Año 3 No. 134 Semana del 28 de agosto al 03 de septiembre de 2011 El banquero que abrazó a Dios Un buen día de 2005, David Barrins, un banquero irlandés, exitoso y con gran porvenir, que trabajaba en el centro financiero de Dublín, sorprendió a su familia, amigos y empresa al anunciar que dejaba su trabajo para seguir la llamada de Dios y convertirse en monje. Al día siguiente ingresaba en la orden católica de los Dominicos. Aunque el banquero irlandés se convirtió hace cinco años, había escuchado la llamada de Dios desde muy pequeño, desde los 10 años, cuando era monaguillo en Collooney, un pequeño pueblo tranquilo, de apenas 900 habitantes, en el norte de Irlanda. «En ese momento me dije: o la ignoras [la llamada de Dios], o le das una oportunidad y la sigues». Al final ignoró la llamada de Dios, no se atrevió a explicarlo ni a sus padres ni a sus amigos, y siguió con su vida. Terminó la escuela e ingresó en la universidad, donde se licenció en Finanzas. No tardó en ser contratado por uno de los cuatro principales bancos comerciales irlandeses, como corredor en el mercado de divisas, convirtiéndose en uno de los corredores con mayor proyección. Barrins viajaba continuamente, ganaba mucho dinero y percibía suculentos bonos. Sin embargo, se sentía vacío. «Mi trabajo no me satisfacía en un nivel profundo. Tenía mucho dinero, pero no me sentía independiente», confesó. Hasta que decidió hacer público su secreto. Veintidós años más tarde, comunicó a sus padres y amigos que abandonaba el trabajo y regresaba a su Sligo natal para hacer votos de pobreza, obediencia y castidad. Barrins contó que en ningún momento se ha arrepentido de su decisión y que no echa en falta el lujo: «Decidí que lo intentaría y que me saldría del sistema, y durante este tiempo [de noviciado] he sido más feliz que en toda mi vida». Durante la ceremonia, su rostro parecía relajado y liberado. Por fin había cumplido su sueño. Él¿Cómo está aquí es posible que muchos vivan con hambre estando tan llena la mesa? CONGRESO EUCARÍSTICO: 02 DE SEPTIEMBRE, ¡Prepárate para participar! EN EL ESTADIO 20 DE NOVIEMBRE (Beisbol) AGOSTO 28 DE 2011 Jesús está pasando por aquí J Editorial esús tomó un pan, dio gracias, lo bendijo y se lo pasó a sus discípulos diciendo: “Esto es mi cuerpo, tomen y coman todos de él”; luego tomó el cáliz con vino y les dijo: “Esta es mi sangre que se derrama por ustedes y por muchos para el perdón de los pecados, beban todos de él; hagan esto en memoria mía”. Con estas palabras Jesús consagró por primera vez su cuerpo y su sangre. Él quiso quedarse entre nosotros, para que la Iglesia viviera de la Eucaristía. Glorioso Jueves Santo aquel. Qué maravilla. Por Pacco Magaña La verdadera parábola de Dios es Jesús Queridos hermanos y hermanas: Les agradezco que hayáis venido para la cita del Ángelus aquí a Castelgandolfo, a donde llegué hace pocos días. La Iglesia en San Luis Potosí vive esta semana el glorioso acontecimiento que nos congrega cada domingo: el congreso Eucarístico Arquidiocesano. Todo este inmenso pueblo hambriento del pan de la vida en torno a este glorioso Pan del Cielo está feliz en presencia de su Señor en persona. La Iglesia es eucarística. Vive de la Eucaristía, es decir, se alimenta de ella. La celebra, la exalta. Adoramos a Jesús que quiso quedarse todos los días hasta el fin del mundo entre los hombres. Y ahora nos llenamos de gozo al contemplar y al adorar juntos a este Señor sacramentado. Este acontecimiento de gloria me recuerda a Jesús cuando acompañado de las multitudes, de las muchedumbres, enseñaba los misterios del Reino a la gente sencilla. Casi puedo ver la multiplicación de los panes en este congreso eucarístico. Jesús camina entre nosotros. Jesús nos nutre con el pan de los ángeles, con el verdadero maná que da la vida al pueblo que camina en el desierto. Ahora necesitamos ser un pueblo eucarístico. Ser un pueblo que muestra a los que no lo han visto, al verdadero rey de la vida. Es muy de desear que todo el pueblo de San Luis Potosí haga manifiesta su fe en el glorioso Jesús; que al mismo tiempo que adoramos al Señor sacramentado, lo sirvamos en los necesitados. Hay que llevar a los pobres la buena nueva de que Jesús habita entre nosotros. Hay que difundir muchísimo más la adoración al Santísimo Sacramento, pero también hay que acercar este pan de la vida a los enfermos; es que muchos saben que en la Eucaristía está Jesús, pero pocos lo ven, pocos lo reciben como alimento que da vida, vitalidad, fuerza y santidad. Necesitamos que nuestra evangelización tenga por objetivo que cualquiera que escuche el evangelio sea llevado al Sacramento hermoso. ¿Cómo es posible que muchos vivan con hambre estando tan llena la mesa? Necesitamos pastoral Eucarística, pero también es menester que se difunda esta belleza de presencia constante en los sagrarios de nuestras Iglesias, de nuestros templos, capillas, parroquias, comunidades. Ojalá que la misión continental que se está preparando en el momento kerygmático lleve a nuestras comunidades al encuentro personal y comunitario con Jesucristo vivo en la Eucaristía. Es cierto eso que dice el canto popular: “Jesús está pasando por aquí”. Ahora es necesario que nuestras almas canten: “mis pies están pasando por donde está Jesús”. Difundamos. Hagámoslo. Que nuestras iglesias nunca estén vacías, ni un minuto. Que siempre esté Jesús visitado por alguien. Pues él constantemente nos visita. Él está aquí. Y qué hermoso es. En el Evangelio, Jesús se dirige a la multitud con la célebre parábola del sembrador (Mt 13, 1-23). Es una página de algún modo «autobiográfica», porque refleja la experiencia misma de Jesús, de su predicación: Él se identifica con el sembrador, que esparce la buena semilla de la Palabra de Dios, y percibe los diversos efectos que obtiene, según el tipo de acogida reservada al anuncio. Hay quien escucha superficialmente la Palabra pero no la acoge; hay quien la acoge en un primer momento pero no tiene constancia y lo pierde todo; hay quien queda abrumado por las preocupaciones y seducciones del mundo; y hay quien escucha de manera receptiva como la tierra buena: aquí la Palabra da fruto en abundancia. Pero este Evangelio insiste también en el «método» de la predicación de Jesús, es decir, precisamente, en el uso de las parábolas. « ¿Por qué les hablas en parábolas?», preguntan los discípulos (Mt 13, 10). Y Jesús responde poniendo una distinción entre ellos y la multitud: a los discípulos, es decir, a los que ya se han decidido por Él, les puede hablar del Reino de Dios abiertamente; en cambio, a los demás debe anunciarlo en parábolas, para estimular precisamente la decisión, la conversión del corazón; de hecho, las parábolas, por su naturaleza, requieren un esfuerzo de interpretación, interpelan la inteligencia pero también la libertad. Explica san Juan Crisóstomo: «Jesús pronunció estas palabras con la intención de atraer a sí a sus oyentes y solicitarlos asegurando que, si se dirigen a Él, los sanará» (Com. al Evang. de Mat., 45, 1-2). En el fondo, la verdadera «Parábola» de Dios es Jesús mismo, su Persona, que, en el signo de la humanidad, oculta y al mismo tiempo revela la divinidad. De esta manera Dios no nos obliga a creer en Él, sino que nos atrae hacia sí con la verdad y la bondad de su Hijo encarnado: de hecho, el amor respeta siempre la libertad. Que la Virgen María nos ayude a ser, según su modelo, «tierra buena» donde la semilla de la Pa- - labra pueda dar mucho fruto. AGOSTO 28 DE 2011 ¿QUÉ NOS ESTÁ FALLANDO? E s una realidad triste, pero cierta, que actualmente tenemos muchos católicos sin conciencia de su misión en el mundo o con una identidad débil y vulnerable. ¿Cómo estamos educando en la fe? ¿Cómo estamos alimentando la vida cristiana? En muchas partes la iniciación cristiana ha sido pobre o fragmentada. Cumplir con nuestra misión evangelizadora incluye la educación en la fe, el poner en contacto a las personas con Jesucristo e invitarles a seguirlo con decisión. La iniciación cristiana incluye el “kerygma” (primer anuncio de Jesucristo, que lleva a la conversión y a asumir un nuevo estilo de vida), significa insertarse en los misterios de la fe y se puede expresar pastoralmente como “catecumenado bautismal” (destinado a evangelizar a los que se preparan a recibir el Sacramento del Bautismo), o bien, como “catecumenado post-bautismal”, que busca anunciar el evangelio a los cristianos que fueron bautizados, pero no han tenido la oportunidad de profundizar en la fe. Es un compromiso de nuestra Iglesia latinoamericana desarrollar un proceso de iniciación en la vida cristiana que comience por el kerygma y, guiado por la Palabra de Dios, conduzca a un encuentro personal con Jesucristo, que lleve a la conversión, al seguimiento en una comunidad eclesial, y madurar en la fe mediante la participación en los Sacramentos, el servicio y la misión. La comunidad que asume la iniciación cristiana de sus integrantes renueva su vida comunitaria y despierta su carácter misionero. El itinerario formativo cristiano se concibe fundamentalmente como una experiencia. Se trata de un encuentro con Jesucristo vivo, anunciado por auténticos testigos. Ser discípulos es un regalo de Dios que está llamado a crecer. Por tanto, la comunidad cristiana ha de velar para que todos los discípulos estén en un constante desarrollo y maduración mediante la iniciación cristiana y la catequesis permanente. Los rasgos que se busca delinear en los discípulos de Cristo son los siguientes: • Que el centro de su persona sea Jesucristo y tenga espíritu de oración. • Que sea amante de la Palabra de Dios y acuda con frecuencia al Sacramento de la Reconciliación. • Que participe en la Eucaristía y se inserte de corazón en la comunidad eclesial y en la sociedad. • Que sea solidario en el amor y un fervoroso misionero. Se ve necesario impulsar una adecuada catequesis que promueva permanentemente en los fieles una adhesión personal y comunitaria a Cristo, especialmente a través de la lectura y meditación de la Palabra de Dios, la oración, la liturgia y la vivencia comunitaria. ¿Conocemos en nuestra Diócesis algunas experiencias para evangelizar a los adultos y ayudarlos a profundizar en la fe cristiana? NOTA: Puedes ampliar esta reflexión leyendo los párrafos 286-300 del documento de Aparecida. Apreciados lectores y lectoras: LAS FIESTAS PATRONALES son un momento muy relevante en la vida religiosa de cada parroquia, rectoría y capilla, por muy humilde que sea. Se puede decir que es el momento culminante de la vida pastoral de las comunidades creyentes. Asistir a las fiestas patronales, es uno de los gratos deberes pastorales del Obispo porque es una valiosísima oportunidad de encuentro fraterno y evangelizador con sus hermanos, es la ocasión propicia para compartir su alegría y acción de gracias al Señor por todas las bendiciones recibidas a lo largo del año. Todo el año hay muchísimas fiestas patronales. Si sólo nos fijamos en las parroquias, rectorías, santuarios y templos con sacerdote propio, hay alrededor de 130 fiestas patronales. Pero, ¡asómbrense ustedes!, en todo el territorio de nuestra Arquidiócesis, hay más de mil capillas, tanto en las áreas urbanas como rurales, que cada año le hacen fiesta a su santo patrono. El regocijo de las fiestas patronales se expresa