Cómo influye en las condiciones laborales poseer un título universitario Gabriela Garrido Introducción En el presente trabajo se analizará, a través de estadísticas publicadas por organismos oficiales, tres testimonios de empleados y material teórico relevante, la relación que existe entre la obtención de un título universitario y las condiciones laborales. Las estadísticas corresponden al Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas 2001, del INDEC. Los testimonios recabados corresponden a empleados de dos empresas multinacionales asentadas en la Argentina, vinculados a su empleador mediante una relación laboral de dependencia de naturaleza formal. El marco teórico se apoya en el aporte científico de numerosos autores, en particular en el artículo “Empleo, remuneraciones y diferenciación social en el último cuarto de siglo XX” de Luis Beccaria. (Beccaria, 2002) El objetivo es demostrar que los estudios universitarios completos no sólo otorgan al empleado una calificación técnica específica para la realización de las tareas, sino también ventajas competitivas respecto de quienes no los poseen al momento de evaluar las condiciones laborales. Las ventajas competitivas se hacen manifiestas a través de diferentes canales, en particular, mediante los niveles de remuneración, el acceso a los puestos de trabajo y la estabilidad laboral dentro de una empresa. Datos estadísticos Antes de comenzar el análisis desde el punto de vista estadístico sobre la incidencia de los estudios universitarios completos en la situación ocupacional, es necesario dar cuenta de la situación de la Argentina en cuanto al porcentaje de la población que posee dicha calificación. A pesar de que existe una suerte de mito popular sobre la denominada “masividad universitaria argentina”, los números no son muy favorables respecto de otros países. Según el estudio titulado “Radiografía de la Argentina”1 del sociólogo Artemio López, sólo el 3% de los argentinos son 1 En un estudio de la Consultora Equis titulado “Radiografía de la Argentina”, su titular Artemio López expresó: “Argentina es un país que se jactó de poseer un alto nivel educativo, comparándose con los países más desarrollados del hemisferio y estándares similares a los de las potencias mundiales. Ahora llegamos a la circunstancia de que cada 100 habitantes tenemos 3 graduados universitarios y también dos analfabetos absolutos, casi la misma cantidad de universitarios que de analfabetos”. graduados universitarios, una tasa que casi iguala los índices de analfabetismo nacionales. En su obra “La tragedia educativa” (Etcheverry, 2000), el profesor Jaim Etcheverry ofrece datos similares respecto de la situación de la Argentina en el año 1999 al indicar que sólo el 5% de la población cuenta con estudios universitarios completos, mientras que países como Estados Unidos, Francia o Canadá alcanzan o superan el 20%. Según el cuadro 7.12, la distribución por tipo de actividad en el año 2001 se agrupa de la siguiente manera: ciencias económicas (16,27%), ciencias médicas (15,98%), ciencias jurídicas (13,43%), ciencias sociales (11,16%), ingeniería y carreras afines (9,79%), arquitectura (5,44%), farmacia y bioquímica (3,58%), ciencias de la educación (3,27%), odontología (3,14%), ciencias naturales (3,08%), informática (2,98%), agronomía (2,63%), veterinaria (1,65%), idiomas (1,22%) y artes (0,74%). En valores absolutos, la población ocupada con estudios universitarios completos representa sólo el 9% de la población total, 927.129 sobre 10.913.187, según se desprende del cuadro 9.4 que se adjunta en el anexo estadístico. Sin embargo, si se toma en cuenta que cerca del 5% de la población total cuenta con estudios universitarios, se puede concluir que la incidencia en el mercado laboral de este grupo es