Carta de Presidente Estimados Delegados, Se les da la bienvenida a la Séptima edición del Modelo Intercolegial de las Naciones Unidas del Liceo los Robles. La mesa del Consejo de Paz y Seguridad de la Unión Africana espera con ansias un gran fondo académico, liderazgo y creatividad por parte de los delegados al momento de hablar sobre el tópico, asimismo esperamos el mayor esfuerzo de ustedes al momento de proponer las soluciones que deberán solventar la problemática. De verdad esperamos que en esta oportunidad, ustedes delegados, disfruten el modelo y les sirva como aprendizaje para el desarrollo de habilidades que serán útiles en un futuro. En el continente africano se ha podido ver como la falta de desarrollo económico ha hecho que se creen grupos irregulares, que quieren aprovecharse de los recursos valiosos de otros países. Tras el tiempo estos países de África han querido surgir, sin embargo, debido a los intereses internos de los gobiernos y de las empresas nacionales, públicas y trasnacionales no se ha podido ver el avance de éstas naciones africanas. También es importante mencionar que debido a la influencia que han tenido estos grupos irregulares en África, se han creado varios conflictos que son influyentes al momento de buscar el desarrollo de un país. Los países en este comité tienen el deber de solucionar esta problemática como una unidad africana, tomando en cuenta las diferencias de credo, religión, raza y también evitar el derrame de sangre y que se deje de cobrar tantas vidas inocentes que luchan por su libertad. Por último y no menos importante se le recuerda a los delegados que está en sus manos la vida de millones de africanos que luchan por su libertad y las ganas de vivir en una sociedad sin corrupción “Nos encontramos en el amanecer de un siglo africano, un siglo en el que África ocupará su lugar legítimo entre las naciones del mundo” - Nelson Mandela Se Despide, Naim Bijani, Presidente de Mesa – Unión Africana Lista de Países 1. Argelia 2. Angola 3. Benín 4. Camerún 5. Costa de Marfil 6. Republica Democrática del Congo 7. Republica del Congo 8. Egipto 9. Ghana 10. Kenia 11. Libia 12. Nigeria 13. Ruanda 14. Senegal 15. Sierra Leona 16. Somalia 17. Sudáfrica 18. Sudán 19. Sudán del sur 20. Túnez 21. Mozambique 22. Burkina Faso 23. Burundi 24. Mauritania 25. Gambia 26. Uganda 27. Liberia 28. Botsuana 29. Malaui 30. Mauricio Consejo de Paz y Seguridad de la Unión Africana Como es entendible, el fin único de este comité es establecer y mantener la paz y seguridad del continente africano, para lo cual tiene facultades como el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas pero limitado al continente africano. Este tiene la potestad de tomar acciones que puedan resolver problemas de paz y seguridad en el continente, buscando primordialmente soluciones diplomáticas y pacíficas a los problemas y en caso de ser necesario, hacer uso de las fuerzas encargadas de mantener paz y seguridad. El Consejo de Paz y Seguridad de la Unión Africana se creó moldeándose al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. De esta manera, los miembros de éste comité son elegidos por la Asamblea General de la Unión Africana. En este comité se suelen tratar todos los problemas internos que tenga el continente africano referente a la paz y seguridad o a cualquier tema que ponga en riesgo la paz y la seguridad del continente africano. Un ejemplo de lo anteriormente planteado es el tema que debatiremos en esta oportunidad: la extracción ilegal de minerales como violación a la soberanía nacional. Es importante destacar, que como Consejo de Paz y Seguridad tenemos el deber y la obligación de solventar el problema tomando acciones, ya sean de carácter pacífico o en su defecto a través del uso de las fuerzas encargadas de reestablecer el orden y la paz en el continente africano. Es importante no olvidar nunca que las medidas pacíficas son nuestra principal fuente de solución al problema. La idea es poder solventar cualquier situación de crisis a través de las negociaciones diplomáticas que se generen y que consigan como resultado un acuerdo eficaz que permita establecer paz y seguridad en el continente. Antecedentes En la gran guerra del Congo hubo un total de 3,5 millones de muertes, las cuales fueron producidas mayormente por enfermedades y hambre. Además, se pudo demostrar que dentro del país había más de veinte grupo insurgentes que eran tanto locales como extranjeros y que estaban siendo apoyados