ANDREW 50LTIS SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADA. � a1e"árez en E xplote los trucos y sutilezas del orden de jugadas en la apertura TUTOR Editor: David Domingo Coordinación editorial: Paloma González Traducción: Antonio Gude No está permitida la reproducción total o parcial de este libro, ni tampoco su tratamiento irúonnático, ni la transmisión de ninguna forma o por cualquier medio, ya sea electrónico, mecáruco, por fotocopia, por registro u otros métodos, sin el permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright. Título original: Transpo Tricks in chess Publicado por primera vez en U.K. en 2004 por B. T. Batsford Limited, un sello de Anova Books Company Limited, London. © 2007 by Anova Books © 2007 del texto by Andrew Soltis © 2009 by Ediciones Tutor, S.A. Marqués de Urquijo, 34. 28008 Madrid Tel.: 91 559 98 32. Fax: 91 541 02 35 E-mail: [email protected] www.edicionestutor.com • Socio fundador de la World Sport Publishers' Association (WSPA) Maquetación: Juan Moraño ISBN: 978-84-7902-788-9 Depósito legal: M-34.272-2009 Impreso en Gráficas COFAS Impreso en España - Printed in Spain 3 Sumario Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . CAPÍTULO 1 Aperturas abiertas . 5 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13 CAPÍTULO 2 Apertura Ruy López . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33 CAPÍTULO 3 Defensa Siciliana . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 51 CAPÍTULO 4 Aperturas semiabiertas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 87 CAPÍTULO 5 Aperturas de Peón Dama . . . . .. . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . 111 CAPÍTULO 6 Defensas indias . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 179 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . CAPÍTULO 7 Defensa Holandesa y aperturas de flanco Índice de variantes de apertura . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 143 . . 199 Signos convencionales + ++ 0-0 0-0-0 ? !? ?! !! ?? ± :¡: ± :¡: +-+ = oo '2!? ECO Jaque Jaque mate Enroque corto Enroque largo Buena jugada Mala jugada Jugada interesante Jugada dudosa Jugada extraordinaria Grave error Ligera ventaj a de las blancas Ligera ventaj a de las negras Ventaja de las blancas Ventaj a de las negras Ventaja decisiva de las blancas Ventaj a decisiva de las negras Posición igualada Posición complicada, difícil de evaluar Posición complicada tendente a la igualdad Enciclopedia de Aperturas de lnformator 5 Introducción Las aperturas se han vuelto tan complejas y enrevesadas, que hemos olvidado nues tro principal objetivo al jugarlas, es decir, la razón por la que, digamos, preferirnos 1 e4 a 1 d4 (u 11 h3 a 1 1 �e3), a saber, con seguir el medio juego que queremos jugar. Lamentablemente, también nuestros oponentes pueden elegir, a fin de llegar a un medio juego que les convenga. Rara vez ambos medios juegos coinciden. ¿Cómo conseguir el que usted quiere? Por sorprendente que parezca, no puede confiar en su legendaria habilidad posicio nal, su capacidad de cálculo (superior a la de Fritz) ni en su deslumbrante carisma personal. Lo que tiene que hacer es recu rrir a la superchería, a la astucia de la transposición. Piense, por ejemplo, en la apertura 1 e4 eS 2 ltJf3 ltJc6 3 .,tbS ltJf6 4 0-0 ltJ xe4 5 d4, la línea principal de la Defensa Berlinesa en la Ruy López. (Ver diagrama l.) En el 99% de las partidas, las negras responden aquí con 5 ... d6 ó 5 . . . .i.e7, y la vida sigue. Pero rnerode.ando en el laberinto de las notas al pie, descubrirnos 5 a6!?. Nor..• malmente, se acompaña del comentario "si 6 i.a4, entonces 6 ... b5 7 .tb3 d5, transpo niendo a la Defensa Abierta". Puesto que se trata de una nota al pie, apenas reparamos en ella. Después de todo, 5 ... a6 "sólo transpone". Eso nos dice que no importa, porque sólo conduce a otra apertu ra, es decir, a algo irrelevante en esa página. Pero resulta que 5 ... a6 ha sido un ar ma valiosa para muchos jugadores, desde Paul Morphy hasta Vassili Ivanchuk. Su fuerza radica en la posibilidad de que las negras puedan llegar a dónde quieren lle gar (la Defensa Abierta), y evitar lo que quieren evitar: la Variante del Cambio (3 ... a6 4 �xc6). 6 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ Sutilezas como ésa rara vez se apre cian, hasta que pasan a incorporarse a la "teoría". Tal fue el caso de la partida Bot vinnik-Capablanca (AVRO 1938), que se hizo famosa al instante y que comenzó con 1 d4 llif6 2 c4 e6 3 llic3 .ib4 4 e3 d5 De qué forma degrada las opciones de su oponente o incrementa las suyas pro pias. Una estrategia básica en cualquier apertura es incrementar las opciones pro pias. Consideremos esta conocida posi ción: Hoy día parece obvio 5 a3 � x c3+ 6 bxc3. Pero en 1938 se consideró una ju gada magistral. "La idea de esta jugada es típicamente moderna, a saber, transponer a una variante favorable que no se hubie se alcanzado de una forma normal", escri bió Reuben Fine. En realidad, hay una forma normal que permite a las blancas evitar un peón do blado (la desacreditada 4 a3 �xc3+ 5 bxc3 dS? ! ) . Botvinnik empleó 5 a3 ! para empu jar a Capablanca a entrar en una versión favorable de 4 a3. No juzgamos las transposiciones por el mismo parámetro que hacemos con otras jugadas. Una idea original de apertura (o novedad teórica, como suele llamársela) se evalúa según la nueva posición que cree. Pero una transposición que, por de finición, produce una posición conoci da, como 5 a3 ! , lo hace brillantemente. Podríamos juzgarla por sus efectos, por ejemplo: Se trata de un esquema, es decir, de una formación básica de partida en una apertura importante. En este caso, se trata de un esquema que ha servido como ram pa de lanzamiento de millares de Sicilia nas Dragón, que a menudo continúan con 10 ... llieS y ... l:lc8/ ... llic4. Pero en una partida de 1997, Anand Kiril Georgiev, las negras ensayaron 10 llia5!?. Las blancas pronto apreciaron la diferencia. Después de la natural 11 �b3, las negras podrían transponer a líneas más conocidas, con 1 1 . la c8 y 1 2 . . . lli c4 1 3 �x4 : xc4. Pero 10 .. lliaS concede a las negras una opción adicional, ... lli xb3+, que pueden emplear según cuáles sean las siguientes jugadas de las blancas. En otras palabras, las negras pueden elegir si de sean o no transponer, con ... lli c4. En lugar de tratar de imaginar lo pe ligroso que puede ser . . . lli xb3+, las blan.•• . . . I NTRODUCCIÓN cás se inclinaron por una opción prácti ca, 11 .te2!, que podríamos considerar una contrasutileza, porque elimina la op ción extra de las negras y deja al caballo sin mejor opción que jugar a c4. Esto surtió un efecto benévolo, porque una sutileza en el orden de jugadas puede juzgarse también por: La forma en que enerva o confunde a su oponente. Objetivamente, 1 1 �e2 no es mej or que 11 � b 3 . Pero psicológicamente constituye un fuerte golpe, como es típi co de las transposiciones, que suelen te ner una mayor potencia psicológica que obj etiva. Después de 11 l:i c8 12 �bl, las ne gras no pudieron armarse de valor para realizar la mejor jugada, 12 ... tt:J c4, por que daría paso al medio juego que las blancas buscaban, pues al pasar por alto 10 ... tt:Je5, las negras decidieron práctica mente que no querían entrar en ese me dio juego. Así pues, eligieron una política muy di ferente, 12 a6?. En el Dragón, j ugadas tan lentas suelen resultar fatales, como su cedió en este caso. .•. 7 13 g4! bS 14 h4 e6 15 a3 hS 16 �gS hxg4 17 hS! gxhS 18 .l:txhS .li:!.cS 19 fxg4 1::r x c3 20 _t xf6 'ilV x f6 21 'ilV x c3 tLi c4 22 �xc4 bxc4 23 'i!Vxc4, y las blancas ga naron. Esto demuestra que las transposicio nes plantean trucos que afectan no sólo al orden de jugadas, sino también a la ecuanimidad de su oponente, quien, al comprender que está siendo arrastrado al medio j uego que usted busca, puede perder el habitual aplomo con que los jugadores afrontan normalmente las 15 primeras jugadas de la apertura. Y los ju gadores que pierden la confianza, come ten errores. Volvamos a 1 e4 eS 2 tt:Jt3 tt:Jc6 3 .tbS tt:'if6 4 0-0 tt:'ixe4 5 d4 a6. Giovanni Vescovi era el jugador n.º 60 del mundo, cuando, en 2005, se enfrentó por primera vez, con blancas, a esta posición. Decidió que no se dejaría arrastrar a la Defensa Abierta. Pero eso significó que debía optar por 6 �xc6?!, lo que resultó ser el preludio a una mala idea, 6 dxc6 7 'i!Ve2 .tfS 8 g4? ••• .tg6 9 h4 •.• Las negras podían haber refutado esta continuación con 9 'i!Vd7! 10 tt:'ixeS 'i!Vxd4, como ya había jugado Johannes ••. 8 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ Zukertort, ¡nada menos que en Londres 1883 ! Vescovi invirtió 40 minutos para descu brir esa dudosa línea. Esto nos lleva a otro criterio de transposición, que puede me dirse por: La forma en que su oponente piensa. La verdadera batalla de la apertura co mienza cuando puede forzar a su oponen te a salir de sus conocimientos teóricos. Sólo entonces se arriesga a cometer erro res y a invertir un tiempo considerable en reflexionar. Ése fue el caso, cuando Vishy Anand, con negras, jugó una partida rápida de de sempate entre fenómenos, en 1994, con la Defensa Petrov. Después de 1 e4 e5 2 tllf3 tllf6 3 d4 tllx e4. Su oponente no jugó aquí 4 �d3, un movimiento que se considera automático, optando por 4 lll x e5!? Fue ése un caso de jugada cuyo mérito principal era, simplemente, obligar a pen sar al oponente. Es característico de tales jugadas que no reducen sus opciones, sino que más bien las incrementan, pero obli gan a pensar más al rival. No tiene mucho valor, por ejemplo, ju gar 1 d4 c6, y luego 2 c4 dS, en compara ción con la ruta normal, 1 d4 dS 2 c4 c6. Pero este orden, empleado por Anatoli Karpov, entre otros, lleva a las blancas a debatir entre si conocen más acerca de la Caro-Kann (2 e4) que de la Eslava. O bien ¿qué harían, en caso de 2 c4 bS? Un orden de jugadas extraño puede conseguir eso. Una jugada "que haga pensar" puede costar a su oponente algo más que minu tos. Puede inducirlo a tomar una mala de cisión. El ejemplo más drástico de los últimos tiempos le ocurrió a Vladimir Kramnik en lo que era, hasta ese momen to, la partida más importante de su vida, la última de un match de Candidatos en 1994. Su oponente, Boris Gelfand, abrió con 1 c4, a lo que siguió 1 c5 2 lll c3 lll f6 3 g3. Esta posición se había producido millones de veces, pero a Kramnik nunca se le había presentado. Por rutinaria que fuese, la ju gada 3 g3 lo confundió. Respondió 3 d5 4 cxd5 lll xd5, y después de 5 � g2 •.• ••• Anand comenzó a calcular furiosa mente, tratando de descubrir qué había de malo en la jugada blanca. Pero lo cierto es que no tenía nada de malo. Sólo es una ju gada inhabitual. Tras invertir dos de sus preciosos cinco minutos, jugó 4 d6 5 tllf3 d5, llegándose a una posición de libro. ..• I NTRODUCCIÓN ... optó por 5 . . e6??, "casi sin pensar", se gún su oponente. Kramnik asumía que po dría transponer, .después de 6 ll'if3 ll'ic6, a otro esquema muy bueno para las negras. Pero siguió 6 ll'i xdS! cxdS 7 �b3, con lo que las blancas ganaron un peón (7 . . . c4 8 �bS + ), la partida y el match. El efec to de aturdimiento que produjo 3 g3 arrin conó, durante varios años, las aspiraciones de Kramnik al campeonato mundial. Hay una cuarta forma de evaluar una astuta transposición, a saber: . El camino conocido es 4 . . . cS , y en tonces 5 a3 �xc3+ 6 bxc3 ll'ie7. Pero las blancas disponen de numerosas líneas marginales, como 5 dxcS, 5 �g4 y 5 ll'if3. La teoría no considera a estas líneas tan buenas como 5 a3. Pero en la práctica son peligrosas, si las negras no están bien pre paradas. En lugar de pasar horas y horas estu diándolas, las negras pueden jugar 4 ll'ie7!, que solía ser un preludio a 5 a3 �xc3 + 6 bxc3 b6. Pero Wolfgang Uhl mann demostró que 6 cS! era una simple transposición a la línea principal 4 ... cS. Las negras obtienen así los beneficios del orden de jugadas normal, sin tener que preocuparse por las líneas alternativas. És ta es la "higiene mental" del orden de ju gadas. Cada truco de transposición debe ser juzgado mediante un balance: ¿Cuáles son los beneficios? , ¿cuáles son los inconve nientes?, ¿qué orden de jugadas es más importante? Algunas jugadas, como 4 ... ll'ie7, pueden tener más ventajas que in convenientes. Otras, como la de Krarnn ik, 5 ... e6??, pueden ser desastrosas. Pero la inmensa mayoría se encuen tra en un término medio. La idea de alcanzar la línea de fondo no es conce derle una posición superior, sino una po sición que a usted le guste jugar. Lo ideal sería que, además, su oponente quisiera evitarla. Consideremos 1 e4 c5 2 ll'if3 ll'ic6 3 d4 cxd4 4 ll'i xd4 ll'if6 5 ll'ic3 d6, y ahora 6 h3 e6 7 g4 . Esto transpone a una versión con servadora del Ataque Keres, en la que las blancas confían en un esquema lento, a ba se de Ag2, en lugar de g4-g5. Sin embargo, en la partida Andreikin Kosteniuk, Tomsk 2006, siguió 7 a6 8 gS •.• •.. Cómo preserva su salud mental. Todos nosotros estamos obligados a ocuparnos de una cantidad cada vez ma yor de análisis librescos. Casi tan difícil de memorizarlos en casa resulta recordarlos luego ante el tablero. Esto puede ser de lo cos. Nos gustaóa simplificar la cantidad de "libro" que necesitamos conocer para lle gar a los medios juegos que nos gustan. La mejor forma de ahorrar nuestro tiempo de estudio (y de preservar nuestra salud) es mediante las transposiciones. Piense, por ejemplo, en la línea principal de la France sa Winawer, 1 e4 e6 2 d4 dS 3 ll'i c3 �b4 4 es. 9 ••• ll'id7 9 h4. 10 SECRETOS D E LA I NVERSIÓN D E J UGADAS EN AJEDREZ de Mark Taimanov, en la edición de 1972 de la Enciclopedia de Aperturas yugosla va, las negras ganan. É sta es otra posición de libro del Ata que Keres, pero las blancas han perdido un tiempo, porque han invertido dos movi mientos en llevar su peón h a h4. Un tiem po perdido es una diferencia importante. Pero más importante aún resultó el he cho de que las negras no estuviesen fami liarizadas con las posiciones del Ataque Keres. Después de 9 ltJde5?! 10 .te3 b5?!, quedaron peor, y tras 11 ltJ xc6 ltJ xc6 ••• En realidad, las blancas disponen de una buena respuesta, 10 ltJf5! . La línea crí tica es 10 ... ltJe7!, que fuerza la secuencia 11 lLi xg7+ @f8 12 .txc5 "fixc5+ 13 @hl @ xg7 14 e5. posición estaba perdida. La objetivamente mala 8 g5? funcionó brillantemente por transposición, convirtiéndose, en realidad, en 8 g5 ! . Que esto sea correcto está sometido a debate, lo que significa que tanto a las blancas como a las negras puede interesar les llegar a la posición del diagrama. Pues bien, hay tres rutas razonables para llegar a la misma. Una de ellas es 1 e4 c5 2 ltJf3 e6 3 d4 "SOLO TRANSPONE" cxd4 4 ltJ xd4 ltJ c6 5 ltJ c3 Wfc7 6 .t e3 a6 7 .td3 ltJf6 8 0-0, y ahora 8 .tb4 9 f4 .tc5. Algunas posiciones de apertura pueden al canzarse a través de dos, tres o más órde nes de j ugadas lógicos. Los libros (e incluso los jugadores expertos) tienden a descartar las rutas alternativas, porque "sólo transponen". Pero cada una de esas rutas pueden tener beneficios y compro misos que sólo un hábil "inversor" de juga das sabe cómo evaluar. Tomemos, por ejemplo, esta posición de la Siciliana Tai manov. Juegan blancas, y según el análisis Pero si son las negras quienes quieren lle gar a la posición del diagrama, este orden contiene una laguna, pues las blancas dis ponen de la fuerte alternativa 9 ltJ xc6!, se guido de 10 ltJa4. La segunda ruta es forzada. Las negras atacan el peón h con 8 .td6. El instinto de las blancas es responder a la amenaza con otra amenaza, 9 f4. Pero comprenden que las negras no van a permitir 10 e5. De modo que serán conscientes de que las ne gras planean transponer, con 9 . . . .tc5 ! , a la 12 'ii' d2 .tb7 13 f4 "fic7 14 �f2 ltJb8 15 a3 ltJd7 16 f5 ltJe5? 17 fxe6 fxe6 18 .th3, su •.• •.• I NTRODUCCIÓN 11 p'osición del diagrama 10, y muchos juga dores pueden optar por alternativas como 9 h3. La tercera ruta, 8 �e7!?, es la más engañosa. Un experimentado jugador sici liano, con blancas, reconocería que la juga da temática es 9 f4, y vería que, tras 9 ... d6, el juego revertiría a una Scheveningen teó rica. De modo que jugaría 9 f4, permitien do a las negras responder 9 ... i.c5, y llegar a donde quería. De las tres rutas, 8 .. 1i.. e7 parece ser la mejor para las negras, a fin de llegar a la posición del diagrama 10. •.• . EL SEÑUELO DE LO CONOCIDO 5 lL:ic3 a6. Tras estudiar la posición por un rato, jugó 5 'iia4 +, esperando transponer después de 5 . . lLi bd7. Pero un asombrado Keres se tomó 15 minutos para cerciorarse de que no estaba soñando, y jugó 5 ... b5! , ganando fácilmen te (6 lL:i xb5? �d7). Un error mucho más corriente y menos penoso se produce cuando un buen juga dor toma el camino fácil en una posición desconocida y transpone a otra con la que está familiarizado. Incluso puede hacerlo sospechando (o estando seguro) de que está realizando una jugada inferior. Todos hemos visto esto cuando un ju gador de 1 e4 se enfrenta con 1 lL:ic6, y responde 2 lL:if3. Sabe que los libros reco miendan 2 d4! , pero lo cierto es que la mi tad de todas las partidas que empiezan con 1 e4 lL:ic6 continúan con 2 lL:if3, porque las blancas quieren transponer a una apertura abierta (con 2 ... e5). De modo similar, cuando un jugador 1 d4 se enfrenta a 1 ... d5 2 lL:if3 lL:ic6 3 c4 e5? ! , lo normal es que transponga al Con tragambito Albin, con 4 dxe5? ! , aunque sospeche que 4 lL:i xe5 ! sea mejor. El timador explota el lado débil de la naturaleza humana. Los demás debería mos castigarlo por tomarse tales liberta. Hay jugadores famosos, como Uhlmann, Lajos Portisch y Mihai Suba, que utilizan sutilezas en el orden de jugadas, con el ex clusivo propósito de conseguir el medio juego que desean. Hay otros, como Bent Larsen, que utilizan distintos órdenes de jugadas como un· medio de crear confu sión, es decir, para plantear problemas y obligar a sus oponentes a pensar. También están los tahúres o timadores. El timador busca la forma retorcida de llegar al medio juego que quiere conse guir. Sabe, por ejemplo, que cuando sus oponentes se ven confrontados a una juga da desconocida, sienten la fuerte tenta ción, incluso irracional, de alcanzar como sea una posición familiar. Laszlo Szabo, por ejemplo, cayó vícti ma de esta tentación, en el Torneo de Can didatos de 1953, cuando su partida con Paul Keres comenzó así: 1 d4 d5 2 lL:if3 lL:if6 3 c4 dxc4, y ahora 4 lL:ic3 a6. (Ver diagrama 11.) Esta última jugada no la conocía, pero recordó que había obtenido en una oca sión muy buen juego con 4 'ii a4+ lL:i bd7 ... 12 SECRETOS D E LA INVERSIÓN D E JUGADAS E N AJ EDREZ des. Por ejemplo: 1 e4 c5 2 tbtJ t2J c6 3 d4 cxd4 4 tbxd4 tbf6 S tbc3 g6. Este orden concede a las negras todos los beneficios tácticos de un Dragón Acele rado moderno, sin permitir la Formación Maróczy, como en el caso del Dragón Ace lerado. Pero hay un inconveniente, a saber, que 6 tbxc6 condena a las negras bien a un dudoso medio juego (6 ... bxc6 7 e5), bien a un final nada divertido (6 ... dxc6 7 'it'xd8+) . No obstante, e l timador sopesará e l riesgo d e ser exprimido a muerte por l a formación Maróczy con e l que existe de que las blancas jueguen 6 t2J xc6 ! . Las apuestas se inclinan a su favor. Una comprobación en la base de datos mues tra que las blancas han jugado 6 t2J xc6! en menos de una de cada tres ocasio nes (exactamente, en 327 partidas de un total de 1 .000) . Incluso super-grandes maestros como Bobby Fischer y Mij ail Tal se decidieron por la inferior 6 .te3 para entrar en una posición que cono cían. Ejemplos como éste deberían decirle que desconfíe de la expresión "sólo trans pone". Normalmente, una transposición conlleva una ventaja, un inconveniente y una opción extra a considerar. Si la ig nora, puede estar permitiendo que su oponente se haga con el control de la di rección que tomará la apertura, y el precio a pagar será entrar en el medio juego que a él le gusta. 13 Capítulo 1 Aperturas abiertas El ventajismo comienza con las más viejas aperturas, como el Gambito de Rey Acep tado. Actualmente, la teoría dice que esta apertura (1 e4 e5 2 f4 exf4 3 lll f3) ya no es peligrosa, debido a 3 ... d5, a lo que sigue 4 exd5 tt:Jf6, con igualdad. Si eso hace felices a las negras, debe rían "pensar un momento" en el orden de jugadas 1 e4 e5 2 f4 d5 3 exd5 exf4!?, como han jugado Anatoli Karpov y Artur Yusu pov. transpone al Gambito Breyer, 1 e4 e5 2 f4 exf4 3 'it'f3 d5 4 exd5. Pero el Gambito Breyer es inocuo, y las negras incluso pue den intentar la línea de sacrificio 4 ... lll f6 5 i.b5+ c6 ! ? , recomendada por Yakov Es trin. Este orden puede apenar a un practi cante del Gambito de Alfil. Hay pocos ju gadores de 1 e4 e5 2 f4 exf4 3 �c4 que se sientan cómodos en posiciones del Gambi to de Caballo, en el que deberían entrar ju gando, en el diagrama 13, 4 lll f3. De modo que veamos 4 i.c4 y com prendamos que transpone a una fea posi ción del Gambito de Alfil, 1 e4 e5 2 f4 exf4 3 �c4, y ahora 3 . . d5 4 exd5, antes que la recomendada 4 i. xd5. Se trata de una trampa psicológica, porque las blancas no están realmente mal tras 4 exd5!? tt:Jf6 5 tt:Jc3, y si 5 ... c6, 6 d4. Sencillamente, han transpuesto a la línea principal del Gambito de Alfil, que se pro duce en el orden 1 e4 e5 2 f4 exf4 3 �c4 lll f6 4 lll c3 c6 5 d4 d5 6 exd5. Pero se re quiere mucho tiempo para comprender esto ante el tablero. Si a las negras no les gusta la línea con ... d5, o aspiran a algo más que la igualdad, pueden optar por esto: . ¿Qué es lo que debe pensarse aquí? Bueno, para debutantes, las blancas se pre guntan si deberían entrar en una línea de libro, con 4 tt:Jf3 lll f6, o intentar 4 'it'f3, que 14 SECRETOS D E LA INVERSIÓN D E J UGADAS E N AJ EDREZ Se trata de un esquema estudiado des de 1860, y que hoy se considera excelente para las negras (8 g3 �h3 ! 9 J::!. f2 lbf6 ! , o bien 9 gxf4 �d7! 10 � f2 lbf6). Pero las negras no pueden llegar a esta posición a partir del orden tradicional 1 e4 e5 2 f4 exf4 3 lbt3. Necesitan una direc ción sesgada. La tentativa de Bobby Fischer fue 3 d6, y entonces 4 �c4 h6! 5 d4 gS 6 0-0 �g7 7 c3 lbc6, y se consigue el esquema desea do. El problema con 3 ... d6 es que 4 d4 amenaza 5 �xf4 antes de que las negras puedan poner su casa del flanco de rey en orden, con ... gS y ...h6. Su mejor opción es 4 ... gS 5 h4 g4, después de lo cual 6 lb gS? falla (por 6 ... f6! ) , pero 6 lbgl conduce a un juego de doble filo. No hay jugada objetivamente mejor que 4 d4, pero sí hay una que crea más confusión: 4 lbc3!? (Ver diagrama 15.) ••. La natural 4 g5 cae en una trampa, porque 5 h4 transpone a una versión mejor de lo habitual del Gambito Allgaier (5 .. . g4 6 lbg5 h6 7 lb xf7 rj;xf7, mejor que 6 .. . f6 7 lbh3 gxh3 8 �hS+ ). A diferencia del Allgaier normal, 1 e4 ... eS 2 f4 exf4 3 lb f3 gS 4 h4 g4 5 lb gS ? ! h6 6 lb xf7 rj;xf7 7 �c4+ dS ! , las blancas tie nen una jugada extra, lbc3, que es mejor que la jugada extra de las negras, ... d6? ! . Viktor Korchnoi declaró que, e n el dia grama 15, 4 h6! es favorable a las negras. Puede que sea lo mejor, pero después de 5 d4 gS 6 g3 ! , hemos llegado a una posición que a menudo se produce en el Gambito de Rey Aceptado y cuya evaluación es, en el mejor de los casos, "posición confusa". Por ej emplo: 6 . . . fxg3 7 h x g3 � g7 8 .tc4 y 8 ... ..tg4 9 .l:!.fl �d7 10 �d3, Ga llagher-Jurgens, Bad Würishofen 1994. Re cuerde la posición con 6 g3. Volverá a verla. Las negras pueden tratar de mejorar sobre la Defensa Fischer, con la menospre ciada 3 h6, buscando un buen esquema para su causa. Esto puede confundir a las blancas, a menos que sepan que 4 d4 gS 5 lbc3 ! d6 6 g3 ! llega a la línea complicada. Esto nos deja 3 g5. La continuación de la época romántica era 4 �c4 g4, pero 4 lb c6! despeja el camino hacia el esque ma ansiado. (Ver diagrama 16.) ... ... ... ... Las negras incitan a jugar 5 0-0 ii.g7 6 d4 h6, etc. Una vez que las blancas j ue- APERTU RAS ABIERTAS guen 4 �c4, pueden intercalar, de forma efectiva, h2-h4, porque 5 h4? g4! 6 ll'ig5 se vuelve contra ellas de mala manera, tras 6 ... ll:'ie5 ! 7 il..b 3 h6 8 d4 hxg5 9 dxe5 il.. g7. La mejor respuesta a 3 ... g5 se supone que es 4 h4, que sale del esquema tras 4 ... g4 5 ll:'ie5. Sin embargo, el análisis de la po sición es inacabable y a las blancas puede tentarles la jugada de confusión 4 d4. En tonces, 4 ... g4 5 il.. x f4 ! ? gxf3 6 'iVxf3, es un ataque inusual tipo Muzio, que ha prestado buenos servicios a Alexander Morozevich. La respuesta segura es 4 d4 h6, puesto que 5 h4 il.. g7 6 g3 g4! es prometedor para las negras. Pero 5 ll:'ic3 ! y 5 ... d6 6 g3 de nuevo produce la posición confusa. 15 a esa buena posición del Gambito de Ca ballo que resulta de 3 ll:'if3 g5 4 �c4 ll:'ic6! . Esto constituye una ventaja psicológica porque, como antes se ha observado, los gambiteadores de alfil, a menudo se sien ten incómodos en el Gambito de Caballo. La bonificación es que las blancas dis ponen de algunas respuestas naturales pe ro malas, como 4 ll'ic3?, que permite la fuerte 4 ... 'iVh4+ 5 @fl il.. cS. Que las blan cas tengan ventaj a después de 4 d4 ll'i f6 5 e5 d5 ! no está claro (6 il..b3 ll'ie4). APERTURA VIENESA Si su oponente es un gambiteador de Alfil, tiene buenos motivos para suponer que está mejor preparado que usted, mucho mejor. Un jugador hábil con las transposi ciones respondería a 1 e4 e5 2 f4 exf4 3 �c4 con la jugada olvidada, pero favori ta de Chigorin, 3 ll:'ic6. (Ver diagrama 17.) Hay dos tipos de jugadores vieneses. Los del primer tipo no quieren memorizar las toneladas teóricas de la Ruy López. Los del segundo tipo están bien preparados y dispuestos a hacerle sufrir con sus conoci mientos enciclopédicos sobre la Apertura Vienesa, como después de 1 e4 e5 2 ll'ic3 ll:'if6 3 il..c4 ll'i xe4 4 'iVhS. Contra ambos tipos de oponente, vale la pena desviarse ya en la segunda jugada, con 2 d6!? (Ver diagrama 18.) Las negras pueden entonces responder a la natural 4 ll:'if3 con 4 g5! , llegándose Esto parece demasiado pasivo, pero las blancas deben tener cuidado, pues si 3 f4 GAMBITO DE ALFIL ... ... ••• 16 SECRETOS D E LA INVERSIÓN D E J UGADAS EN AJEDREZ exf4, y ahora 4 lZ:Jf3 h6! 5 d4 gS, estamos de nuevo en el confuso Gambito de Rey Aceptado. Lo mejor para las blancas probable mente sea 4 d4 ó 4 �c4. Pero pocos juga dores de la Vienesa están familiarizados o se sienten cómodos con las líneas del Gambito de Rey Aceptado en que las ne gras juegan ... 'iVh4+. Bueno, ¿qué sucede con 3 .tc4 ? En tal caso, 3 lZ:Jc6 obliga a las blancas a decidir entre permitir 4 d3 lZ:JaS ! ? , o lanzarse a otro Gambito de Rey Aceptado (con 4 f4 exf4 5 lZ:lf3 h6 ó 5 . . gS 6 h4 g4 7 lZ:lgS lZ:JeS). Podemos asumir que, en lugar de esta línea, un sencillo desarrollo, a base de 4 ttJf3, castigará la jugada 2 ... d6. Pero esto transpone a la Defensa Húngara tras 4 Ae7!?. Esta defensa tiene la reputación de ser indigesta ("no-puedo-defender-ningu na-posición-restringida"), pero que se ba sa sólo en la formación blanca c2-c3 y d2-d4 o 'iVb3. (Ver diagrama 19.) ••• . ... Una expansión como ésa no es posible aquí y es dudoso que las blancas tengan al go más que una ventaja óptica, después de 5 0-0 lZ:Jf6 6 d4 .tg4 ! , o de 5 d4 lZ:Jf6 6 h3 0-0 7 0-0 liJd7 8 dS lZ:lcb8 (Movsesian-Efi mov, Pula 1997). Hay mucha más experiencia con la otra "jugada de debutante", 2 .tc5, que ha prestado buenos servicios a Karpov, Bent Larsen y Vassili Smyslov. Los libros solían decir que las negras estaban ya peor, debi do a 3 lZ:Jf3 lZ:Jc6 4 lZ:lxeS ! lZ:lxeS 5 d4. Pero las negras tienen una buena alternativa, 3 d6!, ya que 4 d4 exd4 5 lZ:lxd4 ttJe7 ó 5 .. lZ:Jc6 lleva el juego hacia una versión razonable de la Apertura Escoce sa, después de 6 i.e3, 6 lZ:lb3 ó 6 lZ:Jxc6 'iVf6. Por ej emplo : 5 . . ttJ c6 6 A e3 .t b6 7 liJdS lZ:Jf6 8 lZ:lxb6 axb6 9 f3 0-0 10 Ac4 dS ! , o bien 10 c4 l:t e8 1 1 lZ:Jc2 liJd7 12 'iVd2 liJdeS 13 Ae2 Ae6 14 b3 fS, con buen jue go para las negras en la partida Zarnicki Bianchi, Buenos Aires 1989. Las blancas pueden permanecer en los cauces de la Vienesa con 3 f4. Después de esto, 3 ... d6 es un Gambito de Rey Acep tado, en el que las blancas se han privado del avance c2-c3, su plan más ambicioso en el Gambito de Rey Rehusado, y los libros no están de acuerdo acerca de sus posibili dades de lograr ventaja. También es posible 3 g3, que transpone a una línea principal de la variante de ... ... . . APERTU RAS ABIERTAS Louis Pá.ulsen. El único inconveniente de las negras es que renuncian a la defensa recomendada por la teoría (1 e4 e5 2 tLlc3 tLlf6 3 g3 d5! ). De modo que 2 ... $J..c5 no tiene mayores ventajas ni inconvenientes, y se trata, sobre todo, de una ventaja "que obliga a pensar". APERTURA CENTRAL La mayoría de los jugadores que respon den 1 e5 a 1 e4 saben que 2 d 4 exd4 3 'ií'xd4 tLlc6 4 'ií'e3 se neutraliza con 4 tLlf6 5 tLlc3 �b4 6 �d2 0-0. Pero eso es prácticamente todo lo que recuerdan de esta apertura. Las blancas, sin embargo, tienen una jugada para "confundir" , 5 �d2. .•. ... 17 tral s e producen s i las negras temen una lí nea que no muchos conocen. Se trata de 5 e5!?, en lugar de S tLlc3 ó S il.d2. Este avance parece perder un peón, pero S ... tLlg4 6 'ií'e4 tLl gxeS ! permite 7 f4. Para jugar 4 ... tLlf6 con confianza, las negras deberían conocer algunas líneas caóticas como 6 ... dS 7 exd6+ il.. e 6, y lue go 8 il.. a6, o bien 8 .iJ..e2! tLlf6 9 dxc7 'ikxc7. Pero pueden ahorrarse muchas preo cupaciones y tiempo de estudio optando por una cuarta jugada diferente. Una posi bilidad es 4 ... �b4 +, con idea de llegar a la lmea igualadora de libro tras S tLlc3 tLlf6. El inconveniente es que las negras pueden tener que enfrentarse a opciones adiciona les de las blancas, como S c3 .tas 6 i.c4 ó 6 'ikg3. La alternativa de las negras es 4 �e7, en cuyo caso, S tLlc3 lbf6 transpone a la lmea 4 ... lbf6 S lbc3 il.. e 7, como hicie ron Alexander Alekhine y Boris Spassky. ... Este desarrollo de alfil a menudo pro duce el efecto de inducir a las negras a op tar por otra defensa, como S ... $J.. e7 6 tLlc3 0-0 7 0-0-0, transponiendo así a la variante menos ambiciosa S tLlc3 $J..c7 6 �d2 0-0. Pero esto es, en esencia, un farol, porque si las negras contestan a S �d2 con S ... �b4! , las blancas no tienen nada mejor que transponer a la lmea teórica, con 6 tLlc3!. Las otras sutilezas de la Apertura Cen- Sin embargo, hay otra jugada que debe preocupar a las negras, 5 'il'g3, y después de S ... lbf6 6 eS (que le gustaba a Paul Ke res para las blancas), o bien S ... il.. f6 6 lbc3 lbge7 7 �d2, como en la partida Ziemac ki-Fatyga, Correspondencia 1992 (7 . . . d6 8 0-0-0 il.. e6 9 f4). 18 SECRETOS D E LA I NVERSIÓN D E JUGADAS E N AJEDREZ Así pues, las negras deberán decidirse o por los inconvenientes de 4 ... .tb4+ o por 4 ... .te7, y sopesar los méritos de evi tar la rara 4 ... lbf6 5 e5 ! ? . GAMBITO DANÉ S 2 d4 exd4 3 lbf3 son obligar a las negras a pensar, en la tercera jugada, e impedirles que planteen una Defensa Petrov. Por ejemplo: 3 /bc6 4 /bxd4, o bien 3 ... .tes 4 /bxd4 lbc6. La principal alternativa de las negras es 3 /bf6. En tal caso, 4 eS es otra línea de la Petrov, 1 e4 eS 2 /bf3 lbf6 3 d4 exd4 4 e5, que las negras han estado evitando durante años (jugando 3 . . . /bxe4 ! ) . N o e s una mala línea, pero pocos jugadores con negras conocerán la teoría y eso hace de 3 lbf3 un arma efectiva contra un profesional de la Petrov. ••• ••• El Gambito Danés es un pariente directo de los gambitos Goring y Escocés. Este gambito tiene la reputación de ser el peor de los tres, pero las blancas pueden tratar de mejorar con 1 e4 e5 2 d4 exd4, y ahora 2 /bt'3!?, en lugar del verdadero Gambito Danés, 3 c3. APERTURA DE ALFlL REY Esta jugada tiene éxito en caso de 3 c5 4 c3 dxc3? S /bxc3, cuando se habría transpuesto a 1 e4 es 2 d4 exd4 3 c3 dxc3 4 /bxc3 cS? S /bf3, una defensa ridícula contra el Gambito Goring. (Pero 3 ... cS 4 c3 dS ó 4 ... 'f!ie7 son posiciones virtualmente no contrastadas.) Otra versión del Gambito Góring re sulta de 3 .t b4+, y entonces 4 c3 dxc3 S /bxc3. Esta olvidada variante es perfec tamente j ugable tras 5 . . . lb c6 6 .t c4 d6 7 /bg5 .txc3+ 8 bxc3 lbe5, y ahora 9 i.b3 h6 10 f4! hxgS 11 fxeS 'f!ie7 12 'f!id5 dxeS 13 �xgS ! . Los principales beneficios d e 1 e4 eS ••• ••• Las líneas independientes en la Apertura de Alfil son un tanto raras hoy día. Lo normal es que 2 .tc4 se use como una ru ta hacia la Apertura Vienesa o la Apertu ra Italiana, que permita a las blancas evitar posiciones específicas de dichas aperturas. Así, se benefician de 2 �c4, si les gusta 2 ... lbc6 3 lbc3 lbf6 4 d3, o 2 . . . lbf6 3 d3 lbc6 4 lbc3, pero no quieren llegar a esta posición a través de la Vienesa, debido a la caótica 2 /bc3 /bf6 3 �c4 /bxe4 ! ? . Observe que después d e 1 e 4 e 5 2 .tc4 /bf6 3 d3 y la natural 3 �c5. ••• APERTURAS ABIERTAS ... tt:lc3 lleva las blancas a una Vienesa, sin tener que afrontar 2 lbc3 lbf6 3 �c4 lbc6 4 d3 �b4, ni 4 .. , lb a5. Las negras conser van estas opciones con la más precisa 3 lb c6! , en cuyo caso parece justificarse la vieja regla "los caballos antes de los alfiles". La otra dirección que pueden tomar las blancas después de 2 �c4 es hacia la seu do Ruy López, es decir, el sistema que em pieza con 1 e4 e5 2 lbf3 lbc6 3 �c4, seguido de 4 d3, 5 c3 y lbbd2, 0-0, �b3 y, eventualmente, d3-d4. Este sistema tiene muchas de las venta jas de la Ruy López, sin las 30 toneladas de teoría publicada. La principal virtud de utilizar 2 �c4 para llegar a esas posiciones (2 ... lbf6 3 d3 lbc6 4 lbf3) es que las blan cas evitan la Defensa Petrov. ••. DEFENSA PHILIDOR Los libros solían ridiculizar la Defensa Philidor, debido a la ventaja blanca de es pacio. Pero los jóvenes maestros cuestio nan esa opinión. Para ellos, lo principal es cómo alcanzar el esquema del diagrama si guiente: El orden tradicional, 1 e4 eS 2 lbf3 d6 3 d4 tt::ld7, una variante bautizada con el 19 nombre del mayor en la Guerra de Sece sión de EEUU, James Hanham, permite a las blancas quedarse con los dos alfiles, 4 �c4 c6 5 0-0 .Yie7 6 dxe5 ! dxe5 7 lbg5 �xg5 8 'it'h5. Aron Nimzovich ayudó a popularizar otra secuencia, 1 e4 eS 2 lbf3 d6 3 d4 lbf6 . De esta forma, las negras tienen más fácil conseguir el esquema deseado (4 lbc3 lbbd7 5 �c4 �e7), porque pocos jugado res están dispuestos a lanzarse en las com plicaciones de 4 dxe5 lbxe4 5 'iWd5. Si a las negras les preocupa 4 dxe5, de berían considerar proponer un final, por que todavía menos jugadores con blancas cambiarán damas después de 1 e4 d6 2 d4 e5 ! ?. Enmanuel Lasker empleó esta ver sión, en un match por el Campeonato Mundial, contra David ("detesto los fina les") Janowski. Hoy día, jugadores como Michael Adams juegan con confianza las negras en el orden 1 e4 d6 2 d4 lbf6 3 lbc3 eS!?. Ahora 4 lbf3 lbbd7 transpone a la lí nea de Nimzovich, y 4 dxeS dxe5 5 �xd8+ @ xd8 es un final ligeramente peor. Por ejemplo, la partida Vaisser-Rontaine, Campeonato de Francia 2006, siguió con 6 �c4 �b4! 7 Ad2 @e7 8 f3 c6. 20 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ Las negras pronto igualaron (9 lt:Jge2 lt:J bd7 10 lt:Jcl b5! 1 1 � e2 �d6 12 a4 b4 13 lt:Jdl a5), Juego quedaron mejor (14 lt:Je3 lt:J b6 15 lt:J d3 g6 16 b3 lt:J fd7 17 c3 bxc3 1 8 �xc3 f6 19 lt:Jb2 lt:Jc5) y acabaron ga nando. Observe que los órdenes con 1 ... d6 tienen el beneficio añadido de recortar las opciones blancas tras 1 e4 e5, como 2 f4, 2 �c4, 2 lt:Jc3, etc. Hay un capítulo independiente, en Ja teoría de Ja Defensa Philidor, cuando las negras entregan el centro, como tras 1 e4 e5 2 lt:Jf3 d6 3 d4 exd4, y ahora 4 lt:J xd4 g6, o 4 ... lt:Jf6 5 lt:Jc3 Ae7. Las blancas pueden tratar de explotar esto con la jugada de Henry Bird 4 .tc4!? 9 'ifa4+, ganando). En la misma página. consideró 1 e4 e5 2 lt:Jf3 d6 3 d4 lt:Jf6 4 lt:Jg5! ? exd4 5 �c4 d5 como igualado. Bueno, es la misma posición. Lo mej or , después de 4 � c4 lt:J f6 5 lt:Jg5, es 5 ... �e6, una jugada que se re monta a los tiempos de Rudolf von Bil guer, quien pensaba que 6 ltJ x e 6 fxe6 7 �xe6 'ife7 (8 �c8 ! 'if xe4+ 9 'it'e2) era igualado. A los ojos de un jugador moder no, las blancas tienen ventaja. Por consi guiente, 4 �c4 ! ? es algo más que una j ugada "para confundir". Observe que en los órdenes de jugadas tradicionales (1 e4 e5 2 lt:Jt3 d6), las blan cas pueden intentar 3 � c4, con idea de 3 ... lt:Jd7 4 0-0 �e7 5 d4. De esta forma, evitan 3 d4 exd4 y cazan a las negras en la lmea Hanham inferior. Es mejor 3 � e7! 4 0-0 lt:Jf6, que deja a las blancas con una ventaj a mínima tras 5 l:t el 0-0 6 c3 lt:Jbd7 7 d4. Es más ambi cioso 3 lt:Jf6!? 4 lt:Jg5 d5 5 exd5, con lo que se llega a una Defensa Dos Caballos, con un tiempo menos por parte de las ne gras. ••• ••• Una de las claves es que 4 . . . ltJ c6 5 lt:J xd4 sería una excelente Apertura Es cocesa, y 5 c3 dxc3 6 lt:J xc3 transpone a un buen Gambito Escocés. Es como si las ne gras respondiesen a 1 e4 e5 2 lt:J f3 lt:J c6 3 d4 exd4 4 c3 dxc3 5 ltJ xc3 con 5 . . . d6 6 �c4. El verdadero test para 4 .tc4 es 4 lt:Jf6. En la primera edición de Ja Enciclo pedia de Aperturas, Lev Polugaievsky indicó 5 lt:Jg5 d5, como favorable a las blancas (6 exd5 h6 7 lt:Jf3 j_b4+ 8 c3 dxc3 ... Pero el tiempo menos es . . . c6, lo que puede beneficiar a las negras, porque aquí su caballo no está atacado. Así que pueden APERTU RAS ABIERTAS erear una posición confusa, con 5 . . . h6 6 tl'lf3 �d6, o bien 6 ... e4 7 'iVe2 .tb4 8 c3? ! 0-0! (Miguel Najdorf). DEFENSA PETROV La Petrov es tan increíblemente sólida que las blancas, frustradas por alguna(s) expe riencia(s), pueden intentar transponer a otra apertura. Los hermanos Paulsen po pularizaron 1 e4 e5 2 tl'lf3 tl'lf6 3 tl'lc3, por ejemplo, para derivar a una Apertura Cua tro Caballos. Sus colegas del siglo XIX ensayaron 1 e4 e5 2 tl'lf3 tl'lf6 3 d4 exd4 y 4 �c4, en un esfuerzo por entrar en una Dos Caballos (4 ... tl'lc6), que suele ser terra incognita pa ra un jugador Petrov. Pero la línea crítica es 4 ... tll xe4 ! , el dudoso gambito del prín cipe Urusov. Actualmente, es más habitual 3 d4 tll x e4, y la teoría dice que las posibilida des están, más o menos, equilibradas tras 4 ..td3 d5 5 tll xe5. El descubrimiento de Yakov Murey, 4 ... tl'lc6, permite a las ne gras evitar esto. Se basa en 5 � xe4 d5 6 .td3 e4, que parece correcto. Si las blancas quieren evitar la idea de Murey y buscan una línea sólida, pueden j ugar 4 tll xe5!? 21 En tal caso, 4 ... d5 5 �d3 transpone a la línea principal, como si se hubiese juga do 4 �d3 d5. Este orden concede a las negras una opción extra, 4 . . d6!? 5 tl'lf3 d5. Han trans puesto a la "otra" Petrov, la línea 3 tll xe5, que las blancas presumiblemente querían evitar, puesto que han jugado 3 d4. La es caramuza de Murey (4 ... tl'lc6), la preven tiva 4 tll x e5 y la contrasutileza 4 ... d6 tienen poco que ver con buscar la jugada objetivamente mejor, sino con buscar, más bien, la posición en la que su oponente se sienta más incómodo. La "otra" Petrov es hoy día la más po pular: 3 tl'lxe5 d6 4 tl'lf3 tll x e4 5 d4 d5. La alternativa de Smyslov, 5 ... Ae7 6 Ad3 tl'l f6 , tiene la reputación de ser pesa da, porque 7 h3 deja al alfil dama negro sin una buena casilla. Después de 7 ... 0-0 8 0-0 d5, el juego transpone a una versión favorable de la Francesa (Variante del Cambio), en la que h2-h3 es una jugada extra. Las blancas pueden tratar de inducir a su oponente a entrar en la línea de Smyslov, por medio de un orden de juga das popularizado por Alfonso Romero Holmes, que comienza con 5 �d3!?. Aho ra, 5 ... tl'lc5 6 Ae2 permite a las blancas ju gar d4 con ganancia de tiempo. De modo que 5 . tl'lf6 6 0-0 Ae7 7 h3! es lo más ha bitual. (Ver diagrama 29.) . .. Las blancas alcanzan una Smyslov des pués de 7 ... 0-0 8 c3 d5 9 ..tc2 l:t e8 10 d4. Es una forma más conservadora de la mis ma, porque las blancas han renunciado al útil avance c2-c4. Pero también es una po sición bastante más modesta para las ne gras de lo que muchos jugadores Petrov pueden tolerar. 22 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ Gari Kasparov dijo que 6 l2Jc6 7 0-0 . Ae7 8 .l:.el �g4 era bueno para las negras. ..• La mejor réplica a 5 �d3 es 5 ... d5, y ahora 6 'iVe2 'W/e7. Un caso típico se vio en la partida García Padrón-Romero Hol mes, Las Palmas 1991: 7 0-0 l2Jc5 8 l:t el 'iVxe2 9 .t xe2 l2J e6 10 d4 c6 1 1 c4 ! �b4 12 l2Jc3 0-0 13 a3! ii.xc3 14 bxc3 b6 15 l2Je5 l:t d8 16 a4! f6 17 l2Jg4, y las blancas ganaron. Un esquema posterior de la Petrov co mienza con 3 l2J xe5 d6 4 l2Jf3 l2J xe4 5 d4 d5 6 �d3, seguido, por parte de las negras, de ... �g4, ... Ae7 y ... l2Jc6. El orden de es tas jugadas, sin embargo, está sometido a debate. En la mayor autoridad del siglo XIX, el Handbuch1, Emil Schallopp reco mendaba 6 .. �e7 7 0-0 l2Jc6, seguido de ... �g4. Pero otros defendían 6 ... l2Jc6 7 0-0 �e7, o incluso 6 ... �g4 7 0-0 l2Jc6 y ... �e7, como Carl Schlechter, que recomendó es ta línea en su versión del Handbuch. Podemos prescindir del último orden, ya que 6 ... .tg4 permite 7 'iVe2 ! , con ventaja después de 7 ... 'iVe7 8 0-0 l2Jc6 9 �bS ! y �xc6+, o bien 7 ... fS 8 h3 �hS 9 g4! . . ' El autor hace referencia al Handbuch des Schachs piels (Manual de ajedrez), el tratado más influyente de aperturas del siglo XIX, iniciado por Paul Rudolf von Bilguer y finalizado por los teóricos alemanes más destacados de la época. Su primera edición data de 1843. N.d. T. A 9 c4, las negras responden 9 ... l2Jf6 10 cxdS �xf3 ! , con buen juego. Pero Kas parov añadió que las blancas obtienen la iniciativa, si minan la posición del caballo una jugada antes, con 8 c4! . Por esta razón, Karpov prefirió 6 ... l2Jc6 7 0-0 �g4 en su match de 1 985, a fin de poder responder (con negras) a 8 c4 con 8 ... l2J f6 ! ? . Entonces se considera lo mejor 9 l2Jc3 (9 . . . l2Jb4 10 �gS ! , ó 9 . . . dxc4 10 �xc4 �e7 1 1 dS !), y los resultados de 9 ... �xf3 10 'iVxf3 l2J xd4 1 1 'ifh3 han sido favorables a las blancas en los últimos tiempos. La última línea no ha sido univer salmente aceptada. A Jan Timman y Ale xander Beliavsky les gusta 6 ... l2Jc6 /7 �e7, mientras que Vishy Anand, Vladimir Kramnik y Alexei Shirov prefieren 6 .. . �e7/7 ... l2Jc6, y Yusupov juega ambos ór denes de jugadas. Otro esquema surge después de, diga mos, 6 ... l2Jc6 7 0-0 ii.e7. Las blancas, nor malmente, eligen entre minar el caballo de e4, con 8 c4, y atacarlo con 8 l:l el . Isaac Kashdan tuvo éxito en los años treinta con la siguiente línea: 8 c4 l2Jb4 ! 9 cxdS l2Jxd3 10 'ifxd3 'it'xdS 1 1 l:t el ii.fS. ••• APERTU RAS ABIERTAS 23 La línea de Kashdan sigue resistien do hoy día, y si las negras quieren, pue den alcanzarla incluso después de 8 l:. el, con 8 Af5, antes que con la po pular 8 . . . �g4. ... Ahora, 9 c4 lDb4 10 cxd5 lD xd3 trans pone a lo que las negras quieren y proba blemente las blancas no, pues de otro modo habrían jugado directamente 8 c4. APERTURA PONZIANI La Apertura Ponziani (1 e4 e5 2 lDD lDc6 3 c3) no goza hoy del menor respeto. Pero si las negras se descuidan, pueden quedar en posición comprometida, con 3 lD f6 4 d4 d6. No parece haber nada con 5 �c4 lD xe4 ! , de modo que 5 �b5, transponien do a la vieja Defensa Steinitz de la Ruy López, suele jugarse más a menudo. (Ver diagrama 32.) ••• La variante de Steinitz se considera una reliquia, pero ésta es una Steinitz en la que las blancas han jugado de modo conservador (1 e4 e5 2 lDf3 lD c6 3 �b5 d6 4 c3? ! lDf6 5 d4, en lugar de 4 d4! ) . Este orden era una incursión esporádi- ca favorita de grandes maestros como Srnyslov y Geller, y no tiene mayores in convenientes. Por ejemplo: 5 ... �d7 6 0-0 �e7 7 'i!Ve2 0-0 8 l:t dl 'i!Ve8 (amenaza ... lD xd4 ! ) 9 d5 lt:J d8 10 c4 c6 11 Aa4 b5 ! , corno en la partida Manik-Mokry, Olo mouc 1998. Pero si, por otra parte, las negras saben lo que tienen que hacer en una aguda línea de la Apertura Escocesa (1 e4 e5 2 lbf3 lDc6 3 d4 exd4 4 c3 lD f6 ! ? 5 e5 lt:Je4), pue den transponer a la misma, desde la Pon ziani, mediante 3 ... lDf6 4 d4 exd4 ! . APERTURA ESCOCESA Las blancas pueden entrar en una de las principales variantes de la Escocesa, a tra vés de la Apertura Cuatro Caballos (1 e4 e5 2 lD f3 lD c6 3 lD c3 lD f6 4 d4 e x d 4 5 lDxd4). S i ésta es una posición que quiere usted jugar, éste es el mejor orden, porque 4 ... �b4? ! es dudoso. Por el contrario, en el orden tradicional de la Escocesa, 1 e4 e5 2 lDf3 lDc6 3 d4 exd4 4 lD xd4, las negras pueden evitar esta lmea con 4 .. .tes, en tre otras jugadas. Hay varias sutilezas en la línea de la Cuatro Caballos, después de 5 A b4 6 tD xc6 bxc6 7 �d3. . ••. SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ 24 Ahora, 7 dS 8 exdS cxdS 9 0-0 0-0 10 �gS se juega casi con uniformidad ro .•. bótica, y es muy ligeramente favorable a las blancas, o igualada, según el autor. Pe ro hay varias desviaciones posibles, que comienzan con 8 �e7+!? . La teoría ha respaldado y se ha vuelto atrás acerca del valor de 9 �e2. En cual quier caso, contra un oponente al que le gusta conservar damas en el tablero, 8 .. �e7+ tiene evidentes méritos. Pero si las blancas entran gustosas en un final, pueden forzarlo respondiendo a 8 cxdS con 9 �e2+!?, de modo que 9 . . . �e7 transpone. Hay beneficios adi cionales, en el caso de que un jugador con negras que odie los finales j uegue 9 . . . � e6 ( 1 0 � b5 + ! lLi d7 1 1 � c6 d4 12 �e4), o bien 9 . . � e7 (10 . . . � g5 0-0 1 1 0-0-0 ! ? , con posibilidades mej ores de lo habitual). Las negras pueden anticiparse a esto y excluir los finales mediante otra ruta hacia el esquema, concebida por Georg Marco, 7 0-0 y entonces 8 0-0 dS 9 exdS cxdS 10 � gS . Esto parece ser lo más preciso, y lo más engañoso, puesto que las blancas comenzarán a pensar en 8 �g5 y la amena za 9 e5. Las negras quedan peor tras 8 ... d6, de modo que 8 dS. ••• . ••• . ••• •.. La idea de las negras es 9 eS �e8!, y son las blancas quienes se llevan la sorpre sa. Por ejemplo: 10 f4? ltJg4 1 1 �e2 f6 (12 exf6 gxf6 13 h3 fxg5 14 hxg4 �xg4! 15 �xh7+ @g7, y se rindieron en la partida Candela-Korneev, Ponferrada 1997). Si las blancas ven la idea y buscan el esque ma habitual, con 9 exdS, las negras pueden re currir a una opción adicional, 9 �xdS!. De esta forma, atacan g5 y g2, y después de 10 �xf6 �e6+ y 1 1 ... �xf6 quedan bien. Actualmente, a las negras les preocupa más el orden estándar de la Escocesa, 1 e4 eS 2 lLit3 lLic6 3 d4 exd4 4 ltJxd4, y ahora 4 ... lbf6 5 lbxc6, o bien 4 ... �c5 5 lbxc6. Por esa razón, pueden tratar de transponer a la ver sión de los Cuatro Caballos, con 4 �b4+!? ••. •.• APERTURAS ABIERTAS Ahora, S tl:ic3 tl:if6 transpone a dicha apertura, lo que podría considerarse una pequeña victoria moral para las negras. La objeción evidente a 4 ... �b4+ es 5 c3. En tal caso, con 5 �c5 6 �e3 �b6 se llega a una posición de libro (a partir de 4 ... i.cS S .te3), pero con un adicional c2-c3 de las blancas. ¿A quién beneficia ese avance? Las blancas tienen una protección adicional de la casilla d4, pero pierden una de las prin cipales bazas de la Escocesa, el salto de ca ballo de c3 a dS. La práctica reciente indica que las negras están bien, después de 7 tl:if5 .txe3 8 tl:i xe3 tl:if6, porque las blan cas no pueden defender el peón e con tl:ic3 (y 9 tl:id2 permite la igualadora 9 ... dS) . O bien 7 �c4 d6 8 0-0 tl:if6 9 tl:id2 tl:ieS ! 10 �e2 0-0 1 1 h3 � e8, como en la partida Goloshchapov-Brodsky, Hoogeveen 2006. ¿Qué sucede con el orden habitual, 4 tl:i xd4 Ac5 5 i. e 3, amenazando tl:i xc6? Se han dedicado muchas horas de estudio a S ... 'it'f6, pero la higiene mental alternativa es 5 i.b6! ... 25 siguió con 6 tl:i c3 d6 7 g3 tl:i f6 8 � g2 0-0 9 tl:i xc6 bxc6 10 A xb6 axb6, con igual dad. Otra línea de moda es 4 ... tl:if6 S tl:i xc6 dxc6 6 eS. Las negras pueden evitarla con 4 'it'f6. De ese modo tratan de alcanzar, no de evitar, la posición con S �e3 �cS. Este orden tiene la ventaja de eludir otra línea difícil, 4 ... �es S tl:ib3. La mejor for ma de castigar 4 . . . 'it'f6 es S ttJ bS A es 6 'ii' e2. Pero el veredicto no está claro aho ra. Las candidatas son 6 ... .ib6 y 6 ... 'ii'd 8 (para seguir con ... a6) . E n u n momento dado, e l destino d e la Escocesa parecía vinculado a la corrección de 4 'it'h4. Hoy hay serias dudas de que esta salida de dama sea siquiera jugable. Su suerte depende de cómo evaluemos la posición que sigue: .•. •.• ••. Ahora, 6 tl:i c3 dS y 7 ,,, tl:i f6 ó 6 . . . tl:i f6 transponen a una sólida línea Cuatro Ca ballos/Escocesa. Por ejemplo: la partida Sveshnikov-M. Tseitlin, Budapest 1 989, La última palabra sobre 7 . . . � xc3 + 8 tl:i xc3 u 8 bxc3 está por pronunciarse. Pero es igual de importante encontrar el mejor camino de las blancas hasta la posi ción del diagrama. Hay cuatro rutas: (a) 5 tl:ic3 .tb4 6 tl:idb5 'ii' xe4+ 7 � e2 , y ahí estamos. Pero las negras pueden ju gar mucho mejor, con 6 ... .taS ! y ... a6. Por ejemplo: 7 �e2 a6 8 tl:i d4 i.xc3+ 9 bxc3 tl:if6 10 tl:ixc6 dxc6 1 1 eS tl:i g4 (Rentería- 26 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ Miktov, Minneapolis 2005). Por esa razón, las blancas deberían preferir: (b) 5 lLlc3 .tb4 6 .te2! , y ahora 6 11Wxe4 7 lLldb5. Si las negras se desvían con 6 . . . lLlf6 7 0-0 .1xc3, entonces es fuerte 8 lLlf5 ! . Por ejemplo: 8 . . . 11Wxe4 9 .1d3 '1Wg4 10 f3 ! '1Wa4 11 bxc3 0-0 12 lLl xg7 ! , con ata que ganador, Karj akin-Malinin, Sudak 2002. Pero las blancas pueden optar por 5 lLlb5, porque es más apremiante y aspira a algo más que la posición del diagrama. Posibilidades: (c) Con 5 lLl b5 11W x e4+ 6 .1 e2 .tb4+ 7 lLllc3 se alcanza la posición del diagra ma. Pero las blancas pueden mejorar con 7 �d2!, que da lugar a líneas como 7 . . . .txd2+ 8 '1Wxd2 '1We5 9 f4 ! . ( d) Las negras pueden tratar de mejo rar con 5 ... .1b4+, ya que 6 lLl lc3 11Wxe4+ 7 .1e2 transpone. Pero de nuevo es mejor intercalar la jugada de alfil, 6 �d2!, lle gándose a (c) , después de 6 . . . 11Wxe4+ 7 .1e2. El principal problema de 5 lLlb5 es 5 ... �c5, y tras 6 '1We2 lLld4, con lo que las blancas no pueden llegar a la posición del diagrama, ni obtener una clara ventaja. Se gún el actual estado de la teoría, la opción (b) parece ser la más precisa. ••• APERTURA CUATRO CABALLOS La lúlea principal de la Apertura Cuatro Caballos ha sido, durante la mayor parte del siglo pasado, la que se conoce como "desclavada" de Johannes Metger, des pués de 1 e4 e5 2 lLl f3 lLl c6 3 lLl c3 lLl f6 4 .1b5 �b4 5 0-0 0-0 6 d3. (Ver diagrama 38.) Las negras deshacen la clavada que si gue, con 6 ... d6 7 �g5 .1xc3 8 bxc3 '1We7, y ahora ... lLld8-e6/...c5, que plantea un blo queo sobre casillas negras. Ésta es la mejor forma para las negras de j ugar a ganar en la Cuatro Caballos, ya que la jugada de Akiba Rubinstein, 4 . . . lLl d4, permite orientar el juego hacia tablas, por parte de las blancas, con 5 lLl xd4 exd4 6 e5. Las blancas tienen modos de evitar la maniobra de Metger -y seguir jugando a ganar-, y las negras también los tienen de seguir buscándola. La jugada marginal de las blancas es 7 lLl e2, revivida por Daniel Cámpora, quien demostró que la ventaj a de las blancas e n una posición simétrica (7 . . . lLl e7) es algo con lo que se puede trabaj ar. Por ejemplo: 8 c3 .1a5 9 lLl g3 lLl g6 10 d4 c6 1 1 .t d3 .:. e8 12 h3 � b6 1 3 J:!. e l h6 1 4 � c2 '1W c7 1 5 .1 e3 .t e6 16 'IWcl ! l:. ad8 17 a4 a5 18 lLlf5 d5 19 lLlxg7 ! , Cámpora-B arón Rodríguez, Lanzarote 2003 . Las negras pueden evitar esta línea capturando antes en c3. Reuben Fine así lo hizo, con 6 ... "fi/e7 7 �g5 .1xc3 8 bxc3, y para evitar la tablista 8 . . . d6 9 � xc6, jugó 8 ... lLld8! (Ver diagrama 39.) Ahora, 9 d4 d6 es la posición de Met ger. Si las blancas comienzan la maniobra APERTU RAS ABIERTAS de caballo con 7 ll'ie2, las negras pueden responder 7 . . . d5 ! ? . Por ejemplo: 8 exd5 ll'i xd5 9 ll'ig3 ll'i f4 10 d4 ll'i g6 1 1 c3 �d6, Loevenfish-Alatorzev, Moscú 1940. No obstante, el método más popular es diferir ... °fie7, 6 ... �x c3 7 bxc3 d6 8 �gS °fie7. Éste era el orden favorito de Frank Marshall y Smyslov. APERTURA ITALIANA Y DEFENSA DOS CABALLOS Hay una frontera definida, después de 1 e4 e5 2 ll'if3 ll'ic6 3 �c4, que separa a la Aper tura Italiana (o Giuoco Piano) , 3 . . . �c5, de la Defensa Dos Caballos, 3 ... ll'if6. Pero esa frontera a menudo se difumina por transposición. Con 3 . . . �c5 , las negras evitan ciertas líneas, como 3 . . . ll'if6 4 ll'ig5 , que tienen buena reputación, o incluso el cuestiona ble Ataque Max Lange, 3 . . . ll'if6 4 d4 exd4 5 0-0 �c5 6 e5 ! ? . Las blancas pueden forzar a las negras a entrar en el Max Lange, p o r 1 e4 eS 2 ll'if.3 ll'ic6 3 �c4 �es, y ahora 4 0-0. Es te enroque fue en su día ridiculizado, pero hoy se considera una ruta alternativa a la seudo Ruy López (4 0-0 ll'if6 S d3) . Tam bién es posible S d4!? 27 Ahora, 5 . . . exd4 6 e5 lleva al Max Lan ge, que presumiblemente las negras querían evitar. Si siguen queriéndolo, el antídoto es 5 ... �xd4 ! , y después de 6 ll'i xd4 ll'i xd4 7 �g5 d6 8 f4 "fie7, o bien 8 ... �e6. Pero Yakov Estrin argumentó que las blancas tienen posibilidades razona bles. Lo que es cierto es que esto es mucho mejor que 4 d4 �xd4 5 ll'i xd4 ll'i x d4 6 f4? (6 0-0 transpone) 6 ... d5 ! 7 exd5 °fih4+ 8 g3 l/i'h3, que es favorable a las negras. Puesto que 3 . . . �c5 no plantea ningu na amenaza, las blancas tienen más liber tad que en la Defensa Dos Caballos. Así, pueden optar por una seudo Ruy López, con 4 d3, 4 c3 ó 4 0-0, conservando otras opciones. La teoría dice que puede contes tarse a 4 c3 con 4 . . . ll'i f6 ó con 4 . . . "fie7 5 d4 �b6. Pero si la idea de las negras es conservar el punto fuerte de eS, lo más preciso es 4 ... �b6, en cuyo caso 5 d4 "fle7, como jugaban los integrantes de las Pléyades de Berlín, transpone. La justificación de 4 . . . �b6 es que . . . VJ!/e7 no es tan útil como . . . �b6 en la seudo Ruy López. Las blancas pueden cam biar de idea tras 4 . . . "fie7, y pasar a 5 d3, con intención de atacar posteriormente a la vulnerable dama negra, con ll'ie3-d5 ó lZ'i fS. El inconveniente de este orden de ju- 28 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ gadas es que tras 4 . . . �b6 5 d3, las negras habrán perdido un tiempo si, más adelan te, consideran necesario seguir con ... a6 y ... Aa7. Observe que 3 Ac4 Ac5 es una ruta hacia la Variante Canal (4 llJc3 llJf6 5 d3 d6 6 Ag5!?), una de las líneas más prome tedoras de la Italiana. Las blancas no pue den llegar a esta posición por la Cuatro Caballos, debido a 1 e4 e5 2 llJ f3 llJ c6 3 llJc3 llJf6 4 �c4? llJxe4 ! , y necesitarían la cooperación de las blancas. Sin embargo, sí pueden conseguirlo, a través de la Defen sa Dos Caballos, 1 e4 e5 2 llJf3 llJc6 3 �c4 llJf6, si evitan 4 llJc3? (por 4 . . . lLi xe4! ) y j uegan 4 d3 ! , para seguir con 4 . A c5 5 llJc3. En un orden estándar de la Dos Caba llos, 1 e4 e5 2 llJf3 llJc6 3 �c4 llJf6 4 llJg5, hay dos líneas marginales que están conec tadas: 4 ... d5 5 exd5 llJd4 y 5 . b5. No son del todo parecidas, y sin embargo transpo nen después de 5 ... llJd4 6 c3 b5 ! 7 Afl ! ,o bien 5 ... b5 6 �fl ! llJd4 7 c3. La elección de las negras debería de pender de qué línea puede provocar una mala respuesta de las blancas, corno 5 . . . b 5 6 dxc6 ? ! bxc4 7 'ir'e2 h 6 8 'ir'xe5+ �e7, favorable a las negras. Hans Berliner re vivió 5 ... b5 en su lucha por el Campeo nato Mundial por Correspondencia, explicando que 5 ... llJ d4 "es menos cla ra", tras 6 llJ c3 . Otro orden d e jugadas e n l a D o s Caba llos guarda relación con la periódicamente revivida 4 d4 exd4 5 e5 d5 6 .tb5 llJ e4 7 llJ xd4. (Ver diagrama 41.) .. .. Desde hace mucho, se asumió que las negras deben responder 7 ... Ad7, la j uga da de Paul Morphy, después de lo cual, 8 .txc6 bxc6 9 0-0 Ac5 y 10 .te3, la posición está equilibrada. Pero la reciente expe riencia sugiere que con 10 f3! las blancas obtienen la mejor parte. Para evitar eso, las negras pueden recu rrir a la jugada de Adolf Anderssen, 7 Ac5!?. Después de 8 Ae3 Ad7 9 Axc6 bxc6 10 f3, las negras podrían responder 10 ... 