1. Ciencia

PREPARACIÓN
Toyota Land Cruiser KDJ155 Tot Curses-Adonis
El pack
completo
Más potencia y par que el vehículo de serie gracias a
la nueva centralita Adonis y unas suspensiones de gran
nivel hacen de este KDJ 155 la elección idónea para el
usuario todoterreno. Trialeras o pistas, poco importa.
Este Land Cruiser sale airoso de cuantos apuros
pongamos entre sus neumáticos.
Texto: Cristian Mestres Fotos: Asensi Carricondo
S
e ha hecho esperar, pero aquí tenemos al primer osado aficionado al
todoterreno que no se ha podido resistir a mejorar la respuesta TT de su Land
Cruiser 155. Mientras la gran mayoría espera a que se agote su garantía o le da un
uso más asfáltico, el poseedor del vehículo
que ilustra estas páginas lo disfrutará con
toda intensidad por los caminos de nuestra geografía... o parte del extranjero. Sus
órganos mecánicos, bastidor y carrocería
han sido objeto del concienzudo estudio de
los técnicos de Tot Curses y Adonis Ibérica.
Los temores a la nueva ley general de reforma de vehículos fueron los aceleradores
del proceso. Así que, para evitarse dolores
de cabeza (o de bolsillo), el propietario de
esta joya optó por aunar en una sola visita
al taller todos los cambios previstos para algún que otro año.
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Uno de los principales atractivos de
esta preparación se esconde detrás de la
guantera. Queda oculto a la vista, pero basta con accionar el pedal del gas para descubrir su existencia. Estamos escribiendo
sobre la centralita suplementaria Adonis,
un modelo desarrollado específicamente
para la nueva generación del Toyota Land
Cruiser.
Su principio de funcionamiento no cambia respecto a las que habíamos probado
con anterioridad. A diferencia de algunos
productos low cost a la venta en el mercado, no busca engañar a los sensores del vehículo o se ocupa, exclusivamente, de aumentar el caudal de inyección y la presión
del turbo. Esta ECU recibe la señal de todos
los puntos del coche y los interpreta a partir
de sus cartografías previamente programadas. En otras palabras, la centralita Adonis gestiona el motor por ella misma mientras que la unidad original permanece en
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ADONIS
194,7 CV / 517 Nm
La centralita Adonis contra la electrónica de serie y la R-Edition
Las curvas, al detalle
C
omo complemento al reportaje de
esta preparación de Tot Curses tuvimos la ocasión de realizar un interesante comparativo de centralitas que
mostramos por su interés. Así que adiós
a supuestos datos oficiales anunciados y
a referencias estándar que, como todos
sabemos, poco o nada tienen que ver
con el rendimiento de cada unidad específica. No hay nunca dos motores iguales, así que nada mejor que el banco de
pruebas para vehículos 4x4 de Tot Curses para enfrentar en igualdad de condi-
La centralita Adonis
está programada para entregar
unos teóricos 225 CV y 560 Nm
estado latente y puede reactivarse con sólo
tocar un pulsador. Este accionamiento puede efectuarse en cualquier momento, tanto con el coche detenido como con el vehículo en marcha, y el cambio no se percibe
más allá de la reducción de los valores de
potencia y par.
La centralita Adonis entrega unos teóricos
225 CV y 560 Nm de par, unas potencias
que dejan muy lejos el rendimiento del Land
Cruiser de serie, con 173 CV y 410 Nm.
Sin embargo, el comparativo de centralitas que hemos podido efectuar (ver recuadro superior) nos ha servido para descubrir
que esta unidad en concreto quedaba algo
por debajo. Lo que no cambia es, en nin-
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ciones y sobre un mismo coche la electrónica original Toyota para el Land Cruiser
KDJ155 3.0 D-4D de 173 CV, la centralita de la versión R-Edition, que programa
Toyota Motorsport, y, finalmente, la que
ofrece Adonis.
