1. Ciencia

X Jornadas de Patrimonio
Recorrido Histórico
Calles:
Llanos de Verdugo, Desierta y Carnicería
Viernes 10 de Octubre de 2014, a las 20:00 h.
Punto de encuentro:
Museo de Historia de Agüimes
X JORNADAS DE PATRIMONIO
RECORRIDO HISTÓRICO 2014
Llanos de Verdugo y calles Desierta y Carnicería
Los muros de las casas
repiten nombres
de gentes admirables
por sus acciones.
Corren recuerdos
de aquellas nobles gentes
que se nos fueron.
Las personas pasan, las casas se quedan y guardan memorias,
reformen, se arruinen…
aunque se vendan, se
Hacia 1740 aparece por Agüimes don José Joaquín Verdugo Albituría, regidor perpetuo,
juez subdelegado de Indias, corregidor de ausencia de Gran Canaria, apoderado general
de las Islas de Lanzarote y Fuerteventura desde febrero de 1744 y regidor del Cabildo
de Gran Canaria desde el 2 de noviembre de 1748 por compra del oficio a don Alonso
Mugica del Castillo.
A tal y tan eminente señor el Obispo de Canarias y señor de Agüimes don Fray
Valentín Morán, en agosto de 1754, le regaló un extenso sitio donde don José Joaquín
construyó su gran caserón y un molino de prensar para la fábrica de aceite con las
aceitunas traídas de su hacienda en el Toscón de Temisas.
Quedó libre una amplia zona que el pueblo denominó Llanos de Verdugo.
El 17 de mayo de 1903, el agüimense don Juan Romero Alvarado solicitó permiso
al Ayuntamiento para “construir su casa en Los Llanos de Verdugo lindando con la
carretera”.
En la casa construida vivió con su esposa María Jesús Romero Rodríguez y con sus
hijos José, Juan, Higinio, Joaquín, Catalina, Francisco y Domingo.
Fue famosa e importante su tienda de víveres y bebidas.
Muy cerca y por la misma fecha, fabricó su primo hermano Sebastián Tarajano Romero
casado con Emilia Hernández Placeres.
Hacia 1910, Sebastián emigró a Cuba desde donde reclamó a su esposa e hijos
Joaquina, Francisco, Josefa y Antonia.
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
Para costear los fletes de los pasajes hipotecó su casa a su primo hermano José Romero
Alvarado. La casa pasaría después a ser propiedad de Quino Romero Romero quien allí
montó y administró un bar.
El 19 de agosto de 1882 se aprobó el quinto tramo de la Carretera que unía a Telde con
Agüimes.
En 1900 la Carretera ya estaba en servicio y varías familias se interesaron en construir
a ambos lados desde El Sifón a La Rambla.
La Carretera atravesó y cortó los Llanos de Verdugo y las calles Ejido, Desierta
y Carnicería. Estos rótulos son antiquísimos. El 24 de diciembre de 1868, el
Ayuntamiento encargó la roturación y enumeración de las calles a Don Sebastián
Alvarado y don Antonio Amador quienes respetaron los viejos nombres de Ejido,
Desierta y Carnicería insertos en el distrito Este.
En 1918 el alcalde don Luis Artiles Castro dio el nombre de León y Castillo al tramo
de la Carretera que va desde El Sifón a La Rambla.
Llanos de Verdugo, hoy calle Juan Alvarado y Saz
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
En 1990 el alcalde don Antonio Morales Méndez lo cambió por el actual Juan Alvarado
y Saz, nacido en Agüimes.
Don Luis Artiles Castro, a su regreso de Cuba en 1894, se afilió al Partido Liberal de
don Fernando León y Castillo. Fue concejal del Ayuntamiento de Agüimes desde
1895 a 1912 y alcalde desde 1912 a 1922. Volvió a serlo desde 1 de enero de 1931 al 14
de abril en que se estableció la Segunda República.
Casado en 1896, a sus 28 años, con Agustina María del Rosario Santana, natural de
San Agustín de Las Palmas de Gran Canaria; construyó, en 1915, su casa frente
a los Llanos de Verdugo, lindando con la Carretera. En esa casa vivió con sus hijos
Catalina, Juan, Joaquín, Eusebia, Luis, Sebastián, Vicente y Porfirio.
Juan y Luis emigraron a Santa Clara de Cuba. Allí murió Luis. Juan regresó en
1975. Falleció en Las Palmas de Gran Canaria.
Porfirio murió en España en 1937 luchando contra las tropas republicanas. Sebastián
y Vicente crearon familias en la Capital.
La única que no se ausentó de su Agüimes natal fue Eusebia quien casó con Antonio
Rodríguez Mena. Sus hijos fueron: Porfirio, Luis, Catalina y Agustina.
El más sobresaliente de los hijos de Luis Artiles y Agustina Santana fue Joaquín
Artiles Santana, eminente sacerdote y catedrático, a quien su Agüimes natal, el 31
de diciembre de 1956, siendo alcalde don Francisco Suárez Suárez, lo nombró Hijo
Predilecto en reconocimiento de sus muchos méritos.
El 30 de abril de 1969, siendo alcalde don Lucas Bordón Suárez, se rotuló con su
nombre la avenida que va desde La Rambla hacia el Cementerio.
La casa ha sido adquirida por el Ayuntamiento presidido por don Antonio Morales
Méndez. En ella se ubica la Biblioteca Municipal “Joaquín Artiles”.
Lindante con esta casa, hacia el Sur, está la de Felipe Tarajano Vega y su esposa
Catalina Santana Rodríguez. Aquí vivieron
con sus hijos Dominga, Antonia, Catalina, Josefa y Domingo. La sigue habitando el
soltero Domingo Tarajano Santana.
