1. Educación

Curar un problema frecuente aunque difícil de sobrellevar
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LAS PÁPULAS PERLADAS
EN EL MIEMBRO VIRIL
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LAS PÁPULAS PERLADAS EN EL MIEMBRO VIRIL
SUMARIO
Capítulo I.
Consideraciones preliminares.
El problema que vamos a tratar no es grave en sí mismo, como lo iremos
comprobando a lo largo de todo este informe. Sin embargo, en el hombre que
tiene el problema se produce un verdadero padecimiento psicológico. Sucede
que tener pápulas perladas no es agradable para el que las porta a la hora de
la intimidad sexual con el otro.
Capítulo II.
¿Qué son las pápulas perladas?
Las pápulas perladas son un grupo de protuberancias o bultos muy pequeños
en el pene, más precisamente en la base del glande o bálano. No segregan pus
ni serosidad. Tampoco resultan dolorosas, a lo sumo pueden molestar con el
roce. Las dificultades que presentan no se relacionan con las molestias que
reportan sino porque su aspecto puede hacer pensar en que se trata de una
afección riesgosa o contagiosa.
Capítulo III.
¿Por qué se originan las pápulas perladas?
No se conoce muy bien de dónde vienen las pápulas perladas, simplemente
parecieran una condición del cuerpo humano masculino. Para saber que no se
transmiten sexualmente no hay más que comprobar que hasta un niño
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entrando en la etapa de la pubertad puede tener pápulas perladas, antes de
haber tenido contacto sexual con el otro sexo o con personas de su mismo
sexo.
Capítulo IV.
¡Basta de temores! Los NO rotundos que hay que saber.
Este informe vamos a centrarlo en la curación por métodos naturales no
invasivos, que seguramente es el anhelo de quienes padecen las pápulas
perladas. Pero le vamos a dedicar un amplio espacio a derribar ciertos mitos
que no hacen más que crear preocupaciones infundadas. Estamos seguros que
este capítulo va a interesar tanto como el dedicado a los tratamientos
naturales y efectivos, ¿o no?
Capítulo V.
Fundamental: hay que tener un diagnóstico certero.
Todas las recomendaciones y tratamientos que vayamos a exponer en lo
sucesivo están referidos a las pápulas perladas y a ninguna otra manifestación
orgánica, por más parecida que resulte. Si queda aunque sea algún ínfimo
resquicio de duda acerca de que lo que se padece son las pápulas perladas,
hay que consultar al médico dermatólogo o al médico urólogo para disipar las
dudas.
Capítulo VI.
Los tratamientos médicos habituales.
Existen distintos tratamientos, sobre todo los que se llevan a cabo en el
consultorio del médico dermatólogo. Se suelen quemar las protuberancias a
través del frío o del calor, según sea el procedimiento elegido a emplear.
Vamos a referirnos a los métodos habituales de exterminar las pápulas
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perladas, sin obviar mencionar sus ventajas así como las desventajas que
pueden ocasionar.
Capítulo VII.
Comprobado con éxito: Existen tratamientos accesibles y
naturales.
Una vez que hayamos brindado toda la información necesaria para saber más
acerca de las pápulas perladas, nos introduciremos de lleno en los métodos
que son naturales. Cada uno de los tratamientos que vamos a exponer han
reportado resultados satisfactorios a quienes los han practicado, siempre que
hayan tenido la paciencia junto con la debida rigurosidad que requiere su
aplicación.
Capítulo VIII.
Melaleuca alternifolia, un aceite esencial prodigioso.
Desde tiempos remotos se conocen los beneficios que reporta la melaleuca
alternifolia en afecciones diversas de la piel. Como todo este tipo de
sustancias naturales, no provoca efectos secundarios o colaterales, salvo que
pueda haber una reacción por dosis muy excesivas. Y los resultados excelentes
no se hacen esperar por demasiado tiempo.
Capítulo IX.
Las propiedades emolientes del aceite de ricino.
Casi seguro que la mayoría conoce las propiedades purgantes y depurativas
que posee el aceite de ricino, así se lo ha utilizado en innumerables
oportunidades desde el fondo de los tiempos. Sin embargo, se podría decir
que el aceite de ricino es de amplio espectro. Entre otras cosas, por fortuna
está comprobado su poder para deshacerse con éxito de las pápulas perladas.
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Capítulo X.
La increíble efectividad de la crema dental blanqueadora.
A veces nos esmeramos en encontrar remedios farmacéuticos que son de
venta libre, leemos sus prospectos detenidamente y si nos parece que nos van
a ayudar en la patología que tenemos no dudamos en adquirirlos. Cuesten lo
que cuesten. Aquí vamos a hablar de un producto que no es un remedio, que
no está en la góndola de productos medicinales de venta libre conocida como
productos OTC ni nada por el estilo. Y que por sobre todas las cosas es muy
accesible. ¡Si hasta es muy posible que no haya que salir a comprarlo!
Capítulo XI.
Hay otras opciones de tratamientos naturales.
Queremos brindar varias opciones de tratamientos naturales, para que cada
uno elija la que considere más conveniente o para que confíe más en una de
ellas. Todas las opciones de tratamiento natural que brindamos han sido
comprobadas en la práctica y han reportado resultados óptimos en un lapso
breve de tiempo. Cada organismo humano es único y no reacciona de manera
igual ante los mismos estímulos. Hay quienes necesitan más tiempo que otros
en las aplicaciones naturales. Vale decir, hay quienes necesitan aplicar un
tratamiento de mayor duración para alcanzar los resultados esperados.
Capítulo XII.
Consideraciones últimas.
Poco nos queda por agregar de utilidad hacia el final de este informe: Curar
un problema frecuente aunque difícil de sobrellevar. LAS PÁPULAS
PERLADAS EN EL MIEMBRO VIRIL. Si alguien ha tenido la capacidad de
soportar las pápulas perladas por un determinado tiempo, ¿qué sacrificio le
puede implicar probar e insistir con algunos de los tratamientos naturales que
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vamos a proponer? ¡A no distraerse con búsquedas infructuosas! ¡Y adelante
con la lectura de este informe, sin dilaciones!
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Capítulo I.
Consideraciones preliminares.
Las pápulas perladas son uno de esos problemas que se viven de manera
oculta y solitaria, tanto con sentimiento de vergüenza como con temor a que
los otros lleguen a enterarse de lo que se intenta ocultar. A pesar de que cada
vez se tiene acceso a mayor información, por lo que quien padece el
problema casi seguro que pronto sabrá que lo que tiene no se lo va a
contagiar a nadie, tanto por el aspecto visible como por el lugar en donde
están ubicadas las pápulas perladas, es un problema que sigue turbando el
ánimo.
Por lo general todos los problemas en la piel inquietan a quienes los padecen;
esto es así. Y si a esto le sumamos que las pápulas perladas son un problema
en la piel del pene, un órgano con tanta sensibilidad y con una alta dosis de
connotación viril, esto se constituye en una verdadera pesadilla para el
hombre que las sufre. Y si a esto le agregamos las dudas que puedan generar
en una pareja sexual, la pesadilla va en aumento y cae como una sombra
tenebrosa en la vida cotidiana de la persona afectada.
Como las pápulas perladas suelen aparecer en edad temprana, generan aún
mayor inquietud en la mente de una persona que se está modelando con
nuevas percepciones y experiencias. Piénsese en un púber que un buen día
descubre en su pene unas especies de granitos (que en realidad no son
granitos) antiestéticos. Si los granitos de la cara ya le resultaban difíciles de
portar, más aún lo serán estas especies de granitos en su miembro viril. La
cara con granitos la va a tener que seguir exponiendo, mal que le pese. En
cambio su sexo se transformará en algo posible y digno de ocultar ante otras
personas. Y sus deseos sexuales serán reprimidos una y otra vez.
De verdad, ¡un verdadero padecimiento! Justamente en esa edad donde se
viven las primeras experiencias sexuales las pápulas perladas se constituirán
en un problema emocional difícil de transitar. Las relaciones sexuales con el
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sexo opuesto o con el mismo sexo, de acuerdo a las inclinaciones, se harán
cada vez más complicadas de abordar y más aún de concretar. El círculo
vicioso encerrará a quien padece las pápulas perladas: no querrá vincularse
con nadie por miedo a que lo rechacen, a la vez que los otros pueden
rechazarlo por ignorancia. Y se sabe, la ignorancia que genera el
desconocimiento es una de las ignorancias más altamente discriminatorias.
Qué duda cabe que alguien que tenga pápulas perladas pueda sentirse
discriminado.
La cuestión es que para alguien que está en una etapa de desarrollo y de
crecimiento, que de por sí es difícil, tanto o más le resultará difícil si ha
descubierto en su pene a las pápulas perladas. Y no solo evitará los
encuentros para mantener relaciones sexuales sino que puede llegar a evitar
hasta la ida al club para practicar y disfrutar de un deporte con los
compañeros. El hecho de que tenga que desvestirse para ducharse o todo
aquello que le implique que puedan verlo desnudo, le generará tanta
preocupación que terminará eludiendo los encuentros sociales, lo que no
redundará en beneficios para el carácter del joven. Ni hablar si el joven en
cuestión es de naturaleza tímida y retraída, porque en ese caso este problema
puede generarle, sin exagerar, el auto-encarcelamiento y el padecimiento en
el más absoluto encierro y soledad. Va a ser difícil que un joven en esas
condiciones pueda adquirir la debida madurez emocional necesaria para la