muy superior en términos relativos que la que tienen otros sectores de la población con niveles educativos inferiores. Algo similar ocurre cuando se analiza la tasa de desempleo desde el punto de vista de los valores relativos. En el cuadro 7.11 que se adjunta al anexo estadístico, se puede advertir que en el año 2001 sólo el 10% de la población de 20 años o más (incluye la población de 70 años o más) que completó el nivel universitario se encuentra en situación de inactividad laboral. Hay que tener en cuenta que entre esta población se agrupan tanto desocupados como jubilados. Esta tasa es notablemente inferior a la tasa de desempleo general del país que, al año 2001, alcanzó niveles del 18,3%. Si se considera que entre la población de desocupados sólo se contabilizan aquellos que se encuentran en situación de desempleo abierto y de subempleo visible (Beccaria, 2002: 31), la comparación se agudiza mucho más. Al año 2001, había en la Argentina un total de 927.129 graduados universitarios con ocupación laboral, de los cuales eran empleados de los sectores públicos y privado 572.748, patrones 91.649, trabajadores por cuenta propia 252.244 y trabajadores familiares 10.488, tal como se desprende del cuadro 7.12 del anexo estadístico. Testimonios recabados Para dar cuenta de la percepción de los actores sociales sobre la influencia de la educación formal en la situación ocupacional, se recabaron testimonios a través de entrevistas a tres empleados. El primero de ellos, con un nivel educativo secundario completo, trabaja en una empresa de telecomunicaciones multinacional como supervisor de obra. Al ser interrogado sobre cómo influye en el acceso a un puesto de trabajo poseer un título universitario, manifestó que fue seleccionado para el puesto por la experiencia en el rubro que tenía por haber trabajado en otra empresa más chica de comunicaciones donde hacía un trabajo parecido. También señaló, con cierta resignación, que hace 4 años que es supervisor, pero que no cree que pueda ascender más en la empresa porque los cargos superiores están ocupados principalmente por ingenieros. El segundo trabajador encuestado es Licenciado en administración de empresas egresado de la UBA y trabaja como gerente regional en un laboratorio de productos medicinales multinacional. Sus respuestas revelan una posición categórica en cuanto al perfil profesional que las empresas multinacionales buscan al momento de la selección de los recursos humanos, pero cree que la estabilidad laboral y el nivel de remuneraciones no está relacionado a la posesión de conocimientos técnicos sino a la productividad. Por último, se entrevistó a un gerente de producto con estudios secundarios completos que trabaja en el mismo laboratorio multinacional. Es curioso cómo el encuestado adujo que en el departamento de recursos humanos y en los “talent reviews” de los empleados en situación de ascenso se evalúan los conocimientos formales de los candidatos como un prerrequisito para el cargo, a la par que las habilidades y la idea de progreso de un “self-made man”, y que a la hora de inclinarse entre varios postulantes, se privilegia a los empleados con estudios superiores. En cuanto al nivel de las remuneraciones, manifestó que se incrementa en función de la productividad del empleado. Marco teórico Ya hacia finales del s. XIX, Max Weber había vinculado el devenir de la modernidad a un proceso de racionalización fundado en la acumulación de conocimientos técnicos que se concretaría a través del dominio de la razón técnica y formal por sobre el pensamiento mágico. Weber acordó a la educación formal una función importante en la identificación de las formas de distribución del poder, que clasifica en clases, estamentos y partidos. En este sentido, expresa que los estamentos se definen