48 Harvard Deusto Márketing y Ventas o cómo dominar la experiencia del cliente Integrar la percepción del cliente en la toma de decisiones es hoy más importante que nunca, ya que puede producir beneficios significativos en forma de mayores ingresos. De hecho, según una encuesta de Accenture realizada a más de mil cuatrocientos cincuenta ejecutivos de empresas ‘business-to-business’ de todo el mundo, el 85% afirma que la experiencia del cliente es una de sus prioridades estratégicas. Sin embargo, la mayoría de compañías B2B no domina las herramientas necesarias para crear, implementar y evaluar una adecuada estrategia de ‘customer experience’ Esther Gasull Socio responsable de Sales and Customer Services de Accenture Strategy España C omo customer experience (CE) se podría definir la manera en la que los clientes y los stakeholders de un negocio perciben todas sus interacciones con una compañía proveedora a lo largo de toda la cadena de valor. En lo que a márketing y ventas se refiere, la CE incluye las campañas de márketing y ventas, su seguimiento, la gestión de cuentas y de pedidos, la solución de problemas, la contratación, el soporte técnico, el mantenimiento, la definición y el seguimiento del acuerdo de nivel de servicio ( en inglés, Service Level Agreement o SLA), la gestión de la planificación y el rendimiento, la efectividad de las ventas y la interacción multicanal con el cliente. En el mundo de la empresa está ampliamente reconocido que la CE es fundamental para crecer. De acuerdo con una reciente encuesta de Accenture realizada a cerca de mil quinientos ejecutivos de ventas, servicios y clientes de empresas B2B en trece países, estos reconocen que la experiencia del cliente ha llegado para quedarse: tres de cada cuatro creen que su correcta implementación se traducirá en importantes y sostenidos cambios en ventas y servicios en los próximos dos años. Sin embargo, la mayoría de ©HARVARD DEUSTO. Esta copia es para uso personal Jugar para ganar 49 TRES PERFILES DE EMPRESAS En función de su actuación a la hora de gestionar la experiencia del cliente, podemos diferenciar tres perfiles de compañías: “masters, o maestras”, “luchadoras” y “rezagadas”. En las dos últimas tipologías, las inversiones en CE se conciben como inefectivas o, directamente, una pérdida de dinero si se comparan con la percepción de las empresas “maestras”: presas que “juegan para ganar” y que pre- ▶ Masters, o maestras. Serían aquellas emsentan un crecimiento de sus ingresos superior a la media. Son capaces de desarrollar potentes estrategias de CE y ejecutarlas con éxito. Sus “secretos” se sustentan en cinco características clave: 1. Llevan la teoría a la práctica. 2. Conocen los verdaderos intereses de sus clientes. 3. Dominan lo digital. 4. Se centran en los resultados y evitan la complejidad. 5. Impulsan la colaboración. ñías que “juegan para no perder” y que tie- ▶ Luchadoras o aspirantes. Son las companen resultados modestos. Suponen el 48% del total. Se podrían diferenciar tres tipos: 1. Las “grandes pensadoras”, más centradas en planificar estrategias de CE que en ejecutarlas. 2. Las “heroínas de la ejecución”, que muestran resultados algo mejores que las anteriores porque son buenas a la hora de gestionar la experiencia del cliente, incluso a pesar de no contar con una base estratégica sólida. 3. Las “buscadoras confiadas”, aquellas que obtienen buenos resultados, aunque no los mejores, porque, a pesar de esforzarse tanto en la planificación estratégica como en la ejecución de la CE, en ambos casos no es suficiente. compañías business -tobusiness (B2B) utiliza de forma poco eficaz gran parte de las inversiones que hace en nombre de la CE. Según la investigación de Accenture, el 76% de los directivos gasta hasta la mitad de sus inversiones en iniciativas inefectivas relacionadas con la experiencia del cliente, es decir, zan resultados financieros bajos o ▶ Rezagadas. Son las organizaciones que lan➤➤➤ ©HARVARD DEUSTO. Esta copia es para uso personal que sus inversiones destinadas a la