vida que apenas ha comenzado a despegar.
En el caso de que las pápulas perladas aparezcan un poco más tarde que en la
etapa de la pubertad o en la etapa de la adolescencia, también se
constituirán en un verdadero problema difícil de sobrellevar. Se tenga pareja
estable y peor aún si se trata de una conquista esporádica, mostrar el órgano
sexual con pápulas perladas será un escollo difícil de superar. Por ahí si se
trata de una pareja estable puede haber una mejor comprensión y
acompañamiento para encontrar una solución juntos, aunque mientras se
averigua la índole de las pápulas, es muy posible que las relaciones sexuales
traten de evitarse por temor a contagiarse algo. O en el peor de los casos, no
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resultaría extraño que comiencen las dudas y recriminaciones sobre la
fidelidad, en el convencimiento de que “eso” desagradable se lo transmitió
otra persona, en una relación ajena a la pareja.
Así es como quien tiene el problema de las pápulas perladas pueda arribar a la
consulta médica muy deprimido, le sobran los motivos para ello. En primer
lugar, siempre cuesta hacer este tipo de consultas. Casi seguro que la persona
afectada concurrirá en la creencia de que tiene algo grave y complicado. La
consulta médica puede disiparle los temores en ese sentido. Si el facultativo
le diagnostica pápulas perladas, de inmediato le aclarará que no tiene por qué
preocuparse por ese diagnóstico. Hasta le puede llegar a hablar de la cantidad
de hombres que hay en su misma situación, sin riesgos para la propia salud ni
para la salud del prójimo.
Y ya no se sentirá tan solo en un problema que alguien de palabra autorizada
le dice que es común en el género masculino. El paciente se irá con la
sensación de que se sacó un peso de encima porque lo que tiene en su pene
no se contagia a otras partes de su cuerpo ni se transmite sexualmente. No
hay riesgos para él y tampoco hay riesgos para los otros. Sin embargo,
persistirá en él la sensación de que el problema que tiene lo está aislando
socialmente y está menoscabando su propia estima. Si no resuelve de una vez
por todas el problema, cada vez se sentirá peor anímicamente y se sumirá en
un laberinto oscuro, donde le costará encontrar la salida. Y la mente es la
sede tanto del bienestar como de la enfermedad. Hay que tener cuidado de
no dejarse estar y originar una verdadera dolencia de origen psicosomático.
Hay muchas probabilidades de que la tranquilidad que por una parte le
infundió el médico se trastoque por la intranquilidad de saber que puede
llegar a vivir años o toda su vida con las pápulas perladas, salvo que haga algo
para sacárselas de encima. Resulta raro que se vayan por sí mismas tal como
vinieron, salvo que se aguarde con calma llegar a una edad avanzada, porque
en los ancianos este problema es poco frecuente y tiende a desaparecer. Si se
está en la etapa de la pubertad, la adolescencia, la juventud o incluso la
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mediana edad, no es para nada alentador esperar tanto tiempo para ver
desaparecer o atenuarse las pápulas perladas. Así que si ya se animó a una
primera consulta bien puede volver por una segunda consulta, para esta vez
buscar más precisiones en saber cómo sacarse de encima las pápulas perladas.
El médico dermatólogo le dirá todo el arsenal con que cuenta la medicina
tradicional para combatir las pápulas perladas, desde la laserterapia hasta las
electrocaturerizaciones. Lo que lo podrá hacer pensar en los temores que
embargan a la hora de someterse a estos procedimientos nada menos que en
el pene. ¿Y si se pierde la sensibilidad? ¿Y si se pierde la erección?
Sobrevendrán temores, temores y más temores. Y como si fuera poco,
también habrá que contar con una buena suma de dinero, a no olvidar ese
detalle tan importante. Y en todo caso, ¿los buenos resultados persistirán?
Habrá qué ver, no se puede predecir de antemano. Hay que ir paso a paso, no
hay que apresurarse con los pronósticos a largo plazo. Tal vez con el tiempo el
problema pueda regresar, si se tiene la predisposición a padecerlo… La
persona se irá de la consulta con estos y muchos interrogantes, quizás con
más ansiedad que con la que llegó. Y si puede afrontarlo económicamente y
se anima tal vez se someta a algún tratamiento invasivo, con tal de intentar
deshacerse de las pápulas perladas.
En fin, ya nos extenderemos en el capítulo correspondiente acerca de cada
pro y de cada contra que tienen los procedimientos que emplea la medicina
tradicional para quitar las pápulas perladas. Lo que queremos adelantar en
esta introducción al tema de las pápulas perladas que estamos considerando
es que nos encontramos en condiciones de ofrecer soluciones naturales,
probadas y certeras. La primera ventaja que tendrá cualquiera de esas
soluciones que expongamos es que se podrán llevar a cabo sin salir de casa y
sin ninguna ayuda adicional, con sustancias que no traerán inconvenientes
secundarios aunque sí reportarán beneficios estables.
Y bien, ¿por qué no probar? No va a hacer falta demasiado tiempo para
observar los logros satisfactorios. En algunos hombres los tratamientos dan
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resultados bastante más pronto que en otros. De hecho, sabemos que cada
organismo responde de diferentes maneras a las terapéuticas. Así como
también algunos de estos recursos terapéuticos naturales serán más efectivos
en algunos hombres que en otros. Quizás alguien que ha probado con uno de
estos tratamientos y tarda en ver resultados positivos, en vez de seguir
insistiendo con el mismo tratamiento hasta notar la mejoría pruebe con otro
tratamiento y se sorprenda con resultados mucho más rápidos. Lo que no
conviene es practicar dos o más tratamientos a la vez, porque puede haber
alguna interacción inconveniente o sencillamente porque no se podrá apreciar
cuál de los tratamientos aplicados ofrece los mejores resultados.
Como sucede cada vez que tenemos un problema en nuestro cuerpo, lo mejor
es informarnos. El conocimiento despeja dudas en tanto da mayor seguridad a
la hora de obtener lo que se quiere. Así que vamos a comenzar por brindar
toda la información que se necesita para conocer a un temible enemigo del
hombre: las pápulas perladas. Y a continuación vendrá la manera eficaz y
duradera de vencer a ese enemigo.
Invitamos a transcurrir la lectura del presente libro electrónico con mucha
atención, desde el comienzo hasta el final. Para vencer al archi enemigo
llamado pápulas perladas hay que hacerlo con las mejores armas: el
conocimiento y la perseverancia en el tratamiento natural. Queremos infundir
ánimo a quienes tienen las pápulas perladas y ansían curarlas con
tratamientos naturales. Tenemos la certeza de que pronto sobrevendrá el
éxito, si se hacen las cosas tal como se indican en detalle en este informe.
Muchas gracias por elegir esta lectura con la debida fundamentación que el
caso requiere, aunque sobre todo agradecemos el empeño que se ponga en
llevar a la práctica alguno de los tratamientos naturales que vamos a
explicitar.
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Capítulo II.
¿Qué son las pápulas perladas?
Las pápulas perladas están constituidas por protuberancias muy pequeñas, de
coloración carne, rosadas o blanquecinas, que circundan la base del glande,
bálano o cabeza del miembro viril o pene. Justamente su adjetivo de perladas
ha sido puesto en razón de que se asemejan en su aspecto físico a medias
perlas, que se esparcen en una o más filas rodeando el perímetro del glande.
Las pápulas perladas tienen un nombre científico aunque menos habitual,
quizás por su difícil pronunciación: hirsuties papillaris genitalis. Lo cierto es
que están comprendidas en el ámbito de los problemas dermatológicos o del
estudio médico de los problemas de la piel. Tanto comprometen la capa más
superficial de la piel, la epidermis, como la capa interna más gruesa que se
encuentra por debajo de la epidermis, la dermis.
Esas pequeñas protuberancias solo son padecidas por los hombres. No se da
este problema con idénticas características en las mujeres de ninguna edad,
ni en el área de la vagina ni siquiera en otras partes del cuerpo. Como ya
dijimos, las pápulas perladas se localizan en derredor de la base del glande,
bálano o cabeza del miembro viril. Nos resta agregar que, aunque puede
darse, muy rara vez suelen esparcirse por toda la superficie del glande.
¿Dentro de qué edades suelen estar comprendidos los hombres que tienen
pápulas perladas? Por lo general son púberes, adolescentes u hombres de
mediana edad, en un período comprendido entre los 12 y los 45 años de edad.
Según datos aproximados, casi de un cuarenta a un ochenta por ciento de los
hombres entre las edades que acabamos de mencionar suelen tener pápulas
perladas, en forma más o menos prolífica. La mayoría de los hombres por
diversas razones no realiza una consulta médica por ello. También la mayoría
de los hombres no accede a un tratamiento médico eficaz y con resultados
permanentes, por lo que una buena parte de su vida convive con este
problema y sus lamentables consecuencias. Al llegar a la vejez, las pápulas
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perladas suelen desaparecer por completo o atenuarse hasta hacerse casi
imperceptibles.
Si bien el color de las pápulas perladas semeja al resto de la piel de esa zona
del pene y el tamaño es poco más que el de la cabeza de un alfiler, resultan
visibles con la simple observación. Y también resultan notables a la
percepción del tacto, aunque de consistencia suave y sin rugosidades.
No reportan síntomas evidentes ni provocan infecciones de ningún tipo. No
