Consejería en ITS y VIH/SIDA Información básica Lic. Leonardo L. Chacón Asusta Dr. Armando Álvarez González Dra. Olenia Pesant Hernández Dra. Jacqueline Sánchez Fuentes © Ministerio de Salud Pública, 2004. MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Índice Introducción 5 Acercamiento conceptual y metodológico a la Consejería 7 Elementos básicos de la sexualidad 55 Clínica, tratamiento del VIH/SIDA y aspectos nutricionales 73 Las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) 91 3 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Introducción Los servicios de Consejería especializada en ITS y VIH/SIDA en nuestro país han funcionado de manera sistemática desde 1993, pero es a partir del año 1998 que se elabora un programa de capacitación y entrenamiento de consejeros. Este movimiento de formación de consejeros ha tenido como resultado la extensión de este tipo de servicio a todas las provincias del país. La labor de Consejería requiere de preparación continua, estudios autodidactos, supervisión y acompañamiento. Este material intenta satisfacer algunas de las necesidades de los consejeros, utilizándose como documento de referencia. Nuestro propósito es que sirva de bibliografía básica de los talleres de Consejería y material de consulta de los consejeros formados. El mismo consta de cuatro partes: - Aspectos metodológicos de la Consejería, que abordan los elementos básicos de la Consejería, tipos de Consejería, métodos y técnicas para el cambio de comportamiento, intervención en crisis, situaciones potencialmente estresantes de las PVVIH y situaciones difíciles de la Consejería. - Sexualidad, donde se hace referencia a los conceptos básicos de la sexualidad (sexo, identidad, orientación sexual, género e identidad de género), respuesta sexual humana, disfunciones sexuales y parafilias. - VIH/SIDA, en la cual se hace referencia a los aspectos clínicos de la infección por VIH, etapas de la infección, infecciones oportunistas, tratamientos ARV, adherencia a tratamientos y nutrición. - ITS, donde se abordan los síntomas y signos de las principales infecciones, agentes causales, curso de la infección, exámenes diagnósticos y relación con el VIH/SIDA. Este manual está dirigido tanto a consejeros cara a cara como a operadores de servicios de Consejería telefónica. Se tratan los elementos de la comunicación y la Consejería cara a cara como elementos básicos y generales, y se particulariza en las especificidades de la Consejería telefónica. Esta diferenciación permite que los lectores no confundan lo específico de la comunicación telefónica con lo referido a la comunicación directa, cara a cara. También esta es la lógica de la secuencia de formación de los consejeros, en la 5 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS cual un consejero de un servicio de ayuda telefónica antes debió formarse como consejero cara a cara. La elaboración de este material estuvo a cargo de especialistas que se han capacitado y desempeñado como consejeros. Esperamos que sea de utilidad y que contribuya a elevar la calidad de los servicios brindados. 6 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Acercamiento conceptual y metodológico a la Consejería Por Lic. Leonardo L. Chacón Asusta La Consejería es la acepción con la que se está generalizando en nuestro medio el término Counselling. Este término expresa un concepto relativamente nuevo, para el cual no existe una palabra en nuestra lengua que recoja la riqueza que posee en el idioma inglés. Cuando hablamos de Consejería se debe estar alerta de no incurrir en los equívocos que su cercanía a la palabra consejo pueda introducir en nuestro proceder profesional. La Consejería, tal y como se debe entender para que sea eficaz, es una forma profesional peculiar de prestar ayuda. Es un diálogo mediante el cual el usuario puede explorar sus sentimientos, expresar sus miedos y temores, y además conocer a qué se va enfrentar y qué situaciones difíciles deberá superar; para lo cual recibirá la información necesaria sobre su situación, de manera clara y precisa, de modo que le sirva para elaborar alternativas de comportamiento. La Consejería es una herramienta de comunicación por excelencia, una relación de ayuda que pretende implicar al individuo, a partir de sus propias necesidades y emociones. El consejero favorece que el usuario aprenda a tomar decisiones responsables sobre su propio comportamiento. La situación de cada persona es particular y por lo tanto el usuario requiere de la información pertinente a su caso concreto y todo lo general que sabemos al respecto. Los consejeros deben de asegurarse de comprender las especificidades de la persona que le solicita ayuda, porque lo adecuado para alguien puede ser muy perjudicial para otro, por lo que no existen recetas, ni consejos estereotipados ni estándares a seguir. La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que la Consejería es la técnica por excelencia para enfrentar la problemática del VIH/SIDA, por sus grandes potencialidades como medio de proveer apoyo personal y las posibilidades que ofrece para la modificación del comportamiento. El resto de las infecciones de transmisión sexual tiene muchos elementos comunes con el VIH/SIDA por lo que este tipo de servicios se han estado extendiendo a ellas también, de manera paulatina. 7 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Mientras mayor alcance tiene una técnica educativa, en cuanto al número de personas a las que puede llegar (como es el caso de los medios masivos de comunicación), menos eficaz es en cuanto a la cantidad de personas en las que puede influir eficientemente para lograr el cambio de comportamiento, precisamente por lo poco personalizada que suele llegar la información para acceder a grandes grupos. La proporción se da también en sentido inverso, mientras menos alcance tiene una técnica, por el hecho de trabajar con un menor número de personas, más posibilidades tiene de acceder al cambio de comportamiento. La Consejería es una técnica de poco alcance pero de muchas posibilidades de incidencia, eficaz en el cambio de comportamiento. Objetivos de la Consejería Mediante la Consejería se puede prevenir la propagación del VIH/SIDA y las ITS (a través de la promoción de cambios en el comportamiento sexual, el aumento de la información, de la capacidad para generar alternativas y la percepción de autoeficacia) y proveer de apoyo psicosocial a las personas afectadas por el VIH/SIDA y las ITS (que implica el apoyo emocional, el fortalecimiento de las redes de apoyo social, el mejoramiento de las habilidades para la comunicación interpersonal). Las personas afectadas por las ITS y el VIH/SIDA no son sólo las personas infectadas o en riesgo de adquirir alguna de estas infecciones sino que estos términos contemplan también a amigos, familiares, compañeros de trabajo de personas infectadas y trabajadores de salud involucrados en la prevención de las ITS y el VIH/SIDA o en servicios asistenciales. En su enunciamiento estos objetivos pueden parecer sencillos, sin embargo, para su consecución se requiere de realizar intervenciones en el mundo íntimo del individuo, de la pareja y hasta de la familia. Por otra parte, el comportamiento de un individuo no depende totalmente de sí mismo sino que está sometido a las influencias del micromedio en el que se desarrolla (las normas grupales, modos de vida, representaciones sociales, tipo y estilo de la comunicación interpersonal, la relación de pareja) y las condiciones del contexto macrosocial (las condiciones de vida, las costumbres, la cultura del país o región, las políticas sociales). Por tanto, la labor de Consejería requiere del uso intencional y racional de técnicas que promuevan la asunción de la responsabilidad en el autocuidado y la modificación de comportamientos sexuales de riesgo, y permitan brindar contención emocional, teniendo en cuenta que los beneficiarios del servicio son sujetos con una determinada historia, insertos en un contexto sociocultural concreto, que los determina. La contención emocional se refiere al control que puede alcanzar un sujeto de su estado emocional para lo cual son necesarias la expresión emocional, la catársis, y nunca la represión de los sentimientos y afectos. 8 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS ¿Por qué nos referimos a las personas que asisten a los servicios de Consejería como usuarios y no como pacientes? En nuestra definición, los términos usuario y paciente son antónimos. Nos referimos a usuario (o demandante del servicio) como una persona responsable de su salud, capaz de ser activo en su autocuidado, de comprender las dimensiones de los problemas que lo amenazan y tomar las medidas más convenientes para enfrentar dichos problemas. Capaz de tomar decisiones sobre sí mismo y su futuro, optar por lo que para él representa bienestar. El usuario requiere de un profesional que lo oriente, que le ayude a comprender la magnitud de la situación-problema, que confíe en sus capacidades, que le informe e intervenga respetando sus decisiones, sin imposiciones. Mientras que paciente se refiere a una persona pasiva, con tendencia a la inactividad, incapaz de tomar decisiones por sí misma, con incapacidad para comprender la naturaleza de los problemas que lo afectan ni con recursos para tomar las decisiones precisas. Alguien que requiere que le digan qué hacer, cuándo y cómo. El modelo tradicional de ayuda en salud se refiere al vínculo entre un profesional y un paciente. Es un modelo autoritario, que tiende a la estandarización, sin plantearse la necesidad de personalización de los problemas de salud. En este modelo, el profesional de salud (médico, enfermero, psicólogo, etc.) le dice al paciente lo que debe hacer y la manera más conveniente de llevarlo a cabo. Sin embargo, un problema común en el medio sanitario es la poca adherencia a las recomendaciones médicas o la manifestación de resistencias para seguir dichas recomendaciones al pie de la letra. Un modelo más personalizado, donde el individuo se involucre, participando en la determinación de las pautas a seguir, permite que se genere un mayor compromiso y, por tanto, adherencia. Además, permite que la persona aprenda sobre la situación-problema, interiorice los factores que la desencadenaron y generalice los cambios a otras áreas de la vida con aspectos comunes, es decir, favorece el crecimiento personal. Para poder implementar este modelo en la relación consejero-usuario, requerimos de asumir posturas más flexibles, con capacidad para adecuarse a cada situación personal, obviando los estereotipos. La propuesta metodológica de la Consejería se inspira en este modelo, y sólo en este contexto es aplicable y ofrece oportunidades para una intervención eficaz. Por otra parte, otra diferencia práctica entre los términos paciente-usuario se refiere a que hablamos de pacientes como personas que pade- 9 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS cen una situación o problema de salud, mientras que las personas que solicitan la ayuda de los consejeros no necesariamente son portadores de sintomatología o patologías, las personas pueden acudir por temores o dudas ante los riesgos asumidos, motivadas por la búsqueda de información o por la preocupación por un familiar o amigo. Definición de principios para el servicio En la medida que el consejero sustituya al usuario en su capacidad generadora, en la elaboración de alternativas y la elección del comportamiento a seguir se está en presencia de una Consejería inadecuada o poco efectiva. Su efectividad depende de la capacidad del consejero de involucrar activamente al usuario. Para ello es necesario tener presente que en una sesión de Consejería: - El recibimiento en la consulta es un elemento muy importante y el mismo tiene que ser adecuado, haciéndole sentir al usuario que el consejero está a su disposición, que el espacio de la Consejería es su espacio, y que este es un servicio creado para él o ella en el cual será respetado(a). - Se facilita que la otra persona exprese sus sentimientos y preocupaciones. - Se facilita que el usuario haga sus elecciones y tome decisiones responsables sobre su propio comportamiento. El consejero sólo será un propiciador. - Se facilita la comunicación interpersonal, el diálogo. Se debe intentar comprender todo lo que comunica el sujeto (tanto verbal como extraverbal) y usar los códigos propios del usuario para hacerse comprender con mayor facilidad. - Las personas que asisten deben ser ayudadas a identificar sus riesgos y a desarrollar un plan de prevención personal. - No se debe juzgar a las personas que acuden. Se debe crear un clima de seguridad, no amenazante, que no dé lugar a actitudes defensivas del individuo. - No se deben dar consejos, entendidos éstos como recomendaciones ya elaboradas por parte del especialista, sino que las soluciones deben ser encontradas en conjunto entre el usuario y el consejero. - Se ofrece información al individuo sobre el tema, en relación con su solicitud, pero no se limita sólo a eso, además pretende ayudar a la persona a que esta información lo movilice a encontrar una estrategia que le ayude a enfrentar esta situación en su vida. La información debe ser suficiente, veraz, clara y personalizada. - El consejero debe tener en cuenta todas las situaciones que pueden ser favorecedoras de estrés en los afectados para intentar paliarlas, en lo posible, con su intervención. - Se debe tener en cuenta la influencia de factores obstaculizadores del cambio de comportamiento, para prevenir su acción. 10 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS - Se deben tener presentes los límites de la Consejería, como un espacio de orientación e información sobre temas específicos (ITS-VIH/SIDA). Se debe disponer de un sistema de derivación para la búsqueda de ayuda sobre otros temas (disfunciones sexuales, problemas dermatológicos, ginecológicos, psicológicos, de adicciones, etc.). - Se debe realizar una adecuada despedida, donde el usuario se sienta invitado a un reencuentro y comprenda que puede regresar al servicio cuando lo considere necesario. La Consejería se entiende como un diálogo entre una persona capacitada para ayudar y una persona que necesita y demanda ayuda, por lo que es una relación de ayuda entre dos personas. El profesional no debe asumir una postura ortodoxa y debe evitar cualquier tipo de roce emocional con el usuario y su situación. Es importante que el consejero sea capaz de ponerse en el lugar del usuario y mostrarle empatía, por lo que es útil hacer contacto psicológico. El profesionalismo reside en el empleo adecuado de las técnicas para ayudarlo y no en el tono frío, distante, plagado de frases elaboradas y de difícil comprensión, ni en la indiferencia afectiva. La confidencialidad es un valor y un requerimiento imprescindible e ineludible de los servicios de Consejería; puede estar asociada al anonimato en la medida de lo posible, atendiendo a los objetivos del servicio y las necesidades de los usuarios. Estos son dos elementos claves para la efectividad de la intervención de ayuda La Consejería no se concibe como un proceso de una sola sesión. La mayoría de las personas requieren de más de un encuentro. Un tipo de Consejería puede abarcar más de una sesión de trabajo (Consejería pretest, postest, etc.). Para ello se debe pautar los objetivos alcanzables en cada sesión. Más adelante profundizaremos más sobre este tema. Elementos metodológicos La Consejería cuenta con un esquema metodológico sencillo pero sumamente efectivo. Dicho esquema es fácilmente adaptable a los diferentes tipos de Consejerías y responde su organización a las necesidades y expectativas del usuario, por lo que el orden de los pasos a seguir depende de cada situación concreta. Los elementos esenciales son: Explorar el contexto El consejero debe intentar comprender la situación del usuario, sus sentimientos, preocupaciones, recursos personales, habilidades; debe ser capaz de responderse a sí mismo quién es la persona que tiene delante, cómo se siente, qué necesita, qué le preocupa, qué conoce, qué no conoce, con qué recursos personológicos cuenta para enfrentar el problema, cómo ha enfrentado situaciones difíciles con anterioridad, con el apoyo de quiénes cuenta, etc. 11 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS La intervención del consejero depende de la información que pueda recoger sobre la situación que le plantea el usuario, de lo que le afecta y de la manera en que le afecta, por lo que cada intervención es específica. El consejero debe estimular el diálogo con el usuario, lograr que se sienta escuchado y comprendido, por lo que es importante establecer un vínculo empático, poniéndose en su lugar. Las preguntas deben ser abiertas, comenzar con aspectos generales para, poco a poco, ir profundizando en la temática que se explore; deben seguir un proceso lógico, secuencial, apegado a las necesidades del usuario, sin violentarlo. Ejemplo de pregunta abierta: “¿Cómo evitas las ITS?”, en lugar de: “¿Usas condón?” Deben evitarse las interrogaciones iniciadas con la pregunta por qué, que por lo general implican o son percibidas como cuestionadoras y agresivas. Ejemplo: “¿Qué te motivó a tener relaciones sin condón con esa persona?”, en lugar de: “¿Por qué no usaste condón con un desconocido?” En ocasiones no es necesario elaborar preguntas, puede ser suficiente repetir la última frase expresada por el usuario (respuesta reflejo). Ejemplo: Usuario: “No sé si sea capaz de decírselo todo.“ Consejero: “Decírselo todo...”, en lugar de: “¿Qué entiendes por todo? ¿Qué significa para ti decírselo todo?” También es útil recurrir a gestos o expresiones de interrogación como arquear las cejas o abrir bien los ojos. El silencio puede ser tan interrogador como una pregunta. Dé tiempo a que el usuario organice sus ideas y no lo presione para que hable. En muchas ocasiones las personas hablan para llenar una pausa incómoda en la conversación. Al esperar pacientemente a que la otra persona se prepare a hablar se puede incitarla al diálogo con mayor intensidad que con preguntas. Asuma una postura de escucha activa (inclinado hacia el usuario, mirándolo a la cara, asintiendo como muestra de su comprensión, concentrándose en lo que dice el usuario y tratando de esclarecer las dudas sobre lo que expresa el usuario). Mediante la escucha activa se logra que el usuario se sienta comprendido, permite que reflexione sobre lo que está comunicando y lo alienta para que se explique mejor. Se puede utilizar la paráfrasis, que es repetir con nuestras propias palabras las ideas expresadas por el usuario, para garantizar que se le ha comprendido cabalmente. No se debe expresar desacuerdo con lo relatado porque esto puede obstaculizar el diálogo. En otros pasos del proceso de Consejería (brindar información y promover alternativas de comportamientos) se puede corregir los conocimientos o cuestionar puntos de vistas o actitudes para el enfrentamiento a situaciones determinadas. 12 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS En el caso de una Consejería telefónica los elementos de escucha activa se refieren fundamentalmente a los aspectos relativos a la oralidad, es decir, a los elementos comunes con la Consejería cara a cara relativos a la palabra y al uso de los sonidos. Es útil sustituir las palabras por frases o sonidos que expresen nuestra atención a la comunicación del usuario. Ejemplos: “Sí..., por supuesto..., claro..., eh..., anjá…”, etc. Se debe tener presente que en la variante telefónica existe una dilatación de la percepción del tiempo transcurrido, el usuario puede pensar que la duración de la sesión de Consejería es mayor de lo que realmente es. Por este motivo, cuando el consejero se queda muy absorto en la conversación del usuario, guardando silencio, el usuario puede pensar que no le está escuchando o que no está el consejero en la línea, puesto que no lo está viendo; lo cual le genera al usuario mucha ansiedad y lo puede distraer del tema que viene tratando. Por eso se requiere de mostrarle presencia física y atención, mediante la escucha activa. Brindar apoyo emocional Una forma efectiva de brindar apoyo emocional es permitiendo que el usuario exprese sus emociones, que hable sobre lo que siente, lo que le preocupa. Es importante formularle preguntas sobre sus sentimientos, sobre el significado personal que puede tener para él o ella la situación que plantea. Muchas veces las personas carecen de los espacios necesarios para poder expresarse emocionalmente, donde puedan hablar sobre lo que sienten. No se deben cortar las expresiones de llanto a no ser que sean excesivas. La mayoría de las personas suele atemorizarse o no sabe cómo comportarse cuando alguien llora en su presencia. Se debe conservar la calma, ver el llanto como algo necesario y reparador para el usuario. Dígale que lo comprende, que él o ella se debe sentir muy mal, que cualquier persona en su situación también se sentiría mal; en fin, legitime sus sentimientos, hágalo sentir que lo comprende. De esta manera se puede hacer que las personas sepan que el consejero comprende por qué se sienten de determinada manera, aunque no sepa cómo se sienten exactamente, ya que esto es imposible. Nunca utilice frases para restar significado a lo que siente el usuario, tales como: “no te preocupes, eso es una bobería, tú veras que eso no tiene importancia, debes ser fuerte, los hombres no lloran”, etc. Estas frases hacen sentir a la persona que su expresión emocional es inadecuada, con lo que empeoramos su estado afectivo. El tono verbal utilizado debe ser suave, cálido, calmado, que denote estabilidad y control emocional. Reflejar sentimientos puede ser una técnica muy útil. Consiste en intentar identificar el o los sentimientos que está vivenciando el usuario en este momento. No se trata de realizar una interpretación, ni se debe ser totalmente preci13 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS so en la identificación del sentimiento. Lo importante es que el usuario se sienta invitado a analizar sus emociones. Ejemplo: Ante una persona que muestra signos de intranquilidad, respira de manera agitada, mueve constantemente las manos, el consejero puede decir: “Parece que está muy ansioso en estos momentos”, el usuario puede responder: “No, no es ansiedad, lo que pasa es que tengo miedo. Podría estar infectado y hasta dentro tres meses no lo sabré con certeza.” Puede ser útil brindarle un punto de vista optimista sobre la situación que relata, sin obviar lo negativo o difícil de lo que está comunicando, mostrándole también los aspectos positivos que le resultan poco evidentes. Es necesario evitar frases o palabras que denoten enjuiciamiento o crítica puesto que esto podría evitar la expresión emocional o generar cólera. En la variante de Consejería telefónica este es un aspecto muy importante a tener en cuenta, puesto que la accesibilidad del teléfono hace que las personas puedan recurrir a los consejeros cuando están atravesando una situación difícil o inmediatamente después. Por esta razón, no es raro encontrar a usuarios que se comunican en un estado emocional muy desfavorable para una reflexión sobre un problema de salud o para tomar decisiones. Se debe emplear las mismas técnicas de la Consejería cara a cara. El hecho de estar acompañado en una situación tan tensa le permite al usuario recuperarse más rápidamente. Se debe insistir en que el consejero estará en la línea el tiempo que necesite. El apoyo emocional se puede expresar también mediante el lenguaje extraverbal, realizando ligeros contactos físicos con el usuario, dándole palmadas o simplemente presionando su brazo u hombro. Por supuesto, esta técnica sólo es aplicable a la Consejería cara a cara. Brindar información La información que se le brinde al usuario debe ser elaborada en un lenguaje asequible, sin demasiado tecnicismo y de la manera más sencilla posible. Debe ser una información personalizada, lo que significa que a una persona se le brinda la información que necesita o que puede interiorizar en ese momento y no todo lo que el consejero sabe sobre el tema o todo lo que requiere la situación. La información brindada debe estar justificada por las necesidades y demandas del usuario y no elaborar frases estereotipadas para cualquier persona ante situaciones similares. No se debe sobrecargar al usuario con información puesto que se podría agobiar e incrementar su malestar emocional. Si es necesario, cite al usuario para un reencuentro donde sea posible y pertinente continuar profundizando sobre el tema. 14 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Mediante la exploración del contexto puede el consejero percatarse de los conocimientos que posee el usuario y de cuáles son sus necesidades de información. Se debe utilizar los mismos códigos del usuario, su manera de referirse al tema pero sin errores conceptuales ni simplificaciones excesivas. En la Consejería cara a cara el consejero puede auxiliarse de materiales impresos (plegables, folletos, etc.) o maquetas, hacer modelaje. En la variante telefónica se debe recurrir a la ejemplificación y al uso de analogías. Promover la elaboración de alternativas Cada situación conflictiva puede tener múltiples soluciones alternativas pero, muchas veces, la persona en conflicto puede ver pocas de ellas y de forma excluyente. La intervención de los consejeros va dirigida a que, mediante la información que se le brinda, el usuario busque otras alternativas de comportamiento que no percibía o que no las tenía en cuenta. Por otra parte, muchas veces los cambios a implementar son internos, subjetivos, vinculados a la actitud ante determinada situación que no tiene cambio esencial, pero con la que es posible lograr una convivencia que asegure el equilibrio emocional. No se debe decir lo que el usuario debe hacer, de qué manera debe comportarse y qué es lo mejor para su vida porque sólo la persona puede implementar los cambios pertinentes; por lo que los cambios no pueden ser impuestos sino motivados por la necesidad de mejora. Cualquier cambio implica un costo psicológico para el individuo, por lo que el usuario debe percibir un beneficio personal importante para proponérselo. Lo que puede ser conveniente para una persona no tiene el mismo significado para otra, por lo que no debe guiarse el consejero por lo que cree como lo más adecuado, si esto no ha sido validado por el propio usuario. La libertad para decidir favorece la asunción de la responsabilidad. Si la persona no se siente libre para escoger lo que considera como un beneficio, no se sentirá comprometida para mantener ese comportamiento. En última instancia si el cambio no es percibido como una necesidad, no se puede confiar en que será implementado puesto que el consejero no estará presente en las ocasiones donde deba ejecutarse, dado que muchas de las facetas de la vida sexual de una persona se manifiestan en privado, sólo en presencia de la o las parejas sexuales. Existen métodos y modelos para la promoción del cambio de comportamiento. En este material se puede disponer de dos, que aunque sencillos son altamente eficaces y oportunos de implementar15 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS se en las sesiones de Consejería. Nos referimos a la Elaboración de un plan de prevención personal y al Decálogo de cambio. También se dispone de información sobre el Modelo Transteórico del Cambio de Comportamiento. Tipos de Consejería y procedimientos La Consejería no debe concebirse como un evento de minutos de duración sino como un proceso que transcurre por diferentes etapas, en dependencia de las necesidades del usuario y la situación a enfrentar. Por eso cualquier tipo de Consejería a la que se haga referencia puede variar en duración de acuerdo con las personas involucradas. Muchas veces, es necesario plantearse el proceso teniendo en cuenta que se pueden articular varias sesiones. No debe esperarse que los objetivos de las sesiones se puedan identificar con demasiada antelación, pero sí se pueden plantear en el transcurso de una sesión los objetivos pendientes para la próxima y solicitar un reencuentro. Consejeria preprueba 1. Exploración del contexto Se deben clarificar: - Cuáles son las razones para hacerse la prueba. - Cuál es el riesgo potencial de haberse puesto en contacto con el VIH. - Cuáles son los conocimientos sobre las ITS y el VIH/SIDA (síntomas, evolución, agentes causales, consecuencias para la salud, medidas de prevención, pruebas de diagnóstico, etc). - Cuáles son sus principales necesidades y preocupaciones. - Cuál es la capacidad potencial de asimilación racional de la información que se brinda. 2. Ofrecer información Es importante brindar información básica sobre el VIH/SIDA: - Acerca de la prueba: período de ventana sensibilidad y poca especificidad del ELISA, confirmación con Western Blot, significado del resultado (positivo, negativo o indeterminado). - Acerca de la infección por VIH/SIDA: período de incubación, vías de transmisión y no transmisión, factores que aumentan vulnerabilidad a la infección, características biomédicas y tratamientos, educación para la prevención, reducción del riesgo (enseñar el uso del condón). 3. Exploración de las reacciones psicosociales potenciales si el resultado fuera positivo -Se debe explorar la posible reacción ante un resultado positivo al VIH: percepción de estar infectado, exploración de enfrentamiento ante situaciones difíciles anteriores, indagar sobre red de apoyo social y actividades diarias, indagar sobre preocupaciones ante posible resultado positivo. 16 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS 4. Disposición y consentimiento para la realización de la prueba Se debe contar con el consentimiento del usuario para hacerse la prueba, para ello es importante que el usuario conozca sobre: - Las particularidades de la entrega de resultados - Las garantías de confidencialidad. Consejería postprueba 1. Canalizar ansiedad durante la espera del resultado y brindar apoyo ante signos de ansiedad: ¿Cómo te has sentido desde la última vez que nos vimos? ¿Cómo te estás sintiendo ahora? 2. Recapitular y aclarar información básica, así como esclarecer dudas: ¿Qué recuerdas de lo que hablamos la vez anterior? ¿Qué has pensado sobre esto? ¿Sobre qué te gustaría tener más información? ¿Qué entiendes por período de ventan? Aludir al significado del resultado positivo y negativo (o indeterminado, si se adecua). 3. Entrega del resultado de manera objetiva y directa: deje que el usuario señale el momento oportuno para revelar los resultados, no lo apure ni retrase; dé el resultado en un tono directo y neutral; espere por si la persona tiene algo que decir antes de empezar a hablar y, si es necesario, indagar sobre sus sentimientos. 4. Permitir la expresión de sentimientos: Retome preocupaciones expresadas preprueba. Identifique y planifique en conjunto estrategias de adaptación. Si el resultado es positivo 1. Dar apoyo: palabras de aliento, sin lástima; no compasión, sí solidaridad, si es preciso utilizar ligeros contactos físicos en señal de apoyo; demostrar que el periodo de ajuste al resultado tiene una duración limitada; mensajes de controlabilidad. 2. Escuchar y empatizar: ambiente no amenazador legitimar sus respuestas y sentimientos. Ejemplo: Sé cómo te sientes. Sé que para ti debe ser muy difícil.” 3. Profundizar en información sobre VIH/SIDA: posible tiempo prolongado del período de incubación; autocuidados y cofactores (nutrición, descanso, ejercicios, evitar el alcohol, el tabaco, el estrés y la depresión y las medidas de higiene para evitar las infecciones mediante los alimentos, el agua, etc.); posibilidad de sobrevivientes de larga duración; actualidad y avances en tratamientos; medidas de prevención que debe tomar (para evitar las reinfecciones o la adquisición de otras infecciones de transmisión sexual). 