Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas. Centro Nacional de Producción más Limpia Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas. Centro Nacional de Producción más Limpia 1. MANUAL DE GESTIÓN AMBIENTAL. 1.1 Definición. En general un manual de gestión es una herramienta administrativa que permite a una empresa normalizar las operaciones, con el propósito de sistematizar las funciones, generando como consecuencia la estabilidad y solidez de la empresa. Para el caso de un sistema de gestión ambiental, se pretende establecer los lineamientos que ejecuta una empresa con el propósito de controlar su gestión ambiental y demostrar a terceros el desempeño en este campo de acción específico. La documentación del Manual Ambiental, si bien no es un requisito indispensable para una organización, no cabe duda que será un beneficio importante cuando se trate de demostrar a partes interesadas (Gobierno, vecinos, inversionistas), el grado de responsabilidad y control que mantiene en todas las actividades de la empresa, en procura de reducir y mitigar el impacto ambiental que pueda provocar. Esto genera confianza en todas las partes interesadas y tranquilidad a la empresa para que siga aplicando esfuerzos y recursos a la mejora de la productividad, reduciendo las posibilidades de que ocurran emergencias que pueden perjudicar su imagen y posibles sanciones del Gobierno. 1.2 Propósito de este Manual. Este documento pretende aportar a las empresas medianas y pequeñas las directrices para establecer un sistema de gestión ambiental con base en los requisitos de la Normas ISO 14001, y establecer el Manual Ambiental que documente los procesos que se ejecutan para la prevención de la contaminación. Las secciones siguientes, a partir de la número 2 y hasta la 18, proporcionan información de cada uno de los requisitos establecidos en la Norma Internacional. Incluye comentarios para la interpretación de los requisitos en cuestión y proporciona información para que un empresario, que desee desarrollar e implementar un sistema de gestión ambiental, pueda iniciar las prácticas respectivas. La sección 19 aporta el proceso para el desarrollo de auditorías internas al sistema de gestión ambiental. Con esta sección se pretende guiar al empresario en las medidas que debe tomar para desarrollar auditorías internas y sobre la documentación que debe generarse a partir de ella. documentación básica que debe levantarse con el propósito de cumplir con los requisitos de la Norma ISO 14001. En el anexo 1 se muestran tres ejemplos de Política Ambiental que servirán para establecer la declaración de Política ambiental de la empresa; en el anexo 2 presenta una muestra de un Manual Ambiental que cumple con el requisito 4.4.4 de la Norma; en el anexo 3 se incluyen ejemplos específicos de los procedimientos mencionados anteriormente; y en el anexo 4, se brindan ejemplos generales de los formatos que se mencionan en cada uno de los procedimientos. 1.3 ¿Cómo elaborar su propio Manual Ambiental? En primer lugar es recomendable que haga un repaso de la Norma ISO 14001 y de los requisitos que se establecen en ella. Este Manual es un medio para profundizar en la Norma. Posteriormente, es necesario realizar una auditoría ambiental. La auditoría debe aportar información sobre el estado de la empresa con respecto a: cumplimiento de los requisitos solicitados en la Norma internacional; cumplimiento de los requisitos legales que aplican a sus actividades, productos y servicios; estado de control del impacto ambiental; cantidad y ubicación de los procesos de mayor impacto ambiental; grado de identificación del personal con las prácticas ambientales y el nivel de documentación de las prácticas ambientales. La información anterior deja en claro cuál es la brecha de partida de la situación de la empresa con respecto a las prácticas ambientales establecidas por el Ministerio de Salud, por lo que le permite visualizar el volumen de trabajo que puede esperarle. La claridad que posee de su situación puede asegurarle el desarrollo de su Manual de gestión ambiental conforme avanza en el desarrollo e implementación del sistema de gestión. 1.4 ¿Qué no es este Manual de Gestión? Finalmente, queda mencionar que éste no es un texto que pueda ser aplicado de manera puntual en todas las empresas. La documentación presentada son muestras, es necesario que se adapte a la realidad particular de cada empresa y eso sólo lo puede hacer una persona que esté inmersa en la organización y conozca su cultura. Los recursos que puedan aplicarse, la estructura organizacional, la cantidad de procesos productivos y de servicio, el nivel académico del personal; serán elementos que al final determinen cómo se establecerá el sistema de gestión ambiental y su Manual. Los anexos del 1 al 4 incluyen ejemplos concretos de la Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas (1) 2. MANUAL DE GESTIÓN AMBIENTAL. 2.1 Documentación en un sistema de gestión ambiental. La empresa debe mantener un sistema de gestión ambiental documentado para asegurar que todas las actividades y servicios que desarrolla, cumplan los requisitos especificados por la legislación y sean realizados tomando en cuenta el factor ambiental. Regularmente la documentación de un sistema de gestión ambiental está dividida en cuatro niveles jerárquicos, que son utilizados y mantenidos para satisfacer los requerimientos de la norma. Podrían incluirse niveles adicionales como la Política Ambiental como cabeza de la documentación o bien la inclusión de otro tipo de documentos como tablas, normas técnicas, entre otros. Los niveles de documentación sugeridas son: Nivel 1: Manual Ambiental. El manual ambiental describe la política ambiental, la estructura general de la compañía y los métodos para mantener el sistema de gestión ambiental. Además hace referencia a los procedimientos utilizados para cumplir con la política definida. Nivel 2: Procedimientos del sistema. Son documentados donde se especifica la manera de realizar las actividades, definiendo quién lo hace, cuándo y qué documentación se utiliza para verificar que las mismas se ejecutan conforme a la política ambiental. Obsérvese que en esta sección de la Norma se intenta integrar los elementos esenciales del sistema de gestión. La Política y los objetivos determinan el camino que tomará la organización. El alcance el límite en el cual se aplicará el sistema. El propósito de la documentación es proporcionar la información necesaria para los empleados y otras partes interesadas, cuando así lo requieran. Los documentos pueden estar en cualquier medio (papel, electrónico, fotos, carteles) que sea útil, legible, de fácil comprensión y accesible a quienes necesitan la información. Nivel 3: Instructivos de trabajo. Al referirse a los “elementos principales del sistema de gestión ambiental” puede hacerse referencia a los procesos que ha establecido la empresa para su sistema; por ejemplo, el proceso de identificación de aspectos ambientales, o bien el proceso de identificación de requisitos legales, entre otros. Los instructivos de trabajo se establecen para indicar, en forma detallada, cómo debe de realizarse una actividad específica, especialmente en los casos donde la ausencia de dichas instrucciones afecte adversamente la calidad del ambiente. Una empresa puede decidir no documentar alguno de los procedimientos que se solicitan en la Norma, pero debe demostrar que todas las personas que ejecutan ese procedimiento conocen los objetivos del mismo y lo ejecutan de manera apropiada. Nivel 4: Registros y formatos. .2.3 Manual de gestión ambiental. En la empresa se utilizan registros con el fin de proporcionar evidencia de que las actividades se realizan en conformidad con lo especificado en los procedimientos, instructivos y política ambiental. En la Norma ISO 14001, debe entenderse como procedimiento documentado, un procedimiento que, además de estar escrito, ha sido validado por el personal que lo utilizará, revisado y aprobado por personal competente. Toda esta información debe mantenerse documentada; sin embargo, la Norma no especifica de qué manera hacerlo. Una práctica común es el establecimiento de un Manual de Gestión Ambiental. 2.2 Requisitos 4.4.4 de la Norma ISO 14001. La Norma ISO 14001 es clara con respecto a la documentación que debe mantenerse definida para el sistema de gestión ambiental. (2) La documentación del sistema de gestión ambiental debe incluir: a) la política, objetivos y metas ambientales; b) la descripción del alcance del sistema de gestión ambiental; c) la descripción de los elementos principales del sistema de gestión ambiental y su interacción, así como la referencia a los documentos relacionados; d) los documentos, incluyendo los registros requeridos por esta Norma Internacional; y e) los documentos, incluyendo los registros determinados por la organización como necesarios para asegurar la eficacia de la planificación, operación y control de procesos relacionados con sus aspectos ambientales significativos. El Manual no necesita ser largo, basta con realizar una pequeña descripción de los métodos aplicados por la empresa para cumplir con un requisito de la norma, o bien la metodología utilizada para medir y dar seguimiento a un aspecto ambiental significativo. Algunos ejemplos de documentación que puede colocarse en este Manual (y no mencionada por el requisito) son: la lista de aspectos ambientales significativos, la lista de requisitos legales aplicables, el programa de auditorías internas, la metodología para realizar las revisiones por la Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas dirección, la descripción de las responsabilidades y los recursos para la implementación del sistema, los indicadores para dar seguimiento al desempeño ambiental, la lista de instrumentos de medición, la descripción de otros requisitos a los que se someta la empresa, las competencias ambientales identificadas, la descripción de los controles operacionales establecidos. En el anexo 2 se muestra un ejemplo de la estructura de un Manual Ambiental y la forma en que puede hacerse la descripción de los elementos claves del sistema. En otras palabras se interpreta como la declaración de compromiso, necesariamente dictada por la alta gerencia, en relación con su gestión del desempeño ambiental. La Política Ambiental, dado que proporciona la estructura de partida para las acciones cotidianas que se ejecutan en una empresa en favor del medio ambiente, además de ser la base para la definición de los objetivos y las metas ambientales, debe ser redactada en términos simples para que sea comprendida por todos los miembros de la organización. El requisito 4.2 de la Norma establece que: 3. REQUISITOS GENERALES. En la Norma se anota la necesidad de que una organización inicie el proceso de desarrollo e implementación de un sistema de gestión ambiental con la definición del alcance del mismo (Requisito 4.1 Norma ISO 14001:2004). Debe interpretarse el término alcance como los límites de la empresa en los que se aplica el sistema de gestión ambiental. Los límites reflejen el marco de influencia de la empresa; es decir, que no se deje fuera de los límites alguna actividad que, aunque no es necesariamente un proceso principal de la empresa, podría generar un impacto ambiental relevante. Por ejemplo, actividades como mantenimiento de edificios o trabajos ocasionales (ampliación de la planta de proceso, compra de equipos, entre otros). La definición del alcance se hace aún más relevante cuando la empresa posee procesos productivos en diferentes lugares geográficos. La definición del alcance podría expresarse de la siguiente manera: “El sistema de gestión ambiental aplica a todas las actividades, servicios y productos realizados por la empresa ya sea para creación de valor del producto final o bien de las que se realizan como apoyo a los procesos de creación de valor”. Otro ejemplo: “El sistema de gestión ambiental aplica a todas las actividades requeridas para la producción y comercialización de los productos, en las instalaciones ubicadas en <zona geográfica>.” 4. POLÍTICA AMBIENTAL. 