'ifh4+ 11 g3 llJ xg3 ! . Lo normal, por tanto, es que las blancas jueguen 10 0-0. La clave es que han transpuesto a la línea de igualdad 7 ... Ad7, en la que se juega 10 Ae3, sin disponer de la opción 10 f3. El riesgo de esta sutileza es que 7 ... Ac5 permite 8 llJ xc6 ! ? , a lo que es forzoso seguir 8 ... .txf2+ 9 @fl , o bien 9 @e2 ! ? �g4+ 1 0 @fl . Las blancas también obtie nen una opción adicional, tras 8 Ae3 �d7 9 Axc6 bxc6, a lo que pueden responder 10 llJd2! (antes que transponer con 10 0-0), que ha logrado buenos resultados en los últimos tiempos. (Ver diagrama 42.) ..• La partida Sveshnikov-Zaj a, Belgrado 200 1 , por ej emplo, siguió así: 10 . . . llJ xd2 11 'ir'xd2 0-0 12 lLib3 ! Ab6 13 0-0-0 'ir'e7 14 J::t hel a5 15 a3 a4 16 �g5 ! 'ir'e6 17 tt:ld4 'ir' g6 1 8 f4, y las blancas acabaron ga nando. Al efectuar un balance, 7 ... �d7 pare- APERTU RAS AB I E RTAS ce mejor que 7 . . . �cS, de modo que Morphy vence a Anderssen una vez más. GAMBITO EVANS La primera pregunta a plantearse en el Gam bito Evans (1 e4 e5 2 ll:lf3 lll c6 3 � c4 .tc5 4 b4 il.xb4 5 c3) es a dónde deben retirar las negras su alfil. Hay dos formas de llegar a b6: optar por la sólida defensa de Lasker, S ... �es 6 O-O d6 7 d4 �b6, y s . �as 6 O-O d6 7 d4 �b6. El orden importa, porque las blancas disponen de varias opciones en su sexta jugada. Detengámonos en 5 �c5. .. ... La ventaja principal es que después de 6 'it'b3 (una jugada válida contra S . . . �aS) 29 es aquí bastante anodina, ya que 6 . . . 'it'e7 amenaza 7 . . . ll:laS ! . Pero ese beneficio s e altera con 6 d4!. Las negras no pueden conseguir la seguri dad de la defensa Lasker, 6 . . . �b6 (7 0-0? d6) , debido a 7 dxeS ! . Por consiguiente, deben entrar e n una de las líneas principales el Gambito Evans, como 6 . . . exd4 7 0-0! d6 8 cxd4 �b6, en cuya posición las blancas tienen compen sación, que ha resistido la prueba del tiem po durante siglo y medio. Una vez que las negras se decidan por 5 ... �a5, una cuestión clave es si las blan cas deberían jugar la inmediata 6 �b3 o precederla de 6 d4. Suele prestarse más atención a 6 d4 d6 7 �b3, pero 7 . . . �d7 parece ser una réplica adecuada. Comparemos con 6 'i/Vb3: Ahora es imposible ... 'it'd7. Las otras jugadas de damas, 6 . . 'iff6 ó 6 ... 'it'e7, pa recen transponer a malas versiones de la línea 6 d4 d6 7 �b3. Por ejemplo: 6 �b3 �f6 7 d4 d6? permite 8 dS ! lZ:l juega 9 'it'a4+. También en caso de 6 �b3 'it'e7 7 d4 exd4 8 0-0 ..tb6 9 cxd4, o de 6 ... �f6 7 d4 exd4 8 0-0 d6 9 eS ! , estamos en variantes que a menudo resultan fatales para las ne gras, antes de la jugada 2S. . 30 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJEDREZ El verdadero reto para 6 'iVb3 es 6 'iVf6 7 d4 lLl xd4! . Entonces, 8 lLl xd4 exd4 9 0-0 ha sido puesto a prueba en una par tida por correspondencia (9 . . . dxc3 10 eS 'iVxeS ! 1 1 � xt7+ @f8) , sin llegar a una conclusión. Si a las blancas les gustan, 6 'iVb3 sería mucho mejor para sus intereses que 6 0-0 y quizá también superior a 6 d4. Observe que antes, en el Evans, cada bando puede plantear al contrario un du doso "algo en qué pensar". En el caso de las negras es 4 ... lLl xb4? ! , antes que 4 . . . .txb4. Pero n o e s algo que cree muchos problemas a las blancas, tras S c3 ltJc6, lo único que ha pasado es que las negras han transpuesto a la cuestionable 4 ... �xb4 S c3 .tes. La apuesta de las blancas por la inteli gencia es peor. Se trata de 5 0-0, después de 4 . . . �xb4. ••. GAMBITOS ESCOCÉ S Y G Ó RING Estos dos gambitos están estrechamente relacionados y por ellos puede llegarse a posiciones de la Apertura Italiana y la Defensa Dos Caballos. El orden del Gambito Escocés (1 e4 e5 2 ltJ f3 li) c6 3 d4 exd4 4 .tc4) concede a las negras mayor elección. La respuesta más simple es 4 li)f6, que transpone a los Dos Caballos (1 e4 eS 2 ltJf3 li) c6 3 �c4 li)f6 4 d4 exd4). Es una buena opción para las negras, si les gusta afrontar el Ataque Max Lange (S 0-0 .t cS ) o la variante anti-Lange (S 0-0 li) xe4). Pero si las negras responden normal mente a 3 �c4 con 3 . . . �es, es un mal or den, porque pueden acabar en territorio desconocido. Por esta razón, pueden pre ferir 4 ... .th4+. La idea es que S c3 dxc3 6 li) xc3 transpone a la que antes se consi deraba la mejor defensa contra el Gambito Goring (1 e4 eS 2 li)f3 li) c6 3 d4 exd4 4 c3 dxc3 S li) xc3 .tb4 ! 6 .tc4) . Esa conclusión está siendo debatida úl timamente. Sin embargo, las blancas no tienen por qué implicarse en el debate, ya que el orden del Gambito Escocés 6 bxc3 ! ... Las blancas quieren dej ar para más tar de c2-c3, como en caso de S . . . d6? 6 d4 exd4 7 c3 ! ? , como sugerido por Savielly Tartakower. Pero Marshall demostró que S 0-0 puede responderse eficazmente con 5 ltJf6! 6 d4 exd4 7 c3 dxc3 8 e5 d5!. ... APERTURAS ABIERTAS es· favorable a sus intereses (6 . . . � e7 ? 7 'ii d S). Bueno, entonces ¿qué decir de la terce ra opción, en la posición del diagrama 46, 4 .tc5? Se trata de una invitación nada velada a entrar en el Max Lange (S 0-0 lLif6 6 eS dS) . En comparación con 4 . . . lLif6, las negras pierden l a posibilidad anti Lange. Pero se benefician de no tener que enfrentarse a la línea aS eS ! ? , que Evgeni Sveshnikov ha demostrado puede resultar peligrosa. Otra virtud es que después de 4 .,tc5 5 0-0, las negras disponen de la opción adi cional 5 d6. (Ver diagrama 47.) 31 .•• ... ••• La idea no es 6 c3 dxc3 ? ! , que transpo ne a un Güring poco atractivo. Es mejor 6 �g4, con juego confuso. Por ejemplo: 7 'ii b 3 'ii d7 8 c x d4 il. x f3 9 d x cS lLi d4 1 0 'iie3 'ilig4 1 1 'ifgS , con un final comple jo, Wist-Rausis, Correspondencia 1 994. Un último punto es que 4 ... .tes tam bién puede transponer, después de S c3 ... ttJf6, a la Apertura Italiana, lo que es una opción más segura que S ... dxc3 ? ! 6 tLi xc3 d6, otra línea confusa del Güring (7 il.gS tLige7 8 lLidS f6 9 �xf6 ! ?) . De modo que l a última nota sobre e l Gambito Escocés, 4 �c4, es que debe evi tarse 4 . .. � b4+? ! , 4 . . . ltJ f6 es la opción segura y 4 . . . �es la jugada más de doble filo. Ésa es una de las conclusiones más definitivas que podemos extraer acerca de estas aperturas abiertas, llenas de trampas. 33 Capítulo 2 Apertura Ruy López Hay muchos más trucos con el orden de jugadas en la Ruy López que en cualquier otra apertura abierta, y a menudo empie zan a verse ya en el cuarto movimiento, co mo en la Defensa Berlinesa. Al adepto a esta defensa le hace feliz entrar en un fi nal, por ej emplo con 1 e4 e5 2 lll f3 lll c6 3 fi.b5 lll f6 4 0-0 lll xe4 5 d4 lll d6 6 ii. xc6 dxc6 7 dxe5 lll f5 8 'it'xd8+. Por eso, es muy probable que le disguste la réplica 4 'ii'e2!? � c5 ! ? 5 ii. x c6. Por ej emplo : 5 . . . dxc6 6 lll xe5 'it'd4 7 lll d3 ! . Porque probable mente no esté en su ADN. Las negras deberían conocer la contra sutileza 4 .. a6! . Después de 5 fi.xc6 dxc6 6 lll xe5 'it'd4 recupera el peón. Lo mejor para las blancas es 5 �a4 ! , pero deben co nocer la Variante Worrall (a la que nor malmente se llega con 3 . . . a6 4 j_a4 lll f6 5 'it'e2), y a la que se ha transpuesto. . DEFENSA CLÁSICA En la Defensa Clásica (1 e4 e5 2 lll f3 lll c6 3 j_b5 j_c5) hay dos esquemas tempranos y varias formas de alcanzarlos. Uno de ellos, con ... lll ge7, se produce tras 4 c3 lll ge7 5 0-0 j_b6, o bien 4 0-0 lll ge7 5 c3 f;_b6. (Ver diagrama 49.) Y no es muy probable que se sienta a gusto defendiéndose en un tipo de posicio nes como las de la Defensa Steinitz, 4 .. fi.e7 5 c3 d6 6 d4. Tampoco estará muy in clinado a gambitear un peón, con 4 ... . Hay un consenso en el sentido de que las blancas están ligeramente mejor des pués de 6 d4, y su principal mérito es que eluden lo que quieren evitar: 4 0-0 deja a un lado 4 c3 f5 ! ? , por ejemplo. Pero 4 c3 evitaría, a su vez, 4 0-0 lll d4. Lo que realmente inclinaría la balanza a favor de 4 c3 sería el hecho de que al- 34 SECR ETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJEDREZ 1 1 exd6 cxd6 12 I:!. dl, como en la partid.a Matulovic-Ilincic, Sombor 2004. Hay cierto componente psicológico en 4 0-0 y ahora 4 ... CiJf6 5 CiJc3!? guien encontrase la forma de lograr venta ja con la opción extra 4 ... CiJ ge7 5 d4, pero lo cierto es que, desde hace décadas, se conoce la solución igualadora 5 . . . exd4 6 cxd4 i.. b4+ ! . S i las negras quieren jugar . . . CiJf6 en lugar de ... CiJ ge7, hay tres órdenes de ju gadas que vale la pena considerar. La pri mera y más efectiva es 3 CiJf6!, a lo que sigue 4 0-0 i.. c5 . Esto explota la preferen cia de las blancas por 4 0-0, pues esperan que las negras continúen con una Berli nesa normal. De esta forma, las negras evitan c2-c3/d2-d4, en vista de 3 . . . CiJ f6 4 c3? CiJ xe4! . Los otros dos órdenes comienzan con 3 .. i.. c5 4 c3 CiJf6 5 d4 i.. b6 6 0-0 0-0 y 4 0-0 CiJf6 5 c3 0-0 6 d4 i.. b 6. Los libros le con ceden mucha atención al primer orden de jugadas, porque garantiza a las blancas una opción adicional, 6 'iie2. Pero si, de todos modos, quieren jugar 6 0-0, y no recuerdan la compleja teoría de la línea 4 c3 f5, el se gundo orden es el mejor. Para empezar, porque tiene la ventaja añadida de tentar a las negras a jugar 4 ... CiJf6 5 c3 CiJ xe4?. Esto parece la línea 3 ... CiJf6 4 c3? CiJ xe4! antes mencionada, pero ésta resulta ser mala tras 6 'it'e2 ! . Por ejemplo: 6 ... f5 7 d3 CiJ f6 8 d4 i.. e7 9 dxe5 CiJ e4 10 i.. c4 ! d5 ••• . Lo que ha sucedido es que hemos aca bado en una Apertura Cuatro Caballos (1 e4 e5 2 CiJf3 CiJc6 3 CiJc3 CiJ f6 4 i..b5), en la que las negras han jugado una rara línea marginal, 4 ... i.. c5 ! ? , y las blancas han res pondido 5 0-0. Esto está muy bien para las negras, si conocen la teoría (5 ... 0-0! 6 CiJ xeS CiJxeS 7 d4 i.. d6!). Alexander Beliavsky se vio sorpren dido en una ocasión, por Lj ubomir Lju bojevic, con este orden de jugadas, y fue superado tras 6 ... .l:t e8? ! 7 CiJf3 CiJ xe4 8 d4 CiJ xc3 9 bxc3 i.. f8 10 CiJ g5 ! h6 1 1 CiJh3 d6 12 'iff3 ! i.. d7 13 I:t bl � b8 14 'ii g3 CiJ e7 15 i.. xd7 'if xd7 16 .ixh6 ! . DEFENSA COZIO Y DEL FIANCHETIO Cuando las negras desarrollan su alfil de rey por g7 están jugando una Apertura Vienesa con los colores invertidos, siendo una reflexión especular de 1 e4 e5 2 CiJc3 CiJf6 3 g3 i.. b4. Pero el tiempo extra de las APERTU RA RUY LÓPEZ 35 blancas en la versión Ruy López (1 e4 e5 2 tZ:lf3 tZ:lc6 3 �b5 g6) significa que pue den avanzar antes su peón d. Podrían hacerlo rápidamente porque después de 4 0-0 las negras tienen tiempo para jugar 4 ... �g7 5 c3 tZ:lge7 6 d4, y en tonces 6 ... exd4 7 cxd4 d5 ! , con juego de doble filo. Más peligroso es 4 c3: ta el tema 3 ... g6 4 c3, lo mismo que la mo lesta 3 ... g6 4 d4 exd4 5 Ag5 !. Se trata de la Defensa Cozio (3 tZ:lge7), que transpo ne a una posición de 3 ... g6 4 0-0, después de 3 ... tZ:lge7 4 0-0 g6 5 c3 �g7 6 d4 exd4 7 cxd4 d5. Si las blancas responden 4 d4 exd4 5 tZ:lx d4 tenemos 5 g6 6 tZ:lc3 .i.g7 7 Ae3 Las negras tienen problemas tras 4 ... d6 5 d4 �d7 6 �b3 ! (6 ... �g7 7 dxe5 dxe5 8 �c4 ataca f7 y b7). Vassili Smyslov, el maestro de esta variante, dijo que lo mejor era 4 ... a6!. Las negras están dispuestas a transponer, después de 5 �a4, a una De fensa Steinitz diferida (3 ... a6 4 �a4 d6 y ... g6). ¿Por qué preferirían las negras 3 ... g6 al orden normal de la Steinitz diferida? La respuesta es que evitan otras lfueas de esa variante, como 5 0-0! y 5 �xc6+ ! ? . Puede que las blancas prefieran res ponder a 4 ... a6 con 5 Ac4, lo que sería una versión muy sólida de la Apertura Ita liana, en la que las negras disponen de la jugada extra . . . a6. Por ejemplo: 5 ... d6 6 d4 'f!ie7 7 0-0 �g7. Hay un camino por la puerta trasera, hacia un fianchetto de las negras, que evi- La posición se convierte en una vieja Defensa Steinitz, aunque, en realidad, una de las mejores versiones de esa defensa, después de 8 . . . d6. Pero las negras pue den jugar mej or, con ... d5 ! ? . Por ejemplo: 8 �d2 d5 9 exd5 tZ:l xd5 1 0 tZ:l xc6 bxc6 1 1 .i. xc6 tZ:l xe3 ! 12 � x e3 l::t b8, o bien 12 �xa8 �xd2+ 13 �xd2 tZ:lc4+ 14 �el tZ:l xb2. Debe haber un inconveniente en el or den de la Defensa Cozio, pues de no ser así todo el mundo la jugaría, y es 3 tZ:l ge7 4 tZ:lc3!, con lo que la posición se hace más complej a después de 4 . g6 5 d4 e x d4 6 tZ:ldS!. Que las blancas tengan ventaja des pués de 6 ... ilg7 7 �g5 es discutible. Con todo, pocos partidarios de la Ruy López están dispuestos a comprobarlo, lo que ha ce que el orden de la Cozio sea un buen ar ma práctica. ••• , ... 0-0. ••• . . 36 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJEDREZ DEFENSA BIRD La defensa de Henry Bird (1 e4 e5 2 tll f3 tll c6 3 i.b5 tll d4 4 tll xd4 exd4) parece ab surda. Las negras mueven su única pieza desarrollada por segunda vez, para doblar sus propios peones. Pero esos peones centrales doblados llevan a cabo una buena tarea de restringir a las blancas después de 5 d3 c6 6 Ac4 d5!. Por ej emplo: 7 exd5 cxd5 8 A b5 + i. d7 9 i.xd7+ '/i'xd7 10 0-0 .ic5 ! 1 1 .la el+ tll e7, y la posición es perfectamente razonable para las negras. El error de las blancas fue comprome terse demasiado pronto (5 d3? ! ) . La mejor jugada de espera en muchas -si no en to das- es el enroque. Aquí, 5 0-0! permite a las blancas decidir entre 6 d3, 6 c3, 6 i.c4 e incluso 6 '/i'h5 , una vez que las negras realicen su quinta jugada. Así, tienen ex celentes posibilidades en caso de 5 . . . c6 6 .ic4 d5 7 exdS cxd5 8 .tb5+ .td7 9 %1 e l+ tll e7 10 .txd7+ '/i'xd7, y ahora 1 1 '/i'h5 u 1 1 c4 (en lugar de transponer con 1 1 d3?). Después de 5 0-0, la jugada más popu lar en los últimos años ha sido 5 i.c5. vulnerando la regla de que no debe m<;> verse una pieza dos veces en la apertura. Las negras deben neutralizar la amenaza 7 i.xf7+ @ xf7 8 '/i'h5+, de modo que no tie nen tiempo para jugar ... d5. STEINITZIANA La solución de Wilhelm Steinitz al proble ma de la Ruy López fue mantener una só lida cabeza de puente en e5, después de 1 e4 e5 2 tll f3 tll c6 3 ii.b5, mediante 3 ... d6. Sus discípulos ensayaron 3 d6 4 d4 i.d7 5 tll c3 tll f6 6 0-0 .t e7, o incluso, por inver sión, 3 tll f6 4 0-0 .te7 5 tll c3 d6 6 d4 ..• ••• i.d7. Una posición clave surge después de que las blancas protejan su peón e con 7 n el, y amenazan con ganar el negro. Eso lleva a una formación típica, 7 exd4 ••• 8 tll xd4 0-0 9 .txc6 bxc6. ••• Ahora, 6 d3 c6 7 i.c4 dS ! deriva hacia la línea con 5 d3. Más preciso es 6 i.c4!, Las blancas están mejor, pero las ne gras tienen juego sobre la columna b y con el plan ... c5 !/... .tc6. Por ejemplo: 10 .tf4 c5 1 1 tll f3 .t c6 1 2 '/i' d3 tll h5 ! 1 3 i. e3 : es 1 4 l:l adl 'ii'b8 15 �el '/i'b7, Narciso Du blan-Mirzoev, Salou 2006. La experiencia demuestra que las blan cas deberían tratar de obligar a las negras APERTURA RUY LÓPEZ en c6 con el alfil, eliminando así el contra juego ... c5 ! . Pueden hacerlo así: 3 d6 4 d4 .td7 5 lll c3 lll f6 6 .txc6! , ya que si 6 ... bxc6?, las negras pierden un peón, con 7 dxe5. En lugar de ello, 6 . .txc6 7 �d3 re nueva la amenaza dxe5, y es favorable a las blancas: 7 ... lll d7 8 lll xd4 �d7 9 .tgS �e7 10 0-0-0 y 8 ... g6 9 .tgS .tg7 10 lll xc6 bxc6 11 e5 dxe5 12 �f3 �d6 13 l:t dl (Lu pulescu-Pessi, Bucarest 2004). La contrasutileza de las negras radica en jugar ... exd4 antes de .txc6, a fin de po der retomar con el peón b, lo que consi guen con 3 . d6 4 d4 .td7 5 lll c3 . •.• .. .. 37 una diferencia, porque las blancas puede.n retomar de dama, 5 'it'xd4 .td7 6 .txc6, una línea favorable a las blancas, algo que es sabido desde los tiempos de Morphy. Para resucitar la Defensa Steinitz, las negras necesitan una nueva idea, quizá la relativamente poco explorada 5 ... l2Jge7!?, en el último orden de jugadas, o algo que pueda confundir a las blancas acerca del momento oportuno del cambio .txc6. Po drían intentar el orden de la Defensa Ber linesa, 3 ... lll f6 4 0-0, y ahora 4 ... d6, o bien 4 ... .te7 5 l:l el d6. Esto tiene la ventaja de privar a las blancas de sus planes más agre sivos, como 'if d3/0-0-0, y evitar 4 d4. Pero las blancas deberían ser conscien tes de que después de 3 .. l2J f6 4 0-0 d6 5 d4 .td7, pueden seguir con 6 .txc6! .txc6 7 lll c3 . . Ahora 5 ... exd4! 6 lll xd4 lll f6 7 0-0 �e7. Si ahora 8 .txc6 u 8 l:t el 0-0 9 .txc6, el juego derivaría hacia la formación de doble filo (con ... bxc6) que debería hacer felices a las negras. Lamentablemente, hay una contracon trasutileza. Las blancas pueden acelerar la captura en c6, como demostró Jackson Showalter hace más de un siglo, 3 ... d6 4 d4 .1d7 y ahora 5 .txc6 .txc6 6 lll c3, que transpone a la línea favorable después de 6 ... lll f6 7 'ii' d3 exd4 8 lll xd4. Por supuesto, las negras también pue den acelerar su plan, con 4 d4 exd4, como suele hacer Alexander Onischuk. Pero hay La liquidación que sigue, 7 ... l2J xe4 8 lll x e4 .txe4 9 l:t e l es favorable a sus in tereses (9 .. f5 10 lll g5 ó 9 ... �f5 10 dxe5 d5 11 lll d4). Por otro lado, las negras normalmente transponen, con 7 ... exd4 8 lll xd4 a una línea .txc6, antes que ... bxc6 ! . Conclusión: l a Steinitz merece s u repu tación, pero sólo si las blancas juegan oportunamente ..txc6. Si a las negras les gustan las líneas con ... bxc6, tendrán una . 38 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ mejor oportunidad de alcanzarlas por la Steinitz diferida, como 3 ... a6 4 �a4 lt:if6 5 0-0 �e7 6 .!:!. el d6, en cuyo caso lo mejor que tienen las blancas es 7 � xc6+ bxc6 8 d4 cxd4 9 lt:i xd4 .td7. DEFENSA STEINITZ DIFERIDA Este sistema se conoce en Rusia como "Defensa Steinitz mejorada" y la mejora más evidente es que, al intercalar 3 . . . a6 4 �a4 antes de 4 ... d6, las negras hacen que el avance d2-d4 sea un tanto arriesga do. Después de 1 e4 e5 2 lt:if3 lt:ic6 3 �b5 a6 4 �a4 d6 5 d4, las negras pueden res ponder 5 ... b5! 6 �b3 lt:i xd4 7 lt:ixd4 exd4. Ahora 8 'it'xd4? cae en la trampa cono cida como el Arca de Noé (8 ... c5 9 'it'd5 �e6 10 'it'c6+ �d7 11 'it'd5 c4, ganando). Pero 8 c3! es un gambito muy respetable: 8 .. dxc3 9 lt:i xc3 lt:if6 10 0-0. La quinta jugada más flexible de las blancas es 5 0-0!, que les concede todo tipo de sutilezas. Pueden, por ej emplo, responder a 5 ... �d7 con 6 c3. Esto nor malmente transpone a la línea principal de la Steinitz diferida, 5 c3 �d7, pero sin exponerse a la azarosa Variante Siesta (5 c3 f5 ! ?). . Hay otra idea que merece ser debiqa mente acreditada. Se trata de c2-c4, inven to de Oldrich Duras. No se considera peligrosa, porque si 5 c4, 5 . . .tg4! explota el agujero de d4. Pero después de 5 0-0 � d7, las blancas pueden buscar una Duras mejorada, con 6 c4, en cuyo caso, si las ne gras responden 6 ... �g4 les costaría un tiempo, y no está claro que eso o 6 ... lt:if6 7 lt:ic3 puedan igualar. La continuación más habitual, después de 5 0-0 .td7 es 6 d4. . Éste es un gambito mejorado, en vista de 6 ... b5 7 � b3 lt:ixd4 8 lt:i xd4 exd4 9 c3, pues ... �d7 no es tan útil como ... �b7. Por otro lado, 6 ... lt:ige7 7 c4! es un ex celente Duras. Por ej emplo: 7 . . . lt:i g6 8 lt:ic3 �e7 9 .te3 0-0 10 l:t cl Ag4 11 �xc6 bxc6 12 h3, como en la partida Smagin-Ba bu, Londres 1990 . La teoría prefiere 6 ... lt:i f6!. En tal caso, ambos jugadores pueden pensar que han ganado la batalla de la apertura. Las negras dicen: "Te he engañado, llevándote a una Defensa Steinitz do blemente diferida, sin permitirte la opor tunidad de emplear tu mej or arma." Traducción: Esta posición puede alcan zarse por 3 . . . a6 4 Aa4 lt:i f6 5 0-0 d6 6 d4 APERTURA RUY LÓPEZ � d7, pero sólo si las blancas pasan por alto 6 i. xc6+ ! . "No", responden las blancas, "tengo lo que quería, porque ahora puedo jugar 7 i.xc6 y obtener una versión favorable de la Steinitz clásica". Con lo que quieren decir 7 ... i.xc6 8 l:t el exd4 9 lb xd4, porque si 8 . . . lb xe4? , 9 d5, y si 8 . . . �xe4, 9 lbc3, posibilidades ambas favorables a las blan cas. Como a menudo sucede al transponer, ambos jugadores pueden tener razón. Las blancas han conseguido el medio juego que querían, y las negras han evitado el medio juego que querían evitar. Lajos Portisch añadió otra sutileza a la moderna Defensa Steinitz, al responder a 5 0-0 con 5 i.e7! ? ••• Ésta parece una ruta inocua hacia cau ces tranquilos, como 6 c3 lbf6 7 l:t el 0-0 8 h3 i.d7, pero hay diferencias entre 5 ... i.e7 y 5 . . . i.d7. Una de ellas es que las ne gras están mejor situadas para jugar 6 . . . i.g4, e n relación con l a u n tanto dudosa 5 0-0 i.g4. Por ej emplo : 6 c3 i. g4 7 d4 b5 8 i.b3 lbf6, con idea de . . . i.xf3. También 7 d3 lbf6 8 lbbd2 lb d7 9 h3 �h5 10 i.c2 lbf8 ! ? resultó bueno para las negras (11 g4 i.g6 12 d4 h5) en la partida Browne-Por tisch, Milán 1975. 39 Otra diferencia es que las negras pue den tratar de implementar la Variante Siesta, respondiendo a 6 c3 con 6 f5! ? 7 exf5 �xf5 8 d4 e4. Una prueba más dura para 5 . . . i.e7 es 6 d4. En tal caso, 6 . . . b5 7 i. b3 lb x d 4 8 lb xd4 exd4 9 c3 e s otro gambito central. Después de 9 . . . lb f6 ! 10 cxd4 �b7 11 f3 0-0, se ha transpuesto a una línea más o menos igualada (5 d4 b5 6 � b3 lb xd4 7 lb xd4 exd4 8 c3 �b7 9 cxd4 lbf6 10 f3 �e7) . Si hay una refutación de 5 . . . �e7, es 6 �xc6+ bxc6 7 d4. Entonces, 7 . . . f6?, que es temático en líneas similares con �xc6+ de la viej a Defensa Steinitz, hace que las pie zas del flanco de rey parezcan estúpidas. Ahora 7 ... exd4 8 lb xd4 ..• . . . permite a las blancas ejercer el control de la posición, con 8 c5 9 lbc6! �d7 10 lba5! (10 . . . lbf6? ! 1 1 c4). Pero 5 . . . i.e7 es j ugable si las negras postergan . . . c5 , en favor de 8 �d7 9 lbc3 lbf6. O bien, mejor aún, 9 �f6!, seguido de . . . lbe7. La olvidada 5 . . . �e7 merece que se la recuerde. Las negras también pueden mezclar la Steinitz diferida con la Cozio, si juegan 1 e4 e5 2 lbf3 lb c6 3 �b5 a6 4 i.a4 y ahora .•• ••• ..• SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ 40 4 ttJge7. Alexei Suetin recomendaba "5 c3! " y citaba una de sus partidas, con 5 bS 6 .tb3 dS 7 'i!Ve2!, con ventaja. •.. ... . Pero las negras mejoran su juego con 5 .. d6! , y después de 6 d4 .td7, se transpo ne a la línea de la Steinitz diferida con 5 c3 �d7 6 d4 ttJ ge7. La teoría favorece hoy más la posición blanca que una generación atrás, pero lo que puede ser más importan te es que las negras evitaron las opciones distintas de 5 c3 de la Steinitz diferida. Por otra parte, después de 4 ... ltJge7 5 0-0, las negras pueden transponer con seguridad a la lmea de fianchetto (5 ... g6 6 c3 d6) . Las blancas pueden tener que replicar a 4 ... ttJge7 con 5 d4 exd4 6 ltJ xd4, que hasta ahora no ha sido claro, después de 6 ... g6 ó 6 ... b5 ! ? 7 .tb3 ttJ a5. 2 ltJf3 ttJc6 3 i.bS a6 4 i.a4 ltJf6 5 .t�c6 dxc6 6 d3 ltJd7?! 7 ttJbd2 �e7 8 ltJc4 ii..f6? 9 'i!Ve2 cS 10 �d2 0-0 11 g4, con un ataque ganador (11 ... b5 12 ttJe3 g6? ! 13 h4 ttJb8 14 0-0-0 ttJc6 15 :i dgl i/.e6? 16 @bl ltJb4 17 �xb4 cxb4 18 g5 ! y ltJ g4). Una ventaja importante de diferir el cambio .txc6 es que a las negras les re sulta más difícil defender su peón e. Des pués de 3 . . . a6 4 .ta4 ttJf6 5 i.xc6 dxc6, no pueden jugar ... f6, como en el caso de 4 � xc6 dxc6. Sin embargo, 6 ... i.d6! es una buena defensa de desarrollo, y las negras están bien después de 7 lb bd2 i.e6. La razón por la que el cambio doble mente diferido, 5 0-0 ii.. e 7 6 � xc6 dxc6, tiene mejor reputación es que 7 ... i.d6 costaría un tiempo. Las negras, en cam bio, obtienen una posición sólida con . . . ttJ d7. Si quieren un medio juego dese quilibrado, con mayores posibilidades de victoria, deberían considerar la rara 6 ... bxc6!? VARIANTES DEL CAMBIO Las blancas pueden jugar ii.. x c6 en la cuar ta, quinta o sexta jugadas de las lmeas principales. Cambiar en la quinta jugada tiene sentido, si las blancas quieren evitar la Defensa Abierta y conservar la opción 0-0-0. Eduard Gufeld venció a Mijail Tal en una partida que se desarrolló así: 1 e4 eS Esto puede transponer a una Defensa Steinitz. La línea del cambio doblemen te diferido (7 :! el d6) que le gustaba ju gar, con negras, a Akiba Rubinstein, que es similar a las mejores versiones de la APERTURA RUY LÓPEZ viej a Steinitz, tras 8 d4 exd4 9 llJ xd4 .t d7. Las blancas podrían mejorar con 7 llJ x e5 llJ xe4 ó 7 d4 llJ xe4 8 dxe5 0-0 (9 l:l el d5 10 llJ d4 .td7 11 f3 llJ g5 , como en la partida l. Sokolov-S. Nikolic, Pan cevo 1 987), pero apenas hay experiencia con la variante para pronunciar un vere dicto. 41 evitar la Defensa Abierta, 5 d4. Esto a me nudo favorece a las blancas, si están mejor preparadas, después de 5 ... exd4 6 0-0 ó 6 e5. Pero las negras pueden jugar, en cam bio, 5 b5!? •.• DEFENSA ABIERTA Antes de pasar a la línea principal de la D efen s a Abierta, 1 e4 e5 2 llJ f3 llJ c6 3 .tb5 a6 4 Aa4 llJf6 5 0-0 llJ xe4 6 d4 b5 7 Íi.b3 d5, consideremos 7 .te7!?. •.• Ahora 6 dxe5! llJ x e4! 7 f¡_ b3 llJ c5 8 .td5 .te7 9 0-0 transpone a la línea an terior. La formación estándar de la Defensa Abierta se produce tras 1 e4 e5 2 llJt3 llJc6 3 .tb5 a6 4 .ia4 llJ f6 5 0-0 llJ xe4 6 d4 b5 7 .tb3 d5 8 dxe5 .te6. Las jugadas a dispo Esta jugada trata de inducir a las blan cas a 8 l:l el, y entonces 8 ... d5 9 dxe5 i.e6, una posición absolutamente igualada, que podría producirse tras 7 ... d5 8 dxe5 .te6, si las blancas juegan la inepta 9 l:l el ! ?, pues entonces 9 ... Íi.e7. La mejor tentativa para castigar 7 ... Ji.. e7 es 8 dxe5. La experiencia con 8 ... llJc5 9 .td5 .tb7 ( ó 9 ... llJe6) dista de ser convincente. Por ejem plo: 9 . . . Ji.. b7 1 0 llJ c3 0-0 1 1 1i.. f4 llJ e6 1 2 1;_g3 f5 ! . . S i a las negras les gustan estas posicio nes, pueden conseguirlas aunque las blan cas adopten una forma estándar para sición de las blancas (c2-c3, .te3, llJbd2) y de las negras ( ... .te7, ... llJc5, ... il,.c5) pue den mezclarse en distintos órdenes, ha ciendo inevitables las transposiciones. En la primera edición de la Enciclope dia de Aperturas yugoslava, Viktor Korch noi endosaba la sabiduría convencional de que 9 c3 .te7 10 Ae3 y 9 c3 il.. e7 10 llJbd2 eran tan favorables a las blancas que las negras deberían evitarlas con 9 ... .tc5 ! . Pero Andrei Sokolov demostró l a forma en que las blancas pueden inducir a su ri val a entrar en una línea favorable, con 9 Ae3!?, y si entonces 9 fi.e7, 10 c3!. Esto es muy efectivo contra oponentes muy preparados teóricamente en la línea 9 c3 ••• .tes. 42 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJEDREZ Por ej emplo: 10 . . . 0-0 1 1 tt:J bd2 'i:fd7 12 l:t el l:t ad8 13 il.. c2 tt:J xd2 14 'i:fxd2 il..g4 15 'it'd3 g6 16 il..h6 l:t fe8 17 � adl tt:Ja5 18 h3 il.. xf3 19 'i:f xf3 c5 20 'i:fg3 tt:Jc4 21 b3 tt:J a3 22 e6! 'i:fc6 23 il.. f5 ! y ganan, Kamsky-Piket, Dos Hermanas 1995. No hay un antídoto evidente contra 9 ile3 , pero se ha llamado la atención sobre 9 tt:Jbd2, porque permite a las blancas res ponder a 9 . . . il.. c5 con 10 ttJ xe4 d x e4 1 1 il.. xc6, con, al menos, una pequeña venta ja. Esto ha hecho que las negras se decanten por 9 ... il.. e7, después de lo cual 10 c3! es otra buena transposición. El inconvenien te de 9 tt:Jbd2 es que las blancas pierden control de d4, en relación con 9 ile3 y 9 c3, lo que resulta significativo tras 9 tt:Jc5! . En tal caso, a las blancas les agrada ría ver 10 c3 il.. e 7 11 ilc2 il.. g4, porque transpone a otra buena línea 9 c3 (9 c3 tt:Jc5 10 il.. c2 il.. g4 1 1 tt:Jbd2 il.. e7) . Por ejemplo: 12 l:. e l 'it' d7 13 tt:J fl l::t d8 1 4 tt:J e3 il.. h5 15 tt:Jf5. Pero las negras han obtenido mejores resultados respondiendo a 10 c3 con 10 d4, hasta tal punto que se ha convertido en una de las líneas pricipales, con análisis teóricos que superan la jugada 20. Un timador preferiría otra novena ju gada, 9 a4!? ... ... Las blancas tratan de deslizarse en una línea olvidada que comienza así: 1 e4 e5 2 tt:Jf3 tt:Jc6 3 .ib5 a6 4 il.. a4 tt:Jf6 5 0-0 tLixe4 6 d4 b5 7 .ib3 d5, y ahora 8 a4, en lugar de 8 dxe5. Si las blancas logran el control de la columna abierta a, con 8 ... l:. b8 9 axb5 axb5, habrán alcanzado una versión muy mejorada de la Defensa Abierta, 10 dxe5 il.. e6 11 c3. Pero 8 a4? fue encerrada en una nota al pie, a raíz del match Lasker-Schlechter de 1910, pues las negras igualaron con 8 ... tt:J xd4! . El atractivo del orden de jugadas 8 dxe5 .te6 9 a4 es que 9 ... .l:l b8 permite a las blancas alcanzar la versión ideal de 8 a4 (seguido de 10 axb5 axb5 1 1 c3). Por ejem plo: 11 ... il.. e7 12 tlJd4 ! tt:J xe5 (12 ... 'i:fd7 13 Ac2 ! ) 13 f3 tt:Jc5 14 ilc2 il.. d7 15 b4, con ventaja, Alekhine-Rohacek, Munich 1941. Así pues, ¿qué tiene de malo 9 a4? La teoría dice que 9 tt:Ja5 es la respuesta. Pero 10 axb5 axb5 11 tt:J d4! il..c5 12 c3 0-0 13 Ac2 no es muy convincente. Se requie re más experiencia práctica (digamos 9 b4 10 a5, amenazando il.. a4), antes de po der evaluar debidamente 9 a4! ? . ... ... APERTURA RUY LÓPEZ DEFENSA M O LLER/ARKANGELSK No hay mejor ejemplo de cómo las trans posiciones pueden mejorar un grupo de aperturas hermanadas que en los sistemas agresivos en que las negras juegan ... a6, ... llJf6 y . . . .tes, posiblemente en conjunción con ... bS y ... i.b7. Hasta hace muy poco, parecían primas hermanas indignas de nuestra atención. El Ataque Móller (1 e4 e5 2 llJfJ lLlc6 3 i.. b5 a6 4 �a4 lLlf6 5 0-0 Ac5) se consi deraba demasiado inconsistente, debido a 6 c3 Aa7 7 d4, o bien 6 lLl xe5 llJ xe5 7 d4. La Variante Arkangelsk, 5 b5 6 i. b3 i.b7, disfrutó de quince minutos de fama en los años sesenta. Una fama que expiró cuando las blancas lograron ventaja en ambos flancos, con 7 l:t el .tes 8 c3 d6 9 d4 i.b6 10 i.gS y a2-a4. Pero entonces surgió la nueva Arkan gelsk, 5 ... b5 6 .tb3 Ac5. •.• La idea de las negras radica en diferir el desarrollo de su alfil dama, hasta que se pa donde les servirá mejor, si en g4 o en b7. Por ejemplo: en caso de 7 ll el, descar tan 7 . . i.b7 (que transpone a la desfavora ble vieja Arkangelsk) y juegan 7 .. tLig4!, en el espíritu del Móller. Esta jugada es . . 43 buena, pues si 8 d4? tLl xd4 9 lLl xd4 'ifh4 ! , o bien 8 ll e2 lLl d4 9 lLl xd4 i.xd4, amena zando 10 ... 'ifh4. Si las blancas concluyen que deberían jugar 7 'if e2, seguramente acabarán trans poniendo al Ataque Worrall, que normal mente se produce con el orden S 'if e2 bS 6 i.b3 �cS 7 0-0, y conduce a posibilidades más o menos igualadas. Si las blancas abandonan el plan c2c3/d2-d4 y optan por 7 d3 , las negras pue den revertir a la vieja Arkangelsk, 7 .. . 0-0 8 a4 i.b7. Se trata de una "antigua" posi ción, que se produce después de S 0-0 bS 6 .tb3 .tb7, cuando las blancas prescin den de las líneas críticas, como 7 : el . Una vez más, las negras consiguen así un juego libre de la apertura. Una prueba clave para la nueva Arkal gensk es 7 c3 d6 8 d4 i.b6. La diferencia entre la nueva y la vieja variante se pone de manifiesto con 9 n el. En tal caso, 9 . . Ab7? transpone a una posi ción inferior de la "vieja". Pero tras 9 . . i.g4!, estamos en la "nueva". Las blancas no pueden mantener ahora la disposición de su centro y no logran ventaja tras 10 dS lLle7 1 1 h3 .td7 ! y ... c6. ¿Qué decir de a2-a4, el antídoto contra . . 44 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJEDREZ un temprano ... bS ? Eso no molestaría a las negras en la posición del diagrama 68. Por ejemplo: 9 a4 Ag4! 10 axb5 axb5 11 : xa8 'iVxa8 U h3 .ih5, con lo que han obtenido buenos resultados. Puede seguir 13 'it'd3 exd4 14 .,tgS .txf3 1S .txf6 �xg2 ! , Pavlo vic-Carlsen, Reykjavik 2006. ¿No hay más que buenas noticias para las negras en la nueva Arkangelsk? No del todo. Deben saber qué hacer en caso de 7 tLi xe5. En los últimos años ha surgido una gran cantidad de teoría sobre la línea 7 ... tLl xeS 8 d4 .txd4 9 'iVxd4 d6, y los restos del naufragio aún no han desaparecido del todo. Por otra parte, las blancas pueden plan tear sus propias trampas de transposición. Con 7 a4 obligan a las negras a responder a la amenaza axbS. Después de 7 .tb7 .•• porque no tienen que enfrentarse a las· líneas más críticas, 8 ... 1:1 b8 y 8 ... .ig4. A pesar de todo, la familia ... .tes sigue siendo respetable, porque las negras han descubierto hasta ahora mejores transpo siciones que las blancas. ATAQUE MARSHALL Y VARIANTES ANTI-MARSHALL En los años treinta, el gambito de Frank Marshall se consideraba refutado. En los sesenta fue reintroducido por Boris Spassky, como un arma efectiva de tablas. Hoy quizá sea la defensa más peligrosa contra la Ruy López, lo que concede una importante significación a la séptima juga da negra: 1 e4 e5 2 tLl f3 tLl c6 3 .tbS a6 4 .ta4 tLlf6 5 0-0 .te7 6 I:t el b5 7 .tb3. 70 8 d3 es otra línea tranquila, una anti-Mar shall, en la que se ha jugado ... .tes en lugar de ... .te7. Eso podría parecer beneficioso para las negras, pero las blancas pueden complicar las cosas con 8 c3, esperando 8 d6 9 d4 �b6 10 .tg5!, una posición favo rable de la "vieja" Arkangelsk. ¿Qué ha sucedido? Hemos transpuesto a la línea 7 c3 d6 8 a4 ! ? .t b7 9 d4 � b6 1 0 j¿gS. Esto ha ayudado a las blancas, .•• Con 7 . . . d6 las negras se comprome ten con una de las variantes principales (8 c3 0-0 9 h3 , etc.) . Pero 7 0-0 les per mite plantear el Gambito Marshall, 8 c3 d5 ! ? . Se trata sólo de una amenaza, por que aún pueden j ugar 8 . . . d6, revirtiendo a las líneas principales. Con todo, la ame naza es tan molesta hoy día que hasta los más fuertes grandes maestros suelen es quivarla optando por modestas -si no ..• APERTU RA RUY LÓ PEZ cobardes- j ugadas anti-Marshall, como 8 d3 u 8 h3. ¿Por qué, entonces, debería jugar al guien 7 ... d6, que permite a las blancas ju gar más agresivamente sin riesgo? El único inconveniente de 7 ... 0-0 es que se supone que 8 a4 es fuerte. Lo es, pero no de forma muy significativa, tras 8 a4 .tb7. Por esta razón, los mejores grandes maes tros del mundo han estado investigando una forma agresiva de eludir el Marshall. Una idea es 8 d4. 13 ll'i c3 ! ) . Lo normal es que las negras respondan a 8 d3 con 8 d6. Después de 9 c3 las blancas podrán acabar avanzan do d3-d4. Esto les asegura que pueden ejecutar la maniobra ll'ifl , tan importan te en la Ruy López. Así pues, planean 10 lL'i bd2, 11 ll'ifl , 12 ll'i g3 y, eventualmente, d3-d4. Hay que decir que en algunas líneas con 8 c3, como la Variante Zaitsev, no con siguen hacerlo (8 ... d6 9 h3 �b7 10 d4 l:l e8 1 1 ll'ibd2 .tf8 12 ll'ifl ? exd4 ! , y las negras ganan un peón). El inconveriiente de 8 d3 d6 9 c3 es que las blancas irán un tiempo por detrás de las líneas tradiciona les con 8 c3 d6 9 h3, en las que normalmen te el avance d4 se realiza en una sola jugada. Pero ese tiempo puede ser un in conveniente menor, en comparación con los problemas que puede plantear el Mar shall. Observe que una de las pocas respues tas activas de que disponen las negras es 9 . .te6. Las negras parecen estar bien, si se compara esto con 8 c3 d6 9 h3 .te6 10 d4 ! , que según l a teoría e s favorable a las blan cas, después de 10 . . . � xb3 11 axb3 l:!. e8 12 dS ! y 13 c4. Pero ¿han igualado las negras después de 8 d3 d6 9 c3 �e6, y ahora 10 d4?. •.• .. Este avance da buen resultado cuando las negras juegan 8 ... ll'i xd4 9 ll'ixd4 exd4 10 eS , y es una incógnita en caso de 8 d6. En tal caso, 9 c3! transpone a la línea 8 c3 d6 9 d4 �g4. Los libros dicen que esta viej a línea es la segunda mejor, tras 8 c3 d6 9 h3. Pero "segunda mejor" no quiere decir que sea mala, y la vieja línea es em pleada hoy por Gata Kamsky, Magnus Carlsen y Alexander Grischuk, entre otros. ¿Qué decir de otras líneas anti-Mars hall? La más simple comienza con 8 d3. Entonces, la respuesta 8 ... dS se conside ra incorrecta, porque la casilla c3 está disponible para un caballo (9 exdS ll'i xdS 10 ll'i xeS ll'i xeS 11 l:! xeS c6 12 l:t el .td6 ... 45 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ 46 Tienen un tiempo de ventaja sobre la línea anterior. Pero lo único que eso signi fica es que las blancas no han j ugado h2h3. Puede que lo mejor para las negras sea 10 .tg4!, transponiendo a 8 c3 d6 9 d4 .tg4, ese viejo y razonable sistema. Otra sutileza anti-Marshall es 8 h3. Si las negras continúan con 8 d6, como a menudo hacen en el caso de 8 d3, las blan cas pueden retomar la variante principal con 9 c3! , con lo que han transpuesto a 8 c3 d6 9 h3, de paso que han eludido el Mar shall. Los libros solían despachar la jugada 8 h3 con el comentario de que tras 8 .tb7 el gambito seguía vivo. Es decir, que des pués de 9 c3 dS! 10 exd5 ltJ xdS 11 tLi xeS tLi xeS 12 l::i xe5 ltJf4 ! , las negras obtienen un fortísimo ataque. Efim Geller señaló, en cambio, las vir tudes de 9 d4!?. Si ahora 9 d6, 10 c3! transpone a la Variante Zaitsev. Si las blan cas prefieren jugar la Variante Zaitsev an tes que el Marshall -y ése suele ser el caso para la mayoría de los adeptos a la Ruy López-, entonces se han anotado una pe queña victoria moral. •.. ... .•• �xf7+ l:t xf7 1 1 tLi xe5 l:t f8! 12 �xd4 c5 es un buen gambito, y 10 lLi xd4 cxd4 11 e5 ltJe4 12 'i!Yg4 ha dado buenos resultados a las negras. No obstante, es posible que 9 d4 sea consistente, pues permitir el Marshall es peor, y debido a que la respuesta más natural de las negras es entrar en 9 . d6 10 c3, lo que da lugar a las posiciones co nocidas. A causa de la naturaleza forzada de las principales lúteas en el Marshall, hay poco lugar para las transposiciones, después de 8 c3 dS 9 exdS lLi x dS 10 lLi xeS ltJ x eS 11 l:t x eS c6. Una excepción se produce con la idea de Fischer 12 g3. .. ... Esta j ugada está concebida para sor tear la megateoría de la línea 12 d4 i.d6 13 : el �h4 14 g3 �h3. La forma más sen cilla de responder a 12 g3 es 12 i.d6 13 l:t el, y ahora 13 �d7! y ... �h3 transpone a la línea que las blancas tratan de evitar. Una de las pocas variables en el Mar shall es un oportuno cambio .txd5, si las blancas lo desean. Pueden hacerlo con 12 d4 �d6 13 l:t el �h4 14 g3 'it'h3 15 AxdS cxdS, o bien esperar con 15 .t e3 .t g4 16 'it'd3 l:! ae8, y cambiar en este momen to, 17 AxdS. O también pueden seguir postergando ••• ... El test para el orden de jugadas pro puesto por Geller es 9 ltJ xd4, ya que 10 ... APERTU RA RUY LÓPEZ 'el cambio, con 17 tll d2 l::l e6 18 'iVfl 'iVh5 19 .t x d5 . También pueden llegar a las mis mas posiciones con el orden U �xd5 cxd5 13 d4 �d6 14 1:1 el 'iVh4 15 g3 'iVh3 . ¿Qué es mejor? Quizá el último orden porque -al margen de la opción extra 14 · l:!. e3- elude otra línea de Geller, 12 d4 �d6 13 l:t el 'iVh4 14 g3 'iVh3 15 �e3 �g4 16 'iVd3 tll xe3 ! ? 17 l:t xe3 c5. 47 obligadas a analizar las complejidades de la jugada 7 tll g5 ". Hay opiniones diversas acerca de la corrección de 7 . .. d5 8 exd5 tll d4. Las blancas acabaron optando por 7 c3, y las negras transpusieron, con 7 Ae7 8 h3 tll a5 9 Ac2 c5 10 d4. Pero para enton ces habían ganado ¡ más de una hora en el reloj ! •.. MAPAS DE RUTA HACIA LAS LÍNEAS PRINCIPALES DE LA RUY LÓ PEZ Las negras alcanzan la formación principal de la Ruy López tras 1 e4 e5 2 tll f3 tll c6 3 �b5 a6 4 �a4 tll f6 5 0-0 Ae7 6 1:. el b5 7 .1i.b3 0-0 8 c3 d6 9 h3. Otros órdenes con ceden más opciones a las blancas, pero también obligan más a pensar. Arthur Bisguier explicó una vez en Chess Review por qué empleaba el orden 5 b5 6 �b3 d6!? ... En primer lugar, quería evitar la Va riante Steinitz diferida, favorita de su opo nente (5 ... Ae7 6 Axc6). En segundo lugar, de esa forma las blancas "no po dáan estar seguras de que yo quisiera trans poner a la línea principal, y se sentirían É se es un caso extremo de "dar moti vos para pensar" al oponente. Como otras rutas alternativas a las formaciones princi pales de la Ruy López, eso siempre tiene un precio. Las blancas han ahorrado un tiempo, en comparación con las líneas principales jugadas en el orden habitual. No tienen que jugar l::t el, puesto que Ac2 protege ya al peón e. En otras rutas, pueden prescindir de h2-h3, porque ... .tg4 no es una preocupación. Con todo, y como veremos, las blancas pueden tener que ju gar h2-h3 y l:t el después de todo, y entre gar a las negras los tiempos. Si lo hacen, las negras pueden obtener algunos beneficios a corto plazo, gracias a estos órdenes alter nativos. Otro orden es 1 e4 e5 2 ttJ f3 ttJ c6 3 .1i.b5 a6 4 �a4 tll f6 5 0-0 b5 6 �b3, y ahora 6 �e7. Entonces 7 tll g5? no tiene sentido, por 7 ... 0-0 ! . .•. 48 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ Este orden tiene el inconveniente habi tual de ... b5, a saber, permitir el avance 7 a4. Entonces, 7 ... b4 tiene mala reputación, debido a 8 'ik'e2 0-0 9 a5 ! y 10 c3. Quizá sea mejor 7 ... �b7 y 8 axb5 axb5 9 l:t xa8 y 10 tll c3, pero hay poca experiencia práctica para comprobarlo. Otro orden casi olvidado (después de 1 e4 e5 2 tll f3 tll c6 3 � b5 a6 4 � a4 tll f6 5 0-0) es 5 . �e7 6 l:l el bS 7 �b3 .tb7. Esto también se produce vía Variante Ar kangelsk, si las negras sitúan su alfil rey en e7, en lugar de c5. Las blancas no tienen aquí nada mejor que 8 c3. Lo que ha sucedido es que hemos llegado a una línea principal de la Ruy López, pe ro con la omisión de h2-h3 y ... 0-0. Eso de be favorecer a las blancas, no a las negras, pero es difícil demostrarlo, si las negras continúan postergando el enroque, con 11 ••• cxd4 12 cxd4 : c8. .. Esto no es sólo una trampa, pues 13 dxeS dxeS 14 tll xeS? 'ik'c7! merece la seria verificación que aún no ha obtenido. LA VIEJA LÍNEA PRINCIPAL Esta posición se produjo varias veces en los cincuenta, como un medio de plan tear una especie de Gambito Marshall, 8 ... d5. Sin embargo, las negras también pue den responder 8 d6, con la esperanza de alcanzar una versión mejorada o, al menos, confusa, de la principal línea de la Ruy Ló pez, tras 9 d4 tll aS !? . Esto deja un peón colgando, pero nadie que haya jugado esta posición parece confiar en la línea 10 dxe5 dxe5 1 1 tll xe5 tll xb3. También se ha jugado la alternativa 10 �c2 cS. Cuando Paul Keres llegó a esta posición, descartó 11 dxe5 dxe5 12 'ik'xd8+ tt xd8 13 tll xe5 Axe4! , y jugó 11 tll b d2. •.• La forma en que se llegaba a la formación principal de la Ruy López, durante gran parte del siglo XX, era 5 O·O �e7 6 l:t el bS 7 �b3 d6 8 c3, y ahora 8 . . tll aS 9 i.c2 cS. Esto se consideraba una sutileza, porque evitaba 8 ... 0-0 9 d4, en una época en que esta línea se considera muy fuerte. El or den 8 ... tll a5 comenzó a desaparecer en los años cincuenta, pero fue revivido por Bent Larsen y Oleg Romanishin. ¿Por qué fue revivida? Una razón es que, al diferir el enroque, las negras pue den responder a 10 d4 'f/c7 ll h3 con un rápido ... : c8, que amenaza el alfil de c2 antes de lo habitual. Por ejemplo: 11 .td7 12 tll bd2 cxd4 . ••• . APERTURA RUY LÓPEZ 49 13 c x d4 :t c8. Puesto que las blancas no tienen tiempo de jugar ll:lfl , no pueden de fender el alfil con .i::t e2 o lll e 3, como sue len hacer en la línea principal ortodoxa. En lugar de ello, suelen jugar 14 .tbl , a lo que sigue 14 .. 0-0 15 ll:lfl, que transpo ne a una posición a la que normalmente se llega por 5 0-0 .t e? 6 l::t el b5 7 �b3 0-0 8 c3 d6 9 h3 ll:l a5 10 ii.c2 c5 11 d4 'i#c7 12 lll bd2 cxd4 13 cxd4 ii.d7 14 ll:lfl l:t ac8, si en este momento las blancas renuncian a 15 lll e3 ! y 15 :t e2 ! , y optan por 15 .tbl . E n este orden, las blancas n o disponen de esa elección y el resultado es una posición más o menos equivalente ( 1 5 . . . l:t fe8 16 ll:lg3 ll:l c6). Otra ventaja de la vieja lmea principal es que las negras no están enrocadas des pués de 8 ... ll:la5 9 ii.c2 c5 10 d4 'i#c7 11 h3 lll c6. Esto significa que 12 d5? (una buena j ugada con los movimientos añadidos lll bd2 y ...0-0) resulta ser buena para las negras después de 12 ... ll:lb8 13 ll'lbd2. En lugar de 13 ... 0-0? 14 a4 ... (Ver diagrama 80.) . .. .las negras pueden atacar, con 13 ... g5! (14 ll:l xg5 l:t g8), con ventaja, según Alek sandar Matanovic. El inconveniente de la vieja línea prin cipal es que las blancas ahorran un tiempo, no jugando h2-h3. Pero eso puede ser tem poral. Por ejemplo: 11 llJ bd2 0-0 12 ll:lfl?, antes que 12 h3 ! , permite 12 ... cxd4 13 cxd4 .tg4 ! , con excelente juego. Tal se vio totalmente frustrado cuando Larsen adoptó contra él la vieja lmea prin cipal en 1991 . Tal sabía que, según los li bros, 10 d4 'i#c7 11 a4 era la refutación. Pero al estudiar la posición, concluyó que 11 c4! (en lugar de la teórica 1 1 ... b4?) no era mala en absoluto. También se dio cuenta de que tras 11 ll:lbd2, las negras pueden responder 11 ... � d7 12 d5 0-0, y cuando las blancas j ueguen ll:l fl-e3, las negras responden ... ll:lg4 ! , que parecía bueno. De modo que, tras considerable reflexión, Tal se limitó a jugar 11 h3, transponiendo después de todo. Ésa fue la última partida entre estos dos grandes guerreros y finalizó en tablas, después de que las negras recurriesen al truco 1 1 . . . �d7 12 llJ bd2 13 cxd4 1:1 c8 ! 14 �bl 0-0. ... LÍNEAS PRINCIPALES Una moderna línea principal discurre así: 1 e4 e5 2 ll:lf3 ll:l c6 3 i.b5 a6 4 �a4 ll:lf6 50 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ 5 0-0 Jie7 6 l':t el b5 7 ..tb3 0-0 8 c3 d6 9 h3, y ahora 9 tll a5 10 .tc2 c5 11 d4. Lo nor .•. mal es que las negras defiendan el atacado peón e con ... 'fi/c7, ... tll d7 ó ... tll c6, con o sin cambio de los peones c. A menudo, inclu yen . .. .l:[ e8, de forma que, tras ... �f8, poder completar su desarrollo y presionar sobre e4. Por ejemplo: 11 ... 'fi/c7 12 tll bd2 cxd4 13 cxd4 Jib7 14 tll fl : ac8 y 15 . . . .l:. fe8. Más económica es la idea de gambito de Yakov Murey, 11 ... !i e8!?, que se basa en 12 dxe5 dxe5 13 tll xe5 Ab7, con com pensación por el peón sacrificado. ejemplo: 11 ... l:t e8 12 tll bd2 Af8 13 b3 tll c6 14 Jib2 .td7 15 a3 'fi/b6 ! , con buen juego. Por el contrario, 11 . . . 'fi/c7 12 tll bd2 I:i e8 13 b3 .tf8 14 tll fl es favorable a las blancas. La contribución de Igor Zaitsev a la Ruy López se produce cuando las negras responden al esquema habitual, 9 h3, con 9 . .l:. e8 10 d4 .tb7. De esta forma se impi de la maniobra tll d2-fl, tan valiosa para las blancas en la Ruy López, como antes se ha observado. Lo que hizo jugable a la Variante Zait sev fue comprender que 9 l:t e8 10 tll g5 .. ••. Por ejemplo: 14 tll d2 .td6, o bien 14 'fi/f3 Jif8 15 Jif4 l:t e6 16 tll g4 tll c4 17 tll xf6+ .!:. xf6 18 tll d2 tll e 5, Chandler-Heb den, Millfield 2000. Pero la idea principal de 1 1 ... l:l e8 es ahorrar un tiempo, omitiendo ... 'fi/c7. Por ejemplo: 12 tll bd2 Ji t8 13 tll tl, que concede a las negras buen contrajuego después de 13 cxd4 14 cxd4 ..• exd4 15 tll xd4 Jib7. Compare esta línea con 11 . . . 'fi/c7 12 tLl bd2 l:[ e8 13 tll fl Jif8, en cuyo caso las blancas consiguen ventaj a con 14 .tg5 ! . Al evitar . . . 'fi/c7, las negras pueden encontrar una mejor utilización de su dama. Por ... no creaba a las negras problemas, puesto que 10 l:i t8! es perfectamente seguro. Las blancas, en tal caso, no tienen nada mejor que 1 1 tll f3 ! , repitiendo posiciones. En realidad, las tablas de grandes maes tros han finalizado aquí, o tras algunas re peticiones más. El orden de jugadas original de Zaitsev es inexacto, si las negras quieren evitar unas tablas, así como las complicaciones de 9 ... ll e8 10 a4 tll a5 11 i.a2. Más preci so es 9 .tb7!, primero, y luego 10 d4 .!:. e8, transponiendo. .•• ••• 51 Capítulo 3 Defensa Siciliana En la Defensa Siciliana los trucos por transposición castigan las jugadas rutina rias con mayor frecuencia que en ninguna otra apertura. Eso es lo que cabría esperar de las agudas líneas abiertas, pero también sucede en las variantes cerradas. Las blancas pueden intentar, por ejemplo, ahorrar un tiempo en compara ción con el tradicional orden cerrado, 1 e4 cS 2 ltJ c3 ltJc6 3 g3, con 2 g3. El campeón ruso por correspondencia, Sergei Koro liev, mostró las ventajas de la idea, des pués de 2 ltJc6 3 j,, g2 g6 4 d3 � g7 S f4 d6 6 ltJfJ. Las negras han jugado de forma mecá nica, pero si siguen con 6 eS 7 0-0 ••. ... ltJge7?! (Ver diagrama 83.) ... gracias al tiempo ahorrado ( ltJc3), las blancas disponen de un fuerte sacrificio de peón, 8 fS! gxfS 9 ltJh4 fxe4 10 dxe4, segui do de ltJf5 o 'i'h5. Por ejemplo: 10 ... .te6 11 ltJf5 j,xf5 12 exf5 f6 13 ltJc3 0-0 14 lbd5, Koroliev-Varlamov, Corresponden cia 1981. Si las negras se decantan por 6 ... lbf6, Koroliev hubiese entrado gustoso en una cerrada normal, con ltJc3, pues mu chos jugadores piensan que ... ltJf6 es una de las defensas menos efectivas contra la Variante Cerrada. El inconveniente de 2 g3 es 2 dS!. Las blancas no tienen tiempo para jugar 3 d3 y 4 ltJd2, debido a 3 ... dxe4 ! , y puede que tampoco les guste 3 exd5 'i'xd5 4 ltJf3 �g4 5 .tg2 'i'e6+ ! . Alexander Morozevich refinó este or den de jugadas con 2 d3!?, que permite a las blancas transponer, después de 2 ... g6 3 g3 �g7 4 .tg2 ltJc6 5 f4 d6 6 lbf3 e5 7 0-0 ltJge7 8 f5! , al sacrificio de Koroliev. Pero también les permite responder a ... d5 con ltJd2 ! , y obtener un Ataque Indio de Rey (es decir, una India de Rey con los colores invertidos). ... 52 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ SICILIANA CAMALE ÓN cas apuntan a una línea cerrada. Pero si las negras responden ingenuamente 4 g6?, esperando 5 ii.g2 ii.g7 ••• Este elástico sistema se basa en la posibili dad que las blancas tienen de diferir una decisión en cuanto a si abrir o no el centro con d2-d4. Da resultado, porque las sofisti cadas jugadas negras de las líneas abiertas, como ... a6 y ... fl/c7, estarían fuera de lugar en los esquemas cerrados, como demos tró por primera vez Vladimir Simagin, en partidas como Simagin-Portisch, Plovdiv 19S9: 1 e4 c5 2 llJf3 e6 3 llJc3!? a6 4 g3 b5. . . . se verán sorprendidos por 5 d4! cxd4 6 llJ xd4. Esto las expone a un feo agujero El esquema negro funcionaría bien después de S d4 cxd4, pero no en la conti nuación de la partida, 5 Ag2 ii.b7 6 d3! llJc6 7 0-0 d6 8 llJ gS . A pesar de su expe riencia en la Siciliana Abierta, Lajos Por tisch pareció desorientado, a la vista de la continuación: 8 ... h6 9 llJh3 llJf6 10 f4 ii.e7 1 1 fS ! eS 12 llJf2 llJd4 13 llJbl ! llJd7 14 c3 llJc6 lS a4 ii.gS 16 ..txgS fl/xgS 17 axbS axbS 18 l:t xa8+ ii.xa8 19 llJa3 llJ a7 20 d4! . Por otra parte, si las negras asumen que el juego se encauzará hacia una Siciliana Cerrada, las blancas pueden pasar a la abierta. Tal es el caso, después de 2 llJc3 llJc6 3 llJge2 e6 4 g3. Las negras muestran su disposición a jugar una Variante Taima nov o una Scheveningen, así que las blan- en d6 (6 ... ii.g7? 7 llJdbS ! ) . D e modo similar, 4 ... llJ ge7 S ii.g2 g6? 6 d4! . Las negras nunca tienen este proble ma en órdenes normales de la Siciliana Cerrada, como 1 e4 cS 2 llJc3 llJc6 3 g3 g6 4 Ag2 Ag7, porque tienen demasiada fuerza concentrada sobre d4. Supongamos que las negras renuncian a ... g6 y tratan, en cambio, de jugar un rá pido ... dS, como en la línea 1 e4 cS 2 llJc3 e6 3 g3 dS 4 exdS exdS. Es un arma perfec tamente válida contra esquemas cerrados. Pero 2 ... e6 es una jugada más comprome tida de lo que las negras sospechan, y des pués de 3 llJf3 , no pueden impedir d4. Si el jugador con negras es un adepto de la Naj dorf o la Dragón, se encontrará fuera de su repertorio. Hay tres versiones básicas del Cama león: 1) las blancas desarrollan sus caba llos por f3 y c3. 2) Pueden jugar 2 llJe2 y 3 llJbc3. O bien, 3) pueden comenzar con 2 llJc3 y luego 3 llJge2. La primera versión es la más engañosa. DEFENSA S I C ILIANA Después de 2 tt::l f3 , un practicante de la Va riante Taimanov respondería 2 ... e6, por que quiere evitar 2 ... Ac6 3 i.b5, la Variante Rossolimo. Pero 3 tt::l c3 plantea entonces un problema. Si las negras siguen con 3 ... tt::l c6, permiten una de las mejores versiones de la Rossolimo, 4 �b5 ! , mien tras que 3 ... tt::l f6 transpone, después de 4 e5 tt::l d5, a la dudosa Variante Nimzovich (a la que normalmente se llega por el orden 2 tt::l f3 tt::l f6 3 e5 tt::l d5 4 tt::l c3 e6). La respuesta más flexible a 2 tt::l f3 e6 3 tt::l c3 es 3 ... d6. Entonces, 4 d4 cxd4 5 tt::l xd4 da paso a toda una serie de posibles sicilia nas (5 ... tt::l f6, 5 ... tt::l c6, 5 ... a6). Sin embar go, las blancas pueden sorprenderles con 5 53 tt::l c6 3 tt::l c3 con 3 d6 4 d4 cxd4 5 tt::l xd4 g6. Pero ésta es una moderna Variante del ••• Dragón, con una ligera diferencia, a saber, que se ha jugado ... tt::l c6 en lugar de ... tt::l f6. Eso significa que es posible 6 tt::l d5!. En tonces, 6 ... .td7 7 j,, g5 es molesto, y 6 ... e6 7 tt:Jc3 expone los agujeros. 1Wxd4!? Si las negras responden 6 i.g7, en su lugar, no están perdidas como afirmaba Alexei Suetin en la primera edición de la Enciclopedia de Aperturas yugoslava (ECO). Pero quedan peor tras 7 tt::l b 5! l:! b8 8 c4. El jugador de la Dragón podría refinar este orden y responder a 2 tt::l f3 con 2 d6 3 tt::l c3 g6. Pero quedaría en un nue vo y complicado territorio, tras 4 d4 cxd4 5 1Wxd4! (5 ... tt::l f6 6 e5 tt::l c6 7 �b5). Pero la vida no es tan simple para las blancas en este orden del Camaleón. Un inconveniente principal a 2 tt::l f3 tt::l c6 3 tt::l c3, o a 2 d6 3 tt::l c3 es 3 e5! , en cuyo caso el avance d2-d4 es imposible y las blancas se encuentran atascadas en una Si ciliana Cerrada, con su caballo de rey mal situado en f3, donde bloquea el peón f. Por ejemplo: 2 ... tt::l c6 3 tt::l f3 e5 4 �c4 d6 5 0-0 i.e7 6 a3? ! tt::l f6 7 I:1 bl 0-0 8 b4 a6 9 d3 b5 ! , como en la partida J. Polgár-Kramnik, París 1994. Las blancas pueden mejorar ••• ••• Entonces, 5 .. tt:Jc6 6 Ab5 es una posi ción (a la que normalmente se llega por 2 tt::l f3 d6 3 d4 cxd4 4 1Wxd4) con la que la mayoría de los jugadores de 2 ... e6 no es tán familiarizados. Y 5 a6 es más enga ñosa de lo que pudiera pensarse: 6 1Wd3 . ••• tt::l c6 7 ..tf4 1Wc7 8 0-0 tt::l e 5?? 9 tt::l xe5 dxe5 10 �xe5!, y las negras se rindieron, Benja min-Hrop, Parsippany 2003. El jugador de la Dragón puede sentir se a gusto en la primera versión del Cama león, porque puede responder a 2 tt::l f3 ••• ••• 54 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J U GADAS EN AJEDREZ sobre 6 a3? ! , pero hasta ahora 3 ... eS ! ha conseguido buenos resultados. José Raúl Capablanca y Paul Keres trataron de resolver el problema de ... es con la segunda versión del Camaleón, 2 lt:Je2 y 3 lt:Jbc3. La diferencia es que 2 . . . lt:Jc6 3 lt:Jbc3 e S permite 4 lt:JdS ! , seguido de lt:Jec3 ! y �c4, con lo que las piezas blancas quedan muy bien coordinadas. La respuesta natural a 2 lt:Je2 es 2 lt:J f6 , que ataca el peón e y provoca com plicaciones, con 3 eS ? ! lt:Jg4, o bien 3 . . . lt:JdS 4 lt:Jbc3 e6. ••• Pero así es cómo Bobby Fischer se vio superado, en su match-revancha de 1992, por Boris Spassky, quien pasó a una Sici liana Cerrada, 3 lt:Jbc3 d6 4 g3! lt:Jc6 5 �g2 d6 6 0-0 �g7 7 d3 0-0 8 h3 y 9 f4, un arma excelente contra Fischer, quien siempre había preferido los sistemas ... fS o ... e6/ ... lt:Jge7, no aquéllos con ... lt:Jf6. Quizá la mejor política de las negras, tras 2 lt:Je2, sea permitir una Siciliana Abierta, digamos, con 2 . . . lt:Jc6 3 lt:Jbc3 d6 4 d4, con lo que postergan ... es, hasta que las blancas hayan renunciado a lt:JdS/ �c4, por ejemplo, con 4 g3 eS ! . Hay pequeñas diferencias e n e l tercer orden del Camaleón, 2 lt:J c3 y 3 lt:Jge2. Puede suponerse que un jugador Najdorf . responda 2 d6 y 3 ... a6. Después de 4 d4 cxd4 5 lt:J x d4 , puede elegir entre transpo ner a una Najdorf normal, con S ... lt:Jf6, y la opción adicional 5 ... e6!?. Esto evita la Najdorf con 6 �gS, y obtiene buenas ver siones de otras Najdorf, como 6 f4 bS 7 �d3 �b7 8 0-0 lt:Jd7 9 fS? 