como una pretensión de privilegios fundada en el modo de vida, las maneras formales de educación y el prestigio hereditario o profesional (Weber, 1992: 245). Más tarde, Emile Durkheim (1993) señaló que a medida que va avanzando la modernidad, se va acentuando cada vez más la especialización de las tareas. En la división del trabajo social se plasma el proceso de individualización por el que trascendió la sociedad moderna hasta convertirse en una red de relaciones de interdependencia. Desde una perspectiva contemporánea y local sobre mercado de trabajo, el economista Luis Beccaria distingue los estratos socioeconómicos en función del nivel educativo del jefe del hogar (Beccaria, 2002: 41). Así distingue cuatro niveles: bajo, cuando el jefe no completó la escuela primaria; medio bajo, cuando el jefe no completó la escuela secundaria; medio alto, cuando el jefe posee estudios secundarios completos o terciarios incompletos; y superior, cuando el jefe posee estudios terciarios completos. En el artículo citado, el autor muestra una tendencia consistente que revela que las tasas de desocupación fueron históricamente más bajas en el sector superior de la población; llegando a niveles de hasta 4 veces inferior entre los hogares cuyos jefes completaron estudios terciarios respecto de los hogares del sector bajo. Por otro lado, en los estudios sobre la desigualad social que concentran su atención tanto en la situación ocupacional como en los índices de pobreza, se suele tomar como factor de análisis el nivel educativo de la población encuestada o censada. Así, por ejemplo, para medir la pobreza en función de la Necesidades Básicas Insatisfechas, uno de los cinco indicadores tomados en cuenta es el de la capacidad de subsistencia del hogar, que supone que los bajos niveles educativos de los jefes de hogar repercuten de manera directa en las condiciones de vida porque derivan en desventajas para su inserción ocupacional.2 También las empresas de marketing que hacen estudios sobre consumo toman en cuenta el nivel educativo para delimitar los segmentos socioeconómicos de la población (Heredia, 2011: 3). Conclusiones Relación con el desempleo Las mayores posibilidades de acceso al empleo responden, entre otros factores, al nivel educativo superior de la población. El economista Luis Beccaria subraya que, durante la década de los ´90 en la Argentina, “[l]as tasas de desempleo resultaron similares para trabajadores de distinta calificación, con la excepción de los profesionales universitarios, cuya desocupación fue mucho más baja. […] la evolución del empleo de los diferentes grupos de ocupados estuvo relacionada 2 Ver http://www.indec.gov.ar/redatam/CPV2001ARG/docs/Definiciones%20CD%20Base%20CNPHV200 1_d.pdf, pág. 14. directamente con su nivel de escolaridad, pues aquellos menos educados enfrentaron los mayores obstáculos”. (Beccaria, 2002: 38-39). También surge de la información testimonial presentada que las empresas favorecen a los candidatos capacitados formalmente en la selección de los recursos humanos en tanto “se privilegia a la gente con estudios”. Relación con la remuneración En este aspecto, vale citar un estudio realizado por el BID sobre la situación del Gran Buenos Aires que señala que quienes tienen al menos seis años de educación tienen ingresos 35% superiores a quienes no poseen estudios. Los que tienen doce años de educación, que equivale a haber completado la escuela secundaria, tienen ingresos 80% superiores a quienes no la completaron y quienes han cursado estudios durante al menos diecisiete años (estudios universitarios completos) poseen ingresos 160% superiores a quienes no cuentan con estos estudios.3 Desde la perspectiva de la teoría de la estratificación social se puede concluir que al comparar los datos sobre la