1. Educación

MODELO RESUELTO DE COMENTARIO DE TEXTO
EL BRILLO DE LA MISERIA
Séguéla es una ciudad pequeña y polvorienta tumbada en el corazón del norte
rebelde de Costa de Marfil. Está rodeada por gargantas excavadas en la tierra de donde
docenas de jóvenes sacan tierra a paletadas en busca de los codiciados diamantes, vigilados
desde los taludes por otros jóvenes con fusil en ristre. Cada diamante que encuentran, una
vez cortado y tallado, valdrá miles de dólares en el mercado mundial: ellos ganan cinco
dólares a la semana. Es sobrecogedor el contraste que hay entre la imagen elegante,
perfecta, inmaculada de los diamantes en Europa y la realidad de estas minas miserables
donde se afanan al sol muchachos mugrientos empuñando palas y picos, sin otra máquina
que una primitiva bomba de agua. Aquí no hay nada que se parezca al derecho laboral,
únicamente el cansancio de una gente que trabaja para sobrevivir bajo los ojos insomnes de
las armas.
Los comerciantes locales afirman que siguen explotando las minas como han hecho
toda la vida, pero no es cierto: ahora, los diamantes financian la guerra. En Abiyán se dice
que son malienses los que se encargan de pasar las piedras preciosas de contrabando por los
países vecinos: Malí y, sobre todo, Ghana. Ghana es el destino soñado porque forma parte
del Proceso de Kimberley, un sistema de certificación que garantiza que los diamantes
exportados por las naciones signatarias no son “diamantes ensangrentados”, no están
nutriendo una guerra y espurreando muerte. Desde hace cuatro años, Ghana exporta
diamantes “limpios”, vendidos con el visto bueno de la comunidad internacional en los
barrios ricos de las capitales ricas, con una etiqueta que asegura su procedencia pacífica:
diamantes que han sido sacados de la tierra en el norte de la Costa de Marfil para comprar
nuevos fusiles, lanzagranadas y morteros. Cuando, finalmente, un informe de Naciones
Unidas desveló hace unos meses lo que todos sabíamos, los grandes magnates mundiales
del diamante expresaron su preocupación y decidieron enviar una misión a Ghana para
mejorar su capacidad de control de fronteras, pero este país no fue expulsado del Proceso
de Kimberley: las autoridades ghanesas mostraron también su sorpresa. Los diamantes
siguen cruzando la frontera, todos siguen haciendo caja.
F. GOITIA y G. SÁNCHEZ TERÁN, XL Semanal
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ANÁLISIS DEL TEXTO “EL BRILLO DE LA MISERIA”
1. Redacte un resumen del texto.
2. A propósito del texto señale:
a. el tema, la tesis y los argumentos.
b. tres elementos formales relevantes empleados en la construcción del texto.
c. su opinión sobre el tema del texto, de forma breve y razonada.
1. Resumen:
En Costa de Marfil se extraen diamantes en condiciones de miseria y de violencia y se
exportan ilegalmente a través de Ghana, país firmante del Proceso de Kimberley, que
certifica que no servirán para financiar guerras. Las autoridades implicadas, la comunidad
internacional y las grandes empresas comercializadoras parecen ser las últimas en enterarse
de esta situación y no han hecho todavía nada para evitar este tráfico sangriento.
2. a el tema, la tesis y los argumentos.
Tema: La extracción y el comercio ilegal de diamantes en países africanos.
Tesis: Las autoridades internacionales y las instituciones afectadas por el tráfico de
diamantes, que sirve para comprar armas en los países africanos en guerra, se desentienden
de este terrible problema y prefieren continuar con su lucrativo negocio.
Esta tesis no es completamente explícita, pero podría resumirse en la frase que cierra el
texto: "Los diamantes siguen cruzando la frontera, todos siguen haciendo caja"; frase que si
bien aisladamente no refleja una idea del todo precisa, en el contexto del texto adquiere
pleno significado.
Argumentos:
"El brillo de la miseria" es un texto periodístico en el que se combinan información y
opinión, de ahí que al no ser un texto estrictamente argumentativo los hechos y los
razonamientos, así como las opiniones de los autores, se mezclen continuamente.
En el primer párrafo se nos describe la situación de una pequeña ciudad, Séguéla, y las
circunstancias que rodean la extracción de los diamantes. Encontramos aquí un argumento
de ejemplificación (un caso particular nos ayuda a comprender un problema general), al
mismo que tiempo que, sospechamos, se trata de algo que los autores han visto con sus
propios ojos, dada la forma tan precisa de contarlo (argumento de experiencia personal). La
incidencia en detalles dramáticos sobre la miseria y la violencia que rodean este hecho
("jóvenes que sacan tierra a paletadas (...) vigilados por otros jóvenes, fusil en ristre"),
("minas miserables"), ("muchachos mugrientos") ("bajo los ojos insomnes de las armas")
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busca que el lector se vea afectado emocionalmente, se conmueva ante esta escena de
explotación (argumento afectivo). Otro procedimiento muy evidente empleado para
persuadir al lector es el argumento de contraste: aparece ya en el primer párrafo ("Cada
diamante que encuentran, una vez cortado y tallado, valdrá miles de dólares en el mercado
mundial: ellos ganan cinco dólares a la semana”). Y continúa: "Es sobrecogedor el
contraste...". Continuamente los autores se refieren a esta oposición entre las terribles
condiciones de vida en el país de origen y la imagen lujosa y sofisticada de los diamantes
en los ricos países donde se venden.
