1. Educación

Producciones Intensivas
Cómo se comportan las hortalizas
en nuestra región
Ing. Agr. Fabián Alberto Corti
Mat.Prof.30010. EEA INTA Reconquista
Ing.Agr. María Virginia Ramoa
Mat.Prof 30145. AER INTA Reconquista
En la Estación Experimental Agropecuaria del INTA Reconquista se vienen realizando ensayos y
parcelas demostrativas de diversas especies hortícolas y florícolas desde el año 2008, en un módulo demostrativo experimental creado con esa finalidad.
Se planteó como objetivo investigar y experimentar
sobre diversas especies hortícolas y florícolas, probando nuevos materiales, tecnologías innovadoras,
cultivos alternativos, etc , en un marco de producción intensiva sustentable, amigable con el medio
ambiente, pero sin dejar de lado el margen de rentabilidad que permita al productor y su familia la
continuidad en la producción y su permanencia en
la zona rural.
Durante el año 2013, diversas experimentaciones,
en especies hortícolas, se han llevado a cabo en el
módulo. Nos planteamos en esta nota, comentar
algunos resultados preliminares obtenidos durante
al año 2013, generar una discusión con los datos
aportados, y trazar, a partir de lo alcanzado, algunas
líneas para futuras investigaciones. Nos centraremos en cinco ensayos: distintas prácticas de manejo
en lechuga crespa, densidad de siembra en Brócoli y
Coliflor, y diferentes variedades de frutilla.
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Prácticas de manejo en Lechuga Crespa
La lechuga (Lactuca sativa L.) es una de las especies
hortícolas más sembradas en la región, contabilizándose –según datos arrojados por encuesta realizada
en 2007- más de 15 hectáreas. Se plantearon para
este ensayo cuatro modos de manejo del cultivo: el
tradicional (usado como testigo), con cobertura de
manta térmica, con mulching, y uno combinado, utilizando mulching y manta térmica.
El mulching, o acolchado, es una técnica que permite cubrir el suelo (sea con hojas, paja, pasto, aserrín,
plástico, etc.) para favorecer al cultivo en diferentes
aspectos: la calidad del producto, ahorro y uso más
eficiente del agua, precocidad, control de malezas,
control de erosión del suelo, aumentar la temperatura del suelo en invierno, entre otros.
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Con la manta térmica, que consiste en una cobertura
de tela de polipropileno liviana, permeable y de bajo
costo, se busca prevenir heladas suaves, aumentar
la temperatura y la humedad (esto puede favorecer
la presencia de enfermedades), impedir ataque de
insectos y pájaros, incentivar la precocidad y mejorar la calidad. La manta térmica no impide el paso
de la luz solar, el aire y el agua de lluvia.
El ensayo se realizó con un diseño estadístico de bloques completamente aleatorizados, con 3 repeticiones, tres variedades (Grand Rapid TBR, Waldman’s
Green y Brisa) y los cuatro tratamientos antes mencionados (convencional testigo, con manta térmica,
con mulching y combinando). El trasplante se realizó en un sistema de surcos dobles, a trebolillo, a 25
cm entre plantas y entre líneas. La distancia entre
surcos fue de 70 centímetros.
Se cosechó en dos fechas, para el testigo el día 10
de octubre de 2013, el resto de los tratamientos el
4 de Octubre. En los tratamientos con mulching y
manta térmica, la característica más destacada fue
la precocidad. Se midieron rendimiento y descarte.
En éste último no se detectó diferencias entre los
distintos tratamientos y variedades, razón por la
cual no se tendrá en cuenta en la discusión.
Los resultados parciales obtenidos se observan en
el Gráfico 1:
ayudan a mejorar el rendimiento, sobre todo el mulching y la combinación de prácticas (se observa
mejor en la variedad Brisa). Cabe aclarar que en el
tratamiento con manta térmica sola, hubo una invasión muy importante de malezas.
