38 Disfagia: ¿Quiénes son candidatos a tratamiento no quirúrgico y cómo tratarlos? MEMORIAS. DISFAGIA Disfagia: ¿Quiénes son candidatos a tratamiento no quirúrgico y cómo tratarlos? Dr. Edgardo Suárez-Morán, Dra. Paola Figueroa-Barojas Hospital Español de México, México, D.F. Entre las manifestaciones esofágicas de diversas enfermedades que afectan a este órgano, una de las más importantes por su probable implicación en organicidad se encuentra la disfagia, cuyo origen viene del griego Phagia que significa comer y de Dys que a su vez significa dificultad. Este síntoma que comúnmente es referido por los pacientes como el paso difícil del alimento a través del esófago o como una sensación de que el alimento se mantiene retenido en él. Para su estudio y tratamiento se divide en disfagia orofaríngea o de transferencia y disfagia esofágica propiamente. La primera se refiere a aquella que es causada por la incapacidad de deglutir el alimento, provocada por la alteración de uno o más de los procesos implicados en la deglución.1,2 La segunda, se refiere a aquella causada por alteraciones que involucran el cuerpo del esófago propiamente dicho. El tratamiento de la disfagia está dirigido a minimizar la broncoaspiración, mejorar la habilidad de alimentación y deglución y optimizar el estado nutricional del paciente. Generalmente el tratamiento está dirigido a la patología de base, pero hay ocasiones en que ésta no es susceptible a tratamiento médico.3 Disfagia orofaríngea Existen causas muy diversas de disfagia orofaríngea y como ya se ha mencionado antes el tratamiento debe ser individualizado (Cuadro 1). No contamos con una estrategia de tratamiento adecuada para todos los casos, pero existen principios generales de tratamiento. Modificaciones dietéticas Es el componente principal en el tratamiento de la disfagia orofaríngea, se recomienda el empleo de modificaciones en la textura según la fase de la deglución que se encuentre afectada. Si la función deglutoria mejora, la consistencia de la dieta se modificará de forma individualizada. Se puede además utilizar fórmulas especiales para mejorar la función inmune, aunque su eficacia es discutible, ya que no ha demostrado mejoría en la sobrevida. Existen en EU compañías especializadas en nutrición que comercializan productos de consistencia apropiada para la alimentación de pacientes con disfagia (Homehealth labs y Novartis). Es importante conservar un adecuado estado de hidratación y aseo de cavidad oral, ya que estos enfermos son susceptibles a deshidratación e infecciones oportunistas.4 Ejercicios de rehabilitación y maniobras compensatorias Los ejercicios de rehabilitación pueden ser directos e indirectos. Los directos se realizan durante la deglución y están diseñados para mejorar la fuerza motora oral, el rango de movimiento y la coordinación. Los indirectos tienen como finalidad fortalecer los músculos de la deglución. Existen también técnicas de facilitación como el estímulo eléctrico de la faringe con el objetivo de lograr una reorganización cortical, ésta se administra mediante un estimulador manual conectado a dos electrodos colocados en el cuello. Otra técnica comprende la estimulación neuromuscular faríngea profunda (DPNS) que estimula tres sitios reflejos: 1) la base de las papilas gustativas en la base de la lengua para mejorar la retracción de la misma; 2) el paladar blando para mejorar su elevación y 3) los músculos constrictores faríngeos superior y medial para mejorar la peristalsis faríngea y la apertura cricofaríngea. Otra variante es la estimulación térmica-táctil con la finalidad de aumentar la velocidad de deglución, consiste en la aplicación de frío sobre el arco facial anterior bilateral con un espejo laríngeo.5 Las técnicas compensatorias consisten simplemente en la corrección de la posición de la cabeza y maniobras respiratorias. 