Una posible aparición del argumento de autoridad se daría cuando se cita un informe de
Naciones Unidas que avala los hechos antes referidos. Un informe de esta institución ha de
ser riguroso por naturaleza y su fuerza de convicción es poderosa. Pero su importancia
queda devaluada por el hecho de que los autores señalan, sarcásticamente, que este informe
"desveló hace unos meses lo que todos sabíamos", dando a entender que, o bien los
organismos de control son absolutamente ineptos o, lo que es peor, prefieren mirar a otro
lado.
Por otra parte, a lo largo de todo el texto se van acumulando hechos y datos, informaciones
periodísticas (argumento de hechos y datos) sobre la situación en esos países africanos, la
ruta que sigue el contrabando, en qué consiste el Proceso de Kimberley o cómo, a pesar de
su complicidad, Ghana no ha sido expulsada de ese acuerdo internacional para evitar el
comercio sangriento de diamantes.
Quizá se podrían rastrear otros argumentos indirectos o subyacentes como el argumento
moral (basado en que tanto la guerra como la explotación laboral son moralmente
reprobables) o el argumento causa-efecto (la terrible situación de miseria y de violencia en
muchos países africanos es la consecuencia de la actitud egoísta de Occidente).
Todos estos argumentos confluyen en la afirmación final, muy gráfica y expresiva, que
podríamos tomar como una formulación de la tesis, tal y como hemos señalado más arriba:
"Los diamantes siguen cruzando la frontera, todos siguen haciendo caja". Se trataría por
tanto de un texto con estructura inductiva.
2 b. tres elementos formales relevantes empleados en la construcción del texto.
Por su propia naturaleza periodística e informativa y por el público amplio al que
va dirigido, este texto pretende la claridad y eficacia expositivas y se puede afirmar que las
consigue, pues utiliza un nivel de lenguaje medio o estándar, con términos de uso común y
frases no excesivamente largas ni con mucha complejidad sintáctica. En el léxico
encontramos alguna palabra más culta, tomada del vocabulario político-administrativo
(“signatarias”, línea 17, que en un nivel más popular equivale a “firmantes”) pero, a
renglón seguido aparece un término coloquial como “espurreando”. Estas dos palabras
establecen los límites entre los que se mueve el vocabulario de este artículo periodístico, en
el que no falta alguna frase hecha propia del habla actual (“haciendo caja”, línea 27, con el
significado de “ganando dinero”, “haciendo negocio”).
Aunque no estemos ante un texto literario y, por tanto, ni la finalidad estética ni la
función poética sean dominantes, los autores han cuidado la forma de expresión y han
utilizado algunos recursos literarios que dan más intensidad y refuerzan el significado.
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Llama especialmente la atención el empleo muy habitual de la antítesis –utilizando esta
figura en un sentido amplio y flexible- para contraponer las situaciones tan distintas de las
minas y de los países productores, por un lado, y de los países ricos y de los compradores
por otro. La oposición se da en el mismo sintagma del título (“brillo de la miseria”) hasta
constituir casi un oxímoron. En otros casos son los adjetivos explicativos con valor de
epíteto los que se encargan de contrastar: “imagen elegante, perfecta, inmaculada de los
diamantes”, –nótese también la enumeración- frente a las “minas miserables” y los
“muchachos mugrientos”. Para marcar el choque de ideas los autores se valen, además, del
procedimiento de poner en relación de yuxtaposición, mediante el signo gráfico de los dos
puntos, frases antitéticas; esto ocurre en las líneas 5, 13, 15 y 20. Otras veces prefieren la
coordinación adversativa con nexos como “únicamente” (línea 10) o “pero” (línea 13 y
línea 25).
La intencionalidad crítica y la búsqueda de una implicación afectiva del lector se
manifiesta también mediante el uso muy abundante de adjetivos, la mayoría con carácter
descriptivo o valorativo. Citaremos solo algunos ejemplos tomados del primer párrafo, pero
igualmente sucede en el segundo: "ciudad pequeña y polvorienta", "codiciados diamantes"
“Es sobrecogedor”, " imagen elegante, perfecta e inmaculada", "minas miserables",
"soldados mugrientos", "primitiva bomba de agua"...
Además de estos tres rasgos relevantes (al alumno se le piden solo tres) podríamos
señalar la presencia de algunas figuras literarias como la personificación (“los ojos
insomnes de las armas”, líneas 10-11) y expresiones metafóricas como “el corazón del
norte rebelde de Costa de Marfil”, (línea 1), “diamantes ensangrentados” (línea 17) o
“espurreando muerte”. La misión de estos recursos, igual que la de los apuntados en los
párrafos anteriores, es la de profundizar en la expresividad, emotividad y fuerza
comunicativa del texto más que la búsqueda estricta de la belleza.
c. su opinión sobre el tema del texto, de forma breve y razonada:
El texto resulta muy interesante, pues de una manera directa y realista nos permite
conocer una tragedia que está ocurriendo en el continente africano y de la que los europeos,
confortablemente instalados en nuestro mundo egoísta y desarrollado, apenas somos
conscientes. Me ha impresionado especialmente esa escena inicial que nos pone ante los
ojos el destino de jóvenes obligados a trabajar en condiciones de esclavitud en las minas o
que, armados con fusil, obligan a otros a seguir excavando. Comparto la posición crítica de
los autores y pienso que este problema no tendrá solución hasta que la comunidad
internacional no tome medidas contundentes contra todos los países y las empresas que
incumplen las normas del Proceso de Kimberley. Pero, además, buena parte de la
responsabilidad de esta situación corresponde a los consumidores de los países
occidentales, cuyo amor por el lujo y la ostentación y por mantener un nivel de vida
excesivo les lleva a ignorar la suerte de otros seres humanos atrapados en el infierno de la
pobreza, la violencia y la injusticia.
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