Módulo V. Vida adulta Tema 2. Bienestar emocional Caso de Éxito. Envejecimiento de las personas con discapacidad César del Rio y Vanesa Polo Fundación San Cebrián Objetivo La Fundación San Cebrián desde sus inicios ya tenía como misión la atención a las personas con discapacidad intelectual en proceso de envejecimiento como se refleja en la progresión de un mayor porcentaje de personas con más de 45 años a las que se ha ido atendiendo a través de los años. Ante el aumento de la esperanza de vida de las personas con discapacidad intelectual, la Fundación San Cebrián de Palencia reorganizó los servicios que prestaba para dar respuestas adecuadas a las nuevas necesidades derivadas del envejecimiento. El primer paso fue identificar los cambios debidos a la edad que notábamos en las personas con discapacidad para determinar los apoyos necesarios que garantizasen su bienestar. Palabras clave: envejecimiento activo, autonomía, salud, bienestar. Esquema o índice de contenidos: Un poco de historia ....................................................................................................................... 2 Nuestra visión del envejecimiento................................................................................................ 2 Diseño de los programas de envejecimiento satisfactorio ........................................................... 3 Atención centrada en la persona .................................................................................................. 3 El día a día en la atención a las personas con discapacidad ......................................................... 4 Diez pasos para promover la autoestima. .................................................................................... 5 ¿Cómo evaluamos las mejoras? .................................................................................................... 5 Los retos del envejecimiento satisfactorio ................................................................................... 6 A modo de conclusión: .................................................................................................................. 7 © FUNDACIÓN MAPFRE 2014. Todos los derechos reservados. http://discapacidad.fundacionmapfre.org Página 1 de 7 ¿Cuándo empezamos a envejecer? Los versos de Elisabeth Brami nos sugieren una respuesta: “Como la hoja verde que en otoño enrojece, se arremolina con el viento, y luego cruje bajo nuestros pasos. Como todo lo que nace, como todo lo que está vivo...” Un poco de historia El Centro San Cebrián se creó en 1979, como Centro de Referencia en personas con Trastorno Dual (enfermedad mental) y personas sin familiares. En 1980 llegaron los primeros usuarios, en 1985 los primeros usuarios externos y en 1992 se crearon los primeros Servicios destinados a Personas Mayores de 45 años. Actualmente atiende a 330 personas con discapacidad a través de los servicios de Residencia, Centro de Día, Hogares Mayores, Viviendas Colectivas y Pisos. La Fundación San Cebrián desde sus inicios ya tenía como misión la atención a las personas con discapacidad intelectual en proceso de envejecimiento como se refleja en la progresión de un mayor porcentaje de personas con más de 45 años a las que se ha ido atendiendo a través de los años. En 1988 eran el 21,84% de usuarios. En 1989 se llega al 32,97%. En 2006 ya son el 41,5% de las personas atendidas. El proceso de envejecimiento sigue aumentando ya que en la actualidad, el 48.16% de las personas a las que se atiende en los centros y servicios son mayores de 45 años. Ante el aumento de la esperanza de vida de las personas con discapacidad intelectual, la Fundación San Cebrián de Palencia reorganizó los servicios que prestaba para dar respuestas adecuadas a las nuevas necesidades derivadas del envejecimiento. El primer paso fue identificar los cambios debidos a la edad que notábamos en las personas con discapacidad para determinar los apoyos necesarios que garantizasen su bienestar. Nuestra visión del envejecimiento. Desde nuestra filosofía enmarcamos el concepto de vejez dentro del modelo del ciclo vital, pero teniendo en cuenta que su impacto es diferente en cada persona, ya que depende de diversos factores vividos en años anteriores, como son la salud, la alimentación, la educación, las relaciones sociales, el trabajo y su carga genética. Creemos también que hay una vejez cronológica, que comienza en las personas con discapacidad alrededor de los 45 años y una vejez funcional, que no viene determinada sólo por la edad, sino que va asociada al proceso de