situación ocupacional de los graduados universitarios, es posible estimar la incidencia positiva que la educación universitaria tiene sobre el nivel de los ingresos. Si bien en los últimos 25 años el salario real cayó incesablemente casi un 40% en la Argentina, los ingresos de los jefes de hogar con nivel terciario completo fueron los únicos que experimentaron una recuperación parcial entre 1991 y 2000 (Beccaria, 2002: 45-46). Si bien de las entrevistas recabadas se desprende que los empleados se inclinan por creer que el nivel de remuneraciones se determina por la productividad y no por el nivel educativo, un estudio de 2005 basado en datos desagregados de la Encuesta Permanente de Hogares del Gran Buenos Aires, 1980-2002 onda octubre y onda mayo para 2003, señala que el nivel de remuneraciones de quienes poseen estudios superiores completos ha estado ininterrumpidamente entre 1980 y 2002 por encima de los grupos con primario incompleto, primario completo, secundario incompleto, secundario completo y superior incompleto (Benza y Gabriel, 2005: 103). Relación con las posibilidades de ascenso De los testimonios recabados durante las entrevistas surge claramente que la posibilidad de ascenso en empresas con grandes estructuras piramidales, como lo son los laboratorios y las compañías de telecomunicaciones multinacionales, es mucho mayor entre quienes cuentan con una capacitación profesional superior que entre quienes carecen de ella. El primer empleado 3 Datos extraídos de Etcheverry (2000). encuestado, quien no posee un título universitario, es contundente en este sentido: “Los cargos de más arriba los tienen los que tienen un título, nosotros no podemos”. Hacia el futuro A partir del proceso de desindustrialización que comenzó en la Argentina en la década del ´70 con la dictadura militar y que se prolongó durante los siguientes gobiernos democráticos, el sector de los trabajadores menos calificados se vio fuertemente afectado. En particular, una gran parte de estos trabajadores se vieron excluidos del mercado formal de trabajo y se volcaron masivamente a actividades informales por cuenta propia o en relación de dependencia en condiciones de precariedad ocupacional (Svampa, 2005: 167). Frente a este panorama nos preguntamos qué medidas se deberían articular para elevar los niveles educativos de la población con miras a alcanzar índices cercanos al 20% de graduados universitarios, teniendo en cuenta su gran influencia en las condiciones laborales en una sociedad donde el trabajo funciona como el gran integrador de las relaciones sociales, donde “el trabajo es más que el trabajo” (Castel, 1997: 390). Entre ellas, destaco la articulación entre los niveles terciarios y universitarios. En este aspecto creo que para elevar la tasa de egresados universitarios es indispensable fortalecer el sistema de articulación entre el ámbito terciario y el ámbito universitario de manera de permitir que las materias aprobadas en cursos de nivel superior terciario sean reconocidas en las carreras universitarias cuando el alumno egresado de un terciario no universitario persigue un título de grado.4 Bibliografía Beccaria, Luis (2002), “Empleo, remuneraciones y diferenciación social en el último cuarto del siglo XX”, en VVAA, Sociedad y sociabilidad en la Argentina de los 90, Buenos Aires, Biblos. Benza, Gabriela y Calvi, Gabriel (2005), “Concentración del ingreso y desigualdad social en la Argentina (1974-2003)”, en Realidad Económica, Nro. 214. Castel, Robert (1997), Metamorfosis de la cuestión social, Buenos Aires, Paidós. Durkheim, Emile [1893] (1993), La división del trabajo social, Buenos Aires, Planeta-Agostini. Etcheverry, Jaim (2000), La tragedia educativa, Buenos Aires, Fondo de Cultura Económica. 