¿CÓMO CONSEGUIR TRABAJO Y NO MORIR EN EL INTENTO

¿CÓMO CONSEGUIR TRABAJO Y NO MORIR EN EL INTENTO?
Cada vez es más común escuchar que las universidades constituyen el primer
lugar en la generación de desempleo; es más, las estadísticas indican que uno
de cada dos egresados no consiguen trabajo en sus primeros intentos de formar
parte del ejército laboral de nuestro país.
En la actualidad, las demandas de empleo en aumento y las ofertas cada vez
más escasas han tenido como consecuencia un mercado de trabajo muy
competitivo. ¿Sabe que por cada vacante hay más de 250 candidatos que se
postulan para el mismo puesto que usted?. Esta podría ser una cifra alarmante,
pero no se preocupe, a continuación me daré a la tarea de indicarle una fórmula
infalible para conseguir trabajo.
Cómo Consultor en Imagen Pública, cada año recibo cientos de correos
electrónicos de estudiantes y profesionistas que me formulan la misma pregunta:
¿Cuál es la imagen que se debe de proyectar para conseguir empleo? A la que
respondo sin dudarlo ni un segundo: TODO DEPENDE… Sí, todo depende del
trabajo que está solicitando, el puesto que desea ocupar y la empresa donde
desea ingresar.
Como probablemente ya se ha dado cuenta, buscar chamba no es nada fácil. No
se agobie si lo han rechazado durante sus primeros intentos o si su compadre lo
logró antes que usted. La regla de oro dice que tiene que ser persistente, así
que por ningún motivo quite el dedo del renglón.
El primer paso y probablemente el más importante es preguntarse a qué se
quiere dedicar, pues la decisión marcará su destino. En repetidas ocasiones he
escuchado a un significativo número de personas quejarse del trabajo que
poseen escudándose tras la mediocre acepción de que se encuentran ahí de
forma provisional mientras se les presenta otra oportunidad, sin embargo
querido lector, yo le recomiendo que no caiga en esa tremenda falacia ya que
cada vez le será más difícil comenzar en otro lugar y además recuerde que las
oportunidades no se presentan, ¡se buscan!
En lo personal puedo alardear sobre el hecho de que amo mi trabajo, me gusta
el ambiente laboral dónde me desenvuelvo y lo mejor de todo es que no me
lamento cada vez que suena el despertador; yo le recomiende que trate de vivir
de la misma forma, siendo indispensable que identifique una empresa dónde le
gustaría trabajar, en la que se sienta cómodo con sus potenciales compañeros
de trabajo, dónde pueda saciar sus ambiciones y en la que le permitan
desarrollarse en lo profesional y en lo personal.
Una vez que tenga en mente más de un sitio dónde le gustaría trabajar, es
momento de prepararse para enfrentar un proceso largo y desgastante ya que
buscar trabajo es una chamba de tiempo completo que requiere de atención,
compromiso, dedicación y mucho valor por parte del interesado.
La mejor carta de recomendación con la que en la mayoría de las veces
contamos y no sabemos explotar al máximo es el currículum vitae (CV).
No podemos dejar escapar el hecho de que hay departamentos de Recursos
Humanos que reciben más de 50,000 candidaturas anuales, por lo que debemos
de poner especial énfasis en el CV, siendo éste el primer acercamiento que
tendrá con la empresa de su interés.
Debemos de entender que el Currículum es un resumen y como tal debe
limitarse a redactar los argumentos que refuercen su imagen profesional y por
ningún motivo incluya una enciclopedia sobre su persona y lo maravillosa que es
su vida. Es necesario destacar lo más importante sobre su educación profesional
y los logros obtenidos en ellos, comenzando con el más reciente ya sea
doctorado, maestría o licenciatura. Si es afortunado y cuenta con experiencia
laboral, resalte las actividades de mayor trascendencia, la empresa en la que
trabajó, el puesto que desempeñó, los presupuestos que ha desempeñado, por
mencionar algunos ejemplos.