4.1 Requisito de la Norma ISO 14001. Tal como lo define la Norma ISO 14001:2004, la Política Ambiental refleja las: “Intenciones y dirección general de una organización relacionada con su desempeño ambiental, como las ha expresado formalmente la alta dirección”. La alta dirección debe definir la política ambiental de la organización y asegurarse de que, dentro del alcance definido de su sistema de gestión ambiental, ésta: a) es apropiada a la naturaleza, magnitud e impactos ambientales de sus actividades, productos y servicios; b) incluye un compromiso de mejora continua y prevención de la contaminación; c) incluye un compromiso de cumplir con los requisitos legales aplicables y con otros requisitos que la organización suscriba relacionados con sus aspectos ambientales; d) proporciona el marco de referencia para establecer y revisar los objetivos y las metas ambientales; e) se documenta, implanta y mantiene; f) se comunica a todas las personas que trabajan para la organización o en nombre de ella; y g) está a disposición del público. Debe entenderse alta dirección, como el miembro de mayor jerarquía en la empresa, el cual podría ser el Presidente, el Director, el Gerente General, la Junta Directiva, entre otros. Del texto se resalta la necesidad de ser explícito al incluir ciertos compromisos en la redacción de la Política Ambiental, como lo son: cumplimiento de requisitos legales, prevenir la contaminación y promover la mejora continua en el sistema de gestión ambiental. Aprecie que el requisito también establece que la comunicación de este compromiso debe ser no solamente a los trabajadores ordinarios de la empresa, sino también para contratistas o cualquier otra persona que pueda ejecutar alguna actividad dentro de los límites del sistema de gestión ambiental; por ejemplo transportistas o visitantes. El primero de los requisitos (“es apropiada a la naturaleza, magnitud e impactos ambientales”) está establecido para dar a la Política Ambiental el enfoque particular de la empresa. En muchas ocasiones pueden encontrarse escritos tan generales que podrían aplicarse a cualquier empresa, independientemente de la naturaleza de la misma. Veamos el siguiente ejemplo de la redacción de una Política Ambiental. “En H y B somos concientes de la necesidad de mantener una gestión que esté en armonía con el ambiente en Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas (3) beneficio de sociedad actual y de las generaciones futuras. Por esta razón nos comprometemos a actuar en total cumplimiento de los requisitos legales, promoviendo un proceso de mejora continua y una cultura empresarial de prevención de la contaminación”. Aunque de manera general este pequeño enunciado incluye los criterios b y c del requisito de la norma, e inclusive puede dar una ligera dirección para establecer los objetivos y metas; no da mayor información sobre la empresa “H y B”. Un lector externo no sabrá la naturaleza de la empresa y como consecuencia la magnitud y el impacto ambiental que podría generar. 4.2 Proceso para definir la Política Ambiental en la empresa. Establecer el compromiso de la empresa con respecto a la gestión ambiental tiene como punto de partida un análisis de la situación ambiental de la empresa. Es preferible realizar una evaluación general de los impactos ambientales que se generan en el momento inicial. Esta evaluación puede comprender la identificación de los aspectos ambientales más importantes así como los requisitos legales aplicables a los mismos. Valorar el grado de control que se mantiene sobre los aspectos ambientales y las brechas para el cumplimiento de los requisitos legales. Una evaluación de este tipo puede causar una sorpresa para una organización que quizá no conozca la realidad del impacto ambiental que está generando. Pero independiente a los resultados que se obtengan, indudablemente dará a la alta dirección una base para iniciar la declaración de su Política Ambiental. Otro elemento que puede enriquecer el proceso es acceder a la declaración de Política Ambiental de otras empresas y hacer el ejercicio de evaluar el cumplimiento de los diversos requisitos que establece la Norma ISO 14001. En el anexo 1 se incluye una muestra de tres enunciados de Política Ambiental que pueden orientarle para la redacción del compromiso en su empresa. Tome en cuenta los siguientes asuntos: ! No debe pensarse que la definición final de este compromiso pueda surgir en una sola sesión de trabajo. Es recomendable hacer un borrador y releerlo unas semanas después para confirmar que el enunciado realmente incluye la filosofía de la empresa y es congruente con sus valores. ! Procure no comprometerse con ideales que a la postre no podrá cumplir. Por ejemplo, durante el inicio del sistema es bastante comprometedor sugerir el cumplimiento de requisitos legales que se dictan más allá de las fronteras de su país; o bien, externar un deseo de compromiso de prevención de la contaminación en todos los miembros de la sociedad en la que se ubica la empresa. Ir más allá de la capacidad de cumplimiento de la empresa puede provocar que su Política Ambiental no (4) pase de ser un agradable documento que está adornando una pared. ! Asegurar que la declaración hecha sea una base concreta para el establecimiento de objetivos ambientales. Cada idea establecida en la Política Ambiental debería estar respaldada por objetivos que demuestren que el compromiso adquirido se está llevando a cumplimiento. 5. ASPECTOS AMBIENTALES. 5.1 Requisito 4.3.1 de la Norma ISO 14001:2004. La eficacia de un sistema de gestión ambiental radica en la avaluación y seguimiento continuo de la interacción de una empresa con el medio ambiente (Norma ISO 14004:2004). La Norma ISO 14001 define aspecto ambiental como “elemento de las actividades, productos o servicios de una organización que puede interactuar con el medio ambiente”. Por tanto, un aspecto ambiental es aquello que una actividad, producto o servicio genera (en cuanto a emisiones, vertidos, residuos, ruido, consumo de recursos, entre otros) que tiene o puede tener incidencia sobre el medio ambiente. Como ejemplos se puede tomar, vertido de aguas residuales, las emisiones, el consumo o la reutilización de un material, o la generación de ruido. Un concepto que debe comprenderse paralelamente es el de impacto ambiental, el cual es definido como “cualquier cambio en el medio ambiente, sea éste adverso o beneficioso, resultante en todo o en parte de las actividades, productos o servicios de una organización”. Como ejemplos de impactos adversos se incluyen la contaminación de suelos y el agotamiento de los recursos naturales. Ejemplo de impactos beneficiosos incluyen la mejora en la calidad del agua o del suelo. El requisito 4.3.1 de la Norma ISO 14001 establece que: La organización debe establecer, implantar y mantener uno o varios procedimientos para: a) identificar los aspectos ambientales de sus actividades, productos y servicios que pueda controlar y aquellos que pueda influir dentro del alcance del sistema de gestión ambiental, teniendo en cuenta los desarrollos nuevos o planificados, o las actividades, productos y servicios nuevos o modificados; y b) determinar aquellos aspectos que tienen o pueden tener impactos significativos sobre el medio ambiente (es decir, aspectos ambientales significativos). La organización debe documentar esta información y mantenerla actualizada. La organización debe asegurarse que los aspectos ambientales significativos se tengan en cuenta en el establecimiento, implantación y mantenimiento de su sistema de gestión ambiental. Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas El primer punto a resaltar es el requerimiento de establecer un procedimiento (revisado, aprobado e implantado), que describa los pasos para identificar los aspectos ambientales. El anexo 3 incluye una muestra de un procedimiento general para realizar esta actividad. Como lo especifica la Norma, el alcance que la empresa establezca para su sistema de gestión ambiental a la vez establece los límites en los cuales la empresa identificará los aspectos ambientales. Agrega la Norma que debe “identificar los aspectos ambientales… que pueda controlar…”. Esto puede interpretarse como que no sólo deban identificarse aspectos sobre los que se dispone de total control o influencia, sino todo aquel sobre el que se dispone de cierta capacidad de control que haga que se puede actuar posteriormente sobre ellos; puede pensarse en posibles derrames o fugas, posibilidad de influir sobre terceros (proveedores, clientes, comunidad), por citar algunos. El alcance debe considerar “sus actividades, productos y servicios”, lo cual incluye tanto aquellas que se desarrollen dentro de las instalaciones de la organización, como las que se desarrollen en algún lugar donde se da la prestación de un servicio; sean estas actividades productivas o auxiliares, y tanto sean realizadas por el personal de la empresa como por el personal subcontratado. Y con respecto al personal subcontratado debe tomarse en cuenta tanto el personal que se mantiene laborando continuamente con la empresa, como el que hace trabajos de manera ocasional. Por otro lado, la Norma agrega que al identificarse los aspectos ambientales debe tenerse en cuenta “los desarrollos nuevos o planificados, o las actividades, productos y servicios nuevos o modificados”; lo cual implica la actualización continua de los aspectos ambientales. Puesto que una organización puede tener muchos aspectos ambientales e impactos asociados, el requisito de la Norma también solicita “determinar aquellos aspectos que tienen o pueden tener impactos significativos sobre el medio ambiente”, lo que sugiere una diferenciación necesaria entre los distintos aspectos ambientales con el fin de establecer prioridades para la organización. La Norma ISO 14001 aclara que un aspecto ambiental significativo “es aquel que produce o puede producir un impacto ambiental significativo”; se le atribuye esta condición dado que el impacto tiene una importancia superior al efecto causado por otros aspectos ambientales. 5.2 Proceso de identificación de aspectos ambientales 5.2.1. Situaciones generadoras de aspectos ambientales. El hecho de considerar las actividades “planificadas” en el proceso de identificación de los aspectos ambientales - requisito de la Norma ISO 14001- da a entender que se tomen en cuenta no solamente las condiciones de operación normales, sino también las condiciones de operación anormales como condiciones de arranque, de parada por mantenimiento y, más allá de lo planificado, las situaciones de emergencia y los accidentes. Adicionalmente, debe tenerse presente la dimensión temporal de su generación; es decir, no sólo considerar los aspectos ambientales que ocurren en el presente, sino también los que ya han ocurrido y los que podrían provocarse por actividades que están planificadas (futuro). Los aspectos ambientales pueden ser clasificados en dos categorías: A. Previstos: son aspectos ambientales que se conoce con certeza su existencia. Se dividen a la vez en: a. Condiciones normales (CN): son los habituales de operación o de actividades (producción, prestación de servicio). b. Condiciones anormales (CA): son los habituales relacionados con servicios auxiliares (arranques, paradas, limpieza, mantenimiento) que, estando ligadas directa o indirectamente a la actividad principal de la organización, son planificadas, programadas y previsibles. B. Potenciales: son aspectos ambientales que se conoce la posibilidad de su existencia en condiciones particulares. Se dividen a la vez en: a. Incidentes (I): son situaciones no previstas, en las cuales se origina riesgo de daño al medio ambiente pero cuyas consecuencias medioambientales en el caso de que se originen, son de carácter menor (ligeras fugas, derrames, escapes, manchas en el suelo, etc). b. Accidentes (A): igual que las anteriores pero de carácter mayor. Los aspectos medioambientales son emisiones, vertidos, residuos que aparecen como consecuencia de diferentes escenarios de riesgo: incendios, explosiones, inundaciones, vertidos accidentales, terremotos, etc. Adicionalmente, como ya se mencionó, debe tomarse en cuenta la dimensión de tiempo. C. Dimensión temporal: a. Actividades pasadas: son aquellas que se realizaban con anterioridad y ya cesaron. Estas actividades evidentemente afectaron al medio ambiente aunque normalmente sólo pueden apreciarse sus efectos en suelo dado que las alteraciones de las condiciones de otros medios (atmósfera, aguas, flora o fauna) no se aprecian con facilidad. En la metodología de evaluación debe considerarse los efectos que ocasionaron derrames, manchas- como aspectos ambientales. b. Actividades presentes: pueden identificarse aspectos ambientales como resultado de un análisis de las actividades, las instalaciones y los productos existentes en el momento actual. c. Actividades futuras: son las que previsiblemente se adoptarán con motivo de nuevos proyectos o desarrollos de ampliación de las instalaciones actuales y, como Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas (5) consecuencia, generarán aspectos medioambientales. Estos se determinan por experiencia. 5.2.2 Proceso de identificación de los aspectos ambientales. El proceso concreto para la identificación de los aspectos ambientales varía considerablemente entre una organización y otra. El enfoque puede considerar el agrupamiento de los aspectos ambientales en las siguientes categorías: ! Emisiones al aire, ! Vertidos al agua, ! Descargas al suelo, ! Uso de materias primas y recursos naturales (uso de agua, uso de suelo), ! Asuntos ambientales de la comunidad, ! Uso de energía, ! Emisiones de energía (calor, radiación), ! Residuos y subproductos. Un mecanismo útil para iniciar la selección de los aspectos ambientales, es la recopilación de información cuantitativa y cualitativa de las características de sus actividades, productos y servicios; como por ejemplo entradas y salidas de materiales o energía, procesos y tecnología utilizados, características de los materiales, métodos de transporte. Además, es un asunto importante comprender el impacto ambiental que provocan los aspectos ambientales identificados. Hay gran diversidad de estrategias para determinar este impacto; puede considerar diagramas de causa - efecto; diagramas de flujo donde se incluyen las entradas y salidas; resultados de balances de masa y energía; evaluaciones de impacto ambiental o análisis de ciclo de vida. La Norma ISO 14004 indica que el enfoque que se vaya a escoger debe tener la capacidad de reconocer: a) Los impactos ambientales positivos (beneficiosos) y los negativos (adversos), b) Los impactos ambientales reales y potenciales, c) La parte o partes del medio ambiente que pueden verse afectadas aire, agua, suelo, flora, fauna, entre otros. d) Las características del lugar que puede afectar al impacto tipo de clima, tipo de suelo, altura sobre el nivel del mar. e) La naturaleza de los cambios del medio ambiente problemas globales frente a locales, duración del impacto, acumulación potencial del impacto en el tiempo-. 