acusan dolor ni leve ni agudo. Solo la incomodidad al tener pápulas perladas
se puede generar con el roce de las ropas. Asimismo, se puede sentir alguna
molestia, sobre todo cuando se está pendiente del problema, al momento de
tener relaciones sexuales y más aún cuando se utiliza un condón o
preservativo, que comprime y provoca roce en la zona afectada. Sucede que
las pequeñas protuberancias perladas son lo suficientemente sensitivas como
para acusar algunas molestias, que no por ello provocan una disfunción
eréctil, una eyaculación precoz ni nada que se le parezca. De ninguna manera
impiden el coito. Si alguien tiene pápulas perladas y además padece de
disfunción eréctil y/o eyaculación precoz, le decimos que desvincule los
problemas porque la única relación que tienen es que se manifiestan a nivel
del pene. Lo cierto es que las pápulas perladas no provocan disfunción eréctil
y/o eyaculación precoz ni son consecuencia de la disfunción eréctil ni de la
eyaculación precoz.
Las pápulas perladas tienen carácter benigno en cuanto a afección orgánica y
por ende, se las pueden tildar de inofensivas y de una cuestión puramente
estética. Sin embargo, no resultan tan inofensivas cuando generan tamaña
preocupación en el varón que las padece. Más allá de que se deben
desacreditar los temores sin fundamentos en cuanto a los problemas orgánicos
que puedan generar, no hay que desestimar las preocupaciones de índole
psicológico que llegan a provocar las pápulas perladas.
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Y aunque los médicos aseguren el carácter benigno y puramente estético de
las pápulas perladas, para muchos hombres pueden ser uno de los motivos de
mayor preocupación en sus vidas. Por ello le dedicamos este informe
minucioso, porque sabemos que las pápulas perladas no son un problema
menor y no nos parece justo que alguien tenga que resignarse a vivir con
ellas. O que alguien tenga que resignarse a padecer con ellas.
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Capítulo III.
¿Por qué se originan las pápulas perladas?
Las causas originarias de las pápulas perladas en el hombre no se conocen a
ciencia cierta. Sin hablar de evidencias científicamente comprobadas, se
especula con el hecho de que este problema se da más en los hombres que no
han sido circuncidados.
Para aclarar un poco más el asunto, ¿en qué consiste la circuncisión? La
circuncisión es el procedimiento quirúrgico por el cual se extirpa el prepucio
del pene, que es la misma piel del pene que recubre al glande, bálano o
cabeza del miembro viril. Con la circuncisión se deja al descubierto el glande.
En cierta forma, la circuncisión resulta más conveniente para mantener la
higiene y, por lo tanto, puede llegar a evitar infecciones urinarias. En algunas
religiones esta operación forma parte de un rito (religión judía y religión
mahometana).
Claramente, las pápulas perladas no tienen su origen en ningún tipo de
enfermedad de transmisión sexual, ni siquiera su manifestación guarda
relación alguna con la actividad sexual. Tampoco las pápulas perladas se
adquieren por contagio de ningún tipo. Estas cuestiones quedan descartadas
de plano.
Muchas veces se puede pensar que estas pequeñas protuberancias pueden
deberse a glándulas grasas que están obstruidas. Pero no es así. Hay otro tipo
de granitos que se forman por glándulas sebáceas obstruidas y reciben el
nombre de otra afección; ya diferenciaremos más adelante a las pápulas
perladas de otras patologías. Las pápulas perladas no son granitos. No hay que
presionar las protuberancias para intentar desobstruirlas, solo se conseguirá
inflamar y resentir la piel. Tampoco hay que intentar arrancar las
protuberancias, pincharlas con algún elemento punzante o rasparlas para
mermar su tamaño hasta exterminarlas, porque ello podría originar irritación,
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lastimaduras con sangrado e incluso una infección, síntomas que de por sí
nunca tienen las pápulas perladas.
También se ha llegado a pensar que las pápulas perladas podrían originarse
por la falta de higiene íntima. Nada más alejado de ello. La higiene en el
pene y en particular en la zona del glande es fundamental para evitar muchos
otros problemas, aunque nada tiene que ver con el hecho de que aparezcan y
se reproduzcan las pápulas perladas.
Como en tantos otros problemas orgánicos y psicológicos, ¿podemos hablar de
causas hereditarias o genéticas en el caso de las pápulas perladas? Todos los
hombres
nacen
con
información
genética
donde
están
todas
las
potencialidades. Y a veces esas potencialidades se expresan o se hacen
visibles, mientras que otras veces esas potencialidades permanecen latentes y
nunca llegan a expresarse. En concreto, no resultaría extraño que alguien que
tenga el problema de las pápulas perladas descubra que su padre o que su
abuelo las tenía (si es que no han sido un secreto celosamente ocultado). La
predisposición genética condensa hasta las potencialidades menos pensadas,
que en algún período de la vida se podrán expresar o que, por el contrario, no
se lograrán expresar jamás.
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Capítulo IV.
¡Basta de temores! Los NO rotundos que hay que saber.
Todos los problemas que se centran en los órganos sexuales suelen generar
temores y prejuicios al por mayor, la más de las veces sin ningún fundamento.
Como las pápulas perladas se manifiestan en el pene y ello de por sí las hace
más preocupantes que si estuvieran en otra parte del cuerpo, queremos
despejar todas las sospechas o consideraciones que puedan hacerse sin ningún
asidero. Hay que leer atentamente lo que sigue y perder de una vez y para
siempre todos los miedos, que no contribuyen en nada al mantenimiento de la
salud.
Ya dijimos en otros párrafos que las pápulas perladas no tienen su origen en la
falta de higiene ni tampoco en el contagio. Queremos insistir en esto del
contagio, porque la verdad es que las pápulas perladas no se producen por
contagio de otra afección que se encuentra en el propio cuerpo, ni tampoco
por contagio de ningún tipo proveniente de otra persona. Las pápulas perladas
no se producen por contagio sexual, ni por contagio directo por tener
contacto con otra persona que tiene el problema. Menos aún se provocan por
contagio indirecto, como podría ser utilizar una toalla o la ropa interior que
haya usado una persona con pápulas perladas. Ni se contagian por sentarnos
en un asiento donde estuvo sentado alguien con pápulas perladas. ¡Nada más
alejado de estas suposiciones exageradas!
Lo importante es recalcar que las pápulas perladas no son una enfermedad de
transmisión sexual. No tienen ninguna relación con el Sida, con la hepatitis B
ni con el Virus de Papiloma Humano (VPH) o Human Papiloma Virus, en inglés
(HPV).
El
VPH
es
una
enfermedad
muy
contagiosa
y
transmisible
fundamentalmente por vía sexual. En ese sentido no hay por qué inquietarse,
porque nadie transmitirá las pápulas perladas si las tiene ni tampoco recibirá
el contagio de otra persona que tenga las pápulas perladas.
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Asimismo, tampoco hay que asustarse al observar las protuberancias perladas
pensando en tumores malignos o en alteraciones en la piel de pronóstico
dudoso. Las pápulas perladas nunca son lesiones cancerosas. Podemos estar
seguros que no son cáncer, de ninguna manera, tanto es así que jamás se
pediría una biopsia o análisis microscópico de una pápula perlada.
Tampoco las pápulas perladas deben confundirse con la dolencia conocida
como granos o manchas de Fordyce (que en realidad son granos pequeños y no
manchas). Las pápulas perladas están acotadas a la circunferencia del glande
y a lo sumo se esparcen por todo el glande, mientras que los granos o
manchas de Fordyce, que tienen entre uno y tres milímetros en su diámetro y
son de color rojizo o blanquecino, se extienden por el tronco del pene y por el
escroto, así como pueden aparecer en otras zonas del cuerpo lejos del sexo,
como los labios bucales, las encías o la zona interior de la boca. Y otra de las
características diferenciadoras entre las pápulas perladas y los granos o
manchas de Fordyce es que esta última afección puede involucrar tanto a los
hombres como a las mujeres, también en diferentes partes del cuerpo. Las
similitudes entre las pápulas perladas y los granos o manchas de Fordyce
radican en que ambos son asintomáticos en cuanto al dolor, así como tampoco
se provocan por contagio sexual ni por contagio de ningún tipo.
Y para evitar otra equivocación frecuente, aclaramos que las pápulas perladas
no son glándulas de Tyson o prepuciales, que suelen aparecer en la unión del
prepucio con el glande, pueden ser seborreicas y tienden a desaparecer con la
edad. Las células de las glándulas de Tyson o prepuciales producen el
esmegma, que es una secreción de tipo graso. Por el contrario, las pápulas
perladas no producen secreción de ningún tipo. De todos modos, es muy
habitual que se tienda a denominar las pápulas perladas como glándulas de
Tyson.
Y ya que estamos en esto de lo que no son las pápulas perladas, aclaremos
que tampoco se las debe confundir con las llamadas glándulas de Littre. Las
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glándulas de Littre o glándulas uretrales se ubican en la uretra, canal que
conduce la orina fuera de la vedija y que atraviesa el pene.
En resumen, para disipar los temores sin fundamento y a fin de quitarles todo
el peso que puedan tener sobre el fluir del pensamiento negativo, resulta muy
importante tener en cuenta los siguientes NO rotundos acerca de las pápulas
perladas. A saber:

