6 Sábado, 26 de marzo de 2016 Sonando en la región central ■ Por Francisnet Díaz Rondón ■ Fotos: Yariel Valdés González Ilusión de papel ¡Sufran, diseñadores! ■ Por Laura Rodríguez Fuentes ■ Foto: Ramón Barreras Rosa María La cienfueguera Rosa María y la santaclareña Yensa Mercedes constituyen dos buenas opciones para llegar a la final. Voces potentes, presencia, carisma, buena afinación y dominio escénico caracterizan al equipo de ocho concursantes que representará a la región central del país en la segunda edición del programa musical de jóvenes talentos Sonando en Cuba, cuya final regional se efectuó el pasado sábado en la plataforma del área recreativa del «Sandino», de Santa Clara. Para el evento nacional quedaron elegidos siete: Yensa Mercedes Vidaurreta Mesa, Zoila Beatriz Díaz Navas y Oscar Jesús Chaviano Reyes, de la provincia de Villa Clara; Yordan Humberto Quintana y Rosa María Moret Portilla, de Cienfuegos, además del espirituano Yosvany Beltrán Díaz y el avileño Roberto Ernesto Izquierdo Martínez. El cienfueguero Yonaiki Calzada Gómez fue el octavo, salvado por el público, luego de una reñida disputa con la bella villaclareña oriunda de San Juan de los Remedios, Jennifer Rodríguez Pérez. Los jóvenes concursantes tendrán de madrina durante el certamen a la popular intérprete Tania Pantoja, quien manifestó sentirse orgullosa de guiarlos hasta la gran final en La Habana ante los representantes de la región oriental y occidental, apadrinados por los cantantes Waldo Mendoza y Paulo FG, respectivamente. Entre sus muchachos, la Pantoja tiene en sus manos varios diamantes en bruto que le tocará pulir. Dos de ellas, Yensa Mercedes Vidaurreta Mesa y Rosa María Moret Portilla, cartas de triunfo ante los equipos contrincantes. Ambas poseen una gran integralidad al cantar, con visible dominio de los géneros musicales —bailables, boleros o baladas—, y al bailar con soltura y dominar el escenario como si fuesen experimentadas artistas, todos requisitos fundamentales exigidos a los participantes en esta segunda edición de Sonando en Cuba. No sucede así con Zoila Beatriz, Yordan y el jovencito Oscar Jesús, quienes se desenvuelven de manera excelente en la interpretación de temas suaves, pero sin fogueo en la música popular. Por suerte, cuentan con una coach con vasto conocimiento en ese aspecto . Por el contrario, Yosvany y Roberto Ernesto sí nadan como peces en aguas más movidas. Ambos llevan la música bailable en la sangre, lo cual les reporta ventaja. En los boleros y baladas podrán profundizar más a medida que asimilen los consejos de su madrina. Por su parte, Yonaiki Calzada presenta buena voz y algo de carisma sobre el escenario, pero deberá controlar más sus emociones y entusiasmo, lo cual le ha jugado malas pasadas. El público venido de varias partes de la región central disfrutó de un espectáculo visualmente bien concebido, bajo la conducción de Yasbel Rodríguez y el popular actor Jorge Martínez, y la dirección para televisión de Gloria Torres y general de Paulo FG. Sobre el certamen, opinó el popular músico: «Los cantantes deben ser lo más integrales posible, abarcar diferentes estilos e interpretar distintos géneros. [...] Con respecto al programa hemos logrado enlazar una serie de objetivos y propósitos en general, y creo que el público va a estar muy agradecido por todo lo que va a encontrar. Sobre todo, esta distribución por regiones que define a los talentos e involucra a todo el país en una competencia que, al final, el resultado es Cuba y el beneplácito, del público cubano». Solo resta encontrar los ocho finalistas de la región occidental, cuyas audiciones se harán a finales de marzo en la capital del país. Sonando en Cuba vuelve a la carga, y esta vez a la búsqueda de intérpretes integrales, no solo con excelentes voces y