39 Rev Gastroenterol Mex, Vol. 72, Supl. 2, 2007 Suárez-Morán E y col. CUADRO 1 ETIOLOGÍA DE LA DISFAGIA OROFARÍNGEA Y MODALIDADES DE TRATAMIENTO Alteración Tratamiento no quirúrgico Alteraciones del sistema Nervioso Central (SNC) Evento vascular Cerebral (EVC) Síndromes extrapiramidales (Enf. de Parkinson, Corea de Huntington, enf. de Wilson) Traumatismo Craneoencefálico (TCE) Neoplasia del tallo cerebral Enf. de Alzheimer Esclerosis múltiple Parálisis cerebral Esclerosis lateral amiotrófica (ELA) Medicamentos (fenotiazinas y benzodiacepinas) Dieta, cambios posturales, ejercicio, GEP Alteraciones del sistema nervioso periférico Atrofia muscular espinal Síndrome de Guillain Barré Poliomielitis Síndrome pospolio Difteria Medicamentos (toxina botulínica, procainamida y citotóxicos) Alteraciones miogénicas Miastenia Gravis Dermatomiositis Polimiositis Enfermedades del tejido conectivo Sarcoidosis Miopatía tirotóxica Síndromes paraneoplásicos Distrofia miotónica Distrofia muscular oculofaríngea Drogas (amiodarona, alcohol, hipolipemiantes) Botulismo Alteraciones estructurales Divertículo faríngeo posterior Divertículo faríngeo lateral Membrana esofágica cervical Barra cricofaríngea Estenosis cricofaríngea Tumores orofaríngeos Cirugía de cabeza y cuello Radioterapia Osteofitos cervicales Suspender medicamentos Plasmaféresis, inmunoglobulina, esteroides Antibióticos Suspender medicamentos Esteroides, inmunomoduladores, timectomía, agentes antiacetilcolinesterasa, plasmaféresis Inmunosupresión Tratamiento de enfermedad de base Suspender medicamentos Soporte médico Miotomía endoscópica Dilatación forzada endoscópica Tratamiento quirúrgico 40 Disfagia: ¿Quiénes son candidatos a tratamiento no quirúrgico y cómo tratarlos? CUADRO 2 PORCENTAJE DE PACIENTES QUE PRESENTAN DISFAGIA EN LAS DIVERSAS PATOLOGÍAS Y OPCIONES DE TRATAMIENTO PARA LAS MISMAS Causa Disfagia % Espasmo Esofágico Difuso 30-60% Acalasia 60-90% Esclerodermia ERGE 25-53% 30% Esofagitis infecciosa Esofagitis eosinofílica Esofagitis por cáusticos Divertículos esofágicos Anillo de Schatzky 30% 50% 17-30% 5% Opciones de tratamiento No invasivo Relajantes de músculo liso (Nitratos, bloqueadores de canales de calcio) Dieta suave, anticolinérgicos, bloqueadores de canales de calcio Manejo antirreflujo (IBP, antagonistas H2), manejo de esclerodermia Manejo antirreflujo (IBP, antagonistas H2) Antibioticoterapia dirigida Modificación en dieta, esteroides tópicos o sistémicos, moduladores de inflamación Dieta absoluta, esteroides Ninguno Dieta blanda En pacientes que no recuperan la función deglutoria a pesar de las maniobras antes descritas se recomienda el uso de alimentación nasoenteral mediante sondas o la colocación de gastrostomía endoscópica percutánea (GEP). DISFAGIA ESOFÁGICA Existen diversas enfermedades esofágicas que causan disfagia. Estos pueden ser clasificados en cuatro grupos: 1. 2. 3. 4. Invasivo NO quirúrgico Enfermedades causadas por lesión mucosa. Neoplasias. Alteraciones de la luz esofágica. Alteraciones de la musculatura lisa del esófago y su inervación. Al igual que en el caso de la disfagia orofaríngea, el tratamiento de la disfagia esofágica debe estar dirigido a la causa de la misma (Cuadro 2). Dilataciones repetitivas Dilatación neumática, inyección de toxina botulínica Ninguno Dilatación endoscópica Ninguno Dilatación endoscópica Dilatación endoscópica Reparación endoscópica Dilatación Patología mucosa La lesión mucosa se define como el daño ocasionado por agentes intrínsecos o extrínsecos que es capaz de alterar la integridad de la mucosa, lo que lleva a inflamación aguda que puede llegar a ser crónica y dejar secuelas permanentes. Las causas más frecuentes de disfagia esofágica secundaria a lesión mucosa son: 1) Enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), con o sin estenosis pépticas, 2) Esofagitis, ya sea infecciosa, eosinofílica, cáustica o por radiación.6 Las estenosis pépticas son generalmente secundarias a ERGE, pero existen otras causas que deben considerarse en el diagnóstico diferencial: 1) estenosis cáusticas, 2) estenosis inducidas por medicamentos, 3) estenosis postoperatoria, 4) estenosis micótica. Posterior a la confirmación endoscópica, la dilatación es el tratamiento de elección, ésta puede realizarse de manera progresiva con dilatadores de