Las pápulas perladas NO constituyen una enfermedad de transmisión
sexual. No se transmiten ni por una relación vaginal, ni por una relación
anal, ni tampoco por mantener sexo oral.

Las pápulas perladas NO son signo de una patología o enfermedad
subyacente.

Las pápulas perladas NO se provocan por la falta de higiene en los
genitales.

Las pápulas perladas NO son verrugas genitales.

Las pápulas perladas NO son herpes genitales.

Las pápulas perladas NO son contagiosas, ni en forma directa ni en
forma indirecta.

Las pápulas perladas NO son glándulas de Tyson.

Las pápulas perladas no son manchas o granos de Fordyce.

Las pápulas perladas no son glándulas de Littre.

Las pápulas perladas NO guardan relación con el Virus de Papiloma
Humano (VPH) o Human Papiloman Virus (HPV).
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
Las pápulas perladas NO son una balanitis o una inflamación del bálano,
glande o cabeza del pene.

Las pápulas perladas NO son un cáncer ni constituyen algún signo de la
existencia de un tumor maligno de ningún tipo.

Las pápulas perladas no constituyen un signo de padecimiento del virus
de Sida.

Las pápulas perladas no se relacionan con la enfermedad infecciosa
conocida como hepatitis B.

Las pápulas perladas NO producen disfunción eréctil.

Las pápulas perladas NO producen eyaculación precoz.

Las pápulas perladas NO afectan el coito.

Las pápulas perladas NO segregan ningún líquido.

Las pápulas perladas NO sangran.