4. Abordar el impacto en la sexualidad: situación de pareja; comunicación del diagnóstico a pareja estable u ocasional; canalizar preocupaciones sobre posibles disfunciones sexuales; profundizar en alternativas de prácticas sexuales de menor riesgo (condón y sexo seguro). 17 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS 5. Prevención de la propagación del VIH: favorecer la concientización de su responsabilidad en detener la propagación de la epidemia; ayudar a comprender la necesidad de identificar posibles contactos; necesidad de seguimiento serológico de la pareja; discusión de implicaciones del embarazo y el parto (si se ajusta). 6. Abordar estrategias de adaptación: favorecer red de apoyo psicosocial; favorecer empleo del tiempo libre; favorecer mantenimiento de actividades socialmente útiles y las cotidianas de la vida privada; convencer que se dispone de tiempo para hacer los cambios, prestando atención en la primera reconsulta a los mínimos indispensables; ayudar a elaborar estrategias de comunicación del diagnóstico a personas necesarias. 7. Seguimiento: ayudar a desarrollar un plan de conductas saludables; dar fecha para próxima sesión (más de una); dejar abierta posibilidad de volver antes, si es necesario; aplicar decálogo de cambio en las visitas de seguimiento. Si el resultado es negativo 1. Insistir en la posibilidad del periodo de ventana. 2. Indicar rechequeo en tres meses. 3. Desmitificar que un resultado negativo en una prueba de VIH es igual a vacuna. 4. Insistir en la responsabilidad con su propia salud, a partir de la información que posee. 5. Manejar compromiso de trasmitir a otros la información recibida. 6. Elaborar plan de prevención personal, para reducir los riesgos. 7. Diseñar plan de seguimiento y aplicar decálogo de cambio. 8. Mencionar que un resultado negativo no siempre significa que la pareja sexual no está infectada (desestimular las reacciones de euforia, cuestionándolas, para aumentar la necesidad de información). 9. Generar expectativas en cuanto a la necesidad de prevención y nuevas visitas. 10. Explicar las prácticas sexuales de riesgo, las de menor riesgo y sexo seguro. 11. Modelar la utilización del preservativo. Tanto los aspectos relevantes de la Consejería preprueba y como los de la postprueba expresados anteriormente están referidos a la temática del VIH/SIDA pero son perfectamente ajustables para lo relacionado con las ITS. El impacto emocional que tiene para algunas personas un posible diagnóstico de una ITS puede ser comparable con el del VIH a pesar de la significativa diferencia en la evolución clínica de estas infecciones. Consejería de información general 1. Explorar el contexto: - Identificar necesidades de información. - Determinar conocimientos previos sobre el tema. 18 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS - Constatar relación entre los temas de interés y la situación real del usuario (hasta qué punto es una simple curiosidad o es un problema que lo afecta personalmente). - Ayudar al usuario a identificar sus comportamientos de riesgos. - Explorar sus sentimientos en relación con el tema o situación. 2. A continuación la Consejería puede seguir un curso general que incluye: - Apoyo emocional. - Brindar información personalizada. - Corregir la información errada (sin mostrarnos superiores al usuario ni haciendo énfasis en su desconocimiento). - Aportar elementos novedosos sobre el tema (a partir de su situación particular). 3. Promover cambios de comportamiento: - Generar motivación para incorporar cambios de comportamientos (si el usuario, debido a nuestra actuación aumenta su percepción de riesgo puede ser que se proponga cambios de comportamiento). - Aplicar alguno de los métodos para el abordaje del cambio de comportamiento. O la Consejería puede variar hacia una Consejería de preprueba con la implementación de los puntos referidos anteriormente. Consejería de VIH y procreación Es necesario tener en cuenta que: 1. El deseo de tener hijos es una necesidad intensa en muchas personas, sobre todo en mujeres, muchas veces vinculado a la realización personal y al sentido de la vida. 2. La procreación puede ser fuente de conflictos en personas seropositivas: - Por el temor de infectar a la pareja o quedar infectado(a), en parejas serodiscordantes. - Por el riesgo para la salud de las mujeres seropositivas. - Por el temor de tener hijos infectados, atendiendo a las particularidades del SIDA pediátrico. - Por el temor de morir y dejar al hijo huérfano. - La probabilidad de tener hijos con VIH depende de si la madre esté infectada. 3. La mayoría de las madres seropositivas tienen hijos seronegativos (probabilidad que ha aumentado con el uso de inhibidores y la realización de cesáreas). Se debe utilizar los pasos metodológicos básicos de la Consejería. Es importante que en el proceso de Consejería participen ambos miembros de la pareja o las personas interesadas o afectadas; insistir con el usuario de que cuente con el consentimiento informado de las personas involucradas. 19 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Para ayudar en el proceso de toma de decisión las personas interesadas deben enfrentarse a las siguientes preguntas: - “¿Cuáles son sus razones para querer tener un hijo?” - Si son una pareja serodiscordante, “¿están dispuestos a correr el riesgo de infectar al(la) compañero(a) para poder tener el hijo(a) o quedar infectado(a)?” - Si la mujer es seropositiva, “¿están preparados para la posibilidad de tener un hijo infectado con el VIH?” - Si el embarazo afectara la salud de la madre, “¿aceptaría este riesgo?, ¿qué impacto tendría en la pareja y en los demás miembros de la familia?” - “¿Cómo cambiarían sus vidas si optaran por no tener hijos?” - “¿Quién cuidaría de su hijo si ellos enfermaran o murieran?” Muchas personas con VIH optan por tener hijos alentados por los avances en tratamientos y atención al embarazo de madres seropositivas, aun cuando están conscientes de los riesgos a los que se exponen. Es importante respetar las decisiones de los usuarios, brindar información veraz pero clarificando los riesgos de esta decisión para que se asuma con la responsabilidad y preparación que merece toda nueva vida engendrada. Impacto emocional del diagnóstico de VIH/SIDA Las personas al recibir el diagnóstico de VIH/SIDA suelen transitar por estados emocionales diferentes que se suceden en forma de etapas. Este proceso emocional es común en los momentos de duelos o de enfrentamientos a pérdidas. En este caso no se refiere sólo a las emociones generadas por la pérdida del estado “óptimo” de salud, sino también por las pérdidas colaterales que pueden acompañar al diagnóstico: pérdida del cariño de las personas significativas, del respeto de los familiares y amigos, del puesto de trabajo, de la autonomía, etc. Este tipo de proceso ha sido descrito por Elizabeth Kluber-Ross. No es exclusivo del VIH/SIDA sino que lo podemos identificar en las personas que reciben diagnóstico de enfermedades oncológicas, puesto que está asociado a la pérdida progresiva de la salud y al enfrentamiento inevitable a la muerte en un período de tiempo relativamente limitado. También se puede encontrar en padres al conocer la discapacidad de un hijo, ante la muerte de un familiar o amigo querido, la pérdida de objetos valiosos, etc. El SIDA en la actualidad es una enfermedad que compromete seriamente la salud, por lo que no es de extrañar que las personas infectadas con el VIH teman por el padecimiento de esta enfermedad y sientan la amenaza subjetiva de tener que enfrentar la muerte. Las etapas que conforman este proceso suelen nombrarse por los sentimientos o mecanismos que las caracterizan: negación, agresividad, negociación, depresión y aceptación. No son etapas que tie20 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS nen un orden inmutable sino que se suceden de manera particular en cada individuo; tampoco tienen un carácter unidireccional, se suceden y se retrocede, una persona puede haber superado una etapa y puede regresar a la misma. Una persona en etapa de aceptación puede volver a enfrentarse a la negación ante el impacto emocional de un nuevo evento altamente estresante. Las etapas están generadas por la reacción emocional del individuo ante el diagnóstico de VIH o el deterioro del estado de salud, por lo que requieren de acciones dirigidas a brindar apoyo emocional, que faciliten la expresión de los sentimientos en una relación donde los usuarios se sientan comprendidos y aceptados. El paso por estas etapas es una necesidad psicológica de adaptación emocional para manejar el estrés que generan estas situaciones, por lo que su duración es limitada pero no necesariamente corta. Es importante que los usuarios conozcan que es normal tener estos sentimientos y pensamientos, que es un momento superable, para lo cual requiere de tiempo. Ante el diagnóstico, las personas necesitan de un período de tiempo, variable para cada cual, para enfrentar de manera constructiva esta situación. Es un proceso que no debe apresurarse. Los consejeros pueden contribuir a que este período de tiempo, sin violentarlo, sea lo más corto posible y transcurra con el menor costo emocional. La posibilidad de que los usuarios reciban su diagnóstico en el marco de una situación de Consejería postprueba y que hayan sido beneficiados con sesiones de Consejería preprueba, contribuye a una mejor manejo del impacto emocional de un resultado positivo. Sin embargo, la Consejería preprueba no es suficiente para que las personas no requieran de ayuda en la contención de sus emociones ante el diagnóstico y un enfrentamiento constructivo a la infección. Para ello es importante que se conozca en qué consiste cada una de las etapas de la reacción emocional y se pueda esbozar, a grosso modo, acciones de intervención. Negación Suele ser la primera etapa. La persona se niega a aceptar el resultado de sus pruebas, piensa que existe alguna confusión o equivocación. Pide repetir los exámenes, puede desconfiar del procedimiento y la calidad de la atención recibida. Piensa que esto no le puede estar sucediendo realmente. Existe incapacidad para discutir con realismo la situación. Esta etapa se puede prolongar por varios meses y la persona negarse a aceptar las evidencias. Se siente aturdida o pasmada. Manifiesta deseos de aislarse. En ocasiones la apariencia física no se corresponde con la magnitud del problema a enfrentar (usa ropa de colores alegres, se maquilla y acicala, está animado y se comporta como si nada sucediera). Los consejeros no deben agredir al usuario por su desconfianza ni impacientarse por sus demandas para reiterar las pruebas. 21 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Deben comprender que es una situación muy difícil de manejar por el usuario y que no cuenta con recursos suficientes para enfrentarla. Es importante legitimar este estado de incredulidad y explorar las emociones, facilitando su expresión. Deje que el usuario hable, cuando esté listo para ello, no debe ser presionado. Acepte las señales de incapacidad para enfrentar la situación. Permita los cambios de ánimo y las ilusiones sobre cosas más felices e improbables. Se debe tener en cuenta la exploración de los temores asociados a la infección con VIH. Agresividad (cólera, ira o coraje) La persona comienza a aceptar que la situación le está sucediendo realmente a sí aunque no comprende el porqué le pasa a él o ella. Puede existir manifestación verbal y no verbal de ira, envidia y resentimiento. Puede sentirse culpable y dirigir la agresividad hacia sí mismo, puede llegar a acciones de físicas: “Si yo lo sabía, por qué me está pasando, me lo merezco”, etc. También puede dirigir su cólera hacia otras personas como la pareja o la persona con quien probablemente se infectó; o hacia sus amigos y familiares, por no haberlo alertado o apoyado; o hacia el personal de salud que da el diagnóstico o lo contactó como participante de una cadena epidemiológica. También puede dirigir su ira hacia Dios, el destino o cualquier otra representación de fuentes de protección que no cumplieron su función: “Es resultado de mi mala suerte”. Puede desestimar las intervenciones del consejero, incluso aquellas relacionadas con el cuidado de su salud, mostrarse molesto y ser agresivo ante las muestras de ayuda y comprensión; estas manifestaciones están más asociadas a la necesidad de ser tenido en cuenta, ser comprendido y constantemente ayudado. Expresiones de desamparo y desesperación. Los consejeros deben comprender que esta reacción puede enmascarar los temores y ansiedades del usuario, que no se debe responder de manera agresiva al usuario bajo ningún concepto y ante el temor de situaciones de agresividad física inminente, darle tiempo, no presionarlo para enfrentar la situación estresante. Es importante legitimar los sentimientos y mostrar comprensión. Minimizar los sentimientos de culpa, ante las dificultades de la mayoría de las personas para lograr implementar cambios de comportamientos y ante el involucramiento en prácticas sexuales de riesgo sin la intención de infectarse. Ayudarlo a reflexionar sobre lo difícil de precisar la fuente de infección cuando han existido varias relaciones sexuales de riesgo. Utilice un lenguaje sencillo y hable despacio para evitar malentendidos y molestias al usuario. Evite el contacto físico, ante la irritabilidad del usuario. Hay que tener en cuenta que aunque se utilicen técnicas reflexivas es imprescindible facilitar la expresión emocional. Negociación En esta etapa la aceptación es más marcada que en la anterior pero aún es un elemento muy íntimo, donde existe mayor compresión 22 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS racional pero insuficiente emocional. La persona comprende qué le sucede pero emocionalmente no puede procesar estos sentimientos. Existe una discordancia entre lo que se piensa y lo que se siente, fuente de otras ideas irracionales que ayudan a disminuir la ansiedad. El sujeto comienza a plantear pactos que puedan tener como resultado un cambio en su estado serológico. El individuo comienza a proponerse cambios en su forma de ser, se impone limitaciones a conductas que le resultaban placenteras y pudieran estar vinculadas a la infección (como las prácticas sexuales) a cambio de tener una prueba negativa. La persona le hace promesas a Dios, a los orishas u a otra deidad a cambio de su salud. Los consejeros deben ser comprensivos y nunca cuestionar estos pactos mediante calificativos de ridiculez, tontería, estupidez o ignorancia. Esta etapa suele ser de bastante corta duración puesto que el sujeto puede comprobar en poco tiempo lo inefectivo de la negociación. Hay que estar atentos a que las ofrendas que proponga el usuario no comprometan su salud ni la de otras personas. Es necesario legitimar los sentimientos del usuario e insistir que es una etapa común en muchas personas que atraviesan una situación similar. Depresión El sujeto suele sentirse muy deprimido luego de comprobar lo infructuoso de sus intentos de negociación, comienza a tener una comprensión emocional mayor de su situación lo que se manifiesta en una expresión anticipada del duelo. Puede tener expresiones muy significativas como las referidas a la despedida de personas queridas, la repartición de los objetos de valor sentimental y proponerse la resolución de los conflictos interpersonales pendientes. Aflicción, llanto, tristeza, hipoactividad, etc. Los consejeros deben facilitar la expresión de sus emociones, ayudarlo a resolver los asuntos pendientes y ponerlos en orden. Es importante cuidar de expresiones de despedida que puedan convertirse en pérdidas físicas o de objetos valiosos, que luego se vivencien como pérdida (repartir su ropa o ceder sus propiedades que posteriormente serán necesitadas). Es necesario que el usuario perciba que cuenta con un espacio para su expresión emocional y con personas que lo apoyan y ayudan. Emplee las técnicas de apoyo emocional, incluso aquellas que involucran contacto físico. No se deben utilizar frases superficiales de contención emocional o para dar ánimo y evitar las falsas promesas. Aceptación (resolución) Esta fase se caracteriza por el alivio emocional y la comprensión total de la situación. La persona se mantiene en una actitud de espera, con un nivel de ansiedad bajo, con cierta tensión. En un primer 23 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS momento de la etapa, la persona se muestra poco comunicativa, dedicándole mucho tiempo a la introspección, aunque puede estar muy dialogante con el consejero por quien se puede sentir comprendida. Está a la expectativa de un acontecimiento importante que debe ocurrirle y que es inevitable. En esta etapa el usuario está en mejores condiciones para la apropiación de información más profunda sobre la infección, puede asimilar mejor los conocimientos básicos y buscar aclaraciones para sus dudas. La persona continúa requiriendo de apoyo emocional. Puede demandar de mayor intercambio interpersonal con las personas más significativas, el consejero puede contribuir a la preparación del entorno familiar ante la solicitud del usuario. El usuario puede iniciarse en esta etapa y luego retroceder a alguna de las anteriores con lo que se retomaría lo recomendado. Particularidades de las ideas suicidas En la literatura sobre el diagnóstico de VIH se alude a la presencia e importancia de las ideas suicidas como señales oportunas de intentos suicidas. Aunque no se manifiestan en la mayoría de las personas diagnosticadas, o al menos no se concretan en intentos suicidas, creemos importante reflexionar sobre acciones de intervención que pueden realizar los consejeros. El consejero debe tener la capacidad de evaluar el riesgo potencial con respecto al intento suicida del usuario. Aunque muchos usuarios pueden manifestar ideas de poner fin a su vida o dejar de vivir, no en todos representan motivos reales sino una reacción ante una situación difícil de enfrentar. Los consejeros deben dilucidar la diferencia. La finalidad de la intervención ante ideas suicidas que pueden convertirse en comportamientos es la derivación a especialistas de salud mental. Los consejeros deben brindar elementos de apoyo emocional, de búsqueda de alternativa y preparar al usuario para la derivación. Nunca se debe optar por la derivación sin una preparación previa. Las ideas suicidas más preocupantes son aquellas que van acompañadas de: - Un plan para llevar a cabo la conducta suicida. - La existencia de los medios para llevar a cabo el plan de suicidio. - Una historia de intentos de suicidio. - La pérdida reciente de algo o alguien muy querido u otro evento traumático (los más críticos se asocian al diagnóstico en fase SIDA o la muerte a causa del SIDA de la pareja, etc.) Se ha demostrado que la idea suicida no puede ser implantada, por lo tanto no se debe tener miedo de hablar abiertamente sobre el tema. Pregunte directamente al usuario si piensa hacerse daño, esto le demostrará que ud está preocupado por él o ella y le brindará la oportunidad de hablar de sus sentimientos. Explore qué alternativas 24 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS ha valorado además de atentar contra su vida y trate de promover ambivalencia con respecto a la idea suicida. Utilice los elementos de Intervención en Crisis que se enuncian más adelante. Recomendaciones para algunas situaciones díficiles más comunes a enfrentar en la Consejería En nuestra práctica profesional se nos han presentado situaciones que resultan difíciles y no poco comunes, que además son altamente tensas para los consejeros. Se han podido elaborar algunas sugerencias prácticas para estas situaciones. Usuario que no habla Existen muchas razones que pueden generar un silencio excesivo (no tener clara la demanda que se va a plantear al consejero, dudas sobre las garantías de confidencialidad y anonimato del servicio, excesiva preocupación y estar emocionalmente muy afectado, vergüenza por lo que se va a plantear, entre otras). En la variante telefónica se debería agregar (curiosidad por el servicio, interés por comprobar si la divulgación recibida es cierta, haber establecido la llamada en un momento poco oportuno, sin la privacidad necesaria). Proceder recomendado - Darle tiempo. - Legitimizar lo difícil que es hablar sobre ciertos temas. - Invitarlo a jerarquizar las preocupaciones. - Recordar la confidencialidad del servicio, favorecer el anonimato. - Indagar si prefiere ser atendido por otro consejero. - Controlar nuestra ansiedad ante el silencio. Usuario que llora durante la sesión - No enjuiciar. - Dar tiempo a recuperación. - Mostrar empatía. - Esclarecer razones de la depresión. - Legitimar el estado de ánimo. - Ofrecer testimonio si existe la posibilidad (para las PVVIH que hayan estado entrenadas previamente, en el caso que se refiera a un diagnóstico positivo al VIH). - Se recomienda hacer preguntas cortas para detener el llanto si este es muy prologando y sin aparente recuperación. Comprometimiento afectivo y sobreimplicación del consejero con la problemática del usuario Es cuando los procesos transferenciales se han vuelto incontrolables para el consejero. El consejero proyecta sobre el usuario la satisfacción de necesidades afectivas con gran fuerza dinamizadora. Es cuando el consejero siente amor, odio, excesiva amistad o 25 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS antipatía inexplicable por el usuario. Puede ver en el usuario una posible pareja, un amigo necesario, o siente que el usuario le despierta sentimientos similares a los que vivencia por un familiar o alguien muy afín, con quien tiene conflictos sin resolver. - Asumir una actitud profesional. - Buscar ayuda especializada (el consejero posee situaciones no resueltas para las que necesita ayuda y que las está reflejando en la problemática del usuario). - Derivar a otro consejero. Tema difícil Se refiere a las situaciones en las que el consejero no dispone de la información necesaria para la demanda del usuario. Puede ser que el tema no se ajuste a las especificidades de la Consejería que se brinda (especializada en ITS y VIH/SIDA) o que se carezca de información actualizada. - Superación técnica. - Apoyo en otros especialistas. - Si no se tiene respuesta en ese momento, reconocerlo (el consejero no tiene que ser omnipotente ni omnisapiente), y quedar en dar respuesta en otro momento. Usuario que se niega a derivación El usuario considera que nadie más va a ser capaz de comprenderlo como lo ha hecho el consejero o que no puede volver a plantearle la misma situación a otro especialista. - Insistir y argumentar en la necesidad de atención especializada. - Convencer de lo oportuno de tratamiento temprano. - Dar elementos de confiabilidad de los especialistas a los que se deriva (siempre y cuando se tenga certeza de esto). - Darle tiempo y mantener seguimiento por Consejería. Impresiona que el usuario plantea un problema falso Se observa incoherencia en lo relatado por el usuario durante la exploración del contexto que hace sospechar que plantea un problema falso. Por ejemplo: habla de la situación-problema de un amigo pero con demasiada implicación emocional. En ocasiones tiene que ver con un posible diagnóstico de VIH. - Minuciosa exploración del contexto. - Evaluar correspondencia entre la dimensión del problema planteado y el estado emocional. - Brindar confianza. - Nunca se debe verbalizar la sospecha. - Ofrecer elementos ventajosos del programa (ante un posible diagnóstico de VIH). - Mostrar comprensión si se devela la simulación, no recriminar ni cuestionar. 26 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Valores diferentes a los del usuario La persona que se tiene enfrente posee valores éticos y morales diferentes a los del consejero; en ocasiones, totalmente contrarios. - Aceptar al usuario. - No criticar. - No transmitir rechazo. Muchas personas juntas en la consulta Se refiere cuando el usuario viene acompañado de otras personas. Es una situación peligrosa puesto que se debe mantener la confidencialidad con respecto a lo que se ha estado trabajando con el usuario y que puede ser fuente de conflictos familiares. Puede ser que los acompañantes vengan con sus propias demandas, rivalizando y exigiendo el espacio destinado al usuario. - Si la presencia de estas personas dificultan la expresión del usuario, deben abandonar el local. - Pedir y ofrecer información no confidencial frente a los acompañantes. - No descentralizar el problema hacia familiares y allegados, mantener el centro de la atención en el usuario. - Sugerir la asistencia de los acompañantes al servicio de Consejería en calidad de usuarios. Usuario exige definición de fidelidad de la pareja Puede ser bastante común que el usuario se sienta más preocupado por una posible infidelidad que por el padecimiento de una ITS o el VIH. - No tomar partido en cuanto a aseveración de infidelidad. - Conveniar siempre lo referido por el afectado, sin violar la ética profesional. - La dimensión del problema (el padecimiento de una ITS) requiere de ayuda mutua. - Existen ITS que pueden tener un período de incubación largo. En la Consejería telefónica es común también el acoso sexual al consejero El consejero recibe llamadas que parecen inocuas pero que paulatinamente adquieren un tono erótico o el usuario le solicita citas u otros tipos de propuestas con connotación sexual al consejero. - Bajo ninguna situación se debe agredir al usuario con frases ofensivas ni mostrarse los consejeros ofendidos. - Se le informa la finalidad del servicio y si en otra ocasión lo desea, puede repetir la llamada. - Se le recuerda que el servicio no está destinado a ese tipo de funciones por lo que se procederá a dar por terminada la llamada. - Se procede a interrumpir la comunicación. 27 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Situaciones potencialmente estresantes para los usuarios. Las demandas que se les presentan a los consejeros son muy diversas: desde preguntas de curiosidad general sobre las funciones de la Consejería y el desempeño de los consejeros; hasta la solicitud de ayuda para enfrentar una crisis psicológica o asesoría para la toma de decisiones. Aunque cada situación de Consejería es única y no se debe hacer generalizaciones superficiales ni crear patrones rígidos de intervención, existen elementos comunes en algunas de las problemáticas de los usuarios. Es importante conocer cuáles pueden ser estas situaciones ya que podríamos ayudar al usuario a identificarlas y prepararse previamente para su enfrentamiento. Podemos ayudarlo a prever los problemas y obstáculos que debe encarar en el futuro inmediato y a más mediato plazo. Se consideran estas situaciones como potencialmente estresantes porque ninguna de ellas, por sí misma, es causa de estrés o malestar psicológico. El estrés está dado por la interrelación entre las demandas de actuación que exige la situación y las consecuencias objetivas que de ella se derivan, por una parte; y la significación que esto tiene para el usuario y los recursos psicológicos con los que cuenta, por otra. Lo que para algunas personas puede ser muy doloroso o tensionante, para otras es algo sin mucha importancia o fácil de sobrellevar. Por ejemplo, el diagnóstico de blenorragia (gonorrea) en una persona puede generar vergüenza, temor al qué dirán, miedo por las consecuencias que puede provocar para la salud; sin embargo para otra puede significar un refuerzo para su autoestima, la persona puede sentirse orgullosa porque es una muestra de su desempeño sexual, de la precocidad sexual, etc. El impacto psíquico de la situación está determinado también por las características psicológicas del individuo, sus cualidades personológicas y sus habilidades. En la determinación del estrés también se debe tener presente el contexto o momento en que se manifiesta la situación estresante. Para una misma persona una situación puede generarle estrés o no en dependencia del momento en que se enfrente a la misma. Por ejemplo, la pérdida de la capacidad reproductiva a causa de una tumoración en una mujer joven, sin hijos y con aspiraciones de tenerlos puede tener una connotación más negativa que en otra mujer, que haya tenido los hijos que deseaba y no tenga en sus proyectos nuevas gestaciones. Si la enfermedad hubiese afectado a la joven después de tener a sus hijos, puede ser que esté en condiciones de enfrentar con más facilidad la pérdida de su capacidad reproductiva. 