'it'b6 ! . También crea un razonable Ataque Keres después de 6 g4. Por ejemplo: 6 . . . t[J e7 7 a3 lt:J bc6 8 lt:Jb3 bS, como en la partida Vallejo-To palov, León 2006. El problema con el orden imitador de la Najdorf es que las negras deben justifi car . . . a6 después de 4 g3! ••• Ahora, 4 ... e5 no es ni de cerca tan efectivo como cuando el peón f está blo queado. Virtualmente, están una jugada por delante de la Siciliana Cerrada normal, tras 5 �g2 lt:Jc6 6 d3 g6 7 f4 �g7 8 0-0 lt:Jge7 9 �e3 0-0 10 'it'd2 lt:Jd4 11 .IH2 . Observe que las negras también logran una opción extra, tanto en el orden 2 lt:Jc3/3 lt:Jge2, como en el 2 lt:Jc3/3 lt:Jf3. Después de 2 ... lt:J c6 y 3 ... d6 4 d4 exd4 S lt:J xd4, pueden intentar S ... eS. Esto tiene la ventaja de alcanzar una Variante Sveshnikov (6 lt:JdbS a6 7 lt:J a3 bS 8 lt:JdS), pero con la posibilidad 8 ... lt:Jce7 ! ? , que ha DEFENSA SICI LIANA obtenido buenos resultados. Sin embargo, las blancas también disponen de una op ción extra, 6 t2Jf5 ! ? , y toda esta línea 5 .. eS debe calificarse de confusa. El mayor problema con todos los órde nes Camaleón es el Dragón Acelerado. Después de 1 e4 c5 2 t2Jf3 t2Jc6 3 t2Jc3 g6! , surge la posición del diagrama: . 55 liana como Evgeni Sveshnikov dijo que permitirlo, respondiendo a 2 f4 con 2 ... t2Jc6, era un grave error, pues "las negras ya están peor", escribió. El plan básico de las blancas en este ataque es t2Jc3 y f2-f4, seguido de t2Jf3 y el alfil de rey en c4 o bS. Si las negras pudie sen estar seguras de que las blancas no van a transponer, su mejor orden sería 1 e4 c5 2 ll:ic3 ll:ic6 3 f4 e6 4 ll:if3 ll:ige7. Ahora, 4 g3 �g7 es una inocua Sicilia na Cerrada, en la que el caballo rey de las blancas está, una vez más, mal situado. Es mejor 4 d4 cxd4 5 t2J xd4 �g7. Si a las ne gras les gusta la Variante del Dragón, se sentirán aquí felices, porque disfrutan de los beneficios del orden acelerado, sin per mitir a las blancas su mejor arma, la For mación Maróczy. Pero las blancas también pueden estar contentas con este orden de j ugadas, porque han disuadido a las negras de una serie de variantes que podrían haber preparado, como la Taimanov o la Sves hnikov. ATAQUE GRAND PRIX El Ataque Grand Prix se consideraba en una época una apertura de cafetero. Pero nada menos que una autoridad en la Sici- De esta forma, pueden responder a 5 �b5 con 5 ... a6! y a 5 .tc4! con 5 d5! . Pero la mayor fuerza del Grand Prix reside en su capacidad de transposición. Las blancas pueden pasar a una Siciliana Abierta, con 5 d4 cxd4 6 t2Jxd4. El resulta do es una versión perfectamente buena de la Variante Taimanov. Pero hay abundante teoría que las negras deben conocer, y si su conductor no es un practicante habitual de la Taimanov, habrá sido empujado a salir de su repertorio. Este tipo de desplazamiento sucede porque las negras deben realizar compro misos de piezas y peones. Eso aporta a las blancas la información que necesitan para decidir si transponer a otra línea de la Siciliana. Las blancas podrían jugar 5 g3 , creando una Siciliana Cerrada, en la que •.. 56 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ las negras han renunciado a las jugadas re comendadas ... tll f6 y ... e5 . ¿Qué puede decirse de otro orden más flexible -y muy corriente- como 1 e4 c5 2 tll c3 tll c6 3 f4 d6 4 tll f3 e6? En tal caso, a 5 �b5 existen las buenas réplicas 5 ... tll ge7 y 5 ... a6! . Pero las blancas pueden jugar 5 g3! Las blancas obtienen así una buena Camaleón. Por ejemplo: 5 ... tll ge7 6 �g2, y si 6 ... g6, entonces 7 d4! expone de nue vo el agujero d6. Es mejor 4 a6. Pero entonces, 5 d4 cxd4 6 tll xd4 tll f6 llevaría el j uego a una extraña Najdorf. Es decir, 1 e4 c5 2 tll f3 d6 3 d4 cxd4 4 tll xd4 tll f6 5 tll c3 a6 y 6 f4 tll c 6? ! . Por ejemplo: 7 �e3 �d7 8 'it'f3 g6 9 tll d 5! l:. c8 10 tll xf6+ exf6 11 c3 es exce lente para las blancas (Fogarasi-Ftacnik, Austria 2006). Lo más probable es que la mejor respuesta para las negras, después de 1 e4 c5 2 tll c3 tll c6 3 f4 d6 4 tll f3 , no sea ni 4 ... e6 ni 4 ... a6, sino 4 ... g6, que debe rían contentarse con 5 �b5 .td7, una po sición conocida del Grand Prix. Pero también están obligadas a conocer mucha teoría del Dragón, a causa de 5 d4! ?. El Grand Prix es un arma especialmen te buena contra los jugadores Najdorf, Scheveningen y Dragón, porque respon· derán a 1 e4 c5 2 tll c3 con 2 d6, con la es peranza de transponer (3 tll f3 tll f6 4 d4), o bien de castigar el orden de las blancas (3 tll f3 d5 ! ) . Pero hay un problema con 2 ... d6. Algunas de las mejores versiones (para las blancas) del Grand Prix son las que se derivan de . . . d6. Por ejemplo : 3 f4 tll c6 4 tll f3 g6 5 �b5! es una clavada que impi de ... tll d4, una fuerte idea cuando el peón d se encuentra en d7. La solución de Gari Kasparov fue 1 e4 c5 2 tll c3 d6 3 f4 g6 4 tll f3 i.g7. ..• .•. Esto es muy superior a 4 ... tll c6 5 .tb5 .tg7? ! 6 i.xc6+! , que es favorable a las blancas. Las negras pueden responder ahora a 5 �b5+ con 5 ... �d7 ! . También invitan a entrar en una Dragón, 5 d4 cxd4, y pueden responder a 5 i. c4 con 5 . . . tll c6 6 0-0 e6, hostigan do a continuación al alfil, con . . . tll ge7/ . . . d5 . El timador puede tratar de explotar el orden de Kasparov con la paradójica 5 Ab5+ ii.d7 6 �c4!?. La idea es que el al fil negro interfiere con la posible ruptura ... d5. Sólo hay algunos ejemplos hasta aho ra (6 ... tll c6 7 0-0 e6 8 d3 tll ge7 9 'it'el a6 10 f5 ! ? gxf5 11 'it'h4 b5 12 �b3 'it'b6, R. DEFENSA SICI LIANA Pérez-Movsziszian, Balaguer 2006). Pero puede que sea una sutileza a tener en cuenta. En caso de 3 g6, las negras tienen otro rompedero de cabeza. Las blancas pueden responder 4 d4 cxd4 5 'it'xd4. Esto les permite un prometedor sacrificio de peón, tras S ... li:Jf6 6 eS li:Jc6 7 .tbS (7 ... dxeS 8 'it'xd8+ @ xd8 9 fxeS ! lll xeS 10 i.f4 li:Jed7 11 0-0-0). ..• VARIANTE ALAPIN A Simon Alapin se le debe la idea 2 c3, a pesar de que el jugador alemán H. W. Po pert ya la había planteado, así como la as tuta 2 li:Jf3/3 c3, más de cincuenta años antes que Alapin. La ventaja del segundo orden de juga das es que las blancas quieren ver cuál es la segunda jugada negra, antes de definir se por c2-c3. Esto es significativo, porque después de 2 li:Jf3 li:Jc6 3 c3!?, las negras han perdido algunas de sus mejores opcio nes 2 c3. No pueden jugar, por ejemplo, la mejor versión de ... b6/ ... .tb7, que se produce en la línea 2 c3 li:Jf6 3 eS lll dS 4 d4 cxd4 S cxd4 e6 6 li:Jf3 b6, porque el caballo dama 57 interfiere (3 li:J f6 4 e5 lll d5 5 d4 cxd4 6 cxd4 h6 7 .tc4!). También 3 ... d5 4 exd5 'it'xd5 conduce .•• a una posición 2 c3 dS en la que el caballo dama negro se desarrolla temprano. Las blancas amenazan pronto con avanzar sus peones centrales. Por ejemplo: 5 d4 �g4 6 .te2 e6?! 7 h3 i.h5 8 c4 'it'd6 9 g4 i.g6 10 d5!, con ventaja. En la práctica, la forma diferida de la Variante Alapin no aparece con frecuen cia tras 2 li:Jf3 d6, debido a 3 c3 li:Jf6! (4 d4? lll xe4) . Se produce más a menudo después de 2 li:J f3 a6, cuando las blancas tratan de demostrar que . . . a6 es irrele vante. También es un buen arma contra 2 ... e6, pero existe la contrasutileza, 3 c3 li:Je7 ! ? y ... dS. Esta idea, favorita de Evge ni Vasiukov, evita las líneas ... dS/exdS, en las que las negras deben retomar de dama o peón e, es deir, 1 e4 cS 2 c3 dS 3 exdS, o bien 2 ... e6 3 d4 dS 4 exdS. La diferencia es 2 li:Jf3 e6 3 c3 li:J e7!? 4 d4 cxd4 5 cxd4 d5. Ahora 6 exd5 permite 6 li:Jx d5! . Lo que ha sucedido es que las negras han en trado en una posición de la Defensa Semi Tarrasch a la que normahnente se llega ••• 58 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ por un orden como 1 lDf3 l2Jf6 2 c4 e6 3 d4 c5 4 e3 cxd4 5 exd4 d5 6 cxd5 ? ! lb xd5. Lo mejor para las blancas es 6 e5, aun que después de 6 lDbc6 y 7 ... l2Jf5, las negras tienen una versión muy respetable de la Francesa del Avance. Pero, aunque respetable, tal vez no sea el tipo de medio juego que le gustaría defender a un sici liano. Por esto es por lo que se juega 1 e4 c5 2 l2Jf3 e6 3 c3 d5 4 e5, pues aunque 4 exd5 es objetivamente mejor, las blancas esperan que un jugador de la Siciliana no se encuentre cómodo en la Francesa. Y también es la razón por la que las negras evitan a menudo la objetivamente mejor 4 . . . lb c6 5 d4 y prefieren un gambito, con 4 ... d4! ? 5 cxd4 cxd4 6 �b5+ lb c6 7 �xc6+ bxc6 8 'iWa4, o bien 6 ... �d7 7 lD x d4 ! ? . ••. LÍNEAS PRINCIPALES DE LA ALAPIN Después de 2 c3 tt:lf6, el juego normalmen te sigue con 3 e5 tt:ld5 4 d4. Pero Sveshni kov, la mayor autoridad en la variante, prefiere 4 l2Jf3, y responde a 4 .. tt:lc6 con 5 .t c4, y tras 5 . . . e6 6 0-0 d6 7 d4 cxd4 8 cxd4, se llega a una posición típica de la Variante Alapin. El motivo por el que Sveshnikov prefiere ese orden es que evi ta algunas molestas líneas, como 4 d4 cxd4 5 cxd4 d6 6 tt:lf3 tt:lc6 7 �c4 dxe5 y 7 ... tt:lb6 8 �b3 d5. Otro mérito de 4 tt:lf3 es que concede a las negras la posibilidad de j ugar 4 ... e6 5 �c4 b6. Piensan que pueden transponer a la línea 4 d4 cxd4 5 cxd4 e6 6 tt:lf3, que goza de una buena reputación. (Ver diagrama 96.) Pero las blancas pueden salir al paso con 6 �xd5! exd5 7 d3, con una ligera ven- taja. La ruta más precisa a esta línea del fianchetto es 4 tt:lf3 b6 ! 5 �c4 �b7. El inconveniente de 4 l2Jf3 tt:lc6 5 �c4 es la idea de Gedeon B arcza, 5 ... tt:l b6! 6 �b3 c4, aunque n o e s necesariamente mala para las blancas. Sólo es confusa, so bre todo después de las continuaciones de moda 7 �c2 'iWc7 8 'iWe2 g5!?. La línea principal de 2 ... d5 es 3 exd5 'iWxd5 4 d4. Las negras deberían evitar 4 ... cxd4, porque entrarían en uno de esos me dios juegos con peón d aislado que sabe mos son inferiores, en el Gambito de Dama Aceptado y la Defensa Semi-Ta rrasch. Por ejemplo: 4 ... cxd4 5 cxd4 tt:lc6 6 tt:lf3 e6 7 tt:lc3 'iWd8 8 �c4 transpone a una posición de 1 d4 con un tiempo extra para las blancas. Es mejor 4 ... tt:lf6 5 tt:lf3. Suelen jugar se tanto 5 ... e6 como 5 ... �g4. La otra al ternativa es 5 ... tt:lc6!?. (Ver diagrama 97.) Esto impide populares esquemas de ata que con �d3, porque si 6 �d3, seguiría 6 ... Ag4! (7 .te3 cxd4 8 cxd4 .txf3 9 gxf3 e6). Otra ventaja de 5 ... lb c6 es que 6 .te2 (que prepara c2-c4) puede responderse con 6 ... cxd4! 7 cxd4 e6, con una aproxi mada igualdad. Las blancas no pueden to- DEFENSA SICI LIANA mar en d4 de caballo, porque g2 está col gando. Por el contrario, 6 . . . e6 7 0-0 cxd4 8 lZ:i xd4 ! lZ:i xd4 9 cxd4, seguido de lZ:i c3 ó �f3, es favorable a las blancas. VARIANTES ROSSOLIMO, MOSCÚ Y 'ii' xd4 59 Otra virtud es que 4 d4 cxd4 5 'ii'x d4 �d7 6 �xc6 �xc6 es una línea principal que también puede producirse después de 2 ... d6 3 d4 cxd4 4 'ii' x d4, y ahora 4 ... lZ:ic6 5 .tb5 �d7 6 .txc6 �xc6. Si las negras in vierten su tiempo de estudio sobre esta posición, pueden estar preparadas para to das las principales variantes de �b5( +) y 'ii' x d4. Observe que en la posición 6 �xc6 �xc6, la única apuesta de las blancas por la ventaja o incluso por la iniciativa se su pone que es 7 lZ:ic3 lZ:if6 8 �g5 ! y 0-0-0. Sin embargo, 7 ... h6! ? deja a las blan cas sin plan. Un ejemplo de la práctica, Ló pez-Dobrov, Neiva 2005: 8 �e3 e5 ! 9 'ii' d3 lbf6 10 0-0-0 �e7 11 h3? 'ii'd7 12 @bl b5 13 lZ:i d2? 'ii' b7 14 f4 0-0 1 5 fxe5 dxe5 1 6 lLlf3? b4 17 lLle2 �b5, y las blancas se rindieron. En consecuencia, las blancas se antici pan a 7 lLlc3 h6 con la inmediata 7 �gS!. Las dos variantes en que las blancas sitúan su alfil en b5 en la tercera jugada están, na turalmente, relacionadas. Si las negras son lo bastante versátiles como para jugar sici lianas abiertas, tanto con 1 e4 c5 2 lZ:it3 d6, como con 2 ... lbc6, pueden reducir su in versión en estudio, mediante 2 d6 3 �bS+ lZ:ic6!, y 2 lZ:ic6 3 �bS d6!, transponiendo. ••• ••• Esto casi siempre transpone (7 ... lLl f6 8 lLlc3) y, hasta ahora, nadie ha detectado un inconveniente en 7 .tgS!. El modo más fácil de responder a 1 e4 c5 2 lLlt3 d6 3 d4 cxd4 4 'iVxd4, con la perspectiva c2-c4, es, sencillamente, evitarlo mediante 3 lLlf6! (4 lLlc3 cxd4!). •.• 60 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ Grandes maestros de primera fila, co mo Vishy Anand, han tratado de buscar ventaj a para las blancas en la línea 4 dxcS, pero no lo han conseguido, tras 4 ... ll:i xe4 negras no han invertido un tiempo en ... a6,. pero la experiencia indica que las blancas quedan bien tras 7 c4 g6 8 b3. 5 cxd6 ll:ic6! 6 lLibd2 ll:i xd6. Hay una forma más directa, poco cono cida, de que las blancas traten de crear una Formación Maróczy, a saber, 1 e4 cS 2 ll:if3 d6 3 d4 cxd4 4 lll xd4 ll:if6 5 �d3!?. Por ejemplo: 8 .. �g7 9 �b2 0-0 10 0-0 f!ic7 11 ll:ic3 (Fogarasi-Starostits, Scanno 2005). Hasta el momento, no ha aparecido un buen antídoto contra 5 �d3 ! ? . . Objetivamente, esto no es peligroso, pero subj etivamente puede crear un se rio trastorno a las negras, porque la ra zón por la que juegan 4 . . . ll:i f6 es forzar 5 ll:i c3 para evitar c2-c4. Hoy sabemos que las estructuras de peones resultantes de 5 �d3 e6 6 c4, o de 5 . . . g6 6 c4, no son necesariamente malas para las negras. Pero pueden resultar muy difíciles de ju gar, si no se está familiarizado con ellas, aunque el j ugador de la Dragón moder na, la Scheveningen o la Najdorf suele estarlo. Las negras tienen dos respuestas obli gadas. Una es 5 ... e5, y después de 6 lLif3 y 7 c4, las blancas alcanzan una buena ver sión de la Variante Kalashnikov. Quizá sea mejor 5 ... ll:ic6, y después de 6 lLi xc6 bxc6, 7 ... g6. A diferencia de 6 �d3 en la Najdorf (que consideraremos más adelante) , las VARIANTE MODERNA DEL DRAG Ó N El Dragón moderno nació como una con trasutileza. Cuando el Dragón comenzó a anotarse victorias en el siglo XIX, normal mente se planteaba en este orden: 1 e4 c5 2 ll:if3 lLic6 3 d4 cxd4 4 ll:i x d4 ll:if6 5 lLic3 d6 6 �e2 g6. Pero las blancas encontraron una efectiva jugada disuasoria, 6 Ag5, pues si 6 ... g6? ! , 7 �xf6 ! . Kurt Richter, que contribuyó a lanzar 6 Ag5, popularizó también el orden refi nado 1 e4 es 2 ll:if3 d6 3 d4 cxd4 4 ll:i xd4 ll:if6 5 lLic3 g6! , y ahora es demasiado tar de para 6 �g5 Ag7. El precio que las negras pagan es comprometerse a un Dragón, antes de Ae2, lo que permite a las blancas disponer de opciones más agresivas, como el Ataque Yugoslavo, � e3/f3/f!id2/0-0-0, y algunas j ugadas DEFENSA SICI LIANA tranquilas, como el sistema de fianchetto, 6 g3. Incluso este último contiene esco llos, tras 6 g3 iJ.. g7 7 .t g2. 61 en la ruta. Un camino es 7 ... 0-0 8 �d2 tlic6, y otro 7 ... tlic6 8 �d2 0-0. La mayo ría de los jugadores no aprecian la diferen cia. Sin embargo, existe, porque 7 tli c6 8 �d2 permite a las negras utilizar 8 iJ.. d7!? como jugada de espera. ..• ••. La natural 7 tlic6 permite plantear la trampa 8 tlixc6! bxc6 9 e5, en la que han caído muchos maestros. Las negras debe rían jugar bien 6 ... tlic6 (7 il.g2 tli xd4 ! ) , antes d e ... §lg7, o bien diferir ... tlic6 e n favor de 6 ... iJ.. g7 7 .tg2 0-0. Es importante conocer esta trampa, porque también puede surgir con otros órdenes de j ugadas, como 1 e4 c5 2 tlif3 tli c6 3 d4 cxd4 4 tli x d4 tli f6 5 tli c3 d6 6 g3 g6, y ahora 7 ilg2 ilg7 8 tlixc6! trans pone a lo que las blancas querían, y 7 . . . tli xd4! 8 �xd4 ilg7 e s l o que las negras quieren. En elAtaque Yugoslavo hay una juga da que sirve "para hacer pensar", 6 f3. Efim Geller, en la edición de 1975 de la ECO indicaba que "6 f3 ? ! " se castigaba con 6 ... �b6 7 ile3 �xb2. Pero esto per mite 8 tli db5 ! , con amenazas de encerrar la dama con 9 n bl, una jugada lo bastan te fuerte como para conceder un "? ! " a 6 . �b6. Más corriente es 6 ile3, que plantea una pequeña trampa (6 . . . tli g4?? 7 iJ.. b 5+ ), y que conduce a otra bifurcación ... .. En tal caso, a 9 ilc4 pueden transponer, con 9 0-0, a las líneas principales. Esto es útil en tiempos corno el actual, en el que las negras obtienen mejores resultados contra el Ataque Yugoslavo (9 iJ.. c4) que contra otras líneas. Gracias a este orden, pueden momentáneamente mantener a su rey en el centro, después de 9 0-0-0 n c8. Ahora, 10 g4 tlie5 1 1 h4 h5 ! 12 g5 tlih7 ha ce que el enroque sea más seguro para las negras, una vez que las columnas g y h es tán cerradas. Otra situación se produce cuando las blancas juegan ilc4 pero difieren �d2, co mo en el orden 7 tlic6 8 il c4 a fin de acelerar el ataque h2-h4-h5. Este orden trata de inducir a las ne gras a jugar 8 . . �b6, que parece bueno, en vista de 9 ilb3? tli xe4, o bien 9 ... tli g4. Sin embargo, 9 tli f5 ! �xb2 10 tli xg7+ es un sacrificio tan prometedor, que los maestros renunciaron a 8 . . �b6 ya en la década de los sesenta. La mejor ••• ••• , . . 62 SECR ETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJEDREZ política para las negras, después de 8 .tc4, es 8 0-0!, que normalmente trans pone a una línea principal, tras 9 �d2. Si, en su lugar, las blancas juegan 9 kb3, en tonces las negras pueden poner en mar cha más rápidamente su ataque en el flanco de dama, 9 k d7 10 h4 lll xd4 .•. •.. 11 .,txd4 bS 12 hS aS. Esto transpone a la línea de captura del peón, 11 ... tll xd5 12 t2ixd5 cxd5 13 �xd5. Pero no hay razón alguna para permitir una opción extra a las negras, la idea de Vassili Panov, 11 �as 12 dxc6 .te6!. Una partida soviética de 1954 siguió así: 13 a3 l Hd8 1 4 'iWe2 l:. xdl+ 15 �xdl l:t d8 16 'ife2 lll d5 17 tLixdS 'ifxd5 18 c7? kxb2+! 19 c;t> xb2 �a2+, y ganan. Si las negras no juegan 9 ... d5, tienen dos órdenes naturales para alcanzar esa formación. U no de ellos es 9 ttJ xd4 10 .t xd4 �e6 11 c;t>bl! 'ifc7 (no 1 1 ... 'ifa5 12 lll dS ! �xd2 13 lll xe7+ ). La experiencia dice que las blancas están mejor, pero no lo bastante para disuadir a las negras de jugar la variante. El otro orden es 9 ke6, seguido de 10 ... t2i xd4. Las negras puede estar reti centes a adoptarlo, porque ... (Ver diagrama 106.) •.• Por ejemplo: 13 hxg6 hxg6 14 lll dS tll xdS lS k x dS l:t c8 16 'i/V d2 � x c2! 17 �xc2 kxd4 18 0-0-0 il.g7 19 c;t>bl �b6 20 g4 e6, como en la partida Pérez Cande lario-Guseinov, Kusadasi 2006. DRAG ÓN CON 9 0-0-0 En la formación del Ataque Yugoslavo (1 e4 cS 2 lll f3 d6 3 d4 cxd4 4 lll xd4 lll f6 S lll c3 g6 6 ke3 kg7 7 f3 lll c6 8 'it'd2 0-0), las blancas tienen tres alternativas princi pales. Una de ellas, 9 0-0-0, concede poco lugar para las sutilezas, tras la apremiante 9 ..• dS. En tal caso, ha sido muy analizada la lí nea 10 exd5 ltJxdS 1 1 tLi xc6 bxc6 12 kd4, que sigue siendo controvertida, y 12 t2ixd5 cxd5 13 �xd5 es arriesgado. Las blancas deberían evitar la alternativa 10 lll xc6 bxc6 11 exdS. •.• ••• ... en lugar de 10 c;t>bl t2i xd4 1 1 kxd4 �c7, transponiendo, las blancas pueden inten tar 10 tLi xe6 fxe6 11 g3!, y 12 kh3, atacan do e6. Pero 9 ... ke6 tiene un aspecto positi vo, pues de este modo las negras prescin den de 9 ... lll xd4 10 �xd4 ke6 1 1 lll d5 ! ?, que a muchos draconianos no les gusta DEFENSA SICI LIANA afrontar. De modo que de ellos dependerá cuál de estas líneas prefieren evitar, si 1 1 lt:Jd5 ! ? , o l a derivada de 9 . . . .te6 1 0 ltJ xe6. Cualquiera que sea la ruta hacia la for mación estándar, las blancas normalmente continúan con 12 g4 ó 12 h4. Un jugador diestro en el orden de jugadas preferiría 12 �b5!?. El alfil se dirige a b3, su mejor ca silla en el tablero. ¿Pero no es eso una pérdida de tiempo? por cierto, que ha llegado a analizarse has ta ¡ los finales de peones ! , con la conclusión de que las blancas están mucho mejor, si es que su ventaja no es decisiva. Esto subraya un peligro para ambos ju gadores en la Dragón moderna, a saber, la posibilidad de que la línea 9 0-0-0 se con vierta en una arriesgada línea 9 g4, y vice versa. O bien que una línea con 9 0-0-0 se transforme en una posición de 9 �c4. Tal es el caso con 9 0-0-0 lt:J xd4 10 .txd4 'i!Va5, y 1 1 ... .te6. Se diría que es otra Dragón rutinaria. Pero el orden de las negras es deficiente, porque 11 .tc4! trans pondrá, después de 11 .te6 12 .tb3 , a la mala línea de los años cincuenta. ... DRAG Ó N, 9 g4 El avance 9 g4 hace mucho que se conside raba una alternativa fiable a 9 0-0-0. En al gunos aspectos es superior, porque impide 9 . . . d5 con 10 g5 ! . Disuade 9 . . ltJ x d4 10 .txd4 .te6, debido a ll lt:Jd5 ! , que es una mejor versión de 9 0-0-0 lt:Jxd4 10 .txd4 �e6 1 1 lt:Jd5. Pero 9 g4 sufrió un duro golpe en el Campeonato Mundial de 1995, cuando el equipo de Kasparov descubrió 9 .te6! 10 0-0-0 lt:J xd4 ll .txd4 'i!Va5 ! . . ••• En absoluto. Una continuación natural es 12 'i!Va5 13 .ta4 l:t fc8 14 .t b3 , en cu yo caso habremos llegado a una posición que, en los años cincuenta, se alcanzaba por el orden 9 .tc4 lt:J xd4 10 .txd4 .te6 11 .tb3 'i!Va5 12 ..ti>bl l:. fc8. Una posición, ... 63 64 SECR ETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ Nos dirigimos a una posición estándar, en la línea 9 0-0-0 lt:i xd4, pero con un tiem po extra para las negras, que ahorraron lle vando directamente la dama a a5 en una jugada, en comparación con 9 0-0-0 ltJ xd4 10 .1xd4 �e6 11 @bl ! , cuando se suele jugar 11 ... �c7, porque 11 ... �a5? falla, por 12 lt:id5 ! . Un tiempo extra vale oro en la Dragón, y esto resultó evidente en la primera parti da Anand-Kasprov. Después de 12 @ bl ll fc8, las negras amenazaban ya ... ll xc3/ ... �xa2+. Su ataque sería más rápido en caso de 13 a3 l:i[ ab8 14 h4 bS 15 h5?! b4!. No parece tener un inconveniente 9 g4 Ae6 ! , como existe en la posición compara ble 9 0-0-0 �e6, debido a que 10 lt:i xe6 fxe6 11 g3 es, por supuesto, ilegal. ... .ie6!? peón no ha resultado significativa en p�r tidas que siguieron con 10 0-0-0 ll c8 1 1 i.c4 �d7 ó 10 .ic4 @f7 1 1 a 3 (de otro modo, ... lt:ia5) 11 ... ll c8 12 .ta2 lt:ie5 y ... lt:ic4. Las negras pueden tratar de mejorar esta idea, con 8 ttJ xd4 9 �xd4 i.e6, pues las blancas se ven privadas tanto de lt:i xe6 como de Ac4. Pero falla, por 10 .tbS+! . Ahora, 10 ... i.d7? 1 1 �c4, y las negras se encuentran en la posición que trataban de evitar, con una j ugada menos. No hay, virtualmente, experiencia con 10 ... @f8 (11 0-0-0 �a5), de modo que tendremos que dejar que los tahúres la prueben por nosotros. En la línea principal ii.c4, 7 lt:i c6 8 �d2 0-0 9 -tc4, las negras normalmente juegan ... Ad7 y sitúan una torre en c8, mientras que las blancas juegan 0-0-0, .ib3 y h2-h4. Si las negras quieren jugar, en cambio, un sistema . . . 'iV a5/ . . . ll fc8 , la forma más precisa de hacerlo es con 9 � as y 10 . . . �d7, antes que a la in versa. Las negras quieren transponer a líneas sin .tc4, después de 9 0-0-0 0-0, o bien 9 g4 0-0. El inconveniente obvio es 9 lt:ixe6 fxe6. Pero hasta ahora, esta debilidad de La razón es que este orden frena un rá pido ataque, a base de 10 h4?, que falla, por 10 �b4! 11 �b3 lt:i xd4 12 Axd4? lt:i xe4. Las blancas deben jugar el final 12 DRAG Ó N, 9 .ic4 Algunos expertos en el Dragón, como Ser gei Tiviakov, han rodeado esta línea hiper teórica, 6 �e3 ii.g7 7 f3 lt:ic6 8 �d2, con 8 ... .•• •.. ..• DEFENSA SICI LIANA 'i!Vxd4 y, aunque no es penoso, no es, desde luego, lo que tenían in mente. DRAGÓ N CLÁ SICO Cuando las blancas juegan �e2, normal mente prosiguen con f2-f4 y 11.. e3. Una pri mera formación es 1 e4 c5 2 ll:if3 d6 3 d4 cxd4 4 ll:i xd4 ll:if6 5 ll:ic3 g6 6 �e2 � g7. Hay pocas lúieas con il.e2 en las que las blancas enroquen largo, de modo que 7 0-0 parece su mejor opción. Sin embargo, la diagonal gl-b6 constituye un problema, después de 7 0-0 8 i.. e3 ll:i c6. 65 La forma de evitar este tipo de sorpre sa, así como otras ideas liberadoras como ... d5, ... ll:ixd4 y ... ll:ig4, es retirar el caballo de d4 a b3. Siegbert Tarrasch calificaba ru tinariamente a ll:ib3 con un signo de inte rrogación en la Siciliana. Pero en el Dragón moderno, un caso a considerar es 6 Ae2 i.. g7 7 ll:ib3, en lugar de 7 0-0. La razón es que la natural 7 0-0 permi te a las blancas una aguda opción extra, 8 g4!?. •.. La posición del rey negro hace que 8 ll:ic6 9 g5 ll:id7 10 h4 o 10 i.. e3 sea más pe ligroso que si hubiesen jugado 7 ... ll:ic6. A algunos jugadores no les gusta ll:i b3, porque permite a las negras j ugar . . . � e6 sin temor a ll:i xe6. Pero el alfil se enfrenta a mayores peligros por parte de los peones: 7 0-0 ll:i c6 8 ll:i b3 �e6? es fa vorable a las blancas, después de 9 f4 ! y 10 f5 ! . Por ej emplo: 9 . . . l:t c8 1 0 f5 �d7 1 1 g4. Lo cierto es que ll:i b3 sirve a mu chos buenos propósitos, y la cuestión principal es cuándo j ugarlo. Es esencial para la línea clásica más de doble filo, el ataque de Jan Foltys. Quizá el orden más preciso para las blancas sea 6 �e2 ..tg7 7 Ae3 ll:i c6, y ahora 8 f4 0-0 9 ll:ib3 11.. e 6 ••. Ahora, 9 f4 permite 9 'i!Vb6!, que amenaza 10 ... ll:i xe4, o bien 10 ... ll:i g4/ll ... il.xd4. No es mejor 8 f4, por la misma respuesta, 8 ... 'i!Vb6 ! . Esto subraya la difi cultad de las blancas en alcanzar posicio nes clásicas, a través de la Variante Loevenfish (6 f4). Esta variante plantea una trampa, 6 ... il.g7 7 e5 ! ? , que como me jor se evita es con 6 ... ll:i c6. Un jugador tai mado, con blancas, podría intentar esta idea, 6 f4, para ver si las negras caen en la celada, y luego pasar a la lúiea clásica, des pués de 6 ll:ic6 7 �e2 11.. g7 8 il.e3 0-0. Pero no debe pasarse de listo, con 9 0-0?! , porque eso permitiría otra vez 9 'it'b6!. ••. •.• ••. 10 g4! ?. 66 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJEDREZ Este orden evita 8 lt:lb3 .te6 9 f4 �c8!, que impide g2-g4. Entonces, las blancas no tienen nada mejor que transponer a las lí neas antiguas, con 10 0-0 0-0, que dan buen resultado a las negras. Las blancas pueden temer el avance 8 f4 a causa de 8 �6. Pe ro en este caso, el primer jugador dispone de 9 e5!, que Sammy Reshevsky permitió en una ocasión (9 ... dxe5?? 10 lt:lxc6, ganando). Después de 8 0-0, las blancas entran en el Ataque Foltys con 9 lt:lb3, y ahora 9 ... .te6 10 g4. En cuanto a las negras, su forma de desviarse es 9 lt:la5. Entonces, 10 0-0 .te6 ! transpone a una posición a la que normalmente se llega por 9 . . . �e6 10 0-0 lt:la5, que se considera lo bastante se gura. Este orden permite a las negras res ponder a 10 g4 con 10 b6!?. No hay alfil al que hostigar con f4-f5, y después de 11 g5 li:ld7 y ... e5, tienen contrajuego. Por ejemplo: 12 �d2 �b7 13 .td4 e5 14 fxe5 lt:l xe5 15 lt:l xa5 bxa5 16 0-0-0 'W/c7, como en la partida OH-Van der Wiel, Campeo nato de Holanda por equipos 1996. También las blancas disponen de una opción adicional en este orden, 10 e5. (Ver diagrama 1 14.) Las negras pueden transponer a una Dragón moderna, con 6 ... g6, y si 7 jt,e3 ó 7 lt:lb3, el juego es normal. Pero también es posible 6 lt:l xd4!? 7 'W/xd4 g6. (Ver diagrama 115.) Ahora, 10 ... dxe5?? pierde pieza (por 11 'W/xd8 y lt:l xa5). Pero 10 lt:le8 necesi- Entonces, después de 8 �e3 �b7, las blancas no tienen ventaja, porque su dama ••• ••• ••• ••• ••• ta más pruebas prácticas, para ver si las blancas se han hiperexpansionado. La alternativa más popular a 9 ... lt:la5 es 9 a5. En tal caso, a la semiautomática 10 a4, las negras pueden responder con se guridad 10 .te6, ya que 11 g4 d5 ! es mu cho más fuerte cuando el caballo dama negro no puede ser expulsado de b4 (12 f5 .tc8! 13 exd5 lt:lb4 14 .tf3 gxf5). Normal mente, las blancas juegan 11 0-0 y transpo nen a una posición a la que suele llegarse por 9 ... .te6 10 0-0, pero con la adición de las jugadas de peón a. Esto tiene sus más y sus menos, pero suele ayudar a las blan cas en líneas como 11 ... 'W/ c8 12 h3 lt:l b4 ••• ••• 13 lt:ld4 �c4 14 lt:ldb5. Por último, hay un orden de jugadas que no encaja en ninguna categoría tradi cional del Dragón. Se produce tras 1 e4 c5 2 lt:lt'3 d6 3 d4 cxd4 4 lt:l xd4 lt:lf6 5 lt:lc3 lt:lc6, y las blancas responden con la juga da 6 �e2. ••• DEFENSA SICILIANA 67 rey por fianchetto, deberán intentar algo como 6 ll:ide2 ll:if6 7 g3. es vulnerable (9 �d2 0-0 10 0-0-0 iie6). Esta posición podría producirse también en el Dragón moderno, 5 ... g6 6 .te2 ll:ic6 7 .te3 ll:i xd4 8 �xd4?. Si las blancas quieren castigar este orden, la mej or apuesta es 8 � gS Ji g7 9 lLl dS. La posición crítica seguramente es 9 . 0-0 10 ii.xf6 gxf6. Pero los alfiles negros parecen compensar los malos peones. Por ejemplo: 1 1 0-0-0 f5 12 �d3 fxe4 13 �xe4 li! e8 14 �f3 l:t eS 15 ..tc4 .te6, como en la partida Michiels-Van der Weide, Amster dam 2000. Si eso es cierto, 6 ... ll:i xd4 ! ? es una con siderable sutileza, y una recompensa de los dioses de la teoría a las negras por haber revivido el viejo orden de jugadas del Dra gón, después de tantos años. .. DRAG Ó N ACELERADO El Dragón Acelerado, 1 e4 cS 2 ll:i f3 ll:i c6 3 d4 cxd4 4 ll:ixd4 g6, se convierte en mo derno, después de ... d6. Las ventaj as en el orden del Acelerado radican en que limi tan las opciones blancas y pernúten a las negras preparar el avance ... d5 ! . El caballo de las blancas queda inme diatamente atacado, después de 5 ll:i c3 il.g7, y s i éstas quieren desarrollar s u alfil Ahora, 7 ... 0-0 8 il.g2 d6 9 0-0 lleva el juego a un respetable Dragón moderno (1 e4 c5 2 lZ:i f3 d6 3 d4 cxd4 4 lZ:i xd4 lZ:i f6 5 lZ:i c3 g6 6 g3 Ji g7 7 .t g2 0-0 8 0-0 lZ:i c6 9 ll:ide2). Pero las negras mejoran con 7 bS! (8 ll:i xb5 ll:i xe4), a diferencia de las lí neas normales, en las que deben gastar un tiempo ( ... n b8, ... a6) para preparar el avance ... b5, en el Dragón moderno. Más a menudo vemos 6 ll:ib3. Las blan cas buscan un Dragón clásico (6 ... ll:if6 7 .te2 0-0), en el que conservan la opción .tgS, así como las líneas con@hl/f2-f4, en las que se difiere Jie3. Algunos libros afir man que 6 ll:ib3 se refuta con 6 ... .txc3 + ! ? ( 7 bxc3 ll:if6 8 ii.d3 d5). Pero muchos grandes maestros no lo creen. Anatoli Karpov, por ejemplo, ha jugado 6 ll:ib3 y tanto Bent Larsen como Gata Kamsky prescindieron de 6 ... �xc3+ cuando juga ron esta posición con negras. No obstante, si las blancas quieren ju gar ii.e2 pero no Jie3, una ruta más preci sa es 5 �e2 ó 5 ll:i b3 (después de 1 e4 c5 2 ll:if3 ll:ic6 3 d4 cxd4 4 ll:ixd4 g6). Por ejem plo: 5 .te2 �g7 6 ll:ib3 y 6 ... d6 7 0-0 ll:if6 8 ll:ic3. Si busca usted en los libros 5 ll:ic3 ... 68 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J U GADAS EN AJ EDREZ i.g7 6 Ae3, sólo encontrará 6 ttJ f6 . La razón es que así es cómo las negras eluden algunas líneas del Ataque Yugoslavo. Por ejemplo: 7 f3? ! 0-0 8 'ii'd2, y ahora no 8 ... d6, sino 8 ... d5 ! , con excelentes posibilida des. Lo mismo puede decirse de 8 g4 'ii'b6! . ••• 1 e4 c5 2 ttJf3 g6. Entonces, si las blanca.s tratan de transponer a la Maróczy, con 3 c4 ii.. g7 4 d4, ó 3 d4 i.g7 4 c4 (y ahora 4 ... cxd4 5 tlJ xd4 ttJc6), las negras disponen de diversas opciones independientes, como 4 ... 'ii' a5+ y 4 ... d6. Estas opciones adicionales deben ser sopesadas, considerando sus inconvenein tes. Para jugar 1 e4 c5 2 ttJf3 g6 3 d4 Ag7, las negras deben sentirse cómodas en otras aperturas, como la Benoni Schrnid (4 d5) y la Caro-Kann Panov (después de 4 c3 cxd4 5 cxd4 d5 ! 6 exd5 ! ) , así como con 4 dxc5 ! ?. VARIANTE SCHEVENINGEN Pero aquí rara vez s e menciona un in conveniente de 6 ... ttJf6, a saber, que ase gura a las blancas una opción adicional: 7 tDxc6!? bxc6 8 e5, que reporta ventaja de espacio tras 8 ... ttJg8, o permite un inten so juego táctico en caso de 8 ... ttJ d5, anali zado hasta más allá de la jugada 20. ¿Realmente quiere usted memorizar lí neas como 8 ... tlJd5 9 tlJ xd5 cxd5 10 'ii' x d5 n b8 1 1 � x a7 :! xb2 12 A d4 l:t x c2 1 3 Ad3 e6! 14 'ii' a8 %:t c6 15 Ab5 l:t a6? Si la respuesta es no, es preferible la mayor higiene mental de la jugada 6 ... d6. Puede que acabe jugando el Ataque Yugoslavo, pero también le permitirá dormir por la noche. Debido a la forma en que el orden de jugadas del Dragón Acelerado degrada las opciones de las blancas, sería una defensa perfecta contra 1 e4, de no ser por la For mación Maróczy, para evitar la cual las ne gras han ensayado distintos órdenes, como Los elementos básicos de la Scheveningen son: peones negros en e6 y d6, y un caballo en f6, contra caballos blancos en c3 y d4, y un peón en e4. Este esquema puede resul tar de variados órdenes, pero muchos de ellos comprometen prematuramente las negras a jugadas como ... 'ii' c7. ¿Por qué es prematuro? Después de todo, las negras siempre juegan ... 'ii'c7 en la Siciliana, de modo que puede conside rarse una mera transposición, ¿o no? No, no cuando las blancas se desarro llan, por ejemplo, con Ag2. Una de las me jores características del moderno orden de la Scheveningen, 1 e4 c5 2 ttJf3 d6 3 d4 cxd4 4 ttJ xd4 ttJf6 5 ttJc3 e6, es que des pués de 6 g3 (Ver diagrama 118.) .. .las negras pueden prescindir de ... 'f!lc7, y obtener la igualdad con 6 ... ttJc6 7 i.g2 A d7! . Por ej emplo: 8 0-0 a6 9 a4 i. e7 10 i.e3 0-0 1 1 @hl ttJe5 12 f4 ttJc4, Malajov Vogt, Feugen 2006. No es mejor 8 tlJdb5 'ii'b8 9 i.f4 ttJ e5 y ... a6. El orden de la Scheveningen también DEFENSA SICI LIANA es efectivo contra los jugadores blancos que tratan de entrar en una Siciliana más emocionante, con 6 �c4 ó 6 �g5. En tales casos, suelen esperar 6 ... lll c6 ó 6 ... a6, lle gando así a terreno conocido. Pero las ne gras disponen de una mejor jugada, 6 ... �e7 ! , con lo que las blancas quedan atra padas en una Najdorf inferior u otra Sici liana. Por ejemplo: 6 �c4 .te7! 7 � b3 y 7 ... a6? 8 f4 es favorable a las blancas. 8 ... b5 9 e5 ! , con ventaja, o bien 8 ... 0-0 9 "it'f3. (En el orden de jugadas de la Najdorf, es to sucede con 5 ... a6 6 �c4 e6 7 �b3, cuando las negras juegan 7 ... �e7? ! , en lu gar de 7 ... b5 ! .) Las negras pueden conseguir contra juego a base de ... lll a6-c5 , mejor que ... a6. Por ejemplo: 7 0-0 8 �e3 lll a6! 9 f4 lll c5. Si las blancas están alerta, pueden intentar 7 � e3 , en lugar de 7 �b3, sin importarles entrar en una variante teórica del Ataque Sozin (7 ... lll c6). Pero es mucho mejor 7 ... •.. a6! (Ver diagrama 119.) É sta es una posición superior de la Najdorf, que puede producirse tras 5 ... a6 6 �c4 e6 7 �e3? ! . Por ejemplo: 8 'i!Ve2 b5 9 �b3 b4, o bien 9 �d3 �b7 10 a3 lll bd7 1 1 0-0 lll c5 12 f3, y las negras quedaron es- 69 pléndidamente en la partida Ulko-Ulibin, Moscú 2005. ATAQUES KERES E INGLÉS Hay dos alternativas capitales al tranquilo Sistema Scheveningen, y ambas parten del avance g2-g4. Una de ellas es el Ataque Keres, con la inmediata 6 g4, y otra el Ata que Inglés, con �e3, f2-f3 y "it'd2. Durante décadas se pensó que el Ata que Keres sólo podía plantearse en el or den tradicional. El avance g2-g4-g5 no tiene sentido, si las negras no han situado un caballo en f6, el motor temático. Como consecuencia, en un artículo de 1967 en Shajmatny Buletin se recomendaba 1 e4 c5 2 lll f3 d6 3 d4 cxd4 4 lll xd4 lll c6 5 lll c3 e6. (Ver diagrama 120.) De esta forma, con 6 .te2 lll f6, las ne gras alcanzan una Scheveningen, a la vez que evitan el Ataque Keres. Pero las blancas no necesitan atacar un caballo. En el match por el Campeonato Mundial de 1985, Kar pov mejoró con la simple y, al mismo tiem po, sorprendente 6 g4!. Después de 6 ... lll f6, 7 g5 es un excelente Ataque Keres. Es me jor evitar ... lll f6 , pero no necesariamente 70 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ iguala el juego (6 ... a6 7 �e3 l:i:Jge7 8 l:i:Jb3). La triste verdad es que no hay ninguna ruta sencilla anti-Keres que lleve a la Scheveningen. Kasparov incluso recurrió a la Najdorf (5 ... a6 6 Ae2 e6) para evitarlo, aunque eso permite a las blancas numero sas alternativas en su sexta jugada. En el orden normal del Ataque Keres, 1 e4 cS 2 l:i:J f3 d6 3 d4 cxd4 4 l:i:J xd4 l:i:Jf6 5 l:i:Jc3 e6 6 g4, se ha producido una especie de consenso, en el sentido de que 6 ... h6 es la única jugada que permite a las negras aspirar a la igualdad. Otras jugadas condu cen a versiones favorables para las blancas del Ataque Inglés, el Ataque Velimirovic o formaciones similares. Por ejemplo: 6 ... a6 7 gS l:i:Jfd7 8 .te3 bS 9 a3. Esto es un Ataque Inglés en el que las blancas han reemplazado f2-f3 por a2- a3, y ya han jugado g4-g5, lo que basta para ase gurarles ventaja. Por ejemplo: 9 . . . l1:J b6 10 .U. gl l:i:J8d7 11 f4 y 12 f5. Otro ejemplo es 6 . . . � e7 7 g5 l:i:J fd7 8 h4 l:i:Jc6 9 Ae3, en cuyo caso 10 Ac4! concede a las blancas una versión favora ble del Ataque Velimirovic. A partir del orden del Ataque Sozin (1 e4 c5 2 l:i:Jf3 ti:Jc6 3 d4 cxd4 4 l:i:Jxd4 l:i:Jf6 5 l:i:Jc3 d6 6 Ac4 e6 7 .te3), las blancas tam bién pueden conseguir algo muy similar, aunque sólo si las negras se muestran muy colaboradoras: 7 a6 8 'ii' e2 �e7 9 g4? 'V/lc7? (mejor 9 .. . l:i:J xd4 10 .txd4 e5 ! y . . . � x g4 ) 10 g5 l:i:Jd7 11 h4. Otro peligroso esquema de ataque co mienza con 1 e4 cS 2 l:i:J f3 d6 3 d4 cxd4 4 l:i:J xd4 l:i:Jf6 5 l:i:Jc3 e6 6 Ae3 o 6 f4. En ambos casos, las blancas pueden ejecutar el plan de Mijail Tal, a base de �e3, f2-f4, 'V/lf3 y 0-0-0. La jugada de peón parecía superior, porque si 6 ... Ae7, 7 .tb5+ y 8 e5 plantea problemas a las negras. La jugada de alfil, por otra parte, concede a las blancas una opción extra, después de 6 ... l:i:Jc6: transpo ner a un Sozin (7 Ac4), sin tener que afrontar la jugada de Pal Benko, 6 ... 'V/lb6, en el orden normal del Sozin. Pero hoy día se prefiere 6 Ae3 por otra razón, a saber, que es la ruta principal hacia el Ataque In glés. Después de 6 a6. (Ver diagrama 122.) ••• ••• Si las blancas adoptan el plan f2-f4, las negras obtienen un rápido contrajuego (7 f4 b5 ! 8 l!Vf3 Ab7 9 Ad3 l:i:Jbd7 10 a3 l::[ c8). Pero 7 g4 es una buena réplica. En tal caso, la natural 7 ... h6 transpone a una espe- DEFENSA SICI LIANA cie de Ataque Keres, en el que las blancas han añadido la útil ii.e3, mientras que las negras sólo han añadido la lenta ... a6. Co mo consecuencia, las blancas tienen bue nas posibilidades, tanto en el caso de continuar a lo Keres (8 h4), al modo del Ataque Inglés (8 f3), o al modo del híbri do TalfTopalov, con 8 f4. El avance 7 g4 tiene un inconveniente, pues 7 e5 8 t2Jf5 g6 obliga a las blancas a sacrificar material (9 t2Jg3? ii.xg4). Pero la línea de Bela Perenyi, 9 g5! gxf5 10 e xf5 , ha demostrado ser tremendamente fuerte. No hay un orden que sea el exclusiva mente correcto en el Ataque Inglés, des pués de 6 �e3 a6, pues tanto 7 f3 y 8 'if d2, como 7 'if d2 y 8 f3, tienen sus méritos. En los noventa, las blancas demostraron que su mejor desarrollo refutaba ... d5, aun cuando difiriesen el avance g2-g4, como en la lútea 7 'ifd2 ii.e7 8 f3 t2Jc6 9 0-0-0 d5, y ahora 10 g4! dxe4 1 1 'iff2 'ifc7 12 g5, con ventaja. ••• fried) que lo investigaron hacia 1880. Pero puesto que existe ya una Variante Paulsen, digamos que Clásica puede servir. Las negras pueden elegir entre dos órdenes, 2 ... d6 y 5 ... tbc6, o bien a la inversa, 2 ... tbc6 y 5 ... d6. Hoy su decisión normalmente depende de cómo el jugador se sienta respecto a 2 . . . tbc6 3 �b5 (o bien a 2 ... d6 3 !/i.b5+ ), así como también de lo preparado que se encuentre respecto a 3 c3 ó 3 tbc3. Los Paulsen solían jugar este orden de la Clásica para llegar al Dragón, la Scheve ningen y otras líneas que llegaron a poner se de moda mucho después de que ellos hubiesen desaparecido, como la Variante de Isaac Boleslavsky, 6 !/i.e2 e5. Actual mente, se utiliza también como un compás de espera. Después de 6 �e2, por ejemplo, las negras pueden jugar una Scheveningen o una Dragón, con mayor seguridad (o bien 6 ... t2Jxd4 ! ? 7 'ifxd4 g6, como antes se ha dicho). En la mayoría de las partidas, las blancas juegan 6 !Ji. g5 y 6 !/i.c4, de modo que las negras suelen dedicar la mayor parte de su tiempo de preparación a las variantes Rauzer y Sozin. Esto las hace más vulnerables a las trampas por trans posición, para empezar, 6 f4. Esta jugada puede ser un problema para las negras que utilizan la Clásica para eludir el Ata que Keres y alcanzar la Scheveningen ( 6 !/i.e2 e6) . (Ver diagrama 123.) Si las negras responden 6 e6, su rival dispone de un ambicioso plan, a base de 7 � e3 y 'iff3/0-0-0. Esto transpone a la línea 1 e4 c5 2 tb f3 d6 3 d4 cxd4 4 tb xd4 tbf6 5 t2Jc3 e6 6 f4 t2J c6 7 !/i.e3, y las negras han perdido la posibilidad del agudo esquema 6 . . . a6, seguido de ... b5/ ... !/i.b7. ••• VARIANTE CLÁSICA El maravilloso y flexible sistema que re sulta de 1 e4 c5 2 t2Jf3 d6 3 d4 cxd4 4 tbxd4 t2Jf6 5 t2Jc3 t2Jc6 debería llevar el nombre de los hermanos Paulsen (Louis y Wil- 71 72 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ El jugador con negras que prefiera 6 �e2 en la Variante Boleslavsky también puede tener un problema con 6 f4. Los li bros recomendaban 6 ... e5, debido a que 7 lll xc6 bxc6 8 fxeS lll g4! les concede un ex celente juego sobre casillas de su color, tanto si las blancas aceptan el peón (9 exd6 �xd6), como si permiten 9 ... lll xeS. Sin embargo, 6 .. e5 se pone a prueba con 7 tll f3! , seguido de .tc4. Un ejemplo de cómo un jugador Boleslavsky puede encontrarse en territorio desconocido lo tenemos en la partida Salmensuu-Atalik, Groninga 1999: 7 ... .te7 8 �c4 0-0 9 0-0 exf4 10 ..txf4 �g4 1 1 �d2 �hS 12 l:!. ael .,tg6 13 @hl l:t e8 14 �b3 a6 15 lll d4 lll aS 16 tll fS lll xb3 17 axb3 tll xe4 18 lll h6+ g x h 6 1 9 n xe4 ..t x e 4 20 lll x e 4 � f8 ? 2 1 �gS, con posibilidades confusas. La respuesta más sólida a 6 f4 debe ser 6 ... g6, transponiendo a la Variante Loeven fish del Dragón. Pero aunque un draconia no pueda memorizar las complejas líneas 7 lll xc6 bxc6 8 es y 7 Ab5 Ad7 8 ..txc6, no es probable que un habitual de la Clásica lo haga. Ése es otro punto a favor de 6 f4! ? . Otras opciones engañosas d e l a Clásica son 6 � e3 y 6 f3, ambas agresivas y, a la vez, jugadas de espera. Pueden transponer a . una Dragón ( 6 ... g6) o al Ataque Inglés ( 6 ... e6), pero si las negras querían realmen te jugar una Dragón, habrían optado por S ... g6, y si querían jugar un Ataque Inglés, habrían optado por 5 . . . e6. De esta forma, pierden algunas opciones. La teoría prefie re ... a6 a ... lll c6 en el Ataque Inglés, pero después de 6 ..ie3 e6, las negras ya están comprometidas con ... lll c6. También, en caso de 6 ... e6 7 ..ic4! sería molesto para las negras, que normalmente responden a 6 ..tc4 con la jugada de Benko 6 ... �b6. Hay dos nubarrones en el horizonte de 6 .te3. Uno es 6 ... eS, que transpone a una línea de la Variante Boleslavsky, que se considera igualada (7 lll b 3 �e7 8 �e2), o a de la Variante Sveshnikov, considerada buena para las negras (7 lll dbS a6 8 lll a3 bS). El otro nubarrón es 6 ... lll g4! , que la teoría considera, como mínimo, posición igualada. Por esto es por lo que es más pre ciso 6 f3. Las blancas siguen pudiendo alcanzar posiciones del Ataque Yugoslavo en la Dragón, o del Ataque Inglés (6 ... g6 7 Ae3 ó 6 ... e6 7 .te3 , respectivamente), pero evitan 6 -te3 lll g4. La experiencia con 6 .. . eS 7 lll b3 ..te7 8 �e3 .te6 9 lll d S, y 7 .. . .te6 8 lll d5 es aleatoria. DEFENSA SICILIANA ATAQUE RAUZER En el orden clásico, 6 � g5 disuade de pasar al Dragón (6 . . . g6 7 � xf6) , o a la Boleslavsky (6 . . . e5 7 j_xf6 'i!Vxf6? 8 l2Jd5). Las negras normalmente prefieren 6 . . . e6 y la experiencia ha demostrado que la única forma que tienen las blan cas para luchar por la ventaj a es 7 'i!Vd2 y 8 0-0-0. Las negras toman decisiones importan tes acerca del momento oportuno o nece sidad de ... l2J xd4, ... h6, ... a6 y ... 'i!Vb6. Si las blancas responden a ... 'ii'b6 con lb b3, po drían alcanzar la posición del diagrama 125, una de las mejores formaciones Rau zer para las negras: Normalmente se llega por el orden 6 e6 7 'i!Vd2 �e7 8 0-0-0 0-0 9 l2Jb3 'ii'b 6. Pe •.. ro las blancas pueden impedir que se pro duzca, jugando 9 f4 ó 9 f3, avances ambos que gozan de buena reputación. Por esta razón, las negras pueden decantarse por 6 ... 'ii'b 6 y después de 7 l2Jb3 e6 8 'ii'd2 �e7 9 0·0-0 0-0, transponiendo. Una tercera ruta hacia la formación del diagrama es 6 ... e6 7 'ii'd2 'ii'b6 8 l2Jb3 i.e7 9 0-0-0 0-0. ¿ Qué orden es el mej or? Los dos últimos amenazan ... 'i!Vxd4, además de 73 ... 'i!Vxb2, pero comparten el demérito de permitir que su rival les doble peones, con .txf6. Además, las blancas pueden responder a 6 ... e6 7 'i!Vd2 'ii'b 6 con 8 0-0-0 (y trans poner, después de 8 ... �e7 9 f3, por ejem plo). La única forma de castigar esto es 8 ... l2J xd4 9 'i!Vxd4 'i!Vxd4 10 l::t xd4. A diferen cia de otros finales sicilianos tempranos, éste es favorable a las blancas, según Peter Svidler, quien prefirió 6 ... 'ii'b 6, aunque esta jugada también se enfrenta al proble ma 7 Ae3!?. Declinar el peón es malo (7 ... 'ii' a 5 ? 8 l2Jb3 'ii'c7 9 l2Jd5!, o bien 8 ... 'ii'd8? 9 .te2 e6 10 0-0, una Scheveningen con un tiem po o dos menos). Lo mismo puede decirse de 7 ... lb g4 8 l2J d5 ! l2J xe3 9 fxe3, en vista de 9 . . 'i!Va5+ 10 b4! l2J xb4 1 1 lb b3 ! l2J d3+ 12 @ e2, ganando pieza. Por el contrario, 6 . . . e6 7 'i!Vd2 'ii' b 6 8 A e3 l2J g4 ! es bueno para las negras. De modo que la respues ta a qué orden es el mej or depende de si las negras pueden jugar 6 . . . 'ii' b6 7 i.e3 'ifxb2 8 l2J db5. Si no es así, 6 . . . e6 7 'ii' d2 � e7 y 8 0-0-0 0-0 9 l2J b3 'i!Vb6 es el me jor. Otra formación es: . 74 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJEDREZ Esta posición se considera de doble filo, lo bastante como para atraer a juga dores con blancas como con negras, y pue de producirse tras 6 � g5 e6 7 'iVd2 Ae7 8 0-0-0 0-0 9 f4 ll:\ xd4 10 'iVxd4. Si las negras prefieren defender esta posición antes que la que se produce con 9 tt:lb3, pueden lograr lo que buscan con 8 tt:lxd4 9 'iVxd4 0-0 10 f4. El problema con el segundo orden es que las blancas no tie nen que cooperar jugando 10 f4. También pueden jugar 10 e5, avance sobre el que Jan Timman se pronunció en una ocasión, diciendo que es la única forma de castigar Ja secuencia negra. Por ejemplo: 10 ... dxe5 1 1 'Y:W x e5 � d7 12 � e2 l: c8 13 A e3 a6 14 g4, con posición confusa, Akopian-Joba va, Beer Sheva 2005. Las blancas también tienen otra pro metedora alternativa: 10 f3. Esta jugada funciona mejor aquí que con caballos so bre el tablero (6 �g5 e6 7 'iVd2 i,.e7 8 0-0-0 0-0, seguido de 9 f3 a6 10 g4 d5 ! ) . La cuestión es ésta: las negras deben decidir qué medio juego prefieren, si el que resul ta de 8 ... 0-0 9 tt:lb3, o Jos que resultan de 8 ... tt:l xd4 9 'iVxd4 0-0 10 e5 y 10 f3. Con negras, un timador puede inclinar se por la rara 7 'iVd2 i,.e7 8 0-0-0 0-0 9 f4 ••• �d7!? La idea es responder a Ja natural 10 .tc4 con 10 ... tt:l xd4 1 1 'iVxd4 �c6 y al canzar una prometedora posición (12 l:t hel 'iVa5). Hay una línea que normalmente se produce con 9 . . . tt:l xd4 10 'iV x d4 'iV a5 1 1 Ac4 �d7, en cuyo caso las blancas sus tituyen 12 e5 ! por la menos ambiciosa 12 l:t hel. La aparente refutación de 9 ... .td7 es 10 tt:ldb5, amenazando tt:l xd6. Pero 10 ... d5!? ofrece buen juego por un peón. Por ejemplo: 1 1 exd5 tt:l xd5 12 tt:l xd5 exd5 13 'iVxd5 .tg4! 14 'iVxd8 Axd8 15 lld2 �b6. O bien 1 1 e5 tt:le8 12 h4 a6 13 tt:ld4 f6, Su tovsky-Zviagintsev, Essen 2000. Otro orden engañoso es 7 'iVd2 �e7 8 0-0-0 a6 (o bien 7 ... a6 8 0-0-0 �e7), que guarda parecido con 7 'iVd2 � e7 8 0-0-0 0-0 9 f4 a6?, que Paul Keres refutó con 10 e5! dxe5 1 1 tt:l xc6 bxc6 12 fxe5. (Ver diagrama 129.) Este orden es significativo, porque si 9 f4, las negras transponen no a la línea ma la (9 ... 0-0?) sino a una muy buena, 9 ... �d7!, que también puede producirse por 7 'iVd2 a6 8 0-0-0 �d7 9 f4 �e7, cuando las negras prescinden de 9 f3. Si insisten en jugar 9 f3, las negras res ponden 9 ... tt:lxd4 10 'it'xd4 b5!, y sitúan su D EFENSA SICILIANA alfil de forma más útil, en b7 y no en d7. Por ej empl o : 1 1 h4 � b7 12 @ b l 'fi/ c7 13 'fi/d2 � c8 14 .id3 h6 15 .te3 b4 16 lll a4 d5 ! , Sax-Acs, Campeonato de Hungría 2003 . Puesto que 9 lll b3 permite 9 b5!, en circunstancias mejores de las habituales, el verdadero test para el orden de jugadas de las negras es 9 .txf6. Si responden 9 . . . .ixf6?, pierden un peón, por 10 lll xc6. Pe ro la experiencia con 9 . . gxf6 10 f4 .id7 y 10 .te2 'fi/b6 no ha sido concluyente, de modo que ésta puede ser una verdadera contribución al Ataque Rauzer. .•• . ATAQUE SOZIN Joseph Blackburne solía jugar 6 .ic4 con tra la Variante Clásica, de modo que 6 ... g6 se castigaría con 7 lll xc6 bxc6 8 e5 ! . Más tarde, Ossip Bernstein descubrió la sutile za 6 .id7. (Ver diagrama 130.) ... 75 lll xd4 11 .ixd4 .ic6. No existe, virtual mente, experiencia magistral con 8 lll db5 'fi/b8 9 j,f4 ó 9 � g5. La sutil respuesta 7 .ib3 es una jugada de espera, a fin de ver cómo siguen las ne gras (7 ... e6 ó 7 ... g6). Pero después de 7 g6 8 .i e3 , las negras pueden responder 8 lll g4! y contra 8 f3 es posible 8 lll xd4! 9 'fi/xd4 .ig7, con un juego excelente. Por ejemplo: 10 .te3 0-0 1 1 'fi/d2 b5 12 .ih6 .txh6 13 'fi/xh6 b4 14 lll d5 e6! 15 lll e 3 as 16 h4 a4 17 .ic4 d5 ! , Shivaji-Motylev, Min neapolis 2005. La gran contribución de Pal Benko a la teoría de 6 .tc4 fue comprender que 6 ... �b6 7 lll b3 e6 transpone a una buena Sche veningen para las negras, aunque es proba ble que tengan que retirar la dama a c7 con pérdida de un tiempo. Uno de los se cretos del Ataque Sozin es que entrar en la línea correcta a menudo cuesta un tiempo. Esto es evidente cuando las blancas se mantienen en los límites del Sozin, respon diendo a 6 'fi/b6 con 7 lll db5!? , y después de 7 a6 8 �e3 'fi/a5 9 lll d4 e6 (no 9 . . lll xe4? , por 10 'fi/f3): (Ver diagrama 131.) ••• ••• ... ••• Los libros recomiendan 7 0-0, porque 7 ... g6 8 lll xc6 es ligeramente favorable a las blancas. Pero 7 e6!? es una "vieja" juga da Sozin, con 0-0, que no está considerado tan peligroso como las líneas con 0-0-0. Por ejemplo: 8 �b3 �e7 9 �e3 0-0 10 'fi/e2 ••• ••• . Las blancas tienen un tiempo menos, en un "viejo" Sozin. (Se produciría des- 76 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ pués de 6 .tc4 e6 7 .1;.. e 3 a6, si las negras tuviesen el tiempo extra ... 'it'a5.) Pero in cluso con un tiempo menos, las blancas tie nen buenas posibilidades, después de 10 0-0 ii.e7 11 f4, según la teoría. En realidad, los grandes maestros a menudo devuelven el tiempo, digamos, con 1 1 ... 'it'c7 12 �b3 0-0 para llegar a una línea de libro, 13 'it'f3 4J xd4 14 .txd4 b5, con posibilidades equi valentes. En el caso de la ortodoxa 6 Ac4 e6, las blancas eligen entre la vieja 0-0 y el plan f2-f4-f5, o bien el Ataque de Dragoljub Ve limirovic, a base de .11.. e 3, 'it'e2, 0-0-0 y g2g4-g5. Entretanto, las negras deberán optar, bien por un rápido desarrollo ( ... i.e7, .. . 0-0), bien por un plan más ambi cioso, pero de desarrollo más lento ( ... a6, ... b5, ... 'it'c7). Hallar la defensa correcta para cada plan de ataque y viceversa es algo crucial. El juego en el flanco de dama no funcionó bien contra el viejo Sozin, cuando era jo ven la continuación 6 i. c4 e6 7 0-0. Des pués de 7 a6 8 A e3 'it'c7 9 �b3 4J a5 'ii' d7 1 4 'it' f3 y 1 5 e 5 ó 1 5 f x e 6 f x e 6 1 6 'it'h3). Se encontró un antídoto en el rápido desarrollo, 7 i.e7 8 .11.. e3 0-0 9 f4? dS! . Pero esa política no da buen resultado contra el Ataque Velimirovic. Por ejem plo: 7 �e3 .11.. e7 8 'ike2 0-0, y ahora 9 0-0-0 .1;.. d7 10 i. b3 'it'b8 1 1 g4 ! l:t c8 12 g5 4J e8 13 h4 4J a5 14 g6 ! , como en la parti da Velimirovic-Milic, Belgrado 1965, uno de los primeros éxitos de la estrategia blanca. En lugar de ello, las negras suelen ob tener mejores resultados cuando empren den operaciones en el flanco de dama. Por ejemplo: 7 ..te3 a6 8 'it'e2 'it'c7 9 0-0-0 4J a5, o bien 9 .. i.e7 10 .la hgl 4Ja5 1 1 Ad3 b5. Lo que esto significa e s que cada bando debe ser lo bastante flexible como para explotar el plan de su oponente. La mejor jugada de espera de las blancas es 7 10 f4 bS. ...pueden plantear el Velimirovic, con 9 'i!fe2!, con la ventaja de saber dónde vive •.• . �b3. Después de 7 ... Ae7 8 Ae3 0-0 (Ver diagrama 133.) ••• (Ver diagrama 132.) .. .las negras a menudo eran aplastadas por 11 f5 4J xb3 12 cxb3 ! (12 ... i.e7 13 l:t cl el rey negro. La mejor réplica de espera es 7 a6. Si las blancas se comprometen, con 8 f4, en.•. 77 DEFENSA SICILIANA alternativas. La primera es 5 lll bd7 , en sayada por Tigran Petrosian, Mark Taima nov y Bent Larsen. En el libro de torneo de La Habana 1966, Petrosian escribió: "La única ventaja de esta jugada radica en ... su relativa novedad." ••. tonces 8 ... Ae7 9 .te3 0-0 dirige el juego hacia una vieja formación del Sozin, que ofrece posibilidades a ambos bandos (10 0-0 lll xd4! 11 �xd4 b5 !). El compás de es pera continúa si a 7 �b3 a6 sigue 8 .te3. Jugadores muy fuertes, como Vishy Anand, han jugado aquí 8 "i/Jc7, para mantener vivas las opciones de contrajuego en el flan co de dama. Sin embargo, pasar al viejo Sozin, con 9 f4!, permite explotar el retraso de las ne gras, que quedan peor tras 9 ... b5 10 lll xc6 "i/Jxc6 11 f5. O bien 9 ... �e7 10 0-0 lll xd4 11 Axd4 b5 12 e5 ! , con rápida victoria en la partida Golubev-Lerner, Odesa/Estam bul 2006, después de 12 ... dxe5 13 fxe5 lll d7 14 %:[ xf7 ! @ xf7 15 "i/Jf3+. Ambos bandos se quedan finalmente sin jugadas de espera tras 8 �e3 y 8 � e7 ! . Entonces, 9 0-0 0-0 es una buena po sición Sozin para las negras, y 9 "i/Je2 0-0 10 0-0-0 es una posición del Ataque Veli mirovic, que aún debe ser evaluada. ... ••• QUINfAS JUGADAS RARAS Sabemos mucho acerca de 1 e4 c5 2 lll t3 d6 3 d4 cxd4 4 lll xd4 lll f6 5 lll c3, cuando las negras responden 5 ... g6, 5 ... e6, 5 ... a6 y 5 ... lb c6, pero muy poco acerca de dos La novedad es buena cuando las blan cas juegan 6 .ic4 y descubren, después de 6 ... a6 7 .ib3 e6, que han sido empujadas a una popular línea de la Najdorf que sue le ser buena para las negras. En el orden normal de la Najdorf, 5 ... a6 6 �c4 e6, las blancas pueden evitar esa posición (7 �b3 lll bd7) mediante 7 0-0 ! , como jugó ese as tuto mago de la transposición, Deep Fritz, contra Kramnik, en 2006. Pero no hay otros trucos con 5 ... lll bd7, y sí muchos inconvenientes. A 6 .tg5, lo mejor que pueden hacer las negras probablemente sea 6 . . . a6, alcanzando una Najdorf (5 ... a6 6 �g5 lll bd7), que no ha tenido éxito desde los años sesenta. También, el caballo blanco de d4 no puede cambiarse, de modo que éste domi na el centro, y las blancas obtienen una forma superior del Ataque Inglés, tras 6 i.e3. Por ej emplo: 6 . . . a6 7 g4 h6 8 f3 e6 9 "i/Jd2 "i/Jc7 10 0-0-0 y 1 1 h4, o bien 8 . . b6 9 "i/Jd2 �b7 10 0-0-0 e6 11 h4 d5 12 .ih3 ! , . 78 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ con una fuerte iniciativa, Balogh-Bilek, Budapest 2002. La alternativa de mayor éxito es 5 �d7, una especialidad de Viktor Kuprei chik y Aloyzas Kveinis. .