Las pápulas perladas NO producen picor.
Obsérvese cuántos NO hemos enunciado (quizás hasta nos hayamos olvidado
de alguno), como para perder los temores principales que se tengan acerca de
las pápulas perladas. Más vale ser racionales y desterrar de nuestra mente los
mitos que nos crean preocupaciones, a permanecer en la ignorancia y
mantener aquellos temores que no se basan en datos de la realidad.
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Capítulo V.
Fundamental: hay que tener un diagnóstico certero.
Si un hombre de cualquier edad se observa pequeñas protuberancias en la
base del glande, bálano o cabeza del pene, de acuerdo a las descripciones que
hemos venido haciendo, pero aún así tiene sus dudas sobre el diagnóstico, lo
mejor que puede hacer para despejar dichas dudas es asistir a una consulta
con un médico dermatólogo o con un médico urólogo. Ambos especialistas
estarán en condiciones de darle un diagnóstico certero con la simple
observación del problema. Es muy posible que no sean necesarios otro tipo de
análisis.
Lo conveniente al elegir un profesional para la consulta es conocer a alguien
por referencia directa de otro paciente. Siempre hay que intentar atenderse
con un profesional de excelencia probada, pero en el caso de ir a consultar
por las pápulas perladas se requiere muy especialmente que el profesional en
cuestión nos caiga bien en el trato y que no nos sintamos incómodos con él,
no solo para exhibir el problema que nos aqueja sino para animarnos a hacerle
las preguntas que nos gustaría que nos responda. El buen clima que se cree en
la consulta tanto traerá cierta tranquilidad como disipará las dudas.
Como el propósito de este libro electrónico es brindar tratamientos naturales,
accesibles y sin que generen problemas secundarios, lo que queremos
recomendar muy encarecidamente es que se tenga la certeza de que lo que se
tiene son pápulas perladas antes de iniciar cualquiera de los tratamientos
propuestos. Por ello, ante la más pequeña duda lo conveniente es asistir a la
consulta médica. Si no son pápulas perladas los tratamientos que estamos
proponiendo quedan invalidados, a no olvidar esta recomendación muy
importante. Nunca hay que arriesgarse a probar tratamientos que no son los
indicados para curar el problema que se tiene.
Si una persona asiste a la consulta médica para tener un diagnóstico certero,
no está demás que le haga al facultativo todas las preguntas que puedan estar
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inquietándolo.
También
puede
aprovechar
para
informarse
de
los
tratamientos que ofrece la medicina tradicional, aunque si es por esa
información aquí se la vamos a dar en el capítulo que sigue. Si se decide a
optar por algunos de los tratamientos quirúrgicos, la persona debe conocer en
detalle los procedimientos, como por ejemplo saber si el tratamiento irá
dirigido solo a las pápulas perladas o si se corre el riesgo de que se produzcan
daños en los tejidos circundantes. No olvidemos que las pápulas perladas
tienen dimensiones pequeñas, por lo que no sería extraño que al querer
eliminar una se elimine tejido adyacente. Asimismo, la persona interesada
debe informarse de las recomendaciones previas a la intervención, debe
conocer el tipo de anestesia que recibirá y cómo será el post operatorio, en
todo caso enterarse si tras el tratamiento quirúrgico podrá o no hacer todas
sus tareas habituales.
Lo que le convendría a la persona que intenta deshacerse de sus pápulas
perladas, para tener una idea actualizada y precisa, es recibir información de
los costos que implican cada uno de esos tratamientos, que con seguridad no
son cubiertos por ninguna obra social ni siquiera por la medicina prepaga.
Todo lo que se considera una cuestión estética por lo general no tiene
cobertura, aunque cada uno deberá averiguar al respecto. Además, hay que
saber que en algunos casos se requiere concurrir a varias sesiones para
exterminar las pápulas perladas, por lo que hay que poder estar seguros de
afrontar en el futuro todas las sesiones que sean necesarias para completar el
tratamiento integral. De nada valdrá comenzar un tratamiento para luego
tener que abandonarlo porque no se puede afrontar su costo.
De lo que es muy posible que nunca le hable el médico dermatólogo o el
médico urólogo es acerca de los métodos naturales comprobados que existen
para eliminar las pápulas perladas. De eso no se habla en un consultorio de
medicina tradicional, porque aunque el tema se conozca, cuesta admitir lo
que no está científicamente examinado con estudios registrados de
determinados números de casos. Sin embargo, las comprobaciones empíricas
existen y muchos médicos conocen este dato. Y cuando la medicina
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tradicional no tiene todas las respuestas que necesitamos para poder
curarnos, o tiene respuestas que pueden tener efectividad como la
laserterapia pero resultan inaccesibles por su costo, ¿por qué no probar con
tratamientos naturales que pueden resultar beneficiosos? Dejamos la
inquietud para que se evalúe, para que se vaya pensando y luego se decida lo
mejor.
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Capítulo VI.
Los tratamientos médicos habituales.
El médico dermatólogo puede recetar pomadas, lociones o cremas diversas
para aplicar en la zona de las pápulas perladas. En general, estos productos
no eliminan el problema de raíz y en forma definitiva. Quizás sirvan para
aliviar alguna molestia o picazón que se provoque con el roce en la zona del
glande. Pero nada más.
En cuanto a las intervenciones específicas a realizarse en el área donde están
las pápulas perladas, podemos mencionar las siguientes: la crioterapia con
utilización de nitrógeno líquido, el láser CO2 o láser de dióxido de carbono, la
electrofulguración o electroescisión y la radiofrecuencia. Vamos a precisar
cada uno de estos procedimientos a continuación.
Crioterapia con la utilización de nitrógeno líquido. Esta técnica quirúrgica
se basa en la destrucción del tejido de las pápulas perladas por aplicación de
frío intenso con nitrógeno líquido (por lo general menos de 196 grados
centígrados). Es un procedimiento que no requiere anestesia ya que no duele.
Puede requerir más de una sesión para eliminar todas las pápulas perladas
(dependerá de la cantidad). Después del tratamiento aparecerá en la zona de
destrucción de la lesión una pequeña ampolla, escara o costra, que no hay
que sacar. Cuando tenga que desparecer, se desprenderá sola. Si la escara se
desprende antes de que el área esté sanada, se puede provocar alguna
pequeña hemorragia.
Luego de la intervención se recomiendan tres semanas de abstinencia sexual.
¿Cuáles son los resultados de la aplicación de la crioterapia con nitrógeno
líquido en pápulas perladas? Los resultados son variados, para algunos este
procedimiento ha sido efectivo y para otros no tanto. Y la posibilidad de que
las pápulas perladas vuelvan a aparecer tiempo después siempre está latente.
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Láser CO2 o láser de dióxido de carbono. Se trata de un procedimiento
quirúrgico dermatológico que elimina tejido con emisión de radiación
infrarroja, pulsada o continua, que se absorbe en agua. Se practica con
anestesia local. Luego del procedimiento la zona queda hinchada y un poco
enrojecida por algunos días, así como aparecen pequeñas costras o escaras en
el lugar de la lesión, que se desprenden por sí solas.
¿Cuáles son los resultados concretos del láser CO2 o láser de dióxido de
carbono en las pápulas perladas? En primer lugar, se pueden requerir varias
sesiones para lograr eliminar todas las pápulas perladas. Aunque al fin se
logren exterminarlas todas, esto no obsta para que resurjan tiempo después.
Si el paciente tiene tendencia a conservar las cicatrices en su cuerpo debido a
su tipo de piel, en este caso podrá observar que le quedan cicatrices
pequeñas, que a lo sumo se atenúan un tiempo después. Es uno de los
procedimientos más aconsejados en cuanto a resultados favorables, si bien su
práctica es muy cara.