5.3 Evaluación de los aspectos ambientales. El objetivo de este apartado es determinar los aspectos ambientales significativos. El carácter significativo es un concepto relativo; no se puede definir en términos absolutos. Lo que es importante para una organización puede no serlo para otra. La evaluación del carácter significativo implica aplicar a la vez técnicas de análisis y el criterio de la organización. (6) La definición de criterios de evaluación suele ser la estrategia más común para determinar qué aspectos ambientales e impactos asociados pueden considerarse significativos. Lo esencial es que tanto el establecimiento como la aplicación de estos criterios deben aportar coherencia y ser reproducibles en la evaluación de todos los aspectos ambientales. La Norma ISO 14004 aclara que cuando se establezcan criterios para determinar la relevancia del aspecto ambiental y su impacto, la organización debería considerar lo siguiente: a) Criterios ambientales (ejemplo: escala, severidad, y duración del impacto, o tipo, tamaño y frecuencia de un aspecto ambiental); b) Requisitos legales aplicables (ejemplo: límites de emisión y descarga definidos en las leyes y reglamentos); c) Las inquietudes de las partes interesadas, internas y externas (ejemplo: las relacionadas con valores de la organización, imagen pública, ruido, olor o degradación visual). La definición de los criterios a utilizar para evaluar los aspectos ambientales los debe definir la empresa. Lo importante es asegurar que los criterios aportarán información objetiva para establecer las prioridades para actuar en el campo ambiental. Si va a realizar la evaluación de aspectos ambientales por primera vez podría aplicar alguna modalidad de la estrategia de Trabajo de Grupos Nominales. Por dar un ejemplo sencillo, puede considerar que un grupo de miembros de la empresa con experiencia y criterio- se reúnan para compartir opiniones sobre el impacto ambiental que puede estar provocando la empresa, y a partir de ahí generar una votación para decidir cuál de los aspectos ambientales debe ser controlado de manera prioritaria. 5.3.1 Criterios de evaluación. A. Criterio: inquietud de partes interesadas. Este criterio es recomendado en la Norma ISO 14004. El mismo se puede evaluar de acuerdo a la existencia o no de inquietudes de partes interesadas. En caso de existir una manifestación externa o interna de partes interesadas se le puede asignar una puntuación en proporción a la inquietud presentada. B. Criterio: requisitos legales aplicables En una primera evaluación, el hecho de que exista un requisito legal que aplique a alguno de los aspectos ambientales, puede ser suficiente para calificarlo como significativo. Sin embargo, si la empresa demuestra que posee un desempeño ambiental apropiado en ese campo, la existencia del requisito legal no representaría un factor definitorio. C. Criterios ambientales. El procedimiento en el anexo 2 muestra una manera de definir los criterios ambientales recomendados en la Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas Norma ISO 14004. AENOR (Asociación Española de Normalización) (2002), recomienda que se definan criterios con las siguientes características: ! Técnicos, ! Cuantificables (objetivos) y ! Relacionados con el medio ambiente. Conforme a las características mencionadas se pueden escoger criterios como los siguientes: ! Acercamiento a límites, ! Magnitud del aspecto, ! Naturaleza del aspecto (peligrosidad, gravedad, toxicidad), ! Sensibilidad del medio, ! Extensión del aspecto o del efecto, ! Frecuencia del aspecto, ! Probabilidad del aspecto, ! Reversibilidad del aspecto. AENOR aporta las siguientes definiciones para los criterios de evaluación mencionados. En el caso del criterio de acercamiento a límites se pretende evaluar la cercanía con respecto al alcance de un límite especificado para la organización. Puede ser un límite legal (emisiones, vertidos) o un límite establecido por la organización (consumo de recursos, desechos, productos químicos utilizados). Se le asigna más valor de significancia cuanto más se acerca al límite establecido. Debe tomarse en cuenta que si el límite es de carácter legal, el criterio no debe contemplar la posibilidad de superar tal límite, por lo que estaría incumpliendo con un requisito básico de un sistema de gestión ambiental el cual exige un cumplimiento de los requisitos legales. Para el caso específico de vertido de aguas residuales, en una empresa de productos lácteos, el límite de vertido para el parámetro DBO es 250 mg/l, según lo establece el reglamento para vertidos y rehúso de aguas residuales, Decreto ejecutivo No. 26042-S-MINAE. El criterio de evaluación podrían establecerse de la siguiente manera: ! Alto: Sobre el 85% del límite de vertido: Sobre 213 mg/l y hasta 250 mg/l. ! Medio: Entre el 60% y el 85% del límite de vertido: Entre 150 mg/l y 213 mg/l. ! Bajo: Inferior al 60% del límite de vertido: Inferior a 150 mg/l. El criterio de magnitud pretende evaluar el cambio de un aspecto ambiental con respecto a su valor inicial. Se le dará mayor valor conforme este cambio aumente. Para el caso específico debería considerarse no como un valor absoluto sino como un indicador relacionado con la base de cálculo de la empresa (unidad de producción, número de servicios). Con respecto al consumo de agua en el proceso operativo, se puede establecer un indicador que especifique el volumen de agua consumido por unidad de producción. Este no es un parámetro controlado por la legislación ambiental sino parte de un compromiso establecido para mejora del desempeño ambiental de la empresa. En un caso hipotético de una organización con proceso continuo, se puede establecer consumo de agua de 10,0 litros por kilogramo de producto terminado. Los parámetros para la evaluación se estiman de la siguiente manera: ! Alto: Superior al 5% del valor del periodo anterior: superior a 10,5 l/kg de producto terminado. ! Medio: Inferior al 5% del valor del periodo anterior hasta el dato del periodo anterior: Entre 10,0 l/kg y 10,5 l/kg de producto terminado. ! Bajo: Inferior al valor obtenido en el periodo anterior. Inferior a 10,0 l/kg de producto terminado. El criterio de naturaleza del aspecto evalúa el efecto que tiene el aspecto ambiental por virtud de su naturaleza, ya sea ésta calificada de peligrosa, tóxica o grave. La evaluación dará mayor grado de significancia a los aspectos cuya naturaleza sea más dañina para el medio ambiente. Los desechos sólidos pueden ser clasificados de acuerdo a la siguiente estructura de evaluación. ! Alto: residuo peligroso y tóxico. ! Medio: residuo tóxico o peligroso. ! Bajo: residuo inerte. Criterios como extensión, acumulación y penetración, habitualmente se aplican a situaciones pasadas y pretenden evaluar el impacto que se ocasiona a pesar del tiempo transcurrido. En este caso se da mayor valor al aspecto cuanto más se ha dispersado en el medio. El criterio de frecuencia se aplica a aspectos ambientales que pueden darse no de manera permanente, sino periódicamente. Evaluar la frecuencia o número de repeticiones en un periodo de tiempo definido es un indicador apropiado para la gestión ambiental. El propósito de la metodología es dar mayor valor al aspecto que ocurra con mayor frecuencia. Probabilidad es un criterio que sugiere la posibilidad de ocurrencia de un aspecto o impacto ambiental potencial, de ahí que involucra los impactos ambientales futuros. Se puede tomar como referencia la experiencia ocurrida en otros proyectos o actividades similares. Se da mayor valor de significancia a los aspectos más probables de ocurrencia. El criterio de reversibilidad valora si una vez en el medio ambiente el aspecto ambiental lo afecta irreversiblemente. Un aspecto ambiental que por sus características puede ser considerado que provoca un efecto irreversible en el ambiente, puede ser calificado como significativo por siempre. 5.4 Determinación de los aspectos ambientales significativos. Si se ha realizado la evaluación objetiva de los aspectos Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas (7) ambientales, se logró establecer una lista de cuáles son los de mayor prioridad por el impacto ambiental que pueden provocar. El valor a partir del cual se determina que un aspecto ambiental es significativo es definido por la empresa y éste depende de varios factores, sin embargo, el principal de ellos es el económico. Algunos otros factores son la presión de partes interesadas externas o bien la imagen de la organización. Con el propósito de no entorpecer el proceso de implementación del sistema de gestión ambiental, de manera que pueda darse un uso apropiado a la mayor cantidad de recursos, es recomendable que se utilice al menos el 20% de los aspectos ambientales que reciban la mayor puntuación durante la evaluación. 6. REQUISITOS LEGALES Y OTROS REQUISITOS. 6.1 Requisito 4.3.2 de la Norma ISO 14001:2004. La Norma ISO 14001 hace hincapié en la necesidad de cumplir con los requisitos legales y otros requisitos a los que la organización se someta. Este requisito establece que: La organización debe establecer, implantar y mantener uno o varios procedimientos para: a) identificar y tener acceso a los requisitos legales aplicables y otros requisitos que la organización suscriba relacionados con sus aspectos ambientales; y b) determinar cómo se aplican estos requisitos a sus aspectos ambientales. La organización debe asegurarse de que estos requisitos legales aplicables y otros requisitos que la organización suscriba se tengan en cuenta en el establecimiento, implantación y mantenimiento de su sistema de gestión ambiental. La organización debe establecer el mecanismo apropiado que le permita identificar los requisitos legales ambientales vigentes que le aplican y mantener dicha información actualizada, con el propósito de permitir a la organización el ser conciente de los diferentes requisitos y determinar cómo se aplican a los aspectos ambientales; esto garantiza el cumplimiento de los mismos y le da la posibilidad de planificar sus esfuerzos e inversiones, incluso anticipándose a la legislación de próxima aplicación. Los requisitos legales pueden tener varias formas, tales como: ! Legislación incluido Leyes y reglamentos, ! Decretos ! Permisos, licencias u otras formas de autorización, ! Órdenes emitidas por entidades públicas, ! Tratados, convenciones o protocolos. La Norma también hace mención de “otros requisitos”, concepto que debe interpretarse como requisitos legales a (8) los cuales la empresa se suscribe voluntariamente y que son distintos a los requisitos legales. La Norma ISO 14004 incluye entre estos requisitos los siguientes: ! Acuerdos con autoridades públicas, ! Acuerdos con clientes, ! Directrices no reglamentarias, ! Códigos de buenas prácticas, ! Etiquetado voluntario. 6.2 Requisito 4.5.2 de la Norma ISO 14001:2004. El requisito anterior involucra los requisitos de identificar y acceder a los requisitos legales; la responsabilidad de cumplir con tales requisitos legales, la Norma ISO 14001, lo solicita en el requisito 4.5.2, en la sección de medición y seguimiento a los procesos. En coherencia con su compromiso de cumplimiento, la organización debe establecer, implementar y mantener uno o varios procedimientos para evaluar periódicamente el cumplimiento de los requisitos legales aplicables. La organización debe mantener los registros de los resultados de las evaluaciones periódicas. La organización debe evaluar el cumplimiento con otros requisitos que suscriba. La organización puede combinar esta evaluación con la evaluación del cumplimiento legal mencionada en el párrafo anterior, o establecer uno o varios procedimientos separados. La organización debe mantener los registros de los resultados de las evaluaciones periódicas. Un mecanismo para asegurar el cumplimiento de requisitos legales es la aplicación de los programas de gestión ambiental (FOR 05), especialmente cuando se trata de un requisito legal que aplica a un aspecto ambiental significativo o el cumplimiento de otro requisito que pueda afectar el desempeño ambiental de la empresa. 6.3 Identificación y acceso a requisitos legales. El punto de partida para esta identificación de requisito legales es el conocimiento de los aspectos ambientales, éstos le darán una guía para determinar cuáles son los requisitos legales que le aplican. De hecho el numeral b) en el requisito de la Norma exige que se logre una correlación entre los requisitos legales y los aspectos ambientales que están asociados a ellos. El método más sencillo para identificar los requisitos legales es realizar una auditoría de cumplimiento legal con un organismo competente (externo), el cual se pueda comprometer a mantener actualizada a la empresa sobre modificaciones que sufra la legislación en el tiempo. En caso de que la empresa requiera realizar la identificación de los requisitos legales por si misma debe hacer una investigación exhaustiva dado que hay gran variedad de requisitos legales. Puede contactarse con la Cámara Industrial relacionada con su gremio o bien visitar los distintos Entes emisores de legislación en el país. Para la Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas actualización de la legislación es recomendable que se suscriba al Diario Oficial La Gaceta, y realizar una revisión periódica de este medio. ¿Quién debe tener acceso a los requisitos legales? Es recomendable que todas las personas cuya responsabilidad en la organización está relacionada con algún aspecto ambiental, que a su vez esté relacionado con un requisito legal, conozca y tenga acceso a tal requisito legal; esto reduce las posibilidades de que la empresa pueda caer en un incumplimiento por omisión. En el anexo 3 se presenta una muestra de un procedimiento para la identificación, acceso y el cumplimiento de requisitos legales. 