CE no llegan a tener repercusión. ¿Qué se puede hacer para cambiar esta tendencia? Harvard Deusto Márketing y Ventas ➤ ➤ ➤ negativos. Suponen el 28% del total. Saben que la experiencia del cliente es esencial, pero presentan grandes brechas en el desarrollo de la estrategia y ejecución de la CE. APRENDER DE LAS “MAESTRAS” De los tres perfiles identificados, nos interesa especialmente uno, el de las compañías “maestras” en CE, porque de ellas podemos aprender cómo “jugar para ganar”. A continuación desarrollaremos uno a uno los cinco puntos clave de su exitosa estrategia de CE: 1 Llevan la teoría a la práctica. Del dicho al hecho. Aunque, según la investigación de Accenture, los ejecutivos creen que la creciente importancia de la experiencia del cliente comportará grandes cambios en la gestión de los servicios y de las ventas en los dos próximos años, lo cierto es que, en general, son todavía muy pocos los que actúan en consecuencia (ver gráfico 1). Todas las empresas coinciden en que el concepto de customer experience es fundamental para su negocio, pero entre un 15% y un 35% de las empresas “luchadoras” –las que juegan para no perder– y más del 40% de las “rezagadas” asignan poca importancia a habilidades clave de ejecución estratégica y operacional relativas a la CE. Aún es más significativa, indica el estudio, la brecha “importancia-cumplimiento” en esas competencias, es decir, la diferencia entre la importancia que una empresa otorga a un aspecto y lo bien que considera que lo está haciendo a ese respecto. Las “maestras” reconocen la importancia de todas las competencias clave, y es más probable que la ejecución sea buena en todas ellas: identifican las competencias clave, les dan prioridad y sobresalen en ellas. Las “luchadoras” y las “rezagadas”, por su parte, conceden menos importancia a las aptitudes relativas a la CE y muestran significa- GRÁFICO 1. CÓMO ENTIENDEN LAS EMPRESAS ‘MASTERS’ LA IMPORTANCIA DE LA ESTRATEGIA DE LA EXPERIENCIA DEL CLIENTE Importancia otorgada a las competencias de estrategia y ejecución relativas a la experiencia del cliente (las dos principales competencias, según importancia y media de las competencias). 100% 93% 92% 85% 83% 73% 65% 70% 64% 57% Masters Buscadores de confianza Grandes planificadores Importancia de la estrategia de CE (media de seis áreas) Importancia de la ejecución de CE (media de once áreas) Héroes de la ejecución 57% Los que lo intentan/ rezagados ©HARVARD DEUSTO. Esta copia es para uso personal 50 Jugar para ganar 2 Conocen los verdaderos intereses de sus clientes. Las empresas consideradas “maestras” construyen sus capacidades de customer experience teniendo muy claro qué es lo que realmente importa a sus clientes; conocen lo que estos buscan y valoran. Aúnan medidas y esfuerzos en las áreas que más interés despiertan en ellos en lugar de confiar en mejoras intuitivas inspiradas por grupos de muestra o por el personal de la sede central (ver cuadro). El 93% de las “masters”, frente a solo un 72% de las “luchadoras” y un 55% de las “rezagadas”, aseguran ser buenas en identificar las experiencias diferenciadas que coinciden con las necesidades y expectativas de sus clientes. De este porcentaje, el 65% afirman que las mediciones que realizan en relación a sus clientes les proporcionan datos factibles para mejorar de forma efectiva la CE, frente a un 24% de las “luchadoras” y solo un 10% de las “rezagadas”. Las “maestras” se esfuerzan, y lo consiguen, por conocer prácticamente al detalle los verdaderos intereses de sus clientes. En función de su actuación a la hora de gestionar la experiencia del cliente, podemos diferenciar tres perfiles de compañías: “’masters’ o maestras”, “luchadoras” y “rezagadas” mayor agilidad en sus procesos. Entienden hasta qué punto la tecnología afecta a su negocio, por lo que superan a sus competidoras en este ámbito, pasando de estar afectadas por el cambio digital a ser los “motores” reales de ese cambio: dominar lo digital ha cambiado radicalmente la forma de interactuar con los