•. ventajas sobre el orden de la Clásica, pero las negras corren el riesgo de caer en el peor escenario, a saber, un Ataque Inglés o un Rauzer. VARIANTE NAJDORF La jugada esencial de la Najdorf, ... a6, es útil en la mayoría de las variantes sicilia nas y eso concede a las negras libertad para transponer a las mismas. Que tenga sentido dependerá de cuál de las casi doce alternativas razonables elijan las blancas en su sexta jugada. Los órdenes de jugadas de algunas de ellas, como 6 ..te2, 6 .1g5 y 6 f4, son demasiado complejos para consi derar aquí. Entre otros, tenemos: (a) 6 .td3 Esto funciona como una jugada de es pera en casos como 6 �e2 g6, en los que las negras han eludido el Ataque Yugosla vo, o 6 ... e6, cuando se llega a una Scheve ningen sin que pueda plantearse el Ataque Keres ni el Ataque Inglés. El principal in conveniente de 5 ... .td7 es que ocupa la mejor casilla de retirada del caballo rey y que mejora el impacto de g2-g4-g5 en el Ataque Inglés (6 .te3 ó 6 f3). Pero en la práctica, 6 �g5 es la jugada favorita de las blancas. En tal caso, 6 ... tt:Jc6 transpone a un Rauzer con 6 ... .td7. El único beneficio aparente de las negras para jugarlo en ese orden (en lugar de 5 ... tt:Jc6 6 ..tg5 .1d7) es evitar el Sozin y otras alternativas de la Clásica, como 6 f4. En aras de la originalidad, los grandes maestros prefieren responder a 6 .tg5 con 6 ... e6, porque ofrece a las blancas elec ción entre una línea muy rara de la Naj dorf (7 f4 a6) , otro Rauzer (7 'i!V d2 tt:J c6 8 f4 h6) y la confusa 7 tt:Jdb5 ..tc6 8 .txf6. Conclusión: 5 ... .td7 tiene algunas Esta jugada, virtualmente no teórica, tiene un gran valor de transposición. Des pués de 6 e6 7 f4 ó 7 0-0, las blancas ob tienen posiciones muy razonables de la Scheveningen, en las que ..td3 reemplaza a .te2. Por ejemplo: 7 f4 tt:J c6 8 tt:Jf3 .te7 9 0-0 y 'i!Vel-g3. Si las negras nunca juegan posiciones Scheveningen, porque respon den a 6 �e2 con 6 ... e5, entonces 6 ..td3 podría ser un problema. •.• D EFENSA SICILIANA Si las negras responden a 6 �d3 con 6 ... es, las blancas disponen de una buena casilla de retirada en e2. Por ejemplo: 7 lDde2 �e7 8 0-0 0-0 9 f4 liJbd7 10 lD g3 (10 . . . exf4 11 liJ fS ! lD e5 12 lD xe7+ "Wi x e7 1 3 ii.xf4 h6 14 ii.g3 ! y ii.h4, Gallagher Karjakin, Panormo 2002). El inconvenien te de 6 �d3 parece ser 6 liJc6, ya que el caballo atacado no puede mantenerse en d4 (7 �e3 lDg4!). Sin embargo, después de 7 lDxc6 bxc6 8 0-0. ••. Las blancas pueden continuar con lD a4/c2-c4 ! , como hacen en la línea del Sozin que sigue: 1 e4 c5 2 liJ f3 lD c6 3 d4 cxd4 4 lD xd4 liJ f6 5 lD c3 d6 6 Ac4 "Wib6 7 lD xc6 bxc6 8 0-0 y lD a4, con un brillan te panorama. En la posición del diagra ma 137, pueden responder a 8 . . . e5 con 9 b3 A e7 10 �b2 0-0 1 1 lD a4. Después de 1 1 . . . .t e6 12 "Wie2 "Wi c7 13 c4 liJ d7 1 4 c5 ! , favorable a las blancas e n la p artida Dgebuadze-Wemmers, Bélgica 2004. É sa no puede ser la mej or línea pa ra las negras, tras 6 Ad3. Pero entonces ¿cuál es? (b) 6 a4 Ésta es la mejor jugada de espera para las blancas en la Najdorf. Contra 6 ... e5, 79 pueden continuar con 7 liJf3, de modo que 7 ... ii.e7 8 �c4 0-0 9 ilg5, ó 7 ... h6 8 �c4 la dejaría con un tiempo de ventaja sobre las líneas 6 � e3 e5 7 liJ f3 y 6 A e2 e5 7 liJf3. En lugar de ello, las negras pueden transponer a una Scheveningen, una Boles lavsky o una Dragón, tras 6 ... lDc6. Hay evidencias en el sentido de que los avances del peón a ayudan a las blancas en el Dra gón. Por ejemplo: 6 lDc6 7 A e2 g6 8 0-0 Ag7 9 �e3 o-o. .•• El agujero de b6 concede a las blan cas la posibilidad de ejercer un férreo control del flanco de dama, después de 10 'iVd2 lD g4 1 1 �xg4 � xg4 12 liJ d5 ! l:l c8 1 3 a5 . También es bueno 1 0 f4, ya que 10 . . . 'iVb6, que iguala al instante cuando los peones a se encuentran en sus casillas iniciales, puede contestarse con la fuerte 11 a5 ! lD xe5 12 e5. Si las negras optan por 10 . . . �d7, entonces 1 1 lD b3 y liJ d5 garantizan ventaj a posicio nal a las blancas. Otra idea, después de 6 lDc6 es 7 �e2 eS. Los libros recomiendan 8 lD xc6, pero lo cierto es que sólo demuestran que iguala. Es mejor 8 lDb3! .te7 9 0-0 0-0, y ahora 10 �gS! •.. 80 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJEDREZ gen (1 e4 c5 2 lt:Jf3 d6 3 d4 cxd4 4 lt:Jxd4 lt'lf6 5 lt:Jc3 e6 6 �c4 i.e7 7 �b3 0-0 8 Ji..e3 lt:J a6 ! ?). Después de 8 0-0 lt:Jc5, las negras tienen un desarrollo más rápido que en la línea de Fischer. La contrasutileza es 7 0-0, que se había descartado en los años cincuenta. En tal caso, 7 ... b5 8 �b3 transpone a la posición con 7 �b3 b5 8 0-0 que las blancas quieren conseguir, y evita la de 7 it.. b 3 lt'lbd7, que las negras buscan. Si, de todos modos, las negras juegan 7 lt'lbd7, entonces 8 it.. g5 ! ••• . Esto es favorable a las blancas, después de 10 .t e6 11 i.xf6 y lt:Jd5. Es diferente de la Boleslavsky normal (5 ... lt:Jc6 6 it.. e 2 e5 7 lt'lb3 it.. e 7), en cuyo caso las negras igualan de inmediato, tras 8 0-0 0-0 9 �g5 lt:Jxe4 ! . La inclusión d e a2-a4 y ...a 6 significa que 10 it.. g5 lt:J xe4? condena el caballo, pues sigue 11 ii.. x e7 lt'l xc3 12 ..txd8 lLJ xdl 13 i.c7 lt'l xb2 14 :l fbl . .•. (c) 6 it.. c4 Existe consenso general en cuanto a que la mejor respuesta de las negras es 6 e6, pero en cuanto a la séptima jugada blanca ese acuerdo se diluye. La vieja fa vorita, 7 �b3, se consideraba la mejor por que preserva la opción del enroque largo. Por ejemplo: 7 �e7!? 8 f4 0-0 9 �f3, y ahora 9 ... lt'lbd7? 10 g4, o bien 9 . �c7 10 f5 lt:J c6 1 1 it.. e 3. Así pues, las negras volvieron su aten ción sobre 7 b5. Las blancas encontraron 8 0-0 era bueno, porque tras 8 . . . � b7 9 l::t e l ! lt'lbd7 10 �g5 lt:Jc5? 1 1 it.. d5 ! es un sacrificio correcto, corno demostró en su día Fischer. Para anticiparse a esa posibilidad, las negras comenzaron a jugar 7 lt'lbd7 y ... lt:Jc5 , muy en el espíritu de la Schevenin••• ••• . ••• ••• . Esto transpone a la variante Najdorf con 6 .tg5, que ha puntuado bien para las blancas desde los años sesenta. Fuertes jugadores, corno Leonid Yudasin, han en sayado 8 ... 'iWc7 ! ? , pero tras 9 ..t xe6! fxe6 10 lt:J xe6, las negras han sido sistemática mente demolidas, desde una brillante partida de Keres (10 . . . 'it'c4 1 1 lt'ld5 @f7 12 ..txf6 @ xe6 13 ..tc3 ! , ganando). Para jugar esta línea, las negras pueden tener que arriesgarse con 8 ... h6 9 it.. h4 g5 10 it.. g 3 lt:J e5. Pueden evitar todo esto, recordando por qué se abandonó 7 0-0 hace medio si glo: 7 it.. e7! 8 i.b3 0-0. Ahora, 9 f4 lt:Jc6 llega a una posición perfectamente equili••• D EFENSA S I C I LIANA brada del viejo Ataque Sozin, y 9 il.e3 b5 es una línea de doble filo de la Najdorf. (d) 6 .te3 Las blancas se disponen a entrar en una tranquila Scheveningen, o un Ataque Inglés. Algunos grandes maestros, como Michael Adams, prefieren jugar contra 6 i.e3 e5 antes que contra 6 .ie2 e5, de mo do que comienzan con 6 i.e3. Si 6 ... e6, entonces 7 �e2 les permite transponer a 6 .te2 e6 7 �e3. Algunos partidarios del Ataque Inglés prefieren 6 f3 y 6 ... e6 7 i.e3. De esta for ma, evitan 6 .ie3 lt:Jg4. Pero también re nuncian a otras opciones, como 6 .te3 e6 7 g4 y 6 ji,e3 e5 7 lt:Jb3 .ie7 8 "i!Vd2 ! ? . En esta última línea, las blancas difieren f2-f3, a fin de impedir ... d5, y mantener abierta la opción f2-f4, como en la línea 8 "i!Vd2 �e6 9 0-0-0 llJ bd7 10 f4. También pueden indu cir a las negras a entrar en una mala línea, tras 8 ... 0-0 9 0-0-0 b5? 10 f3 ! .te6 l l lt:Jd5, como en la partida Topalov-Van Wely, Wijk aan Zee 2007. La respuesta más retorcida a 6 .ie3 es 6 lt:Jc6. ••• 81 negras disponen de la activa réplica 7 lt:J xd4 8 .ixd4 e5 y .t e6 . Y si las blancas proponen una Scheveningen, con 7 .i e2 , las negras pueden abrirse paso hacia un Dragón clásico, 7 g6, en el que las blan cas se han visto privadas del Ataque Yu goslavo y las líneas con .ig5. El precio que pagan es haberse comprometido con la ju gada ... a6! ? . ••• ••• ••• VARIANTE TAIMANOV/KAN A la posición básica de la Variante Taima nov puede llegarse de dos formas diferen tes, y Mark Taimanov utilizaba ambas, 1 e4 c5 2 lt:Jf3 lt:Jc6 3 d4 cxd4 4 lt:J xd4 e6 y 2 ••• e6 3 d4 cxd4 4 lt:J xd4 lt:Jc6. El primer orden disuade el Ataque In dio de Rey (3 d3), que es prometedor con tra 2 ... e6, mientras que el segundo orden elimina la Variante Rossolimo, pues si 3 it.. b 5? (tras 2 ... e6), 3 ... a6 ! . Las negras también pueden elegir un orden basado en cómo piensen responder a 3 lt:Jc3 ó 3 c3. Por ejemplo: 1 e4 c5 2 lt:Jf3 e6 3 lt:Jc3 es un buen Camaleón para las blancas, pero 2 ... lt:Jc6 3 lt:Jc3 e5 ! no lo es. Ambos órdenes, junto con un tercero, empleado por Salo Flohr, 1 e4 c5 2 lt:Jf3 lt:Jc6 3 d4 cxd4 4 lt:J xd4 'iic7!?, tienen el in conveniente de permitir una Formación Maróczy. Por ejemplo: 4 e6 5 lt:Jb5 ame naza lt:J d6+, ganando tiempo para, tras 5 ... d6, jugar 6 c4! . Las negras pueden impedir l a Maróczy con 5 lt:Jf6!? (Ver diagrama 142.) ••• ••• Esto evita 6 ... e6 7 g4 y obliga al ata cante inglés a preparar g2-g4. Si 7 Vi'd2, las Si las blancas defienden el atacado p e ó n e con 6 llJ l c 3 , entonces 6 . . . d6 7 .tf4 e5 8 .t g5 es la Variante Sveshni kov, como también 6 i. f4 e5 7 it.. g5 d6 8 lt:J lc3 . 82 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ Ahora, a 6 � e3 las negras pueden res ponder más enérgicamente, con 6 lbf6 7 WI d2 ..t b4! . Puede seguir 8 f3 ltJ xd4 9 �xd4 e5, o bien 9 W/xd4 .txc3+ 10 bxc3 e5. El inconveniente de este orden puede ser 7 li:Jdb5 W/bS 8 f4, aunque las negras recuperan un tiempo con 8 .. . d6 y ... a6. Fischer (a quien le gustaban las líneas li:Jb5/c2-c4 con blancas), planteaba la Tai manov, con negras, a través de otro orden, el de Ilia Kan: 1 e4 c5 2 li:Jf3 e6 3 d4 cxd4 4 li:Jxd4 a6. Después de 5 lt:J c3 , transponía (con 5 ... lt:Jc6) a la Taimanov 5 . . . a6. Otros jugadores de la Kan difieren to davía más ... lt:Jc6, mediante 5 'fJ/c7, a fin de alterar el desarrollo blanco con ... b4 ó ... �b4. Por ejemplo: 6 .te2 li:Jf6 7 .t e3? permite 7 �b4! . Por ejemplo: 8 W/d3 lt:Jc6, amenazando 9 ... lt:l xe5. O bien 8 �d2 .txc3 9 .txc3 lt:lxe4 10 .tb4 W/b6 1 1 .ta3 lt:Jc6, con escasa compensación por el peón perdido, Bonte-Cabrilo, Timisoara 2006. Otra ventaja del orden Kan es cuando la blancas fianchetan su alfil rey, 5 lt:Jc3 W/c7 6 g3 .t b4! ••. Las negras, por supuesto, disponen de una ruta más simple a la Sveshnikov, si eso es lo que quieren, y 5 ... lbf6 tiene sentido cuando las negras quieren plan tear una Taimanov y no les gusta permitir 5 lbb5. Jugar oportunamente los tres mo vimientos clave de la Taimanov ( . . . a6, . . . lb c6 y ... W/c7) ha resultado ser más complicado de lo que parecía una década atrás. Sólo hace poco 1 e4 c.5 2 lLit3 lLic6 3 d4 cxd4 4 lb xd4 e6 5 lbc3 a6 ha sido puesto a prueba por el Ataque Inglés, por ejemplo, que ha resultado peligroso tras 6 �e3 lbf6 7 g4, o bien 6 ... W/c7 7 'i!Yd2 lbf6 8 0-0-0. Esto aporta un argumento a favor de 5 •.. ••• ..• 'i!Yc7. Las blancas no pueden ignorar ... .txc3+, pero tampoco pueden pretender DEFENSA SICILIANA que tienen ventaj a tras 7 lbe2 lbf6, ó 7 .td2 lbf6 (8 �g2 lbc6 9 lbb3 �e7 ! y ... d6, con una excelente Scheveningen). Los inconvenientes del orden Kan comienzan con 5 c4. Esto da mal resulta do contra la Taimanov (1 e4 cS 2 lb f3 lb c6 3 d4 cxd4 4 lb xd4 e6, y ahora 5 c4 lb f6 6 lb c3 � b4 ! ) , pero no contra la Kan. Otro inconveniente es que las blancas pueden j ugar 5 ..t d3 , debido a que su caballo no está colgando en d4, como en la Taimanov, lo que les permite crear una Formación Maróczy diferida, con c2-c4. Con estos órdenes, las negras tendrán muchas oportunidades de transponer a una Scheveningen con ... d6. Pero eso tiene sen tido cuando las blancas han realizado una jugada que es útil en la Taimanov, pero no en la Scheveningen. Una ilustración es a2a3, para impedir ... �b4 y ... b5-b4. Un or den popular en los sesenta era 1 e4 c5 2 lbf3 lbc6 3 d4 cxd4 4 lb xd4 e6 5 lbc3 a6 83 6 �e2 'i// c7 7 a3. normales como 10 a4 ó 10 'i//e l, las blancas transpondrían con 10 a3? ! . Pero n o s e considera prudente para las negras transponer a una Scheveningen después de g2-g3, cuando ya han jugado . . . 'i/ic7. Después de 1 e4 c5 2 lb f3 lb c6 3 d4 cxd4 4 lb xd4 e6 5 lbc3 'i// c7 6 g3, las ne gras están más o menos obligadas a jugar 6 ... a6 para evitar 7 lbdbS 'i//b8 8 �f4. Sigue 6 a6 7 �g2 d6 8 0-0 lbf6 9 .!:!. el!, que permite a las blancas ejecutar su plan es tratégico lb xc6 y e4-e5 -que se supone ... 'i//c7 debía evitar- por medios tácticos. Es decir, 9 �e7 10 lb xc6! bxc6 11 e5! dxe5 U l:t xe5 y U 'i// x eS 13 �x c6+. No ha habido mejoras importantes en esta línea desde los años sesenta. Por esta razón, muchos jugadores consideran que 5 ... 'i//c7 es un ligero error, que se castiga con 6 g3 ! , y que 5 ... a6 es una mejor juga da de espera (6 g3 d6 !). Pero las negras disponen de otra sutile za, aunque se hayan comprometido con ... 'i//c7 y ... a6. Aquí, 7 lbf6 8 0-0 �e7 9 �e3 d6! es una buena decisión. Comparémoslo con 1 e4 cS 2 lbf3 d6 3 d4 cxd4 4 lb xd4 lbf6 5 lbc3 e6 6 �e2 a6 7 0-0 'i//c7 8 f4 lbc6 9 �e3 �e7, y ahora, en lugar de las líneas Esta posición puede producirse después de 5 'i//c7 6 g3 a6 7 �g2, y entonces 7 d6 8 0-0 ..te7!? (Erling Mortensen). Las ne gras se disponen a jugar una Scheveningen normal, después de 9 ... lbf6 y 10 ...0-0. •.. ••• ••• ... ••• ••• SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ 84 La única forma de impedirlo es 9 n el, con idea de que si 9 . . . ll:l f6?' 10 ll:l xc6 ! , alcanzando la posición de los se senta. Pero la diferencia es 9 Sl.f6!?. Ahora no valen gran cosa 10 lll b3 , 10 ll:l de2 ni 10 �e3, debido a 10 . . . ll:l ge7. Las líneas cruciales son 10 ll:l xc6 bxc6 11 jLf4 eS y 10 ll:lfS exfS 1 1 ll:l dS y, a me nos que consigan mayor éxito que hasta ahora, el orden de Mortensen constituye un refuerzo significativo para la Varian te Taimanov. .•. VARIANTES CON ···'*'b6 Hay una familia de líneas elaboradas en torno a . . . '*'b6 y . . . e6, a menudo en conjunción con . . . �cS. Todas ellas tie nen por obj eto presionar sobre la dia gonal b6-f2, al menos al comienzo pero suelen usarse para desembocar en la Scheveningen. Los miembros de la fa milia son: (a) 1 e4 c5 2 ll:l f3 ll:l c6 3 d4 c x d4 4 ll:lxd4 '*'b6; ( b ) 1 e4 c5 2 lLl f3 lLl c6 3 d4 c x d4 4 ll:l xd4 ll:lf6 5 ll:lc3 �b6; (c) 1 e4 c5 2 ll:lf3 e6 3 d4 cxd4 4 ll:lxd4 �c5, y ( d) 1 e4 c5 2 ll:lf3 e6 3 d4 cxd4 4 ll:l xd4 �b6. Las dos últimas líneas, popularizadas por Michael Basman y Kveinis, respectiva mente, pueden transponer entre sí. Por ej emplo : 1 e4 c5 2 lLl f3 e6 3 d4 c x d4 4 ll:l xd4 �b6, y ahora 5 ll:lc3 �c5 6 �e3 ll:lc6. (Ver diagrama 147.) No 6 ... '*' xb2? 7 ll:l dbS , ¡ que fue re futada en una partida Morphy-Paulsen ! Las negras han obtenido buenas posi ciones después de 6 . . . ll:l c6. Por ej em plo: 7 ll:l a4 '*'a5+ 8 c3 � xd4! 9 Jl. xd4 ll:l xd4 10 '*'xd4 ll:l f6 11 it. e2?! e5! 12 '*'c4 d6. La ruta más precisa para las negras ha cia la posición del diagrama 147 es la de Kveinis. Una razón es que 4 ... il.. cS no ha dado buen resultado contra la sorprendente 5 it.e3 '*'b6 6 c3 ! . Por ejemplo: 6 .. �xb2 7 '*'b3 'ii' x al? 8 lll c 2, o bien 7 .. . '*'xb3 8 axb3, o aun 6 ... ll:lc6 7 lll d2! ll:lxd4 8 ll:lc4. Los otros tres órdenes a menudo deri van en Scheveningens, una vez que las blancas retiran su caballo a b3. La ventaja para las negras es evitar los ataques Keres e Inglés. Por ejemplo, en el orden de Kvei nis, el juego puede continuar así: 5 lLl b3 lll c6 6 lll c3 ll:lf6, y ahora 7 �d3 �e7 8 0-0 0-0 9 �e3 Wlc7 10 f4 d6 11 Wif3 a6 12 a4, o bien 12 g4. La teoría dice que las blancas están un poco mejor, pero que la posición negra es sólida. Si eso es lo que las negras quieren, ¿cuál es el mejor camino hacia esa posi ción? En el orden (a), las blancas tienen una opción extra, 5 lll b5. Pero las negras disponen de una sorprendente réplica, 5 . ••• a6 6 �e3 �d8! DEFENSA SICI LIANA 85 posición, después de 6 d6 7 .t f4 e5 8 .tgS a6, a lo que se llamó Variante Sves ... La idea de esta jugada es que 7 lb d4 lb f6 8 lb c3 e6 es una Variante Taima nov con .te3, lo que tiene mucha mej or reputación hoy gracias a 'i!Vd2 y 0-0-0, pero puede ser algo con que las blancas no se sientan cómodas, sobre todo si j uegan normalmente .t g2 contra la Tai manov. Este orden también puede confundir a las blancas, puesto que 7 lb5c3 y luego 7 e6 8 lbd2 b5! es bueno para las negras. Si tuvieran alguna duda al respecto, deberían inclinarse por el orden (b ), porque 6 lbdb5 a6 7 .te3? es un error (7 ... 'i!Va5 gana ma terial) y 7 lba3 e6 8 lbc4 'i!Vc7 9 .te 3 b5 nunca ha obtenido buenos resultados para las blancas. ••. hnikov. Esto priva a las blancas de las op ciones de la Sveshnikov normal, 1 e4 c5 2 lbf3 lbc6 3 d4 cxd4 4 lbxd4 lbf6 5 lbc3 e5 6 lbdb5 d6 7 .tg5 a6, como 6 lbf5, 6 lb db5 d6 7 lbd5 y 7 a4. Por supuesto, también en la Cuatro Ca ballos hay abundante teoría que conocer, si las blancas deciden no sumarse a la ruta hacia la Sveshnikov. Pero las negras pue den reducir considerablemente esos des plazamientos llevando el juego hacia una Scheveningen, con 6 . . . d6. Eso es normal mente la segunda mejor opción. Pero evi ta cantidad de análisis teóricos, como 6 g3 d5 7 .tg2 .tb4 8 exd5 lb xd5, o bien 6 .te2 .tb4 7 0-0 .txc3 8 bxc3 lb xe4 9 �d3 d5 10 .ta3. En lugar de ello, las negras están más o menos igualadas tras 6 g3 d6! ? ó 6 �e2 d6! ? . Hay una lmea e n l a que ambos conten dientes parecen jugar a ver quién engaña a quién, 6 a3. VARIANTE CUATRO CABALLOS Durante décadas, la variante que comien za c o n 1 e 4 c5 2 lb f3 lb c6 3 d4 c x d4 4 lb xd4 lbf6 5 lbc3 e6 estaba etiquetada como "dudosa", porque la línea principal, 6 lbdb5 .tb4 7 a3 dejaba a las blancas con la pareja de alfiles y mejores perspec tivas. Su reputación cambió en la década de los setenta, cuando las negras adoptaron la Cuatro Caballos como una forma de trans- Después de 6 ... d6, las negras dicen: "He sido más listo que tú. He llegado a una Scheveningen en la que tu jugada a2a3 es una pérdida de tiempo." Las blancas responden: "En absoluto. 86 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ Mi objetivo era evitar tanto la Sveshnikov como 6 ... �b4. La ventaja añadida es que podré jugar 7 �c4 ! , entrando en un Sozin, en el que te has privado de la línea de Ben ko." o bien las negras pueden jugar 6 ... es y decir: "He conseguido lo que quería, una Sveshnikov. En esta versión, no puedes ju gar 7 ttJdbS d6 8 �gS, porque tu caballo no tiene retirada, después de 8 . a6! ." A lo que las blancas responden: "Tonterías. Yo soy quien se ha llevado la mejor parte, por que después de 7 ltJb3, es una Sveshnikov con un tiempo extra para mí. Ese tiempo impide ... .tb4! ." No hay consenso acerca de cuál es la mejor respuesta a 6 a3 , pero 6 ... d6 no puede ser malo, sobre todo porque 7 �c4? ! no es, realmente, un buen Sozin, tras 7 . . . 'iW c7 ! 8 .t a2 a6 9 0-0 tLl x d4 10 'iVxd4 ltJ g4. El orden Cuatro Caballos-para-llegar a-la-Sveshnikov tenía por objeto impedir una contrasutileza. El siempre creativo Igor Zaitsev encontró la siguiente: 6 ttJdb5 .. d6 7 .tf4 e5 8 ttJd5!? Zaitsev dijo que había jugado esto, por primera vez, en una partida de cinco minu tos y, más tarde, en unas simultáneas, que siguieron con 8 ttJ xd5 9 exd5 exf4 10 dxc6 bxc6 11 'iVf3. La experiencia con 11 ... dS 12 0-0-0 es un tanto incierta (12 ... .td6? 13 'iVc3 ! cxbS 14 'iWc6+ .td7 15 'iWxd6 fue favorable a las blancas en una partida Zaitsev-Sveshni kov) Pero en el mismo caso se encuentran las líneas principales de la Variante Sves hnikov. La Siciliana nunca es fácil para las negras... ¡Ni tampoco para las blancas! ... . 87 Capítulo 4 Aperturas semiabiertas El jugador con negras revela algo acerca de sí mismo, cuando responde a 1 e4 con una jugada distinta a 1 ... e5 ó 1 ... c5. Un especialista en la Alekhine, por ejemplo, casi siempre tendrá preferencia por de sequilibrios posicionales y un rápido con trajuego. Puede que tenga un problema, por tanto, con 1 e4 tt::l f6 2 tt::l c3!?, porque la Apertura Vienesa (2 ... e5) no es probable que le permita jugar lo que él quiere. Por otra parte, pocos jugadores de la Alekhine están preparados para defender una Francesa (2 ... e6 3 d4 d5) o una Pire (2 ... d6 3 d4), y es dudoso que lo estén para jugar una Siciliana (2 ... c5? ! 3 e5). Después de 2 ... d5 3 e5 .. .las negras pueden ser reticentes a reali zar la mejor jugada, 3 ... tt::l fd7!, porque puede conducir a una Francesa Steinitz (4 f4 e6 5 d4). Pero las alternativas son un tanto cuestionables, como 3 ... tt::l e4 ó 3 ... d4 4 tt::l ce2 tt::l g4. Si las blancas aspiran a una ventaj a importante en la Alekhine, la elección tradicional es el Ataque de los Cuatro Peones, 1 e4 ttJ f6 2 e5 ttJ d5 3 c4 ttJ b6 4 d4 d6 5 f4. La respuesta estándar es 5 ... dxe5 6 fxe5 tt::l c6, que plantea algunas trampas, basadas en la clavada tt::l f3/ . . . A g4. Por ej emplo, si las blancas j ue gan 7 tt::l f3 , con la esperanza de 7 . . � f5 ? 8 d5 ttJ b4 9 tt::l d4, con ventaja, pe ro 7 ... Ag4! es excelente para las ne gras. Lo mismo puede decirse de 7 .te3 Af5 8 tt::l c3 e6 9 tt::l f3 y 9 . . . Ag4 ! , a pesar de la pérdida de tiempo. Por ejemplo: 10 �e2 �xf3 11 gxf3 'ifh4+ 12 �f2 'iff4. Las blancas pueden evitar esto, invirtien do simplemente el orden, con 9 �e2 ! y 10 tt::l f3. Si el jugador con negras es más astuto, puede diferir tanto ... dxe5 como ... tt::l c6, como hizo Viktor Korchnoi, con 5 ... �f5 . 6 tt::l c3 e6. 88 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ Ahora, 10 dS i.b4! hace saltar el centro blanco, tras 10 0-0 f6 11 exf6 !/l xf6 12 !/l e3 ltJ c6, con lo que las ne gras llegan a donde querían llegar. Cuando se introduj o por primera vez este orden, en una partida de 1 960 Ge ller-Korchnoi, las blancas se desorienta ron y quedaron peor tras 11 i. f4? ltJ c6 1 2 exf6 !/l xf6. ALEKHINE, 4 ltJf3 Esto reporta dividendos en caso de 7 !/ld3? !/lxd3 8 'ifxd3 c5 (9 d5? dxe5 10 fxe5 'ifh4+ y ... 'ifxc4). Es mejor 7 ltJf3, después de lo cual 7 . . . dxe5 8 fxe5 lb c6 9 i.d3 ? ! i.g4! es otra trampa. Pero des pués de 9 !/le3 ! !/le7, las blancas tienen po sibilidades razonables, bien el camino más trillado, 10 !/le2 0-0 11 0-0 f6, bien con el emprendedor avance 10 d5 ! ? (10 ... !/lb4 11 ltJd4 �g6 12 a3). Puesto que 10 d5 requiere una prepa ración minuciosa por parte de las negras, tal vez prefieran responder a 7 ltJ f3 dxeS 8 fxe5 con 8 !/le7!. Esto les permite al canzar la formación de los Cuatro Peo nes, de forma no traumática, tras 9 ile2 ... 0-0. Cuando las blancas responden a 1 e4 ltJf6 2 e5 ltJd5 con la más modesta 3 d4 d6 4 ltJt3, el momento preciso de cambiar en d6 y e5 resulta crucial. Después, por ejemplo, de 4 i.g4, parece que las blancas buscan el mo mento oportuno de jugar exd6, ya que ... cxd6 les permite ganar espacio con d4-d5! . Pero a l a inmediata 5 c4 ltJb6 6 exd6, las negras pueden responder 6 ... exd6 ! , una satisfactoria versión d e l a Variante del Cambio, que normalmente se ve después de 4 c4 ltJb6 5 exd6 cxd6. Es más preciso 5 �e2 e6, y luego 6 c4 ltJb6 7 exd6, o bien 7 0-0 ile7 8 exd6. Otra cuestión tiene que ver con h2-h3. En la mayoría de los casos, las negras reti rarán su alfil sencillamente a h5. Pero 5 i.e2 e6 6 h3 es inoportuno, debido a 6 �xf3! 7 i.xf3 c6. (Ver diagrama 154.) ... ••• Las negras quieren crear un objetivo en e5 (8 0-0 dxe5 9 dxe5 ltJ d7 10 'ife2 'ifc7), explotando el descuido de las blan cas, porque 8 c4 ltJb6 9 exd6 permite la fa vorable 9 ltJxc4! . Si las blancas quieren cuestionar al al fil, un mejor orden es 6 0-0! i.e7 7 h3. Des pués de 7 !/lxf3 8 !ílxt3 c6 9 c4 ltJb6, las negras pierden material, con 10 exd6 y 11 cS. La razón por la que las negras necesi••• ••• APERTURAS SEMIABIERTAS 89 do, y 14 ... .,tg6 da tiempo a las blancas pa ra 15 lbd4!, y sus piezas dominaron des pués de 15 ... Af6 16 lb xc6 bxc6 17 'ii' x c6, como en la partida A. Sokolov-Arzhen kov, Bar 2000 (17 ... � xb2 18 l:t adl 'it'a5 1 9 'ii' xd6 'ii' xa2 20 � f3 ht ac8 21 c5 ! a5 22 c6). Una ramificación diferente del árbol 4 lbf3 es 4 g6. Hoy se considera lo mejor 5 �c4 lbb6. Pero la vieja 5 c6!? tiene un nuevo uso gracias a la transposición. Des pués de 6 0-0, las blancas parecen entrar en una buena Variante del Cambio, en vis ta de 6 i.. g7 7 exd6! exd6 8 l:t el+. ••• •.. tan 8 ... c6 es que 8 ... dxe5 falla por 9 c4! lb juega 10 .txb7. Por otro lado, 7 .tfS permite a las blancas ejecutar el plan de ganar espacio en condiciones ideales. Por ejemplo: 8 c4 lbb6 9 lbc3 0-0 10 i.. e3 lbc6, y ahora 1 1 e x d6 c x d 6 1 2 d5 ! e x d 5 1 3 cxd5 ! lb e5 1 4 lb xe5 ! dxe5 15 'ii'b 3, con ventaja. El principal beneficio de h2-h3 radica en 7 .thS 8 c4 lbb6 9 lbc3 lb c6 10 exd6, y ahora 10 cxd6 11 .te3 0-0 12 d5!. Esto es muy bueno para las blancas, sobre todo después de la natural 12 exdS 13 lb xdS lb xd5 14 'ii' x dS. ••. ••• ••• •.. ... Sin embargo, 6 dxeS! 7 lb xe5 .tg7 es el orden de un taimado. Lo que ha sucedi do es que las negras han transpuesto a una línea atribuida a Edwins Kengis. Normal mente se produce en el orden 4 lbf3 dxe5 5 lb xe5 g6 6 �c4 c6 7 0-0 .tg7. Las negras han igualado. Por ej emplo: 8 c3 lb d7 9 lb xd7 ,t xd7 1 0 lb d2 0-0 ll lb f3 A e6 1 2 'ii'e2 lbc7 ! 13 ..tf4 .txc4 14 "ii' xc4 lbe6 15 .tes 'ii'd5, Sarbok-Carlsen, Gausdal 2003. La clave del orden 4 ... g6 5 .tc4 c6 es que las negras evitan alguna de las opcio nes del orden de Kengis, como (tras 4 lbf3 dxe5 5 lb xe5 g6) 6 c4 y 6 'ii'f3. Si a las ne gras les gusta la línea de Kengis, 4 . . . g6 ••• Si el alfil siguiese en g4, las negras esta rían bien con ... .tf6. Pero aquí está ataca- 90 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J U GADAS EN AJ EDREZ 5 �c4 c6 puede ser la forma más precisa de llegar a ella. Por último, está la línea 4 ll:\ f3 ll:\c6. La reputación de esta línea descansa sobre los últimos análisis de un gambito, 5 c4 ll:\ b6 6 e6 ! ? fxe6. Si las blancas no tienen con fianza en qué hacer a continuación, debe rían renunciar al mismo y optar por 6 ll:\c3. Ahora 6 .ig4 (ó 6 ... dxeS 7 dS) 7 exd6 exd6 transpone a una Variante del no supieran que 3 ll:\ c3 � a5 4 d4 ll:\ f6 5 ll:\ f3 ii.g4 6 h3! es claramente favorable a su causa (6 ... .ihS 7 g4! �g6 8 ll:\ eS). Hoy día, las negras suelen jugar 1 e4 dS con ... �fS, para obtener una estructura ti po Caro-Kann, con juego más activo. Pero se mantienen alerta ante la posibilidad de jugar una mejor versión de ... .tg4. Por ejemplo: 4 ll:\f3 ll:\f6 5 .ic4 c6. ••• Cambio en la que las negras definieron de masiado pronto la posición de sus piezas en el flanco de dama. Por ejemplo: 8 .ie2 �e7 9 d5 ! y 9 ... �xf3 10 i.xf3 ll:\eS 1 1 .te2 ll:\exc4? 1 2 �xc4 ll:\ xc4 1 3 'iVa4+, o bien 1 1 . .. 0-0 12 b3 .if6 13 �b2 as 14 0-0, con ventaja de espacio, Emms-Baburin, Is la de Man 1997. Esta posibilidad no se produciría en una Variante del Cambio normal (4 c4 ll:\b6 5 exd6 exd6 6 ll:\f3) si las negras tie nen cuidado. Por ejemplo: 6 ... .ie7 7 ll:\c3 0-0 8 .ie2 y 8 . ll:\c6 9 �e3 .ig4 ! . .. DEFENSA ESCANDINAVA Erase una vez un jugador que respondió a 1 e4 con 1 ... d5 2 exd5 °if xd5, sólo para sa lir "del libro", esperando que las blancas Ahora, 6 0-0 i.g4! tiene las ventajas de una Caro-Kann superior (7 d4 e6 8 J::t el ll:\bd7). Pero las negras son las que tienen ma yor probabilidad de ser cazadas en la Es candinava, aunque piensen que son las cazadoras. Después de 4 ll:\f3, podrían caer en la tentación de apoderarse del centro con 4 ... eS. Pero en tal caso, 5 d4! las caza en una desacreditada línea, que solía pro ducirse con 4 d4 eS? ! 5 ll:\f3 ! . El mayor refinamiento d e l a Escandi nava comienza después de 4 d4 ll:\f6 5 ll:\f3 (o bien 4 ll:\f3 ll:\f6 5 d4). La jugada de es pera 5 ... c6 anticipa la idea estratégica más peligrosa de las blancas, d4-d5, y evitan trampas sobre la dama (6 ll:\eS lLJ bd7 7 ll:\c4 �c7 ! ) . La respuesta más corriente a 5 . c6 es 6 �c4, que permite alcanzar una for mación, tras 6 ... .tf5 7 i.d2 e6 8 'ife2 .. APERTURAS SEMIABIERTAS �b4, en la que las blancas eligen entre 9 lt:ie5 y el enroque. Las dos jugadas a me nudo revierten: 9 lt:ie5 lt:ibd7 10 0-0-0 y 9 0-0-0 lt:ibd7 10 lb e5. Pero la jugada más precisa de caballo recorta las opciones negras. La simplifica dora 9 lt:ie5! lt:id5? es lamentable para las negras (10 � xd5 ! cxd5 1 1 �b5 + ! �xb5 12 lt:ixbS .txd2+ 13 @xd2 lt:ia6 14 lt:id6+, ga nando ). La misma idea tiene éxito, sin em bargo, después de 9 0-0-0 lt:id5, en vista de 10 �xd5 cxd5 1 1 �b5+ lt:id7 ! (12 'ifxb7 l:t b8 13 'flc6 .ta3). Las blancas también obtienen algunas opciones adicionales de 9 lt:ie5 ! , como 9 ... lt:ibd7 10 lt:i xd7 lt:i xd7 11 g4 .tg6 12 h4, que ha resultado peligroso en las pocas ocasiones que se ha producido en la prác tica. La situación más peligrosa para las ne gras es cuando las blancas han jugado pronto j.c4 y 'ii'e 2, con lo que está en el aire la ruptura d4-d5 ! . Por ejemplo: 1 e4 d5 2 exd5 'it'xd5 3 lt:ic3 �a5 4 d4 lt:if6 5 �c4 c6 6 �d2 �f5 y ahora 7 �e2!, que permi te a los alfiles blancos hacerse los amos, después de 7 ... e6 8 d5 ! cxd5 9 lt:i xd5 �d8 10 lt:i xf6+. La mejor tentativa para explotar el or- 91 den de las blancas es 5 ... .tg4!?, antes que 5 ... c6. Entonces, 6 lt:if3? lt:ic6! y 7 ... 0-0-0 con cede a las negras el esquema más agresivo que pueden obtener en la Escandinava. Por ejemplo: 7 �b5 0-0-0 8 �xc6 bxc6 9 0-0 e5 10 �d3 exd4 11 tt:ie2 �xf3 12 'ii' xf3 �d5, David-Kosteniuk, Dresde 1999. En caso de 6 f3 .tf5 7 lt:ige2 e6, las ne gras tienen una posición segura. Por ejem plo: 8 � d2 ? � b 6 9 g4 .t g6 10 h4 h6 11 �b3 tt:ic6 ! 12 �e3 0-0-0 13 ¡vd2 �b4 14 0-0-0 lt:id5 15 .tf2 lt:ia5, con ventaja, Movsesian-Kogan, Nova Gorica 2000. ESCANDINAVA, 2 ... lt:if6 Si aspira a una gran ventaj a contra 1 e4 d5 2 exd5 lt:if6, tendrá que dominar las com plejas líneas 3 �b5+. Pero si lo que quiere es un medio juego razonable, podrá aho rrar mucho tiempo de estudio con 3 c4. Lo mejor para las negras es 3 ... c6 4 d4 cxd5, transponiendo a un Ataque Panov de la Ca ro-Kann. Si lo que busca es un término medio entre ambas cosas, existen las opciones 3 d4 y 3 lt:if3. Después de 3 ... lt:i xd5, las ne gras elegirán entre dos planes básicos de 92 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ desarrollo: ... g6/... �g7 y ... �g4/ ... e6. Con tra cualquiera de estos planes, las blancas siguen con .te2, 0-0 y c2-c4. La virtud de 3 tt:Jf3, y luego 3 lZJ xdS 4 d4, radica en evitar las versiones más agudas del Gambito Portugués (3 d4 �g4! ?). Si las negras insisten en responder a 3 tt:Jf3 con 3 .tg4, las blancas parecen llevarse la palma con 4 �bS+!, en vista de 4 ... c6 5 dxc6 lZJ xc6 6 h3 .th5 7 .t xc6+ bxc6 8 d3 , o bien 4 . . . lZJ bd7 5 h3 � hS 6 tt:Jc3. Un orden más sutil es 3 d4 lZJ x d S .•. .•• 4 ..te2!?. Esto impide 4 ... �g4 y transpone a la lí nea principal favorable a las blancas, tras 4 ... g6 5 tt:Jf3. Puede que las negras prefieran 4 ... .tf5, sobre la base de que han induci do a las blancas a una de las líneas más tranquilas de 3 .tbS+ (3 ... .td7 4 �e2 ! ? lZJ xdS 5 d4 �fS). Pero incluso aunque hayan sido "enga ñadas", las blancas siguen disfrutando de buenas perspectivas después de 4 .tfS 5 tt:Jf3 e6 6 0-0 .te7 7 c4. Por ejemplo: 7 ... tt:Jb4 8 tt:Ja3 lZJ8c6 9 .te3 0-0 10 �d2 �d7 1 1 l Hcl J::t fd8 12 tt:J b5 ! tt:J a6 1 3 a3 �e8 14 l:t dl , Van der Weide-Buschke, Senden 2006. •.. DEFENSA MODERNA Las negras a menudo juegan 1 . . . g6 y 2 . . . � g7 como una especie de reconoci miento del terreno. Esperan a que las blancas muestren sus cartas, antes de decidir si transponer a una Defensa Pire, con ... tt:J f6. Esto tiene sentido cuando, por ejem plo, las blancas han entregado su más peli grosa arma anti-Pire, con un rápido i.e3-h6xg7. Es cuestión de gustos después de 1 e4 g6 2 d4 �g7 3 tt:Jc3 d6 4 f4, que las negras elijan entre transponer al Ataque Austriaco de la Pire (4 ... tt:Jf6) o mantener se en la Defensa Moderna, con 4 ... c6, 4 ... tt:Jc6 ó 4 ... a6. Pero la opción de la Pire pronto se aca ba. Después de 4 f4 c6 5 tt:Jf3 tt:Jf6?. Ésta es una mala versión de la Pire, porque ... c6 no encaja con la línea 6 ..t d3 0-0 7 0-0 bS 8 e S ! d x e S 9 fx e S lZJ dS 10 lZJ xdS �xdS 11 a4. Las negras quedaron claramente peor tras 1 1 . . . c5 12 1ii' e2 ! .1 b7 13 c4 b x c4 1 4 �xc4 1li'd8 15 e6, como en la partida Ghinda-Bogdan, Campeonato de Ruma nía 1997, que podemos considerar un caso en el que un adepto a la Moderna se en- APERTU RAS SEMIABIERTAS contró en una Pire con la que no estaba fa miliarizado. Las blancas deben tomar una decisión clave en la cuarta jugada de la Moderna. Supongamos que quieren desarrollar su alfil de rey por g2. El fianchetto se ejecuta gradualmente en la Pire (1 e4 d6 2 d4 lt:Jf6 3 lt:Jc3 g6 4 g3), pero puede impedirse en la Moderna, 1 e4 g6 2 d4 .tg7 3 lt:Jc3 d6 4 g3 lt:Jc6!. En tal caso, si 5 lt:Jge2? i.g4 ! , 5 dS lt:J d4 y 5 .te3 cS no son los tipos de posi ción que las blancas buscan cuando juegan g2-g3. 93 3 lt:Jc3 g6), las blancas han logrado algún éxito con 4 Ac4 i.g7 5 'ife2. Pero en la Moderna, 4 .tc4 se enfrenta a 4 tt:Jc6!?. Ahora 5 d5 es incoherente y a otras juga das las negras pueden pasar a una agrada ble Pire, como 5 lt:Jf3 lt:Jf6 6 0-0 .tg4, o bien 5 �e3 lt:Jf6 6 f3 0-0 7 lt:Jge2 eS. La moraleja es que las blancas necesi tan lt:Jc3 en el orden de jugadas Pire para defender e4, pero que deberían diferirlo en la Moderna, si quieren disponer de la opción de responder a ... lt:Jc6 y/o ... .tg4 con c2-c3 ! . El orden favorable es 3 lt:Jf3, y después de 3 ... d6, 4 .tc4 lt:Jf6 5 'if e2. También es gratificante jugar 3 lt:Jt3 d6 4 i.e2! antes de lt:J c3, con lo que las blan cas buscan el esquema clásico, pues 4 lt:Jf6 5 lt:J c3 transpone a una Pire muy vista. ••• ••• Por ejemplo: 5 d5 lt:Jd4 6 lt:Jbl!?, para encerrar al caballo, conduce a un juego de doble filo como 6 ... c6 7 c3 lt:JbS 8 .tg2 cxdS 9 exdS lt:J c7 10 lt:J e2 lt:J f6 1 1 0-0 0-0 12 c4 bS ! , Raetsky-Sakaev, San Petersbur go 1999. Las blancas deberían optar por la más precisa 4 lt:Jge2!. Después de 4 tt:Jf6 5 g3, consiguen la deseada posición de la Pire. Si las negras insisten en jugar 4 ... lt:J c6, las blancas ganan espacio con 5 dS ! lt:JeS 6 f4 y .te3/lt:J d4 les da una posición mucho mejor que la que normalmente obtienen en la variante g2-g3. Las lmeas con i.c4 cuentan una histo ria similar. En la Pire (1 e4 d6 2 d4 lt:J f6 ••• Esto evita algunas lmeas marginales, como 4 lt:Jc3 .tg4, ó 4 ... a6. Por el contra rio, 4 � e2 .t g4 5 h3 .t xf3 6 ..t xf3 lt:J c6 7 c3 e5 8 d x eS es favorable a los alfiles blancos. Al diferir lt:J c3, las blancas tam bién disuaden a su rival de jugar ... a6/... b5, porque no hay un caballo atacable con el avance ... b4. Además de la transición Moderna/Pire, las negras también pueden �ntentar la transición Moderna/Dragón, intercalan- 94 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ do . . . c5 . Por ej emplo: 1 e4 g6 2 d4 ..t g7 3 tt:l c3 y 3 . . . c5, que busca un Dragón Acelerado ( 4 tt:lf3 cxd4 5 ttJ xd4 tt:l c6) , sin tener que preocuparse por la Formación Maróczy. En la práctica, han tenido éxito en un tercio de las ocasiones, porque los jugado res 1 e4 normalmente evitan la Benoni Schmid, 4 d5, y tienen dudas acerca de 4 dxc5 ! ? . DEFENSA MODERNA, 3 ... c6 Las negras deberían transponer con 4 d6! 5 ii. e2 tt:lf6 a una línea principal de la agudas de la Pire, basadas en f2-f2 y/o ..tgS . El test más duro para 3 ... c6 es 4 f4. En tonces, 4 ... d6 5 tt:lf3 tt:lf6? es una mala Pire, como antes se ha dicho, y 5 ... �g4 es una Moderna un tanto dudosa. Las negras suelen preferir 4 ... dS, buscando una Va riante Gurgenidze. Hay varias rutas hacia una formación Gurgenidze, entre ellas 1 e4 g6 2 d4 ii.g7 3 tt:lc3 c6 4 f4 'iVb6!? 5 tt:lf3 d5 y ahora 6 e5!, puesto que 6 exdS ii.g4 ! aseguraría a las negras una buena compensación por el peón entregado. ¿Cuál es la mejor ruta hacia esta for mación? Lo único que parece cierto es que las negras deberían evitar 1 e4 c6 2 d4 dS 3 tt:lc3 g6, si quieren entrar realmente en una Gurgenidze. Las blancas tienen dema siadas buenas alternativas a 4 eS y 5 f4, co mo 3 cxdS y 3 eS. Observe que las blancas pueden disua dir a su rival de una Gurgenidze, después de 1 e4 g6 2 d4 �g7, mediante 3 f4. (Ver diagrama 166.) Pire, que normalmente se plantea en el or den 1 e4 d6 2 d4 tt:lf6 3 tt:lc3 g6 4 tt:lf3 � g7 5 �e2 0-0 6 0-0 c6 y se consideraba perfec tamente equilibrada. Gracias al orden 3 ... c6, las negras han eludido las líneas más Ahora 3 c6 4 tt:lf3 d5 5 e5. A diferen cia de la Gurgenidze normal (en la que el caballo está situado en c3), las blancas pueden aquí reforzar el centro con c2-c3. Cuando las negras juegan ... c6 antes de ... d6, crean problemas a las blancas, que después de 1 e4 g6 2 d4 ii. g7 3 tt:lc3 d6, du dan entre una jugada del alfil dama o un fianchetto de alfil rey. Por ejemplo: 4 � gS es razonable después de 3 . . . d6, pero des pués de 3 . . . c6 es un dudoso gambito, 4 �gS �b6! . E n caso d e 3 c 6 4 g 3 provoca 4 d5! , cuando el alfil blanco se estrella contra un muro. Por ejemplo : 5 exdS cxdS 6 .i g2 tt:l f6 7 tt:l ge2 0-0 8 0-0 tt:l c6 9 h3 b6 10 ii. gS e6 y . . . ii. a6 , como en la partida Ambrus-Eliseev, San Petersbur go 2002. Pero ... dS y ... �b6 no son las únicas ideas subyacentes en 3 ... c6. Las blancas deben tener cuidado para no caer en una Pire con la que no están familirizadas, si las negras siguen con ... d6 y ... tt:lf6. Por ejem plo: 4 tt:lf3. (Ver diagrama 165.) ••• ••• ..• ..• APERTU RAS SEMIABIERTAS Y en caso de 3 . . . d6 4 tll f3 , las blancas tie nen una prometedora Pire. "Después de 3 f4, me sentí como un hombre roto", dijo en una ocasión Julian Hodgson al enfrentarse a dicha jugada. No obstante, las negras tienen una bue na respuesta: 3 ... c5!, que aquí da resulta do porque 4 c3? no refuerza el centro eficazmente (4 ... cxd4 5 cxd4 '/:!Vb6 ! ) . DEFENSA PIRC El orden estándar de la Pire es 1 e4 d6 2 d4 tll f6. Como el peón e está atacado, las blancas están prácticamente limitadas a 3 �d3, 3 tll d2, 3 f3 o la línea principal, 3 tll c3. Las dos primeras jugadas tratan de al canzar el tranquilo sistema de Efim Geller en la Defensa Moderna (1 e4 g6 2 d4 �g7 3 c3 d6 4 tll f3 y �d3/tll bd2). Si lo consi guen, habrán logrado una pequeña victo ria moral, pues los jugadores de la Pire a menudo se sienten incómodos en las lí neas de la Moderna. A 3 �d3, las negras pueden evitar el sistema Geller, con 3 e5. Después de 4 c3, 4 d5!? es la forma activa de obstacu lizar el plan de las blancas, mientras que la forma sólida es 4 ... tll c6 5 tll f3 . ••• ••• 95 ¿Qué bando está aquí más cómodo? El jugador Pire amante de la táctica aguda, puede no gustarle defenderse en una seudo-Ruy López, con 5 ... � e7 6 h3 0-0 7 tll bd2. Pero las blancas pueden encon trarse, después de 5 ... i.g4 6 d5 tll e7 7 c4, en una India Antigua, favorable, desde lue go, pero que tal vez no convenga a un ju gador de 1 e4. Las negras también pueden responder a 3 �d3 ó 3 tll d2 con una Philidor, me diante ... tll b d7, como en la línea 3 tll d2 e5 4 c3 i.. e7 5 tll gf3 tll bd7. El esquema blan co es tan pasivo que su ventaja normal mente desaparece hacia la jugada 12. Por ej emplo: 6 i.. e 2 0-0 7 0-0 c6 8 � el '/:!Vc7 9 .tfl l:! e8 10 '/:!Vc2 .tf8 1 1 b4 d5 ! , y las ne gras pronto quedaron mejor (12 dxe5 tll xe5 13 tll xe5 '/:!Vxe5 14 tll f3 '/:!Vh5 15 e5 i.. f5), Rublevsky-Azmajparashvili, Inter net 2004. Con 3 f3, las blancas indican que de sean jugar una India de Rey, Ataque Samisch. Un ejemplo de lo que puede su ceder a un fuerte GM que le gusta la Pire, con negras, pero no la India de Rey, lo te nemos en la partida A. Rodríguez-Kuz min, Minsk 1982: 3 ... g6 4 c4! i.. g7 5 tll c3 tll c6 6 tll ge2 0-0 7 �e3 a6 8 tll cl e5 9 d5 tll d4 10 tll b3 c5? ! 1 1 dxc6 bxc6 12 tll xd4 96 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJE D R EZ exd4 13 .txd4 : b8 14 'iYd2 'iVaS? lS l:l c l:t d8 1 6 .te2 .te6 1 7 0-0 'iYb4 1 8 b3, y las blancas ganaron. Las negras pueden tratar de evitar ese destino, con 3 ... e5. De esta forma están proponiendo a las blancas un final, con una ventaja minúscula, 4 dxeS dxeS S 'iVxd8+, pero 4 llJe2!, seguido de S c4 y 6 llJbc3 conduce igualmente al Samisch. Si las blancas juegan la convencional 3 llJc3, después de 1 e4 d6 2 d4 llJ f6 , las ne gras tienen una alternativa a 3 ... g6, en 3 c6, un sistema elaborado por el maestro de Omsk, Anatoli Ufimtsev. ... g6? ! S llJf3), ni la Philidor (4 ... llJbd7,? ! S llJf3) son lo bastante activas. Ufimtsev prefería 4 �a5!, que disfrutó de cierta popularidad en los años ochenta, pero que sigue siendo un tanto sospechosa. El punto de partida de la mayoría de las defensas Pire es 3 llJc3 g6. Las negras buscan la ocasión de atacar el centro con ... cS. Por ejemplo: 1 e4 d6 2 d4 tLlf6 3 lLl c3 g6 4 tLlf3 .tg7 5 ..te2 c5. ••• •.• Las negras esperan. Después de 4 llJf3 o 4 g3 , pueden plantear una versión tenue de la Pire, con 4 ... g6. Pero si las blancas juegan 4 .tgS, entonces 4 llJ bd7 y S ... eS/ ... il.e7 ! es una buena Philidor, porque el alfil dama blanco está mal situado. En caso de S f4 'iVaS 6 'iVd2 bS ! , las ne gras obtienen un contrajuego más rápido que en una Pire normal, porque no han gastado tiempos en ... g6/ ... .tg7. Por ejem plo: 7 .td3 tLlb6 8 llJf3 b4 9 tLldl dS ! 10 eS llJe4, como en la partida Wells-Hodgson, Edimburgo 1989. La verdadera prueba para el orden de Ufimtsev es 4 f4!. En tal caso, ni la Pire (4 ••• Después d e 6 0-0 c x d4 7 lLl xd4 0-0, han transpuesto a una Dragón Clásica. Si 6 d5 0-0, es una Benoni Schmid, pero una Schmid en la que las blancas se han visto privadas de la útil jugada ..tbS+ ! . L a j ustificación táctica e s 6 dxc5 '1Wa5!, con buen juego. Esto explica por qué S . . . cS es mejor que S . .. 0-0 6 0-0 cS 7 dxcS dxcS, que se considera favorable a las blancas, después de 8 'it'xd8 y 9 .te3. La línea más peligrosa de la Pire es 4 f4 y la continuación habitual en tal caso es 4 �g7 5 llJf3 0-0 6 .td3. Las negras pueden tratar de evitarlo con s . . . es 6 dxcS 'iVaS y 7 ... 'ir'xcS , ya que 7 exd6? permite un fuerte 7 ... llJ xe4. Pero las blancas pueden alterar el orden, con 4 f4 �g7 5 .td3! ? ... APERTU RAS SEMIABIERTAS Esto evita 5 ... c5 6 dxcS 'i!i'aS, porque e4 ya está protegido (7 cxd6 ! ) . Tampoco es bueno 6 ... dxcS 7 eS (7 ... ltJdS? 8 AbS+ ). Si, en cambio, las negras juegan 5 ... 0-0, las blancas transponen a la línea principal, con 6 ltJ f3 ! . El inconveniente puede estar en las opciones extra de que disfrutan las ne gras tras S ..td3, como 5 ... ltJc6 6 d5 l2ib4 o 6 ltJf3 �g4. Pero no ha habido mucha experiencia práctica con estas líneas para que podamos pronunciarnos sobre las mis mas. Otro refinamiento, esta vez por parte de las negras, se produce con 4 f4 ..t g 7 5 l2it3 ltJa6!?. Parece una oferta de trans posición, después de 6 Ad3 0-0, a una va riante que discurre así: 4 f4 Ag7 S tt::l f3 0-0 6 .td3 tt::l a6, y se considera favorable a las blancas tras 7 0-0 cS 8 dS y f4-fS. Pero las negras disponen de la opción adicional 6 Ad3 c5!? (Ver diagrama 171 .) La idea es 7 d5 �g4 8 0-0 tt::l d7, o bien 7 ... 'i!i'c7 y ... c4, cuando su contrajuego es más rápido de lo habitual. Por ejemplo: 7 d5 'i!i'c7 8 'i!i'e2 0-0 9 a3 e6! 10 dxe6 Axe6, Bareev-Christiansen, Biel 1991 , partida que siguió con 11 .tc4 l:. ae8 12 0-0 Axc4 13 'i!i'xc6 'i!i'c6! 14 eS ltJg4, con buen juego. 97 Las únicas pegas de S . . . tt::l a6 son 6 eS y 6 �c4 0-0 7 eS. Pero, una vez más, la expe riencia con estas jugadas es escasa. DEFENSA CARO-KANN La Caro-Kann contiene trampas de trans posición incluso después de la supertran quila 1 e4 c6 2 d3. Si el juego continúa con 2 ... d5 3 tt::l d2 ltJd7 4 tt::l gf3. Aprendimos de una famosa partida Smyslov-Tal, que 4 ... e5? fallaba por 5 d4!, que es favorable a las blancas. También po demos ver que 4 ... tt::l gf6 5 e5! es una De fensa Francesa mejor de lo habitual (S ... tt::l g4 6 d4 e6 7 tt::l b3). 98 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ Si las negras preparan ... ll:Jgf6 con 4 'Wic7, las blancas juegan 5 exdS! cxdS 6 d4, con una forma favorable de la viej a Va riante del Cambio en la Caro-Kann. Por ejemplo: 6 ... e6 7 .td3 ll:Je7 8 0-0 g6 9 l:t el �g7 10 ll:Jfl ll:Jc6 1 1 c3 0-0 12 .tgS, y la partida Tiviakov-Dreev, Gotemburgo 2005, continuó con 12 ... e5 13 ll:Je3 ! lbb6 14 dxe5 lb xe5 15 .tf4 lb xf3+ 16 'Wixf3 'Wic617 lbc2 y ll:Jd4, con clara superioridad. El camino más seguro hacia la igual dad, después de 2 d3 , es 2 ... dS 3 lb d2 eS 4 ll:Jgf3 �d6! (no 4 ... ll:Jd7? 5 d4! , que trans pone a la partida Tal-Smyslov) . Entonces, 5 d4 se parece a una Francesa Tarrasch, después de 5 .. exd4! 6 exdS cxdS. ••• mejor para las negras de lo usual, porque no es posible 7 .tc4. Sin embargo, hay una razón de mayor peso para jugar 3 ll:Jd2. Las blancas pue den responder a 3 ... g6 con 4 c3, como de mostró Anatoli Karpov en una partida de 1990 contra Deep Thought, que siguió con 4 ... .tg7 5 eS! f6 6 f4, con ventaja blanca. El inconveniente de 3 ll:Jd2 es que el peón d no está protegido, después de 3 ... 'Wib6 . . Pero las negras tienen un tiempo ( ... .td6) por delante de la versión de la Ta rrasch, 1 e4 e6 2 d4 d5 3 ll:Jd2 c5 4 exd5 exd5 5 lbgf3 cxd4, y deberían poder igua lar. A menudo verá que los grandes maes tros juegan 1 e4 c6 2 d4 dS 3 ll:Jd2 para transponer a las líneas principales, después de 3 . . . dxe4 4 ll:J xe4. Este orden descarta la oscura continuación 3 lbc3 b5, que pue de conducir a una versión de la Caro Kann con ... exf6, después de 4 a3 dxe4 5 lb xe4 lbf6 6 lb xf6+ exf6, que podría ser Entonces, 4 lbgf3 .tg4 facilita conside rablemente el juego de las negras. Las blancas deberían jugar aquí 4 c3, y después de 4 ... dxe4 5 lbxe4 .tfS 6 ll:Jg3 .tg6, se llega a una línea principal de la Caro Kann, pero con las jugadas añadidas ... 'Wib6 y c2-c3. Esto dificulta que las blan cas desarrollen su alfil dama sin dejar col gado el peón de b2. Sin embargo, 7 h4 h6 8 ll:Jh3 puede hacer que c2-c3 resulte más útil que . . . 'Wib6. Por ej emplo: 8 . . . ll:J d7 9 lbf4 �h7 10 .tc4 e6 1 1 'Wie2, Lanc-Pe dersen, Trnava 1985. CARO-KANN, DOS CABALLOS El orden 1 e4 c6 2 ll:Jc3 d5 3 ll:Jf3 transpone a las líneas principales (3 d4), después de 3 APERTURAS SEMIABI E RTAS .. : dxe4 4 lll xe4 lll d7 S d4, o bien 4 ... tll f6 S tll xf6+ y 6 d4. Sin embargo, hay dos trampas para el j ugador imprudente. Una de ellas es muy conocida, 3 dx e4 4 lll xe4 Af5 5 lll g3 �g6?, en cuyo caso las blancas explotan su jugada extra de caba llo con 6 h4 h6 7 lll e5! � h 7 8 'if h5 g6 9 � c4. La otra se plantea con 4 tll d7 5 �c4 lll gf6 6 lll e g5 e6 7 'ife2, y no se cono ció hasta 19S2, en gran parte debido a que la jugada de Aaron Nimzovich, 4 ... lll d 7, no se jugaba mucho antes de esa fecha. .•. 99 mantener libre la casilla f6. Por ejemplo: 6 d3 lll d7 7 �d2 �es 8 'i!Vg3 'i!Vf6 ! , Cherni shov-Lastin, Voronezh 2006. La clave principal de 5 ... e6 se pone de manifiesto tras 6 d4 lll f6! ... Los libros solían descartar esta jugada, citando una partida de 19Sl que siguió con 7 �d3 �e7 8 eS lll fd7 9 'i!Vg3, con un ata que fácil. Pero las negras pueden mejorar su j uego con 7 dxe4! 8 lll xe4 lll xe4 9 'if x e4 lll d7. Por ej emplo: 1 0 c3 lll f6 11 'i!Ve2 'i!VdS iguala tras 12 0-0 �d6 13 l:t el 0-0 14 �c4 'i!VaS lS �d2 l:tfe8 16 l:t adl .l:!. ad8 17 �el 'i!VhS ! , Krai-Kamsky, Cam peonato de EEUU 2004. Si las blancas aspiran a más, después de S ... e6 6 d4 tll f6, deberían probar jugadas tipo Francesa, como 7 eS ó 7 �gS, pero con su alfil dama cambiado, sería una bue na Francesa para las negras. Entretanto, 4 �h5 (después de 1 e4 c6 2 lll c3 dS 3 lll f3 �g4 4 h3) ha sido pro fundamente analizado, empezando por S g4 �g6 6 exd5 cxd5 7 �bS+. Cuando al guien juega 4 ... �h5, normalmente se está jactando de que su memoria es mejor que la de usted. La higiene mental alternativa es 5 d4 ... Si se hubiese jugado d2-d4 (en lugar de lll f3 ), las negras tendrían un juego sólido con 7 lll b6. Pero aquí perderían un peón, por 8 lll e5!, y las negras deben acep tar una ligera inferioridad, con 7 ... lll d S. ... La línea principal de la Variante Dos Caballos es 1 e4 c6 2 lll c3 d5 3 lll f3 .ig4, y ahora 4 h3 �xf3 5 'i!Vxf3. En los años cin cuenta, las negras jugaban S ... e6 hasta que descubrieron que 6 d4 dxe4 7 lll xe4! era un gambito correcto. Por ejemplo: 7 ... �xd4 8 �d3 tll f6 9 c3 'ifd8 10 0-0 y l::t dl . En consecuencia, adoptaron S ... lll f6, por que 6 d4 es ahora incorrecto: 6 . . . dxe4 7 lll xe4 'ifxd4 ! . Pero Karpov h a jugado exclusivamen te S ... e6, entre cuyas ventajas se cuenta el ... e6 6 Ad3. SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ 1 00 La idea de las blancas es que 6 dxe4 7 l2J xe4 i.xf3 8 ¡fxf3 ¡f xd4 9 0-0 es una versión superior del gambito 4 . . . i. xf3 5 ¡f xf3 e6 6 d4. Las negras probablemente deberían declinar la oferta, con 6 l2Jf6, y después de 7 e5 l2Jfd7 8 g4 �g6 9 �xg6 y 10 l2Je2, las posibilidades son mutuas (Short-Jalif man, Mérida 2001). ••• •.• ATAQUE PANOV La variante de Vassili Panov, 1 e4 c6 2 d4 d5 3 exd5 cxd5 4 c4, se convierte en un Gambito de Dama Aceptado, en caso de ... dxc4. Pero una versión ligeramente infe rior, y las negras deberían postergar . . . dxc4, aun a costa de que las blancas creen una favorable cuña de peones, con el avance c4-c5. Una posibilidad es 4 ••• l2Jc6?! permite un molesto l2Jc3. Por ejemplo: 6 ... e5 7 l2J c3 �b4 8 �d2 �xc3 9 � xc3, con ventaja. Más habitual es 4 l2Jf6 5 l2J c3, y en tal caso una línea clave comienza por 5 l2Jc6 6 � g5 e6. Ahora, 7 c5 � e7 8 .t b5 0-0 9 �xc6! bxc6 10 l2Jf3 amenaza 'i!Va4/l2Jf3-e5 y concede a las blancas una versión ideal de la formación Panov. Por ejemplo: 10 ... l2Jd7 1 1 Ji.xe7 ¡fxe7 12 0-0 e5 13 l2J xe5 l2J xe5 14 dxe5 ¡vxe5 15 l:t el 'iYf6 16 ¡fd2 l:t b8 17 b4 (18 ... f! xb4? 19 l2J xd5), Rath Brinck-Claussen, Vejle 1974. Desde que el Ataque Panov empezó a atentar contra la salud de la Caro-Kann, hace más de setenta años, las negras han encontrado diversas formas de evitarlo, como 6 ... ¡fa5, 6 ... �e6 y 6 ... e6 7 c5 �e7 8 �b5 .td7 ! . Por esta razón, las blancas suelen preferir 6 l2Jf3 a 6 .tg5. (Ver diagrama 179.) ••• ••• (Ver diagrama 178.) Si ahora 6 e6?, 7 c5! es bueno para sus intereses. Por ejemplo: 7 ... �e7 8 �b5 0-0 9 0-0 y 9 ... l2Je4 10 .txc6 l2J xc3 11 bxc3 bxc6 12 'iYa4. Pero 6 ... .tg4 logra una fácil igualdad, después de 7 Ae2? e6 8 c5 l2Je4. En lugar de 7 �e2?, la mejor respuesta de las blancas a 6 � g4 es 7 cxd5 l2J xd5 8 ¡fb3, que conduce a un final algo supe.•. Ahora, 5 l2Jf3 �g4 6 l2Jc3 l2Jf6 transpo ne a una línea principal del Ataque Panov. Pero el inconveniente es 5 cxd5! ¡f xd5 6 l2Jf3. Resulta que hemos aparcado en una Siciliana Alapin (1 e4 c5 2 c3 d5 3 exd5 ¡fxd5 4 d4 l2Jc6 5 l2Jf3 cxd4? ! 6 cxd4) en la que el temprano cambio de los peones e ••• APERTU RAS SEMIAB I E RTAS 1 01 Es mejor 6 � e7! , y ahora puede se guir 7 ll:lf3 0-0. Si 8 �d3, ha llegado el mo mento de jugar 8 ... dxc4! 9 .txc4 a6, porque esto da lugar a un buen Gambito de Dama Aceptado para las negras. Por ejemplo: 10 0-0 b5 1 1 .tb3 �b7 12 l:t el ll:lc6 13 a3 l:t c8, o bien 1 1 �d3 �b7 12 ¡ve2 ll:lc6 13 l:t adl ll:lb4 14 Abl ll:lbd5. En lugar de 6 �g5, las blancas pueden intentar 6 c5 �e7 7 �b5+. Pero si el juga dor con negras está alerta, verá que 7 ... ll:lc6? conduce a la posición con 8 ll:lf3, y optará por 7 ... �d7 ! 8 j:,xd7+ ¡vxd7 9 ll:lf3 ll:lc6. Además de 6 Ag5 ó 6 c5, las blancas pueden considerar el cambio de peones en d5. Pero la inmediata 6 cxd5 ll:l xd5 7 ,td3 .tb4! ha obtenido buenos resultados prácticos para las negras. La alternativa 6 ll:lf3 tiene sentido, ya que 6 ... ll:lc6 de nuevo es impreciso (7 c5 ! ) y 6 ... �b4 7 Ad3 dxc4 8 j:,xc4 concede a las blancas un buen Gambito de Dama Aceptado que, en realidad, es una Nim zoindia. Pero la clave principal es que contra 6 ••• rior, que se hizo famoso a raíz de la victo ria de Bobby Fischer sobre Max Euwe (8 ... .txf3 9 gxf3 e6 10 ¡vxb7 ll:l xd4 1 1 �b5+ ll:l xb5 12 ¡vc6+ ! @e7 13 ¡vxb5 ll:l xc3 14 bxc3 ¡vds ó 14 ... ¡vd7). É sta es una lmea importante, porque las blancas pueden plantearla en diversos órdenes y porque la inferioridad de las ne gras es tan ligera que éstas a menudo cola boran. Otra estrategia de las negras es enrocar rápidamente tras 4 c4 ll:lf6 5 ll:lc3 y 5 ... e6. Ahora, a 6 .tg5. Las blancas pueden transponer, 6 ll:lc6 7 c5, para llegar a la posición 4 c4 ll:l f6 .•• 5 ll:lc3 ll:lc6 antes mencionada. • .. i.. e7 .. .las blancas pueden jugar 7 cxd5! ll:l xd5, sin tener que defender c3, en comparación con 6 cxd5 ll:l xd5 7 .td3 .tb4. Ahora, con SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJEDREZ 1 02 PANOV ACELERADO 8 .td3 u 8 .tc4 consiguen una ligera ven taja. Si las negras retoman en d5 de peón (7 cxd5 exd5), quedan con la peor parte de una posición simétrica, después de 8 .tb5+! .td7 (8 . . tbc6 9 tb e5) 9 'ifb3 tb c6 10 0-0, o bien 9 .t xb5 10 � xb5+ �d7 . ... 11 tbe5. Cuando las blancas no juegan 4 c4, después de 1 e4 c6 2 d4 d5 3 exd5 cxd5, las dificultades de las negras se centran, sobre todo, en el problema de su alfil da ma. Las blancas juegan, normalmente, 4 �d3, que impide ... �f5 y hace que ... �g4 sea problemático. Después de 4 . . . tb c6 5 c3, el primer jugador tiene una buena posición. Las negras pueden ver la luz si su rival juega 4 c3. Con 2 c4, las blancas tratan de plantear un Ataque Panov en el que las negras no pue den mantener un peón en d5, ni tampoco alcanzar la relativa seguridad del final Fis cher-Euwe. En lugar de ello, las negras a menudo asumen un medio juego ligeramente peor, con peón d aislado, como en el caso de 2 •.• d5 3 exd5 cxd5 4 cxd5! tbf6 5 tbc3 tb xd5. Ahora, 6 .tc4 ttJb6 7 �b3 tbc6 8 ttJf3 6 ttJ f3 ttJ c6 7 .t b5 e6 8 0-0 .t e7 9 d4 son líneas prometeras para las blan cas, que gracias a este orden de jugadas, han evitado 6 d4 tbc6 7 tbf3 �g4 ! , la va riante del final. Las blancas obtienen también opcio nes adicionales, relacionadas con molestos j aques, 5 .tb5+ y 5 'ii' a4+, con posiciones que la teoría considera difíciles para las negras. Las negras pueden evitar estos proble mas respondiendo a 2 c4 d5 3 exd5 con 3 ttJf6!. Ahora, 4 dxc6 tb xc6 es un gambito correcto, más conocido por la Defensa Es candinava ( 1 e4 d5 2 exd5 tb f6 3 c4 c6 4 dxc6 tb xc6, y ahora 5 d3 e5 6 tb c3 .tf5 7 ttJf3 �b4 8 .te2 e4! ) . y 9 d4, o Esta jugada parece negligente, debido a 4 .tf5. Pero la idea (o la trampa) se pone de relieve con 5 �b3!, atacando b7 y d5. Después de 5 . . . b6? 6 .tb5+ ó 5 ... �d7 6 tb f3 tb c6 7 �b5 ! y tb e5 , las negras están claramente peor. Pero si se mantie nen alerta, comprenderán que tras 4 tb c6 las blancas no tienen nada mejor que 5 .td3, transponiendo a la línea prin cipal. ••. .•• ••. APE;RTU RAS SEMIABIERTAS Si las blancas impiden 4 ... cxd5 con 4 'iVa4, las negras pueden ofrecer otro peón, 4 ... e6! 5 dxe6 �c5! 6 ext7+ @ xt7, o bien 6 lt::i f3 lt::i g4 7 d4 � x d4 8 lb xd4 'iV x d4 9 'iVc2 lt::i a6, como en la partida Hübner 1 03 bro de 1983 sobre la Defensa Francesa. Svetozar Gligoric, por su parte, escribió que la mej or respuesta a 3 0, c3 dxe4 4 0, xe4 0, d7 es 5 0,f3 0,gf6. Luther, Sauerbrücken 2002. Es más preciso 3 cxd5! En tal caso, 3 ... lt::i f6 4 dxc6 lt::i xc6 es menos correcto ( 5 0, c3 e5 6 0, f3 !Ji. c5 7 !1i.b5). Las negras pueden evitar todo esto res pondiendo a 2 c4 con 2 ... e5, con lo que asumen que un jugador de 1 e4 no está psi cológicamente preparado para jugar una India Antigua (3 0,f3 d6 4 d4 0,bd7). DEFENSA FRANCESA Las variantes de la Defensa Francesa (1 e4 e6) en que se producen más transposicio nes son la Rubinstein (2 d4 d5 3 0,c3 dxe4 o 3 0, d2 dx e4) y la Bum (3 0, c3 0, f6 4 !1i.g5 dxe4), algo que a las blancas pare cía no importarles, porque se asumía que quedan mejor en cualquier caso. "La práctica ha demostrado que las po sibilidades de las blancas son algo mejores y ahora esta defensa es rara", dijo Alexei Suetin de la Variante Rubinstein en su li- En tal caso, "6 !1i.g5 ! " consigue una buena Burn, dijo, puesto que 6 . . . c5? per mite 7 dxc5 0, xc5? 