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INFORMACIÓN DE LOS PONENTES POR BLOQUES TEMÁTICOS Y POR ORDEN DE INTERVENCIÓN 1. Movilización global y desregulación: los cimientos de la gubernamentalidad neoliberal Intervenciones de Alberto Berzosa, Luis López Carrasco, Merve Elveren, Marta Echaves y Zdenka Badovinac ALBERTO BERZOSA La exposición como terreno para la disputa de la Historia Los relatos oficiales sobre nuestra historia reciente, y en particular los que se refieren a la Transición y los primeros pasos de la democracia postfranquista, están repletos de consensos que explican los hechos de manera simplificada, emborronando y empobreciendo nuestro conocimiento de los mismos. En este sentido, algunos lugares comunes respecto a la Transición han sido corregidos por nuevos planteamientos historiográficos cada vez más extendidos como, por ejemplo, el papel protagonista que ocuparon entonces las personalidades políticas, cuya importancia aparece cada vez más matizada al explicar las transformaciones vividas por el país en ese momento en favor del papel desempeñado por las bases sociales y políticas. Con los años ochenta ocurre algo similar. Las lecturas políticas del periodo diagnostican generalmente la apatía de la política de base y un mayoritario entusiasmo por el felipismo, mientras que las lecturas artísticas hablan de la desaparición del arte comprometido en favor de un modo de hacer y un gusto estético acrítico y hedonista puesto al servicio de la modernización cultural del país. Sin embargo, las lecturas históricas de los ochenta contradirían tales consensos señalando, por ejemplo, cómo la actividad asociativa en los barrios obreros cambió de escenario pero continuó funcionando, cómo la primera coordinación contra la expansión del sida tuvo un carácter ciudadano, o el gran crecimiento que alcanzaron entonces los movimientos ecologistas y anti‐OTAN. Y lo mismo desde el punto de vista cultural, donde los discursos oficiales quedan en evidencia si prestamos atención, por ejemplo, al modo en que se construyeron las redes de teatro alternativo en las grandes ciudades, o al desarrollo de proyectos artísticos críticos como los de Darío Corbeira o el colectivo Agustín Parejo School, entre otros. La revisión de nuestro pasado reciente ha de hacerse desde una posición que reivindique la Historia frente a los relatos establecidos y sus consensos. Mi intervención en este seminario pretende desarrollar estas ideas y definir los museos y centros de arte como espacios privilegiados para presentar tales investigaciones históricas, en el mismo sentido en que lo hace la exposición Madrid activismos (1968‐
1982), que recientemente he comisariado, y en la que se recurre a la cultura material y a las fuentes primarias (también el arte), es decir a la Historia, precisamente para tratar de reenfocar, desde las salas de exposición, los borrones y las confusiones que los consensos históricos han generado en los relatos de nuestra contemporaneidad. BIOGRAFÍA Alberto Berzosa Camacho. Doctor en Historia y Teoría del Arte por la Universidad Autónoma de Madrid y la Université de Reims Champagne‐Ardenne. Autor de libros como Homoherejías fílmicas (Brumaria, 2014) y Cámara en mano contra el franquismo. De Cataluña a Europa, 1968‐1982 (Al Margen, 2009), y artículos como «Juegos de realidad y ficción en la obra de Llorenç Soler» (Biblioteca Nueva, 2013) o «Cine, activismo y movimientos sociales de una España en transición» (Brumaria, 2012). Ha coordinado diferentes actividades, como los encuentros «Nuevo cine de autor español» en la librería La Central del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (2013), y comisariado muestras cinematográficas como Els 5 QK’s: los mariquitas felices de la transición o El documental de Llorenç Soler, así como la exposición Madrid activismos 1968‐1982, dentro del programa Inéditos 2016 en La Casa Encendida. Es miembro del colectivo Imagen Subversiva y desde esta plataforma ha