28 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS A continuación veremos algunas de estas situaciones Las acciones de control del Programa de prevención y control del VIH/SIDA Estas acciones traen consigo el involucramiento de otras personas (personal de salud) en el mundo privado de la persona afectada. Pueden comenzar por los mecanismos de citación, donde el personal de salud visita la vivienda o el centro de trabajo de alguien que haya sido dado como contacto sexual por una persona con VIH y se le solicita que colabore en la realización de exámenes diagnósticos. Para algunas personas esto es muy tensionante, por verse precisados a darles una explicación al respecto a sus familiares o compañeros de trabajo. Aunque el personal que realiza estas funciones recibe una capacitación especializada, teniendo en cuenta la necesidad de mantener la mayor confidencialidad y discreción, en ocasiones, es imposible no despertar sospechas en otras personas. Al recibir un diagnóstico de VIH, la persona pasa a un registro donde se le identifica como tal; se le realiza una entrevista epidemiológica donde se recogen datos sobre su vida íntima y su sexualidad, en la cual debe abordar elementos que podrían afectar sus relaciones familiares, de pareja y hasta laborales. Se debe informar al usuario sobre la necesidad de su colaboración para evitar la propagación de la infección mediante la ruptura de la cadena epidemiológica y de las garantías de confidencialidad y discreción que le ofrece el programa. Ante las dudas del cumplimiento de estas garantías podemos aludir a los derechos que tiene para hacerlas cumplir y las consecuencias que pueden tener para los médicos y enfermeros si no las respetan. Asistencia a Centros de diagnóstico y atención La necesidad de recibir ayuda especializada en centros específicos genera mucha tensión. El simple hecho de asistir puede revelar el diagnóstico del individuo. Algunas personas se niegan a solicitar ayuda a especialistas cuando esto significa concurrir a las consultas especializadas. Se debe confrontar al usuario con sus temores y actitudes de evitación, haciendo énfasis en las consecuencias que esto puede tener en el cuidado de su salud sino recibe la atención que necesita. También se debe contemplar que en estas instituciones asisten personas por diversas razones, que no tienen que ver con la infección por VIH o las ITS. 29 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Demora en el proceso de diagnóstico El tiempo de espera de un resultado de VIH es un período de mucha tensión emocional por todas las consecuencias que puede tener para una persona un resultado positivo, cuando se prolonga demasiado al usuario le puede embargar una intensa angustia, generada por la incertidumbre. En ocasiones, la angustia provocada por la incertidumbre puede ser más intensa que la certeza de un resultado positivo. Algunas personas se involucran continuamente en relaciones de mucho riesgo cuando su proceso de diagnóstico es muy retardado, por ejemplo, personas que reciben resultados de indeterminación y que han tenido reiteradas relaciones sexuales con personas con VIH, con la esperanza de recibir un diagnóstico definitivo. Es poco probable que podamos determinar cuántas personas se infectaron realmente durante este momento tan angustiante. Atender la incertidumbre y ayudar al usuario a manejarla sin pesimismo, son elementos esenciales de las intervenciones de los consejeros. En estos casos son muy necesarias las Consejerías de seguimiento. En algunas instituciones de salud los resultados de los exámenes se demoran más que en otras, se debe tener presente esta heterogeneidad para brindarle diferentes opciones. Algunos usuarios prefieren asistir a instituciones que le son muy distantes pero en las que obtienen los resultados más pronto, como por ejemplo: viajar de un municipio a la ciudad cabecera, al Centro Provincial de Higiene y Epidemiología (CPHE). Es importante explicarle al usuario las razones de esta demora y hacer énfasis en que aunque haya tenido prácticas sexuales de mucho riesgo cabe la posibilidad de no haberse infectado. Información pública acerca de las características biomédicas del SIDA La representación colectiva del SIDA como una enfermedad mortal e incurable, el estereotipo sobre la depauperación física de las personas infectadas, son algunos de los factores que pueden afectar a los usuarios. El consejero debe cuestionar los estereotipos sobre la infección, tener presente los cambios generados en la evolución clínica de la infección en la actualidad por el uso de las antirretrovirales y mantenerse actualizado sobre la disponibilidad de medicamentos en el país (en el año 2000 Cuba comenzó con la producción y distribución de inhibidores). Por otra parte se debe estar atento a que no se magnifiquen los beneficios de estos medicamentos, al extremo de considerarlos una especie de cura para el VIH. 30 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Activación de los conflictos en la imagen de sí mismo Algunos padecimientos asociados al VIH generan alteraciones en la imagen física del individuo, como también el uso de algunos inhibidores (medicamentos para el VIH). El consejero debe ayudar al usuario a identificar sus puntos fuertes con vista a aumentar su autoestima. Se debe tener en cuenta que algunas de estas alteraciones son temporales o reversibles. El usuario debe tener presente que existen males mayores. Un medicamento puede generar cambios no deseados en la imagen física pero puede ser muy necesario para limitar la replicación viral. Temores relacionados con la reacción de la familia El temor por la posible pérdida del apoyo de la familia, por la manera en que pueden reaccionar ante el diagnóstico, a las censuras al estilo de vida, las actitudes de rechazo y la culpabilización pueden crear un gran malestar psicológico, difícil de manejar. En el enfrentamiento del diagnóstico, los individuos con VIH van a requerir del apoyo de las personas que le son significativas afectivamente; de su comprensión y ayuda. El consejero puede contribuir a informar el diagnóstico a la familia ante la demanda del usuario, explorar los temores y evacuar sus dudas, facilitar la comunicación con el usuario y ayudarlos a abordar los temas difíciles. Podría ser útil una estrategia para la información del diagnóstico donde se tenga en cuenta la necesidad de informarlo y la capacidad de asimilarlo por parte del familiar. Algunos usuarios en busca de aceptación y apoyo o por dificultades para manejar sus temores, comienzan a comunicar su diagnóstico a todas las personas que lo rodean indiscriminadamente. Se debe intentar identificar a las personas que más pueden ayudarlo y que mejor pueden reaccionar para evitar mayores conflictos. Todo lo que el consejero comunique a un familiar sobre el usuario debe ser con su consentimiento. Preocupaciones relacionadas con las amistades y el círculo de relaciones sociales Similar a los temores a la reacción familiar y al modo de intervención en esta situación. Repercusión en la vida de pareja El diagnóstico de VIH puede tener diversos significados en la vida de una pareja. En algunas ocasiones puede verse asociado a la infidelidad de uno de sus miembros, a sentimientos de culpabilidad, a la necesidad de modificar los comportamientos sexuales (que podría ser visto por algunos de los miembros como la disminución 31 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS del erotismo en las prácticas sexuales habituales), al temor de infectar a la pareja y al replanteamiento de proyectos de paternidad o maternidad, entre otros. La variedad de significados genera diversos modos de intervención, en dependencia de las demandas, necesidades y recursos de la pareja. El consejero no debe brindar información tergiversada para evitar los posibles conflictos en la relación, pero no debe revelar lo que fue transmitido por un usuario en condición de confidencialidad. Debe evitar inmiscuirse en debates sobre la posible infidelidad, priorizando las ventajas que puede tener un enfrentamiento de la infección con apoyo de la pareja. La erotización de las prácticas sexuales de menos riesgo puede ayudar a enriquecer la vida sexual, a la vez que es un recurso para disminuir los temores de infectar y ser infectado durante la relación sexual. Prejuicios de los profesionales de la salud La necesidad de comprensión y de ayuda humanizada se ve limitada por los prejuicios y temores del personal de salud. El estigma social del SIDA puede afectar al personal de salud. Todo esto se puede manifestar en actitudes de rechazo y en la desatención profesional. Para una persona con VIH puede ser muy estresante informar de su diagnóstico al personal de salud cuando le solicita ayuda para ponerse una inyección, medirse la presión arterial, recibir asistencia estomatológica, etc. Enfrentamiento a otros entornos Algunos de los cambios que puede generar el diagnóstico de VIH se refieren a la inserción de los individuos diagnosticados en nuevos espacios (sanatorio, consulta especializada, Equipos de Ayuda Mutua); lo cual significa relacionarse con nuevas personas, regirse por nuevas normas. Esto puede ser muy estresante, sobre todo para las personas con características de personalidad con tendencia a la rigidez, a la introversión, a la poca sociabilidad y muy conservadores. Por otra parte, por la interacción en nuevos entornos, la PVVIH puede tener el temor de ser rechazado por las distintas personas que van conociendo su diagnóstico, lo cual es una de las razones fundamentales para evitar hablar abiertamente sobre esto. Los usuarios deben visualizar las ventajas e inconvenientes de la inserción en nuevos entornos y sobre la base de este análisis, tomar una decisión. Muchas veces es necesario realizar intentos de inserción antes de tomar una decisión definitiva, puesto que los temores pueden generar sobrevaloración de los inconvenientes en detrimento de las ventajas. 32 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Reajuste de las metas y cambio de hábitos Las limitaciones que puede imponer la infección por VIH provocan reajustes de planes y metas de las personas diagnosticadas: algunos relativos a cambios de puestos de trabajo, cambios de perfil laboral, restricciones para la ingestión de bebidas alcohólicas, la modificación de los hábitos alimentarios, el uso sistemático de condones, evitar la maternidad o paternidad ante el temor de infectar a la pareja o al posible hijo, etc. Se debe tener presente la influencia de los cofactores relacionados con el estilo de vida en la agudización de la infección. Los cambios deben partir de la propia persona con VIH y no deben ser impuestos. Es importante que el usuario disponga de información realista sobre los riesgos personales, para que pueda tomar decisiones responsables. Sistema de atención Algunos usuarios dudan de incorporarse a las variantes de atención de las PVVIH del Sistema Nacional de Salud (recibir la dieta alimentaria para PVVIH, asistir a algún tipo de consulta especializada o ingresar en el sanatorio) o de ser diagnosticados, por los costos que esto implican: Incorporarse a alguna de las variantes del sistema de atención a las PVVIH (sanatorial o ambulatorio) significa que otras personas no deseadas tengan información sobre el estatus serológico del usuario. El ingreso sanatorial y la participación en el curso de “Aprendiendo a vivir con VIH” son espacios donde la persona recién diagnosticada debe interactuar y convivir con otras personas con VIH, que pueden ser muy diferentes y con quienes se puede sentir extremadamente incómoda. También este momento significa una separación de los familiares y un distanciamiento del entorno laboral. Recibir un reforzamiento de la canasta de alimentación básica va acompañado de la posibilidad de identificación de su situación como seropositivo por los empleados de comercio de su zona de residencia y, por ende, con el riesgo de divulgarse en su barrio. El consejero puede ayudar al usuario a enfrentar estas situaciones si facilita que tome conciencia de los posibles inconvenientes previamente y haga un balance de costos y beneficios. El realizar este balance con antelación permite que el mismo no sea hecho bajo un estado emocional desfavorable para la reflexión y el análisis. Proyectos de maternidad y paternidad de la personas con VIH La posibilidad de darle cumplimiento a proyectos de vida concebidos antes de ser diagnosticados puede verse amenazada por la 33 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS infección por VIH. Esto es más característico de los planes de maternidad y paternidad. La concepción de una criatura puede estar relacionada con: - La posible infección con VIH de uno de los miembros de la pareja cuando se refiere a una pareja serodiscordante; - Con la posible reinfección por ambos miembros de la pareja cuando ambos son seropositivos, y las consecuencias que esto puede tener para su salud; - Con el embarazo de una mujer seropositiva y las posibles repercusiones que tiene el mismo en su salud; - Con la posibilidad de tener un niño infectado con VIH y el comportamiento diferenciado y grave del SIDA en los niños. Aparición de las primeras señales de enfermedades oportunistas Ante la aparición de los primeros signos y síntomas de enfermedades oportunistas muchas personas con VIH se sienten muy atemorizadas y suelen tener pensamientos pesimistas y sentimientos de depresión y angustia. Estas enfermedades pueden ser un indicador del comienzo de la claudicación del sistema inmunológico ante la replicación viral. El apoyo emocional de los consejeros, la información optimista sobre tratamientos y cobertura de salud, son acciones dirigidas a promover la necesidad de atención médica oportuna y mantener contacto ante la posibilidad de uso de tratamientos antirretrovirales. Los consejeros pueden favorecer y apoyar la adherencia a los tratamientos por parte de los usuarios. Problemas asociados a los tratamientos médicos La dosificación y el modo de administración de los medicamentos antirretrovirales requieren, en muchos casos, de cambios en los hábitos alimentarios y de descanso. Es necesario que los usuarios asuman estos cambios como una premisa para garantizar la efectividad de los tratamientos; los consejeros deben ayudar a los usuarios a implementarlos, teniendo en cuenta la flexibilidad con que se pueden asumir. Las molestias y los efectos secundarios de los medicamentos deben ser canalizados por los consejeros, sin minimizar su impacto en el estado emocional de los usuarios, pero valorando que pueden ser temporales, como parte de un proceso de adaptación. Ante la intolerancia es importante valorar nuevas variantes terapéuticas. Para las adecuaciones en los estilos de vida vinculados a los tratamientos y los conflictos relacionados con los trastornos de la imagen física, es importante valorar la derivación con especialistas de salud mental. 34 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Enfermedad y muerte de otros seropositivos Puede ser que los temores y las ideas irracionales que un usuario había superado vuelvan a manifestarse ante las vivencias generadas por la enfermedad y muerte de otras personas con VIH conocidas, sobre todo si estas personas están vinculadas a su cadena epidemiológica o comparten períodos similares de diagnóstico o infección. En primer lugar se debe brindar apoyo emocional y permitir la expresión libre de los sentimientos del usuario, insistiendo en explorar los miedos y temores. También hay que tener presente que cada organismo es específico y que no responden igualmente ante la infección. Es importante aprovechar este momento para pensar junto al usuario cómo sería su enfrentamiento de esta situación. El proceso de morir Es importante preparar al personal de salud y a los familiares y allegados que asumirán el cuidado de un paciente en fase terminal a que ayuden a la persona con VIH a transitar con el menor sufrimiento posible esta etapa de la enfermedad. No se le debe ocultar información, en la medida que su capacidad de asimilación lo permita. Se le debe ayudar a poner sus asuntos en orden y resolver los conflictos con las personas significativas que habían quedado pendientes. Los consejeros pueden asesorar a los familiares y brindarles apoyo emocional. También pueden contribuir a la elaboración del duelo ante la inmediata pérdida del ser querido. Primera ayuda psicologica para sobrepasar crisis En ocasiones, las demandas de los usuarios parten de situaciones conflictivas que son vivenciadas o se comportan como crisis, cuyo enfrentamiento requiere de ayuda especializada. La Primera Ayuda Psicológica es una variante metodológica para la resolución de estos conflictos o la intervención en crisis. Tiene como objetivo general restablecer el enfrentamiento inmediato, ayudando a la persona a tomar medidas concretas que contribuyan a superar la crisis. Es una intervención breve que está enmarcada en el presente del usuario, vivenciado como crítico. Esto orienta y pone límites. No se trata de resolver de inmediato el problema total, sino que se identifican las necesidades críticas y luego se realiza una referencia apropiada a otra persona o institución. Posiblemente una derivación a psicólogos clínicos o psiquiatras. Cinco componentes de la Primera Ayuda Psicológica 1. Hacer contacto psicológico: 35 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS - Invitar a hablar/comunicar interés. - Estar atentos a hechos y sentimientos. - Declaración de empatía. - Tocar físicamente. - Proporcionar control de calma. 2. Examinar las dimensiones del problema: - Es necesario indagar pasado inmediato, presente y futuro inmediato. Pasado: - Suceso precipitante: “¿Qué ocurrió que desencadenó la crisis?” - Fuerzas y debilidades. Presente: - Fuerzas y debilidades. - Recursos personales. - Recursos sociales, redes de apoyo (familiares, amigos o instituciones). - Cuánto afecta el problema. Futuro: - Decisiones inminentes (esta noche, próximos días/ semanas). Una táctica útil es formular preguntas abiertas finales como: “¿Qué sucedió recientemente que le hace las cosas difíciles ahora? Cuénteme más sobre lo que le está afectando recientemente.” Se pueden formular otras preguntas como quién, qué, dónde, por qué, cuándo y cómo, sin que parezcan amenazas, para obtener información sobre las dimensiones del problema. 3. Examinar las soluciones posibles: - Se deben identificar una o más soluciones a necesidades inmediatas o posteriores. - Se debe preguntar sobre algunas vías que ha tratado el usuario o que haya empleado en situaciones difíciles anteriores. Explorar los obstáculos encontrados. Una táctica del consejero puede consistir en conseguir que el usuario reconsidere una solución que haya sido probada sólo a la ligera o rechazada inmediatamente. 4. Ayudar a tomar una acción concreta: - Se pretende implementar soluciones inmediatas si se encuentran necesidades inmediatas. Se debe evaluar la necesidad de la intervención de tipo facilitadora o de tipo directiva: - Facilitadora: si la mortalidad es baja y el usuario se presenta a sí mismo como capaz de restablecer el enfrentamiento, el consejero consagra la energía en que el usuario tome la acción. Escuchar activamente, hasta sugerir estrategias de solución. - Directiva: si la mortalidad es alta o el usuario se declara incapaz de actuar en su propio beneficio. 36 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS La casi totalidad de las intervenciones de la Consejería Básica deben ser facilitadoras, y sólo en casos muy excepcionales, ser directivas. En particular tanto el VIH/SIDA como las infecciones de transmisión sexual provocan en algunos profesionales, la preocupación de “controlar” la situación ante la posibilidad de nuevas infecciones, pero realmente no es para nada imprescindible asumir una postura directiva para el logro de este propósito sino, todo lo contrario, mientras más se permita que el individuo asuma un papel activo, con una acción facilitadora del consejero, en cuanto a su modificación conductual, más favorables serán los resultados que se obtengan. Se debe solicitar acuerdo del usuario para la intervención: desde la movilización de recursos de modo activo hasta controlar la situación. Puede ser desde la localización a un miembro de la familia, hasta movilizar los recursos para asistir a un servicio de urgencia ante un intento suicida. Es imprescindible para la intervención directiva el acceso del consejero a otros recursos comunitarios. 5. Seguimiento: - Revisar el progreso, y saber si se han realizado los propósitos de la ayuda. Explorar otros posibles procedimientos. Establecer el recontacto y en él, verificar si se cumplieron los tres objetivos específicos, si con respecto a las necesidades inmediatas se tomaron acciones inmediatas y si se realiza el enlace para derivación. - Detenerse si lo anterior no se cumple y regresar a evaluar las dimensiones del problema, con la valoración de nuevas alternativas de solución y evaluar la preparación para la derivación. La derivación debe ser concebida como una alternativa de ayuda imprescindible para la resolución del conflicto o el enfrentamiento del mismo. Métodos para el abordaje del cambio de comportamiento Incorporar un nuevo comportamiento requiere de tiempo, esfuerzo, compromiso, retroalimentación positiva, preparación previa, apoyo de las personas significativas y condiciones contextuales favorecedoras. Un elemento esencial en la promoción de cambios de comportamiento es lograr el compromiso individual, que el usuario perciba los cambios como necesarios y beneficiosos (aunque los beneficios pueden referirse a otras personas, por ejemplo, algunos individuos utilizan condones en las relaciones ocasionales motivados por el cuidado de la salud de la pareja estable, por el impacto que puede tener la infección para la familia, más que por el cuidado de la salud propia). La adopción de nuevos comportamientos exige recursos personales para la adaptación a los cambios y para la elaboración de la pérdi- 37 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS da de los beneficios percibidos como inherentes a los comportamientos de riesgo (por ejemplo, la percepción de las relaciones sexuales desprotegidas como más eróticas y placenteras que en las que se utiliza condón). El consejero puede ayudar al usuario en la incorporación de algunos de estos recursos y acompañarlo en el proceso de implementación de los cambios, proceso constituido por cambios paulatinos, paso a paso, con retrocesos ocasionales que no significan fracasos. Es importante tener presente que los cambios que para una persona pueden ser de muy fácil adopción para otro sujeto representan un gran ejercicio de voluntad y fuente de incalculables conflictos y tensiones. La Consejería, como servicio, representa un espacio muy oportuno para la promoción de comportamientos saludables, como hemos visto, pero no es infalible, ni siquiera a partir del mejor desempeño profesional por parte del consejero y la implicación personal del usuario. Se debe tener presente que los comportamientos sexuales, por una parte, involucran generalmente a otros individuos y, por otra, están atravesados por las condiciones sociales (las representaciones sociales, las normas grupales, los estereotipos sexuales, las costumbres, la tradición, las condiciones de vida, la organización social, los cánones instituidos, etc.) que pueden afectar la adopción de nuevos comportamientos. Al trabajar con el usuario en la implementación de los cambios se deben tener presentes los recursos comunicativos con que dispone, sus habilidades para la negociación de las prácticas sexuales de menos riesgo, y manejar las repercusiones que pueden tener en otras personas estos cambios. No es suficiente con que el usuario se perciba en riesgo, conozca cómo puede disminuirlo y cómo utilizar el condón. Esta sería una visión demasiado simplista y sumamente inefectiva. Existen diferentes métodos para la promoción de cambios de comportamiento, provenientes muchos de ellos del Enfoque Cognitivo Conductual, que han sido ampliamente empleados en el área de la salud. A continuación presentamos algunos de los más utilizados con eficacia en los servicios de Consejería: Elaboración de un plan de prevención personal Clarificación de la situación o problema En el inicio de la intervención al usuario le deben quedar claros los siguientes aspectos: - Se puede evitar transmitir las ITS y el VIH a otros. - Contraer el VIH y las demás ITS se puede evitar, sólo cuando las personas modifican voluntariamente su conducta. - Es difícil cambiar comportamientos, pero se puede lograr si se realiza el cambio paso a paso, y se invierte tiempo, esfuerzo y compromiso. - Para las personas sexualmente activas, protegerse significa: 38 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS a) Abstenerse de tener relaciones sexuales, o b) Tener relaciones sexuales con una sola persona, de quien se esté seguro(a) que no está infectada con el VIH u otra ITS y que, además, no tenga otros compañeros o compañeras sexuales, o c) Usar condón cada vez que se tengan relaciones sexuales, o d) Sólo participar en actividades sexuales en las que no haya penetración. Identificación de los cambios a implementar Hay que ayudar al usuario a identificar los cambios que necesitará considerar para evitar infectarse o infectar a otros: - O pedirle que identifique comportamientos nuevos que deberá adoptar para disminuir los riesgos o - Pedirle que identifique los comportamientos que practica con poca frecuencia que deberá adoptar para disminuir los riesgos. Aquí hacemos referencia a comportamientos ocasionales o aquellos realizados en períodos concretos en el pasado. Ejemplo: en la adolescencia, durante el embarazo, etc. Diseño de las acciones a realizar para la implementación del cambio Discutir con el usuario la forma en que pretende realizar los cambios, cómo los piensa llevar a cabo (de la manera más detallada posible). Identificación de las barreras u obstáculos Explorar e identificar obstáculos para estos cambios de conducta. Intentar prever los elementos obstaculizadores para el cambio de comportamiento, de la manera más práctica y realista posible (en ocasiones los usuarios se proponen cambios en condiciones ideales que los hacen irrealizables o desestiman barreras importantes). Formulación de estrategias Ayudar a formular estrategias para superar estos obstáculos. Ayudar al usuario a pensar qué debe hacer para evitar las barreras o superarlas. Identificación del comienzo Ayudar a identificar un primer paso realizable para iniciar la modificación de su comportamiento. En la medida que el usuario sea capaz de dar un primer paso estamos más próximos de que se sienta apto para continuar con los siguientes pasos. Reforzamiento de la autoeficacia Recordarle que sólo él o ella pueden implementar los cambios necesarios para protegerse; que esto, aunque difícil, es posible. 39 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Decálogo de cambio Son 10 pasos o principios para encaminar la intervención, hacia un cambio de comportamiento: 1. Pedir los cambios de uno en uno. Si solicitamos demasiados cambios el usuario no se sentirá con fuerzas para llevarlos a cabo. 2. Describir concretamente la conducta clave, lo más detallada posible. Una misma conducta tiene connotaciones diferentes para distintas personas por lo que se debe operar lo mejor posible. 3. Preparar la conducta que se desea cambiar, identificando los pormenores que están alrededor de ella y si es posible y necesario, hasta escribirlos. 4. Buscar el momento más adecuado para proponer ese cambio. En la medida que el cambio se produzca en un momento oportuno estamos contribuyendo a disminuir la posibilidad de fracaso. Ante un fracaso inicial puede ser que el usuario pierda la motivación por el cambio. 5. Empezar por algo positivo, reforzando cualquier modificación, en el sentido de la conducta deseada, por insignificante que pudiera parecer. Llevar a la reflexión de cómo afecta la conducta que se tiene. ¿Cuál es el problema? 6. Ponerse en el lugar del otro. Empatizar con la dificultad del cambio, a partir de que se sabe que cualquier cambio implica un costo psicológico. 7. Asumir los límites de la responsabilidad del consejero y trabajar con la toma de conciencia de la responsabilidad del usuario. 8. Evitar que el usuario asuma una conducta de pasividad, reflejando las concepciones ortodoxas de relaciones de ayuda profesionales en salud. 9. Pedir el cambio. 10. Buscar alternativas. Modelo Transteórico del cambio de comportamiento o teoría de las etapas del cambio Este modelo, Prochaska, DiClemente y Norcross (1992), ha sido ampliamente utilizado, inicialmente en la modificación del hábito de fumar y en el tratamiento de las adicciones al alcohol y las drogas, y en la actualidad es muy usado en el cambio de otros múltiples tipos de comportamientos, incluyendo los comportamientos sexuales. El Modelo Transteórico comprende el cambio de comportamiento como un proceso y que las personas se hallan en diversos niveles de disposición o motivación para el mismo, es decir, en diferentes etapas en relación con el cambio deseado. Por esta razón las intervenciones deben ser individualizadas, teniendo presente el momento, en el proceso, en que la persona se encuentra. De esta forma, aunque se vea el cambio de comportamiento como un proceso complicado, las etapas por las que atraviesa la persona 40 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS son predecibles y admiten la intervención de otras personas para facilitar el cambio. El tránsito de una etapa a otra está dado por la presencia de determinados procesos, los cuales constituyen los dinamizadores de la disposición del individuo con relación al cambio, es decir, los facilitadores del cambio. Los procesos son las actividades, pensamientos, sentimientos o experiencias que ayudan al sujeto a progresar a través de las etapas y acercarse a la meta (cambio) propuesta. Este modelo se ajusta con facilidad a la metodología de la Consejería por lo que consideramos oportuno que los consejeros estén familiarizados con sus elementos esenciales para ayudar al usuario a incorporar comportamientos sexuales más saludables. Las intervenciones de los consejeros deben ir dirigidas a ubicar al usuario en etapa con relación al cambio deseado y facilitar la ocurrencia de los procesos que permitirán el paso del usuario hacia otra etapa, más próxima a la meta o cambio deseado. Este modelo se aplica a partir de los siguientes pasos: 1. Escoger el comportamiento que requiere ser cambiado o que el sujeto se propone modificar. 2. Colocar al usuario en etapa, atendiendo al cambio deseado y al comportamiento a modificar. 3. Identificar los procesos que podrían facilitarse y determinar las intervenciones apropiadas para cada proceso. 4. Implementar las intervenciones. Para dar el primer paso es necesario tener presente que nos referimos a un comportamiento concreto y no a la conjunción de varios comportamientos afines, como se muestran en nuestro cotidiano de vida. Los motivos y procesos que se requieren tener presentes en una intervención para un comportamiento pueden ser muy diferentes de los que actúan en otro. Ejemplo: Puede acudir a la Consejería una persona que no utiliza sistemáticamente condones en sus relaciones sexuales, cambia frecuentemente de parejas y se involucra sexualmente con personas desconocidas. Este usuario manifiesta varios comportamientos susceptibles a modificar para disminuir el riesgo de exposición a las ITS-VIH/SIDA, pero las etapas en las que se encuentra para cada comportamiento son diferentes y los procesos que podrían requerir intervenciones son distintos también. Es necesario conocer en qué consiste cada etapa y cuáles son los procesos típicos de cada una de ellas. Etapas del cambio de comportamiento El cambio no ocurre de una vez ni mediante pasos agigantados sino que ocurre por una evolución lenta, muchas veces imperceptible, mediante pequeños pasos que aportan lecciones y aprendizajes. Estos pasos describen las etapas del cambio por las que transita un sujeto: 41 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS 1. Precontemplación. 2. Contemplación. 3. Preparación. 4. Acción. 5. Mantenimiento. Aunque cada etapa prepara el terreno para la siguiente, el cambio no se manifiesta de manera lineal sino de manera cíclica, por lo que un sujeto puede retroceder hasta etapas transitadas previamente. Este modelo tiene en cuenta, además de las etapas, los momentos de recaídas y lapsos como parte natural del proceso de cambio. Las recaídas no son más que retrocesos hacia una etapa anterior o la paralización en la etapa actual. Las personas pueden recaer en cualquier momento y en cualquier etapa. Precontemplación. En esta etapa la persona no ve ninguna razón para el cambio, no está consciente de que exista problema alguno o, al menos, no personaliza este problema, no ve que el problema pueda afectarla personalmente, que el problema pueda ocurrirle a él o ella. En las situaciones que tienen en cuenta sus riesgos, no valoran las magnitudes de los mismos y los racionalizan o justifican. Las personas en esta etapa pueden haber intentado realizar cambios en el pasado y han fracasado, por lo que se han desilusionado de sus capacidades para implementar el cambio y se sienten incapaces de cambiar algo en el futuro. Por lo general, las personas en esta etapa no vienen a los servicios de Consejería por sí solas, puesto que ellas no consideran que necesiten cambiar algo. Sin embargo, algunas personas en esta etapa acuden a nuestros servicios a partir de las intervenciones de los promotores u otros especialistas que inciden en sus percepciones de riesgo o porque han tenido exposiciones muy riesgosas y se sienten muy angustiados. Los consejeros pueden encontrar muy difícil trabajar con usuarios en esta etapa porque, al parecer, a ellos no les importa la información que se le brinda ni están dispuestos a plantearse ningún cambio. Es necesario que el consejero se proponga hacerlos conscientes de las posibles consecuencias de sus comportamientos de riesgo y ayudarlos a personalizar la estimación del riesgo. Contemplación. Las personas en esta etapa están conscientes de que existe un problema pero aún no están listos para hacer nada al respecto. Pueden ver la necesidad del cambio pero no han pensado en llevarlo a cabo aún, no piensan hacer nada al respecto. Las personas en esta etapa pueden expresar mucha ambivalencia, sopesando los pros y los contras de asumir los cambios. Por lo general hacen más énfasis en las desventajas del cambio a implementar que en los beneficios que podría reportarle. 