clientes, porque les permite conocerlos mejor y poder ofrecerles, por tanto, una propuesta extremadamente personalizada. Pero eso no significa que las “maestras” se olviden definitivamente de los canales analógicos tradicionales. De hecho, incluyen formalmente la CE en las operaciones de cada día tanto en los canales digitales como en los analógicos, con especial énfasis en lo que se refiere a búsqueda de resultados. El éxito de la customer experience es un proceso end-to-end para prácticamente todas las “maestras”, y solo para tres cuartas partes de las “lu- ➤ ➤ ➤ cuadro. Conocer lo que los clientes buscan y valoran Las compañías masters unifican esfuerzos, mediciones y experiencia en las áreas que más importan a los clientes en lugar de confiar en mejoras intuitivas. 3 Dominan lo digital. Las empresas “maes- tras” son más tendentes que el resto –sobre todo, mucho más que las “rezagadas”– a reconocer el impacto de las tecnologías digitales tanto en la experiencia de sus clientes como en los resultados globales de la compañía. También suelen tener un mayor éxito al utilizarlas. Es cierto que la mayoría de las empresas reconoce la importancia de lo digital en la interacción con sus clientes, pero las “masters” van más allá: son capaces de vislumbrar los beneficios de invertir en tecnología para generar más oportunidades de ingresos e impulsar 65% 24% 10% Masters Aspirantes Rezagadas Porcentaje que considera que sus mediciones proporcionan datos útiles con los que mejorar la CE. ©HARVARD DEUSTO. Esta copia es para uso personal tivas brechas de rendimiento, tanto en la implementación de las estrategias como en su ejecución. Las “masters”, además, invierten de una forma más agresiva en la futura experiencia de sus clientes. Es decir, respaldan sus palabras con dinero, y entre sus planes está aumentar la inversión en talento, herramientas y procesos necesarios para proporcionar a sus clientes una experiencia eficaz. Son cuatro veces más proclives a aumentar el presupuesto dedicado a customer experience de cara al siguiente año fiscal que las “luchadoras”. En suma, no solo “dicen” que la CE es importante, sino que también llevan la teoría a la práctica. 51 ➤ ➤ ➤ chadoras” y para menos de la mitad de las “rezagadas” (ver gráfico 2). Una proporción similar de “maestras” vincula las evaluaciones, el salario o los bonus de sus equipos de ventas y servicios al resultado de la experiencia que ofrecen a sus clientes. Las “maestras” utilizan lo digital en su beneficio, permitiendo a los clientes que nacieron digitales permanecer digitales. Es decir, si las “luchadoras” y las “rezagadas” tienden a mirar hacia los canales digitales como una forma para darse a conocer y atraer oportunidades, las “maestras” buscan el equilibrio entre los canales digitales y los analógicos, pensando en el creciente número de clientes valiosos y versados en lo digital que esperan que los procesos de ventas y servicios se realicen por esos cauces. 4 Se centran en los resultados y evitan la complejidad. Una de las mayores difi- cultades a la hora de ofrecer una buena expe- riencia al cliente radica en que las empresas no eliminan los programas que no funcionan. En lugar de añadir capa tras capa, lo que engrosa el problema, las “maestras” saben de qué iniciativas librarse. Tras monitorizar la eficiencia de múltiples programas de CE, saben qué funciona y qué no (ver gráfico 3). El 93% de las “masters” asegura seguir los resultados de sus estrategias de CE para medir el impacto e identificar las mejoras, que se centran en qué produce beneficios, frente a un 70% de las “luchadoras” y un 61% de las “rezagadas”. El 65% de las “maestras” constatan que sus mediciones les aportan datos útiles para tomar decisiones, frente a un 24% de las “luchadoras” y un 10% de las “rezagadas”. 