Savary flexibles o con dilatadores neumáticos. La elección entre los tipos de dilatadores debe basarse en la experiencia del endosco- 41 Rev Gastroenterol Mex, Vol. 72, Supl. 2, 2007 Suárez-Morán E y col. Estenosis péptica Dilatación progresiva + terapia antirreflujo ¿Resolución del cuadro? Endoscopia de control para confirmar resolución de esofagitis y repetir dilatación progresiva Sí ¿Resolución del cuadro? Sí No Control periódico Reaparición tadía Sí Reaparición precoz o disfagia persistente: considerar inyección de esteroides o tratamiento quirúrgico Figura 1. Algoritmo para el manejo de estenosis pépticas. pista, ya que los estudios publicados no establecen superioridad de un tipo de dilatador con respecto al otro. Si se utilizan dilatadores de Savary, el primer dilatador a utilizarse debe ser de un diámetro aproximado equivalente al diámetro estimado de la estrechez. Se introducen dilatadores de un diámetro cada vez mayor hasta que se encuentra la primera resistencia, luego de lo cual no se pasan más de dos dilatadores durante una sesión. Si se utilizan dilatadores neumáticos, la dilatación inicial está limitada a un diámetro de hasta 45F. El tamaño de la dilatación inicial de la estenosis aparentemente no correlaciona con la recurrencia de la misma ni la necesidad de dilataciones repetidas, por lo que no se justifica la dilatación agresiva de las estenosis para prevenir su recurrencia. El grado de dilatación debe ser individualizado y basado en la respuesta sintomática y en las dificultades encontradas durante el procedimiento de dilatación. La mayoría de los pacientes refieren alivio importante de la disfagia cuando se obtiene un diámetro de dilatación de 40F a 54F. En general no se recomienda dilatar las estenosis a un diámetro mayor a 60F.3 El manejo antirreflujo agresivo con inhibidores de la bomba de protones (IBP) es coadyuvante en el manejo de disfagia, disminuyendo la sintomatología y el número de dilataciones esofágicas necesarias. Para los pacientes con disfagia persistente o recurrente posterior a un intento inicial de dilatación y terapia antirreflujo, se debe confirmar endoscópicamente la resolución de la esofagitis por reflujo antes de realizar una nueva dilatación; si la esofagitis ha remitido, la necesidad de dilataciones subsecuentes es determinada de forma empírica. En el caso de estenosis refractarias se puede intentar inyección de corticoide y en casos excepcionales puede requerirse la colocación de una prótesis endoluminal para estenosis benignas.1 El riesgo de ruptura es alrededor de 0.5%. La cirugía está generalmente indicada si ocurre una perforación franca (Figura 1). La esofagitis infecciosa se presenta más frecuentemente en pacientes inmunocomprometidos, en los que pueden coexistir múltiples infecciones. Su tratamiento depende del aislamiento del germen causal. La Candida albicans es el agente causal más frecuente y su trata- 42 Disfagia: ¿Quiénes son candidatos a tratamiento no quirúrgico y cómo tratarlos? miento es a base de fluconazol 100 mg/d por 7-14 días, también pueden utilizase soluciones con nistatina, pero sólo son útiles en casos leves. Las infecciones virales (herpes simple y citomegalovirus) responden al uso de antirretrovirales (aciclovir, ganciclovir). Las úlceras idiopáticas que se presentan en pacientes con SIDA pueden ser tratadas con prednisona 40 mg/d con disminución gradual de la dosis a lo largo de cuatro semanas.6 El tratamiento de la esofagitis eosinofílica se basa en dietas de eliminación o hipoalergénicas, esteroides inhalados y sistémicos. Se ha utilizado Fluticasona 220 a 500 mcg/dosis dos veces al día durante tres meses con resultados variables. En casos de difícil control se ha usado esteroides sistémicos (metilprednisolona 0.5 mg/ kg). Se han reportado algunos casos con respuesta a moduladores de inflamación como cromoglicato de sodio y montelukast.7 La disfagia secundaria a ingesta de cáusticos se presenta cuado hay lesiones de segundo grado (afectan hasta la muscular, con formación de úlceras profundas). Los fenómenos de reparación cicatrizal determinan