en el continuo repicar de las campanas, en la pólvora, la música, “el teatro del pueblo”, los juegos mecánicos, etc. El templo o capilla se viste de fiesta, adornado con muchas flores y otros creativos detalles. La imagen de Cristo, de la Santísima Virgen o de los santos y santas se bajan de su altar y se acercan a la comunidad para que los fieles sientan su cercanía, protección, consuelo, ayuda, modelo y estímulo de vida cristiana. La gente rompe la rutina de la vida y descansa. La comunidad fortalece su fe, se reúne y estrecha los lazos fraternos y solidarios. Es que esta es su fiesta muy especial y local; casi su fiesta familiar. Yo gozo mucho en cada fiesta patronal. A veces voy con el ánimo caído pero me vuelve el entusiasmo al ver los rostros alegres de todos, vestidos de fiesta, con ropa nueva o limpia, y un corazón que desborda júbilo por la fe o por el festejo social. El sacerdote parece otro, afanado por muchos detalles, vive la bienaventuranza de la fe de su pueblo y del júbilo de los sencillos. Los niños son los que más gozan las fiestas patronales. Para el sacerdote, la fiesta patronal es como una cosecha espiritual; ese día puede percibir el fruto de sus muchos afanes y cansancios pastorales; puede ver que su parcela sigue dando frutos para el Reino de Dios y para la eternidad de Dios. Pienso que Dios también hace fiesta con su pueblo y deja caer una lluvia de bendiciones en tan dichoso día. Siempre pido a Dios que sigan impulsándose y mejorándose las fiestas patronales para gloria suya, fortalecimiento de la fe y descanso corporal y espiritual de los fieles. La tradición de las fiestas religiosas en la Iglesia tiene hondas raíces bíblicas. Tiene su origen en aquel mandato del Señor al pueblo de Israel, cuando dijo a Moisés: “Estas son las fiestas del Señor, las asambleas santas que convocarán en las fechas establecidas… Estas son las fiestas del Señor, en las cuales convocarán asambleas santas, para ofrecer sacrificios en honor del Señor, holocaustos con ofrendas, sacrificios de comunión y libaciones: cada una en el día prescrito” (Lev 23, 4.37). Las fiestas de Dios y de su pueblo, nuestras grandes fiestas litúrgicas a lo largo del año que celebran los misterios de nuestra salvación: Navidad, Pascua, Pentecostés…, y las fiestas patronales, tienen también la finalidad de hacer salir a los fieles de su arrinconamiento, autosuficiencia y egoísmo, para integrarlos en la vida comunitaria: cada hombre y mujer, en efecto, pertenece al pueblo y pertenece a Dios. La intención fundamental de las fiestas religiosas es doble: participar en la Eucaristía y descansar del trabajo. La participación en la Misa es el centro de la fiesta y marca el ritmo espiritual de la vida del pueblo creyente y el recuerdo de las maravillas que Dios ha hecho y sigue haciendo en cada uno y en toda la comunidad; el descanso aleja a los fieles de las cosas materiales y los afanes cotidianos y los introduce en el tiempo de Dios para que vean, con sentido de fe, el correr de la vida, su significado de salvación y su horizonte de eternidad. No olviden lo que les decía: que todas las fiestas cristianas se inspiran en las fiestas del pueblo de Israel pero muy enriquecidas con el nuevo contenido cristiano. El centro de todas ellas es la fascinante persona de Jesucristo, su palabra, el misterio de su muerte y gloriosa resurrección. A Él se dirigen todas las celebraciones y en Él tienen su feliz culminación porque Él es Rey y Señor de todo el universo, principio y fundamento de nuestra fe. No cabe duda que todas las fiestas religiosas nos hacen percibir la presencia de Dios hasta en las cosas y los acontecimientos más pequeños porque están penetrados por Él que no es un Dios lejano, sino muy cercano, muy cariñoso con sus hijos. “Como un padre siente ternura por sus hijos, así el Señor siente ternura por sus fieles”. Vale la pena tener los ojos bien abiertos para no dejar pasar lo divino que tiene la vida. Estén ciertos que la fe hace la vida transparente y luminosa, mientras que la falta de fe la hace oscura y opaca. Con un corazón sencillo y humilde, podemos ver el paso de Dios hasta en la brisa ligera, en el rostro de cada persona, en la sonrisa de un niño; así también, en el cielo silencioso, en una noche llena de estrellas, podemos oír el paso de Dios; y, ¿por qué no?, también en el repicar de las campanas y en el bullicio de cada fiesta religiosa. “Y, hasta que nos volvamos a encontrar, que el Señor los guarde en la palma de su mano”. +Luis, Arzobispo de S. Luis P. Nuestra historia El venerable Padre Barragán Cano «Un Sacerdote eremita, virtuoso y santo, iniciador del Santuario del Desierto» Por Pbro. Lic. Rubén Pérez Ortiz E n 1633, a dos de diciembre, ante notario, testigos el guardián Fray Lorenzo González y otros dos religiosos hizo «donación irrevocable a la Provincia de San Francisco de Zacatecas de la dicha ermita, casa de vivienda, huerta y lo demás en dicho sitio labrado y edificado, para que los religiosos de dicha Provincia la pueblen y posean como cosa suya», con la única condición «de que por el tiempo de mi voluntad he de vivir y asistir en dicho desierto y casa con dichos religiosos que la poblaren» y de que, a su muerte, le dijesen cierta cantidad de misas. Ignoramos por qué esta donación tan categórica y certificada no llegó a tener efecto, tal vez por la condición de que él viviría con los religiosos; o tal vez porque si la ermita, huerta y demás las habría formado él, el terreno no era suyo, pues hasta 1656 Guerrero donó el sitio al P. Barragán “por el amor que le tenía – dice la escritura de donación- y por los servicios que de él había recibido”. El P. Barragán, el 10 de julio de 1658 «estando bueno y con la salud y en su entero juicio y cumplida memoria» hizo testamento. En él heredó a su hijo espiritual, el Padre Francisco de Chagoyan la ermita y todas sus pertenencias, sacando lo que repartió a otros, y la renta de sesenta y seis vacas chichiguas, quinientas ovejas y cien cabras. Fundó con sus propios bienes, dos capellanías, de las que se declaró patrón: una bajo cuyo título se ordenó y que renunció a favor de sus sobrino, el licenciado Cristóbal Gascón; otra a cuyo título se ordenó el padre Matías Ramos, falleció antes de 1658, y que también dejó a aquél. Junto a las casas en que se fundaron estas capellanías y que estaban junto al convento de San Agustín, tenía otras dos pequeñas, que dejó a su sobrina Angela Conde, viuda. El padre Barragán Cano, después de haber vivido en el Desierto más de treinta y siete años, pasó a mejor vida el 15 de abril de 1665. La noticia de su muerte conmovió a toda la ciudad, que lo tenía por santo. Se cadáver fue – como lo ordenó en su testamento,- sepultado en la Iglesia parroquial, con asistencia de todo el clero y en medio de un pueblo numeroso. La fama de santidad de que ya gozaba en vida, consta por la partida de su entierro, escrita, al parecer por su (segunda de dos partes) albacea el Bachiller Diego de Córdoba Altamirano, reza: «En 16 de Abril de 1665 enterré en el iglesia Parroquial al V.P: Juan Barragán Cano, que vivía en su Desierto de San Juan Bautista, de esta ciudad dos leguas. Hizo testamento: mandose enterrar en dicha Iglesia, en la Capilla del Santo Christo de la Humanidad: díle sepultura en medio del altar mayor, por ser un cuerpo al que se debe toda veneración: murió virgen: se enterró con palma; y murió de edad de setenta y siete años: vivió en dicho Desierto treinta y siete años y días: dixose Misa de cuerpo presente ofrendada de pan y vino y cera». El sepulcro del P. Barragán Cano se perdió, pues la capilla de la Humanidad y Paciencia de Cristo fue demolida en 1670 para dar lugar a la iglesia actual. «Después de 140 años que han corrido desde su muerte a acá –escribió en 1805 el P. Gorriño- aún dura la buena memoria del P. Barragán, y el olor de sus virtudes en la tradición de ellas, que sean trasmitido de padres a hijos…» El P. Montejano al abordar en su monumental estudio Santa María de Guadalupe en San Luis Potosí, ajusta los datos proporcionados por el P. Gorriño en su Oración Eucarística y data el inicio del cambio del patrocinio del venerado santuario hasta que el heredero del P. Barragán Cano, el P. Francisco Chagoyán quién entre su pertenencias –no así el P. Ba-rragán-, deja una imagen de Nuestra Señora de Guadalupe y, tiempo más adelante en 1735, con apoyo del P. Uresti, se comenzará a edificar el solemne y sobrio Santuario del desierto como hoy lo conocemos ya bajo el patrocinio de Nuestra Sra. de Guadalupe. El celular, un desagradable interruptor de diálogo E n estos tiempos en que impera la más sofisticada tecnología, las comunicaciones sociales tienen gran relieve. Los medios modernos de comunicación hacen mas práctica la conversación. Ya no hay necesidad de ir a la calle para encontrarse con alguien. Ya muchos tienen su sitio, y éste se encuentra en internet, en el celular y en otro tipo de aparatos. El que tiene sitio en internet ya tiene un lugar de encuentro y comunicación con los demás. Los aparatos de comunicación optimizan la información, pero debilitan el diálogo. Ahora los encuentros personales tienen mucho de interferencia. Se encuentran cortados, por el constante sonido del celular. Todos necesitamos socializar, pero no son suficientes las relaciones cibernéticas; es decir, las que se hacen a través de internet. No basta el encuentro a través de un aparato. No es suficiente, el ver una película en casa. También hay necesidad de asistir a la sala cinematográfica. Y contagiarse del sentimiento común que despiertan las escenas proyectadas en la pantalla. Las reuniones son fundamentales en la vida de las personas. Porque sólo ahí escuchamos la voz al natural; es ahí donde podemos mirarnos a los ojos; sólo así podemos descifrar el lenguaje del cuerpo, -que muchas veces no coincide con lo que decimos-. Pero desafortunadamente cuando todos están físicamente presentes, espiritualmente se encuentran ausentes. Porque aún en reuniones privadas, cargamos con el amigo virtual; quizá el compañero impersonal, o el cómplice ausente, pero presente a través del celular. Todos comparten la misma mesa, pero no el mismo espíritu, cada cual está agarrado del teléfono, hablando con quienes no participan del encuentro. Y este es un modo fácil de distorsionar o evitar un verdadero encuentro con los amigos. El sonido del celular, es la interferencia que rompe el diálogo. Ahora nos vemos a la cara, pero hablamos con el que no vemos. La comunicación se ha ido deteriorando, está fracturada. Se tienen diálogos a medias, y reuniones incompletas, ya que los encuentros, se comparten también con los ausentes. Hoy abundan las comunicaciones impersonales y los tiempos compartidos. Porque no tenemos la buena disposición, ni la voluntad para prestar el oído y el corazón a los que tenemos físicamente enfrente. Todos necesitamos escuchar, pero también necesitamos ser escuchados. No permitas que el celular, te haga perder a los amigos. Porque cuando te buscan, cuentan a medias contigo. Ya que su rival, el terrible celular, les roba tu atención. Madero 405, Centro 05 Un día en el hospital Poner cuernos Por P. Kino Un hombre está a punto de arrojarse del último piso de un edificio, le avisan a su esposa y ésta dice, “díganle que le puse cuernos, no