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Cabellos, restos de tejidos, improntas dactilares, huellas de pisadas y
de neumáticos y salpicaduras de sangre son algunas de las evidencias
irrefutables que los criminales dejan en el escenario tras cometer el
acto delictivo. Recogerlas, analizarlas e interpretarlas constituye la
principal labor del equipo de forenses comandado por D.B. Russell,
que en la decimoquinta temporada de ‘C.S.I. Las Vegas’ se
enfrentará a un escurridizo imitador criminal vinculado al pasado del
líder del C.S.I. La última temporada de la ficción de investigación
forense creada por Anthony E. Zuiker llegará a Cuatro mañana,
jueves 26 de mayo, a partir de las 22:30h.
“Las pruebas no mienten”. Éste es el leitmotiv que mueve a los
forenses de la saga de ‘C.S.I.’, un exitoso fenómeno global que
desde el estreno de ‘C.S.I. Las Vegas’ en 2000 en Estados Unidos
cuenta con más de 60 estatuillas en su palmarés y tres spin-offs.
Ted Danson, Elisabeth Shue, George Eads, Jorja Fox, Paul
Guilfoyle, Eric Szmanda, Robert David Hall y Elisabeth
Harnois protagonizan esta serie dramática que ha reinventado el
género de la ficción criminal en televisión.
Un nuevo cross over con ‘C.S.I. Cyber’ -la cuarta serie de la
franquicia-, cerca de una decena de ‘cameos’ y singulares
investigaciones criminales conforman las principales novedades
de la nueva entrega de capítulos. La serie culminará con un doble
capítulo final en el que regresan a la escena del crimen los dos
personajes más icónicos de la serie: Gil Grissom (William
Petersen) y Catherine Willows (Marg Helgenberger )...
La gran mayoría de los homicidas investigados por los forenses de Las
Vegas cometen un asesinato con premeditación, de manera imprevista o
accidentalmente. Tras perpetrar el crimen, huyen del lugar mientras
esperan no ser descubiertos. Sin embargo, un número reducido de
homicidas pasan a convertirse en psicópatas cuando el primer asesinato
se convierte en el detonante de una larga y prolífica carrera criminal.
Buscan acaparar la atención mediática, demostrar su ingenio e inteligencia
a las fuerzas policiales y satisfacer sus oscuros y sanguinarios deseos. Son
los asesinos en serie, la ‘bestia negra’ de los forenses.
Desde hace más de una década, el C.S.I. de Las Vegas se ha enfrentado a
algunos de los más implacables, como Ernie Dell, el ‘asesino de las
miniaturas’, que construía maquetas de sus crímenes y que puso en jaque
a Gil Grissom; Nate Haskell, conocido como Dr. Jeckyll, a quien persiguió
celosamente Raymond Langston; los ‘asesinos del Inferno’, que mataban a
prostitutas y strippers recreando en sus crímenes escenas del ‘Infierno’ primera de las tres cánticas de ‘La Divina Comedia’ de Dante Alighieri- y
a quienes investigó D.B. Russell.
Todos ellos poseían un modus operandi
original y único, pero en la nueva entrega de
episodios de ‘C.S.I. Las Vegas’ los
investigadores forenses se enfrentarán
por primera vez a un imitador del
‘asesino de Gig Habor’, un homicida en serie
que sembró el terror en Seatlle y a quien D.B.
Russell y Julie Finlay capturaron cuando
ambos trabajaban en el estado de
Washington. Mientras el líder del C.S.I. trata
de identificar a este emulador criminal,
algunos de sus efectivos se verán inmersos en
atípicos acontecimientos: Sara Sidle y
Greg Sanders serán puestos en cuarentena
tras acudir a un escenario lleno de patógenos
mortales; y Morgan, Sarah y Julie asistirán a
una conferencia en la que se producirá un
tiroteo masivo.
Casos rocambolescos como el de un
hombre que ha sido asesinado dos veces;
extrañas víctimas como un hombre vestido
de superhéroe o una joven cubierta de
cromo; y escenarios insólitos como una
tienda especializada en la venta de marihuana
medicinal y una feria que reúne a
coleccionistas de asesinatos macabros, serán
investigados por el mejor equipo
forense de los Estados Unidos.
Icónicos actores de Hollywood, estrellas del deporte, famosos cantantes y hasta el exalcalde de Las
Vegas, Oscar Goodman, figuran en el ‘libro de honor’ de ‘C.S.I. La Vegas’, que se verá ampliado con
las participaciones especiales de conocidos rostros de la televisión estadounidense.
Mark-Paul Gosselaar (‘Policías de Nueva York’) intervendrá en una trama argumental dando
vida a Jared Briscoe, el infame asesino de Gig Harbor que se cobró la vida de siete mujeres antes
de que Russell y Finlay lograran poner fin a su estela criminal. Separado al nacer de su hermano
gemelo, Briscoe espera el día de su ejecución en el corredor de la muerte, mientras es informado
de que un imitador está emulando sus crímenes en Las Vegas.
Bella Thorne, que alcanzó la popularidad mundial dando vida a CeCe Jones en la exitosa serie
juvenil ‘Shake It Up!’, dejará atrás su vis cómica para convertirse en Hannah Hunt, capitana del
equipo de natación de un instituto y sospechosa de la muerte del profesor de Química durante un
experimento que culminó dramáticamente. La ficción forense acogerá también las intervenciones
estelares de Mark Valley (‘El cuerpo del delito’) que volverá a interpretar a Daniel Shaw,
investigador privado que se siente atraido por Julie Finlay; y Sharon Osbourne (‘X Factor’, talentshow del que fue jurado), esposa del cantante y compositor de heavy metal Ozzy Osbourne, como
Elise Massey, la enigmática directora de una sala de billar y de un red de prostitución.
Dean McDermott (‘Missing’) y Lisa Rinna (‘Melrose Place’), por su parte, encarnarán a Garth
Fogel, un agresor sexual implicado en el asesinato de una familia, y a Tori Nolan, una irresponsable
adolescente desaparecida, respectivamente, mientras que Eric Roberts (‘El caballero oscuro’)
retomará el papel del predicador Daniel Larson. Además, en el nuevo cross over de la serie con
‘C.S.I. Cyber’, la oscarizada Patricia Arquette (‘Boyhood’), como la agente Avery Ryan del FBI,
volverá a colaborar con los forenses de Las Vegas para esclarecer la extraña muerte de la nueva
víctima de un despiadado psicópata.
Un misterioso individuo ha colocado una bomba en el
coche de Julie Finlay, que hará explosión dentro de 15
minutos. Mientras una unidad del equipo de artificieros
trata de sacar a la forense del interior de su vehículo
sana y salva, D.B. Russell recibe una llamada en la que
una voz distorsionada le pide que adivine su identidad.
Días antes, el jefe de los forenses y Finlay habían
acudido al escenario de un crimen, entorno que les
recordaba un viejo caso que ambos investigaron en
Seattle. Tras analizar las primeras evidencias, los
forenses sospechan que se enfrentan a un homicida en
serie, un imitador del asesino de la localidad costera
de Gig Harbor, Jared Briscoe, que actualmente cumple
condena en prisión.
D.B. Russell y su equipo de investigadores tratan de
esclarecer el robo y mortal tiroteo que han tenido
lugar en un establecimiento especializado en la venta
de marihuana medicinal.
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