la aparición de estenosis únicas o múltiples en 17-30%, en las ocho primeras semanas. De la misma forma, la disfagia asociada a terapia con radiación suele ser secundaria a daño inflamatorio crónico con fenómenos de fibrosis que condicionan estenosis y suele presentarse cuando se utilizan dosis de radiación mayores a 60 Gy. En ambos casos, las estenosis pueden ser tratadas de forma alternativa con dilataciones anterógradas o mediante la implantación de una endoprótesis. El último procedimiento ha demostrado ser igualmente eficaz, con un tiempo de curación más corto. El fracaso del tratamiento conservador obliga a considerar el tratamiento quirúrgico.8 Acalasia Tratamiento farmacológico Disfagia Sí Toxina botulínica No Control Disfagia No Sí Disfagia Disfagia Disfagia No Disfagia No Sí Repetir dilatación forzada (max x 3) No Disfagia Sí Valorar gastrostomía Figura 2. Algoritmo de manejo médico de pacientes con acalasia. Control Sí Repetir toxina botulínica o plantear dilatación forzada 43 Rev Gastroenterol Mex, Vol. 72, Supl. 2, 2007 Neoplasias Tanto las neoplasias benignas como malignas del esófago pueden ocasionar disfagia. En ambos casos, el tratamiento de elección es la resección de los mismos, pero en el caso de las neoplasias malignas que no son resecables, se puede realizar tratamiento endoscópico paliativo. Existen diversas modalidades de tratamiento entre las que se encuentran la dilatación periódica, la colocación de endoprótesis esofágicas, terapia ablativa fotodinámica o con láser y la resección mucosa endoscópica.9 Suárez-Morán E y col. creando una comunicación entre el divertículo y el esófago y permitiendo su drenaje hacia la luz esofágica.10 Alteraciones de la musculatura lisa del esófago y su inervación Las principales causas de disfagia secundaria a alteraciones de la musculatura lisa del esófago y su inervación son la acalasia y los trastornos motores esofágicos no acalasia. Acalasia Alteraciones de la luz esofágica Anillos de Schatzky y membranas esofágicas El tratamiento de los anillos esofágicos es la ruptura de estos mediante el paso de un dilatador único de gran tamaño (45-60F). Posterior a la dilatación abrupta, se debe administrar tratamiento antirreflujo agresivo para resolver la esofagitis por reflujo asociada. Al igual que en las estenosis pépticas, la necesidad de dilataciones subsecuentes se determina de forma empírica; sin embargo, es probable que ocurra una recidiva de la disfagia, por lo que se debe informar a los pacientes de la posibilidad de repetir las dilataciones. En caso de disfagia persistente o recurrente, a pesar de una dilatación adecuada y apego a terapia antirreflujo, se recomienda realizar manometría esofágica. En caso de identificarse algún trastorno tratable de la motilidad, como acalasia, la terapia a seguir estará dirigida a la patología de base, si no se encuentra ningún trastorno de la motilidad tratable, se debe repetir la endoscopia para confirmar la ruptura del anillo y que la esofagitis se haya resuelto. Si persiste el anillo, se justifica realizar otro intento de dilatación forzada. Los anillos refractarios que no responden a la dilatación con dilatadores estándar, pueden responder a dilatación neumática con balones grandes (Balones para acalasia), incisión electroquirúrgica endoscópica y resección quirúrgica. Esto rara vez es necesario y se debe considerar únicamente después de descartarse otras causas de disfagia.5 Las membranas esofágicas rara vez requieren de tratamiento, pero cuando ocasionan disfagia, pueden ser tratadas con dilatación endoscópica. Divertículos Representan 5% de los casos de disfagia y su tratamiento generalmente es quirúrgico aunque se han desarrollado nuevos métodos de tratamiento endoscópico Debido a que la causa de acalasia es desconocida, el tratamiento se basa en intentar compensar las anormalidades funcionales. El pobre vaciamiento esofágico se trata mediante la reducción de la presión del esfínter esofágico inferior (EEI) de manera que la gravedad promueva el paso del alimento hacia el estómago.11 Existen cuatro tipos de tratamiento