloco en un disco: Parte de la religión. Lo coloco en un verso: “no me banco las hormigas, por favor pasarme el raid”. Empezaba el rap de su cuerpo. Say no more. X 6 año 5 | nº 288 | 19 de octubre de 2014 nes de periodistas culturales? El periodismo de ahora, que no es nuevo, y que se realiza actualmente, me suena light. El periodismo que a mí me interesa predominantemente es el que contextualiza los hechos que registran. Un libro, un disco, una película, un concierto no ocurren en el vacío, ocurren en un contexto social. Y el público busca en el artista un testimonio. Y cuando llega el momento de reseñarlo, o de comunicárselo a alguien que no estuvo, no puede ponerse a mostrar todo lo que sabe. Es lo que hacen muchos periodistas hoy, son enciclopedistas. Saben en qué mes se publicó tal cosa, conocen la discografía completa del artista, se vieron todos los recitales y cuentan su experiencia personal, pero no la experiencia social del artista. Yo siento que eso es una carencia fundamental de este momento para mi estilo periodístico. Por eso pienso que hay un rasgo de levedad. Precisamente porque llevamos más de 30 años de democracia y ya no estamos en la resistencia cultural contra la dictadura. miguel Grinberg «Yo ya hice mi papel. Ahora sólo acompaño» Miguel Grinberg es una mixtura de poeta, periodista, actor clave de la contracultura argentina, traductor, orientador en meditación, referente del ámbito de la ecología social. Alrededor de esas labores, y desde los años 70, publicó más de veinte libros. Trabó amistad con artistas como Allen Ginsberg, Witold Gombrowicz o Henry Miller. Hoy, con 77 años, lanzó la quinta y definitiva edición del pionero Cómo vino la mano, publicó el diario personal de su estadía en Nueva York durante el trascendental año 1964, promete un libro de poesía inédito, organizará el premio “Mariposas de madera” y volvió a editar en forma de anuario su mítica revista Eco contemporáneo. Además, este miércoles, la Legislatura Porteña lo destacará por su labor en la cultura. Grinberg tiene más novedades pero, desde el bar La academia, asegura que eso será suficiente para la nota. Por Facundo Arroyo Acaba de salir la quinta edición de Como vino la mano (Gourmet Musical), su libro dedicado al registro de la primera época -fundacionaldel rock argentino… Se considera la definitiva. Las ediciones anteriores fueron engrosándose con diferentes materiales hasta que en un momento decidí parar. Esto no significa que abandone el rock. Leandro (Donozo, musicólogo y director de Editorial Gourmet musical) está preparando un libro con mis notas de La Opinión en el período de la dictadura. Te lo doy como primicia. Entre 1975 y 1981 yo fui secretario de redacción del diario La Opinión, dedicado a Cultura y Espectáculos. Y me enorgullezco de haberle quitado legitimidad al rock argentino en La Opinión durante la dictadura. Eso amerita un libro así que en este momento está en etapa de producción. acción de archivarlos y reservarlos fue sabia. ¿Dónde conservó ese material? Eventualmente, hay varios editores peleándose por otro libro. En la época de la democracia fui columnista de la revista Canta Rock y tengo la intención de recopilar eso en otro libro pero todavía no sé quién lo va a editar. Será al mejor postor. Ahora que Como vino la mano es un clásico, tengo demanda. Antes no tenía, las cosas están mejorando. Las carpetas donde yo guardaba los artículos están, pero como se han puesto amarillas, a raíz de la poca calidad que contiene el papel de diario, no daba para escanear. Era más el laburo de descifrar los jeroglíficos que daba por resultado esa acción que volver a tipearlos. Leandro también quiere re-editar un libro que sacó Emecé y ahora está agotado. Es sobre la contracultura argentina (La Generación "V". La insurrección contracultural de los años 60 -2004-). Ese libro no lo he comprometido con nadie porque él tiene una prioridad. Por supuesto la ¿Hay también otros nuevos ofrecimientos para su trabajo periodístico? La música rebelde, emparentada con la que está registrada en su libro, ¿se trasladó a otros ámbitos como la de la cancionística del Río de la Plata y la música urbana? Efectivamente. Yo siento que lo que pasa en el alma de la sociedad está siendo abordado por la