Tras desmontar toda la zona de la
guantera para acceder al cerebro electrónico del coche y situarlo sobre los rodillos, Bertrand Marco, de Adonis Ibérica, ha empezado a calibrar el banco
de pruebas. Antes de empezar el test, el
propio Bertrand nos ha advertido de la
merma prestacional que implica la presencia del snorkel, especialmente en lo
que respecta a potencia, ya que consiente un menor caudal de aire a altas vueltas. Además, nos explicaba: “Más allá
de resultados máximos, que vienen siempre determinados por factores externos a
la prueba, como la temperatura o el estado del vehículo, lo interesante del comparativo es ver las diferencias en las curvas por tramos”.
Empezamos. Efectuamos dos mediciones para cada una de las opciones elec-
gún caso, el rendimiento del bloque con el
“suplemento Adonis”, especialmente a bajo
régimen. El nuevo índice de par llega mucho antes y con una contundencia superior,
lo que auxilia tanto en zonas de muy baja
adherencia como en las trialeras. Además,
existe una función específica de overboost,
un extra de potencia que entra en funcionamiento siempre que el conductor pise a
fondo el acelerador. El precio de venta al
público de la centralita Adonis –montaje incluido– es de 1.880 euros, aunque no incluye la homologación. Toyota nos reclama 2.050 por una R-Edition, pero en este
caso la homologación ya viene incluida en
el precio. Es importante matizar que la unidad probada funciona exclusivamente con
el motor 3.0 D-4D de 173 CV. Adonis ya
está desarrollando la ECU para la nueva
variante de 190 CV.
Completa el trabajo en la planta motriz
la adición de una toma elevada Roca Silva,
de color blanco que queda perfectamente
integrada en el vehículo.
Las mejoras en el propulsor han obligado a Tot Curses a plantear y legalizar
unas modificaciones a su altura. Para empezar, el especialista con sede en Vulpellac ha empezado por mejorar la estabilidad con el aumento del ancho de vías.
El equipo que encabeza José Luis León ha
incorporado unos separadores que ensanchan un total de seis centímetros por
eje, tres en cada neumático. A continuación, y a fin de mejorar el contacto del
vehículo con el suelo, se ha sustituido la
goma original por un juego de BF Goodrich All-Terrain en medida 245/75. La
llanta sigue siendo la de aleación de aluminio de 17 pulgadas que Toyota nos entrega de serie.
UNA GRAN SUSPENSIÓN
El segundo gran punto fuerte de esta
preparación, junto a la centralita Adonis, son las suspensiones. El propietario
de este modelo ha buscado una suspensión de gama alta, que le brindara un
R-EDITION
184,4 CV / 454 Nm
trónicas y, al acabar, Bertrand Marco nos
proporciona un balance inicial. Primero,
las cifras de par motor: “Si tomamos la línea de 400 Nm como referencia, vemos
que la curva original’(verde) no llega a
sobrepasarla, alcanzando un valor máximo de 393 Nm a 2.390 rpm. La R-Edition llega a los 454 Nm a 2.185 vueltas,
aunque ya supera los 400 a 1.800. Finalmente, la centralita Adonis sobrepasa
los 400 Nm a 1.700 rpm y llega a su valor máximo, 517 Nm, a 2.055 rpm. Podemos llegar fácilmente a la conclusión
de que las centralitas suplementarias mejoran la entrega de prestaciones, además
de rebajar el valor máximo en casi 300
rpm en ambos casos. Además, se trata de
curvas muy ‘redondas’, lo que se traduce en una mayor fuerza que en el vehículo original a todo régimen y una respuesta superior”.
¿Y LA POTENCIA?
¿Y qué hay de los valores de potencia?
He aquí la lectura de las curvas que nos
proporciona Bertrand Marco: “Antes que
nada, hay que matizar que las cifras de
potencia obtenidas en los tres casos son
inferiores a las que anuncia Toyota, lo
que se explica, en gran medida, por la
presencia de la toma elevada, que en este
caso penaliza el flujo óptimo de aire en la
admisión. Este hecho quedó patente durante las pruebas en la excesiva emisión
de humo negro por el escape a medida
que crecía la velocidad del motor, debido
a la falta de aire para quemar el combustible inyectado.
Original
160,8 CV / 393 Nm
Si tomamos como referencia el valor
al paso por las 2.000 rpm, la cifra de la
electrónica original es de 110 CV, que
crece en 19 CV (129 CV) con la centralita suplementaria R-Edition y en 38 CV
(148 CV) con la Adonis”.