alas…”. “P oner el cuerno” es una frase que se utiliza cuando una persona que tiene una pareja, le es infiel a ella. En la Biblia, de manera especial en el libro del apocalipsis, “cuernos” es símbolo de poder. Era el arma del carnero, del toro, y por ende símbolo de fuerza (Dn 7, 11). El gran artista Miguel Ángel Buonarroti, realizó una escultura en mármol titulada el “Moisés”, que actualmente se encuentra en “San Pietro in Vincoli” (Roma), le colocó unos cuernos, ya que una traducción de Ex 34,29-35, hecha por san Jerónimo, habla de Moisés con cuernos de luz. Aquí, por tanto, los cuernos tienen otro significado, se podría decir que son rayos de luz, por haber hablado con Dios, y no significan poder. Para algunos animales los cuernos les sirven como antena, por ejemplo los cuernos del caracol. Queridos lectores: Dedico este espacio a los que han tenido algún paciente en casa o en el hospital. Nunca te imaginas que tarde o temprano tendrás que estar en el hospital; ya sea porque lo requieras por alguna enfermedad personal o porque alguien de tu casa necesita los servicios y atenciones médicas. En mi caso, es tan crudo y doloroso ver a tu ser querido entubado, con pérdida del conocimiento, que han pasado 28 horas y no se ha despertado de un profundo sueño y temes que sea el definitivo. Como nos damos cuenta, una simple palabra “cuerno” tiene muchos significados, pero ¿por qué este artículo? La vida te cambia radicalmente, debes de programar tus actividades cotidianas para poder atender, la que será la prioritaria en este momento. Tus padres, esposo (a), hijo (a) o hermano (a), será ante todo y sobre todo donde inviertas tu tiempo y dinero. Tristemente puedo decir, que hay personas tan indiferentes a esta situación, que no son capaces de preguntar siquiera como está su padre o su madre, su hermana o su hijo, ni mucho menos contar con ellos en cuestión de ayudar a lo que se ofrezca. Vivimos en la sociedad donde a veces queremos “mandar al cuerno” muchas responsabilidades asumidas. Mandamos al cuerno el matrimonio, el sacerdocio, los amigos que nos hablan con la verdad. Muchos niños “mandan al cuerno” sus estudios, y se dedican a conformarse con lo mínimo necesario en la escuela. Pongámonos los “cuernos de luz”, como Moisés, que al hablar con Dios salía transformado y se le percibía en su rostro ese resplandor que sólo viene de Dios. Pongámonos los cuernos de poder, es decir, de servicio, pues el poder no es para servirse o aprovecharse de los demás, sino para hacer el bien a los que tenemos a nuestro cargo. Las noches se hacen tan largas y eternas; ya pasaron cinco minutos y tú crees que fue una hora; no hay más espacio en el cubículo para ti y lo único que te acompaña es una silla incómoda que te servirá en momentos para mitigar el sueño o descansar por estar de pie. En algunos casos, por la enfermedad de tu paciente, no te puedes mover ni un instante; se te quitan las ganas de comer o te matas el hambre con cualquier cosa. Finalmente, hagamos a un lado los cuernos de la infidelidad a la pareja, a Dios y a nosotros mismos… No mandemos al cuerno este artículo… No dejas de observar la gota del suero que cae lentamente; te acostumbras al sonido del monitor y ves constantemente las líneas que aparecen haciendo olas de colores que te indican cómo está el pulso, el corazón y la oxigenación. El cuerno es un instrumento musical de viento, que debe su nombre a que ciertamente parece un cuerno de toro. La palabra “cuerno de la abundancia” se refiere a riqueza que sale de dicha figura “cuernaria” (Palabra dominguera que no aparece en el diccionario, pero que se me ocurrió). “Mandar al cuerno” es dejar a un lado de manera agresiva a una persona o a una situación molesta. El día de la operación es el más difícil tanto para el paciente como para los familiares. Si el enfermo está consciente pide los auxilios espirituales y se encomienda a Dios; tiene la seguridad de entrar pero no de salir con vida del quirófano. Todos se unen en oración; en algunos lugares es muy común prender un cirio bendito para que Dios ilumine a los médicos y sobre todo que se haga la voluntad de Dios. Para el que acompaña al enfermo hasta el quirófano, hay dos momentos cruciales. Te mandan llamar para decirte que la operación es de alto riesgo y firmas una responsiva. El otro momento, es cuando se acabó la intervención quirúrgica y te dan el resultado, bueno o malo. La vida de un enfermo en el hospital o en casa y para el que lo cuida, es una oportunidad para bendecir a Dios y de ser dichosos porque se siente su cercanía y su presencia. Jesús es el Médico de médicos que viene a curarnos de nuestras enfermedades y dolencias; Él mismo lo dijo: “Dichosos los que sufren porque serán consolados…” (Mt 5,4). También, cuando le presentaron al ciego de nacimiento dijo: “…es para que en él se muestre la obra de Dios…” (Jn 9,3). Y efectivamente, en la enfermedad notas la obra y la mano de Dios. Al estar mi madre en los hospitales, las personas me identifican como sacerdote y he tenido un encuentro muy cercano con sus enfermos, ya sea en terapia intensiva o en sala. Les doy consuelo y los encomiendo a Dios. Bendigamos a Dios en cada momento, en la salud y en la enfermedad, en el sufrimiento y en el gozo. Que Dios bendiga a quienes se dedican de manera incansable al servicio de la salud y para que todos tengamos una mejor condición de vida. Hasta la próxima. ÁREA PASTORAL Y MISIONERA Fundamento trinitario de la misión 6 Por Pbro. José Antonio Martínez Ortiz L a Iglesia por naturaleza es misionera. Si partimos de la pregunta ¿Dónde tiene origen la misión?, podemos descubrir que nace de un gran amor, basta con observar las maravillas de la creación, no hay algo que exista que Dios no lo haya hecho pensando en cada uno de nosotros, con un amor y una bondad enorme, y con una delicadeza en cada detalle de la creación, hasta llegar a la perfección del ser humano como obra cumbre creado a imagen y semejanza de Él. Dios Padre ha realizado la creación por el Hijo en el Espíritu Santo. El hombre con la libertad que Dios le dio le falló cayendo en el pecado, y fue ahí donde se manifiesta el amor de Dios con la promesa del redentor. La Iglesia de Dios que peregrina en este mundo hacia la patria eterna es, por su naturaleza misionera, puesto que toma su origen de la misión del Hijo y del Espíritu Santo, según el designio de Dios Padre. Dios nos habla desde el cielo C omo en tiempos antiquísimos Dios nos habla desde el cielo; en las tempestades con relámpagos y truenos para decirnos aquí estoy. Fuera del tiempo de aguas, nos regala y nos presenta cada día, elementos necesarios con la naturaleza para nuestra subsistencia. También nos dice aquí estoy, en los Sagrarios, en los conventos y en los asilos. Dice aquí estoy, con los cieguitos, inválidos y mutilados. Vuelve a decir aquí estoy, con los artesanos, artistas. Aquí estoy, con la vida de los niños, adolescentes, jóvenes, adultos, ancianos. Y con nuestra propia vida nunca se cansa de decir aquí estoy. Pero nosotros muchas veces nos comportamos como si fuéramos ateos, ciegos o sordomudos, no vemos todos sus regalos, menos se los agradecemos. El salmo 94 nos exhorta: hoy si escucháis la voz de Dios no endurescais vuestro corazón, como en Merivá cuando vuestro padre me pusieron a prueba, aunque habían visto mis obras. Cuántas veces nosotros hemos tentado a Dios, con nuestra manera de vivir. Pero eso sí, cuando oímos los truenos, no hayamos donde escondernos; y cuando tenemos algún problema que nos afecta, corremos a la Iglesia a buscar a Dios. La misión procede de Dios Amor, Uno y Trino, y se realiza con su fuerza para llevar toda la humanidad hacia Él. El amor del Padre es manifestado por su Hijo Jesucristo y comunicado en el Espíritu Santo. Esta comunión Trinitaria es prototipo del corazón humano, de la comunidad humana y de la comunidad eclesial. Dios Uno y Trino es, por tanto, el objetivo final de la misión. La misión es iniciativa y don de Dios, y se realiza en el dinamismo trinitario de Dios Amor. Dios nos habla desde el cielo y en todas partes. Pero la Misericordia de Dios, sigue dividiendo el mar de la vida, para que lo atravesemos sin remos y sin lanchas. Este voluntad de Dios tiene su origen en el “gran amor” de Dios Padre. tenemos algunos ejemplos como el de la parábola del hijo pródigo (cfr. Lc 15, 11,32) o el texto de san Juan “tanto amo Dios al mundo que envió a su hijo único” (Jn 3, 16). Mira esos dibujitos, -¡son jeroglíficos!- Llamándonos además sin interés alguno a participar con Él en la gloria eterna, difundió libremente la bondad divina y no cesa de difundirla, de forma que Él que es Creador del universo, se haga por fin todo en “todas las cosas” (1Cor 15,28). Dios llama a los hombres a participar de su vida no sólo en particular, sino para constituirlo en su pueblo (Cfr. AG2). Hoy en día el hombre se sigue apartando de Dios por el pecado y vemos la necesidad de la misericordia de Dios para todo el género humano. Tanta violencia, inseguridad, una sociedad permisiva sin moral ni valores es un indicativo de una ausencia de Dios. Hay que reconocer que el cumplimiento de la promesa del Salvador está presente para liberar a su pueblo de la opresión. Por Luis Ricardo Guerrero Romero [email protected] T al vez una palabra poco usada en nuestro vocabulario común, pero sin duda cuna de nuestra escritura. Esta palabra significa escritura sagrada, o grabados sagrados del griego ιεροs (sagrado) y γλιφω (grabar, esculpir), en suma son caracteres en forma de dibujos egipcios esculpidos en los monumentos públicos, la composición de figuras, que narran alguna idea (por así decirlo). Y fue “el sabio” Champollion (historiador, lingüista y egiptólogo francés) quien descifró por primera vez los jeroglíficos inscritos en la piedra rosetta los cuales contenían un decreto de Tolomeo V. 07 Los libros y sus autores Sobre el olvidado siglo XX Tony Judt Edit Taurus 2009 T ony Judt que había entrado en una “época del olvido”, hoy ve que el mundo es tan radicalmente distinto del que hace tan sólo veinte años veía. Hemos dejado de lado nuestro pasado inmediato, incluso de haber podido entenderlo. No sabemos, literalmente, de dónde venimos, y el resultado de esta ignorancia es evidente. Hemos perdido el contacto con tres generaciones de debates políticos a nivel internacional y también de pensamientos y activismo social. Ya no sabemos discutir sobre este tipo de conceptos y hemos olvidado el papel que juzgaban los intelectuales a la hora de debatir, transmitir y defender las ideas que conformaron su tiempo. En este libro Tony Judt, hace revivir aspectos claves del mundo que hemos perdido, y nos recuerda la importancia que siguen teniendo tanto para hoy como para lo que esperamos del futuro. Judt manifiesta sugestivos vínculos entre una asombrosa variedad de temas, desde la historia del abandono y recuperación del Holocausto, o la difícil cuestión del “mal” en la comprensión del pasado europeo, hasta el auge y la caída del Estado en los asuntos públicos o el arrinconamiento de la historia a favor de la “herencia”. Nos lleva más allá de lo que creemos saber para enseñarnos cómo lo aprendimos, y muestra hasta qué punto gran parte de nuestra historia ha sido sacrificada ante el triunfo del mito frente a la comprensión, de la negación frente a la memoria. Este libro es la necesaria hoja de ruta para recuperar el sentido de la historia que necesitamos con tanta urgencia. Sobre al autor. Tony Judt (Londres, 1948-Nueva York 2010) hizo sus estudios en el Kings College de Cambridge y en la École Normale Superiore de París. Impartió clases en las universidades de Cambridge, Oxford, Bérkeley y Nueva York, y en ésta última ocupó la cátedra de Estudios Europeos, que el mismo fundó en 1995. Sus libros: Postguerra (2006), Pasado Imperfecto (2007), Algo va mal (2010) Iglesia Universal MADRID.