mayoría de los músicos llamados cancionistas del Río de la Plata. Yo no los rotularía cantores de protesta. Los rotularía cantores de la vida. O cantoras, porque también hay varias chicas. Tienen un alto rigor poético. Gente como Gabo Ferro, Juan Ravioli, Pablo Dacal, Salvet están abordando algo que siempre abordó el rock en Argentina que es el difícil arte de ser joven en este país. Y desde el punto de vista conceptual están resistiendo la trivialización y la idolatría que son los dos grandes enemigos de cualquier sociedad. Por eso prologué el libro de Martín Graziano Cancionistas del Río de la Plata. Siguió la tradición de registro e hizo el Cómo vino la mano de esta época. Lo logró. ¿Cómo ve a las nuevas generacio- Yendo a la poesía, se acaba de publicar Memoria de los ritos paralelos por la editorial Caja Negra, ¿de qué versa? Está transcripto textualmente de las páginas originales. Es la parte de mis diarios de Nueva York que pude tipear porque me prestaron una máquina de escribir. Permanece inédita la primera parte de mi vida en esa ciudad, la tengo escrita en cuadernos. Los conservo pero no he tomado ninguna iniciativa. Sus publicaciones de poesía no se consiguen, ¿tiene pensado alguna nueva edición? Esos textos han cumplido 40 años, Martín Graziano me tiró una idea que me dejó pensando. La re-edición. Sería volver a editar esos tres libros de poesía. Es esa conversación la que me llevó a asumir la vigencia de esos textos. Evidencia existencial. ¿Hay otro libro de poesía inédita que está por salir? Hice una edición que me va a editar Leviatán dentro de quince días. Edición de varias etapas de mi poesía. Ahí cae todo: el rock, la guerra de Vietnam, la soledad, la metrópoli, la juventud. Se va a llamar Himno a Ximena, el poema más largo del libro. Cuando volvía en el tren de la frontera de Estados Unidos hacia México (Ciudad Juárez) lo escribí «El periodismo que a mí me interesa predominantemente es el que contextualiza los hechos que registran. Un libro, un disco, una película, un concierto no ocurren en el vacío, ocurren en un contexto social» 19 de octubre de 2014 | año 5 | nº 288 pensando en la bebita que había nacido de mis amigos de México, Ximena Mondragón. Apareció en una carpeta vieja, mágicamente. Fue en el desván de mi cuñada en Brasil (San Pablo, Campinas) donde viví muchos años. ¿Qué otros poemas tiene este nuevo libro? “Pequeño sendero” es un poema dedicado a la guerra de Vietnam por el cual recibí algunos premios. Terminé premiado al lado de Pablo Neruda. Hay otros poemas que quiero mucho y nunca salieron en libros. De todas las épocas. Alguno habrá salido en alguna revista literaria, pero muy pocos. Hay poemas de los últimos cinco años. Sigo escribiendo. Siento que estoy completando un mosaico de cuadraditos que quedaron vacíos de las muchas cosas que yo he hecho. No por hacerme el extraordinario sino porque soy extraordinario, no soy ordinario (risas). Tengo una gran capacidad de trabajo. Este miércoles la Legislatura porteña lo va a premiar, ¿finalmente le llega el reconocimiento? Tengo más premios en el exterior que en Argentina. Recién ahora descubrieron que existo y el miércoles me declaran Personalidad destacada de la Cultura de la Ciudad de Buenos Aires. Es un diploma, pensé que eran unos mangos para que me pueda jubilar, pero no. No involucra plata, ni la llave de oro de la ciudad. Es un premio que agradezco fervorosamente pero es un diploma más. Hay dos niveles de premio que tienden a confundirse. Uno es personalidad destacada que lo da la legislatura, los diputados en su conjunto. Y el otro es ciudadano ilustre que lo da el Jefe de Gobierno. El de Marcelo Tinelli salió desde la bancada del PRO. ¿Y el suyo quién lo promovió? No voy a las sesiones pero por el “comentario de pasillo” sé que me votaron por unanimidad, lo cual me enorgullece. Hay premios que se negocian, no fue este el caso. Es un orgullo porque entiendo que no soy una figura pública. La promoción fue por Aníbal Ibarra y por Pablo Bergel. No faltará el que diga que lo de Ibarra es para mejorar su imagen con el rock. Algunos tienen algún karma que pagar y él está pagando el suyo, está ahí porque la gente lo votó, contra eso mucho no se puede hacer. Yo no por eso voy a rechazar el premio, son