presencia escénica, sino profundamente comprometidos con su música, la cultura y la tierra cubanas. Artes Plásticas también en el ademán desafiante de su sincero erotismo, cargado de referencias y citas a los genitales y de éxtasis culminativo. El cuerpo humano siempre será un paisaje exótico: una pradera con senderos insospechados, con trillos que se bifurcan hacia la existencia, la explotación, la zozobra y el deseo». Sobre la caracterización de su obra, Rubén Rodríguez confesó seguir la línea de Servando Cabrera Moreno, del pintor español Diego Velázquez e incluso de artistas de humor gráfico. «Dicen que tengo influencia de Servando, yo creo que he copiado su obra. Cuando lo vi dibujar, quise hacerlo como él. Me llaman mucho la atención los caricaturistas, porque en muy pocas líneas tienen que dar un mensaje muy amplio; sus dibujos son envidiables. En la gran mayoría son dibujantes muy buenos. Tengo influencia de muchos de ellos por la línea, los he estudiado bastante. «También admiro y tengo influencia del pintor español Diego Velázquez; su forma de trabajar, el movimiento, la pincelada, el dibujo. Son artistas que influyen, que en un momento determinado los estudiaste y copiaste, hasta que encontraste identidad propia». El autor también expuso en la Galería Mejunje, del centro cultural de igual nombre, el jueves 24 de marzo. Rubén Rodríguez Martínez nació en Cárdenas, Matanzas, en 1959. Es graduado de la Escuela Provincial de Artes Plásticas de Las Villas (1975) y de la Escuela Nacional de Arte (1980), así como fundador del Taller Artístico René Portocarrero. Ha sido reconocido con el Diploma al Mérito Artístico y con la Distinción por la Cultura Nacional. ● Francisnet Díaz Rondón Aventuras del cuerpo El erotismo, el desnudo y la sensualidad de la anatomía humana confluyen en la obra del artista de la plástica Rubén Rodríguez Martínez, cuya exposición personal Aventuras del cuerpo quedó inaugurada en la noche de este miércoles en la Arche Galería de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) de Villa Clara. Foto: Manuel de Feria Una treintena de obras componen la muestra. Antonio Pérez Santos, presidente de la Uneac villaclareña, escribió para el catálogo: «El valor de sus recreaciones y conjeturas radica en la fuerza plástica de la representación y Si Coco Chanel resucitara, quedaría boquiabierta con los flamantes diseños que se les ocurren a las muchachas del proyecto Ilusión de Papel. En la secundaria básica Juan Verdecia, de Camajuaní, tres jóvenes instructoras tienen el cuartel general. De sus manos salen los más exorbitantes vestidos, pero también sencillas flores con las que adornan diversos accesorios. Mediante complicadas técnicas del origami, amalgaman cada pieza para formar los trajes —a la medida— de las modelos, quienes, cierto, nada tienen que ver con los patrones escuálidos de los escenarios habituales. Hace dos años, a Naira Pérez Bermúdez se le ocurrió utilizar materiales no convencionales como antiguas cintas de casetes o pedazos de nailon, y transformarlos en algo valioso. Finalmente, decidió emplear solamente papel por su docilidad a la hora crear y la facilidad para adquirirlo. Junto a Dayana Lemes Rodríguez y Nadia Jiménez Mora, preparó colecciones de 15 prendas con diversos motivos, a la usanza de las pasarelas. «Queríamos transmitirles a las niñas que la moda es efímera. Ese fue siempre nuestro objetivo principal, que lo que se usa es fugaz, y también por Yensa Mercedes eso la idea del papel. Después que ellas modelaban, el vestido podía romperse muy fácil. Comenzamos a construirlos con páginas de revistas extranjeras. Es nuestra crítica al consumismo», cuenta Dayana. Además de las intervenciones comunitarias con los desfiles, realizan obsequios para fechas especiales y suvenires para trabajadores