participado en charlas, seminarios y conferencias en espacios como el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, el CA2M Centro de Arte Dos de Mayo de Móstoles o La Casa Encendida (Encontexto). Desde 2015 es profesor del Curso de Especialista en Cine, Fotografía y Vídeo Político y Social de la Universidad Complutense de Madrid y profesor asociado del Departamento de Historia y Teoría del Arte de la Universidad Autónoma de Madrid. LUIS LÓPEZ CARRASCO ¿Va a estallar el obús? Protestas, disturbios, revueltas. Episodios como la Primavera de Reinosa, las movilizaciones estudiantiles del 87, la «Intifada» del Besòs o la quema del parlamento regional de Cartagena ofrecen una imagen de alta conflictividad social y movilización ciudadana en el periodo 1986‐1992; sin embargo, la memoria colectiva de esos años resuena todavía para la opinión pública como un oasis de confort, celebración y hedonismo. Los ochenta continúan siendo en la actualidad aquellos maravillosos años en los que todos fuimos clase media, un refugio para la nostalgia. Mientras tanto la clase trabajadora, la juventud de extrarradio y el entorno rural desaparecerán paulatinamente del imaginario cultural hasta convencer a propios y extraños de que nunca existieron. La producción de cine documental, que quizá podría haber retratado esos años convulsos, se desvanecerá en España tras su actividad en la década anterior. Probablemente el gran relato contrahegemónico de los ochenta sea la reconversión industrial (eufemismo sibilino que encubre un desmantelamiento sin contrapartidas), proceso que atraviesa toda la década y afecta a toda la geografía española, arrastrando la pérdida de cientos de miles de empleos, agudizando el deterioro urbano y la desesperanza profunda de comarcas enteras. La reconversión es además el peaje que España tiene que pagar para acceder a los fondos europeos que sufragarán los fastos del 92. El modelo de crecimiento español basado en el sector terciario, el turismo de masas y la especulación inmobiliaria va en paralelo a esas medidas y conecta con la crisis económica, laboral y financiera actual. Recuperar ese pasado escamoteado es crucial para entender la desintegración de nuestro presente. BIOGRAFÍA Luis López Carrasco (Murcia, 1981) es productor, director y guionista. Cofundador del colectivo audiovisual Los Hijos, dedicado al cine documental experimental. Su trabajo como director ha sido proyectado en numerosos festivales internacionales como Locarno, Róterdam, Nueva York, BAFICI o Viennale y centros de arte contemporáneo como Georges Pompidou, Guggenheim Bilbao o Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. MERVE ELVEREN How did we get here? La década de los ochenta en Turquía está marcada por el legado del poderoso régimen militar, instituido con el golpe de Estado de 1980, y también por las políticas gubernamentales neoliberalistas que estrechaban los vínculos con la economía global. How did we get here, que se presentó en el SALT Beyoğlu y el SALT Galata en 2015, establecía una cartografía de los grupos alternativos y trazaba los orígenes del contexto actual de Turquía en ese punto de inflexión, tanto en relación con el pasado reciente como a través de los movimientos sociales y los elementos de la cultura popular. BIOGRAFÍA Merve Elveren se graduó en Comunicación Visual en la Sabancı University de Estambul (2009). Desde 2011 es programadora de exposiciones en el SALT. Ha participado en la organización de Foto Galatasaray (2011), Modernity Unveiled / Interweaving Histories – Gülsün Karamustafa (2011), Istanbul Eindhoven SALTVanAbbe: 68‐89 (2012), Modern Times: Pre 68 (2012) y Scared of Murals (2013). En 2013 comisarió, junto con Duygu Demir, la retrospectiva A Promised Exhibition – Gülsün Karamustafa. En 2015 trabajó en How did we get here, un proyecto de investigación sobre las transformaciones que experimentó Turquía durante la década de los ochenta. MARTA ECHAVES Nos querían muertos. La contrarrevolución