dos cosas distintas. Hay una movida de choque cultural para ese día, ¿cierto? Me llegaron rumores que ese mismo día habrá una manifestación por la persecución a los centros culturales de la Ciudad. Lo cual me parece justo también. Es un buen momento por el quórum periodístico que habrá para hacer una manifestación. No la estoy organizando «No soy Néstor Kirchner pero estoy buscando una transversalidad conceptual entre los grupos que son alternativos. Si bien la contracultura tiene un matiz aislacionista estoy pensando que si esa gente interactuara entre sí, con mayor vigor, muchas cosas podrían cambiar en la ciudad de Buenos Aires» 7 yo (se ríe) pero sé que algo están preparando. ¿Algún consejo capaz que le dé? No sé, no sé. ¿Usted también está organizando la entrega de unos premios? Sí. Las mariposas de madera. Lo organizo con Rodolfo García y León Gieco. La entrega será en el Bar La Perla, nada de institucionalización. Serán veinte mariposas para veinte actores fundamentales de la época pionera del rock. Las mariposas son hermosas, las hizo Marité García. Otra de las nuevas noticias es el lanzamiento de su revista de los años sesenta, Eco contemporáneo. ¿Por qué vuelve? Es un anuario, está terminándose de escribir porque no está escrito por mí. Está editado por mí. Vuelve porque noto una carencia en la contracultura de Buenos Aires. Después de 32 años de democracia, muchos grupos de valor que existen no trascienden el ambiente en el cual se mueven. Como si todavía fuese riesgoso darse a conocer a un público mayor. Eso es el karma de la contracultura… Hasta cierto punto sí, pero eso no impide que se conozcan entre sí. Hay 25 grupos que tienen cuatro páginas de este anuario. Cada grupo edita esas cuatro páginas. Desde la Estación de deseo de Caballito, la Escuela de bio-danza de Buenos Aires, el arte lúdico de Mireya Baglietto, la Fundación espiritual de Argentina de Ludovica Squirru, la revista Hecho en Buenos Aires, Luz de Luna, el restaurante Krishna. Es decir, cuentan sus historias y la revista se venderá en sus lugares de distribución para que los usuarios, clientes, seguidores, conozcan las otras experiencias. Hospital Durand: alta complejidad Por Romina Sánchez Una “La semana pasada, unos 50 pacientes se quedaron sin atención en el servicio de cardiocirugías porque no hay médicos, ya que el Gobierno de la Ciudad tiene una política sistemática de no llevar adelante nombramientos para el sector. Este es un problema de todo el año, pero con años de arrastre. No nos quedó otra que tomar esta medida, suspender las intervenciones, dada esta situación que afecta en primer lugar a las personas que necesitan atención pero también a los trabajadores. Así, nuestra estabilidad laboral está puesta en duda”, explica, algo contrariado, Mario Acosta, enfermero del Hospital Durand. Y abunda Acosta, sobre una problemática que, de tanta historia a cuestas, ya se naturaliza: “Siempre intentaron cerrar el servicio. De hecho, no figura en el organigrama del hospital y eso imposibilita los nombramientos. En el servicio de cirugías cardiovasculares, los enfermeros hacemos de administrativos también. Y no solo eso. En cuanto a los recursos, podemos decir que los aparatos, en su mayoría, son alquilados y obsoletos”. La cuestión de la falta de nombramientos, expone Acosta, lleva a que los fines de semana no haya profesionales suficientes para cuidar de los pacientes que, una vez operados, quedan internados en la sala de recuperación. “Ahí, que es un sector de alta complejidad, precisamos cardiólogos y terapistas, y no los tenemos. Muchos renunciaron y, por esta decisión del GCBA, sus cargos no fueron cubiertos. Y los que están trabajando, se encuentran en un cuadro de precarización laboral, en negro, desempeñándose con una ‘ficha prestada’. Muchos cirujanos, después de intervenciones de 5 o 6 horas, se quedan para cubrir todo el trabajo que hay que hacer. Pero, aun así, no alcanza. La situación se «Noto una carencia en la contracultura de Buenos Aires. Después de 32 años de democracia, muchos grupos de valor que existen no trascienden el ambiente en el cual se mueven. Como si todavía fuese riesgoso darse a conocer a un público mayor» Es decir que también pensó metodología. No soy Néstor Kirchner pero