destacados. «Reutilizamos todo lo desechable que encontramos», agrega Nadia. El teatro y la música también forman parte del espectáculo. «Vamos casi siempre a lugares donde podamos encontrarnos con los jóvenes. Nos interesa que sean ellos los receptores. La calle es nuestro espacio principal, porque interactúan con personas de todo tipo. Es más difícil que la gente vaya a las galerías», refiere Dayana. Al taller se incorporan muchos estudiantes interesados en la antigua técnica oriental. Los vestidos los diseñaron inicialmente en periódicos, y luego cubriertos con papel blanco o de revista, en dependencia de la colección. Hace poco confeccionaron el traje de la muerte, a propósito de la presentación de la revista Signos que abordaba el tema en su penúltimo número. El vestuario no se circunscribe a las mujeres, pues también han creado ropa masculina y disfraces para los niños de la escuela especial del municipio. La ayuda del almacén de víveres en Camajuaní ha sido imprescindible para el trabajo de Ilusión de Papel. «En el Boulevard de Santa Clara nos ocurrió algo muy gracioso —cuenta Dayana—. Vimos muchas cajas desechadas y había varias personas que las querían para materias primas. Sin embargo, nos reconocieron y dejaron que nos las lleváramos todas». Merecedor, entre otros reconocimientos, del Premio Nacional Escaramujo, el proyecto quisiera hacerse conocer a mayor escala. Ansían, por ejemplo, presentarse en Exuberarte. La cantautora Ya í m a O r o z c o s e presentará hoy sábado en su peña de la Uneac, a las 10:00 p.m. Tendrá como invitados a Noslen García y Jessica Zequeira, oriundos de Bejucal, quienes traen un nuevo proyecto. Junto a la anfitriona, ambos estuvieron esta semana en el festival Trovándote, de Ciego de Ávila, desarrollado del 23 al 27 de marzo. En la galería Hurón Azul, de Manicaragua, se encuentra abierta al público la exposición personal En la mira, del pintor Erick Rolando Guerra Ulloa. La integran 13 obras en las cuales el autor «muestra un segmento de nuestra personalidad colectiva e individual», según palabras de artista Ramón Fuentes Fuentes. En esta misma institución el Grupo de Teatro Escambray, dirigido por Rafael González, el próximo jueves 31, a las 9:00 p.m. presentará Ensayo para un naufragio, obra basada en cuentos de autores cubanos como Alexis Díaz Pimienta y Laidi Fernández de Juan. (Omaray Ceballos Corcho) La joven jazzista cubana Zule Guerra se presentará el próximo lunes, a las 10:00 p.m. en el Centro Cultural El Mejunje. La versátil artista recibió el premio JoJazz en 2014 por su interpretación en el Concurso de Jóvenes Jazzistas de Cuba. Además de sus dones para el canto, también compone y es líder del grupo musical Blues d'Havana desde hace algo más de un año. (Alexis Castañeda Pérez de Alejo) El Quinteto Criollo estará mañana en el patio bar del Centro Cultural El Bosque, a las 10:00 a.m., y a las 5:00 p.m., en El Mejunje, en la matinée bailable del cuarto domingo de cada mes. Los premios del XXII Salón Territorial de Arte Popular de Villa Clara recayeron en los artistas de la plástica villaclareños Betzi Arias López, por la obra Vacuna Tropical, y Kevin Gálvez Fernández, por Yugo o Estrella y Epifanía del sol naciente; y el espirituano Arístides Rafael Sáenz Sánchez por Me dicen Cuba. Los pintores Rafael González Morales, Justo Pastor Acea Gómez y Carlos A. Cáceres Valladares obtuvieron menciones. Asimismo, los reconocidos artistas Aida Ida Morales, Alberto Anido y Noel Guzmán Boffill Rojas recibieron mención especial. El jurado estuvo integrado por la Dra. Teresa Crego Fuentes, el máster Danilo Vega Cabrera y el artista Jorge Luis Sanfiel Cárdenas. También, varias instituciones, entidades y organismos entregaron premios colaterales. (F.D.R.)
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