Electrofulguración o electroescisión. Esta técnica se basa en la eliminación
de tejido con la reproducción de calor y con la ayuda de un dispositivo
electroquirúrgico, que se denomina electrocauterio o hyfrecator. Se produce
la disecación, la coagulación y la posterior necrosis.
¿Cuáles son los resultados respecto de las pápulas perladas? Lo mismo que en
los procedimientos que describimos con anterioridad, las pápulas perladas
quedan exterminadas en el momento pero pueden reaparecer tiempo
después. También hay que tener en cuenta las secuelas de las cicatrizaciones,
sobre todo en aquellas personas que tienen tendencia a hacer cicatrices de
tipo queloides o hipertróficas.
Radiofrecuencia. La técnica consiste en un calentamiento gradual sobre las
pápulas perladas, que actúa sobre las fibras de colágeno. Este procedimiento
provoca la formación de colágeno nuevo. Es un método preciso, ya que se
trabaja con un instrumento manual, que va directamente a las lesiones y no
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daña el tejido adyacente. El procedimiento se realiza con anestesia local,
como lidocaína.
La técnica de radiofrecuencia requiere varias sesiones hasta actuar sobre
todas las pápulas perladas. El área tratada enrojece y luego aparecen escaras,
que permanecen unos días hasta caer. Resulta un procedimiento de un costo
elevado, que no garantiza que con el tiempo las pápulas perladas no
reaparezcan.
Como podemos apreciar porque se desprende de lo dicho en este informe,
todas las intervenciones que hemos detallado no ofrecen la garantía de que
las pápulas perladas en el glande del miembro viril no vuelvan a aparecer un
tiempo después. Lo que no es un dato menor, teniendo en cuenta los costos
elevados que implican sus prácticas.
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Capítulo VII.
Comprobado con éxito: Existen tratamientos accesibles y
naturales.
Los tratamientos naturales que vamos a consignar han sido probados en varios
hombres con pápulas perladas, con resultados altamente favorables. Hay que
aclarar que para que cualquiera de estos tratamientos ofrezca resultados
positivos, tiene que ser practicado tal como se indica y por todo el tiempo
que sea necesario. De nada valdrá si no se tiene la constancia de hacer el
tratamiento las veces al día que se requiera e insistir hasta que las pápulas
perladas desaparezcan por completo. Hay que observar que la ejecución de
ninguno de los tratamientos lleva demasiado tiempo, así como tampoco
ninguno de los tratamientos es complicado de hacer en el transcurso del día.
Por el contrario, piénsese que mucho más complicado es seguir portando las
pápulas perladas.
La ventaja de estos tratamientos es que pueden realizarse en el hogar y no
requieren ayuda extra por parte de otra persona. Para un problema como las
pápulas perladas en el pene esto que acabamos de decir cobra mucho sentido.
La persona efectuará el tratamiento de manera cómoda, en su casa y en
soledad, incluso si vive con alguien podrá buscarse su espacio de intimidad
como puede ser en un lugar como el baño.
Todos los tratamientos indicados son de uso externo tópico. Ninguno de ellos
requiere de demasiado tiempo de aplicación. Y lo que también es muy
importante y ventajoso, las sustancias o elementos que se van a necesitar son
sumamente económicos y fáciles de conseguir.
Antes de procurar la iniciación de cualquiera de los tratamientos hay que
asegurarse de tener todo lo necesario en casa, para que no haya que
interrumpir la acción en procura de algún implemento. También es necesario
buscarse espacios de tiempo y lugar para estar tranquilo, donde se sepa de
antemano que no va a ser interrumpido por ningún motivo. Como primera
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medida entonces, ¡a apagar el teléfono celular y a poner en funcionamiento
el contestador telefónico!
Si los tratamientos se indican dos veces al día, es muy fácil ubicar una
aplicación a primera hora de la mañana y otra a última hora de la noche,
antes de acostarse. Cuando hay indicadas otras aplicaciones durante el día,
hay que tener en cuenta que se practiquen con intervalos regulares, es decir,
espaciadas más o menos la misma cantidad de horas una aplicación de la
siguiente. Y conviene durante el período en que se lleven a cabo cualquiera
de los tratamientos no tener relaciones sexuales ni masturbarse, para que la
zona a tratar no reciba una inyección extra de sangre, porque ello no favorece
la práctica de curación que se está llevando a cabo.
Cualquiera de las sustancias que se aplique conviene dejar por un rato las
pápulas perladas al aire libre, para que la sustancia en cuestión se absorba
bien en la piel y no se pierda buena parte en contacto con las ropas. En cada
caso se indicará si hay que recubrir la zona convenientemente con una gasa o
con otro elemento. De todas maneras, ninguna de las sustancias que vamos a
emplear mancha la piel ni siquiera la ropa. Y si queda alguna pequeña
suciedad en donde la sustancia entró en contacto con la ropa, bastará un
buen lavado para eliminarla.
Para tranquilidad de quienes se decidan por estos tratamientos tópicos
naturales, ninguna de las sustancias que se utilizan tiene efectos tóxicos. Por
lo tanto, son sustancias que no provocarán reacciones en la piel ni generarán
efectos colaterales que puedan aparecer en el momento de la aplicación o
más tarde. En el caso de que la persona quiera hacer una prueba de
sensibilidad para estar más seguro, puede aplicar la sustancia que quiera
utilizar en una porción ínfima de la piel y esperar por veinticuatro horas para
observar si se produce alguna reacción alérgica o de hipersensibilidad. Recién
después de comprobar que no hay inconvenientes se puede proceder a
comenzar con el tratamiento.
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Por último queremos hacer una aclaración. Así como dijimos en el caso de los
procedimientos quirúrgicos - que más adelante las pápulas perladas pueden
reaparecer - en el caso de los tratamientos naturales no invasivos que vamos a
indicar también puede darse que con el tiempo las pápulas perladas tenga una
recidiva. Entonces no tenemos más que volver a repetir el tratamiento para
volver a exterminarlas. La diferencia fundamental está en el costo, porque
cuando pagamos grandes sumas como en los tratamientos quirúrgicos
dermatológicos lo lógico es que pretendamos resultados definitivos. En
cambio, cuando veamos en los capítulos siguientes las sustancias y elementos
que tenemos que utilizar para el tratamiento natural, no nos resultará
oneroso repetir el tratamiento más adelante si es necesario. Si las pápulas
perladas regresan, siempre vamos a estar en condiciones de hacerles frente
con este tratamiento natural.
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Capítulo VIII.
Melaleuca alternifolia, un aceite esencial prodigioso.
Uno de los tratamientos comprobados para la eliminación de las pápulas
perladas es el que se realiza con la aplicación del aceite de melaleuca
alternifolia, más conocida vulgarmente como aceite del árbol de té,
precisamente porque sus hojas se han utilizado como reemplazo del té.
Originario de Australia, se sabe que desde antaño las tribus aborígenes de ese
territorio lo utilizaron para tratar distintas afecciones en la piel.
Este aceite esencial se obtiene a partir de la destilación por vapor de las
hojas frescas de la planta de melaleuca alternifolia, ya sea silvestre o en
plantaciones. Tras la destilación se logra un aceite concentrado, que para su
mejor preservación debe ser almacenado lejos de las fuentes de calor y de los
rayos del sol, preferentemente en frascos de vidrio de color ámbar oscuro.
Por lo que acabamos de decir, es recomendable buscar un producto que tenga
sello de calidad y que en su envase se especifiquen las normas de seguridad
que acredita el producto.
¿Cuáles son las principales propiedades del aceite de melaleuca alternifolia o
aceite del árbol de té? Las propiedades son muchas, ya sea para eliminar las
pápulas perladas o para otras cuantas afecciones de la piel. Se trata de un