Algunos datos que siempre debe de incluir son su nombre (con dos apellidos),
fecha de nacimiento completa (no edad), nacionalidad, estado civil, dirección,
teléfono dónde desee que lo contacten y de preferencia también su número
móvil, su correo electrónico, los idiomas que habla especificando los porcentajes
correspondientes, capacidades especializadas y entrenamientos específicos que
haya recibido. Las empresas consideran de buen gusto indicar al inicio el puesto
por el que desea postularse con la intención de facilitarles su trabajo.
Es sumamente importante que cuide todos los detalles de los materiales que va
a entregar debido a que la calidad de estos será asociada con la calidad de su
persona y de su trabajo. El CV se debe de imprimir por una sola cara con
impresora láser, sobre papel blanco (de preferencia opalina para una mejor
presentación), sin arrugas, evitando los colores llamativos y por ningún motivo
vaya a darse el lujo de tener faltas de ortografía ya que de esa manera también
tendrá falta de empleo. Lleve consigo por lo menos tres copias de su currículum,
debido a que en ocasiones se lo pueden pedir para canalizarlo a otros
departamentos.
Una vez que haya presentado un CV impecable, estoy seguro de que le
llamarán para concertar la tan temida entrevista de trabajo. Dichas entrevistas
tienen como objetivo el intercambio de información entre el entrevistador y el
postulante, de forma que lo conozcan y establezcan un juicio concreto sobre si
se encuentra entre las personas más calificadas (adecuadas) para obtener el
puesto y en la que tendrá que hacer gala de su imagen profesional, es decir, la
percepción que proyecte mediante el uso de protocolos. Esto quiere decir que la
conducta que tenga con todos los involucrados en su proceso de contratación
serán cruciales.
Como consejo personal, trate de extender dicho comportamiento a su vida
personal ya que no querrá comprobar aquella leyenda urbana en la que un joven
en su intento de llegar a tiempo a su entrevista le recordó el 10 de mayo al
conductor que se encontraba delante de él sin saber que se trataba de la
persona que lo iba a entrevistar.
Uno de los factores fundamentales es la puntualidad ya que es preferible que
usted espere y no quien lo va a entrevistar. Se recomienda llegar 15 minutos
antes de la cita debido a que un lapso de tiempo mayor es interpretado como
una falta de cortesía como consecuencia de que la persona que le va a hacer el
favor de regalarle un momento invaluable de su tiempo se puede llegar a sentir
presionada. Mientras espera mantenga la calma, apague su teléfono celular y
aproveche para ver que su cabello se encuentre en su lugar y su atuendo en
perfectas condiciones. En todo momento tenga una actitud positiva, cordial y
educada.
Esté conciente en todo momento de su lenguaje corporal, ya que lo que no
deseamos decir con palabras, nuestro cuerpo lo grita. Mantenga una postura
erguida, la cabeza levantada (que sus ojos formen una línea paralela al suelo ya
que no desea verse presuntuoso) y un paso firme. Siempre se debe de saludar
de mano, con un apretón firme (no trate de triturarle la mano a su contraparte),
con la palma completamente seca ya que es de mal gusto ofrecer una mano
sudorosa aunque se encuentre muy nervioso, además de que transmite miedo e
inseguridad, manteniendo el contacto visual y sonriendo (la sonrisa tiene un
efecto doble debido a que genera empatía y ayuda a contrarrestar el miedo).
El aseo personal y la indumentaria constituyen formas de comunicación no
verbal en las cuales debe de poner especial atención. Procure siempre tener un
buen corte de cabello, las uñas limpias, la ropa sin ninguna arruga o
descompostura y los zapatos boleados.
Antes de asistir a su entrevista investigue como se viste la gente que trabaja en
esa empresa para que no se vea ni muy fachoso ni demasiado presuntuoso.
Cada empresa tiene sus reglas de vestimenta, sin embargo, para la mayoría de
los casos prefiera trajes (hombres y mujeres) de colores azul marino o gris
oxford y camisa blanca con el objetivo de proyectar apertura, seriedad y
autoridad (en otro artículo hablaremos más sobre la importancia del vestuario).