7 Objetivos, metas y programas de gestión ambiental. 7.1 Requisito 4.3.3 de la Norma ISO 14001:2004. La norma ISO 14001 define objetivo ambiental como “fin ambiental de carácter general coherente con la política ambiental que una organización establece”. Y define meta ambiental como “requisito de desempeño detallado aplicable a la organización o a partes de ella, que tiene su origen en los objetivos ambientales y que es necesario establecer y cumplir para alcanzar dichos objetivos”. Por lo tanto, la Política, los objetivos y las metas conforman una jerarquía como la que se observa en la figura 1. POLÍTICA AMBIENTAL Objetivo Ambiental A Meta Ambiental A1… An Objetivo Ambiental B Meta Ambiental B1… Bn Objetivo Ambiental C Meta Ambiental C1… Cn Figura 1. Estructura de jerarquía de la Política, objetivos y metas. Los objetivos y metas son esenciales para apoyar y llevar a cumplimiento la Política Ambiental y demuestran el compromiso organizacional hacia la mejora continua. La norma ISO 14001 establece en el requisito 4.3.3 que: La organización debe establecer, implantar y mantener objetivos y metas ambientales documentados, en los niveles y funciones pertinentes dentro de la misma. Los objetivos y metas deben ser medibles cuando sea factible, y deben ser coherentes con la política ambiental, incluidos los compromisos de prevención de la contaminación, cumplimiento con los requisitos legales aplicables y otros requisitos que la organización suscriba, y con la mejora continua. Cuando una organización establece y revisa sus objetivos, la organización debe tener en cuenta los requisitos legales y de otros requisitos que la organización suscriba, y sus aspectos ambientales significativos. Además, debe considerar sus opciones tecnológicas y sus requisitos financieros, operacionales y comerciales, así como las opiniones de las partes interesadas. La organización debe establecer, implantar y mantener uno o varios programas para alcanzar sus objetivos y metas. Estos programas deben incluir: a) La asignación de responsabilidades para lograr los objetivos y metas en las funciones y niveles pertinentes de la organización; y b) Los medios y plazos para lograrlos. En la Norma se declara que “deben establecerse… objetivos y metas… en los niveles y funciones pertinentes”. La referencia es a todos los niveles donde pueda ocurrir un mal desempeño ambiental de la empresa. En el proceso de planificación de un sistema de gestión ambiental, una empresa establece objetivos y metas para cumplir los compromisos adquiridos en la Política Ambiental y para lograr otros objetivos que se hayan adquirido. El proceso de establecimiento y revisión de objetivos y la implantación de programas para lograrlos proporciona una base sistemática para que la organización mejore su desempeño ambiental en algunas áreas, mientras mantiene su nivel de desempeño ambiental en otras. 7.2 Proceso para establecer objetivos y metas ambientales. Los objetivos deben establecerse en el nivel más alto de la organización y debe contemplar todos los niveles y funciones en donde se llevan a cabo actividades importantes para cumplir los compromisos de la Política Ambiental y las metas globales de la organización. La Norma ISO 14004 menciona como elementos de entrada para el establecimiento de objetivos y metas los siguientes: a) principios y compromisos en su política ambiental, b) sus aspectos ambientales significativos, c) requisitos legales y otros requisitos que la organización suscriba, d) el efecto de cambios previstos sobre sus actividades y procesos, e) opiniones de partes interesadas, f) opciones tecnológicas y viabilidad, g) consideraciones financieras, operacionales y de la organización, que incluye información de los proveedores y contratistas, h) posibles efectos sobre la imagen pública de la organización, i) hallazgos de revisiones ambientales, y j) otras metas de la organización. Aunque es necesario la consideración de todos los aspectos ambientales significativos en la definición de los Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas (9) objetivos y metas, es aún más apropiado el establecimiento de objetivos y metas relativos a la minimización de residuos o a proyectos de eficiencia de recursos con periodo de retorno de la inversión a corto o mediano plazo. Para facilitar la expresión de objetivos y metas, se sugiere que se establezcan en función de “unidades de producción”. Esto no sólo previene que la organización quede atrapada por algún límite auto impuesto, sino que también permite a las partes interesadas comparar y comprender la posición de la organización. Otras dos características de los objetivos es que deben ser cuantificados y que estén definidos en el tiempo. Otro requisito necesario para cumplir con la Norma ISO 14001 es que los objetivos estén disponibles al público, por lo que deberían estar expresados en términos que excluyan los tecnicismos. Los objetivos podrían publicarse al igual que la política, en un informe anual o en un informe ambiental separado. Ejemplos de establecimiento de objetivos. 1. Una empresa utiliza un proceso de producción alimentado por energía eléctrica. El resultado incluye un alto volumen de vertido de contaminantes al agua. Es posible un proceso alternativo, eliminando los vertidos y usando un 60% menos de electricidad, pero representa una importante inversión de capital. La compañía decide instalar el nuevo equipo y tenerlo en operación para dentro de tres años. Establece los siguientes objetivos ambientales: Objetivo A: Reducir el consumo de electricidad por unidad de producción en un 60% en el transcurso de tres años. Meta A1: Sustituir las bombas del pozo de agua, una por semestre durante dos años. Objetivo B: Eliminar los vertidos al agua industrial en un periodo de tres años. Meta B1: Hacer proceso de limpieza de equipo en seco y aplicar desengrasote biodegradable en seis meses. 2. Una empresa comercializadora no puede reducir en seguida sus requerimientos de transporte. Está examinando el objetivo de reemplazar algunos vehículos por otros más pequeños. En este sentido estima un recorte en el uso de combustible y, por tanto, de las emisiones de CO2 en un 5% en los próximos dos años. Adicionalmente, ha realizado una evaluación en el uso de combustibles para la calefacción de los edificios. Como resultado, considera inversiones con un periodo de retorno de 2 años o menos. Con esto se espera reducir el consumo de combustible para calefacción y de emisiones de CO2, en un 20%. La compañía decide realizar los cambios e inversiones necesarias y establece los siguientes objetivos y metas: Objetivo A: Reducir la producción de CO2 por empleado, en un 15% en los próximos dos años. Meta A.1: recortar el consumo de combustible para transporte por empleado en un 5% en los próximos dos años. ( 10 ) Meta A.2: recortar el consumo de combustible para calefacción por empleado en un 20% en los próximos dos años. 3. Una empresa aplica, en la limpieza de las láminas de acero, una solución alcalina y una solución ácida. Después de cada unidad de limpieza cuenta con un enjuague de la lámina para eliminar los residuos de cada una de las soluciones de limpieza. Se procura reducir el consumo de agua y el uso de productos químicos, por lo que se establecen los siguientes objetivos y metas: Objetivo A: Reducción del consumo de agua durante este periodo fiscal. Meta A1: Reutilización del agua de enjuague posterior a la solución ácida, en el enjuague de ubicado posterior a la limpieza alcalina. Objetivo B: Reducción y sustitución de productos químicos utilizas en la limpieza de la lámina de acero en un año. Meta B1: Aplicación de vapor de agua para reducir el uso de productos alcalinos en un 50%. Meta B2: Sustitución del producto alcalino por otro que contenga componentes biodegradables. 7.3 Elaboración de programas de gestión ambiental. El medio para cumplir los objetivos y metas ambientales es establecer un programa con acciones específicas que aseguren su ejecución. El programa debe tener en cuenta las funciones, las responsabilidades, los procesos, los recursos, los plazos, las prioridades y las acciones necesarias para lograr los objetivos y las metas ambientales. Estas acciones pueden relacionarse con procesos individuales, proyectos, productos, servicios, sitios o instalaciones dentro de un sitio. Los programas para lograr objetivos y metas ayudan a una organización a mejorar su desempeño ambiental. Deben ser dinámicos. Cuando ocurren cambios en los procesos, actividades, servicios y productos dentro del alcance del sistema de gestión ambiental, los objetivos, las metas y los programas asociados deben actualizarse según sea necesario. En términos generales, la empresa debe establecer, para cada objetivo definido, un programa correspondiente mostrando: ! ¿Qué se va a hacer? ! ¿Cómo se va a hacer? ! ¿Cuándo se va a hacer? ! ¿Quién será responsable? El grado de complejidad de los programas de gestión ambiental varía considerablemente, al igual que lo hace el número de personas implicadas en ellos. En el anexo 4 se muestran ejemplos de formato para programas de gestión ambiental (FOR 05). 8. RECURSOS, FUNCIONES, RESPONSABILIDADES Y AUTORIDAD. Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas 8.2 ¿Cómo establecer recursos y definir las responsabilidades, autoridad y funciones? 8.1 Requisito4.4.1 de la Norma ISO 14001. El requisito 4.4.1 de la Norma ISO 14001, especifica los tipos de recursos, así como funciones, responsabilidades y autoridad para desarrollar y mantener el sistema de gestión ambiental. La Norma describe que: La dirección debe asegurarse de la disponibilidad de recursos esenciales para establecer, implantar, mantener y mejorar el sistema de gestión ambiental. Estos incluyen los recursos humanos y habilidades especializadas, infraestructura de la organización y los recursos financieros y tecnológicos. Las funciones, las responsabilidades y la autoridad se deben definir, documentar y comunicar para facilitar una gestión ambiental eficaz. La alta dirección de la organización debe designar uno o varios representantes de la dirección, quien, independientemente de otras responsabilidades, debe tener definidas sus funciones, responsabilidades y autoridad para: a) asegurarse de que el sistema de gestión ambiental se establece, implanta y mantiene de acuerdo con los requisitos de esta Norma Internacional. Informar a la alta dirección sobre el desempeño del sistema de gestión ambiental para su revisión, incluyendo las recomendaciones para la mejora. Cuando se determinen los recursos para implementar y mantener el sistema de gestión ambiental debe tomarse en cuenta lo siguiente: ! ! ! ! ! Infraestructura, Sistemas de información, Formación (personal competente), Tecnología, y Recursos financieros y otros, específicos para sus operaciones. Para una pequeña y mediana empresa la adjudicación de recursos para la gestión ambiental puede generar limitaciones o barreras al desarrollo del sistema y su mantenimiento. Es prudente que la empresa inicie acciones estratégicas para buscar ayuda en este campo. Algunos ejemplos de acciones son: ! Ir hacia atrás o hacia delante en la cadena de producción para compartir tecnología o conocimientos con empresas en procura de tratamiento de aspectos ambientales. ! Acudir a Universidades para promover el desarrollo de proyectos con estudiantes. ! Buscar organizaciones no gubernamentales que apoyen gestión ambiental y proporcionen recursos para el desarrollo de proyectos en este campo. Con respecto a la definición de responsabilidades, funciones y autoridad, es común encontrarse, en una pequeña o mediana empresa, que la responsabilidad de la implementación y mantenimiento del sistema de gestión ambiental, recae en el propio director general o la máxima autoridad en la empresa, situación que puede ser buena si esta persona realmente tiene el tiempo para dedicarlo a la gestión ambiental. Independiente a que se designe al director general como representante de la dirección o no, debe tomar las medidas para definir responsabilidades y funciones claras en todos los niveles de la empresa. A continuación se presenta un ejemplo que podría aplicar a la definición de estas responsabilidades. Obsérvese los niveles incluidos. Tome en consideración que la asignación de recursos es un aspecto que debe revisarse continuamente durante el proceso de revisión por la dirección. Es recomendable establecer un mecanismo para dar seguimiento a los beneficios y los costos de sus actividades ambientales. Incluir en ellos aspectos como el costo de control de la contaminación, residuos y su disposición final. De esta manera se podrá dar evidencia general de lo que representa, financieramente hablando, el sistema de gestión ambiental de la empresa. Por otro lado, la definición de responsabilidades y autoridad tiene una relación muy fuerte con el éxito en la implementación y mantenimiento del sistema de gestión ambiental. La persona o personas designadas para las funciones ambientales deben ser competentes y con suficiente autoridad y conciencia ambiental. Estas personas serán quienes midan el desempeño ambiental de la empresa y lo comunicarán a la alta dirección. Las responsabilidades, funciones y autoridad, así como la definición de recursos se documentan en el Manual Ambiental (anexo 2). 9. COMPETENCIAS, FORMACIÓN Y TOMA DE CONCIENCIA. 