42 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Los usuarios en esta etapa pueden acudir a nuestros servicios pero aún se pueden mostrar escépticos de la ayuda que les podemos brindar. Es importante apoyar al usuario y no violentarlo a asumir metas para las que no está listo aún. Preparación. En esta etapa la persona está pensando seriamente en realizar el cambio de comportamiento en poco tiempo. Las personas se sienten muy implicadas en la necesidad de realizar el cambio y piensan hacerlo en muy poco tiempo, para lo cual están elaborando un plan o meditando en el cómo realizarlo. Expresan verbalmente sus intenciones de cambiar. En esta etapa las personas pueden haber dado los primeros pasos para el cambio deseado. Están evaluando el nuevo comportamiento y sus habilidades para realizarlo. Los beneficios del nuevo comportamiento han superado a las desventajas en sus evaluaciones. Están a punto de realizar un cambio activo y consistente en su comportamiento. Acción. Ya en esta etapa el nuevo comportamiento se manifiesta más activa y consistentemente, pero no rebasa los seis meses de implementación. El usuario se ha comprometido fuertemente con el cambio y ha empezado a hacerlo pero aún no se considera un cambio logrado. Este cambio aún es muy reciente aunque expresa mucho compromiso. Esta etapa se diferencia de la anterior en que el cambio es consistente y mantenido. Ejemplo: las personas que se proponen usar condones sistemáticamente y lo han hecho por menos de seis meses se encuentran en Acción pero si los usan en unas ocasiones y no en otras, aún estarían en Preparación. Esta etapa es muy difícil y estresante. Puede ser difícil para el usuario manejar las emociones disímiles que le producen el nuevo comportamiento y las reminiscencias del antiguo. Es importante brindar apoyo emocional a los usuarios en esta etapa, trabajar en la prevención de las recaídas o en la recuperación de las mismas y en la evitación de la asunción de muchos cambios cuando aún no se poseen las habilidades necesarias para implementarlos sistemáticamente. Esta etapa requiere compromiso y energía para la realización de los cambios. Es necesario también el fortalecimiento o la activación de las redes de apoyo social, de modo de que los sujetos significativos sirvan más como cómplices del cambio y no sujetos resistentes al mismo. Mantenimiento. Es cuando el cambio se ha hecho consistente por más de seis meses. La persona se encuentra en la implementación activa del cambio en su proyecto de vida y toman medidas para evitar las recaídas. El nuevo comportamiento requiere de menos esfuerzo y produce menos estrés pero aún la recaída es un elemento a prevenir. El tiem- 43 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS po, un período de seis meses, es el aspecto característico de la consistencia del cambio. Las personas se sienten muy confiadas en sus habilidades para llevar a cabo el cambio. Al intentar incorporar los nuevos aprendizajes o desarrollar las nuevas habilidades adquiridas, los sujetos pueden tener fracasos inicialmente o no se sienten totalmente capaces de llevarlos a cabo, por lo que retroceden a momentos previos en relación con el cambio propuesto. Cada intervención debe tener presente la necesidad de atender las posibles recaídas y no verlas como un fracaso de la intervención sino como momentos de consolidación y profundización para el paso a una etapa más cercana al cambio previsto. El lapso y la recaída no deben producir alarma al menos que se observe un patrón de recaída. En este caso se debe revisar la estrategia utilizada, influir en los procesos que se han desestimado o recolocar al usuario en etapa. Es importante tener presente el impacto que ha provocado la recaída. Los procesos del cambio. (Tomado del Manual de Cambio de Comportamiento de Cicatelli Associates Inc.) Entendemos como procesos a las experiencias, vivencias, sentimientos, pensamientos y acciones que ayudan a las personas a desarrollar las habilidades comportamentales, afectivas y cognitivas que movilizan el cambio. Según este modelo existen diez procesos y dos factores adicionales (Balance decisional y Autoeficacia). Cada etapa posee procesos específicos, aunque algunos procesos pueden coexistir en diferentes etapas. Sin embargo, es necesario tener presente cuáles son los procesos que se dinamizan en cada etapa, porque los procesos que pueden ser beneficiosos en una etapa pueden ser perjudiciales en otra. 1. Concientizar: Incrementando el nivel de conciencia y el de procesamiento de la información acertada, aumentando la conciencia sobre sí mismo y el problema. 2. Descanso (alivio) dramático: Experimentando y manifestando las emociones que están asociadas con los comportamientos. 3. Reevaluación ambiental: La experimentación afectiva y cognitiva del ambiente y los problemas individuales, de cómo el comportamiento actual afecta al ambiente y a otros. 4. Auto-reevaluación: La reexperimentación de los problemas afectivos y cognitivos del individuo, evaluando cómo se siente y piensa de sí mismo en relación con el problema. 5. Autoliberación: la creencia en la habilidad propia para cambiar y el compromiso para actuar con esa creencia. 6. Relaciones de apoyo: Relaciones que tienen cualidades de genuinidad, confianza, cariño, empatía y abiertas. 7. Liberación social: Darse cuenta de cambios sociales que apoyan los cambios personales. 44 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS 8. Condicionamiento contrario: Sustituir los comportamientos desfavorables por comportamientos positivos, buscar alternativas más beneficiosas. 9. Manejo del refuerzo: Estimulando los comportamientos positivos e inhibiendo los negativos. 10. Control del estímulo: Reestructurando el ambiente y la experiencia para que los estímulos problemáticos sean menos propensos a ocurrir. 11. Balance decisional: Evaluando los pros y contras del comportamiento actual y del que se desea alcanzar (es importante que se crea en los beneficios del nuevo comportamiento). 12. Autoeficacia: Creencia en las habilidades individuales para completar las actividades necesarias para la implementación del cambio, la confianza en la habilidad de resistir la tentación. Los procesos no son de por sí intervenciones sino que representan el foco o énfasis que debe tener la intervención. No obstante, los procesos deben contemplar las diferencias personales, es decir, para algunos usuarios ciertos procesos pueden tener resultados más relevantes que para otros usuarios. En ocasiones los usuarios, imbuidos en un optimismo acrítico, se sienten capaces de asumir los cambios sin valorar los obstáculos a superar. Es importante tener una noción de los mismos para poder ayudar a los usuarios a preverlos y a elaborar alternativas de enfrentamiento. Relación de etapas y procesos Para moverse de Para moverse de Precontemplación Contemplación a a Contemplación Preparación Para moverse de Preparación a Acción Para moverse de Acción a Mantenimiento Para quedarse en Mantenimiento y prevenir las recaídas Concientizar Auto-reevaluación Liberación Social Manejo del Refuerzo Autoeficacia Descanso (Alivio) Dramático Balance Decisional Balance Decisional Relaciones de Apoyo Liberación Social Reevaluación Ambiental Autoeficacia Autoeficacia Condicionamiento Contrario Balance Decisional Control del Estímulo Autoeficacia 45 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Intervenciones que dinamizan los procesos Procesos Intervenciones Concientizar Observaciones, confrontaciones, interpretaciones, panfletos, libros, preguntas enfocadas, testimonios, brindar información y argumentos que incrementen la percepción de riesgo. Situaciones inconclusas, frases inconclusas, juegos dramáticos, situaciones de pérdidas, grupos de apoyo, imágenes proyectivas, dibujos e intercambio de roles. Erotización de las prácticas de sexo seguro y protegido. Descanso (Alivio) Dramático Reevaluación Ambiental Auto-reevaluación Relaciones de Apoyo Ponerse en el lugar de personas queridas, reacciones de personas allegadas, presentaciones de casos, documentales, negociación del condón, etc. Clarificación de valores, imagen guiada, introspección, experiencias emocionales correctivas, dibujar y planificación ideal del futuro. Situaciones inconclusas, contratos de comportamiento, juego de roles y elaboración de planes futuros. Grupos de apoyo, grupos de ayuda mutua, alianzas terapéuticas y conexiones de apoyo social. Liberación Social Condicionamiento Contrario Manejo del Refuerzo Control del Estímulo Reflexión sobre las normas sociales, videos debates y grupos de apoyo. Desarrollar un plan de comportamientos alternativos, juegos dramáticos, desensibilización progresiva, promoción de condones sabores para el sexo oral, etc. Autorrecompensas, retroalimentación positiva, desarrollar un plan de refuerzo personalizado. Reestructuración del ambiente, colocación de condones en varios sitios de la casa o de la habitación, incremento de la conciencia del estímulo y juego de roles. Autoeficacia Modelaje del uso de condones, desarrollo de habilidades para la negociación de condones, análisis de experiencias pasadas, situaciones inconclusas, juegos dramáticos, escogiendo alternativas y probándolas. Balance de los pros y los contras, imágenes guiadas, análisis de los beneficios, situaciones conflictivas hipotéticas, etc. Autoliberación Balance Decisional Obstaculizadores del cambio de comportamiento En diferentes ocasiones hemos hecho alusión a las dificultades que puede tener un usuario para la adopción de comportamientos sexuales de menos riesgo. A continuación haremos referencia a algunos de las situaciones más comunes, aunque no representan la totalidad de las mismas. Las conductas que tienen riesgo implican generalmente un placer o alivio, intenso, inmediato y seguro Por lo que para algunas personas renunciar a los comportamientos de riesgo significa renunciar al placer o a formas de manejar la ansiedad o la angustia. Por esta razón las conductas preventivas pueden representar la disminución del placer o el retraso en su obtención. 46 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Lo nocivo o perjudicial como consecuencia de una conducta de riesgo, sólo es probable y aparece a largo plazo El placer o alivio generado por el comportamiento de riesgo es seguro mientras que el daño o peligro para la salud es en algunas situaciones, no en todas, y en muchos casos aparece después de mantener el comportamiento de riesgo luego de mucho tiempo. Ejemplo: las personas que fuman no desarrollarían el cáncer de pulmón hasta muchos años después de haber adquirido el hábito. Las personas que están habituadas a tener conductas de riesgo, sin que les haya “pasado nada”, no encuentran razón para cambiar, sobre todo al observar que otras personas expuestas al riesgo no sufren perjuicios inmediatos. El período de tiempo entre el comportamiento de riesgo y la detección del perjuicio a la salud Muchas de las personas que manifiestan comportamientos de riesgo no relacionan el mismo con el daño que puede generarle. Para poder determinar si se produjo la infección mediante las pruebas convencionales de anticuerpos al VIH transcurre un período de tiempo lo suficientemente prologando como para que algunos sujetos reiteren los comportamientos de riesgo. El hecho que la infección por VIH no produzca una sintomatología aparatosa (ni con localización en la zona genital) hace que algunas personas no relacionen sus comportamientos sexuales con la infección. La población tiene una percepción errónea de lo que significa estar infectado con el VIH Muchas personas aún consideran que quienes tienen VIH son individuos que se pueden reconocer a simple vista, que poseen manchas o tienen una apariencia demacrada, o que son personas poco higiénicas o que pertenecen a grupos sociales específicos (por ejemplo: hippies, homosexuales, jóvenes, prostitutas, etc.); por lo que consideran que las personas con apariencias saludables, higiénicos o moralmente “adecuados” naturalmente son seronegativas. También creen que todas las personas seropositivas están diagnosticadas y que residen en los sanatorios, desconociendo que existen personas con VIH que nunca se han realizado la prueba de detección de anticuerpos (al menos después de un posible período de ventana) y que muchas personas diagnosticadas viven en sus comunidades, vinculadas a actividades sociales comunes a cualquier otra persona. Las personas tienden a tener una percepción errónea de lo es conocer a la pareja Todas las personas mantenemos una parte de nuestro mundo íntimo oculto a los demás, incluso a nuestros seres más queridos. Esta necesidad de privacidad es imprescindible para el cuidado de nues- 47 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS tra autoestima. Por esta razón, si nosotros mantenemos a nuestra pareja al margen de determinados asuntos personales, por qué no va suceder de esta manera con la otra parte de la relación. El hecho de que estemos enamorados y de ser correspondidos, el hecho de que nuestra pareja posea muy buenos sentimientos y sea una persona con una vida sexual muy “moderada”, no quiere decir que no se haya expuesto al VIH (u otra ITS) en alguna ocasión o que no se deba realizar un examen de detección de anticuerpos al VIH. Existe un mito sobre lo que es la fidelidad y la pareja monogámica El ideal de relación de pareja involucra la fidelidad y la monogamia, por lo que la mayoría de las personas suelen percibir a sus parejas como fieles, aun cuando ellos mismos no lo sean. Algunas investigaciones sobre el comportamiento sexual realizadas en nuestro país demuestran que la infidelidad y las relaciones múltiples son más comunes de lo que se supone, aunque esto no significa que no existan relaciones monogámicas, donde hay fidelidad mutua. Por otra parte, el modelo de relación de pareja predominante en la actualidad es de monogamia seriada, en el cual una persona monógama ha tenido varias parejas sexuales anteriormente y, por lo tanto, podría llegar a la actual relación siendo portador del VIH u otra ITS. Asumir un resultado no reactivo del ELISA o negativo del Western Blot como una “vacuna” Para algunas personas un resultado negativo de VIH luego de haber tenido algún comportamiento de riesgo es percibido como una demostración de que no es susceptible a infectarse, como si fuesen inmunes al VIH. Se pueden haber tenido comportamientos de mucho riesgo y no haberse infectado, pero esto no significa que no se pueda infectar en el futuro si se mantienen estos comportamientos. Por otra parte, la persona puede encontrarse en período de ventana y aunque tenga un resultado negativo al VIH podría portar esta infección. Casi ninguna persona se considera como perteneciente a un grupo de riesgo Por lo que cuando nos referimos a sectores de la población, utilizando este tipo de nomenclatura, muchas personas se sienten ajenas a lo que se está diciendo. Por otra parte, no es el tipo de grupo de pertenencia o referencia lo que puede indicar quiénes pudieran estar infectados sino sus comportamientos sexuales. 48 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Tampoco las personas suelen autoidentificarse como promiscuas. La palabra promiscuidad posee una acepción muy peyorativa, vinculada a lo inmoral o a lo poco higiénico, por lo que recomendamos excluir este tipo de lenguaje y ser utilizada en sustitución, la referencia a comportamientos concretos, como cambio frecuente de pareja o personas con conductas sexuales de riesgo. Las presiones grupales Algunas personas, como los jóvenes y adolescentes o grupos de hombres, etc., suelen ceder ante las presiones de los individuos que los rodean, obviando sus propias convicciones, motivados por ganar el respeto o la aceptación de los miembros del grupo. Por ejemplo, jóvenes que tengan relaciones sexuales sin suficiente preparación ni deseos, sólo con la intencionalidad de no diferenciarse del resto del grupo; u hombres que tienen relaciones sexuales para demostrar su hombría (hacer el papel de hombres); o tener relaciones desprotegidas para demostrar que no se siente temor; etc. El peligro en la conducta de riesgo, en ocasiones, es un atractivo adicional para mantenerla En ocasiones, el riesgo es un atractivo del comportamiento sexual, es un elemento que constituye un atractivo erótico que acompaña a la relación sexual. El tener una relación con personas desconocidas, el mantener relaciones desprotegidas con personas infectadas o tener sexo “fuerte” donde el condón se puede romper pueden ser relaciones sexuales muy eróticas para algunas personas. Otros ejemplos más comunes son el tener relaciones sexuales en lugares públicos o en lugares donde pueden ser interrumpidos por terceros (familiares, compañeros de trabajo, etc.) La significación personal del condón y de la deposición seminal En nuestra cultura la deposición seminal es un símbolo de mayor compromiso afectivo, de mayor compenetración de la pareja o tiene un valor erótico muy importante, mientras que el uso del condón es considerado como un acto poco natural, artificial, ajeno a la práctica sexual, por lo que se vivencia como una interrupción del acto sexual o un elemento que reduce el erotismo. Muchas de las campañas de prevención apelan al miedo El miedo y la excesiva referencia a los perjuicios han sido elementos utilizados en algunas campañas que han generado, como mecanismo para la atenuación del temor, un alejamiento de la información, una reacción de negación que implica que las personas se sientan ajenas al tema, como si estuviesen al margen de la epidemia, completamente fuera de peligro, sin evaluar con realismo el riesgo personal. 49 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Por otra parte, el miedo promueve estigma, hace que las personas que se sospechen infectados se oculten, que las personas con VIH se vean discriminadas, rechazadas, etc. Inequidad de género Aún subsiste en nuestra sociedad una cultura machista, donde la mujer mantiene una posición de subordinación sexual con respecto al hombre. Por lo que proponer un cambio de comportamiento sexual en la pareja heterosexual es más difícil para la mujer que para el hombre. Aún muchas mujeres mantienen una postura pasiva con respecto a las prácticas sexuales en la pareja y el logro de su satisfacción sexual y la evitación de los riesgos. Por lo que la estrategia para la proposición de cambios en los comportamientos sexuales para las mujeres no puede ser igual a la de los hombres. Aún es considerado por algunas personas que proponer el uso del condón por una mujer es un símbolo de una vida sexual “inadecuada”, “promiscua”, y no como una necesidad de autocuidado. Las personas tienden a tener una posición de pasividad frente al saber/autoridad de los profesionales de la salud Esta actitud de pasividad/subordinación genera la no asunción de la responsabilidad personal en los cambios de comportamientos y en el cuidado de la salud. Las personas no expresan sus reales necesidades en este tipo de relación y, algunas veces, simulan la aceptación incondicional de lo sugerido por el personal de salud, lo cual va acompañado de comportamientos más auténticos, totalmente diferentes a lo pactado con el especialista. Promover la adopción de cambios de comportamientos debe comenzar por favorecer la responsabilidad personal en el cuidado de la salud, para lo cual es necesario romper con la tradición de este tipo de relación, asumiendo a cada individuo como un ser con capacidad de gerenciar su autocuidado. ¿Quién puede ofrecer Consejería? La Consejería puede ser ofrecida por cualquier persona independientemente de su formación profesional. Existen variantes de capacitaciones y entrenamientos pero es muy importante contar con las cualidades que favorecen la labor de Consejería y que no forman parte de ningún tipo de enseñanza curricular. La heterogeneidad profesional o el amplio diapazón de posibles consejeros exige de los mismos que posean una profunda motivación por el tema y por la actividad, y habilidades para el aprendizaje autodidáctico. Un consejero debe proponerse una continua superación. Por otra parte, el consejero debe poseer capacidad de introspección, habilidades para mirarse a sí mismo y poder identificar los puntos débiles y las dificultades a superar. La Consejería exige del consejero un cuestionamiento constante de sus prejuicios y estereotipos, por lo 50 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS que se requiere de personas con capacidad para percibirlos y flexibilidad para proponerse cambios en su forma de ser y de ver el mundo. También se requiere de personas con: - Sensibilidad con las personas afectadas. - Sinceridad y objetividad. - Seguridad, desinhibición. - Confiabilidad (que inspire confianza). - Disposición para el autoconocimiento y exploración de sus barreras emocionales y comprensión. - Tolerancia, no paternalismo. - Desprejuiciadas y con una identidad sexual asumida. - Ausencia de alteraciones psicopatológicas. Habilidades necesarias para impartir Consejería, que deben crearse a partir de la capacitación y de la formación continuada: - Habilidades prácticas en Consejería. - Habilidades de autocontrol. - Habilidades de comunicación. - Habilidades de motivación para el cambio. - Habilidades en el manejo de las emociones. - Habilidades en el manejo de cuestiones delicadas, como la muerte, conflictos relacionados con la sexualidad, rechazo, etc. - Habilidades para conocer sus limitaciones y saber cuándo referir al sujeto a otros especialistas (psicólogo, inmunólogo, médico clínico). - Dominio básico del tema central de la Consejería. - Conocimientos básicos sobre sexualidad. Propuestas de intervención para llamadas de personas con intentos suicidas inminente o víctimas de violencia doméstica En los servicios telefónicos de ayuda se pueden dar situaciones, que si bien son ajenas a la finalidad para lo que han sido creados, no deben ignorarse ni sería ético dejar de prepararse para su manejo. Específicamente nos referimos a las llamadas de personas con ideas suicidas y de personas víctimas de violencia doméstica. La promoción sistemática, la divulgación de la que deben ser objetos los servicios telefónicos de prevención de VIH/SIDA pueden motivar que resulten números telefónicos que las personas en situaciones límites y que requieren de ayuda inmediata utilicen. No responder a estas demandas puede ser la negación del último recurso de ayuda que estas personas soliciten. Por este motivo se debe concebir un proceder para responder a estas demandas. Para ello nos apoyaremos en la experiencia de otros servicios de la región. 51 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Los intentos suicidas Existen muchas creencias erróneas en la población sobre las ideas, los intentos y el acto suicida. Estas creencias más que ayudar, constituyen serios obstáculos para la prevención de los actos suicidas. Es importante que el consejero tenga presente que: - La mayoría de las personas que realizan un intento suicida han hablado sobre sus ideas al respecto previamente. - Las personas dan muchas señales verbales y extraverbales sobre la planeación suicida. - La mayoría de las personas que se suicidan habían tenido intentos fallidos previamente. - La depresión puede ser un factor de riesgo para el suicidio pero no todas las personas que lo cometen están deprimidas. Existen otros factores de riesgo como los trastornos de la personalidad, el alcoholismo, las adicciones de drogas, el temor a la discapacidad crónica, etc. - El comportamiento suicida no se hereda aunque puede imitarse. Algunos trastornos psiquiátricos son los que se podrían heredar. - Hablar abiertamente sobre las ideas suicidas es el primer acto para su prevención. Esto permite que la persona tome conciencia sobre la magnitud del acto a cometer. - Los intentos suicidas muchas veces están precedidos de momentos de planeación y señales de aviso, no siempre son el resultado de impulsos circunstanciales e impremeditados, por lo que muchos podrían prevenirse. - Muchas personas ante la vivencia de soledad y de carecer de fuentes de ayuda, ven en el acto suicida una salida para una situación insoluble. Cualquier persona capacitada puede contribuir a brindar un primer momento de ayuda que favorece la prevención. Elementos para la atención telefónica de una persona con idea suicida: 1. Establezca una relación de confianza y comunicación. Intente que el usuario sienta que puede comunicarse con libertad. 2. Escuche con atención lo que le cuenta el usuario. Es importante que el usuario se sienta atendido, que se le presta atención, que lo que le sucede le interesa al consejero. 3. No dé consejos, no juzgue. Crea en el usuario. No subestime sus intenciones ni moralice sobre el comportamiento suicida. 4. Haga preguntas sobre su cotidianidad y escuche atentamente. Haga que se sienta en una conversación y no en un interrogatorio. Que los sucesos de su vida son importantes y el consejero le presta atención. 5. Haga comentarios que validen los sentimientos del usuario: “Entiendo, cualquiera se sentiría de esa manera.” Es esencial que el usuario se percate de que el consejero es capaz de ponerse en su lugar, de comprenderlo. 6. Explore la idea suicida (cuán planificada la tiene, cómo lo piensa hacer). Mientras más planificada, más intensa debe ser la intervención. 52 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS 7. Intente alejarlo de sitios potencialmente peligrosos (balcones, ventanas, la cocina). Explore dónde se encuentra y evalúe el riesgo potencial, es importante que lo motive a trasladarse hacia lugares menos peligrosos o neutros como la sala de estar, el comedor, etc. 8. Estimúlelo a buscar otras alternativas que no sea la autodestrucción, pero cuestione las irrealizables (irse de la casa sin tener otro lugar, cambiar a la persona con quien tiene conflictos). Intente ser prolífico en cuanto al número y calidad de opciones, esfuércese porque el usuario se sienta ayudado. 9.Proponga la búsqueda de ayuda para enfrentar el problema (familiares, amigos, especialistas). No minimice las objeciones que pueda hacer el usuario con respecto a la búsqueda de ayuda, pero insista en su necesidad. 10. Recuérdele que usted estará todo el tiempo necesario, que ahora no está solo. Dedíquele todo el que requiera. Intente que el usuario se mantenga la mayor cantidad de tiempo hablando con usted si la idea está muy planificada. Puede ser que llegue alguien al lugar donde se encuentra el usuario y frustre sus intenciones. La violencia doméstica Las personas que han sido víctimas de violencia doméstica de manera reiterada y mantienen el vínculo con quienes las agraden pueden identificar los factores o condiciones que preceden este tipo de comportamiento (consumo excesivo de alcohol, confrontaciones frente a terceros, frustraciones de los agresores por motivos ajenos a la víctima, etc.). Es posible que ante la amenaza de violencia inminente busquen ayuda en el servicio telefónico, intentado encontrar apoyo y orientación para manejar la situación y mantenerse a salvo. La violencia en el ámbito familiar puede tener diferentes manifestaciones: - Física: cuando existen golpes, empujones, bofetadas, laceraciones. - Sexual: abuso sexual, incluyendo la violación a menores; prácticas sexuales en contra de la voluntad de un miembro de la pareja; prostitución forzada. - Psicológica o emocional: cuando existen conductas y actitudes que generan humillaciones; vergüenza; ultrajes; limitación de los derechos individuales; limitaciones para visitar a los amigos, trabajar fuera del hogar, mantener contacto con otros familiares, etc. - Económica: cuando existe la amenaza de desamparo económico o el vínculo está determinado por una relación económica. La violencia doméstica no sólo contempla a la que puede existir entre adultos (parejas, padres e hijos adultos o convivientes) sino que tiene en cuenta a la que se ejerce sobre los niños y adolescentes por padres y tutores, muchas veces amparados en los métodos tradicionales de imposición de respeto y disciplina. Son pocos los niños y adolescentes que buscan ayuda. Suele ser una situación menos cuestionada desde lo social. 53 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Aunque la violencia física es un tipo particular de violencia doméstica, es a la que hacemos referencia en este acápite, por ser más susceptible de buscar ayuda inminente, fundamentalmente los adultos de una familia u hogar. La relación que se establece entre el agresor y la persona violentada puede ser muy compleja, plagada de mutuas dependencias, culpas, arrepentimientos y fe en un cambio espontáneo. Muchas veces la víctima se suele sentir culpable por los impulsos violentos del agresor, como si fuese responsable de los mismos. Por otra parte, las personas que violentan (los agresores) suelen solicitar disculpas y se arrepienten de sus comportamientos ante sus víctimas. Muchas veces se reproducen modelos de relaciones de pareja aprendidos en los hogares. Es importante que seamos capaces de ponernos en el lugar de la persona que solicita ayuda y nunca enjuiciarla o criticarla ni cuestionar la naturaleza del vínculo afectivo ni las cualidades morales de la víctima y el agresor. En ocasiones, las personas se niegan a creer que eso les esté pasando a ellas o que el comportamiento violento sea más mantenido de lo que se atreverían a imaginar. A continuación les presentamos un algoritmo de intervención en este tipo llamadas que puede orientar nuestra forma de brindar ayuda. Elementos para la atención telefónica de víctimas de violencia doméstica 1. Dígale que le cuente lo que le sucedió o le sucede. Escuche sin enjuiciar ni criticar. Trate de evaluar la inminencia de la agresión. 2. Infórmese de dónde está (en qué lugar de la casa). Existen lugares más peligrosos que otros como las cocinas, donde hay cazuelas, cuchillos, punzones, etc; los balcones; los baños. 3. Ayúdele a encontrar el lugar más seguro de la casa, donde pueda protegerse momentáneamente. Trate de que la persona se dirija hacia lugares menos peligrosos (dormitorios, comedores). 4. Ayúdele a ubicar a personas que lo puedan ayudar (recordar nombres, número de teléfonos, direcciones, etc.). 5. Ayúdele a implementar un plan de emergencia inmediato. Identificar una conducta evasiva o de protección inmediata, localizar personas que le puedan ayudar, lugares a donde dirigirse, etc. 6. Si tiene que huir, recuérdele lo que tiene que llevar (los hijos, si los tiene; documentos personales; dinero; las llaves). Es posible que con la urgencia olvide cosas importantes o personas que están a su cuidado. 7. Hable al usuario con voz clara y determinante. Es importante que sienta seguridad en la persona que le ayuda y que se establezca un diálogo que garantice la comprensión del usuario. 8. Insista en que usted estará en la línea todo el tiempo necesario y que no colgará. Esto le brindará apoyo y disminuirá su ansiedad. 9. Utilice connotación positiva. Dígale al usuario lo bien que lo está haciendo y coméntele que fue una buena idea haberlo llamado. 54 Bibliografía 1. AIDSCOM: A través del espejo. El papel del consejero en la prevención del SIDA. Guía de Consejería. AIDSCOM. México, 1991. 2. Alfonso Cruz, M.A: Fundamentos Teórico Metodológicos para la Creación de servicios de Consejería Cara a Cara en VIH/SIDA/ITS. Tesis de Maestría, Facultad de Psicología, Universidad de La Habana. Ciudad de La Habana, 2000. 3. Báez, E et al: Talleres de Capacitación en Educación y Prevención de la Transmisión del VIH/SIDA. Manual de instrucción. 3era Edición. Patronato de lucha contra el SIDA. Santo Domingo, 1995. 4. Bor, R and Meursing, K: ¿Qué se necesita para un buen aconsejamiento?. Acción en SIDA, No 24. México, 1995. 5. Calviño, M: Orientación psicológica. Esquema referencial de alternativa múltiple. Editorial Científico-Técnica. La Habana, 2002. 