envejecimiento y conlleva un deterioro físico, psicológico y la pérdida de la capacidad de adaptación. También existe una mayor prevalencia de ciertas enfermedades que afectan a la salud y a la autonomía personal. En definitiva, entendemos que aunque el envejecimiento no constituye un proceso simple o unitario, si podemos señalar algunos rasgos comunes que se desarrollan a nivel biológico, psicológico y social. Entre otros señalamos los siguientes: a) Cambios fisiológicos que afectan a aparatos, órganos y sistemas. Mayor susceptibilidad de contraer enfermedades, descenso de facultades físicas, perdida de elasticidad en piel y músculos, disminución de la fuerza, deterioro neuronal. © FUNDACIÓN MAPFRE 2014. Todos los derechos reservados. http://discapacidad.fundacionmapfre.org Página 2 de 7 b) Cambios psicológicos que influyen en una disminución de destrezas intelectuales: tiempo de reacción, lentitud en sus actividades, déficit de atención, problemas de memoria, actitudes de rechazo, introversión, aislamiento e intolerancia. c) Cambios sociales derivados de la jubilación, perdida de seres queridos, cambios en la forma y lugares de vida. Diseño de los programas de envejecimiento satisfactorio El Centro de Día Mayores es un proyecto de calidad y futuro que atiende de forma integral a las personas mayores con discapacidad intelectual porque la vejez es un paso más hacia la autodeterminación, la plenitud y la independencia de las personas mayores. Desde este análisis global se desarrolló la planificación de servicios a las personas con discapacidad teniendo en cuenta la individualidad del proceso de envejecimiento, porque la pérdida de vida independiente va a afectar negativamente a su calidad de vida. Pero también se tuvieron en cuenta la importancia de enfatizar los aspectos positivos que se dan en el proceso de envejecimiento, como son la madurez por la experiencia, serenidad de la edad adulta, la experiencia de la historia personal y social vivida y la capacidad de tomar decisiones de manera más meditada. Por eso, entre las prioridades que nos propusimos en el programa de envejecimiento satisfactorio de la Fundación San Cebrián, se destacan el mantenimiento de la autonomía personal y de la calidad de vida y que su deterioro no afecte a su autoestima. Para conseguirlo se desarrollan una serie de actividades con el objetivo de mantener su capacidad mental, facilitando la interacción, la orientación a la realidad a la vez que se estimulan sus recuerdos para que prevalezca su identidad; El definitiva, nos planteamos que nuestros usuarios sean reconocidos como adultos, con necesidades de adultos, porque son personas con identidad, dignidad, que tienen preferencias y derecho a su intimidad. Trabajamos con personas que tienen ahora edades comprendidas entre los 36 y los 85 años y cuyo envejecimiento se produce más o menos a partir de los 40-45 años. Cada persona está envejeciendo de forma diferente, el sexo no es determinante, si constatamos que a mejor nivel funcional mejor vejez. Cada etapa del envejecimiento afecta de forma diferente a cada usuario, la pérdida de capacidad física, psíquica y emocional se da siempre en todos los casos, pero cada individuo responde de forma distinta ante la nueva situación. Atención centrada en la persona Se trabaja de forma individualizada gestionando los apoyos adecuados y procurando un plan de vida para cada persona con discapacidad, con el único fin de retrasar la dependencia, manteniendo una vida activa, ofertando alternativas de ocio para asegurar una buena interacción social, así como participando en la comunidad para generar amistades y apoyos naturales. La longevidad es una situación deseable porque nuestros usuarios tienen un nivel óptimo de bienestar físico y psicológico, lo que nos estimula a trabajar para que no se produzca la pérdida de su independencia. Ante este reto creemos que una buena planificación del Servicio de Mayores que ofrezca oportunidades de aprendizaje, mantenimiento de las destrezas © FUNDACIÓN MAPFRE 2014. Todos los derechos reservados. http://discapacidad.fundacionmapfre.org Página 3 de 7 adquiridas y el desarrollo de habilidades adaptativas puede capacitar a cada persona mayor para realizar una vida más independiente. Por eso trabajamos para conseguir envejecer de una forma saludable, que se traduce en una mayor actividad física, la atención a la salud y la prevención de enfermedades, el fomento de la participación en la sociedad, el desarrollo de actividades que provocan satisfacción y el mantenimiento de buenas relaciones