estoy buscando una transversalidad conceptual entre los grupos que son alternativos. Si bien la contracultura tiene un matiz aislacionista como decís vos, en este caso particular estoy pensando que si esa gente interactuara entre sí, con mayor vigor, muchas cosas podrían cambiar en la ciudad de Buenos Aires. Llegarían a un público que está necesitando nuevas voces. Por eso la tapa lleva el título de “Otras voces”. Se va a financiar colectivamente por Panal de ideas. ¿De alguna manera es un gesto contracultural de estos tiempos? El método de la filantropía que se canaliza a través de internet. El más conocido es Idea.me, donde originalmente pensábamos radicarlo, pero apareció este que es un poco menos ampuloso. Es la venta anticipada. Se garantiza la impresión y después con los 50 ejemplares que cada grupo venderá en el circuito de su influencia se podrá pagarle a la imprenta. Si comprobamos que la forma se justifica y salimos hechos, haremos un nuevo anuario de la misma manera. ¿Y usted qué piensa del financiamiento colectivo? Me parece una idea saludable, promisoria. Si Dacal y Sandra Vázquez lo hicieron de esta manera con sus propuestas ¿por qué Eco Contemporáneo no va a poder hacerlo? Es un gesto con las maneras actuales, es una revista que teóricamente cumplió su tarea en los años '60 pero que está viva. Porque su editor está vivo. Todo es posible. ¿Cuál es el medio más efectivo que circula en la actualidad? Sé que la televisión está en estado de descomposición. Sé que el negocio de los kioscos y la distribución de los diarios está en bancarrota. Sé que los centros culturales están bajo la ofensiva del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, sé que no abunda la plata, sé que la gente está muy distraída por la enorme oferta de espectáculos que hay, sé que en la universidad falta crítica por parte de los universitarios y las facultades tienen mucha responsabilidad en esto (es solo chicas y diplomas), entonces te encargo a vos esta misión y a todos los jóvenes de tu generación. Porque yo ya hice mi papel y ahora sólo acompaño. Hay que generar una espiritualidad visionaria y militante, ahí es donde trabajo actualmente. Por eso no se me ve en los lugares donde está todo el mundo, no porque me esté escondiendo sino porque estoy percutiendo este tambor. Grinberg el del tamborcito. ¿A qué le dice ni a palos? Te voy a frustrar. Daré vuelta el concepto. La consigna revolucionaria de este momento es definir qué queremos poner en el lugar de lo que no queremos. Para el no ya hay muchos candidatos, pero para el sí están faltando unos cuantos, y yo estoy de este lado. X falsa escuadra torna insostenible”, narra el enfermero, quien agrega que todos los años pelean desde el hospital por los nombramientos necesarios para un sector que tiene dos quirófanos y una sala de recuperación. Es más, el año pasado, los trabajadores del Hospital Durand acudieron a la Legislatura. Tanto ruido hicieron, que se terminó presentando un pedido de informes que hoy, a más de un año, sigue pululando en la comisión de Salud. El proyecto de resolución solicitaba al Poder Ejecutivo que informara, “a través de los organismos correspondientes y dentro de un plazo de treinta (30) días, la capacidad operativa potencial del área de Cirugía Cardiovascular” del Hospital Durand. Además, que especificara “el criterio de funcionamiento de las guardias en dicho servicio, con qué personal se cuenta; que detallara tareas y forma de pago de las mismas”, y si “se preveía llamado a concurso para nombramientos en este servicio, con fecha y características”. El Gobierno porteño no respondió el pedido. Los trabajadores del hospital general de agudos de Díaz Vélez al 5000 esperan, por su parte, que así oficie el estado porteño. “Siempre se desentendieron y vaciaron la salud pública”, dice Acosta. En tanto, en el servicio de cardiocirugías, aseguran que esta semana tratarán de cubrir, al menos, tres intervenciones. Es que los pacientes no pueden esperar. × año 5 | nº 288 | 19 de octubre de 2014 8 DIARIO DE Luna llena BICISENDA Por Ayelén Oliva desde La Paz Una vez más, Evo arrasó. El apoyo de más de la mitad de bolivianos a su gestión no sorprendió a nadie, ni siquiera al candidato de la segunda fuerza liderada por el empresario