9.1 Requisito 4.4.2 de la Norma ISO 14001. El compromiso de cada persona, en el contexto de los valores ambientales establecidos por la empresa, es el que transforma un sistema de gestión ambiental que está en el papel en un proceso eficaz. Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas ( 11 ) Este requisito está dividido en tres elementos claramente diferenciados. La formación se refiere al conocimiento especializado que debe tener un miembro de la empresa para desempeñar un cargo; las competencias determinan los rasgos o requisitos básicos para la eficaz ejecución de actividades ambientales y la toma de conciencia incluye un marco mental de deseo de hacer las cosas por convencimiento propio. los procedimientos que se definan para realizar tareas que puedan provocar un impacto ambiental. Un punto de partida para lograr esta toma de conciencia es hacer del conocimiento de ellos cuáles son los aspectos ambientales que estén relacionados con su área de trabajo y, unido a esto, sobre el efecto que puede tener sobre el ambiente (impacto ambiental) el no seguir con los procedimientos definidos. Literalmente el requisito especifica que: La organización debe asegurarse de que cualquier persona que realice tareas para ella o en su nombre, que potencialmente pueda causar uno o varios impactos ambientales significativos identificados por la organización, sea competente tomando como base una educación, formación o experiencia adecuadas, y debe mantener los registros asociados. La organización debe identificar las necesidades de formación relacionadas con sus aspectos ambientales y su sistema de gestión ambiental. Debe proporcionar formación o emprender otras acciones para satisfacer estas necesidades y debe mantener los registros asociados. La organización debe establecer y mantener uno o varios procedimientos para que sus empleados o las personas que trabajan en su nombre tomen conciencia de: a) la importancia de la conformidad con la política ambiental, los procedimientos y requisitos del sistema de gestión ambiental; b) los aspectos ambientales significativos, los impactos relacionados reales o potenciales asociados con su trabajo y los beneficios ambientales de un mejor desempeño personal; c) sus funciones y responsabilidades en el logro de la conformidad con los requisitos del sistema de gestión ambiental; y d) las consecuencias de potenciales de desviarse de los procedimientos especificados. Las competencias deben ser definidas desde tres enfoques: educación (preparación profesional), formación (conocimiento especializado) y experiencia. Este último enfoque de competencia puede eventualmente sustituir a los dos primeros. La formación debe ser identificada en función de las competencias identificadas y con el propósito de asegurar que el personal que desempeña funciones que puede provocar un impacto ambiental, lo realicen con el menor riesgo de producir tal impacto ambiental. La Norma hace énfasis en que las personas que realizan una actividad en nombre de la empresa también deben ser competentes para realizarla. 9.2 Proceso de identificación de las competencias ambientales. Para determinar las competencias ambientales del personal de la empresa o de personas que trabajan en su nombre, puede acudir a dos fuentes principales. ! Funciones que desempeña en el sistema de gestión ambiental. ! Impacto ambiental generado por sus actividades. Las primeras definidas en el apartado anterior (6.2) y las segundas en el proceso de identificación de aspectos ambientales. Por ejemplo, al referirse al Gestor Ambiental puede pensarse en un profesional con formación especializada en gestión ambiental o alguna carrera afín (educación); con preparación en la interpretación de la norma ISO 14001 y como auditor líder de gestión ambiental (formación) y con experiencia en la implementación de sistemas de gestión. El operador de la planta de aguas residuales puede ser una persona con formación secundaria completa (educación); con conocimiento en la operación de tratamiento de aguas y en los conceptos generales que se incluyen en ella, como son DBO, DQO, pH (formación); y con experiencia en el campo. Una persona subcontratada para la recolección de desechos sólidos puede requerir una formación profesional mínima (educación); con conocimiento de manipulación de desechos ordinarios y peligrosos (formación) y con poca experiencia. 9.3 Programa de formación. Puede apreciarse que una vez que se han identificado las competencias, la definición de las necesidades de formación se torna un poco más simple, ya que van a estar dirigidas a satisfacer las competencias requeridas. Estos requerimientos de formación pueden integrarse en un registro con responsabilidades y fechas de ejecución, para realizar un seguimiento más simple de su cumplimiento. Un programa de formación puede ser el siguiente: Finalmente, se solicita que los empleados y las personas que trabajan en nombre de la empresa tomen conciencia de la necesidad de cumplir con la Política Ambiental y con ( 12 ) Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas ambientales y otros. El propósito es que los miembros de la empresa conozcan el desempeño ambiental. Un factor relevante en este proceso es establecer los medios para evaluar la efectividad de la formación brindada. Regularmente es el desempeño global de la empresa la que puede permitir demostrar que en realidad fue efectiva; sin embargo, puede aplicarse ciertos indicadores que permiten dar un seguimiento más específico de la efectividad de formación. En el caso del operario responsable del tratamiento de aguas residuales puede valorarse estadísticamente la cantidad de veces que se desestabilizan los resultados de las aguas vertidas; o bien puede contabilizarse el número de hallazgos de auditoría (no conformidades) para evaluar la eficacia del gestor ambiental en la implementación del sistema de gestión ambiental. Es necesario mantener registros que evidencien la formación brindada. 10. COMUNICACIÓN. 10.1 Requisitos 4.4.3 de la Norma ISO 14001 Este requisito pretende que la empresa defina los mecanismos para comunicar a todas las partes interesadas, todos los aspectos relevantes del sistema de gestión ambiental. El enunciado de la Norma establece que: En relación con sus aspectos ambientales y su sistema de gestión ambiental, la organización debe establecer, implantar y mantener uno o varios procedimientos para: a) la comunicación interna entre los diversos niveles y funciones de la organización; b) recibir, documentar y responder a las comunicaciones pertinentes de las partes interesadas externas. La organización debe decidir si comunica o no externamente información acerca de sus aspectos ambientales significativos y debe documentar su decisión. Si la decisión es comunicarla, la organización debe establecer e implantar uno o varios métodos para realizar esta comunicación externa. Con respeto a otras partes interesadas, menciona la necesidad de definir los mecanismos para recibir documentar y responder a las comunicaciones externas. Lo esencial es que la empresa pueda demostrar que las partes externas reciben la comunicación apropiada a sus necesidades o inquietudes. En el anexo 3 se muestra un ejemplo de un procedimiento para comunicación. 10.2 Proceso de comunicación interna. El propósito global de comunicar o mantener informado a las partes interesadas de la gestión ambiental de la empresa es demostrar el compromiso y los esfuerzos por mejorar el desempeño ambiental; además de incrementar la toma de conciencia de los que reciben la información. Los mecanismos para comunicar a los empleados de la empresa los elementos del sistema de gestión ambiental son variados. Puede incluir el establecimiento de pizarras informativas, actividades grupales, reuniones de departamento, correo electrónico, murales, actividades especiales de la empresa, boletines, entre otros. Además, debe considerarse el establecer medios para que los empleados también puedan transmitir sus inquietudes en este campo hacia los niveles responsables de la gestión. Un mecanismo utilizado es el de buzón de sugerencias. 10.3 Proceso de comunicación externa. Las partes interesadas, principalmente los vecinos o los entes de gobierno, regularmente necesitan comunicarse con la empresa para transmitir sus dudas o quejas por el desempeño ambiental. La empresa debe incluir en su procedimiento las responsabilidades y los medios para recibir y dar respuesta con prontitud a todas estas inquietudes. Regularmente esta tarea recae sobre el gerente general o bien en el gestor ambiental. La Norma da la opción para que la empresa decida si desea o no comunicar a partes interesadas externas sobre su desempeño ambiental. Ésta puede ser una práctica proactiva, propio de un sistema de gestión ambiental con enfoque preventivo; sin embargo, por consideración a los costos que esto podría traer en papelería y demás, puede optar por no comunicarlo. Si la decisión es no comunicar, debe dejarlo evidenciado en el Manual Ambiental (Anexo 2). 11. CONTROL DE DOCUMENTOS. La Norma menciona la necesidad de establecer un procedimiento para la comunicación interna “en relación con… su sistema de gestión ambiental”, esto debe traer a la mente todos los elementos del sistema de gestión ambiental: la Política, los objetivos y metas, los programas de gestión, las responsabilidades, los aspectos 11.1 Requisito 4.4.5 de la Norma ISO 14001. La empresa debe establecer el proceso para el control de los documentos. El propósito es que se describa cuál es el procedimiento para la aprobación y revisión continua de Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas ( 13 ) los documentos; la manera en que se comunican a las personas que los utilizan; la necesidad de validar los procedimientos en la práctica antes de llevarlos a aprobación; el requerimiento de eliminar los documentos obsoletos de su lugar de uso para evitar que sean utilizan por equivocación. En la Norma se declara: Los documentos requeridos por el sistema de gestión ambiental y por esta norma internacional se deben controlar. Los registros son un tipo especial de documento y se deben controlar de acuerdo con los requisitos establecidos en el apartado 4.5.4. La organización debe establecer, implantar y mantener uno o varios procedimientos para: a) aprobar los documentos con relación a su adecuación antes de su emisión; b) revisar y actualizar los documentos cuando sea necesario, y aprobarlos nuevamente; c) asegurarse de que se identifican los cambios y el estado de revisión actual de los documentos; d) asegurarse de que los documentos permanecen legibles y fácilmente identificables; e) asegurarse de que se identifican los documentos de origen externo que la organización ha determinado que son necesarios par la planificación y operación del sistema de gestión ambiental y se controla su distribución; y f) prevenir el uso no intencionado de documentos obsoletos y aplicarles una identificación adecuada en el caso de que se mantengan por cualquier razón. la ejecución de sus actividades. En el anexo 3 se adjunta una muestra de un procedimiento para el control de la documentación. 12. CONTROL OPERACIONAL. 12.1 Requisito 4.4.6 de la norma ISO 14001. Este requisito establece que: La organización debe identificar y planificar aquellas operaciones que están asociadas con los aspectos ambientales significativos identificados, de acuerdo con su política ambiental, objetivos y metas, con el objeto de asegurarse de que se efectúan bajo las condiciones especificadas, mediante: a) el establecimiento, implantación y mantenimiento de uno o varios procedimientos documentados para controlar situaciones en las que su ausencia podría llevar a desviaciones de la política, los objetivos y metas ambiéntales; b) el establecimiento de criterios operacionales en los procedimientos; y el establecimiento, implantación y mantenimiento de procedimientos relacionados con aspectos ambientales significativos identificados de los bienes y servicios utilizados por la organización, y la comunicación de los procedimientos y requisitos aplicables a los proveedores, incluyendo contratistas. 11.2 Proceso de control de documentos. Los documentos se pueden controlar eficazmente mediante: ! El desarrollo de un formato de documento apropiado que incluya títulos únicos, números, fechas, revisiones, histórico de las actualizaciones o autoridad encargada de la revisión; ! La asignación de la revisión y aprobación de documentos a individuos con suficiente capacidad técnica y autoridad en la organización; y ! El mantenimiento de un sistema de distribución de documentos eficaz. Cuando se vayan a redactar documentos para el sistema de gestión ambiental, debe partirse de los requisitos específicos de la Norma ya que en ella se solicita continuamente el mantener procedimientos. La documentación general de un sistema de gestión ambiental se divide en cuatro niveles: el Manual Ambiental, los procedimientos solicitados por la Norma Internacional, los procedimientos que la organización requiere para el efectivo mantenimiento del sistema y los registros. Las partes o contenido de los procedimientos u otros, queda a libertad de la empresa. La empresa decide la complejidad de la documentación. La recomendación es no generar documentos largos, porque pierden la efectividad de su razón de ser: guiar a los trabajadores en ( 16 ) El enfoque que mantiene la Norma es que se realice el control sobre los procesos relacionados con los aspectos ambientales significativos. Ahora bien, agrega, que no en todos los casos se deben establecer procedimientos documentados, sino sólo en los casos donde se considere que sea necesario. ¿Con base en qué criterios se puede afirmar que sea o no necesario establecer un procedimiento documentado? El primer factor es el grado de control que se mantiene para el aspecto ambiental asociado, y el segundo, la experiencia que tengan las personas que están ejecutando dicha actividad. Esto aplica a actividades que estén relacionadas con los procesos productivos así como las que estén relacionadas con bienes (instalaciones, maquinaria) y servicios (distribución, almacenamiento); resaltando la necesidad de que las personas que realizan actividades en nombre de la empresa también cumplan con los procedimientos que vayan a establecerse. Por ejemplo, informar (y controlar) sobre la metodología para manipular desechos sólidos a todos los proveedores y contratistas. 