aceite natural antiséptico, antimicrobiano, fungicida, antiviral (arremete
contra los virus, los hongos, las bacterias). Tan antiséptico resulta que se dice
que los soldados australianos que intervinieron en la contienda de la Primera
Guerra Mundial, hacia la primera mitad del siglo pasado, portaban en su
equipaje aceite de melaleuca alternifolia o aceite del árbol de té, para
utilizar como desinfectante cuando fuera necesario.
Asimismo, el aceite de melaleuca alternifolia refuerza el sistema inmunitario,
a la vez que regula la actividad de las glándulas sebáceas. En afecciones a
nivel cutáneo, se lo utiliza en dermatitis de contacto o no, en herpes, en
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eccemas, para el prurito genital y para tratar las verrugas en cualquier parte
del cuerpo.
¿Cómo aplicar la melaleuca alternifolia en el caso concreto de las pápulas
perladas? Se requiere que el aceite sea puro, adquirido en una herboristería o
dietética responsable de los productos que comercializa. Para aplicarlo se
pueden utilizar hisopos, un trozo muy pequeño de algodón o una gasa.
También se puede aplicar directamente con la yema de los dedos, pero en
este caso hay que tener la precaución de no introducir el dedo para
embeberlo adentro de todo el producto para no contaminarlo. Se puede
colocar el aceite en un gotero (de vidrio oscuro), para luego poder aplicarlo
de a gotas en forma más eficaz y sin desperdiciar el producto.
Hay quienes prefieren diluir unas gotas de aceite puro en una cucharada de
agua tibia. En el caso que nos ocupa, para mayor efectividad se puede utilizar
el aceite puro, de tres a cinco gotas por aplicación. Como primera medida se
debe tener la zona a tratar muy bien aseada y muy bien seca,
preferentemente lavándola con un jabón neutro. A continuación se embebe el
hisopo, el algodón o la gasa, y se procede a aplicarlo en la zona afectada,
prestando atención a no extenderlo fuera de las pápulas perladas. Hay que
aplicar el aceite con pequeños toquecitos, cuidando de cubrir bien cada
pápula aunque sin restregar ni presionar demasiado.
Una vez aplicado el aceite esencial de melaleuca alternifolia o árbol de té, se
debe esperar unos cuantos minutos para que penetre, antes de colocarse la
ropa interior. La aplicación debe hacerse de tres a cuatro veces al día (no
más), hasta que las pápulas perladas desaparezcan por completo. A la semana
o quizás antes ya se empiezan a notar los resultados, pero hay que insistir con
el procedimiento hasta exterminar cada una de las pápulas perladas. Con una
lupa se puede observar mejor que no queden rastros de pápulas.
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Capítulo IX.
Las propiedades emolientes del aceite de ricino.
Ahora vamos a poner en la mira a una plata originaria de África que desde la
antigüedad está prestando servicios al hombre (hasta se han encontrado sus
semillas en de las tumbas egipcias, por lo que los faraones la deben haber
conocido muy bien): el ricino, ricinus communis, palma de Cristo, higuera del
diablo o higuera infernal. De las semillas de esta planta que se conoce con
tantos nombres diferentes se extrae un aceite muy emoliente, que en el caso
que nos interesa sirve para ablandar y exterminar las pápulas perladas.
El aceite de ricino o vulgarmente llamado aceite castor (una pésima
traducción de castor oil, en inglés), exhibe numerosas propiedades, más allá
de las más conocidas como purgante, depurativo o para limpieza de colon.
Posee en su composición ácidos grasos insaturados: ricinoleico, esteárico,
linoleico y dihidroxiesteárico. Resulta antimicrobiano, antiinflamatorio y
antioxidante (por sus vitaminas, minerales y proteínas). Estimula la
producción de colágeno y elastina, por lo que se lo suele utilizar en eccemas y
dermatitis.
¿Cómo se debe aplicar el aceite de ricino para combatir las pápulas perladas?
Como primera medida tenemos que proveernos de un aceite de ricino de
buena calidad, cuidando que no esté rancio porque puede resultar tóxico.
Aunque cuando está rancio se nota por el olor, hay que constatar la fecha de
envasado y vencimiento en el propio envase del producto. También es bueno
saber que el aceite de ricino se ha conservado al amparo del calor y de la luz
solar.
Para su aplicación necesitaremos hisopos, un trozo pequeño de algodón o una
gasa. Una vez que se ha lavado la zona afectada con un jabón neutro y secado
cuidadosamente sin dejar rastros de humedad, se procede a embeber el
hisopo, el algodón o la gasa con unas gotas de aceite de ricino puro. Para
mayor comodidad es preferible tener el aceite en un frasco con gotero. Luego
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se aplica sobre las pápulas perladas con pequeños toquecitos y sin restregar,
cuidando que quede la zona afectada bien cubierta. Conviene esperar un poco
tras la aplicación para cubrirse con ropas, para asegurarse que el aceite ha
penetrado lo suficiente, aunque se dice que tiene un gran poder de
penetración cutánea.
La aplicación de aceite de ricino debe hacerse de tres a cuatro veces al día,
en forma sistemática y hasta que las pápulas perladas desaparezcan por
completo. No existen contraindicaciones para que se aplique más de cuatro
veces diarias. Tras una semana de aplicación sin discontinuar ya se pueden
observar buenos resultados. Dependiendo de cada piel, se pueden llegar a
necesitar tres semanas de tratamiento o un poco más.
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Capítulo X.
La increíble efectividad de la crema dental blanqueadora.
En los capítulos anteriores nos referimos a dos aceites que la medicina suele
utilizar, por lo que no nos habrá causado asombro ninguno de los dos
tratamientos que indicamos. Ahora vamos a referirnos a la crema dental
blanqueadora. ¡Sí señor, la crema dental blanqueadora, la misma que se
utiliza para cepillarse la dentadura y que solemos tener al lado del cepillo
dental! Y esto sí que es asombroso, ¿verdad?
Para aplicar la crema dental blanqueadora sobre las pápulas perladas lo más
conveniente resulta proveerse de un cepillo dental de estructura muy
pequeña y de cerda suave. Con la crema dental blanqueadora, el cepillo
adecuado y una hoja de papel tisú - o puede ser un poco de papel higiénico ya estamos en condiciones de comenzar el tratamiento.
Esta aplicación se debe hacer por la noche, cuando ya nos disponemos a ir a
dormir. Una vez que hemos aseado la zona afectada con agua tibia y con la
ayuda de un jabón neutro, procedemos a la aplicación de la crema dental
blanqueadora tomando pequeñas porciones por sobre el cepillo dental,
aplicando el producto en forma circular y de manera suave. El proceso de
suave masaje circular es un paso muy importante y no debe exceder el
perímetro de las pápulas, por eso es importante que el cepillo sea pequeño.
Una vez que se aplicó la crema dental blanqueadora sobre las pápulas
perladas hay que cubrir la zona con papel un tisú o con el papel higiénico. El
empleo del papel es para que una vez que la crema dental se seque no se
desprenda, porque se debe dejar actuar durante toda la noche. Por la mañana
se procederá a retirar el papel tisú y a lavar con cuidado la zona con agua
tibia y con el empleo de un jabón neutro.
El tratamiento con crema dental blanqueadora resulta muy efectivo, así lo
atestiguan muchos de los que lo han puesto en práctica. Sin embargo, para
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observar los resultados favorables se tendrá que practicar rigurosamente el
mismo procedimiento todas las noches, durante al menos el curso de una
semana. Por lo general las pápulas perladas comienzan a resecarse y a
descamarse en los primeros días del tratamiento, para ir desprendiéndose
poco a poco. Día a día se pueden ver los progresos en el exterminio. Resulta
natural que se observe la descamación, esto quiere decir que la crema dental
blanqueadora está funcionando de manera correcta y pronto no dejará rastros
de las pápulas perladas. Sin embargo, no hay que intentar apresurar el
procedimiento desprendiendo forzosamente la piel descamada. Las pápulas
