Las ánimas milagrosas en Venezuela Angelina Pollak-Eltz [email protected] Estudios de postgrado, UCAB Universidad Católica Andrés Bello Resumen La devoción a los santos tiene mucha importancia para todos los católicos en el mundo entero, sobre todo en los países latinoamericanos, donde casi todos tienen su santo de protección personal. A partir del siglo XII solamente la Sagra Rota en Roma decide sobre la canonización de nuevos santos. Sin embargo, todavía en Venezuela y otros países el mismo pueblo elige sus «muertos milagrosos», que en vida eran curanderos, personas humildes y caritativas o víctimas de accidentes. Entre ellos hay también revolucionarios y algunos Robin Hood, que robaron a los ricos para dar a los pobres. Igualmente, se implora a «malandros» (asesinos, atracadores) que, en la creencia del pueblo, pueden salvarse del infierno cuando ayudan a los vivos. Para pedir un favor a cualquiera de estos santos, el creyente suele hacer una promesa; y cuando ocurre «el milagro» hay que pagar sin regatear. Este culto a los muertos empieza espontáneamente y a menudo se propaga rápidamente en todo el país. Sin embargo, cuando no ocurren más milagros el «santo» es olvidado. Algunos «muertos milagrosos» son invocados también por los espiritistas del Culto de Maria Lionza, que pretenden recibir sus mensajes por mediums en trance. El «santo popular» más conocido es el médico José Gregorio Hernández, pero como esta también invocado por los espiritistas, su canonización oficial será difícil. Palabras claves: santo popular, muerto milagroso, canonización, espiritismo. ❏❏❏ VIII CONGRESO DE INVESTIGACIÓN Y CREACIÓN INTELECTUAL DE LA UNIMET 111
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