- En su discurso en la ceremonia de despedida en el aeropuerto de Barajas, el Papa Benedicto resaltó que los jóvenes que han participado en la Jornada Mundial de la Juventud tienen la misión de enseñarle a sus paisanos que “amar a Cristo es vivir a plenitud”. El Santo Padre agradeció a todos los participantes de la JMJ, por su presencia y su testimonio, y los invitó a “difundir por todos los rincones del mundo la gozosa y profunda experiencia de fe vivida en este noble País”. “Transmitan su alegría especialmente a los que hubieran querido venir y no han podido hacerlo por las más diversas circunstancias, a tantos como han rezado por ustedes y a quienes la celebración misma de la Jornada les ha tocado el corazón”. “Con su cercanía y testimonio, ayuden a sus amigos y compañeros a descubrir que amar a Cristo es vivir en plenitud”, agregó. MADRID.- El Papa ha quedado “satisfecho y agradecido por todo el esfuerzo que se ha hecho” para organizar la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Madrid 2011, que ha calificado de “magnífica y en la que todo el mundo ha puesto lo mejor de su parte”, durante el vuelo de regreso a Roma de este domingo, según ha explicado la Embajadora de España en el Vaticano, María Jesús Figa. “La verdad es que había un ambiente de satisfacción y de conclusión de un viaje que ha salido muy bien”, ha agregado. A su vez, ha comentado que los acompañantes del Papa “estaban encantados” con la organización “porque se entendía que no era fácil” organizar el movimiento de un millón de personas asistentes. Iglesia en México MÉXICO.- Los participantes en el II Encuentro Nacional de Radios Católicas por Internet, los comunicadores católicos manifiestan su enorme interés de hacer uso de los últimos desarrollos en tecnología de las telecomunicaciones para difundir las enseñanzas y el “tesoro espiritual” de la Iglesia Católica, ante los distintos cambios y realidades sociales de la vida. Para facilitar a las diversas Radios Católicas por Internet en México en ser un canal por medio del cual lleguen a todos los lugares del país de manera organizada, eficaz, planificada, con contenidos de calidad interactuando con las demás comisiones episcopales y equipos de trabajo de manera competitiva. La Eternal Word Television Network (EWTN) Radio Católica mundial de Estados Unidos, desea brindar aportes técnicos a los comunicadores católicos como un inicio de su apoyo para fortalecer la era digital católica en México. SAN LUIS POTOSÍ.- Los ciento veintiséis jóvenes, que participaron en la Jornada Mundial de la Juventud, han manifestado su satisfacción de ver realizados sus anhelos así como haber alcanzado sus sueños al haber participado en el Encuentro con el Papa Benedicto XVI. Fue una experiencia intensa y sobre todo retadora, pues tanto el clima como los cansancios estuvieron al día, pero la satisfacción de vivir un encuentro de oración, de cantos y de animación valieron la pena, pues el estar con miles de jóvenes de todo el mundo realmente animó la fe, que como manifiesta el lema: “quedamos arraigados y edificados en Cristo”. SAN LUIS POTOSÍ.- Todo listo para llevar a cabo el Congreso Eucarístico Arquidiocesano el próximo 2 de septiembre. Este encuentro dará inicio a partir de las cuatro de la tarde, podrás participar, ya sea desde la procesión partiendo del Santuario de Guadalupe a partir de las 16:00 Hrs. Para llegar al estadio de “20 de Noviembre” (de béisbol) o llegar directamente a este lugar donde se tendrá el momento de Adoración a Jesús en la Eucaristía, así como la participación en la Eucaristía. Todos estamos invitados, participa. ¡No quiero sufrir…! “D esde aquel día, Jesús comenzó a anunciar a sus discípulos que debía ir a Jerusalén, y sufrir mucho de parte de los ancianos, de los sumos sacerdotes y de los escribas; que debía ser condenado a muerte y resucitar al tercer día. Pedro lo llevó aparte y comenzó a reprenderlo, diciendo: «Dios no lo permita, Señor, eso no sucederá». Pero él, dándose vuelta, dijo a Pedro: «¡Retírate, ve detrás de mí, Satanás! Tú eres para mí un obstáculo, porque tus pensamientos no son los de Dios, sino los de los hombres». Entonces Jesús dijo a sus discípulos: «El que quiera venir detrás de mí, que renuncie a sí mismo, que cargue con su cruz y me siga. Porque él que quiera salvar su vida, la perderá; y el que pierda su vida a causa de mí, la encontrará. ¿De qué le servirá al hombre ganar el mundo entero si pierde su vida? ¿Y qué podrá dar el hombre a cambio de su vida?” (Mt 16, 21-26). Jesús anuncia que va a padecer mucho; naturalmente, a partir de aquí, la historia con sus discípulos ya no puede ser la misma. En el evento anterior, justo se acababa de declarar que Jesús era el Mesías, es decir, el destinado a llevar la corona de gobierno, la corona del reinado sobre el pueblo de Dios. De ahí que sea muy complicado para los discípulos comprender que el mesías tenga que sufrir hasta la muerte. Pedro, nuevamente, la hará de interlocutor, hablará no sólo por él sino por todos los discípulos, movido de amor lleva aparte a Jesús para insistirle que no le puede pasar eso. Simón Pedro, a quien Dios le había revelado la verdadera identidad de Jesús, actúa ahora al mero estilo de los hombres que no ven sino con sus humanos ojos. Ese intento de disuadir a Jesús del sufrimiento es casi tan capital como su profesión de fe, pero como contraparte negativa; pues esa negativa al sufrimiento no sólo es una defensa a Jesús, sino que significa un no al sufrimiento de Pedro mismo y de los demás discípulos, es un no al sufrimiento de la Iglesia. Por lo anterior, no extraña la fuerte e inmediata reacción de Jesús: “tus pensamientos no son los de Dios, apártate de mí Satanás”. Con su réplica Jesús deja en claro que su Iglesia, tal como la acababa de llamar (“mi Iglesia”), no puede darle la espalda al sufrimiento. “Padecer mucho” es una realidad que todo creyente, que todo discípulo debe asimilar. El mensaje parece claro: ser discípulo es un logro difícil de alcanzar, porque el discipulado consiste en seguir el ejemplo del maestro que padeció la cruz. Seguir a Jesús se logra ante todo con la negación de uno mismo, lo cual, en el contexto global del evangelio, consiste primero en la obediencia a la voluntad de otro. Difícilmente encontraremos algo más exigente que se le pueda pedir a un ser humano. Negarse a sí mismo es romper toda conexión que nos ate a nosotros mismos, es desvincularnos de lo que son nuestros deseos muy personales. Eso es el inicio del discipulado, dejar de caminar nuestros propios caminos, a fin de ir detrás de otro. El discípulo, dice un comentarista, está en la posición del hombre condenado a muerte, asume la autonegación, lo cual implica entender que la propia vida en este mundo ya ha concluido. La existencia cristiana conlleva desplazar el ego del centro del propio universo y la consecuente disponibilidad para renunciar a toda ambición personal hasta morir por causa de Jesucristo. “Perder la vida por causa de Cristo” significa que el discípulo le pertenece como posesión a Jesús. El Señor del propio yo ya no es uno mismo sino otro. Este texto proclama la primacía de la propia vida comparada con todo lo demás, comparada con el mundo, pues ni con el mundo entero se puede comprar. Según los comentaristas, el concepto de mundo empleado aquí se refiere a todo lo externo, todo lo que implica una atracción opuesta a lo espiritual y eterno. El mensaje a los discípulos parace claro: no seguir a Cristo no sólo es desperdiciar la vida, sino perderla. Ver, reflexionar, analizar, juzgar y actuar: pasos que deben realizar los Asambleístas para su Discípulado y Misión Se realizó con gran éxito la Asamblea Interdecanal de los Decanatos: San Luis Rey y Ntra. Señora de la Expectación Por LCC Angélica Maldonado Morales B e tarina d anta Ca do con S e d nzan roquia s; come de donde , la Par a o t ig s p o s g ilia de E s 4 de a ntonio, o jueve e, vivió su Vig pilla de Sn. A do de cientos d a s a p El verd la ca paña ría, Rio tura en or acom olores”. ñ e S Alejand ristía de aper o r ía D est ca o “Mar con nu p n m ió a una Eu s c e proc acia el partió la e feligreses h d En rueda d e Prensa s obre el Co cesano, M ngreso Eu onseñor S c ebastián Z organizado árate Guzm arístico Arquidior; presbíte á n ro , director d Pedro Sán Familiar; p el c chez Solís resbítero J , o titular de la omité s pal de Pas é Manuel L Pasto toral y el p ó p e z Facundo resbítero F del Santua , Vicario Ep ral ernando C rio del Señ iscoastro Villan or del Sau la importa ueva, párro cito, difund ncia de viv co ieron y hab ir el próxim zarse el 2 laron sobre o Congres de septiem o Eucarísti bre en el e co, a realistadio 20 d e Noviemb re. o er vivid , al hab ia del o z o g nuestro en la parroqu rtimos a o, p del 11m o risto viv dez, los días les c c , n ía o r c g zar y n entro an ale d Ferná uadalupe Sala e su a d Con gr eros, un encu iu C ll s” de do qu sr. J. G 42 caba de Jesú ndo rector el erta. Esperan e r b m o u risto. n sie arlos H “dulce l 2011, cia de C C e a n r d a g o u t la J s go ro. res en 14 de a piritual, el Pb de colo e r s p e m r o sie ases día sea cuarto ajo el lema “Vivamos la comunión, impulsando la formación” y la frase Bíblica “¡Ay de mí, sino evangelizara!” (1 Cor 9,16), se llevó a cabo con muy favorable respuesta por parte de Sacerdotes y fieles laicos comprometidos, la Asamblea Interdecanal de los Decanatos de SAN LUIS REY Y NUESTRA SEÑORA DE LA EXPECTACIÓN, la cual fue presidida por nuestro Pastor, Mons. Luis Morales Reyes, el pasado martes 09 de agosto del 2011 en el interior de la Casa de Acción Católica. El Objetivo General de estas Asambleas Interdecanales es: “Compartir nuestras experiencias en la aplicación del Proyecto formativo, a fin de que sigamos impulsando la formación en nuestras respectivas comunidades parroquiales. El Objetivo Específico: Ofrecer elementos que nos ayuden a implementar nuestras estrategias misioneras para facilitar la misión permanente. Fiestas Patronales en honor a Nuestra Señora de la Asunción Por LCC Angélica Maldonado Morales E l pasado 15 de agosto, distintas parroquias de nuestra Arquidiócesis, que tienen por Patrona titular a Nuestra Señora de la Asunción, festejaron con evidente fervor mariano su fiesta. en los recintos de las parroquias de Tlaxcala, Portezuelo, Santa María del Río, Angostura, Parroquia de Las Tres Ave Marías, y La Catedral Metropolitana, veneraron a la Santísima Virgen María en su advocación de Nuestra Señora de la Asunción, con una solemne Concelebración Eucarística, algunas de ellas, presididas por nuestro Pastor, Mons. Luis Morales Reyes, quien indicó a los fieles amantes de la hermosa Virgen: “Ojalá que esta Fiesta Mariana, esta solemnidad de la Asunción