5 Impulsan la colaboración. Un factor que es de importancia sustancial en la capacidad de una empresa para generar valor es el liderazgo: ¿quién asume la responsabilidad Las “’masters’” respaldan sus palabras con dinero: aumentan la inversión en talento, herramientas y procesos necesarios para proporcionar a sus clientes una experiencia eficaz GRÁFICO 2. incentivos ligados a la cE Incentivos en el personal propio Incentivos en los socios 91% 85% 75% 72% 47% Masters / “juegan a ganar” Aspirantes Buscadores de confianza Grandes planificadores Héroes de la ejecución / “juegan a no perder” 42% Los que lo intentan/ rezagados de crear y ejecutar estrategias de customer experience? En el caso de las “maestras”, y no tanto en los otros dos grupos, la experiencia de los clientes suele estar centralizada bajo la responsabilidad de una dirección sénior que gestiona directamente varias áreas de experiencia (ver gráfico 4). Pero la solución no es tan sencilla, ya que no se trata simplemente de crear el puesto de chief customer officer. De hecho, los líderes de distintas direcciones dentro de la compañía piensan en la CE de maneras diferentes y con diferentes prioridades. La clave para un liderazgo de customer experience con éxito es la atribución de la autoridad y la responsabilidad que se necesita para alinear todas las prioridades, muchas veces divergentes, y llegar a un consenso en cuanto a qué significa para la compañía la experiencia del cliente. Para las compañías “maestras”, una de las claves de una exitosa ejecución de CE es la colaboración. Son más proclives que las demás ©HARVARD DEUSTO. Esta copia es para uso personal Harvard Deusto Márketing y Ventas 52 Jugar para ganar Para poder “jugar a ganar” mediante el concepto de customer experience, las empresas B2B tienen que hacer frente a los desafíos y oportunidades de las cambiantes dinámicas de negocio de sus clientes, pero es importante que las empresas dominen primero lo más básico de la CE antes de introducir nuevas capacidades. Si se fracasa en lo más primario, el error anularía cualquier beneficio que se pudiera llegar a producir. Ahora, el “viaje” de compra del consumidor es más dinámico, porque este se mueve ágilmente a lo largo de caminos multidireccionales que impulsan su consumo a gran velocidad. También ➤ ➤ ➤ GRÁFICO 3. TOMAR BUENAS DECISIONES Las empresas masters tienen una mayor predisposición a reconocer sus buenos resultados en el seguimiento de la calidad de la experiencia de sus clientes para valorar el impacto e identificar las mejoras. 93% 70% 61% Masters / “juegan a ganar” Aspirantes Buscadores de confianza Grandes planificadores Héroes de la ejecución / “juegan a no perder” Los que lo intentan/ rezagados GRÁFICO 4. M ODELO DE ORGANIZACIÓN DE RESPONSABILIDADES EN LA CE Jefes de los departamentos de Servicios o Ventas 6% 7% 10% Jefes de las Unidades de Negocio 12% 14% 19% Dirección sénior centralizada que trabaja con otros departamentos, pero sin autoridad directa sobre ellos 18% 31% Dirección sénior centralizada que dirige directamente varias áreas y departamentos 35% 64% 48% Masters / “juegan a Aspirantes ganar” Buscadores de confianza Grandes planificadores Héroes de la ejecución / “juegan a no perder” 36% Los que lo intentan/ rezagados ©HARVARD DEUSTO. Esta copia es para uso personal a cooperar, más allá de las ventas, en cuanto al márketing y los servicios, ya sea a través de secciones internas o de proveedores externos. Conocen el valor de promover la colaboración, que tan importante se ha convertido para crear una customer experience consistente y cohesionada, en toda la organización. ¿Por qué? Porque consiguen minimizar el número e importancia de promesas rotas a clientes, resultado de la desconexión entre departamentos (ver gráfico 5). El 90% de las empresas “maestras” resultantes del estudio asegura que la colaboración, tanto interna como externa, es vital y que su ejecución en este campo es buena. La importancia que les dan las “luchadoras” es menor, aunque todavía está por encima de las “rezagadas”. Este último grupo, además, reconoce que su actuación a este respecto es aún peor que la importancia que se le otorga. Las “maestras” priorizan la colaboración entre directivos, y lo hacen bien. Ahora, los negocios son un “deporte de equipo”, de