por países del continente africano. Sabiendo esto, podemos darnos cuenta que algunos países tenían un interés especial en que esos grupos insurgentes se mantuvieran en el Congo, ya que los mismos extraían minerales de grandes costos que luego eran vendidos a un precio altísimo y que los gobiernos que apoyaban a estos grupos, se veían beneficiados de estas acciones. En la desarrollo de esta guerra, se pueden ver cuales son los cuatro grupos de fuerzas irregulares mas fuertes. Debido a la presencia de estos grupos, el conflicto fue llamado guerra de cuarta generación, por la forma como la llevaron, debido a que no había un gran control de los territorios y una línea de defensa fuerte y segura. Entre las más importantes están: Fuerzas tutsi: estas fuerzas irregulares eran de los ejércitos de Ruanda y Burundi. Estos fueron creados por las etnias tutsi banyamulengue y las fuerzas rebeldes llamadas “Reagrupamiento Congoleño para la Democracia” o la RCD (esta dominado por los banyamulengue) estos grupos tienen dominado la parte del norte y sur de kiva y contrarrestan las influencia de Uganda Fuerzas hutus: estas fuerzas realizaron el genocidio de 1994. Estos son rebeldes de Burundi para derrocar a los gobernantes, son hutus congoleases y parte de las milicias Mai Mai. Estos están por los alrededores de kivu y su principal función es retirar a la fuerzas tutsi Fuerzas ugandesas: Incluye al ejército nacional de Uganda y varios grupos apoyados por este país, tales como el "Movimiento de Liberación del Congo", cuyas fuerzas controlan la zona del noreste y centro-norte de la RDC. Sus fines son proteger la frontera ugandesa, evitar el desarrollo de un estado fuerte en el Congo, contrarrestar la influencia de Ruanda y explotar los recursos naturales. Fuerzas del gobierno de Kinshasa (Kabila): incluye al ejército nacional del Congo, grupos enemigos de los Mai Mai, y naciones aliadas como Zimbabue, Angola, Chad, Sudán y Namibia. Controlan el este y el sur de la RDC, y sus principales fines son crear un estado fuerte que controle sus fronteras y territorio, al igual que los recursos naturales. Como se explico anteriormente, este conflicto se desarrolló de manera desordenada, ya que no existieron batallas definidas y el control territorial fue muy ineficiente. Como resultado, la guerra la combatieron, grupos de milicias no organizadas, altamente indisciplinadas y que contribuyeron a la violencia con acciones tales como violaciones masivas, tortura y limpieza étnica. Por esto mismo, los acuerdos de alto al fuego o de paz han resultado en gran medida inoperantes, ya que estos grupos continúan funcionando impunemente y sin ningún control. El principal objetivo de esta guerra fue la necesidad de extraer los diferentes minerales en la zona, de los cuales entre los mas importante destacan el diamantes, oro y coltán. Los esfuerzos de explotación convirtieron a los oficiales de los ejércitos de Ruanda y Uganda en tenedores de pequeñas y grandes fortunas, que con el tiempo desplazaron al objetivo inicial de perseguir, capturar y castigar a los principales autores del genocidio de 1994, por sostener el control en el este de la RDC. En la interinidad las fuerzas de ocupación establecieron impuestos prohibitivos a los habitantes nativos, confiscando casi todo el ganado y buena parte de los alimentos de las zonas ocupadas. Se sabe hoy que hubo intereses de muchas partes involucradas por controlar los yacimientos de coltán, un mineral precioso con un importante uso en la industria informática y espacial. En 1999 tropas de Uganda y de Ruanda chocaron en la ciudad de Kisangani. Pese a este quiebre entre sus enemigos, las fuerzas de Kabila estaban demasiado exhaustas como para tomar ventaja de la situación. En el año 2001 las Naciones Unidas emitió un informe, luego de que uno de sus comités especiales culminó una investigación de la explotación mineral ilegal en la República Democrática del Congo, culpando a países como Uganda, Ruanda y Zimbabue por la explotación ilegal de los minerales Los repetidos intentos de poner término a la violencia en el Congo fracasaron reiteradamente. El año 2002 trajo consigo el agravamiento de la situación interna de Ruanda, mientras que grupos como la ADC desistieron o actuaron débilmente en apoyar al gobierno de Joseph Kabila. Para agravar más la situación, los banyamulengues, cansados del interminable conflicto, se amotinaron varias veces, provocando graves desórdenes en las zonas que se encontraban bajo