de la Virgen Santísima, nos deje serios y formales compromisos: Que creamos firmemente en Dios y descubramos la grandeza de su amor hacia nosotros; que sintamos su misma alegría en Dios nuestro Salvador; que creamos que Dios mira la pequeñez de nuestra vida y nos compromete a hacer obras grandes de amor en favor de los demás; que la Virgen llevada al Cielo, nos comprometa a vencer las obras de la carne; a vivir en este mundo sin perder de vista los bienes del cielo; a buscar a Dios, a caminar en su presencia y a estar en su amor y en su paz”. CATEDRAL La Catedral Potosina, que tiene por Patrona titular a Nuestra Señora de la Asunción, lució a su máxima capacidad de fieles Marianos, quienes la festejaron con evidente fervor En el bellísimo recinto de la Catedral Metropolitana, El Señor Arzobispo estuvo acompañado del Honorable Cabildo Catedralicio Antes de la Celebración Eucarística, los potosinos acompañaron en prosesión por la Plaza de Fundadores, a la imagen de la Virgen de la Asunción PORTEZUELO Perteneciente a la parroquia de San Pedro, el templo de portezuelos está dedicado a Nuestra madre María en su advocación a la virgen de la Asunción, y con abundante fe, se celebró a su santa Patrona Nuestro Arzobispo Luis Morales Reyes presidió la solemne Eucaristía donde un buen grupo de niños recibieron por primera vez el sacramento de la comunión El Párroco y decano del decanato Beato Juan XXIII el padre José de Jesús Cruz Rodríguez fue el principal promotor de esta jubilosa fiesta que se vivió con desbordante fe y entrega “Por nuestras obras y omisiones seremos juzgados” Por LCC Angélica Maldonado Morales C on una concelebración Eucarística de cuerpo presente, se le dio la mañana del jueves 18 de agosto a las 10:00 horas, el último adiós al Presbítero Samuel Jiménez Escobedo, presidida por nuestro Arzobispo Emérito, Monseñor Arturo Antonio Szymanski Ramírez, en el Santuario de San José y del Señor de los Trabajos, quien acompañado de más de una docena de Sacerdotes de la Arquidiócesis le encaminó hacia la vida eterna. Monseñor Szymanski al iniciar el rito de despedida del Sacerdote que muchas veces con sus manos impartió los Sacramentos, dijo: “La Arquidiócesis de San Luis hoy enluta su corazón al saber la pérdida de otro gran Sacerdote, sin embargo, tiene la firma esperanza en que ya está gozando de la presencia de Dios, pues siempre debe tenerse la fe inquebrantable en la Resurrección, dado que todos vamos de paso por este mundo pasajero”. Nuestro Pastor Emérito indicó: “Es de reconocer el invaluable e incansable trabajo que nos dejó como herencia el Padre Samuel Jiménez Escobedo, quien nació el 24 de noviembre de 1924 en Tepechitlán, Zacatecas. Entregó su alma al Creador la tarde del miércoles 17 de agosto a 86 años de edad y 59 de Presbítero. Fue ordenado sacerdote el 22 de diciembre de 1951 y en este 2011 cumpliría su 60 aniversario sacerdotal. Fue Párroco de Pastora, Villa Hidalgo y Villa de Pozos y Vicario en San Pío X. Entre otros puestos relevantes que lo distinguieron por su eficiencia y su gran amor a la Iglesia Potosina. Descanse en paz. AGOSTO 28 DE 2011 SANTA MARÍA Acompañado de un gran número de sacerdotes en la plaza principal del municipio de Santa María, el Arzobispo Luis Morales invitó a que se acercaran con fe a los brazos de nuestra Virgen protectora Centenares de personas se acercaron a esta parroquia durante todo el novenario que con mucho ánimo y fe iban con la intención de agradecer, otros de hacer peticiones a nuestra Madre María TLAXCALA En la Parroquia de Tlaxcala, los fieles de esta parroquia no dejaron pasar su fiesta patronal e hicieron acto de presencia para venerar a nuestra Madre El párroco J. Miguel Domínguez Mejía, quien junto con los vicarios Valentín Carbajal y Rodrigo Alemán, recibieron a las peregrinaciones, danzas y entradas de cera provenientes de todas las comunidades cercanas TRES AVES MARIA En esta Parroquia nuestro Pastor estuvo acompañado del Párroco de dicho recinto, Pbro. Gerardo Vaglienty Rivera y de varios Sacerdotes invitados LA ANGOSTURA Acompañado del padre decano Alfonso Hernández y el padre Fernando Castro, D. Luis Morales Reyes presidió en el atrio parroquial la solemne eucaristía, quien en todo momento exaltó el gran amor de nuestra madre que ascendió a los cielos Con distintas actividades se vivió de una forma plena, en Angostura, esta fiesta patronal. El domingo 14 de agosto recibió a Don Luis, quien fue recibido por fieles, grupos parroquiales, y por su párroco, Pbro. Carlos Aguilar Jiménez En la Parroquia de las Tres Avemarías, el Párroco Álvaro Rivera de León y su Vicario Guillermo Gil, junto con todos los fieles, recibieron a Don Luis Morales con la hospitalidad que los caracteriza “La Eucaristía, Alimento para la Misión” Congreso Eucarístico Arquidiocesano viernes 2 de septiembre de 2011 Estadio de Beisbol “20 de NOVIEMBRE” PROGRAMA 3:00 PM Animación 4:00 PM Procesión con El Santísimo Sacramento Partiendo de La Basílica de Guadalupe 5:00 PM Hora Santa 6:00 PM Solemne Concelebración Eucarística Y EN CONCIERTO JON CARLO (TEXAS, USA) GRUPO EMMANUEL (MÉXICO) SEMINARIO IGLESIA CATEDRAL PARROQUIAS RECTORÍAS VICARIOS ESTUDIOS EN ROMA P. Tomás Ramírez Álvarez Sagrario Metropolitano Mons. Juan Castillo Pérez S. Miguel Arcángel (S. Miguelito) P. Juan Rodríguez Rodríguez San Juan de Guadalupe P. Marcos Manuel Segura Mtz. San Judas Tadeo (Colorines) P. Gaudencio Castillo Hdz. N.S de Guadalupe (Corte Primero) P. Juan Genaro Ruiz Castellanos San Diego de Alcalá (San Diego) P. José de la Cruz Rodríguez San Joaquín y Santa Ana (Plazuela) P. David Orta Colunga N.S. de Guadalupe (Estanzuela) P. Eliseo Rico de León Sagrada Familia (El Capulín) P. Eduardo Díaz Espinosa Sagrado Corazón de Jesús (Mantequilla) P. Rafael Hernández Díaz La Divina Pastora (Pastora) P. Felipe González López María Auxiliadora P. Margarito de la Torre Torres Sta Teresa del Niño Jesús (La Cofradía) P. Sixto López Tapia Basílica de Guadalupe P. Gerardo Román Picazo Gtz. N. S. de los Remedios Luis Humberto Ríos Bañuelos, DJ Sagrada Familia de Nazareth P. Ruben Omar Villegas Hdz. Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote P. Bernardo Méndez Carmona N.S. de la Asunción (Tlaxcala) P. Luis Fco. Juárez Gallardo La Santa Cruz P. Carlos A. Palomares Salazar N.S. de Fátima P. Jesús Omar Salazar Martínez N.S. de los Dolores (Morales) P. Tomás Pérez Arellano S. Martín de Porres P. Cristian González Facundo Sagrado Corazón (Col. Morelos) P. José Inés Moreno Castillo Santa Cruz del Calvario P. Antonio Esparza Velázquez San Franciso de Asís (Villa de Pozos) P. Antonio Vega Martínez San Franciso de Asís (Villa de Pozos) P. José Elías Rangel Salazar P. Víctor Javier Morales Soldevilla Sta. Catarina de Alejandría (Rioverde) N.S. de la Asunción (Sta. Ma. del Río) P. Ricardo Cavazos Castro Santuario de N.P. Jesús (Salinas) P. Julián Menchaca Ramírez Valle de San Francisco (V. de Reyes) P. Jorge Luis Tejeda Contreras, DJ San Juan Bautista (Cerritos) P. Josué Torres Martínez San Ciro de Alejandría (San Ciro) P. Domingo Alonso Martínez San Jerónimo (Moctezuma) P. J. Eulogio Villanueva Sánchez San José (Zaragoza) Pontificia U. de la Sta. Cruz P. Efraín Moreno Aguirre P. Juan Manuel Uribe Salazar P. Luis Santiago Flores Lucio Pontificia U. Gregoriana P. Antonio Del Castillo Vázquez Disciplinar del Seminario Menor P. Raúl Sánchez Ramírez Adscrito Iglesia Catedral P. Gregorio Fernández Torres, DJ N.S. de Guadalupe (Villa de Arriaga) Pontificia U. Gregoriana AGOSTO 28 DE 2011 D urante muchísimo tiempo (digamos que durante toda la Edad Media) la campana fue el instrumento de comunicación más eficaz. Con ella se llamaba a Misa, se gritaba el paso de la muerte, se anunciaban las tempestades y se invitaba a los fieles a rezar las horas. En uno de sus bellísimos relatos cortos, Alexandr Solzhenitsyn (1918-2008), autor de novelas tan famosas como El pabellón del cáncer, El primer círculo y El archipiélago Gulag, hace esta observación acerca de las campanas que, durante su niñez, esparcían su sonido metálico por todo lo largo y ancho de la campiña rusa: «La gente siempre fue codiciosa y frecuentemente mala. Pero el tañido nocturno resonante fluía sobre campos, aldeas y bosques, e impulsaba a abandonar las pequeñas preocupaciones terrestres y dedicar en esa hora los pensamientos a la eternidad». La antigüedad, ciertamente, no desconoció el uso de las campanas. En Grecia se las tocaba para anunciar la apertura de los mercados, y, en Roma, para señalar la hora de los baños, la proximidad de un eclipse o simplemente para anunciar a los esclavos que era ya tiempo de servir la cena. Sin embargo, no hay punto de comparación entre estas campanas y la campana cristiana, que llegó a convertirse, por decirlo así, en un verdadero medio de comunicación social. Aquéllas eran pequeñas y casi siempre de uso doméstico, mientras que ésta fue grande desde el principio (la de la catedral de Viena pesaba 17 toneladas), y desde el principio, también, se la colocó en el centro de la población. Era ella la que invitaba y convocaba, la que llamaba y prevenía. Es casi un tópico entre ciertos intelectuales hablar de «el oscuro Medioevo». Si lo dicen porque en aquel tiempo la gente carecía de esa bendición llamada luz eléctrica, bien dicho está: en este sentido, la Edad Media no sólo fue oscura, sino oscurísima; pero si lo dicen por otra cosa, se equivocan, pues el Medioevo más que oscuro fue silencioso: de hecho, el tañido de la campana fue el único sonido estruendoso que conoció el hombre de aquella época. Cuando los misioneros cristianos –a partir del siglo VI- llegaban a algún lugar, inmediatamente se daban a la tarea de construir iglesias y erigir cam- 13 Campanas de la discordia panarios. Ésta era una práctica invariable, y nunca tuvieron por ello ningún problema, salvo en China, donde el tañido de las campanas era tenido por un sonido maléfico, pues según las creencias de esa gente el tintineo metálico perturbaba los espíritus de sus antepasados y los hacía ponerse inquietos allí donde estuvieran, ya fuera en el aire, en el cielo o en el averno. «Todo lo que ustedes predican está muy bien y pueden seguir predicándolo todo el tiempo que quieran, decían los chinos, pero por favor no toquen esas malditas campanas, que nos ponen los pelos de punta». Para los piadosos misioneros aquella creencia carecía de todo fundamento, de modo que siguieron tocándolas como si tal cosa. Y cada vez que las tocaban, los chinos se estremecían pensando en sus padres, tíos, tías, abuelos y bisabuelos que seguramente se retorcían de dolor y de pena en algún lugar del inframundo. Tanto conflicto causó en China aquel sonido que hasta el emperador en persona tuvo que tomar cartas en el asunto. Ahora bien, ¿creen ustedes que esto arredró a los misioneros? ¡Para nada! Y así fue como empezó la persecución de los cristianos en China. Este doloroso acontecimiento histórico fue una dura lección para la Igle- sia del siglo XVI, y tanto lo fue que en 1639 un documento de la Sagrada Congregación para la Propaganda de la Fe hubo de recordar a los misioneros católicos del mundo entero la siguiente verdad: «No hay nada más irritante que la alteración de las costumbres ancestrales de los pueblos en beneficio de las costumbres extrañas de reciente