manera que impulsar la colaboración entre departamentos y entre ejecutivos puede ser crucial, así como convertirse en la clave que impulse a una compañía a superar a sus rivales. Y una vez identificados los líderes adecuados, la empresa debe construir un nuevo modelo de cliente. De nada sirve la inversión si se dirige a edificar un modelo caducado en el que se espera que el cliente sea previsible y se mueva siempre por el sendero del descubrimiento. El modelo actual debe estar basado en el entorno de negocios de hoy, para asegurar que la estrategia de la compañía refleja una naturaleza más dinámica, más accesible y más continua. 53 Harvard Deusto Márketing y Ventas Las inversiones a realizar en CE deben decidirse tras una estrategia estructurada que determine el dónde y el cómo “Jugar para ganar o cómo dominar la experiencia del cliente”. © Planeta DeAgostini Formación, S.L. ➤ ➤ ➤ es más accesible, porque el acceso al conocimiento es cada vez más amplio y más abierto, ya que el consumidor encuentra contenidos en todos los canales que utiliza, además de que otros elementos del ecosistema B2B (competencia, amigos, comerciantes, socios...) ejercen actualmente una capacidad de persuasión mucho mayor sobre el consumidor. Y, por supuesto, es un “viaje” ciertamente más continuo: los negocios del cliente esperan un compromiso continuado de sus proveedores. Puntos de contacto permanentes y funciones de sourcing/procurement cada vez más sofisticadas dan lugar a una monitorización de la GRÁFICO 5. E L VALOR DE LA COLABORACIÓN ENTRE FUNCIONES Y CON DISTINTOS ‘PARTNERS’ Las organizaciones “masters” otorgan mayor importancia a la colaboración entre departamentos y con otros socios. ejecución de los proveedores casi en tiempo real, siendo posible comparar de forma continua la promesa con el resultado. Ahora, el foco es la evaluación, no la compra. PASOS PREVIOS En esta era en la que todo se basa en el consumidor, la cultura de las empresas se va transformando para pasar de ser una estructura centrada en el producto a una estructura centrada en el cliente. Para ello, todos los empleados deben entender quiénes son sus clientes, cómo perciben estos sus interacciones con la empresa y el papel que ellos mismos juegan en proporcionarles una “experiencia total”. Hoy, la CE se ha convertido en algo mucho más importante para las empresas B2B. No obstante, crear, facilitar, una experiencia adecuada no es fácil. Requiere que las empresas identifiquen un líder fuerte con la autoridad de hacer que las cosas sucedan, que pongan en marcha un nuevo modelo de cliente y nuevas competencias, en especial en el ámbito digital, y que incorporen la customer experience en todas sus secciones y funciones. Y todo esto requiere tiempo, esfuerzo y dinero. ¿Cómo hacerlo, entonces? Las inversiones a realizar deben decidirse tras una estrategia estructurada que determine el dónde y el cómo. Para ello es conveniente ejecutar cuatro pasos previos: 1. Realizar un diagnóstico que evalúe las actuales inversiones en customer experience y calcule el retorno de la inversión (ROI). 2. Desarrollar un borrador para determinar qué inversiones han sido tanto observadas como apreciadas por los clientes. 3. Comprender en qué destacan otros, tanto en el propio sector como en campos distintos, en cuanto a CE se refiere. 4. Determinar la estrategia para futuras inversiones a lo largo del ciclo de vida del cliente. 90% 76% 55% Masters / “juegan a ganar” Aspirantes Buscadores de confianza Grandes planificadores Héroes de la ejecución / “juegan a no perder” Los que lo intentan/ rezagados Pero, sin duda, la inversión en este ámbito merece la pena, ya que una buena customer experience puede producir beneficios significativos en forma de mayores ingresos. Y precisamente es esto lo que necesitan los directivos de las empresas business-to-business que están cansadas de “jugar a no perder”. Ahora, más que nunca, deben jugar a ganar. ■ ©HARVARD DEUSTO. Esta copia es para uso personal 54
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