Retrocedamos al Norte.
Frente a las casas de los citados Juan Romero Alvarado y Sebastián Tarajano Romero
hubo un amplio solar amurallado donde el promotor don Miguel González Benítez,
en los años de la Segunda República (1931-1936), organizó interesantes luchadas en
las que destacaban los magníficos atletas Sebastián Guerra, Rosendo Hernández,
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
Fulgencio López, Diego Abrante, Hermenegildo Hernández (hijo), Maximiano
Trujillo y Sebastián Caballero.
Aquel amplio solar, hacia 1950, fue comprado por los hermanos Antonio, Joaquín y
Carmelo Mena Rodríguez.
En la esquina sur construyó su casa Carmelo. La parte baja se la alquiló primero y se
la vendió después a su cuñado, el activísimo y competente Francisco López Sánchez
quien instaló allí un taller de mecánica.
En la parte alta vivió Carmelo con su esposa Magdalena López Sánchez y sus hijos
Magdalena, Juan, Rosario, Carmelo, Vicente, Eustasio, Gloria, José Manuel, Paqui
y Begoña. La sigue habitando el soltero José Manuel Mena López.
CALLE DESIERTA
Esta calle llevó el nombre de “Desierta” desde antiquísimos tiempos hasta 1939 en que
se le dio el de “Alférez Porfirio Artiles”. Desde 1990 se la llama “Manolo Millares”.
En 1897 tenía tan sólo siete edificios:
Esos edificios, en 1838, eran propiedad de:
1.- Luis Artiles y su mujer María Antonia Martín y sus hijos
Catalina, María, Juan y Joaquín.
2.- Lorenzo Castro, su mujer Sebastiana Romero y sus hijos
Pedro, Ana, José, María, Catalina, Agustina y Vicente.
3.- José Artiles y su mujer Joaquina Alemán y sus hijos
José, Catalina, Luisa y Luis.
4.- Cristóbal Méndez, María Dolores Mena y sus hijos
Sebastián, Antonio, Francisca y María.
5.- Cristóbal Sánchez, su mujer Catalina Artiles y sus hijos
María, Cristóbal, José, Juan , Juana, Antonio y Antonia.
6.- Cristóbal Miguel Collado, su esposa Josefa Tarajano
y sus hijos santaneros Gregorio y Bruno.
A principios del siglo XX las casas citadas estaban habitadas por descendientes de las
indicadas familias.
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
Bajando, a la izquierda, tuvo su vivienda el propietario rural y urbano don Antonio
Abad Rodríguez Alvarado, alcalde de la Villa desde 1848 – 1853.
Este señor casó con María Rodríguez Suárez, el 22 de diciembre de 1844, Fueron sus
hijos: María, Josefa y José.
El 24 de marzo de 1867,
casó en segundas nupcias
con
Andrea
Romero
Rodríguez. En esta casa les
nacieron sus hijos: Tomás,
Juan, Antonio y Vicente.
El 6 de agosto de 1887,
doña Andrea Romero
Rodríguez, viuda, de 46
años, concede licencia a
su hijo Vicente Rodríguez
Romero, de 12 años, para
embarcar a Buenos Aires
de Argentina a reunirse
con su familiares. Firman
la solicitud el alcalde
don Cristóbal Gómez y
el secretario don Pedro
Santana.
El más sobresaliente de
sus hijos fue Tomás quien
se ordenó de sacerdote en
1892. Desde el 1 de julio
de 1900 al 15 de diciembre
de 1955 fue famoso cura
de Tinajo de Lanzarote.
Familiares de Don Tomás Rodríguez Romero
A esta Isla se llevó a sus
hermanos solteros Juan y Vicente quienes crearon familias allí.
Quedó habitando esta casa Antonio Abad Rodríguez Romero, casado con Isabel Artiles
Cárdenas, hija de Bartolomé Artiles Rodríguez quien casó en Santa Clara de Cuba
con María Leocadia Cárdenas. Aquí les nacieron a Antonio e Isabel sus hijos: Andrés,
María, Josefa, Tomás y Juan.
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
Toda esta familia marchó a Lanzarote al amparo y protección del famoso Arcipreste de
Lanzarote, don Tomás Rodríguez Romero.
Fue entonces cuando esta casona
se vendió a don José Romero
Rodríguez y su esposa Dominga
Hernández Herrera quienes
vivieron aquí con sus hijos
Catalina, María Jesús, Ana,
Joaquín, Antonio y Domingo.
Joaquín fue el único que cursó
estudios superiores. Se jubiló de
maestro en la Villa. Fue el último
que habitó esta casona.
Frente, a la derecha, vivió el
matrimonio Juan Hernández
Rodríguez y Catalina Artiles
Pérez. La casa la heredó su hijo
Sebastián Hernández Artiles,
quien en 1879 contrajo matrimonio
con Josefa Tarajano Romero.
Aquí les nacieron sus hijos Juan,
Antonio, Sebastián, Francisco,
Domingo, Catalina y Juana.
Don Sebastián fue designado
vicecirujano municipal en 1890.
Montó aquí su barbería, la continuó
su hijo Juan hasta su fallecimiento.
Don José Artiles Castro y Dña. Francisca López Ruano
en Santa Clara (Cuba)
Sus hijos Antonio, Domingo y Francisco emigraron a Cuba.
Antonio murió en Santa Clara. Domingo regresó con las facultades mentales
mermadas. Murió en Las Palmas de Gran Canaria, el 24 de diciembre de 1968.