6. Cicatelli Associates, Inc: Consejería para pruebas de VIH y Cambio de conducta. Manual de capacitador. Cicatelli Associates, Inc. New York, 2002. 7. CNPITS-VIH/SIDA: Conociendo sobre VIH. Ed. Pueblo y Educación. Ciudad de La Habana, 1999. 8. CNPITS-VIH/SIDA: Viviendo con VIH. Ed. Pueblo y Educación. Ciudad de La Habana, 1999. 9. Coutinho, O y Mhlanga, D: Confidencialidad contra secreto. Acción en SIDA, No 24. México, 1995. 10. Fundación Anti-Sida España (fase): Guía de Counselling para Formadores. Harmony, Madrid. 1997. 11. Glanz, K; Rimer, B y Sutton, S: Teorías de un vistazo: Guía para la práctica en la promoción de salud en Modelos y teorías en comunicación en salud, Selección de lecturas. MINSAP. 12. ILPES: Manual para la capacitación de operadores de una línea telefónica de ayuda e información sobre SIDA. ILPES, San José, 1998. 13. Meursing, K: ¿Cómo abordar temas difíciles? Acción en SIDA, No 24. México, 1995. 14. OPS: Informe mundial sobre la violencia y la salud. Washington, DC. OPS, 2003. 15. Picard, C.A: Mediación en conflictos interpersonales y en pequeños grupos. Publicaciones Acuario. La Habana, 2002 16. Pérez Barrero, S.A: El suicidio. Comportamiento y prevención. Editorial Oriente, Santiago de Cuba, 1996. 17. Pujari, S: Apoyo para un comportamiento más seguro. Acción en SIDA, No 24. México, 1995. 18. Sánchez Bodas, A: ¿Qué es el Counseling?: Prevención, cambio y desarrollo personal. Ed. Lec Tour. Buenos Aires, 2003. MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Elementos básicos de la sexualidad humana Por Lic. Leonardo L. Chacón Asusta La sexualidad nos resulta obvia, cotidiana y conocida, pero no nos es fácil definirla. Para algunas personas es lo referente a los genitales o al acto sexual; para otras, abarca lo erótico y afectivo; pero lo que es común para la mayoría es la dificultad de atrapar su significado en un concepto concreto. En esto ha influido grandemente la carga histórica de estigmas, tabúes, prejuicios, prohibiciones e ideas distorsionadas que cubren lo sexual, limitando el tratamiento abierto, libre, sin malestares por reconocer y disfrutar de sus aspectos placenteros y la diversidad y fluidez que representa. Pecaminoso, sucio, abominable, innombrable y enfermizo son adjetivos que han acompañado a algunas conductas y realidades vinculadas a la sexualidad. No es de extrañar que nos cueste hablar sobre estos temas, que los adultos eviten tratarlos con los jóvenes o que los enfoques utilizados para su abordaje sean extremadamente médicos, profesionales, minimizando o renombrando lo placentero. Para algunos especialistas, la sexualidad “… es una parte integral de toda personalidad, y se expresa en todo lo que una persona hace” (Aller Atucha, en González y Castellanos, 2003). La sexualidad es inherente a la condición humana, es una configuración de la personalidad y posee condicionamientos biológicos, psicológicos y sociales. Por lo que la definimos como la forma en que nos comportamos, relacionamos y sentimos como hombres o como mujeres. Se concibe como la vivencia subjetiva, dentro de un contexto sociocultural concreto, del cuerpo sexuado. Es parte integral de la vida humana y eje de su desarrollo. La manera de caminar, la forma en que saludamos, nuestro vestuario, la manera de sentarnos y los gestos que hacemos al hablar están pautados por nuestra sexualidad. La sexualidad humana cumple diferentes funciones: - La reproducción: concebida no sólo como la capacidad de tener hijos sino también por los sentimientos de paternidad y maternidad, y el desempeño de roles encaminados a la crianza y educación de los hijos. 55 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS - El disfrute del placer erótico: la búsqueda del placer se halla en la base de muchas de las expresiones y comportamientos sexuales; y no sólo el placer que conlleva generalmente la excitación y el orgasmo, sino el placer de dar, de recibir y comunicarse en una relación sexual positiva. - La expresión de sentimientos: la sexualidad es un cauce privilegiado para la expresión de cariño, afecto o amor hacia otras personas, puesto que la relación sexual es una de las formas más íntimas y excitantes de relacionarse y comunicarse con la persona deseada. - El refuerzo de la autoestima: nos ayuda a mejorar nuestra autoimagen, a sentirnos más vitales, a protegernos de otros factores negativos como el estrés, la competitividad, etc. - Confianza en el desempeño social: mediante el diseño de los atributos y funciones de géneros, los sujetos de un sexo u otro, disponen de guiones que pautan su desempeño como individuo insertados en relaciones sociales. La adscripción a estos guiones le brinda al sujeto confianza para satisfacer las expectativas sociales. Una sexualidad sana implica: - Conocimiento, valoración, aceptación y disfrute del propio cuerpo. - Aceptación del hecho de que cada persona puede expresarse como es, y vaya realizándose de la manera que desee, sin someterse a patrones rígidos que limiten su potencial humano. Saber que todos somos diferentes y todos, por lo tanto, tenemos gustos y deseos diferentes. Ser capaces de expresar estos deseos y respetar los de los demás. - Adquisición de una concepción desinhibida y afectuosa, donde exista una valoración abierta y responsable de las diversas dimensiones de nuestra sexualidad y la de los demás; libre de autocensura por la connotación del placer erótico. - Asunción de la responsabilidad para el desempeño y disfrute de nuestro potencial sexual y el de los demás, lo cual implica poseer conocimientos y habilidades que garanticen nuestro equilibrio físico y emocional sin causar perjuicios a otras personas. A continuación analizaremos algunos de los elementos esenciales para la comprensión de la sexualidad humana. Sexo. Dimensión biológica de la sexualidad Nos referimos como sexo a los atributos anátomo-fisiológicos que identifican a un individuo como hombre o como mujer. Comprende los factores genéticos, el sistema endocrino, las gónadas y los órganos reproductivos. El sexo constituye la base biológica del comportamiento sexual. Deseo, capacidad para estimularse, respuesta sexual y capacidad de satisfacción dependen, en gran medida, de la armonía de estas estructuras biológicas. 56 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Los factores biológicos controlan el desarrollo sexual desde la concepción. De esta forma los cambios fisiológicos que se producen durante todo el ciclo vital condicionan la variabilidad de la sexualidad en cada etapa de la vida. Diferenciación sexual Sexo Varón Hembra Cromosómico Gonadal Hormonal Genital XY Testículos Andrógenos Conducto eyaculatorio, vesículas seminales, pene, bolsas escrotales, etc. XX Ovarios Progestógenos Trompas de Falopio, útero, vagina, vulva, etc. Desde el punto de vista fisiológico hay tres momentos especialmente significativos a lo largo del ciclo vital: el período prenatal (en el que tienen lugar los grandes procesos de sexuación corporal: las gónadas, los órganos genitales y el cerebro se diferencian en masculinos o femeninos), la pubertad (el cuerpo se diferencia sexualmente de forma más evidente, se desarrollan los caracteres sexuales secundarios y los órganos sexuales maduran, haciendo posible la reproducción) y el climaterio (con una pérdida progresiva de vigor físico y la aparición de la menopausia en la mujer). Existen otras acepciones sobre sexo, sobre todo en el lenguaje coloquial, que denominan a las relaciones sexuales. En el lenguaje cotidiano y en algunos materiales educativos, dirigidos a la población que utilizan un lenguaje coloquial, se refieren a las relaciones sexuales como tener sexo o hacer sexo. Es importante que se tenga presente que existe una denominación, desde la sexología y la medicina, para el sexo y otra de uso popular. El consejero debe tener en cuenta las diversas acepciones y familiarizarse con su uso en los diferentes ámbitos. Género, dimensión social de la sexualidad. Del dimorfismo sexual a la inequidad social. Las diferencias sexuales entre varones y hembras han sido agudizadas históricamente para sustento de la estructura de distribución de poder del patriarcado. Este es uno de los elementos que condiciona la percepción “naturalizada” de la diferenciación de género, a partir de los atributos y funciones para hombres y mujeres, diseñados y controlados por la sociedad. De esta manera se considera lógico que los hombres (más fuertes, activos, ágiles y extrovertidos) desempeñen más adecuadamente tareas de dirección, con esfuerzo físico, de acción, que involucran una mayor concentración del poder; mientras que las mujeres (más 57 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS débiles, pasivas, dóciles e introvertidas) se destacan en las labores domésticas, de poca interacción social y de subordinación. De modo que se justifica con elementos de la constitución anatómica de los sexos la inequidad social de acceso y control del poder. Con el decursar histórico la expresión de los mecanismos de asignación y control del poder a partir de las distinciones de género se han convertido en mecanismos más sutiles y discretos. La mirada tradicional e ingenua del cuestionamiento del desequilibrio de poder entre mujeres y hombres podría percibir cambios radicales significativos; pero un análisis global nos muestra que los cambios encubren un perfeccionamiento de las manifestaciones del sexismo, puesto que aún las grandes fuentes de administración del poder en la mayoría de las sociedades (el poder político, el económico y el militar) están en manos de los hombres. Las instituciones sociales participan en la adjudicación del poder mediante los procesos de socialización del individuo. La familia, la escuela, las organizaciones sociales, las instituciones religiosas, los medios masivos de información participan en este proceso a través de la educación de los individuos y condicionando las expectativas sociales afines con un modelo sexista. De esta manera, las características atribuidas a la masculinidad y la femineidad se perciben como naturales, inamovibles y necesarias para mantener el equilibrio social. Este proceso se gesta desde mucho antes del nacimiento, mediante las expectativas de los padres y del resto de los familiares sobre las cualidades y proyecciones del futuro individuo. Elementos tan cotidianos y aparentemente ingenuos como los juegos infantiles responden a esta orden sexual imperante. Juegos típicos de varones, como los pistoleros, las bolas o canicas, el trompo con cordel, condicionan en los participantes habilidades para la competencia, el esfuerzo físico, el liderazgo y las relaciones económicas; mientras que juegos típicos de hembras, como las muñecas o las casitas, están más orientados para la formación de habilidades de colaboración, asistencia y que impliquen menor esfuerzo físico. La educación y formación sexista de los individuos son interiorizadas por cada sujeto y se integran a su subjetividad a través de la identidad de género, es decir, en la forma que cada individuo se identifica con los atributos y funciones diseñados para su sexo. De esta manera los varones se identifican con los atributos que distinguen a la masculinidad y las hembras con los de la feminidad. El grado de interiorización de los atributos genéricos varía de un sujeto a otro. Existen personas que aunque poseen una identidad de género coherente con su sexo manifiestan con intensidad atributos característicos del otro género: varones que siendo masculinos manifiestan rasgos de sensibilidad o son muy colaboradores o poco 58 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS activos; mientras que existen mujeres que aunque femeninas tienden a la competitividad, expresan poco sus sentimientos o son poco delicadas en sus gestos. El nivel de interiorización de los atributos de género no está dado por la orientación sexual del individuo: existen hombres y mujeres homosexuales muy masculinos y femeninas respectivamente, mientras que hombres y mujeres heterosexuales se manifiestan afeminados o masculinizados, según sea el caso. También existen personas, que sintiéndose a gusto con su sexo, manifiestan una identificación con los atributos (y funciones) diseñadas para personas de otro género. De esta forma existen varones que se identifican con las cualidades que distinguen a la femineidad y mujeres con las de la masculinidad. Generalmente se centra en el vestuario y es por lo que se les denomina a estas personas como travestis. El travestismo no es sinónimo de homosexualidad, también puede expresarse en personas heterosexuales, y genera una fuerte censura por gran parte de la sociedad. Para muchas personas el travestismo es un acto incomprensible y una gran violación de las normas sociales. Las críticas y cuestionamientos sobre los travestís tienen una fundamentación más moral que científica. Existe una tipología de travestismo que distingue entre: - El transformista: la persona que se viste y se manifiesta como de otro sexo con fines culturales (no sólo como la imitación de artistas femeninas sino en la representación y en la satirización de la feminidad). - El fetichista: la persona utiliza una o más prendas del otro sexo para alcanzar excitación y placer sexual. - El propiamente travesti: la persona necesita usar prendas de otro sexo para sentirse bien psicológicamente; se siente más confortado. Algunas personas lo hacen ocasionalmente, por miedo al rechazo social, mientras que otras lo hacen la mayor parte del tiempo, impulsados por una necesidad de autorrealización y desafiando las normas sociales. En esta tipología también se podría incluir a los transexuales pero existen particularidades de la identidad sexual de estos individuos que son muy específicas, como veremos en el siguiente acápite. Identidad sexual y orientación sexual. Dimensiones del sexo psicológico. La trascendencia de la sexualidad en la personalidad y en el mundo vivencial de los seres humanos es extremadamente significativa. El deseo, el erotismo, el autoerotismo, la intimidad, la necesidad de contacto físico, el singular vínculo afectivo, la representación de sí mismo, son elementos que dinamizan el comportamiento humano, matizándolo como sexuado. Los aspectos psicológicos de la sexualidad cubren una gama muy amplia y de compleja interacción, por lo que haremos referencia a dos de los elementos más importantes. 59 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS La identidad sexual es definida como la percepción que posee un individuo de sí mismo como ser sexuado, como hombre o como mujer; es decir, cómo se ve, se siente y se manifiesta a partir de las cualidades de su sexo biológico y la imagen que tiene del mismo. Es la conciencia que tenemos de nuestro sexo, la forma de percibirnos y de sentirnos en relación con el mismo. Cuando una persona posee atributos sexuales (sexo biológico) de hembra y se percibe y se siente como mujer, decimos que esta persona tiene una identidad sexual coherente. Lo mismo ocurre cuando la persona posee atributos sexuales de varón y se percibe y se siente como hombre. Sin embargo, existen otras dimensiones de la identidad sexual que no caben en este orden que entendemos como lo coherente. Nos podemos encontrar personas que poseen los atributos sexuales de un sexo pero se sienten y se perciben del otro sexo. Por ejemplo, un individuo que posee pene, testículos, hormonas sexuales masculinas, cromosómicamente es XY, pero se siente y piensa como mujer. Psicológicamente suele percibirse como si estuviese atrapado en un cuerpo que no le pertenece, como si hubiese nacido con el cuerpo equivocado. Es lo que se denomina como persona transexual, y al fenómeno se le denomina transexualismo. El transexualismo es más frecuente de hombre para mujer (una persona con cuerpo de hombre pero con una identidad sexual de mujer), que de mujer para hombre. Las razones que sustentan estas diferencias no están suficientemente explicadas, por lo que no nos aventuraremos en hipótesis difíciles de comprobar. El transexualismo se distingue de lo que se denomina como travestismo. Pudiesen semejarse en la apariencia (ya que tanto el transexual como el trasvesti son personas de un sexo biológico que muestran una apariencia física del otro sexo), pero, esencialmente, son diferentes. Las vivencias sobre su sexualidad y la forma en que se percibe una persona transexual son muy diferentes de las vivencias y de la manera de percibirse de un individuo que se trasviste. El transexualismo se asume por los académicos como un trastorno de la identidad sexual, aunque algunos especialistas comienzan a considerarlo como una variante de la identidad sexual: alude a una persona que posee una identidad sexual que no es coherente con su sexo biológico pero que no significa necesariamente desajuste mental. Es erróneo pensar que una persona transexual es aquella que se somete a una intervención quirúrgica para la reasignación sexual, es decir, para transformar la apariencia de los genitales, por ejemplo: amputar el pene y los testículos y crear en su lugar una vagina. Lo que determina que a alguien se le considere transexual son sus vivencias y la manera en que se percibe sexualmente y no los deseos o expectativas sobre la reasignación sexual. Muchas personas tran60 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS sexuales no desean someterse a la intervención quirúrgica y se sienten cómodos con disponer de una identidad legal coherente con la identidad sexual que poseen, ya sea femenina (transexual de hombre para mujer) o masculina (transexual de mujer para hombre). Otros autores (Ryan & Futterman, 1997; Isay, 1996; Cáceres, Pecheny y Terto, 2002) relacionan el concepto de identidad sexual con la integración sin costo emocional de la orientación sexual a la vida social (grupos de interacción, familia, amigos, trabajo, vecinos). Para ellos la identidad sexual se expresa en la asunción de un estilo de vida que manifieste la coherencia de la esfera erótico-sexual con el resto de la personalidad del individuo, sin generarle esto malestar psicológico; por el contrario, esta integración es fuente de desarrollo de la personalidad. En la medida que una persona que posee una orientación sexual no heterosexual se siente satisfecho consigo mismo, se respete y crea que los demás deban respetarlo sin importar su orientación sexual y, además, no crea que sea necesario ocultar o disimular esta orientación sexual será una persona más plena y con mayores posibilidades de ser feliz y enfrentar los retos que la vida pueda presentarle. Esta perspectiva parte del criterio de que cuando alguien que posee una identidad sexual no asumida, es decir, una persona que no acepta su orientación sexual o cree que es necesario aparentar ser heterosexual para ser aceptada socialmente, es un individuo vulnerable psicológicamente, con dificultades para alcanzar estabilidad emocional y manejar los retos y dificultades de la vida. Pero para poder profundizar sobre el tema de los aspectos psicológicos de la sexualidad es necesario definir lo que entendemos por orientación sexual. La orientación sexual está dada por la orientación del deseo sexual de una persona, la orientación psicosexual del deseo erótico, y contempla tres dimensiones esenciales: - Heterosexual: la persona se siente atraída y obtiene placer sexual a través de las relaciones sexuales mantenidas con personas del otro sexo. - Bisexual: la persona se siente atraída y obtiene placer sexual a través de las relaciones mantenidas, indistintamente, con personas de uno u otro sexo. - Homosexual: la persona se siente atraída y obtiene placer sexual a través de las relaciones mantenidas con personas de su mismo sexo. También se hace referencia a la orientación asexual, definiendo como tal a las personas que no sienten atracción ni por hombres ni por mujeres, ni vivencian malestar alguno por ello. La forma en que se da esta no manifestación de los deseos sexuales no genera inestabilidad emocional en los individuos ni perjudica a otros; no se puede identificar como una expresión de las parafilias o un tipo de disfunción sexual. 61 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS El hecho que hagamos precisas diferenciaciones entre las variantes de orientación sexual no significa que podamos extrapolarlo con facilidad a la vida cotidiana. Una persona heterosexual expresa su orientación sexual de una manera diferente a lo que lo expresa otro heterosexual. No existen dos personas con igual orientación sexual que la expresen del mismo modo. La sexualidad humana se expresa como continua y esto se refleja en la orientación de deseo sexual. No existen claras diferencias que distingan individualmente las variantes de orientación sexual aunque podamos conceptualizarlas con fines cognoscitivos. La orientación sexual posee como cualidad la estabilidad. Aunque se manifiesta durante la vida sexual activa (que se inicia en la adolescencia y continúa durante la adultez) existen evidencias de su formación desde edades muy tempranas, entre los 2-3 años de vida. Algunos estudios han arrojado que las personas no heterosexuales se sienten diferentes desde la niñez, entre los 4 y 6 años de edad, en edades donde no existe una estructuración del deseo sexual, y no es hasta unos años después que se tiene conciencia de los primeros sentimientos de atracción homosexual (9-10 años) (Ryan & Futterman, 1997). Es decir, la orientación sexual podría tener sus raíces en momentos en los cuales no existen evidencias para su manifestación, lo cual se opone a la creencia de que la orientación sexual surge o se forma durante la adolescencia. La influencia educativa sobre la orientación sexual parece ser muy limitada en muchos casos que manifiestan una orientación no heterosexual. La educación influye más en la interiorización de los atributos de género (en la manera de mostrarse la persona como masculina o femenina) que en la determinación y dirección del deseo sexual (Isay, 1996). Hablar de estabilidad no significa que la orientación sexual sea estática. Una persona puede manifestarse durante un tiempo de su vida con una variante de orientación sexual y luego manifestar otra. Aunque la mayoría de las personas en la adolescencia o en la adultez temprana muestran o toman conciencia de una orientación sexual determinada y se mantiene de esta manera a todo lo largo de la vida, existen registros de casos que documentan situaciones diferentes. Existen personas que han manifestado durante la mayor parte de su adultez una variante de orientación sexual, sin mostrar malestar ni trastornos con su sexualidad, y luego, sin explicación aparente, comienzan a manifestar otro tipo de variante de orientación sexual. En la medida que se adquieren más conocimientos sobre las dimensiones y funcionamiento de la sexualidad humana, surgen nuevas interrogantes. Orientación sexual y comportamiento sexual no es lo mismo. La orientación no conlleva necesariamente una conducta sexual, ni por el 62 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS comportamiento sexual se puede determinar con certeza si una persona es heterosexual, homosexual o bisexual. Una persona puede poseer sentimientos de atracción sexual hacia personas de su mismo sexo aunque tenga prácticas heterosexuales; o puede tener prácticas sexuales con personas de su mismo sexo aunque no se sienta atracción homoerótica. El comportamiento sexual (visto como prácticas sexuales) suele manifestarse de una manera muy íntima, de modo que sólo percibimos lo que el sujeto manifiesta públicamente, sin embargo, ignoramos todo lo que acontece en sus espacios más privados. Por otra parte, el comportamiento sexual de una persona en un momento de su vida puede ser eventual y no volverse a repetir nuevamente, lo cual sería un comportamiento ocasional o transitorio y no cotidiano o frecuente. Determinar la orientación sexual de una persona a partir de su comportamiento es una tarea sumamente incierta. ¿Cómo definiríamos la orientación sexual de un hombre quien haya mantenido relaciones sexuales con mujeres en el comienzo de su vida sexual activa y luego sólo mantuviese relaciones con otros hombres? ¿Bisexual, homosexual u homosexual en transición? ¿Y si este hombre, después de varios años de relaciones con hombres reinicia sus encuentros sexuales con mujeres? ¿Se volvió heterosexual o es bisexual, o es un tipo específico de persona homosexual? Tampoco debemos identificar la orientación sexual con la interiorización de los atributos y roles de género (como ya hemos visto). Es un mito el que los hombres homosexuales son afeminados, débiles, cobardes y extremadamente susceptibles, existen muchos hombres homosexuales que son masculinos, fuertes, vigorosos, y valientes. También existen muchas mujeres homosexuales que son delicadas, tiernas y muestran fragilidad. El comportamiento homosexual puede ser más extendido en nuestra sociedad de lo que pensamos o pudiéramos imaginar. Estudios clásicos realizados en Estados Unidos a finales de la década del 40 (Kinsey, 1948, Schifter, 1989) arrojan resultados que conmovieron lo que se entendía por comportamiento homosexual y en la actualidad aún poseen relevancia. Estos estudios indicaron que el 50% de los hombres no son exclusivamente heterosexuales en su vida adulta. El 37% ha tenido algunas experiencias homosexuales que los han llevado al orgasmo entre la adolescencia y la vejez. Por esta razón en el ámbito de la lucha contra el VIH/SIDA se ha utilizado la categoría de hombres que tienen sexo con hombres (HSH) para hacer referencia y promover la toma de conciencia en uno de los grupos más vulnerable a la epidemia. Este concepto se basa en criterios comportamentales, es decir, al comportamiento sexual (ocasional o 63 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS cotidiano) de algunos varones y no se reduce al concepto de homosexualidad. El grupo de los HSH lo pueden integrar individuos de diferentes orientaciones sexuales (homosexual, bisexual o heterosexual) en dependencia de sus prácticas sexuales. La respuesta sexual Tanto para los hombres como para las mujeres la respuesta sexual se puede dividir con fines descriptivos en cinco fases o etapas que se expresan secuencialmente: deseo, excitación, meseta, orgasmo y resolución. Sin embargo, en la práctica, no siempre es posible distinguir con claridad una fase de otra. El deseo erótico es el deseo o la necesidad de actividad sexual, es el apetito o impulso que lleva a buscar una experiencia sexual o sentirse receptivo a ella. A veces, las personas se sienten sexualmente motivadas de una manera espontánea, sin ningún elemento desencadenante, y sienten la necesidad de buscar una experiencia sexual; otras veces, ante la presencia de un individuo atractivo o la existencia de una situación determinada (caricias, besos, insinuaciones) se incrementa el apetito sexual. Esta etapa está caracterizada por la predisposición o motivación para la relación sexual, es la preparación subjetiva para la actividad sexual. El deseo sexual y el placer que se puede disfrutar en una relación sexual pueden ir acompañados o no de un vínculo amoroso. La relación sexual satisfactoria no está determinada exclusivamente por la presencia del amor en el vínculo de la pareja. Las otras etapas de la respuesta sexual tienen clara expresión fisiológica. Sin embargo, los cambios fisiológicos no se comportan de forma similar en todas las personas e, incluso, en un mismo individuo existen diferencias a lo largo de su vida. Tanto en el hombre como en la mujer, la fase de excitación de la respuesta sexual se produce por la vasocongestión genital. Esto significa que los vasos sanguíneos de los genitales se dilatan y se llenan de sangre. La vasocongestión genital se produce por acción del sistema nervioso autónomo. Esto significa que este fenómeno no está bajo el control voluntario de la persona. Es decir, que un individuo no puede proponerse la secreción en su vagina o la erección de su pene de la misma manera que se propone levantar un brazo. Los brazos y las piernas están bajo control del sistema nervioso voluntario. La excitación sexual viene después de la estimulación, y ocurre solamente si la persona está relajada y dispuesta para el placer. Si la persona se esfuerza demasiado por provocarla, es incluso probable que no se produzca, porque el esfuerzo voluntario puede inhibir una respuesta involuntaria. 64 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS En esta fase las personas suelen sentirse “acelerados” y “calientes”; es un proceso donde las vivencias de estimulación sexual van en incremento progresivo. La fase de meseta se caracteriza por una estabilización de la excitación, de ahí su nombre. En la meseta la persona siente un elevado disfrute sexual pero que es estable, mantenido en el tiempo. El período de duración de esta etapa varía de un individuo a otro. Constituye preámbulo del orgasmo, por lo que también es denominada plataforma orgásmica. El orgasmo se caracteriza por una vivencia intensa de placer sexual, es el momento de mayor disfrute. Para el común de las personas significa la fase final y meta de la relación sexual. El orgasmo masculino lo desencadena la estimulación rítmica del pene (especialmente del glande), y hasta hace poco tiempo se creía que el orgasmo femenino lo provocaba la estimulación de la vagina. Pero en la actualidad se dispone de datos que indican que esto no es así. La penetración en la vagina es extremadamente placentera y gratificadora para la mayoría de las mujeres, pero el orgasmo suele desencadenarse por estimulación rítmica del clítoris. La estimulación directa del clítoris o de la zona inmediatamente circundante puede dar lugar a un orgasmo sin penetración en la vagina. Esto es lo que ocurre con la masturbación y en la relación manual y oral con una pareja. Desde luego, el orgasmo puede también producirse durante el coito, porque en estos momentos el clítoris es estimulado indirectamente: los movimientos de entrada y salida del pene constituyen una fricción del capuchón del clítoris, estimulando así este órgano. La fase de resolución o período refractario es el período de tiempo que prosigue al orgasmo y que es necesario para la recuperación fisiológica para un nuevo orgasmo; es cuando se retorna al momento de no excitación (al menos en los hombres). Una diferencia importante entre la sexualidad masculina y la femenina consiste en el hecho de que la mujer no tiene un período refractario de duración considerable entre distintos orgasmos. Incluso a una edad avanzada, la mujer puede tener muchos orgasmos inmediatamente sucesivos, sin disminuir su nivel de excitación por debajo de la meseta. Este fenómeno se denomina “orgasmos múltiples”. Sin embargo, existen mujeres que sólo logran un orgasmo de elevada intensidad. Diferentes fuerzas físicas y psíquicas pueden afectar la respuesta sexual de una persona. Si alguien está enfermo, deprimido o angustiado, bajo los efectos de ciertos medicamentos, ha interiorizado el mensaje de que la sexualidad es algo malo, o se ha sentido rechazado o desvalorizado, es probable que no se sienta totalmente satis65 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS fecho en las relaciones sexuales o perciba que no es suficiente o que algo “anda mal”. Por otra parte, si alguien está en buena forma física, si su estado de ánimo es bueno, si considera que la sexualidad es algo positivo, y sobre todo si está enamorado o si está en compañía de una persona que le atrae, es probable que se sienta muy dispuesto a una relación sexual, disfrute y genere disfrute en sus relaciones sexuales. Disfunciones sexuales Las disfunciones sexuales son alteraciones en alguna o algunas de las fases de la respuesta sexual o situaciones en las que aparece dolor durante el coito. Existe un menoscabo del desempeño sexual que afecta el disfrute de uno o ambos miembros de la pareja, lo cual suele ser fuente de intensa angustia, ansiedad y frustración. Para que una alteración de la respuesta erótica se considere una disfunción sexual tiene que haberse mantenido en el tiempo y haber generado malestar en la persona o crear problemas en la relación de pareja. El diagnóstico de las disfunciones sexuales debe ser realizado por un especialista, o un grupo especializado para su atención, que tendrá en cuenta diversos factores, como la edad, experiencia sexual de la persona, frecuencia y cronicidad del síntoma, malestar subjetivo, repercusión en la vida sexual de la pareja y efecto sobre otras áreas de actividad. La clasificación de las disfunciones sexuales es la siguiente: - Trastorno del deseo: ausencia o disminución del deseo sexual, trastornos por aversión al sexo. - Trastornos de la excitación: trastornos de excitación en la mujer, trastornos de erección en el varón (disfunción sexual erectil). - Trastornos del orgasmo: anorgasmia masculina y femenina, eyaculación precoz, eyaculación retardada. - Trastornos sexuales por dolor: dispareumia masculina y femenina, vaginismo. - Disfunciones sexuales debidas a enfermedades médicas, disfunciones producidas por medicamentos, drogas, etc. A continuación profundizaremos en algunas de ellas, las más frecuentes. 