de los caballos otra vez La contrarrevolución de los caballos fue un proyecto expositivo que revisitaba los años noventa en el Estado español en tanto década que considero fundacional de un paradigma de gobernanza del que somos herederos. Este ejercicio de imaginación histórico‐política ponía en el centro las mutaciones que sufrieron las estrategias necropolíticas en el contexto de aterrizaje y consolidación del neoliberalismo en nuestro territorio, haciendo especial hincapié en su higienizada y aparentemente desideologizada capacidad destructora. Con motivo de la exposición Gelatina dura, y dejándose contaminar por algunos de los trabajos que ahí se presentan, La contrarrevolución de los caballos tomará en esta ocasión la forma de una conferencia performativa que pretende homenajear todo aquello que desapareció durante aquellos años. Como si de un monumento a todas esas muertes anónimas y silenciosas se tratase, se activarán y entrecruzarán diferentes materiales y documentos que pertenecen a proyectos de artistas con los que he colaborado, o que fueron encontrados en archivos domésticos de amigos y familiares, para tratar de invocar memorias íntimas que se vieron atravesadas por los sucesos que marcaron aquellas décadas. Si los años ochenta son leídos desde los noventa, la imagen de la España posfranquista sortea su mitología transicional, incidiendo en las consecuencias desastrosas de una modernización y financiarizacion acelerada. BIOGRAFÍA Marta Echaves (1990) es comisaria e investigadora. Licenciada en Filosofía, cursó el Programa de Estudios Independiente del MACBA (2014‐2015). Sus últimos proyectos, Nuestro Museo de América y Seguiremos sin tener garras, sientan las bases de sus actuales líneas de investigación: cómo las prácticas artísticas contemporáneas desbordan y ponen en cuestión la positividad de la historia, la univocidad de sus narratologías y sus mecanismos de transmisión. Con su última exposición, La contrarrevolución de los caballos, pone el foco en la España posfranquista, como una de las voces de una nueva generación nacida ya durante la normalidad democrática, para traer al presente «memorias marginales» que reorganicen el paradigma, oficial y contraoficial, con el que ha sido interpretada nuestra historia reciente. ZDENKA BADOVINAC NSK: From Kapital to Capital. An Event in the Final Decade of Yugoslavia Esta ponencia trata de la reciente exposición con el mismo título presentada en Liubliana y las adaptaciones de la misma que pudieron verse en Eindhoven y Moscú durante 2015 y 2016. La exposición reunió propuestas de los distintos colectivos que integran el Neue Slowenische Kunst (NSK), en especial del grupo multimedia Laibach (1980), el grupo de artes visuales IRWIN (1983) y el grupo Scipion Nasice Sisters (1983‐
1987). Demasiado a menudo el NSK se asocia exclusivamente con el contexto de la desintegración de Yugoeslavia y del socialismo. Esta investigación pone de relieve el poder de las iniciativas artísticas colectivas y su objetivo fundamental: construir una nueva constelación artística que permita postular una sociedad diferente y entablar un diálogo internacional. Artistas: Laibach, Irwin, Scipion Nasice Theatre, Cosmokinetic Theatre Red Pilot, Cosmokinetic Cabinet Noordung, New Collectivism, Department of Pure and Applied Philosophy, Builders, Retrovision, Film. En 2015 vio la luz un libro con el mismo título publicado por la Moderna galerija de Liubliana y MIT Press, Boston. BIOGRAFÍA Zdenka Badovinac es curadora y escritora. Desde 1993 ha ejercido el cargo de directora de la Moderna galerija y del Museum of Contemporary Art Metelkova de Liubliana. Ha comisariado numerosas exposiciones de artistas eslovenos e internacionales. Ha sido la impulsora de la primera colección de arte de Europa del Este, la 2000+ Arteast Collection de la Moderna galerija. Su trabajo se ha centrado en los procesos de redefinición de la historia y en las distintas tradiciones vanguardistas en el