Durante la entrevista trate de escuchar más y hablar menos, por eso tenemos
dos oídos y sólo una boca. Cuando le toque su turno de responder sea concreto
y enfóquese a la forma en la que usted puede ayudar a lograr los objetivos de la
empresa, para lo que usted ya debió de haber investigado todo lo posible sobre
su historia, los productos que manejan, su identidad corporativa, su cultura
laboral, sus servicios y su posicionamiento, por mencionar algunos ejemplos.
Es normal que el entrevistador quiera realizar una serie de preguntas, finalmente
para eso está usted ahí, y lo mejor que puede hacer es ir preparado teniendo
presente que nunca debe de mentir ni exagerar. Algunas de las preguntas más
comunes son las siguientes:
Platícame sobre ti
Muchas personas se extienden y cuentan toda su vida aunque esto es
precisamente lo que usted no debe de hacer. La mejor estrategia es hacer una
síntesis sobre sus antecedentes y relacionar las habilidades que más lo
destacan con los objetivos de la empresa.
¿Por qué quieres cambiar de empleo?
Explique por que su trabajo actual no le permite alcanzar sus objetivos y evite
hablar mal de la otra empresa o de tu jefe ya que el entrevistador pensará que
en un futuro hablarás así de ellos.
Dime tres cualidades y tres defectos que te caractericen
Es muy importante que usted se conozca y tenga el carácter para contestar con
sinceridad y humildad. Es recomendable que desarrolle un sencillo estudio
FODA (Fuerzas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas) muy objetivo de su
persona, ya que además de que sabrá la respuesta a esta pregunta, conocerá
las áreas dónde debe de trabajar para superarse.
¿Qué harías si?
Este tipo de preguntas se realizan para ver como afrontarías cierto tipo de
situaciones. Use su imaginación y siempre trate de dar más de una solución
orientada a los objetivos de la empresa.
¿Qué haz logrado en tu vida personal?
Este es su momento para lucirse. No tenga miedo de decir que fue el capitán de
su equipo de fútbol juvenil o que ocupó el puesto de presidenta de la sociedad
de alumnos de su facultad. Recuerde que las empresas están en busca de
líderes.
¿Cuánto quieres ganar?
Probablemente es la pregunta más difícil de todas, sin embargo los expertos
recomiendan evitar la respuesta tanto como puedas, debido a que lo más seguro
es que pida menos de lo que estaban dispuestos a ofrecer. Si no le queda otra
opción, establezca un margen teniendo cuidado de que la cantidad mínima no
sea muy baja. Por el otro lado, si usted no está de acuerdo con la primera oferta
no la acepte, ya que si usted es un buen candidato, seguramente le ofrecerán
más.
Es considerado un buen detalle por parte de los entrevistadores que un día
después de conocerlo le envíe un correo electrónico muy breve dónde
agradezca el tiempo e interés que mostraron en usted teniendo cuidado de no
parecer chantajista o barbero. Si por alguna razón no le ofrecieron el puesto
para el que aplicó, pregunte la razón de forma educada explicando que es con el
único motivo de mejorar en entrevistas futuras, le aseguro que le darán
información que le será muy útil y a lo mejor hasta lo reconsideran para el
trabajo.
Ahora que ha terminado de leer este artículo, estoy convencido de que
realmente quiere conseguir empleo por lo que le recomiendo que se tome un
tiempo para reflexionar y pensar que es lo que quiere hacer y tirar
milimétricamente con mira telescópica hacia su objetivo en vez de tirar con
cañón y esperar a ver que le cae.
Lic. Carlos Raffoul Saba
Director General de Grupo Raffoul S.C., Maestría en Ingeniería en Imagen
Pública y miembro de la Asociación Mexicana de Consultores en Imagen Pública
(AMCIP). [email protected]
www.raffoul.com.mx.