Luis Zárate, director general de ICA y ex presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de México (CICM) se comprometió a entregar al CICM un estudio de movilidad cuya idea conceptual es conectar proyectos de trenes interurbanos y urbanos a través de un corredor de movilidad llamado Crossrail, idea que nació en Europa y se refiere a una red ferroviaria que conectará con los límites de la CDMX y a la red del Sistema de Transporte Colectivo (STC). En sesión de Diálogo con Ingenieros, Ángel Ramírez Ordaz, director de Ingeniería de ICA, presentó el estudio Propuestas para mejorar la movilidad en la megalópolis, el cual integra un diagnóstico de las demandas y la infrestructura disponible y en el que se propone al CICM que sea promotor del Plan Maestro de Movilidad de la Megalópolis, una vez que este sea afinado y ampliado. De acuerdo con el ponente, parte del proyecto puede tomar tres años para desarrollar la arteria central por Reforma, y para concluirlo en su totalidad, se prevé un horizonte de 20 años. Ramírez Ordaz consideró de gran valor apoyar a los proyectos de trenes interurbanos y lograr la conectividad entre el Poniente y el Oriente, lo que es factible, aunque se requieren esquemas de participación públicos y privados. Los criterios considerados para diseñar esta propuesta son: aforo de pasajeros, accesibilidad a destinos importantes proporcionando conexiones más directas, descongestión, costo económico y riesgo asociado con asuntos técnicos y políticos. Precisó que el Crossrail es una visión de red de transporte público a largo plazo y una propuesta que surgió a raíz de un estudio donde se detectó que a la actual red le faltan proyectos que se acerquen a destinos importantes, conexiones hacia los límites de la CDMX y facilitar la transferencia con el STC con una visión de megalópolis. Ante funcionarios del Gobierno de la CDMX, empresarios, consultores y líderes gremiales, comentó que hoy en día hay proyectos similares (Crossrail) en Milán, Londres, París y Frankfurt con una construcción de entre 14 y 76.5 kilómetros de túneles. En el caso de la CDMX, la construcción de túneles sería ente 11 y 22 kilómetros, y entre 6 y 12 kilómetros de viaducto elevado. La principal arteria de este proyecto es un túnel debajo de Reforma, desde el Bosque de Chapultepec saliendo de Viaducto justo antes del Eje 2 Norte, con correspondencia con las líneas 2 y 3 en Hidalgo y las líneas 8 y B en Garibaldi. El túnel tendría una profundidad de entre 20 y 30 metros y las estaciones podrían ubicarse en Chapultepec, Insurgentes y Reforma Norte. Agregó que el estudio conceptual incluyó perfil horizontal y vertical, tipo de suelos, lista de los determinantes de costo (por ejemplo kilómetros de túnel, y elementos clave del diseño ferroviario), así como la tecnología en donde se sugiere que ésta debe ser compatible con la construcción de la red México-‐Toluca. En cuanto a las características de los trenes, estos contarían con 10 vagones de tres metros de ancho, correrían a una velocidad máxima de 100-‐140 km/hora, serían hasta 30 trenes por hora por dirección en el túnel central, tendrían una pendiente máxima de 3.5%, 10 metros de diámetro de túnel con dos pistas de 4 metros entre sí y electrificación por catenaria 25KV AC. Fernando Gutiérrez Ochoa, presidente del CICM agradeció la generosidad de ICA y dijo que presentará esta propuesta en el seno de los Comités de Movilidad, Infraestructura del Transporte y Movilidad.
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