1. Disfunciones sexuales comunes para hombres y mujeres: - Disminución o ausencia del deseo sexual: se manifiesta como la disminución significativa o ausencia del deseo sexual, aun cuando existe óptima capacidad de respuesta física sexual. Las personas comienzan a percatarse de que pierden el apetito sexual, que están menos predispuestos para las relaciones sexuales a pesar de sentirse muy atraídos por sus parejas e, incluso, enamorados. Esto puede generar serios conflictos en la relación puesto que la pareja puede sentirse rechazada, que ha disminuido la atracción sexual o que existen intereses por otras personas. 66 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Cuando la pérdida de deseo es motivada por ausencia de interés se denomina Deseo Sexual Inhibido, pero si se debe principalmente a un miedo insuperable se considera Aversión Sexual. - Coito doloroso o dispareunia: se presenta tanto en mujeres como en hombres, tanto al principio del coito, en el lapso intermedio o después del mismo. En los hombres el dolor aparece fundamentalmente en el pene, aunque también se puede sentir en los testículos o en los órganos internos (asociándose con la próstata y la vesícula seminal), mientras que en las mujeres puede aparecer en el interior de la vagina, en el fondo de la región pélvica o en el abdomen. 2. Disfunciones sexuales exclusivas en mujeres: - Vaginismo: es la dificultad o incapacidad de penetrar la vagina debido a la contracción involuntaria de los músculos que bordean el tercio exterior de la misma. - Anorgasmia: anteriormente denominado frigidez. Es la incapacidad o gran dificultad para lograr el orgasmo. 3. Disfunciones sexuales exclusivas en hombres: - Disfunción sexual eréctil: fue conocida anteriormente como impotencia, término que está en desuso. Se manifiesta por la incapacidad de alcanzar o mantener una erección lo bastante firme como para realizar el coito. La ausencia total de la erección es poco frecuente, excepto como consecuencia de enfermedades orgánicas o uso de fármacos; lo más común es que el individuo alcanza erecciones parciales, poco firmes para lograr la penetración. En ocasiones se logran erecciones firmes, pero desaparecen rápidamente cuando se intenta la penetración. También se dan casos de personas que tienen erecciones firmes en ciertas circunstancias pero en otras no. Los episodios aislados de pérdida de la erección no se consideran disfunción, de esta manera se dan en casi toda la población masculina. - Eyaculación precoz: también se le conoce como eyaculación rápida. Es un trastorno sexual muy común pero difícil de delimitarlo con precisión, dado que no es posible establecer un período de tiempo que defina la eyaculación precoz. Se considera que estamos en presencia de un caso de eyaculación precoz cuando el hombre considera que es muy rápida la consecución del orgasmo o que tiene insuficiente control voluntario de la eyaculación o genere malestar en la pareja. - Eyaculación retardada: es lo contrario de la eyaculación precoz. Existe una gran inversión de tiempo y esfuerzo durante la excitación que, en ocasiones, es tardía. Puede existir la vivencia de incapacidad para lograr el orgasmo y de tener eyaculación. En algunos hombres se puede perder la erección por pérdida de la excitación dado el prolongado tiempo del acto sexual. - Inhibición de la eyaculación: es la incapacidad de eyacular a pesar de existir una erección firme y haber alcanzado una ele67 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS vada excitación sexual. Es muy similar a la eyaculación retardada pero en este caso no se llega al orgasmo. - Eyaculación retrógrada: se distingue de la anterior por existir un cierre en el estanco del cuello de la vejiga en el momento del orgasmo, por lo que el semen es introducido en la vejiga, donde se mezcla con la orina. Orientaciones básicas para la atención de una persona con sospecha de disfunción sexual Cuando existe la sospecha de que un cliente es portador de una disfunción sexual debemos prepararlo para la derivación con los especialistas en el tema que pueden brindarle la ayuda que necesita. Esta preparación debe tener presente los siguientes aspectos: 1. Legitimar la posibilidad de tener una disfunción sexual. 2. Aludir a la necesidad de ayuda especializada (consultas de terapia sexual) y hacer referencia a las condiciones de privacidad y confidencialidad de este tipo de consultas. 3. Hacer referencia a que las disfunciones sexuales pueden ser más frecuentes de lo que se sospecha pero muchas personas no lo explicitan, por lo que permanecen ocultas. 4. Cualquier persona de cualquier edad puede padecer de disfunciones sexuales. 5. Cuestionar las actitudes culpabilizadoras, donde se vean las disfunciones como un problema del individuo y no de la pareja. Es necesario contar con el involucramiento de ambos miembros de la pareja para realizar un tratamiento rápido y efectivo. 6. La disfunciones ocasionales o en personas al inicio de su vida sexual pueden ser parte del desarrollo de la sexualidad, como parte de un proceso de aprendizaje por experimentación. Pueden ser rebasadas espontáneamente. 7. El éxito terapéutico es elevado. Parafilias El término normalidad en lo referente a la sexualidad es mucho más amplio de lo que la mayoría de las personas asume. En la medida de que el comportamiento sexual sea voluntario, consentido por personas con capacidad para decidir, genere placer y no cause daño físico o psicológico a las personas involucradas se considera “normal”. Existen comportamientos que no cumplen estas condiciones y que se caracterizan además por ser persistentes, compulsivos, donde el individuo siente que no tiene poder regulador, generan disconformidad, y constituyen la forma exclusiva o casi exclusiva de generar excitación sexual. La persona quisiera que fuera de otra manera y no puede evitarlo. Sin embargo hay orientaciones del deseo sexual que son consideradas incompatibles con la salud, o sea, trastornos de la orientación 68 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS del deseo. Tal es el caso de las parafilias, término amplio que define a un grupo de conductas con las siguientes características: El objeto del deseo es: - Un animal o una cosa (prendas de vestir, instrumentos, etc). - Una persona que: No consciente o no tiene capacidad para consentir concientemente (Ej: un niño, una persona que sea violada); Sufre daño (el sujeto, la pareja o el grupo social) -Caracterizándose esta conducta por ser: Persistente; La forma exclusiva o casi exclusiva de excitación sexual. Estas conductas son más frecuentes en los varones que en las hembras, no obstante son minoritarias. A veces van asociadas a incapacidad para la actividad sexual recíproca, ya que pueden incluir exigencias inaceptables para la pareja y deficiencias en habilidades sociales. Para una mejor comprensión presentamos la clasificación de las parafilias del DSM-IV: Típicas: fetichismo, exhibicionismo, travestismo, voyeurismo, zoofilia, sadomasoquismo y paidofília. Atípicas: coprofília, necrofilia, froteurismo, escatología telefónica y urofilia. Existen otras pero dada su poca incidencia no aparecen en esta clasificación. Fetichismo Consiste en la dependencia de algún objeto inerte como estímulo para la excitación y la gratificación sexuales, constituyendo el fetiche la fuente más importante de estimulación sexual o esencial para la respuesta sexual satisfactoria. Muchos fetiches son extensiones del cuerpo humano, tales como artículos de ropa o calzado. Otros objetos frecuentes se caracterizan por alguna textura particular como la goma, el plástico o el cuero. La importancia de los fetiches varía según el individuo. En algunos casos sirven simplemente como refuerzo de la situación sexual conseguida por medios ordinarios (por ejemplo, haciendo que la pareja lleve una determinada vestimenta). Travestismo fetichista Consiste en llevar ropas del otro sexo con el objetivo principal de obtener excitación sexual. El travestismo fetichista debe distinguirse del fetichismo simple en el sentido de que los objetos fetichistas o las ropas no sólo se llevan, sino que se llevan para crear la apariencia de ser una persona del sexo opuesto. Normalmente se lleva más de un artículo y a menudo una vestimenta completa incluso con peluca y maquillaje. El travestismo fetichista se distingue del travestismo transexual por su clara asociación con la excitación sexual y con el 69 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS fuerte deseo de quitarse la ropa una vez que se alcanza el orgasmo y la excitación sexual declina. Generalmente en los transexuales hay antecedentes de travestismo fetichista como fase anterior y probablemente en estos casos representa una etapa del desarrollo del transexualismo. Exhibicionismo Consiste en una tendencia persistente o recurrente a exponer los órganos genitales a extraños (normalmente del sexo opuesto) o a gente en lugares públicos, sin incitarlos o intentar un contacto más íntimo. Normalmente, aunque no siempre, suele haber una excitación sexual durante el período de la exposición y el acto suele terminar en una masturbación. El exhibicionismo se limita prácticamente a varones heterosexuales, que se exhiben a mujeres adultas o adolescentes, normalmente confrontándolas, desde una distancia de seguridad, en lugares públicos. Para algunos el exhibicionismo es su única descarga sexual, pero otros simultanean este comportamiento con una vida sexual activa, con relaciones de larga duración, a pesar de que sus impulsos exhibicionistas pueden ejercer una mayor presión en momentos de conflicto en sus relaciones. La mayoría de los exhibicionistas encuentran que sus impulsos son difíciles de controlar y son vivenciados como propios. Si el testigo se sorprende, asusta o impresiona, suele aumentar la excitación del exhibicionista. Escoptofilia (voyeurismo) Se trata de una tendencia persistente o recurrente a mirar a personas comprometidas en una actividad sexual o íntima, como desnudarse, lo que lleva normalmente a una excitación sexual y a una masturbación, que se realiza sin que se sea observado por las otras personas. Paidofilia Se trata de una preferencia sexual por los niños, normalmente de edad prepuberal o de la pubertad temprana. Algunos de los afectados sienten atracción únicamente por las chicas, otros únicamente por los chicos y otros están interesados por ambos sexos. La paidofilia se presenta raramente en mujeres. Los contactos entre adultos y adolescentes sexualmente maduros es algo socialmente reprobado, en especial si los que intervienen son del mismo sexo, pero esto no se acompaña necesariamente de una paidofilia. Un incidente aislado, en especial si el que lo lleva a cabo es un adolescente, no es signo de la presencia de la tendencia persistente o predominante que se requiere para el diagnóstico. No obstante, entre los afectados de paidofilia, hay varones que manifiestan una preferencia por una relación de pareja sexual adulta, pero que debido a que hay reiteradas frustraciones en sus intentos de contactos adecuados, los han sustituido una manera habitual por niños. 70 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Sadomasoquismo Consiste en una preferencia por actividades sexuales que implican el infringir dolor, humillación o esclavitud. Si la persona prefiere ser el receptor de tales estimulaciones entonces se denomina masoquismo, pero si es quien lo ocasiona se trata entonces de sadismo. A menudo un individuo obtiene excitación sexual tanto de actividades sádicas como de masoquistas. Es frecuente que se utilicen en grados leves de estimulación sadomasoquista para potenciar una actividad sexual que por lo demás sería normal. Sin embargo si constituye la fuente más importante para la estimulación o si es necesaria para la gratificación sexual es que estamos ante el sadomasoquismo. Perforarse el prepucio o los pezones puede formar parte del repertorio sadomasoquista, al igual que el empleo de la estrangulación o anoxia para intensificar la excitación sexual. Existen además otras formas de inclinaciones sexuales y actividades consiguientes que son consideradas por los especialistas como poco frecuentes pero que pueden estar menos referenciadas como parafilias. En ocasiones algunas de estas manifestaciones sexuales pueden estar condicionadas por las características socioculturales de determinadas regiones o comunidades. Entre éstas están: Escatología telefónica Es un tipo de parafilia asociada al desarrollo tecnológico del siglo XX y consiste en la realización persistente de llamadas telefónicas obscenas para excitarse sexualmente e incluso para lograr el orgasmo. La mayoría de las personas que realizan estas llamadas son hombres, que se caracterizan por poseer serias dificultades para establecer relaciones interpersonales. Existen tres tipos de llamadas: - Las que el comunicante hace alarde de su masculinidad y describe exhaustivamente sus atributos sexuales y la forma en que se masturba. - Las que el comunicante amenaza, intenta hacer sentir víctima a la persona que recibe la llamada diciéndole que la tiene vigilada, que la puede sorprender, etc. - Las que el comunicante intenta que la persona que recibe la llamada le revele información sobre su intimidad. Este tipo de parafilia es muy común en los servicios de ayuda telefónica, como es el caso de LineAyuda. Froteurismo Se manifiesta como la excitación sexual que se obtiene de la frotación de los órganos sexuales contra el cuerpo de una persona en situaciones de aglomeración pública. 71 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Bestialismo Consiste en las relaciones sexuales con animales. Para algunos autores, cuando esta práctica se considera el método preferido o exclusivo para la obtención de placer sexual se denomina zoofilia. Es más común en las zonas rurales que en las urbanas pero existen personas que poseen animales domesticados para este tipo de práctica sexual. Apotemnofilia Es la preferencia por parejas con alguna anomalía anatómica especial, como un miembro amputado. Bibliografía Urofilia Consiste en la obtención de placer sexual mediante el contacto o la ingestión de la orina. Coprofilia Se refiere al placer sexual obtenido al untarse con las heces fecales. Necrofilia Se define como la excitación sexual que se experimenta mediante la visión o el contacto con cadáveres. Ante la presencia de un sujeto con sospecha de una parafilia es necesario recomendarle la ayuda especializada que puede encontrar en las consultas de orientación y terapia sexual y prepararlo para la derivación. Muchos sujetos que padecen parafilias se resisten a concurrir a este tipo de consultas por temor al rechazo y desconfianza en la capacidad profesional para resolver el problema. Es importante que hagamos la derivación a especialistas previamente identificados para asegurarnos que sean bien recibidos y atendidos. La probabilidad de no concurrir a la referencia es muy alta. 72 1. Artiles de León, J.I: “Salud y violencia de género” en Sarduy y Alfonso: Género: salud y cotidianidad. Editorial CientíficoTécnica, La Habana, 2000. 2. Asturias, L.E: Construcción de la masculinidad y relaciones de género. Exposición en Foro: “Mujeres en lucha por la igualdad de Derechos y Justicia Social”. Ciudad de Guatemala, 5 de marzo de 1997. 3. Bockting, W and Coleman, E: Gender dysphoria. 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Figura 1 Virus de lnrnunodeficiencia Humana (VIH l): 1) Capa bilipídica 2) Espiga de envoltura de la glicoproteína (gp120) 3) Glicoproteína de la membrana (gp41) 4) Nucleocápsida (p17/p18) 5) Core proteico (p24) 6) Reversotranscriptasa 7) ARN viral (p7/p9) Algunos adujeron que era un arma creada por el hombre para la guerra biológica, otros dijeron que había pasado de algunas especies de monos al hombre, y que surgió de una mutación genética que lo hizo más letal, incluso no faltó quien lo relacionó con una maldición divina, como castigo a las conductas pecaminosas de los hombres. En nuestros días la teoría más aceptada sobre el origen del VIH, basada en evidencias de sueros guardados hasta la fecha, es que este virus existía ya desde la década del 50, y que se diseminó fácilmente por el mundo. Esto coincidió con la liberación sexual de los años sesenta y la facilidad de comunicaciones rápidas en el orbe. ¿Qué es el Virus de lnmunodeficiencia Humana, a qué familia pertenece y cómo está compuesto? El VIH es el virus que causa el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida; es miembro de la familia de los Retrovirus y de la subfamilia de los Lentivirus, presenta una cubierta externa y un mensaje genético compuesto por ARN, también una enzima (Reversotranscriptasa) que convierte el ADN de la célula hospedera en ARN viral. La membrana celular está formada por una capa bilipídica donde están las glicoproteínas: gp120 y gp41, las cuales se van a unir al receptor CD4. Dentro de esta membrana está la nucleocápsida compuesta por la proteína p 17 y dentro de unidades de proteína p24. ¿Cuántos tipos de VIH se conocen? Se reconocen dos tipos de virus: el VIH 1 y el VIH 2. Ambos se distinguen por el examen de anticuerpos (ELISA para VIH y el Western Blot), pero los dos causan SIDA de manera indistinguible. No obstante existen algunas diferencias. El VIH 2 parece ser más difícil de transmitir, y el período de incubación es más prolongado. También los diferencia su distribución geográfica, pues el VIH 1 está diseminado en todo el mundo, y es el predominante; en cambio el VIH 2 se encuentra sobre todo en África Occidental. (Figura 1) 73 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS A su vez dentro del VIH 1 hay dos grandes grupos: el M (main) y el O (outlier). Los virus que causan la gran mayoría de las infecciones por VIH 1 diagnosticadas y estudiadas en el mundo son del grupo M. El grupo denominado O incluye un pequeño número de infecciones descubiertas en África. Estos últimos son genéticamente muy diferentes al grupo M y como consecuencia pueden no manifestarse en las pruebas normales de laboratorio que se utilizan para el VIH 1. En el grupo predominante del VIH 1 o sea el M, se han identificado hasta 8 subtipos de la A hasta la H, la mayoría se encuentra en diferentes regiones africanas. El subtipo B es el más común en América y predomina en hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres, aunque también se ve en población heterosexual. El VIH 2 está subdividido en dos subtipos principales, el A y el B, mientras dos subtipos adicionales el C y el E han sido ya identificados. ¿Cómo es el proceso en que el VIH causa el SIDA? El SIDA o Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida se produce por el deterioro crónico del sistema inmunológico, producido por el VIH. Tomando como ejemplo una relación sexual no protegida y en la cual una de las partes esté previamente infectada, sucede que después que el virus entra en el organismo, este va siendo reconocido como antígeno por el sistema inmunológico. Recordemos que el virus en la superficie cuenta con la glicoproteína 120 , la cual es el elemento de unión del VIH con la célula hospedera a través del sitio de anclaje que se corresponde con el receptor CD4 de células tales como el linfocito CD4 (que es la célula más afectada), macrófagos y otras células del sistema inmune; por este medio el virus introduce su material genético a la célula y este, por medio de la enzima reversotranscriptasa, lo cambia a ADN, quedando esta información guardada en el núcleo celular. De esta manera, la célula hospedera cada vez que reciba estímulos de replicación, se convierte en una verdadera fábrica de nuevos virus que van a infectar nuevas células, y poco a poco el sistema inmune se va viendo debilitado. Junto a este proceso descrito a nivel celular también se presentan manifestaciones clínicas y de laboratorio. La gráfica expresa la historia natural de la enfermedad (sin tratamiento), relacionando los niveles de antígenos y anticuerpos con el momento en que aparecen las manifestaciones clínicas. (Figura 2) Se presenta una etapa inicial que es el período de incubación, el cual abarca desde el momento de la infección hasta que comienzan a presentarse los primeros síntomas clínicos. Este periodo de incubación es de aproximadamente 11 años, como promedio, aunque en las personas que se infectaron por vía sanguí74 MANUAL Figura 2 Relación entre los niveles de viremia y anticuerpos en tiempo. DE APOYO A LOS CONSEJEROS nea como los usuarios de drogas endovenosas, este periodo es más corto y en él se incluye el momento de seroconversión o período de ventana, donde los niveles de anticuerpos aún no son detectables; pero en cambio, la viremia es elevada. Este momento coincide con la fase o grupo clínico de infección aguda, cuyos síntomas se describen más adelante. Luego con la elevación de los niveles de anticuerpos, se produce una disminución importante de la viremia y a esto le sigue un período donde se produce un equilibrio entre los niveles de antígeno y anticuerpos, el cual se corresponde con el momento de portador asintomático. Es importante recordar que el período de incubación, también abarca la infección asintomática y que en todo momento la persona infectada es capaz de transmitir el virus a otra por cualquiera de las vías conocidas. El período de enfermedad se corresponde gráficamente con la elevación de los niveles de antígeno y la disminución de los anticuerpos. La presencia en la actualidad de nuevos medicamentos ha cambiado el curso de la enfermedad, haciendo aún más prolongado el período de incubación. Existen algunas personas que reciben el nombre de sobreviviente de larga duración: son aquellos que pasan de los 10 años sin presentar ninguna enfermedad oportunista. ¿Cuáles son los síntomas de la infección aguda? Al inicio de la infección aparece fiebre asociada a adenopatías en un 15% o más de los casos; además puede aparecer rash cutáneo, diarreas, amigdalitis y un cuadro parecido a la mononucleosis, e incluso puede presentarse meningoencefalitis aséptica. Estos síntomas están limitados en tiempo por un período aproximadamente de 7 a 14 días. 75 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Este período clínico va acompañado de producción de anticuerpos contra el VIH, los cuales hacen detectables después de las 12 semanas. Algunas personas pueden presentar un cuadro de adenopatías aumentadas de tamaño y presentes en varias cadenas ganglionares diferentes, excepto las inguinales, que se mantienen por más de un mes; este período recibe el nombre de Linfadenopatías Persistentes Generalizadas (LPG). Este momento puede presentarse inmediatamente después de la infección aguda o más tardíamente. Luego de la desaparición de los síntomas que se observan en la infección aguda se inicia el período de infección asintomática, en el que el virus sigue reproduciéndose e infectando nuevas células durante años. Después de este período, las personas infectadas pueden comenzar a presentar manifestaciones clínicas asociadas a la disminución del conteo de células CD4; al inicio se observan enfermedades de la piel, candidiasis oral, leucoplasia pilosa y manifestaciones generales como fiebre, pérdida de peso, pérdida de apetito, sudoraciones nocturnas y diarreas. Es importante tener presente que no todas las personas que atraviesan el proceso de seroconversión presentan síntomas de infección aguda o no presentan todos los descritos. En ocasiones la sintomatología puede transcurrir muy discreta, apenas perceptible o simplemente no aparecer. Algunas PVVIH han confundido los síntomas de la etapa de infección aguda con otras virosis comunes en nuestro país en determinadas épocas del año. No es conveniente pensar que se puede saber si alguna persona está o no infectada con el VIH sólo analizando su sintomatología. Los exámenes de VIH son los únicos que nos pueden dar esta respuesta, siempre y cuando se realicen en el momento adecuado. ¿Cómo se clasifica la infección VIH/SIDA? En 1993 la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha hecho una clasificación de la infección para poder estandarizar protocolos de investigación y tratamientos. Para hacer estudios y para determinar cuándo empezar con algún tratamiento es necesario tener algunos criterios universales que se explican en este capítulo. La clasificación está determinada por dos parámetros: - Aspectos clínicos de la persona - Conteo de células CD4 (células que determinan las defensas del organismo) Categorías Clínicas (A, B, C) y Conteo de Células CD4 Categoría A: personas asintomáticas, con adenopatías persistentes generalizadas con o sin infección aguda. 76 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Categoría B: pacientes con síntomas pero que no están ni en el grupo A ni C. Categoría C: constituye un indicador de SIDA. Células CD4 A B C más de 500/ rnrn A1 B1 C1 de 200 a 499/mm3 A2 B2 C2 menos de 200/mm3 A3 B3 C3 3 Síntomas asociados con la categoría B - Candidiasis oral. - Candidiasis vaginal persistente y frecuente con pobre respuesta al tratamiento. - Displasia cervical. - Fiebre y diarreas de más de un mes de evolución. - Leucoplasia oral herpes zóster (dos episodios o un episodio con toma de más de un dermatoma). - Púrpura trombocitopénica idiopática. - Enfermedad inflamatoria pélvica, especialmente si se complica con absceso tubo-ovárico. - Neuropatía periférica. - Carcinoma in situ. Síntomas asociados con la categoría C - Candidiasis esofágica traqueal, bronquial y pulmonar. - Cáncer Cervico-uterino invasivo. - Criptosporidiasis con diarreas de más de un mes. - Citomegalovirosis generalizadas. - Herpes simple con úlceras mucocutáneas por más de un mes. - Bronquitis, neumonitis o esofagitis. - Histoplasmosis extra pulmonar. - Demencia asociada al VIH. - Pérdida de peso de más del 10 % asociada a diarrea crónica y fiebre por más de un mes. - Sarcoma de Kaposi. - Micobacteriosis avium o kansasi diseminada. - Tuberculosis pulmonar o diseminada. - Neumonía por pneumocistis carinii. - Neumonía bacteriana recurrente. Los exámenes de laboratorio que se utilizan para seguir el estado inmunológico del paciente son el conteo de células CD4 y la carga viral. Como el linfocito T o CD4 es el más afectado por el VIH, su conteo nos da, un parámetro seguro de la situación inmunitaria de la persona viviendo con VIH, y nos permite tomar conductas terapéuticas o hacer variaciones en el tratamiento; las cifras a tener en cuenta son las que se mencionan en las tablas anteriores. 77 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Los exámenes de carga viral, el cual mide la cantidad de copias virales que se encuentran en la periferia, registran la replicación viral y son un indicador muy fiable para evaluar la efectividad o necesidad de los tratamientos con antirretrovirales. Sus resultados se clasifican de la siguiente manera: - Carga viral baja: menos de 10 000 copias/mm3. - Carga viral media: de 10 000 a 30 000 copias/mm3. - Carga viral elevada: por encima de 30 000 copias/mm3. Cuando no haya posibilidades de medir las células CD4 o la carga viral se utiliza la clasificación del Centre for Disease Control (CDC) de Atlanta, de 1986; la cual tiene cuatro grupos, que son: Grupo 1: Síntomas generales que parecen una gripe fuerte: fiebre, malestar general, cefalea, diarreas y pérdida de peso, faringitis, adenopatías, artralgias, mialgias, rash, seudomononucleosis, anorexia. Grupo 2: Persona que no presenta ningún síntoma clínico pero puede tener problemas psicológicos por saberse infectado. Grupo 3: Pérdida de peso mayor de 10 %, linfadenopatías, aumento inexplicable del tamaño de los ganglios durante más de tres meses, en dos o más lugares fuera de la ingle. Grupo 4: SIDA franco o mayor. Persona que ya tiene síntomas. División en cinco subgrupos A, B, C, D y E. 4A. Síntomas generales Fiebre de más de un mes, pérdida de peso mayor de 10% de la superficie corporal, anorexia, astenia (decaimiento), malestar general, diarreas. 4B. Enfermedades del SNC Demencia por SIDA, leucoencefalopatía multifocal progresiva. 4.C. Otras infecciones oportunistas 4.C.1. mayores: - Neurotoxoplasmosis. - Neumonía por Pneumocistis carini. - Cryptococosis. 4.C.2. rnenores: - Herpes simple. - Herpes zóster. - Candidiasis oral. - Leucoplasia pilosa. 78 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS 4.D. Neoplasias Sarcoma de Kaposi. Otros tipos de cáncer. 4.E. Manifestaciones generales Síntomas que no están descritos en los subgrupos anteriores. Infecciones oportunistas Con el avance de la infección VIH, al cabo de aproximadamente 10 años (promedio), comienzan a aparecer los primeros síntomas de manifestaciones oportunistas; éstas se dividen en menores y mayores según sea el compromiso vital. Es importante conocer que la persona seropositiva al VIH o portadora asintomática, es aquella diagnosticada por exámenes de laboratorio y que no presenta ningún síntoma, a diferencia del enfermo de SIDA que sí tiene manifestaciones específicas de enfermedad. Ambos son potencialmente transmisores del virus por cualquiera de las vías conocidas. ¿Cuáles son las manifestaciones oportunistas menores asociadas al VIH más frecuentes? Candidiasis oral Es la afección más común de las personas viviendo con VIH. Existen dos formas de presentación: la seudomembranosa, que es la más común, y se caracteriza por la presencia de lesiones blanquecinas con base enrojecida, estas lesiones son indoloras, y cuando tratamos de removerlas sangran fácilmente, pueden aparecer en cualquier sitio de la mucosa bucal. Otra forma de candidiasis es la eritematosa, caracterizada, precisamente, por lesiones enrojecidas. Prevención: Higiene oral. (Algunos autores señalan la. relación entre la ingestión de algunos alimentos -carbohidratos- y la falta de higiene oral para el crecimiento de la cándida.) Leucoplasia pilosa Es considerada signo patognomónico de la infección VIH. Son lesiones en forma de pequeñas columnas de color blanquecino, que se encuentran en el dorso de la lengua o en sus bordes; no son dolorosas, y sólo es posible su diagnóstico con la visualización. Es un signo predictor de progresión a SIDA, y está relacionado con el virus de Epstein-Barr. No tiene tratamiento. Herpes Zoster Causado por el virus de la Varicela Zoster. En el caso de las personas infectadas con VIH, se caracteriza por la invasión de varios multidermatomas, con la presencia de lesiones vesiculosas que luego se van a ulcerar, y también encontramos lesiones costrosas; en todos los estadios se acompañan de dolor, ardor y prurito. La infección por el VVZ puede estar latente y reactivarse con la inmunodepresión. 