interpersonales. Para llevar a cabo estas actividades optimizamos las oportunidades que nos ofrece el entorno con paseos por el campo, inclusión en la vida social del pueblo, utilización de los recursos de la comunidad, uso de la piscina, de los centros deportivos y de ocio y todo ello para lograr un buen envejecimiento. Nos enfrentamos a diario al desafío de que llenen sus vidas de sentido personal y de dignidad. El día a día en la atención a las personas con discapacidad Es importante hacer alguna reflexión sobre el trabajo cotidiano que realizamos con las personas con discapacidad en proceso de envejecimiento. En el día a día, nos encontramos que no todos envejecen al mismo tiempo ni de la misma forma, porque el envejecimiento no es un proceso uniforme en un mismo organismo, no aparecen todos los síntomas en todas las personas, cada cual tiene sus propios “achaques”. Pero hay algunos aspectos generales que es necesario tener en cuenta porque van a afectar a la mayoría de estas personas. En relación al aspecto físico, el sistema músculo-esquelético, los discos vertebrales disminuyen y es notable la pérdida de masa muscular y el aumento de grasa corporal. Esto favorece la alteración del equilibrio y de la marcha, el cuerpo va hacia delante, se dan pasitos cortos, hay problemas para girar, y hay que tener en cuenta la separación de los pies. Junto a todo esto está el deterioro en las articulaciones, la osteoporosis, el reuma, la artritis, que afectan a la movilidad. Por eso ponemos especial atención en la actividad de estas personas mayores porque tienen un alto riesgo de sufrir caídas, son más lentos y mucho más torpes en la realización de sus actividades diarias. En relación al sistema cardio-respiratorio vigilamos el aumento de la presión arterial, la aparición de varices en las extremidades inferiores, la disminución de la frecuencia cardiaca y las arritmias. Por eso planificamos las actividades teniendo en cuenta la necesidad de un aumento del tiempo de recuperación después de un esfuerzo porque puede haber un déficit de oxigenación. Para garantizar el buen funcionamiento del aparato digestivo tenemos en cuenta la pérdida de piezas dentales, la disminución de la saliva y la lentitud en el proceso digestivo, junto a un mayor estreñimiento. El sistema urinario también viene afectado en el proceso de envejecimiento y se manifiesta en una pérdida de capacidad del riñón y en la capacidad de la vejiga que disminuye, lo que produce alteraciones como la incontinencia o la retención urinaria. En términos generales podemos señalar que en relación al gusto hay menos goce de la comida, se aprecia en ellos una pérdida en la capacidad de oler, también disminuye la agudeza y la amplitud del campo visual por lo que se deslumbran con facilidad. Así mismo, aumentan los síntomas de sordera y vértigos y disminuye la agudeza táctil y la sensibilidad a la temperatura. © FUNDACIÓN MAPFRE 2014. Todos los derechos reservados. http://discapacidad.fundacionmapfre.org Página 4 de 7 En cuanto a los aspectos psicológicos uno de los retos más importantes al que nos enfrentamos son los cambios de actividad, de vivienda, la pérdida de compañeros, la ausencia de familiares. Esto puede provocar miedos, apatía, agresividad, negatividad, ansiedad, aislamiento y melancolía, lo que hace que sean más dados a la tristeza por las nuevas situaciones que experimentan. La atención, la percepción y la memoria también se ven afectadas por el proceso de envejecimiento y hay que señalar que la información no se registra como cuando eran más jóvenes, ni se retiene, por lo que no se consolidan los recuerdos y esto genera problemas de adaptación al medio. Diez pasos para promover la autoestima Teniendo en cuenta el análisis planteado, las actividades que realizamos tienen como finalidad, la independencia y la autodeterminación de las personas con discapacidad. Presentamos a continuación diez pasos para conseguirlo: 1. Permitir a la persona con discapacidad “caminar sola”, por su propio mundo. 2. Animar a hacer preguntas y expresar opiniones, lo que implica asumir como importante lo que dicen, lo que piensan. 3. Hacer sentir a la persona que es importante para el grupo, generar autoestima. 4. Ayudar a asumir limitaciones, no rechazar preguntas sobre su discapacidad y resaltar que cada persona es única y tiene cualidades. 5. Implicarles en su propio P.I.A y en el proyecto del grupo, dar importancia a lograr las metas propuestas u objetivos. 6. Animar a participar en actividades normalizadas y favorecer su interacción social. 