8 'iVxd8+ y 9 0, xf6. Pero hoy día muchos grandes maestros desconfían de 6 !1i.g5, debido a que tanto 6 . . . h6 como 6 . . !Ji. e7 7 0, xf6+ 0, xf6 8 !1i.d3 c5 parecen igualar. De modo que las blancas comenzaron a descartar 6 !1i.g5 en la Rubinstein, y las negras descubrieron que la Burn era la forma de inducir a las blancas a entrar en una Rubinstein con !1i.g5 . Esa i d e a se plantea a s í : 3 0, c3 0, f6 4 !1i.g5 dxe4 5 0, xe4 0,bd7, de modo que 6 0,f3 transpone a la posición del diagrama 185. No es mejor 6 ltJ xf6+ 0, xf6 7 0,f3 h6! (8 !1i.d2 c5 ! u 8 !1i.h4 !1i.e7 9 �d3 c5 10 'iVe2 'iVa5+ !). Para evitar la Bum, las blancas pue den j ugar líneas muy diferentes, como 3 0, d2 ó 3 0, c3 0, f6 4 e5. Pero las negras descubrieron que 3 . . . !1i. e7 hace más fuerte a . . . dxe4 ! . Por ej emplo: 3 0, d2 ( ó 3 0, c3) 3 ... !1i. e7 4 !1i. d3 dxe4 5 0, xe4 . 0, f6. 1 04 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ Las negras pueden retomar de alfil en f6, logrando así una excelente Rubinstein. Por ejemplo: 6 tt'i xf6+ .t xf6 7 tt'i f3 tt'i c6! 8 c3 e5. O bien 6 tt'if3 tt'ibd7 7 'ii' e2 tt'i xe4 8 Axe4 c5! , a lo que puede seguir 9 0-0 cxd4 10 l:t dl tt'ic5 1 1 ll'i xd4 tt'i xe4 12 'ifxe4 0-0 (Becerra-Kaminski, Internet 2005). Las negras consiguieron alcanzar una posición que también podría producirse por el orden 3 tt'i c3 dxe4 4 tt'i xe4 tt'i d7 5 tt'if3 tt'igf6 6 i.d3 il.. e 7, pero sólo si las blancas descartan 6 tt'i xf6+ ! . FRANCESA STEINITZ La Variante Steinitz ha pasado a ser una forma popular de transponer a una aguda línea de la Variante Tarrasch: 3 tt'i c3 tt'i f6 4 e5 tt'ifd7 5 tt'ice2!?, y ahora 5 c5 6 c3 tt'ic6 7 f4 'ii'b5 8 tt'if3. (Ver diagrama 187.) ... Esta posición es la misma que la que se produce después de 3 tt'id2 tt'if6 4 e5 tt'ifd7 5 c3 c5 6 f4 tt'ic6 7 tt'idf3 'ifb6, una vez que las blancas juegan tt'ie2. De esta forma, las blancas eluden otras líneas de la Tarrasch. Cuando Vishy Anand quiso llegar a la posición del dia- grama 187 en la fase final del Campeona to Mundial PIDE 2000, sabía que si opta ba por 3 tt'i d2, su oponente, Alexei Shirov, no colaboraría jugando 3 ... tt'if6, porque prefería otras j ugadas. De modo que Anand optó por 3 tt'ic3 ! , llegando a la po sición de la Tarrasch que quería, y acabó ganando. Una situación muy diferente surge des pués de 3 tt'ic3 tt'if6 4 e5 tt'ifd7 5 tt'i f3 . Las blancas están listas para liquidar su cen tro y obtener posibilidades tácticas, como 5 c5 6 dxc5 tt'i c6 7 -tf4 .t xc5 8 il.. d3 y 8 . . . 0-0? 9 il.. x h7+. Es efectiva una Francesa más abierta como, por ej emplo, 8 . . . f6 9 exf6 ttJ xf6 10 'ii'e2 0-0 1 1 0-0-0 a6 12 tt'ie5 tt'ib4 13 il..g5 b5 14 a3 tt'i xd3+ 15 l:t xd3 'ifc7 16 f4, como en la partida Berg-Akesson, Gotemburgo 2006. Si a las blancas les gusta esta posición, pueden alcanzarla esquivando la Rubins tein y, quizá, también la Winawer, comen zando por 1 e4 e6 2 tt'if3!?. Los francófilos considerarán esta jugada con un cierto desdén y aspirarán a algo más que 2 d5 3 tt'ic3 dxe4 . sólo para constatar que que dan un poco peor después de 3 d4 4 tt'ie2 c5 5 c3. De modo que jugarán 3 tt'if6 y después de 4 e5 tt'ifd7 5 d4 llevarán a las ••• , ••• . . •.• •.• APERTU RAS SEMIABIERTAS blancas a dónde querían. Y en caso de la natural 3 c5 .•• ... 4 exd5 exd5 5 d4! caza a las negras en una de las ideas menores de Frank Mar shall (1 e4 e6 2 d4 d5 3 lbc3 c5 y 4 exd5 exd5 5 lbf3). ¿Qué deberian hacer las negras des pués de 2 lbf3 d5 3 lbc3 , si no les gusta 3 ... lbf6? En tal caso, su mejor apuesta podría ser 3 �b4. No está claro que las blancas deban transponer a una Winawer, con 4 e5 lb e7 5 a3 .txc3 6 bxc3 y 7 d4, o aspirar a más con 6 dxc3!? . Por ejemplo: 6 . . . c5 7 h4 lb bc6 8 h5 h6 9 Af4 'f//c7 10 'f//d2, como en la partida Rogers-Tondivar, Hoogeveen 2006. ••• FRANCESA WINAWER Como se observó en la introducción, las negras pueden esquivar muchas de las lí neas raras en la Winawer (3 lbc3 Ab4), respondiendo a 4 e5 con 4 lb e7 5 a3 Axc3+ 6 bxc3 c5. El hecho de que la jugada 4 ... lb e7 plantee la necesidad de "algo en qué pen sar" a menudo provoca respuestas como 5 lb e2? c5 6 a3 Axc3+ 7 lb xc3?, favorable a las negras después de 7 ... cxd4 8 'f// x d4 ••• 1 05 lbbc6 9 'f//g4 0-0 10 'f//h5 d4! , Byrne-Uhl mann, Reykjavik 1968. En caso de 5 lbf3 .. .las negras pueden transponer (5 ... c5) a una Winawer normal. Pero también es atractivo 5 b6, ya que las blancas han de jado escapar su oportunidad de jugar 'f//g4, en comparación con 5 a3 � xc3+ 6 bxc3 b6 7 'f/Jg4 ! . Las posibilidades serían equiva lentes después de 5 ... b6 6 .td2 Axc3 ! ? 7 .txc3 �a6 8 Axa6 lb xa6 9 0-0 c5 (Bo kros-Rustemov, Kircheim 2006). La contrasutileza para replicar a 4 ... lbe7 es 5 .i.d3. Después de 5 c5 6 a3 .txc3+ 7 bxc3, las negras parecen tener una buena versión de una Winawer, en vis ta de que las blancas han desarrollado pre maturamente su alfil (7 ... lbbc6 8 lbf3 c4, o bien 7 ... c4 y ... �d7-a4). Pero las blancas mejoran su juego con 6 dxc5! lbbc6 7 lbf3, transponiendo a la va riante 4 ... c5 5 dxc5 que hizo famosa la partida Fine-Botvinnik, AVRO 1938. La compensación de las blancas sigue siendo importante después de 7 d4 8 a3 .,ta5 9 b4 lb xb4 10 axb4 .txb4, en vista de 11 0-0!, en lugar de la jugada de Fine, 1 1 �b5+. Esto es significativo porque hoy rara vez las blancas llegan a esa posición por la .•. ••• •.. 1 06 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJEDREZ vía de Fine, 4 eS cS S dxcS, dado que la teoría recomienda S ... 'l!Vc7 ! ? , o bien S ... lbc6 6 lbf3 d4! . La principal ventaja de 4 cS sobre 4 ... lbe7 es que concede a las negras una op ción adicional, la idea armenia 5 a3 AaS. Entonces, en lugar de la línea principal, 6 b4, el tahúr puede preferir 6 dxcS!?, que amenaza 7 b4 y transpone a una versión su perior de la línea de Fine, después de 6 ... d4 7 b4 dxc3 8 'l!Vg4 ! . Quizá l o mejor sea 6 � xc3+ 7 bxc3 lb e7. El resultado es una extraña posi ción, que podría producirse a través de una Winawer normal ( 1 e4 e6 2 d4 dS 3 lbc3 �b4 4 es cS s a3 �xc3+ 6 bxc3 lbe7 7 dxcS), si las blancas tuviesen un tiempo extra. .•. nishin empleó con éxito 7 .td3!?. Esto a menudo transpone a las demás líneas, pe ro por el momento conserva la posibilidad 'l!Vg4. Por ejemplo: 7 ... 0-0 8 W/g4, con lo que las blancas obtienen la posición 7 'l!Vg4 0-0 8 �d3, sin tener que ocuparse de las réplicas 7 ... W/c7 y 7 ... cxd4 a 7 W/g4. Por ejemplo: 7 �d3 lbbc6 8 W/g4 c4 9 �e2 lb fS 10 a4 'l!VaS 1 1 �d2 � d7 12 'l!VhS h6 13 �g4, como en la partida Bagheri-Api cella, Chartres 200S. ••• El principal inconveniente de 7 �d3 es 7 b6. ¿Por qué? Porque cuando las negras tratan de cambiar su alfil malo, con ... b6/ . . . �a6, la mejor forma que las blancas tienen de salir al paso es ..tbS+, como en la línea 7 lbf3 b6 8 �bS+! �d7 9 �d3 ! . Pero tras haber invertido un tiempo en 7 .td3 , hay pocas razones para responder a 7 . . . b6 con 8 ..t b S + � d7 9 .td3. ... ¿Pero es dxcS una buena jugada extra? Eso depende de posiciones como 8 W/g4 lbd7 9 lbf3 0-0 10 � d3 La temática 9 �c7 10 'l!Vxg7! 1:1 g8 11 'l!Vxh7 lb xeS es fa vorable a las blancas, después de 12 W/hS lb xf3+ 13 'l!Vxf3 �d7 14 �f4, Shamko vich-Gipslis, Campeonato de la URSS 1961. En la línea principal de la Winawer, 4 c5 5 a3 �xc3+ 6 bxc3 lbe7, las opciones son 7 lbf3, 7 a4 y 7 h4. Pero Oleg Roma. ... ... FRANCESA, TARRASCO En la Variante Tarrasch (3 lb d2) , las ne gras suelen utilizar la jugada de espera 3 ..te7. Después de 4 lbgf3 lbf6 5 eS lbfd7, las blancas no tienen nada mejor que 6 c3 c5 7 .td3 lb c6 8 0-0 W/b6. ... APERTU RAS SEMIABIERTAS 1 07 te eligen 5 f4 ó 5 �d3. Si prefieren esta úl tima, pueden diferir �d3 con 5 c3. Se ha transpuesto a una versión del gambito de Viktor Korchnoi (3 lbd2 lb f6 4 e5 lbfd7 5 �d3 c5 6 c3 lbc6 7 lb gf3 'iYb6 8 0-0), en la que las negras juegan 8 ... �e7, en lugar c;le capturar el peón. La jugada de alfil se consideraba dudo sa en un momento dado, pero ahora tiene la reputación de ser una alternativa válida. Por ej emplo: 9 dxc5 lb xc5 10 � c2 lb d7 11 l:I el "ifc7 U 'iWe2 g5 13 �a4 lbc5!, Ka banov-Kravstov, Tomsk 2003. En otras pa labras, 3 ... .te7 puede inducir a las blancas a plantear un gambito que nunca tuvieron la intención de jugar. Si a las blancas les gusta el gambito, pueden alcanzarlo por otros órdenes. Por ejemplo: 3 ... c5 parece excluirlo. Pero 4 lbgf3 lbf6 5 e5 lbfd7 6 c3 transpone. Si las negras quieren eludir el gambito, tienen otras líneas a su disposición, como 4 ... lb c6 y 4 .. cxd4. También es posible 3 ... lbc6 y 4 lbgf3 lbf6 5 e5 lb d7 6 �d3. Ahora es natural 6 . . . lb b4, y después de 7 � e2 c5 8 c3 lb c6 9 �d3 "ifb6 10 0-0, hemos vuelto a la posi ción del gambito, aunque esta vez las blan cas están mejor, con 9 0-0 cxd4 10 cxd4 "ifb6 lbb3. En la línea más aguda de la Tarrasch, 3 lbf6 4 e5 lbfd7, las blancas normalmen- Tanto con 5 c3 como con 5 �d3 se lle ga a la línea principal tras 5 ... c5. Sin em bargo, las negras tienen una estrategia alternativa, con 5 ... b6 y 6 ... �a6, a fin de cambiar su alfil malo. Esto hace que sea más preciso 5 c3, porque si las negras adoptan su plan B de cambio, las blancas tendrán un tiempo de ventaj a: 5 c3 b6 6 'iYg4 ( ó 6 lbh3) 6 ... �a6 7 �xa6, o bien 5 �d3 b6 6 c3 .ta6 7 �xa6. Después de 3 c5 , las principales cues tiones acerca del orden de jugadas giran en tomo a .tbS+ y el momento oportuno de exd5. Las negras han estado obtenien do buenos resultados impidiendo ese ja que. Por ejemplo: 4 exd5 exd5 5 lbgf3 a6. (Ver diagrama 194.) •.. . .•. También puede llegarse a esta posición con 4 lb gf3 a6 5 exd5 cxd5 y 3 ... a6 4 lbgf3 c5 5 exd5 cxd5. ¿Cuál es el mejor orden para las negras? El inconveniente del primer orden es que las blancas pueden dar jaque en la quinta jugada. El inconveniente de 3 ... a6 es 4 e5. Algunos jugadores franceses no re nuncian a la perspectiva de pasar a una Va- SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J U GADAS EN AJEDREZ 1 08 ro si las blancas consiguen su objetivo, la . respuesta más habitual es 6 �d6. ••• riante del Avance (4 ... c5 5 c3), en la que han jugado ... a6 en lugar de ... 'iWb6 ó ... ll:lc6, movinúentos habituales de tal variante. En el tercer orden, 3 ... c5 4 ll:lgf3 a6, las negras deben tener en cuenta 5 dxc5 Axc5 6 .td3, que concede a las blancas un boni to esquema, después de 7 0-0 y 8 a3/9 b4. De modo que depende de las negras evaluar los escenarios resultantes en los tres órdenes, y elegir el mejor de ellos pa ra sus intereses. Ahora bien, ¿cuán peligroso es el j a que? Una escuela de pensamiento dice que el cambio de alfiles de casillas blancas es bueno para el primer jugador, y que a 3 ... c5 4 exd5 exd5 5 .tb5+ debe contestar se 5 ... ll:l c6. Pero Lev Psajis insiste en que es bueno 5 ... Ad7, argumentando que el cambio de estos alfiles ayuda a las negras. Max Euwe está de acuerdo con esto, y di jo que 5 ... ll:lc6 6 ll:lgf3 era tan bueno pa ra las blancas que deberían inducir a su rival a entrar en esta posición, con 5 ll:l gf3, y si 5 ... ll:lc6, 6 �b5 ! . S i Euwe tiene razón acerca d e l a clava da, aún sería preferible otro orden para las blancas, 3 c5 4 ll:lgf3, a fin de responder a 4 ll:lc6 con 5 exd5 exd5 6 .tb5. El in conveniente es que concede a las negras opciones como 4 ... ll:lf6 5 exd5 ll:l xd5. Pe- Es inminente un cambio de peones, ya sea en c5 ó en d4. Dos líneas que a menu do transponen son 7 dxc5 .txc5 8 0-0 y 7 0-0 ll:l e7 8 dxc5. Mijail Botvinnik estimaba que el segundo orden era impreciso, debi do a que las negras pueden mejorar sobre 7 ... ll:le7, con 7 ... cxd4 ! . Entonces, 8 ll:lb3 ll:le7 9 ll:lbxd4 0-0, con juego igualado. Lo que ha sucedido es que se ha trans puesto a la línea 7 dxc5 .i. xc5 8 0-0 ll:l e7 9 ll:lb3 .td6 10 ll:lbd4 0-0. Pero en ese orden, las blancas tienen muchas más opciones, como 10 : el , 10 �g5 y 10 .t xc6+ bxc6 1 1 'iWd4. En cambio, el orden 7 0-0 cxd4! les priva de elección. FRANCESA, VARIANTE DEL AVANCE El esquema habitual de la Variante del Avance solía ser 3 e5 c5 4 c3 ll:lc6 5 ll:lf3 'iWb6 6 .td3 (Ver diagrama 196.) . .•• ••• A raíz de una partida de Howard Staunton (en 1841), se consideraba lo me jor 6 .td7. Pero se demostró que esto ••• APERTU RAS SEMIAB I E RTAS era inexacto en la celebrada victoria de Nimzovich sobre Georg Salwe, en Carls bad 1 91 1 , en la que siguió 7 dxcS! � x cS 8 0-0 y b2-b4, dificultando seriamente el desarrollo de las negras. Las negras pueden mejorar con 6 cxd4! 7 cxd4 �d7, en cuyo caso las blancas no tienen una defensa adecuada de d4, y el gambito 8 0-0 ltJ xd4 no está considerado del todo correcto. Hay dos posiciones básicas que han in fluido mucho sobre la teoría de 3 e5. Una de ellas es la de la partida Nimzovich-Sal we, y la otra, con 6 ... cxd4. Por ejemplo, puede usted ver 4 ... 'i!t'b6 en lugar de 4 ... lLJ c6, y luego 5 ltJf3 �d7. Las negras conservan la opción ... jLbS, para desembarazarse de su alfil malo. Las blancas disponen de dos extrañas, aunque posiblemente buenas respuestas, 6 �d3 �bS 7 �c2!? (7 ... ltJc6 8 .te3) y la diabó lica 7 dxcS �xcS 8 b4!?, basada en la ga nancia del alfil, tras 8 ... �xf2+ 9 'it>e2. Las negras pueden eludir ambas répli cas contestando a 6 �d3 con 6 ltJc6?, pero en tal caso 7 dxcS! lleva de nuevo a la partida Nimzovich-Salwe. También pue den tratar de arreglar las cosas con 6 ... cxd4 7 cxd4? ltJc6, alcanzando así una po sición agradable para su causa. Pero debi- 1 09 do a su retraso en ... ltJc6, las blancas pue den mejorar con 7 ltJ xd4!. Por ejemplo: 7 ... ltJe7 8 ltJd2 ltJbc6 9 lb xc6 y �e2/ltJf3, con una pequeña ventaja. A causa de 6 ... cxd4! , en el diagrama 196, 6 �e2 reemplazó a 6 ..td3. Ahora, la respuesta más habitual de las negras es 6 ... cxd4 7 cxd4 ltJ ge7, que no tienen mayores problemas en líneas como 8 lLJ c3 lLJ f5 9 ltJ a4 'i!t'a5+ 10 ..td2 ..tb4 11 ..tc3 b5 ! , u 8 b3 ltJfS 9 .tb2 �b4+. Es posible que la mejor tentativa de las blancas sea 8 ll'ia3 ltJfS 9 ll'ic2 �b4+ 10 @fl . Pero las negras pueden evitarla, si lle gan a esta posición: ••• ••• En este momento, 8 ltJa3 permite 8 ... ..txa3! 9 bxa3 ltJf5. Ahora bien, ¿cómo lle gan hasta aquí las negras? El problema con 6 �e2 lZJ h6 es 7 �xh6 ! . Las blancas pueden castigar 7 ... 'i!t'xb2? con 8 .te3 ! 'i!t'xal 9 'i!t'c2. Después de 9 ... cxd4, es ma lo 10 cxd4? , por 10 ... .tb4+ y la dama ne gra no puede ser encerrada. Pero 10 lZJ xd4! da a las blancas una gran ventaj a tras 1 0 . . . ltJ xd4 1 1 .txd4 �a3 1 2 �b5+ c;t>d8 13 0-0, ó 10 ... .ta3 11 ltJbS ! . Por consiguiente, e l orden apropiado es 6 ... cxd4 7 cxd4 lZJh6, alcanzando la posi ción del diagrama 197. Las blancas no de- 1 1O SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJEDREZ ben jugar 8 Axh6, porque transpondrían a la mala línea 10 cxd4. En lugar de ello, de ben entrar en una de las mediocres alter nativas 8 l2Jc3 u 8 b3. David Bronstein calificó a 5 A d7 de "inteligente jugada de espera", después de 3 e5 c5 4 c3 t2Jc6 5 l2Jf3. Las blancas deben declarar sus intenciones con 6 a3, 6 l2J a3 o una jugada de alfil. .•• Otro beneficio es que, al postergar . . . 'ii' b 6, las negras se aseguran de que d x c5 no tenga un carácter forzoso, que podría ser un problema en caso de 5 ... 'ii' b 6, porque 6 ... l2J ge7? permite 7 dxc5 ! 'ii' x c5 8 �d3, favorable a las blan cas. Pero en la posición del diagrama, 6 �e2 l2Jge7 7 d xc5 l2Jg6! es excelente para las negras, como también lo es 7 l2Ja3 cxd4 8 cxd4 l2Jf5 9 0-0 �xa3 10 bxa3 0-0 (Sax Dreev, Tilburg 1992). Si las blancas optan por 6 a3, que segu ramente es lo mejor, las negras se benefi cian de su orden de jugadas, porque b6 está libre para un caballo, y las líneas con 6 ... c4, como 7 l2Jbd2 l2Ja5 8 �e2 t2Je7 9 0-0 h6 10 %:l el l2Jc8 ! y . . l2Jb6, con perspectivas de crear una camisa de fuerza en el flanco de dama. Por último, si las blancas creen que con 5 ... �d7 no hay presión sobre d4, pueden optar por la natural 6 �d3. Pero entonces 6 cxd4 7 cxd4 'ii'b 6! les obliga, una vez más, a entrar en la mala posición 5 ... 'ii'b6 6 �d3 cxd4 ! . . La espera es gratificante después de 6 l2Ja3? cxd4 7 cxd4 .txa3! 8 bxa3 'ii'a5+, con ventaja. •.. 111 Capítulo 5 Aperturas de Peón Dama La mayoría de las partidas que empiezan con 1 d4 dS se convierten en Gambitos de Dama, tras la inmediata (o diferida) c2-c4. La razón por la que las blancas podrían di ferir esa agresión es impedir determinadas defensas contra 2 c4, y sopesar la opción de una apertura de Peón Dama, una vez que vean la respuesta de las negras en las jugadas inmediatas. Con 1 d4 d5 2 lbt3 privan a su rival de algunas líneas agudas, como el Contra gambito Albin, Eslavas marginales y el Gambito de Dama Aceptado con 1 d4 dS 2 c4 dxc4 3 lbf3 a6. Las negras pueden tra tar de transponer a esta última lmea, con 2 ... a6, esperando 3 c4 dxc4. Pero las blancas pueden convertir ... a6 en una pérdida de tiempo. Por ej emplo: 3 .tf4 lb f6 4 e3 e6 5 .td3 cS 6 c3 .td6 7 0-0 lbc6 8 dxcS ..txcS 9 lbbd2 .id6 10 �g3 0-0 1 1 e4, con venta ja, Vladimirov-Iuldachev, Mumbai 2003. Pero 2 lbf3 no obliga a las blancas a ju gar una apertura de Peón Dama, porque pueden cambiar de idea y optar por 3 c4. Supongamos que 2 cS es una buena ju gada, si las blancas tienen in mente algo así como 3 c3 lbf6 4 �f4 lbc6 5 e3 'tli'b6 ! . Sin embargo, las negras deben estar prepara das contra la posibilidad 3 c4. ... Esta fuerte jugada es obra de un maes tro suizo poco conocido, Hans Fahrni, con la que confundió a jugadores de elite hace un siglo. La partida Fahrni-Spielmann, Barmen 1905, siguió así: 3 lbc6? 4 cxd5 't!i'xd5 5 lbc3 'tli'd8 6 d5 lbb8 7 e4, con evi dente superioridad. Incluso en caso de las naturales 3 lbf6?! o 3 cxd4?, quedan mejor las blancas, con 4 cxd5!. Por supuesto, el juego negro no tiene nada de malo después de 3 dxc4! o 3 e6! , pero para realizar estas jugadas hay que conocer mucha teoría acerca del Gambito de Dama Aceptado (3 . . . dxc4 4 e3 ó 4 dS), o de la Defensa Tarrasch (3 ... e6 4 cxdS exdS). ... ... .•. ••• •.• 1 12 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J U GADAS EN AJ EDREZ Si las negras se encuentran con tantos escollos, ¿por qué los jugadores actuales no optan siempre por 2 ll:Jf3? La respues ta es que, de esa forma, las blancas se pri van de varias opciones, a la vez que conceden algunas a las negras. Así, las blancas renuncian a las líneas del Gambi to de Dama Aceptado 1 d4 dS 2 c4 dxc4 3 e4 y 3 e3, lo mismo que a variantes del Gambito de Dama Rehusado con ll:Jge2. Por otro lado, renuncian a demoler la De fensa Chigorin (2 c4 ll:Jc6 3 cxdS ó 3 ll:J c3) y la Defensa Báltica (2 c4 AfS 3 cxdS ó 3 ll:Jc3). Al mismo tiempo, conceden a las ne gras opciones adicionales, corno las varian tes Ragzin y Semi-Tarrasch, que no son posibles después de 2 c4, a menos que las blancas colaboren. Se trata de toda una se rie de ventajas e inconvenientes a ponde rar por el jugador. Observe que 1 ll:J f3 d5 2 d4 conduce a la misma posición que 1 d4 dS 2 ll:J f3 . Esto puede ser exasperante para u n ju gador agresivo con negras al que le guste desequilibrar rápidamente la po sición, con 1 llJ f3 dS 2 c4 d4 ó 1 d4 ll:J f6 . Tal era el caso cuando Laj o s Por tisch, un especialista en las defensas indias, se enfrentó al j oven Anatoli Kar pov, quien abrió el juego con 1 ll:J f3 . Portisch s e encontró e n una Defensa Eslava, relativamente desconocida para él, después de 1 . . . dS 2 d4 ! , y acabó per diendo. SISTEMA COLLE El mayor peligro después de 1 d4 d5 2 ll:Jf3 ll:Jf6 3 e3 no es el Sistema Colle, sino aca bar en otra apertura que nunca se ha juga do o que, sencillamente, a usted no le guste. ¿Cómo puede suceder eso, después de jugadas tan tranquilas? Bueno, suponga mos que las negras responden 3 c5. Están mejor preparadas para una Semi Tarrasch (4 c4 e6) o un Gambito de Dama Aceptado (4 ... dxc4). Y si prefieren 3 ... g6, necesitan conocer algo acerca de la Grün feld, en vista de 4 c4?!. Efirn Geller, quien rara vez jugaba la Grünfeld, descubrió en una ocasión , con negras, que 4 ... � g 7 5 cxd5 ll:J xd5 6 .te2 c5 no era una posi ción fácil de jugar. •.• Poco después de 7 e4!, Geller se encon tró en aguas turbulentas (7 . . . llJ b6 8 dS 0-0 9 a4) y acabó perdiendo. El otro gran peligro para las negras es el paso del Colle caracterizado por c2-c3 al Colle gemelo, es decir, el Sistema Zuker tort, caracterizado por b2-b3 y i.b2. Esto es un problema, porque las mejores defen sas contra el Colle, a menudo incluyen ... ll:Jbd7, que puede ser dudoso contra el Sistema Zukertort. He aquí cómo: después de 1 d4 d5 2 ll:Jf3 ll:J f6 3 e3 e6 4 ,.td3 c5 5 c3 ll:Jc6 6 ll:Jbd2, las blancas normalmente responden a 6 ... �e7 ó 6 ... �d6 con 7 0-0 0-0 8 dxcS ! AxcS 9 e4, con buen juego. Pe ro si las negras desarrollan su caballo da ma por d7 APERTURAS DE PEÓN DAMA ... ahora a 8 d x c5? se contesta con 8 ... lli xc5! . El alfil de d3 queda atacado y las blancas no pueden realizar la ruptura cen tral e3-e4, y están ya un poco peor. Pero en el Sistema Zukertort, 1 d4 d5 2 llit3 llif6 3 e3 e6 4 i.d3 c5 5 b3, las negras quedan bien con 5 .. llic6! 6 �b2 i.e7. Por ejemplo: 7 0-0 0-0 8 llibd2 "i!lc7 9 llie5 llid7 ! . E l peligro para ambos jugadores e s pi llarse los dedos. Si las negras hubiesen jugado ... llibd7, en lugar de ... llic6, queda rían peor tras 9 llie5 ! . Por ejemplo: 9 ... b6 10 f4 i.b7 11 c4 llie4 12 cxd5 exd5 13 llixe4 dxe4 14 �c4, como en la partida l. Rabi novich-Makogonov, Campeonato Soviéti co 1937. Lo que esto significa es que el caballo dama negro debe vigilar al alfil dama blan co y viceversa. Después de 1 d4 d5 2 llit3 llif6 3 e3 e6 4 �d3 , es impreciso 4 ... llibd7. (Ver diagrama 202.) . Las blancas aún no se han definido por el Colle o el Zukertort, de modo que 5 0-0 c5 6 b3 ! les concede posibilidades algo me jores. Es más preciso 4 ... c5, cuando 5 b3 y 5 c3 definen la posición blanca, y las ne gras pueden responder 5 ... llic6! y 5 ... llibd7 ! , respectivamente. 113 La respuesta más astuta a 4 '" c5 es 5 0-0, como jugaron José Raúl Capablanca y Aki ba Rubinstein, con idea de esperar a que las negras declarasen sus intenciones. Si 5 ... llibd7, 6 b3 ! , o si 5 ... llic6, 6 c3 ! . Pero no fueron puestos a prueba con 5 ... c4!. Por ejemplo: 6 .ie2 b5 7 b3 .tb7 8 a4 a6 9 axb5 axb5 10 l:t xa8 �xa8 11 bxc4 bxc4 12 c3 llibd7, con igualdad, Inkiov-Groszpeter, Copenhague 1988. OTRAS APERTURAS DE PE ÓN DAMA La Apertura Trompowsky ( 1 d4 lb f6 2 .tgS) tiene un pariente pobre en 1 d4 d5 2 �g5 . Como en este caso no existe la ame naza i.xf6, la vida de las negras es aquí más fácil. Los libros recomiendan 2 ... h6 3 �h4 c6 y ... '1Wb6. Si a las negras no les gusta esa línea, de berían estar alerta ante las trampas deriva das del avance c2-c4. Una de ellas se produce cuando evitan el doblaje de peo nes, con 2 ... llid7 y 3 ... lligf6. En tal caso, sigue 3 c4! (Ver diagrama 203.) Ahora, 3 .. dxc4 4 llic3 es un Gambito de Dama Aceptado inferior, y 3 ... c6 es . 114 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J U GADAS EN AJ EDREZ va ... tt:Jge7/ . .. 0-0. Los partidarios del Albin . han intentado, sin éxito, decidir qué jugada del alfil dama es la correcta. Deberían con siderar también responder a 5 tt:J bd2 con 5 una dudosa Eslava, 4 cxdS! cxdS 5 lt:J d3 , porque el caballo dama negro debería es tar en c6. Por ejemplo: 5 . . . lt:J gf6 6 e3 g6 7 tt:Jf3 �g7 8 �d3 0-0 9 0-0 b6 10 � el �b7 1 1 "iVb3, con ventaj a, Skembris-Vasovsky, Skopje 2002. El Ataque Torre queda definido por las jugadas 1 d4 lt:Jf6 2 lt:Jf3 e6 3 �gS. Normal mente, las negras pueden evitarlo, simple mente, con 1 . . . d5 , ya que 2 tt:J f3 tt:J f6 3 �g5 les permite igualar de inmediato, con 3 ... lt:Je4 ! . Pero hay una sinuosa jugada d e espera, 3 c3. Después de 3 ... e6 4 ..tg5, las negras han sido empujadas al Ataque Torre. Si 3 ... c6, las blancas tienen la habitual peque ña ventaja de una posición simétrica, con 4 �f4. El modo más fácil de igualar contra 3 c3 posiblemente sea 3 ... �f5 4 "iVb3 "iVc8. CONTRAGAMBITO ALBIN ... �fS!?. A diferencia de 5 ... �e6 y 5 ... �g4, esta jugada plantea una amenaza, 6 ... lt:Jb4, ganando así tiempo para enrocar largo, tras 6 a3 "iV d7 , en mejores condicio nes que las habituales. La prueba para es te orden es 7 b4 � xb4! ? (8 axb4 lt:J xb4 9 "iVa4 lt:J c2+ 10 @dl lt:J xal 11 'i!Vxal c5) . Declinar e l sacrificio e s inocuo, 8 �b3 �a5 9 e3 l:l d8, Spais-Katsaris, Atenas 1999. Lo que sucede después de 7 g3 0-0-0 8 �g2 es virtualmente terreno inexplora do. Por ejemplo: 8 ... d3 9 e3 �h3 10 �xh3 °iVxh3 (11 b4 � xb4!). Las blancas evitan esto con 5 g3!, y si 5 � e6 , entonces 6 ••• tt:Jbd2. La línea principal del Contragambito Al bin comienza con 1 d4 dS 2 c4 eS 3 dxeS d4 4 tt:Jf3 lt:Jc6. Las blancas suelen fianchettar su alfil de rey, y luego siguen con tt:J bd2, 0-0, "iVa4 y a2-a3. Entretanto, las negras, desarrollan su alfil dama, normalmente e6 ó g4, y luego se deciden entre ... "iVd7/. . 0-0-0 y la alternati. GAMBITO DE DAMA ACEPTADO Una vez que Joseph Blackbume populari zó la jugada 3 tt:Jf3, después de 1 d4 dS 2 c4 dxc4, las alternativas de las blancas casi se desvanecieron. Pero volvieron a hacer ac to de presencia, sobre todo gracias a inver- APE RTU RAS DE PEÓN DAMA siones en el orden de jugadas. Gari Kaspa rov, por ejemplo, jugó 3 e3 cuando quería evitar 3 lbf3 c6 ! ? -4 e4 bS. Tanto 3 e3 como 3 lbc3 obligan a las negras a pensar en si transponer a las líneas principales, con 3 ... lbf6, o buscar una igualdad más rápida, con 3 ... eS. Por ejem plo: 3 lbc3 eS 4 dxeS? �xdl + es excelen te. La línea clave es 3 lb c3 e5 4 e3 exd4 115 vió esta línea, que plantea un problema con el orden de jugadas. 5 exd4 lbf6 6 �xc4. Después de 4 . . � b4+ 5 lb bd2 exd4 6 .txc4, surge una posición controvertida, y por transposición, 4 ... exd4 5 .txc4 �b4+ 6 lbbd2. ¿Qué es mejor para las negras? Hacia los años ochenta, la respuesta era 4 ... �b4+, porque 5 lbbd2 se castiga con 5 ... c3!, y 5 .td2 .txd2+ 6 �xd2 e x d4 desemboca en la igualdad, tras 7 �xd4 �xd4, ó 7 lb xd4 �e7 8 f3 lb f6 9 .txc4 0-0 y ... � d8. Pero si las negras quieren dar jaque, 4 ... exd4 5 .txc4 .tb4+, entonces las blancas pueden elegir entre 6 .td2 y la más agresiva 6 lbbd2!. Diez años después, la teoría se contradi jo y declaró que 4 ... .tb4+ era la segunda mejor respuesta, porque las blancas obte rúan buenos resultados con 5 lbc3!. Hoy día, no está claro cuál de estos órdenes es el me jor. La cuestión es qué posición quieren evi tar las negras, si 4 ... � b4+ 5 lbc3 ! , o si 4 ... exd4 5 .txc4 .tb4+ 6 lbbd2 ! . . La teoría solía calificar a estas posicio nes de aburridas e igualadas. Pero en los noventa, las blancas consiguieron buenos resultados con ellas, a través de la Varian te del Cambio en la Francesa, o de la Petrov, de modo que las negras compren dieron que su decisión en la tercera jugada era vital. Las blancas facilitan un poco las cosas cuando juegan 3 lbc3 , porque después de 3 ... lbf6, no tienen nada mejor que 4 e3, llevando la partida hacia las líneas princi pales del Gambito de Dama Aceptado. Pe ro en aquellas líneas, es mejor diferir lbc3, como pronto veremos. Algo muy distinto es 3 e4. Este avance se consideró dudoso en su momento, debi do a 3 ... e5, pues las blancas no pueden mantener un peón en d4. Pero 4 lbf3! revi- GAMBITO DE DAMA ACEPTADO, 3 lbf3 En cualquier torneo podemos ver que, en un Gambito de Dama Aceptado, las ne- 116 SECRETOS DE LA INVERSIÓN D E J UGADAS EN AJ EDREZ gras realizan sus seis primeras jugadas co mo si no importasen. Pero lo cierto es que su tercera jugada es significativa. La op ción más popular, 3 . lt:Jf6, permite a las blancas proponer un gambito, 4 lll c3 y 5 e4, basado en el ataque al caballo negro, con e4-e5. mantener el peón, 5 exd4 �e5 ! ? . La línea · clave es 5 �x c4 filc7 (no 5 ... dxe3?? 6 �xf7+). . . Esto se consideraba refutado con 6 filb3, porque 6 ... �e6? se contesta con 7 Las negras pueden eludir esta lmea con e6 5 e4 �b4, una invitación a entrar en la Variante Vienesa (6 �g5 ! c5 ! ) y que, además, debería aceptarse, porque 6 e5 lt:Jd5 7 �d2 lll b 6! dificulta que las blancas puedan recuperar su peón. Otra opción de las negras, después de 4 lt:Jc3, es 4 lt:J c6 , en cuyo caso, 5 e4 .tg4 es una de las mejores líneas de la Defensa Chigorin. Es como si las blancas jugasen 1 d4 d5 2 c4 lt:J c6 3 lll c3 dxc4 4 lll f3 lt:Jf6 5 e4 �g4, y no 4 d5 ! ? . Pero si las negras juga ron 2 ... dxc4, para seguir en el Gambito de Dama Aceptado, deben considerar las tres alternativas a 3 ... lt:Jf6, que no sólo evitan el gambito, sino que aceleran su contra juego. La primera es 3 c5. Después de 4 e3, las negras pueden dirigirse hacia una for mación del Gambito de Dama Aceptado, con 4 ... lt:Jf6 5 �xc4 e6. También disponen de una opción extra, 4 cxd4, con idea de 4 •.. ••• ••• ••• �xe6 ! filxcl + 8 @e2, con un fuerte ata que, probablemente ganador. Sin embargo, las líneas del Gambito de Dama, tanto del Aceptado como del Rehusado, están repletas de "jugaditas" que marcan una gran diferencia, como 6 ... e6!. Después de 7 lt:Jxd4 a6, la posición está igualada, y 7 exd4 lll c6 8 0-0 a6 lleva a una posición más normal del Gambito de Da ma Aceptado, pero con las jugadas de da ma añadidas. Eso ayuda a las negras, porque amenazan 9 ... lt:Ja5 ! y pueden ob tener una buena posición después de 9 fildl lt:Jf6. Por ejemplo: 10 lt:J c3 i.e7 1 1 d5 lt:Ja5 ! , o bien 1 1 file2 0-0 12 l:l dl lll b4, co mo en la partida Wojtkiewicz-Yermo linsky, San Francisco 2002. Eso significa dos ventajas de 3 ... c5 ! ? , evitando e l gambito 3 ... lt:Jf6 4 lt:Jc3/5 e4 y ofreciendo a las negras una buena alterna tiva a la formación del Gambito de Dama Aceptado. El inconveniente es 4 d5!?, y en tal caso 4 e6 5 lt:Jc3 lt:Jf6 6 e4, una lmea confusa. •.. APERTU RAS DE PEÓN DAMA La segunda alternativa es 3 a6, que a menudo transpone a la tercera, 3 ... e6. En los años treinta se consideraba una impor tante sutileza (para disuadir 4 'iVa4+, por 4 . . . bS ! ) , cuando las blancas solían explotar 3 .. . li::i f6 con 4 �a4+. Hoy día, sin embar go, parece inocua, y 3 ... a6 apenas es un preludio a 4 e3 li::i f6 S �xc4 e6, otro esque ma de la apertura. También hay una arriesgada opción adicional, 4 e3 bS, así como la línea de Ca pablanca, 4 e3 e6 S �xc4 bS ! ? y 6 ... �b7. Esto es, a menudo, lo bastante intimidato rio como para inducir a las blancas a jugar · ••• 4 a4?! . 1 17 tienen buen juego en las complicaciones derivadas de 8 h3 �hS 9 0-0 �d6 10 �e2 0-0 1 1 g4 �g6 12 li::i h4 ll:ib4, Hillarp Pers son-C. Hansen, Malmo 2003 . Si 3 ... a6 (y 3 ... e6) tiene un serio in conveniente, es 4 e4!?, en cuyo caso, 4 b5 5 a4 c6, como ha jugado Kasparov, es una posición de doble filo. ••• GAMBITO DE DAMA ACEPTADO, 3 ll:i f6 ••• El mérito principal de 3 ... li::i f6 es que im pide 4 e4 y conduce, en la gran mayoría de las partidas, a la formación 4 e3 e6 5 �xc4. La inevitable . es permite a las negras ais lar el peón d blanco ( ... cxd4/exd4) o ex pansionarse en el flanco de dama, con . . . a6/ ... bS/ ... c4. Pero esto también concede a las blancas la posibilidad de jugar dxcS, tal vez seguido de un cambio de damas, pa ra entrar en un final ligeramente inferior. Si el jugador con negras es el más fuerte, puede eludir el final, difiriendo ... cS. Por ejemplo: 5 a6 6 0-0 li::i bd7. .. •.. Este avance, s in embargo, ayuda a las negras, que pueden transponer a la línea de Rubinstein, en el Gambito de Dama Aceptado, 4 ll:i f6 5 e3 e6 6 �xc4 c5, nor malmente considerada demasiado tran quila como para conseguir ventaja. O bien puede intentar 5 �g4! 6 �xc4 e6 7 ll:ic3, una versión superior de la variante de la clavada. En el orden original de la clavada, 3 li::i f3 li::i f6 4 e3 �g4, las blancas logran ventaja con S �xc4 e6 6 ll:ic3, sobre todo después de 6 ... ll:ic6 7 �bS ! . En este or den, en cambio, eso no es posible, y con 7 ll:i c6 , las negras bien igualan con ... e5, o ••• ••• ••• Ahora, 7 �e2 cS 8 dxcS �xcS es ino cuo, y en caso de 7 a3? ! , las negras incluso pueden obtener ventaja, tras 7 . . . bS 8 �a2 �b7 9 �e2 cS 10 dxcS li::i xcS ! . 118 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJEDREZ El problema de este orden de jugadas es 7 a4! , que plantea una versión mejor de lo habitual de la línea Rubinstein. A dife rencia de la Rubinstein normal, las negras no pueden desarrollar su caballo dama por c6, su mejor casilla una vez que aparece en campo blanco el agujero b4. Así, no logran igualar del todo después de 7 ... c5 8 lbc3 cxd4 9 exd4 �e7. Por ejemplo: 10 'iYe2 0-0 11 .tg5 lbb6 12 .tb3 lbbd5 13 l:. fel y lbe5, como en la partida Lechtynsky-Kan torik, Plzen 2003. Otra versión con ... c5 diferido es 1 d4 d5 2 c4 dxc4 3 ltJf3 tLlf6 4 e3 a6 5 .txc4 b5, una idea de Capablanca. A la rutinaria 6 A b3 .t b7 7 0-0 e6 8 'iYe2, las negras pueden alcanzar una po sición más o menos igualada de la línea principal, con 8 ... lLlbd7 9 l:t dl c5. Este or den tiene algo de farol, porque se basa en que las blancas sigan al pie de la letra una de esas reglas "de oro" en el Gambito de Dama Aceptado, según la cual, siempre que el alfil sea atacado con ... b5, debe reti rarse casi siempre a b3. Ésta es una excepción: 6 �d3! y 7 a4! ponen favorablemente a prueba el flanco de dama negro. Por ejemplo: 6 ... �b7 7 a4! b4 8 lLlbd2 tLlbd7 9 0-0 e6 10 'iYe2 c5 1 1 e4 cxd4 12 e5 tLld5 13 lLlb3 ltJc5 14 Ag5 ! · 'ii'd7 15 tLlfxd4, Topalov-Narciso, Barcelo na 2000. La estrategia blanca da resultado por que su caballo se encontraba en bl. Si el primer jugador vulnera otra regla "de oro" y lo desarrolla pronto, se llega a una posi ción como la que se produce tras 4 e6 5 .txc4 c5 6 lLlc3 y 6 ... a6! 7 0-0 b5. ••• La experiencia con 8 Ad3 tLlbd7 de muestra que las negras tienen un juego có modo. Por ejemplo: 9 'iYe2 .tb7 10 l:t dl 'iYb6 l l Ac2 l:t d8 12 a4 b4 1 3 lLl b l 'iYc7 14 Ad3 cxd4 15 exd4 a5, Benitah-Fressinet, París 2004. Lo que ha sucedido es que las blancas han sido empujadas a una línea sin mordiente de la Variante Merano, en la Semi-Eslava. Compárelo con 1 d4 d5 2 c4 c6 3 ltJf3 ltJf6 4 ltJc3 e6 5 e3 tLlbd7 6 Ad3 dxc4 7 Axc4 b5 8 Ad3 a6, cuando juegan 9 0-0?! (no 9 e4! ) 9 . .. c5 ! 10 'iYe2 Ab7. En la posición del diagrama 212, las blancas pueden mejorar con 8 Ab3!, después de lo cual 8 . . . � b7 9 'iY e2 ttJ bd7 10 l:r dl 'iYb8 (ó 10 ... 'ii'c7) es una línea principal del Gambito de Dama Aceptado, practicada durante décadas, sin que haya podido conseguirse una ventaj a signifi cativa. APERTURAS DE PEÓN DAMA · También se ha pasado la atención a un temprano 'iYe2. Los libros solían decir que el orden de 0-0 y 'iVe2 no importaba por que -como usted habrá supuesto- "transpo nían" . Pero resulta que sí importa, debido a la posibilidad dxc5 y e3-e4-e5, el plan de Semion Furman. Después de 1 d4 d5 2 c4 dxc4 3 ltJf3 ltJf6 4 e3 e6 5 .1l.xc4 c5, se lle ga a la posición del diagrama: <litada Variante Steinitz. Por consiguiente, 6 ... cxd4 parece sospechoso y no hay con senso en cuanto a qué deberían jugar las negras después de 6 'ii'e 2. Hay también buenas y malas transposi ciones, cuando las blancas se anticipan a . . . b5 con una retirada de alfil, 6 0-0 a6 7 �b3. Ahora, 7 b5 8 a4! disloca el flanco de dama negro. Por ejemplo: 8 ... b4 9 ltJbd2 y 8 . . . _t b7 9 axb5 axb5 1 0 l::l x a8 � x a8 1 1 'iVe2, 1 1 ltJ a3 u 1 1 ltJc3. Por otro lado, a 7 � e7, las blancas juegan 8 'iVe2 y se dis ponen a lograr una buena versión de la lí nea de Furman, con 9 dxc5!. Si las negras lo impiden con 8 ... cxd4, transponen a otra dudosa Steinitz, 9 � dl ltJ c6 10 exd4 0-0 11 ltJc3. Lo mismo puede decirse, en caso de 7 ... ltJc6 8 'i:Ve2 cxd4 9 l:t dl. E l orden correcto e s 7 cxd4! 8 exd4 ltJc6. Las blancas no tienen tiempo para jugar 'iVe2/ l:l dl , porque esta vez 9 'iVe2 es incorrecto, por 9 ... ltJxd4 ! . Así que debe rán optar por una ventaja mínima, como 9 ltJc3 i.e7 10 l:t el 0-0 1 1 a4 i.d7, como en la partida Topalov-Kramnik, en su match de 2006. El último tema del Gambito de Dama Aceptado tiene que ver con 6 0-0 a6 7 'iVe2 ••• Ahora, si 6 0-0 a6 7 dxc5, lo mejor para las negras es 7 ... 'iVxdl, y unas tablas son el resultado típico, tras 8 l:t xdl �xc5. Pero 6 'iYe2 convierte a dxc5 en una amenaza, puesto que no permite el cambio de damas. En tal caso, 6 cxd4 7 exd4 ltJc6 lo evita y trata de castigar a las blan cas por poner en peligro su peón de d4. Pe ro hay otra regla sagrada del Gambito de Dama Aceptado, según la cual las negras no deberían cambiar en d4, como hacía ha bitualmente Wilhelm Steinitz, hasta que puedan amenazar con firmeza el peón d u obtener otra compensación. En este caso, aceptar el gambito es arriesgado: 8 0-0! ••• ltJxd4 9 ltJxd4 'iVxd4 10 l:t dl 'iVb6 ll ,.tb5+ .td7 12 ltJc3, Pelletier-Arencibia, Ú beda 1998. Pero declinarlo, con 8 . . . Jl.e7 9 ltJ c3 0-0 10 �e3, transpone a la un tanto desacre- 1 19 ••• ••• 1 20 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ ttJc6. Ahora, 8 ttJc3 y 8 l:t dl a menudo transponen. Por ejemplo: 8 l:t dl b5 9 �b3 ttJc6 10 lll c3. La razón por la que a menudo transpo nen es que 8 ltJc3 cxd4 no gana un peón. Después de 9 l:t dl!, las negras quedan atrapadas en otra Steinitz (9 . . . � e7 1 0 exd4 0-0 1 1 d5 ! exd5 12 ttJ xd5 ttJ x d5 1 3 .txd5 �c7 14 �e4). Max Euwe calificó a 8 lll c3 con un sig no de admiración, por una razón diferente. Las blancas pueden preservar su alfil des pués de 8 tll c3 b5 9 .tb3 �b7 10 l:. dl c4?!, con 11 �c2 ttJb4 12 �bl!, lo que les favorece cuando quieren avanzar su peón e. Por ej emplo: 12 . . . � e7 13 e4 lll d3 14 �xd3 cxd3 15 �xd3 b4 16 e5 ! , como en la partida Moskalenko-Sulava, Aosta 1990. Por el contrario, con 8 l:t dl b5 9 �b3 c4 10 �c2 lllb4! , las negras igualan. Por ejem plo: 1 1 ttJc3 lll xc2 12 �xc2 �b7 13 e4? (13 d5 ! ? ) 13 ... b4 14 e5 bxc3 15 exf6 gxf6, como en una famosa partida Szabo-Euwe, ganada por las negras. GAMBITO DE DAMA REHUSADO Los jugadores han ido descubriendo suti lezas en el Gambito de Dama Rehusado desde que Pierre Saint-Amant demostró . que, tras 1 c4, las negras podían plantearlo, con 1 ... e6! y ... d5. Hasta el recientemente popular orden 1 d4 ttJf6 2 c4 e6 3 lll f3 d5 ! es viejo. Se hi zo famoso en las partidas de Boris Kostic y Heinrich Wolf, ya en la década de los años veinte. Ese orden parece basarse en la amenaza Nimzoindia, es decir, el temor a 3 tll c3 �b4. Mientras la Nimzoindia ha co sechado buenos resultados -como es aho ra el caso-, este orden será útil para las negras, pues priva a las blancas de ttJge2, que a menudo es superior a ttJf3, y de un tiempo que podrían utilizar mejor en ór denes como 1 d4 d5 2 c4 e6 3 tll c3 ttJf6. Las negras tienen otra forma de provo car lll f3: 1 d4 d5 2 c4 e6 3 ltJc3, y ahora 3 ... � e7. Puesto que las blancas no pueden jugar 4 �g5, lo normal es que opten por la juga da natural de desarrollo, 4 ttJf3, y la vida si gue tras 4 ... tll f6, como si se hubiese jugado 3 ... lll f6 4 ttJf3 �e7. Como incon veniente, este orden priva a las negras de variantes sin ... .te7, como la Cambridge Springs, la Vienesa y la Botvinnik. Un tercer camino para las negras de forzar lll f3 es, en realidad, un farol, 1 d4 d5 APERTU RAS DE PEÓN DAMA 2 c4 c6. O habría que decir que... ¡ dos faro les! Las negras cuentan con que las blan cas compartan la opinión de la mayoría, en el sentido de que contra la Defensa Eslava lo mejor es 3 lll f3 . Luego pueden conti nuar con 3 ... lll f6 4 lll c3 e6, suponiendo que estén armadas hasta los dientes con los últimos análisis teóricos en la Variante Merano (5 e3 lll bd7 6 �d3 dxc4). Las blancas a menudo se apartan de esa vía, con 5 �g5, entrando en las líneas principa les del Gambito de Dama Rehusado, que es lo que las negras querían. Pero de ese modo incurren en dos pe queños riesgos. Podrían acabar jugando la blanda y tablista Eslava del Cambio (3 cxd5), y podrían no alcanzar la mejor ver sión de la Defensa Ortodoxa (5 §J.. g5 �e7 6 e3 0-0), porque la no obligatoria ... c6 no encaja bien con ... i.. e 7. Una partida del match Kramnik-Deep Fritz (2002) comen zó con 1 d4 lll f6 2 c4 e6 3 lll f3 d5 4 lll c3 c6 1 21 blancas. Por ejemplo: 1 1 ... lll 5f6 12 lll g3 e5 13 lll f5, o bien 12 ... c5 13 'fle2 lll b6 14 i..b3 cxd4 15 lll xd4. Testigos presenciales describieron a Kramnik como "visiblemente desmorali zado", al comprender que una computa dora (difícilmente doctor en psicología) lo había engañado, llevándolo a una lútea cu ya teoría había olvidado. FORMACIONES ALTERNATIVAS Las formaciones que todos conocemos del Gambito de Dama Rehusado (y que nos gustan o nos disgustan, etc.) suelen apare cer después de 1 d4 d5 2 c4 e6 3 lll c3 lll f6 4 §J.. g 5, seguido de 4 ... lll bd7 ó 4 ... §J.. e 7. 5 i.. gS �e7?!. Las blancas quedaron tan sorprendidas que permitieron a su rival igualar tras 6 e3 0-0 7 �d3 lll bd7 8 0-0 dxc4 9 i.. x c4 lll d5 10 §J.. x e7 'flxe7 11 l:. cl?! lll xc3 12 n xcJ e5. Olvidaron que, desde los años treinta era sabido que 11 lll e 4! es favorable a las Pero hay otras: La que sigue puede resultar de un ama go de Nimzoindia, 1 d4 lll f6 2 c4 36 3 lll f3 , y ahora 3 ... d5 4 lll c3 lll bd7. También se produce con el orden 1 d4 d5 2 c4 e6 3 lll f3 lll d7 ! ? , como un medio de disuadir la Apertura Catalana (4 g3 dxc4 y ... lll b6), y ahora 4 lll c3 lll gf6. En la posición del diagrama 218 las ne gras han cerrado algunas puertas, pero han abierto otras. La Variante Tartakower-Ma kogonov-Bondarevsky y la Defensa Ta- 1 22 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J U GADAS EN AJ EDREZ rrasch no dan buen resultado con ... tt::l b d7. Pero las negras siguen pudiendo jugar una Semi-Eslava (5 e3 c6) o bien, después de 5 i.g5, una Defensa Ortodoxa (5 ... �e7), una Cambridge Springs (5 ... c6 6 e3 'it'a5), o una variante Manhattan (5 ... .tb4) . Esta formación también ayuda a las negras en una Defensa Lasker, 5 � g5 h6 6 �h4 i.e7 7 e3 tt::l e4, como demostró Ulf Andersson. En el orden más conocido de la Defensa Lasker, 1 d4 d5 2 c4 e6 3 tt::l c3 tt:Jf6 4 i.g5 i.e7 5 e3 0-0 6 tt::l f3 h6 7 i.h4 tt:Je4, las blancas pueden dejar mal situado al alfil contrario, y retener una pequeña ventaja. Pero en el orden de Andersson �xf6? es malo, porque las negras pueden reto mar de caballo. Una segunda virtud de es te orden se pone de manfiesto después de 5 i.g5 h6 6 i.h4 �e7 7 e3 tt::l e4 8 i.x e7 'it'x e7 9 cxd5 tt::l xc3 10 bxc3 exd5 11 'it'b3. Ésta es una estrategia estándar anti Lasker. Después de que las negras defien dan el atacado peón d, con 1 1 ... c6 u 11 ... 'it'd6, las blancas tratan de liquidarlo favo rablemente, con 12 c4! . Pero aquí las ne gras pueden defenderlo con la superior 11 tt::l f6!. Sus piezas están mejor coordina das de lo normal, después de 12 c4 c6 13 � d3 i. e6 (14 0-0 .tl c8 15 l:!. abl l:t c7 · 1 6 cxd5 �xd5, como en la partida P. Niko lic-Andersson, Leningrado 1987). El principal inconveniente de la forma ción 1 d4 d5 2 c4 e6 3 tt::l c3 tt::l f6 4 tt::l f3 tt::l bd7 es que las blancas aún no han defi nido el desarrollo de su alfil dama. Pueden crear amenazas con �f4 y tt::l b 5. En mu chas de las líneas 1 d4 d5, la mejor respues ta a .tf4 es ... c5 ! , pero esto no es tan fuerte con un caballo en d7. Esto significa que la idea de Fritz Sa misch, 5 cxdS exdS 6 .tf4, debe ser buena. La natural 6 ... i.e7? permite 7 tt::l b5 ! i.b4+ 8 tt::l d2 �a5 9 'it'a4. Después de 6 ... c6, las blancas pueden construir un buen fundamento para el medio juego, con 7 'it'c2 i.e7 8 h3 0-0 9 e3 � e8 10 �d3, una Variante del Cambio mejor de lo habitual. Pasemos a otra formación. A Mihai Suba le gustaba el centro fluido que las ne gras obtienen en una Semi-Tarrasch, 1 d4 d5 2 c4 e6 3 tt::l f3 tt::l f6 4 tt::l c3 c5 5 cxd5 tt::l xd5 ! . Pero en 1977, Tigran Petrosian "me cazó" con 4 �gS! ?, recuerda. Suba tu vo que jugar esta posición desconocida y perdió. Esta formación encierra una trampa: 4 ••• ... c5?! cae en una línea de la Tarrasch, 5 APERTURAS DE PEÓN DAMA cxdS exdS 6 lbc3, que se sabe es mala des de los tiempos en que Mr. MacDonnell se enfrentó a Monsieur La Bourdonnais. Un siglo más de experiencia con 6 ... .te6 7 e4! y 6 ... lbc6 7 �xf6 gxf6 8 e3 así lo confir man. Otro mérito es que las blancas pueden eludir favorablemente las variantes Cam bridge Springs y Manhattan, respondiendo al j aque con lb bd2. Por ejemplo: 4 ... lbbd7 S e3 .tb4+ 6 lbbd2 ! , y ahora 6 ... 0-0 7 .td3 h6 8 �h4 es una buena Defensa Ortodo xa. Por ejemplo: 8 .. dxc4 9 .ixc4 b6 10 0-0 .tb7 11 'ii'e2 .ie7 12 l:Udl lbe4 13 lb xe4 .ixh4? 14 dS ! , con una gran ventaja, Ga briel-Stangl, Altensteig 1993. Pero 4 ... .ib4+ es más preciso. Des pués de S lbbd2 dxc4 ! es bueno para las negras, como también S .id2 �e7 ! . En 1 934, Hans Müller recomendó 4 . . . i. b4 S lbc3 dxc4 6 e4 cS, y así nació la Variante Vienesa. Las negras pueden plantear juegos mentales con la inmediata 4 ... dxc4!? . "Quizá me decida por la Vienesa, res pondiendo a S lb c3 con S ... .ib4", dice el jugador con negras. " Pero quizá juegue S ... c6, lo que significa que tendremos que comprobar quién ha memorizado más de 1 23 la Variante Botvinnik. Y si realmente que ría jugar la Vienesa, ¿por qué no he dado el jaque en la cuarta jugada?" Las blancas a menudo rehúsan entrar en este juego de adivinaciones, y respon den S e3. En tal caso, S ... cS es una línea marginal, y S .. bS conduce a un juego muy de doble filo, en una línea relativamente inexplorada, que sigue con 6 a4 c6 7 lbc3 i.b4 ! . L a otra opción de las negras, e n l a for mación 1 d4 dS 2 c4 e6 3 lbf3 lbf6 4 �gS , es 4 ... c6, apuntando de nuevo a una Bot vinnik (5 lbc3 dxc4), pero también a una posible Cambridge Springs (S . . . lb bd7 6 e3 'ii'aS). A las blancas puede tentarles S lbbd.2. . Esto funciona en caso de S . . . lb bd7 6 e3 'ifaS? 7 a3 ! y 8 b4, con ventaja. O bien tras S ... .ie7 6 e3 lbbd7, una Defensa Or todoxa en la que las blancas pueden res ponder a 7 .id3 0-0 8 0-0 dxc4? con 9 lb xc4!, como solía hacer Capablanca. Por ejemplo: 9 ... lbdS 10 .ixe7 lb xe7 1 1 l:l cl lbg6 12 �xg6 ! hxg6 13 e4, y las negras no pueden realizar la ansiada ruptura ... es (Capablanca-Tylor, Hastings 1930). Pero siempre que las blancas juegan lb bd2, existe la posibilidad de que ... es ó 1 24 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J U GADAS EN AJ EDREZ ... .td6/ ... e5 igualen rápidamente. Aquí, 5 ... c5 tiene menos impacto, porque es una pérdida de tiempo. Pero 5 ... ltJbd7 6 e3 h6 7 .th4 �d6! es bueno. Por ejemplo: 8 .,td3 0-0 9 0-0 e5 ! 10 � g3 'JJ!i e 7 1 1 cxd5 cxd5 12 dxe5 ltJxe5, Rivas-Yusupov, Minsk 1982. Las formaciones anteriores del Gam bito de Dama Rehusado permiten a las blancas transponer a la auténtica Varian te del Cambio, con cxd5. Pero no la si guiente. Esta posición puede producirse en el orden 1 d4 ltJf6 2 c4 e6 3 ltJf3 d5 4 ltJc3 dxc4. Las negras invitan a su rival a entrar en un Gambito de Dama Aceptado (tras 5 e3), una Variante Vienesa del Gambito de Dama Rehusado (tras 5 e4 ó 5 .tgS), o in cluso en una Nirnzoindia (después de 5 �g5 .tb4 6 e4 c5 7 a3 ! ?). La opción engañosa es 5 'JJil a4+ ! ? para tratar de alcanzar un Gambito de Dama Aceptado superior. En el normal, después de 1 d4 d5 2 c4 dxc4 3 ltJf3 ltJf6, las negras pueden responder tranquilamente a 4 'JJ!l a4+ con 4 ... ltJc6, o 4 ... c6. Pero 4 ... ltJbd7 5 ltJc3 e6 se considera inferior. Esto significa que 5 'JJ!ia4+ ltJbd7?! lleva las ne gras a la mala línea 4 'JJ!i a4+. Por ejemplo: 6 e4 a6 7 .txc4 c6? 8 'JJ!id l ! .te7 9 0-0 0-0 10 a4 b6 11 �d3 .tb7 12 e5 ! , y las blancas. pronto disfrutaron de un ataque ganador, Kasparov-Short, Londres 1993. Es mejor 5 ... c6 6 'JJ!l xc4 b5. GAMBITO DE DAMA REHUSADO, VARIANTE DEL CAMBIO El primer terna en la Variante del Cambio es cuándo cambiar. Hoy día, lo normal es hacerlo en la cuarta jugada. Pero Alexan der Alekhine, al comentar la línea 1 d4 d5 2 c4 e6 3 ltJf3 ltJf6 4 ltJc3 ltJbd7 5 cxd5, di jo que era mejor 5 �g5 . "Las blancas siempre pueden cambiar en una fase pos terior, cuando el 'clima económico' les re sulte más favorable", explicó. Un ejemplo es 1 d4 d5 2 c4 e6 3 ltJc3 ltJf6 4 �g5 ltJbd7 5 e3 c6. Las negras están revelando su interés en la Cambridge Springs. Si las blancas no pueden recordar la teoría, tiene sentido 6 cxd5 ! . (Un tumo después es demasiado tarde, 6 ltJ f3 'JJ!i a5 7 cxd5 ltJ xd5 ! .) Pero cambiar en la tercera jugada es demasiado pronto. Después de 1 d4 d5 2 c4 e6 3 cxd5? exd5 4 ltJc3. , Las negras resuelven su principal pro blema en el Gambito de Dama Rehusado, APERTURAS DE PEÓN DAMA a saber, cómo desarrollar su alfil dama, con 4 ... c6! y ... �f5!. Por ejemplo: 5 'ii'c2 �d6 6 tll f3 tll e7 7 .tg5 �f5. También es impreciso cambiar en la cuarta jugada, si las blancas ya han defini do la posición de su caballo rey, con tll f3 . Una de las victorias más impresionantes con negras, comenzó así: 1 d4 tll f6 2 c4 e6 3 tt:'if3 d5 4 cxd5 ? ! exd5 5 tt:'ic3 c6 6 �g5 Ae7 y ... .tf5 ! (7 'it'c2 g6 8 e3 �f5). Controlar la diagonal bl-h7 es vital en la Variante del Cambio. Si las negras con siguen controlarla, normalmente habrán igualado. Pero si han jugado un temprano ... tt:'ibd7, entonces cxd5 ! suele dar a las blancas tiempo suficiente para impedirlo. Por ejemplo: 1 d4 d5 2 c4 e6 3 tt:J c3 tt:'i f6 4 �g5 tllbd7 5 cxd5 exd5 6 e3 y �d3 ó �c2 harán imposible ... �f5. Salo Flohr, un con noisseur del Gambito de Dama Rehusado, jugaba cxd5 inmediatamente después de .. . ttJ bd7, aunque fuese en la octava jugada. La razón por la que muchos grandes maestros realizan antes la captura (1 d4 d5 2 c4 e6 3 tt:Jc3 tt:Jf6 4 cxd5) es que, una vez que se haya jugado �g5 y ... �e7, las ne gras pueden cambiar favorablemente dos pares de piezas, tras ... tt:J xd5. El resultado a menudo se parece a una Defensa Orto doxa en la que las negras simplifican, con ... dxc4 y ... tt:'id5. Tomemos el caso de 1 d4 d5 2 c4 e6 3 tt:Jc3 tt:'i f6 4 � g5 i.e7. (Ver diagrama 225 .) Las negras igualan después de 5 cxd5? tt:'i xdS! 6 �xe7 �xe7. Otro caso similar es 5 e3 0-0 6 cxd5 ? tt:'i xd5 ! 7 A xe7 � x e7 8 tt:'if3 tt:'ixc3 9 bxc3 b6! (10 �e2 �b7 11 0-0 c5 12 tt:Je5 tt:lc6 13 tt:J xc6? .t xc6 14 �f3 l:I. ac8, y las negras ganaron en la partida Alatorzev-Capablanca, Moscú 1935). Las blancas también tienen un juego 1 25 cómodo tras 5 tt:'if3 0-0 6 �c2 c6 7 e3 tt:'ibd7 8 cxd5 tt:'i xd5 ! 9 j_xe7 �xe7 (10 �e2 l:l. e8 11 0-0 tt:J xc3 12 bxc3 e5). Debe tener presente que diferir cxd5 puede entrar en conflicto con las jugadas precedentes de las blancas. Alekhine tenía la impresión de que el "clima económico" era propicio para el cambio después de 1 d4 d5 2 c4 e6 3 tt:Jc3 tt:Jf6 4 �g5 �e7 5 e3 tt:Jbd7 6 l:t cl 0-0, 7 cxd5, porque 7 ... tt:'i xd5? 8 tt:'i xd5 perdería un peón. Pero después de 7 ... exd5 8 �d3 c6 9 �c2 %1 e8 10 tt:Jf3, descubrió que su torre dama ha bría estado mejor situada en bl para apo yar el ataque de minorías, b2-b4-b5. Otro tema es cuándo desarrollar el ca ballo rey blanco. Consideremos 1 d4 dS 2 c4 e6 3 ttJ c3 ttJ f6 4 ji_ g5 c6 5 e3 ttJ bd7 6 cxdS exdS 7 � d3 �e7 . (Ver diagrama 226.) Así se jugó la partida Smyslov-Keres, Campeonato Mundial 1948. Las blancas siguieron con 8 tll f3 , y las negras respon dieron 8 ... 0-0. Actualmente, ambas juga das se consideran erróneas. Las negras debían haber jugado 8 tt:Je4! , pues si 9 tt:J xe4? dxe4 gana pieza, y porque 9 �xe4 �xg5 ! ó 9 Axe7 'iJ/xe7 10 'it'c2 f5 son bue nas para sus intereses. ••• 1 26 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J U GADAS EN AJEDREZ Si las blancas quieren jugar lbf3, debe rían prepararlo con 8 �c2!, a fin de impe dir 8 ... lbe4? , que perdería un peón, tras 8 .txe7 y 9 lb xe4. Al diferir lbf3, las blancas conservan la opción extra lbge2, y pueden apoderarse de la diagonal bl-h7. Hay algún refina miento más, si las negras tratan de realizar ... .tfS de otra forma, 1 d4 d5 2 c4 e6 3 lbc3 Pero las negras disponen de otra op ción simplificadora, después de 8 .td3, 8 lbh5 9 .txe7 �xe7. Esto da resultado, porque 10 �xh7 no es jaque, sino un sacri ficio incorrecto, por 10 ... g6. Por otro lado, 10 lbf3 y 10 g4 permiten 10 ... lbf4. Las blancas deberían jugar 10 lbge2, conser vando una pequeña ventaja . lbf6 4 cxd5 exd5 5 �g5 .te7 6 e3 c6 7 �c2 lb bd7, y ahora 8 lb f3 lb f8 9 .t d3 lb e6 VARIANTE DEL CAMBIO: lbbd7, ...c6 y h6 1 0 .th4 g6. Su idea es ... lbg7 y ... .tfS. Des pués de 11 0-0 0-0 12 l::t abl aS 13 a3 lb g7 ! 14 b 4 axb4 l S axb4 .t fS ! 1 6 lb eS � xd3 17 lb xd3 lbfS 18 �gS lbd7 19 .tf4 lbb6 y ... lbc4, como en una partida de Najdorf, las negras, como mínimo, han igualado. En tal caso, explotaron un prematuro 8 lbf3. El jugador diestro en transposiciones preferi ría 8 .td3! y tras 8 lbfS, 9 lb ge2. (Ver diagrama 227.) •.. De esta forma, puede optar por el plan de ruptura central, con f2-f3 y e3-e4, o bien por g2-g4. Por ejemplo: 9 lbe6 10 .th4 g6 11 0-0-0 lbg7 12 t3!, y ahora puede se guir 12 ... .te6 13 g4! , o bien 12 ... lb fS 13 .tf2 �as 14 @bl �e6 lS h3 0-0-0 16 e4! , con feroz ataque, Bronstein-Medina, Go temburgo 19SS. ... ... ... ... Hemos visto cómo un temprano ... lb bd7 mej ora las posibilidades negras de jugar . . . �fS ! . Pero tiene la ventaj a de conectar rápidamente los caballos. Las negras pueden responder a .t xf6 con ... lb xf6, que es importante cuando las blancas forman la batería 'ii' c2/ .t d3 contra el peón de h7. También es significativo que después de 1 d4 d5 2 c4 e6 3 lbc3 lbf6 4 cxd5 exd5 5 lbt3?! c6 6 .tg5 �e7 7 e3 �f5! 8 .td3 .txd3 9 �xd3 lbbd7! (Ver diagrama 228.) .. .las blancas hayan cometido una doble negligencia, en la quinta jugada, y de nue vo cuando omitieron 9 � xf6! .txf6 10 'ii' x d3, que deja descolocadas a las piezas APERTU RAS DE PEÓN DAMA enemigas. A las negras les costana tiempo situar su alfil en la diagonal superior b8-h2 y encontrar una buena casilla para el ca ballo. Pero en la posición del diagrama 228, las piezas negras están bien coordinadas, gracias a ... lbbd7 ! , y no deberían tener ma yores problemas para igualar. Por ejem plo: 10 0-0 0-0 11 .l:t abl aS 12 a3 l:l eS 13 b4 axb4 14 axb4 b5! . Otra j ugada que las negras a menudo difieren es . . . c6. No pueden jugar la libe radora . . . lb e4 sin ella, porque el peón d quedaría colgando. Pero eso queda com pensado por la posibilildad de j ugar . . . cS en un solo movimiento. Por ejemplo: 1 d4 d5 2 c4 e6 3 lb c3 lb f6 4 cxd5 e x d5 5 �g5 �e7 6 e3 0-0 7 �d3 lbbd7 8 'ii' c2 l:t e8, y ahora 9 0-0-0 lb f8 10 @bl �e6 11 lb f3 a6 12 lb eS l:t c8 13 h3 cS ! , con buen j uego, Minogina-Belavenets, Mos cú 1 990. La contrasutileza de las blancas es 8 lb ge2 1:1 es 9 0-0. (Ver diagrama 229.) La ausencia de ... c6 significa que 9 lbt'8 puede contestarse con 10 b4!. Nor malmente, las blancas deben invertir un tiempo, como l:t bl, para preparar este ... 1 27 avance temático. Aquí, está justificado tácticamente por 10 ... �xb4 1 1 �xf6 'ii' x f6 12 lb xdS, o bien 1 1 ... gxf6 12 lb xdS ! 'ii' x dS 13 �a4. El último refinamiento en el orden de jugadas tiene que ver con el avance ... h6. Las negras a menudo intercalan esta juga da, debido al peligro de �c2/.td3/�xh7+. Pero deben tener cuidado con obtener la respuesta -por lo general, �h4- que real mente quieren. En consecuencia, las blan cas deberían buscar una alternativa a �h4. Por ejemplo: 1 d4 d5 2 c4 e6 3 lbc3 lb f6 4 cxd5 exd5 5 �g5 �e7 6 e3 lb bd7 7 �d3 c6 8 ¡vc2, y ahora 8 h6?. Las posi ... bilidades estarían más o menos igualadas, tras 9 �h4 lbf8 10 lbge2 lbe6 y ... lbgS ! . También 9 . . . 