Francisco emigró a sus 17 años, en 1906. Regresó cojo. Hablaremos después de él.
Lindando con esta casa está la que en 1838 habitaba el matrimonio Luis Artiles y María
Antonia Martín.
El menor de sus hijos, Joaquín Artiles Martín, heredó esta casa. Fue concejal del
Ayuntamiento en 1873, en la primera República; contrajo matrimonio con Ana Castro
Romero.
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
Sus cinco hijos varones emigraron a Cuba, a sus 17 años de edad: Luis, Vicente, José,
Sebastián y Pedro.
En 1880, el Ayuntamiento declara prófugos a José, Sebastián y Pedro Artiles Castro,
hijos de Joaquín y Ana.
Luis, de quien ya hemos hablado, estuvo en Santa Clara unos siete años, regresó a su
Villa natal en 1894.
Pedro regresó en 1908. Heredó esta casa donde vivió hasta el morir atendido por sus
primas Agustina, Florencia y Ana Artiles Artiles a quienes Pedro regaló la casa que
después pasaría a propiedad de Eusebia Artiles Artiles, casada con el ingéniense Juan
Hernández Caballero.
Los hijos de este matrimonio han vendido recientemente esta casa.
Por su vinculación continua con Agüimes nos interesa resaltar a José y Sebastián.
José Artiles Castro casó en Santa Clara con Francisca López Ruano. Fue el padre
de Florencia Artiles López quien se nos vino de Cuba a Agüimes, en 1932, con su
esposo, el emigrante agüimense Francisco Alemán Armas, y sus hijos cubanos Juan
y José, nacidos en 1930 y 1931. José murió en Agüimes a los ocho meses de estancia
en la Villa.
Sebastián Artiles Castro se casó en Agüimes con María Adelaida Tarajano Romero,
hija de Antonio Tarajano Artiles y Juana Romero Hidalgo.
El joven matrimonio emigró en 1889 a Santa Clara de Cuba donde les nacieron sus
hijos: María Dolores, Juana, Francisca, Antonia, Joaquín, Juan y Ana.
La menor Ana Artiles Tarajano casó en Santa Clara con el emigrante agüimense
Francisco Guerra García quien marchó en 1904, con 17 años de edad.
La mayor María Dolores Artiles Tarajano casó con su primo hermano José Artiles
Artiles.
Francisca Artiles Tarajano casó con su primo hermano Luis Artiles Artiles.
María Adelaida Tarajano Romero nació en Agüimes, el 3 de julio de 1860. Murió en
Santa Clara, el 20 de octubre de 1896, a sus 36 años de edad.
Sebastián Artiles Castro, el 28 de mayo de 1898, a sus 44 años, casó en segundas
nupcias en Agüimes con Francisca Antonia González González, de 36 años, hija de
Juan González Artiles y Petra González Romero. En Cuba les nacieron sus hijos:
Florencia, Petra, Belén y Sebastián.
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
EL CALLEJÓN
El Callejón que comunica la Calle Desierta con la Calle Carnicería no tuvo rótulo
hasta 1945 en que siendo alcalde don Miguel Olivares Torres se le puso el nombre
“Tiradores de Ifni”. El Tabor de Tiradores de Ifni estuvo en Agüimes desde abril de
1941 a octubre de 1948.
En las primeras casas de la derecha vivieron los matrimonios venidos de Temisas:
Don José Vicente Cubas Rodríguez, labrador, y su esposa Josefa Artiles Rodríguez.
Don José Cubas Rodríguez, sochantre, y María Reyes Cubas Cubas quienes se casaron
en Temisas, el 23 de abril de 1883. Aquí les nacieron sus hijos: Eleuteria, Faustino,
Sebastián, Josefa y José.
Don José Cubas Rodríguez fue sochantre de la Parroquia durante 70 años, desde el 1
de agosto de 1882 al 3 de enero de 1952. En las partidas de nacimientos, matrimonios
y defunciones de la Parroquia aparecen los nombres de don Sebastián Parer Torrent,
párroco, de don Domingo Tarajano Romero, sacristán, y don Sebastián Cubas
Rodríguez, sochantre.
Estas casas fueron adquiridas por don Rafael Estévez Alemán y su esposa Agustina
García Ojeda. Sus hijos la vendieron a Remigio Hernández Bordón.
La casa contigua fue comprada en 1958 por doña Isabel Pérez Sánchez, viuda de don
Domingo Tarajano López. Hoy la vive, completamente reformada, su nieta Isabel
Arias Tarajano.
Frente a estas dos casas vivió a principios del siglo XX la familia José Martín Martín y
María Rodríguez Romero con sus hijos: Isabel, Bartolomé, Ana, Enrique, Cristóbal,
Andrés, Santa y Juana.
Esta familia al completo emigró a Cuba en 1911.
En este Callejón vivió el humilde arriero Juan Abrante García con su esposa Antonia
Ojeda Herrera y sus hijos Antonio, José, Agustín, Juan, Antonia, Catalina y Rosario.
Sus hijos Antonio y Juan emigraron a Cuba. Regresó Antonio
El arriero Juan Abrante, por su honradez y laboriosidad, fue nombrado guardia
municipal, cargo que ejerció desde 1926 hasta 1948 en que fue jubilado a sus 80 años,
con una pensión de 2.550 pesetas anuales.
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
Fue el primero que llevó el nombre de guardia municipal, antes se llamaba “portero”,
cuya misión era “el servicio y vigilancia de la población”
Juanito Abrante era el único guardia municipal de la Villa de Agüimes hasta el año
1930, en que fue designado para el mismo cargo José López Suárez, conocido por
“Pepito Trina”. Consta un acta del 28 de agosto de 1928 que el guardia municipal
Juan Abrante cobraba 600 pesetas anuales de sueldo.