Densidad de plantación en Brócoli y
Coliflor
Tanto el brócoli (Brassica oleracea var. Itálica) como
el coliflor (Brassica olerácea L. var. Botrytis) pertenecen a la familia de las Brassicaceae (tradicionalmente Cruciferae) y son originarios de la cuenca
del Mediterráneo. En nuestro país se cultiva principalmente en Buenos Aires, Santa Fe y región de
Cuyo, con una superficie en constante crecimiento
(sobre todo el brócoli). Se consume principalmente
fresco, un porcentaje menor se destina a industria
(en los últimos años aumentó la industrialización,
sobre todo del brócoli).
En ambos cultivos la parte comestible es la inflorescencia, cabeza o pella, formada por un conjunto de
yemas florales y sus pedúnculos carnosos.
Gráfico 1: Comparativo de rendimientos en tres variedades de lechuga crespa
(en kg/m2) en cuatro tratamientos.
En el gráfico podemos observar dos aspectos interesantes. En primer lugar, el rendimiento del testigo
se “acomoda” al promedio, pero cosechado una semana después, fundamentando que los demás tratamientos favorecen la precocidad del cultivo. Por
otro lado, en mayor o menor medida, las distintas
tecnologías propuestas (manta térmica y mulching)
Se planteó la experiencia con el objetivo de medir
producción y tamaño de pellas, trasplantando a distintas densidades. Se los presenta como ensayos
exploratorios que necesitarán el debido análisis para
ratificar los resultados obtenidos.
Se llevaron a cabo en el módulo florihortícola de la
EEA Reconquista, usando un diseño en bloques al
azar, con tres repeticiones y cuatro tratamientos:
a) 30.000 Plantas/ha: Surcos dobles a 1 m de distancia, 25 cm entre líneas y 66 cm entre plantas.
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b) 40.000 Plantas/ha: Surcos dobles a 1 m de
distancia, 25 cm entre líneas y 50 cm entre
plantas.
c) 50.000 Plantas/ha: Surcos dobles a 1 m de
distancia, 25 cm entre líneas y 40 cm entre
plantas.
d) 60.000 Plantas/ha: Surcos dobles a 1 m de
distancia, 25 cm entre líneas y 33 cm entre
plantas.
En todos los casos se cosechó la pella principal (en
brócoli suele haber rebrote). Las plantas cosechadas, sobre el total plantado, superó al 95%, en todos los tratamientos y repeticiones. Se pesaron las
pellas y se midió el diámetro de la misma.
a) Ensayo de densidad de siembra en brócoli
Para la realización de este ensayo se utilizó el híbrido Legacy, de la empresa Seminis. Se comenzó
con el trasplante el día 28 de junio de 2013. La
fertilización utilizada, a base de úrea, fosfato diamónico y cloruro de potasio, representa una proporción
de 68 – 32 – 70 de NPK. Se cosechó sólo la pella
principal, procediendo a clasificarla por su diámetro
ecuatorial, agrupándolas en tres categorías: Pellas
Grandes (de más de 20 cm de diámetro), Pellas Medianas (entre 10 y 20 cm) y Pellas Chicas (menos
de 10 cm). Además, se pesó la producción para obtener el rendimiento.
una densidad de 30.000 plantas, el promedio es de
331 gramos, para 40.000 es de 296, para 50.000
es de 229 y finalmente para 60.000 pl/ha es de sólo
147 gramos por pella.
Otro aspecto con relación a las densidades medias,
es la homogeneidad del tamaño de las pellas, donde
predominaron las de tamaño mediano por sobre las
de tamaños chico y grande.
b) Ensayo de densidad de siembra en coliflor
El híbrido de coliflor utilizado en la experiencia fue
Defender, de la empresa Seminis. Se realizó el trasplante el 27 de junio de 2013. La fertilización utilizada, a base de úrea, fosfato diamónico y cloruro de
potasio, representa una proporción de 117,5 – 40
– 120 de NPK. Se cosechó la pella principal, procediendo a clasificarla por su diámetro ecuatorial,
agrupándolas en tres categorías: Pellas Grandes (de
más de 18 cm de diámetro), Pellas Medianas (entre
13 y 18 cm) y Pellas Chicas (entre 9 y 13 cm), según los criterios de clasificación comprendido en la
reglamentación de las normas de tipificación, empaque y fiscalización de hortalizas frescas con destino
a los mercados nacionales (RX 297/83, modificada
por RE 58/07). Además se pesó la producción para
obtener el rendimiento.