arte contemporáneo, comenzando con la exposición Body and the East – From the 1960s to the Present, inaugurada en 1998 en la Moderna galerija de Liubliana. Comisaria del pabellón de Eslovenia en la Bienal de Venecia (1993‐1997, 2005) y del pabellón austriaco en la Bienal de São Paulo (2002). Entre 2011‐2013 Zdenka Badovinac fue presidenta del CIMAM. Entre sus proyectos más recientes destacan: 1:1 Stopover producida por el Maska Institute at the Museum of Contemporary Art Metelkova, Liubliana (2013); Grammar of Freedom / 5 Lessons: Works from Arteast 2000+ Collection, con Snejana Krasteva y Bojana Piškur, en el Garage Museum, Moscú (2015); NSK from Kapital to Capital. Neue Slowenische Kunst – an Event of the Final Decade of Yugoslavia en la Moderna galerija, Liubliana (2015); Low‐Budget Utopias, con Bojana Piškue, en el Museum of Contemporary Art Metelkova, Liubliana (2016); NSK from Kapital to Capital. Neue Slowenische Kunst – an Event of the Final Decade of Yugoslavia en el Garage Museum of Contemporary Art, Moscú (2016). 2. Relatos de la contracultura Intervenciones de Diana Franssen, Nick Aikens y Nav Haq DIANA FRANSSEN Talking Back. Counter Culture in the Netherlands Talking Back examina la contracultura holandesa en la década de los ochenta a través del movimiento okupa y sus implicaciones culturales en iniciativas artísticas que mantenían actitudes alternativas respecto al mundo del arte. Hubo grupos de artistas que utilizaron el vídeo, el sonido y la fotografía para subvertir las formas de representación «manipuladoras» de los medios de comunicación de masas. Otros movimientos contraculturales se centraron en el rol y la posición de las mujeres en el seno de estas redes alternativas y de los grupos activistas. A pesar de su radicalismo inicial, estas microhistorias también ponen de manifiesto la evolución desde una sociedad más abierta a otra más cerrada e individualista. BIOGRAFÍA Diana Franssen estudió pintura en la Tilburg Art Academy e historia del arte en la Universidad de Utrecht. Dirigió la biblioteca y el archivo del Van Abbemuseum de 1991 a 2004, año en que pasó a ocupar el cargo de conservadora e investigadora en arte del mismo museo. Ha comisariado exposiciones individuales de Lynda Benglis, Piero Gilardi, Mark Lewis y Jan van Toorn, así como Living Archive (2005‐2007); Positions III (2016‐2017); y De Stijl: ‘Who owns the future? From Aubette to Apple’ (2017). También ha sido co‐comisaria de las exposiciones Museum modules; Play Van Abbe y The Collection Now (2013‐2017); From the Center y On Difference, ambos proyectos sobre feminismo; y, en la escena alternativa, Eindhoven in action (2013‐
2014). Ha colaborado en el comisariado de A Republic of Art (2015) y The 1980s. Today’s Beginnings? (2016). Es coeditora de la plataforma online de L’Internationale. NICK AIKENS Thinking Back: Montage and the UK Black Arts Movement En la Gran Bretaña de los ochenta surgió un potente debate entre artistas negros, directores de cine, pensadores e instituciones. Era el resultado de un intento por parte de los artistas de comprender su relación con el legado colonial de Gran Bretaña, una política contemporánea cada vez más dividida y un espacio cultural en el que coexistían las ideas de resistencia, expresión y formación de la identidad. Presentado inicialmente como parte de la exposición The 1980s: Today’s Beginnings? en el Van Abbemuseum de Eindhoven (abril‐septiembre de 2016), el proyecto se ha reconfigurado para adecuarlo a una exposición más amplia, The Place is Here. Britain, comisariada junto con Sam Thorne, que se presentará en el Nottingham Contemporary entre febrero y abril de 2017. En la presentación, Nick Aikens reflexionará sobre la noción de montaje como estrategia estética intrínseca de las propias obras, como mecanismo curatorial en el seno de la exposición y, de forma más amplia, como aproximación a la historia. BIOGRAFÍA Nick Aikens es conservador en el Van Abbemuseum de Eindhoven. Recientemente