79 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS ¿Cuáles son las infecciones oportunistas mayores más frecuentes? El aparato respiratorio habitualmente es uno de los más afectados, y dentro de las infecciones oportunistas más frecuentes se encuentran: Neumonia por Pneumocystis carinii Causada por un protozoo llamado Neumocystis carinii, aparece sobre todo cuando hay un conteo de CD4 menor de 200 mm3; se caracteriza por presentar tos seca, fiebre de 38 grados y disnea, que se va incrementando si no se ofrece tratamiento rápidamente. Junto con estos síntomas aparece como manifestación de la hipoxia, que produce cianosis peribucal y distal, pudiendo llegar al distress respiratorio. Prevención: Para evitar la infección por Neumocystis carinii, no consumir carnes crudas o mal cocinadas; la carne se debe cocinar hasta que pierda el aspecto rosado. Lavarse las manos después de manipular carnes crudas, trabajar con tierra o arena y lavar cuidadosamente las frutas y las verduras crudas antes de comerlas. Tuberculosis pulmonar Es otra de las manifestaciones oportunistas mayores que se presentan en el aparato respiratorio. Se presenta en individuos con inmunidad relativamente conservada. Los síntomas son parecidos a los que se presentan en una persona no VIH positivo. Aparecen infiltrados y cavitación hacia las bases. Para los individuos con la inmunidad destruida, la tuberculosis presenta, además, síntomas no específicos como fiebre, pérdida de peso y fatiga; también aparecen manifestaciones extra pulmonares que afectan la médula ósea, nódulos linfáticos, hígado y sistema nervioso central. En estas personas puede incluso no presentarse ningún síntoma, o aparecer la fiebre como síntoma único. La prueba de tuberculina es normal, y el esputo usualmente es negativo. Neumonía bacteriana Es otra de las afecciones oportunistas del aparato respiratorio. Haemophilus influenzae y Streptococcus pneumoniae son los microorganismos que con mayor frecuencia se han aislado. En pacientes con la enfermedad avanzada se han encontrado también Staphylococcus aureus y algunas bacterias Gram negativas. Estos gérmenes frecuentemente causan bacteriemia, por lo que resulta importante la realización de hemocultivos en pacientes VIH positivo con síntomas respiratorios. En el Sistema Nervioso Central (SNC) encontramos otras afecciones no menos importantes por el grado de compromiso vital. La sintomatología más frecuente en las enfermedades oportunistas del SNC, está dada por el efecto de masa que muchas de ellas causan, tales como cefalea, letargia, confusión, hemiparesia y hemiplejia, e incluso en algunos casos pueden aparecer convulsiones. Otros 80 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS síntomas menos frecuentes pero que también podemos ver son pérdida de la libido y cambios en el comportamiento social. ¿Cuáles son estas enfermedades? Neurotoxoplasmosis Es la infección del SNC que con mayor frecuencia ocurre en nuestros pacientes. Causada por un protozoo llamado Toxoplasma gondii, el cual puede permanecer en estado de latencia en un quiste durante largos años, y con la inmunodeficiencia comienza nuevamente a desarrollarse (infección endógena). Su crecimiento en la cavidad intracraneana causa efecto de masa con los síntomas correspondientes. La Toxoplasmosis es una zoonosis muy relacionada con los gatos, por lo cual es recomendable que las personas viviendo con VIH no manipulen sus excretas, o en caso de hacerlo, el lavado de las manos no debe faltar nunca. Criptococosis cerebromeníngea Es causada por un hongo que recibe el nombre de Cryptococo neoformans, puede ser al igual que la Neurotoxoplasmosis de origen endógeno; sus síntomas pueden ser algunos de los descritos anteriormente y uno bastante particular de esta afección es la fotofobia, además de una triada bien particular compuesta por fiebre, cefalea y rigidez de nuca. La Criptococosis cerebromeníngea aparece sobre todo cuando el conteo de CD4 es menor de 50 células/mm3. Prevención: Se debe de evitar que las personas con VIH tengan contacto con excretas de aves de corral y con los palomares. Retinitis por Citomegalovirus Otra enfermedad frecuente que afecta SNC en pacientes VIH positivos es la Retinitis por Citomegalovirus, la que se presenta con trastornos visuales como la que describe el paciente al ver sombras o la impresión de ver puntos que flotan. Estas impresiones van aumentando con el tiempo sin tratamiento, a tal punto que puede llevar a la pérdida de la visión si no se trata tiempo. ¿Y en el aparato digestivo, cuáles son las enfermedades mas frecuentes? Cryptosporidiasis En el aparato digestivo también encontramos otras afecciones y entre las más importantes está la Cryptosporidiasis que causa diarreas y pueden ser severas, provocando un desbalance hidromineral importante. Prevención: Para esta infección es recomendable evitar tomar agua contaminada, tener contacto sexual (oro-anal) y el contacto con animales. Lavarse las manos después de haber manipulado heces humanas o de animales o de haber tocado tierra. 81 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Otros síntomas muy frecuentes en el sistema digestivo son la disfagia o el dolor retroesternal, que se corresponde en la mayoría de los casos, con Candidiasis esofágica, lesiones de Herpes simple e incluso úlceras aftosas; las diarreas, la mala absorción y la pérdida de peso son causadas, la mayoría de las veces, por protozoarios o bacterias, pero, en ocasiones, no se encuentra ningún germen. ¿Qué otra enfermedad se ve asociada con el SIDA? Sarcoma de Kaposi Patología menos frecuente en nuestro medio, pero muy vinculada al SIDA. Es un tumor relacionado con el herpes virus tipo 8. Se caracteriza por la aparición de máculas rojizas que luego pueden tornarse violáceos, son indoloras y no pruriginosas las que se ven en la piel; pero también pueden estar en algunas vísceras como hígado, pulmones y el tubo digestivo. ¿Cuáles son las terapias antirretrovirales relacionadas con el VIH/SIDA.? Múltiples son los medicamentos que se utilizan para el tratamiento antirretroviral, todos con la intención de lograr un alargamiento del período de incubación, ya que ninguno hasta el momento ha logrado eliminar el virus, de tal manera que pueda hablarse de curación. Existen dos grupos básicos de medicamentos antirretrovirales: 1. lnhibidores de la enzima reversotranscriptasa: a) Nucleósidos análogos. b) Nucleósidos no análogos. 2. lnhibidores de la proteasa: El grupo de los inhibidores de la reversotranscriptasa actúan cambiando un ácido nucleico, impidiendo la elongación de la cadena, por lo que interfieren en la reproducción viral. Inhibidores de la enzima reversotranscriptasa: En el grupo de los nucleósidos análogos están: Zidovudina(AZT) Didanosina(DDI) Zalcitabina(DDC) Stavudina (d4T) Lamivudina (3TC) Abacavir (Ziagen) Zidovudina + Lamivudina (Combivir) Zidovudina + Lamivudina + Abacavir (Trizivir) En el grupo de los nucléosidos no análogos están: Delavardina (Rescriptor) Nevirapine( Viramune) Efavirenz (Sustiva) 82 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Figura 3 Ciclo vital del VIH: 1) Acoplamiento y fusión de la membrana; 2) Transcripción inversa; 3) Integración; 4) Transcripción; 5) Traducción; 6) Ensamblaje; 7) Salida de viriones. Atendiendo al esquema posterior tenemos que los inhibidores de la reversotranscriptasa actúan sobre el paso 2 de la replicación, o sea sobre la enzima antes mencionada; los inhibidores de proteasa, sobre el paso 6, en el momento en que se está produciendo el ensamblaje. La intención, al utilizar estos medicamentos, es interferir en la replicación viral, para lograr una disminución significativa en el número de virus y, con ello, que el tiempo de vida, sin ningún síntoma, sea superior. Los nucleósidos no análogos actúan de la misma forma, aunque su efecto a corto plazo es superior; pero tienen el inconveniente de que se produce resistencia rápidamente. Todos estos nucleósidos causan reacciones secundarias. En algunos casos pueden ser determinantes para suspender el tratamiento, por ejemplo: AZT: Puede causar anemia, supresión de la médula ósea, neutropenia, problemas renales, náuseas y cefalea. DDI: Pancreatitis, neuropatía periférica, náuseas y diarreas. DDC: Neuropatía periférica, pancreatitis y úlceras orales. 3TC: Anemia, neutropenia y problemas renales. D4T: Neuropatía periférica. Nevirapina: Rash cutáneo. Inhibidores de la proteasa: Estos medicamentos están diseñados para inhibir la producción de nuevos virus por parte de las células infectadas. Actúan en una etapa tardía del ensamblaje viral, después que el virus se ha incorporado a la célula y está listo para comenzar su producción en masa de nuevas copias virales. Entre los inhibidores de la proteasa están: - Saquinavir (Invirase) - lndinavir (Crixivan) - Ritonavir (Norvir) - Nelfinavir (Viracept) - Amprenavir (Agenerase) 83 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Drogas Presentación Dosificación Vía de administración AZT Cápsulas de 100 o 250 mg 600 mg diarias Oral DDI Tabletas de 150 mg 300 mg diarios Oral 3TC Tabletas de 150 mg 300 mg diarios Oral DDC Tabletas de 0.75 mg 2,25 mg diarios Oral D4T Tabletas de 40 mg 80 mg diarios Oral Abacavir Tabletas de 300 mg 600 mg diarios Oral Combivir 1 tableta dos veces al día Oral Trizivir 1 tableta dos veces al día Oral Nevirapina Tabletas 200 mg 400 mg diarios Oral Delavirdine Tabletas 100 mg 1200 mg diarios Oral Efavirenz Tabletas 200 mg 600 mg diarios Oral Los inhibidores de la proteasa también causan reacciones secundarias importantes. En algunas personas pueden ser causa de interrupción del tratamiento; entre ellas tenemos: náuseas, diarreas, parestesia perioral y cálculos renales. Todos estos medicamentos se deben tomar en combinación, es lo que se conoce como combinación de terapia (biterapia o triterapia) o cóctel de medicamentos. Estas combinaciones pueden ser de la siguiente manera: - 1 inhibidor de proteasa + 2 inhibidores de reversotranscriptasa (nucleósidos análogos) - 1 inhibidor de reversotranscriptasa (no análogo) + 2 inhibidores de la reversotranscriptasa (nucleósidos análogos). Cuando se administran los inhibidores de la proteasa se debe tener en cuenta por el facultativo que existen otros medicamentos que no se deben administrar junto a ellos o se debe hacer algún cambio en la dosis. Los pacientes y muchos médicos se preguntan cuál es el momento adecuado para iniciar la terapia o cuándo cambiar su tratamiento y a qué cambiar. Existen en la actualidad las Pautas Cubanas sobre Tratamiento Antirretroviral en las cuales se determinan en qué momento iniciar el tratamiento y a cuál cambiar en caso de que no haya una respuesta beneficiosa. Es importante antes de iniciar el tratamiento, que la persona que lo va a recibir tenga conocimiento sobre el mismo y además esté convencido de los beneficios que recibirá con el fin de lograr una adherencia efectiva. 84 MANUAL Drogas Saquinavir Indinavir Nelfinavir Ritonavir DE Presentación Cápsulas de 200 mg Cápsulas de 200 a 400 mg Cápsulas de 250 mg Cápsulas de 1 00 mg APOYO A LOS Dosificación 1800 a 3600 mg diarios 2400 mg diarios 2250 mg diarios 1200 mg diarios CONSEJEROS Vía de administración Oral Oral Oral Oral En la actualidad muchos médicos coinciden en que mientras más temprano se inicie el tratamiento, mejores resultados se obtendrán, alargando el período de incubación. Lo que sí debe ser importante que se conozca es que una vez que se haya pensado en iniciar la terapia esta decisión debe ser tomada con responsabilidad, ya que no es recomendable suspender la terapia a no ser que por decisión médica sea indicado. Lograr la adherencia en el tratamiento es una clave importante para garantizar su efectividad. Suspender los medicamentos espontáneamente u obviar dosis y frecuencias puede generar resistencia viral ante el tratamiento y por tanto invalidar su resultado. Cuando el virus hace resistencia incrementa su proceso de replicación por lo que aumenta la carga viral. Esto trae consigo que la PVVIH requiera suspender el tipo de combinación que venía utilizando y cambiar a otra, lo que restringe la gama de opciones de tratamiento que podría utilizar. Para valorar el inicio de la utilización de tratamientos con inhibidores que si no se hace con responsabilidad y preparación los perjuicios son mayores que los beneficios. Para la mayoría de las PVVIH, los tratamientos son una decisión que los puede acompañar de por vida. La irregularidad en el tratamiento antirretroviral puede traer consigo resistencia viral. ¿En qué consiste el tratamiento con inmunomoduladores? Cuando el organismo es afectado por algún germen, el sistema inmunológico desencadena una serie de respuestas cuyo objetivo final es la destrucción del agente invasor. En el caso de la infección por el VIH, como parte de la respuesta inmune se producen sustancias por los linfocitos que son las llamadas linfoquinas; entre ellas los interferones que tienen un uso terapéutico en enfermedades de origen viral y tumoral por su acción antiproliferativa. Por otra parte, también poseen funciones inmunomoduladoras, ya que actúan sobre el rnacrófago aumentando su función fagocítica, la función de las células NK y, además, sobre los propios linfocitos aumentando 85 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS la función de ellos, y trae un aumento de la expresión de receptores para interleuquinas. El interferón y el Factor de Transferencia son dos de los medicamentos biológicos que se utilizan para control de la infección por VIH, y son inmunomoduladores. Nutrición, dieta e higiene de los alimentos Una buena nutrición es indispensable para todas las PVVIH, puesto que con cada nueva infección y por la misma acción del virus, el cuerpo agota sus reservas, afectando de manera especial la masa muscular. Esto se produce debido a que en estas circunstancias nuestro organismo no tiene de dónde obtener más energía para enfrentar las enfermedades, y por consiguiente debe tomarla de la masa muscular, con el consecuente adelgazamiento de la persona. Para poder conformar una dieta adecuada y balanceada conocer cómo se agrupan los alimentos por los tipos de nutrientes que aportan: Grupos de alimentos Podemos dividir los alimentos en siete grupos: Grupo 1: Cereales y tubérculos (viandas). En este primer grupo encontramos los carbohidratos y vitaminas del tipo B. Dichos alimentos nos proporcionan energía para realizar las funciones del organismo, mantener la temperatura del cuerpo y desarrollar las actividades diarias. Entre los que pertenecen a este grupo encontramos: arroz, maíz, pan, viandas, pastas como fideos y espaguetis, papas. Grupo 2: Vegetales. En este grupo están: tomate, zanahoria, pepino, habichuela y otros. Ellas nos proporcionan las vitaminas y minerales para tener mayor resistencia a las enfermedades. Son de vital importancia las vitaminas A, C, calcio y hierro, así como las del complejo B. Los vegetales con hojas verdes contienen mucho hierro y vitamina A (espinaca, acelgas, lechugas). Grupo 3: Frutas (frescas o secas). Proporcionan vitamina A, C, Acido Fólico, Tiamina, Hierro, magnesio, potasio. Las diversas frutas y los vegetales son de estación, y para cada etapa del año podemos encontrar varias de ellas. No tener costumbre de consumir este importante grupo de alimentos es un factor en contra de nuestro necesario balance dietético. Con frutas y vegetales puedes confeccionar las más diversas recetas, como ensaladas y cócteles; combinarlas con las carnes o el arroz, o comerlas frescas. Lo importante es que están siempre incluidas en nuestras comidas. Grupo 4: Carnes y legumbres. Estos alimentos, llamados también constructores, nos proporcionan las 86 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS proteínas necesarias para formar o reparar los tejidos de los músculos, piel, sangre y huesos Grupo 5: Leche y derivados. Proporcionan proteínas, calcio, vitamina A, B12, D y Riboflavina. Grupo 6: Grasas. Dentro de ellas tenemos aceite, mantequilla, margarina y mayonesa. Nos proporcionan energía, ácidos grasos esenciales y son fijadores de la vitamina A, D, E y K. Grupo 7: Azúcares. Incluye los dulces y proporcionan energía. Dieta Las PVVIH que se mantienen asintomáticas no requieren de alimentación especial. Se hace necesario consumir una dieta que contenga proteínas en las tres comidas fundamentales del día, y alimentos de los siete grupos mencionados. Las PVVIH en el Sistema de Atención Ambulatoria tienen una dieta asignada en el dietario nacional que aparece con el número 3224. Está claro que de acuerdo con las posibilidades económicas de cada uno, los gustos y las habilidades para elaborar los alimentos, se puede mejorar hacia formas más sanas y óptimas los hábitos alimenticios y la cantidad y variedad de las comidas. Consideraciones para hacer una comida más segura - Asegurarse de que las comidas que requieran refrigeración sean guardadas apropiadamente en recipientes bien tapados. - Lavarse las manos con agua y jabón antes de preparar y comer los alimentos. - Hervir el agua de tomar por 10 minutos. - Cocinar las comidas tan pronto se descongelen. Es preferible que se dejen descongelar en la parte más baja del refrigerador. - Lavar o pelar los vegetates y frutas antes de comerlos. - No dejar comidas cocinadas en el refrigerador por más de tres días y calentarlas siempre antes de consumirlas. - Se debe comer en un ambiente relajado y, de ser posible, en compañía de personas agradables. Se puede oír música suave. - Tomar líquidos sólo cuando se termine de comer. - Desayunar abundantemente, a esa hora tendrá más apetito y estará menos cansado. - Consumir las comidas preferidas cuando se tenga buen apetito. Si se comen sin éste, puede que se asocie con sentirse enfermo, lo que provocará más inapetencia. Si la falta de apetito continúa, se debe consultar a un especialista sobre la conveniencia de tomar un suplemento nutricional. 87 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS No se debe interrumpir la alimentación diaria por ningún motivo. Interacciones entre los alimentos y los medicamentos antirretrovirales Medicamento Recomendaciones para su ingestión Abacavir Lamivudine Amprenavir Se puede ingerir con o sin alimentos. Puede ingerirse sin alimentos. Puede ingerirse con o sin alimentos; pero se recomienda tomar alejado de comidas con mucha grasa. Se debe evitar los suplementos de Vitamina E. Delavirdine Didanosine Tomar sin alimentos. Debe ser tomada con el estómago vacío. Efavirenz Se puede ingerir con alimentos, excepto que estos tengan mucha grasa. Indinavir Debe ser tomada con el estómago vacío o con alimentos ligeros y abundante agua en todo momento. Lopinavir/ Ritonavir Nelfinavir Nevirapine Se debe tomar con alimentos para mejorar su absorción. Tomar con alimentos aumenta su absorción. Puede ser tomada con o sin alimentos. Ritonavir Los alimentos no alteran su absorción y pueden mejorar la tolerancia intestinal. Saquinavir Puede tomarse con alimentos. Stavudine Tomar con o sin alimentos. No tomar con AZT. Tenofovir La absorción se incrementa si se toma con alimentos con mucha grasa. Zalcitabine No tiene limitación con los alimentos. No se debe combinar con ddi y d4T. Zidovudine Puede tomarse con alimentos, la tolerancia intestinal mejora cuando se acompaña de pequeñas cantidades de comida y se aumenta la frecuencia de estas. No se debe combinar con d4T. Los medicamentos pueden disminuir las concentraciones de nutrientes; por ejemplo, los inhibidores de proteasa ocasionan hipercolesterolemia, hipertrigliceridemia (grasas), lipodistrofia e hiperglicemia. Lipodistrofia Esta palabra es una combinación de dos que son lipo (grasa) distrofia (crecimiento o cambio anormal). Es un término médico que se usa para describir una serie de problemas que se observan en personas VIH positivas, estos problemas incluyen: lipohipertrofia, lipoatrofia y aumento de las grasas y colesterol dentro del organismo. Las alteraciones de la distribución de la grasa corporal son: Lipohipertrofia (aumento): - Obesidad abdominal. - Aumento del perímetro torácico. - Hipertrofia mamaria. 88 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS - Aumento de la grasa lateral del cuello. - Joroba de búfalo. - Lipomas generalizados o localizados. Lipoatrofia (disminución): - Cara. - Nalgas. - Extremidades. Alteraciones mixtas A mayor edad existe mayor riesgo de desarrollar lipodistrofia y parece que el sexo femenino la lipohipertrofia mamaria, abdomen y cuello es mayor. En cuanto al estadio clínico parece claro que aquellos pacientes sintomáticos o que ya han desarrollado SIDA son los más proclives a desarrollar lipodistrofia. La mayor controversia se centra en la relación con el tratamiento; parece clara la relación entre la duración de la terapia antiviral y una mejor respuesta inmunológica y virológica con un mayor riesgo de redistribución de la grasa corporal y de trastornos metabólicos. Por lo general parece que los inhibidores de proteasa estarían más relacionados con los cuadros de lipohipertrofia y las alteraciones del metabolismo lipídico, mientras los inhibidores de la transcriptasa inversa con los cuadros de lipoatrofia. Bibliografía 1. “ABC de las estadísticas. Suplemento especial”, en revista SIDAHORA. EE.UU, 1997. 2. Polo Rodríguez, P: Manual de Nutrición y SIDA. 3ra Ed, NILO Industria Gráfica, S.A. La Habana, 2002. 3. Horn, T: “Lipo ¿qué?”. Material Mimeografiado, EUA. 4. National Minority AIDS Council: Una guía para personas interesadas en aprender sobre los cambios corporales y los problemas de los lípidos asociados con el VIH. National Minority AIDS Council, 2000. 5. Elion, Richard: Do you know options?, George Washington University Medical Center, 2da. Edition, EE.UU. 1997. 6. Bartlett, G. John y K. Ann Finkbeiner: La guía para vivir con la infección VIH, desarrollada por la clínica de SIDA. John Hopkins University, 3 Edición. EE.UU. 1996. 7. Bartlett, G. John y Finkbeiner A.K: Medical Management of HIV Infection. EE.UU, 1998 8. Mindel, A y Miller, R: A pocket book of diagnosis and management. 2da Edición. Inglaterra, 1996. Aunque estos medicamentos causan estos trastornos, hay medidas que podemos tomar para minimizar sus efectos, tales como: una dieta baja en grasa y consumir grasas de origen vegetal y pescados. Realizar ejercicios físicos como aerobios y la suplementación con vitaminas. Otras acciones más enérgicas tales como la cirugía pueden ser tomadas según criterio médico. 89 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) Por Dra. Olenia Pesant Hernández, Dra. Jacqueline Sánchez Fuentes Los consejeros en un servicio especializado en ITS y VIH/SIDA deben estar familiarizados con los aspectos relativos a la etiología, evolución clínica y alternativas de tratamiento. Se debe poseer un conocimiento general y básico sobre estos aspectos para poder ponerse en el lugar del cliente, identificar la naturaleza de la molestia o sospecha y orientar sobre las vías para recibir la atención requerida. Por tal motivo, este material concibe un acápite que alude a algunas Infecciones de Transmisión Sexual. Sin embargo esto no significa que los consejeros sean capaces de responder a las demandas de diagnóstico y tratamiento solicitadas por los clientes. Para brindar este tipo de ayuda se debe disponer de una preparación y adiestramiento mucho más profundo de lo que los talleres de formación de consejeros ofertan. Contener las preocupaciones de los usuarios, motivarlos a buscar ayuda con especialistas sobre este tipo de infecciones y prepararlos para recibirla, constituyen acciones sumamente necesarias, tanto para la atención médica efectiva como para la prevención de la propagación de estas infecciones. A continuación se presenta información básica sobre algunas Infecciones de Transmisión Sexual. ¿A qué se le denomina Infecciones de Transmisión Sexual? A un conjunto de enfermedades infectocontagiosas que se expresan clínicamente con distinta sintomatología y que tienen diferentes etiologías; las reúne el hecho epidemiológico de adquirirse principalmente por contacto sexual, independientemente de la preferencia sexual, sin ser este el único mecanismo de transmisión. Son evitables en la mayoría de los casos y pueden ser diagnosticadas en etapas tempranas. Algunas de las ITS son de expresión clínica esencialmente local y regional, mientras que otras dan síntomas sistémicos o son asintomáticas. Se les ha nombrado de distinta manera y el número de infecciones que se han incluido en esta clasificación ha aumentado paulatinamente, en la medida que se incrementan los conocimientos sobre 91 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS la epidemiología de muchas enfermedades. Algunos de sus nombres más conocidos han sido enfermedades venéreas y enfermedades de transmisión sexual. En la actualidad se les nombra preferiblemente Infecciones de Transmisión Sexual por el hecho que en su evolución muchas de estos agentes no causan sintomatología en todo momento o en todas las personas, por lo que existen personas que portan estas infecciones y no presentan síntomas o los síntomas y signos desaparecieron sin que se pueda hablar de cura. Las ITS pueden ser de naturaleza infecciosa o parasitaria, y se clasifican según el agente que las causa: Bacterias - Sífilis por Treponema pallidum. - Gonorrea por Neisseria gonorrhoeae. - Clamidiasis por Chlamydia trachomatis (serotipos D, E, F, G, H, I, J, K). - Chancro blando por Bacilo de Ducreyi (Haemphilus ducreyi). - Linfogranuloma venéreo por Chlamydia trachomatis (serotipos L1, L2, L3). - Granulona inguinal por Calymmatobacterium granulomatis. - Vaginosis por Gardnerella vaginalis. - Cervicitis, uretritis y salpingitis por Ureaplasma urealyticum, Mycoplasma hominis y Chlamydia tracomatis. Protozoos - Tricomoniasis por Trichomonas vaginalis. Hongos - Moniliasis por Cándida albicans. Virus - Herpes genital por Virus Herpes Simplex 1 y 2. - Hepatitis viral por Virus de la Hepatitis B o C. - Citomegalovirosis por Cytomegalovirus (CMV). - Condilomas acuminados por Papovavirus (Virus del Papiloma Humano- VPH). - Molusco contagioso por Poxvirus (Virus del Molluscum contagiosum). - Síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA) por VIH. Parásitos - Pediculosis púbica por Phthirus pubis. - Sarna por Sarcoptes scabiei. Debemos incluir otros agentes, que con el incremento de cierto tipo de prácticas sexuales han aumentado su frecuencia en cuanto a transmisión sexual: - Salmonella. - Shigella. - Entamoeba histolytica. - Giardia lamblia. - Virus de la hepatitis A. 92 Sífilis. Fotos tomadas del Atlas de EST. Una guía práctica para las dificultades en el diagnóstico. Márques, BP. 2002. MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS A continuación se expondrán algunos elementos de la etiopatogenia y evolución clínica de las ITS más frecuentes. Sífilis ¿Qué es? Es una infección producida por la bacteria: Treponema Pallidum. ¿Cómo se contrae? Por contacto sexual. Chancro Sifilítico en la lengua. Por transmisión directa o transplacentaria, de la madre infectada al feto, (puede producir en el hijo: ceguera, deformación de dientes, sordera, retardo mental y hasta la muerte). Por la sangre, al utilizarse sangre de personas infectadas en transfusiones o elaboración de hemoderivados. ¿Cuánto tardan en aparecer los primeros síntomas de la sífilis después del contacto infectante? (período de incubación). Chancro Sifilítico en palmas de la mano. Para entender mejor la evolución natural de la infección (es decir, sin tratamiento) debemos tener presente que se divide en 2 etapas: Sífilis Reciente Adquirida, que dura desde el contacto infectante hasta los 2 años. Esta etapa es muy infectante, las lesiones son resolutivas, puede tener reinfecciones y no hay peligro para la vida del paciente. Sífilis Tardía Adquirida, que es la enfermedad de más de 2 años de evolución, la cual ya no es contagiosa pero las lesiones no son resolutivas, no hay reinfección y sí hay peligro para la vida del paciente. El período de incubación dura entre 10 y 90 días, como promedio 21 días después del contacto sexual infectante, apareciendo la primera manifestación clínica que es el Chancro Sifilítico (Sífilis Primaria). ¿Cuáles son los síntomas? El Chancro Sifilítico, consiste en una pequeña úlcera o herida indolora, que aparece por el sitio donde penetra el Treponema. Suele ser una lesión única, limpia, sin dolor y con bordes nítidos. En los hombres la ulceración fundamentalmente es en el glande mientras que en la mujer suele aparecer en los labios mayores o en los menores y en el cuello del útero. Sin embargo, el chancro puede presentarse extragenital, en el ano y en la boca y amígdalas, debido a las diferentes prácticas o preferencias sexuales. Se puede acompañar de adenopatías bilaterales inguinales si el chancro es genital y unilateral si es extragenital. La lesión inicial o primaria de la sífilis desaparece espontáneamente entre los 2 y 5 semanas, pero si no recibe tratamiento, la enfermedad permanece en la sangre en estado de latencia, o silencio clínico. 93 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS ¿Cómo se diagnostica? El diagnóstico confirmado de la sífilis se realiza por la presencia del Treponema pallidum al examen directo del exudado de las lesiones, visto al ultramicroscopio por la técnica de campo oscuro o por el examen de sangre con técnicas serológicas, no treponémicas (VDRL, RPR) o treponémicas. La clínica de la sífilis, puede simular otras muchas enfermedades eruptivas de la piel o ulcerativa de los genitales, no obstante, a pesar de las particularidades de esta enfermedad, existen criterios que permiten el diagnóstico de la sífilis, como son: Serología VDRL reactiva, más antecedentes epidemiológicos, como son personas de alto riesgo (contacto de caso de sífilis, sospechosos o asociados). Serologia VDRL reactiva, más antecedentes clínicos (lesión genital, no dolorosa, ganglios regionales indoloros, erupción cutánea no pruriginosa). Serologia VDRL reactiva, más antecedentes epidemiológicos, más antecedentes clínicos. ¿Cuál es el tratamiento? Antibióticos. La transmisión perinatal puede detenerse si se trata a las embarazadas con serología reactiva VDRL o RPR, o confirmadas como sifilíticas en cualquier momento del embarazo. Si la madre con sífilis es tratada en el primer trimestre, la infección no pasará al futuro hijo en formación; pero si se trata después de este período, estaremos tratando tanto a la madre como el feto. Secundarismo Sifilítico en plantas de los pies. ¿Qué puede suceder si no se trata? La Sífilis tiene tratamiento profiláctico y curativo en todas las etapas. Si no se trata en el período de incubación (tratamiento profiláctico), con mucha probabilidad el paciente pasará a la fase de Sífilis primaria y si no recibe tratamiento, desarrollará la sífilis secundaria y así hasta la etapa de sífilis tardía. Sífilis secundaria Consiste en una erupción generalizada por todo el cuerpo, como salpullido o placas rosadas, que se descaman por la parte interna de los bordes (inclusive en palmas de las manos y plantas de los pies) Puede dar toma del estado general con dolor en las articulaciones, dolor de cabeza, fiebre, anorexia, caída abundante del cabello en forma de mechones (cucarachones), adenopatías generalizadas y en la sífilis congénita, pueden aparecer vesículas de pus. Esta etapa también desaparece espontáneamente. 