En el siguiente gráfico podemos ver algunos resultados parciales obtenidos:
En el Gráfico 2 podemos ver algunos resultados parciales obtenidos:
Gráfico 3: Rendimiento y tamaño de pellas obtenidas según densidad de plantación en coliflor.
Gráfico 2: Rendimiento y tamaño de pellas obtenidas según densidad de plantación en brócoli.
De acuerdo a los resultados obtenidos podemos inferir que los mayores rendimientos se dieron en las
densidades medias (40.000 y 50.000 pl/ha). Como
es de esperar, el promedio de peso por pella disminuye a medida que aumenta la densidad. Así, para
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En la experiencia, a diferencia de lo visto en brócoli, no se ha cosechado pellas de tamaño chico, y
los rendimientos finales fueron mayores a medida
que aumentaba la densidad. Por otro lado, lo que
si se comprueba es la disminución del promedio
de las pellas a medida que aumentamos el número de plantas. Así vemos pesos promedios de 642,
540, 488 y 444 gramos promedio por pella para las
densidades de 30.000, 40.000, 50.000 y 60.000
plantas por hectárea respectivamente. De todas formas, el mayor número de plantas hace que el rendimiento sea inverso.
Para tomar una decisión con respecto a la densidad
deseada se tendrá en cuenta la necesidad del mercado en cuanto a tamaño, peso y uniformidad y se
podrá continuar con estos ensayos para ajustar en
mayor medida la densidad apropiada para nuestra
región.
Ensayo de variedades de frutillas
servarse en cámaras por un breve período, hasta su
plantación o envío a destino ( estas son plantaciones
de otoño). También existen los plantines denominados “frigo”, que se cosechan en Julio y se llevan a
cámara hasta su venta, en febrero o principio marzo
del año siguiente. Este sistema permite plantaciones
tempranas, o de verano, y producciones primicias.
Se utiliza también para disminuir costos porque las
plantas producen hijuelos y esto hace que se utilice
menor cantidad por hectárea.
Es muy importante preparar el lote con anticipación,
tenerlo a punto para cuando llegan los plantines. El
primer paso es pasar un cincel, disco o rastra, para
lograr una superficie libre de terrones y lo suficientemente suelta como para hacer los camellones, o
lomos, donde se plantará.
Los lomos deben ser adecuadamente anchos (40
cm parte superior y 60 cm base) para que puedan
sembrarse una doble fila de plantas. La altura del
lomo puede variar entre 20-30 cm.
El cultivo de frutilla se inicia a partir de plantines
provenientes de viveros especializados del sur del
país, de las provincias de Río Negro y Chubut , aunque también pueden provenir de viveros localizados
en Mendoza.
Una vez armados los lomos se coloca la cinta de
riego y el “mulching” de polietileno, para evitar que
la fruta entre en contacto con la tierra y se deteriore,
esto puede realizarse mecánicamente - como ocurre
en regiones más “especializadas”- o manualmente,
como es el caso de nuestra zona.
Los más utilizados son los denominados “frescos”,
que se obtienen de los viveros en el mes de abril y
son trasplantados inmediatamente, o pueden con-
Se colocan 50.000 a 55.000 plantas/ha, separadas
a 30 ó 35 cm, a doble hilera por lomo.
Esquema: Pernuzzi, Cristian. Sordo, María del Huerto. Manejo del cultivo de frutilla, Jornada Hortícola de Entre Ríos, 2003.
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El sistema más común de protección es el microtúnel, armado con barras de hierro de 6 u 8 mm
cada 2.5 m, que luego se los cubren con polietileno
transparente LDT (larga duración térmica) de 80 o
más micrones de espesor.