Al final del Callejón, y
lindando
con
la
Calle
Carnicería vivió el cortante
o matarife Vicente Trujillo
Alemán con sus hijos: Antonia,
Concepción,
Encarnación,
Ana y Maximiano Trujillo
Rodríguez.
Lindando con el Callejón y con
frontis a la Calle Desierta está
la casa que fue propiedad de los
esposos Juan Artiles Rodríguez
y Dolores Artiles Castro y de
sus hijos. José, Ana, Florencia,
Juan, Eusebia, Francisco y
Luis.
Ya hemos dicho que José y
Luis emigraron a Santa Clara
de Cuba donde casaron con
sus primas hermanas Dolores y
Francisca Artiles Tarajano.
Familia Trujillo Santana
Esta casa le fue alquilada a
Antonia Armas Artiles, nuestra generosa y benemérita “Antoñita La Cubana”, célebre
partera. Aquí vivió durante varios años con su esposo José Guerra García y sus hijos:
José, Concepción, María, Caridad, Juana y Ramona. Antoñita murió el 21 de enero
de 1971. Todo Agüimes se conmovió.
La casa contigua, que en 1838 era propiedad del matrimonio Cristóbal Méndez y María
Dolores Mena, fue heredada por su hijo Sebastián Méndez Mena, casado con Catalina
Suárez Caballero. Aquí les nacieron sus hijos: Francisco, Sebastián, Candelaria, José
y Antonio.
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
Seguía la casa que fue de Juan Hidalgo Trujillo, de su esposa Catalina Suárez
Quintana y de sus hijos: Josefa, José, Juan, Rosario, Dolores y Sinforosa.
Hacia 1890 regresó de Cuba el matrimonio Manuel Caballero García y María Álvarez
Ortega con un hijo cubano Manuel Caballero Álvarez quien a sus 18 años se marchó
a su patria natal.
En Agüimes nacieron Águeda, José, Salvador, y Francisco. Los tres varones emigraron
a Cuba. La única hembra Águeda Caballero Álvarez contrajo matrimonio con el
labrador Domingo Tarajano Vega. Aquí nacieron y crecieron sus hijos: Domingo,
Antonia, María, Águeda, Fulgencio, Manuel y Aurelio Tarajano Caballero.
La casa es hoy propiedad de Águeda Tarajano Caballero quien casó con Ángel
Hernández Artiles.
Esta casa lindaba con la del jornalero Fermín Alemán Álvarez y su esposa Juana
Alemán Sánchez. Aquí, hacia 1910, convivían con sus hijos Josefa, Sebastián, Dolores
y José Alemán Alemán.
A la izquierda de la Calle Desierta, bajando, y después de la casona propiedad de
los hermanos Romero Hernández, vivieron familias vinculadas por parentesco.
Recordemos a cinco:
1ª.-Juan Manuel Sánchez Hernández, jornalero, su esposa Teresa Sánchez Rodríguez
y sus hijos: Ana, María, Sebastián, Rosario y Juana.
2ª.-José Sánchez Sánchez, panadero, y su hija Catalina Sánchez Sánchez.
3ª.-Francisca Romero Sánchez, viuda en 1900, a sus 36 años, con sus hijos José, de
doce años, y Agustín Artiles Romero, de ocho años.
Este Agustín Artiles Romero heredó la casa materna donde vivió con su esposa Juana
Sánchez Sánchez, hija de Juan Sánchez Martín y Juana Sánchez Álvarez. Agustín
sucedió como sacristán a Domingo Tarajano Romero, fue zapatero y guarda del Muelle
de Arinaga. El 29 de marzo de 1942, como alcalde accidental entregó el mando a don
Bartolomé Romero Romero quien se fingió enfermo y pasó a ser alcalde don Miguel
Olivares Torres.
De sus cinco hijos, sobresale nuestro don Juan Artiles Sánchez, eminente sacerdote,
párroco de San Juan de Telde, canónigo y vicario general de la diócesis de Canarias y
acérrimo defensor de su Villa.
4ª.-Juan Sánchez Martín con su esposa Juana Sánchez Álvarez, sus hijas Catalina,
11
X JORNADAS DE PATRIMONIO
Sebastiana, Juana, Joaquina, y
Ludovina y su cuñado Domingo
Sánchez Álvarez.
Catalina, la hija mayor, casó
con Francisco Miguel Morales,
encargado
general
de
las
propiedades de don Juan Melián
Alvarado, en Arinaga a donde
se llevó a su esposa, cuñadas y
suegros.
Ludovina casó, el 5 de julio de
1930, con el agüimense José Mena
Rodríguez.
En 1941, a orillas del mar y cerquita
del Muelle de Arinaga, viven en
casa propia doña Catalina Sánchez
Sánchez, de 50 años, viuda y su
hija Juana Morales Sánchez, de
17 años.
Con ellas conviven las hermanas
solteras de doña Catalina,
Don Juan Artiles Sánchez
Sebastiana, de 40 años, y Joaquina,
de 39 años. Y también los padres:
Juana Sánchez Álvarez, de 74 años, y Juan Sánchez Martín, de 75 años, guarda del
Muelle, cargo en que le sucedió su yerno Agustín Artiles Romero y a este su hijo José
Artiles Sánchez.
5ª.-Francisco Sánchez Álvarez, labrador, su esposa María del Pino Artiles Álvarez y
sus hijos José, Catalina, Juan, Antonia, Juana, Pino y Evarista.