deben caer por sí mismas, ante la acción masajeadora proporcionada con el
cepillo dental pequeño impregnado de la crema dental blanqueadora.
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Capítulo XI.
Hay otras opciones de tratamientos naturales.
Los tratamientos naturales que hemos mencionado hasta ahora resultan de
suma efectividad, tanto la aplicación de aceite esencial de melaleuca
alternifolia como los tópicos con aceite de ricino o el empleo de la crema
dental blanqueadora. Conviene elegir uno de los métodos y emplearlo el
tiempo suficiente como para que haga efecto, sin cambiar por otro antes de
tiempo. Tampoco se recomienda utilizar dos o más tratamientos naturales a la
vez, podría haber interacciones entre las sustancias o al fin no saberse cuál es
el tratamiento que realmente produjo el efecto sanador.
Otra de las sustancias que se pueden utilizar para combatir las pápulas
perladas es una pomada o ungüento que posea en su fórmula tres antibióticos:
bacitracina, neomicina y sulfatos de la polimixina B. Este tipo de antibiótico
con propiedades regeneradoras está indicado para prevenir infecciones así
como también para curar heridas. Lo conveniente es que sea recetado por un
médico.
Con el triple antibiótico tenemos que tener la precaución de no utilizarlo si
somos alérgicos a los antibióticos. Luego de higienizarse bien las manos agua y
jabón, hay que probar el producto en una pequeña porción de piel y aguardar
por veinticuatro horas para ver si se produce alguna reacción alérgica o de
hipersensibilidad (erupciones, hinchazón o enrojecimiento). O si se sabe los
componentes que pueden generar reacciones alérgicas hay que leer
detenidamente el prospecto antes de utilizarlo. También se recomienda
constatar la fecha de vencimiento del medicamento y no aplicar más dosis
que las indicadas en el prospecto adjunto.
Una vez que nos aseguramos de que podemos usar el triple antibiótico sin
inconvenientes, procedemos a higienizar muy bien la zona donde lo
colocaremos. Lo aplicamos con una gasa un par de veces al día, puede ser por
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la mañana y por la noche. Al cabo de una semana ya podremos observar
resultados satisfactorios.
Otro tratamiento que ha reportado excelentes resultados es el uso de alfa
hidroxiácidos (AHA). Se trata de moléculas o compuestos orgánicos que
derivan de algunas fuentes alimenticias. En cosmética se utilizan estos ácidos
de frutas para exfoliar las capas más superficiales de la piel. Tanto aceleran
el proceso de exfoliación como regeneran las capas superficiales de la piel.
Lo ideal es elegir un AHA en una concentración de un 8 por ciento o a lo sumo
un 10 por ciento. El ácido que más se suele utilizar es el glicólico, que es un
derivado de la caña de azúcar. También hay que procurarse un producto
testeado dermatológicamente. Este tipo de productos en general requieren
una receta médica para su adquisición ya que no son cremas cosméticas de
venta libre.
¿Cómo se aplica sobre las pápulas perladas el ácido alfa hidroxiácidos o AHA?
Hay que cuidar de poner los tópicos solo en las pápulas perladas, con un
hisopo se logra mejor el propósito. Debe tener en cuenta que la zona puede
ponerse un poco enrojecida. Se puede aplicar por la mañana y repetir el
procedimiento por la noche. Por fortuna, los efectos positivos comienzan a
notarse a los pocos días de iniciado el tratamiento.
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Capítulo XII.
Consideraciones últimas.
A esta altura del informe ya hemos tomado conocimiento de lo que son y
sobre todo, hemos tomado conocimiento de qué significan para el hombre las
pápulas perladas en el glande de su miembro viril. Y lo que es más
importante, hemos tomado conocimiento de los tratamientos naturales no
invasivos con los que podemos combatirlas, sin riesgos ni contraindicaciones
de ninguna índole. Y lo más significativo es que podrá lograr esto sin que
queden rastros evidentes, ni siquiera pequeñas cicatrices.
Como se habrá podido apreciar, no nos hemos referido a ningún tratamiento
que requiera sustancias extrañas, sustancias imposibles de conseguir o
sustancias inaccesibles por su precio elevado. Al contrario, todos los
tratamientos enunciados aquí están al alcance de cualquier persona, estamos
seguros de ello. Por lo que solo resta esperar que los afectados por las pápulas
perladas no se demoren más en iniciar el tratamiento que les parezca que
mejor les va a resultar y con el que se sientan más cómodos de llevar a la
práctica. Lo importante es que los damnificados por las pápulas se decidan a
probar y que luego no abandonen dicho tratamiento hasta no evidenciar los
resultados favorables en su totalidad. ¡A no olvidarse! Hay que perseverar en
el objetivo de destruir las pápulas perladas. Si no se tiene constancia y rigor
para hacer las cosas tal como se indican, no vale la pena comenzar ningún
tratamiento porque no solo conducirá al fracaso sino a la frustración. Hay que
predisponerse a los buenos resultados y perseguirlos todo lo que sea
necesario, sin lugar a dudas.
A la par del tratamiento natural hay que trabajar la autoestima, tan alicaída a
causa de las pápulas perladas. Ni bien se comienza con el tratamiento, con la
esperanza de que muy pronto se van a poder exhibir óptimos resultados, ya
será posible sentirse más seguro con las relaciones sociales. Si no se tiene una
pareja estable aunque se está con ansias de salir a la conquista, no hay que
esperar ni un minuto más en tender las redes. Hay que pensar con optimismo
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que al fin ha llegado el momento tan esperado, que no podrá traer otra cosa
más que dicha.
Cuando se está decidido a establecer o reestablecer vínculos, no se debe
desaprovechar ninguna oportunidad para ello. Si no se tiene un grupo que
frecuentar, no es una excusa para quedarse encerrado en casa. Hay que salir
en busca de nuevos vínculos de acuerdo a los intereses. Y una forma de
entablar vínculos puede ser emprendiendo las actividades que más se
disfrutan. En todo momento hay que andar con la cabeza bien en alto, hay
que arremeter hacia el frente, exultante y seguro de sí mismo.
Funcionará como un buen motor la puesta de objetivos claros en el camino,
así como las motivaciones en el intento por alcanzarlos. A la par que se inicia
el tratamiento para las pápulas perladas es preciso tener en cuenta otros
aspectos, de tal manera de sentirse cien por ciento saludable en los múltiples
momentos que depara la vida. La alimentación sana, variada, nutritiva y
natural, ayudará a sentirse mejor en todo sentido, desde física a
anímicamente. Tampoco hay que adherir a las toxicomanías, como el alcohol,
el cigarrillo o la cafeína. Y si los buenos hábitos se acompañan con una
actividad física practicada en forma regular, mucho mejor. Se puede practicar
el deporte que más guste o cualquier otra actividad con el cuerpo, con el
firme propósito de que saque de la abulia, revitalice cada uno de los órganos
y distraiga la mente. Al fin y al cabo el cuerpo es el lugar de las sensaciones
placenteras y debe estar en las mejores condiciones posibles para las
oportunidades que están por venir. El cuerpo tiene que estar sano y libre, así
como dispuesto a amar y ser amado.
Sabemos que una vez que se haya conseguido exterminar las pápulas perladas
todo será más fácil en la vida. Por nuestra parte, deseamos con franqueza
haber sido útil con este informe a tantos hombres que sufren con las pápulas
perladas, sin atreverse muchas veces a compartir con alguien el problema.
Justamente, con este informe quisimos actuar con complicidad con esos
hombres afectados y temerosos, para acercarnos a ellos, para compartir su
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problemática y para ofrecerles nuestra ayuda con generosidad. No dudamos
que los tratamientos naturales no invasivos serán la mejor solución que hayan
podido encontrar al exterminio de las pápulas perladas. Y la mejor solución
para alcanzar una calidad de vida plena y satisfactoria, como debe ser.
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