En la zona de Coronda se utilizan macrotúneles de
6,6 m de ancho, 50 m de largo y 2,5 m de alto
en el que entran 1.800 plantas, diseñados especialmente para cultivos de bajo porte como la frutilla,
estos túneles permiten mantener por más tiempo la
temperatura, necesitan menos mano de obra para
su manejo (cierre y apertura) que los microtúneles,
entre otras ventajas, pero tienen en contra el elevado
costo.
Los microtúneles permiten obtener producciones
primicias, pudiendo la planta comenzar a producir
en junio, alargando así el período de cosecha a 6
meses. Si no se protegiera la planta la producción
recién comenzaría en septiembre, donde el precio
comienza a caer.
Podemos citar en forma general una distribución de
la producción en: 8-10% en junio-julio; 10-15% en
agosto; 20-25% en septiembre; 30-35% en octubre; 15-20% en noviembre y 5-10% en diciembre.
En la Estación Experimental Agropecuaria INTA Reconquista se realizó, en el año 2013, un ensayo 3
variedades de frutillas para evaluar rendimientos y
distribución de la producción. Las variedades fueron: Viansa Festival, Camarosa y Camino Real.
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Para caracterizarlas rápidamente podemos citar que
la variedad Viansa Festival produce precozmente,
pero el tamaño de fruta es algo menor que el resto de las variedades probadas; Camarosa presenta
buen tamaño de fruta, de piel gruesa, característica
favorable al momento de la cosecha y envasado; el
inicio de la producción es algo más tardía que Festival. Camino real es la más tardía de las 3 variedades probadas y presenta buen tamaño de fruta.
El ensayo
Se realizó en el año 2013; se utilizó un diseño con
bloques al azar con 5 repeticiones. Como se mencionó anteriormente se compararon 3 variedades: Viansa Festival, Camarosa y Camino Real. La primera
se plantó el 10 de abril y las restantes (Camarosa y
Camino) se plantaron el 30 de abril.
El sistema de plantación fue doble hilera intercalada
(tresbolillo) sobre lomos separados a 1,20 m con
cintas de riego, mulching y microtúneles. Se realizó fertilización por riego, durante todo el ciclo del
cultivo.
Las cosechas se realizaron 2 veces por semana, pesando las frutas para obtener el peso y estimar el
rendimiento.
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Se cosecharon durante los meses de junio, julio,
agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre,
finalizando en este mes la cosecha debido al bajo
precio y las altas temperaturas, lo que significa la
obtención de frutas chicas.
Camarosa y Camino Real comenzaron a producir a
los 63 días de plantadas, Viansa Festival a los 75
días desde su trasplante.
En el siguiente gráfico podemos observar el rendimiento promedio/planta/mes de las 3 variedades.
Viansa Festival fue la variedad que obtuvo el mejor
rendimiento con 957,1 gr/planta, seguida por Camarosa con 810,5 gr/planta, por último, Camino
Real con 467,4 gr/planta.
A partir del 2014 la variedad Camarosa se deja de
producir, habiendo sido por muchos años la variedad más sembrada. Este recambio varietal se debe
a que hay en el mercado otras variedades con mejores características mejoradas en cuanto a precocidad, resistencia a enfermedades, rendimientos, etc.
como son, entre otras, Sabrina, Virtud, Splendor y
Viansa Festival.
Todos los ensayos parten de la base de las demandas de información de productores de la zona o a
partir de encuestas sobre cultivos más sembrados.
La información generada de ellos es nuestra base de
datos locales para los interrogantes de los productores hortícolas de la región.
Viansa Festival presentó el mejor rendimiento, comenzando a producir a fin de junio donde los precios
son muy buenos, pero los picos de producción fueron en septiembre, octubre y noviembre. Seguida en
rendimiento, la variedad Camarosa también obtuvo
buenos resultados. Camino Real fue la que menos
rindió, esta variedad es de producción tardía.
A continuación podemos ver el rendimiento promedio en gramos por planta durante todo el ciclo, de
las 3 variedades.
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