Desde los más remotos tiempos, el Este fue el sitio de expansión poblacional. Durante
el Señorío los obispos concedían solares, generalmente a gentes pobres. Después de
1837, el Ayuntamiento administró como propios aquellos solares.
En 1874, el Ayuntamiento le regaló un solar al mampostero José Felipe Mena Ramírez.
En 1890, el Ayuntamiento le regaló el solar contiguo a Rafael Romero González. Era
alcalde don Cristóbal Gómez, y secretario don Pedro Santana.
El 15 de junio de 1890, el carpintero Basilio José Santana solicitó que en línea recta
12
X JORNADAS DE PATRIMONIO
con la Calle Desierta, junto a la propiedad de don Antonio Abad Sánchez, se le conceda
ochenta metros cuadrados para instalar un molino harinero de viento.
El alcalde don Antonio María Melián Ruano accedió a la petición. En la casa
construida vivió Vicente Santana, hijo de Basilio, casado con Elena Sánchez Artiles
con dos hijos en 1910: Basilio, de dos años, e Isabel, de un mes.
Desde principios de 1899 al 8 de agosto de 1903, se residenció en la Villa de Agüimes,
el Batallón de Reserva, número 8, al mando del coronel don Antonio Serra Orts.
El 23 de abril de 1899, siendo alcalde don Gregorio Rodríguez de León, el Ayuntamiento
le cede al Ministerio de Guerra 8.000 metros cuadrados en la prolongación de la Calle
Carnicería a condición de que en los cuatro años sucesivos el Ministerio ejecute las
obras de acuartelamiento.
El Ministerio no cumplió el pacto.
El 15 de junio de 1906, el alcalde don Francisco Melián Alvarado solicita que, a
cambio de aquellos 8.000 metros cuadrados, se le otorgue al Ayuntamiento el solar del
Exconvento de los Dominicos.
El 11 de junio de 1922, el ayuntamiento solicita la devolución de los solares de 8.000
metros cuadrados por ser necesarios para el ensanche del Pueblo.
En 1950, el Ministerio devolvió aquellos solares en los que el Ayuntamiento construyó
viviendas sociales, un mercado y la casa del médico titular.
El 16 de diciembre de 1955, siendo alcalde don Narciso Bordón Suárez, se acordó
adjudicar a la Dirección General de la Guardia Civil doce viviendas de las 24 de las
llamadas Casas Baratas.
El 18 de diciembre de 1921,
el Ayuntamiento afirma
que tiene como propios
4.890 metros cuadrados en
El Egido. De ellos cede
240 metros cuadrados
al vecino de El Ingenio
don Francisco Olivares
Acosta para construir un
molino harinero y casa
habitación de planta baja,
formando frontis a la Calle
Carnicería por el lindero
del norte, en el punto
conocido por “Cruz del
Tío Matías”.
Familia Olivares Torres
13
X JORNADAS DE PATRIMONIO
En esa casa se criaron y crecieron los Olivares Torres, hijos de Francisco y Teodosia.
Fueron notables los tres varones: Francisco, comerciante; Miguel, alcalde desde 1940
a 1949; y Juan, guardia muniucipal desde 1940 hasta su jubilación.
El desaparecido molino y huerta contigua es
hoy propiedad de Dolores Tarajano Pérez,
por compra hecha a Miguel Olivares Torres,
el 21 de diciembre de 1963.
En la casa reconstruida se residenció la
abnegada Dolores con sus hijos: Antonia,
Remigio, Rosario, Mari Lola, Auxiliadora,
Domingo, Antonio, Francisco, José, Juan,
Narcisa, Rafaela, Inmaculada e Isabel
Bordón Tarajano.
Familia Bordón Tarajano
Cerca y al Oeste de la “Cruz del
Tío Matías”, hacia 1920, tuvo su
casa doña Antonia López Bordón
quien casó con el ingéniense
don Hermenegildo Hernández
Pérez. Fueron sus hijos: Rosario,
Lola,
Antonia,
Sebastiana,
Hermenegildo, Luis Gonzaga,
Manuel, Bartolomé (Tito) y
Gregorio.
Los solares al Sur del “Molino de
Olivares” fueron propiedad por
herencia materna de doña Antonia
López Bordón. En ellos fabricaron
sus casas sus hijos: Hermenegildo,
Rosario, Lola, Luis Gonzaga,
Antonia y Tito.
Don Hermenegildo Hernández y Don Francisco Bordón
14
X JORNADAS DE PATRIMONIO
CALLE CARNICERÍA
La antiquísima Calle Carnicería, por motivos políticos, pasó a denominarse Calle
General Mola desde el 30 de septiembre de 1937.
En 1990, siendo alcalde don Antonio Morales Méndez, se la canarizó con el nombre del
prestigioso poeta Tomás Morales.
En 1897, sólo tenía ocho edificios, y en 1900, sólo tenía diez edificios.
Trataremos de recordar a algunas de las familias que las habitaron a partir de 1900
en que el Municipio de Agüimes tenía 2.889 habitantes. (En el 2014, tiene 29.641
habitantes).
A la izquierda, subiendo, vivió en 1900, el oficial del Ayuntamiento don Ceferino
Artiles Trujillo, de 31 años, con su esposa Josefa Sánchez Morales, de 23 años, y
su hija Francisca, de tres meses. Ceferino, en 1908, marchó a Las Palmas de Gran
Canaria como funcionario del Ayuntamiento capitalino.
La casa pasó a ser habitada por su hermano Antonio Artiles Trujillo, casado con Juana
Rodríguez García.