su control, chocando con el propio ejército de Ruanda. Como contrapartida de esta situación, la zona oeste del país, aquella controlada por el gobierno de Kinshasa, logró establecer un cada vez más firme orden interno, aumentando la seguridad, controlando la inflación y permitiendo el regreso de la ayuda internacional. Situación Actual En realidad el mayor beneficiario del coltán congoleño durante la guerra fue Ruanda. En el año 2001 la ONU envió una comisión de expertos para realizar informes sobre el asunto y proponer soluciones para finalizar el conflicto. Entre las soluciones más importantes, éstos propusieron instaurar un proceso para certificar el origen del diamante, coltán y oro extraído, declarar un embargo en la zona tanto de armas como de exportación e importación de minerales y sancionar los países o empresas que irrumpieran con este embargo. Gracias a estos informes realizados por la ONU, mas los realizados por la ONG, que fueron expuestos a través de los medios internacionales, se permitió la atención internacional de este conflicto y la identificación de la empresas que realizaban la extracción ilegal de minerales en la zona. Y fue así como 34 empresas (27 occidentales) fueron acusadas de importar coltán y casiterita y se consiguió que la compañía aérea belga Sabena suspendiese el transporte del mineral que realizaba desde Kigali (capital de Ruanda) a Bruselas Sin embargo, muchas otras empresas encontraron la forma de seguir con el negocio y actualmente utilizan rutas alternativas y una gran parte del coltán congoleño sigue saliendo al mercado camuflado como procedente de Tailandia o Brasil. Las medidas que se tomaron fueron muy ineficientes y en el Consejo de Seguridad no se llego a ningún acuerdo para adoptar otras más efectivas. Más bien al contrario, ya que actualmente muchos países occidentales siguen ayudando a Uganda y Ruanda tanto militarmente como a través de cuantiosas ‘ayudas al desarrollo’. Por ejemplo, la agencia de ayuda británica (DFID) anunció en septiembre del año 2000 un préstamo de 95 millones de dólares sobre un periodo de tres años para ayudar al Gobierno ruandés. Resulta paradójico y difícil de comprender cómo era necesaria una ayuda a países que poseían los suficientes recursos para invadir a su vecino. En este sentido, informes publicados por la ONU en abril de 2001 estimaban que el gasto militar de Ruanda en municiones, abastecimiento y vuelos de su Ejército en el Congo rondaba los 60 millones de dólares al año, mientras otros informes también publicados por la ONU y por comisiones independientes estimaban que en el año 2000 Ruanda había ganado 40 millones de dólares por diamantes, 15 millones por el oro y 191 millones por el coltán, todos extraídos en suelo congoleño. Uganda habría ganado en sus zonas bajo control 1,8 millones por diamantes, 105 millones por el oro y 6,2 millones por el coltán. La guerra ha acabado, sin embargo, en África siguen habiendo conflictos por la explotación de minerales en territorios que no le pertenecen a los grupos que lo explota y, que en muchas oportunidades son financiados por gobiernos de países adyacentes al territorio al cual se le está violando la soberanía. El coltán no es el único mineral que ha generado problemas en África, ya que existen minerales de mucho valor, tales como el oro, diamante, esmeraldas, entre otros. Es importante saber que aunque la guerra en sí ya finalizó, igual sigue existiendo la minería ilegal que viola soberanía de países y que sigue siendo una razón de conflicto en aquellos territorios involucrados. En todos los casos anteriores, siempre se sospecha del apoyo de los gobiernos hacia los grupos insurgentes que traspasan fronteras para poder extraer el mineral de otros territorios, quienes se ven beneficiados de este delito debido al gran valor económico que poseen dichos minerales. Es de suma importancia que este tipo de acciones dejen de llevarse a cabo en el territorio africano, ya que constituyen un peligro para la paz y seguridad del continente y además es un acto ilegal que debe ser sancionado y no puede seguir siento tolerado ni permitido; es por esta razón que el Consejo de Paz y Seguridad de la Unión Africana debe actuar con medidas eficaces, sin dejar a un lado todos los problemas que ha ocasionado la extracción ilegal de minerales, no solamente en la República Democrática del Congo, sino en todos los países de África en que esto ocurre.
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