cementero Samuel Doria Medina, de Unidad Demócrata (UD), quien reconoció su derrota mucho antes de conocer los resultados oficiales y se conformó con ser el “fiscalizador” de la próxima gestión de Evo Morales. El domingo pasado, el Movimiento al Socialismo (MAS) demostró su capacidad de tejer una cadena de triunfos electorales ininterrumpidos desde el 2005, aunque no pudo escapar a la tendencia de los oficialismos regionales de dejar escapar 5 puntos en comparación con las elecciones pasadas. Ahora, cómo se explica que luego de 9 años de gestión el oficialismo haya podido mantener un holgado índice de adhesión a sus políticas. Para ensayar una respuesta, debemos tener en cuenta tres grandes aciertos del gobierno de Evo Morales. El primero, político, es que el MAS es el único partido desde el retorno a la democracia en Bolivia, en 1982, que ganó todas las elecciones presidenciales con mayoría absoluta en primera vuelta. Todos los presidentes que estuvieron antes de Evo llegaron al poder con tan sólo un tercio del apoyo electoral, es decir, un 70 por ciento de los bolivianos no había elegido a ese candidato como presidente. Hasta la sanción de la nueva Constitución, en 2009, en Bolivia no existía la segunda vuelta sino que los presidentes se definían en el Senado. Sin ir más lejos, los últimos dos presidentes anteriores a Evo -el dictador Banzer Suarez de Acción Democrática Nacionalista (ADN) y el liberal Sánchez de Lozada del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR)- asumieron con tan sólo el 22 por ciento del apoyo electoral, gracias una red de alianzas políticas tejidas durante más de 20 años entre estas dos grandes fuerzas políticas que se movían pendularmente en el Congreso para avalar las candidaturas de su “oponente”. El triunfo del MAS llegó para terminar con la “democracia pactada”, hija de los regímenes autoritarios de la última mitad del siglo pasado, sostenida en estos acuerdos tácitos (y a veces no tanto) entre el ADN de Banzer y el MNR de Sánchez de Lozada. El segundo acierto es económico. Bolivia tiene la fórmula del éxito, atípica para las economías regionales: crecimiento económico sin inflación. Según cifras del Ministerio de Economía, Bolivia liderará los índices regionales de crecimiento económico con una expansión del 5,5 por ciento del PBI (datos que también respalda la CEPAL e incluso el FMI) con una inflación de menos de 4 puntos, muy por debajo de los 5,5 puntos proyectados por el propio gobierno para este año. El tercer acierto es social. La reducción de los índices de pobreza es innegable. La inyección de programas sociales como el Renta Dignidad, el bono Juancito Pinto o el programa Juana Azurduy sumado a un incremento de las fuentes de empleo, redujo la pobreza en el período 2002-2013 en un 25 por ciento y la indigencia cayó 22 puntos. Sin embargo, los 18 puntos actuales de pobreza extrema se traducen en casi 2 millones de ciudadanos que continúan sin acceso a servicios básicos y se convierten en el desafío más urgente que deberá afrontar la próxima administración de Morales. De estos aciertos (y otros tantos), las elecciones del domingo pasado demostraron la capacidad del MAS de reacomodar sus fichas y ampliar sus zonas de influencia con el fin de conformar una verdadera fuerza de alcance nacional. “No hay más media luna, hay luna llena”, dijo Evo Morales hace una semana, mientras festejaba un nuevo triunfo desde los balcones del Palacio Quemado, refiriéndose al viejo bloque opositor que se levantó contra su gobierno durante el primer mandato. Revirtió los números negativos en Pando, Tarija e incluso la presuntuosa Santa Cruz donde obtuvo el 48,5 por ciento frente a los 40 puntos de UD, mientras Beni quedó como el único departamento renegado y así logró equilibrar una balanza de poder desnivelada entre el occidente y el oriente boliviano. En definitiva, lo novedoso que se vio el domingo pasado, es la capacidad del MAS de recomponer el resquicio entre el gobierno y las autonomías departamentales en esa lucha por el sentido que es en parte la política, terminar con los fantasmas de la vieja medialuna boliviana y encontrar la unidad estatal en medio de la plurinacionalidad.x ¡AGEN La salidera DÁ! manda tu gacetilla a [email protected] DOMINGO