importación. Guardaos, pues, de imponer vuestros usos europeos; tratad, más bien, de adaptaros a los suyos». La Iglesia aprendió desde entonces que las culturas deben siempre respetarse, y que el Evangelio no es, ni puede serlo nunca, una especie de escoba que llega a una casa sucia. Pero también debe ser una lección para nosotros, hombres del siglo XXI, pues nos invita a practicar esa noble virtud hoy ya en vías de extinción llamada tacto o delicadeza. La delicadeza no es afeminamiento, como generalmente se cree, sino la capacidad de tener ante nuestros ojos los sentimientos del otro para tratarlos con el respeto debido. Es bueno, por ejemplo, decir siempre la verdad, pero la verdad no debe nunca confundirse con un garrote; es bueno ser sinceros, pero la sinceridad que ofende no es ya sinceridad, sino cinismo. «Yo siempre digo lo que pienso», dice el que se cree sincero; sin embargo, basta con ser un poco perspicaces para darnos cuenta de que, al decir esto, miente. A un conocido mío (del que todos huían por su sinceridad animal) le pregunté una vez: «¿Es cierto que siempre dices lo que piensas? Pues bien, te demostraré que eso no es verdad. Cuando vas con tu esposa por la calle y observas con el rabillo del ojo en la acera de enfrente a una linda joven que pasa por ahí, piensas en muchas cosas. Ojalá no las pensaras, pero conociéndote como te conozco, sé que lo haces. Ahora bien, ¿dices siempre a tu mujer todo lo que se te viene a la mente en esos desenfrenados monólogos interiores? Seguro que no, pues conociéndola a ella como la conozco, no creo que pudieras permanecer a su lado ni siquiera un minuto más. ¿Ves ahora por qué digo que no eres todo lo sincero que afirmas ser? En todo caso, lo eres sólo cuando te conviene». Lo diremos con otras palabras: la delicadeza es la virtud que nos hace tener presentes los sentimientos del otro para no contristarlo innecesariamente. Si yo sé, por ejemplo, que a ti te molesta que utilice ciertas expresiones, no las usaré; si te choca que me suene la nariz, me la seguiré sonando si es necesario, pero sólo allí donde tú no puedas verme ni tampoco escucharme. Si te molesta el ruido de las campanas, y para lo que tengo que decirte no es estrictamente necesario ese ruido, ¿para qué las toco? Juan de Zavala primer impulsor de la Educación Superior en San Luis Potosí Por Mtro. José Ricardo García López J uan de Zavala, nació hacia 1559 en Tellaeche en el pueblo de San Pedro de Luxua o Asúa en el Señorío de Vizcaya, durante su niñez y juventud se le dio el tratamiento de hijodalgo notorio o hidalgo de sangre, es decir que por su sangre era de una clase noble y distinguida. Pasó a Nueva España hacia 1585 y ya para l589 se encontraba radicado en la ciudad de Zacatecas como mercader y guardaminas o sea la persona a la que se le encomendaban las llaves de las puertas de una o varias minas porque era el minero que gozaba de la confianza y consideración de los socios o dueños de las minas establecidas en la región. Por mayo de 1592 dejó Zacatecas y se estableció en las minas de Cerro de San Pedro que se habían descubierto en marzo de ese año, allí inició tienda de mercaderías y en 1593 se asoció con el capitán Miguel Caldera, su amigo, para explotar las minas de Santa Clara, La Biznaga y Los Muertos en el Cerro de San Pedro que fueron las primeras en las que se extrajo oro. La enorme fortuna que Zavala llegó a acumularse debió no sólo a la explotación minera sino también a la agricultura que llevó a cabo en las grandes extensiones de tierra que adquirió y al gran número de cabezas de ganado de cría y engorda que alcanzó a tener. De tal manera se enriqueció que en 1594 llegó a ser el más acaudalado de los mineros potosinos, éstos lo nombraron diputado de república, cargo que se concedía sólo a las personas que se significaban por su honorabilidad, aptitudes y riqueza. El y su esposa Catalina Vázquez, originaria de Granada en España, eran muy solicitados como padrinos en los bautizos no sólo de las principales familias sino también de la gente del pueblo. Todos los vecinos de San Luis afirmaban que ese matrimonio era muy honrado, cuerdo y de mucha caridad y virtud; su magnanimidad quedó patentizada en 1596 cuando se estaba construyendo la iglesia mayor de San Luis, (hoy nuestra Santa Iglesia Catedral), contrató la obra con el alarife Juan de Buitrago y se obligó a pagar los 9 mil pesos oro de su costo, además entregó 4 mil pesos oro para pagar a Francisco de Gilvera la cuarta parte del costo de la techumbre de madera, éste fue el mayor donativo que aportaron los vecinos. En 1609 se trasladó a la capital del virreinato para desempeñar el cargo de Alguacil de Corte de la Real Chancillería, él y su esposa aprovecharon la estancia en México para exponer a fray Bruno Dávila, prior del hospital de los desamparados en esa ciudad, el de- seo que tenían de fundar un hospital en el pueblo y minas de San Luis Potosí, donde se pudieran curar los enfermos pobres que hubiere en este pueblo, a los españoles, pero, preferentemente a los indios, sin que se les cobrara por ello cosa alguna. El nombre del nosocomio sería San Juan Bautista y estaría a cargo de los hermanos juaninos. Fray Bruno aceptó la oferta y la donación del terreno necesario para la construcción y establecimiento del hospital, donó además 13 camas de madera con sus colchones para los enfermos, 26 sábanas de ruan, otras tantas frazadas de Castilla, el mismo número de almohadas de lana y en efectivo, 500 pesos de oro común para medicinas y demás cosas convenientes y forzosas. En 1611 el Virrey y el Obispo de Michoacán concedieron de muy buen grado el permiso para el establecimiento de esa obra porque era “en servicio de Dios Nuestro Señor y bien de los pobres”. Este mismo año llegaron a San Luis fray Alonso Pérez, prior y fundador del hospital y el hermano fray Andrés de Alcázar. El hospital alcanzó tanta fama que a los 5 años de su fundación los frailes no daban abasto con los gastos y recurrieron a la limosna de puerta en puerta para poder sostener esta institución que había de durar más de 200 años. 10 de octubre de 1623 en la ciudad de México entre los albaceas de Juan de Zavala y el provincial Juan Laurencio S.J. dieron cumplimiento a su voluntad firmando la escritura de fundación del Colegio de la Compañía de Jesús en San Luis Potosí. Así fue como se coronó dignamente la vida del rico fundador, poniendo de relieve su amor a sus semejantes. La institución educadora fundada por los jesuitas en San Luis Potosí tuvo una corta duración, sólo 144 años, debido a que en 1767 el monarca ordenó su forzosa salida del reino español, quedando muy pocos vestigios de su paso por el pueblo de San Luis, Minas del Potosí de la Nueva España. Los numerosos retablos, pinturas, esculturas, platería, ornamentos y biblioteca se perdieron para siempre, sin noticia alguna de que hubiera existido un inventario, aunque fuese aproximado, de toda esa riqueza cultural. La parte superior del colegio fue demolida, sólo queda como testimonio de su existencia la parte inferior que ha sido remodelada y hoy en día es el edificio central de la Universidad Autónoma. Tampoco conocemos el destino que tuvo su mobiliario y las pinturas que debieron ser de gran importancia porque además de obedecer a un plan objetivo de decoración, eran piezas didácticas para la formación de la ju- ventud potosina del siglo XVIII. De haberse salvado la biblioteca del colegio jesuita, tendríamos a la mano el botón de muestra que pondría de manifiesto la intensa actividad formativa, en beneficio de la juventud potosina de aquella época, que desarrolló la pequeña comunidad jesuítica en nuestra ciudad. Si hay algo que ha caracterizado a la Compañía de Jesús en el mundo entero, ha sido su excelente formación intelectual. Con el legado que dejó don Juan de Zavala pretendía que los educadores no dependieran, desde el punto de vista material y de su gobierno y administración, de personas ajenas al proyecto educativo, ya que también sabía este generoso bienhechor que quien es pobre no puede vivir su propia vida, porque tantos son los compromisos que causa la indigencia que zafarse de ella es empezar a vivir, debido a que quien pretende un autogobierno, aunque sea modesto, vive soñando en una independencia económica no obstante que al principio parezca elemental, lo que nos hace recordar la frase: la miseria es mordaza que traba la lengua y paraliza el corazón. Además de la Iglesia Parroquial (hoy Catedral) fueron beneficiados, con la generosidad de Zavala, el templo de San Francisco, La iglesia de San Juan de Dios, y por otro lado, las huérfanas del pueblo de San Luis Potosí mediante un legado de 5 mil pesos de oro. Mientras estas cosas sucedían en el pueblo de San Luis Minas del Potosí, los jesuitas escribían con su sangre la historia de las misiones que tenían entre los infieles de todo el mundo a la par que multiplicaban sus colegios para labrar y pulir el alma de niños y jóvenes. El año de 1615 vinieron de San Luis de la Paz a San Luis Potosí los jesuitas a predicar la cuaresma y luego en 1621 regresaron a misionar, fue tanto el provecho espiritual para los potosinos, que los más ricos y connotados vecinos pugnaron por la fundación de un colegio jesuita, pero ya Juan de Zavala les había tomado la delantera porque 2 días antes de morir, el 19 de junio de 1620 dictó su testamento en el que ordenó que se entregaran 50 mil pesos para que se estableciera un colegio de la Compañía de Jesús en San Luis Potosí. El pueblo aún no cumplía 30 años de haber sido fundado, cuando se hizo realidad la voluntad del donante y el Hospital Juanino, (escuela TIPO) Los jugosos donativos hechos por el benefactor de los jesuitas, pudo haberlos destinado a otro tipo de legados para beneficio de los numerosos parientes radicados en esta y en la Vieja España, como era costumbre de los españoles que habían llegado con el fin de hacer fortuna en América. El matrimonio Zavala no tuvo hijos y por esta razón dispuso de una parte significativa de su fortuna en beneficio de la juventud que en aquél momento recibió la educación superior, así como de todos los que aún la siguen recibiendo y de todos los que hemos gozado de esa herencia y que ahora llevamos con orgullo el título de universitarios. Ojalá en un futuro próximo, nuestra Universidad honre a DON JUAN DE ZAVALA imponiendo su nombre a alguno de sus recintos. AGOSTO 28 DE 2011 El derecho a la educación religiosa en las escuelas públicas La lección de la crisis económica, según el Papa: responsabilidad B enedicto XVI considera que la actual crisis económica deja una clara lección: responsabilidad. En una conversación con los periodistas que le acompañaban en el vuelo Roma-Madrid en la mañana de este jueves, el pontífice aclaró que esta responsabilidad económica no sólo es nacional, sino que es también mundial y con el mismo futuro. En estos momentos, reconoció, “se confirma en la crisis actual económica lo que ya se ha visto en la gran crisis precedente: la dimensión ética no es algo exterior a los problemas económicos, sino una dimensión interior y fundamental”. Por Pbro. Valentín Carbajal Méndez [email protected] L os medios de comunicación, que tanto influyen en lo que pensamos, se refieren a la educación religiosa como retrógrada. ¿Por qué defender la educación