4 Extraído de la carta de aporte al debate sobre la reforma de la Ley de Educación de Gabriela Garrido, 12 de julio de 2006, publicada en http://debate-educacion.educ.ar/ley/aporte-deexpertos/gabriela_garrido_universidad_d.php Heredia, Mariana (2011), “Ricos estructurales y nuevos ricos en Buenos Aires: primeras pistas sobre la reproducción y la recomposición de las clases altas”, Estudios Sociológicos. (En prensa). Svampa, Maristella (2005), La sociedad excluyente, Buenos Aires, Taurus. Weber, Max [1922] (1992), Economía y Sociedad, Buenos Aires, Fondo de Cultura Económica. Anexo sobre las entrevistas Las entrevistas se formularon por correo electrónico. Los encuestados respondieron a las siguientes tres preguntas: 1) ¿Cómo cree que influye en el acceso a un puesto de trabajo poseer un título universitario? 2) ¿Cómo cree que influye en la estabilidad laboral poseer un título universitario? 3) ¿Cómo cree que influye en el nivel de la remuneración poseer un título universitario? Anexos estadísticos Cuadro 9.4 Total del país. Población de 14 años o más ocupada por categoría ocupacional según sexo y máximo nivel de instrucción alcanzado. Año 2001. Sexo y máximo nivel de instrucción alcanzado Población ocupada Obrero o empleado Sector Sector público privado Patrón Trabajador por cuenta propia Trabajador familiar Recibe No recibe sueldo sueldo Total Sin instrucción o primario incompleto Primario completo o secundario incompleto Secundario completo o terciario/ universitario incompleto Terciario completo Universitario completo Varones 10,913,187 1,358,328 4,604,698 3,235,166 2,313,793 170,358 700,513 717,788 5,340,836 720,679 2,463,945 1,648,336 680,754 54,323 266,423 233,739 2,210,473 341,242 999,860 535,633 109,486 11,821 49,336 39,411 257,845 59,905 124,621 60,259 787,866 927,129 6,813,031 413,408 311,726 1,170,449 246,854 261,022 3,282,953 34,620 91,649 506,327 81,494 252,244 1,630,349 4,224 4,694 73,952 7,266 5,794 149,001 Sin instrucción o primario incompleto Primario completo o secundario incompleto Secundario completo o terciario/ universitario incompleto Terciario completo Universitario completo Mujeres 972,583 3,239,599 1,879,144 127,630 473,528 351,463 476,369 1,656,240 926,547 42,369 207,244 173,498 280,642 789,632 371,875 8,264 36,188 25,261 37,309 76,767 30,500 227,415 494,290 4,100,156 84,426 133,402 1,143,344 81,147 142,650 2,057,883 18,615 64,601 174,427 39,708 148,492 580,124 1,640 2,599 35,534 1,879 2,546 108,844 Sin instrucción o primario incompleto Primario completo o secundario incompleto Secundario completo o terciario/ universitario incompleto Terciario completo Universitario completo 385,745 1,365,099 1,356,022 42,728 226,985 366,325 244,310 807,705 721,789 11,954 59,179 60,241 60,600 210,228 163,758 3,557 13,148 14,150 22,596 47,854 29,759 560,451 432,839 328,982 178,324 165,707 118,372 16,005 27,048 41,786 103,752 2,584 2,095 5,387 3,248 Fuente: INDEC. Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas 2001. Cuadro 7.12 Total del País. Población ocupada de 20 años y más que completó el nivel universitario por categoría ocupacional según disciplina y área de estudio. Año 2001. Disciplina, área de estudio y sexo Total Población ocupada de 20 años y más que completó el nivel universitario por categoría ocupacional Obrero o empleado Trabajador familiar Trabajador Total Patrón por cuenta Sector Sector Recibe No recibe propia público privado sueldo sueldo 927,129 150,806 Ciencias Económicas 148,192 Medicina y carreras auxiliares 124,521 Derecho y Ciencias Jurídicas 103,450 Humanidades y Ciencias Sociales 90,745 Ingeniería y carreras afines 50,409 Arquitectura y Diseño 33,145 Farmacia y Bioquímica 30,349 Ciencias de la Educación 29,136 Odontología 28,559 Ciencias Exactas y Naturales 27,663 Informática y Sistemas 24,340 Agronomía y carreras afines 15,269 Veterinaria 11,293 Idiomas extranjeros 6,861 Artes 26,677 No codificables 25,714 Declaración en blanco Fuente: INDEC, Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas 2001. 