12.2 Documentar procedimientos de control operacional. El enfoque general para establecer controles Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas operacionales tiene la siguiente secuencia: ! Elegir un método de control (pueden ser procedimientos, instrucciones de trabajo, controles físicos, uso de personal con formación o la combinación de los casos anteriores); ! Seleccionar criterios de operación aceptables (cómo realizar las prácticas para obtener los resultados deseados); ! Establecer los procedimientos necesarios que definan cómo se van a planificar, realizar y controlar las operaciones identificadas (indicar cómo se realizan mediciones y se da seguimiento para verificar cumplimiento y efectividad de los criterios de operación); y ! Documentar los procedimientos (puede hacerse mediante instrucciones, señales, formatos, videos, fotos). Es apropiada que se consideren las siguientes actividades cuando se vaya a establecer el control operacional: ! Contratación de personal y de servicios, ! Adquisición de propiedades o instalaciones, ! Servicio al cliente, ! Manipulación y almacenamiento de materias primas, ! Publicidad, ! Procesos de producción y mantenimiento, ! Compras, ! Procesos auxiliares (suministro de energía, reciclaje, tratamiento de aguas residuales, etc). 13. PREPARACIÓN Y RESPUESTA ANTE EMERGENCIAS. 13.1 Requisito 4.4.7 de la Norma ISO 14001. Debe recordarse que esta norma internacional no tiene relación con la gestión de seguridad y salud ocupacional, por lo que en este requisito debe entenderse la preparación y respuesta de emergencias que tienen relación con un posible impacto en el ambiente. El objetivo es identificar las situaciones de emergencia potenciales o accidentes potenciales que puedan tener impacto ambiental significativo o adverso, y realizar las acciones de mitigación y repuesta apropiadas si estas situaciones ocurren. La organización debe establecer, implantar y mantener uno o varios procedimientos para identificar situaciones potenciales de emergencia y accidentes potenciales que pueden tener impactos en el medio ambiente y cómo responder ante ellos. La organización debe responder ante situaciones de emergencia y accidentes reales y prevenir o mitigar los impactos ambientales adversos asociados. La organización debe revisar periódicamente y modificar cuando sea necesario, sus procedimientos de preparación y respuesta ante emergencias, en particular después de que ocurran accidentes o situaciones de emergencia. El requisito concluye resaltando la necesidad de realizar simulacros, cuando sea práctico, para asegurar que los procedimientos que se han establecido sean eficaces. En el anexo 3 se incluye el procedimiento para actuación ante posibles situaciones de emergencia. 13.2 Posibles situaciones de emergencia. En este apartado, la empresa debe considerar, cuando aplique: ! Emisiones accidentales al aire, ! Vertidos al agua y descargas al suelo, ! Derrames, ! Disposición de desechos sólidos peligrosos, ! Incendios, ! Huracanes, ! Temblores. En general puede hacerse una evaluación de las consecuencias de las condiciones de operación anormales (arranques, paradas de proceso, mantenimiento preventivo). Para llegar a las posibles situaciones de emergencia debe tomar en cuenta: ! Naturaleza de los peligros en el sitio (información sobre los productos peligrosos), por ejemplo líquidos inflamables, tanques de almacenamiento, gases comprimidos. ! Posible situación de emergencia o accidente en una instalación cercana, ! Interno a la empresa debe tomar las siguientes medidas: ! Método para responder a una situación de emergencia específica, ! La formación del personal para la respuesta a emergencia, ! Organización y responsabilidades para enfrentar una emergencia, ! Las rutas de evacuación y puntos de encuentro, ! Datos para contacto de instituciones de ayuda (bomberos, servicios de limpieza de derrames), ! Procesos de evaluación posterior a la emergencia, La empresa debe procurar que las medidas que tome sean las necesarias para reducir el posible impacto ambiental y para mitigar el impacto que ocurra. Por ejemplo, debe proveerse de materiales para retención y recolección de derrames; debe establecer medidas para reducir la posibilidad de un incendio; debe considerar el anclaje de estantes para evitar caídas de productos peligrosos durante un temblor; debe procurar adecuar las áreas de almacenamiento de productos peligrosos para evitar que alcance el alcantarillado pluvial en caso de un derrame; asegurar el almacenamiento de productos químicos por compatibilidad, entre otros ejemplos. En el anexo 5 se ha incluido una propuesta realizado por IHOBE, sobre la estructura y contenido de un Plan de emergencia Ambiental. El documento ha sido modificado del original. La organización también debe realizar pruebas periódicas de tales procedimientos, cuando sea factible. ( 16 ) Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas ( 15 ) 14. Seguimiento y medición empresas. 14.1 Requisitos 4.5.1 de la Norma ISO 14001. Los indicadores deben poseer al menos las siguientes características: ! Medidos contra una base de producción (unidades de producción). ! Tomados para un periodo de tiempo definido (mensual, anual, semestral). ! Reproducibles (se repitan los resultados). La verificación incluye un enfoque sistemático para la medición, el seguimiento y la evaluación del desempeño ambiental de la empresa. Para centrar los recursos sobre las mediciones más importantes es apropiado hacer una identificación, de lo que la Norma llama como, las características fundamentales de sus operaciones. Estas características usualmente están relacionadas con actividades asociadas a aspectos ambientales significativos. La Norma establece: La organización debe establecer, implantar y mantener uno o varios procedimientos para hacer el seguimiento y medir de forma regular las características fundamentales de sus operaciones que pueden tener un impacto significativo en el medio ambiente. Los procedimientos deben incluir la documentación de la información para hacer el seguimiento del desempeño, de los controles operacionales aplicables y de la conformidad con los objetivos y metas ambientales de la organización. La organización debe asegurarse de que los equipos de seguimiento y medición se utilicen y mantengan calibrados y se deben conservar los registros asociados. El otro requisito detallado en la norma es la necesidad de asegurar que lo equipos que sean utilizados para realizar mediciones estén calibrados. La validez de la información recopilada depende en gran proporción de la confianza que den los instrumentos de medición, así como de la competencia del personal que ejecuta las mediciones. Es indispensable mantener registros de las calibraciones que se efectúen. Cuando sea oportuno, es valioso documentar los procedimientos para medición y seguimiento de alguna de las características claves identificadas. Se recomienda documentar cuál es el proceso para el tratamiento de aguas residuales, cuándo y cómo medir las variables clave (pH, sólidos sedimentables, caudal, etc); también puede documentarse sobre el manejo de desechos sólidos peligrosos, cómo deben almacenarse, tratamiento interno; etc. 14.2 Seguimiento del desempeño ambiental. El método más utilizado en la práctica es definir indicadores de gestión que permitan dar seguimiento a los principales aspectos ambientales. La utilización de indicadores permite a una empresa: ! Aumentar el conocimiento o entendimiento del sistema, de los procesos y de la organización. ! Proveer información concisa acerca del estado y tendencia en el desempeño de la organización que facilita la toma de decisiones, ! Provee de una herramienta para medir el progreso hacia el logro de los objetivos. ! Facilita la comparación del desempeño ambiental entre ( 14 ) La empresa debe revisar continuamente sus indicadores y reafirmar su utilidad, la facilidad para la toma de datos, la aplicación a la empresa, la confiabilidad de los datos. La norma ISO 14031 establece ejemplos de indicadores, los cuales ha dividido en indicadores de gestión (cantidad de no conformidades, personal que cumple con las competencias, estado de las acciones correctivas, ejecución del programa de capacitación, etc) e indicadores operacionales (consumo de agua por unidad de producción, volumen de desechos sólidos por unidad de producción, cantidad de CO2 emitido al año, etc). La cantidad y tipo de indicadores depende de las características de cada empresa. Se sugiere que al menos se logre establecer uno por cada aspecto ambiental significativo y que se mantenga un control periódico de los mismos. 15. NO CONFORMIDAD, ACCIÓN CORRECTIVA Y ACCIÓN PREVENTIVA. 15.1 Requisito 4.5.3 de la Norma ISO 14001. Una no conformidad es una desviación o incumplimiento de los requisitos de la norma ISO 14001 o de los procedimientos establecidos por la empresa para el control de su desempeño ambiental. El acto de establecer acciones correctivas o acciones preventivas obedece a dar solución a una no conformidad real o a una no conformidad potencial, respectivamente. Este es un mecanismo para promover la mejora continua del sistema de gestión ambiental. En el anexo 3 se incluye un procedimiento general para la identificación de no conformidades y el establecimiento de acciones correctivas y acciones preventivas. La Norma ISO 14001 establece que: La organización debe establecer, implantar y mantener uno o varios procedimientos para tratar las no conformidades reales y potenciales y tomar acciones correctivas y acciones preventivas. Los procedimientos deben definir requisitos para: a) la identificación y corrección de las no conformidades y tomando las acciones para mitigar sus impactos ambientales. b) La investigación de las no conformidades, Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas determinando sus causas y tomando las acciones con el fin de prevenir que vuelvan a ocurrir; c) La evaluación de la necesidad de acciones para prevenir las no conformidades y la implantación de las acciones apropiadas definidas para prevenir su ocurrencia; d) El registro de los resultados de las acciones preventivas y acciones correctivas tomadas; y e) La revisión de la eficacia de las acciones preventivas y acciones correctivas tomadas. Las acciones tomadas deben ser las apropiadas en relación a la magnitud de los problemas e impactos ambientales encontrados. La organización debe asegurarse de que cualquier cambio necesario se incorpore a la documentación del sistema de gestión ambiental. La Norma sugiere la definición de responsabilidades y autoridad para el análisis y resolución de las no conformidades determinadas. 15.2 Determinación de no conformidades. Una no conformidad puede estar asociada a que una parte del sistema de gestión no funcione de la manera prevista, o bien que no se cumpla con los requisitos de desempeño ambiental. Ejemplos de estas situaciones son los siguientes: empresa debe iniciar una evaluación de la misma, haciendo un enfoque de las causas que llevaron a la desviación de los requisitos del sistema. Cualquier plan de acción que surja para corregir la no conformidad determinada debe procurar eliminar la raíz del problema para reducir considerablemente la posibilidad de que se vaya a repetir. De igual manera debe procederse si la acción a tomar es de carácter preventivo. Estos hallazgos suelen ser identificados por análisis de tendencias en el desempeño ambiental o extrapolando una no conformidad real determinada en un área de trabajo a otra área con las mismas características. Un sistema de gestión ambiental maduro se caracteriza porque las acciones que se documentan son en su mayoría de carácter preventivo. Debe recordarse que el hecho de establecer las acciones correctivas y acciones preventivas se hace con el sentido de mejorar el sistema de gestión ambiental; razón por la cual es necesario establecer mecanismos para evaluar la eficacia de la acción tomada. Este proceso de verificación se sugiere que sea aplicado en la fecha propuesta para la caducidad del plan de gestión establecido. Debe verificarse que la implementación de las acciones logra reducir la potencial ocurrencia de una no conformidad más importante. Desempeño del sistema: ! No se definan o comuniquen las responsabilidades requeridas por el sistema de gestión ambiental, 16. CONTROL DE REGISTROS. ! No definición de objetivos ambientales, ! Inexistencia de un proceso formal de revisión por la 16.1 Requisito 4.5.4 de la Norma ISO 14001. dirección, ! No hay evidencia de un proceso de evaluación de cumplimiento con los requisitos legales. ! No hay evidencia de cumplimiento de la Política Ambiental. ! Personal no competente para la ejecución de actividades. Desempeño ambiental: ! Incumplimiento de las metas ambientales, ! Incumplimiento de los criterios de operación establecidos, ! Incumplimiento de un requisito legal, ! Desempeño ambiental adverso, ! No mitigación de impacto ambiental por accidentes. Aunque un método para la determinación continua de las no conformidades es el proceso de auditorías internas, no puede pensarse que éste sea el único medio. Las responsabilidades rutinarias de todos los empleados deben incluir la identificación de no conformidades. El hecho de que el personal está en contacto con las áreas de trabajo, tiene mayor posibilidad de verificar la aplicación de los procedimientos de manera apropiada. 