Seguía la casa que 1910 era propiedad del joven matrimonio José Rodríguez Arias y
Eleuteria Cubas Cubas y sus hijos: Catalina, María Reyes y José.
María Reyes Rodríguez Cubas casó con Manuel Hernández Martel. Este matrimonio,
al emigrar a Venezuela, vendió la casa al matrimonio Domingo Artiles Tarajano y
María Martín Martín quienes se instalaron a vivir aquí con sus hijos: María Antonia,
Juana Rosa, Fernando, Concepción, Higinio, Francisca, Domingo, Manuel,
Cristóbal, Ana y José.
Domingo Artiles Tarajano, en 1922, con apenas 17 años, emigró a Cuba donde ya
estaban todos sus hermanos varones: Sebastián, Antonio, Francisco y Fernando.
Le acompañó en el viaje su cuñado Cristóbal Lorenzo Caballero, casado con Juana
Artiles Tarajano.
Domingo regresó en 1931 con su esposa cubana María Martín Martín y sus dos hijas
cubanas: María Antonia y Juana Rosa.
Seguía la casa de don Vicente Bordón Caballero y su esposa María de los Reyes
Rodríguez Arias con sus hijos: José, Ana, Francisco, Lorenzo, Catalina, Sebastiana,
Antonia, Vicente, María de los Reyes, Rosario y Juana.
El 29 de agosto de 1881, el Ayuntamiento decretó una prestación personal para fabricar
dos locales para venta de carne y pescado, a la derecha de esta calle, subiendo. No se
fabricaron los locales.
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
El primer edificio existente en 1910, a la derecha subiendo, fue propiedad de don
Antonio del Cristo Artiles Artiles, hijo del pastor de Los Corralillos, Antonio Artiles
Alvarado.
Antonio del Cristo Artiles Artiles, a los 16 años, en 1892, emigró a Cuba donde ya
estaban sus hermanos José y Joaquín.
En Cuba casó con Catalina Rodríguez Caballero. En 1898, regresó con su esposa y
tres hijas cubanas: María, Francisca y Antonia.
En 1910, viudo de 46 años, reside aquí con sus hijas Francisca, de 18 años, y Antonia,
de 16 años. María, de 20 años, ya estaba casada con José Hernández.
Antonia, a sus 28 años, casó con Sebastián González Martín, de 38 años.
Familias Artiles Martín
Francisca Artiles Rodríguez casó con José Tarajano López quien había marchado a
Cuba a los 17 años, en 1906. El matrimonio Tarajano – Artiles regresó de Cuba
con dos hijos allí nacidos: Antonio, con tres años, y José del Cristo, con dos años. A
los pocos meses de la llegada a Agüimes nació Catalina y al año después, Sebastián.
La familia se residenció aquí con don Antonio del Cristo. José Tarajano López llegó
enfermo de Cuba y murió en Agüimes a los dos años de su regreso.
Aquí, el 7 de agosto de 1915, a los ocho meses de edad, murió el niñito José Tarajano
Artiles, primer hijo de José y Francisca.
Francisca Artiles Rodríguez, en 1932, volvió a casarse con el labrador Domingo Artiles
Artiles. De este matrimonio nació Francisca Artiles Artiles.
16
X JORNADAS DE PATRIMONIO
Esta casa la vivió hasta su muerte Sebastián Tarajano Artiles.
A la derecha y cerquita del Callejón, el citado matrimonio Domingo Artiles Tarajano
y María Martín Martín compraron, hacia 1965, una casa al matarife Maximiano
Trujillo. En ella instalaron una tienda y un bar.
La tienda fue atendida con esmero y atención por su hija mayor María Antonia.
Casada María Antonia y retirados sus padres a vivir en Arinaga, la tienda y bar fueron
atendidos por Domingo Artiles Martín.
Bodega de los hermanos Ojeda, en la foto:
D. Antonio Ojeda, D. Higinio Melián, D. Antonio Sánchez,
Juan María Suárez, José González, César de la Fez, etc...
A la derecha, subiendo, seguían las casas habitadas por:
1.-El matrimonio José de Santa Ana y su esposa Antonia Rodríguez Artiles con sus
hijos: Antonio, Catalina, Sebastián, María y Ana.
2.-José Alemán Pérez, su esposa Micaela Rodríguez Medina y sus hijos: Rita, María
y Blas.
3.-Juan Sánchez Artiles y Cándida Cabrera Artiles con sus hijos: Sebastián, Ana,
Dolores, Josefa, Juan, Efigenio, Antonio y Josefa.
4.-Antonio Cabrera Sánchez y su esposa Agustina Goyes.
5.-Francisco Trujillo Romero y su esposa Dolores Méndez González.
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
6.-Cristóbal Abrante Méndez y Juana Alemán Quintana.
7.-Bibiana Morales Suárez.
A la izquierda, subiendo, lindando con el Callejón, en 1900, vivió el propietario rural
y urbano don Diego Artiles Rodríguez, de 75 años, con su esposa Francisca Romero
Artiles, de 45 años, con sus hijos: José (21 años), Juana (20 años), Aurora (18 años),
Josefa (13 años), Antonio (10 años), Juan (8 años) y Diego (5 años).
Los cuatro varones emigraron a Cuba. Sólo regresó Antonio quien fue declarado
prófugo en 1917. A los dos años volvió a su pueblo natal, donde casó con Dolores
Romero Romero. Recordemos a sus hijos: Candelaria (Lala), Sebastián, Francisca,
Diego, Juan, Juana, Dominga, Rigoberto y Ana Teresa.