El balance final es evidente, y apunta las centralitas como principal foco de
mejora de los resultados. La toma elevada sólo plantea dos puntos de discusión: ¿máximas prestaciones o referencias de catálogo reducidas? Si lo que
buscamos es la máxima potencia, toca
necesariamente prescindir de ella. Sin
embargo, si lo que pretendemos es una
preparación compensada, con un filtro de aire bien protegido del polvo, el
agua y la humedad durante nuestras
excursiones off-road, resulta imprescindible instalar una unidad.
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5
El buen rendimiento de la suepsnsión King proporciona mucha confianza al volante en curvas rápidas como la de la imagen.
buen rendimiento trialero, pero que encajara las zonas de pista rápida sin demasiados apuros, máxime si consideramos el nerviosismo que se supone a todo
todoterreno corto de ejes. José Luis León
ha encontrado la respuesta a esta difícil
combinación en la firma King.
El KDJ 155 en estudio lleva una combinación de muelle y amortiguador con
botella separada único por rueda de
esta firma en el eje delantero. Para la
zaga, Tot Curses ha montado dos amor1
tiguadores idénticos a los usados delante, aunque en este caso manteniendo los muelles del Land Cruiser de serie.
¿El motivo? Bien sencillo. León priorizó
su mayor elasticidad, sabedor de que el
usuario no circularía con su vehículo altamente cargado, con lo que no había
necesidad de resortes helicoidales de
mayor rigidez.
La elevación total del vehículo con los
nuevos amortiguadores es de cuatro centímetros. Para alcanzarla con los muelles
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de fábrica posteriores ha habido que incorporar un suplemento de nailon de la
misma medida.
Puestos al volante, el rendimiento del
nuevo equipo de suspensión evidencia un
equilibrio manifiesto. A partir de un tarado bastante duro, su reacción a alta velocidad (en tramos de pista rápida con
baches) es muy parecida a la de los coches de competición, y permite pasar por
las irregularidades sin oscilación alguna
de la carrocería. En otras palabras, es
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La protección de la carrocería y los órganos mecánicos del Land Cruiser queda reducida
a una plancha de duraluminio de 8 milímetros de grosor para el ángulo de ataque (1)
y a una estribera metálica que protege el ventral (7) en zonas complicadas. Otro extra
apreciable en el exterior es la toma aérea Roca Silva, situada en el pilar que protege la
zona del copiloto y que queda elegantemente integrada en el montante.
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La centralita Adonis incrementa las cifras de
potencia y par. Bien secundado por las gomas, el
conjunto tiene una respuesta contundente.
como si flotáramos sobre los baches. En
condiciones de baja velocidad, aseguran
un magnífico copiado del terreno, lo que
ayuda a quien se encuentra al volante. En
estas condiciones también resulta un interesante auxilio el bloqueo neumático ARB
posterior, que se acciona desde un botón
específico ubicado en la consola.
El listado de extras de este Land Cruiser se completa con un sencillo equipo
de protecciones. La nueva altura libre
hace innecesario el resguardo del ángu-
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La suspensión delantera
(4) se confía a un juego
de amortiguador-muelle
de la firma King (se puede
apreciar por su peculiar
color azul). El amortiguador
cuenta con botella de
hidráulico separada y
permite ganar 4 cm de
elevación. En la zaga (5)
se ha complementado su
concurso con los muelles
originales, suplementados
con un taco de nailon en su
parte superior. Ambos ejes
cuentan con espaciadores
de 6 cm, y en el diferencial
posterior se monta un
bloqueo neumático ARB,
accionable desde el
habitáculo (6).
lo de salida, y tan sólo se han instalado
unas planchas de duraluminio de 8 mm
de espesor para el de ataque. Su adición la complementan un juego de estriberas para resguardar el ángulo ventral
en trialeras muy delicadas.
Decía un conocido anuncio de neumáticos que la potencia sin control sirve de
muy poca cosa. Este Toyota Land Cruiser consolida la tesis... a la par que invita a disfrutar a tope de la conducción
off-road. 6