0-0 1 0 lbge2 l:t e8 1 1 0-0 lbf8 y ... lbe4. Sin embargo, es mucho más promete dor 9 �f4!, después de 9 ... 0-0 10 0-0-0, o de 10 lbge2 i::t e8 1 1 0-0-0 y h2-h3/g2-g4. Las blancas deberían procurar trans poner de una Defensa Ortodoxa, en la que se ha jugado ... h6, a una Variante del Cambio. Por ej empl o : 1 d4 d5 2 c4 e6 3 lbc3 lbf6 4 �g5 lbbd7 5 lbf3 h6. Aho ra, si 6 �h4 �e7 7 cxdS, las negras repli can 7 ... lb xdS ! , con igualdad. Pero existe la inmediata 6 cxd5!? 1 28 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ exd5 y quedó un poco peor (9 i.f4 c5 10 i.e2). GAMBITO DE DAMA REHUSADO, DEFENSA ORTODOXA En la Defensa Ortodoxa, 1 d4 d5 2 c4 e6 3 lbc3 lbf6 4 �g5 �e7 5 e3 0-0 6 lbf3 lbbd7, las sutilezas de las blancas comien zan con su torre dama, cuya primera fun ción, según se sitúe en el ó dl , es disuadir al rival de ... c5, le mejor ruptura liberado ra de las negras. Si las negras esquivan el reto, 6 exd5 7 i.h4 �e7 8 e3, quedan algo peor. Por •.. ej emplo: 8 . . . c6 9 'iWc2 0-0 10 i.d3 l:t e8 1 1 i.g3 lbf8 12 h3 .te6 13 0-0 lb6d7 14 lba4 a5 15 a3, l. Sokolov-Seirawan, Campeona to de Holanda por equipos 2002. Aceptar el sacrificio, 6 hxgS 7 dxe6 fxe6 8 lb xgS garantiza amplia compensa ción a las blancas (8 ... i.d6 9 e4! , como en la partida Torre-P. Nikolic, Leningrado 1987). Otro orden en que puede incluirse el avance ... h6 es: 1 d4 dS 2 c4 e6 3 lbc3 i.e7 4 lbf3 lbf6 5 i.g5 0-0 6 e3 lbbd7 7 'iWc2, y ahora 7 h6. Esto provocó la rutinaria 8 i.h4 en autoridades del Gambito de Da ma Rehusado como Akiba Rubinstein, Viktor Korchnoi y Boris Spassky. Pero sus oponentes omitieron la buena réplica 8 cS!. Por ejemplo: 9 l:l dl 'iWa5 10 cxd5 lbxd5 11 .txe7 lbxe7 12 i.e2 lbd5! 13 0-0 lb xc3 14 bxc3 b6 y ... .ta6, Carlsen-Han sen, Skanderborg 2005. Sin embargo, en 1961 , un aficionado demostró la fuerza de 8 cxd5!. Su oponen te, confundido, respondió 8 ... lb xd5? y perdió un peón, porque tenúa que 8 ... hxg5 9 dxe6 ofreciese una compensación excesiva a las blancas. Kasparov revivió la idea contra Portisch, quien respondió 8 ... ... ••• ..• Las negras igualan en caso de 7 a3?! c5! y de 7 'iWb3 c5! (8 cxd5 cxd4 9 lb xd4 lbc5 ! 10 'iWc2 lb xd5, Poluljahov-Tregubov, Kras nodar 2000). Eso explica la jugada 7 � el, que normalmente provoca 7 ... c6, que pro tege los peones e y d y prepara otras ideas liberadoras, como ... lbe4. Pero si ya se ha jugado ... c6, en el caso de que las negras hayan utilizado un orden como 1 d4 dS 2 c4 c6 3 lbf3 e6 4 lbc3 lbf6 5 .tgS lbbd7 6 e3 i.e7?!, no hay necesidad apremiante de jugar l:l el . Rubinstein de mostró que las blancas pueden emplear sus piezas pesadas de forma más efectiva, con 7 'iWc2! 0-0 8 .l.:!. dl!. Ahora, 8 ... c5 trans pone a una posición de libro, en la que las APERTURAS DE PEÓN DAMA negras se han retrasado una jugada, y se encuentran bajo fuerte presión, tras 9 cxdS exdS 10 dxcS. Gracias al tándem 'it'+� , la liquidación familiar, 8 ... dxc4 9 �xc4 tt:JdS 10 Axe7 'it'xe7 1 1 0-0 tt:J xc3 12 'it'xc3 , no permite ... es y deja a las negras con serios proble mas, tras 12 . . . cS 13 'it'a3 , ó 13 �bS cxd4 14 'it'xd4 tt:Jf6 lS lt:JeS tt:Je8 16 �d7 (Bo goljubov-Müller, Zurich 1934). A las blancas les encantaría imponer su juego en estas posiciones. Pero si las ne gras tienen cuidado con ... c6, sólo pueden intentar engañar a su rival. Una forma de hacerlo es con un temprano 'it'c2, en lugar de e2-e3 . Por ej emplo: 1 d4 d5 2 c4 e6 1 29 gar, y es bueno para las negras 6 c5!. La situación es similar cuando las negras em plean el orden 1 d4 d5 2 c4 e6 3 tt:Jc3 �e7 para diferir AgS y las blancas lo difieren voluntariamente aún más: 4 tt:J f3 tt:J f6 5 'it'c2, en cuyo caso, 5 0-0 6 �g5! h6 les permite alcanzar la prometedora posición 7 �xf6 Axf6 8 0-0-0. ••• ••• 3 tt:Jc3 tt:Jf6 4 Ag5 Ae7 5 tt:Jf3 o-o 6 �c2. Otra jugada natural, 5 tt:Jbd7, permi te una excelente Variante del Cambio, 6 cxd5! exd5 7 �f4! c5 8 e3 0-0 9 A d3 , ya que el caballo dama negro está mal situa do. Pero, una vez más, las negras pueden atacar el centro con ... cS, antes de que las blancas lo impidan con l:t dl. Por ejemplo: ••• 5 c5!? 6 cxd5 cxd4! 7 lt:Jxd4 exd5 8 �g5 tt:Jc6 9 .:. dl h6 10 � h4 'it'a5, como en la ••• Ahora, 6 c6?! 7 e3 tt:J bd7 8 l:t dl!, las blancas consiguen su objetivo. Este orden también abre la opción del 0-0-0. Por ejemplo: 6 ... h6 7 �xf6! �xf6 8 0-0-0 y 9 e4, con buenas posibilidades. Después de 6 tt:Jbd7, pueden pasar a la Variante del Cambio, ya que 7 cxd5 ttJ xd5? pierde un peón (8 ttJ xdS exdS 9 Axe7 'fkxe7 10 'it'xc7, o bien 8 ... �xgS 9 lt:J xc7). Pero el problema de un temprano 'it'c2 es que la torre blanca aún no está en su lu•.. .•. partida Rustemov-Ubilava, Olite 2006. GAMBITO DE DAMA REHUSADO, DEFENSA LASKER El punto de partida típico de la Defensa Lasker es 1 d4 d5 2 c4 e6 3 tt:Jc3 tt:Jf6 4 Ag5 �e7 5 e3 h6 6 .i.h4 0-0 7 tt:Jf3 tt:Je4. A di ferencia de posiciones similares, la retirada a g3 no es aquí prometedora (8 �g3 ? ! �b4 9 J:t cl cS). Cuando mejor funciona la simplifica- 1 30 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJEDREZ dora . . . lbe4 es cuando las blancas tienen un caballo en c3, de modo que es posible ... lb xc3, y otro en f3, de modo que con ... lb xe4/ ... dxe4 queda atacado. Las blancas pueden evitar tal disposición de piezas, postergando lbf3 ó lbc3. Por ejemplo: 1 d4 dS 2 c4 e6 3 lbf3 lbf6 4 .tgS ii.. e7 5 e3. las blancas juegan 1 d4 dS 2 c4 e6 3 lbc3 · lbf6 4 ii.g5 lbbd7 5 e3 c6 6 a3 . .. pueden obtener una versión razonable de la Ortodoxa Rubinstein, 6 ii.e7 7 lbf3 0-0 8 '!i'c2 y l:i dl. Pero las negras pueden transponer a una buena Lasker, con 7 lbe4, o con 7 h6 8 ii.h4 lb e4, en cuyo ca so a2-a3 no habrá servido de mucho. La fuerza de la línea principal de la Cambridge Springs, 6 lbf3 'i!VaS depende hoy de si las blancas pueden lograr venta ja con 7 cxdS lb xdS 8 '!i'd2 ii.b4 9 It cl. Las negras deben decidir cuándo j ugar ... e5, ... h6 y ... 0-0, pues de no ser así queda rán claramente peor. La formación básica es la del diagrama: ••• ••• ••• Ahora, 5 lbe4 ha estado bajo sospe cha desde la partida W. Cohn-Leonhardt, Ostende 1907, que siguió con 6 ii.xe7 '!i'xe7 7 lbbd2! 0-0 8 ii. d3 y 8 .. f5 9 0-0 lbd7 10 '!i'b3 c6 11 : acl , y dio a las blan cas una excelente Holandesa Stonewall. Sin embargo, 5 0-0 deja la pelota en el tejado. Las blancas pueden continuar retrasando lbc3 , y jugar 6 '!i'c2, después de lo cual podrán conseguir una formación ideal de la Defensa Ortodoxa, 6 lb bd7 7 lbc3 c6 8 .!itdl!. Pero una vez más, 7 cS! es bueno y las negras deberían poder igualar. ••• . ••• ••• ... GAMBITO DE DAMA REHUSADO, DEFENSA CAMBRIDGE SPRINGS Las blancas tienen varias formas de evitar la Cambridge Springs, en los órdenes tra dicionales. Pero la mayoría de ellos permi ten a las negras entrar en una buena Defensa Ortodoxa o una buena Lasker. Si 1 31 APERTURAS DE PEÓN DAMA En esta posición, las negras han obteni do buenos resultados. Por ejemplo: 13 e4 tll f4 14 ..tc4 tll g6 15 a3 tll xh4! , como se ju gó en una partida Alekhine-Bogoljubov que ganaron las negras, y 13 'i!i'c2 exd4 14 exd4 tll 7b6 15 tll eS ..te6 finalizó en rá pidas tablas, Piket-Ivanchuk, Mantecado 1993. Lo difícil para las negras es alcanzar esa formación. El match de Candidatos de 1983 entre Kasparov y Smyslov sometió a prueba varios órdenes de jugadas, y de mostró que 9 e5?! era malo, en vista de 10 a3! ..txc3 11 bxc3 'i!i'xa3 12 e4, con un peligroso ataque. Ese tipo de sacrificio es una de las principales preocupaciones de las negras. Alekhine dijo que el mejor or den de las negras para alcanzar la forma ción era 9 0-0 10 ..td3 e5, y ahora 11 0-0 h6 12 ..th4 l::t c8. Pero se basaba en su afir mación de que 1 1 a3 ! ? ..txc3 12 bxc3 'i!i'xa3 era incorrecto. Si un jugador de la Cambridge Springs tiene dudas al respecto, debería considerar la ligeramente distinta 9 0-0 10 ..td3 h6. ••• .•. Pero este orden tiene un problema poten cial en 11 ..tf4!? tll xf4 12 exf4, que impide . . . es . Por ej emplo : 1 2 . . . tll f6 1 3 0-0 cS 14 dxcS � xcS lS a3 � e7 16 tll eS l:t d8 17 'i!i'e2 fue prometedor para las blancas en la partida Hillarp Persson-Vera, Erevan 1996. Algunas autoridades dicen que lo me jor es 9 . . . h6, porque aquí 10 .tf4 es menos prometedor, y 10 .th4 0-0 11 ..td3 eS llega a la formación deseada. Pero las blancas podrían mejorar con 1 1 �c4 ! ? , como en una partida de Alekhine, que siguió con 1 1 . tll xc3 1 2 bxc3 ..ta3 13 Ja bl e s 14 .tg3. Por consiguiente, las negras deberían op tar por el orden que evita lo que quieren evitar. Si no les importa j ugar 9 0-0 10 .td3 h6 1 1 .tf4 ! ? , entonces ésa es su mejor apuesta. Pero si están dispuestas a aceptar uno de los gambitos, otros órdenes son superiores. . . . . GAMBITO DE DAMA REHUSADO, VARIANTE BOTVINNIK ••• Si busca en los libros la Variante Botvin nik, la encontrará baj o el orden 1 d4 dS 2 c4 e6 3 tll c3 tll f6 4 tll f3 c6 S ,,tgS dxc4. Pe ro el pequeño secreto de los especialistas en la Botvinnik es que muy pocos utilizan actualmente ese orden, porque la ductili dad en su manejo garantiza a las blancas muchas alternativas prometedoras, entre ellas 4 .tgS y 4 cxdS. Son otros órdenes, como 1 d4 d5 2 c4 c6 3 tll f3 tll f6 4 tll c3 e6, lo que convier ten a la Variante Botvinnik en el arma que es. (Ver diagrama 238.) Ahora, 11 ..th4 l::t e8 12 0-0 e5 llega a la formación, y 12 a3 ..tf8 también es seguro. Las negras evitan 11 . eS 12 a3 ! ? , que po dría ser una buena versión del gambito. .. "¿Conoces tanto como yo de la Varian te Botvinnik? ," pregunta el jugador con negras. "¿O acerca de la Merano?" 1 32 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJEDREZ Quiere decir acerca de 5 � gS dxc4, o de 5 e3 llJbd7 6 i.d3 dxc4. Si a las blan cas no les gustan sus respuestas a tales preguntas, también deberían estar decep cionadas cuando buscan alternativas y ven que 5 cxdS exdS! es una inofensiva Variante del Cambio (6 .t g5 .te7 y ... .tf5 ! ) . E incluso si conociesen las inten ciones de las negras, las blancas deberían ser reticentes a jugar cxd5 en la tercera o cuarta jugadas, porque acabarían en una línea supertranquila de la Variante del Cambio en la Eslava. Así pues, lo que un jugador de la Botvinnik está diciendo con este orden es: "No tienes mucho dónde elegir. O es la Botvinnik para ti, o es una rápida igualdad para mí." Cuando las blancas entran en 5 .t gS dxc4, justifican el peón perdido con 6 e4 bS 7 e5 h6 8 � h4 gS 9 llJ x gS hxgS 10 i. x gS , con tremendas complicacio nes. Una de las posiciones menos anali zadas se produce cuando el alfil se retira a g3 . (Ver diagrama 239.) En esta posición están sucediendo mu chas cosas, y además en ambos flancos. Por ejemplo: 9 ... llJxd5 10 llJd2 �e7 11 �e2 i.b7 12 llJde4 llJd7 13 h4 c5 14 hxg5 lLl xc3 1 5 llJ xc3 cxd4 16 'i!Vxd4 i. xg5 17 0-0, como en la partida Hillarp Persson-Hec tor, Gotemburgo 2006, que ganaron las blancas. Si esto le parece atractivo, tal vez me rezca la pena que añada a su repertorio 9 i.g3, porque puede llegar a la posición del diagrama 239 por otros órdenes. Por ejem plo, después de 1 d4 d5 2 c4 e6 3 llJ c3 c6 4 llJ f3 llJ f6 5 i. g5 , y si a las negras no les gusta la Botvinnik ni la Cambridge Springs, j ugarán 5 ... h6. Los libros solían decir "si 6 i.h4?, entonces 6 ... dxc4! gana un peón". Sin embargo, 6 i.h4 dxc4 7 e4 es pro metedor, incluso después de 7 ... g5 8 .tg3 b5. En tal caso, las blancas tienen diversos medios de buscar compensación, entre ellos 9 e5, llegándose a la posición del dia grama 239. GAMBITO DE DAMA REHUSADO, VARIANTE VIENESA Ha habido muchas tentativas por refutar la Variante Vienesa, 1 d4 dS 2 c4 e6 3 llJf3 llJf6 4 llJc3 dx4 5 �gS i.b4 6 e4 cS, pero la conservadora 7 i.xc4 es hoy la línea principal. La formación derivada de ella se refleja en el diagrama: APERTU RAS DE P EÓN DAMA 1 33 cas pueden tener que arriesgarse, con 10 lDc2 i.xc3 11 j¡_xc3 �gS ! 12 'ii'e2 'i!Vxg2 13 0-0-0. DEFENSA TARRASCO Y SEMI-TARRASCO La teoría antigua afirmaba que las blancas estaban mucho mej or ( 1 1 . . . 'ii' xc4+ 12 '>f;gl gxf6? 13 l:. cl, o bien 12 .. . lDd7 13 %:'l cl). Pero 11 ... gxf6! resultó ser excelente para las negras y hoy su mayor preocupación es cómo llegar a la posición del diagrama 240. Una forma de lograrlo es con 7 i.xc4 cxd4 8 lD xd4 'ika5, después de lo cual 9 .txf6 .txc3+ 10 b xc3 'if xc3+ 11 <ott fl . La otra es 8 i.xc3+ 9 bxc3 'ii'a5 , y ahora 10 �xf6 'i!Vxc3+. La ventaja del primer orden es que las negras preservan su alfil rey pa ra la defensa de las casillas oscuras. Esto es importante en el segundo orden, cuando las blancas ensayan 10 �bS+, en lugar de 10 �xf6. Después de 10 ... lDbd7 1 1 i.xf6 'ii' x c3+ 12 <ott fl gxf6 13 h4! y %:'l h3, ofrece buenas perspectivas a las blancas. Pero en el primer orden, el jaque es inocuo, 8 ... 'i!VaS 9 .tbS+ lDbd7 10 .txf6 gxf6. El problema de 8 ... 'ii' a S, según las au toridades, y ya de análisis que se remontan a los años treinta, es "9 i.d2 ! , y después de 9 . . . es, 10 tDc2". Pero 9 �d2 es tan pasivo que 9 .. . 0-0 hace que las piezas blancas parezcan mal colocadas (10 'ii' e2 l::t d8 1 1 lDf3 lDc6 12 a3 .txc3 13 �xc3 'i!VhS, Summerscale-Wells, Millfield 2000). En lugar de ello, las blan- Actualmente, la formación de la Defen sa Tarrasch se produce con este orden: 1 d 4 d5 2 c4 e 6 3 lD c3 c5 4 c x d5 e x d5 5 lD f3 lD c6 6 g3 lD f6 7 i.g2 i.e7 8 0-0 0-0, y el peón d negro se convierte en el foco del medio j uego, tras el cambio de peones. Por esto es por lo que las negras pueden apresurarse a defenderlo con 5 . lDf6?! • . .•• Su castigo en tal caso es 6 j¡_g5!, pues habrían transpuesto a 1 d4 dS 2 c4 e6 3 lDf3 lDf6 4 �gS, cuando las negras juegan le negligente 4 . . . cS? ! y permiten S cxdS exdS 6 lDc3. La respuesta correcta es 5 lDc6!, en cuyo caso 6 �g5 pierde fuerza, por 6 � e7! . Las negras pueden caer en la misma trampa, a través de la Semi-Tarrasch, 1 d4 dS 2 c4 e6 3 tDc3 lDf6 4 lDf3 cS, si juegan S cxdS exdS? (en lugar de S ... lD xdS) 6 �gS ! . .•• ••• 1 34 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJEDREZ DEFENSA ESLAVA Las primeras jugadas de la Defensa Eslava encierran cierta sutileza, a causa de las fuer tes impresiones que los jugadores tienen acerca de las líneas principales, como la Es lava Abierta, y las variantes Merano y Chi gorin de la Semi-Eslava. En consecuencia, una Eslava a menudo es una batalla silen ciosa entre un jugador que trata de evitar, digamos, la Eslava Abierta, y otro que trata de evitar la Merano, correspondiendo normal mente el éxito al que mejor sabe transponer. Tomemos, por ejemplo, este inicio de fea apariencia: 1 d4 lll f6 2 c4 c6 y 3 d5. No se le ha prestado mucha atención, a pe sar de que ha sido empleada por Paul Ke res, Efim Bogoljubov y Alekhine. Las blancas a menudo responden 3 lll c3 auto máticamente y, después de 3 ... d5, com prenden que no pueden plantear líneas anti-Merano, como lll bd2 o diferir una ju gada el desarrollo del caballo dama, como en la línea 1 d4 d5 2 c4 c6 3 lll f3 lll f6 4 e3 e6 s Ad3 lll bd7 6 o-o. O bien, supongamos que se juega 1 d4 d5 2 c4 c6 y ahora 3 e3. ... que un temprano e2-e3 es una buena for ma de evitar el alto "mantenimiento" de la Variante Abierta (1 d4 d5 2 c4 c6 3 lll c3 lll f6 4 lll f3 dxc4) . Para lograr ventaja, las blancas deben jugar 5 a4 �f5 6 e3 ó 6 lll e5, o incluso arriesgarse con el gambito 5 e4! ?. En cualquiera de estos casos, ten drán que memorizar una buena cantidad de teoría. Pero si las negras juegan ... dxc4, des pués de e2-e3, las blancas pueden retomar en c4 sin perder un tiempo con a2-a4, transponiendo así a un Gambito de Dama Aceptado favorable, como si las negras hubiesen jugado 1 d4 d5 2 c4 dxc4 3 e3 c6? ! 4 � xc4. En caso de 1 d4 lll f6 2 c4 c6 3 e3, las ne gras tienen la buena alternativa 3 g6!. Luego, pueden transponer a una de las mejores versiones de la Defensa India de Rey. Por ejemplo: 4 lll c3 il. g7 5 lll f3 0-0 6 �d3 d6! 7 0-0 lll bd7 8 11Wc2 c5 9 l:t dl 11We7 10 .tfl e4 1 1 lll d2 :l e8. El orden e2-e3 en cualquier Eslava tie ne otros dos inconvenientes. Uno es que ... �f5 ! es más seguro cuando el alfil dama blanco está bloqueado. Por otro lado, las negras pueden transponer a una buena ver sión de la Variante Schlechter de la Grün feld (1 d4 d5 2 c4 c6 3 lll f3 lll f6 4 e3 g6). La reputación que la Schlechter tiene de plo miza se basa en líneas con las más empren dedores �f4 ó Jl.g5. ••• DEFENSA ESLAVA, VARIANTE DEL CAMBIO ¿Por qué deberían las blancas optar por una jugada tranquila? La razón es Las blancas pueden iniciar la Variante del Cambio en la tercera jugada (como hacen hoy casi todos los jugadores) , en la cuarta (como prefería Botvinnik) o más tarde. El motivo de postergarla es que las negras pueden definir prematuramente la posi- APERTU RAS DE PEÓN DAMA 1 35 ción de sus piezas, antes de saber que su ri val va a jugar exd5 . Por ej emplo: 1 d4 dS DEFENSA ESLAVA, 3 lLic3 2 c4 c6 3 lLit3 lLif6 4 lLic3 �fS? 5 cxdS cxdS 6 �b3! es favorable a las blancas. En otros tiempos, esta jugada se prefería a 3 lLif3 (después de 1 d4 d5 2 c4 c6), porque cumple mejor la tarea de disuadir ... �f5, como en la línea 3 lLi c3 lLi f6 4 e3 � f5 ? ! 5 cxd5 cxd5 6 �b3. Hoy día, cuando las blancas eligen 3 lLic3 suele deberse a otra razón, a saber, llegar a la Semi-Eslava, después de 3 ... l¿jf6 4 e3 e6 5 lLif3, sin permitir la Variante Abierta, 4 lLic3 dxc4. Los libros dicen que el inconveniente de 3 lLJc3 es 3 dxc4, de bido a que ... b5-b4 atacará el caballo. ••. Lo mismo puede decirse de 4 . . . lLibd7, pues 5 cxd5 ! cxd5 6 �f4 deja al caballo da ma mal colocado, Después de 6 e6 7 e3 �e7 8 h3 0-0 9 �d3, las blancas tienen las mejores piezas. Por ejemplo: 9 ... lLib6 10 0-0 �d7 11 lLJe5 l:l c8 12 �b3 ! �e8 13 l:Hcl lLifd7 14 a4! , Reshevsky-Bemstein, Cam peonato de EEUU 1951. En la Variante del Cambio normal, 3 cxdS cxdS 4 lLi c3, hay una pequeña tram pa para un jugador inadvertido que lleve las negras, y piense que este orden le per mite 4 lLi c6 , en cuyo caso se verá sor prendido por 5 e4! . Las blancas disfrutan de una clara ventaj a tras 5 ... dxe4? 6 d5 lLie5 7 �a4+ �d7 8 �xe4. Las negras de berían jugar 5 ... lLJf6, con la esperanza de que las blancas les permitan la variante del final en el Ataque Panov (6 exd5 lLi xd5 7 lLJf3 �g4 8 'ifb3 �xf3 9 gxf3, etc.). Pero es mucho más prometedor 6 eS lLie4 7 ii.d3. Por ejemplo: 7 ... lLi xc3 8 bxc3 e6 9 lLif3 h6 10 0-0 lLi a5 11 .!:[ bl �d7 12 lLid2 y �g4, Gaprindashvili-Murshed, Polanica Zdroj 1986. ••• ••• Pero en la práctica las negras juegan a menudo 3 lLic3 dxc4 sin intención de se guir con ... b5. Lo conocen todo acerca del truco 3 lLic3 lLJf6 4 e3 para evitar la Eslava Abierta. "Pero yo soy quien va a plantear la trampa", se dice el jugador a sí mismo, "porque llegaré allí después de 3 . . . dxc4 4 lLif3 lLif6 ! " . Las blancas pueden evitar l a Abierta con 4 e4!?. Pero entonces 4 ... bS tiene ma yor justificación (5 a4 b4 6 lLi a2 lLif6!). En lugar de ello, prefieren 4 e3, y puede seguir 4 ... b5 5 a4 b4 6 lLia2 e6 7 �xc4 lLif6 y, puesto que no tienen un peón atacado en e4, pueden continuar con 8 lLif3. 1 36 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ ¿Qué ha sucedido? Este orden a menu do se produce tras 1 d4 dS 2 c4 c6 3 tLlf3 tLlf6 4 tLlc3 dxc4, cuando las blancas no buscan la ventaj a con 5 a4 ni 5 e4! ? , sino que juegan la inocua 5 e3. Ahora, 5 bS 6 a4 b4 7 tLi a2 e6 8 .i x c4 llega a l a posición del diagrama 245 . Por ej emplo: 8 . . . tLl bd7 9 0-0 .t b7 1 0 .t d2 a5 1 1 tLi c l .t d6 1 2 tLl b 3 c5 13 'ife2 0-0 14 Jl fdl 'ifb6. Las negras ríen las últimas. No sólo han entrado en la Eslava Abierta, sino que, al tratar de evi tarla, las blancas incluso han entrado en una versión absolutamente igualada de la misma. ••• DEFENSA ESLAVA, 3 tLlf3 Aunque 3 tLlf3 dxc4 tiene menos empuje que la versión 3 tLic3 dxc4, a las negras puede gustarles, debido a los trucos que contiene. Cuando las blancas tratan de castigar 3 . . . dxc4 con 4 e4 bS 5 a4, pueden evitar la transposición al Gambito Eslavo, 5 . . . tLlf6, mediante 5 e6! (Ver diagrama 246.) ••. De este modo quieren empujar a las blancas a jugar 6 tLic3 �b4!, una versión de la Variante Noteboom en la que las blancas han avanzado a e4. El peón es más agresivo en esta casilla, pero también más vulnerable. Ambos bandos tienen posibili dades, después de 7 .te2 tLl f6 8 'ifc2 �b7 9 0-0 a6 10 e5 tLld5 11 tLie4 tLld7. La idea temática es 6 axbS cxbS 7 b3. Pero de nuevo las negras deberían atacar e4. Por ejemplo: 7 ... tLlf6! 8 e5 tLie4 9 bxc4 .tb4+ 10 tLlbd2 tLic6 1 1 .td3 tLic5 ! , con buenas posibilidades para las negras, Be liavsky-Jarlov, Ljubljana 2002. Más habitual es 3 . tLlf6, después de 1 d4 d5 2 c4 c6 3 tLlf3. Ahora, 4 'ifc2!? per mite a las blancas eludir la Variante Mera no, respondiendo a 4 ... e6 con 5 g3. Las negras tienen su elección principal en la Catalana Cerrada (que a pocos jugadores Merano les gusta) y una Holandesa Stone wall, con 5 ... tLie4 y 6 ... f5, en la que toda vía menos entrarían. La jugada de dama también puede ser un buen arma contra una Eslava Abierta, debido a 4 dx c4 5 e4 bS 6 b3!. Las blan cas tienen buena compensación después de 6 ... cxb3 7 axb3 e6 8 �d2. Por ejemplo: 8 . . a5 9 �d3 �b7 10 0-0 .te7 11 �c3 (Nakamura-Hansen, Malmo 2005) . 4 'ifc2 no tiene un inconveniente serio, pero 4 g6 es una versión mejor de la habitual de .. ••• . •.• APERTU RAS DE PEÓN DAMA la Eslava Schlechter, porque ... .tfS ganará un tiempo. Si las blancas omiten las distintas eva siones de la Eslava Abierta y continúan con 4 lll c3 , las negras tienen la alternativa 4 dxc4 5 a4 �f5, en forma de 5 e6! ? .•. .•. La tentación natural es castigar una ju gada tan pasiva con 6 e4. Pero 6 �b4 7 e5 ll'ld5 8 �d2 b5 9 axb5 transpone a una línea del Gambito Eslavo que no es del to do mala para las negras (5 e4 bS 6 eS ll'ldS 7 a4 e6 8 axbS �b4 9 �d2). Esto tiene una ventaja psicológica, ya que la preferencia de las blancas por 5 a4 (en lugar de 5 e4) indica que no confían en las líneas de gam bito. La réplica más corriente, en la posición del diagrama, es 6 e3. Después de 6 c5 7 �xc4, estamos en un Gambito de Dama Aceptado, en el que las blancas disponen de un tiempo extra, a2-a4. Pero a Kram nik, entre otros, le gusta la posición de las negras, porque después de 7 ... lll c6 8 0-0 cxd4 9 exd4 �e7, logran algún control de dS, ocupando el agujero de b4 con su caba llo. Por ejemplo: 10 'it'e2 0-0 11 l:!. dl lll b4, y las negras parecen estar bien. Podría se guir 10 �gS 0-0 11 l:l el �d7, como en la partida Navara-Svidler, Turín 2006. 1 37 ESLAVA, TRES PEONES Cuando las negras emplean sus tres prime ras jugadas en disponer sus peones en dS, c6 y e6, están sacrificando el desarrollo en aras de posibles transposiciones. Pueden inducir a unas reticentes blancas a entrar en la Botvinnik, la Noteboom y otras va riantes agudas, o incluso en una Holande sa mejor de lo normal, además de algunas líneas de la Merano, evitando, de paso, las líneas peligrosas de esta última variante. Puede que las negras prefieran 1 d4 dS 2 c4 c6, seguido de 3 ... e6, al otro orden, 2 ... e6 y 3 ... c6, porque 2 . . . c6 parece inducir 3 lll f3 . De esta forma, no tienen que en frentarse al Gambito Marshall, 3 lll c3 e6 4 e4. Pero otro jugador con negras preferi rá 2 ... e6 3 lll c3, porque impide la opción ll'lbd2 en la Semi-Eslava. ••. .•• El orden 3 lll c3 priva a las blancas de 4 �gS y disuade 4 cxdS, debido a 4 ... exdS ! y ... �fS, igualando. Las negras se arriesgan a que su rival plantee el Marshall, 4 e4, pero pueden tra tar de impedirlo con 4 �b4, y después de 5 exdS cxdS 6 lll f3, entrar en una Caro Kann Panov, relativamente benigna. Sin embargo, 5 eS ó 5 'it'g4 son un mayor de•.. 1 38 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ safio. Por ejemplo: 5 'it'g4 tll f6 6 �xg7 l: g8 7 �h6 dxe4 8 a3 �xc3+ 9 bxc3 e5, como en la partida Gelashvili-Izoria, Atenas 2005. Las principales alternativas en la cuar ta jugada son una Catalana poco explora da, 4 g3, y mantener la situación fluida, con 4 tll f3 ó 4 e3. La flexibilidad de la Varian te Tres Peones queda ilustrada por las opiones de las negras después de 4 tll f3 : (a) 4 ... f5 crea una Stonewall, con la que las negras pueden sentirse felices, pues no tendrán que preocuparse de las manio bras tll h3-f4 y tll bd2, peligrosas en los ór denes normales de la Defensa Holandesa. Pero las blancas no han sido privadas de 5 �f4 ! , favorable a su causa. (b) 4 ... tll f6 invita a entrar en una Se mi-Eslava (5 e3 tll bd7) o un Gambito de Dama Rehusado (5 �g5). Las negras pue den esperar este último caso, pues si las blancas buscasen entrar en una Semi-Esla va, podrían haberlo hecho directamente con 4 e3, sin tener que ocuparse de 4 tll f3 dxc4. (c) 4 dxc4 empuja a las blancas hacia una Noteboom (5 a4 �b4). Esta variante tiene una carga teórica tan densa que sólo los muy valientes y los teóricos se atreve rán a jugar con seguridad 4 tll f3, a menos que ... A menos que las blancas piensen res ponder a 4 tll f3 dxc4 con 5 �g5! ? (Ver diagrama 249.) ••• Ésta es la forma que las blancas tienen de decir "sospecho que no quieres entrar en una Botvinnik, porque si así fuese, ha brías jugado 4 . . . tll f6, y después de 5 �g5, 5 ... dxc4. Pero ahora tienes un problema, si quieres evitar la Botvinnik". Quieren decir que después de 5 f6 6 �d2 c5, 7 e3! es un peligroso gambito, ba••• sado en la debilitada casilla e6. Por ejem plo: 7 ... tll c6 8 �xc4! cxd4 9 exd4 tll xd4 10 0-0 ! . Por ejemplo: 10 ... tll xf3+ 11 'it'xf3 'it'xd2 12 ll adl 'it'xb2 13 tLl b5, o bien 12 ... 'it'g5 13 l:t fel �e7 14 tll b5 'it'c5 15 l:I cl , Glek-An. Bijovsky, Porto San Giorgio 1999. Si el j ugador con blancas es más con servador, preferirá 4 e3, que impide las variantes Noteboom, Botvinnik y otras, invitando a entrar en una Semi-Eslava, 4 . . . tll f6 5 tll c3 . Las negras pueden seguir sin mostrar sus cartas un poco más, con 4 tll d7 . De algún modo, sugieren que a 5 tll f3 responderán con una excelente Stonewall (5 f5! ) . Después de 6 � e2 tll gf6 7 0-0 � d6 es el tipo de posición agresiva con que las negras sólo pueden soñar en un orden de jugadas normal de la Defensa Holandesa. Por ej emplo: 8 a3 a5 9 l:t b l 'it' e7 1 0 � d2 0-0 1 1 b4 tll e4 12 bxa5 .U f6 ! 1 3 �el l:l h6 14 g3 g5, con excelente j uego, Polak-Stangl, Brunn 1993 . Las blancas pueden contestar con la sutileza 5 � d3 , de modo que 5 f5 6 cxd5! exd5? 7 �x f5 cuelga un peón, y 6 ... cxd5 es una Eslava/Cambio, en la que el caballo dama negro está mal situado. Como conse cuencia, las negras suelen jugar 5 . . . tll gf6, ••• ••• ••• APERTU RAS DE PEÓN DAMA . y 6 l2Jf3 lleva las blancas a la Semi-Eslava que querían. Alexei Dreev y Evgeni Sveshnikov han respondido a 5 �d3 con una contrasutile za, 5 ... dxc4 6 i.x c4 b5. É sta es una Merano acelerada, en la que hay poca experiencia práctica. Por ejemplo: 7 �e2 �b7 8 l2Jf3 a6 9 0-0 c5 es una excelente versión de la Merano (10 d5 exd5 1 1 l2J xd5 l2Jgf6 12 e4! ? lLl xdS 13 exd5 Ad6, Sherbakov-Sveshnikov, Rostov 1993). Las blancas disponen de opciones adicio nales en esa línea, como 8 Af3 y l2J ge2/ a2-a4, o bien 7 .td3 Ab7 8 l2Jf3 a6 9 0-0 c5 10 .te4, pero no puede decirse que sean impresionantes. En la posición del diagrama 250, su me jor opción posiblemente sea transponer a un Ataque Reynolds de la Merano, con 7 A d3 Ab7 8 l2J f3 a6 9 e4! , y ahora 9 . . . c5 10 d5 c4 11 �c2 l2Jgf6 ! . Pero el hiperagu do Ataque Reynolds no es para todos. Está claro que los Tres Peones resisten buen número de fintas y amagos. La otra versión se produce cuando el caballo rey blanco se desarrolla antes, 1 d4 d5 2 c4 c6 3 l2Jf3 a6. Después de 4 e3 l2Jd7, las negras de nuevo pueden jugar una cuasi Merano, sin temor a e3-e4-e5. Por ejemplo: 5 �d3 1 39 dxc4! 6 Ax c4 b5 7 Ad3 a6 y 8 0-0 l2Jgf6 es una lmea inofensiva de la Merano. La idea temática es 8 l2Jc3 l2Jbd7 9 e4 . Pero 9 c5 10 e5 tiene menos sentido cuando no hay un caballo en f6. Y, una vez más, un juego tipo Reynolds, 10 d5 no ofrece gran cosa, tras 10 ... exd5 11 l2J xd5 l2Jgf6. Por ejem plo: 12 l2J xf6+ �xf6 13 0-0 i.d6 14 a4 c4 15 .t c2 0-0 16 A g5 'i:Ve6 17 l2J d4 'ii' e5 18 f4 'i:Vxd4+! 19 'i:Vxd4 �c5, como en la par tida Jelen-Sveshnikov, Nova Gorica 1998. La principal opción extra de las blan cas con este orden es 4 .tgS. ••• Si, ahora, 4 ... l2Jf6, estamos en un Gam bito de Dama Rehusado. Pero tal vez las negras prefieran 4 Ae7 5 Axe7 VJixe7. Cambiar este buen alfil parece dudoso, pe ro muchos se contentarían con jugar 6 e3 l2Jf6 7 l2Jc3 0-0 8 l:l cl l2Jbd7 9 Ae2 dxc4 10 i.xc4 e5. ••• DEFENSA SEMI-ESLAVA A la Semi-Eslava puede llegarse por el Gambito de Dama Rehusado, la Eslava o la Tres Peones. La primera sutileza de las blancas es desarrollar su caballo dama por d2, en lugar de c3, como en la línea 1 d4 d5 2 c4 c6 3 l2Jf3 l2Jf6 4 e3 e6, y ahora 5 l2Jbd2. 1 40 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ Esto les permite obtener posiciones teóri cas favorables, si las negras continúan con S ... tbbd7 6 �d3 il.d6 7 e4! dxe4 8 tb xe4. Es la misma posición que logran tras 5 tbc3 lbbd7 6 .td3 �d6 7 e4! prometen con un temprano lt:Jbd2, como hizo Kramnik en su match de 2006 por el Campeonato Mundial, S ... dxc4 6 .txc4 cS. Algo diferente es otro orden anti-Me rano, 5 �d3 lbbd7 6 0-0. Pero el orden S tbbd2 tiene dos venta jas, ambas basadas en que las blancas pue den retomar en c4 de caballo. En primer lugar, no permiten una Merano, pues S ... tbbd7 6 �d3 dxc4 7 tb xc4 bS? ! 8 ttJceS tb xeS 9 tb xeS il.b7 10 0-0 ..td6 1 1 f4 0-0 12 �f3, Litinskaia-Arajamia, Candidatas 1988, es excelente. En segundo lugar, no permiten a las negras la mejor versión del sistema de Chigorin, 6 ... .i'.d6 7 e4 dxc4 (8 .i'.xc4 eS ! ) , debido a que 8 tb xc4! impide ... es. Alekhine pensaba que este truco era tan fuerte que las negras debían responder a un temprano 5 lbbd2 con S ... cS ! ? . Por esta razón, las blancas a menudo invierten actualmente el orden: S .td3 , y si S ... lb bd7, entonces 6 tb bd2. Su razona miento es que el caballo dama negro está mal situado en d7, en caso de un poste rior ... cs. Lo mejor para las negras en tal caso podría ser regresar al Gambito de Dama Aceptado, en el que las blancas se com- Ésta es una jugada psicológica. Los ju gadores de la Merano normalmente no quieren una posición del Gambito de Da ma Aceptado, como 6 ... dxc4 7 � xc4 cS, aunque sea su mejor opción. Por el contra rio, les atraen las líneas tipo Merano, 7 ... bS 8 .,td3 a6, y se juegan sus opciones tras 9 a4. Pero este truco actúa como un bume rán, si las negras adoptan el plan de Chi gorin, 6 ... il. d6! , pues tras 7 lb bd2 0-0 8 e4 eS, la posición está igualada. En caso de 7 tb c3 0-0, se llega a una posición que suele producirse por el orden 1 d4 dS 2 c4 e6 3 tb c3 tb f6 4 tb f3 c6 S e3 lb bd7 6 ..t d3 �d6, y si ahora las blancas juegan la imprecisa 7 0-0? ! , las negras respon den 7 . . . 0-0. La diferencia es que ahora 8 e4 dxc4! 9 .txc4 eS es bueno, porque las negras es tán enrocadas. Sin embargo, si las blancas hubiesen jugado 7 e4! en el orden S ..td3 lbbd7 6 tbc3 �d6, las negras no podrían responder 7 ... dxc4 8 ..txc4 eS? 9 dxeS APERTU RAS DE PEÓN DAMA t2J x e5 10 t2J xe5 .t xe5, en vista de 1 1 �xd8+ y �xíl, con ventaj a. En la línea principal de la Merano, 1 d4 dS 2 c4 c6 3 t2J f3 t2J f6 4 e3 e6 5 t2J c3 t2J bd7 6 .t d3 dxc4 7 i.xc4 bS 8 � d3 , hay un orden engañoso, que comienza con 8 i.b7, en lugar de 8 . . . a6. La idea es responder a la natural 9 e4, que es la ju gada correcta contra 8 . . . a6, con 9 b4! . Entonces, las blancas pueden entrar en un medio j uego ¡ con cuatro damas ! , des pués de 10 e5 bxc3 11 exf6 cxb2 12 fxg7 bxal � 13 gxh8�. Su única alternativa buena es una variante muy complej a (10 t2J a4 c5 11 e5 tL\ d5 ) , que puede obligar les a sacrificar, al menos, un peón, si quieren conservar la esperanza de lograr ventaja. Por esa razón, muchos jugadores evi tan, con blancas, el tema, optando por 9 0-0. La continuación 9 b4 10 t2J a4 es muy analizada en los libros, pero el veredicto es confuso. Sin embargo, 9 a6! ? es la elec ción del tahúr. (Ver diagrama 254.) 1 41 ••• ••• ... ••• Lo que ha pasado es que las negras han llegado a una Merano normal (8 ... a6) en la que se ha planteado la segunda mejor jugada, 9 0-0, a la que las negras han res pondido 9 . . .tb7. Es ésta un buen arma contra un jugador con blancas que no quiera entrar en el Ataque Reynolds (10 e4 c5 11 d5). La clave es que 10 e4 c5 11 eS es como la viej a línea Merano, pero con 0-0 y ... Ab7 añadidas. Ésta es una posición prácticamente nueva, de modo que las posibilidades son recíprocas, después de 1 1 ... cxd4 12 tLl xbS �xf3, o bien 1 1 ... t2Jd5 12 a4 b4 13 t2Je4 cxd4 14 .tgS �b8 (Dambacher-Stellwa gen, Campeonato de Holanda por equipos 2006). . 1 43 Capítulo 6 Defensas indias Actualmente, la respuesta más popular a 1 d4 es 1 lll f6 , y la réplica más popular a esta jugada es 2 c4, abriendo la puerta a la defensas hipermodernas que llamamos in dias. Tenemos tendencia a omitir 2 lt:Jf3, porque, normalmente, "suele transponer". Pero lo cierto es que permite a las blancas eludir el Gambito Benko, el Gambito Bu dapest y algunos otros sistemas. A cambio, las negras pueden entrar en una Defensa India de Rey, sin temor a un ataque Sa misch o a una Benoni Moderna, sin preo cuparse acerca de los sistemas con f2-f4. O bien pueden proponer un Gambito de Da ma Rehusado (2 . . . d5), en el que las blan cas han definido ya la posición de su caballo de rey. Los libros subestiman también 2 �g5, una jugada que progresivamente se ha convertido en un arma temible en manos de un pensador flexible, que puede optar por el Ataque Torre o un Gambito de Da ma Rehusado cuando lo considere opor tuno. Por ej emplo, después de 2 . . . e6, las blancas pueden salir del esquema normal de la Trompowsky (3 e3 ó 3 e4) y entrar en el Torre, con 3 lll f3 . Esto tiene sentido para un jugador que, con blancas, sólo le gusta la Trompowsky cuando le permiten •.• doblar peones (� xf6), o construir un fuerte centro con f2-f3 , después de 2 . . . lll e4. Para el jugador Trompowsky que no tiene interés en transponer a otra apertu ra, la posición crítica es ésta: La teoría afirma que las negras pueden igualar con 4 ¡fb6. Si eso es cierto, ¿có mo pueden las blancas evitarlo y cómo pueden conseguirlo las negras? Un cami no es 1 d4 lll f6 2 �g5 c5, y ahora 3 d5 lll e4 4 .tf4. Pero las negras deben preocuparse por 3 �xf6 y 3 lll c3 ! ? . Ambas jugadas son peligrosas y tienen su propio cuerpo analí tico a memorizar. ... 1 44 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J U GADAS EN AJEDREZ Es más preciso 1 d4 ll:if6 2 �g5 ll:i e4 , y luego 3 Af4 c5 4 d5. Las posibilidades de las negras de alcanzar el diagrama an terior son mucho mayores, porque en es te orden el alfil se retira a h4 con menos frecuencia. Si avanzamos y suponemos que las blancas contestan a 4 �b6 con 5 Acl! . (Los amantes de la Trompowsky hacen cosas así, es natural en ellos.) Las blancas esperan construir un fuerte cen tro, con f2-f3 y e2-e4, que justifica su pér dida de tiempo. Pero después de 5 e6, tendrán que jugar, bien un gambito dudo so, 6 c4 �b4+, bien entrar en 6 f3 ll:if6. Esto último conduce a menudo a 7 c4 ••• ••• exd5 8 cxd5 c4. �xc5 7 ll:i c3 , con juego favorable a sus . intereses. Por ejemplo: 7 . . d5 8 0-0-0 �e6 9 e4, o bien 7 . . d6 8 e4 a6 9 0-0-0, Berg-Ilincic, Budapest 2006. Pero las ne gras tienen una medida correctora, a sa ber, 4 �a5+ ! ? 5 c3 ll:i f6 . Ahora, 6 dxc5 �xc5 7 e4 e5 ! , con juego excelente. Lo mej or para las blancas es 6 d5, a lo que puede seguir 6 . . . �b6 ! 7 �el (no 7 �d2 ll:i xd5 ! ) 7 . . e6 8 c4 exd5 9 cxd5 c4, que lleva otra vez a la posición del diagrama 256. Una última precisión acerca de la Trompowsky: después de 1 d4 ll:i f6 2 � g5 ll:i e4 3 � f4 d5 , en lugar de 3 . . . c5 , las blancas pueden quedar en una ver sión favorable del Gambito Blackmar Diemer. Este gambito es dudoso en su forma básica, 1 d4 d5 2 e4 dxe4 3 ll:i c3 ll:i f6 4 f3 exf3 5 ll:i xf3 . Pero con un tiem po extra, 1 d4 ll:if6 2 �g5 ll:i e4 3 �f4 d5 4 f3 lD f6 5 e 4 ! ? d x e 4 6 lD c 3 ! e x f3 . . ••• . 7 ll:i xf3 Esto es significativo por dos razones. Primera, porque está considerado por al gunos partidarios de la Trompowsky como la mejor defensa de las negras, que obtie nen buen juego tras 9 e4 �c5 10 ll:ih3 d6 1 1 ll:i d2 A xh3 , o bien 9 e3 � c5 10 'it/ f2 0-0 1 1 �xc4 l:t e8. Segunda, porque es otra posición que las negras pueden recon ducir. Supongamos que las blancas tratan de evitarla, mediante 1 d4 ll:i f6 2 A g5 ll:i e4 3 Af4 c5, y ahora 4 f3 ll:i f6 5 dxc5!?. En tal caso, sigue 5 . . . �a5+ 6 �d2 ! ? ... resulta inmediatamente respetable. Has ta Gari Kasparov lo jugó así (en unas si multáneas): 7 �g4 8 h3 .t xf3 9 �xf3 c6 ••• 10 0-0-0 e6 11 Ac4 ll:ibd7? 12 d5! cxd5 13 ll:i xd5!, con terrorífico ataque, Kaspa rov-Cameiro, Sao Paulo 2004. DEFENSAS I N D IAS 1 45 ATAQUE TORRE Cuando las negras juegan . . . d5 en la Trompowsky o en el Ataque Torre, las blancas normalmente tienen la opción de pasar a un Gambito de Dama Rehusado, con c2-c4, y a menudo suele ser una bue na táctica psicológica contra un jugador de 1 . . . tt'if6. Cuando Wolfgang Unzicker, por ejemplo, se enfrentó por primera vez al To rre n o r m a l , 1 d4 ttJ f6 2 ttJ f3 e 6 3 � g5 , respondió 3 d5. S u oponente, Ti gran Petrosian, sabía que U nzicker prefe ría la Eslava a un Gambito de Dama Rehusado, de modo que jugó 4 c4! . Un zicker se encontraba en una posición que no le resultaba muy familiar, y eso se hizo sentir después de 4 . . . c6 5 �c2 iL.e7 6 e3 0-0 7 tt'ic3 h6? ! 8 �f4 tt'ibd7 9 cxd5 cxd5 ? ! 10 �d3, y Petrosian ganó una de sus grandes partidas. En las líneas principales del Torre, las negras no ocupan el centro, sino que sue len ocuparse del alfil dama blanco, incluso ya en la tercera jugada: 1 d4 tt'if6 2 tt'if3 e6 3 �g5 h6. Si, ahora, 4 iLxf6 �xf6 5 e4 d6, el juego transpone a una Trompowsky, en la que las blancas han jugado tt'if3, en lu gar de la más emprendedora tt'ic3. Esto es importante en la línea de la Trompowsky 1 d4 tt'i f6 2 � g5 e6 3 f4 h6 4 i. xf6 �xf6 5 lll c3 d6. Las blancas obtienen su mejor juego a partir de f2-f4. Por ejemplo: 6 �d2 c6 7 f4! . Esto significa que el Torre no trans pone bien a la Trompowsky y que esa tran sición debería reservarse para emplear contra un jugador con negras que sólo co noce las líneas de la Trompowsky 1 d4 tt'if6 2 �g5 tt'ie4 y 2 ... c5. Para núnimizar el peligro de . . . h6, las blancas pueden ensayar el Torre diferido, 1 d4 tt'if6 2 tt'if3 e6 3 c3, favorito de Tony Miles. .•• Las blancas esperan a que las negras hayan definido un sistema de desarrollo (3 .. b6, 3 ... d5, 3 ... c5) antes de decidirse a ju gar �g5. Las blancas logran un Torre razo nable después de 3 ... d5 4 iLg5 c5 5 e3. La preferencia de los grandes maestros, 3 ... b6, también da muy buen juego a las blan cas tras 4 .t g5. Por ej emplo : 4 . . . A b7 5 tt'ibd2 d5 6 e3 c5 7 �d3 tt'ibd7 8 0-0 �c7 9 iLxf6 tt'i xf6 10 tt'ie5 y 1 1 f4, con un es quema agresivo de las blancas, Timm an Tiviakov, Moscú 1993. . GAMBITO BENKO El sacrificio . . . b5 en una formación Beno ni existía mucho antes de que se inventase el Gambito Benko, y hay algunos jugado res que lo proponen sólo tras haber plan teado una Defensa India de Rey o una Benoni. De esta forma, se benefician de conocer el esquema adoptado por las blancas, antes de haber sacrificado su peón. Por ejemplo: 1 d4 tt'if6 2 c4 g6 3 tt'ic3 il.g7 4 e4 d6 5 h3 0-0 6 tt'if3 y ahora 6 c5 •.• 7 d5. (Ver diagrama 259.) Ahora, 7 b5!? 8 cxb5 a6 es una bue na versión del Gambito Benko para las ••• 1 46 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JU GADAS EN AJ EDREZ negras. Por ejemplo: 9 bxa6 'iWaS 10 l2Jd2 �xa6 1 1 �xa6 'l!\i'xa6 12 'iWe2 e6, Gheor ghiu-Nemet, Suhr 1990. Un caso similar es 1 d4 l2Jf6 2 c4 cS 3 dS g6 4 l2Jc3 d6 S e4 �g7 6 l2Jf3 0-0 7 h3 a6 8 �d3 bS ! . Por ejemplo: 9 cxbS axbS 10 lLi xbS l2J a6 ! y 1 1 ... l2Jb4. Pero en muchas otras secuencias, las blancas tienen un modo favorable de de clinar o eludir el gambito. En la Variante Clásica de la India de Rey, 1 d4 l2Jf6 2 c4 g6 3 l2Jc3 �g7 4 e4 d6 S l2Jf3 0-0 6 �e2, pueden ignorar 6 . . . cS. En lugar de 7 dS bS ! ? , las blancas deberían enrocar, 7 0-0, porque 7 ... cxd4? ! deja a las negras en una versión inferior de la Formación Maróczy. Otra idea es jugar ... a6 antes de ... cS, 1 d4 l2Jf6 2 c4 a6!?, y si ahora 3 l2J c3 c5 4 d5, 4 ... b5! 5 cxb5 g6 es un Ben.ka de libro. Es te orden tiene una ventaja añadida, en comparación con el Benko normal, 1 d4 l2Jf6 2 c4 cS, pues las blancas pueden obte ner una prometedora Apertura Inglesa, después de 3 l2Jf3 cxd4 4 l2J xd4, y si 4 ... a6, entonces S g3 ! dS 6 �g2. Pero después de 1 d4 lLi f6 2 c4 a6 3 l2Jc3 c5 (Ver diagrama 260.) ra las negras, en vista de 5 d5! . Por ejemplo: 6 cxdS lLi xdS 7 lLi dbS lLi b4 ! , o bien 7 'iWb3 ? ! lLi xc3 8 bxc3 eS ! 9 l2J c2 lLJ d7 y . . . lLJ cS , con ventaj a negra en la partida Filgueira-D. Gurevich, Buenos Aires 2003. Sin embargo, siempre hay un problema dxcS, cuando se juega ... a6 antes de ... cS. Así, las blancas se llevan la mejor parte, en caso de 1 d4 l2Jf6 2 c4 a6 3 l2Jc3 c5 4 dxc5!, y ahora 4 ... 'iWaS S a3 'iWxcS 6 e4 d6 7 �e3, o bien 4 ... e6 S e4 �xcS 6 eS. Una versión ligeramente distinta es 1 d4 l2Jf6 2 l2Jf3 a6, que solían plantear Mi les y Lev Alburt. Con 3 c4 c5 4 d5 b5, la apertura es un gambito no muy Benko. Se trata de un arma psicológica, concebida para incordiar a las blancas, que han j u gado 2 l2Jf3 precisamente para evitar el Ben.ka. ••• EL BENKO PROPIAMENTE DICHO "Ben.ka no sabe jugar el Ben.ka", dijo otro experto en la apertura, John Fedorowicz. Se refería al hábito de Pal Benko de seguir jugando el orden original de la apertura (1 d4 l2Jf6 2 c4 c5 3 d5 b5 4 cxb5 a6 5 bxa6), .. .la Inglesa que resulta, si el j uego sigue con 4 l2Jf3 c x d4 5 lLi xd4, es excelente pa- mucho después de que se hubiesen confir mado los méritos de 5 g6! ••• DEFENSAS I N D IAS 1 47 1 3 tt:laS ! y tt:lc6, como en la partida Ras hkovsky-Meshkov, Moscú 2002. La clave de 4 tt:lf3 se pone de relieve cuando las blancas aceptan el gambito a la jugada siguiente, 4 g6 5 cxb5! a6 y 6 b6!?. •.. Las negras pueden retomar el peón más tarde, cuando sepan si es mejor hacer lo de alfil o de caballo. Eso es importante cuando, por ejemplo, las blancas fianchet tan su alfil de rey: 5 ... �xa6 6 g3 d6 7 �g2 g6 8 b3 ! , con buenas posibilidades de im poner su peón de ventaja. Por ejemplo: 8 ... �g7 9 Ab2 tt:lbd7 10 tt:lh3 o-o 1 1 o-o tt:lb6 12 a4. Pero después de 5 . . . g6 ! , las blan cas no pueden j ugar 6 g3 d6 7 � g2 � g7 8 b3??, por 8 tt:lfd7. Fedorowicz indicó que incluso si las blancas ponían primero en orden su ca sa del fl anco de d a m a , con 6 b3 � g7 7 �b2 0-0 8 g3, las negras pueden explo tar la flexibilidad de su quinta jugada, con 8 tt:l xa6! 9 � g2 -tb7, y ahora 10 tt:l h3 e6! para minar d5. Entonces, 1 1 tt:l f4 tt:l xd5 1 2 il. xg7 r:j; xg7 1 3 tt:l xd5 il. x d5 14 � xd5 exd5 1 5 if xd5 ? ? 'it'f6 cuesta material. La respuesta del timador al Benko em pieza por 4 tt:lf3. Sabe que a un benkonita no le gusta que la tensión en el flanco de dama se resuelva con 4 ... bxc4 ó 4 . . . b4. Las blancas tienen una ligera ventaj a posi cional en esas líneas, pero suele ser sufi ciente. Por ej emplo : 4 . . . bxc4 5 tt:l c3 d6 6 tt:ld2! g6 7 tt:lxc4 �g7 8 e4 0-0 9 �e2 �a6 10 0-0 tt:l bd7 1 1 � d2 tt:l b6 12 b3 tt:l fd7 ... ••• Ahora, 6 'it'xb6 7 tt:l c3 d6 8 e4 �g7 es prometedor, después de 9 �e2 �g4 10 eS ! , o de 9 .. 0-0 10 tt:ld2 tt:lbd7 1 1 tt:l c4 'it'c7 12 0-0 tt:lb6 13 l:! bl, Burmakin-Os tertag, Bad Würishofen 2006. La idea de las blancas es que estas posiciones se pro ducen más a menudo por el orden 4 cxbS a6 5 b6, y ahora 5 ... 'it'xb6 6 tt:lc3 d6 7 e4 g6 8 tt:lf3 �g7, un orden que concede a las negras una alternativa muy prometedora, 5 ... e6! ? , con buen juego en el centro. Esta opción no es posible después de 4 tt:lf3 g6 5 cxbS a6 6 b6. Otra ventaja es que las negras a menu do responden 6 a5?!, a consecuencia de la falta de costumbre, porque es una bue na jugada en la posición 4 cxbS a6 5 b6 aS. En tal caso, pueden jugar un rápido ... �a6 y decidir después si retomar en b6 de da ma o de caballo. Pero en la forma diferida, las blancas toman la delantera, con 7 tt:l c3 .ta6, y ahora 8 b7! �xb7 9 e4, o bien 8 ... l:l a7 9 e4 �xfl 10 r:j; xfl d6 1 1 eS ! . Por ejemplo: 1 1 ... dxeS 12 tt:l xe5 l:!. xb7 13 ••• . .•• 1 48 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ �a4+ ! l2J bd7 14 l2J c6, o bien 13 . . . l2J fd7 14 l2Jc6 �b6 15 .tf4 ! , Mllov-De Vreugt, Ohrid 2001. Si las blancas tienen dudas acerca de 6 b6, deberían jugar 4 l2Jf3 g6 5 cxb5 a6, con idea de 6 e3 ! ? . Esto parece una línea del Benko que estaba de moda en los años ochenta, 1 d4 l2Jf6 2 c4 c5 3 d5 b5 4 cxb5 a6 5 e3, hasta que las negras descubrieron un buen antídoto, con el ataque al peón d, 5 ... axb5 6 �xb5 �a5+ 7 l2Jc3 .tb7 ! . Pero e n e l orden 4 l2J f3 g6 5 c x b5 a6 6 e3 jugado ... a6. Por ejemplo: 5 . . bxc4 6 l2Jc3 d6 7 e4 g6 8 .txc4. Las negras disponen de un tiempo extra, en relación con 4 l2Jf3 bxc4 5 l2Jc3 d6 6 e4 g6 7 .txc4. Pero la ju gada extra es ... a6, que es más nociva que útil. . LA FAMILIA BENONI La Defensa Benoni se caracteriza por un peón blanco en d5 y otro negro en d5. Hay varios tipos de Benoni, según que las blan cas apoyen su peón de d5 con c2-c4 y que las negras traten o no de liquidar en el cen tro con ... e6. Entre las versiones irregulares se en cuentra una que surgió en los años seten ta, cuando las blancas solían responder a 1 d4 l2Jf6 2 c4 c5 con l2Jf3. Las negras co menzaron a emplear un orden anti-Ingle sa, 1 d4 c5, a fin de transponer a una Benoni Moderna, después de 2 d5 e6 . .. .las negras no logran gran cosa con 6 axb5 7 .t x b5 �a5+ 8 l2J c3 .tb7?, porque ••• las blancas simplemente enrocan y conser van su peón extra (9 0-0 �g7 10 a4 0-0 11 e4). En lugar de ello, las negras deberían jugar 8 �a6! 9 .tx a6 �xa6. Después de 10 e4 d6 11 e5, la posición requiere más ex periencia práctica (11 ... dxe5 12 l2J xe5 il_g7 13 '*i'd3, Balgojevic-S. Kasparov, Cur to 2006). ¿Qué sucede si las negras responden a 4 l2Jf3 con 4 a6, en lugar de 4 ... g6? Esto transpondría a 1 d4 l2J f6 2 l2J f3 a6 3 c4 c5 4 d5 b5. Después de 5 e3, hay dos ideas te máticas del Benko (5 ... b4 y 5 ... dxc4) que tienen poco sentido, porque las negras han ••• ... Ahora, 3 c4 exd5 4 cxd5 l2J f6 La venta ja de 1 d4 c5 es que, en este caso, 2 l2Jf3 permite a las negras ganar terreno en el centro, con 2 . . . cxd4 3 l2J xd4 d5 ! , como de mostró en su día Alexander Alekhine. Pe ro este orden también tiene un serio inconveniente, a saber, que las blancas aún . DEFENSAS I N D IAS n o se han comprometido con c2-c4, de mo do que pueden jugar, con 3 lt:Jc3, una posi ción más abierta,. que después de 3 ... lt:Jf6 4 e4 exd5? 5 e5! les favorece claramente, y también en caso de 4 ... d6 S AbS+ y 6 dxe6, aunque menos. Una mejor ruta irregular hacia la Be noni Moderna es 1 d4 e6 2 c4 c5 3 d5, que evita la Trompowsky y asegura que las blancas jueguen c2-c4, antes de compro meterse con ... cS. Hay otra ventaja eviden te en este orden, después de 3 exd5 ••• 4 cxd5 d6 5 lt:Jc3 g6 6 e4 �g7. 1 49 inconveniente, a saber, que después de 1 ... e6 las blancas pueden responder 2 e4. BENONI SCHMID Este sistema se puso de moda en el orden 1 d4 c5 2 d5 d6 3 lt:Jc3 g6, después de que Lothar Schmid consiguiese (en 19S4) con el mismo una serie de impresionantes vic torias, en un torneo por Correspondencia. Por ejemplo: 4 e4 �g7 S lt:Jf3 lt:Jf6 6 �e2 lt:J a6 7 0-0 lt:Jc7 8 lt:Jd2. Al diferir el enro que, logró tiempo para jugar 8 ... a6 9 a4 �d7 10 lt:Jc4 bS 11 lt:ib6 b4! 12 lt:i xa8 'it'xa8 13 lt:ibl lt:i xe4, con ventaja, Hayes Schrnid. Un mérito del orden de Schrnid es que si las blancas se deciden por 3 c4 (en lugar de 3 lt:Jc3), las negras pueden elegir entre jugar un híbrido India de Rey/Benoni (con 3 . . . g6 4 lt:J c3 .1i g7 S e4 lt:J f6 6 A e2 0-0 7 lt:Jf3 e6) y ... exdS, corno hizo el propio Schrnid. Otra ventaj a es que las negras pueden experimentar con distintos órde nes, corno 1 d4 lt:Jf6 2 lt:Jf3 c5 3 d5 d6 y 1 d4 c5 2 d5 d6 3 e4. Las negras pueden transponer a las lí neas principales con 7 ... lt:Jf6. Pero en caso de 7 f4 es una mala decisión, pues 7 lt:Jf6 8 �b5+! es favorable a las blancas. En lu gar de ello, la maniobra 7 'it'h4+! 8 g3 'it'e7 ha resistido bien los tests prácticos (9 .ig2 lt:Jf6 10 lt:J ge2 0-0 11 0-0 lt:Je8 12 .te3 lt:Jd7 13 'it'd2 l:l b8 14 a4 a6 lS l:f. abl fS, Skembris-Hamdouchi, Bastia 2002). Otro mérito de este orden es que si 7 lt:Jf3, las negras tienen tiempo para jugar 7 a6 8 a4 �g4, un tema recurrente en la Benoni para lograr el control de eS. Si las negras hubiesen transpuesto con 7 lt:Jf6, las blancas podrían evitar la idea ... �g4xf3 con 8 lt:J d2 . Sin embargo, el orden tiene un ••• ••• ••• ••• Las negras suelen proseguir con 3 ... g6, y luego ... .tg7 y ... lt:Jf6. Pero es más preci so 3 lt:Jf6 4 lt:J c3 g6. De esta forma, se evi••• 1 50 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ ta 3 ... g6 4 lbf3 �g7 5 �b5+ lbd7 6 0-0 lbf6 7 .l:. el , en cuyo caso las blancas pue den explotar el hecho de haber diferido lbc3. Por ejemplo: 7 . . . 0-0 8 a4! a6 9 �fl b6 10 h3 lbe8 11 lb a3 ! y lbc4/e4-e5, con ventaja, como demostró Mijail Tal. El jaque de alfil es un problema recu rrente en las líneas de la Benoni Schmid. Para evitarlo, las negras deben modificar el orden: 1 d4 c5 2 dS lbf6 3 lbc3 g6, y aho ra 4 lbf3 �g7 5 e4 0-0. Esto también les permite transponer a líneas más normales de la Schmid, con 6 ... d6. O bien, podrían entrar en lmeas agudas, como 6 �e2 b5 ! ? (7 e5 lbg4 8 �f4 b4! 9 lbe4 d6). Los peli gros de este orden surgen con el avance de los peones centrales blancos, como el in mediato 4 e4 �g7 5 e5!?, o bien 4 lbf3 �g7 5 e4 0-0 6 e5 lbg4 7 lLigS!?, e incluso 6 d6 'tlib6 7 �f4 'tlixb2. INDIA DE REY/BENONI Este híbrido es similar a la Benoni Schmid, excepto en que las blancas se han comprometido con c2-c4. Esto da lugar, normalmente, al orden 1 d4 lb f6 2 c4 cS 3 dS d6. Las sutilezas suelen estar relacio nadas con lo que las negras hacen con su peón e. Por ej emplo: 4 lb c3 g6 5 e4 � g7 6 lbf3 0-0 7 i.e2 e6 8 0-0. Ahora, 8 ... exd5 9 cxd5 transpone a una posición muy cono cida de la Benoni Moderna, que se evalúa entre "=" y "�". Pero las negras pueden seguir difiriendo la captura, con 8 l:!. e8!? (Ver diagrama 267.) ••• Esta jugada no puede considerarse de espera, porque prepara 9 ... exd5 10 cxd5? lb xe4, y a jugadas tranquilas, como 9 h3, las negras obtienen un juego excelente con 9 exdS 10 exd5 �f5. Y si las blancas tra tan de explotar el retraso en ... exd5, me•.• diante 9 dxe6 �xe6 10 �f4, las negras tie nen compensación adecuada por el peón que pierden, tras 10 lbc6! 11 �xd6 lbd4, o eso parece indicar la experiencia práctica de la lmea. Esto deja 9 lbd2, que defiende e4 y puede alcanzar una formación de la Beno ni Moderna (9 ... exd5 10 cxd5). Las negras pueden sentirse satisfechas, porque de es ta forma evitan la línea con 't!Vc2, es decir, 1 d4 lbf6 2 c4 c5 3 d5 e6 4 lbc3 exd5 5 cxd5 d6 6 e4 g6 7 lbf3 �g7 8 i.e2 0-0 9 0-0 l:l e8, y ahora 10 't!Vc2, en lugar de 10 lbd2. Pero las negras pueden seguir postergan do la captura, y responder a 9 lbd2 con 9 lba6!, preparando el avance . . . b5 en sus próximas jugadas, a base de . . . lbc7, ... a6, . . . .l:r. b8, etc. , mientras que las blancas no disponen de jugadas igual de útiles. Una vez más, 10 dxe6? es dudoso. Des pués de 10 i.xe6 11 f4 �d7!, el vulnera ble peón e de las blancas se convierte en el tema principal. Por ejemplo: 12 �f3 �c6 13 lLid5 lLib4 y 13 l:t el 'tlib6 14 lbb3 l:t ad8 15 �d2 lbb4 (Ardiansj ah-Schmidt, Indo nesia 1983) son favorables a las negras. La Benoni Moderna diferida sigue es tando en gran parte inexplorada y los indi cios apuntan a que vale la pena ahondar en esas exploraciones. ••• ••• ••• DEFENSAS I N DIAS BENONI MODERNA La Benoni Moderna se plantea en dos ór denes principales: 1 d4 ll:if6 2 c4 es 3 dS e6, seguido de ... exdS/ ... d6, ... g6, y 2 ... e6 y 3 ... cS ( 4 dS exdS 5 cxd5 d6). En ambos casos, las blancas pueden pa sar a la Apertura Inglesa con ll:if3, en lugar del avance d4-d5 . Un mérito de 1 d4 ll:if6 2 c4 c5 es que garantiza a las negras la op ción adicional de responder a 3 ll:if3 con 3 ... cxd4 4 lZ:i xdS eS ! ? , una de las líneas más emprendedoras contra la Inglesa. Para evitar eso, las blancas tal vez pre fieran 3 e3. Un especialista Benko/Benoni puede quedar confundido después de 3 g6 4 ll:ic3 �g7 5 ll:if3 0-0 6 ..te2. ••• 1 51 ... b6/ ... �b7 sólo sirven para bloquear el contrajuego en el flanco de dama. Por ej emplo: 8 . . . ii.. b7 9 d5 ! e5 10 ll:i el ll:i e8 1 1 ll:id3 se convierte, de pronto, en una du dosa India de Rey, como se puso de ma nifiesto en la partida Bisguier-Kavalek, Olimpiada de Tel Aviv 1964, después de 1 1 ... f5 1 2 exf5 gxfS 13 f4 'fiie7 14 �e3 �a6 lS 'i/Vb3 ! exf4 16 ..txf4 �xc3 17 'i/Vxc3 'i/Vxe2 18 !:lael , con un fuerte ataque. Objetivamente, una buena solución al orden de las blancas es 6 d5! , entrando en una Grünfeld mejor de lo habitual. Pe ro para jugarla, las negras tienen que co nocer complejos análisis teóricos, como 7 dxc5 'i/Va5 8 cxd5 ll:i xd5!, lo que refuerza la impresión de que 3 e3 puede ser un arma eficaz contra un jugador Benko/Benoni bien pertrechado teóricamente. Actualmente, lo más probable es que se encuentre usted con el otro orden de la Benoni Moderna, 1 d4 ll:if6 2 c4 e6 y 3 c5, porque plantea la amenaza de la Nim zoindia (3 ll:ic3 ..tb4!), lo que a menudo induce a las blancas a jugar 3 ll:if3, permi tiendo así a las negras, después de 3 . . . c5 4 d5, eludir las lfueas agresivas de la Benoni Moderna, en las que las blancas juegan f2f4 ó f2-f3. Si a las negras no les disgusta en trar en posiciones de la Inglesa Simétrica, como 3 ll:if3 cS 4 ll:ic3 cxd4 5 ll:ixd4, ésta es la ruta más satisfactoria hacia la Benoni Moderna. Si las blancas intentan 1 d4 ll:if6 2 c4 e6 3 ll:if3 c5 4 e3 (Ver diagrama 269.) ••• ••• Ahora, 6 cxd4 7 exd4 d5 es una De fensa Tarrasch (en el Gambito de Dama Rehusado), con los colores invertidos, es decir, con una jugada extra para las blan cas. Esto suena más prometedor de lo que realmente es. Por ej empl o : 8 0-0 ll:i c6 9 .ie3 dxc4 10 ..txc4 ll:ia5, con posibilida des igualadas. En lugar de eso, hay un en foque más indio, 6 d6 7 0-0 b6?! 