religiosa en escuelas públicas? Es cíclicamente tema controvertido. Con frecuencia Juan Pablo II destacaba que el diálogo interreligioso es parte importante de nuestra época, hemos de profundizar en las raíces de nuestra cultura, y también en el estudio de la religión (no se entendería la historia de México sin la Iglesia), en ese marco se ve cada vez más claro que el auténtico sentido religioso hace al hombre más humano. El conocimiento de las demás religiones, lo hace más tolerante, y ahuyenta el problema del racismo. Es verdad que unos conocimientos religiosos no bastan para hacernos buenos ciudadanos, pero es un medio más para ello. En todo caso, habrá que asegurar la calidad de esa enseñanza, más que condenarla u oponerse. El Estado puede ser aconfesional, el Estado, no yo, es decir, no los ciudadanos, que sí pueden ejercer la libertad religiosa, y por eso la ley ha de prever que en los centros públicos se impartan enseñanzas religiosas de acuerdo con las convicciones de los alumnos o de los padres. Eso es sencillamente hacer posible el ejercicio de un derecho ciudadano. Los alumnos han de poder escoger el estudio de la religión (porque son creyentes, o por interés cultural). Y ha de ser una materia, el hecho religioso, que pueda evaluarse (no la fe del alumno, lógicamente, sino el conocimiento de esa disciplina), de la misma manera que se evalúan las demás. El revuelo que se arma con la religión en nuestro país no tiene sentido, si no es por el viejo tema del clericalismo/anticlericalismo ancestral de nuestra historia. Estoy hablando de una libertad para el estudio de la religión, pero esto no significa que en el escoger la religión todo sea lo mismo, no: eso sería indiferencia mala, hay que buscar la verdad y actuar en conciencia, siendo la verdad sobre el sentido de la vida del hombre y sobre Dios, algo tan serio, va en ello nuestra felicidad. Pero esto ya pertenece a otro ámbito, no al de conocimientos sino al modo de vivir la fe, será por tanto el aspecto religioso que vivirá en los actos personales o colectivos de tipo religioso. Esa libertad habrá de vivirse con responsabilidad, es decir merece ser una elección hecha a conciencia por los padres, y no dejada a manos de la comodidad, de la elección preferida por el niño en aquel momento. Pero eso no es la materia de la asignatura de religión, eso es catequesis. De manera que defender la religión en la escuela pública es exigir un derecho y esforzarse en un deber de padres cristianos: un cristiano podrá mostrar la invitación –sin fanatismo, con tolerancia, pero con autenticidad- de los auténticos derechos humanos, que colocan al hombre en la más alta dignidad, la de Hijo de Dios; en la más plena libertad, liberado por Cristo del pecado mismo; en el más alto destino, la posesión definitiva y total del mismo Dios por el amor; Jesús nos sitúa en la más estrecha relación de solidaridad con los demás hombres por el amor fraterno y la comunidad eclesial; nos impulsa al más alto desarrollo de todo lo humano, porque ha sido constituido señor del mundo por su propio Creador; se nos da, en fin, como modelo y meta, pues es hijo de Dios encarnado, perfecto Hombre, cuya imitación constituye para el hombre fuente inagotable de superación personal y colectiva. De esta forma, el educador católico puede estar seguro de que hace al hombre más hombre, “El laico católico testigo de la fe en la escuela”. Es una tarea inmensa que el educador ha de transmitir con su vida y su palabra: el hombre inmerso cotidianamente en lo terreno, en la vida secular, está llamado a ofrecer este noble servicio. La economía necesita una razón ética Según explicó en la tradicional rueda de prensa con motivo de sus viajes internacionales, “la economía no funciona sólo con una auto-reglamentación mercantil, sino que tiene necesidad de una razón ética para funcionar para el hombre”. El papa reconoció que se ha demostrado la sabiduría de la propuesta de la primera encíclica social Juan Pablo II: “el hombre debe ponerse en el centro de la economía y la economía no debe medirse según el máximo beneficio, sino según el bien de todos”. La economía “funciona verdaderamente bien sólo si funciona de una manera humana, en el respeto del otro, en sus diferentes dimensiones: responsabilidad con la propia nación, y no sólo consigo mismo, responsabilidad con el mundo”. Tres dimensiones de la responsabilidad “La nación no está aislada, ni siquiera Europa está aislada, sino que es responsable de toda la humanidad y debe pensar siempre en afrontar los problemas económicos con esta clave de responsabilidad, en particular con las demás partes del mundo, con las que sufren, tienen sed y hambre, y no tienen futuro”. Esta responsabilidad implica también al futuro, subrayó. “Si los jóvenes de hoy no encuentran perspectivas en su vida también nuestro hoy está equivocado, está mal”. Por tanto, aclaró, “la Iglesia con su doctrina social, con su doctrina sobre la responsabilidad ante Dios, abre la capacidad a renunciar al máximo beneficio y a ver en las realidades la dimensión humanística y religiosa, es decir, estamos hechos el uno para el otro”. “Esto es fundamental para nuestro futuro”, remachó. 16 Dios llama a todos a su fiesta Por Pbro. Margarito de la Torre H ay fiestas que son exclusivas y excluyentes, pero en la fiesta que organiza Dios nadie está excluido; todos somos invitados a participar de la alegría de Dios. estado de vida. Un padre de familia que vive en el campo no puede ir a diario a la misa ni cada ocho días, porque no la hay, pero Dios le da otros medios para encontrarse con Él. Hay quien piensa que la religión es para unos cuantos. Recuerdo que cuando yo era chamaco, los jóvenes me invitaban a sus reuniones de la Acción Católica (ACJM), pero mis amigos me decían que ir a la capilla era para las viejas; y tal vez lograron influir en mí, porque por mucho tiempo me alejé de la Iglesia. En mi parroquia hay grupos juveniles y comencé a promover una jornada vocacional para el 30 y 31 de julio de este año, 2011; supuse que vendría un buen número y cuando se acercaba la fecha pedí que se inscribieran; ¿sabe usted cuántos se inscribieron en un principio?, ninguno. Finalmente asistieron unos treinta. A veces se piensa que cuando se habla de vocación es algo exclusivo de los padrecitos o de las monjitas y es un grandísimo error. Vocación es llamada y todos, ninguno excluido, hemos sido llamados por Dios a la vida y cada uno tiene una vocación. Dios organiza una fiesta para cada uno en especial. Cada quien puede tener un encuentro personal con Él, según su Una de las principales tareas en la vida debiera ser escuchar la voz de Dios, tal vez la principal; y si escuchamos a Dios descubriremos el amor que Él tiene por cada uno de nosotros. Si no escuchamos a Dios no descubrimos su amor y si no descubrimos su amor no podemos ser felices, y las consecuencias son nefastas: el mal, en todas sus manifestaciones, y la ausencia de Dios en la vida del malvado. Mas no podemos decir simplemente que alguien sea malvado, pues no es la persona sola la única responsable de sus acciones; todos, de alguna manera somos corresponsables. ¿Cómo aprendimos a hablar nuestro idioma? Escuchándolo. ¿Cómo aprendemos a escuchar a Dios? Escuchándole. Cierto que Dios nos ha dado la capacidad de buscarlo y hay quienes, a pesar de que en su casa tal vez no se les habló de Dios o muy poco, llegan a conocer bastante a Dios y amarlo, pero no es lo ordinario. Dios se vale de mediaciones y así como se vale de la pareja humana para dar la vida, quiere valerse, principalmente de ella, para darse a conocer a sus hijos. De aquí el gran privilegio (antes que llamarlo responsabilidad) que los progenitores tienen de dar a conocer a Dios a sus hijos, que en realidad son hijos de Dios. ¿Y si los progenitores no están debidamente formados? He aquí una gran responsabilidad de la Iglesia, de todos nosotros, que somos Iglesia, aunque insisto que más que responsabilidad (que lo es), debemos asumirlo como un privilegio de Dios, ¿pues a quién no le gustaría ir en representación de un gran Rey? Todos deseamos la felicidad y somos todos invitados a la fiesta de Dios, sólo que a veces nos equivocamos de dirección, no tanto porque nos falle la memoria sino la voluntad, y la voluntad se fortalece con la oración. Sabedores que Dios nos ama, busquémoslo cada día más en los sacramentos, en su palabra y en la oración y sabremos encontrarnos con Él en lo ordinario de la vida. ¿Mérito o Triunfo? Con comentario de fut bol y música de rock H ace unos días perdió la selección nacional de fut bol 2 a 0 ante Brasil. Y todo esto en los últimos minutos del segundo tiempo, casi cuando estaba por terminar el juego. Yo vi solamente parte del primer tiempo y el segundo completo. Pero, lo mismo que mis hermanos que veían el fut bol conmigo, coincidíamos en que México merecía ganar; que Brasil supo sacarle jugo a dos oportunidades milagrosas y logró llevarse la victoria y el pase a la gran final de este mundial juvenil de fut bol. Y lo merecía nuestra selección porque fue el equipo que más se entregó en la cancha, el que tuvo más llegadas, el que realizó mejores jugadas, el que sudó realmente la camiseta. Pero el éxito lo obtuvieron los otros. Entonces el mérito es de los mexicanos y el éxito de aquellos. Lo mismo pasa en la vida, que es también como un juego. ¿Cuántas veces habremos visto que una persona se pasa toda la vida en busca del éxito y a veces lo obtiene y a veces no? Hay quienes desde la más tierna infancia van en busca de la mejor calificación, de los cuadros de honor en las escuelas, del triunfo en las competencias; lo mismo los jóvenes que desean el éxito, la fama y la gloria, ya en los deportes, ya en las artes; se juegan la vida en busca del aplauso. Hoy día, por ejemplo, existe el apostar por el éxito en el espectáculo; ahora mismo estoy escuchando a unos muchachitos ensayar su música de rock, pues han formado una banda; hasta aquí llegan los sonidos del bajo eléctrico, los requintos lloriqueantes de las guitarras, la batería con su taca taca pum que me hace estremecer a cada golpe; ellos sueñan con ser exitosos y famosos, estar en giras, viajar por el mundo, tener fans, grabar discos, firmar autógrafos y estar en televisión. No sé si lo lograrán algún día. Tal vez sí, tal vez no, quizá tengan momentos de dicha y momentos de desesperación. El mundo de la fama es tan voluble. Unas veces se está en la cima y otro en los abismos. Sin embargo ellos ponen todo su potencial en lo que anhelan. Cientos de ellos están surgiendo, quizá cuando usted esté leyendo estas líneas escuche también algún grupo musical de su barrio ensayando sus sueños de fama, gloria, fantasía y éxito. Los jóvenes y los adultos también tienen sus sueños de éxito. Unos desean casarse, tener una vida propia, una familia, hijos, un buen trabajo y ser gerentes en la empresa, ser jefes de oficina o de taller, jefa de enfermeras, capitán de cocina, etc. Sin embargo hay los que tienen que hacer jugadas sucias para lograr el éxito. Muchas veces el éxito es fruto de algunas injusticias; a veces hay que descalificar a unos y adular a otros para lograr subir y subir como la espuma; otras veces hay que sacrificar, desconocer o eliminar a otros para que no estorben la subida o el paso, para que las oportunidades sean más favorables y no haya tanta competencia. El éxito a veces es cruel. Y el éxito no siempre es resultado de esfuerzo verdadero y honesto, ¿qué es el éxito entonces? Tal vez sólo frivolidad, posiblemente es nada más la ambición de un aplauso; y el aplauso es sólo un golpe de viento, pasa, no se queda. El mérito no siempre tiene una corona, medallas y aplausos, pero sí que lleva consigo la paz en el alma. Alguno puede tener éxito sin merecerlo, pero quien tiene merito, aún sin bombos y platillos, tiene el corazón tranquilo, porque su esfuerzo iba más allá del triunfo pasajero, de la competencia ocasional. A la paz se entra, no por éxitos, sino por méritos, es decir, por una vida ejemplar, por una entrega generosa y constante en el servicio de los demás. A la vida eterna se entra también por méritos, pero no por los propios, sino por los de Jesucristo, que nos mereció la salvación; y cada que hacemos meritos, es decir, cuando buscamos el Reino de Dios y su justicia, ya tenemos el éxito verdadero: la corona de la gloria. Hagamos méritos, luchemos por merecer. Seguro que junto con el aplauso tendremos la vida, la tranquilidad, la paz. Vivamos al estilo de Jesús. Si Él quiere que alcancemos el éxito en esta vida, él lo hará; y si quiere darnos la gloria, ya lo hizo. Solo es necesario que tengamos deseos de obtenerla. 