paliativo disponibles. El manejo de la acalasia depende en gran medida del riesgo quirúrgico. El tratamiento farmacológico con nitratos o bloqueadores de los canales de calcio logra el alivio de los síntomas hasta en 70% de los casos, pero es poco tolerado debido a sus efectos secundarios, los fármacos crean tolerancia disminuyendo su eficacia. Generalmente se administran de forma sublingual 30-45 min antes de los alimentos y se ha observado mayor respuesta en pacientes que presentan dilatación esofágica mínima.12 El manejo a largo plazo es limitado. Para pacientes con comorbilidad importante que previene el manejo quirúrgico o dilatación neumática, existe un procedimiento endoscópico de bajo riesgo, la inyección de 80-100 U de toxina botulínica en los cuatro cuadrantes del EEI con aguja de escleroterapia.13,14 Éste parece ser un procedimiento seguro que puede inducir una remisión clínica durante por lo menos seis meses en aproximadamente dos tercios de los pacientes con acalasia. Sin embargo, su efecto es de corta duración y se requiere de inyecciones repetidas para mantener la remisión (66% de los pacientes en remisión a los seis meses permanecerán en remisión al año, a pesar de las inyecciones repetidas).11 Otro abordaje es la dilatación neumática endoscópica con dilatadores de gran calibre (50F o mayor). Se requiere de una dilatación forzada a un diámetro mínimo de 3 cm para romper la capa muscular circular y tener un efecto sobre el EEI.15 Se ha observado una eficacia clínica de 32-98%, con mejor respuesta en pacientes 44 Disfagia: ¿Quiénes son candidatos a tratamiento no quirúrgico y cómo tratarlos? mayores. En pacientes con una pobre respuesta inicial o recurrencia rápida, es poco probable que respondan a dilataciones subsecuentes, conlleva un riesgo de perforación de 1-5%.3 Trastornos motores no acalasia Dentro de los trastornos motores esofágicos no acalásicos que pueden ocasionar disfagia se encuentran el Espasmo Esofágico Difuso, el Esófago en Cascanueces, el Esfínter Esofágico Inferior Hipertónico y en algunas ocasiones los trastornos de hipocontractilidad acentuada. El tratamiento de los primeros es a base de relajantes de músculo liso, existen algunos estudios controlados que sugieren que el uso de ansiolíticos, terapia conductivo-conductual y biorretroalimentación pueden ser efectivos en estos pacientes.11 En algunas ocasiones también se ha intentado la inyección de toxina botulínica y la dilatación endoscópica con resultados variables. Los trastornos de hipocontractibilidad acentuada responden en su mayoría a otras patologías subyacentes como son enfermedades mixtas del tejido conectivo, diabetes mellitus y enfermedad por reflujo gastroesofágico y es por esto que su manejo depende de la patología de base. Una gastrostomía para alimentación es una alternativa más segura que la dilatación neumática o la miotomía, pero muchos pacientes neurológicamente intactos encuentran que la vida con una gastrostomía es inaceptable. DISFAGIA FUNCIONAL Se desconoce la verdadera prevalencia de este trastorno. Se caracteriza por pruebas diagnósticas que no demuestran patología estructural o alteraciones manométricas y su diagnóstico se realiza por exclusión basándose en los criterios de Roma III. El tratamiento incluye evitar factores precipitantes, la correcta masticación de los alimentos y terapia cognitivo-conductual. Al igual que otros trastornos funcionales responden al uso de relajantes de músculo liso, anticolinérgicos, ansiolíticos y antidepresivos.16 REFERENCIAS 1. Cook IL, Kahrilas PJ. American Gastroenterology Association Technical Review on management of dysphagia. Gastroenterology 1999; 116: 455-78. 2. Castell OD, Richter JE. The Esophagus. 4th. Ed. Philadelphia: Lippincot Williams and Wilkins; 2004. 3. Malagelada JR, et al. Recomendaciones de la WGO-OMGE para el manejo de la disfagia, 2004. 4. Lister R. Oropharyngeal dysphagia and nutritional management. Curr Opin Gastroenterol 22: 341-6. 5. Paik NJ. Dysphagia. Emedicine, Diciembre 2006. 6. Achkar E. 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