8 e4!, que se desliza hacia otra mala Forma ción Maróczy (8 ... cxd4 9 ll:i xd4 y 10 f3), o bien una Benoni o India de Rey, en la que ••• ••• ... se trata de una invitación tácita a entrar en una Semi-Tarrasch (4 ... d5). Un autén tico jugador Benoni preferirá la recomen dación de Mihai Suba, 4 a6 5 ll:ic3 'i/Vc7, seguido de ... d6/ ... ll:ibd7, seguido, even tualmente, de ... g6/... ii.. g7. Todas estas ju••• 1 52 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJEDREZ blancas están retrasando el desarrollo de su caballo dama hasta saber por dónde prefieren movilizarlo ( c3, a3, d2). También se benefician de detalles tácticos, como 6 �g4 7 'it'a4+!. Después de 7 ... .td7, 8 'it'b3 es una buena continuación, y si 7 ... lZJbd7, 8 lLifd2! pone en peligro el alfil de g4. Por ejemplo: 8 ... a6 9 h3 b5 10 �c2 �h5 1 1 a4! b4 12 lLic4 y .tf4. O bien 11 ... �g6 12 axb5 lLi xd5 13 bxa6, y las blancas ganaron, Do joian-Lukov, Plovdiv 1988. En este orden, las negras, por supuesto, pueden organizar el avance ... b5 más fácil mente. Sin embargo, ese avance no resuel ve sus problemas, en la línea 6 g6 7 h3 �g7 8 � d3 0-0 9 0-0. Por ejemplo: 9 ... b5 10 .l:! e l ! a6 11 a4 b4 12 lLib2, o bien 10 ... : es 1 1 ..txb5 � xe4 12 tLic3 : xel+ 13 'ir'xel a6 14 �a4 y �f4, como en la parti da l. Sokolov- Papaioannou, Turín 2006. Ante un tLic3 diferido, existe una sim ple réplica. Después de 1 d4 lLi f6 2 c4 e6 3 lLif3 c5 4 d5, las negras deberían jugar 4 ... d6!, en lugar de 4 . . . exd5. ••• gadas son útiles para las negras en una Be noni, lo que significa que estarán muy bien preparadas cuando las blancas aprecien que su única posibilidad de conseguir ven taja pasa por el avance d4-d5. Por ejemplo: 6 �e2 d6 7 0-0 lZJbd7 8 d5 exd5 9 cxd5 b5. O bien 8 a4 g6 9 d5 exd5 1 0 cxd5 � g7 1 1 e4 0-0 (Tukmakov-Suba, Erevan 1980), en cuyo caso las negras han ganado un tiempo sobre una Benoni normal. Las blancas pueden tratar de explotar el orden amenaza Nimzoindia, 1 d4 lLi f6 2 c4 e6 3 tLlf3 c5 4 d5 exd5 5 cxd5 d6, con ••• 6 e4!? Las blancas no pueden jugar ahora 5 e4? , por 5 ... tLi xe4, y 5 lLic3 permite a las negras transponer, con 5 exd5 6 cxd5, a las líneas normales. Esto también da a las blancas motivos para pensar en 6 lLixdS ••• Esto es algo más que una trampa de tLixe4?? 7 'it'a4+ ). Las una jugada (6 ••• DEFENSAS I N D IAS tll x dS 7 'if xdS. Pero el peón d retrasado no es tan débil como parece, después de 7 ... lll c6. Por ejemplo: 8 e4 �e6 9 'ii'd l �e7, o bien 8 lll g5 'ife7 9 'ii' e4 h6, como en la olvidada partida Bandal-Fischer, Meralco 1967. En la línea principal de la Benoni Mo derna, 1 d4 tll f6 2 c4 c5 3 dS e6 4 lll c3 exdS S cxdS d6 6 tll f3 g6, la j ugada 7 tll d2 se consideraba una virtual refutación de la apertura. Fue planteada por primera vez en la partida Nimzovich-Marshall, Nueva York 1927. Por ejemplo: 7 ... �g7 8 tll c4 y 9 �f4, o bien 7 .. . tll a6? 8 lll c4 lll c7 9 a4 �g7 10 .tf4 ! . Pero l a Benoni fu e rescatada al com prender que 7 ... lll bd7 8 lll c4 lll b6 era una buena réplica. Algunos comentaristas cali ficaron la jugada 7 tll d2 con un " ? ! ", mien tras que otros lo hicieron con un " ! " , cuando tal jugada s e planteó e n e l match de 1972 por el Campeonato Mundial entre Fischer y Spassky. No obstante, 7 tll d2 tie ne un valor de transposición, debido a que, tras 7 ... tll bd7. Las blancas pueden jugar 8 e4!, y des pués de entrar en la Variante Clásica (que suele producirse con 7 e4 �g7 8 lll d2), en la que las negras han sido inducidas a una 1 53 línea con ... lll bd7, en lugar de las variantes más populares con ... tll a6 ó ... .tg4. El or den de las blancas no tiene inconvenientes, o al menos, no han sido descubiertos. INDIA ANTIGUA DESTINO INDIA DE REY Hay algunos jugadores a los que les gusta la India Antigua. Después de 1 d4 tll f6 2 c4,juegan voluntariamente 2 ... d6 y 3 ... eS o 3 ... lll bd7, seguido de 4 ... eS. Pero otros utilizan el orden de la India Antigua como un camino seguro hacia una India de Rey. El temprano ... e5 normalmente disuade a las blancas de líneas más agudas, como el Ataque Samisch, lo que reduce la cantidad de teoría que las negras deben conocer. Esta sutileza tiene un siglo de vida. La partida Janowski-Chigorin, Ostende 1907, se desarrolló así: 1 d4 tll f6 2 c4 d6 3 lll c3 lll bd7 4 tll f3 es s e3. Siguió: S ... iie7 6 �d3, y las negras pronto quedaron con mal j uego (6 . . . c6 7 0-0 'ii'c7 8 iid2 0-0 9 .l:!. cl : es 10 tll g5 tll f8? ! 11 'ifc2 h6 12 lll ge4 �e6 13 d5 ! �c8 14 f4!). Pero cuando, en otra partida del mismo torneo, se llegó a la posición del diagrama, las negras (Aaron Nimzovich) 1 54 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ se desviaron, con S ... g6!. De esta forma, indujeron a las blancas a una de las varian tes más inocuas de la India de Rey, igua lando tras 6 �e2 Ji.. g7 7 0-0 0-0 8 b3 .l:l e8. Las blancas pueden insistir en jugar un esquema Samisch, después de, digamos, 4 e4 eS S dS llJcS 6 f3. Pero la clave de este orden se revela cuando las negras cambian de opinión acerca de entrar en la India de Rey. Después de que 6 aS 7 Ji.. e3 �e7! se jugase en el Campeonato de la URSS de 1954, el libro del torneo decía que se trataba de "una precisión de apertura que hasta Mihail Chigorin conocía". ••• Una jugada astuta como 5 l2Jge2 mere ce una astuta réplica, S c6. Ahora 6 f3 �e7 ! transpone a una buena India Antigua, ya que 7 .te3 0-0 8 'iWd2 permite 8 ... d5 ! (9 cxdS cxdS 10 exdS exd4 11 � xd4 l2Jb6). O bien 8 l2Jg3 dS ! 9 cxdS cxdS 10 exdS? �b4, con ventaja. La respuesta tradicional a 1 d4 l2J f6 2 c4 d6 3 l2Jc3 l2Jbd7 es 4 l2Jf3, pero pocos jugadores entienden por qué. La razón es que impide 4 ... es 5 �g5 g6?' debido a 6 dxe5 dxeS 7 l2J xeS ! . Si las negras optan, en cambio, por una India Antigua (5 ... �e7), la posición es muy buena para las blancas, después de 6 e3 y Ji.. e2/'iWc2. La contrasuti leza de las negras a 4 l2Jf3 es, simplemente, ••• 4 Al evitar ... g6, no tiene sentido un ata que h2-h4-h5. Las negras hicieron tablas después de 8 'ifd2 0-0 9 l2Jge2 l2Je8 10 g4 h6! 11 0-0-0 �gS! U �x gS � x gS . También las blancas pueden ser sutiles. Después de 1 d4 l2Jf6 2 c4 d6 3 l2Jc3 l2Jbd7 4 e4 eS, pueden ensayar S l2Jge2 y esperar a que las negras definan la posición de su alfil rey. Entonces, 5 ... g6 6 f3 �g7 7 i.g5 ! , con un Samisch mejor de lo normal. Por ej emplo: 7 . . . exd4 8 l2J x d4 0-0 9 'iY d2 y 0-0-0! , o bien 7 ... h6 8 �e3 0-0 9 'ifd2 @h7 10 d5 ! a5 1 1 g4! l2Jg8 12 h4 l2Jc5? 13 h5 g5 14 l2J g3 , con gran ventaj a posicional (Kohlmeyer-Lymar, Balaguer 2006). ..• g6. Si las blancas prosiguen entonces al modo de la India Antigua (S �gS � e7), se encontrarán en una India de Rey margi nal, 6 ... h6 7 �h4 gS 8 �g3 llJhS, que pue de evaluarse como igualada. El inconveniente de 4 ... g6 es que las negras normalmente acaban, tras 5 e4 ó 5 g3, en una Variante Clásica o del Fianchet to, en la India de Rey, en las que se ven pri vadas de sus armas más agresivas, como ... l2Jc6, y ... c5 es ahora menos efectivo. Pe ro la ventaj a es evitar el Ataque Samisch y DEFENSAS I N D IAS otros sistemas, lo que puede ser más im portante. Por otra parte, �i las negras quieren real mente jugar una India Antigua, 1 d4 lt:l f6 2 c4 d6 3 lt:lc3 lt:lbd7 4 lt:lf3 c6! es lo más preciso. De esta forma, pueden transponer a las líneas principales de la defensa, des pués de S e4 eS y 6 . . . �e7, pero evitan 4 ... eS S �gS ! y 6 e3 . DEFENSA INDIA DE REY Después del tradicional orden de la India de Rey, 1 d4 lt:lf6 2 c4 g6 3 lt:lc3 ..tg7 4 e4, las negras no están obligadas a jugar 4 ... d6. Así, con 4 ... 0-0 provocan a las blancas a hiperexpansionarse, con S eS lt:le8. El avance de peón no ha vuelto a jugarse des de la partida Letelier-Fischer, Olimpiada de Leipzig 1960 (6 f4 d6 7 �e3 cS 8 dxcS lt:lc6). Al margen de la provocación, 4 0-0 sirve a las negras para plantear un gambi to, S f3 cS!?, y ahora, si 6 dxcS, 6 b6. ••• ••• 1 55 Si las blancas declinan el gambito, con 6 dS d6 7 �e3, transponen a otro gambito Samisch, 4 ... d6 S f3 0-0 6 �e3 cS ! ? (7 dS). La contrasutileza a 4 ... 0-0 es S �e3, que permite a las blancas transponer a un Sa misch normal, tras S ... d6 6 f3. Las negras deben tener cuidado con S �gS, por la tentación que existe, en la In dia de Rey, de hostigar al alfil, cuando éste se sitúa en gS . De haber jugado 4 ... d6, en lugar de enrocar, S ... h6 ! (6 ..te3 lt:lg4) es recomendable, antes de que las blancas puedan impedirlo con 6 'it'd2. Sin embar go, después de 4 0-0 S �gS h6?! 6 �e3, las negras no pueden jugar 6 ... lt:lg4. El re sultado es un Samisch inferior. Por ejem plo: 6 . . . d6 7 f3 ! eS 8 dS c6 9 'it'd2 cxdS 10 cxdS lt:le8 11 0-0-0 @h7 12 g4 ! , Ushenina Siti, Kochin 2004. Como reverso de la moneda, las ne gras pueden diferir el enroque, en lugar de acelerarlo. De este modo, obtienen un tiempo extra para el desarrollo y privan a las blancas de un objetivo en el flanco de rey. Por ejemplo: 1 d4 lt:lf6 2 c4 g6 3 lt:l c3 �g7 4 e4 d6 S f3 lt:lc6!? 6 �e3 a6 7 lt:l ge2 ••• l:t b8. Por ejemplo: 7 �e3 bxcS 8 �xcS lt:lc6 9 : el l':t b8 10 � d2 l:i e8! 11 lt:l ge2 d6 12 � e3 e6 13 lt:l f4 dS! ? 14 cxdS exdS lS exdS lt:lb4, con fuerte iniciativa, Loma ya-Gufeld, Thilisi 1961. Ese tiempo permite a las negras res ponder a 8 lt:lcl eS 9 dS lt:ld4 10 lt:lb3 con 1 56 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ 10 ... c5! 11 dxc6 bxc6 con juego en la co lumna b . Por ej emplo : 1 2 tiJ xd4 e x d4 1 3 ..txd4 l:t b2. Después de 9 tiJb3, las ne gras pueden transponer a líneas normales, con 9 ... exd4 10 tiJ xd4 0-0. Las blancas también pueden benefi ciarse de diferir el enroque. En la Variante del Fianchetto, 1 d4 tiJf6 2 c4 g6 3 g3 ..tg7 4 ..tg2 0-0 5 tl:if3 d6, pueden ensayar la fa vorita de Viktor Korchnoi, 6 tl:ic3 (en lugar de 6 0-0) . Después de 6 tl:i bd7 7 e4 e5 8 h3, el juego puede transponer a las líneas convencionales con . . . c6, como 8 . . . c6 9 �e3 exd4 10 tiJxd4 l:. e8 11 0-0. Por ejem plo: 1 1 . . . aS 12 'ii' c2 'ii' c 7 13 l:t adl tl:i cS 1 4 .l:Ue l tl:i fd7 1S f4 tl:i e6 1 6 'ii' d 2 tiJ xd4 17 ..txd4, Rogozenko-Dragomirescu, Ti misoara 2006. Lo que ha sucedido es que las blancas han alcanzado una posición favorable, que normalmente resulta de 6 0-0 tl:ibd7 7 tl:ic3 eS 8 e4 c6 9 h3 l:t e8 y ... exd4, una línea que las negras abandonaron décadas atrás. En el orden 6 tl:ic3, las negras pierden la posi bilidad de jugar líneas mejores. El princi pal inconveniente de 6 tiJc3, en lugar de 6 0-0, es que puede que ... es resulte más fuerte, como veremos dentro de unas pági nas. Pero si a las blancas no les preocupan las líneas con ... cS, este orden tiene perfec to sentido. jugada de espera, ya que hay pocas líneas , del Samisch en que las blancas desarro llen el caballo por otra casilla, pero hay varias en las que .tgS presta mej ores ser vicios que .te3. Por ejemplo: 6 t:;J ge2 e5?! 7 �g5!. ••. INDIA DE REY, S ÁMISCH Después de 1 d4 tiJf6 2 c4 g6 3 tl:i c3 �g7 4 e4 d6 5 f3 0-0, las negras normalmente eligen entre romper en el centro con ... cS ó con ... es . El primero de estos avances parece difícil de conseguir, hasta que se descubrió, en los ochenta, que 6 �e3 es era un gambito correcto. Eso significa que las blancas deberían considerar otras sextas jugadas, como 6 tl:i ge2, una buena Si 7 ... c6 8 'ii' d2 tiJbd7 9 d5!, las negras no pueden jugar fácilmente la maniobra temática ... tl:ie8/ .. .fS. Por ejemplo: 9 ... cxdS 10 tl:i xdS , o bien 9 . . . tl:i b6 10 tl:i g3 'ii' c7 1 1 l:! cl es penoso (Dreev-Mork, Linares 1999). Bien, entonces ¿cuán bueno es 6 tiJge2 c5 7 d5? Las negras pueden buscar una B enoni Moderna de doble filo, 7 . . . e6 8 .tgS exdS 9 cxdS. Sin embargo, 8 tiJg3 conserva más opciones para las blancas, pues a 8 ... exdS 9 cxdS, su alfil puede si tuarse en f4 (por ejemplo: 9 ... tiJ a6 10 �e2 tiJ c7 1 1 0-0 .t d7 12 a4 a6 1 3 � f4 ! tiJ fe8 14 'ii'd2, con ventaja, Jismatullin-Neche purenko, Serpujov 2004). Contra la idea de Robert Byrne, ... c6/ ... a6/ ... bS, una opinión convencional sostiene que .td3 y el enroque corto es mejor política que preparar un ataque de mate con 'ii'd2 y 0-0-0. Las negras pueden tratar de explotar eso con 5 f3 0-0 6 �e3 a6. DEFENSAS I N D IAS Ahora, a 7 � d3 puede contestarse con cS!, y tras 8 dxc5 dxc5 9 �xc5 lll c6, es una versión mejorada del gambito 6 Ae3 c5 , y en caso de 8 d5 e6 ! es una buena Be noni. La principal idea de las negras es que a 7 'it'd2 puede contestarse 7 c6!. La ECO considera 8 0-0-0 b5 y 8 �h6 b5 po siciones igualadas, y entre las pocas líneas de la Variante Byrne que no son favora bles a las blancas. Tal utilizó una idea similar en el Cam peonato Mundial de 1961 , cuando iba por detrás en el marcador. Quería jugar una lí nea ... e5/ ... c6, pero temía 5 ... 0-0 6 ii.e3 e5 7 dxe5 ! dxe5 8 'it'xd8 ! , en cuyo caso las ne gras tienen la peor parte de unas posibles tablas. Así que refinó el orden con 6 ... c6, apuntando en dirección a ... a6/ ... b5. Pero después de que Botvinnik respondiese 7 �d3, continuó con 7 . e5 ! y consiguió la apertura que quería. Antes de dejar el Samisch, debemos mencionar 5 lll ge2. Los libros nos dicen que la idea de las blancas es 6 lll g3, y aña den que sólo conduce a una posición igua lada, tras 5 e5 6 d5 lll a6 . (Ver diagrama 280.) 7 ... ... . . ..• Puede que eso sea cierto después de 7 lll g3 h5 y 8 ... h4. Pero con 7 f3! y 8 �g5 1 57 se alcanza una posición Samisch mejor de lo habitual. Las negras deberían ignorar los libros y j ugar 5 0-0, y luego quizá 6 .tgS lll bd7 7 'it'd2 c5, puesto que 8 d5 b5 9 cxb5 a6 es un buen Benko (Damljano vic-Martinovic, Smederevska Palanka 1999) . .•. INDIA DE REY, CLÁSICA El orden más corriente de la Variante Clá sica es 1 d4 lll f6 2 c4 g6 3 lll c3 �g7 4 e4 d6 5 lll f3 0-0 6 ii.e2. Ahora, 6 ... e5 pernúte a las blancas forzar, sin riesgo alguno, un fi nal ligeramente favorable, 7 dxe5 dxe5 8 'it'xd8 .!:. xd8 9 �g5. Esto es un voto a favor de 6 lll bd7, seguido de 7 0-0 e5. Este orden también impide a las blancas plantear la Variante Petrosian (6 ... e5 7 d5, para seguir con �g5 y lll d2). Las blancas no pueden for marla tras 6 . . . lll bd7 7 0-0 e5, porque si 8 d5, 8 ... lll c5 ataca el peón e (8 .tg5 h6 ! 9 �h4? g5). Sin embargo, 6 ... lll bd7 puede ser puesto a prueba con 7 e5!?. Solía con siderarse la línea clave 7 ... dxe5 8 dxe5 lll g4 9 e6 fxe6 10 0-0 lll de5 , y aunque la experiencia indica que las negras tienen una posición igualada ( 1 1 'it'b3 lll xf3+ 12 � xf3 lll e5 13 .te2 lll c6 ! y ... lll d4) , las po••• 1 58 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJEDREZ siciones que resultan son difíciles de ju gar. El hermano menor -y más sabio- de 6 ... lbbd7 es 6 lba6!, a lo que sigue 7 0-0 .•. es. Una base de datos sólo contiene ocho ejemplos de esta posición, de antes de 1 988. En la mayoría de los casos, las ne gras podrán transponer a posiciones con 6 ... eS 7 0-0 lbbd7 muy buenas para sus in tereses. Por ejemplo: 8 .l:t el exd4 9 lb xd4 lb cS, o bien 8 ... c6 9 dS lb cS ! y 8 �e3 c6 9 dS lb g4 10 .tgS f6 11 .td2 fS , seguido de ... lbcS. Las ventaj as de situar un caballo en a6 se ponen de manifiesto cuando no transpo nemos. Las blancas consiguen poco en el final, 8 dxeS dxeS 9 �xd8 l:!. xd8, porque 10 lbdS pierde el peón e, y porque la pre paratoria 10 .tgS se contesta debidamente con 10 . c6 ó 10 ... h6. En todas las líneas del final, a lb xeS sigue ... lbxe4 ! . N o obstante, los libros recomendaban la ortodoxa 6 ... eS 7 0-0 lbc6, con análisis que llegaban hasta la jugada 2S. Si a las blancas no les gusta la megateoría, debe rían considerar una idea de Bent Larsen, 1 d4 lbf6 2 c4 g6 3 lbc3 �g7 4 e4 d6 5 lbf3 . Larsen quería salir del libro (6 ... lbbd7 7 h3). Pero 6 .te3 puede utilizarse como una forma de seguirlo, pero en otra pági na. La razón es que cuando las negras ven 6 .te3 suelen pensar que 6 ... eS 7 dxeS es una forma superior del final 6 �e2 eS 7 dxeS. En consecuencia, preparan ... eS con 6 . . . lb bd7 ó 6 . . . lb a6. Pero en tal caso, 7 �e2! eS 8 0-0 permite a las blancas trans poner a las líneas normales con ... lbbd7 ó ... lba6, habiendo eludido la megateoría de ... lbc6. Las negras pueden contrarrestar 6 �e3 con 6 c5. Este avance se basa en 7 dxcS �aS y 7 ii.. e2? lbg4 8 .tgS cxd4 9 lb xd4 �b6 ! . Lo mejor para las blancas puede ser 7 dS, alcanzando una Benoni de doble filo, después de 7 ... e6 8 h3 exdS 9 exdS. Si eso es lo peor que puede pasar, 6 .te3 puede prestar por un tiempo buenos servicios a las blancas. ••. . 0-0 6 �e3. INDIA DE REY, FIANCHETTO El orden del fianchetto que ha merecido mayor respaldo es 1 d4 lbf6 2 c4 g6 3 g3 � g7 4 � g2 0-0 S lb f3. En esta variante hay más espacio para las sutilezas que cuando las blancas postergan el avance de los peones e o d, como en el caso de DEFENSAS I N D IAS 1 d4 liJ f6 2 liJ f3 g6 3 g3 � g7 4 � g2 0-0 5 0-0. 1 59 centro, después de 6 . . . dS 7 cxdS cxdS 8 tLieS ! . Pero entonces, las negras pueden volver a la India de Rey, con 6 d6, trans poniendo a una posición que Lubos Kava lek fue el primero en jugar. ••• Las blancas pueden decidir, después de d6, si entrar en una India de Rey( con 6 c4), o si pasar a la Defensa Pire (con 6 lLi c3 y 7 e4). Contra un jugador que rara vez plantea la Pire, 6 lLic3 puede ser fuer te. Tal fue el caso en la partida Langeweg Vasiukov, Wijk aan Zee 1973: 6 . . . lLi bd7 7 c4 eS 8 a4 exd4 9 liJ xd4 : es 10 aS ! ll:icS 1 1 láel lLig4? ! 12 h3 lL:ieS 13 f4 liJed7 14 �e3 lL:if8 lS 'if d2 a6 16 b4! liJcd7 17 lL:ib3, con clara ventaja. Pero las negras pueden ocul tar sus intenciones con 5 c6!?. Después de 6 ll:i c3 dS! , deberían igualar (7 b3 �fS 8 .tb2 lLie4!). La idea ... dS es, naturalmen te, más fuerte cuando las negras no han in vertido un tiempo en S . . . d6. Si las blancas han avanzado su peón e y no el peón d, corno en la línea 1 c4 lL:if6 2 lLit'3 g6 3 g3 �g7 4 �g2 0-0 5 0-0, enton ces 5 c6 es lo que Tal llamaba "una pe queña diversión psicológica" . Las negras obtienen una buena versión de la Neo Grünfeld, con 6 ll:ic3 dS ! , amenazando ... d4, y luego 7 cxdS cxdS 8 d4 ll:i e4 ! . Las blancas pueden intentar una ver sión invertida de esa línea, con 6 d4, de for ma que su caballo sea el que quede en el 5 ... ••• ••• Ahora, 7 liJ c3 'if aS 8 h3 eS 9 e4 liJbd7 es una línea principal que también se pro duce por el orden 1 d4 liJf6 2 c4 g6 3 g3 � g7 4 � g2 0-0 s lL:i f3 d6 6 0-0 lb bd7 7 tLic3 eS 8 e4 c6 9 h3 �as. La diferencia principal es que, en el segundo orden, las negras han evitado una alternativa que está muy analizada, 9 �e3 ! ? lLig4 10 �gS. Este orden también permite a las negras, después de 7 tLic3 �aS, atacar el peón e (8 dS �b4 ). En años recientes, 8 h3 �a6 ha gozado de cierta popularidad. Joel Benjamín propuso un orden más preciso, que comienza por 7 'ii' b 6. Esto transpone, después de 8 dS 'i!Vb4, o de 8 h3 'i!Va6. Pero 8 e4, que es una línea central en el orden de Kavalek, es aquí más fácil de replicar, con 8 �g4!. Después de 9 h3 �xf3 10 � xf3 liJfd7 1 1 �e3, como se jugó precisamente contra Kavalek, debe ría dejar colgado el peón b. Y 9 b3 cS ! iguala. Por ejemplo: 10 dxcS dxcS 1 1 �e3 tLi c6 12 h3 .l:t ad8, Tregubov-lzoria, Moscú 2006. .•• ..• 1 60 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ Las negras pueden intercalar ... es en diversos momentos, dentro de las 12 pri meras jugadas de la Variante del Fianchet to. Algunos expertos en la India de Rey lo hacen tan pronto como las blancas decla ran su preferencia por g2-g3. Por ejemplo: 1 d4 lt:Jf6 2 c4 g6 3 g3 cS. Pero otros espe ran a que su rival juegue lt:Jc3, como en es te orden: 1 d4 lt:Jf6 2 c4 g6 3 g3 i.g7 4 i.g2 0-0 S lt:Jt3 d6 6 lt:J c3, y ahora 6 cS 7 dS e6! El inconveniente es permitir a las ne gras una buena versión del Gambito Ben ko. Por ejemplo: 1 d4 lt:Jf6 2 c4 g6 3 g3 .tg7 4 i.g2 0-0 S lt:Jt3 d6 6 0-0 cS 7 dS. ... Aquí 7 bS!? 8 cxbS a6 transpone a la Variante del Fianchetto en el Benko. Es una línea sólida para las blancas, pero no plantea la menor amenaza de refutar el Benko. ••• Las blancas pueden tratar de castigar la última jugada negra con 8 dxe6, porque sus peones quedan vulnerables tras 8 ... fxe6, y porque 8 ... .txe6 significaría sacri ficar material (9 lt:J gS ..t xc4 10 ..t xb7) . Pero una vez que Korchnoi y Rafael Vaga nian perdieron famosas partidas con el sa crificio, la teoría dijo que las blancas deberían evitar este camino y transponer a una tranquila Benoni (8 0-0 exdS 9 cxdS). Sin embargo, si las blancas han jugado 6 0-0, en lugar de 6 lt:Jc3, 6 ... cS 7 dS e6 8 dxe6 ! e s fuerte, porque ahora a 8 ... .txe6 9 lt:JgS �xc4 10 .txb7 lt:Jbd7 sigue 1 1 lt:Ja3 ! . Esto concedió a Korchnoi dos fáciles victorias cuando introduj o la jugada ( 1 1 . . l:t b8 12 lt:Jxc4 l:t xb7 13 lt:Jxd6, con un claro peón de ventaja). É sta es una razón importante para que las blancas difieran lt:Jc3. . INDIA DE REY, �gS En la Variante de Yuri Averbaj , 1 d4 lt:J f6 2 c4 g6 3 lt:Jc3 �g7 4 e4 d6 S .te2 0-0 6 j.gS, las negras no pueden jugar 6 ... eS? 7 dxeS dxeS 8 'it'xd8 y 9 lt:J d5 . Su principal opción se encuentra entre 6 ... cS 7 dS h6 8 i.e3 e6 y 6 ... h6 7 .te3 cS 8 dS e6, que transpone. Ambos órdenes tienen sus méritos. Svetozar Gligoric prefería 6 ... h6, porque después de 7 i.h4 cS 8 dS, las negras tie nen una fuerte alternativa en 8 . a6 9 a4 'it'aS, al no ser posible .td2. Si 7 �e3 eS ( ó 7 ... lt:Jbd7 8 lt:Jf3 eS), se alcanza una posi ción de la Variante Clásica, en la que el tiempo extra ... h6, es más una baza que una carga. Otras autoridades prefieren 6 ... cS 7 dS h6. Pero para jugar así, las negras necesi. . DEFENSAS I N D IAS tan · conocer una gran cantidad de teoría, acerca de los sacrificios de peón que se producen después .de 8 j/_f4 e6 9 dxe6. Por el contrario, 6 h6 7 .tf4 puede respon derse con 7 tt:lc6 (8 tt:lf3 lL\ xd4! y 8 dS eS ! ) . Esto hace que el orden 6 ... h6 sea mentalmente el más higiénico. Otro sistema con .t gS es 5 h3 0-0 ••• ••• 6 .tg5. 1 61 INDIA DE REY, CUATRO PEONES En la Variante de los Cuatro Peones (1 d4 tt:lf6 2 c4 g6 3 tt:lc3 .i.g7 4 e4 d6 5 f4), las negras normalmente atacan el centro con ... cS, y las blancas suelen responder d4-dS. El momento de realizar ... cS no importa demasiado, a menos que las blancas per mitan ... cxd4. Después de 5 c5 6 tt:lf3!? cxd4 7 tt:l xd4 tt:l c6 8 .t e3 . ••• Ahora, 6 h6 7 �e3! y '!Wd2 es favora ble a las blancas, porque las negras no pue den jugar 7 . .. tt:lg4, y porque esta vez . . . h6 es más una carga que una baza. Por ejem plo: 7 ... c6 8 �d2 �h7 9 .td3 eS 10 dS tt:l a6 11 g4, con ventaj a, Paunovic-lllic, Belgrado 2004. La teoría solía considerar buena 6 c5, debido a que 7 d5 e6 8 �d3 exd5 9 exd5 es una Benoni un tanto anodina, pero 9 cxd5! transpone a una buena posición. Por ejem plo: 9 . . . l::t e8 10 tt:lf3 a6 1 1 a4 '!WaS 12 0-0 lL\bd7 13 l:. el '!Wb4 14 �c2 c4 lS .tfl , Ba reev-Predescu, Kitchener 2006. Observe que, puesto que no han sido jugadas ... h6 y �h4, todas las lmeas con ... 'ifaS pueden responderse favorablemente con .td2. Por ejemplo: 6 ... cS 7 dS a6 8 a4 'if aS 9 .td2! e6 10 .td3, o bien 7 . . bS 8 cxbS a6 9 a4 'if aS 10 .td2, con ventaja. ••• ••• . Las negras pueden obtener un juego dinámico con 8 tt:l g4! . Por ejemplo: 9 tt:l xc6 bxc6 10 .tgl eS ! , o bien 9 .tgl tt:l xd4 10 .t xd4 eS. Esto es mejor que 8 0-0 9 .te2!, que impide . . . tt:lg4. Las blan cas logran un medio juego algo favorable, o un buen final, como 9 . . . es 10 tt:l xc6 bxc6 1 1 fxeS dxeS 12 .tes y 'if xd8, o con 9 . . . tt:lxd4 10 .txd4 eS 11 fxeS dxeS 12 .tes. La razón de que esto sea significativo es que si las negras juegan S . . . 0-0, en lugar de S . . . cS, las blancas pueden jugar tran quilamente 6 tt:lf3 cS 7 �e2!? cxd4 8 tt:lxd4, forzando la buena línea antes mencio nada. Por consiguiente, es más preciso S ... cS. Las blancas pueden evitarlo con una con trasutileza, 5 .te2!. Si las negras asumen que van a entrar en una Variante Clásica, ••• ••• 1 62 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ 5 . . . 0-0 6 l2J f3 , se verán sorprendidas por 6 f4 c5 7 l2Jf3, pues el juego se desliza a la línea 5 f4 0-0 6 l2Jf3 c5 7 �e2. Hay una última sutileza. Las negras pueden responder a 5 .te2 con 5 c5, de modo que 6 lbf3 cxd4 7 l2J xd4 l2Jc6 entor pezca el juego blanco. ..• Pero si las blancas tratan de alcanzar esta posición por el orden l2Jf3/h3, 5 l2Jf3 0-0 6 h3, pueden ser frenadas con 6 e5 7 d5, pues las negras abren favorablemen te el flanco de rey, no el de dama, con 7 ... l2Ja6! 8 ile3 l2Jh5 y f5. Otra curiosidad de la línea 5 l2J f3 0-0 6 h3 es que los libros dicen que lo mejor es 6 c5, después de lo cual 7 d5 e6 8 ild3. ..• .•• •.• Pero 6 dxc5! es un tanto favorable a las blancas. Por ejemplo: 6 ... �as 7 .td2! �xc5 8 l2J f3 0-0 9 0-0, y ahora 9 . . . b6? ! 10 l:t cl �b7 1 1 l2Jd5 ! , como en la partida Uhlmann-Bindrich, Dresde 2001. INDIA DE REY, OTRAS VARIANTES Una oscura variante que merece más aten ción, aunque sólo sea por sus posibilidades de transponer, es 1 d4 l2Jf6 2 c4 g6 3 l2Jc3 i.g7 4 e4 d6 5 h3 0-0 6 i.e3. Algunos ex pertos en la India de Rey dicen que lo me jor es 6 e5 e indican 7 d5 c6 que, tras 8 i.d3 b5 ! ? , conduce -según ellos- a una po sición igualada. Pero 8 l2Jf3! transpone a una línea favorable de la variante vinculada l2J f3/h2-h3. Por ej emplo : 8 . . . cxd5 9 cxd5 l2Ja6 10 ile2 l2Jc5 1 1 l2Jd2 y 9 ... l2Je8 10 l2Jc4 a6? ! 11 b4 l2Jd7 12 �d2, como en la partida Alexandrov-Zhelnin, Krasnodar 1997. .•. Y ahora 8 ... exd5 9 exd5 l:l. e8+ 10 Ji.e3 �h6, o bien 10 . . . l2Jh5, se conside ran posiciones confusas. Pero 9 cxd5! re vierte a una B enoni favorable a las blancas, según muchas autoridades. Se ven así recompensadas por haber serpen teado, ya que si tratan de conseguir la po sición 9 cxd5, a través de una Benoni, las negras disponen de diversas formas de impedirlo, como 1 d4 l2J f6 2 c4 e6 3 l2J f3 c5 4 d5 exd5 5 cxd5 d6 6 lb c3 g6 7 h3, y ahora 7 . . . a6 8 a4 �e7. DEFENSA MODERNA La Defensa Moderna, después de 1 d4 g6 2 c4, se convierte en India de Rey con 2 ... l2J f6. Las negras pueden utilizar esta ruta para eludir el Ataque Samisch, entre otras líneas de la India de Rey. Por ejem- DEFENSAS I N D IAS 1 63 plo: 1 d4 g6 2 c4 �g7 3 tt:J c3 d6 4 e4, y ahora 4 ... es. Las negras se arriesgan a entrar en un final, pero esta jugada tiene sus ventajas. Si las blancas juegan 5 �e3, esperando algo así como 5 ... tt:Jd7 6 d5 ó 6 f3, las negras pueden dejar mal situado al alfil, con 5 ... exd4!? 6 �xd4 lbf6, que atacarán a conti nuación con ... tt:Jc6. Por ejemplo: 7 tt:Jf3 tt:Jc6 8 �e3 0-0 9 .te2 l:t e8 10 tt:Jd2 tt:Jd7 ! 1 1 0-0 tt:Jd4 1 2 �d3 tt:Jc5, Lputian-Todor cevic, Cannes 1996. Si, en la posición del diagrama 291 , las blancas juegan 5 dS, las negras entran en una India de Rey normal, con 5 ... tt:Jf6. Pe ro otra ventaja de este orden es que es po sible 5 ... tt:Jd7 6 Ae3 tt:Je7! y ...f5, un plan visto con cierta condescencia por la teoría. Más habitual es 5 tt:Jf3, que puede con vertirse en una India de Rey Clásica, des pués de 5 ... tt:Jd7, como jugaba, entre otros, Tigran Petrosian. Pero si las negras no quieren jugar una Variante Clásica, puede explotar el orden 1 d4 g6 2 c4 �g7 3 tt:Jc3 con 3 ... cS!? (Ver diagrama 292.) Esta posición puede volverse muy agu da tras 4 dS i.xc3+!? 5 bxc3 f5, o bien con- <lucir a un híbrido India de Rey/Benoni, después de 4 . . . d6. En lugar del avance, las blancas suelen jugar 4 tt:Jf3, pero esto per mite 4 ... cxd4 5 tt:J x d4 tt:Jc6!, una excelen te versión para las negras de la Inglesa, porque las blancas no tienen el tiempo que necesitan para plantear una Formación Maróczy. Si las blancas están interesadas en en trar en la Clásica, una ruta más segura es 1 d4 g6 2 c4 �g7 3 tt:Jf3, o bien 3 e4. Obser ve que en el último caso, las negras dispo nen de la opción extra 3 ... tt:Jc6. El ataque al peón d da buen resultado si las negras pueden asegurar su caballo en d4, 4 d5 tt:Jd4 5 �e3 con 5 ... c5, y ahora 6 dxc6 dxc6, una recaptura que no es posible después de ... d6. Pero 3 ... tt:Jc6 puede te ner feas consecuencias tras 4 tt:Jf3 ! , en lu gar de 4 d5. Una continuación típica en tal caso es 4 ... d6 5 d5! tt:JbS 6 h3 que lleva el juego hacia una Benoni ( 6 . . . c5 7 �d3), en la que las blancas disfrutan de dos tiempos extra, gracias a ... tt:Jc6-b8. La vida no es fá cil para el jugador de la Moderna. DEFENSA GRÜNFELD Cuando Bobby Fischer calificó a 2 tt:Jf3, después de 1 d4 tt:Jf6, "un error corriente", 1 64 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ pensaba en la forma en que limita las op ciones de las blancas, tanto en la Grünfeld como en la India de Rey. Hace, por ejem plo, que la Variante del Cambio en la Grünfeld sea inofensiva, debido a la clava da ... .1lg4. Esto significa que después de 1 d4 lll f6 2 lll f3 g6 3 c4 �g7 4 lll c3. d4 lll f6 2 c4 g6 3 lll c3 d5, el área más fértil para las trampas se encuentra en la Va riante Rusa ('iWb3). Una de sus formacio nes queda planteada después de 4 lll f3 �g7 5 'iWb3 dxc4 6 'if xc4 0-0 7 e4 o, alter nativamente, 4 'ii' b 3 dxc4 5 'ii' xc4 .1l g7 6 e4 0-0 7 lll f3 . En una época anterior, 4 'ii'b3 se consi deraba más precisa, porque 4 ... c6 5 cxd5 ! es favorable a las blancas, mientras que en el segundo orden, 4 lll f3 Jig7 5 'ii'b3 c6 es una defensa razonable. Eso parece trivial hoy en día, pero el caso para 4 'ii'b3 se vio reforzando en el match por el Campeona to Mundial de 1963, cuando Petrosian de mostró que después de 4 dxc4 5 'ii' xc4 il.g7 6 e4 0-0, las blancas no tenían que jugar 7 lll f3, sino que podían intentar 7 ••• ii.e2!?. Las negras podrían jugar 4 ... d5!, ya que 5 cxd5 lll xd5 6 e4 lll xc3 7 bxc3 les permite dislocar el centro blanco con un oportuno ... �g4. Una de las primeras par tidas de Ernst Grünfeld, con la apertura que él creó, siguió así: 7 . . . 0-0 8 � e2 c5 9 0-0 cxd4 10 cxd4 lll c6 11 �e3 �g4 ! , con ventaja. Pero hoy sabemos que lll f3 enca ja perfectamente con el cambio central porque después de, digamos, 7 ... c5 8 l:l bl lll c6, las blancas pueden permitirse jugar 9 d5 ! �xc3+ 10 �d2, y 4 ... d5 ya no merece un signo de admiración. El jugador con negras que puede plan tear tanto la Grünfeld como la India de Rey tal vez prefiera la más flexible 4 ... 0-0. Si las blancas j uegan 5 �f4, para contener el avance . . . e5, después de 5 . . . d6 6 e3, las negras pueden seguir adelante con 5 ... d5, como hizo Fischer en su partida del si glo, seis años antes de intentar el orden normal de la Grünfeld. En aquel orden, 1 Los comentaristas pasaron esto por al to, porque 7 ... a6 8 lll f3 desemboca en la Variante Húngara, y 7 ... lll a6 8 lll f3 trans pone a la Variante Prins, variantes ambas que tienen buena reputación. Pero la idea de 7 ii.e2 para las blancas es evitar la Va riante Smyslov, comprobada y contrasta da, 7 lll f3 il.g4. Si esto le preocupa, puede arriesgarse con la opción extra de la ne gras, 4 'ii'b3 dxc4 5 'ii' xc4 §ie6 ! ? . DEFE NSAS I N D IAS · Pero s upongamos que a usted le gusta la Variante Smyslov y no las alternativas. Entonces, podría. considerar 4 tt:J f3 �g7 5 cxd5 tt:J xd5 6 �a4+!?, una idea de An drei Lilienthal. É ste es un orden que "da qué pensar" y una buena forma de limitar las opciones de las negras. Las blancas quieren que su oponente piense acerca de 6 . . . tt:J c6 y se preocupe por las consecuen cias de 7 e3 y 8 ,.tb5, así como de 6 ... c6 7 e4 ! . Por ej emplo: 7 . . . tt:Jb6 8 �c2 � xd4 9 .th6 y .l:t dl , o bien 8 ... 0-0 9 .te3 �g4 10 tt:J e5 ! . 1 65 9 .te3 a5 ! ? y ... a4. Si no le preocupa esto -y quiere eludir las variantes Prins y Hún gara-, 5 �a4+ ! ? le conviene. Un poco más azarosa es la línea similar de Wolfgang Uhlmann, 4 tt:Jf3 .tg7 5 �a4+, con la que de nuevo nos acercamos a la Formación Rusa, 5 .td7 6 �b3 dxc4 7 �xc4! 0-0 .•. 8 e4. Las negras tienen un tiempo extra, ... .td7. Pero eso limita sus opciones un tanto, pues si 8 ... a6, 9 e5 ! es un problema. Su caballo no puede retirarse a d7, como en la Húngara habitual. En caso de 8 tt:Jc6, 9 d5! . Observe que en estas líneas las negras pueden evacuar d7 con 9 �e6. Pero 10 exf6! sacrifica la dama por tres piezas. Las negras han sido cazadas en una línea que normalmente se produce en este orden: 4 tt:Jf3 .tg7 5 �b3 dxc4 6 �xc4 0-0 7 e4 tt:Jc6 8 e5 �e6? (8 ... tt:Jd7 ! ) 9 exf6 _txc4 10 fxg7 y 1 1 .txc4. En el diagrama 296 las negras suelen optar por 8 ... .tg4, alcanzando, una vez más, una posición de la Variante Smyslov. Pero eso probablemente sea un error, por que pueden tratar de castigar el orden de las blancas con 8 tt:Ja6!?. Entonces, tras 9 e5 tt:Jg4 10 .tf4, consiguen explotar su mo vimiento extra ... .td7 con 10 c5 11 d5 .•. E n la práctica, las negras normalmente responden 6 .td7, porque es apremian te y conduce a un terreno conocido, 7 �b3 tt:Jb6 8 e4 0-0 9 .te3 .tg4. Pero esto signi fica que se han visto privadas de las va riantes Húngara y Prins. Las blancas también plantean una trampa, pues la na tural 6 ... .td7 7 �b3 tt:Jb6 8 e4 .tg4? se castiga con 9 tt:Jg5 ! , amenazando 10 �xf7+. Así ganan tiempo para 9 . . 0-0 10 h3 ! � c8 (ó 1 0 . . . .t d7) 1 1 tt:J f3 . Como suele suceder en la Grünfeld, cuando las negras no tienen presión sobre el centro, están peor. Un inconveniente potencial de este or den es la opción extra de las negras 8 . 0-0 .•• . . . ... ••• •.. 1 66 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ b5! , como en la partida Gerzhoy-Tiomin, Tel Aviv 2002. Otra opción añadida es 8 b5!. Por ejemplo: 9 lll xb5 lll xe4 10 'ii xc7 lll c6, con buen juego. O bien 9 'iib3 c5 ! 10 dxc5 lll a6 1 1 e5 lll g4 12 .tf4 lll xc5, como en la parti da Goletiani-Neubauer, Port Brin 2005. Sólo los tahúres confiarían en 5 'ii a4+. ... b6 13 d5 ! , con ventaja (Almási-Balusz, Gyula 1993). En lugar de ello, las negras deberían responder a 7 Ab5+ con 7 c6!, después de lo cual, 8 �a4 da lugar a una controvertida lmea, defendida por Ale xander Beliavsky. Sin embargo, si hubiesen jugado 6 c5, entonces no hay nada mejor contra 7 �b5+ que 7 Ad7, permitiendo a las blancas transponer a la línea del Cambio, con 8 Ae2!. Si en lugar de 7 ... �d7, las ne gras respondiesen 7 lll c6?, 8 d5 es una vieja trampa en la que han caído numero sos grandes maestros (8 ... 'ii a5 9 'iia4! 'ii x c3+ 10 �e2, con gran ventaja blanca, Beliavsky-Mijalchishin, Terme Zrece 2003, entre otras). Esto hace que sea más preci so 6 Ag7!. Las blancas difieren el 0-0. Una secuen cia corriente es 4 cxd5 lll xd5 5 e4 lll xc3 6 bxc3 i.g7 7 i.c4 0-0 8 lll e2 c5 9 Ae3 lll c6. ••• .•. ••• GRÜNFELD, VARIANTE DEL CAMBIO .•• En la viej a Variante del Cambio hay algu nos temas que destacan: Sexta jugada negra. Después de 1 d4 lll f6 2 c4 g6 3 lll c3 d5 4 cxd5 lll xd5 5 e4 lll xc3 6 bxc3, las negras suelen jugar ... A g7 y ... c5, en uno u otro orden. Nor malmente, transponen. Pero a comienzos de los noventa, se en contró un detalle, 7 Ab5+. Si las negras han jugado 6 Ag7. ..• ••• En los años cincuenta, la línea 10 0-0 cxd4 11 cxd4 �g4 (12 f3 lll a5) se conside Las blancas pueden responder a 7 �d7 con 8 Ae2 y transponer a la Variante .•• del Cambio, con lll f3, en la que la jugada extra de las negras, ... Ad7, estorba para presionar sobre d4. Por ej emplo: 8 . . . c5 9 lll f3 lll c6 10 0-0 0-0 11 l:t bl cxd4 12 cxd4 raba ligeramente favorable a las blancas. Las negras comenzaron a ensayar un plan con 10 ... 'iic7 y 1 1 ... l:t d8, que adoptaron, entre otros, Leonid Shamkovich e Isaac Kashdan. Pero tras algunas impresionan tes victorias de Spassky, con 1 1 l:t cl ! , esta DEFENSAS I N DIAS línea desapareció de la escena. Entonces, Lev Polugaievsky encontró una sutileza, 10 l:t el, en lugar de 10 0-0. Su primera cla ve era que 10 ... 'f!/c7 transpone al plan de Shamkovich, tras 11 0-0! . La segunda clave era que la torre defenderá el alfil de c4, después del doble cambio 10 . . . cxd4 1 1 cxd4, de modo que las negras no pueden transponer a la línea . . . ll:iaS con 11 ... �g4 12 f3 ll:ia5??, y están peor después de 12 ... Ad7 1 3 o-o ( 1 3 . . . ll:i a5 14 .td3 y 'f!/d2/ �h6). De cualquier forma, las blan cas se benefician de 10 n el. El inconveniente es 10 ... cxd4 11 cxd4 'f!/a5+. Pero las blancas pueden hacer de la necesidad virtud, por no haber enrocado, mediante 12 'i!tfl � d7 13 h4! , para abrir la columna h. También este plan se ha anota do algunas impresionantes victorias y, sin embargo, el mérito de 10 .l:te l sigue sujeto a polémica. Otra posibilidad es acelerar el enro que, con 9 0-0, en lugar de 9 �e3. Las blancas están listas para transpo ner a las líneas principales, después de 9 ... ll:ic6 10 �e3. De esta forma, evitan la idea de Peter Svidler de responder a 9 �e3 con 9 ... cxd4 10 cxd4 'f!/a5+ 1 1 �d2 'f!/d8 ! . La experiencia con 1 2 �c3 ll:ic6 n o es 1 67 concluyente. Si las blancas no tienen nada mejor que 12 ii.e3 'f!/a5+, la lucha se diri ge a unas tablas por repetición de jugadas, antes de que hayan transcurrido cinco mi nutos. Hasta ahora no se ha encontrado ningún inconveniente a 9 0-0. Las negras difieren . . . cxd4. La vieja lí nea principal de la Variante del Cambio era 4 cxd5 ll:i xd5 5 e4 ll:i xc3 6 bxc3 �g7 7 Ac4 c5 8 ll:i e2 0-0 9 �e3 ll:ic6 10 0-0, y ahora 10 ... cxd4 1 1 cxd4 �g4 12 f3 ll:ia5. Pero a fines de los setenta, Jan Timman de mostró el valor de postergar el cambio de los peones e, con 10 ... �g4. El juego a me nudo transpone, después de 11 fe ll:i a5, y un ulterior ... cxd4. ¿Cuál es la clave de 10 ... � g4 11 f3 ll:ia5? Hay dos ideas que sobresalen. Después de 10 . . . cxd4 1 1 cxd4 .tg4 12 f3 ll:iaS, la teoría dice que las blancas pueden intentar 13 �d5 y obtener buen j uego. Por ejemplo: 13 ... �d7 14 l:t b l 'f!/c8 15 'f!/d3 y l:l fcl. Pero con los peones e en el tablero, 12 � d5 �d7 13 .:. bl 'f!/c8 amenaza al alfil con . c4! y ... e6. Otro problema con ... cxd4 radica en la línea que hizo famoso el match por el Campeonato Mundial de 1987: 13 �xf7+ .. 1 68 SEC RETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ l:. x f7 1 4 fx g4 l:. xfl + 1 5 @ x fl 'it' b6 1 6 �gl ! 'ife61• Después de 17 �d3 �xg4 18 : n se considera ligeramente favora ble a las blancas. Pero con los peones e en el tablero, llegamos a una posición ligera mente distinta, después de @ gl/ ... �e6. Ahora, 16 'it'd3 'it'c4 ! concede a las ne gras un juego más vigoroso en el flanco de dama. Por ejemplo: 17 'if d2 'if e6 ! 18 ll:i g3 ll:i c4, o bien 17 'ifxc4+ ll:i xc4 18 �f2 cxd4 19 cxd4 e5. En consecuencia, la más precisa 10 . . . ilg4 está reemplazando a 10 . . . cxd4. Las negras a menudo difieren ... d5, porque no les gusta . . d5 5 cxd5 ll:i xd5 6 e4 ll:ib6 7 ll:ie2 ! . En su lugar, esperan con 4 0-0, porque es más fácil de jugar la línea 5 ll:if3 dS 6 cxdS ll:i xdS. La contrasutileza de las blancas es 5 ll:i c3 para impedir . . . d5. Las negras pueden continuar al modo de la India de Rey (5 . . . d6 ó 5 ... c5). Pero también es posible 5 tl:Jc6!?. Es una for ma de decir: "Tratas de evitar la Neo Grünfeld. Pero si sigues ahora con 6 tl:Jf3, puedo transponer con 6 ... d5." . ... , ••• NEO-GRÜNFELD En la Neo-Grünfeld, se juegan g2-g3 y ... d5. Si se juega antes ... d5, las negras pue den capturar en c4, lo que puede dificultar la recaptura, y esto explica por qué 1 d4 ll:if6 2 c4 g6 3 ll:ic3 d5 4 g3? ! rara vez se ve. Por ej emplo: 4 . . . dxc4 ! 5 'if a4+ ll:i fd7 ! 6 'ifxc4 ll:ib6 7 'it'd3 ll:ic6 8 ll:if3 ilf5 9 e4 ilg4, con excelente juego de las negras. Más común es el orden 1 d4 ll:if6 2 c4 g6 3 g3 i.g7 4 Ag2. La trama se agudiza si las blancas res ponden 6 e4, porque 6 d6! lleva las ne gras a una de esas líneas del Fianchetto en la India de Rey, con un temprano e2-e4, que quedaron desacreditadas en los años cincuenta. Por ejemplo: 7 tl:Jge2 e5 8 ile3? ll:ig4, o bien 8 d5 ll:id4 ! . También hay terreno independiente por explorar, con 6 dS ll:iaS 7 'it'd3 cS. Por ejemplo: 8 e4 d6 9 ll:ige2 a6 y ... b5, como en la partida Ilincic-Djuric, Vrnjacka Banja 1998. Observe que 8 ll:if3 d6 transpone a una buena línea para las negras en la India de Rey, que normalmente se produce así: 1 d4 tt:Jf6 2 c4 g6 3 g3 �g7 4 i.g2 0-0 5 ll:if3 d6 6 tl:Jc3 tt:Jc6 7 d5 tl:J a5, y las blancas jue gan 8 'it'd3 ? ! c5 9 0-0, en lugar de 8 ll:id2 ! . ••• 1 Conocida corno Variante Sevilla por muchos autores y expertos, puesto que el Mundial de 1 987 se disputó en la capital hispalense. N.d. T. DEFENSAS I N D IAS DEFENSA INDIA DE DAMA eso en líneas como 3 ·· � 1 69 b6 4 e3 Ab7 5 �d3 Ab4+!?. Las defensas Indi� de Dama y Nimzoindia son las caras opuestas de una misma mo neda, concebida, si no acuñada, por Aaron Nimzovich. Antes de encontrar su fórmula (1 d4 tb f6 2 c4 e6, seguido de 3 tlJ f3 b6 ó 3 tLic3 Ab4), experimentó con un orden que no dependiese de la tercera jugada blanca, 1 d4 tbf6 2 c4 b6. La ventaj a de este orden es que las ne gras cuentan con opciones más agudas en caso de 3 tlJf3 �b7 4 g3, como 4 . . . e5 ! ? , 4 . . . Axf3 y 4 ... c5 5 d5 b5 ! ? . ¿Cuál es el as pecto negativo? Los libros dicen que las blancas pueden lograr el control de e4 con tb c3 y 'ir'c2 ó f2-f3. Por ejemplo: 3 tbc3 .tb7 4 'li'c2 d5 5 cxd5 tb xd5 6 tb f3 e6 7 e4. Pero los buenos jugadores, incluidos Fischer y Larsen, han utilizado 2 ... b6! ? y otros, con blancas, entre ellos Anatoli Kar pov, han transpuesto a líneas normales con 3 tlJf3, de modo que puede que la jugada tenga más ventajas que inconvenientes. En el orden convencional, 1 d4 tb f6 2 c4 e6, las blancas indican sus sentimien tos acerca de la Nimzoindia cuando eligen 3 tlJD. Las negras pueden tratar de explotar Las blancas a menudo responden 6 lbbd2, aunque esta jugada no ofrezca más que la igualdad. El temor a la Nirnzoindia ha afectado al primer jugador, ya que 6 tbc3 ! transpone a una línea, 1 d4 tbf6 2 c4 e6 3 tbc3 Ab4 4 e3 b6 5 �d3 Ab7 6 tbf3, que ofrece excelentes posibilidades, inclu so en el gambito 6 ... tbe4 7 0-0. Si las blancas pueden racionalizar su miedo a la Nimzoindia, pueden jugar la más ambiciosa 1 d4 tbf6 2 c4 e6 3 ttJD b6 4 tbc3, permitiendo 4 ... Ab4. Corren ese riesgo en la esperanza de que las negras prefieran 4 ... Ab7 5 'ifc2 Ab4 ó 5 Ag5 h6 6 Ah4 .tb4. Pero entonces 5 a3 ! entra en el Sistema Petrosian, 4 a3 Ab7 5 tbc3. La diferencia es que las negras han perdido la posibilidad de jugar 4 a3 Aa6, una alterna tiva importante. Por esta razón, 4 tbc3 se responde más a menudo con 4 Ab4. Las blancas normalmente eligen entre 5 AgS y 5 e3, y pueden transponer a una de las lí neas 4 �g5 y 4 e3. Por ejempo: 5 e3 �b7 6 Ad3 tbe4 7 0-0, y de nuevo es dicho gambito. En la vieja línea principal de la India de Dama, 1 d4 tbf6 2 c4 e6 3 ttJD b6 4 g3 ••• 1 70 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJEDREZ .tb7, las blancas inician un juego de espe ra, al diferir ll:ic3, pues los libros dicen que si 5 ll:ic3, 5 . . . �b4! iguala. El juego conti núa así: 5 .tg2 .te7 6 0-0 0-0. Luego, jugadas tranquilas como 7 b3 ó 7 l:t el permiten a las negras transponer a una Catalana igua lada, con 7 ... d5 ! . La jugada crítica es 7 ll:ic3, preparán dose para apoderarse del centro con 8 'ir'c2 y 9 e4. Las negras normalmente ocu pan e4, 7 ... ll:ie4, para impedir mecánica mente e2-e4. Pero si ... .tb4 igualaba antes, ¿por qué no 7 .tb4? ... Esta jugada rara vez se menciona en los libros y, sin embargo, ha sido empleada nada menos que por Leonid Stein, David Bronstein y Boris Spassky. Es posible que las blancas estén mejor tras 8 .td2, pero no mucho (8 ... �xc3 9 .t xc3 ll:ie4). O bien 8 ... d6 9 .t'! cl t2Jbd7 10 d5 ll:ic5, como en la partida W. Schrnidt-Gofshtein, De brecen 1992 (11 t2Jh4 a5 12 'ir'c2 l:l e8 13 .l:l fel .txc3 14 � xc3 exd5 15 Axf6 'ir'xf6 16 cxd5 g6, con igualdad). DEFENSA BOGOINDIA Según Mark Taimanov, quien se haría eco de una vieja historia, en una partida de un torneo femenino una partida comenzó así: 1 d4 ll:if6 2 c4 e6 3 ll:if3 .tb4+. Las blancas se vieron sorprendidas por el j aque y pre guntaron: " ¿ Qué apertura estás jugando? " L a respuesta fue: " ¡Estoy jugando l a Nim zoindia! ¿Qué te creías?" La Defensa Bogoindia se merece un respeto. Después de 4 t2Jbd2, las blancas esperan conseguir la pareja de alfiles con 5 a3. La experiencia indica que las mejores opciones para las negras radican en pasar al Gambito de Dama Rehusado, con 4 d5, y después de 5 a3 .te7! ••• Es como si la partida hubiese comenza do con 1 d4 d5 2 c4 e6 3 t2Jf3 ll:if6 4 e3 .te7 5 ll:ibd2? y las blancas tuviesen el avance extra a2-a3 a modo de compensación. Pero no es bastante, y 6 e3 0-0 7 .t d3 b6 8 0-0 .tb7 9 b3 ll:i bd7 10 .tb2 c5 es una fá cil igualdad. El tronco principal de la Bogoindia es 4 �d2, no 4 ll:i bd2. Las negras nor malmente protegen el alfil (4 . . . 'ir'e7, 4 . . . a5 , 4 . . . c5) , pensando que mantenien do fluida la situación en el flanco de dama, las blancas serán reticentes a permitir posiciones tipo Nimzoindia, con ll:i c3 . Por ejemplo: 4 . . . 'ir'e7 5 ll:i c3 ? ! b 6 6 e 3 .tb7 7 .td3, y ahora 7 . . . .t x c3 ! DEFENSAS I N D IAS 8 � x c3 tt:J e4 es un j uego igualador típico. La alternativa "para pensar" es 4 ... �e7!?. Las negras proponen otro rutina rio Gambito de Dama Rehusado (5 tt:J c3 d5 6 �g5) . Por supuesto, podrían haber pasado más directamente al mismo con 3 . . . d5. Pero puede que quieran que las blancas consideren también 5 g3. La idea es que las blancas podrían pensar que 5 . . . b 6 6 �g2 .tb7 e s una versión favorable de la India de Dama. Pero después de 5 g3, las negras tienen un buen cambio de marcha: 5 ... d5!, transponiendo a una bue na versión de la Catalana Cerrada, que normalmente se plantea en este orden: 1 d4 tt:J f6 2 c4 e6 3 g3 d5 4 tt:Jf3 �b4+ 5 �d2 �e7, de la que un jugador de 3 tt:Jf3 puede conocer poco. DEFENSA NIMZOINDIA La Nirnzoindia está relacionada con una apertura sin nombre, 1 d4 d5 2 c4 e6 3 tt:Jc3 �b4!? 1 71 bré conseguido la Nimzoindia de todos modos." Pero no es una Nirnzoindia normal, porque si las negras doblan los peones e, las blancas pueden desdoblarlos con cxd5, corno vimos en la Introducción, en la partida Botvinnik-Capablanca. Eso significa que la prueba de fuego debería ser 4 a3 � xc3+ 5 bxc3. Por ejemplo: 5 ... c5 6 cxd5 exd5 7 e3. Pero las negras pue den evitar transponer a la partida Botvinnik-Capablanca (7 . . . tt:J f6? ! ) , con 7 . . . tt:J c6 8 �d3 tt:J ge7 ! y . . . �f5 . Por ejemplo: 9 �c2? c4 10 �e2 �f5 y 9 tt:Je2 c4 10 �bl �f5 11 a4 0-0 12 �a3 1:1 e8, con suficien te contraj uego, Jurtsidze-Tsereteli, Tbilisi 2006. El caballo rey, por otra parte, podría ser mejor utilizado si las blancas juegan 4 �a4+. Esto podría transponer a la Defensa Ragozin (Gambito de Dama Rehusado), en caso de 4 . . . tt:Jc6 5 tt:Jf3 tt:Jf6, una posi ción de doble filo tras 6 ll:le5. Pero las ne gras hacen que tt:J e5 sea inofensivo jugando, en cambio, 5 . . . tt:Je7 ! ? . Este orden d e jugadas sigue siendo muy joven y por esta razón muchos juga dores que se sientan en la silla de las blan cas optarán por 4 tt:Jf3, pasando a terreno conocido. Pero eso las limita, después de 4 ... dxc4, a permitir la Variante Noteboorn (5 e3 b5), o a tratar de entrar en una Vie nesa, tras 5 e4 c5. NIMZOINDIA, LENINGRADO Las negras parecen decir: "Si hubiese jugado 1 . . . tt:Jf6 2 c4 e6, podrías evitar la Nirnzoindia con 3 tt:Jf3 ó 3 g3, o incluso desviarte antes con 2 .tg5. Pero ahora ha- Alexander Alekhine dijo que "la respues ta más lógica" a 1 d4 tt:Jf6 2 c4 e6 3 tt:Jc3 �b4 era 4 �g5, porque 4 . . . d5 es "una va riante poco atractiva" del Gambito de Da ma Rehusado. Se refería a 1 d4 d5 2 c4 e6 3 tt:Jc3 tt:Jf6 4 �g5 � b4? ! , que es favorable a las blancas tras 5 �a4+ ó 5 e3. 1 72 S ECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ E DREZ Pero la verdadera prueba para la Va riante Leningrado, 4 �g5, es ... c5 ! . Una de las lmeas principales es 4 �g5 h6 5 �h4 c5 6 dS �x c3+ 7 bxc3. Si 7 d6, las negras preparan una es trategia tradicional de bloqueo sobre casi llas negras ( ... e5, ... 'f/e7 y, quizá, ... g5). Pero eso permite a las blancas dar prioridad al j uego de piezas sobre la estructura de peones, con 8 dxe6!?, puesto que 8 ... fxe6 9 e3 y liJf3/�e2 es favorable a sus intere ses. Es mejor 8 . . . � xe6, pero 9 e3 liJ bd7 10 �d3 liJe5 deriva en juego confuso. Las negras pueden intentar un juego sutil, a base de 7 e5 y luego 8 ... d6! , trans poniendo a la lmea de bloqueo. Pero las blancas disponen de la opción extra de 8 d6!. La experiencia demuestra que aunque las negras ganen el peón avanzado, las blancas están bien. Un orden superior para las negras es 4 . h6 5 �h4 c5 6 d5 d6!, postergando ... .txc3+. Esto impide d5-d6 y consigue el bloqueo deseado, después de 7 e3 �xc3+! 8 bxc3 e5, con posibilidades equivalentes. Por ejemplo: 9 'f/c2 'f/e7 10 liJf3 g5 1 1 Ag3 liJh5 1 2 �d3 liJd7 13 liJd2 liJdf6 1 4 0-0-0 @d8 ! ? y ... @c7, como e n l a partida Guseinov-lbragimov, Bakú 2006. NIMZOINDIA, JUGADAS DE DAMA Después de que Gideon Stahlberg le gana se tres partidas, con 4 'f/b3, en su match de 1934, Nimzovich declaró que la jugada de dama era "casi una refutación de mi va riante". Hoy, ni siquiera es una lmea im portante. Pero está tan estrechamente vinculada con 4 'f/c2 que las negras deben tener cuidado para no ser atrapadas en una línea de la variante 4 'f/c2, que es o in ferior o desconocida. Por ejemplo: 4 ... liJc6 se considera su ficiente para igualar contra 4 �b3, pero es desfavorable contra 4 �c2. Las negras pueden encontrarse en la línea mala, des pués de 4 'f/b3 liJc6 5 liJf3 d5. ..• .•• . . Ahora, 6 a3 �xc3+? 7 'f/xc3 es favora ble a las blancas, que han transpuesto a 4 'f/c2 liJc6? ! 5 liJf3 d5 6 a3 .txc3+. En ese orden, 6 ... dxc4?? perdería pieza. Pero con la dama en b3, 6 ... dxc4! 7 'f/xc4 �d6 es excelente para las negras. Un caso similar surge después de 4 'f/b3 c5 y 5 dxc5. Entonces, 5 .. . liJ a6 6 a3 �xc5 es una senda fácil hacia la igualdad. Por el contrario, 6 ... �xc3+ ? ! 7 'f/xc3 liJ xc5 8 f3 ! es malo para las negras. Esta lí nea transpone a 4 'f/c2 c5 5 dxc5, cuando las DEFENSAS I N D IAS negras juegan la inferior 5 ... lba6? ! (6 a3 �xc3+ 7 'i!i'xc3 lb xc5 8 f3 ! ) , en lugar de 5 ... 0-0 ! 6 a3 �xc5 .. La principal diferencia entre las dos ju gadas de dama es que 4 'i!i'c2 no ataca el al fil, pero prepara e2-e4. Si las negras impiden ese avance con 4 ... dS, ¿qué tipo de Gambito de Dama Rehusado tene mos? La respuesta es que uno bueno para las negras, después de 5 �g5 dxc4, e inclu so mejor después de 5 lbf3 ? ! dxc4 ! . Por otra parte, la prudente 5 e3 no encaja bien con 4 'i!i'c2. Después de 5 . . . c5, las negras alcanzan un territorio cómodo de la Nim zoindia con 4 e3, por ejemplo con 6 lbf3 lbc6 7 a3 �xc3+ 8 bxc3 0-0. La verdadera prueba para ... dS en una Nimzoindia suele ser a2-a3, de modo que debemos evaluar 5 a3 �e7!? Las blancas están mejor, pero sólo un poco. Por ejemplo: 6 cxd5 exdS 7 �gS c6 8 e3 � g4 ! ? 9 lb ge2 lb bd7 10 h3 � hS 1 1 lb g3 � g6 12 lb fS � xf5 ! 1 3 'i!f x fS g6 i 4 'i!i'c2 lbhS, con rápidas tablas, Shipov Rozentalis, Tromso 2006. Eso significa que un jugador agresivo, con negras, puede utilizar este orden de ju gadas como una especie de reconocimien to del terreno. Comienza con 1 d4 lbf6 2 c4 1 73 e6 3 lbc3 �b4, con la esperanza de alcan zar una de las líneas agudas. Si las blancas optan, en cambio, por la conservadora 4 'it'c2, las negras pueden transponer a un só lido Gambito de Dama Rehusado, con 4 ... dS 5 a3 �e7, a muy poco precio. Las nuevas sutilezas de la variante 4 'i!i'c2 se producen tras 4 dS 5 cxdS cS!?. Se trata del gambito de Veselin Topalov, basado en líneas como 6 dxe6 cxd4 7 exf7+ � xf7, ó 6 . . . �xe6 7 dxc5 0-0. Que las negras logren suficiente compensación es tema debatible, pero nuestra preocupa ción es cómo pueden las blancas eludir por completo este azaroso tema. Una posibili dad es 6 �gS, pues 6 ... exd5 desemboca en una línea tranquila que suele producirse tras 4 'iVc2 d5 5 cxdS exd5 6 �g5 cS. La posición resultante puede ser buena para las blancas, tras 7 a3 �xc3+ 8 bxc3. Por ejemplo: 8 . . . h6 9 � xf6 'iWxf6 10 e3 0-0 1 1 lb f3 lb c6 12 � e2 � e6 1 3 0-0 l'.:!. fc8 14 'i\Va4, con una modesta ventaja, Rowson Pert, Campeonato Británico 2006. Hay, sin embargo, una complicación, en caso de 6 �gS 'i!i'xdS!? ••. Lo que ha sucedido es que las negras han inducido a su oponente a una línea que normalmente se produce en este or- 1 74 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJE D R EZ den: 4 �c2 d5 5 �g5 c5 6 cxd5 �xd5, cuando amenazan 7 ... �xg5, 7 ... cxd4 y 7 ... tt:le4. Esto suele conducir a posibilidades equivalentes tras 7 .txf6 gxf6 8 dxc5 �xc5. Otra forma en que las blancas pueden combatir el nuevo gambito es responder a 4 'iVc2 d5 5 cxd5 c5 con 6 dxc5. Después de 6 ... �xd5 7 a3 ! �xc3+ 8 �xc3 0-0 9 f3 ! , quedan con la mejor parte de la posición. Para evitar esto, las negras pueden apurar sus posibilidades con 6 ... tt:l xd5. Pero observe lo que pasa cuando un tahúr intenta 6 exdS. En tal caso, después de 7 �gS, transponemos a una posición que resulta de 4 �c2 d5 5 cxd5 exd5 6 �g5, cuando las negras ensayan la ambiciosa 6 ... c5, y las blancas no juegan 7 a3 ! . En lu gar de ello, deben jugar 7 dxc5, con lo que, de todos modos, las negras obtienen un buen juego, tras 7 h6! 8 �h4 gS 9 �g3 tt:le4 10 �x b8 �f6! 11 i.g3 tt:l xc3, como en la sensacional partida I. Sokolov-Aro nian, Turín 2006. Por último, pocos libros mencionan si quiera la tercera jugada de dama posible, 4 'ii'd3. El objetivo de las blancas es atrapar de nuevo a su rival en una línea descono cida de 4 �c2. "¿Qué es esto?", se preguntarán las ne gras. "¿Cree realmente que 4 ... c5 5 d5 es bueno?, ¿o es que su idea es responder a 4 .. d5 con 5 cxd5 exd5 6 �b5+?". (Ver diagrama 312.) ... .•• . involuntariamente transpuesto. Éste es un problema, si las negras normalmente res ponden a 4 �c2 con una jugada diferente a 4 ... 0-0. De modo similar, si las negras no están familiarizadas con 4 �c2 d5 5 a3 �xc3+, porque optan por alguna otra cuarta juga da, acabarán en territorio extraño, después de 4 �d3 d5 5 a3 ! �xc3+? 6 �xc3. NIMZOINDIA, S ÁMISCH Después de que Fritz Samisch introdujese 4 a3, se realizaron tentativas por refinar la idea, difiriendo este avance en favor de la jugada de Nikolai Rjumin, 4 f3, y de la de Akiba Rubinstein, 4 e3, que se supone son más flexibles. Pero habría que preguntarse si no es más flexible 4 a3 �xc3+ 5 b xc3 , porque permite a las blancas elegir ahora entre f2-f3 y e2-e3, una vez que las negras se definan. Por ejemplo: después de 5 b6. (Ver diagrama 313.) ••• "No puedo llegar a ninguna conclu sión, así que me enrocaré", pueden decidir. No es una mala decisión, porque 4 0-0 5 a3 �xc3+ 6 �xc3 no tiene nada de malo, siempre y cuando las negras conozcan la teoría. ¿Qué teoría? La considerable can tidad de análisis consagrados a la línea 4 �c2 0-0 5 a3 �xc3+ 6 �xc3, a la que han ••• Las negras estarían satisfechas de ver 6 e3, ya que con 6 ... �b7 7 f3 c5 ! , obtendrían buen contrajuego. Pero las blancas que dan mejor después de 6 f3! y 7 e4! (o bien 6 ... d5 7 �g5 ! ) . Por otra parte, si las negras se deciden por 5 c5, lograrían buen jue••• D E FENSAS I N D IAS 1 75 ejemplo: 7 b6 8 e4! �b7 9 �g5, como en la famosa partida Keres-Reshevsky, Tor neo de Candidatos 1953 (9 ... h6 10 h4! d6 1 1 eS dxeS 12 dxeS �e4 13 .l:!. h3 ! , con un feroz ataque). Las negras a menudo se confunden en la Samisch diferida, como en aquella par tida. Pensaban que iban a transponer a otra partida anterior del mismo torneo, que siguió con 4 e3 c5 5 a3, en lugar de 5 �d3, y ahora 5 ... �xc3+ 6 bxc3 b6 7 �d3 �b7. Las negras obtuvieron un excelente j uego, después de 8 f3 l2i c6 9 l2i e2 0-0 10 0-0 l2ia5 1 1 e4 l2ie8!, con idea de ... l2id6. Reshevsky habría podido transponer a aquella partida con 8 l2i e2 �b7 u 8 f3 �b7, pero cruzó el Rubicón tras el avan ce 8 e4! . •.• go tras 6 f3 dS 7 cxdS l2i xd5 ! , que transpo ne a la confusa variante 4 f3. Es preferible para las blancas 6 e3!?. Por ej emplo: 6 ... l2i c6 7 � d3 d6 8 l2i e2 0-0, o bien 8 ... eS 9 e4 0-0 transpone a otra prometedora línea, 4 a3 �xc3+ 5 bxc3 0-0 6 e3 cS 7 �d3 l2ic6 8 l2ie2, con un rápido e3-e4 y el ataque f2-f4-f5. Pero hay una mejor transposición que Samisch�Rjumin o Samisch�Rubinstein, a saber, Rubinstein�Samisch, 4 e3, segui do de a2-a3. Puede producirse en varios órdenes, entre ellos 4 e3 c5 5 �d3 0-0 y 6 a3 NIMZOINDIA, RUBINSTEIN La formación más conocida de la Nim zoindia se produce tres jugadas después de 4 e3: �xc3+ 7 bxc3. Esto es más prometedor que 4 a3, por que el enroque negro es vulnerable. Por "Esta posición ha sido investigada por algunos maestros, amantes del análisis, hasta las jugadas 30/35", escribió Vladimir Simagin en 1954. Las defensas negras han resistido bien en ésta y posiciones simila- SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J U GADAS EN AJ EDREZ 1 76 res, y su principal preocupación es el orden de jugadas. Algunos expertos de la Nimzoindia lle gan a la posición del diagrama, con el orden 4 . . . 