17 Palabra de Dios El pan de nuestra alegría Por: Pbro. Jorge Aurelio Ramírez Torres Dir. Espiritual de Teología “El que no toma su cruz y me sigue, no es digno de mí “ Evangelio según San Mateo 16, 21-27 En aquel tiempo, comenzó Jesús a anunciar a sus discípulos que tenía que ir a Jerusalén para padecer allí mucho de parte de los ancianos, de los sumos sacerdotes y de los escribas; que tenía que ser condenado a muerte y resucitar al tercer día. Pedro se lo llevó aparte y trató de disuadirlo, diciéndole: “No lo permita Dios, Señor. Eso no te puede suceder a ti”. Pero Jesús se volvió a Pedro y le dijo: “¡Apártate de mí, Satanás, y no intentes hacerme tropezar en mi camino, porque tu modo de pensar no es el de Dios, sino el de los hombres!”. A nte la cascada de información desalentadora, podemos caer en actitudes derrotistas, fruncir el entrecejo y dejarnos dominar por la angustia y la tristeza. Es parte de nuestra vida encontrar motivos para la tristeza más profunda y para la alegría más intensa, estar vivo supone pasar por ambas experiencias. No podemos elegir las circunstancias que desearíamos vivir, pero sí podemos decidir la manera de afrontarlas. La madre Teresa de Calcuta, alma enamorada de la Eucaristía, mujer que palpó a diario el sufrimiento, el dolor, la pobreza y la injusticia, dijo: La alegría es oración, es fuerza, es amor, es como una red de amor con la que podemos pescar. Un corazón alegre es el resultado de un corazón que arde en amor. La Eucaristía es el pan de nuestra alegría, al ser receptores del amor de Dios que siendo grande y todopoderoso quiere venir a mi en la pobreza e insignificancia de un pan sin levadura. Para que yo quiera ser también un pan repartido y esta alegría se traduzca en servicio y en una estabilidad de ánimo. Hoy puede sonar descabellada la idea de buscar la alegría en el servicio, pero considero que este es el mejor aporte que como católicos podemos dar ante la situación que vivimos. En el análisis sobre la violencia, que hacen nuestros obispos, mencionan cómo la inseguridad afecta la vida comunitaria pues las personas se aíslan, se imposibilita la vida comunitaria y la falta de vida comunitaria genera sentimientos de violencia. Nuestros obispos nos invitan a recuperar o abrir espacios comunitarios donde la gente pueda convivir, recrearse o simplemente caminar, con el fin de fomentar el sentimiento de seguridad necesario para la convivencia pacífica. En cuanto a la fe, proponen que todas las actividades evangelizadoras conduzcan al encuentro y seguimiento de Jesucristo y fortalezcan la vida y el compromiso social. Luego Jesús dijo a sus discípulos: “El que quiera venir conmigo, que renuncie a sí mismo, que tome su cruz y me siga. Pues el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda su vida por mí, la encontrará. ¿De qué le sirve a uno ganar el mundo entero, si pierde su vida? ¿Y qué podrá dar uno a cambio para recobrarla? Creo que un excelente medio para vivir lo anterior es la Eucaristía. Que tal si por lo menos una vez al mes, de manera organizada, nos damos a la tarea de celebrar la misa de la fraternidad, entre catequistas, ministros, grupo juvenil, coro, etc. Nos encargamos de invitar y trasportar, si fuera necesario a ancianos y enfermos y convocar de manera personalizada a niños, jóvenes y familias. Y después de la misa compartir una sencilla comida, mientras los niños y los jóvenes pueden cantar, bailar, decir algunas palabras de aliento y de consuelo a los ancianos y enfermos. Una recomendación de la madre Teresa de Calcuta a sus colaboradoras era: acérquense al enfermo y al que sufre como auténticos ángeles de consuelo, transmitiéndoles la alegría que llevan en su corazón. Esta recomen- dación, también la podemos hacer nuestra y esforzarnos por vivirla pues a la vuelta de la esquina hay personas que viven el dolor y están necesitadas de consuelo, la misa de la fraternidad puede ser un momento extraordinario y oportuno para celebrar nuestro compromiso de vivir diariamente la alegría de servir. El motivo de nuestra alegría es, como dicen nuestros obispos, el encuentro con Jesucristo, una vez un periodista le preguntó a la madre Teresa de Calcuta ¿Quién es Jesús para usted? Esta fue parte de su respuesta: “Para mi Jesús es la alegría para ser compartida, el sacrificio para ser ofrecido, la paz para ser dada, el hambriento para ser alimentado, el sediento para ser saciado, el desnudo para ser vestido, el sin techo para ser hospedado, el enfermo para ser curado, el que vive en soledad para ser amado, el indeseado para ser acogido”…. Si tienes dudas o comentarios sobre el tema escribe a: [email protected] Porque el Hijo del hombre ha de venir rodeado de la gloria de su Padre, en compañía de sus ángeles, y entonces le dará a cada uno lo que merecen sus obras”. Palabra del Señor Gloria a ti Señor Jesús Tomar la cruz Cuando contemplamos la actitud del Apóstol san Pedro, que en el Evangelio con profunda convicción reconoce a Jesús como el Mesías, el Cristo; y al mismo tiempo ante el anuncio de la pasión, pretende persuadir al Señor Jesús, podemos vernos retratados en Él. Como el discípulo en los momentos de paz y alegría no es difícil reconocer la presencia del Señor Jesús, pero en los momentos de prueba, de dificultad, de dolor… podemos anteponernos al pensar de Dios, e incluso revelarnos ante su plan de salvación, nuevamente el Señor Jesús nos recuerda que la tarea es cumplir el plan de Dios, más que nuestras comodidades. Hace una propuesta para un itinerario de seguimiento del que quiere ser discípulo: “el que quiera venir conmigo, que renuncie a sí mismo, que tome su cruz y me siga… “Así la palabra nos dice hoy que podemos elegir entre vivir tranquilamente nuestra vida, ahogando en nosotros las exigencias del Evangelio, o seguir las huellas del Maestro, que siempre pide generosidad, libertad y renuncia. En esta propuesta de Jesús queda claro cuál es el camino que como discípulos hemos de seguir, se trata pues de tomar todo de nuestra vida y confiarla plenamente a Jesús. Tomar la cruz nos hace entender la actitud que ha de tener un discípulo ante su Maestro, que ha sido rechazado y perseguido; es pues tomar la vida con lo que soy y con lo tengo, sin miedo a seguirle. Nuevamente el Señor Jesús nos recuerda el gran valor de la vida, que se hizo para darse, sino no tiene sentido. La invitación es también a dar la vida, porque dando la vida es como se gana la eternidad, ¿de qué le sirve a uno ganar el mundo entero si pierde su vida? Por Pbro. José de Jesús Cruz Rodríguez 18 Parálisis cerebral infantil Grupo de trastornos del desarrollo del movimiento y la postura, que provoca limitaciones en actividades. Son atribuidos a una agresión no progresiva sobre un cerebro en desarrollo, en la época fetal o primeros años. Así se define este padecimiento. Brigadas de ayuda al migrante ¡GRACIAS por tu ayuda! ROBERTO ÁNGEL PÉREZ HERNÁNDEZ tiene 12 años de edad, aunque aparenta ser un bebé de apenas 2, debido a la PCI que padece. Se dice que la sufre debido a que cada vez que hay necesidad de que mueva su cadera, le resulta muy doloroso, lo mismo que las crisis convulsivas que se le presentan. La familia de “Beto” vive en una de las colonias más pobres de nuestra ciudad con su mamá, una hermana, primos y su papá Abraham Pérez, quien es comerciante eventual. DÉNLES USTEDES DE COMER El día 2 DE SEPTIEMBRE EN EL CONGRESO EUCARÍSTICO DIOCESANO, agradeceremos lleven una ofrenda de despensa por cada parroquia, alimento que Cáritas Diocesana distribuirá entre las mismas, haciéndoselas llegar. Con mucho esfuerzo en todos sentidos, la familia nos refiere que consiguió llevar a Roberto a valoración al CRIT de Aguascalientes, donde le ofrecen ayuda sin someterlo a cirugía (como le han diagnosticado en San Luis Potosí). Esta situación resulta muy esperanzadora, sin embargo implica el costo del traslado a Aguascalientes 1 ó 2 veces por mes, además de la necesidad de solventar –entre otras cosas- medicamentos, la sonda con la que se alimenta, etc. De nuestra respuesta caritativa y solidaria depende que Beto pueda algún día caminar sin necesidad de ser operado. ¿CÓMO PUEDES AYUDARLO? LIC. EN TRABAJO SOCIAL GUADALUPE DÍAZ CÁRITAS A.C., ÁLVARO OBREGÓN # 626, CENTRO TEL 812 23 51 Y 812 76 15 AGOSTO 28 DE 2011 Dios ha creado todo lo que hay en el mundo para hacerte feliz. Une todos los puntitos y descubre que fue lo que hizo Dios esta vez. Recordatorio para las PARROQUIAS, MOVIMIENTOS APOSTÓLICOS Y CONGREGACIONES RELIGIOSAS: Les invitamos a participar en el RETIRO MISIONERO que realizaremos el próximo jueves 8 de septiembre, de las 9 de la mañana a las 5 de la tarde, en la Casa de Acción Católica. Se invita a 5 participantes por cada parroquia, Movimiento Apostólico o Congregación. TALLERES DE ORACIÓN Y VIDA PARA JÓVENES Y ADULTOS Para que de una manera nueva y sencilla Puedas convertir a JESÚS en un gran amigo. Iniciamos la semana del 22 de agosto y terminamos en la primera semana de diciembre Informes a los tels: Les pedimos que los participantes acudan con una lista que identifique muy bien de que Institución se trata, los nombres de cada uno de los participantes y el pago correspondiente. La cuota es de $100.00 por persona (incluye la comida). Las inscripciones se realizarán el mismo día a partir de las 8:30 a.m. Si acuden con la lista que les pedimos nos ayudaran a hacer mas ágil este trámite. Atentamente. LA COMISIÓN ORGANIZADORA 813.07.80 y 812.79.69 de 8 - 10 pm ¿Le duelen mucho las rodillas? ¿Le han dicho que el único tratamiento es la cirugía? El padecimiento en donde se desgasta el cartílago se llama artrósis Homeopatia y productos naturales Aquí tenemos la solución a su problema hasta desaparecer esos dolores y regenerar (volver a formar) el cartílago. Con un tratamiento natural, además de curar osteoporósis, artrítis y otros problemas de huesos y músculos. Plaza El Pocito Av. 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