JUEVES Rick Wakeman Ciertas Petunias Teatro Gran Rex - Av Corrientes 857 - 20 hs Sabemos que hay muchos niapaleros que añoran la música de los '70 y dicen conservadoramente que "antes la música, o al menos el rock, era mejor". Lo cierto es que Yes fue una banda emblemática para el rock en general y para el rock sinfónico en particular. El emblema de ese gran grupo fue, a nuestro humilde entender, el gran Rick Wakeman con toda su creatividad y velocidad digitadora en los teclados. Bueno, viene a Argentina. Imperdible. $250 la más barata. Ciudad Cultural Konex - Sarmiento 3131 - 21 hs Ciertas Petunias combina géneros aparentemente disímiles como el jazz y la cumbia, la guajira y el flamenco, el bolero y la chacarera, y los lleva a un lugar muy creativo usando el humor y la música como canal. En esta oportunidad despide "Flor de Viaje", su espectáculo multipremiado y reconocido. Las composiciones son de Jorge Maronna y Daniel Samper Pizano, más algunas propias de Ciertas Petunias. Entrada: $80 anticipadas $100 en puerta. MARTES Ciclo Señales Luminosas Correr Biblioteca Nacional - Agüero 2502 19 hs Llega el martes, día inocuo sino fuera porque Ni a Palos siempre tiene una propuesta piola para salir. El preestreno de Correr, film de Zaida de Pedro, es la interesante película que nos propone la Biblioteca Nacional en conjunto con La Nave de los Sueños, en este ciclo de cine independiente que podemos disfrutar todos los martes de octubre. La entrada es gratarola. VIERNES Fiesta Cafundó Aniversario Groove - Av Santa Fé 4389 - 23.45 hs Se viene una nueva edición de las ya clásicas Fiestas Cafundó que ponen a bailar a todo el mundo. Pocas cosas se ponen más a tono con el calor emergente de la primavera como esta fiesta de tambores y vientos. Como invitados estarán Los Charros, sumado a las visuales de Chula Vjs y Dj Pesadilla. En términos técnicos: alta fiestonga. Entradas anticipadas: $40, una ganga. LUNES Ciclo "Onda Vega" - Gillespie + hermanos Franov Malba - Av Figueroa Alcorta 3415 20 hs El ciclo “Onda Vega” homenajea la figura del particular artista Jorge de la Vega y específicamente su disco El gusanito en persona. En esta oportunidad, el concierto mezclado con exposición visual, tendrá a Gillespie como protagonista acompañado por los hermanos César y Alejandro Franov, que tocan una gran cantidad de instrumentos con una calidad excepcional. Entrada: $90. Staff Director Federico Scigliano Editor Diego Sanchez Redactores Pablo Móbili Martín Rodríguez Emiliano Flores Franco Dorio Julián Eyzaguirre Romina Sánchez Diseño original Nizo Mauas MIÉRCOLES Gyula Kosice Tecnópolis / Pabellón "Artec" - Villa Martelli - 12 a 20 hs Fundador de Arte Madí, Gyula Kosice es ante todo un poeta que se anima a rebasar, sin demasiadas vacilaciones, el marco de las convenciones consagradas por la academia e inclusive por las vanguardias que creen desafiar esas convenciones consagradas. Básicamente un flash. Flash que combina el arte con la tecnología y lo experimental. Qué mejor que en Tecnópolis. Sorprendete con este espectáculo y de paso dale una recorrida al predio que está buenísimo. Arte Diego Paladino Fotografía Patrick Haar Redacción: Amenabar 23 (C1426AYB) Ciudad Autónoma de Buenos Aires Contacto: [email protected] Departamento comercial: Tel.: 4776-1779 SÁBADO La Inapetencia Teatro "La Carbonera" - Balcarce 998 21 hs Por último, para bajar un poco de la fiesta de ayer, te proponemos una gran obra de teatro. La Inapetencia es la historia de una ama de casa conservadora, con los clásicos prejuicios morales sobre la familia, los hijos y el deseo, intentando no quedarse afuera de ciertas prácticas sexuales que supone habituales en su entorno más cercano integrado por su marido, su hijo y sus amigas. La obra es de Rafael Spregelburd y es inédita en nuestro país. Entrada: $100. Descuentos a estudiantes y jubilados. Internos: 156 y 159 Venta de ejemplares atrasados: Azopardo 455. Tel.: 4342-8476 Impresión: Editorial AMFIN S.A. Paseo Colón 1196. Ciudad Autónoma de Buenos Aires Distribución en Capital Federal y Gran Buenos Aires:New Site. Baigorri 103, CABA Distribución en el interior: Inter Rev S.R.L. Av. San Martín 3442. Caseros Pcia. de Buenos Aires
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