94 Lesiones de Secundarismo en la espalda. MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Sífilis Tardía Transcurre durante el segundo año de infección hasta los 25 años siguientes, en una tercera parte de los pacientes no tratados pueden desarrollar complicaciones más graves como: - Parálisis. - Afectación del sistema nervioso central. - Afectación cardiovascular o muerte. Linfogranuloma venéreo ¿Qué es? Es una infección producida por la bacteria: Chlamydia trachomatis. ¿Cómo se contrae? Por transmisión exclusivamente sexual. Linfogranuloma Venéreo. Fotos tomadas del Atlas de EST. Una guía práctica para las dificultades en el diagnóstico. Márques, BP. 2002. ¿Cuáles son los síntomas? La enfermedad evoluciona en 3 fases: Lesión de inoculación: La lesión inicial es una pápula o pústula, no dolorosa que no deja secuela, puede pasar inadvertida para el paciente y se localiza en el hombre en el glande o en el prepucio y en la mujer en la vagina, cuello uterino o genitales externos. Diseminación linfática: Posteriormente ( 2-6 semanas después ) en un estado secundario se produce: inflamación dolorosa de los ganglios inguinales (en un 70 % unilateral) que evolucionan a supuración y fistulización por múltiples orificios, también se puede acompañar de síntomas generales: fiebre, malestar general, dolor articular y sudoraciones nocturnas. Luego, pueden aparecer abscesos indoloros en genitales internos (vagina), en el recto, inflamación de ganglios cercanos causando dificultad para defecar y el contacto urogenital puede causar glositis (inflamación de la lengua) ulcerativa difusa con linfadenopatía regional. La mujer puede ser asintomática pero si su pareja presenta síntomas, entonces ella debe acudir al médico cuanto antes. Secuelas: Estenosis rectal, fístulas rectales, vaginales y vesicales, sobre todo en mujeres y homosexuales masculinos. ¿Cómo se diagnostica? El diagnóstico se hace a partir de métodos serológicos. Se utilizan pruebas de microinmunofluorescencia. ¿Cuál es el tratamiento? Con antibióticos. Aspiración de los bubones (abscesos). Corrección quirúrgica si aparecen en el recto o en la uretra. Chancro blando (Chancroide) ¿Qué es? Es una infección producida por la bacteria: Haemophilus ducreyi. 95 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS ¿Cómo se contrae? Por transmisión exclusivamente sexual. ¿Cuánto tardan en aparecer los primeros síntomas después del contacto infectante? (período de incubación). Suele ser de 2 a 5 días después del contacto riesgoso, pudiendo ser hasta de 2 semanas. ¿Cuáles son los síntomas? Primero aparece una lesión que evoluciona de una pápula a una úlcera o llaga con pus, generalmente múltiples por autoinoculación, son blandas, dolorosas, de bordes purulentos (o sea, con pus) y sangran con facilidad. En los hombres aparece especialmente en el tercio inferior del prepucio, lo cual puede complicarse con fimosis, mientras que en la mujer aparece en la vulva (labios mayores o menores) y raramente en la vagina. También puede aparecer en la región peranal. Cuando aparecen los síntomas en los genitales femeninos o en el ano tienden a desarrollarse múltiples lesiones y resultan ser muy dolorosas, debido a los pliegues de las mucosas en esos órganos. Sin tratamiento puede complicarse con aumento de volumen de los ganglios linfáticos inguinales a uno o a ambos lados y producir un absceso inguinal (bubón) que puede supurar a través de la piel con la formación de fístulas. Es posible una infección mixta, especialmente en asociación con la sífilis o el herpes genital. Los síntomas del chancro blando pueden confundirse con los de la sífilis y el herpes genital. ¿Cómo se diagnostica? Por examen directo, tomando una muestra del material de la lesión. ¿Cuál es el tratamiento? Antibióticos. La aspiración con aguja de grueso calibre de los ganglios linfáticos, puede aliviar la tensión que alcanzan estas estructuras cuando están inflamadas y fluctuantes. Chancro Blando. Fotos tomadas del Atlas de EST. Una guía práctica para las dificultades en el diagnóstico. Márques, BP. 2002. Requiere del cuidado profesional y el seguimiento del paciente debe ser hasta la involución total de las lesiones. ¿Qué puede suceder si no se trata? La enfermedad no desaparece sin tratamiento. Gonorrea ¿Qué es? Es una infección producida por la bacteria: Neisseria gonorroheae. También es denominada como blenorragia. ¿Cómo se contrae? Por contacto sexual. En forma perinatal, a través del canal del parto. 96 Chancroide. Lesión de Chancroide Blando en genitales femeninos. MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS ¿Cuánto tardan en aparecer los primeros síntomas después del contacto infectante? (período de incubación). Por lo general de 1 a 5 días; en el hombre el período de incubación es más corto que en la mujer. ¿Cuáles son los síntomas? Existen personas asintomáticas (que transmiten la enfermedad aun en ausencia de síntomas) principalmente mujeres: de cada 10 mujeres 8 son asintomáticas. Así mismo del 15-25% de los hombres son asintomáticos. Los síntomas en la mujer son dolor bajo vientre, micción dolorosa, aumenta la secreción vaginal y cambia de color (amarillento) y fiebre. Los síntomas en el hombre son micción dolorosa, goteo o secreción amarillenta por el pene. Infección anorrectal: Puede ocurrir por relaciones anales, aunque no necesariamente. Frecuentemente es una infección asintomática, aunque en ocasiones puede presentarse en forma de prurito anal, tenesmo (dolor rectal) y secreción de exudado purulento. Infección orofaríngea: Suele ser asintomática o presentar dolor de garganta, enrojecimiento o amigdalitis. Cuando la infección localizada no es tratada se disemina y alcanza el torrente sanguíneo y se presenta el cuadro de una septicemia gonocócica con fiebre y aparecen lesiones en la piel: vesículas, pústulas o salpullido hemorrágico, artritis y tenosinovitis, dolor ocular con enrojecimiento y pupilas irregulares (iritis), raramente endomiocarditis y meningitis. En la mujer se infecta el cuello uterino, uretra, útero y trompas y en el hombre se infecta la uretra, próstata y epidídimo. ¿Cómo se diagnostica? A través del examen microscópico del flujo del canal urinario o de la vagina; cultivos tomados del cérvix, la garganta, del canal urinario o del recto. Blenorragia o Gonorrea. Foto tomada del Atlas de EST. Una guía práctica para las dificultades en el diagnóstico. Márques, BP. 2002. ¿Cuál es el tratamiento? Con antibióticos. ¿Qué puede suceder si no se trata? Puede sufrir grave infección de los órganos genitales. En la mujer puede provocar una Enfermedad Pélvica Inflamatoria (EPI). Infertilidad en el hombre y la mujer. Riesgo de embarazo ectópico. Trastornos cardiacos. Afecciones cutáneas. Artritis. Meningitis (SNC). Cervicitis ¿Qué es? Es una infección e inflamación de la mucosa del cuello uterino (cérvix) producida por: 97 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Gonococo (Neisseria gonnorrhoeae), Virus del herpes simple, Chlamidias t., Bacterias de la flora cérvico-vaginal, Trichomonas vaginalis, Mycoplasma hominis y Ureaplasma urealiticum. ¿Cómo se contrae? Por transmisión sexual. Por vía perinatal. ¿Cuánto tardan en aparecer los primeros síntomas después del contacto infectante? (período de incubación) Por gonococos: 3 a 5 días. Clamidias: 1 a 3 semanas. Virus del Herpes Simple: 2 a 20 días. ¿Cuáles son los síntomas? Secreción vaginal blanca o amarillo-verdosa. Ardor al orinar. Leve sangrado tras el coito. Dolor pélvico o coito doloroso. Aunque muchas mujeres pueden ser asintomáticas. ¿Cómo se diagnostica? Con un examen ginecológico para inspeccionar el cuello uterino. Examen de una muestra de secreción cervical. ¿Cuál es el tratamiento? Antibióticos. ¿Qué puede suceder si no se trata? La infección por gonococos o clamidias puede ocasionar: EIP (Enfermedad Inflamatoria Pélvica). Infertilidad. Embarazo ectópico. Infecciones clamidiales ¿Qué es? Es una infección producida por un microorganismo, la Chlamydia trachomatis. En la mujer puede producir: cervicitis, uretritis y enfermedad inflamatoria pélvica. En el hombre puede producir: Uretritis no gonocóccica e infección de la próstata. ¿Cómo se contrae? Por transmisión sexual. Perinatal. ¿Cuánto tardan en aparecer los primeros síntomas después del contacto infectante? (período de incubación). De 1 a 3 semanas. ¿Cuáles son los síntomas? El cuadro clínico y las complicaciones son indistinguibles de los de la gonorrea. 98 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS En la mujer: Micción dolorosa. Dolor pélvico. Secreción vaginal. Prurito o quemazón vulvovaginal. Sangrado tras el coito. En etapas posteriores se asocia al Síndrome inflamatorio pélvico. En el Hombre (más del 30% son asintomáticos): Después de un período de incubación (3-30 días) en la mitad de los casos se presenta en forma de uretritis subaguda. Secreción por el pene generalmente clara y en ocasiones purulenta, que es más intensa por la mañana. Sensación de quemazón. Micción dolorosa. ¿Cómo se diagnostica? Examen microscópico de la secreción. ¿Cuál es el tratamiento? Con antibióticos. ¿Qué puede suceder si no se trata? Infección de los órganos genitales. Infertilidad. En el hombre pueden afectarse la próstata y las vesículas seminales. Enfermedad inflamatoria pélvica (EIP) (Endometritis, salpingitis, pelviperitonitis, etc.) ¿Qué es? Es una infección polimicrobiana producida por gonorrea y clamidias principalmente, además de otras bacterias de la flora microbiana normal de la vagina, que ascienden del tracto genital inferior, espontáneamente o por manipulación (por inserción de DIU). Afecta los órganos reproductivos internos de la mujer como útero, las trompas de Falopio, los ovarios, y los tejidos cercanos de la pelvis . El 90% de los casos tienen su origen en una ITS previa y es una de las mayores causas de infertilidad en la mujer. ¿Cómo se contrae? Según el origen de los microorganismos, la causa puede ser: Exógena: A través de la relación sexual. Endógena: Los microorganismos que la causan forman parte de la de la flora microbiana normal de la vagina, la vulva o el colon. Por otra parte se han identificado varios factores de riesgo para el desarrollo de la EIP: Si existen otras ITS, particularmente clamidias, gonorrea, etc. 99 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Si la mujer ha sufrido repetidos episodios de infección gonocóccica o por clamidias. La inestabilidad en las parejas sexuales, o tener varias parejas sexuales. El uso del DIU (T de cobre). ¿Cuánto tardan en aparecer los primeros síntomas después del contacto infectante? (período de incubación). Varía, incluso por meses. ¿Cuáles son los síntomas? Dolor bajo vientre. Dolor al movilizar el cérvix. Micción dolorosa. Coito doloroso. Sangrado irregular. Escalofríos. Fiebre. Cervicitis mucopurulenta. Algunas mujeres no tienen síntomas o son muy leves. ¿Cómo se diagnostica? Con los criterios clínicos mayores y menores establecidos. Examen ginecológico con palpación de útero y trompas. Examen microscópico de una muestra de secreción. Análisis de sangre. ES MUY IMPORTANTE hacer la prueba de embarazo para excluir embarazo ectópico. Biopsia del endometrio. ¿Cuál es el tratamiento? Antibióticos. El tratamiento ambulatorio se dará a mujeres que presenten un cuadro clínico leve, y que no tengan ningunos de los criterios para el tratamiento hospitalario, los cuales son: Existen abscesos pélvicos o tuboováricos. Embarazo. Fiebre mayor o igual a 39 º C. Presenta náuseas o vómitos que le impiden al tratamiento oral. Es adolescente. ¿Qué puede suceder si no se trata? Puede provocar un absceso pélvico que requiera intervención quirúrgica. Infertilidad. Dolor pélvico crónico. Aumenta el riesgo de embarazo ectópico. Tricomoniasis ¿Qué es? Es una infección causada por el protozoo: Trichomonas Vaginalis que existe de forma natural en la vagina, en el tracto urogenital. 100 Secreción típica de la Tricomoniasis. MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS ¿Cómo se contrae? Por transmisión sexual. Por utensilios higiénicos: toallas, ropa íntima, objetos de aseo, y asientos sanitarios. Está asociada a otras ITS, principalmente a la gonorrea. ¿Cuánto tardan en aparecer los primeros síntomas después del contacto infectante? (período de incubación). De 4 a 28 días. ¿Cuáles son los síntomas? En mujeres (más del 10 % son asintomáticas): Cambia el flujo vaginal: mayor cantidad, se torna espumoso; amarillo-verdoso; olor fuerte desagradable. Prurito (picazón) y/o irritación vulvar. Dolor durante el coito. Micción dolorosa. Pequeños puntos hemorrágicos de la mucosa genital (aspecto de frambuesa). En hombres (El 90% son asintomáticos): Micción dolorosa. Secreción genital matinal. La infección se localiza en genitales internos. Es más común en penes no circuncidados con un prepucio largo. ¿Como se diagnostica? Examen microscópico de secreciones genitales. ¿Cuál es el tratamiento? Responde muy bien a tratamientos antibacteriales (con una efectividad en su mayoría del 100%) y no tienen secuelas graves. Deben tratarse también sus parejas sexuales. Es un problema sanitario menor. ¿Qué puede suceder si no se trata? No tiene secuelas graves. Vaginitis (vulvovaginitis) ¿Qué es? Es una infección y/o inflamación del tracto genital inferior femenino (vulva, vagina y cuello del útero) debido a múltiples causas; las más frecuentes son por agentes infecciosos (monilias y tricomonas) así como por factores físicos, químicos, hormonales, orgánicos y anatómicos que pueden modificar la flora vaginal. ¿Cómo se contrae? Por transmisión sexual. Las infecciones por levaduras pueden también producirse en mujeres que no han tenido contacto sexual. 101 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS ¿Cuánto tardan en aparecer los primeros síntomas después del contacto infectante? (período de incubación). Es variable. ¿Cuáles son los síntomas? Secreción vaginal en cantidad y de color diferente al flujo vaginal fisiológico, con olor desagradable. Prurito (picazón) y escozor en la vagina o sus proximidades. Dolor durante el coito. Micción dolorosa. ¿Cómo cerciorarse? Se examina una muestra de la secreción genital en el laboratorio de microbiología. ¿Cuál es el tratamiento? Según el tipo de infección: Con cremas y tabletas vaginales. Antibióticos orales. ¿Qué puede suceder si no se trata? Malestar que suele agravarse. Puede transmitirse a otras personas. Vaginosis bacteriana (V.B.) ¿Qué es? Estuvo clasificada como un tipo de vaginitis inespecíficas y la define un complejo infeccioso que muestra de manera constante un aumento en la incidencia de Gardnerella vaginalis, bacterias anaerobias (fundamentalmente Bacteroides y Mobiluncus) y Mycoplasma hominis, junto con una disminución del número de lactobacilos y del que Gardnerella vaginalis se convierte en el principal marcador diagnóstico. Su patogénesis está dada por el efecto simbiótico entre Gardnerella vaginalis, productora de aminoácidos y los gérmenes anaerobios que producirían aminas (putrescina y cadaverina) a partir de los aminoácidos, elevando consecuentemente el pH, lo que a su vez favorece el crecimiento de Gardnerella vaginalis, estableciendo un círculo vicioso. ¿Cómo se contrae? La Gardnerella vaginalis puede formar parte de la flora vaginal y no producir ningún malestar. Ante los determinados cambios del organismo puede activarse el complejo descrito. Las relaciones sexuales desprotegidas pueden provocar reinfecciones por lo que como cualquier ITS, deben someterse a tratamientos ambos miembros de la pareja. ¿Cuáles son los síntomas? Las pacientes sintomáticas, refieren un aumento de las secreciones o la aparición de un olor similar al del pescado en las mismas. En la mitad o más de las pacientes que presentan esta infección los sínto102 Vaginosis bacteriana. Foto tomada de www.aids.gov.br. MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS mas son mínimos o ausentes. No obstante, las pacientes asintomáticas presentan una concentración bacteriana en la vagina similar al de las pacientes sintomáticas. ¿Cómo cerciorarse? Puede establecerse mediante tinción de Gram de las secreciones vaginales. El diagnóstico clínico puede establecerse cuando se identifican: - El aspecto acuoso y homogéneo de las secreciones. - El pH superior a 4.5 - El olor a pescado tras la alcalinización de las secreciones con hidróxido de potasio (KOH) al 10% - La presencia de más del 20% de células guías en el extendido húmedo, que son células del epitelio vaginal recubiertas de bacterias. ¿Cuál es el tratamiento? Con antibióticos. ¿Qué puede suceder si no se trata? En mujeres embarazadas puede provocar partos prematuros, ruptura prematura de las membranas ovulares y diferentes infecciones postparto. Uretritis ¿Qué es? Es una infección de la uretra ocasionada por: Gonorrea. Clamidias. Trichomonas, y otros microorganismos. En los hombres la uretritis sin gonorrea se denomina Uretritis No Gonocócica (UNG). ¿Cómo se contrae? La mayoría es transmitida sexualmente. La ingesta desproporcionada de sustancias como el alcohol puede ser causa de uretritis química irritativa. Uretritis no gonocócica. Foto tomada de www.aids.gov.br ¿Cuánto tardan en aparecer los primeros síntomas después del contacto infectante? (período de incubación). Por gonorrea: de 2 a 5 días. Por uretritis no gonocócica (UNG): de 1 a 3 semanas. ¿Cuáles son los síntomas? En la uretritis gonocócica: En las mujeres: Micción frecuente y dolorosa. El 70 % es asintomático. En los hombres: Micción frecuente y dolorosa . Secreción uretral que se va tornando abundante y purulenta. Fiebre. 103 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Sin tratamiento el proceso se propaga y aparece sensación de peso en el periné. En las uretritis no gonocócica (UNG): Secreción mucoide con disuria (ardor al orinar) leve e intermitente. En algunos casos la secreción puede simular la de la gonorrea. ¿Cómo se diagnostica? Examen de laboratorio de una muestra de la secreción uretral. El diagnóstico de clamidiasis se realiza por cultivo celular, inmunofluorescencia directa, por ELISA, PCR (reacción en cadena de la polimerasa). ¿Cuál es el tratamiento? Con antibióticos. ¿Qué puede suceder si no se trata? Infertilidad femenina y masculina. Estenosis uretral. Prostatitis, artritis, meningitis, faringitis, pielonefritis, miocarditis, pericarditis y septicemia. Piojos púbicos (Ladillas o pediculosis del pubis) ¿Qué es? Es una infestación de parásitos o insectos llamados Phthirus pubis del orden Anoplura (piojos chupadores), que viven en la raíz del vello pubiano, axilas, pecho y cejas. ¿Cómo se contrae? Por íntimo contacto físico. Por empleo de la misma ropa, cama, etc. ¿Cuánto tardan en aparecer los primeros síntomas después del contacto infectante? (período de incubación). De 1 a 2 semanas. ¿Cuáles son los síntomas? Prurito intenso. Se encuentran el piojo adulto y las liendres fijados al vello pubiano y en otras regiones pilosas de abdomen y nalgas. También, por migración del parásito, puede aparecer en axilas, cejas y pestañas. Picazón en órganos genitales, axilas y cejas que obliga a rascarse lo que puede provocar lesiones cutáneas como ronchas, vesículas y máculas azuladas. ¿Cómo cerciorarse? Se examina el vello en busca de piojos o sus liendres (huevos), puede ser a simple vista o mejor con el auxilio de una lupa de mano. ¿Cuál es el tratamiento? Con champú o lociones antiparasitarias apropiadas. 104 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS Lavando ropa, de vestir, de cama en agua hirviendo, o enviarla a la lavandería para el lavado en seca (dry cleaning). Localizando y eliminando el parásito. Herpes genital. Fotos tomadas del Atlas de EST. Una guía práctica para las dificultades en el diagnóstico. Márques, BP. 2002. ¿Qué puede suceder si no se trata? Se agrava la molestia y se puede transmitir fácilmente. Lesiones post-rascado. Otras bacterias pueden aprovechar la presencia de estas lesiones para invadirlas y propagarse. Herpes genital ¿Qué es? Es una infección cíclica producida por el Virus del Herpes Simplex (VHS) tipo 2, localizado más frecuentemente en el área genital. El Virus Herpes Simple 1 (VHS-1), también llamado herpes labial, afecta principalmente la mucosa y la piel de la boca y la cara, pero puede provocar herpes genital en dependencia de las prácticas sexuales y posee la misma evolución que la infección provocada por el serotipo 2. ¿Cómo se contrae? Por contacto sexual: el contagio se da una semana antes o después de que aparezca o desaparezca la llaga o durante la misma. Y a través de pequeñas lesiones o membranas mucosas y a través de fisuras o erosiones. Por sexo orogenital (oral); lo que se conoce como herpes labial. Por contacto directo con la llaga o vesícula herpética o con la secreción de la misma. Por transmisión perinatal, a través de la placenta o a la hora del parto, lo que puede producir en el niño grave enfermedad o la muerte. La primoinfección de la madre en las primeras 20 semanas de gestación se asocia a un aumento de la frecuencia de aborto espontáneo, prematuridad y malformaciones congénitas. Es importante señalar que el 70% de las madres de los niños con herpes neonatal carecen de síntomas en el momento del parto y de antecedentes de infección genital previa. ¿Cuánto tardan en aparecer los primeros síntomas después del contacto infectante? (período de incubación). De 2 a 20 días. Puede incubarse por años y ser asintomático. ¿Cuáles son los síntomas? Inicialmente se presenta malestar general, fiebre, dolor de cabeza, dolor de huesos y músculos. Algunas veces acompañado de prurito e irritación de genitales. Al inicio del síntoma se presentan algunas señales: Hormigueo o escozor de genitales, nalgas o muslos. El hombre presenta escozor y dolor en el glande y en la mujer en la vulva y el ano o en el sitio donde aparezca dentro del área genital. 105 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS En este período o después del mismo, aparece un enrojecimiento de la zona sobre el que aparecen una agrupación de vesículas (como burbujitas de agua), con ardor y dolor, que evolucionan erosionándose (pelada) y secándose con formación de costra (postilla). Si se trata de una Primoinfección (primera vez que el individuo se pone en contacto el virus) el cuadro resuelve en 21 días desapareciendo sin dejar secuelas. Después de este cuadro el virus queda latente (escondido) en los ganglios regionales para reaparecer en la piel (recurrencia) con un cuadro mucho más discreto y que evoluciona de 7 a 10 días desencadenado por estrés, la exposición intensa al sol y en el sexo femenino también relacionado con la menstruación. El número de recurrencias también está dado por el estado inmunológico del individuo. ¿Cómo se diagnostica? Examinando las lesiones en la piel. Con una muestra del contenido líquido de la vesícula. Con una muestra de sangre. Lesiones de Herpes labial. ¿Cuál es el tratamiento? No hay cura. Los síntomas se tratan con antivirales orales y cremas locales. Inmunomoduladores que mejoran la respuesta inmunológica del organismo. ¿Qué puede suceder si no se trata? Reaparecen principalmente cuando la persona está en una etapa de estrés o enfermedad. Puede transmitirse sexualmente a otros. Está asociado al cáncer de cuello uterino. El herpes es más propenso de aparecer en el embarazo, con una alta probabilidad de contagiar al bebé a la hora del parto. La infección puede ser generalizada con: - meningoencefalitis - lesiones oculares - lesiones pulmonares - lesiones cutáneas - infecciones en el SNC Como el virus es cíclico, las mujeres embarazadas que alguna vez tuvieron herpes deben ser revisadas por un médico para que determine que no tiene lesiones una semana antes del parto. De lo contrario lo que se recomienda es practicar la cesárea. Verrugas genitales (Condiloma Acuminado o Cresta de Gallo) ¿Qué es? Enfermedad infecciosa producida por el Papiloma Virus Humano de la familia Papovaviridae. Existen más de 70 serotipos y 20 de ellos 106 Lesiones de Herpes genital. MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS pueden infectar el tracto genital, divididos en tres grupos según su potencial oncogénico (que pueden llegar a desarrollar cáncer cérvico-uterino). Condiloma acuminado. Fotos tomadas del Atlas de EST. Una guía práctica para las dificultades en el diagnóstico. Márques, BP. 2002. Es muy frecuente en personas jóvenes. Es una de las ITS de mayor contagiosidad. ¿Cómo se contrae? Por contacto directo con las verrugas durante las relaciones sexuales. Principalmente se transmite a personas con el sistema inmunológico debilitado por diabetes, embarazo y otras ITS. Los condilomas que aparecen intra-anal (dentro del ano) son predominantemente en pacientes que han tenido coito anal receptivo y las de localización perianal, sin embargo, pueden aparecer en hombres o mujeres que no tienen historia de penetración anal. Existe el contagio a mucosa de la cavidad oral por hábitos sexuales orogenitales. ¿Cuánto tardan en aparecer los primeros síntomas después del contacto infectante? (período de incubación). De semanas a décadas, ya que la infección puede ser subclínica (no visible clínicamente) y no se conoce el tiempo que el virus puede estar en este estado. ¿Cuáles son los síntomas? Inicialmente, puede presentarse una pequeña irritación o picazón en el área afectada. Las verrugas empiezan como pequeñas máculas (manchas) y crecen hasta convertirse en protuberancias papilomatosas con el aspecto de una coliflor. Pueden ser únicas o múltiples, de tamaño variable. Se extienden por auto-infección principalmente en zonas húmedas como los genitales. En el hombre: aparecen en el en el glande, en el surco balanoprepucial, la porción terminal de la uretra y en la región perianal o el canal anal. En la mujer: aparecen en la vulva, periné y ano; también puede producirse verrugas (o racimos de verrugas) en el cuello uterino (dentro de la vagina) sin que la mujer se dé cuenta. Algunas mujeres son asintomáticas. ¿Cómo se diagnostica? Examen básicamente clínico. Puede ser confirmado por biopsia de las lesiones. ¿Cuál es el tratamiento? Destruirlas con métodos físicos: (por frío o por calor), o métodos químicos, sin embargo, no se debe utilizar la podofilina en las mujeres embarazadas. También existe tratamiento quirúrgico. 107 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS ¿Qué puede suceder si no se trata? Aumentan en cantidad y tamaño. Pueden propagarse a otras zonas. Importante potencial oncológico (cáncer). Los serotipos 6 y 11pueden causar Papilomatosis Laríngea en recién nacidos pero aún se desconoce si la vía de transmisión es transplacentaria, perinatal o postnatal. Hepatitis B (VHB) ¿Que es? Es la inflamación del hígado causada por la infección con el Virus de la Hepatitis B de la familia Hepdnaviridae, que a menudo se transmite sexualmente y que se puede prevenir con vacunas. ¿Como se contrae? El virus se encuentra en la mayoría de los líquidos corporales y según la OPS, solamente se ha demostrado que son infecciosos la sangre, la saliva, el semen y los líquidos vaginales. Otros estudios declaran la transmisión de la siguiente forma: Parenteral: (Es la más frecuente). A través de la sangre por: Transfusiones sanguíneas, por adicción a drogas compartiendo jeringuillas, por tatuajes y por inoculación accidental de material contaminado. Madre-hijo: Puede trasmitirse la infección intraútero, perinatal, o postnatal a través de la sangre, de la secreción vaginal, de la leche materna y de la saliva, cuando la madre tiene infección aguda en el tercer trimestre. Transmisión sexual: Por el contacto con la sangre, el semen, la secreción vaginal, la sangre menstrual, la saliva, por sexo oral y sexo anal, este último estrechamente ligado al VHB. También la transmisión por esta vía está determinada por el cambio frecuente de parejas y episodios múltiples de otras ITS. ¿Cuánto tardan en aparecer los primeros síntomas después del contacto infectante? (período de incubación). De 45 a 180 días. ¿Cuáles son los síntomas? Existen tres patrones principales de respuesta a la infección: Infección aguda (desarrollada por el 30-40% de adultos con VHB). Infección subaguda. Infección crónica (desarrollada por el 5-10% de adultos con VHB). Existe una fase prodrómica donde hay síntomas inespecíficos de anorexia, náuseas, vómitos, cansancio, malestar general, dolores 108 Condiloma acuminado. Fotos tomadas del Atlas de EST. Una guía práctica para las dificultades en el diagnóstico. Márques, BP. 2002. MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS articulares, fiebre, dolor de cabeza y alteraciones del olfato y paladar. Después aparece una fase ictérica: se inicia entre 5 a 10 días después de la fase anterior, donde disminuye la sintomatología que existía y aparece la ictericia con la coloración amarilla de la orina (coluria). Después aparece la fase de convalecencia donde toda la sintomatología desaparece gradualmente en 2 a 12 semanas. En la mayoría de los casos se cura, sin secuelas, en los 6 meses siguientes a la infección. La evolución hacia la forma crónica puede depender de la edad en que ocurre la infección y la evolución para cirrosis y para carcinoma hepatocelular primaria no es rara. Algunos pacientes son asintomáticos. Condiloma acuminado. Fotos tomadas del Atlas de EST. Una guía práctica para las dificultades en el diagnóstico. Márques, BP. 2002. ¿Como se diagnostica? Por marcadores serológicos del virus. Pruebas funcionales hepáticas que reflejan la lesión hepatocelular. Biopsia hepática en la hepatitis crónica. ¿Cual es el tratamiento? No existe tratamiento específico. Los esfuerzos se dirigen a la profilaxis. Se usan antivirales. ¿Que puede suceder si no se trata? En las transmisiones perinatales puede provocar: Abortos. Malformaciones congénitas. Infecciones. Fácil contagio a otros personas (principalmente los asintomáticos). Puede producir cirrosis. Participa en la formación del carcinoma hepatocelular (cáncer). Hepatitis crónica activa. Necrosis hepática aguda. Relación de las ITS con el VIH/SIDA Existe una estrecha relación entre las Infecciones de transmisión sexual y el VIH/ SIDA: En primer lugar, los agentes causales de infecciones transmitidas sexualmente comparten con el VIH la vía fundamental de transmisión. Las relaciones sexuales desprotegidas constituyen la forma más extendida en la cual se adquieren estas infecciones. Por lo que el comportamiento que determina que alguien quede infectado con una ITS, también puede determinar la adquisición del VIH. Las personas que padecen una o varias ITS son más propensas de infectarse del VIH. Algunas ITS producen lesiones en la mucosa, lo cual constituye una puerta de entrada del VIH. Por otra parte, las secreciones que provocan algunas ITS van acompañadas de una 109 MANUAL DE APOYO A LOS CONSEJEROS mayor concentración de CD4, como parte de la respuesta inmunológica; esto facilita que el VIH encuentre células dianas para causar la infección. Se hace referencia de un incremento en la probabilidad de infección de 6 a 8 veces en relación con las personas que no tienen ITS. También las personas con ITS y que portan el VIH transmiten con más facilidad el virus. La infección por VIH altera el curso natural de una ITS y la respuesta a los tratamientos. Por este motivo una ITS, que podría tener secuelas poco severas, en una persona con VIH puede provocar complicaciones mayores e incluso fatales. Por este motivo se le recomienda a las personas con VIH el uso sistemático de condones no sólo para prevenir la reinfección por VIH sino la adquisición de alguna ITS. El padecimiento de alguna ITS por una persona con VIH constituye otra agresión al sistema inmunológico. Bibliografía 1. AIDSCAP: El control de las enfermedades de transmisión sexual: Un manual para el diseño y la administración de programas. Guatemala, S.A. 1997. 2. Berger, GS and Weström, LV: Pelvis inflamatory disease. Raven Press Ltd, EUA, 1992. 3. 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