311,726 261,022 91,649 252,244 4,694 5,794 29,422 67,422 40,725 47,065 20,799 11,583 9,386 18,528 5,941 16,346 6,233 7,782 3,859 3,764 3,613 10,624 8,634 60,700 31,350 14,889 28,811 38,353 11,522 8,794 8,087 2,947 7,603 14,760 6,358 2,467 4,728 1,621 9,006 9,026 18,385 8,879 14,457 4,604 12,113 6,322 7,276 923 3,720 1,475 1,586 3,757 2,922 553 284 2,073 2,320 40,060 39,626 53,429 21,769 18,577 20,168 7,233 2,529 16,326 2,866 4,821 5,791 5,760 2,157 1,256 4,547 5,329 1,238 338 418 468 422 368 174 96 80 101 120 362 122 36 32 154 165 1,001 577 603 733 481 446 282 186 122 168 143 290 139 55 55 273 240 Cuadro 7.11 Total del País. Población de 20 años y más que completó el nivel universitario por grupos de edad y condición de actividad según disciplina y área de estudio. Año 2001. Población de 20 años y más que completó el nivel universitario por grupos de edad Población Disciplina, área de estudio y sexo Total Total 20 a 29 años Condición de actividad Activos Inactivos 1,142,151 995,372 Ciencias Económicas Medicina y carreras auxiliares Derecho y Ciencias Jurídicas Humanidades y Ciencias Sociales Ingeniería y carreras afines 180,374 162,497 17,877 177,030 155,074 145,195 Arquitectura y Diseño Total Condición de actividad Activos Inactivos Total 60 a 64 años Condición de actividad Activos Inactivos Total Condición de actividad Activos Inactivos 12,135 34,294 Condición de actividad Activos Inactivos 767,566 18,479 35,549 33,370 2,179 128,132 120,065 8,067 6,004 4,764 1,240 3,999 2,253 1,746 21,956 22,162 19,803 2,359 127,383 119,780 7,603 9,567 7,763 1,804 7,474 129,852 15,343 20,919 19,588 1,331 104,197 98,634 5,563 7,292 5,891 1,401 132,187 112,814 19,373 21,195 19,310 1,885 96,790 87,189 9,601 5,660 3,710 111,787 98,383 13,404 8,909 8,365 544 83,599 80,309 3,290 6,332 65,399 57,862 7,537 10,588 9,583 1,005 49,396 45,062 4,334 2,236 Farmacia y Bioquímica 40,951 34,998 5,953 4,462 4,126 336 29,767 27,791 1,976 Ciencias de la Educación 37,529 32,316 5,213 6,701 6,082 619 28,151 25,350 Odontología Ciencias Exactas y Naturales 35,944 30,533 5,411 5,575 5,081 494 23,494 35,668 30,331 5,337 3,847 3,506 341 Informática y Sistemas Agronomía y carreras afines Veterinaria 32,247 29,994 2,253 7,492 7,049 443 28,602 25,939 2,663 3,341 3,107 17,103 15,895 1,208 1,964 14,899 11,995 2,904 2,218 9,697 7,554 2,143 No codificables 36,719 29,615 Declaración en blanco 40,820 29,720 Total 15,815 59,764 Condición de actividad Activos Inactivos 15,781 43,983 6,690 2,045 4,645 4,566 2,908 10,444 3,162 7,282 4,620 2,916 1,704 8,167 2,823 5,344 1,950 3,086 1,370 1,716 5,456 1,235 4,221 5,101 1,231 4,683 2,442 2,241 8,264 2,166 6,098 1,785 451 1,494 883 611 1,685 549 1,136 2,099 1,592 507 1,517 799 718 3,106 690 2,416 2,801 1,031 570 461 606 183 423 1,040 131 909 22,113 1,381 2,340 1,784 556 1,796 932 864 2,739 623 2,116 26,807 24,749 2,058 1,591 1,142 449 977 419 558 2,446 515 1,931 24,279 22,659 1,620 271 198 73 122 59 63 83 29 54 234 22,879 21,731 1,148 727 587 140 382 214 168 1,273 300 973 1,811 153 14,088 13,519 569 386 329 57 206 127 79 459 109 350 2,095 123 10,567 9,228 1,339 644 342 302 453 160 293 1,017 170 847 1,530 1,368 162 6,397 5,549 848 557 339 218 443 171 272 770 127 643 7,104 6,459 5,780 679 24,255 21,542 2,713 1,691 1,049 642 1,293 568 725 3,021 676 2,345 11,100 7,413 5,759 1,654 27,690 22,296 5,394 1,470 817 653 1,143 417 726 3,104 431 2,673 Fuente: INDEC, Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas 2001. 37,763 Total 70 años y más 14,541 827,871 Artes 60,305 49,898 65 a 69 años 155,783 Idiomas extranjeros 146,779 170,324 30 a 59 años
© Copyright 2025