ha co‐comisariado la exposición The 1980s. Today’s Beginnings? (Van Abbemuseum, 2016), que incluía el capítulo «Thinking Back: A Montage of Black Art in Britain». Una versión ampliada de esta exposición, comisariada junto con Sam Thorne y titulada The Place is Here, se presentará en el Nottingham Contemporary en 2017. También es comisario de la retrospectiva de Rasheed Araeen (Van Abbemuseum, 2017). Entre sus proyectos editoriales actuales destacan The Long 1980s. Constellations of Art, Politics and Identity (Valiz, 2017) y una monografía sobre Rasheed Araeen (2017). Es miembro del comité editorial de L’Internationale Online y profesor en el Dutch Art Institute (desde 2012) y en la Design Academy Eindhoven (desde 2015). NAV HAQ Energy Flash – The Rave Movement La cultura rave de los ochenta y noventa constituyó el último gran movimiento juvenil de Europa. Durante este periodo de grandes cambios sociales y políticos, el rave, en sus distintas versiones, migró por el continente desde su epicentro en Gran Bretaña, Bélgica y Alemania. Como movimiento, ponía de manifiesto un deseo de autonomía, reivindicando la tolerancia y la experimentación vital, todo ello construido en torno a la energía latente de la música electrónica. Como cultura de base musical, defendía la práctica individual, la invención y la creatividad sin trabas, lo que condujo al más denso periodo de la historia en cuanto a diversificación musical. Energy Flash, presentada en el M HKA entre junio y septiembre de 2016, ha sido la primera exposición museística centrada en el rave, así como en las condiciones sociales, políticas, económicas y tecnológicas que dieron lugar al rave como movimiento alternativo en toda Europa. La exposición analizaba las tecnologías tanto como la estética del rave, además de sus efectos en la cultura en sentido amplio. Para muchas personas decepcionadas con el mercado y el Estado, las raves abrieron una tercera vía, un espacio con una lógica propia basada en lo colectivo. Con un poder de convocatoria que arrastraba a miles de participantes, las raves se han calificado de «zonas autónomas temporales»: concentraciones espontáneamente organizadas de personas y energía musical que eludían las estructuras formales de control. Pese a encarnar tendencias a la vez utópicas y distópicas, las raves poseían ciertas cualidades extraordinarias que transgredían la raza y el género. Utilizando las tecnologías emergentes de la época, la propia música respondía a una nueva estética claramente diferenciada que redefinió las fronteras musicales. Cada local desarrolló su propia cultura rave, a partir de innumerables formas de acid house, techno, hardcore, jungle y otras tendencias. En una situación de pánico moral, los gobiernos de Europa occidental legislaron para criminalizar la cultura rave desde mediados de la década de los noventa. Energy Flash abordaba el rave como un fenómeno altamente politizado, a través de una serie de nociones clave: autonomía, libertad civil, tecnología y creatividad. En tanto que proyecto interdisciplinario, mostró el trabajo de artistas visuales en diálogo con numerosos artefactos de los ámbitos del diseño, la música y la moda, así como artículos seleccionados de varios archivos, documentales de televisión, literatura y legislación penal. A partir de esta diversidad de material, la exposición abonaba la tesis de que la ambigua situación de la cultura rave fuera de la ideología neoliberal, manteniéndose al margen del mercado y las fuerzas estatales, fue determinante en la inhibición de la misma. Esta condición hace de ella un caso digno de estudio por parte de aquellos que buscan formas alternativas de infraestructura para el arte y la cultura. BIOGRAFÍA Nav Haq es conservador senior en el M HKA de Amberes (Museum of Contemporary Art Antwerp), donde ha comisariado exposiciones monográficas de artistas como Hüseyin Bahri Alptekin, Harald Thys & Jos de Gruyter y Kerry James Marshall. También ha co‐comisariado la exposición colectiva Don’t You Know Who I Am? Art After Identity Politics y, más recientemente, Energy Flash: The Rave Movement. Haq dirige el programa IN SITU en el M HKA, encargando a artistas jóvenes el desarrollo de nuevas obras para muestras monográficas, así como el programa LODGERS (junto con AIR Antwerpen), que ofrece residencias de arte de tres meses en Amberes para iniciativas artísticas que no cuentan con un espacio público propio. Forma parte del comité editorial de L’Internationale Online, y es el comisario de la Bienal de Gotemburgo para 2017. 