Diego casó en Santa Clara de Cuba. De allí pasó a Caracas donde sobresalió como
comerciante. Desde allí, hacia 1950, visitó a su Agüimes natal, hizo donativos a la
Iglesia y a algunos pobres. El 29 de enero de 1951, siendo alcalde don Vicente Marrero
Herrera, se le designo Hijo Predilecto de la Villa de Agüimes.
La única que cursó estudios superiores fue Juana.
El 30 de junio de 1920, en las Oposiciones a Maestras, presididas por el agüimense don
Juan Melián Alvarado, aprobaron doña María Jesús Alvarado Alemán, con el número
ocho, y doña Juana Artiles Romero, con el número nueve.
Fueron las dos primeras agüimenses que ejercieron como maestras tituladas.
A la izquierda, subiendo, vivieron los matrimonios:
1.-Fernando Artiles Caballero con su esposa Sebastiana Artiles Artiles y sus hijos:
Domingo, Ana y Sebastián.
2.-Cristóbal Artiles Caballero y su esposa Dolores Artiles Álvarez.
3.-Luis Caballero Romero, su esposa Francisca Tarajano Vega y sus hijos:Domingo,
Francisco y Josefa Caballero Tarajano.
4.-Hacia 1950, vivió Teresa Bordón Suárez, casada con Pedro Castellano Castellano
y, trasladados estos a la Capital, la vivió su hermana Consuelo Bordón Suárez, casada
con Fulgencio López Sánchez.
La actual Calle Alonso Quesada no existía. Las casas diseminadas estaban insertas en
la Calle Carnicería. En la trasera de las casas que acabamos de citar, hacia el sur, hubo
dos edificios que queremos señalar: El primero fue propiedad de las hermanas solteras
Juana, María Dolores y Catalina Melián Romero. Fue heredado por su sobrino don
Juan Melián Calderín, propietario rural y urbano y secretario del Ayuntamiento de la
Villa desde 1914 a 1922.
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
Don Juan casó con doña Francisca Rodríguez López. Aquí les nacieron sus hijos:
Ana, Catalina, Enrique, Juan, Antonio y Pablo. Todos los varones, hacia 1950,
marcharon a Venezuela donde murieron.
Frente a esta casa está la que, en 1890, fue propiedad del alguacil Antonio Félix Ojeda
y su esposa Agustina Artiles Suárez. El 13 de octubre de 1890, Antonio Félix Ojeda
dio licencia a su hijo José Ojeda Artiles, de 13 años, para que vayas a Cuba a unirse
con sus hermanos Abelardo y Antonio Vicente. La casa pasó a propiedad de su hijo
Salvador Ojeda Artiles, casado con Ana Trujillo García. Aquí les nacieron sus hijos:
Catalina, Luisa, Abelardo, José y Agustín Ojeda Trujillo.
Lindando al norte con esta casa construyeron la suya el matrimonio Sebastián Rodríguez
Romero y María Encarnación Mena Ramírez. En ella se criaron sus hijos: Sebastián,
Juan, Josefa, Santa, Vicente, Francisco, Catalina, Antonio, María, Juana y José.
El menor de sus hijos, José Rodríguez Mena, fue Encargado General de la Compañía
de Guaguas “Melián y Compañía”.
La parada de las guaguas o “coches de hora” estaba ubicada al pie de esta casa de dos
plantas; en la parte baja llevaba el Bar su hermano Antonio Rodríguez Mena.
Coche de hora de la compañía Melián y Cía, gestionada por Don José Rodríguez Mena, en la foto
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
La última casa de la izquierda, subiendo, de la Calle Carnicería la habitaba, en 1900,
Antonia Lorenzo Artiles Rodríguez, soltera, de 44 años, con su prohijado Pedro María
de Santa Ana, de 13 años, y Rafaela Artiles Artiles, soltera, de 34 años, y el jornalero
José Santana Bordón con su esposa Andrea Olivares.
Dicha casa pasó a ser propiedad de don Luis Artiles Martín, hijo de Lorenzo Artiles
Rodríguez y Adriana Martín Rodríguez.
Luis Artiles Martín emigró a Cuba en 1910. Regresó rico. El 1 de marzo de 1931,
solicitó permiso al Ayuntamiento para construir un edificio de dos plantas. En la planta
baja montó un importante comercio de víveres y bebidas. En la parte alta tuvo su hogar
con su esposa Josefa Rodríguez Martín y sus hijos: Modesto, Juan y Lorenzo.
Francisco Hernández Tarajano, hijo de Sebastián Hernández Artiles y Josefa
Tarajano Romero, regresó adinerado de Cuba. Compró el solar lindante con la Calle
Carnicería y la Carretera.
El 2 de septiembre de 1923, solicitó permiso al ayuntamiento para construir su casa.
La parte lindante con la Calle Carnicería la alquiló a los boticarios don Antonio Artiles
y don José Antonio Apolinario.
En la botica trabajaron los eficientes agüimenses Rafael Dávila, Antonio Cabrera y
Antonio Abrante.
El edificio con frontis a la Carretera tiene dos pisos. En el bajo ejerció su profesión de
barbero y vicecirujano. En el alto vivió con su esposa María Herrera Rodríguez y sus
hijos: Claudina, Nena, Juan, Antonio y Francisco.
Los tres varones: Juan, Antonio y Francisco aprendieron el oficio de barbero de su
padre y con él ejercieron. En el edificio vive hoy Pancho Hernández Herrera, casado
con Eugenia Suárez Artiles.