7. Plantear tareas que creen seguridad de forma individual. Entrenamientos sencillos según capacidades. 8. Permitir a la persona tener responsabilidades y que asuma el éxito o el fracaso. 9. Dar oportunidades, dejar hacer, desde elegir la ropa que se quieren poner, qué tarea quieren realizar, asumiendo los riesgos de cada decisión. 10. Informar, comunicar qué va a pasar, qué está previsto para cada día, qué cambios puede haber, de personal, de actividad, salidas, novedades en la vida cotidiana. ¿Cómo evaluamos las mejoras? Cuando la persona con discapacidad intelectual se siente más feliz, muestra alegría y bienestar y manifiesta: o Más control personal. o Más confianza en sí mismo. o Más respeto a los otros. o Más participación en las actividades. © FUNDACIÓN MAPFRE 2014. Todos los derechos reservados. http://discapacidad.fundacionmapfre.org Página 5 de 7 o Más momentos de tranquilidad. o Más interés por los compañeros. o Más demanda de ocio. o Menos requerimientos de atención del profesional. En esta tarea la actuación de las familias es imprescindible. Desarrollamos la escucha ante las demandas de las familias a la vez que tratamos de implicarlas en el plan de acción. Para ello invitamos a que participen con nosotros en fiestas, actos de la organización, visitas, excursiones, celebraciones. Informamos de cualquier cuestión que nos demanden. Facilitamos encuentros con cada usuario en la organización y fuera. Respetamos costumbres y creencias. Ayudamos a reducir el impacto que tiene una nueva situación como es dejar al familiar como usuario de nuestra organización. Colaboramos en las necesidades que tenga con respecto a su familiar. Los retos del envejecimiento satisfactorio El proyecto del envejecimiento satisfactorio de las personas con discapacidad se desarrolla a través de un plan de acción anual que tiene por objetivo el lema siguiente: SER FELICES Y SER PROTAGONISTAS. La línea de actuación es: AUTONOMÍA + SALUD + OCIO = SATISFACCIÓN. Esto conlleva un Plan de Atención Individualizada (PIA) con la participación de cada persona y la Planificación Centrada en la Persona (PCP). Para llevarlo adelante se necesita el trabajo eficaz del personal de atención directa que se consigue a través de las siguientes tareas compartidas: Coordinación con otros servicios de la organización y de la comunidad. Adaptando las tareas al bienestar de cada persona sin carácter de obligatoriedad, a través de la motivación. Reduciendo el estrés y la depresión, manteniendo capacidades. Promoviendo la salud, el desarrollo de habilidades y la recuperación de funciones. Orientando para conseguir el ajuste personal, social y conductual. Favoreciendo el desarrollo de capacidades a través del entrenamiento en habilidades motoras, sociales y de comunicación para la vida diaria: en la comunidad, en el ocio, en las manifestaciones sexuales así como el manejo de conductas apropiadas. Manteniendo, estimulando y reforzando las mayores cuotas de autonomía; cualquiera que sea el deterioro con buen nivel de apoyos para lograr progresos. © FUNDACIÓN MAPFRE 2014. Todos los derechos reservados. http://discapacidad.fundacionmapfre.org Página 6 de 7 Adaptando los programas permanentemente de forma integral, con criterios de funcionalidad, edad cronológica, situaciones naturales y con la máxima participación de cada usuario. A modo de conclusión: En resumen, podemos sintetizar que los diversos programas de envejecimiento satisfactorio que desarrolla la Fundación San Cebrián, pretenden responder con calidad de servicio y calidez de trato, a las necesidades inmediatas y de futuro de las personas con discapacidad, que señalamos a continuación: En primer lugar para que conserven la autonomía personal conseguida y que el deterioro que provoca el envejecimiento no afecte demasiado a su autoestima. En segundo lugar que dispongan de los apoyos adecuados para facilitar su interacción social, disminuir los estados de ansiedad y seguir orientados a la realidad de cada nueva situación. En tercer lugar que se adapten a la vida cotidiana haciendo frente a los cambios provocados por la edad: entorno, vivienda, compañeros, trabajo, familia y en la salud (uso de gafas, audífonos, andadores, dentaduras, pañal,...). Y finalmente, potenciar su autodeterminación para que desarrollen la capacidad de elección; que adquieran conciencia sobre sus derechos y los ejerzan, asumiendo los riesgos que implican cada decisión tomada. © FUNDACIÓN MAPFRE 2014. Todos los derechos reservados. http://discapacidad.fundacionmapfre.org Página 7 de 7
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