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13 HOYO_29 CARRILLO.qxd 17/03/16 12:53 Página 13
TRIBUNA
Por Belén Hoyo*
Ciudadanos, del naranja al rojo
E
l pacto de gobierno socialista (fracasado) entre
Pedro Sánchez y Albert
Rivera ha servido para
aclarar unas cuentas dudas que Ciudadanos trataba de ocultar durante
la campaña electoral.
En primer lugar, Albert Rivera mintió al prometer que no apoyaría ningún gobierno que no estuviera presidido por Ciudadanos. Prometió que
se abstendrían y han votado a favor
de un gobierno socialista.
En segundo lugar, el presidente de
Ciudadanos mintió al prometer que
no apoyaría una coalición de perdedores. También ha roto con su teoría de que debe gobernar la lista
más votada. El PP de Mariano Rajoy
es la fuerza ganadora de las elecciones generales, es la primera fuerza
política de España, tanto en el Congreso como en el Senado. Y la coalición de perdedores (término que
acuñó Rivera) son el PSOE, Podemos y Ciudadanos.
Por tanto, Albert Rivera ha engañado de forma descarada a sus propios votantes y al conjunto de los
españoles. Ciudadanos ha pasado
del color naranja con el que querían
diferenciarse del PP y del PSOE a
tener un color muy rojizo, tan rojo
que ya no se diferencia del Partido
Socialista.
Ciudadanos y Rivera quieren que
en España gobierne el PSOE de Pedro Sánchez, el mismo que apoyó
al nefasto Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero: bajo su mandato
España registró un incremento de
tres millones y medio de parados
(especialmente entre jóvenes y mujeres), una fuerte recesión, enorme
déficit, miles de empresas quebradas y decenas de miles de familias
desahuciadas, entre otras muchas
penalidades.
Al líder de Ciudadanos no le importa poner en riesgo la recuperación
económica en España lograda bajo
el Gobierno de Rajoy. Quiere que
el PP, la fuerza política ganadora de
las elecciones, apoye con su abstención un Gobierno socialista (la fuerza
perdedora con el peor resultado de
su historia) que pretende derogar las
principales leyes aprobadas por el
Ejecutivo del PP. Es decir, Rivera
quiere que el PP facilite un Gobierno
que pretende derogar todo el cuerpo
legal que ha permitido a España salir
de la crisis económica, agravada por
la penosa gestión de Zapatero que
apoyó Pedro Sánchez. Un auténtico
disparate.
Y como lo que pretende Albert
Albert Rivera
ha engañado
de forma
descarada a
sus propios
votantes y al
conjunto de
los españoles.
Ciudadanos
ha pasado del
color naranja
a tener un
color muy
rojizo, tan
rojo que ya
no se
diferencia del
PSOE
Rivera es imposible, el PSOE no
tendrá más remedio que intentar
forzar la abstención de Podemos, o
incluso un Gobierno de coalición
con la formación populista, partidaria del derecho de Cataluña a decidir unilateralmente su independencia o de la salida de España de
la Unión Europea.
O eso, o llevar a España a unas
nuevas elecciones. Todo menos que
Sánchez y Rivera entren en razón
y apuesten por un gobierno de coalición entre PP, PSOE y Ciudadanos. Un Gobierno que afiance la
recuperación económica, transmita
estabilidad a nivel internacional y
garantice la unidad de España ante
el órdago separatista del Gobierno
catalán. l
*Diputada por el Partido Popular en el Congreso.
EUROPA PRESS
nº 1147. 21–27 de marzo de 2016
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