15.3 Establecimiento de acciones correctivas y de acciones preventivas. Ante la determinación de una no conformidad real, la Un registro representa la evidencia verificable de las acciones ambientales que ejecuta la empresa. Muestran información de la operación y los resultaos del sistema de gestión ambiental. El propósito de este requisito es darle un trato especial a los documentos denominados registros debido a su importancia como evidencia objetiva de cumplimiento de las operaciones establecidas por la empresa. La Norma establece que: La organización debe establecer y mantener los registros que sean necesarios para demostrar la conformidad con los requisitos de su sistema de gestión ambiental y de esta Norma Internacional, para demostrar los resultados logrados. La organización debe establecer, implantar y mantener uno o varios procedimientos para la identificación, el almacenamiento, la protección, la recuperación, el tiempo de retención y la disposición de los registros. Los registros deben ser y permanecer legibles, identificables y trazables. En el anexo 3 se incluye un procedimiento para el control de registros. El control implica el almacenamiento, la protección, la recuperación, el tiempo de retención y la Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas ( 17 ) disposición de los registros. En el anexo 4 se incluye una muestra de los distintos formatos (referidos en los procedimientos) que serán utilizados para recopilar la información. Cabe aquí hacer la diferencia entre registro y formato; siendo el primero un documento con información recopilada en un formato. 16.2 Tipos de registros que deben mantenerse. Cuando la Norma establece la necesidad de que los registros sean legibles, identificables y trazables se refiere a lo siguiente: es necesario poder tomar la información del registro para el control del desempeño ambiental; se requiere conocer el registro, a qué departamento aplica y si está controlado por el sistema; y, finalmente, si la empresa conoce el lugar de aplicación de los registros y bajo la autoridad de qué persona se deben mantener. Algunos registros que se pueden crear son: ! Información sobre el cumplimiento de los requisitos legales aplicables, ! Aspectos ambientales significativos, ! Detalles sobre no conformidades y acciones correctivas y preventivas, ! Resultados de las auditorías internas y de las revisiones por la dirección, ! Información sobre características ambientales de los productos, ! Evidencia de cumplimiento de objetivos y metas, ! Información sobre participación en formación, ! Resultados de inspección y calibración, ! Resultados de controles operacionales. El control eficaz de los registros es esencial para la implementación exitosa del sistema de gestión ambiental. 17. AUDITORÍAS INTERNAS AL SISTEMA DE GESTIÓN AMBIENTAL. 17.1 Requisito 4.5.5 de la Norma ISO 14001. La ejecución de auditorías internas al sistema de gestión ambiental promueve la mejora continua. Representa una fuente de información valiosa que utilizará la dirección general en el proceso de revisión por la dirección y confirma si el sistema de gestión se ajusta a los requisitos de la Norma y de las operaciones definidas por la empresa para la efectiva gestión ambiental. De ahí la necesidad de ser consistentes y sistemáticos en la aplicación de auditorías internas. Este proceso de auditoría se ha documentado en un procedimiento, del cual se presenta un ejemplo en el anexo 3. La Norma ISO 14001 establece que: La organización debe asegurarse de que las auditorías internas del sistema de gestión ambiental se realizan a intervalos planificados para: a) determinar si el sistema de gestión ambiental: ! es conforme con las disposiciones planificadas para la gestión ambiental, incluidos los requisitos de esta Norma ( 16 ) Internacional; y ! se ha implantado adecuadamente y se mantiene; y b) proporcionar información a la dirección sobre los resultados de las auditorías. La organización debe planificar, establecer, implantar y mantener programas de auditoría, teniendo en cuenta la importancia ambiental de las operaciones implicadas y los resultados de las auditorías previas. Se deben establecer, implantar y mantener uno o varios procedimientos de auditoría que traten sobre: a) las responsabilidades y los requisitos para planificar y realizar las auditorías, informar sobre los resultados y mantener los registros asociados; b) la determinación de los criterios de auditoría, su alcance, frecuencia y métodos. La selección de los auditores y la realización de las auditorías deben asegurar la objetividad e imparcialidad del proceso de auditoría. Aspectos específicos del proceso para la ejecución de auditorías de sistemas de gestión ambiental se presentan en el apartado 19. 17.2 Programa de auditorías internas. Los programas de auditoría interna son un mecanismo que permite programar las auditorías que se realizarán en un periodo de tiempo establecido. Las auditorias internas se realizan en intervalos planificados para asegurar que las personas (auditores y auditados) se preparen para la auditoría. En general pretende dar un mejor aprovechamiento de los recursos de la empresa. Un programa de auditorías internas puede contener una o más auditorías, ya sea que las realizan auditores internos o externos. El programa se base en la naturaleza de las operaciones y da mayor relevancia a aquellos procesos que poseen más probabilidad de que provoquen un impacto ambiental significativo. El programa de auditoría debe evidenciar que se auditan todos los procesos de la empresa y que se incluyen todos los requisitos de la Norma ISO 14001. En cada auditoría interna no se requiere que sean auditados todos los procesos y requisitos de la norma. Pueden ser especializadas para auditar un área o proceso específico. Por ejemplo, pueden establecerse auditorías documentales, auditorías de cumplimiento legal, auditorías de desempeño ambiental, auditorías de sistemas de gestión, entre otros. Lo que debe prestar atención es que la suma de todas las auditorías internas abarque el alcance del sistema de gestión ambiental y la totalidad de la Norma ISO 14001. 18. REVISIÓN POR LA DIRECCIÓN. 18.1 Requisito 4.6 de la norma ISO 14001. Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas El requisito establecido por esta Norma Internacional tiene plasmados dos sentidos muy bien definidos. El primero de ellos es la necesidad de involucrar a la alta dirección en el sistema de gestión ambiental, particularmente en un proceso de revisión y el segundo, resultado del primero, es el establecimiento de oportunidades para mejorar en el desempeño ambiental y en el desempeño de gestión La alta dirección debe revisar el sistema de gestión ambiental de la organización, a intervalos planificados, para asegurarse de su conveniencia, adecuación y eficacia continuas. Estas revisiones deben incluir la evaluación de oportunidades de mejora y la necesidad de efectuar cambios en el sistema de gestión ambiental, incluyendo la política ambiental, los objetivos y las metas ambientales. Se deben conservar los registros de las revisiones por la dirección. Los elementos de entrada para las revisiones por la dirección deben incluir: a) los resultados de las auditorías internas y evaluaciones de cumplimiento con los requisitos legales y otros requisitos que la organización suscriba; b) las comunicaciones de las partes interesadas externas, incluyendo las quejas; c) el desempeño ambiental de la organización; d) el grado de cumplimiento de los objetivos y metas; e) el estado de las acciones correctivas y preventivas; f) el seguimiento de las acciones resultantes de las revisiones previas llevadas a cabo por la dirección; g) los cambios en las circunstancias, incluyendo la evolución de los requisitos legales y otros requisitos relacionados con sus aspectos ambientales; y h) las recomendaciones para la mejora. Los resultados de las revisiones por la dirección deben incluir todas las decisiones y acciones tomadas relacionadas con posibles cambios en la política ambiental, objetivos, metas y otros elementos del sistema de gestión ambiental, coherentes con el compromiso de mejora continua.. Debe tomarse en cuenta que la intención de esta revisión no implica, en un amplio contexto, revisar puntualmente cada uno de los elementos del sistema de gestión ambiental; para tal fin se establece el proceso de auditorías internas. La revisión por la dirección debe enfocarse a la adecuación de la política y los objetivos para cubrir las necesidades del negocio. Como consecuencia de la revisión por la dirección puede ocurrir que sea necesario la variación de la política ambiental - aunque eso ocurre esporádicamente ya que ésta regularmente es escrita en términos generales o globales-; o bien la actualización de los objetivos y las metas - es más probable que estos se modifiquen- debido a que los existentes ya han sido alcanzados o porque la condición de la organización ha variado. ( 16 ) En el anexo 3 se presenta un procedimiento sobre el proceso de revisión por la dirección, y en el anexo 4 se muestra un formato para la documentación de este proceso. 18.2 Proceso de mejora continua. Para efectos de este texto se entiende mejora continua como el “proceso recurrente de optimización del sistema de gestión ambiental para lograr mejoras en el desempeño ambiental global, de forma coherente con la política ambiental de la organización”. La mejora continua es una característica fundamental de un sistema de gestión ambiental eficaz. Ésta se logra a través del cumplimiento de los objetivos y metas ambientales y la optimización del sistema de gestión ambiental y cualquiera de sus componentes. Algunos ejemplos que promueven la mejora continua, misma que se pueden dar conforme el sistema va madurando, son: ! Establecer un proceso para evaluar nuevos materiales, con el fin de promover el uso de materiales menos nocivos. ! Mejorar el proceso para identificar los requisitos legales aplicables de forma que los nuevos requisitos que deben cumplirse se identifiquen de manera oportuna. ! Mejorar la formación proporcionada a los empleados sobre materiales y manipulación, con el fin de reducir la generación de residuos. ! Introducir procesos de tratamiento individual a aguas vertidas. ! Introducir a proveedores y clientes a lo largo de la cadena de producción para evaluar su desempeño ambiental. ! Introducirse en herramientas de evaluación de ciclo de vida de productos. Otro aspecto relevante es que los resultados de las revisiones deben ser documentadas con el propósito de proporcionar un registro de las conclusiones que se logren en su desarrollo. Un motivo por el cual se hace necesaria la documentación de esta actividad es porque puede ayudar a evitar un trabajo duplicado, además de que permite dar seguimiento a las decisiones tomadas durante una junta en futuras sesiones. Finalmente, debe considerarse la posibilidad de realizar las revisiones de manera apropiada para el sistema; por lo que se recomienda realizar varias revisiones distanciadas en el tiempo y recordar que no todos los elementos deben ser revisados en una misma sesión de trabajo. 19. AUDITORÍAS DEL SISTEMA DE GESTIÓN AMBIENTAL. La Norma ISO 19011, establece los lineamientos para al ejecución de auditorías de sistemas de gestión de la calidad y ambiente. Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas ( 19 ) 19.1 Introducción. Las auditorías a sistemas de gestión es una práctica que se ha desarrollado como medio para verificar que las disposiciones establecidas en los requisitos de la norma ISO 14001 y los requisitos establecidos por las organizaciones para la eficaz operación y control del impacto ambiental, se ejecuten en conformidad. Según quien la realice, las auditorías pueden clasificarse en : ! Auditorías internas conducidas por personal de la propia empresa, o bien, por persona externa a la empresa que actúa con los procedimientos y la sistemática de la propia empresa. ! Auditorías externas conducidas por personal independiente a la compañía, o bien, por persona externa a la empresa con sistemática de actuación propia. Un ejemplo es la realizada por los clientes a sus proveedores. ! Auditorías de entidades independientes conducidas por organizaciones independientes con el objetivo de certificar si su sistema cumple con lo predispuesto en una norma específico. El alcance de este manual se suscribe a las auditorías internas, como mecanismo de evaluación y seguimiento al sistema de gestión ambiental. Con respecto a las auditorías internas debe considerarse que pueden presentar ciertas ventajas en comparación con las externas: • Mayor conocimiento de los procesos auditados. El personal conoce bien los procesos y puede profundizar en ellos. • Se tiene fácil acceso a información confidencial. La confianza depositada en las personas designadas como auditores internos permite que puedan tener el acceso a información que no se brinda con tanta facilidad a personas externas. • Se puede hacer un seguimiento de las recomendaciones que se dicten a partir de los resultados de auditoría. El hecho de participar diariamente en las actividades de la empresa le permite a los auditores internos verificar fácilmente si se han dado los cambios debido a los resultados de la auditoría. • Se mejora la toma de conciencia ambiental del personal y la identificación del mismo con la empresa. Al involucrarse en la evaluación, el personal aprende mejor sobre los impactos ambientales y promueve su control. Sin embargo, de igual manera se pueden esperar ciertas desventajas: • Tienen un costo tanto en tiempo como en recursos humanos, los cuales se distraen de sus labores cotidianas para tomar parte en las auditorías. La auditoría interna de un proceso puede involucrar a una persona durante un día laboral o más, lo que puede reducir la productividad. ( 20 ) • Algunos auditores tienen menos libertad de expresarse debido a compañerismo. Este asunto está relacionado con la posibilidad de que generen conflictos internos cuando haya personas que no se identifiquen apropiadamente con el sistema de gestión ambiental o bien se siente amenazados. Se requiere la participación activa del departamento de recursos humanos para reducir la ocurrencia de estas situaciones. • Si no se tiene la experiencia necesaria puede no darse la profundidad suficiente para conocer la realidad de la empresa. La experiencia es sumamente importante para determinar las inconsistencias con el cumplimiento de los requisitos. Es necesario desarrollar un programa de entrenamiento que involucre la interacción con personas que puedan tener más experiencia en la ejecución de las auditorías al sistema de gestión ambiental. • Competencias del auditor. Además de las mencionadas en el punto anterior, debemos referirnos a personas con conducta ética, responsables, con facilidad de expresión, con juicio y diligencia. Todas las competencias deben ser desarrolladas o al menos verificar que las personas seleccionadas como auditores las poseen. Por otro lado, el proceso mismo de auditoría requiere que se cumplan ciertos principios que unidos pueden aportar confianza a los resultados obtenidos. • Independencia: La base para la imparcialidad de la auditoría y la objetividad de las conclusiones de la auditoría. No puede ocurrir que una persona ejecute auditorías de su propia área de trabajo. • Sistemática: El método racional para alcanzar conclusiones de la auditoría fiables y reproducibles en un proceso de auditoría sistemático. No se deja nada al azar. El proceso debe ser repetible y que se alcancen los mismos resultados independientemente de quien ejecute la auditoría. Si se mantienen los principios de auditoría se considera que se ha establecido una herramienta eficaz y fiable y, por consiguiente, se podrán lograr conclusiones de la auditoría que sean pertinentes y suficientes; además de que la alta dirección puede actuar con seguridad sobre aspectos que le ayudarán a mejorar su desempeño. La Norma ISO 14001, en el requisito 4.5.5, establece cuáles son los objetivos de las auditorías internas: a) determinar si el sistema de gestión ambiental: ! es conforme con las disposiciones planificadas para la gestión ambiental, incluidos los requisitos de esta Norma Internacional; y ! se ha implantado adecuadamente y se mantiene; y b) proporcionar información a la dirección sobre los resultados de las auditorías. Adicional a estos objetivos, la evaluación interna del sistema tiene una razón de ser aún más relevante: impulsar desde la dirección de la empresa un proceso de mejora continua, orientado a todas las áreas de la actividad. Los resultados de las auditorías internas son el insumo más importante utilizado por la alta dirección para Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas proponer mejoras en el sistema de gestión. Algunas definiciones que deben estar claras en este proceso son: Auditoría de sistema de gestión ambiental: “Proceso sistemático, independiente y documentado para obtener evidencias de la auditoría y evaluarlas de manera objetiva con el fin de determinar la extensión en que se cumplen los criterios de auditoría”. La definición inicia con los principios básicos de la auditoría que ya se han mencionado; además incluye dos conceptos que se definirán a continuación. Criterios de auditoría: “Conjunto de políticas, procedimientos o requisitos utilizados para realizar auditorías”. Ejemplos de criterios de auditoría son: Norma ISO 14001, Manual ambiental, Política ambiental, procedimientos del sistema de gestión ambiental; o cualquier otro documento o informe que se utilice como partida de evaluación. Evidencias de auditoría: “Registros, declaraciones de hechos o cualquier otra información que son pertinentes para los criterios de auditoría y que son verificables”. Cualquier información (escrita, visual o verbal) que permita verificar el cumplimiento o no del criterio de auditoría utilizado en la evaluación. Hallazgos de auditoría: “Resultados de la evaluación de la evidencias de la auditoría recopilada frente a los criterios de auditoría”. Al contrastar la evidencia de la auditoría con los criterios de auditoría pueden darse dos situaciones: se cumple o no con los criterios de auditoría. En caso de no cumplirse estamos en presencia de un hallazgo de auditoría que puede ser calificado como no conformidad. Conclusiones de auditoría: “Resultado de una auditoría, que proporciona el equipo auditor tras considerar los objetivos de la auditoría y todos los hallazgos de la auditoría”. Las conclusiones de auditoría están dirigidos a verificar que se cumple o no con las disposiciones establecidas en el sistema de gestión ambiental. 19.2 Proceso de auditoría interna. El proceso de auditoría interna, tal como lo se describe en la norma ISO 19011, se puede resumir en el siguiente diagrama:‘ 1. PREPARACIÓN DE LA AUDITORÍA. Este paso incluye la definición de un programa de auditorías (FOR 20, anexo 4), entendido como “conjunto de una o más auditorías planificadas para un período de tiempo determinado y dirigidas hacia un propósito específico”. Como se mencionó en la sección 17, este programa debe incluir todos los procesos de la empresa y todos los requisitos de la Norma ISO 14001. Proporcionar recursos para la auditoría interna, lo cual implica conocer la viabilidad de la auditoría, disponibilidad de auditores y auditados, áreas de reunión y equipos para auditores. Debe mantenerse un grupo de auditores internos competentes en la ejecución de auditorías internas. Los auditores internos deben al menos recibir la siguiente formación. ! Interpretación de los requisitos de la Norma ISO 14001. ! Técnicas de auditoría de sistemas de gestión ambiental. ! Proceso de auditoría de sistemas de gestión ambiental. ! Participación como observadores en al menos dos auditorías internas. Durante todo este proceso debe existir supervisión y evaluación continua para verificar que el auditor puede aplicar las distintas técnicas aprendidas. 2. PLANIFICACIÓN DE LA AUDITORÍA. El eje de este paso es generar un Plan de auditorías internas (FOR 19, anexo 4). Según lo establece la Norma ISO 19011, un plan de auditorías debe contener al menos los siguientes elementos. a) Los objetivos de la auditoría. b) Los criterios de auditoría y los documentos de referencia. Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas ( 21 ) c) El alcance de la auditoría, incluyendo la identificación de las unidades de la organización y unidades funcionales y los procesos que van a auditarse. d) Miembros del grupo auditor. e) Las fechas y lugares donde se van a realizar las actividades de la auditoría in situ. f) La hora y la duración estimadas de las actividades de la auditoría in situ, incluyendo las reuniones con el auditado y las reuniones del equipo auditor. g) Aprobación. El objetivo de auditoría será establecido con las necesidades particulares: puede ser una auditoría de cumplimiento de requisitos legales, una auditoría al sistema total, una auditoría al desempeño ambiental de un área específica, entre otras opciones. El equipo auditor está constituido por un auditor líder o jefe y uno o más auditores que le proporcionan ayuda en el logro de los objetivos definidos. El auditor líder es el encargado de orientar sobre las actividades de auditoría: designación de responsabilidades dentro del equipo, coordinación con el auditado, vocero del grupo; y la más relevante, asegurar que se cumpla con el objetivo establecido. El grupo auditor debe ser competente en su conjunto, es decir, debe asegurarse que los miembros del grupo abarcan la competencia necesaria para cubrir el objetivo pretendido durante la auditoría en ejecución. Debe establecerse en el Plan de auditoría un cronograma de las actividades que se realizarán en el periodo de auditoría, estableciendo claramente la fecha, la hora, el área a auditar, el auditado y el auditor. 3. EJECUCIÓN DE LA AUDITORÍA. La ejecución de la auditoria puede dividirse en cuatro etapas: ! Reunión de apertura: con la participación del equipo auditor y el auditado. En ella se presenta el plan de auditorías internas (objetivo, alcance, criterios de auditoría, cronograma de actividades) y se discute si es necesario realizar alguna modificación del mismo. ! Auditoría en sitio: se realiza una investigación para verificar, con evidencia de auditoría, el cumplimiento de los criterios de auditoría. Se recopila toda la evidencia necesaria para cubrir el objetivo. ! Preparación del informe: levantamiento de los hallazgos de auditoría y de las conclusiones de auditoría. ! Reunión final: se presenta el informe de auditoría mediante una lectura y aprobación de los hallazgos y conclusiones de auditoría. Para la auditoría en sitio el equipo auditor debe prepararse previamente en los criterios de auditoría que va a utilizar (Norma ISO 14001, procedimientos específicos, etc). Una práctica común es la elaboración de guías de verificación que le orienten a llevar la auditoría. El anexo 6 presenta ( 22 ) una guía de verificación para evaluar cumplimiento de los requisitos de la Norma ISO 14001. Debe tenerse presente que la guía de verificación es una ayuda y no puede convertirse en una restricción para profundizar en un aspecto que se considere relevante, durante la ejecución de la auditoría. Deben tomarse en cuenta dos aspectos básicos en el proceso de auditoría: ! Se está ejecutando la auditoría en un tiempo y espacio definido, por lo que aquello que se pueda determinar puede ser exclusivo de ese momento, de ahí la necesidad de recopilar toda la información verificable que le facilite llegar a las conclusiones de auditoría. ! No puede pretenderse abarcar el 100% de la información disponible. Toda auditoría se basa en una muestra, por lo que es la habilidad del auditor lo que le permite determinar el tamaño de esa muestra. Para la elaboración del informe de auditoría es necesario recopilar la información identificada por los miembros del equipo auditor. La reunión de la información debe aportar las bases para redactar los hallazgos y las conclusiones de auditoria. Las diferencias entre el criterio y la evidencia de auditoría definen el Hallazgo de auditoría. Los hallazgos pueden ser clasificados según la dimensión del mismo de la siguiente manera: ! No conformidades mayores: Ausencia o no aplicación total de un procedimiento del sistema en la empresa o de algún requisito de la Norma auditada. ! No conformidades menores: Incumplimiento puntual de una sección de un procedimiento sin que se afecte la buena operabilidad del sistema. ! Observaciones: Una situación no repetitiva que se desvía ligeramente de un procedimiento del sistema sin que se afecte el objetivo del mismo. Durante el proceso de auditoría, en el momento de la determinación de un hallazgo de auditoría, es necesaria su verificación con el auditado, haciéndole entender la evidencia con la cual respalda su hallazgo. De esta manera será más sencilla la redacción del informe de auditoría y la dinámica de la reunión de cierre. 4. INFORME DE AUDITORÍA: El informe de auditoría (FOR 21, anexo 4) es preparado con la supervisión del auditor líder. Éste debe contener al menos los siguientes elementos. ! Objetivo. ! Alcance. ! Criterios de auditoría. ! Equipo auditor. ! Lista de hallazgos de auditoría debidamente clasificados. ! Conclusiones de auditoría. ! Firmas de aprobación. Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas El informe de auditoría se presenta en la reunión de cierre. En caso de que sea necesario realizar cambios, producto de la discusión en la reunión de cierre, el auditor líder asume esa responsabilidad y una vez que lo tenga preparado debe distribuirlo a las personas necesarias (representante de la dirección, auditado, etc) o a quien la organización decida para que luego sea evaluado por la dirección general en el proceso de revisión por la dirección. 5. SEGUIMIENTO A LAS CONCLUSIONES DE AUDITORÍA. Producto del informe de auditoría es probable que se de la apertura de acciones correctivas que promuevan la eliminación de las brechas determinadas durante la auditoría. El cumplimiento de las acciones correctivas pueden ser verificadas por el gestor ambiental al finalizar la fecha de cumplimiento del plan establecido en ella, o bien, por los auditores internos durante la próxima auditoría interna. El proceso de auditoría interna finaliza cuando hayan sido cerradas las acciones correctivas originadas en el proceso de auditoría. Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas ( 23 ) T RI AS D E INDUSTRIA ES PROGRESO FU 43 ND ADA EN 19 R I CA CA MA R A D DUS S TA FOMIN IN CO E Manual de Gestión Ambiental para pequeñas y medianas empresas. Centro Nacional de Producción más Limpia -M I NAE -
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