3. Sexualidades disidentes Intervenciones de Fefa Vila y Equipo Palomar FEFA VILA Las huellas de la disidencia sexual en el tránsito de los ochenta a los noventa en el Estado español: aportaciones para una relectura y reescritura sociopolítica Franco, el dictador, murió en 1975, pero no será hasta finales de los ochenta y comienzos de los noventa cuando surjan y proliferen nuevas identidades políticas bajo nuevos contextos marcados por la crisis económica y social, la pandemia de sida, las agresiones a personas de identidades no normativas y el odio y la homofobia institucionalizados. Será en ese momento, con la aparición de LSD y La Radical Gai en la escena activista madrileña, cuando irrumpe, no exento de contradicciones en su recepción, el movimiento queer en el Estado español. Estos dos grupos introducen por primera vez un debate activista y teórico queer, no solo rescatando la máxima de Wittig «las lesbianas no son mujeres», sino acercando dialógicamente y problematizando el contexto político español a través de la recepción y traducción de autoras como Butler, Teresa de Laurentis, Bersani, Watney, Weeks, Haraway y A. Lorde, entre otras. Se trata de una generación joven de activistas, en la veintena en su mayoría, que entabla redes dentro y fuera del territorio español en conexión con Act Up!, Queer Nation, Lesbian Avengers, Outrage, Guerrila Girls, el movimiento feminista y lesbiano de América Latina, etc. Esta nueva generación impulsará en el Estado español la primera producción propia de textos de todo tipo, que desde inicios de los noventa está contribuyendo a alimentar la comunicación y agitar el activismo con las prácticas teóricas feministas y transfeministas. Herederas de un movimiento LGTB que había luchado con uñas y dientes por la abolición de la Ley de Peligrosidad Social en la Transición, LSD y La Radical Gai tomaron las calles del Madrid desde inicios de los noventa. Tiñeron de rojo el agua de una fuente del centro de la ciudad el 1 de diciembre, Día Internacional de Lucha Contra el Sida; pintaron sus manos del mismo color para dejar sus huellas ante el Ministerio de Sanidad y denunciar la inanición institucional frente a la pandemia de sida y el estigma social que conllevaba; se fotografiaron desnudas en Es‐cultura lesbiana para encontrar en sí mismas los referentes y las visiones que la sociedad les negaba; sufrieron violencias fruto de la intolerancia; enfrentaron sus miedos y los ajenos; salieron del armario llenos y llenas de pluma; reivindicaron su espacio en un mundo que, ante su presencia, se sentía en jaque. Lo cuestionaban todo y siguen haciéndolo. Cuestionan, incluso, sus propias decisiones. La agenda política del movimiento LGTB de entonces giraba en torno a grandes temas: la identidad; la sexualidad y las prácticas sexuales; la construcción de la visibilidad versus la invisibilidad y de un lenguaje propio; las violencias; el sida; la militarización y las redes afectivas. Participaron en todos los movimientos sociales del momento, haciendo evidente en cada espacio de activismo que sus prácticas y propuestas partían de su condición como maricones y bolleras. El campo de batalla donde más sufrieron fue en la lucha contra el VIH. En España, a diferencia de lo que ocurrió en otros países, fueron los grupos activistas de personas afectadas quienes crearon espacios contra el sida. El miedo al estigma y, sobre todo, el