Francisco Hernández Tarajano, conocido por Maestro Pancho, fue designado como
barbero vicecirujano de la Villa, el 25 de febrero de 1917, y el 3 de junio del mismo año,
miembro de la Junta de Sanidad, presidida por el doctor don Cristóbal Gómez Ruano,
primer médico titular de Agüimes y sobrino del doctor don Vicente Ruano Urquía,
el primer agüimense que obtuvo el título de médico. El segundo fue don José Melián
Rodríguez y el tercero el citado don Cristóbal.
La Barbería de Maestro Pancho fue famosa por ser centro de cultura, de diálogo y de
política. Maestro Pancho tenía un excelente don de palabra.
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
Frente a la Barbería de Maestro Pancho, al otro lado de la Carretera, volvemos a los
antiguos Llanos de Verdugo.
Los que fuimos niños en la década de 1930 a 1940, con la venia de los guardias
municipales Juanito Abrante y Pepito Trina, jugábamos a la lucha, al tejo, a la piola, a
los boliches en un amplio solar.
El 25 de septiembre de 1941, don Félix Fernández, comandante del Tabor de Tiradores
de Ifni, en oficio dirigido a los hermanos Agustina y Juan Rodríguez Melián, solicita
se le ceda al Tabor el citado solar para amurallarlo, ajardinarlo y colocar un mástil
donde izar la bandera nacional.
Obtenido el permiso, la obra se realizó rápidamente. La ejecutaron los maestros albañiles
agüimenses Eusebio Martín y Juan Cazorla.
El alcalde don Miguel Olivares le dio el nombre de “Parque Tiradores de Ifni”.
El Tabor pagó por las obras 4.200 pesetas, a descontar del alquiler de 3.000 pesetas
anuales que pagaba a la dueña de la casa adjunta, doña Agustina Rodríguez Melián.
En dicho Parque, en 1945, el Ayuntamiento, presidido por don Miguel Olivares
Torres, rindió un homenaje al Comandante Jefe del Tabor de Tiradores de Ifni, don
Emilio Rámiz González, y al Teniente Coronel, don Cristóbal García Usurriaga. Los
dos domiciliados entonces en la Villa de Agüimes
El Tabor de Tiradores de Ifni permaneció en Agüimes desde abril de 1941 a octubre
de 1948.
El 31 de enero de 1949, el capitán de Infantería don FranciscoGómez Díaz y el teniente
don Manuel Pérez Rivero, en la Villa de Agüimes, entregaron a doña Agustina
Rodríguez Melián los locales en que se hallaban instalado el Cuerpo de Guardia, Salas
de Oficiales y Suboficiales y Parque del disuelto Tabor de Tiradores de Ifni.
Damos fin al Recorrido Histórico del 2014 en que hemos repasado sumeramente
algunas interesantes historias e intrahistorias de dignas y sencillas personas de nuestro
Agüimes.
En este Recorrido ha sonado repetidas veces el nombre de Cuba. Cuba fue, durante
siglos, tierra de promisión, redención y fortuna de muchas familias agüimenses.
En la sesión ordinaria del Ayuntamiento de Agüimes, celebrada el día 8 de junio de
1992, el alcalde don Antonio Morales Méndez expone a los miembros de la Comisión
el entendimiento a que ha llegado con las autoridades de la ciudad de Santa Clara de
Cuba para llevar a cabo el Hermanamiento de los dos pueblos.
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
El Hermanamiento se realizó en la Ciudad de Santa Clara de Cuba, el día 20 de
junio de 1992. El acta está firmada por Humberto Rodríguez González, alcalde de
Santa Clara, y por José Armas Barber, teniente alcalde de la Villa de Agüimes.
Para reforzar este Hermanamiento, el Ayuntamiento de Agüimes organizó una segunda
visita a Santa Clara de Cuba del 20 al 27 de junio de 1992. Como representante del
Ayuntamiento de la Villa de Agüimes fue doña Bibiana Cabrera Cabrera.
En el recorrido hemos citado a las hermanas María Antonia y Juana Rosa Artiles
Martín y a Eugenia Suárez Artiles. Las tres nacieron en Cuba y muy niñitas se vinieron
al Agüimes natal de sus padres emigrantes regresados. Hoy, por dicha, conviven con
nosotros y son madres y abuelas dignas y merecedoras de gracias, encomios y de
nuestros aplausos.
La Villa de Agüimes y Santa Clara de Cuba están unidas por los vínculos de la sangre
y el espíritu de estas tres beneméritas mujeres.
En la imagen: D. Antonio Hdez. Herrera,
D. Farncisco Hdez. Herrera, D. Francisco Hdez. Robaina,
D. José Juan Hdez. Ramírez y José Antonio.
D. Francisco Hdez. Tarajano en la boda de su hijo
D. Francisco Hdez. Herrera con
Doña Eugenia Suárez Artiles, junto a su madre
Catalina Artiles López. Año 1964
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X JORNADAS DE PATRIMONIO
Terminemos el Recorrido con estos versos:
Por caminos de Agüimes
silban los vientos,
discurren por las calles
cantos y rezos.
Vibran los ecos
de las voces castizas
de los ancestros.
Se cambó la palmera,
calló el molino,
emigró el buen muchacho,
se fue el amigo.
Pero en Agüimes
la abolenga bondad
siempre pervive.
La azul enredadera
se marchitó
cuando la santa madre
nos dijo adiós.
Pero en la casa,
por riegos del amor,
habla su alma.
Es la Villa de Agüimes
cuna y cantera
de gentes admirables,
nobles y buenas.
Son frutos dicen
de la belleza y pureza
de sus raíces.
Francisco Tarajano Pérez
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Octubre de 2014
Ilustre Ayuntamiento
de la Villa de Agüimes