0-0, 5 ... c5, 6 ... d5 y 7 . . . ttJc6. Otros prefieren 5 ... d5 y 6 ... c5. Hay otros que comienzan por 4 . . . c5, y luego siguen con 5 ... ttJc6 y 6 ... d5. Incluso hay, por último, quienes tienen fe en 4 ... d5, 5 . . 0-0 y 6 ... c5. Hoy día, 4 ... 0-0 es la jugada que tiene mayor número de seguidores, porque las negras no definen su estructura de peones y no están obligadas a cambiar su alfil (co mo en el caso de 4 ... c5 5 ttJe2 y 6 a3) . Pe ro 4 . . 0-0 sí define la posición del rey, lo que es importante si las blancas deciden pasar a una Samisch diferida, 5 a3 �xc3+ 6 bxc3. El enroque también cuesta un tiempo a las negras y les impide alcanzar la estrategia de bloqueo sobre casillas ne gras, preconizada por Robert Hübner. Después de 5 �d3 c5 6 ttJf3 ttJc6, no tie nen ninguna posibilidad de ver 7 0-0 �xc3 ! , porque las blancas interfieren con . Las negras tienen éxito, en caso de 5 't!Vc2 f5 6 ttJ e2 b6, o de 6 ttJ f3 b6 7 �d3 i.b7, ambas línes excelentes para su cau sa. La principal ventaja de 4 . . . ttJ e4 es que no tienen que ocuparse de la enorme cantidad de teoría en torno a 4 e3 b6, ni tampoco de algunos peligros específicos, como el gambito 5 �d3 �b7 6 ttJ f3 ttJ e4 7 0-0 ! ? . Las blancas también pueden responder a la amenaza sobre c3 del diagrama ante rior, con 5 ttJe2, en lugar de 5 't!Vc2. Si a las negras no les gusta 5 ... �h4 6 g3 �f6, pue den, una vez más, intentar entrar en una buena línea de 4 . . . b6, con 5 f5 6 't!Vc2 b6. ••• . 7 d5!. TANGO En un brevísimo espacio de tiempo, la apertura 1 d4 ttJf6 2 c4 ttJc6 ha producido una gran cantidad de teoría, sobre todo en las continuaciones agudas que comienzan con 3 ttJc3 e5 y 3 d5 ttJeS. Pero en la ma yoría de las partidas, las blancas optan por la ruta familiar, con 3 ttJf3, y después de 3 ... e6. U n jugador astuto, con negras, puede dejarse tentar por evitar todo esto, con 4 ... ttJe4!?, con idea de inducir a su rival a una de las mejores versiones de 4 ... b6. Las blancas pueden intentar 4 g3, des pués de lo cual, 4 d5 es una Catalana. Ta les posiciones, con el peón e bloqueado, se ..• DEFENSAS I N D IAS consideraba en una época heréticas, pero actualmente su reputación no es tan unidi mensional. En caso de 5 .tg2 dxc4, la po sición se considera confusa, después de 6 'fi'a4 lt:Jd7 ! , o de 6 0-0 l:l b8 ! ? . Por otro lado, las negras tienen s u caba llo dama bien situado, si consiguen transpo ner a una Bogoindia, con 4 ... i.. b4+ 5 .td2 'fi'e7. Pero las blancas deberían evitarlo con 5 lt:Jbd2! y 6 a3. Ésta es una transposi ción de una Bogoindia normal, 1 d4 lt:J f6 2 c4 e6 3 lt:Jf3 i.b4+, en la que a 4 lt:Jbd2 se ha contestado con la floja 4 ... lt:Jc6? ! 5 g3 'fi'e7. Si, en lugar de ello, en la posición del diagrama 317, las blancas juegan 4 lt:Jc3, las 1 77 negras pueden trasponer a una rara Nim zoindia, con 4 ... �b4 5 'fi'c2. Las blancas pueden sentirse razonablemente satisfe chas por sus perspectivas después de, diga mos, 5 ... 'fi'e7 6 a3 .t xc3+ 7 'fi'xc3 d6 8 b4 eS 9 dxeS lt:J xeS 10 i.. b2, Baburin-Scan nell, Feugen 2006. Pero la cuestión principal es quién ha engañado a quién. ¿Han arrastrado las ne gras a su oponente a una Nimzoindia 4 'fi'c2, que no querían jugar? ¿O bien, han entrado las blancas en una línea 4 'it'c2, en la que las negras se han visto privadas de 4 d5 ó 4 ... cS? Una vez más, ambos juga dores pueden haber sido cazados. ... 1 79 Capítulo 7 Defensa Holandesa y aperturas de flanco Todo el mundo conoce la primera sutileza de la Defensa Holandesa, a saber, las ne gras pueden eludir el Gambito Staunton, 1 d4 f5 2 e4, mediante 1 ... e6 y 2 c4 f5. En las últimas décadas, 1 ... e6 se ha empleado también para llegar a una Nimzoindia, o una India de Dama (2 c4 ttJf6), o una Be noni (2 c4 c5), sin el riesgo de exponerse a una Trompowsky. Por supuesto, hay otra posibilidad. Después de 2 e4, las negras deberán estar preparadas para una Defensa Francesa (2 ... d5) o la versión más peligrosa de la De fensa Inglesa (2 ... b6), o bien intentar 2 ... c5, como hizo Bent Larsen en una ocasión. Pero también deberán saber qué hacer en caso de 2 ltJd2!? Las blancas sugieren que desean en trar en una Francesa Tarrasch (2 . . . d5 3 e4) . Pero su verdadera intención pue de ser plantear un Sistema Colle (2 . . . d5 3 ttJ gf3 ! ) , en el que las negras han blo queado su alfil dama. Las negras pueden encontrarse también en una versión in ferior del Ataque Stonewall, después de 2 ••• c5 3 e3 ltJ c6 4 c3 ltJ f6 5 i.d3 d5 6 f4! . Las blancas sólo pueden soñar con lo grar esta magnífica posición, después de i. d6 1 d4 d5 2 e 3 . Por ej emplo : 6 ••• 7 'it' f3 .t d7 8 ltJ h3 'it' b 6 9 ltJ f2 0-0-0 10 0-0 @ b8 11 e4! , Marshall-Rubinstein, Viena 1908. Hoy día, la amenaza del Gambito Staunton no asusta a muchos jugadores holandeses. Pero algunos prefieren, de to dos modos, 1 . . . e6, p ara evitar otras lí neas de 1 ... f5, como 2 ltJc3 ó 2 �g5, que son una tentativa por mejorar sobre el Staunton normal, 2 e4 fxe4 3 ll:l c3 ltJ f6 4 i.gS. Después de 1 d4 f5 2 ltJc3. (Ver diagrama 319.) La elección de las negras es limitada, pues 2 ltJf6 3 i.g5 amenaza con un es quema Trompowsky (� xf6/e2-e3/i.d3/ 'it'f3) que no es del gusto de muchos par••. 1 80 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ tidarios de la Holandesa. Por ejemplo: 3 . . . c6 4 �xf6 ! exf6 S e3 dS 6 �d3 g6 7 'ii'f3 �e6 8 h3 �g7 9 l2J ge2 l2J d7 10 g4! fxg4 1 1 hxg4 'ii' e 7? 12 : xh7 ! , como en la par tida Korchnoi-Kostj oerin, La Habana 1966. La respuesta más frecuente a 2 l2Jc3 es 2 d5, en cuyo caso 3 e4!? transpone a una buena versión del Gambito Staunton, des pués de 3 ... fxe4? 4 f3 exf3 S l2J xf3 , pero es mejor 4 'ii'h S+ ! . Esto significa que lo mejor es 3 ... dxe4, aunque a menudo transpone (4 f3 l2J f6 S fxe4 fxe4) a 3 . . . fxe4 4 f3 l2J f6 5 fxe4 dxe4. Entonces, 6 Ac4 eS ! ? 7 �gS ! y 6 ... l2Jc6 7 l2Jge2 eS 8 dS son líneas con fusas. Conclusión: si las negras pueden jugar también la Francesa, evitar todo esto con 1 d4 e6 puede ser la mejor ruta hacia la Ho landesa. Pero pasemos directamente a 1 ... fS. ... HOLANDESA, LÍNEAS PRINCIPALES Las negras a menudo difieren su principal decisión ( ... d6 ó ... dS) y esperan el momen to oportuno para jugar ... �b4( + ). Por ejemplo: 1 d4 f5 2 c4 l2Jf6 3 g3 e6 4 i.g2 �b4+. Ahora, S l2Jc3 ? ! es bueno para las ne gras. Por ej emplo: S . . . 0-0 6 l2J f3 l2J e4 7 'ii'c2 d6 8 0-0 ..txc3 ! 9 bxc3 l2Jd7 10 : dl 'ii'e8 1 1 l2Jd2 l2Jdf6 ! ? , como en la partida Hort-Short, Praga 1990. Es mejor 5 �d2!, ya que el cambio de alfiles tiende a favorecer a las blancas. Es to es paricularmente cierto si las negras adoptan una formación Stonewall, S ... .i.xd2+ 6 l2J xd2 dS?, en lugar de 6 ... d6! y ... es. Las negras tienen mayor éxito, poster gando ... Ab4+, con la esperanza de que las blancas desarrollen voluntariamente su caballo por c3 y permitan la clavada. Pero eso sólo es bueno cuando las blan cas han definido sus piezas del otro flan co ( l2J f3 ó ..t g2) . Así, la clavada es prematura, por ejemplo, después de 1 d4 f5 2 c4 e6 3 l2Jc3 .tb4?!, porque las blan cas no han impedido el plan de Akiba Rubinstein e2-e3/l2Jge2/a2-a3, que em pleaba con la misma efectividad, tanto contra la Holandesa como contra la Nim zoindia. (Ver diagrama 321 .) Esto significa que 4 'ii' c2 l2Jf6 5 e3! 0-0 6 A d3 , seguido de l2Je2 y a2-a3, es favora ble a las blancas. Por ej emplo : 6 . . . d6 DEFENSA HOLANDESA Y APERTURAS DE FLANCO 1 81 l2J h3 �e7 5 0-0, su mejor opción es 5 d6! . En consecuencia, si las negras com ••• prometen demasiado temprano su peón d, las blancas sabrán qué hacer con su ca ballo rey: 1 d4 f5 2 g3 e6 3 �g2 l2J f6 4 c4 d5 5 l2Jh3!. Lo mismo puede decirse si las blancas desarrollan su caballo por e2, antes que por h3. Dos partidas del Cam peonato Mundial de 1951 alcanzaron es ta posición: 7 lbe2 lbc6 8 0-0 .txc3 9 �xc3 a5 10 b3 e5 1 1 Aa3 ! l:l e8 12 d5 l2Je7 13 f4! , Yakovich Gleizerov, Estocolmo 2000. El orden más preciso, después de 1 d4 f5 2 c4 e6 3 lb c3 , es 3 ... l2J f6. Una jugada de espera, para ver Ja decisión de las blancas, como 4 g3 ó 4 l2J f3 , que j ustifica ría 4 ... .tb4 ! . Si las blancas se deciden por 4 e3? ! , habrán iniciado un plan Ru binstein demasiado pronto, y las negras deberían, en tal caso, pasar a la estructu ra de peones ... d6/ . . . e5. Por ejemplo: 4 . . . � e 7 5 .td3 0-0 6 l2J ge2 d6 ! , con buen juego. Una vez que las blancas deciden fian chettar su alfil rey, el caballo rey pasa a ser el foco de Ja atención. Si se desarrolla por e2 ó h3, la sabiduría convencional sostiene que las negras quedan mejor con ... d6 que con ... d5. Un caballo blanco queda muy bien situado en f4 en una Stonewall, por que "toca" al peón retrasado de e6 y pue de reforzar el control de e5 con l2Jd3. Pero después de ... d6, una maniobra de caballo a f4 permite ... e5. En la práctica, un orden como 1 d4 f5 2 g3 l2J f6 3 .t g2 e6 4 l2J f3 �e7 5 0-0 ha ce que 5 d5 resulte atractivo, porque las blancas ya han mostrado sus cartas con l2J f3. Por el contrario, después de 4 ••• Mijail Botvinnik jugó 6 ... d5? ! , se que dó con la peor parte de la apertura, tras 7 l2Jge2 c6 8 b3 l2Je4 9 0-0 l2Jd7 10 �b2 l2Jdf6 1 1 f3 ! , y acabó perdiendo. Cuando David B ronstein llevaba ne gras, eligió 6 d6! , y el caballo blanco tuvo poco qué hacer después de 7 l2J ge2 c5 8 0-0 e5. En realidad, no volvió a mover y las blancas pronto quedaron peor. La situación es más difícil cuando las negras buscan una Stonewall con ... �d6, pues en tal caso no pueden recurrir a ... �e7 como jugada de espera. Pero el lu gar de la jugada "de pase" puede tomarlo ...c6. Después de 1 d4 f5 2 g3 l2Jf6 3 .i g2 e6 4 c4 d5, las blancas están bien con 5 l2Jh3! c6 6 0-0 .t d6 7 .tf4. Pero las negras tienen 4 c6!?, que consideran es una jugada útil, •.• •.• 1 82 SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ tanto en caso de 5 lbh3 d6 corno de 5 lbf3 d5. Por ejemplo: 5 lbf3 d5! 6 0-0 �d6 7 b3 'f!/e7 impide el cambio desfavorable del buen alfil negro (8 �a3). Si las blancas in sisten en el cambio, con 8 a4, las negras ob tienen un j uego adecuado con 8 . . . a5 ! 9 ..t a3 il. x a3 1 O lb x a3 0-0 1 1 lb c2 b6 1 2 lbcel �b7 13 lbd3 lbbd7 y ... c5, corno en la partida Tenikashvili-Radjabov, Mos cú 1998. También hay una cierta sutileza rela cionada con el caballo dama blanco, corno en la línea 1 d4 f5 2 g3 lbf6 3 il.g2 e6 4 lbf3 il.e7 5 0-0 0-0 6 c4, y ahora 6 c6!. Las ne gras esperan 7 lbc3, que hace más apropia do 7 ... d5. Mark Tairnanov, quien alabó 6 ... c6, ex plicaba que los defectos de la Stonewall se explotan mejor cuando las blancas pueden jugar lbf3-e5-d3 y lbbl-d2-f3, y citaba una partida que siguió así: 6 d5, en lugar de 6 ... c6, que se decantó a favor de las blancas, después de 7 lbbd2! c6 8 'f!/c2 'f!/e8 9 tt::l e5 lbbd7 10 lbd3! lbe4 11 lbf3 g5 12 b4. Sin embargo, una vez que las blancas definen la posición de su caballo dama, con lbc3, las negras tienen un juego más fácil, decía también Tairnanov. ••• ••• Por ejemplo: 7 lbc3 d5 8 b3 lbe4 9 .tb2 lbd7 10 e3 �d6 11 lbd.2 tt::l df6. Si las blan cas descartan 7 lbc3 y optan por 7 b3, las negras tienen una buena réplica en 7 a5, cuando el juego puede seguir así: 8 �a3 .txa3 9 lb xa3 d6!, o bien 9 ... 'f!/e7 10 lbc2 ••• d6! , y su alfil malo ha dejado de serlo. HOLANDESA POR INVERSIÓN Las negras pueden plantear una Holande sa, desde su lado del tablero, tras 1 c4, 1 lbf3 ó 1 g3, jugando 1 ... f5. También pue den conseguir una buena Holandesa a par tir de una dudosa Defensa Inglesa, corno en la línea 1 c4 b6 2 d4 �b7 3 lbc3 e6 4 a3 y ahora 4 f5!. ••• DEFENSA HOLANDESA Y APERTURAS DE FLANCO El peón a blanco juega un papel secun dario. Por ej emplo: 5 d5 lb f6 6 g3 lb a6 7 .tg2 lb c5 8 lbh3 � d6 9 .te3 .te5!, Kar pov-Morozevich, Cannes 2002. Pero después de 1 c4 f5 ó 1 lbf3 f5, las blancas pueden jugar d2-d3, en lugar de d2-d4. De esta forma quitan la casilla e4 al caballo contrario y pueden preparar un oportuno y potente avance del peón e. Por ejemplo: 1 lbf3 f5 2 g3 lbf6 3 �g2 e6 4 c4 d5 5 0-0 c6 6 d3 �d6 7 lbc3 0-0 8 e4! . Las negras fueron víctimas de s u insis tencia en 3 ... e6 y ... d5. Si quieren plantear una Holandesa con ... d6, deberían jugar 3 ... d6, preparando 4 ... e5. Si las blancas lo impiden con 4 d4, las negras pueden trans poner a las líneas normales ... d6 con ... e6. Antes de dejar la Holandesa, debemos mencionar un orden poco conocido, cuyo paladín fue Carlos Guimard, 1 d4 d5 2 c4 e6 3 lbc3 .1i.e7 4 ltJO, y ahora 4 ... f5. Esta secuencia impide el Gambito Staunton, así como las líneas 1 d4 f5 2 lbc3 y 2 .tg5, y hace que las blancas definan la posición de sus caballos, de modo que ya no existen las opciones lbbd2, lbh3 y b2b3/.ta3. Pero las blancas pueden proceder a una corrección oportuna, con 5 .tf4! lb f6 1 83 6 e3 c6 7 .td3 0-0 8 �c2 Por ejemplo: 8 ... . lLJe4 9 g4! lba6 10 a3 �a5 11 @e2 tLi xc3+ 12 bxc3 lLi c7 1 3 c5 lb e8 14 .l:!. hg l @ h8 1 5 n g2, y las blancas se abrieron paso, en la partida Lima-Giardelli, Sao Paulo 1993. DEFENSA INGLESA La mayoría de las líneas de la Defensa In glesa son favorables a las blancas, al me nos ligeramente, y las negras deberian mantenerse alerta ante posibles transposi ciones a la Holandesa, la India de Dama u otras aperturas. Después de 1 d4 e6 2 c4 b6 3 lbc3 .1i.b7 4 e3 . Ahora, 4 ... .tb4? ! 5 lbe2! lbf6 es una Nimzoindia satisfactoria para las blancas. Por ejemplo: 6 a3 �xc3+ 7 tLixc3 d5 8 b3. Pero 4 ... f5! es una buena Holandesa. El momento apropiado para la clavada sería 5 lbf3 .tb4, ya que las blancas no pueden romper favorablemente con lbe2 y a2-a3. Es mej or para las blancas 5 lLJ ge2 lb f6 6 d5, pero después de 6 ... lba6, ésta es una de las mejores líneas de la Defensa Ingle sa para las negras. Es irónico que muchos partidarios de la Defensa Inglesa rara vez comiencen con la caracteristica ... b6. La razón es que 1 d4 1 84 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJEDREZ b6 2 e4! .tb7 (o, por inversión, 1 e4 b6 2 d4 i.b7) se considera mejor para las blancas que cuando se ha jugado c2-c4. El orden más preciso es 1 d4 e6, espe rando 2 c4 b6. Contra 1 e4, evitan 1 ... b6 y entran en cualquier otra cosa. Sólo en res puesta a 1 c4 ó 1 ti:Jf3, comienzan las ne gras con 1 ... b6. Otro aspecto de la Defensa Inglesa es que las blancas pueden evitar la clavada . . . A b4, si intercalan antes a2-a3, como en caso de 1 d4 e6 2 c4 b6 3 a3. Las ne gras pueden alcanzar la India de Dama, Variante Petrosian, con 3 . . . ti:J f6 4 ti:J c3 �b7 5 ti:J f3 . Otra ruta hacia el mismo destino es 3 . . . ..tb7 4 ti:J c3 ti:Jf6 5 ti:Jf3. La India de Dama/Petrosian no puede con siderarse una mala línea. ¿Por qué, en tonces, las negras utilizarían uno de estos órdenes (arriesgándose a las complica ciones derivadas de 5 d5) ? Las razones habituales son evitar la Trompowsky y las líneas del Fianchetto en la Defensa India de Dama. Pero un jugador más aventurero, con negras, intentará 3 f5! ? 4 ti:Jc3 ti:Jf6. Las blancas están mejor aquí de lo que lo esta ban en la posición antes mencionada, 1 d4 e6 2 c4 b6 3 ti:Jc3 .tb7 4 e3 f5 ! , pues en es te caso pueden beneficiarse de un fian chetto, 5 g3 ..tb7 6 d5 ! . Sin embargo, hay más espacio para el subterfugio, como des pués de 5 g3 c6! 6 Ag2 d5. (Ver diagrama 328.) ••• Cada bando tiene una jugada más, en relación con una Stonewall normal. Pero ... b6 es más útil que la jugada extra de las blancas, a2-a3, lo que se pone en evidencia después de 7 cxd5 cxd5 8 Af4 .td6 9 �xd6 'ilt'xd6 10 l::t cl ti:Jc6 ll ti:Jf3 0-0 12 0-0 ..tb7 1 3 e3 l:1 ac8, con juego equilibrado, Ro gozenko-Morozevich, Bundesliga 2000. Observe lo mucho que han tardado las ne gras en desarrollar su alfil por b7. En rea lidad, estaban conteniéndolo, debido a 5 d5, en cuyo caso tiene mucho más sentido j ugar 5 . . . .i a6 ! . D espués de 6 e3 e x d5 7 cxd5 .txfl y 7 ti:J xd5 ..td6 ! son buenas para las negras. Si las negras insisten en plantear la De fensa Inglesa contra 1 e4, una cuestión cla ve es cómo van a defender las blancas su peón e, después de 1 e4 b6 2 d4 .tb7. Si 3 ti:Jc3 e6, y las negras se disponen a jugar 4 ... ..tb4. La experiencia con 4 ti:Jf3 j_b4 5 .td3 ti:Jf6 ha variado mucho, pero los re sultados son mejores para las negras que en otras líneas de 1 e4 b6. Es más preciso 3 .td3 ! e6 4 ti:Jf3. En tal caso, 4 ... c5 5 ti:Jc3 cxd4 6 ti:J xd4 es una excelente Siciliana. Lo mejor para las negras es 3 ... ti:Jf6 ! , pues el atacado peón e no puede avanzar (4 e5 i.xg2), y si 4 ti:Jc3 e6, las negras tienen ... .t b4 en la recámara. El orden más preciso de las blancas po dría ser 3 Ad3 ti:Jf6 4 'it'e2!, y ahora 4 e6 5 ti:JfJ . (Ver diagrama 329.) ... De esta forma, conservan las opcio nes ti:J c3 , c2-c3 e incluso c2-c4, como en la línea 5 . . . d5 6 e5 ti:J fd7 7 0-0 c5 8 c3, ó DEFENSA HOLANDESA Y APERTU RAS DE FLANCO 1 85 0-0 10 liJe5 y f2-f4, S. Polgár-Ushenina, Dresde 2006. Hay dos formaciones habituales de la Catalana (1 d4 llJ f6 2 c4 e6) , que a menu do aparecen después de 3 g3 d5 4 ..tg2 y 4 llJ f3 (o bien 3 tl:i f3 d5 4 g3) . Hay pe queñas diferencias entre ambas. Pero el tercer orden, 1 d4 llJ f6 2 c4 e6 3 llJ c3 d5 4 g3, tiene sus ventaj as y sus inconve nientes. 7 . . . � e7 8 c4 ! . Por ej empl o : 8 . . . d x c4 9 �xc4 a6 10 tl:ic3 b5 1 1 �d3 llJb6 12 �e4, con ventaja, Jalifman-Bauer, Internet 2004. APERTURA CATALANA Una Catalana es un Gambito de Dama en el que se ha jugado .tg2. Curiosamente, la Catalana se plantea hoy más a menudo por el orden 1 d4 tl:if6 que por 1 d4 d5, al menos en la alta competición. Después de 1 d4 d5 2 c4 e6 3 g3, las ne gras igualan más rápido, con 3 ... dxc4 ! 4 liJf3 c5. Por ejemplo: 5 'it'a4+ �d7 6 'it'xc4 � c6 7 .t g2 llJ d7 8 0-0 llJ gf6 9 llJ c3 b5 10 'it'd3 'it'b6, Opocensky-Kotov, Praga Moscú 1946. Con mayor frecuencia, la Catalana surge después de 1 d4 tl:if6 2 c4 e6. Pero si a las blancas les preocupa el Benko, la Benoni o el Budapest, entre otras defen sas, deben jugar 2 g3, que transpone a una Catalana normal, después de 2 ... e6 3 c4. Este orden permite a las negras desarro llar su alfil dama fuera de su centro de peones (2 ... d5 3 tl:if3 c6 4 Ag2 Af5). Pe ro eso no se considera ya un camino fácil hacia la igualdad después de, digamos, 5 0-0 e6 6 b3 h6 7 Ab2 liJbd7 8 c4 �d6 9 llJ bd2 Por ejemplo: si 4 ... dxc4 5 'it'a4+ �d7 6 'it'xc4 ..tc6 7 llJf3 , las negras pueden desequilibrar con 7 ... �xf3 y obtener buen juego contra el peón d aislado. Es mejor 7 f3 ! , que se considera favorable a las blancas desde la partida Tinsley Schlechter, Hastings 1895. Pero este or den es impreciso, porque las negras pueden transponer a una forma superior de la Defensa Tarrasch, en el Gambito de Dama Rehusado, 4 c5 5 cxd5 cxd4! 'it'xd4 llJc6, que prestó buenos servicios a Boris Spassky. Observe que las blancas pueden limitar los recursos de su rival conteniendo el peón e o el d. Por ejemplo: 1 d4 liJf6 2 liJf3 e6 3 g3 d5 4 .tg2 Ae7 5 0-0 y un posterior c2-c4 impide las líneas con un temprano ... �b4+ y ... dxc4. ••. 1 86 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ También pueden diferir d2-d4, como en la línea 1 c 4 e6 2 g3 d5 4 tt:Jf3, y ahora 3 . . tt:Jf6 4 � g2 ii.. e7 5 0-0 0-0 6 d4 es la Ca talana Cerrada. Por supuesto, hay menos posibilidades de alcanzar un medio juego catalán por estos órdenes, que a través de 1 d4, 2 c4 y 3 g3. La principal decisión de las negras en la Catalana es si capturar (y cuando) en c4. Si quieren abrir la posición, la forma pru dente de hacerlo es 1 d4 tt:Jf6 2 c4 e6 3 g3 d5 4 .t g2, y ahora 4 i. e7 5 tt:J f3 0-0 . ••• 6 0-0 dxc4. APERTURA INGLESA Un aficionado que juega 1 c4 a menudo se encuentra en desventaja psicológica, cuan do el juego transpone a una apertura 1 d4, porque lo lógico es que haya elegido 1 c4 para eludir líneas propias de 1 d4, como la Eslava, la Grünfeld y la Nimzoindia. Por consiguiente, a las negras puede resultar les útil entrar en un Gambito de Dama Rehusado, porque 1 e6 2 tt:J c3 d5 3 b3? d4!, por ejemplo, es malo. Las blancas pue den tratar de mantenerse dentro de la zo na Réti, con 2 tt:Jf3, y si 2 . . dS, 3 b3. ••• . De esta forma, evitan las lfueas con �a4+, como 1 d4 tt:Jf6 2 c4 e6 3 g3 d5 4 i. g2 dxc4 5 �a4+. Esto tiene sentido, si no quie ren jugar lfueas con 4 ... dxc4 5 tt:Jf3, como 5 ... a6, 5 . . tt:Jc6, 5 .. ii..d7 y 5 ... .tb4+. El jaque de dama puede plantear una trampa en forma diferida, 4 �e7 5 tt:Jf3 . . ••• dxc4 6 �a4+ (Ver diagrama 332.) La respuesta 6 ... tt:J bd7? ! no parece un error. Sin embargo, lo que ha sucedido es que las negras han sido inducidas a entrar en la lfuea 5 �a4+ tt:Jbd7 6 tt:Jf3 �e7? (en lugar de 6 ... c5 ! ó 6 ... l:t b8 ! ) , con ligera ventaja blanca. Pero éste es un momento espléndido para 2 b6!, transponiendo a una Defensa •.• DEFENSA HOLAND ESA Y APERTURAS DE FLANCO Inglesa, en la que las blancas se han com prometido con c2-c4, privándose de los ambiciosos esquemas con e2-e4/f2-f3. El jugador que normalmente responda a 1 d4 e6 2 c4 b6 con un esquema como 3 llJc3 Ab7 4 a3 ó 4 e3 puede encontrarse en una posición sospechosa después de 1 c4 e6 2 llJf3 b6 3 e4 Ab7 4 llJc3 i;.b4 5 Ad3 llJe7 6 a3? ! � xc3 7 dxc3 0-0 8 0-0 f5 ! , como en la partida Ibragimov-Shabalov, Open EEUU 2003. Una historia muy diferente es 1 c4 g6, que conserva un amplio abanico de opciones, incluidas la India de Rey, la D efensa Moderna y la Holandesa Le ningrado. Las negras pueden esperar a 2 llJ c3 , de modo que 2 ... c5 les permite entrar en una buena línea, después de 3 llJ f3 il. g7 4 d4 cxd4 5 llJ xd4 i. g7 . Si juegan 1 c4 c5 , las blancas disponen de la continuación más prometedora 2 llJ f3 ! ? y 3 d4. Otra familia de sutilezas comienza con 1 c4 llJ f6. Las blancas suelen respon der 2 llJ c3 , a fin de responder a 2 . . . e6 con la muy apreciada 3 e4, que permite eludir la Grünfeld, con 2 ... g6 3 e4 y trans poner a una India de Rey, después de 3 ... d6 4 d4. Los libros dedican mucha aten ción a 2 llJ c3 d5. Pero quizá el mejor as pecto del orden 1 c4 llJf6 2 llJ c3 para las negras sea transponer a una línea 1 . . . c5, con 2 ... c5 ! , y luego romper en el centro con 3 ... d5. Como antes se ha dicho, de haber jugado el orden más normal, 1 c4 c5, las blancas pueden romper antes con 2 llJ f3 ! ? y 3 d4. Otra virtud de 1 c4 llJf6 es que 2 llJc3 e5 lleva las negras a una posición habi tual, sin tener que preocuparse por 1 c4 e5 2 g3!?. Si las blancas insisten en jugar 2 g3 (después de 1 c4 llJf6), deberán tener en cuenta 2 c6! 3 il.g2 d5. •.• 1 87 Ahora, las blancas deberán arriesgar se con un gambito (4 llJf3 dxc4/ ... b5), o bien defender el peón e con 4 'iVc2 ó 4 b3, que permite a las negras resolver sus pro blemas de apertura, con 4 ... e5 ! . Por ej emplo: 4 'iVc2 e5 5 d3 h6! 6 tt:J f3 � d6 7 0-0 0-0 8 llJc3 d4, Socko-Belov, Hastings 2004. APERTURA INGLESA, 1 ••. e5 Después de 1 c4 e5, las negras eligen entre sistemas abiertos ( ... llJf6/ ... d5) y cerrados ( ... llJc6 y, posiblemente, ... il.b4). Las sutilezas comienzan con 2 g3, que transpone a las líneas principales después, por ejemplo, de 2 ... llJf6 3 Ag2 d5 4 cxd5 llJxd5 5 llJc3, o de 2 ... llJc6 3 �g2 g6 4 llJc3 . Pero d e esta forma, las blancas evitan la fea posibilidad ... i.b4. Después de que Anatoli Karpov hicie se, con negras, buen uso de 2 llJc3 tt:lf6 3 llJf3 llJc6 4 g3 i;.b4, en su match por el Campeonato Mundial de 1987, Seirawan jugó 2 g3 contra aquél. Karpov se encontró fuera de su repertorio y respondió 2 g6?! , que sólo había empleado en una oca sión, cuando tenía once años. Aquella par tida siguió con 3 �g2 i;.g7, una Siciliana Cerrada, con los colores invertidos, en la ••• SECRETOS DE LA I NVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ 1 88 que la ausencia de un temprano ... lZJc6 quitó hierro al avance b2-b4-b5. sición de la India Antigua, tras 5 ... �e7 6 0-0 0-0 7 d4 lZJbd7. Esta última es una bue Pero la respuesta de Seirawan, 3 d4!, le dio a éste una clara ventaja de espacio (3 ... exd4 4 'ii' x d4) o un final superior (3 ... d6 4 dxe5 dxeS 5 'ifxd8+ ). Karpov eligió la segunda posibilidad y perdió. El inconveniente de 2 g3 es 2 lZJ f6 3 Ag2 c6, ya que 4 lZJf3 e4 5 lZJd4 d5 6 cxd5 puede contestarse con la jugada de Mijail Tal, 6 .. 'if xd5!. Al atacar el caballo, las ne gras obtienen excelentes posibilidades. Por ejemplo: 7 lZJc2 'fihS y ... �h3. La línea 2 lZJc3 lZJf6 3 g3 c6 nunca volvió a estar de moda, después del match-revancha Tal Botvinnik, en el que se jugó 4 lZJf3! e4 5 lZJd4 d5 6 cxd5. Transponer a la otra línea con 6 ... 'ii' x dS?? está claro que no es posible, y 6 ... cxdS 7 d3 ! es favorable a las blancas. Sin embargo, este orden es perfecta mente jugable después de 4 ... d6! (Ver diagrama 336.) ••• . na elección, porque el fianchetto es una de las armas menos ambiciosas que las blan cas tienen contra la India Antigua. Por ej emplo: 8 e4 i:t e8 9 h3 Af8 1 0 .i:t el a6 1 1 dS? ! cxdS 12 cxdS bS ! 13 a3 lZJb6 14 b3 .td7 15 �e3 'it'b8, con excelente juego de las negras (A. Sokolov-Sherwin, Campeo nato de Suiza por equipos 2001). En la variante principal de la Siciliana Cerrada, con los colores invertidos, 1 c4 e5 2 lZJc3 lZJc6 3 g3 g6 4 �g2 .Yig7, las blancas normahnente escogen entre 5 d3, 5 e3 y 5 .l:l bl. Pero las sutilezas comienzan antes, si las negras juegan 1 c4 g6 2 lZJc3 .Yi g7 como hizo Kasparov. De este modo, pudo pasar a su favorita India de Rey, después de 3 d4 lZJf6. ¿Pero qué decir acerca de 3 g3? Esta jugada parece reducir las opciones de las negras, ya que la Grünfeld se ha disuadido, y la Neo-Grünfeld, 3 ... c6 y 4 ... d5, puede impedirse con 4 it.g2/5 e4. En lugar de ello, Kasparov respondió 3 .. lZJc6!?. (Ver diagrama 337.) , . La única posibilidad real que tienen las blancas de obtener ventaja pasa por d2-d4. Después de 5 Ag2, las negras pueden ele gir entre una posición teórica de la India de Rey, con 5 ... g6 6 d4, y una conocida po- Las blancas han dejado escapar su oportunidad de jugar d2-d4. Por otra parte, 4 .tg2 d6 5 lZJf3 e5! las hace entrar en una DEFENSA HOLANDESA Y APERTURAS DE FLANCO variante cerrada, con t2Jf3 y d.2-d3, que la teoría califica de absolutamente igualada. INGLESA, . �b4 . . La versión invertida de 1 e4 c5 2 t2Jf3 t2Jc6 3 .tbS tiene mayores matices en la Ingle sa, porque las negras pueden jugar ... il,b4 en la segunda, tercera, cuarta o quinta ju gada. Un ej emplo instructivo es 1 c4 e5 2 tLic3 tLic6. Las blancas pueden tratar de castigar la última jugada negra, con 3 e3 y d2-d4-d5, pero en tal caso 3 t2J f6 es una excelente jugada de espera. 1 89 to a la línea 1 c4 e5 2 tLi c3 t2J f6 3 t2J f3 t2J c6, y ahora 4 e3 .tb4. La teoría indica que después de 3 t2Jf3 tLi c6, la única posi bilidad sería de las blancas de lograr ven taj a pasa por 4 g3!. É se fue un caso en que las blancas sugieren sus planes en el centro con su tercera j ugada. Es mej or 1 c4 e5 2 tLic3 t2J f6 3 g3, o bien 3 t2J f3 . Pero las negras pueden anticiparse con 2 . . . Ab4. Quieren saber cómo piensan reto mar las blancas cuando j ueguen 3 . . . .t xc3. Se trata d e una información im portante, porque la conservadora dxc3 se recomienda en algunas líneas con 2 tLi c3 t2J f6 3 t2Jf3 t2J c6 4 g3 .tb4. Pero es inocua después de 1 c4 e5 2 tLi c3 .tb4 3 g3 �xc3 4 dxc3?!, porque las negras pueden em plear mejor su caballo rey que transpo niendo con . . . t2J f6 . Por ej emplo: 4 d6 5 �g2 t2J e7! 6 tt:J f3 tt:Jbc6, con buenas po sibilidades. Hay otras lineas de la Inglesa en las que es preferible bxc3. Pero en tal caso, a 4 bxc3, las negras explotan la ausencia de ... lt:Jf6, jugando ... f5 ó ... f6. ••• ••• Ahora, 4 t2J f3 �b4 ! es una línea muy segura para las negras, que han transpues- Por ejemplo: 4 ... d6 5 .tg2 lt:Jc6 6 d3 f5, o bien 6 d4 lt:J ge7 7 t2Jf3 0-0 8 0-0 f6! (9 �a3 @h8, y ahora 10 d5? t2Ja5 11 'iYa4 b6 12 c5 lt:Jxd5 13 cxd6 cxd6 14 tLi xe5 i.b7 1 90 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ fue favorable a las negras en la partida Akesson-Sisatto, Estocohno 2006). El inconveniente de 1 c4 eS 2 lb c3 �b4 es, por supuesto, 3 lb d5, que evita ... � xc3 y gana tiempo. Pero si hay que creer a la experiencia reciente, parece que tanto 3 ... Ad6 como 3 ... �cS igua lan. Por lo tanto, 2 . . . �b4! es un orden mejorado para un jugador con negras al que le gusten las posiciones que resultan de 1 c4 es 2 lbc3 lLJf6 3 g3 .tb4, ó 3 lLJf3 lb c6 4 g3 �b4. También puede valer la pena acelerar ... �xc3 en la línea 3 lLJf3 lLJc6 4 g3 � b4. El juego normalmente continúa con 5 � g2 0-0 6 0-0. Puesto que 6 ... l:t e8 7 lLJ d.5 ! es favorable a las blancas, la tarea de las ne gras es jugar a su debido tiempo ... �xc3 y ... e4. Los libros consideran con mucho de tenimiento 6 ... e4 y apenas mencionan, en cambio, 6 ... �xc3!? La imagen especular del Dragón Acelera do surge después de 1 c4 eS 2 lb c3 lLJ f6 3 lLJf3 lLJc6 4 g3 dS S cxdS lLJ xdS, así como después de 3 g3 dS 4 cxdS lLJ xdS. Una vez más, la elección de las blancas entre ambas depende de aquello que quieran evitar. El primer orden permite a las negras alternativas como 4 ... �cS y 4 ... lbd4, que son perfectamente razonables. Por el con trario, después de 1 c4 e5 2 lbc3 lLJf6 3 g3, no es posible ... lLJd4, y 3 ... �c5?! es pre maturo, porque las blancas aún no se han comprometido con lLJf3. Después de 7 bxc3 l:!. e8, las negras obtienen una buena versión de 6 ... l:t e8, en la que han evitado 7 lLJ dS. Y a 8 d3, que amenaza lograr ventaj a posición con 9 e4, las negras tienen 8 ... e4!. Si las blan cas retoman con el peón d, las negras de ben tratar de evitar . . . e4, que podría transponer a una línea difícil 6 ... e4 7 lb e l Esto significa que pueden conseguir superioridad con 4 �g2 lbc6 5 e3! , segui do de lb ge2 y d2-d4. Por ejemplo: S ... a6 6 lbge2 d6 7 d4 exd4 8 exd4 �a7 9 h3 0-0 10 g4, como en la partida Moskalenko Díaz, Badalona 2000, entre otras. La prin cipal objeción al segundo orden es 3 ... �b4, que algunos j ugadores ingleses con- �xc3 8 dxc3 . E n lugar d e ese avance, de berían mantener intacta su estructura de peones en casillas negras. Por ej emplo: 7 dxc3 d6, y ahora 8 lb el �e6 9 b3 �d7 y ... .th3 . DRAG ÓN INVERTIDO DEFENSA HOLAN D ESA Y APERTU RAS DE FLANCO sideran más prometedor para las negras que 4 ... �b4, en el orden de los cuatro caballos. Cuando el Dragón se produce en el or den de los cuatro caballos, las blancas de ciden si diferir d2-d3, como en la línea 1 c4 eS 2 tbc3 tbf6 3 tbf3 tbc6 4 g3 dS 5 cxdS tb xdS. Solía debatirse si era o no necesario 6 d3 para evitar 6 .1i.g2 t:Dxc3 7 bxc3 e4. El tema parecía estar vinculado a la correc ción de 8 tbd4. La cuestión no se ha re suelto, pero ahora parece que 8 tb gl! fS 9 f3 es favorable a las blancas, lo mismo que 8 ... �f5 9 �a4 �d5 10 tbh3 (Yrjola-Wes terinen, Campeonato de Finlandia 1995). Esto sugiere que 6 �g2 es correcto, siem pre y cuando las blancas quieran avanzar rápidamente su peón b, como en la línea 6 ... tbb6 7 0-0 .1i.e7 8 a3 u 8 l: bl. Si no lo ha cen, entonces es más fácil el juego con 6 d3. Observe también que 1 c4 e5 2 t:D c3 ltJc6 transpondría a las líneas de los cuatro caballos, después de 3 tbf3 tbf6. Pero esto no sucede a menudo, porque la teoría dice que las negras quedan bien después de 3 tbf3 f5, y las blancas están mejor después de 3 g3. Si las negras quieren jugar la línea 1 91 de los cuatro caballos, la forma de hacerlo es 2 ... tbf6. INGLESA, 1 ... c5 Muchos jugadores de 1 c4 consideran a 1 cS la respuesta menos agradable, no precisamente por sus cualidades comba tivas, sino más bien por el carácter tablis ta de la simetría. Si las negras se limitan a imitar a su oponente, 2 tb c3 tb c6 3 g3 g6 4 .1i.g2 � g7, a las blancas les resulta rá difícil elaborar una ventaj a significa tiva. En realidad, los grandes maestros con sideran 5 e3 como "una táctica oferta de tablas'', como dijo András Adorján, debi do al carácter de liquidación que tiene 5 ... e6 6 tbge2 tbge7 7 d4 cxd4 8 t:Dx d4 d5 ! , y ahora 9 cxd5 tb xd5 10 tb xd5 exd5. Otro problema potencial con 5 e3 es la posición desequilibrada y de doble filo de 5 ... .ii. xc3 6 bxc3 f5. Las blancas pueden evitar ambas lí neas con 2 g3!?, postergando tbc3. Si las ne gras las imitan, 2 ... g6 3 �g2 .ii. g7, pueden intentar 4 e3, y si 4 e6, entonces 5 d4 d5 6 dxc5 ! , o bien 5 ... cxd4 6 exd4 t:D e7 7 d5 ! y 6 ... d5 7 c5. Más habitual es 4 t:Dc6 5 t:De2! .•• ••• ••• 1 92 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJE DREZ Esto permite a las blancas transponer a las líneas normales (5 ... e5 6 lbbc3 ó 5 ... lbf6 6 lbbc3), como si hubiesen jugado 2 lbc3 y las negras hubiesen prescindido tanto de la simétrica ... e6/ ... d5 como de la desequilibrante ... .txc3. Si las negras tratan de restablecer la simetría con 5 e6, las blancas pueden romperla con 6 d4, y ahora 6 cxd4 7 exd4 d5 8 c5 ! ? (Grischuk-Malajov, Mos cú 2006). Esa modesta jugada 2 g3 puede plantear problemas a un j ugador con ne gras al que le guste plantear la "Defensa Tarrasch mej orada" , 1 c4 c5 2 lb f3 lb f6 3 lb c3 e6 4 g3 lb c6 5 .tg2 d5 6 cxd5 lb xd5 ! . En el orden 1 c4 c5 2 g3, descubre que 2 lb f6 3 � g2 d5 4 c x d5 lb x d 5 5 lbc3 crea una inmediata presión sobre d5. Si las negras responden con la natural 5 e6, alcanzan su objetivo en caso de 6 lb f3 b6 ó 6 . . . lb c6, como han demostra do docenas de partidas de alto nivel. Pe ro 5 . . . e6?? 6 lb f3 ? ? sería un burdo error por partida doble, ya que 6 lb xd5 exd5 7 �b3! gana un peón, como en la deba cle que sufrió Kramnik, citada en la in troducción . S i un adepto a l a "Tarrasch mejorada" comprende el problema a tiempo, puede recuperarse con 5 lbc7!, y buscar una Formación Maróczy con los colores inver tidos. Pero se trata de un sistema que no es fácil de jugar, cuando se hace por primera vez, como se puso de manifiesto en la par tida Seirawan-Dlugy, World Open 1989, que siguió así: 6 �b3 lb c6 7 �xc6+ bxc6 8 lbf3 f6 9 �a4, y las negras quedaron per didas poco después de 9 . . . � d7 10 d3 e5 11 Ae3 lbb5? 12 ll cl lbd4 13 0-0 h5? 14 h4. Si las negras quieren plantear la For mación Maróczy invertida, deben optar por una forma furtiva: 1 c4 lbf6 2 lbc3 d5 3 cxd5 lbxdS. ••• .•• ••• ••• ••. Esta variante casi siempre es tratada como si fuese una línea marginal de la Grünfeld, con análisis según los cuales se responde a 4 g3 con lb xc3. Sin embargo, las negras también pueden jugar 4 ... c5!, a lo que sigue 5 �g2 lbc7. Este esquema se crea con mayor frecuencia a través del or den 1 c4 c5 2 lbc3 lbf6 3 lbf3 d5 4 cxd5 lb xd5 c5. Pero en este orden las blancas pueden evitar la Formación Maróczy con 2 lb f3 ! ? y 3 d4. En la posición del diagrama 344, las blancas tienen otra posibilidad de evitar la Maróczy, con 4 lbf3. Pero deben saber qué están haciendo, después de 4 c5 5 d4 ó 5 e4. Estrechamente relacionadas con es tas posiciones son las que surgen de 1 c4 cS 2 lbf3 lb f6 3 g3. Este orden de ino cente aspecto fue preparado por Kram nik para su match por el Campeonato Mundial contra Kasparov. A 3 . . . lb c6, podría responder 4 lb c3 y alcanzar una Simétrica Cuatro Caballos, lo que sería una victoria moral para Kramnik, por que le gusta esa variante, mientras que Kasparov, como muchos otros j ugado res, so lían evitarla (mediante 1 c4 c5 2 lb c3 lb f6 3 lb f3 d5 ó 2 ... lb c6 3 lb f3 lb d4). •.• DEFENSA HOLAN DESA Y APERTU RAS DE FLANCO 1 93 Después de 3 ... d5 4 cxd5 lL'l xd5 5 i. g2 , surge una posición clave: · La natural 5 .. g6? es un error, debido a 6 d4! cxd4 7 �xd4, que ataca la torre rey negra. Las negras también quedan peor des pués de 6 . . . �g7 7 e4 lL'l c7 8 d5. Lo que ha sucedido es que se ha llegado a una Neo-Grünfeld (1 d4 lb f6 2 c4 g6 3 g3 d5 4 A g2 i. g7 5 lL'l f3) en la que las negras han jugado 5 . . . c5 ? ! (y 6 cxd5 lb xd5 7 e4 ! ) , en lugar de la superior 5 . . . 0-0 ó 5 . . . dxc4. Pero en la posición del diagrama 345, las negras pueden evitar todo esto con la sencilla 5 lL'lc6!. Cuando las blancas se concentran en d5 con 2 lL'lc3, antes que 2 g3 ó 2 lL'lf3, el ca rácter del juego cambia ligeramente. Las negras pueden caer en la trampa de Kram nik por una "puerta trasera", 2 ... lbf6 3 g3 d5 4 cxd5 lb xd5 5 i.g2, y ahora 5 ... e6?? 6 lb xd5 cxd5 7 �b3. Uno de los inconvenientes de 2 lL'l c3 es que 2 g6! ? permite a las negras con centrar "potencia de fuego " sobre d4. La clave es que 3 lb f3 i. g7 4 d4 cxd4 5 lb xd4 lL'l c6 impide la Formación Ma róczy. . ••• ••• El caballo de d4 está atacado, antes de que las blancas pueden proseguir con su desarrollo, a base de 6 e4 y 7 �e3. Si el ca ballo se retira a b3 ó c2, entonces 6 ... i.xc3+! deja al flanco de dama de las blan cas bajo una fuerte presión. En un tiempo se pensaba que cambiar ese alfil era una temeridad, pero esa opinión fue rebatida por ejemplos como 6 lL'lc2 �xc3+ 7 bxc3 lL'l f6 8 f3 �a5 9 �d2 'i!Va4 10 e4 d6 y lL'ld7-c5, con excelentes perspectivas de las negras, Agzamov-Taimanov, Riga 1975. Hay un posible inconveniente en 1 c4 c5 2 lL'lc3 g6 en 3 d4, que rara vez se juega. Después de 3 cxd4 4 'ii' x d4, la torre rey queda atacada, lo que lleva a 4 . . . lb f6 5 �g5 lbc6 6 'ii'd2, posición es difícil de evaluar, si la comparamos con otras posi ciones vagamente similares, como 1 e4 c5 2 lbf3 lbc6 3 d4 cxd4 4 lb xd4 g6 5 c4 t¿)f6 6 lL'lc3 lL'lxd4 7 'iVxd4 d6 8 �g5 �g7 9 'iVd2. Hay otras dos formas de tratar de al canzar la posición del diagrama 346. Bobby Fischer respondió ocasionalmente a 1 c4 con 1 .. g6 2 lL'lc3 �g7 3 lL'lf3 c5. Pe ro las negras pueden estar dispuestas a ju gar una India de Rey o una Moderna (3 d4) . Fischer también respondió a 1 c4 c5 2 lL'lc3 con 2 lb c6, y luego 3 lbf3 g6, que impide la recaptura � xd4 (tras d2••• ••• . ••• 1 94 SECR ETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ d4/ ... cxd4). Las negras llegan a donde que rían, después de 4 d4 cxd4 5 l2ixd4 .tg7. Pero las blancas pueden jugar 4 e3! y amenazar con 5 d4 y 6 d5, que es más fuer te si este avance ataca un caballo en c6. so de 1 ... l2if6, casi siempre responde 2 c4. De esta forma, evita la Nimzoindia, al res ponder a 2 ... e6 3 l2ic3 �b4 con 4 'ifc2! ?, en lugar de 4 d4. También elude posiciones normales de la Grünfeld, respondiendo a 2 ... g6 con 3 l2ic3 d5 4 cxd5 t2i xd5 5 'if a4+, o bien 3 ... il.g7 4 e4! , lo que le ahorra cien tos de horas de estudio analítico. Observe que 1 c4 l2if6 2 t2if3 llevaría las blancas a la misma posición que 1 l2if3 l2if6 2 c4. Pero 1 c4 supone el riesgo de que las negras respondan 1 ... e5 ! ? . D e todas las primeras jugadas impor tantes, 1 t2if3 garantiza a las negras su me jor oportunidad de responder 1 ... b6, porque las blancas no pueden construir un centro con f2-f3 y tampoco les resulta fácil transponer a una posición de e2-e4/d2-d4. Después de 1 t2if3 b6 2 e4 iLb7 3 l2ic3 En tal caso, Fischer estaba dispuesto a seguir con 4 ... iLg7 5 d4 d6 6 d5 l2i e5. Otros prefieren 6 ... l2ia5. Por ejemplo: 7 e4 t2if6 8 h3 0-0 9 �d3 a6 10 0-0 b5 11 cxb5 c4 12 iLc2 axb5 13 l2i xb5 l2ib3 ! (lzoria Savchenko, Internet 2006). A pesar de eso, y al apoyo que también recibe la maniobra 6 ... .txc3+ 7 bxc3 l2ia5, la teoría no confía en el sistema de las negras. Pero si no hay un caballo en c6, el avance de peón, es flojo, como demostró la partida Bisguier-Karpov, Olimpiada de Skopje 1972. Después de 1 c4 c5 2 l2ic3 g6 3 t2if3 .t g7 4 e3 l2if6 5 d4, las negras con tinuaron con 5 0-0 6 iLe2 cxd4! 7 exd4 d5!, con excelente juego, como vimos en el caso de 1 d4 l2if6 2 c4 c5 3 e3. l2if6! ••• APERTURA RÉTI Kramnik hizo famosa la salida 1 l2if3 co mo un medio de propiciar transposiciones. Después de 1 ... d5, plantea gambitos de dama normales, con 2 d4 y 3 c4. Pero en ca- El ataque al peón e interfiere con la construcción del centro blanco. 4 e5 l2i d5 5 t2ixd5 .txd5 6 d4 e6. Por ejemplo: 7 c4 iLb4+, o bien 7 iLe2 c5 8 c4 iLxf3 ! 9 �xf3 l2ic6 10 d5 t2i xe5 11 Ae4 f5, con excelente juego, Chekachev-Bauer, Clermont-Fe rrand 2003. Otras opciones de las negras son más elásticas: DEFENSA HOLAN DESA Y APERTU RAS DE FLANCO 1 ... c5 es la favorita de los sicilianos (2 e4). Puesto que los jugadores de 1 ltJf3 ge neralmente prefieren líneas cerradas, el re sultado típico es una Inglesa Simétrica (2 c4) o una India de Rey con los colores in vertidos (2 g3). 1 ... d6 parece decir: "Propongo una In dia de Rey de esta forma (2 d4 ltJf6 y 3 ... g6) porque no quiero acabar en una Pire, después de 1 ... g6 2 e4." Si las blancas tra tan de inducir a su rival a una Pire, 1 ... d6 2 e4, pueden encontrarse en una Siciliana, 2 ... cs. 1 ... f5 trata de explotar la temprana de finición del caballo rey blanco. Pero, como hemos visto en el caso de 1 c4 f5, las blan cas pueden tratar de jugar e2-e4, incluso comenzando por 2 d3. 1 95 que 2 ... ltJf6 3 �g5. Pero si las negras quieren plantear una Stonewall, entonces 2 d3 constituye un serio problema para sus planes. 1 . . g6 preserva más opciones abiertas para las negras. Contra 2 e4 pueden pasar a un Dragón hiperacelerado, con 2 ... c5, o bien encaminarse hacia una sólida Pire, con 2 ... d6 ó 2 ... Ag7, porque las blancas han impedido las líneas con f2-f4 y f2-f3. Después de 2 d4 ó 2 c4, las negras man tienen la opción de diversos tipos de defensas (Moderna, Inglesa u Holandesa Leningrado, 2 ... f5). Si responden a 2 d4 con 2 ... c6, entre los resultados pueden contarse una Neo-Grünfeld (3 g3 d5), una Moderna (3 e4 d5), o algunas formaciones indias (3 c4 d6 4 ltJc3 Ag7 ó 4 .. �g4). 1 .. e6 es, junto con 1 ... ltJf6, la respuesta más elástica a 1 lLif3. A menudo la emplean los leales a la Holandesa (2 d4 f5), y quienes tratan de inducir a las blancas a una France sa (2 e4 d5 ! ) o a una Siciliana (2 e4 c5). . . . RÉTI, 1 ... d5 Después de 1 . d5, los hipermodernos ju garían 2 c4 ó 2 g3. Pero el jugador que quiere tener en cartera sus transposicio nes, consideraría 2 e3. . El objetivo de las blancas es transponer a una versión favorable del Gambito Li sitsyn (2 e4), después de 2 ltJf6 3 e4 fxe4 4 fxe4 lLixe4 5 Ad3 lLif6 6 lLig5 y lLi xh7! o Axh7!. La línea original del gambito es és ta: 2 e4 fxe4 3 ltJg5 ltJf6 4 d3 exd3 5 Axd3, pero en esta versión las negras logran ven taj a con 3 ... d5 ! . S i las negras están dispuestas a jugar una Holandesa con ... d6, deberían respon der 2 ... d6, que evita el gambito, lo mismo ••• . 1 96 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ Así solía jugar Taimanov para entrar en una Eslava (2 . . . c6 3 c4 tLl f6 4 lLl c3 e6 5 d4) o un Gambito de Dama Aceptado (2 ... lbf6 3 c4 dxc4 4 .txc4 e6 5 d4, eludiendo las líneas con ... �g4). Las blancas disfru tan de muchas oportunidades similares a las que se derivan de 2 c4 c6 3 d4 tLlf6, pe ro sin tener que preocuparse por 2 c4 d4! ? . Después d e 1 tLl f3 d5, es más frecuente 2 c4. La defensa más sencilla es 2 ... dxc4 que, después de 3 e3, se convierte en una variante del Gambito de Dama Aceptado en la gran mayoría de los casos (3 . . . tLl f6 4 �xc4). ¿Pueden jugar mejor las blancas? A Richard Réti le gustaba 3 tLl a3. Pero 3 ... c5 4 lb xc4 tt::l c6 y ... e5 transpone a una espe cie de Inglesa (1 c4 c5 2 lLlf3 tt::l f6 3 g3 d5 4 cxd5 tLl xd5 5 .tg2 lLlc6 6 0-0 e5 7 d3 �e7), en la que la blancas han elegido un sospe choso desarrollo de caballo, 8 lLlbd2 y lbc4. Después de que 3 lLla3 pasase de moda, las blancas intentaron 3 'ti'a4+. En tal caso, la respuesta más simple es 3 tLld7, seguido de ... a6/ ... b5, para entrar en una Catalana. •.• b5 8 'ti'b3 .tb7. En esta posición, las blan cas no tienen nada mejor que transponer a una Catalana igualada, con d2-d4, es decir, 1 d4 tLl f6 2 c4 e6 3 g3 d5 4 A g2 d x c4 5 'ti'a4+ tLlbd7 6 tLlf3 a6 7 tt::l c3 l:t b8 8 'ti'xc4 b5, etc. Si a las negras no les gustan estas posi ciones, deberían considerar responder a 2 c4 con 2 c6, puesto que la Defensa Esla va (3 d4) resiste bien en la actualidad. Las blancas pueden proseguir en el espíritu de Réti, con 3 b3. La teoría dice que las ne gras pueden igualar, bien con la Defensa Laker ( ... �f5), bien con la de Capablanca ( ... �g4). Una razón importante es que 3 b3 impide 'ti'b3, con el ataque tan molesto para las negras en las aperturas con ... d5 y ... �f5. El moderno tratamiento de la Réti pa sa por diferir tanto b2-b3 como c2-c4. Las blancas apuntan a un Ataque Indio de Rey, con 1 tLlf3 d5 2 g3 tLlf6 3 �g2, y des pués de 3 c5 4 0-0 e6, pueden actuar en el centro, con 5 d3 y tLlbd2/e2-e4. Este sis tema goza de muy buena reputación con tra ... e6. Sin embargo, si las negras desarrollan su alfil dama, 3 �f5 las blancas pueden abandonar el Indio de Rey y regresar a la Réti, con 4 c4. De esta forma, evitan 2 c4 d4 y 2 ... dxc4. ••• ••• ••• , APERTURA NIMZO·LARSEN Bent Larsen contribuyó a popularizar la apertura 1 b3 e5 2 .tb2 tLlc6, atacando el peón e con tLlf3. Después de ... e4, ocupaba las casillas negras centrales con sus piezas y asaltaba . d5 con c2-c4. Pero esta estrategia casi se vio retirada del mapa en 1970, a raíz de una miniatura Larsen-Spassky, que siguió así: 3 c4 tLlf6 4 tLlf3 e4 5 lbd4 ..tcS ! 6 lb xc6 dxc6 7 e3 .. Por ejemplo: 4 'ti'xc4 e6 5 g3 a6 6 .tg2 b5, y si 4 g3 a6 5 lLl c3 e6 6 .tg2, 6 l:t b8! . La amenaza 7 . . . b 5 conduce a 7 'ti'xc4 ••• DEFENSA HOLAN DESA Y APERTU RAS DE FLANCO �fS 8 'ifc2 'ife7 9 �e2 0-0-0, y las blancas quedaron virtualmente perdidas, después de 10 f4?. La teoría concluyó que las blancas de berían jugar lb e2 y f2-f4. Pero otro punto de vista señala que el verdadero error de Larsen fue jugar c2-c4 antes de tl'if3. En lugar de 3 e3 y de 3 c4 ll'if6 4 e3, que jue gan a menudo hoy día, puede que las blan cas prefieran 3 lbf3. Las negras defienden el peón e con .. .f6 en algunas líneas, pero aquí 3 ... f6? ! 4 e4! y S �c4 no puede ser bueno para sus intereses. Por otra parte, 3 d6 (que es bueno en respuesta a 3 e3) permite a las blancas atacar eS con 4 d4. Por ej em plo: 4 ... e4 5 d5! exf3 6 dxc6 bxc6 7 gxf3 ll'i f6 8 'ifd4! , con ventaja. Podría seguir 8 ... �fS? 9 e4 �g6 10 ll'i d2 � e7 1 1 'if a4 ! 'if d7 1 2 � h3 ! y las negras se rindie ron, Hansen-Bergfalk, Correspondencia 1 992, o bien 8 . . . � e7 9 l:l gl cS 10 'ife3 0-0 1 1 lb c3 g6 12 0-0-0 : e8 13 'if f4 y 1 4 e4. Observe también que en posiciones si milares ... �d6 defiende bien el peón e, 1 b3 eS 2 �b2 lLlc6 3 e3 lbf6 4 �bS �d6 ! , pero aquí falla: 3 ll'if3 �d6 4 lba3 ! y tt:'ic4 (ó ll'ibS). .•• 1 97 La respuesta más natural de las negras a 3 lbf3 es 3 . e4, y ahora 4 ll'id4 tl'if6. La falta de c2-c4 juega un papel en la línea 5 .. e3 �c5 6 ll'ixc6 dxc6. Esto es mejor para las blancas que la partida Larsen-Spassky, después de 7 d4! ? Ae7 8 c4, y quizá también después de 7 . . . exd3 8 � xd3. Si, en cambio, 5 ... lb xd4 6 A xd4 d5, 7 c4 es un avance opor tuno, que transpone a posiciones Larsen que han dado buen resultado. Por ejem plo: 7 . . . � fS 8 tt:'i c3 d xc4 9 .t xc4 � d6 10 'ifc2 0-0 11 f4! c6 12 0-0 .l:te8 13 lbdl 'ife7 14 ll'if2, Welling-Minasian, Cappelle-la Grande 1996. No obstante, los libros dicen que des pués de 1 b3 e5 2 �b2 ll'i c6, la mej or ju gada es 3 e3. A menudo indican 3 ... d5, seguido de 4 .tbS .td6. Con todo, aquí de nuevo es una idea atractiva 4 lb f3, a lo que puede seguir 4 ... e4 5 lLl d4 lLl xd4 6 A xd4, que transpone a la línea ante rior, sin pasar por la posición de Spassky (S . . . � xcS ? ? 6 lb xc6 y A x g7). Si a las blancas les gustan tales posiciones, de berían contentarse (después de 1 b3 eS 2 Ab3 lbc6) con 3 e3 d6, debido a 4 lLlt3, antes que a la recomendación teórica, 4 �bS. 1 98 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJ EDREZ lli xd4 6 .txd4, y las negras jugarán, inevi tablemente, dS. 4 llif6, en cambio, es favorable a las blancas tras 5 d4!, después de 5 ... exd4 6 lli xd4 ile7 7 ilb5. Por ejem plo : 7 . . . i.. d7 8 il xc6 b x c6 9 'i!V f3 ! d5 10 llif5, como en la partida Hodgson-Perce rias, Breda 1989. Las blancas han transpues to a una buena línea, 3 e3 d6 4 lli e2 i.. e7 5 d4 exd4? ! 6 lli xd4. Por último, si las blancas prefieren lu char contra 1 b3 d5 , antes que contra 1 e 5 , deberían considerar abrir el j uego con 1 lli f3 , de modo que, tras 1 . . . d5, 2 b3 ! les acerca al medio j uego que de sean. ••• ••• ... Ahora, 4 ... e4 alcanza la posición desea da, con un tiempo de ventaja tras 5 llid4 1 99 , Indice de aperturas y variantes Los números se refieren a las páginas Albin, Contragambito Alekhine, I>efensa Alekhine, Cuatro Peones Alekhine, 4 tt:Jf3 Alfil, Apertura de Alfil, Gambito de Benko, Gambito Benoni, I>efensa Benoni, Sistema Schmid Benoni Moderna, I>efensa Blackmar-I>iemer, Gambito Bogoindia, I>efensa Breyer, Gambito Caro-Kann, Defensa Caro-Kann, Ataque Panov Caro-Kann, Dos Caballos Caro-Kann, Panov Acelerado Catalana, Apertura Central, Apertura Colle, Sistema Cuatro Caballos, Apertura I>anés, Gambito I>os Caballos, I>efensa Escandinava, Defensa Escandinava, 2 . . . tt:Jf6 Escocés, Gambito Escocesa, Apertura Eslava, I>efensa Eslava, Variante del Cambio 114 87 87 88 18 15 145 148 149 151 144 170 13 97 100 98 102 185 17 1 12 26 18 27 90 91 30 23 134 134 200 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE JUGADAS EN AJ EDREZ Eslava, Variante Tres Peones Evans, Gambito Francesa, I>efensa Francesa, Variante del Avance Francesa, Variante Bum Francesa, Variante Rubinstein Francesa, Variante Steinitz Francesa, Variante Tarrasch Francesa, Variante Winawer Gambito de I>ama Aceptado Gambito de Dama Aceptado, 3 ... tLlf6 Gambito de I>ama Rehusado GDR, Defensa Cambridge Springs GDR, Defensa Lasker GDR, Defensa Ortodoxa GDR, Defensa Tarrasch y Semi-Tarrasch GDR, Variante Botvinnik GDR, Variante del Cambio GDR, Variante Vienesa Giuoco Piano (Apertura Italiana) Giuoco Piano, Seudo-Ruy López Max Lange, Ataque G0ring, Gambito Grünfeld, Defensa Grünfeld, Variante del Cambio Grünfeld, Variante Rusa Holandesa, I>efensa Holandesa por transposición Húngara, I>efensa India Antigua, I>efensa India de I>ama, Defensa India de Rey, I>efensa India de Rey, �g5 India de Rey, Variante Clásica India de Rey, Variante Cuatro Peones India de Rey, Variante del Fianchetto India de Rey, h3 India de Rey, Variante Samisch India de Rey/Benoni, I>efensa Inglesa, Apertura Inglesa, Dragón Invertido Inglesa, 1 ... c5 Inglesa, 1 e5 ... 137 29 103 108 103 103 104 106 105 114 1 17 120 130 129 128 133 131 124 132 27 19 27 30 163 166 164 180 182 16 153 169 155 160 157 161 158 162 156 150 186 190 191 187 ÍNDICE DE APERTU RAS Y VARIANTES Inglesa, ... �b4 Inglesa, Defensa Maróczy, Formación Moderna, Defensa Moderna, 1 d4 Moderna, 1 e4 Moderna, Variante Gurgenidze Neo-Grünfeld, Defensa Nimzoindia, Defensa Nimzoindia, variantes con jugada de dama Nimzoindia, Variante Leningrado Nimzoindia, Variante Rubinstein Nimzoindia, Variante Samisch Nimzo-Larsen, Apertura Peón Dama, Apertura Petrov, Defensa Petrov, 3 d4 Petrov, 3 tt:lxe5 Philidor, Defensa Pire, Defensa Ponziani, Apertura Réti, Apertura Rey, Gambito de Gambito de Rey Rehusado Ruy López, Apertura Ruy López, Defensa Abierta Ruy López, Defensa Berlinesa Ruy López, Defensa Bird Ruy López, Defensa Clásica Ruy López, Defensa Cozio Ruy López, Defensa del Fianchetto Ruy López, Defensa Moller Ruy López, Defensa Steinitz Ruy López, Gambito Marshall Ruy López, Variante Anti-Marshall Ruy López, Variante Arkangelsk Ruy López, Variante del Cambio Ruy López, Variante principal Ruy López, Variante Steinitz Diferida Ruy López, vieja línea principal Semi·Eslava, Defensa Semi-Eslava, Variante Merano Siciliana, Defensa 189 183 60 92 162 92 94 168 171 172 171 175 174 196 111 21 21 21 19 95 23 194 13 14 33 41 33 36 33 34 34 43 36 44 44 43 40 47 38 48 139 140 51 201 202 SECRETOS DE LA INVERSIÓN DE J UGADAS EN AJEDREZ Siciliana, Ataque Grand Prix Siciliana, Ataque Inglés Siciliana, Ataque Keres Siciliana, Ataque Rauzer Siciliana, Ataque Sozin Siciliana, Variante Alapin Siciliana, Variante Camaleón Siciliana, Variante Cerrada Siciliana, Variante Clásica Siciliana, Variante Cuatro Caballos Siciliana, Variante del Dragón (Ataque Yugoslavo) Siciliana, Variante del Dragón (Clásica) Siciliana, Variante del Dragón (Fianchetto) Siciliana, Variante del Dragón (Loevenfish) Siciliana, Variante del Dragón Acelerado Siciliana, Variante Kan Siciliana, Variante Moscú Siciliana, Variante Najdorf Siciliana, Variante Rossolirno Siciliana, Variante Scheveningen Siciliana, Variante Sveshnikov Siciliana, Variante Taimanov Siciliana, . �b6 Siciliana, 4 �xd4 Siciliana, 5 ... .id7 Siciliana, 5 tL\bd7 . . ... Staunton, Gambito Stonewall, Ataque Tango (de los caballos negros) Torre, Ataque Trompowsky, Apertura Vienesa, Apertura 55 69 69 73 75 57 52 51 71 85 62 65 61 65 67 81 59 78 59 68 85 81 84 52 78 77 179 179 176 145 143 15 Del mismo autor: EL VERDAD ERO VALO R D E LAS PIEZASJ aavu en a1earez prácticas sobre la explotación de las piezas para el jugatÍIJr de competición 256 pp. Cód.: 500433 Otros libros de AJEDREZ publicados por TUTOR: �61frRA LAS P IEZAS 272 pp. Cód.: 500409 232 pp. Cód.: 500352 176 pp. Cód.: 500299 328 pp. Cód . : 500398 232 pp. Cód.: 500363 324 pp. Cód . : 500323 728 pp. Cód . : 50021 3 AlfATOU KARPOV !'!tJ�!.�t!� ......•• f,!! Drfms• CARO -KANN Vol11n1m Z El Afniut Panov 272 pp. Cód . : 500412 Otros libros de AJEDREZ publicados por TUTOR: • .�Ql:i!t.�\J_M.� � .l�� �-A-�l.���� La V�TE NAJDORF AtOU StllRO\' TABLERO {::�;::g;_¿ 352 pp. Cód . : 500221 ···- ··-�- 11.�w.-. K_o_�l!'I.�• . • M I S M EJO RES PART I D A S Je ajedrn \� f . fl,miJ,,, (l·Jt�!..�.:.c. 296 pp. Cód . : 500108 200 pp. Cód . : 500335 272 pp. Cód . : 500124 448 pp. Cód. : 500233 200 pp. Cód . : 500344 48 pp. Cód.: 5 1 7012 X!�!t. �UN_t-1 _• JO.E C._AL!-A,G_��I!. Có11Ul dtmtitr 11 IA DEFENSA SICILIANA tt:t-:�� -���-·�·� 240 pp. Cód.: 500227 . Pll Yf�NC_l-!E • . . la Escutkt CHINA DE AJEDREZ 192 pp. Cód . : 500193 304 pp. Cód . : 500247 160 pp. Cód . : 500271 cüMBRE 224 pp. Cód . : 500194 192 pp. Cód . : 500264 256 pp. Cód . : 500121 Libros de AJEDREZ de Antonio Gude publicados por TUTOR: 288 pp. Cód . : 507005 456 pp. Cód . : 500143 272 pp. Cód. : 500192 352 pp. Cód. : 507008 448 pp. Cód . : 500177 144 pp. Cód. : 506005 336 pp. Cód. : 520449 440 pp. Cód . : 500288 240 pp. Cód . : 500328 208 pp. Cód . : 5003 14 Libros de AJEDREZ de Antonio Gude publicados por TUTOR: Cuadernos prácticos de ajedrez, uria colección de libros con ejercicios temáticos. El complemento ideal para que el jugador desarrolle la capacidad táctica y estratégica. lililflt'i 710j ¡ n rlt l!1 (1 di AJEDRFZ l\tllOlllO �GI DEFENSA )' contt'Mtoqut 48 pp. Cód . : 520001 48 pp. Cód . : 520005 48 pp. Cód . : 520009 ¡_ "1l(ll 1 1¡/h J 1 {¡ {/ ¡ (j i fi, AJ EDREZ AAIOHIO(.UO( COMBINACIONES . tÚ_ mate *·• � 48 pp. Cód .: 520002 48 pp. Cód . : 520006 llJll/JI. �· , 4 8 pp. Cód. : 5200 1 0 / PRO, fl LEMAS '" estrategia /¡{llr l/Oi ¡'1 1/, l¡ ( l)1 , 1, AJEDREZ A�IOIUOCiVllE PROBLJ.�J > 9; . ... ..•• . . · 48 pp. Cód . : 520003 48 pp. Cód . : 520007 · . . · · · · · · · · ·· · · · • 48 pp. Cód . : 5200 1 1 , :utrl r/( n p 1 t11 l r 1 0 de AJEDREZ ·�· .....,..,,,. . .... . . � · ..... ,:�·>.'.•, ·· 48 pp. Cód . : 520004 SACRIFl.CIOS . pout101utfis . 48 pp. Cód . : 520008 S i desea más información sobre éstos y otros libros de AJEDREZ publicados por Ediciones TUTOR, consulte nuestra página: www.edicionestutor.com
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