miedo a la muerte, marcaron sus acciones políticas. Una gran parte de los activistas de La Radical Gai tenía VIH; a partir de ahí, la lucha contra el sida se convirtió en una de sus reivindicaciones principales y eje que articulaba e introducía nuevos debates en torno al cuerpo y al sexo, a la vida y a la muerte, a la rabia, al deseo, la amistad y el goce. En aquella batalla y en sus debates también estaban las lesbianas de LSD que compartían espacio político, estrategias y alianzas fraternales con La Radi. Sus militantes exigieron una ampliación de los conceptos, de los debates y las demandas políticas existentes, mostrando que aquellas cuestiones que parecían estrictamente personales eran potencialmente políticas o politizables. Eran producto y estaban inmersas en procesos y relaciones sociales, e implicaban a las personas de una manera que las luchas políticas convencionales no conseguían implicar. La democracia ampliaba su horizonte problematizando su espacio tradicional con «lo personal es político». BIOGRAFÍA Fefa Vila Núñez (Laza, 1968) se licenció en Ciencias Políticas y Sociología por la Universidad Complutense de Madrid. Posteriormente completó su formación en políticas y teorías del género en la Universidad de Utrecht, en la Universidad de Mánchester y en la Universidad de Santa Cruz, en California. Es profesora de Sociología en la Universidad Complutense (Departamento de Teoría Sociológica) y ha trabajado, dirigiendo y coordinado proyectos de investigación, para la Fundación FOREM, que depende del sindicato Comisiones Obreras. Además, fue promotora del colectivo LSD, en el que siguió una trayectoria artística y de investigación y reivindicación lésbica queer‐feminista. El colectivo funcionó en Madrid de 1993 a 1998. También ha colaboraron con el grupo de trabajo queer GtQ‐
Mad en la publicación del libro El eje del mal es heterosexual, que ha coeditado. Recientemente ha comisariato la exposición Archivo Queer? Screwing the system –
Madrid 1989‐1995 dentro del proyecto liderado por el Van Abbemuseum bajo la denominación The 1980s. Today’s Beginnings? An alternative view on the eighties. Actualmente es directora artística en el marco que establece el Ayuntamiento de Madrid para la World Pride que tendrá lugar en Madrid en 2017. EQUIPO PALOMAR En memoria de Alberto Cardín (1948‐1992) En los últimos años, el colectivo artístico Equipo Palomar viene hilvanando lo que podría ser una «posible» memoria disidente y marica «incompleta», enfocada a la investigación y producción en las artes visuales. El título En memoria de Alberto Cardín (1948‐1992) hace referencia a la crónica que se le dedica en las páginas del número 12 de la revista de filosofía El Basilisco, fundada en 1978 por Gustavo Bueno. Alberto Cardín es uno de los intelectuales más importantes de una subcultura que él mismo apuntaló teóricamente en la Barcelona de los ochenta, y que transcendió su labor como intérprete y crítico de la posmodernidad. Para el seminario Los ochenta a contrapelo, el Equipo Palomar presentará y debatirá con el público asistente una de sus últimas producciones: la adaptación de un guion de cine inédito escrito por Alberto Cardín en 1976 que han realizado recientemente en el contexto de BCN Producció 2016. BIOGRAFÍA Equipo Palomar, integrado por Mariokissme y R. Marcos Mota, es un proyecto que cuenta con un espacio de trabajo, El Palomar, ubicado en el barrio de Poble Sec (Barcelona), desde el que revisan la historia oculta en relación con la identidad y el género. El Palomar es un espacio, un contexto de trabajo, un posicionamiento político y un replanteamiento institucional. Sus artífices son artistas, pero también son programadoras, actúan como comisarias y generan discursos críticos. Este laboratorio de base queer marca sus propios ritmos, combinando identidades múltiples y flexibles para modificar las formas de trabajar con el arte. En El Palomar, el deseo es un motor para replantearlo todo (www.elpalomar.sexy).